NI CALLADA NI DORMIDA. HISTORIAS DE HUAJUAPAN

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Ni callada ni dormida Historias de Huajuapan

Francisco CĂ­rigo


PRIMERA EDICIÓN

NI CALLADA NI DORMIDA HISTORIAS DE HUAJUAPAN Derechos reservados: Francisco Círigo Villagómez Este libro no puede ser reproducido total o parcialmente sin la autorización escrita del autor.

IMPRESO EN MEXICO

AGRADECIMIENTOS: Mi eterna gratitud a Olga Aída Ballesteros, Manuel Barragán Rojas, Gloria Cruz Ceballos, Foto Estudio Salazar, Graciela Gómez Hernández, José González Acevedo, Neftalí González Huerta, Arturo Herrera Hernández, Guillermina López Soriano, Alvaro Medina Sánchez, Gustavo Reyes García, Ramón Ríos Solano, Diego Vázquez Aguirre y Emma González Osorio; al personal de la Hemeroteca Néstor Sánchez de Oaxaca; y por supuesto a Lupita, Roberto Ignacio y Carlos Daniel por su comprensión y apoyo.


INDICE PROLOGO ............................................................................................... 5 INDICE..................................................................................................... 7 CAPITULO 1 La ciudad callada y dormida .............................................................. 9 San José, cuna de Los Matachines ................................................... 13 El último eclipse del milenio en la tierra del sol .............................. 18 Ciudad heroica ................................................................................. 22 Una plaza para la libre expresión..................................................... 26 UTM, detonante del desarrollo regional .......................................... 28 Una caminata por la salvación del planeta....................................... 32 El último destello de la corona ........................................................ 38 Felipe Padilla, séptimo obispo de Huajuapan .................................. 49 Teodoro Pino, de Hermosillo a la Mixteca ...................................... 52 La divina locura de la locución ........................................................ 58 Paco Guevara, 37 años frente a los micrófonos ............................... 63 Martínez Corro, el Liszt de la Mixteca ............................................ 70 CAPÍTULO 2 La furia de la naturaleza desatada .................................................... 77 Un milagro llamado Luis ................................................................. 82 Somos roqueros, no delincuentes: Gilipollas .................................. 88 Los problemas de la calle, en la calle se resuelven: Comanches ..... 91 Magda, cuatro meses de impunidad ................................................. 95 Voy a demostrar mi inocencia: José Juan Aguilar ........................... 99 Los diez minutos de Eloína ........................................................... 101 El otro sitio de Huajuapan ............................................................. 106 Crónica de una masacre no anunciada ........................................... 111 La última visita de Sergio Vera a la Mixteca................................. 118 La doctora Paz, la presidenta que no fue ....................................... 122 … Y el tiempo parecía haberse detenido ....................................... 131 CAPITULO 3 Pueblo de cantera ........................................................................... 136 Morir otra vez en la cruz................................................................ 139 Arturo, de Cristo a Barrabás .......................................................... 143 El espejismo del billete verde ........................................................ 146 El retorno de los migrantes a San Martín Peras ............................. 149 Tlaxiaco: cuando la guerrilla nos alcanzó...................................... 152


CAPITULO 4 Quiero ser presidente para desacralizar la figura presidencial: Maquío .......................................................................................... 165 El PRI no quiere ver las propuestas del PMS ................................ 171 Si se viola el voto, el pueblo debe tomar el poder, advierte Heberto ...................................................................................................... 174 El PRI se moderniza para estar a la altura de los tiempos: Colosio ...................................................................................................... 178 Defender los votos del PAN en Huajuapan es defender nuestros propios votos: Cárdenas ................................................................ 181 El hijo del “Tata” en la Mixteca de Cárdenas ............................... 183 No habrá reforma electoral si se consuma el fraude en Huajuapan: Luis H. Alvarez ............................................................................. 187 A cumplirle al pueblo, no sólo al PAN: Fernández de Cevallos ... 190 Dos presidentes en Huajuapan: Carlos Salinas y Rafael Calderón 194 Un candidato ecologista en Cacaloxtepec ..................................... 197 Reglas claras para unificar al PRD: López Obrador ..................... 202 Fin a relación “casi perversa” con el gobierno: Flavio Sosa ......... 207 Camacho Solís anunció cien millones para un parque recreativo . 211 La Mixteca avanza sin paternalismos: Heladio ............................. 213 CAPITULO 5 Kitty de Hoyos, entre romances y corridos ................................... 217 Susana Alexander, des-concertante y erótica ................................ 220 Betsy Pecanins: el blues es un canto de libertad ........................... 224 Una larga noche de aplausos y canciones ..................................... 228 Soy tan comercial como cualquier otro cantante: Alberto Cortez . 232 Tania: crónica de una noche pintada de negro .............................. 237 Los ochenta mil proyectos de Tania Libertad ............................... 241 CAPITULO 6 Contra la pretendida muerte de la epístola .................................... 246 Carta a Carlitos, un niño con discapacidad que no es del alma ..... 249 … Y todo por unos limones (Crónica de una muerte estúpida) .... 251


Historias de Huajuapan

PROLOGO

Sí, tener un hijo, plantar un árbol y escribir un libro son las tres cosas que hay que hacer en la vida. Francisco Círigo Villagómez por lo menos ya cumplió con el compromiso editorial. Aquello de su contribución verde y el vástago, no me constan. Tiene en sus manos, respetado lector, el producto de un intenso esfuerzo. Sé perfectamente lo que significa tomar la decisión de plasmar en palabras toda una vida, sentarse frente a la computadora a redactar, corregir y rehacer. Leer y releer. Investigar y recordar. Desmañanarse y desvelarse. También me he preguntado si alguien atenderá lo que escribo y dudado si tiene valor histórico lo que digo. Paco es un comunicador desde siempre y casi todos lo conocen en la Mixteca. Pero sí leen este texto descubrirán muchas cosas que nadie se imaginó que sorteó. Círigo, al igual que muchos enamorados de su tierra, habla con nostalgia y alegría, pero sobre todo demuestra el autor en cada frase que no se puede quedar callado y no ha vivido dormido. Conocí Huajuapan ya hace muchos años, por la amable invitación de Narcedalia Ramírez Pineda. Era un adolescente que empezaba mi vida en la radio y estaba interesado en explorar mi país. Esa afición se me acrecentó afortunadamente con el tiempo. Aquella primera vez comí como rey y disfruté como todo aquel que se atreve a convivir con los grandes anfitriones oaxaqueños. Recuerdo perfectamente que conocí la Universidad Tecnológica y me sorprendieron las ganas de los chavos que

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ahí se preparaban. Seguramente muchos ya son productivos y contribuyen con su zona. Otros quizás emigraron porque no encontraron las oportunidades que se merecían. La historia maldita de millones de compatriotas. Al hojear Ni Callada ni Dormida, uno se transporta a una zona bendita de nuestro México y, permite a quien se atreve a terminar el libro, conocer una intensa trayectoria. Le recomiendo respetuosamente, sin que deje de visitar una sola página, que atienda la crónica del último eclipse del milenio, la biografía de Don Manuel Siordia y Francisco Guevara; el espacio dedicado a Luis y la impunidad de Magda. En el tercer capítulo, el espejismo del billete verde, y en el cuarto, lo que se dice de Maquío, Colosio, Cárdenas, Luis H. Álvarez, Salinas, López Obrador y Heladio. Merece especial atención que Francisco se ocupa también en este libro misceláneo de Alberto Cortez y Tania Libertad, al igual que de decenas de historias del amado Huajuápam, como le decía el sacerdote López Soriano. Vale la pena acabar este libro, que tiene la virtud de leerse de atrás para adelante, por partes, capítulos o simplemente para conciliar el sueño, escogiendo una página al azar. También, se suma a la historia gráfica del sur del país y sin duda servirá como texto de consulta para las nuevas generaciones. Francisco, respetado hombre de la radio que conoce de sobra las razones sociales de este maravilloso invento: entretener, educar y enterar, logró ahora por la vía escrita las características del medio electrónico que nos unió. Usted califique el trabajo del colega; yo por lo pronto, devoré dos centenas de cuartillas, sin dificultad. Ni Callada Ni Dormida, Historias de Huajuapan es sin duda un homenaje a la Mixteca. Yo me uno al aplauso. Gustavo Rentería Mayo de 2008.

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INTRODUCCION

Las manos del periodista (Foto Lupita Palma).

En diciembre de 1958, el sacerdote Eliseo López Soriano1 publicó su poema Huajuápam (sic) en el que pintaba a ésta como una ciudad callada y dormida como águila entre las peñas. Tal descripción se ajustaba fielmente a la realidad de mediados del siglo XX, pues Huajuapan era una de esas localidades provincianas de vida rutinaria y apacible donde transcurrían las semanas, los meses, y a veces los años sin que se registraran acontecimientos relevantes. Esta realidad empezó a cambiar a finales de 1980, cuando su arquitectura se transformó radicalmente y su población creció de manera acelerada como consecuencia del sismo del 24 de octubre de ese año. Diez años después, con la creación de la Universidad Tecnológica de la Mixteca, tuvo otro momento importante de crecimiento y desarrollo. Hoy Huajuapan ya no es callada ni está dormida. Para bien o para mal, casi todos los días se generan en esta ciudad sucesos importantes que configuran una intensa dinámica social, económica, política y cultural que ha quedado registrada en los medios estatales y en no pocas ocasiones ha merecido la atención de los nacionales. Como reportero de noticias he tenido el privilegio de estar 1

Sacerdote y poeta originario de Huajuapan de León, Oax. (1927-2007). Autor de Huajuápam (sic), Por mis senderos, De viaje, Madre amable, La muerte, El tiempo, Por la calle, Historia del sitio de Huajuapan, Primer centenario de la erección de Huajuapan en ciudad y Erección de la Diócesis de las Mixtecas, 1903-1953, entre otras obras.

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cerca de muchos de los acontecimientos importantes ocurridos en Huajuapan y en algunas localidades de la región durante las dos últimas décadas. Con el paso de los años estos sucesos han adquirido su verdadera relevancia, pero también han sucumbido inexorablemente ante la frase lapidaria: lo que hoy es noticia, mañana ya no existe. Desafortunadamente la mayoría de los hechos prominentes ocurridos desde 1601, cuando fue fundada la congregación de Guaxapa, han corrido la misma suerte: se han perdido en la sinmemoria de los tiempos porque nuestros antepasados no tuvieron la visión de registrarlos. Lo poco que sabemos de nuestra historia local es resultado de la preocupación y el esfuerzo de personas como Juan de Dios Flores y Rosendo, Juan de Dios Flores León, Rodolfo Solana, Alvaro Acevedo, Ivo Cervantes, Genaro Legaria, Josafat Herrera, Eliseo López, Telésforo Mendoza y Luis de G. Martínez, entre otros. En las dos últimas décadas, como resultado de los apoyos institucionales canalizados para tal efecto, han surgido plumas preocupadas por la preservación de la memoria histórica de otras localidades de la Mixteca como San Juan Yolotepec, Santiago Chazumba, San Miguel Tulancingo y Santos Reyes Tepejillo. Esta obra no es un libro de Historia de Huajuapan. No pretendo invadir una actividad que corresponde a los historiadores y que está fuera de mis posibilidades; en todo caso, sería un libro de historias, entendidas en el sentido periodístico de la palabra. Es un trabajo de recuperación de textos publicados a partir de 1986, que parecían condenados a la frialdad de una hemeroteca, a la existencia efímera de las páginas de un diario, a la fugacidad de una nota de radio o de televisión; es el modesto esfuerzo de un simple artesano de la palabra por reunir estas páginas dispersas, capturar algunos momentos significativos de la historia reciente de Huajuapan y ponerlos al alcance de las personas interesadas en conocer un poco más de la ciudad que nos vio nacer y en la que hemos pasado la mayor parte de nuestra vida. El autor. 8


Historias de Huajuapan

CAPITULO 1

La ciudad callada y dormida

El antiguo Portal Valerio Trujano a principios de la década de los veinte (Cortesía del Museo Regional de Huajuapan).

Protagonista de uno de los sucesos más gloriosos de la guerra de independencia y dos veces víctima de la furia de la naturaleza, Huajuapan fue fundada en la época de la colonia. De acuerdo con las referencias históricas disponibles, D. Pedro de Barrios Ursúa fundó la congregación de Guaxapa en diciembre de 1601 por órdenes del Virrey de la Nueva España, D. Alvaro Manrique de Zúñiga y Guzmán. El propósito era proteger a los comerciantes y viajeros, pues en la zona existía una mezquita en la que se refugiaban los bandoleros y salteadores que se dedicaban a robar a quienes se dirigían a la capital del Virreinato. Durante la época colonial Guaxapa tuvo la categoría de pueblo y su desarrollo fue prácticamente nulo. Hasta las primeras décadas del siglo XX registró cambios mínimos, pero su crecimiento se aceleró a partir de 1943, con la apertura de la carretera Cristóbal Colón, y empezó a adquirir 9


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su fisonomía actual después del sismo de 19802, que destruyó gran parte de las viviendas y edificios públicos. ¿Pero cómo era el Huajuapan de ayer, la ciudad callada y dormida como águila entre las peñas, que describió el poeta Eliseo López Soriano? Es difícil saberlo con precisión, ya que prácticamente no existen referencias escritas y sólo la memoria de las personas de mayor edad nos permite reconstruir parcialmente el Huajuapan de fines de la primera década del siglo, cuando la población no rebasaba los 10 mil habitantes, muchos de los cuales llegaron de otras localidades huyendo de la lucha revolucionaria. El de 19183 era el Huajuapan limitado al norte por el hospital de San Vicente y el barriecito ubicado entre El Calvario y San Antonio; al poniente por la barranca que baja de El Calvario y se une con la de Las Campanas, por el barrio de La Merced (conocido entonces como Barrio Nuevo) y por los templos de Guadalupe y San Isidro; al oriente por los terrenos del señor Apolonio García (cerca del actual mercado Zaragoza) y el barrio de San José; al sur por los ranchos de D. Juan Gómez Maza y la familia Flores, y por el actual callejón de Las Huertas, llamado así por los huertos de membrillos que existían en el lugar. Era el Huajuapan de los patios sembrados con anís, amapolas y adormideras4 que en los meses de marzo y abril daban un colorido especial a la localidad; el de los jacales de chiname (carrizo azotado con lodo) y techos de palma; el de las casas de adobe con techos de terrado y teja. El Huajuapan de los catrines –vestidos con trajes de casimir pero corte tipo charro– y del populacho con camisa y calzón de manta, sombrero de ala ancha y copa elevada. Su mercado se encontraba en los terrenos del actual Porfirio Díaz y constaba de cuatro corredores, en uno de los cuales se ubicaban las carnicerías; en otro las fondas; en el 2

Círigo, Francisco, 24 de octubre, el sismo de Huajuapan, Ediciones del Ayuntamiento de Huajuapan, 1998. 3 Entrevistas con el sacerdote Alfonso Acevedo Andrade, septiembre de 1990. 4 El cultivo de estas plantas era legal, ya que aún no se les asociaba con la producción de estupefacientes.

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tercero el maíz; y en el último las mercerías, los puestos de fruta y panela. Al centro se localizaba una fuente, casi siempre seca, en cuyo derredor se sentaban los tianguistas que todos los domingos acudían a vender sus mercancías. Era el Huajuapan de los mesones con patios enormes, donde los comerciantes y viajeros ataban sus burros mientras ellos pernoctaban. Destacaba el de D. Marcial Hernández, ubicado en el predio que hoy ocupa el Monte de Piedad5, donde además se alojaban las caravanas circenses y se realizaban los jaripeos y peleas de gallos. El Huajuapan del lenguaje antiguo en los sistemas monetario y de pesas y medidas; cuando una vara de manta costaba 15 centavos y con sólo cinco centavos se adquirían tres piezas de pan. El Huajuapan del Banco Central, del antiguo portal Valerio Trujano que fue derribado con motivo del sismo de 1980; el de las escuelas Guadalupana, Real y de San Rafael Arcángel; el de las veladas literario-musicales que hicieron época; el de los paseos dominicales en el parque, donde los jóvenes y las señoritas circulaban en sentidos opuestos para que los muchachos arrojaran puñados de confeti a la dama de su simpatía; el de las serenatas que entonces eran conocidas como gallos y que muchas veces terminaban de manera abrupta cuando el padre de la joven corría al pretendiente; cuando abrir un poco la cortina de la habitación o encender una vela eran signo de que el galán era correspondido.

Aspecto de la calle Valerio Trujano a mediados del siglo XX (Cortesía del Museo Regional de Huajuapan). 5

En 1990 las oficinas del Monte de Piedad se ubicaban en la calle Morelos, entre Hidalgo y Matamoros.

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Con la construcción de la carretera vinieron los primeros camiones destartalados y con ellos el desarrollo. La segunda mitad del siglo se caracterizó por los cambios acelerados y la transformación de la hasta entonces incipiente ciudad en la capital de las mixtecas. Vendrían también el auge comercial y el consecuente crecimiento demográfico: la ciudad llegó a 40 mil habitantes y luego a casi 100 mil. Atrás quedó el Huajuapan de los mayores, la época dorada de las primeras décadas del siglo, de la riqueza histórica que con el paso del tiempo se va perdiendo ante la falta de testimonios escritos y que sólo perdura en la frágil memoria de los ancianos. Un Huajuapan que muchos de nosotros no conocimos pero que determinó en gran parte lo que somos hoy y lo que habremos de ser en el futuro. Hoy vivimos la época del progreso, de los avances científicos y tecnológicos, de las comunicaciones instantáneas; pero a veces se antoja recordar la ciudad que disfrutamos en nuestra niñez y conocer, aunque sea a vuelo de pájaro, el Huajuapan de los abuelitos. 25 de septiembre de 1990.

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San José, cuna de Los Matachines

Los matachines del barrio de San José en su recorrido por las calles de Huajuapan.

Aunque existen diversas versiones en torno de su origen, y hay discrepancias sobre la fecha de su llegada a Huajuapan, la mayoría de las fuentes coinciden en que las cabezas de los matachines fueron traídas de Tezoatlán de Segura y Luna por vecinos del barrio de San José, a principios del siglo XX, por iniciativa del sacerdote José Cantú Corro. La palabra matachín proviene del vocablo árabe matauachihin, que significa “enmascarado” y que al pasar a Europa se convirtió en mattaccino hasta adquirir su forma actual. Según una versión, los matachines eran una manifestación de celebración victoriosa de los cristianos sobre los árabes. Los primeros grupos o cuadrillas habrían surgido en Toledo, España, probablemente en el año 1571 y llegado a México con posterioridad a la conquista. Otra versión refiere que las danzas de matachines eran una representación de la lucha 13


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entre el bien y el mal, en la que participaban una doncella, varios diablos y bufones, un monarca que dirigía la danza, un abuelo que ponía el orden a latigazos, así como varios capitanes y danzantes. Aunque en todos los casos la danza estaba vinculada a las prácticas religiosas católicas y generalmente se representaba en las fiestas patronales, con el paso del tiempo fue tomando características propias en cada región. En algunas etnias de nuestro país como la tarahumara de Chihuahua, la danza de Los Matachines está ligada a la festividad de la Virgen de Guadalupe y se acompaña con música de violín, arpa, una guitarra pequeña, y en algunos casos, un tambor de cuero. Los danzantes portan una vestimenta vistosa y colorida, rematada con una máscara que oculta su identidad, un penacho con incrustaciones de espejos, o una corona con flores de papel de china, y listones de varios colores. En otras entidades como Durango, Nuevo León, Zacatecas, Jalisco, Guanajuato y Tlaxcala los matachines tienen como característica común el uso de máscaras e indumentarias multicolores ceñidas al cuerpo, aunque en el caso de Aguascalientes los danzantes no utilizan máscara. Tradición casi centenaria Los matachines de Huajuapan se diferencian de los de otros puntos del país no sólo porque son acompañados por la música de una banda de viento, que interpreta las melodías que habitualmente forman parte de su repertorio, sino también porque son armazones de madera con cabezas del mismo material que los danzantes cargan sobre sus hombros, y porque carecen de una coreografía definida. De acuerdo con datos de la Unidad Regional de Culturas Populares, los matachines fueron traídos de la Villa de Tezoatlán de Segura y Luna, probablemente en el año 1919, para ser utilizados en las festividades del barrio de San José. Inicialmente eran sólo máscaras decoradas, pero después se les fabricaron las armazones de madera. Manuel Ortiz Cruz, vecino del barrio, ubica la llegada de 14


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las cabezas de los matachines aproximadamente en 1924, y confirma que las armazones se hicieron en esta ciudad. En su obra San José, un barrio con tradición, Josafat Herrera Sánchez6, cronista del municipio de Huajuapan y vecino del citado barrio, refiere que los matachines nacieron en la época de la revolución, por lo que los primeros sones utilizados para su baile fueron precisamente las canciones de la época, como La adelita, La valentina, La cucaracha y El venadito. Menciona que la primera generación de matachines la integraban El diablo mayor adquirido por Francisco Ortiz Chávez; La muchacha por Miguel Mora; La negra por Francisco Castillo; El viejo por Trinidad Cisneros; La vieja por Gregorio Pérez y El catrín por Manuel Solano. Esta versión coincide en lo general con la de Mario Mora Olivera, quien recuerda que su abuelo Miguel Mora trajo de Tezoatlán las cabezas de los primeros matachines, luego de que varios vecinos del barrio cooperaron para comprar cada uno de ellos un matachín. “Recuerdo que El diablo lo compró un señor de apellido Ortiz, y La muchacha la compró mi abuelo”, relata. El 18 de marzo de 1963 surgió una nueva generación de matachines: El mulato obsequiado por José Barragán; La mulata por Juan Montes; El nuevo diablo por Cristina Montes; La pareja de payasos por Concepción Herrera y Elvia Ortiz; y La japonesa por Gerardo Peral. Así también, La piel canela donada por Willehado Osorio; Cantinflas por Luis Villagómez; Mefistófeles por Baraquiel Ortiz; La rubia por las señoritas Pajares; Mauricio Garcés por Paz Villagómez: y Jorge Negrete, por el propio cronista. El paseo por las calles El baile de Los Matachines de San José se basa en la improvisación, pues para cargarlos y “bailarlos” no se 6

Sacerdote y escritor originario de Huajuapan. Desde 1952 se ha dedicado a la investigación histórica. Es cronista del municipio de Huajuapan desde 1994. Es autor de “Ñuudeé, tierra de valientes”, “De Ñuudeé a Huajuapan”, “Dos mil seiscientas sesenta y cuatro horas de heroísmo” y “Guía turística de Huajuapan”, entre otras obras.

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requiere ensayar… es más, ni siquiera saber bailar. Los participantes en el recorrido que se realiza por las principales calles de la ciudad son jóvenes espontáneos que caminan con las armazones a cuestas y se detienen en las esquinas para bailar al son de la música de la banda, como cada quien la siente. Tal vez la excepción es el infaltable Calaca, el más conocido de los boleros del parque Independencia, quien derrocha maestría y ritmo en cada pieza musical. Parte del encanto de los matachines radica en el juego que se establece entre los bailarines y el público, pues los primeros arremeten contra los espectadores –principalmente los niños y las mujeres– agachando la armazón, simulando embestirlos y haciéndolos correr.

Desde muy temprana edad, los niños del barrio de San José participan en la fiesta y cargan los nuevos matachines hechos a su medida.

El paseo de los matachines se ha convertido en todo un acontecimiento para las familias del barrio. Decenas de hombres, pero sobre todo mujeres y niños, hacen del recorrido por las calles de Huajuapan una verdadera fiesta. Caminan bajo el sol, confundiéndose entre los integrantes de la banda de música y los jóvenes que cargan los monos. Algunos llevan latas de cerveza para calmar la sed. Entre los integrantes del grupo, hay quienes toman fotografías a sus conocidos, mientras éstos se sacuden frenéticamente al ritmo 16


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de El torito y otras melodías alegres. Llaman la atención las madres de familia que acompañan a una nueva generación de matachines, hechos a la medida de los niños, quienes desde los siete u ocho años de edad se empiezan a integrar a la más tradicional de las fiestas de barrio en Huajuapan. En algunos casos, las mamás cargan las pequeñas armazones con la cabeza de El diablo, El payaso o El hombre araña hasta la esquina más próxima, y de manera apresurada ayudan a sus hijos a colocárselas, momentos antes de que empiecen los primeros compases musicales. En décadas pasadas, cuando las jóvenes del barrio estaban sujetas a una estricta vigilancia de sus familiares, el efímero anonimato del baile de los matachines brindaba a los pretendientes la oportunidad de acercarse y cruzar algunas palabras con ellas. Tal era el caso de Manuel Ortiz Cruz, quien emigró a la Ciudad de México en 1939, pero cuando regresaba con motivo de la fiesta del barrio, buscaba la oportunidad de cargar un matachín para acercarse a su novia y ponerse de acuerdo con ella, sin que sus cuñados se dieran cuenta. Con el paso de los años los matachines fueron adoptados por otros barrios, e incluso por algunas localidades cercanas, que los han incorporado a sus festividades. Sin embargo, los de San José siguen siendo los más vistosos y representativos, los que continúan atrayendo la atención de los habitantes de la ciudad. De ello se sienten orgullosos los habitantes del barrio, quienes afirman: “Ahora podrá haber matachines en otros lugares, pero los auténticos, los mejores, son los de San José. Con todo respeto, pero los demás son simples imitaciones”. 19 de marzo de 2001.

