Aportaciones del voluntariado a nivel personal

Casi todo el voluntariado del movimiento asociativo afirma que les ha cambiado en algún sentido la comprensión de este colectivo tras su colaboración.

Muchas personas afirman tener una mayor comprensión, conocimientos y aprendizaje más profundo sobre las personas con problemas con salud mental. Asociado a ello se encontraría la ruptura de estigmas, estereotipos y prejuicios que han ido eliminado gracias a su participación en el voluntariado, con una apertura de mente y la eliminación de juicios de valor.

En este sentido, esta ampliación de conocimiento y contacto, en muchos casos directo, con personas con problemas de salud mental, les ha hecho enriquecerse de esta diversidad, con una mayor empatía y respeto, pudiendo ver el potencial que toda persona tiene independientemente de si se ve afectada o no por un problema de salud mental. Sólo se trata de darles una oportunidad. En muchos casos muestran gratitud hacia el colectivo y la organización donde colaboran con su voluntariado.

También afirman que ese cambio a nivel personal se ve reflejado en una mayor autoestima, bienestar, motivación y empoderamiento, así como un desarrollo personal y adquisición de competencias comunicativas y habilidades sociales básicas, como la escucha o la capacidad de agradecer y habilidades sociales complejas como la inteligencia emocional, la asertividad o la gestión y comunicación emocional.

Gracias a su colaboración como personal voluntario han ganado experiencia y formación, lo que podrán usar en su vida diaria y/o profesional, y además, han ganado valores positivos como la esperanza gracias a la solidaridad y la posibilidad de mejora de un problema de salud mental para la persona y su entorno.