Ya que te pones a sacar toda la ropa del armario, es un buen momento para reciclar ciertas piezas que ya no usas. Hay una regla no escrita que dice que aquellas prendas que no te has puesto en dos años, ya no las necesitas. Hoy en día hay muchos recursos para no tirar a la basura esos tejanos que ya no te puedes poner pero que están como nuevos. Tiendas de segunda mano, grandes cadenas de ropa, o donarlas a la caridad son algunas opciones. Te proponemos que juntes unas cuantas amigas y entre todas llevéis la ropa que no os vais a poner más (y que estén bien) y hagáis un mercadillo de intercambio entre vosotras. Las prendas que ya no valgan siempre las puedes acercar a alguna organización que le encontrara un nuevo dueño.