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El 11 de julio de 1991 Huajuapan fue sede de observación del último gran eclipse del siglo XX y del segundo milenio. El fenómeno inició a las 11 horas con 59 minutos y 25 segundos y concluyó a las 14 horas con 52 minutos y 21 segundos. Su fase total tuvo una duración de 5 minutos con 58 segundos. Huajuapan se ubica en la zona final de observación del eclipse en la República Mexicana, por lo que más de 60 integrantes del Taller de Astronomía Carta del Cielo, A. C., encabezados por Alberto León y Rafael López Vélez, permanecieron en esta ciudad durante cuatro días para estudiar el fenómeno. Este fue el último eclipse total de sol visible en México y el más largo de la segunda mitad del siglo XX. Durante este fenómeno el sol registró su nivel de actividad más alto desde el siglo XV, lo que permitió conocer con mayor precisión el diámetro solar, estudiar su corona, determinar algunas coordenadas terrestres y realizar estudios sobre los aspectos magnéticos y climatológicos de las relaciones sol-tierra. El eclipse más espectacular observado en territorio oaxaqueño había sido el de 1970, cuyo principal punto de observación fue Miahuatlán de Porfirio Díaz.

El último eclipse del milenio en la tierra del sol Puntuales, el sol y la luna acudieron a la cita. Con exactitud cronométrica la diosa Coyolxauqui y el dios Quetzalcóatl se fundieron en la bóveda celeste, cuando faltaban sólo unos segundos para el mediodía. Miles de personas siguieron con atención el encuentro sideral que fue apreciado plenamente en esta ciudad gracias a que el firmamento permaneció despejado durante el tiempo que duró el espectáculo celeste, con excepción de dos 18


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momentos, uno durante la fase parcial y otro durante la totalidad, cuando densos nubarrones provocaron la momentánea frustración de los espectadores al interponerse y ocultar fugazmente a los astros.

Aspecto del eclipse del 11 de julio como se observó en Huajuapan (Cortesía de José González Acevedo).

Como estaba previsto, a la una de la tarde con 28 minutos y 45 segundos la temperatura empezó a descender; una suave brisa sopló, algunas estrellas emergieron y los animales domésticos buscaron refugio al hacerse de noche en pleno día. Las tinieblas se adueñaron de la ciudad, cuyas actividades se paralizaron durante mucho tiempo antes y después de los cinco minutos con 58 segundos que duró la oscuridad total. En ese lapso, con una mezcla de emoción, expectación y temor, la gente observó en las calles, las azoteas y los patios el encuentro amoroso de los astros. En algunos puntos de la ciudad las campanas repicaron y estallaron cohetes, saludando así al espectáculo más impresionante y esperado del final del siglo. Invadidas por una emoción desconocida, algunas personas se arrodillaron; otras lloraron, unas más aplaudieron y algunos ancianos buscaron refugio en el lugar más próximo, mientras duraba la cópula sideral. A la una de la tarde con 32 minutos y 42 segundos surgió la primera puñalada de luz que marcó el principio del fin de la noche en pleno día que vivió la Mixteca, la legendaria Tierra del Sol. Y a partir de ese momento, el astro rey fue 19


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creciendo, recuperando terreno paulatinamente hasta las dos de la tarde con 52 minutos y 21 segundos, cuando el sol y la luna se separaron definitivamente… hasta la próxima ocasión, es decir, hasta el próximo siglo. Habrá otros encuentros, nuevas citas se sumarán a la historia del milenario romance de los astros, pero los habitantes de Huajuapan, la Tierra del Sol ya no seremos testigos de ellos… hasta que hayamos rebasado el año 2000 y estemos viviendo el tercer milenio. 11 de julio de 1991

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En diversos momentos había existido la inquietud de promover que el Congreso del Estado reconociera a Huajuapan la categoría de ciudad heroica. El principal argumento era que esta localidad fue escenario del sitio más largo de la guerra de independencia de nuestro país. Este acontecimiento era considerado de mayor relevancia que la batalla contra los franceses librada en el Cerro Encantado, motivo por el que Tlaxiaco obtuvo dicha denominación el 7 de octubre de 1884. En 1991, la Sociedad Cultural Huajuapeña propuso que se realizaran las gestiones correspondientes ante el Congreso del Estado para que se reconociera a Huajuapan el carácter de heroica. Dos años después, el 9 de marzo de 1993, esta iniciativa fue retomada por el regidor Oscar Ramírez Cariño7 (PRD), quien logró la aprobación del Cabildo para que se hiciera la petición formal a la legislatura del estado. Sin embargo, no existe constancia de que dicho acuerdo se haya cumplido. El 6 de junio de 1994, al comparecer ante el pleno del Cabildo, el cronista del municipio, Josafat Herrera Sánchez, dio a conocer sus tres objetivos principales: 1) Promover el reconocimiento de Huajuapan como “ciudad heroica”; 2) Emitir la convocatoria para la elaboración del escudo del municipio; y 3) Iniciar las investigaciones para la publicación del primer anuario municipal. Meses después, con el apoyo de los integrantes del Consejo de la Crónica Municipal y de la radiodifusora XEOU, realizó una campaña de recolección de firmas de representantes de organismos e instituciones, así como ciudadanos del municipio, para calzar la solicitud que sería remitida al Congreso del Estado, acompañada de una fundamentación histórica. Sin embargo, las gestiones sólo se concretaron el 26 de agosto 7

Psicólogo y catedrático de educación media superior. Fue candidato del PRD a la Presidencia Municipal de Huajuapan; primer regidor emanado de ese partido (1983-1985) y director de Comunicación Social en los primeros meses de la administración 1996-1998.

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de 1996, cuando el gobernador Diódoro Carrasco Altamirano8 promulgó y publicó el decreto número 196 de la LVI legislatura, por medio del cual se le reconoce como Heroica Ciudad de Huajuapan de León y se establece que su nombre debe escribirse Huajuapan y no Huajuápam, como se hacía décadas atrás. La petición fue realizada por el Ayuntamiento presidido por Luis de Guadalupe Martínez Ramírez9 y por el cronista municipal, con base en el acuerdo de Cabildo del 9 de diciembre de ese año10.

Ciudad heroica El presidente interino de la Sociedad Cultural Huajuapeña (SCH), Alfonso Acevedo Andrade, demandó que las autoridades y habitantes de esta localidad promuevan ante el Congreso del Estado que se reconozca a Huajuapan como “ciudad heroica”. Al hacer uso de la palabra durante la presentación de los estudios históricos del sacerdote Josafat Herrera Sánchez, aseguró que Huajuapan tiene méritos suficientes para ostentar la denominación que ya tienen otras ciudades de nuestro país, e incluso de la entidad. Mencionó que el haber sido escenario del sitio más largo de la guerra de independencia de México la ubica en el mismo nivel de heroísmo de ciudades como Veracruz, Cuautla y Tlaxiaco, que desde hace muchos años cuentan con esa denominación. Recordó que en 1812 el militar guerrerense Valerio Trujano11, al frente de un grupo mal armado y sin la 8

Inició su carrera política en el PRI. Fue senador por Oaxaca (1991-1992), gobernador del estado (1992-1998) y Secretario de Gobernación. Actualmente es diputado federal por el PAN. 9 Abogado y político huajuapeño, miembro del PAN. Fue presidente municipal (19961998) y diputado local (2001-2004). Ha sido candidato a diputado federal y senador de la República. Es autor de varios libros, entre los que destacan “Los primeros Ayuntamientos de Huajuapan 1820-1823”, “Huajuapan ayer y hoy” y “Poesía mixteca contemporánea”. 10 Martínez, Luis de Guadalupe, Huajuapan ayer y hoy, Ediciones del Congreso de Oaxaca, 2001. 11 Insurgente nacido en Tepecoacuilco, Gro. (1767-1812). Del 5 de abril al 23 de julio de 1812 sostuvo en Huajuapan el sitio más largo de la guerra de independencia; el 6 de octubre de ese año murió en el rancho de La Virgen, en Tepeaca, Pue. Sus restos reposan en la Catedral de Tehuacán, Pue.

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preparación militar necesaria, defendió esta plaza durante 111 días, hasta que el generalísimo Morelos acudió en su ayuda.

Integrantes de la SCH: Estanislao Ortiz, Filemón Solano, Fidel Ortiz, Alfonso Corro, Carlos Trujano, Federico Solano, Macario Ramírez, Miguel A. Ramírez (atrás); Josafat Herrera, Alfonso Acevedo, Luis Guevara, Franco Camacho y Francisco Círigo (sentados).

El dirigente de la organización cultural propuso iniciar una campaña y gestionar ante la legislatura del estado que se otorgue a Huajuapan ese reconocimiento. En el acto efectuado en la Sala de los Presidentes del Palacio Municipal y organizado por la SCH, Carlos Trujano Morales12, integrante de ese organismo, aseguró que los estudios históricos de Josafat Herrera Sánchez contribuyen al conocimiento y difusión de la historia local. Dijo que la novela histórica Ñudeé, tierra de valientes, los ensayos De Ñuudeé a Huajuapan y Dos mil seiscientas sesenta y cuatro horas de heroísmo, Historia del sitio de Huajuapan, así como la Guía turística de Huajuapan de León, contribuyen al fortalecimiento de la identidad de los huajuapeños. Por su parte, Josafat Herrera afirmó que con sus escritos sólo pretende abonar al menos una parte de su deuda de gratitud con Huajuapan, de donde es originario. 12

Profesor de música y maestro fundador de la Casa de la Cultura. Fue regidor del Ayuntamiento de Huajuapan en la administración 1989-1992.

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Al definirse “más como un soñador y un estudioso” que como un historiador, dijo que desde hace 39 años ha recorrido las localidades de la diócesis para recabar la información necesaria para sus textos. Aseguró que seguirá recopilando datos relativos a la historia local, a pesar de que sabe que sus escritos estarán expuestos a la crítica de quienes “desprecian el esfuerzo de las hormigas de la verdad”. 16 de octubre de 1991.

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Huajuapan es una de las pocas ciudades del país -si no la únicaque cuentan con un espacio público cuyo nombre hace referencia al ejercicio de la libre expresión de las ideas. La Plaza de la Libertad de Expresión es el escenario obligado de actos cívicos, eventos culturales, ceremonias de transmisión de poderes, sesiones públicas de cabildo, informes de gobierno, mítines de inicio o cierre de campañas electorales, protestas populares y hasta huelgas de hambre. La plaza cívica del parque Independencia nació como resultado de la remodelación realizada por la Secretaría de Desarrollo Urbano y Ecología (SEDUE) de agosto de 1990 a febrero de 1991. Su creación tuvo un alto costo cultural para Huajuapan: la destrucción de la fuente de agua y del obelisco ubicados frente al Palacio Municipal. También se contemplaba reubicar el monumento al Gral. Antonio de León13 en el entronque de la carretera a Acatlima, pero los representantes de sectores y organizaciones de la ciudad rechazaron la propuesta. El 7 de junio de 1992, en el marco del día de la libertad de expresión, los integrantes de la Organización de Periodistas Independientes de la Mixteca Oaxaqueña (OPIMO) propusimos al Cabildo que ese espacio recibiera el nombre de Plaza de la Libertad de Expresión. La iniciativa fue aprobada por mayoría de votos, en sesión ordinaria efectuada al día siguiente. La placa alusiva fue develada el 23 de julio por el gobernador de Oaxaca, Heladio Ramírez López, en el marco de la conmemoración del CLXXX aniversario del rompimiento del sitio de Huajuapan. Con la invitación se buscaba que el mandatario estableciera un compromiso público de respeto al ejercicio de la actividad 13

Militar originario de Huajuapan (1794-1847). Fue el primer presidente municipal y gobernador de Oaxaca. En 1842 hizo posible la incorporación del Soconusco a la República. Murió en la Batalla del Molino del Rey, combatiendo a los invasores norteamericanos. En su honor, la ciudad de Huajuapan lleva su apelativo.

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periodística, ya que meses antes había impulsado una iniciativa para tipificar como delito la revelación de secretos. Las protestas de los comunicadores en diversos puntos de la entidad, como la efectuada por los integrantes de la OPIMO el domingo 5 de abril, lograron detener la pretendida “ley mordaza”.

Una plaza para la libre expresión

Detalle del obelisco al Gral. Antonio de León, demolido durante la remodelación del parque Independencia realizada por la SEDUE (Cortesía del Museo Regional de Huajuapan).

El gobernador Heladio Ramírez López develó la placa que denomina a la explanada cívica del parque Independencia de esta ciudad como Plaza de la Libertad de Expresión. En el acto se dio lectura al decreto mediante el cual el cabildo aprobó la propuesta de la Organización de Periodistas Independientes de la Mixteca Oaxaqueña. En su intervención, el presidente de la OPIMO, Francisco Círigo Villagómez, aseguró que los integrantes de esa organización tienen el compromiso de consolidar un periodismo regional que responda a las necesidades actuales de la Mixteca, sin caer en la dependencia sumisa ni en la diatriba estéril. Expresó que la libertad de expresión es el sustento de las sociedades que aspiren a ser auténticamente democráticas, por lo que se debe ejercer de manera responsable y al margen de intereses sectarios. Dijo que la actividad periodística es la conciencia de la sociedad, por lo que no debe someterse ni a los grupos de poder ni a quienes aspiran a obtenerlo: “La pluma no debe 26


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ser arma para herir o aniquilar; el periodismo no debe ser instrumento de grupos, cualesquiera que éstos sean: el periodista no debe tener más compromiso que el de informar con objetividad, oportunidad y sentido social”.

Develación de la placa de la Plaza de la Libertad de Expresión. De izq. a der. Javier Mendoza, Heladio Ramírez y Fidel Arámburo; al micrófono, Francisco Círigo.

Después de hacer un reconocimiento a los precursores del periodismo en Huajuapan de León, afirmó que actualmente esta región ha logrado ubicarse como generadora de noticias, lo que le ha permitido despertar el interés de medios estatales y nacionales, que cubren informativamente esta zona con corresponsales de prensa, radio y televisión. Advirtió que esta nueva realidad impone a los comunicadores el reto de la profesionalización porque “si en otros tiempos bastaban el entusiasmo y la pasión por la actividad, hoy tenemos la obligación de capacitarnos permanentemente, actualizarnos y esforzarnos por realizar un trabajo auténticamente profesional. Estamos convencidos de que hoy hace falta mucho más que entusiasmo y buenas intenciones para hacer periodismo”. Al término del acto, el gobernador Heladio Ramírez López dialogó con los miembros de la OPIMO, a quienes ofreció el apoyo de su gobierno para la realización de cursos de capacitación y actualización. 23 de julio de 1992. .

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La necesidad de constar en Huajuapan con una institución de nivel superior que frenara la emigración de los jóvenes de la Mixteca se había planteado desde hacía varias décadas; sin embargo, sólo se concretó a principios de 1990, cuando la Universidad Tecnológica de la Mixteca (UTM) inició sus actividades. Inaugurada oficialmente el 22 de febrero de 1992 por el presidente Carlos Salinas de Gortari, la UTM responde a un proyecto muy ambicioso que trasciende el ámbito meramente educativo, y cuyo propósito fundamental es coadyuvar a la transformación económica y social de la región, a través de la formación de profesionales de calidad que promuevan el crecimiento económico de la Mixteca. Al iniciar sus actividades la universidad contaba únicamente con 48 alumnos, 5 profesores y dos carreras: Ingeniería en Electrónica e Ingeniería en Computación; actualmente, el número de alumnos asciende a mil 204, el de profesores a 149 y su oferta educativa la integran 10 carreras a nivel licenciatura, y seis posgrados14. Además de la búsqueda de la excelencia académica, “a través de una enseñaza disciplinada con profesores y alumnos de tiempo completo”, la UTM tiene entre sus funciones la investigación, la difusión de la cultura y la promoción del desarrollo.

UTM, detonante del desarrollo regional El presidente Carlos Salinas de Gortari auguró que la Universidad Tecnológica de la Mixteca contribuirá a revertir el fenómeno migratorio de esta región, porque ya está logrando el retorno de los hijos de quienes tuvieron que salir 14

Sitio web de la Universidad Tecnológica de la Mixteca.

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en busca de mejores oportunidades de vida. “Ahora las nuevas generaciones encuentran mejores perspectivas en su propia tierra”, subrayó.

Recorrido por las instalaciones de la UTM. De izq. a der. el gobernador Heladio Ramírez; el presidente de Costa Rica, Rafael Calderón; el presidente de México, Carlos Salinas; y el rector Modesto Seara (Cortesía Foto Salazar).

Al inaugurar las instalaciones de la UTM, el mandatario manifestó que los habitantes de la región y la entidad empiezan a vivir una realidad distinta, pues la dinámica que registran ya no es para emigrar a otras entidades en busca de mejores horizontes, sino para lograr aquí su pleno desarrollo. Refirió que al platicar con los alumnos de la institución, éstos se mostraron orgullosos por la calidad de la educación que están recibiendo. Mencionó que la mayoría de los estudiantes son originarios de la Mixteca o de la capital del estado, y el único que nació en el Distrito Federal también es hijo de mixtecos. Expresó que la UTM no debe ser considerada un gasto sino una inversión en capital humano, que es el más valioso que tenemos los oaxaqueños y los mexicanos. En su intervención, hizo un reconocimiento público al rector Modesto Seara Vázquez, por haber renunciado a la comodidad de la capital del país para comprometer sus proyectos y su vida con la educación de los hijos de los mixtecos. Por su parte, el rector Seara aseguró que la UTM aspira a convertirse en un detonante cultural para transformar la 29


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realidad de deterioro ecológico, atraso económico y emigración que han flagelado por décadas a la Mixteca.

Aspecto de la mesa de honor en la ceremonia de inauguración de la UTM (Cortesía Foto Salazar).

Precisó que el proyecto académico de esa institución no está reñido con las universidades de masas, pero aclaró que los centros de educación superior deben formar a los cuadros más altos de la sociedad para que asuman un verdadero liderazgo. “Las exigencias académicas no se deben reducir, porque entonces se otorgaría patente de corzo a la mediocridad”, advirtió. Dijo que en las universidades debe prevalecer el principio de la diferenciación por el conocimiento: “Los que saben deben enseñar; los que no saben deben aprender, y las decisiones sobre los proyectos académicos deben reposar en el conocimiento y no en votaciones mayoritarias”. Partiendo de la premisa de que el capital financiero debe estar subordinado al intelectual, Seara Vásquez sostuvo que la UTM pretende alentar la imaginación, la creatividad y el espíritu emprendedor para que sus egresados se ocupen de la creación de sus propias empresas. Aclaró que el hecho de que ésta sea una universidad tecnológica no implica que haya renunciado a su dimensión humanista, pues también busca brindar a estudiantes y docentes una sólida formación cultural para que se 30


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identifiquen con su pueblo y conjuguen la búsqueda del progreso científico y tecnológico con la clara conciencia de su historia y tradiciones. Explicó que la búsqueda de la excelencia académica no deber ser un medio para fortalecer la ambición personal, sino fincarse en un contexto ético y en un enfoque solidario de la vida en común. Señaló que la voluntad de trabajo marca la diferencia entre las utopías estériles y las realizables, porque “no hay objetivos demasiado ambiciosos si están respaldados por una inquebrantable decisión”. Al término de la ceremonia de inauguración, el presidente Salinas, acompañado por su homólogo de Costa Rica Rafael Angel Calderón Fournier, por el secretario de Educación Pública Manuel Bartlett Díaz, y por el gobernador de Oaxaca Heladio Ramírez López, realizó un recorrido por las instalaciones de la máxima casa de estudios en la región, ubicadas en Acatlima, a 2.5 kilómetros de Huajuapan. 22 de febrero de 1991.

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En julio de 1990, Paul Coleman, un británico de 37 años de edad, nacionalizado canadiense, salió de Kingston, Ontario, para iniciar una caminata de miles de kilómetros hasta Sao Paulo, Brasil, con el propósito de generar conciencia sobre la necesidad de emprender acciones urgentes para salvar la selva de Las Amazonas. El 3 de diciembre de 1991 pisó territorio oaxaqueño y fue recibido en la plaza cívica del parque “Independencia” de Huajuapan por las autoridades municipales y centenares de personas, principalmente alumnos de instituciones educativas de la ciudad. Como testimonio de su paso por esta región, plantó un árbol en el prado ubicado en el lado norte de la explanada. Coleman logró su objetivo inmediato, pues en su caminata de extremo a extremo del continente atrajo la atención de miles de personas y logró que la Organización de Naciones Unidas (ONU) lo incluyera en la lista de oradores de la Conferencia Mundial sobre la Tierra. Sin embargo, a casi tres décadas de distancia, su esfuerzo parece haber sido infructuoso, pues los seres humanos continuamos depredando el planeta y la Mixteca sigue siendo una de las zonas más áridas de nuestro país. El paso de Paul Coleman por Huajuapan se ha olvido, y el árbol que plantó esa noche del invierno del 91 sigue en pie, pero sin una placa que haga referencia a su origen.

Una caminata por la salvación del planeta15 Tras un recorrido de casi siete mil kilómetros, iniciado hace 16 meses en Kingston, Ontario, Canadá, el británicocanadiense Paul Coleman pisó territorio oaxaqueño y fue recibido por centenares de personas congregadas en el 15

En coautoría con Luis Ramírez y Miguel Angel Schultz.

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parque Independencia de Huajuapan, desde donde realizó un vehemente llamado a la conciencia ecológica de la humanidad. Coleman pretende llegar en junio del año próximo a Sao Paulo, Brasil, para hacer escuchar su voz en la Conferencia Mundial sobre la Tierra y demandar que se tomen medidas urgentes para preservar la selva de Las Amazonas. Al caer la noche, escoltado por una patrulla de la Policía Federal de Caminos, el marchista avanzó con paso firme por la calle Valerio Trujano hasta llegar frente al palacio municipal, donde le esperaban las autoridades locales.

Paul Coleman (izquierda), arribando al parque Independencia de Huajuapan.

En el corazón de la región Mixteca, considerada una de las zonas más devastadas del país, Paul Coleman convocó a iniciar una cruzada a favor del medio ambiente y advirtió: “Sólo tenemos un mundo que fue creado para perdurar mucho más allá de los próximos años”. Aseguró que es urgente salvar los ríos, limpiar los océanos y preservar el medio ambiente “para construir una bella historia de unidad ecológica y salvar el planeta que habremos de heredar a los hijos de nuestros hijos”. Ante centenares de estudiantes, dio a conocer que a su paso por la Ciudad de México recibió la noticia de que la ONU incluyó su nombre en la lista de oradores que participarán en la Conferencia Mundial sobre la Tierra. Dijo que en ese foro será portavoz de los hombres, mujeres y 33


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niños que le han expresado su preocupación por el futuro del planeta y hará saber al secretario general de la ONU que la solidaridad mundial exige cambios profundos en las políticas ecológicas. Confió en que el organismo multinacional se verá obligado a tomar acuerdos que permitan construir un mejor futuro para la humanidad, fincado en la preservación de los recursos naturales. Poco antes, el regidor de Sanidad Alfonso Corro Ceballos consideró que la caminata de Paul Coleman a favor de la vida hace renacer la convicción de que no están canceladas las esperanzas para la humanidad. Entre aplausos de los niños y jóvenes que formaron una valla alrededor de la explanada, Coleman recibió del presidente municipal Fidel Arámburo García un reconocimiento impreso en papel reciclado, con la imagen de un mezquite que representa la vegetación de la Mixteca. Después, el marchista plantó un árbol en el prado ubicado al lado norte de la explanada cívica, como un testimonio de su paso por esta ciudad.

