ALMERIA Y SU CIUDAD TEXTO DE JOHN BERGER
En las casas de vecinos las ventanas son tan repetitivas como los ladrillos, aunque todas son distintas.
Cada ventana enmarca el lugar de una actividad social o privada. Contiene el signo de una experiencia vivida. Revelan lo que hay dentro de los edificios.
Cuando muere o desaparece un inquilino, la habitaci贸n que deja vuelve a ser alquilada.
Lo que continúa día y noche, año tras año, es el marco de la ciudad.
La ciudad ha suprimido todo espacio para lo que est谩 detr谩s o dentro. Es una ilusi贸n en la que se combinan la negaci贸n del tiempo y del espacio.