4 minute read
Polanco “diseña” su camino
Su negocio de eventos y decoración se consolida en Filadelfia
Por: Sara Pacheco
Advertisement
Raw But Meaningful | El Sol Latino Newspaper
Decoración, flores, un ambiente prolijo. Esas son las cosas que vienen a la mente cuando se piensa en el impecable trabajo de Ury Polanco, una mujer originaria de República Dominicana que ha triunfado en Estados Unidos con su propio negocio. Una historia de éxito. Una muestra más de lo que significa el resultado de arduo trabajo, constancia y altibajos. Ury Polanco entró a un negocio en auge en Estados Unidos donde existe mucha competencia. Se puede pensar que para este trabajo solo se necesita creatividad y habilidad, pero es mucho más que eso. La innovación, la disciplina y la responsabilidad, generan un efecto diferenciador en un ambiente tan complejo, algo que Ury posee.
El negocio de la decoración de interiores tiene muchas capas, también implica tener buen ojo para los colores, los muebles, la iluminación, el espacio, la textura, las funciones de construcción y la comprensión de los detalles arquitectónicos.
Según la oficina de estadísticas laborales y el censo de Estados Unidos, la industria comercial de decoración de interiores genera 10 mil millones de dólares en ingresos anuales.
Yo le agradezco mucho a Filadelfia, gracias a Dios tenemos muchos eventos
Ahora su nuevo proyecto en puertas será transformar parte de su tienda en floristería y ofrecer toda clase de regalos personalizados que podrán adquirirse incluso, de manera online. En una entrevista exclusiva conocimos un poco más de su trabajo, sus sueños y sus metas.
Antes de llegar a Estados Unidos, ¿quién era Ury Polanco? Yo vine a los Estados Unidos cuando era muy pequeña, tenía 7 u 8 años. Llegué a Nueva York, somos tres hermanas. Luego me casé muy joven, a los 15 años. Mi primera hija la tuve a los 18 o 19 años. Son tres, tengo dos hembras y un varón. Cuando estaban pequeños me fui otra vez a República Dominicana, prácticamente se criaron allá, estudiaron allá.
Cuando vi que estaban más grandes, quise traerlos de vuelta. Por el inglés, para que estudiaran aquí y entonces no regresé a Nueva York, sino que me fui a Filadelfia, debo tener ya creo que 20 años.
¿En qué momento decides convertirte en empresaria y crear tu propia compañía de diseño de interiores?
Ahí fue raro, porque siempre me ha gustado, desde niña. Mi compañía trabaja con todo tipo de eventos y yo soy Diseñadora de Interiores. Siempre me ha gustado. No lo estudié, pero no fue necesario porque siempre lo he llevado conmigo.
Cuando llegué a Filadelfi a y mis hijos estaban grandes, y estaba averiguando para hacerle la fiesta de cumpleaños 16 a mi hija mayor, vi que no conseguía todo lo que necesitaba.
Se me hacía difícil. Pregunté, nadie me sabía decir. Busqué. Especialmente en la comunidad hispana, y vi que no tenían lo que necesitábamos para la fiesta, y ahí me dio deseo para comenzar. Mi propia hija fue quien me inspiró.
Cuando le hice los 16 a Brigitte -mi hija- a mi vecina le gustó cómo quedó y me pidió que organizara la fiesta de 16 de su hija y así comencé a hacerlo como trabajo.
¿Cómo ha sido tu evolución como decoradora?
Demasiado bien, muy buena. Me han aceptado. Yo le agradezco mucho a Filadelfia, gracias a Dios tenemos muchos eventos, trabajo mucho en eventos corporativos, me apasiona trabajar en los eventos corporativos, me encanta.
Pero especialmente agradezco a El Sol Latino Newspaper, porque siempre en sus eventos, conozco a tres o cuatro clientes más.
Hablemos un poco de tu equipo de trabajo, ¿cómo lo conformas?
Mi equipo tiene que ser responsable, por ejemplo somos de los que nos dicen es a las 10 de la mañana, pues a las 9 ya estamos. Siempre he dicho, en lo que es la decoración, un minuto cuenta. En mi trabajo, un minuto cuenta, especialmente con los corporativos.
Johana es mi mano derecha, si yo no estoy es como si estuviera. Brigitte es parte del negocio, somos las dos. Ella se esforzó mucho para que lo que es hoy Ury Flowers, se destacara.
Hablemos de tendencias para el 2023
A veces me dan la una o dos de la mañana buscando. Las personas que trabajan como yo, tienen como principal herramienta el celular para precisamente, buscar las tendencias. Terminó un evento hoy y ya empiezo a buscar qué hay para mañana. Es emocionante porque todos los días llegan cosas nuevas. Todo depende, por ejemplo, en un evento corporativo son colores más fríos. Las bodas tienen más dorado, blush y colores suaves.
En quinceañeros es diferente, depende del color que le guste a las niñas, hay casos que llegan y me dice «quiero el verde con el morado», y Brigitte me dice «mami, esos colores son muy fuertes» y le respondo, pero no son tus 15 sino de ella.
Entonces lo que tenemos que hacer es buscar la combinación correcta, para que no se vean tan chocantes los dos, pero en realidad es cuestión de gusto. Hay personas que solo le gusta el azul, y es el que le gusta. Por ejemplo, si tu color favorito es el verde y te vas a casar, tu quieres que sea verde. Por más que sea uno hace el juego con los colores, pero hay que ponerle el verde.
Porque eres tu la que te tienes que sentir bien, no yo. En los eventos corporativos me gusta el azul royal, con el Ivory blanco. No me encuentro trabajando en un evento corporativo con otros colores.
¿Te involucras con la comunidad como empresaria?
Siempre. Siempre que pueda ahí estoy, es muy raro que diga que no. En todo, especialmente en nuestro grupo, yo soy dominicana. Siempre estamos haciendo algunos eventos.
¿Tienes algún consejo para las empresarias que están por iniciarse en un negocio, pero les da temor?
Que sigan. Tienen que seguir, crean en el networking como les digo a algunas chicas con las que estoy más cerca. Sigan adelante. Ury Flower & Decor empezó con nada, prácticamente como decimos los dominicanos, empecé relajando.
Yo dije «le hice los 15 a la hija mía, voy a hacer otro». Cuando empecé no tenía nada y gracias le doy a Dios que tenemos muchos eventos y podemos trabajar pequeños y grandes eventos. El año pasado después de la pandemia para nosotros fue muy fuerte. Pero luego todos los eventos los corrieron, y no tuve vida, teníamos muchos eventos cada día.