Paul Coleman saludando al presidente municipal Fidel Arámburo. Al centro, el autor

Ex marino, chofer y cuentista. Paul Coleman incursionó en territorio oaxaqueño a las 15 34


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horas con 20 minutos, vistiendo playera blanca, pants azul rey y calzando el séptimo par de zapatos tenis que utiliza en su recorrido, y que le obsequió el presidente municipal de Pachuca, Hidalgo. Acompañado por Loren Dean, Frank Fisco, Linda Kligman, Charlie Goff y Juan Zamora Cuaxotla –un mecánico de 51 años de edad que se sumó a la caminata en Acatlán de Osorio, Puebla– apenas levanta la vista cuando pasa bajo el enorme letrero verde en el que se aprecia la leyenda “Bienvenidos a Oaxaca”. Cuando abandonó su hogar en el norte del continente, llevaba sólo el dinero necesario para sufragar los gastos de los primeros días, pero ha logrado sobrevivir más de 16 meses gracias a la solidaridad de los habitantes de las poblaciones por las que pasa, pues asegura que la caminata no cuenta con el patrocinio de ninguna organización, fundación o corporación. Manteniendo un paso acelerado que le permite avanzar entre 40 y 50 kilómetros diarios, Paul refiere que su interés por visitar la selva amazónica surgió cuando era niño; pero no fue sino hasta hace menos de dos años cuando tomó la decisión de iniciar esta cruzada a favor de las selvas húmedas del planeta. Al incursionar en la Mixteca oaxaqueña, que padece un grave proceso de desertificación, Coleman rechaza que la suya sea “una voz que clama en el desierto”, pues tiene la convicción de que un esfuerzo individual puede mover a miles de personas y propiciar un cambio sustancial en las políticas ecológicas de los gobiernos y de la ONU. Aunque sirvió a la marina estadounidense durante seis años y trabajó una década como chofer de una asesora de la reina Isabel de Inglaterra, su principal afición consiste en escribir cuentos para niños. Por eso considera que su caminata representa la oportunidad de protagonizar “el más hermoso cuento de hadas que jamás se haya escrito”, cuyo desenlace feliz sería la salvación del principal pulmón del planeta. Al emprender nuevamente su caminata hacia la capital de 35


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la entidad, Paul Coleman advierte que la devastación de la Amazonia no es un problema exclusivo de Brasil, porque todos los problemas relacionados con la ecología son de orden mundial. Y reitera: “Salvar la selva húmeda más importante del planeta, es salvar la esperanza de la humanidad”. 3 de diciembre de 1991.

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El culto a la imagen del Señor de los Corazones –una escultura de Cristo crucificado, de 1.75 m. de altura y 26.5 kilogramos de peso, clavado a una cruz de caoba– data de principios del siglo XVII. Sin embargo, fue a partir de 1812 cuando el Cristo moreno se convirtió en el depositario de la fe y la devoción de prácticamente todo el pueblo de Huajuapan. En ese año, el ejército realista comandado por José Régules Villasante, Francisco Caldelas, Gabriel Esperón, Juan de la Vega y José de San Martín, sitió en Huajuapan a las tropas insurgentes al mando de Valerio Trujano. El sitio duró 111 días y fue el más largo de la guerra de independencia. El 15 de julio, cuando la situación era verdaderamente angustiosa por la escasez de parque y víveres, Trujano envió a Remigio Sarabia, el Indio de Nuyoó, a pedir auxilio a Morelos, quien se encontraba en Chilapa; al mismo tiempo, ordenó la realización de un novenario para invocar la protección del Señor de los Corazones. El jueves 23 de julio, precisamente en el último día del novenario, Morelos, Hermenegildo Galeana, los hermanos Bravo y Vicente Guerrero llegaron a Huajuapan para auxiliar a los sitiados, rompieron el cerco realista y liberaron la plaza. Para el pueblo, la oportuna llegada y el triunfo de los insurgentes no fueron obra de la casualidad, sino evidencia clara de la intervención milagrosa del Señor de los Corazones. Por tal motivo, su festividad se convirtió en la más importante de Huajuapan, opacando a la del santo patrono, Juan Bautista, la cual pasa prácticamente inadvertida. La devoción por el Señor de los Corazones ha trascendido el ámbito local: en el Olivar de los Padres, en la zona sur de la Ciudad de México, existe un templo en el que se venera su imagen. Cada año, un grupo de huajuapeños radicados en la capital del país se reúne en ese lugar para participar en la

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festividad que se realiza en honor del Cristo moreno. Durante mucho tiempo, la tarde del 23 de julio de cada año se realizaba una procesión por las principales calles de Huajuapan. En 1992 el entonces párroco del Sagrario Diocesano, Ausencio Hernández Acevedo, decidió cambiarla para las 8 de la mañana del día 24, lo que permitió una mayor asistencia de los devotos. Actualmente, participan miles de fieles en un recorrido de casi cinco horas. Los vecinos de las calles por las que pasa la imagen participan desde la madrugada en la elaboración de vistosas alfombras de aserrín tenido. Las instituciones bancarias cierran sus puertas, al igual que la mayoría de los comercios, y durante más de medio día se suspende la circulación de vehículos. En mi carrera periodística publiqué varias crónicas relativas a la procesión del Señor de los Corazones; sin embargo, para este libro elegí un texto inédito sobre la del 24 de julio de 2006, que fue la última en que la imagen lució la corona donada por Don Miguel Cantú: el 29 de agosto de ese año fueron robados la corona, algunos “milagros” del cendal y el dinero de las alcancías del Sagrario Diocesano. A principios de octubre fueron detenidos Esteban Flores Bazán y Jorge Hernández Velasco, quienes confesaron su participación en el robo, pero la corona no fue recuperada, ya que fue vendida en Cuautla, Morelos. De manera provisional, la imagen lució una corona de plata elaborada por Alejo Aquino, orfebre de San Pablo Huixtepec, Oaxaca. El primero de enero de 2007, en una ceremonia efectuada en el atrio de la Catedral con la participación de más de mil 500 personas, el obispo Teodoro Enrique Pino Miranda coronó la imagen del Señor de los Corazones con la pieza definitiva, fabricada también por el orfebre Aquino con las joyas donadas con ese propósito por muchos devotos. La nueva corona es de oro de 14 kilates, similar a la anterior, aunque con incrustaciones de brillantes y una mayor cantidad de espinas.

El último destello de la corona Bajo una llovizna finísima, los integrantes de la hermandad salen del Sagrario Diocesano cargando el anda con la imagen del Señor de los Corazones y la depositan en el piso, ante los obispos Teodoro Enrique Pino Miranda, de Huajuapan, y

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Eduardo Carmona, de Puerto Escondido. Frente al templo, centenares de personas aplauden y empiezan a formar una valla que se extiende sobre la calle Madero, por ambos lados de las alfombras multicolores de aserrín.

Aspecto de las alfombras de aserrín en la calle Antonio de León (Foto Lupita Palma).

Son las ocho y media de la mañana. En algunos rostros hay preocupación porque la intensa lluvia de la noche anterior provocó que la misa en honor del morenito de Huajuapan no se realizara en el atrio, sino en el interior de la Catedral. La pregunta es obligada: “¿Y si llueve?”. Y la respuesta es inmediata y contundente: “Aunque llueva habrá procesión”, porque hace falta mucho más que una lluvia, por intensa que sea, para desalentar la devoción de todo un pueblo. Desde las primeras horas de la madrugada, centenares, miles de personas, salieron a las calles para barrer el agua encharcada de la noche anterior. En un ejercicio de solidaridad que sólo se aprecia en esta fecha, hombres y mujeres de todas las edades tendieron el aserrín sobre el pavimento aún húmedo y luego colocan los moldes de madera para ir formando grecas, flores, aves y motivos religiosos hasta cerrar un cinturón multicolor en torno de las principales calles de la ciudad. Bajo un cielo nublado que contrasta con el sol inclemente de otros años, y entre los cánticos de las religiosas, inicia la procesión. Los dos obispos y algunos sacerdotes marchan lentamente atrás de la imagen. Cada 30 metros, grupos de hombres esperan de rodillas el momento de relevar a quienes 39


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cargan el anda, en una escena que se repite centenares de veces durante casi cinco horas. Paradójicamente, el deseo de llevar en hombros al Señor de los Corazones también es motivo de discusiones acaloradas, e incluso de algunas indisciplinas como la de algunos vecinos que se ubicaron entre dos de los grupos designados, argumentando que también tenían derecho a cargar el anda porque estaban frente a sus domicilios.”Muchos son los llamados y pocos los elegidos”, comenta el padre Porfirio Franco Ortiz, párroco del Sagrario Diocesano, con quien comparto micrófonos para realizar la crónica radiofónica de la procesión, como el año anterior. Delante del Cristo, miles de personas forman una inmensa valla que al llegar a la casa episcopal dobla hacia la izquierda y continúa por la calle Constitución, hasta el cruce con la Carretera Internacional. La gente camina por las aceras, evitando pisar los tapetes de colores. Algunas mujeres van descalzas y otras avanzan de rodillas por largos tramos. Muchos rostros son conocidos, aunque también se observa a numerosas personas provenientes de diversos puntos del país, quienes hoy faltaron a sus labores para acudir a la cita anual con el Cristo de los Corazones. En la calle Constitución se viven las primeras manifestaciones de júbilo: la gente arroja flores y confeti desde las azoteas. Al paso de la imagen estallan aplausos, porras y gritos que se funden con el estruendo de los cohetes. Cuando el reloj marca las 9:20 de la mañana, el anda con la imagen se detiene sobre la carretera, entre las calles Juárez y Nuyoó, donde se ubica la primera de las cinco estaciones. Decenas de globos rojos y blancos se elevan hacia el cielo, entre el aplauso de la multitud. Después de la reflexión que la religiosa María de Jesús Enríquez Espinosa realiza en ese lugar, la procesión se reanuda. La carretera parece ensancharse. El padre Porfirio y yo caminos sólo unos metros delante de la imagen. Vemos hacia el frente y nos percatamos de que la valla humana se pierde en el horizonte. Mientras apreciamos la belleza de las alfombras, el sacerdote refiere que los preparativos para la procesión iniciaron a 40


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finales del mes de mayo, cuando los integrantes de la Hermandad del Señor de los Corazones acudieron al aserradero del señor Aquiles Robles –el único que funciona en Tlaxiaco– para adquirir el aserrín; realizaron seis viajes, trayendo en cada uno de ellos un camión tipo torton lleno, y luego tardaron más de un mes para distribuirlo a los vecinos. Este día, la ciudad se paralizó. En el área comprendida dentro del cinturón de aserrín, ningún vehículo circula. Los bancos cerraron sus puertas, al igual que la mayoría de los comercios: la ciudad se vuelca en la más impresionante manifestación de fe que se vive sólo una vez cada año.

La imagen del Señor de los Corazones en el anda (Foto Angélica Muñoz).

“De los Corazones Huajuapan te llama”. El cielo continúa nublado. El sol se muestra sólo por momentos; sin embargo, mientras avanzamos por la carretera empezamos a sentir el bochorno, producto de la humedad en el ambiente por la lluvia de la noche anterior. La gente camina por ambos lados de la cinta asfáltica entonando cánticos en los que se mezclan los nombres de los libertadores de 1812: “De los corazones/ Huajuapan te llama/ Huajuapan te aclama/ con toda su fe/ Por eso Trujano/ estando en la guerra/ en la hora postrera/ con fe te llamó/ y tú lo miraste/ le diste entereza/ le diste la fuerza/ y el triunfo final”. Hace un año, durante el recorrido por la carretera, fuimos 41


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testigos de un acto de fe impresionante: Margarita Montes Soriano, una mujer discapacitada procedente de El Molino, localidad ubicada a cinco kilómetros de la ciudad, era transportada en un triciclo de carga por su madre, doña Alberta Soriano Estrada, y un voluntario que se ofreció a ayudarla. Esta imagen me impresionó profundamente por la devoción que se reflejaba en el rostro de la mujer. Al entrevistarla, me comentó que había pedido a su madre que la llevara a la procesión, aunque tuviese que hacerlo en el triciclo, pues quería hacer penitencia “por los que tienen sus piernas sanas pero no quieren venir”. Al día siguiente, a través de los micrófonos de la radio, solicité el apoyo del auditorio para conseguir una silla de ruedas para ella y en sólo unos minutos hubo respuesta. Hoy Margarita cuenta ya con una silla de ruedas que le permite desplazarse con mayor facilidad. Este día no la vi en la procesión pero sé que estaba allí, perdida entre los miles y miles de fieles. Sé que habría venido aunque hubiese tenido que hacerlo nuevamente en un triciclo de carga. También hace un año, en la calle 5 de febrero, muy cerca del hospital “Rafael Amador”, vimos a un anciano en silla de ruedas, a quien sus familiares colocaron sobre la acera para que pudiera observar de cerca al Cristo de los Corazones. Al paso de la imagen, sus ojos se iluminaron con un brillo especial, mientras sus labios dibujaban una oración. Hoy observamos una escena similar en la esquina de la carretera y la calle Pedro Moreno: un anciano en silla de ruedas, ubicado a un lado de la alfombra de aserrín, miró al Cristo con profunda devoción, mientras dos lágrimas resbalaban silenciosamente por sus mejillas. Para quienes viven atados a un triciclo de carga, como la mujer de El Molino, o a una silla de ruedas como los ancianos de 5 de febrero y de Pedro Moreno, estar en la procesión representa un esfuerzo excepcional. Son actos que hablan de esa fe profunda que los huajuapeños de aquí y los de fuera profesan al Señor de los Corazones.

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Otro aspecto de la procesión del Señor de los Corazones. Al frente, el autor y el sacerdote Porfirio Franco Ortiz, realizando la crónica para la radio local (Foto Angélica Muñoz).

El puente de los Zaqueos A diferencia de los años anteriores, la procesión continúa sobre la carretera hacia el poniente, en lugar de dar vuelta a la izquierda en la calle Bartolomé de las Casas. Decenas de personas han subido al puente peatonal para tomar fotografías o video, o simplemente para observar con devoción desde las alturas, el paso de la imagen. La escena me recuerda a Zaqueo, aquel recaudador de impuestos que tuvo que trepar a una higuera para ver por unos instantes a Jesucristo en la ciudad de Jericó, ya que la multitud y su corta estatura se lo impedían. La Biblia refiere que al llegar a la higuera, Jesús levantó la vista y le dijo: “Zaqueo, baja en seguida porque hoy tengo que alojarme en tu casa”. Dos milenios después, los modernos zaqueos se amontonan sobre la estructura amarilla del puente, adornada con motivos rojos, semejando un arco triunfal en cuya punta luce una cruz y bajo ella dos corazones. Muchas horas de trabajo, mucha creatividad, pero ante todo, mucha devoción. Minutos después de las diez de la mañana, cundo la imagen pasa por la esquina de la carretera y la calle Pedro Moreno, decenas de globos rojos y blancos, anclados al asfalto con bolsas de arena, se elevan al cielo simultáneamente al ser liberados. Es la primera vez que la procesión pasa por este punto de la ciudad. Los vecinos han escrito sobre la alfombra Bienvenido, Señor de los 43


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Corazones. En algunos tramos del recorrido, bandas de música y mariachis tocan al paso del Cristo. Por recomendación del escultor Miguel Casco Aquino, quien junto con sus hijos realizó la más reciente de las restauraciones al Señor de los Corazones, la cruz va casi acostada sobre el anda, para evitar el deterioro de la imagen. Desde la azotea de las oficinas del Instituto Federal Electoral, un militar toma fotografías, otros se arrodillan y uno más se persigna respetuosamente al paso de la imagen. Hace apenas tres semanas se realizaron las elecciones más competidas en la historia de nuestro país, las cuales dejaron una estela de resentimientos. Sin embargo, en este recorrido se borran las diferencias, las sociales, las económicas y las ideológicas. Aquí no hay sino un pueblo unido en torno del Señor de los Corazones. Aquí, los vecinos, los simples conocidos y hasta quienes no lo son se dan la mano para forman una valla que parece no tener fin y enmarcar el mosaico policromo formado por lirios, mariposas, flores, peces, racimos de uvas, hostias y frases bíblicas. Son las 10:40 de la mañana. Han transcurrido dos horas con diez minutos desde el inicio de la procesión, cuando la imagen es depositada frente al Centro Apostólico de Santo Domingo de Guzmán. Las alumnas la reciben con porras y globos rojos. En ambos lados de las alfombras han colocado mamparas en las que se plasman las siete palabras. En ese lugar, una de las religiosas realiza la segunda reflexión en torno de la necesidad de que cada cristino se asuma como un misionero. Veinte minutos después, la imagen toca la calle 5 de febrero a la altura de la curva del Seguro Social. La saluda un arco de cucharilla de maguey sobre el que se aprecia la leyenda Al encuentro con Cristo ayer, hoy y siempre. La reflexión del obispo. Muchas lágrimas se observan al paso de la imagen. Lágrimas de emoción. Sólo quien ha tenido la oportunidad de estar en las vallas, de recibir la primera luz del día colocando las 44


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alfombras de aserrín; quien ha soportado largas horas de espera para contemplar por sólo unos minutos la bienamada imagen y arrojarle confeti, flores o serpentinas de colores; quien ha caminado kilómetros y kilómetros bajo un sol inclemente para acompañarla en su recorrido, puede entender por qué el pueblo entero se vuelca en esta manifestación extraordinaria de fe y devoción que cada año se hace más grande. Cinco minutos antes de completar las primeras tres horas de recorrido, a las puertas del domicilio del abogado Joaquín Salazar, la imagen se detiene nuevamente. Ahora es el obispo Teodoro Enrique Pino Miranda quien realiza la reflexión correspondiente a la tercera estación. Se refiere a las manifestaciones de júbilo que se reproducen al paso de la imagen del Señor de los Corazones y las compara con las que se vivieron durante la entrada triunfal de Cristo a Jerusalén. Menciona que las alfombras de aserrín teñido son similares a los tapetes de hoja de palma que la gente colocó en aquella época al paso de Jesús. Y concluye su mensaje destacando la misión salvífica del Mesías: “Cristo pasa y nos dice „Sígueme, porque no he venido a condenarte, sino a salvarte‟”. La procesión se reanuda. La escena de la gente en las azoteas, con cámaras fotográficas o de video, se multiplica. Los cohetes estallan de tramo en tramo a lo largo de la calle. Los camellones permiten que la gente ocupe los carriles laterales y se dejen los centrales para la imagen y su comitiva. Pasado el mediodía, la imagen se detiene por cuarta ocasión, ahora en el entronque de las calles Micaela Galindo, Allende y 5 de febrero, junto al monumento a la Constitución, donde el sacerdote José González Acevedo centra su mensaje en la importancia de que los católicos realicen una labor de catequesis. Dios nunca muere. Veintiún minutos después del mediodía, la imagen llega a la 45


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altura del hospital “Rafael Amador”, desde donde se aprecian el último tramo de la calle Antonio de León y el lugar donde ésta cambia su nombre por el de 5 de febrero. Las nubes se dispersan y el sol sale totalmente. A pesar del toldo, algunos rayos se reflejan en la corona de metal dorado con incrustaciones de piedras preciosas que circunda la cabeza del Cristo moreno. Sobre el pavimento se observa una enorme vid con racimos de uvas, y unos metros adelante, enmarcada por arreglos florales, la frase Yo soy la luz del mundo, el que me siga no caminará en la oscuridad sino que tendrá la luz de la vida. En este punto donde la calle se ensancha, la procesión avanza con mayor fluidez. Es imposible calcular el número de personas que participan, porque no hay cifra que pueda encerrar las dimensiones de la fe y la devoción de un pueblo. A pesar de que llevamos más de cuatro horas de recorrido, hablando de manera casi ininterrumpida, y de que hemos caminado varios kilómetros, no se sienten la sed ni el cansancio. Desde la planta alta del restaurante Victor´s las notas de un mariachi se dejan escuchar, opacando los cánticos y rezos. El Dios nunca muere, del maestro Macedonio Alcalá, provoca que una emoción profunda nos invada y que las lágrimas aparezcan en los rostros de algunas personas que marchan cerca de la imagen. Pero qué importa saber/ que voy a tener el mismo final/ porque me queda el consuelo/ que Dios nunca morirá”. Frente a las instalaciones de la notaría de Othón Sibaja, la imagen se detiene por última vez para que el sacerdote Miguel Angel Calvo Gómez realice su reflexión. Son las 13:05 horas cuando la procesión se reanuda para recorrer el último tramo, entre las notas de una banda de música de viento. Sobre la calle Antonio de León, las alfombras tienen una característica especial: los adornos de aserrín son sustituidos por pétalos de flores naturales. Al llegar al templo de Nuestra Señora del Carmen las campanas repican. Desde este punto se aprecia el corazón histórico de Huajuapan, donde en 1812 Valerio Trujano se fortificó, estableció su centro de operaciones y diseñó las 46


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estrategias que le permitieron resistir los 15 embates de los realistas, desde aquel domingo 5 de abril cuando la plaza fue sitiada, hasta el jueves 23 de julio cuando las tropas de Morelos llegaron en su auxilio y derrotaron a los españoles. Frente al Palacio Municipal, funcionarios del Ayuntamiento reciben el anda y la transportan durante 30 metros, al igual que todos los grupos que han participando en esta tarea. Los aplausos y las porras se intensifican, los cohetes estallan casi sin ininterrupción cuando la imagen es depositada nuevamente frente a las puertas del Sagrario Diocesano, de donde salió casi cinco horas antes. El reloj marca las 13:25 horas cuando el obispo Teodoro Pino Miranda toma el micrófono para agradecer la participación del pueblo de Huajuapan: “Esta procesión tiene un significado muy especial. Hace 5 horas iniciamos este recorrido y hemos llegado a la meta. En el camino hemos visto rostros enfermos, rostros angustiados, rostros alegres, rostros que manifiestan esta presencia que hoy nos hemos dado la oportunidad de reflexionar. Pidamos al Señor de los Corazones que la disponibilidad de cada uno de nosotros se manifieste en alegría, en esperanza, pero sobre todo en servicio y en amor a nuestros hermanos”. Luego, la imagen es introducida al templo por los integrantes de la hermandad, quienes la colocan nuevamente en su nicho. Durante algunos minutos las puertas del Sagrario permanecen cerradas, pero luego se abren para que las personas que han formado una enorme fila pasen ordenadamente a besar la imagen. La gente se dispersa. Las calles se han ido abriendo paulatinamente a la circulación, una vez que la procesión ha pasado y que los vecinos retiran las alfombras y sólo quedan algunos vestigios del aserrín multicolor. En el interior del templo, los fieles desfilan uno tras otro para besar la imagen, en un ritual que se prolonga hasta la madrugada del día siguiente. 24 de julio de 2006.

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El 24 de marzo de 1991, a través de un comunicado suscrito por el vicario general, el pro vicario y el secretario canciller de la diócesis de Huajuapan, se dio a conocer que el obispo José de Jesús Aguilera Rodríguez16 había presentado su renuncia al cargo, la cual le fue aceptada por el papa Juan Pablo II. Aunque en el boletín no se dieron a conocer las causas, el 1 de abril el propio Aguilera explicó que su renuncia obedeció a motivos de salud, pues sus problemas cardiacos se habían agudizado en los últimos meses. Por disposición del papa, Jesús Aguilera continuó como administrador apostólico hasta la llegada de su sucesor Felipe Padilla Cardona17, el 17 de marzo de 1992. Felipe Padilla fungió como obispo de Huajuapan cuatro años y medio, y como administrador apostólico cuatro años más: el 4 de octubre de 1996 fue designado obispo coadjutor de Tehuantepec y a finales de 2000 asumió el cargo de obispo residencial de esa diócesis. El 31 de enero de 2001 entregó el gobierno pastoral de la Diócesis de Huajuapan al actual obispo, Teodoro Enrique Pino Miranda18, quien había sido preconizado el 2 de diciembre del año 2000, justamente un día después de cumplir 54 años de edad.

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Originario de Irapuato, Gto., fue catedrático del Seminario y vicario de la Diócesis de León, antes de ser designado sexto obispo de Huajuapan (1982-1992). Renunció por motivos de salud, aunque en su último mensaje como administrador apostólico, reconoció la existencia de un grupo de sacerdotes que se rebeló ante su autoridad pastoral. 17 Nació en León, Gto. Séptimo obispo de Huajuapan (1992-1996) y administrador apostólico de la Diócesis (1996-2001). Obispo coadjutor de Tehuantepec, y obispo residencial de esa diócesis a partir del año 2000, ante la renuncia de Arturo Lona Reyes, por motivos de salud. 18 Nació en Cucurpe, Sonora, el 1 de diciembre de 1946. Antes de su designación como obispo de Huajuapan, desempeñó diversos cargos, entre ellos el de vicario de Pastoral de la Arquidiócesis de Hermosillo.

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Felipe Padilla, séptimo obispo de Huajuapan19 El fervor se desbordó y el pueblo católico de las 52 parroquias de la diócesis se volcó en esta ciudad centenaria para recibir a su nuevo obispo, Felipe Padilla Cardona. Desde las tres de la tarde, grupos de fieles procedentes de diversos rumbos de la ciudad y de las foranías empezaron a congregarse en las inmediaciones de la Catedral y del Seminario Diocesano, así como en las calles por las que pasaría la comitiva episcopal.

Felipe Padilla Cardona estuvo más de nueve años al frente de la Diócesis de Huajuapan (Cortesía de José González Acevedo).

