LA PRIMERA PREGUNTA
E
n primer lugar, habría que decir que la planificación tradicional pretende actuar en un ámbito más restringido y que el PES es más ambicioso. El mundo de la planificación tradicional se limita a lo económico-social. En cambio el PES intenta ser y ha llegado a ser una planificación de la acción humana que integra todas las dimensiones de la realidad, especialmente el mundo de la política con el de la técnica. Esta diferencia de amplitud quizá crea todas las otras. Veamos la primera pregunta que plantea la oposición entre diagnóstico y situación. ¿Cómo explicar la realidad? El planificador tradicional explica la realidad con el concepto de diagnóstico. Yo acepté y fui prisionero de ese concepto hasta mediados de los años setenta, de manera que comprendo bien su fuerza. La idea del analista que diagnostica consiste en ser objetivo, científico y riguroso. Descubrir la verdad, en singular, y construir a partir de ella el plan para cambiarla. Por consiguiente, el diagnóstico debe ser uno y único, válido para todos. Todo esto parece evidente e imbatible. ¿Alguien puede ser enemigo de la búsqueda de la verdad por medio de las ciencias? ¿Puede el plan fundamentarse en otra cosa que no sea la verdad? La planificación tradicional se apropió del concepto de diagnóstico que es originario de la medicina y le agregó el sesgo de la teoría económica positivista y determinística. Es decir, en la versión del planificador tradicional, el diagnóstico es la verdad sobre una realidad vista con el rigor de un analista que domina la teoría económica. Hasta aquí todo parece bien, pero en realidad, todo está mal. Sin embargo, no es fácil salir de la trampa si uno ha nacido en ella. Lo que está mal con el diagnóstico sólo se descubre intentando aplicar ese concepto a un juego entre dos o más oponentes. Sólo en ese momento uno descubre que en un juego real las explicaciones de los jugadores oponentes nunca son iguales, y el problema no se resuelve declarando a una verdadera y falsa a las otras que difieren. ¿Pueden haber varias explicaciones verdaderas sobre una misma realidad? ¿Qué significa verdadera? Este es el punto de partida de la teoría de las situaciones. La anécdota de Garrincha que usted escuchó hoy ayuda a entender la enorme diferencia entre diagnóstico y apreciación situacional. La planificación tradicional sólo reconoce un actor, el Gobierno del Estado, y todos los demás son agentes con conductas predecibles. La planificación tradicional, a lo Procusto, establece una relación entre un sujeto que planifica y un sistema planificado que no contiene sujetos y no puede autoexplicarse. Sólo puede haber una explicación si existe un sólo actor interesado en explicar. Por el contrario, la planificación estratégica reconoce un juego entre varios actores, y por consiguiente surge la pregunta: ¿cómo explican la realidad del juego los 17