P a u l o C o e l h o
Dios es el mismo, aunque tenga mil nombres; pero tienes que escoger uno para llamarlo
Ciertas cosas son tan importantes que necesitan ser descubiertas solas.
Hay momentos en que las tribulaciones se presentan en nuestras vidas y no podemos evitarlas. Pero están allí por algún motivo. Sólo cuando ya las hemos superado entenderemos por qué estaban allí.
Algunas veces hay que decidirse entre una cosa a la que se estĂĄ acostumbrado y otra que nos gustarĂa conocer.
No tenĂa miedo a las dificultades: lo que la asustaba era la obligaciĂłn de tener que escoger un camino. Escoger un camino significaba abandonar otros.
Cuando alguien desea algo debe saber que corre riesgos y por eso la vida vale la pena
La posibilidad de realizar un sueĂąo es lo que hace que la vida sea interesante.
SĂłlo una cosa vuelve un sueĂąo imposible: el miedo a fracasar.
Incluso un camino sinuoso, difĂcil, nos puede conducir a la meta si no lo abandonamos hasta el final.
Hay que manifestar los sueĂąos para que puedan comenzar a realizarse.
Cada trecho recorrido enriquece al peregrino y lo acerca un poco mĂĄs a hacer realidad sus sueĂąos.