Pancartas, mantas, banderas con los colores del Vaticano y alfombras multicolores de aserrín esperaban el paso de quien poco después sería consagrado como séptimo obispo de esta diócesis erigida el 25 de abril de 1902 por el papa León XIII con el nombre de Diócesis de las Mixtecas. En la calle Trujano, a sólo unos metros del atrio de la Catedral, un arco elaborado con cucharilla de maguey se erguía majestuoso para dar la bienvenida a Felipe Padilla. A las 17:25 horas, con un retraso de 25 minutos motivado por una escala técnica para abastecerse de combustible, el helicóptero con matrícula XEFHU tocó suelo mixteco en el helipuerto adaptado en el Seminario Diocesano. Momentos 19

En coautoría con Luis Ramírez.

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antes, la aeronave había sobrevolado la ciudad entre aplausos, porras y banderas que se agitaban para saludar al nuevo pastor y al delegado apostólico Jerónimo Prigione. Al pie de la aeronave les dieron la bienvenida el vicario general Enrique Montes Neri y el pro vicario Jerónimo Vera Velasco. También recibieron el saludo del presidente municipal panista Fidel Arámburo García y de la presidenta del DIF municipal, Olga Ballesteros, viuda del fallecido alcalde Luis Guevara Camacho. Después de un breve descanso en un salón del Seminario, Felipe Padilla y Jerónimo Prigione abordaron una camioneta descubierta color gris, flanqueada con las banderas de México y El Vaticano, para iniciar el recorrido por las principales calles de la ciudad hasta llegar al atrio de la Catedral, donde el júbilo popular estalló en forma de cohetes, bandas de música y un mar de banderas blancas y amarillas que ondeaban al paso del nuevo prelado. Allí, en el corazón de esta diócesis que se extiende sobre el territorio de 26 mil kilómetros cuadrados y agrupa más de 400 mil habitantes, miles de fieles permanecieron atentos a la ceremonia que tuvo una duración de tres horas con 13 minutos. Otros tantos tuvieron que conformarse con seguir el desarrollo del acto por el sonido local, sobre la calle Madero y en el lado norte del parque Independencia. Una veintena de prelados, entre ellos el arzobispo de Oaxaca Bartolomé Carrasco Briseño y su coadjutor Héctor González Martínez; Jesús Alba Palacios de San Luis Potosí; Rafael García González, de la diócesis de León; y Anselmo Zarza Bernal, emérito de esa diócesis guanajuatense, presidieron la ceremonia. En uno de los momentos emotivos, el vicario general Enrique Montes Neri y el secretario canciller Manuel Muñoz Calixto, a nombre de la Iglesia Diocesana solicitaron oficialmente a Jerónimo Prigione la ordenación episcopal de Felipe Padilla Cardona, guanajuatense de 47 años de edad, preconizado el 15 de febrero de este año como séptimo obispo de Huajuapan, en sustitución de José de Jesús Aguilera Rodríguez, quien había renunciado al gobierno 50


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episcopal en marzo de 1991, por motivos de salud. Una vez que Prigione autorizó la ordenación, a pesar de que aún no se recibe la Bula papal, Felipe Padilla, hasta entonces obispo electo, realizó la profesión de fe, recibió el saludo de paz de su hermano Vicente –también sacerdote– y escuchó las promesas de adhesión y obediencia del Cabildo de Consultores, el Cabildo Catedralicio, los representantes del Seminario, del presbiterio, de las regiones y de las organizaciones de laicos. Buscar la verdadera unidad de la Iglesia Momentos antes, en su homilía, Prigione convocó a mantener la unidad de la Iglesia universal, con respeto a la legítima diversidad, pero ajena a las luchas internas que dañan la credibilidad del mensaje cristiano. Pidió al nuevo obispo y a los sacerdotes integrar una auténtica comunidad de vida y no permitir que los conflictos internos rompan con esa unidad fundada en la verdad y en la caridad. Aseguró que la Iglesia promueve la dignidad humana y opta preferentemente por los pobres, pero aclaró que esta opción “no es exclusiva ni excluyente, ni debe confundirse con la subversión o la politiquería”. Por ello, pidió a los católicos “no caer en la tentación de la teología de la liberación, porque no va de acuerdo con el ministerio de la Iglesia”. Poco después, ya consagrado como obispo, Felipe Padilla dirigió su primer mensaje a la comunidad católica diocesana, apoyándose en la parábola del sembrador. Destacó la importancia del mensaje evangélico como factor vital de las iglesias universal y diocesana, y se ubicó en la línea pastoral de sus seis antecesores Rafael Amador, Luis María Altamirano, Genaro Méndez del Río, Celestino Fernández, José López Lara y Jesús Aguilera. El nuevo prelado manifestó también su propósito de vivir en auténtica comunión con el presbiterio diocesano y con el pueblo católico de Huajuapan: “Una verdadera comunión cristina de interioridad y convicción, no sólo de gestos y 51


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costumbres, porque éstas sólo tienen contenido cuando responden a las convicciones profundas”, precisó. A las 22:25 horas, después de que el nuevo prelado impartió su primera bendición recorriendo los pasillos formados por la gente, concluyó la ceremonia religiosa. Después, el júbilo se desbordó en una verbena popular que se prolongó hasta las primeras horas del miércoles. 17 de marzo de 1992

Teodoro Pino, de Hermosillo a la Mixteca

Teodoro Pino trasladándose a la Catedral para su ordenación episcopal (Cortesía de Correo Mixteco).

Después de cuatro años, tres meses y veintisiete días de espera, Huajuapan volvió a tener obispo residencial. Cuando el reloj marcaba las siete de la noche con treinta minutos concluyó el ritual de ordenación y el sonorense Teodoro Enrique Pino Miranda se convirtió en el octavo prelado de esta casi centenaria Diócesis. A esa hora, se escuchó a través del sonido local la tan ansiada frase: “Ya tenemos obispo”, seguida del aplauso de la multitud. Una hora con cuarenta y cinco minutos antes, el hasta entonces obispo electo había descendido del automóvil Mustang rojo convertible con placas 288-EUU de Washington que lo trasladó desde El Chacuaco hasta la Catedral, en medio de una interminable valla de personas que aplaudían a su paso, agitando banderas de papel. 52


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En el exterior de la Catedral le habían recibido los sacerdotes Javier Hernández, Rogelio Palma, Francisco Rojas y Mario Cabrera, quienes le condujeron hasta el interior, entre los miles de fieles que atestaban el atrio, y las porras de quienes tuvieron que conformarse con presenciar la ceremonia en las pantallas gigantes de las calles adyacentes. En punto de las seis de la tarde, el arzobispo de Hermosillo, José Ulises Macías Salcedo, el secretario adjunto de la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM), Luis Barrera Flores, y el encargado de asuntos de la nunciatura apostólica en México, Astolfo Astolfi, acompañados por una decena de obispos, subieron al estrado instalado frente a las puertas de la Catedral, para iniciar la concelebración eucarística. Los más de cien sacerdotes provenientes de las 71 parroquias de la diócesis también desfilaron por el pasillo desde los anexos, pero se ubicaron en las sillas colocadas frente al altar. La ceremonia transcurrió entre los cánticos de los fieles dirigidos por un grupo de religiosas y acompañados por una banda de música de viento. En el momento de la homilía, el arzobispo Macías exhortó al obispo electo a encarnar al buen pastor, que no sólo debe vigilar a sus ovejas desde el exterior del redil, sino entrar y mezclarse con ellas para cumplir plenamente su misión. Minutos después, el hasta entonces administrador apostólico Felipe Padilla Cardona dio la bienvenida a Pino Miranda y pidió al pueblo católico de la diócesis trabajar en comunión con él. Al filo de las siete de la noche inició el ritual de ordenación, enmarcado por un denso silencio que sólo era roto por el ruido de los zanates que desde los árboles del parque central se hacían presentes. Después de la profesión de fe, se procedió a la firma de los documentos en lo que se establece que se cumplieron todas las condiciones para proceder a la ordenación del nuevo obispo. Siguieron luego la imposición de las manos, del libro de los evangelios, del anillo episcopal como signo de fidelidad; de la mitra en señal de santidad; y del báculo que 53


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simboliza la misión del pastor. Ya investido como obispo, en su primer mensaje a los fieles, Pino Miranda dijo que no trae ningún proyecto pastoral, porque el proyecto “ya está en esta diócesis con el dinamismo de sus sacerdotes, sus religiosas y laicos comprometidos; con su religiosidad popular y sus expresiones culturales; y con las semillas del verbo esparcidas en esta tierra”. Agregó que la iglesia diocesana debe hacer de sus signos celebrativos el contenido de una intensa comunión entre el obispo y los presbíteros, de las comunidades entre sí y de éstas con los religiosos, laicos e instituciones. Aseguró que vino a Huajuapan a compartir la vida de los habitantes de la diócesis: “Quiero estar con el pequeño, con el desposeído, con el que vive situaciones de marginación”, enfatizó. Eran las ocho de la noche con veinte minutos cuando, entre el estruendo de los cohetes, el repicar de las campanas y los fuegos de artificio que iluminaban el cielo, el obispo impartió la primera bendición a los sacerdotes, religiosas y fieles provenientes de diversas parroquias de las mixtecas de Oaxaca y Puebla, así como de Hermosillo, Sonora. Recepción en Tierra Blanca La intensa jornada para Teodoro Pino había iniciado a las 10 de la mañana cuando, acompañado por su madre Ramona Miranda, y por los arzobispos José Ulises Macías, Carlos Quintero y Héctor González, abordó la camioneta suburban gris que lo trasladó de la Ciudad de Oaxaca a su nueva diócesis. Diez minutos después del mediodía, la comitiva se detuvo en Tierra Blanca, pequeña localidad ubicada a 56 kilómetros de Huajuapan y puerta de entrada a la diócesis viniendo desde el sureste. Allí fue recibido por las autoridades municipales de la zona, los representantes del Decanato de la Provincia y centenares de fieles. En el templete ubicado a un costado de la cinta asfáltica, entre bandas de música y banderas blancas y amarillas que eran agitadas 54


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frenéticamente por hombres y mujeres, en su mayoría campesinos, recibió la salutación oficial del sacerdote Hilario Reyes Vargas, decano de la región de la Provincia. En ese lugar dirigió un breve mensaje a sus fieles, el primero en suelo mixteco: “Me da mucho llegar aquí y percibir un gran calor humano, pero también el calor de la fe. Vengo con el corazón abierto, con la voluntad de encarnarme en esta cultura, que no es diferente porque finalmente todos somos mexicanos”, expresó. Después abordó nuevamente la camioneta para recorrer los 16 kilómetros que lo separaban de Tamazulapan, donde centenares de fieles lo esperaban en el atrio del templo parroquial. Tras otra breve ceremonia de recepción, Pino Miranda pasó al interior del ex convento de ese lugar, donde fue servida una comida en su honor; luego recorrió los últimos 40 kilómetros hasta la cabecera de la diócesis. Poco antes de las 5 de la tarde arribó al entronque de las carreteras México-Oaxaca y Huajuapan-Tehuacán, donde fue recibido por las autoridades municipales de extracción panista y por miles de fieles. En su mensaje de bienvenida, el presidente municipal Bernardo Barragán Salazar manifestó que Huajuapan ya no es una “ciudad callada y dormida”, pues en ella coexisten nuevas realidades derivadas de su expansión urbana y del desarrollo que ha logrado por su privilegiada ubicación geográfica. Mencionó que la diócesis de Huajuapan está conformada por un gran número de pueblos indígenas poseedores de una gran riqueza cultural, folklórica y lingüística, pero en los que subsisten condiciones de marginación. Luego de presenciar la interpretación del Jarabe Mixteco, con el acompañamiento de la banda municipal José López Alavez, Pino Miranda abordó el Mustang descubierto que lo condujo lentamente por el tramo urbano de la Carretera Internacional hasta el entronque con la calle Valerio Trujano, donde un gran arco de cucharilla le daba la bienvenida, y recorrió las últimas cuatro calles hasta el atrio de la Catedral. Ocho horas con cuarenta minutos después de haber 55


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ingresado al territorio de esta diócesis, ya con la mitra en la cabeza y el báculo en la mano derecha, Teodoro Pino abandonó el atrio de la Catedral entre aplausos, porras y música, e ingresó al colegio Teresita Martín para ofrecer su primera conferencia de prensa.

El obispo Teodoro Pino recibido por el presidente municipal Bernardo Barragán Salazar (Cortesía de Correo Mixteco).

A sólo unos metros, en el parque “Independencia”, iniciaba la verbena popular que marcaba el fin de los cuatro años, tres meses y veintisiete días de ausencia de pastor en esta diócesis. 31 de enero de 2001.

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El 3 de agosto de 1969 fue inaugurada la radiodifusora XEOU, la primera en la región Mixteca. Nació con 500 watts de potencia, en la frecuencia 1480 de AM y con la denominación de Radio Huajuapan. En sus casi cuatro décadas de existencia ha ostentado los nombres de Radio Dimensión, Radio Joya, Sensación 1020, Sensación Estéreo y La Primera. Actualmente se ubica en el 1020 de AM y su potencia se ha incrementado a 5,000 watts. Desde su creación, la XEOU ha estado ligada estrechamente a la vida de Huajuapan, pues durante décadas fue el único medio de comunicación en esta zona. Aunque en los últimos años han surgido medios impresos –algunos de existencia efímera– se han realizado intentos de difundir programas locales a través de la televisión por cable, e incluso ha surgido una estación pirata, la XEOU sigue siendo el medio de mayor penetración e impacto. A través de ella, la gente se mantiene informada diariamente de lo que ocurre en Huajuapan y en la región. La radio ha dado cuenta, de manera puntual, de los principales acontecimientos ocurridos en Huajuapan durante los últimos 39 años: visitas de presidentes de la República, gobernadores y candidatos presidenciales de diversos partidos políticos; la toma de posesión y los informes anuales de los últimos 13 ayuntamientos; la consagración de los tres últimos obispos; los sismos de 1980 y 1999, durante los cuales desempeñó un papel de enlace muy importante; y el nacimiento de diversas empresas e instituciones. En la vida de la radio, destacan dos personajes: don Manuel Humberto Siordia Mata, fundador de la estación, y Francisco Javier Guevara Martínez, quien está a punto de cumplir 37 años ininterrumpidos frente a sus micrófonos.

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La divina locura de la locución

Don Manuel Humberto Siordia y el Ing. Manuel Siordia en la develación de la placa del salón de usos múltiples de la XEOU.

Contra los vaticinios de su padre, quien le advirtió que si se dedicaba a esa actividad “se iba a morir de hambre”, don Manuel Humberto Siordia Mata ha vivido de la locución más de sesenta años y se ha convertido en una de las voces más conocidas y autorizadas de Oaxaca. En 1944 inició su carrera en la primera estación de radio de la capital del estado, la XEAX, propiedad del señor Márquez. Recuerda: – Fui de los iniciadores. Teníamos sólo 50 discos y la gente ya sabía que después de Los Tarzanes seguía Amar y vivir, porque no se nos ocurría intercalar los discos, sólo les dábamos la vuelta. Mi papá me decía que eso no iba a funcionar, que me iba a morir de hambre. Precisamente para alejarlo de los micrófonos, su padre lo envió a trabajar a Aguascalientes, pero en la primera oportunidad el joven Manuel Humberto terminó en una estación de radio, la XEBI, de esa ciudad. – Un día vinieron a Oaxaca unos parientes de Aguascalientes, entre ellos uno que era el líder del sindicato de ferrocarrileros. Mi papá me dijo que me fuera a trabajar allá, porque yo ya no quería estudiar, y en esa época 58


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Aguascalientes era el principal centro ferrocarrilero del país; pero yo llevaba el gusanito de la locución y fui a una estación de radio, me hicieron una prueba y me contrataron. Después de un tiempo en esa ciudad, durante el cual conoció e hizo mancuerna con otro magnífico locutor, Germán Figaredo, quiso probar fortuna en la capital del país y para ello recurrió a un viejo amigo de su padre, el general Carlos I. Serrano, presidente del senado en la época de Miguel Alemán20, y a quien mucho llamaban el presidente sin banda. Sin embargo, rechazó lo que para muchos habría sido el sueño de su vida: trabajar en la XEW, la catedral de la radio en América Latina y prefirió ingresar a la XEB. – Cuando lo fui a saludar, el general Serrano me preguntó: “¿Qué quieres, chamaco, qué se te ofrece?”. Le dije que estaba buscando trabajo y me pidió que esperara media hora. Al término de ese tiempo salió su secretario particular, el licenciado Alberto Sodi del Valle, también oaxaqueño, y me dijo que me presentara a las 10 de la noche con el ingeniero Manuel Mayoral Heredia21, en ese entonces titular de la SCT y después gobernador del estado. El ingeniero Mayoral me informó que entraría a la XEW, pero yo no me consideraba con la suficiente experiencia y capacidad para estar al lado de las grandes glorias de la radiodifusión nacional como Manuel Bernal, Pedro de Lile, Joaquín Grajales, Jaime Manríquez, Edmundo García, Luis Cáceres, y le dije: “Mire, ahí lo voy a hacer quedar mal”. Entonces me citó para el día siguiente y me recomendó con los señores Duprá, que eran los dueños de la XEB. En esa estación compartió micrófonos con el también oaxaqueño José Ramón Bennetts y con otras figuras de la locución como Daniel Pérez Alcaraz, Enrique W. Curtis, 20

Originario de Sayula, Ver, fue magistrado del Tribunal Superior de Justicia, senador por Veracruz, gobernador de esa entidad, secretario de Gobernación y Presidente de México (1946-1952). 21 Gobernador de Oaxaca del 1 de diciembre de 1950 al 25 de junio de 1952. Su pretensión de aumentar los impuestos a los comerciantes generó protestas que desembocaron en una huelga nacional en 72 instituciones educativas del país. Tuvo que dejar el cargo antes de completar su segundo año de gobierno, tras la muerte de dos manifestantes a manos de su guardia personal, durante una protesta frente a la casa de gobierno.

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Enrique de la Campa, José Luis Gutiérrez, Fernando Marcos y Julio Sotero. Los dos últimos transmitían los partidos de fútbol desde el parque Asturias. En la ciudad de México también trabajó en Radio 620 La estación de la juventud y XEL Radio Capital, donde compartió micrófonos con Alfonso García, quien después fue conductor de La hora nacional. En esta última le tocaba abrir estación a las 4 de la mañana, por lo que utilizaba como gallo el famoso Reloj Chino, ubicado a sólo media cuadra, ya que no tenía dinero para comprar un despertador. Después de una estancia temporal en Guadalajara, decidió regresar a Oaxaca para fundar la XEOA, que revolucionó la radio en la entidad, porque trajo consigo a excelentes locutores como Federico Lozano, Ortiz Galván, Gabriel Fernández (actual esposo de La Chilindrina) y Rolando García, hermano de Arturo de Córdova. Sin embargo, fue en la XERPO Radio Variedades de Oaxaca donde permaneció 30 años, como locutor y conductor de noticiarios. Desde 1994 don Manuel Humberto es coordinador y conductor del noticiario Antena 89-7 de la XHOCA-FM de grupo ACIROaxaca. La fundación de la XEOU. La charla, que se desarrolla en un restaurante de la avenida Héroes de Chapultepec en la ciudad de Oaxaca, es interrumpida frecuentemente por algunos comensales que al reconocer a don Manuel Humberto se acercan a saludarlo. Sin embargo, el entrevistado no pierde el hilo de la conversación y de inmediato retoma el tema. Los recuerdos de seis décadas fluyen sin esfuerzo, como si el tiempo no hubiese transcurrido. La pregunta es inevitable: – ¿Cómo surgió la idea de fundar una estación de radio y por qué eligió Huajuapan? – Como gente que ha vivido mucho tiempo atrás de un micrófono, yo anhelaba tener mi propia estación. Sabía que era muy difícil que me la dieran para la ciudad de Oaxaca porque el dueño de la XEAX era yerno de un alto 60


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funcionario de la SCT. Además, yo tenía la experiencia del maestro Manuel Zárate Aquino, quien tuvo que esperar 29 años para que le autorizaran una estación en la capital del estado. Por eso pensé en otro lugar; deseché Tuxtepec porque estaba muy lejos, y entonces elegí Huajuapan, aunque todo mundo me decía “En Huajuapan nadie se va a anunciar, es una población muy chica”. Pero yo me mantuve firme: “Huajuapan, y a ver cómo nos va”. Empezamos con una estación modesta, con un equipo nacional, con 500 watts, pero gracias a Dios, nos ha funcionado. Tal vez influyó en su decisión el hecho de que había vivido un año en Huajuapan, cuando vino a trabajar como parte de la campaña contra la fiebre aftosa. En 1969, después de cinco años de gestiones ante la SCT y habiendo satisfecho todos los requisitos legales, técnicos y administrativos, por fin obtuvo la concesión para operar su estación de radio, con distintivo de llamada XEOU, en la frecuencia de los 1480 kilociclos de la banda de AM. La primera persona de esta ciudad con quien estableció contacto fue don Manuel Ramírez Acevedo, El Trovador Mixteco, quien años atrás había tratado infructuosamente de interesar al empresario radiofónico Rómulo O‟Farril para que estableciera una radiodifusora en Huajuapan. Fue él quien le puso en contacto con la señora Limón, propietaria de un terreno ubicado frente a la antigua secundaria Benito Juárez, el cual fue rentado para instalar los estudios, oficinas, planta transmisora y antena. Otra persona que le apoyó para la instalación de la emisora fue Nicolasa Solano, quien durante muchos años laboró en Teléfonos de México y hace algunos años falleció. La emisora fue inaugurada oficialmente el 3 de agosto de ese año y empezó a funcionar bajo la conducción de Héctor Noguera Trujillo, un veracruzano radicado en Oaxaca, a quien don Manuel encomendó la gerencia. Dos años después tomó la decisión de rentar la estación a una cadena dirigida por el también locutor Adrián Ojeda, y cuándo ésta desapareció la siguió rentando a Roberto Martínez Orozco, quien ahora es propietario de una estación de radio en 61


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Ixmiquilpan, Hidalgo. En 1985 don Manuel Humberto transfirió la estación a su hijo Manuel de Jesús, quien después de haber concluido la carrera de ingeniería en electrónica y comunicaciones se dedicaba a dar mantenimiento a diversas estaciones: – Ese año terminaba el contrato de arrendamiento con el señor Martínez Orozco y él quería que lo renováramos, pero mi hijo decidió regresar a Oaxaca porque estaba muy estresado por el exceso de trabajo y los viajes constantes, ya que él y su amigo Melchor Huerta se encargaban del mantenimiento de las estaciones del Núcleo Radio Mil y de otras emisoras en el país. Entonces les propuse que se hicieran cargo de la estación de Huajuapan y ellos aceptaron. Sin ocultar su orgullo, afirma que bajo la dirección de su hijo, quien hasta la fecha es director general, la estación se ha consolidado como una de las mejores de la entidad, superando en recursos, instalaciones y tecnología a muchas de la capital del estado: “Le ha puesto mucho empeño y ahora tenemos una estación muy digna”. Durante sus seis décadas frente a los micrófonos, don Manolo ha recibido numerosos reconocimientos, entre ellos la Charola de Plata como Decano de los Locutores en Oaxaca; la medalla Carlos Pickering otorgada por la Asociación Nacional de Locutores de México; y el Premio Estatal de Periodismo Benito Juárez García. Sin embargo, una de sus mayores satisfacciones es que el 9 de julio de 2005 fue invitado a develar la placa que del Salón de usos múltiples Manuel Humberto Siordia de la XEOU. Orgulloso de ser uno de los 12 fundadores del Sindicato de Trabajadores de la Industria de la Radiodifusión, Televisión, Similares y Conexas (STIRT) con Rafael Camacho Guzmán y uno de los 10 iniciadores de la Asociación Nacional de Locutores, a sus 76 años de edad don Manuel Humberto Siordia mantiene viva la pasión por los micrófonos y agradece a Dios por haberle permitido continuar viviendo esa divina locura, como define a la locución. 21 de noviembre de 2006

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Historias de Huajuapan

Paco Guevara: 37 años frente a los micrófonos Cuando en 1971 fue invitado por David Prado Torres a trabajar como locutor en la XEOU de Huajuapan, Francisco Javier Guevara Martínez no imaginó que en esta ciudad que ni siquiera podía ubicar en el mapa reafirmaría su vocación, formaría una familia y pasaría los siguientes 37 años de su vida. Originario de Orizaba, Veracruz, Paco Guevara como se le conoce en el medio, había cumplido apenas 20 años de edad y trabajaba como auxiliar en el departamento de refacciones de una agencia automotriz. Para satisfacer su inquietud por la radio, los fines de semana realizaba prácticas de locución en Río Blanco, en una estación de circuito cerrado, propiedad de David Prado: “Era una cabinita, con bocinas en el parque central y en el mercado, pero se comercializaban los espacios como si fuera una estación de radio. Ahí también realizaron prácticas algunos de quienes después se integraron a la XEOU, como Manuel Velasco Báez, Sergio Magno Parra Sánchez y Miguel Martínez Parra, entre otros”, recuerda. Después de varios meses de prácticas fue cuando David Prado le invitó a venir a Huajuapan en sustitución de otro veracruzano, Sergio Martínez Zacarías. Paco Guevara no lo pensó dos veces y aceptó de inmediato. Llegó el 3 de julio y dos días después su voz salió al aire. No sabía que en ese momento estaba iniciando la carrera más larga dentro de la locución en la historia de esa emisora. Cuando llegó, ya estaban Héctor Noguera Trujillo (quien era gerente y locutor), Manuel Velasco Báez y David Prado Torres. Un mes y medio después, el 19 de agosto, se festejó el segundo aniversario de la estación. En enero de 1992, David Prado pasó a ocupar la gerencia en sustitución de Héctor Noguera, pero diez meses después, el 13 de octubre de ese año, falleció en una accidente automovilístico en la recta a Cholula, cuando se dirigía a la Ciudad de México a realizar gestiones para el establecimiento de un equipo de futbol de tercera división profesional en Huajuapan. 63


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Paco Guevara conduciendo el programa Libre Expresión en la XEOU de Huajuapan.

