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ACADEMIA DE BEISBOL ALFREDO HARP HELÚ
ACADEMIA DE BEISBOL ALFREDO HARP HELÚ El enigma de una academia
Jorge del Valle
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El beisbol es uno de los deportes más fascinantes que existen en el mundo, ya que además de las grandes jugadas hay mucho misterio en su desarrollo. Podemos hablar de todos los momentos de suspenso que suceden mientras se juega, o de sus famosas “cábalas”, que muy poco se sabe de su origen, pero que, de forma extraña, casi siempre se realizan las premisas beisboleras.
Los fieles amantes del rey de los deportes podemos ver en todos lados ciertas acciones un poco extrañas, desde un campeonato que vivió 108 años con una maldición, hasta un juego ganado en la novena entrada con muchas carreras en contra y teniendo únicamente un out de vida. Pero qué aficionado no ha sentido que se detiene el tiempo unos segundos cuando el bateador que entró de emergente logra conectar un gran batazo ¡y todos en el estadio se quedan mudos! Son segundos de misterio en espera de un home run o una gran jugada en los jardines. Es lo hermoso de este deporte, que nada está escrito hasta que cae el último out y que la esperanza de ganar el juego siempre se encuentra presente.
A lo largo de la historia del beisbol han existido muchos hechos sin explicación y las instalaciones del paraíso beisbolero no son la excepción para ese tipo de acontecimientos. Algunos de los egresados cuentan que han visto “apariciones” en los campos o en las habitaciones y, sin tener pruebas reales, esto se torna en misteriosas leyendas que se transmiten de curso en curso, cuando los chicos platican diferentes historias vividas, incluso se habla de duendes que esconden los objetos personales de nuestros prospectos, o de apariciones de personas ya fallecidas. Hay quienes aseguran haberlo vivido y otros que comentan no sentir o ver nada.
Quizás una de las razones de estas apariciones sea el terreno en donde está construida la Academia, pantanoso y difícil de trabajar, como si se tratara de un llano agreste y abandonado. Ojalá muy pronto volvamos a escuchar las risas, los gritos y las espectaculares jugadas de todos nuestros prospectos. Por ahora, el misterio aquí no está en los partidos o en las fantasmagóricas apariciones sino en ¿cuándo volveremos a estar cerca?