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Las Musas de Punta Cana
LAS REINAS DEL CARNAVAL… LAS MUSAS DE PUNTA CANA
Lo que inició como algo para apoyar el Carnaval Punta Cana, la principal zona turística del país hace ya 13 años, se ha convertido en una tradición y en una de las comparsas más esperadas por todos los que llegan a disfrutar de este evento único en el Este. Estas damas, que con amor, esmero y entrega se dedican por meses a realizar sus atuendos, se han convertido en las verdaderas reinas del carnaval, en el corazón del mismo.
El afán de sorprender y deleitar cada año a los miles de espectadores que asisten al Carnaval Punta Cana, es la principal fuente de inspiración de este grupo de mujeres que a pesar de tener sus compromisos familiares y laborables, se reúnen cada año para elaborar sus vistosos trajes que deja a más de uno boquiabierto, tanto locales como extranjeros.
Esta comparsa icónica de las fiestas de carnaval en la costa del coco, está
conformada, como ya dijimos por mujeres de la comunidad de Punta Cana, con cargas laborables y familiares, pero que han decidido transferir, de generación en generación, el orgullo no solo de trabajar, sino también de vivir en la tierra que se ha convertido en sus hogares: Punta Cana.
Doña Haydee Kuret de Rainieri, pionera de las Musas de Punta Cana, nos cuenta que la comparsa nació cuando se generó la idea de hacer el carnaval en la parte litoral este de la República Dominicana y que hoy, trece años después, ya son más de 30 las musas y musitas que desfilan en el boulevard 1ero. de Noviembre. Por varias entregas, trabajan para integrar a la nueva generación a las que han denominados “musitas” que son niñas entre 7 y 10 años de edad. “No hay líder de Las Musas, somos un grupo muy heterogéneo de mujeres jóvenes, medianas y dos o tres ya mayorcitas. Somos mujeres que trabajamos, que estamos en nuestras casas, con diversidad de temperamentos, de forma de ser, de vida, y lo más bonito es la integración que existe entre cada una de nosotras”, afirma.
Es una integración que ha venido desarrollándose con un propósito: ser el ícono del carnaval, y sin duda a equivocarnos podemos decir, que han logrado justo eso. “Punta Cana es una comunidad relativamente pequeña, joven en el tiempo, pero está llena de valores, responsabilidades, de personas sumamente trabajadoras, honestas, que creen que el futuro depende de nosotros, que tenemos el deber de crear donde queremos vivir, como queremos vivir y que es de nosotros que depende que nuestra comunidad pueda ser cada día mejor,” resalta con mucho orgullo doña Haydee.
Todas viven en la misma comunidad y trabajan en empresas del mismo destino. Cada año para el carnaval, cada una jura que tendrán mucho tiempo para preparar todo para la comparsa, sin embargo el ingenio del taller de laboriosidad para sus trajes las lleva a estar pegando, cosiendo, cortando y ajustando hasta minutos antes del desfile, o desde hace dos años para acá, minutos antes de salir a escena en la Gala de Carnaval, el día previo al evento. “La idea central sale de dos o tres mentes, comenzamos con una cosa y de ahí todo evoluciona y se va transformando, pero basado en la idea original. Este es un grupo tan heterogéneo que aquí están las mentalidades creativas, artísticas, práctica, la que unifica las ideas… pero al final todas trabajamos para que nuestros vestidos siempre sean muy atractivos, y brindarles un buen espectáculo a los asistentes,” comenta.
El primer año, el disfraz consistió en una bata larga y un antifaz, algo sumamente sencillo con elementos de mariposa, algo para no dejar pasar el momento e integrarse al primer carnaval de la zona turística. “Al año siguiente compramos unos disfraces por internet, para ir evolucionando un chin. Eran unos pavos reales bien graciositos, pero Frank Elías nos dijo que era vergonzoso que la comparsa de Punta Cana fuese tan sencillita, simple y que comprara disfraces, eso nos hirió el amor propio,” recuerda doña Haydee. “Al año siguiente, copiamos, pero pedimos permiso al dueño del diseño del traje de Miss República Dominicana. Yo tenía el libro con la imagen y de ahí arrancamos a trabajar sobre ese traje y se creó una fantasía,” nos explica. De los 13 años que tiene la comparsa, los mismos que tiene el carnaval por once años consecutivos han confeccionado sus trajes ellas mismas. “Nuestros disfraces de carnaval cada año es algo representativo y alegórico a nuestro país o a nuestra zona, por eso hemos exhibidos creaciones como Los Corales, Las Indias del Yauya, Estampas Dominicanas, Fantasías del Mar, entre otras y las que vendrán,” nos comenta.
PEGA PEGA
Mayra Abreu, otra de Las Musas de Punta Cana, nos explica cómo funciona el “pega pega.” Ya estamos en la cuenta regresiva y casi culminamos con los “pega pega”, que son las reuniones de trabajo, tipo taller, que realizamos en los patios de las casa de algunas de las integrantes. Realmente nos divertimos muchísimo haciendo nuestros trajes, cada “pega pega” es algo nuevo para nosotros. Somos retantes y nos compenetramos mucho una con otra. Para las alas de nuestro traje de mariposas hace unos años, ahí nos graduamos todas. Fue un taller casi de mecánica. Fueron muchas pruebas con alambres, tubos, y los “musos” (esposos de las musas) tuvieron que prestar su asistencia en más de una ocasión,” nos comenta entre risas.
Nos cuenta que el “pega pega” surgió a partir del traje de Fantasías del Mar, fruto de haber comprado una tela alegórica a ese nombre, por lo que tuvieron que reunirse muchas veces a cortar y pegar los elementos al traje que iban a exhibir ese año. “Son varios meses de tensión, confraternidad, donde nos quejamos muchísimo, pero también donde aprendemos muchos. Contamos con el apoyo total de nuestros esposos y parejas, y por esto la carga es menor. Todas trabajamos, somos profesionales y
con compromisos de familia, pero sacamos ese tiempo para trabajar con mucha pasión y amor nuestros trajes de cada año,” dice Mayra.