A la muerte de Prado, hubo un intento de RAVISA, una cadena nacional de radio, por rentar la estación, pero quien finalmente lo hizo en 1973 fue Roberto Martínez Orozco, quien estuvo al frente de la misma hasta mediados de la década de los ochenta, cuando se hicieron cargo de ella los ingenieros Manuel Siordia Torres y Melchor Huerta. La radio de antes y la de ahora Sus más de tres décadas y media frente a los micrófonos, han dado a Paco Guevara la oportunidad de ser testigo de los cambios tecnológicos que la radio ha experimentado, desde los acetatos y las grabadoras de casete hasta los discos compactos y las computadoras, pasando por las cintas de carrete abierto, las cartucheras y los dats: “Al principio trabajábamos básicamente con dos tornamesas, una grabadora de casete y una de carrete abierto. Además de las melodías, muchos comerciales venían en disco, por lo que las agujas se desgastaban rápidamente, así que teníamos que cambiarlas mientras se estaba reproduciendo un disco en la otra tornamesa. La llegada de los cartuchos fue un gran avance, porque eran más prácticos, y ahora con los CD‟s y las computadoras, todo es más fácil”. 64


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Estos cambios también se perciben en la producción de los comerciales, pues actualmente hay un departamento de producción que se encarga de la parte creativa y de la edición, por lo que el locutor sólo tiene que poner la voz. “Antes teníamos que ponerle cerebro y ser creativos, porque nos daban un texto y había que musicalizarlo, buscar los efectos y operar el equipo; y si nos equivocábamos, teníamos que repetirlo desde el principio, una y otra vez hasta que saliera de un jalón, porque no había posibilidad de editar. Definitivamente, los locutores de antes teníamos que ingeniárnoslas por necesidad”, reitera. El periodismo, una nueva faceta El de Paco Guevara es un caso poco frecuente en el medio radiofónico: “Es uno de los pocos en el estado, y creo que a nivel nacional, en que un locutor permanece toda su carrera en una sola plaza y en una sola estación, pues en el medio de la radio hay mucha movilidad, generalmente los locutores cambian frecuentemente de estación”. El haber permanecido tantos años en una sola empresa no fue por falta de oportunidades, sino porque a los pocos años de su llegada, se casó y formó una familia. Aunque su esposa es originaria de Arriaga, Chiapas, también trabajaba en Huajuapan, por lo que ambos decidieron establecerse aquí. “Muchos compañeros se fueron a aprender a otros lugares; yo también tuve la oportunidad de salir, pero decidí quedarme, y no me arrepiento. Yo creo que la cuestión familiar tuvo mucho que ver con esa decisión”, refiere. Debido a que el salario de la estación no le permitía solventar totalmente sus necesidades, tuvo que buscar un ingreso complementario. Así, laboró durante 12 años en el programa rural de abasto de Distribuidora Conasupo (DICONSA), para lo cual realizó un convenio con la radio, para trabajar jornada reducida de lunes a viernes y estar más tiempo frente al micrófono los fines de semana. En 1992, cuando dejó DICONSA, se inició en la actividad periodística, la cual le permitió descubrir una faceta diferente 65


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del mundo de las comunicaciones. Fue en ese año cuando, después de haber participado en un curso-taller de géneros periodísticos, se integró al naciente equipo de noticias de la radio, y posteriormente se incorporó como corresponsal a un periódico y a un noticiario radiofónico de la capital de la entidad. “Es algo muy diferente a la locución, de más talacha, pero le permite a uno conocer a mucha gente”, dice. Y si como locutor tuvo la oportunidad de realizar transmisiones importantes como las visitas de los ex mandatarios Luis Echeverría, José López Portillo y Miguel de la Madrid, entre otros; de prácticamente todos los gobernadores de Oaxaca a partir de Alfonso Gómez Sandoval, así como las consagraciones episcopales de Jesús Aguilera, Felipe Padilla y Teodoro Pino, como reportero entrevistó a muchos personajes del medio artístico y de la política, entre quienes destacan Beatriz Paredes, Cuauhtémoc Cárdenas y Andrés Manuel López Obrador. Paco Guevara se involucró tanto en el mundo de la información que desde hace varios años dejó de presentar programas musicales para dedicarse exclusivamente a la conducción del noticiario matutino, actualmente denominado Primer Contacto, y del programa de comentarios y participación ciudadana Libre Expresión, además de haber estado una temporada como responsable del departamento de noticias de la radio. La actividad sindical en el STIRT Un aspecto poco conocido de su actividad en la radio es el de representante del Sindicato de Trabajadores de la Industria de la Radiodifusión, Televisión, Similares y Conexas (STIRT), al que pertenece desde que se incorporó al medio. Como delegado sindical estuvo más de 15 años, de ellos 10 o 12 de manera consecutiva, “tal vez porque el puesto no era muy peleado, pues el número de trabajadores sindicalizados era reducido”. La actividad sindical le permitió tratar a los secretarios generales de la sección Oaxaca, desde Justino Martínez Luna 66


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hasta Jesús Bamán Jiménez. Además, eventualmente tuvo trato con Nezahualcóyotl de la Vega y Rafael Camacho Guzmán, durante las visitas que ambos dirigentes nacionales realizaron al estado de Oaxaca. “Cada dirigente tenía su propio estilo: Justino era muy pausado para hablar, no era incendiario en sus discursos, pero nos daba nuestro lugar; José Luis también era calmado, muy inteligente y muy participativo en la toma de las decisiones; Bamán tiene la habilidad de generar un ambiente de compañerismo y promover la participación de los integrantes de su comité y del resto de los sindicalizados, no es dado a las decisiones verticales”, analiza. La representación sindical también le dio la oportunidad de participar en los congresos y asambleas nacionales en diversas ciudades, entre ellas Guadalajara, Veracruz, Acapulco y Querétaro. Del evento realizado en esta última, recuerda una anécdota: “Rafael Camacho Guzmán era el dirigente nacional del sindicato, pero también era gobernador de esa entidad. Como sabía de los alcances del gremio, ordenó que durante los días que duraba la asamblea, cerraran todos los lugares non santos, para evitar que sus muchachitos se descarriaran y faltaran a las sesiones”. Aunque reconoce que el sindicato ha mostrado voluntad para mejorar las condiciones laborales de sus agremiados, considera que a nivel nacional los salarios en esta industria siguen siendo bajos, aunque en los llamados convenios de singularidades se han logrado algunos avances. En parte por esta situación, pero también porque admite que “la radio es como una droga”, sigue activo, a pesar de que hace muchos años habría tenido la posibilidad de jubilarse. Las satisfacciones A la distancia de 37 años, Paco Guevara recapitula: “La radio me ha dado mucho, me ha dado satisfacciones, la posibilidad de conocer a mucha gente, de obtener el reconocimiento del auditorio; muchas personas que ni 67


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conozco, me conocen por mi nombre y me saludan, tal vez porque a través de la radio me he convertido en parte de su diario vivir”. Satisfacciones como la que tuvo el 14 de septiembre de 1996, cuando el STIRT le otorgó un reconocimiento especial que le fue entregado por el gobernador Diódoro Carrasco Altamirano en el marco del Día del Locutor y del Trabajador de la Radio, al cumplir 25 años frente a los micrófonos. O como haber sido merecedor del último Premio Municipal de Periodismo otorgado por el Ayuntamiento de Huajuapan el 7 de junio de 2002. Satisfecho y agradecido “con la radio, con don Manolo, con el ingeniero Manuel, que me ha dado ánimos y la oportunidad de seguir trabajando”, Paco Guevara no piensa por ahora en el retiro. Espera rebasar los cuarenta años como locutor y cumplir muchos más. Y aunque el tiempo que lleva frente a los micrófonos rebasa holgadamente la suma de los años de experiencia del resto de los locutores de la XEOU, confiesa que cada vez que entra a cabina lo hace “con los mismo nervios, con el mismo entusiasmo, con la misma preocupación por que todo salga bien”, como cuando se plantó por primera vez frente a un micrófono. 6 de marzo de 2008.

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El viernes 29 de febrero, en el marco de la celebración de su XXV aniversario, se agregó a la Casa de la Cultura de Huajuapan el nombre “Antonio Martínez Corro22”, en honor del compilador del Jarabe Mixteco. La Casa de la Cultura nació oficialmente en febrero de 1983, en el último tercio de la administración de Manuel Bautista Arias23 y después de dos años de gestiones ante el gobierno del estado. Dos de los principales promotores de su creación fueron María de los Angeles Abad24 y Luis Guevara. Aunque el de las casas de cultura fue uno de los principales programas del gobernador Pedro Vásquez Colmenares25, la de Huajuapan no fue incluida en el paquete de las primeras 26 creadas en la entidad. Sin embargo, la persistencia en las gestiones logró que el 6 de febrero de 1982 fuera publicado en el Periódico Oficial del Gobierno del Estado el decreto de expropiación del predio que hasta la fecha ocupa esa institución y poco después iniciara la construcción del edificio. 22

Músico, profesor y periodista nacido en Huajuapan (1906-1973). Fue alumno de Manuel M. Ponce en la Escuela Nocturna de Bellas Artes. Fue articulista de El Universal y de diversas publicaciones de Estados Unidos, Cuba y Argentina. Autor de más de una veintena de composiciones musicales, entre ellas la compilación del Jarabe Mixteco, que se presenta cada año en la fiesta de la Guelaguetza, en la Ciudad de Oaxaca. 23 Originario de San Juan Bautista Suchitepec. Fue presidente del primer Ayuntamiento Constitucional de Huajuapan emanado del PAN (1981-1983), candidato a diputado federal (1985) y concejal del Ayuntamiento (1989-1992). Murió en 1995. 24 Regidora de Educación y Promoción Humana del Ayuntamiento de Huajuapan (19811983). Conductora de noticiarios y gerente de la radiodifusora XECE de la Ciudad de Oaxaca; directora de radio del Gobierno del Estado, delegada de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (PROFEPA) y coordinadora estatal del programa “Oportunidades”. Fue candidata del PAN a la diputación local, a la diputación federal y al Senado de la República. 25 Político oaxaqueño, miembro del Partido Revolucionario Institucional (PRI). Fue gobernador del estado (1980-1985), director de Aeropuertos y Servicios Auxiliares (ASA), titular de la Dirección de Investigaciones y Seguridad Nacional (DISEN), embajador de México en Guatemala y presidente de la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (COMAR).

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Un factor decisivo para su autorización fue la estrategia de crear una “cultura sin casa”, en contraposición con la realidad de muchas de las existentes en esa época, que eran “casas sin cultura” porque operaban con muy bajo nivel de actividad, a pesar de que contaban con instalaciones, personal y presupuesto. En el caso de Huajuapan, se crearon los talleres de iniciación artística “Pro Casa de la Cultura”, que empezaron a funcionar en la explanada que dejó el Palacio Municipal al ser demolido tras el sismo del 24 de octubre de 1980. El primero de ellos fue el de pintura, a cargo de José Luis García26; después el de danza, bajo la responsabilidad de César Martínez, y el de teatro, dirigido inicialmente por don Juan Moreno y luego por quien esto escribe. Al autorizarse oficialmente la creación de la Casa de la Cultura, María de los Angeles Abad, fue designada directora. Los primeros maestros fueron José Luis García (pintura); César Martínez y Leonor Leal (danza); Ramón Ríos27 y Carlos Trujano (piano y guitarra, respectivamente); y Francisco Círigo (teatro). Ramón Ríos fue alumno de Antonio Martínez Corro, a quien profesa un profundo cariño y gratitud. Sus textos, escritos con motivo de los aniversarios luctuosos del maestro y su amena plática, dan vida a esta semblanza.

Martínez Corro, el Liszt28 de la mixteca A punto de cumplirse 35 años de la muerte del compilador del Jarabe mixteco, Ramón Ríos Solano considera que la obra del maestro Antonio Martínez Corro no ha sido valorada en su justa dimensión. El pianista, integrante del equipo fundador de la Casa de la Cultura y discípulo del maestro Tonchi –como le llamaban cariñosamente quienes le conocieron– afirma que el Jarabe 26

Pintor originario de Huajuapan de León. Alumno de Arturo García Bustos, ha participado en diversas exposiciones en México y el extranjero. En fecha reciente reanudó los murales del Palacio Municipal de Huajuapan, obra iniciada en 1987 y que permanecía inconclusa desde hace dos décadas. 27 Pianista y profesor de música originario de Santo Domingo Tonalá. Estudió en el seminario de Huajuapan y tomó clases de piano con el maestro Antonio Martínez Corro. Es egresado de la Escuela Superior de Música. 28 Franz Liszt, pianista y compositor romántico nacido en Hungría (1811-1986). Creador del poema sinfónico, forma típica del romanticismo, y de la moderna técnica de interpretación pianística. Es autor de 20 Rapsodias Húngaras, en las que capta el sentimiento y la esencia del pueblo húngaro.

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Mixteco “es una obra perfectamente armonizada y equilibrada, con una melodía fresca y un ritmo ágil”. Asegura que esto es resultado de los amplios conocimientos que el maestro tenía de música, principalmente de armonía y composición, pero también de la vida y costumbres de los pueblos de la zona. Sostiene que la compilación del Jarabe Mixteco es un trabajo similar al que Franz Liszt realizó con sus mundialmente famosas Rapsodias Húngaras, pues Martínez Corro logró plasmar la expresión y el sentimiento de la milenaria raza mixteca, al conjugar la música, las leyendas y las tradiciones de los pueblos de esta región. El bastón blanco y sus ojos sin vida Hijo de don Herlindo Martínez, otro gran músico mixteco, el maestro Tonchi fue seminarista y profesor normalista, pero también realizó estudios de medicina y contabilidad; ejerció el periodismo en diversos medios impresos del país y del extranjero; y cursó 7 años en la Escuela Nocturna de Bellas Artes, donde fue alumno de Manuel M. Ponce, el más grande de los músicos mexicanos. Aunque su obra cumbre es el Jarabe Mixteco, entre sus numerosas composiciones se encuentran Por qué, Ita, Canta, Mixteca mía, y el Himno a Cristo Rey –que entona casi todo el mundo católico– así como algunas rondas infantiles y cantos escolares. Igual que Bach, ocho años antes de su muerte, en 1965, Martínez Corro perdió uno de los sentidos más preciados; la vista. Cuando regresó a la Mixteca después de muchos años de ausencia, ya estaba ciego, pero aún así continuó componiendo e impartiendo clases. Así le recuerda Ramón Ríos: “Era de mediana estatura, siempre pulcro en el vestir y en el hablar. En su frente amplia se encerraba un cúmulo de conocimientos. Unos lentes oscuros escondían sus ojos muertos, y utilizaba un bastón blanco que movía ligeramente delante de sí para no tropezar. Así recorría el largo pasillo de bugambilias y 71


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enredaderas de su casa de las calles de Hidalgo”. El primer contacto con quien después habría de ser su maestro se dio una tarde de marzo de 1968 en el refectorio del Seminario Mayor, entonces ubicado en la esquina de las calles Morelos y Guerrero. El maestro estaba junto al piano, dirigiendo el ensayo de la estudiantina de la institución, que se preparaba para la recepción del obispo José López Lara. Poseedor de un oído finísimo capaz de detectar las “comas” que hay entre un sonido y otro, en sólo unas horas afinó al grupo, logrando una mejoría notable. Aunque a Ramón le impresionaron profundamente la figura del maestro y la atención que le prestaban los integrantes de la estudiantina, ese día no cruzó palabra con él. No fue sino hasta un mes después cuando el vicerrector del seminario lo llamó para sugerirle que tomara clases con Martínez Corro, quien había regresado recientemente a Huajuapan. “Es un maestro que toca desde el piano hasta la flauta”, le dijo. En esa época, Ramón Ríos estudiaba piano, pero de una manera autodidacta. La idea le entusiasmó, pero el jueves siguiente, cuando acudió a su casa, lo hizo con cierto recelo y temor, porque sabía que los grandes músicos se caracterizan por ser malhumorados. Sin embargo, el maestro Tonchi le sorprendió: “Era muy amable, aunque no dulzón. Se sentó a platicar conmigo y me preguntó qué estudiaba, cuántos años tenía, qué quería hacer. Luego, me pidió que interpretara la última lección del método Beyer que hubiese tocado – recuerdo que era la lección 61– y cuando terminé me corrigió la posición y la distancia entre las manos, así como otros detalles técnicos. Desde esa vez me impactó”. Como maestro, Martínez Corro era generoso y humano. Sus clases eran muy extensas, pues no se limitaba a la enseñanza del piano, sino que las complementaba con dictado rítmico, dictado melódico e historia de la música. Además, platicaba mucho con sus alumnos y les hablaba de su vida. En una ocasión comentó a Ramón que se había casado con una nieta o bisnieta de doña Josefa Ortiz de Domínguez, quien le puso como condición para aceptarlo 72


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que abandonara la intensa vida social que el maestro llevaba. En esa época, las clases particulares se cotizaban entre 100 y 150 pesos en la Ciudad de México. Sin embargo, cuando tocaron el tema de sus honorarios, el maestro Tonchi le dijo: “Ha de saber usted –porque siempre nos hablaba de usted– que quien del altar vive, del altar tiene que comer, como decía San Pablo; pero yo no voy a abusar, no le voy a cobrar lo que se cobra en la Ciudad de México. Págueme de 5 a 15 pesos, lo que usted pueda”. Entre los alumnos de piano, violín y canto que el maestro tuvo en sus últimos cinco años de estancia en Huajuapan –a la postre los últimos de su vida– Ramón recuerda a dos seminaristas poseedores de voces extraordinarias: Justo Osio, quien regresó a Huajuapan con motivo de los 50 años del Jarabe Mixteco, tan sólo para cantar Mixteca mía, y Willehado Abraham Cruz, quien siguió viviendo en esta ciudad, se dedicó al magisterio y falleció hace casi dos décadas. Ramón fue alumno de Martínez Corro sólo un año, pues a finales de 1969 decidió emigrar a la Ciudad de México para estudiar. Cuando le comentó esta decisión, el maestro le felicitó, le auguró éxito y le dio un consejo: “Recuerde que a México, hay que ir a sacarle, no a meterle; vaya, estudie todo lo que pueda, y regrese a su tierra”. En 1972, cuando Ramón iba a tocar por primera vez en la Sala Chopin, Martínez Corro le pidió que le interpretara el programa que presentaría. En la siguiente visita a Huajuapan Ramón acudió a su casa y tocó para el maestro las 4 ó 5 melodías que incluiría en su presentación. Después de escucharle con atención, el maestro le hizo algunas observaciones que le fueron de mucha utilidad. A pesar de la distancia, Ramón mantuvo el contacto con Martínez Corro, quien aunque estaba ciego, elaboraba sus cartas en una máquina de escribir. En febrero de 1973, Irma, una hermana de Ramón que también había sido alumna de Tonchi, le informó que el maestro estaba muy enfermo. Víctima de la diabetes, se había refugiado con su familia en una vieja casa de la 73


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colonia Santa María la Ribera, en la Ciudad de México. Aunque Ramón fue a visitarlo, no pudo verle. Poco después, regresó acompañado por Irma, y ésta vez pudieron cruzar con él sólo unas cuantas palabras, pues estaba en cama y con la salud muy deteriorada. En abril, el maestro murió y sus restos fueron traídos a Huajuapan, para ser depositados junto a los de don Herlindo, su padre. Acto de justicia

Fachada de la Casa de la Cultura Antonio Martínez Corro.

A casi 35 años de distancia, cuando parecía que el aniversario luctuoso del maestro Tonchi pasaría inadvertido, como ocurrió los años anteriores, el Ayuntamiento tuvo la iniciativa de poner nombre a la Casa de la Cultura, con motivo del XXV aniversario de esa institución. Aunque la propuesta original se perfilaba hacia José López Alavez, Ramón Ríos argumentó que, sin pretender restarle méritos, una calle del primer cuadro de la ciudad y la banda municipal de música ya ostentaban el nombre del autor de la Canción Mixteca. Recordó que en Huajuapan existían personajes destacados como Antonio Martínez Corro, Elisa Abascal y el sacerdote González Gatica, que aún teniendo méritos suficientes, permanecían en el olvido. Finalmente, el Cabildo aprobó esta propuesta y desde el último día de febrero, la Casa de la Cultura se denomina oficialmente “Antonio Martínez Corro”. Ramón Ríos no oculta su satisfacción por la decisión de las autoridades. Considera que fue un acto de justicia, como 74


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lo fue hace 19 años la colocación de una placa con el nombre del maestro al salón de música de la institución, como parte del homenaje póstumo organizado en coordinación con la Sociedad Cultural Huajuapeña. A tres décadas y media de distancia, Ramón sigue recordando al maestro Tonchi, “con sus ojos sin vida y su limpio vestir, reflejo de la pureza de su espíritu; con su paso inseguro y su blanco bastón, caminando bajo el techo de bugambilias y enredaderas de su casa, cuna pacífica de músicos, dramaturgos y poetas”. A 35 años de su muerte, el espíritu del maestro sigue recorriendo, como en sus años mozos, los polvorientos pueblos de esta Mixteca que tanto amó. 8 de marzo de 2008.

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Capítulo 2

“Lloraron los árboles, vacilaron los tejados, se estremeció el suelo y se sacudieron las conciencias”. Estanislao Ortiz Escamilla.

El viernes 24 de octubre de 1980 un sismo de 6.5 grados de intensidad en la escala de Richter, con duración de un minuto con 47 segundos, sacudió el Distrito Federal y los estados de Veracruz, México, Morelos, Tlaxcala, Guerrero, Puebla y Oaxaca29. El epicentro fue ubicado a unos 140 kilómetros al oeste de la ciudad de Oaxaca, en las inmediaciones de Huajuapan de León. Aunque también se reportaron víctimas en la capital del país y en localidades del estado de Puebla, como Acatlán de Osorio, Tehuitzingo y San Pedro Yeloixtlahuaca, la ciudad más afectada fue Huajuapan, donde resultaron dañadas entre el 60 y el 85 por ciento de las casas, así como templos, escuelas y edificios públicos. En esta zona el número de viviendas caídas fue estimado en dos mil; otras 300 tuvieron que ser demolidas y cinco mil ameritaron reparaciones diversas; también resultaron dañados 23 templos y 75 edificios escolares. El número de víctimas mortales ascendió a 54 y el de heridos a 378. El sismo de 1980 fue la mayor tragedia colectiva registrada en Huajuapan durante la segunda mitad del siglo XX, pero también constituyó un elemento de transformación y un detonante del crecimiento de la ciudad. 29

Excélsior, 25/X/80.

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En esta edición incluyo un texto publicado al cumplirse once años del sismo y otro relativo a la historia de Luis Vázquez González, un niño que permaneció sepultado entre los escombros del portal municipal y fue rescatado ileso varias horas más tarde.

