Mexiquenses Chingones

de los hot-dogs a los nano satélites; de las corbatas a los softwares

“El hombre que sueña casi siempre supera sus sueños, y después de soñar hay que pasar la idea a la acción”

Texto: Gabriela Landetta Fotografía: Jesús Mejia

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escaparate!

Julio 2020

De niño lavaba coches; hoy tiene una empresa con 27 oficinas en el país en donde trabajan tres mil personas y socios comerciales en Estados Unidos, Europa y Centroamérica.

Fernando Flores, Fer o Queche, como gusten llamarle, es un empresario que se ha ganado su lugar en el difícil mundo de los negocios con esfuerzos, dedicación… y mucho carácter.

“Los logros en la vida siempre dependen del carácter del ser humano. El hombre que se domina a sí mismo puede dominar el mundo y la inteligencia emocional es muy importante en los negocios, porque cada que tú vendes un proyecto… de cien puertas que tocas, se te abre una”. Pero además de tener carácter, otro factor fundamental es saber vender. Y él desde muy joven supo cómo hacerlo para lograr sus objetivos.

Así, de vender corbatas y hot-dogs pasó a ofrecer sofisticada tecnología: “hemos logrado meter productos en el mercado que han solucionado algo y que dan un valor aparte. Es cuando logramos tener éxito”, nos cuenta en entrevista para Escaparate.

Para darte una leve idea de lo que Queche ha logrado junto con su equipo, te diremos que, gracias a él, tú tienes la facilidad de sacar tu acta de nacimiento o realizar otros trámites en un cajero.

Sí, efectivamente, él desarrolló la tecnología para que tú, fácilmente, puedas conseguir en minutos un documento tan importante como el acta de nacimiento.

Como le sucede a todos los emprendedores cuando inician sus proyectos: “no tenía dinero para poder hacer mi sueño; para poder hacer ese sueño necesitaba de una inversión”.

A sus casi, 47 años, Queche se considera todavía un chavo que sigue soñando, ideando, imaginando. Pero no se queda en eso, sino que trabaja para hacerlo realidad.

Y aquí comparte otro consejo para los jóvenes emprendedores.

“Primero hay que soñar. El hombre que sueña casi siempre supera sus sueños, y después de soñar hay que pasar la idea a la acción. No quedarse en el sueño, no quedarse en la idea, sino ejecutarla. Después de eso, fijarse un objetivo.”

Su inquietud lo empuja ahora a entrar a la industria de los satélites: “estamos en proceso de desarrollar un nano satélite para muchas cosas para la industria, inclusive para temas de seguridad”. Será el próximo año cuando logre ese objetivo.

Vecino de Metepec, de donde orgullosamente es originario, afirma que su principal motor es su familia y con su hija, que sigue sus pasos como emprendedora, mantiene una excelente relación, Fernando Flores, Fer o Queche, como quieran llamarlo, es, sin duda, uno de nuestros mexiquenses chingones.

#DéjateVer

Julio 2020