Lógicamente esto supone que al menos uno de los fotógrafos o de los videógrafos se dedique durante una parte del día a montarlo con las imágenes tomadas hasta ese momento. Como durante ese tiempo no podrá hacer otra cosa, necesitará compañeros que sigan grabando o disparando lo que sigue sucediendo.
¿Para qué sirve? Para los invitados es una bonita sorpresa y para los novios es emocionante verse a sí mismos ese día y ver, sobre todo, a su pareja en los momentos de la preparación en los que estaban a solas. Ideal para impacientes.
Extras Bajo este título he querido agrupar una serie de elementos que, si bien no tienen palabras tan extrañas, quizá encierren algún misterio para ti.
1 Los álbums.
ERIC PAREY. FOTOGRAFÍA CON EMPATÍA