La furia de la naturaleza desatada 24 de octubre. 8:54 de la mañana. La ciudad despierta. En las calles empieza a notarse el movimiento cotidiano, de las aulas brotan los coros infantiles y en los mercados la actividad comercial se encuentra en pleno apogeo; las oficinas públicas se disponen a abrir sus puertas. Sólo las amas de casa y algunos rezagados permanecen en sus hogares. Un día como cualquiera, un viernes como cualquier otro. Y sin embargo, en unos segundos todo cambió radicalmente: se estremecieron los tejados, se desplomaron los vetustos muros, se levantó una enorme nube de polvo y la majestuosa tierra del sol quedo reducida a escombros, convertida en un páramo de ruinas, luto y llanto. Templos, escuelas, edificios públicos y hospitales se vinieron abajo. El Palacio Municipal, el hospital Rafael Amador y Hernández, las primarias Antonio de León, Teresita Martín, Lázaro Cárdenas y la secundaria Benito Juárez se desplomaron; la Catedral y los templos de El Calvario y San José, entre otros, quedaron en pie pero seriamente dañados; la torre del Sagrario Diocesano tuvo que ser derrumbada esa misma tarde ante el inminente riesgo de desplome; del mercado Porfirio Díaz sólo quedó el cascarón, al igual que de muchas viviendas cuyas fachadas se mantuvieron en pie, ocultando púdicamente sus interiores reducidos a escombros. Las calles se tornaron intransitables, reinó el caos y empezaron a observarse escenas auténticamente dantescas. Hombres, mujeres y niños corrían sin rumbo, asemejando fantasmas, cubiertos por la cal de los techos y paredes; algunos se arrodillaban, otros caminaban con la mirada perdida sin acertar a explicarse lo que estaba ocurriendo, unos más removían escombros, otros recorrían hospitales. 77


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Llanto, luto, destrucción. Una ciudad reducida a escombros. Incomunicación y oscuridad. Poco más de 50 muertos en la región; 60 por ciento de viviendas dañadas en esta ciudad y más de 350 heridos, muchos de ellos trasladados a otras ciudades o atendidos en una enorme tienda de campaña que, a manera de improvisado hospital, funcionó durante varios días en el parque Independencia. Las líneas telefónicas resultaron dañadas, dejando virtualmente incomunicada la ciudad. La energía eléctrica fue suspendida y la radio local, que en esos momentos tocaba la melodía Un gato en la oscuridad del brasileño Roberto Carlos, enmudeció. Al mediodía un nuevo sismo hizo resurgir el pánico. Por la noche, miles de almas se congregaron en el atrio de la Catedral ante la imagen del Señor de los Corazones para llorar por sus muertos, lamentar la pérdida de sus viviendas y sus patrimonios o dar gracias por haber sobrevivido a la catástrofe. A oscuras, la ciudad acentuaba su imagen de zona de desastre, de urbe bombardeada. Al día siguiente, el gobernador Eliseo Jiménez Ruiz30 y el presidente José López Portillo31 sobrevolaron la ciudad en helicóptero y luego recorrieron a pie algunas de las calles más dañadas, los mercados y el primer cuadro. El presidente declaró el estado de emergencia y ordenó la implementación del plan DN-III-E. Durante varios meses las calles permanecieron bloqueadas por los escombros y hasta la fecha pueden observarse algunos muros semiderruidos, como mudos testigos de la catástrofe de hace 11 años. 30

Militar y político oaxaqueño. Fue senador de la República y gobernador interino (19771980). En 1974, como comandante de la XXVII Zona Militar, coordinó las acciones de rescate del candidato a gobernador de Guerrero, Rubén Figueroa Figueroa, secuestrado por integrantes del Partido de los Pobres y combatió a la guerrilla en esa entidad, hasta la muerte del principal dirigente rebelde, Lucio Cabañas Barrientos. 31 Fue el 68º presidente de la República (1976-1982). Durante su administración se registró una aparente bonanza económica basada en los recursos petroleros del país. El final de su mandato estuvo marcado por denuncias relativas a escandalosos casos de corrupción, el aumento excesivo de la deuda externa y una severa crisis económica.

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Imágenes difusas. A la distancia de los años las imágenes del sismo se desdibujan, adquieren tonalidades lejanas... pero no se borran. No se borra el estrépito que precedió al movimiento telúrico, un retumbo en las entrañas de la tierra, como lo recuerda el taxista Luis García Jiménez; o la enorme nube de polvo que podía verse desde el rumbo del Seguro Social, según relata Gilberto Oledo: “Era una nube muy extensa. Mi mamá estaba en el centro porque tenía su puesto en el mercado y yo vine corriendo a verla. Muchos puestos estaban caídos. Fue algo muy feo, siniestro”. O la angustia del profesor José Barragán Ramírez, quien en Magdalena Tetaltepec logró controlar a sus alumnos y ponerlos a salvo, para después devorar los kilómetros y trasladarse a esta ciudad en busca de su familia. O la desesperación de Roberto Cano Ibáñez, al leer, en la ciudad de México, los encabezados de los periódicos de la tarde, que aseguraban: Huajuapan desapareció del mapa. En el centro de la tragedia, el médico Alfredo Loranca Ventura se libró milagrosamente de la muerte, pues un muro cayó sobre la cama de su habitación del hospital Rafael Amador y Hernández, tan sólo unos instantes después de que él se incorporó rápidamente al ver que el techo y las paredes se desplomaron en medio de un estrépito ensordecedor. Refiere que tuvo que salir por el hueco que dejó un clóset, ya que la puerta de la habitación no se pudo abrir. Recuerda el pánico de los pacientes, la angustia de los familiares que buscaban a los suyos, el rescate de los recién nacidos, la búsqueda de medicamentos entre los escombros y la manera en que, al regresar la calma, tuvieron que organizar a los propios enfermos y a sus familiares para que atendieran a otros heridos: “Fueron solo unos segundos, pero parecieron interminables, como si todo estuviese transcurriendo en cámara lenta”. En el antiguo mercado Porfirio Díaz, Juan de Dios Ortiz Acevedo, desde su local exterior ubicado exactamente frente a la Catedral y denominado La Huajuapeña, presenció la 79


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muerte instantánea de uno de sus clientes, quien ante el estrépito del derrumbe corrió hacia la calle pero al hacerlo fue alcanzado por la cornisa que se desprendió de la construcción. Leonel Sánchez González, desde su pescadería del interior, presenció el pánico de comerciantes y clientes, la salida en tropel tratando de ganar los pasillos, la angustia reflejada en todos los rostros y la forma en que, para proteger a un niño que estaba a su servicio, se mantuvo hasta el final del temblor junto a uno de los pilares que sostenían el techo. A pesar de que el mercado estaba atestado, solo tres o cuatro personas murieron en ese lugar. Asimismo, sólo dos o tres personas perecieron en el hoy desaparecido Hotel Viñas que se vino a tierra completamente, según recuerda Roberto Viñas Leyva, cuya familia perdió prácticamente todo su patrimonio y tuvo que empezar de cero. “¿Qué hacen aquí? ¡Huajuapan se acabó!”. A once años de distancia las imágenes se tornan brumosas, como viejas fotografías, pero permanecen dormidas en el recuerdo y resurgen a la menor referencia del desastre. El entonces presidente municipal Fidel López Sánchez32 recuerda que ese día se trasladó a la ciudad de Oaxaca para asistir a una audiencia con el gobernador Eliseo Jiménez Ruiz. Al subir las escaleras del antiguo palacio de gobierno, sin saber aún de la tragedia, se topó con el mandatario, quien le dijo: “¿Qué andan haciendo aquí? ¡Huajuapan se acabó!”. Manuel Bautista Arias, quien le sucedió en el cargo, recuerda que recibió la ciudad en ruinas, devastada, llena de escombros, por lo que la prioridad de su administración fue quitar a Huajuapan la imagen de ciudad bombardeada, despejar las calles y luego pensar en la reconstrucción. Asegura que la reconstrucción de la ciudad se tuvo que 32 Es originario de San Juan Mixtepec, Juxtlahuaca, y miembro del PRI. Fue presidente municipal de San Juan Mixtepec y Santiago Juxtlahuaca; diputado federal (1955); síndico (1972-1974) y presidente municipal (1978-1980) de Huajuapan.

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realizar con el esfuerzo de los propios habitantes porque “la ayuda oficial nunca llegó, todo el tiempo la estuvimos esperando”. Fidel Arámburo García33, actual presidente municipal, define al sismo como una poda porque propicio un mayor crecimiento, aunque anárquico, de la ciudad y lamenta que no se haya aprovechado esta situación para regular el crecimiento de la mancha urbana: “Con el temblor tuvimos esa oportunidad; quizás no se supo aprovechar, pero pudo haber cambiado mucho la vialidad”. Luis Antonio Pozos Avila sostiene que el sismo cambió las tendencias de construcción: “A partir de entonces la gente empezó a construir considerando el carácter sísmico de la ciudad y utilizando materiales que resistieran un nuevo movimiento de esta naturaleza”. En efecto, la ciudad se transformó radicalmente: el adobe y la teja fueron sustituidos por el tabique y la losa de concreto; la piedra por el acero; las románticas casas con tejados de dos aguas por edificios de dos o más niveles. “Jamás lo olvidaremos” A 11 años de distancia, quedan pocos recuerdos físicos de aquella fatídica mañana de octubre de 1980. Las nuevas generaciones sólo saben de esta tragedia por algunas pláticas de sus familiares, como Abel Vargas y Peral Rojas. Pocos, como Ariadna Ortiz Conde, recuerdan los detalles: “Yo tenía como tres años de edad, pero me acuerdo cómo quedaron mi casa y la ciudad; también recuerdo que al otro día o a los dos días llovió muy fuerte. ¿Cómo no lo voy a tener presente? Quienes lo vivimos jamás lo olvidaremos”. En efecto: Huajuapan fue uno hace 11 años y es otro hoy. “Fue un cambio tajante en muchos aspectos, en el social, en el económico, pero principalmente en el arquitectónico”, afirma Estanislao Ortiz Escamilla, fotógrafo huajuapeño 33 Fue presidente municipal de Huajuapan (1990-1992), en sustitución del fallecido Luis Guevara Camacho. Ha sido diputado local por el PAN (1999-2001) y síndico municipal (2002-2004).

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egresado de la Academia de San Carlos, autor del único testimonio gráfico sistematizado del sismo, que se ha convertido en un documento histórico invaluable, y de las líneas finales de este texto: Años de historia, cúmulo de esfuerzos y recuerdos apacibles se iban en el estrépito del derrumbe. 24 de octubre de 1991.

Un milagro llamado Luis Veintisiete años después de haber quedado sepultado por toneladas de escombros, Luis Vázquez González es un comerciante de 40 años de edad, casado y padre de dos hijas, que se ha sumado a los miles de mixtecos que cada año emigran a los Estados Unidos en busca de mejores condiciones de vida. A pesar del tiempo transcurrido, recuerda con asombrosa claridad aquella mañana del 24 de octubre de 1980, cuando el techo del antiguo portal municipal Valerio Trujano se le vino encima. Faltaban sólo unos minutos para las nueve de la mañana. Doña Emma González Osorio, su madre, cruzó la calle Morelos para ir al mercado Porfirio Díaz a comprar el desayuno y dejó a Luis al cuidado del puesto de donitas norteñas que se ubicaba en el lado norte del portal. “Ella quería dejar a mi hermano pero yo le dije que se lo llevara, que yo me quedaba a cuidar el puesto porque estaba platicando con un amigo de mi otro hermano, el grande”, recuerda34. Habían pasado sólo unos minutos cuando sintió el movimiento de la tierra. El amigo le dijo: “¡Sal, Luis, porque 34

Entrevista vía telefónica realizada el 23 de octubre de 2007 por Paola Ituarte, Jefa de Noticias de la XEOU de Huajuapan, con cuya autorización se reproducen algunos fragmentos.

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está temblando!”, pero él contestó “No, ahorita pasa todo”. Como el movimiento no cesaba, el otro muchacho decidió salir a la calle pero Luis permaneció en el portal. Cuando vio que el techo empezó a caer, buscó refugio bajo la mesa de las donitas. Al terminar el movimiento y el estrépito del derrumbe, se dio cuenta de que estaba sepultado por una montaña de escombros. A sólo unos metros de distancia, doña Emma escuchó el ruido sordo que provenía del oriente, sintió el movimiento de la tierra y observó aterrada que en los estantes las cosas se movían, “pero en lugar de que cayeran, brincaban de abajo para arriba”35. En esos momentos de angustia que le parecieron interminables pensó en Luis e invocó la protección del Señor de los Corazones: “Sentí mucho miedo y me acordé que mi hijo estaba solo, pero no podía salir porque estaba temblando muy fuerte, así que empecé a rezar y rezar, a pedirle al Señor de los Corazones que me lo cuidara; le dije „¡Perdónanos, Señor, hemos sido muy pecadores pero no nos abandones, protege a mi hijo, tápalo con tus bracitos para que no le pase nada!‟. En eso, empezó a temblar más fuerte y quise salir, pero las personas del mercado me dijeron „No, doña Emma, espérese, ahorita que termine de temblar sale y va a ver a su hijo‟”. Cuando disminuyó la intensidad del sismo corrió hacia su puesto, pero al llegar a la esquina sólo vio una nube de polvo y una montaña de escombros donde momentos antes se erguía el portal. “Empecé a preguntarle a los compañeros de los puestos „¿No vieron a mi hijo?‟, pero todos me contestaban „No, doña Emma, no lo hemos visto‟. Y yo subía y bajaba buscándolo y gritando su nombre, hasta que un señor me dijo „Su hijo está enterrado allí, en los escombros‟”. Entonces, invadida por el miedo, la angustia y la desesperación, corrió por la calle Morelos y siguió por Hidalgo hasta su casa, ubicada a espaldas de la comandancia de la Policía Municipal. Al llegar a la puerta, gritó a su 35

Entrevista con la señora Emma González Osorio, noviembre de 2001.

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esposo: “¡Diego, viejito, ven pronto porque creo que el niño está muerto!”. Al escucharla, don Diego Vázquez Aguirre salió con su hijo César y otro panadero que trabajaba con ellos. “Todos íbamos corriendo y aunque la casa está cerca, nos parecía que era muy, muy lejos, como si corriéramos pero no avanzáramos. Mi esposo y mi hijo iban llorando, pero no a gritos, sino que sólo les rodaban las lágrimas”. Cuando llegaron al portal ya había mucha gente. Desesperada, Doña Emma les dijo: “¡No sean babosos, ayúdenme, traigan picos y palas para sacar a mi hijo!”. En ese momento vio pasar una retroexcavadora y gritó a la gente: “Háblenle para que nos ayude, que venga a sacar la tierra”, pero una persona le dijo “No, señora, porque su hijo puede estar vivo y lo vayamos a despedazar. Mejor vamos a hacerlo con calma, aunque nos tardemos, pero vamos a hacerlo bien”. En sólo unos minutos llegaron trabajadores de la Secretaría de Asentamientos Humanos y Obras Públicas (SAHOP) que se ubicaba en la esquina de las calles Ignacio Vázquez y Porfirio Díaz, así como numerosos voluntarios con picos, barretas y palas, quienes empezaron a romper la pesada losa. Bajo los escombros, sumido en la oscuridad absoluta, el pequeño Luis intentó mover una mano, pero al sentir que le caía más tierra encima desistió. Entonces pensó que el final de su vida llegaría a sus escasos 13 años de edad, pues le pareció imposible que alguien pudiese rescatarlo. Sin embargo, cuando habían transcurrido más de dos horas desde el sismo, escuchó golpes cada vez más intensos sobre la losa; con todas sus fuerzas, gritó: “¡Papá, papá, sácame de aquí!” y casi de inmediato escuchó voces que repetían “¡Está vivo, está vivo!”. Al tener la certeza de que Luis vivía, los trabajos de rescate se hicieron más lentos, más cuidadosos para no lastimarlo, y la angustia se prolongó durante algunos minutos más, que parecieron interminables. Finalmente, lograron llegar hasta donde estaba el niño, en el hueco 84


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formado por la mesa. “¡Sácame, papá!”, suplicó otra vez. Don Diego lo tomó de los brazos pero no logró sacarlo, por lo que los voluntarios tuvieron que ensanchar el hueco.

Luis Vázquez momentos después de ser rescatado de los escombros del Portal Municipal. A la izquierda, el médico Rafael Morales; a la derecha, su padre Diego Vázquez (Cortesía de la familia Vázquez González).

Al salir, asustado y totalmente cubierto de caliche, fue auscultado por el regidor de Salubridad del Ayuntamiento, el médico Rafael Morales Martínez, quien le dio dos o tres nalgadas; luego, la señora Rosalía Reyes de Morán, propietaria de una farmacia ubicada a sólo una calle de distancia, lo bañó con alcohol, y fue hasta entonces cuando el niño terminó de reaccionar. Invadidos por una mezcla de emociones, don Diego y doña Emma caminaron hasta el consultorio de su compadre Lauro Niño de Rivera Leyva para que éste realizara una revisión más minuciosa al niño y sólo se sintieron tranquilos cuando el médico les dijo: “No, compa, el niño no tiene nada, está bueno y sano, no tiene quebrado nada”. Doña Emma lo considera un verdadero milagro y no deja de dar gracias al Señor de los Corazones por haber librado a Luis de la muerte. Marcela, hermana de Luis, recuerda que la tragedia pareció perseguirlo en los meses que siguieron al temblor: a mediados de 1981, cuando pasaba casi frente al Banco 85


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Internacional (actualmente HSBC), se registró un asalto en el que murió un elemento de la Policía Preventiva Estatal y resultaron heridos otro policía y el gerente de la sucursal. En diciembre del mismo año ocurrió una explosión de pólvora seguida de un incendio en los puestos de artículos navideños que se ubicaban en el terreno de la esquina de Heroico Colegio Militar y Antonio de León, donde actualmente se localiza la Casa de la Cultura. Nuevamente, Luis estuvo muy cerca de los hechos. Tres o cuatro años después del sismo decidió emigrar a los Estados Unidos. Actualmente radica en Chicago, Illinois, con su esposa Judith y sus hijas Doraida de 18 años de edad y Ludis, de 15. A finales de la década de los 80 regresó a Huajuapan después de cinco años de ausencia, pero encontró la ciudad totalmente cambiada: “Me dio mucha tristeza porque ya no era como antes, había mucha violencia, mucho pandillerismo, ya no era como cuando yo vivía aquí”. A 27 años de distancia, Luis está convencido de que esa mañana de octubre volvió a nacer. “La vida es dura, pero solamente Dios sabe por qué nos tiene vivos; por eso hay que echarle pa‟ delante, hay que ponerle ganas y esfuerzo, hasta que El nos deje vivir”. 24 de octubre de 2007.

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A partir de la década de los ochenta han surgido en Huajuapan diversas bandas juveniles. Las más antiguas y representativas son Los Comanches de la colonia Altavista de Juárez, cuyos integrantes se reúnen en la cancha de futbol ubicada junto a la escuela primaria 21 de marzo, y Los Gilipollas del barrio de Guadalupe, que tienen su centro de operaciones en la cancha de básquetbol localizada frente al templo del mismo nombre. Aunque sus integrantes rechazan los calificativos de pandilleros o delincuentes, muchos de ellos se han visto involucrados en hechos de violencia y actos delictivos. Apenas veinte días después de la realización de las entrevistas que presentamos en este libro, tres integrantes de Los Gilipollas fueron detenidos en posesión de diversos artículos que habían robado de un consultorio médico. Uno de ellos admitió ser el autor del homicidio de otro joven, ocurrido días antes en una discoteca de la colonia Tepeyac. Los primeros integrantes de estas bandas se han alejado de la esquina; muchos son padres de familia; algunos ejercen una profesión y hay quienes han llegado a ocupar un cargo público36. Pero, frente a otras bandas de existencia efímera, las de Los Comanches y Los Gilipollas han subsistido, se han renovado y hoy están integradas por una nueva generación de jóvenes que siguen encontrando su espacio en la esquina y en la cancha. Siguen siendo celosos de su territorio, aunque los hechos de violencia en que se ven involucrados han disminuido con respecto de años anteriores.

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José Manuel Gómez Mendoza (a) “El Chóper”, fue director municipal de Protección Civil en la administración de Procopio Martínez Ramírez.

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Somos roqueros, no delincuentes: Gilipollas A pesar de su ropa, del pelo largo y de su pasión por el rock, los jóvenes autodenominados Gilipollas, se consideran chavos normales: “No somos banda ni pandilleros, sólo rockers; pero somos gente tan normal como tú o como cualquier otro”. Según estimaciones de la Policía Municipal, son aproximadamente 70, aunque ellos dicen que “no pasan de 30”. Se reúnen todas las tardes en la explanada ubicada frente al templo de Guadalupe, “solamente para jugar, platicar o pasar el rato”. Rechazan la imagen que tienen de ellos las corporaciones policiales y gran parte de la sociedad. Niegan ser agresivos, y se resisten a ser catalogados como delincuentes. Sin embargo, precisamente por su aspecto, por su vestimenta y su pelo largo, ése es el trato que reciben de la sociedad y de las corporaciones. “Muchas veces nos para la policía sólo por nuestra ropa o por nuestro pelo; pero una cosa es cómo vestimos y otra cómo actuamos. Hay gente que viste bien pero puede ser delincuente”, afirman. Son casi las ocho y media de la noche. La cita con Los Gilipollas la concertamos a través de Jorge, quien es profesor de algunos de ellos. Sin embargo, el aguacero estuvo a punto de frustrar la charla. Al principio, sólo seis jóvenes se encontraban refugiados bajo un pequeño techo de lámina ubicado en el lado poniente de la explanada. Con desconfianza, aceptaron dialogar con el reportero, pero con la condición de que no se manejaran nombres ni se grabara la entrevista. “Mejor vamos a platicar así nomás”, pidieron. Inicialmente negaron ser integrantes de la banda, pero vencida la desconfianza, uno de ellos explico que el nombre de Gilipollas lo adoptaron de “una grosería que usan los gallegos”. Ninguno sabía que el diccionario define como “gilipollas” a las personas “con poco entendimiento y propensas a hacer cosas de las que se ríen todos sus amigos”. (“¡Uta!, ya nos amolamos, pero ni modo que nos cambiemos 88


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el nombre”). Conforme la lluvia fue cediendo, se fueron acercando otros integrantes hasta sumar 15. Algunos de ellos eran casi niños. Durante el desarrollo de la charla, hablaron de su ropa, de su pelo largo (“no es signo de rebeldía, sino de libertad”) y de su relación con la familia (“al principio nos criticaban, pero poco a poco nos han ido entendiendo”). Se refirieron también a las conductas antisociales que se les atribuyen y aseguraron que no se reúnen para delinquir ni para agredir a la gente. Sin embargo, dijeron que a veces llegan al barrio grupos de jóvenes procedentes de otros puntos de la ciudad, y son ellos los que provocan desmanes que luego son atribuidos a Los Gilipollas. Afirman que cuando ocurre algún ilícito en la colonia, sufren con mayor intensidad el acoso policial: “Nos detienen cuando vamos a nuestra casa, nos ponen contra la pared y nos someten a la revisión de rutina; a veces hasta nos llevan a la cárcel, pero las autoridades no nos hacen caso, por nuestro mismo aspecto”. Niegan que en la banda existan liderazgos “porque aquí no hay personalismos, todos somos iguales”; sin embargo, uno de ellos es quien actúa como líder. Es él quien relata que los integrantes de la banda no sólo se reúnen para pasar el tiempo, sino también para tratar de unir a los jóvenes de la colonia, “hablamos de rock, pero también del cristianismo, de lo que pensamos y de lo que queremos hacer en la vida”. Reconocen que el sacerdote José González Acevedo, quien durante muchos años fue el responsable de la parroquia de Nuestra Señora de Guadalupe, mantuvo un contacto permanente con ellos. “En las misas trataba de orientarnos y nos controlaba muy bien; a veces nos ponía a barrer la explanada o el atrio, o a tocar las campanas”, relata con expresión divertida. En cambio, las autoridades no les han brindado apoyos ni han mostrado interés por buscar un acercamiento con ellos. “Nosotros estaríamos dispuestos a platicar, pero hasta ahora nadie se nos ha acercado”. Recuerdan que en los primeros meses de la actual administración el presidente municipal implementó un 89


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programa denominado Treinta días más de trabajo por Huajuapan, y en ese marco sostuvo reuniones con niños, mujeres, ancianos, autoridades de las agencias municipales y de policía. El siguiente encuentro sería con los llamados chavos banda, pero nunca se realizó porque el programa se interrumpió sin explicación alguna. Los Gilipollas hablan de su pasión por el rock y aseguran que este género no debe ser sinónimo de violencia: “Hace un mes nos visitó un chavo que ofreció mandarnos videos y casetes de rock cristiano, y la semana pasada vino a platicar con nosotros un punk de Oaxaca que viene con la onda de no a los tóxicos, cero alcohol, cero drogas, cero tabaco. Nosotros ya habíamos platicado algo de eso, sobre todo después de que picaron a un chavo en la Casa de la Cultura. Queremos hacer tocadas pero sin alcohol; queremos meter en esa onda a los chavos”. Y concluyen: “Somos roqueros pero no somos pandilla, mucho menos delincuentes. Somos gente normal, queremos unir a los chavos y proteger al barrio. Si agrediéramos a la gente no vendrían familias con sus chavitos pequeños a jugar aquí en la cancha. Aquí nos reunimos los chavos y vienen también algunas chavas, pero siempre les damos su lugar. Somos como tú o como cualquiera. Lo que pasa es que hay algunas gentes que se esconde tras la ropa de rockers para delinquir”. Como para subrayar las palabras del líder, el sonido proveniente de una grabadora invade la humedad de la explanada. Las notas golpean las paredes del atrio y de la escuela. A la rola de Alex Lora se agregan las voces, tímidas al principio, de algunos de los chavos que continúan observándome con curiosidad cuando me alejo. 30 de agosto de 1994.

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Los problemas de la calle, en la calle se resuelven: Comanches. Oscilando entre el mito y la realidad, Los comanches se reúnen todas las tardes en una esquina de la calle Campillo o junto a la escuela 21 de marzo de la colonia Altavista de Juárez. En este último lugar dialogan con el reportero, bajo una ligera llovizna de esas que no hacen ruido pero mojan igual. A diferencia de otras bandas, la mayoría viste ropa casual. Evitan la indumentaria de los rockers y son pocos los que se dejan crecer el pelo, para evitar problemas con la policía y con los vecinos. Sin embargo, aseguran que el aspecto exterior no es un reflejo de la conducta. Los Comanches son una de las bandas más antiguas y temidas de la ciudad. De ellos se dice que han convertido su territorio en un coto de poder que ningún extraño puede rebasar sin exponerse a ser agredido. Se afirma que frecuentemente cometen robos domiciliarios o asaltos a transeúntes, que ocasionan destrozos a la escuela y que no son ajenos al consumo de estupefacientes. Sin embargo, sus integrantes rechazan esa imagen: “Es pura fantasía. La gente nos ve como una pandilla, pero no lo somos, porque la pandilla se junta para agredir y nosotros nos reunimos para hacer deporte, intercambiar música o platicar cosas del trabajo, porque casi todos trabajamos”, asegura uno de ellos (“nada de nombres, tú sabes, ¿no?”). Rechazan la actitud agresiva que se les atribuye y aseguran que sólo recurren a la violencia para defenderse cuando son atacados. Sin embargo saben que algunos vecinos de la colonia los rechazan e incluso llaman a la policía –la ley, como ellos le nombran– para que los disuelva cuando ya son las ocho de la noche y continúan jugando en la pequeña cancha ubicada junto a la escuela. Mencionan que cuando ocurre algún ilícito en esa zona de la ciudad o cuando se causa algún destrozo a la escuela, a ellos les cuelgan el milagro. Creada hace 14 años, la banda de Los Comanches tuvo su 91


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época más difícil entre 1988 y 1992, por los enfrentamientos con otras bandas y por la represión de la policía: “Fueron tiempos duros porque no nos dejaban ser, venían a agredirnos. Si nos dejaran ser, las cosas se arreglarían más fácilmente, porque los problemas que se hacen en la calle, en la calle se resuelven. Lo que pasa es que hay algunos que agreden y luego van a llorar, y eso no se vale”. Algunos de los fundadores de la banda se han casado; otros han emigrado a los Estados Unidos. Los que se han incorporado en los últimos años no quieren revivir aquellos tiempos de violencia y por ello tratan de llevarla por la derecha. Por eso mantienen contacto con la mayoría de las bandas de la ciudad, con quienes tratan de llevar una relación positiva. Roqueros confesos, deportistas irredentos, Los Comanches aseguran que nunca han recibido atención ni apoyo de las autoridades o de alguna institución. Nadie ha buscado un acercamiento. “Eso seria bueno, pero de las autoridades sólo hemos recibido represión, nunca comprensión”, afirma uno de ellos. Y mirando la ciudad a sus pies, agrega: “Allá abajo se paran el cuello con otra gente, pero a nosotros nunca nos han comprendido”. Consideran que la discriminación de que son objeto por parte de la ley se debe a que ellos habitan en las zonas altas de la ciudad, pero en las más bajas de la escala social: “A lo mejor los chavos que andan muy bien arregladitos y que se ponen su corbatita para ir a las fiestas son peores que nosotros, pero como ellos están un poquito arriba, tienen el respeto de la ley... en cambio a nosotros nos reprimen sin motivo, aunque tratemos de llevarla por la derecha y demostrar que somos tranquilos”. A pesar de ese rechazo, aseguran que están dispuestos a participar en actividades en beneficio de la colonia. Refieren que, en fecha reciente limpiaron el terreno donde practican deporte, consiguieron algunas plantas con los vecinos, pero algunas fueron robadas y otras destruidas. “No duraron ni tres días. ¿Cómo ves? Y luego dicen que los delincuentes somos nosotros”. 92


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Aseguran que sus padres conocen la fama que rodea a Los Comanches, pero también saben que ésta “es puro mito” y por eso los entienden y los apoyan. “Ellos nos conocen, saben que nos reunimos para jugar, para platicar, y lo ven bien porque nos sirve como distracción, pues casi todos trabajamos en el día; pero saben que no somos delincuentes”, afirman. Reconocen que en los jóvenes hay ciertos niveles de agresividad, pero aseguran que esta situación no depende del ambiente familiar ni de la posición social, sino de la edad. “Así somos los chavos, pero con el tiempo vamos a cambiar”. Sin embargo, están convencidos de que esa “agresividad natural” se podría reducir al mínimo si los chavos tuvieran más atención, más espacios deportivos y eventos musicales. Aseguran que ellos han intentado organizar algunas tocadas de rock, pero no sólo no han recibido apoyos sino que les han puesto obstáculos. “Por eso no hay como unir a las bandas, unir ideas, porque si uno espera de las autoridades no se va a hacer nada”, reiteran. La plática concluye. Los Comanches permanecen allí, en su feudo, bajo la fina llovizna de los últimos días de agosto, con las luces de la ciudad a sus pies. Hasta que algún vecino llame a la ley y tengan que disolverse, que regresar a sus casas y dejar vacías otra vez la esquina, la cancha, la explanada. 31de agosto de 1994.

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El 19 de abril de 1993, en las inmediaciones de Yucunduchi, municipio de Chila de las Flores, Pue., a unos 20 kilómetros de esta ciudad, fue encontrado el cadáver de una mujer joven con el cráneo destrozado y huellas de golpes en diversas partes del cuerpo. Al día siguiente sería identificada como Magdalena Villarreal Olivares, de 24 años de edad, secretaria de la Tesorería Municipal de Huajuapan, e hija del administrador del panteón El gólgota. La joven mantenía una relación sentimental con el director administrativo del Ayuntamiento, Hugo Castro Rivera. El 30 de abril, su padre, Cresencio Villarreal Villarreal, presentó una denuncia de hechos ante el agente del ministerio público de Huajuapan, señalando a Hugo Castro y al jefe de turno de la Policía Municipal, Miguel Angel Calvo Pinacho, como autores materiales del crimen, y al regidor de Hacienda, José Juan Aguilar Márquez, como encubridor. Ante la sospecha de que las autoridades encargadas de la investigación protegían a los presuntos responsables, el 19 de junio, horas antes de la primera visita oficial del gobernador Diódoro Carrasco Altamirano a Huajuapan, Cresencio Villarreal hizo pública su denuncia ante los medios de comunicación. Días después, el procurador general de justicia del estado, Sadot Sánchez Carreño, ordenó la exhumación del cadáver y la reapertura de las investigaciones. El 23 de octubre, elementos de la Policía Judicial del Estado detuvieron en Huajuapan a José Juan Aguilar, y casi simultáneamente, en Tuxtepec a Gustavo Sebastián Castro, a quien supuestamente confundieron con su hermano Hugo; Miguel Angel Calvo, quien aparentemente fue advertido de que sería detenido, huyó. En los días posteriores, José Juan Aguilar obtuvo su libertad bajo fianza, pero fue separado de su cargo, al quedar sujeto a proceso; Gustavo Castro salió libre al acreditar su identidad; su hermano Hugo y Miguel Angel Calvo continúan prófugos.

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En este libro incluyo el texto “Magda, cuatro meses de impunidad”, publicado al cumplirse 120 días del homicidio, así como la entrevista realizada a José Juan Aguilar, después de que salió de la cárcel.

Magda, cuatro meses de impunidad. Cuatro meses después de que el cadáver de Magda fue hallado a la orilla de la carretera México-Oaxaca, a la altura de Yucunduchi, Pue., sus padres Cresencio Villarreal y Emilia Olivares aún demandan y esperan justicia. Contradicciones en torno del caso, preguntas sin respuesta, avances mínimos y un hermetismo casi total, han caracterizado estos 120 días durante los cuales los padres de la joven, quien era secretaria de la Tesorería Municipal de Huajuapan, no han perdido la esperanza de que los homicidas sean detenidos y sometidos a proceso por el crimen, cuyas repercusiones han trascendido el ámbito policiaco e invadido el terreno político local. El crimen perpetrado la madrugada del 19 de abril mereció la atención de la prensa capitalina, especialmente del diario El Nacional, que envió a la reportera Celia Teresa Gómez Ramos para efectuar una investigación sobre el caso. El interés de los medios, así como la denuncia de Cresencio Villarreal, motivaron la reactivación de las investigaciones –dormidas durante dos meses– e incluso la exhumación del cadáver para realizar una nueva necropsia, 72 días después del crimen. También provocaron que el presidente municipal Javier Mendoza Aroche separara de sus cargos a su ex chofer y jefe de turno de la Policía Municipal Miguel Angel Calvo Pinacho, al director administrativo Hugo Castro Rivera y al ex comandante de la policía y en ese entonces director del rastro, Fernando Vicente Cortés Martínez, al hacerse pública la denuncia interpuesta por el padre de la joven. Sin embargo, a partir de entonces –mes de junio– los avances han sido mínimos, aunque el agente del ministerio público Ismael Zúñiga Castellanos afirma que se ha seguido 95


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investigando y que los responsables serán castigados. De 24 años de edad, Magda era la quinta de los seis hijos del matrimonio Villarreal Olivares. Originaria de San Juan Yolotepec, pequeña localidad perteneciente a este distrito, su familia emigró a Huajuapan cuando ella era una niña. Aquí cursó la primaria, la secundaria y la carrera de secretariado en la Academia Juvenil del PRI, de donde egresó en 1988. Para ayudar al sostenimiento de su familia, trabajó en el Instituto Federal Electoral; en el despacho del abogado Rey Luis Salazar Aguirre; y después en el del contador Rafael Sánchez Guerrero, quien la invitó a laborar en la Tesorería Municipal, al ser nombrado titular de esa dependencia. Fue en el Ayuntamiento donde Magda conoció a Hugo Castro –un poblano de 37 años de edad, divorciado y padre de un hijo– quien había dirigido el sector juvenil del PRI en Puebla, trabajado en la CNC, y coordinado algunas campañas políticas, entre ellas la del entonces candidato a diputado local Javier Mendoza Aroche, quien con el paso del tiempo lo hizo su compadre y lo designó director administrativo del Ayuntamiento de Huajuapan. Hugo Castro empezó a asediar a la joven, y aunque ésta inicialmente lo rechazó, terminó aceptándolo, subyugada por la promesa de matrimonio y por la riqueza de que hacía alarde el entonces funcionario. Sin embargo, la promesa nunca se cumpliría: el 19 de abril, el cadáver de Magda fue hallado a la orilla de la carretera, con el cráneo destrozado. Hoy, Castro Rivera, junto con el regidor José Juan Aguilar, con Miguel Angel Calvo y Fernando Vicente Cortés, figura entre los principales sospechosos del homicidio. Dos meses tuvieron que pasar para que Cresencio Villarreal decidiera hacer pública la denuncia que bajo el número 247/993 interpuso contra Castro Rivera y Calvo Pinacho (o Cortés Martínez) por homicidio, y contra José Juan Aguilar Márquez por encubrimiento. El mismo día que la denuncia se hizo pública a través de los medios (19 de junio) y coincidiendo con la visita del gobernador Diódoro Carrasco a Huajuapan, el presidente municipal solicitó a Castro Rivera, Calvo Pinacho y Cortés 96


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Martínez su separación, “para que pudieran defenderse de los cargos en su contra”. Aunque los regidores del PAN también solicitaron la salida del concejal José Juan Aguilar, éste permanece en su puesto. Casi dos semanas después, el 1 de julio, los peritos médicos Elías Salvador Ramírez y Jaime Ramírez Moreno exhumaron el cadáver que había sido sepultado en el panteón El gólgota, donde trabaja el padre de la joven, y practicaron una nueva necropsia cuyos resultados no fueron dados a conocer. El agente del ministerio público Ismael Zúñiga Castellanos, sólo informó que la exhumación fue muy importante para confirmar algunas hipótesis, y aseguró que no habría impunidad. Sin embargo, las semanas han pasado y no se notan avances importantes, pese a que el Cabildo solicitó al procurador Sadot Sánchez Carreño que se agilicen las indagaciones “para limpiar el nombre de José Juan Aguilar”. A cuatro meses de distancia, subsisten puntos oscuros, contradicciones y preguntas sin respuesta: – ¿Por qué el médico legista de Acatlán de Osorio, Pue., Jorge Lara Villagrana, asentó en el acta que la muerte fue provocada por atropellamiento, a pesar de que hasta un estudiante de medicina habría descartado de inmediato esta hipótesis? – ¿Por qué la mañana posterior al crimen Hugo Castro Rivera no se presentó a trabajar? – ¿Por qué las autoridades no han verificado detalles fácilmente comprobables? Baste señalar que en tres días de investigación con la reportera Celia Teresa Gómez, obtuvimos más datos que la Policía Judicial en tres meses. – ¿Por qué en la averiguación previa se cita como uno de los autores del crimen a Fernando Cortés Martínez, cuando el padre de la joven señala a Miguel Angel Calvo Pinacho? Estas y muchas otras preguntas permanecerán sin respuesta hasta que las investigaciones concluyan oficialmente. Sin embargo, algunos puntos parecen aclararse gracias a las filtraciones de un alto funcionario que pidió mantener en reserva su identidad. De acuerdo con su versión, 97


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la noche anterior al crimen, Magda estuvo en un bar de la calle 5 de febrero y posteriormente en una discoteca de la colonia Tepeyac con los funcionarios mencionados anteriormente. Al día siguiente, cuando aún no había sido identificado su cadáver, Hugo Castro solicitó los servicios de un abogado amigo suyo, a quien reveló que “al parecer” la joven había sido asesinada, por lo que temía que lo involucraran en el crimen. Acompañado por dicho abogado, se trasladó a Acatlán, Pue., pero no ingresó a la agencia del ministerio público porque en ese lugar vio a los padres de la joven; regresó a Huajuapan, donde estuvo ingiriendo bebidas alcohólicas y mostró un nerviosismo inusual. Esa misma semana, acompañado por un amigo suyo que había sido militar en el estado de Tlaxcala, se trasladó a Chila de las Flores, Pue., para solicitar al agente del ministerio público subalterno, Pánfilo Sánchez Morales, una copia de las diligencias practicadas tras el hallazgo del cadáver, presentándose como agentes de la PGR. Posteriormente, fueron al lugar del crimen para “rescatar” la piedra que destrozó el cráneo de la joven. Han pasado cuatro meses, cuatro meses de impunidad, y a pesar de que ha sido objeto de intimidaciones, Cresencio Villarreal aún exige justicia. “Sólo quiero eso, justicia. No quiero dinero de ellos, porque mi hija no es mercancía. Quiero justicia”. Más allá del crimen y del aspecto meramente policial, el caso Magda representa la disyuntiva entre la justicia y el encubrimiento; entre la recuperación de la confianza y el deterioro de las instituciones públicas; entre la transparencia y la complicidad de una administración municipal que, a decir de algunos, ha implantado en Huajuapan el trienio de la impunidad. Ejemplos sobran. 19 de agosto de 1993

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Voy a demostrar mi inocencia: José Juan Aguilar Insistiendo en su inocencia, convencido de que las acusaciones en su contra tienen un fondo eminentemente político, José Juan Aguilar Márquez afirma que está dispuesto a proseguir por su cuenta las investigaciones en torno del crimen de Magdalena Villarreal Olivares, para que los hechos se aclaren y él pueda reivindicar su imagen: “Quiero demostrar a la sociedad que no soy como me han pintado”, subraya. Vistiendo pantalón oscuro y camisa verde a rayas, enrolladas las mangas a la altura del codo, Aguilar Márquez fija la vista en los anteojos que se encuentran sobre el escritorio, mientras recuerda las horas, los días que pasó en prisión y que, afirma, no los desea ni a su peor enemigo: “Son cicatrices que no se borran fácilmente; lo más grave es el daño moral que le causan a uno; a veces nos dan donde más nos duele”, afirma. La entrevista se realiza en su oficina del Palacio Municipal. Apenas unos minutos antes, en el nivel superior del edificio, se había analizado su caso y, con base en el Código de Procedimientos Penales del Estado de Oaxaca, se decidió separarlo del Cabildo mientras dure el proceso penal que se instruye en su contra. Sin embargo, Aguilar Márquez reitera lo que dijo a los otros catorce concejales que asistieron a la sesión: “Según mis abogados, tengo el derecho de solicitar una licencia y lo voy a hacer por un tiempo determinado, porque tengo confianza en que esto se va a aclarar; eso lo tiene que respetar el Cabildo. No me opongo a mi separación del cargo, pero hasta que yo solicite licencia se podrá convocar a mi suplente”. Aguilar Márquez reconoce que en su oportunidad recibió la advertencia de que sería detenido porque se había librado orden de aprehensión en su contra, y aunque esto lo mantuvo intranquilo, decidió no escapar y quedarse para enfrentar lo que viniera. “No me quise ir entonces, ni me voy a ir ahora porque nada debo. Soy inocente. Ni participé en el crimen ni 99


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vi nada”, insiste. Y atribuye su detención a móviles políticos, generados incluso en el seno de su propio partido. Con tristeza afirma: “En el partido somos egoístas, nos falta madurez, no dejamos que alguien sobresalga. Yo no nací ayer, yo ando en la política desde hace años, por eso lo sé”. Y a esa falta de madurez y a las discordias internas, atribuye que mucha gente se haya retirado del PRI y que el partido haya perdido algunas elecciones municipales en Huajuapan. Y a esas razones atribuye también que ahora se le quiere tomar como chivo expiatorio. De estatura mediana y complexión robusta, Aguilar Márquez representa más de sus 37 años. Y aunque asegura que no se ha pesado desde que abandonó el reclusorio, estima que ahora está muy por debajo de los 77 kilogramos que constituían su peso normal. Con voz tranquila, aunque con un dejo de amargura, relata su experiencia tras las rejas. Reitera que fueron los días más difíciles de su vida, pero recuerda detalles agradables, como el hecho de que fue visitado por mucha gente, líderes de colonos, amigos y hasta no amigos. “La gente de las colonias quería organizar actos de protesta por mi detención, pero yo no acepté, porque a pesar de todo soy institucional”, afirma. Sin embargo, su voz se quiebra cuando habla de sus hijas: “Una de ellas me dijo que quiere ser abogada porque le da mucho coraje todo lo que nos está pasando; pero yo les hablé y les pedí que no le guarden rencor a nadie”. Insiste en que buscará pruebas para demostrar su inocencia y asegura que, una vez separado de su cargo como regidor de Hacienda, se dedicará a su trabajo en el magisterio. Con un dejo de ironía y una sonrisa no exenta de amargura, comenta que hay mucha gente que pasa inadvertida por la vida. Y concluye: “Por lo menos, yo ya no pasaré así”. 5 de noviembre de 1993.

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Eloína Guerrero Bazán37 formó parte del Ayuntamiento de Huajuapan electo para el periodo 1993-1995, como suplente del regidor de Hacienda. En octubre de 1993, al conocerse la detención del regidor propietario José Juan Aguilar Márquez, declaró a los medios que, en caso de ser convocada para asumir el cargo, pediría que se practicara una auditoría para esclarecer el manejo de los recursos públicos durante los primeros 10 meses de la administración municipal, y deslindar responsabilidades. El 8 de noviembre rindió protesta como regidora de Hacienda, pero inmediatamente después el Cabildo aprobó una propuesta de su compañero de partido, el síndico segundo Germán Ramírez López, para reubicarla en la regiduría de Limpia y Transporte. En protesta, Eloína Guerrero presentó su renuncia, pasando a la historia como la concejal de más breve estancia en el cargo: sólo diez minutos.

Los diez minutos de Eloína “La ley no se vota, se cumple. ¡Ustedes están violando la Constitución, y por eso me retiro!”. En estos términos y visiblemente molesta se expresó la hasta entonces regidora de Hacienda, Eloína Guerrero Bazán, momentos antes de abandonar el salón de sesiones del Palacio Municipal. Apenas diez minutos antes, la concejal priísta había rendido la protesta de ley ante el presidente municipal Javier Mendoza Aroche, en presencia de los demás integrantes del cabildo, quienes testificaron el acto de manera respetuosa. La historia empezó a escribirse a las siete de la noche con treinta y siete minutos, después de la lista de presentes y la lectura de las dos actas anteriores (la de la sesión ordinaria del 18 de octubre y la extraordinaria del 5 de noviembre), 37

Abogada, Cirujana Dentista y Maestra en Administración de Organizaciones por la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla. Fue candidata a concejal suplente en la planilla del PRI encabezada por Mario Mendoza Chávez (2004).

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cuando el presidente municipal pidió a la todavía regidora suplente que pasara al frente para rendir la protesta y asumir el cargo que dejó vacante José Juan Aguilar Márquez. Ante las versiones difundidas en los días previos, en el sentido de que sería reubicada en la regiduría de Limpia y Transporte para evitar que insistiera en su pretensión de exigir una auditoría, Eloína Guerrero inquirió: “¡Un momento! ¿Con qué carácter voy a rendir protesta?”. “Como regidora de Hacienda”, respondió Mendoza Aroche sin titubear. “Ustedes y todos los ciudadanos conocen mi postura y saben que solicito que se practique una auditoría antes de que asuma el cargo, no porque considere que haya desvíos de recursos, sino porque ha faltado claridad; no se ha informado a la población sobre el manejo de los fondos municipales y no sería honesto que yo recibiera el cargo sin saber en qué condiciones lo hago. Los partidos políticos representados en este cabildo (PRI, PAN y PRD) han respaldado mi postura, y quiero que ésta quede muy clara”, advirtió la concejal suplente. Mendoza Aroche aclaró que lo primero que tendría que hacer sería rendir protesta y después plantear su solicitud de auditoría, si así lo estimaba pertinente. Tras un “estira y afloja” que se prolongó durante algunos minutos, Eloína Guerrero aceptó los argumentos del alcalde y se puso de pie para rendir la protesta de ley. El reloj marcaba las siete de la noche con cuarenta y tres minutos. Los integrantes del cabildo apenas se acomodaban nuevamente en sus asientos cuando el síndico segundo, Germán Ramírez López, pidió al secretario municipal Felipe Cervantes Toscano que diera lectura a un escrito que entregó en ese momento: en el documento pedía que se realizara un “reacomodo” en algunas regidurías, y particularmente en la de Hacienda. De inmediato, el perredista Oscar Ramírez Cariño advirtió que la propuesta de Ramírez López era contraria a los dispuesto en el artículo 52 de la Ley Orgánica Municipal, que establece que los regidores desempeñarán sus 102


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respectivas comisiones durante un año, y este lapso aún no se cumplía, pues apenas habían transcurrido 10 meses de la administración. Sin embargo, el asesor jurídico del Ayuntamiento, Gabriel Herrera Bautista, tomó la palabra para citar otro artículo que faculta al Cabildo a remover a los concejales de las comisiones que les fueron asignadas. Intervino el regidor panista Héctor Legaria Barragán para pedir a Ramírez López que fundara y motivara legalmente su propuesta. El síndico segundo habló mucho pero eludió responder y se limitó a reiterar: “Ahí está mi propuesta, ustedes decidirán si la aceptan o no”. El suplente del presidente municipal, Elías Torres Ramírez, intervino para decir que Germán Ramírez “se sacó de la manga” la mencionada propuesta. Pidió a los concejales actuar de manera responsable y dar la oportunidad a Eloína Guerrero para demostrar su capacidad al frente de la regiduría de Hacienda. “No se puede tomar un acuerdo de este tipo sobre las rodillas”, advirtió. Eloína Guerrero intervino nuevamente para manifestar que había sido investida de un mandato constitucional y que éste sólo podría ser revocado por la Legislatura del Estado, y no por un acuerdo como el que el síndico segundo pretendía imponer. Ningún argumento valió: el presidente municipal sometió a votación la propuesta de Germán Ramírez, y ésta fue aprobada por mayoría, con el voto en contra de Oscar Ramírez y la abstención del priísta César Corro Carrizosa. Ante el resultado de la votación, el perredista solicitó al secretario municipal que asentara en el acta su inconformidad por lo que calificó “un mayoriteo mecánico y crimen de lesa conciencia”. Consumada la remoción de su compañera, Germán Ramírez confirmó la versión que se había filtrado los días anteriores, al proponer que Fidel López Sánchez ocupara la regiduría de Hacienda y Eloína Guerrero asumiera la de Limpia y Transporte. Fue la gota que derramó el vaso: la recién integrada regidora no toleró más y, visiblemente 103


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molesta, exigió al resto de los concejales respeto para su persona; explicó que con su solicitud de auditoría sólo buscaba que los ciudadanos recuperaran la confianza en el Cabildo; y concluyó con un “¡Renuncio!” que resonó en las paredes del salón de sesiones. El autor de la discutida propuesta, Germán Ramírez López, advirtió: “Los cargos públicos son irrenunciables, regidora”. Pero Oscar Ramírez replicó: “Son irrenunciables cuando no existe causa justificada, y en este caso la hay, porque el trato que ustedes están dando a la compañera regidora es indignante”. Al percatarse de que había “línea” y de que Germán Ramírez era sólo el brazo ejecutor de los acuerdos tomados en el cabildeo de la noche del viernes entre los concejales priístas y los panistas, Eloína Guerrero se puso de pie, tomó sus documentos y mientras salía del salón reiteró: “Ustedes están violando la Constitución”. No menos molesto, Oscar Ramírez también abandonó la sesión, tras expresar su protesta por el “trato indigno” dado a la concejal priísta. En el reloj faltaban sólo siete minutos para las ocho de la noche. La sesión continuó. En votación secreta, los concejales emitieron su voto para designar al nuevo regidor de Hacienda, resultando un empate entre el priísta Fidel López y el panista José Antonio Velasco Ramírez. El presidente municipal ejerció su voto de calidad a favor de su compañero de partido, pero dio a conocer su determinación de crear una contraloría interna, a cargo del panista. Y “metiendo las manos al fuego” por los integrantes del Cabildo, advirtió que no permitiría que se pusiera en tela de juicio la honestidad de ninguno de ellos, por lo que solicitó al recién designado contralor una “revisión” a las finanzas del municipio. Todo estaba consumado: Eloína Guerrero pasó a la historia política de Huajuapan como la regidora que menos tiempo ha durado en el cargo: sólo diez minutos. La “noche negra para Huajuapan”, como la llamó Oscar Ramírez al abandonar el salón de sesiones, había empezado. 08 de noviembre de 1993.

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A finales de octubre de 1996, la ciudad de Huajuapan fue virtualmente sitiada durante casi dos días por decenas de microbuses, camionetas del servicio mixto y taxis foráneos. El bloqueo de las calles y carreteras inició dos días antes del cuarto informe del gobernador Diódoro Carrasco Altamirano, y fue encabezado por Gerardo Pérez Castro, representante de los transportistas foráneos de la CTM. El presidente municipal Luis de Guadalupe Martínez y los dirigentes de partidos políticos y organismos civiles, emplazaron a los inconformes para retirar los bloqueos. Al no obtener respuesta, centenares de ciudadanos movieron los vehículos y restablecieron la circulación. Un día después del desalojo, Pérez Castro ofreció una conferencia de prensa en la que anunció que promovería la revocación del mandato del presidente municipal e interpondría una denuncia penal en su contra por daños y perjuicios, y por abuso de autoridad. Reconoció que el movimiento contaba con el apoyo del diputado local Germán Ramírez López, dirigente regional de la CTM, pero negó que el legislador hubiese sido el promotor de los bloqueos de calles. Siete años después, el 8 de septiembre de 2003, Gerardo Pérez Castro desapareció después de haber salido de su domicilio para desempeñar sus actividades habituales en el taxi de su propiedad. El vehículo fue encontrado abandonado dos días después. En los días subsecuentes, ciudadanos de diversas filiaciones políticas realizaron una marcha para pedir a las autoridades competentes la agilización de las investigaciones. Por su parte, en una carta enviada al periódico La Jornada, sus familiares solicitaron la intervención del gobernador José Murat38 para localizar al dirigente. Mencionaron: “Tememos que su desaparición sea producto de sus discrepancias con sus mismos 38

Político priísta nacido en Ciudad Ixtepec, Oax. Fue diputado federal en tres ocasiones, Senador de la República, dirigente estatal del PRI y gobernador de Oaxaca (1998-2004).

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compañeros en el sector político donde participaba; pero (…) también nos preocupa la posibilidad de un asalto común atípico, una venganza de tipo personal o un secuestro por motivos económicos”. Han transcurrido más de cuatro años, y hasta la fecha se carece de información sobre el paradero de Gerardo Pérez Castro, quien fue regidor de Gobernación y Reglamentos en la administración 1999-2001 y presidente del Comité Municipal del PRI.

El otro sitio de Huajuapan.

El dirigente del transporte y ex líder municipal del PRI Gerardo Pérez Castro, desaparecido en septiembre de 2003.

Por segundo día consecutivo la ciudad de Huajuapan permaneció sitiada por taxis foráneos, microbuses y camionetas del servicio mixto procedentes de diversas localidades de la región. Pero a diferencia de ayer, cuando las sombras de la noche cayeron sobre las calles desoladas por las que no circulaba ningún vehículo, esta vez los ciudadanos convocados por el presidente municipal, abriéndose paso con una retroexcavadora y una grúa, despejaron completamente las vialidades. Minutos antes de las cuatro de la tarde, decenas de personas que tuvieron que desplazarse a pie desde diversos puntos de la ciudad empezaron a congregarse en el parque Independencia, en respuesta a la convocatoria del presidente municipal Luis de Guadalupe Martínez Ramírez. Una hora 106


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antes, a través de la radio local, el munícipe informó que las autoridades y los representantes de 14 organizaciones sociales enviaron un escrito al gobernador Diódoro Carrasco, solicitando su intervención para resolver el conflicto. Emplazó a los transportistas a despejar las calles, a más tardar a las cuatro de la tarde y pidió a los ciudadanos estar presentes a esa hora para verificar el cumplimiento de esta petición o, en su caso, determinar las acciones a seguir. Conforme pasaban los minutos, el grupo de ciudadanos crecía y la tensión se empezaba a manifestar entre los transportistas encabezados por Gerardo Pérez Castro, quienes se concentraron frente a la puerta de la Casa de la Cultura. Entre los primeros, se encontraban comerciantes del centro de la ciudad, locatarios de los mercados públicos, taxistas locales, vecinos, e incluso estudiantes que por segundo día consecutivo habían tenido que caminar varios kilómetros para asistir a clases y regresar a sus hogares.

Calles bloqueadas y personas caminando fue el aspecto que presentó el primer cuadro de la ciudad durante dos días.

Sobre la calle Heroico Colegio Militar, los transportistas rodeaban a su dirigente, en espera de instrucciones. Algunos de ellos comentaban “Van a venir a quitarnos, ya traen un trascabo”. Y, en efecto, casi frente al Palacio Municipal se encontraba la máquina, con el operador a bordo preparado para intervenir en el momento oportuno. Junto a ella estaba una grúa particular que había llegado minutos antes. Entre los ciudadanos reunidos en el parque central 107


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empezaron a escucharse voces que urgían a iniciar el desalojo: “¡Vamos a quitarlos, ya dijeron que no se van a mover!”. Y entre ellas, se imponía la del presidente municipal, quien pedía calma: “Vamos a hablar con ellos, vamos a pedirles que se retiren de manera voluntaria”. Cuando el munícipe empezó a caminar hacia la puerta de la Casa de la Cultura, junto a los dirigentes de organizaciones y ciudadanos, la retroexcavadora y la grúa avanzaron también hacia la esquina, donde un microbús bloqueaba el paso. Al llegar al lugar donde los transportistas estaban reunidos, el alcalde se dirigió a Gerardo Pérez Castro y le solicitó que diera la orden para despejar las calles. El dirigente de los transportistas respondió que no se retirarían porque estaban ejerciendo un derecho. La tensión creció, ante los gritos de “¡Vamos a quitarlos!”, por un lado, y de “¡Quítennos si pueden, aquí los esperamos!”, por el otro, seguidos de insultos de uno y otro bandos. Mientras, Pérez Castro advertía a Martínez Ramírez: “A usted lo hago responsable de lo que pase, porque usted llamó a la gente”, y el munícipe insistía: “Dense cuenta de que están afectando a los ciudadanos”, unos 15 hombres rodearon el microbús que bloqueaba la esquina de las calles Antonio de León y Heroico Colegio Militar, levantándolo del frente hasta hacerlo girar hacia el oriente. La grúa empezó a enganchar la defensa, pero casi de inmediato se escuchó una voz apresurada que decía: “¡Espérense, ya lo voy a quitar!”. Como si esta fuese la indicación que esperaban, los transportistas empezaron a abordar y retirar sus unidades, entre el aplauso de los ciudadanos. En sólo unos minutos, la calle Heroico Colegio Militar quedó reabierta al tráfico de vehículos. El grupo de personas, con la retroexcavadora y la grúa al frente, avanzó hacia el norte, sobre la calle Valerio Trujano, con la intención de retirar los vehículos del servicio público que bloqueaban las esquinas, pero en cada una de ellas se repetía la escena: los propietarios de los taxis, microbuses y camionetas del transporte mixto abordaban apresuradamente 108


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sus unidades y se retiraban entre el aplauso, y en algunos casos la rechifla de la gente. Así, el grupo llegó a las oficinas de la delegación de Tránsito del Estado, ubicadas en la calle Bravo, la primera que había sido bloqueada la mañana del lunes. Y aprovechando el viaje, también reabrió el tramo de la calle Nuyoó comprendido entre Bravo y Carranza, que había sido cerrado por usuarios del sistema de agua potable encabezados por Heliodoro Ambrosio Ayala. Mientras el grueso del contingente verificaba que las calles del centro hubiesen quedado despejadas, decenas de hombres subieron a las camionetas pick up que empezaban a circular por las calles recién abiertas, y se trasladaron al entronque de las carreteras a Santiago Juxtlahuaca y a Mariscala, que permanecía bloqueado por varios microbuses. También en este lugar, cuando la gente empezó a descender de las camionetas, los propietarios de las unidades del transporte público las retiraron de manera apresurada. La gente volvió a las camionetas para recorrer las calles 5 de febrero, 2 de abril y Carranza, hasta constatar que la circulación de vehículos había vuelto a la normalidad. Al llegar frente al Palacio Municipal, fueron recibidos con aplausos de las pocas personas que aún se encontraban ahí, comentando las incidencias de la jornada: “¡Ya hacía falta esto, ahora sí se pasaron!”, comentaba una mujer; “¡Que sepan que ya no nos vamos a dejar, ya estuvo bueno de que unos cuantos vengan y cierren las calles cuando se les antoje!”, secundaba un hombre de edad madura; “Después de esto, ahora hasta los embotellamientos los voy a ver bonitos”, ironizaba alguien más. Eran poco más de las seis de la tarde. Después de más de 30 horas, el segundo sitio de Huajuapan, como lo llamaron algunos de los participantes en el operativo, había concluido. Con las primeras sombras, las luces de los vehículos se encendían mientras circulaban por las calles del centro de la ciudad recién rescatada. 29 de octubre de 1996.

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La madrugada del sábado 4 de mayo de 1996, integrantes de la familia Mora Rodríguez fueron atacados en las inmediaciones de Santa María Tutla, a unos 11 kilómetros de Tamazulapan del Progreso, por un grupo de personas armadas. En el atentado perdieron la vida ocho personas –entre ellas cuatro menores de edad– y resultaron heridas otras dos. El gobernador Diódoro Carrasco y el procurador Roberto Pedro Martínez Ortiz se comunicaron con los familiares de las víctimas para expresarles sus condolencias; ordenaron el envío de un grupo especial de elementos de la Policía Judicial del Estado para apoyar las investigaciones, y de especialistas en la elaboración de retratos hablados para tratar de establecer la identidad de los criminales. Una de las principales líneas de investigación se orientó hacia la posibilidad de una venganza derivada de un problema que integrantes de la familia habían tenido meses antes con los propietarios de otra empresa de juegos mecánicos, en Putla de Guerrero. Otra línea apuntaba hacia un incidente que Samuel y Aureliano Mora tuvieron con personas desconocidas que pretendieron introducirse a su domicilio, horas antes del atentado; sin embargo, los hechos nunca se esclarecieron. El múltiple asesinato conmocionó a los habitantes de Huajuapan, no sólo porque los Mora Rodríguez, integrantes de una de las familias más antiguas del barrio de San José, eran ampliamente conocidos por ser propietarios de los juegos mecánicos que se instalaban en prácticamente todas las ferias de la ciudad y en muchas de las localidades de la región, sino también por la saña empleada por los autores del atentado, ya que incluso los cuerpos de los niños presentaban el tiro de gracia.

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Crónica de una masacre no anunciada. Faltaban pocos minutos para las dos de la mañana del sábado. La mayoría de los catorce ocupantes de la camioneta Chevrolet tipo suburban, principalmente los niños, dormitaban distribuidos en las tres filas de asientos. Hacía menos de diez minutos, el vehículo conducido por Aureliano Nano Mora había salido de Tamazulapan. Durante la tarde y la noche, los integrantes de la familia Mora Rodríguez habían atendido los juegos mecánicos de su propiedad, instalados en esa población con motivo de la feria de la Santa Cruz. Como todos los años en esas fechas, al término de una intensa jornada de trabajo recorrían los 40 kilómetros que los separaban de Huajuapan, para llegar a descansar a su casa. Nadie imaginaba que para ocho de los ocupantes del vehículo, ése sería el último viaje de su vida.

Detalle del vehículo en que viajaban los integrantes de la familia Mora Rodríguez.

La camioneta blanca con franjas rojas serpenteaba por la carretera, subiendo las curvas que anunciaban la proximidad de Santa María Tutla. Casi al llegar al kilómetro 29, otro vehículo del mismo tipo pero de color azul, los rebasó. Por la ventanilla abatible de la parte posterior, asomó el cañón de un arma y empezaron a escucharse las detonaciones, mientras los fogonazos rasgaban la oscuridad de la noche. Alcanzado por uno de los disparos, Nano giró el volante para 111


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ponerse fuera del alcance de los agresores y logró salir de la carretera, pero el vehículo se detuvo al chocar contra los árboles y las rocas. La otra camioneta retrocedió sobre la carretera desierta, y de ella bajaron varios hombres armados. Al darse cuenta, Nano les gritó: “¡A mí háganme lo que quieran, pero dejen a los niños!”. Inconmovibles, los agresores le dispararon una y otra vez; hicieron lo mismo con su hermano Samuel (Chame) y luego con las mujeres y los niños que habían empezado a salir del vehículo y corrían en dirección al monte. Los gritos de terror fueron apagados por el tableteo de las metralletas. Al ver caer los cuerpos, los criminales se acercaban para dispararles a la cabeza. Uno de los atacantes iluminó con una linterna el interior del vehículo, en busca de sobrevivientes, pero se retiró al no ver movimiento. Tendida en el piso de la última fila de asientos, conteniendo el llanto, el temblor del cuerpo, el dolor y el miedo, con su bebé en brazos, Libia García se quedó inmóvil cuando escuchó las voces de los atacantes y cuando percibió la luz de la lámpara que se filtraba por la ventanilla. Permaneció quieta cuando escuchó los ruidos que indicaban que los criminales habían subido nuevamente a su vehículo, y luego el motor de la unidad que se alejaba con rumbo a Tamazulapan, dejando tras de sí siete personas sin vida, tres heridas y cuatro milagrosamente ilesas. En las siguientes horas, una de las mujeres heridas falleció en el hospital Rafael Amador y Hernández de Huajuapan, a donde había sido trasladada. Incredulidad y rabia La noticia había corrido “como reguero de pólvora”. En los pasillos del panteón 16 de septiembre, decenas de personas – familiares, amigos o simples curiosos– comentaban los hechos ocurridos durante la madrugada. Algunos de los recién llegados se asomaban al interior del pequeño cuarto que hacía las veces de anfiteatro y que resultó insuficiente para albergar los cadáveres; dejaban una veladora encendida 112


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y después se integraban a los grupos, tratando de encontrar alguna explicación a lo que parecía no tenerla. ¿Cómo explicar la saña reflejada en la gran cantidad de impactos de bala de alto calibre que presentaban los cuerpos de Nano, su hermano Samuel, la joven Lucía y la anciana Acela? ¿Qué podría explicar –ya no digamos justificar– el codo destrozado de Edgar, de ocho años de edad, los impresionantes agujeros en el cuerpecito de Teresa Ivonne, de sólo once meses, o el cráneo deshecho de Alexis, de dos años de edad? ¿Qué explicación podrían tener los 57 cartuchos percutidos, todos ellos de grueso calibre, recogidos en el lugar del crimen? ¿Cómo explicar los 22 impactos de bala en la camioneta, si en su interior sólo viajaban dos hombres desarmados, y el resto de los ocupantes eran mujeres y niños indefensos? Las expresiones de incredulidad y rabia se multiplican en el pasillo central del cementerio, a unos metros de los cuerpos sin vida: “¿Por qué los mataron, y por qué con esa crueldad?”; “Criaturas inocentes, ¿qué culpa tenían ellos?”; “¡Esa gente no tiene entrañas!”; “Que Dios me perdone, pero ojalá algún día, los que hicieron esto lo paguen de la misma manera, para que sepan lo que se siente”; y un lapidario “¡Ojalá se pudran en el infierno!”. Y las lágrimas aparecen en los rostros, y un nudo aprisiona la garganta ante tantas escenas de dolor reunidas en un espacio tan pequeño. Imposible mantenerse al margen de ese sentimiento colectivo de incredulidad, dolor y rabia. Escarbo en los recuerdos buscando en el pasado reciente o remoto un hecho similar, pero no, definitivamente no encuentro antecedentes de un crimen con estas características, tan sanguinario, tan irracional, tan absurdo. Sin pistas Frente al escritorio repleto de papeles, con voz apenas audible, Libia García relata las escenas de pesadilla que vivió horas antes. Los cuerpos de su esposo Nano y de su pequeño hijo Edgar están con los de las otras seis víctimas en el panteón 16 de septiembre, en espera de que les sea 113


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practicada la necropsia de ley. Sin embargo, ella tiene que sobreponerse al dolor para rendir su declaración ante el agente del ministerio público Julián Bautista Martínez. Interrumpida de vez en cuando por las preguntas del representante social, refiere de manera detallada lo ocurrido desde que abordaron la camioneta con placas de circulación THC-7219 del estado de Oaxaca, para regresar a su domicilio en la colonia Altavista de Juárez de esta ciudad; los primeros diez minutos de viaje que transcurrieron sin sobresaltos, y los posteriores que se convirtieron en una pesadilla inimaginable; la sorpresa y el miedo al escuchar las primeras balas horadando el parabrisa y el cofre; las brusca salida del camino y el choque contra las rocas y árboles; y luego, el pánico al descubrir que el otro vehículos retrocedía y que de él descendían los asesinos para disparar indiscriminadamente contra los dos hombres, las mujeres y los niños, y rematar a los sobrevivientes; la manera en que ella, con el dolor de ver a su esposo y a uno de sus hijos abatido por las balas, al igual que a la mayoría de los ocupantes del vehículo, logró controlar el miedo, y apretando contra su pecho a su bebé dormido –que milagrosamente no lloró a pesar del ruido y el movimiento– se tiró en el piso del vehículo, en la última fila de asientos, y permaneció inmóvil, rezando en silencio, implorando por un milagro; y cómo el milagro se produjo cuando uno de los criminales alumbró el interior del vehículo con una linterna, pero al verla inmóvil, la creyó muerta y se alejó, para reunirse con sus cómplices y escapar con rumbo a Tamazulapan. La voz de la mujer se quiebra, y por momentos los sollozos le impiden continuar el relato, pero segundos después se rehace y prosigue. Sin embargo, son pocos los datos que puede aportar: la oscuridad y la rapidez de los acontecimientos operaron en contra. Las hojas que contienen las declaraciones de la mujer son precedidas por otras en las que se consignan las circunstancias en que el personal actuante encontró el lugar del crimen: la camioneta fuera de la carretera, con golpes, abolladuras y las llantas del lado izquierdo reventadas; los 22 impactos de bala de diversos calibres que presenta el 114


Historias de Huajuapan

vehículo: cuatro en el parabrisas, dos en el cofre y 16 en el costado izquierdo; los 57 casquillos percutidos hallados en el lugar del crimen: 16 calibre 7.62 (para AK-47), dos calibre 2.41 y dos calibre 2.23 o R-15 en la cinta asfáltica, así como 23 calibre 7.62 y 14 calibre R-15 a un lado de la carretera, en el lugar donde fueron abatidos los menores; y los cadáveres de Aureliano Mora Rodríguez de 38 años de edad; su hermano Samuel de 35 años; la joven Lucía Cuevas Hernández de 22; y los menores Samuel Mora Domínguez de 12, Edgar Mora García de 8, Alexis Herrera Cuevas de 2, y Teresa Ivonne Herrera Cuevas, de sólo once meses de edad. También se consigna el traslado el personal ministerial para dar fe de la existencia de un octavo cadáver, el de Acela Arias Torres, de 65 años de edad, quien falleció a las 6 de la mañana en el hospital, y de dos personas heridas: Lorena Domínguez Alcalá de 33 años, esposa de Samuel Mora, y su hija Eva Lorena Mora Domínguez, de 14.

Los cuerpos de los integrantes de la familia Mora fueron velados en el templo de San José.

Desde las primeras horas del día, el teléfono de la agencia del ministerio público casi no ha dejado de sonar. La mayor parte de las llamadas son de la Procuraduría General de Justicia del Estado, cuyo titular, Roberto Pedro Martínez Ortiz, ha manifestado su especial interés y el del gobernador Diódoro Carrasco Altamirano en el caso. Conforme surge algún nuevo dato, algún indicio, un detalle, es reportado de inmediato a la procuraduría. Tal vez el caso más parecido a éste sea el de las masacres de habitantes de San Francisco 115


Ni callada ni dormida

Higos y San Mateo Tunuchi, en el distrito de Silacayoapan, donde también fueron victimados varios menores de edad, aunque en ese caso el móvil fue un añejo conflicto por límites de tierras. En éste no hay indicios, datos, pistas, que pudieran ayudar a entender los porqués de la masacre. El ministerio público reconoce: “Es el peor crimen que se haya cometido en Huajuapan en muchos, muchos años”.

A nombre de la familia, Manuel Hugo Torres pidió la intervención de las autoridades para esclarecer el crimen y brindar protección a los sobrevivientes.

Un crimen incalificable Rodeado de micrófonos y grabadoras, a las puertas del templo de San José, Manuel Hugo Torres, cuñado de Nano y Chame, habla a nombre de la familia Mora Rodríguez. En el interior del templo se tuvieron que mover algunas bancas para acomodar los cuatro ataúdes oscuros y los cuatro blancos. Las bancas están llenas y en el pequeño espacio del atrio se han colocado sillas plegables. En la calle, de pie, decenas de personas permanecen en silencio y algunas de ellas secundan los rezos y los cantos que llegan desde el interior. A sólo unos metros de la entrada de la sacristía, sobre la calle Aquiles Serdán, la casa de don Mario Mora Olivera, donde Nano y Chame crecieron y jugaron de niños. Visiblemente afectado, pero también indignado, el vocero de la familia pide la intervención del presidente de la 116


Historias de Huajuapan

República para esclarecer los hechos y lograr que se haga justicia: “Esta fue una masacre, un vil asesinato que no tiene calificativos. Ustedes, como medios de comunicación, saquen las cosas tal como son: fue un crimen con alevosía, ventaja y con todas las agravantes de la ley. El móvil no fue una venganza ni un robo; fue un crimen incalificable, como no se lo imaginan, con metralletas y cuernos de chivo. Mis cuñados tienen diez, quince perforaciones, y los niños tienen el tiro de gracia. Esto es increíble. Pedimos a las autoridades que actúen, porque hoy necesitamos de la ley para que haya justicia, esto no debe quedar así”. Refiere que en el transcurso del día recibieron las llamadas del gobernador y del procurador de justicia, quienes les expresaron sus condolencias, giraron instrucciones al ministerio público para agilizar las investigaciones y para brindar protección a las dos personas que permanecen hospitalizadas, ante el temor de que los homicidas puedan atentar contra ellas. En el interior, los rezos y los cantos continúan. La gente llega con flores y veladoras. Algunos salen a la calle para permitir la entrada de quienes esperan en el exterior. Las horas transcurren lentamente. Afuera, la vida continúa. Nada parece diferente en esta noche de sábado en Huajuapan. Y sin embargo, en el ambiente flota una pregunta que parece condenada a quedar sin respuesta: ¿Por qué? ¿Por qué? 4 de mayo de 1996.

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El jueves 30 de septiembre de 1993 el profesor Sergio Vera Cervantes falleció a causa de un paro cardiaco en una habitación del Hotel Estadio, en la colonia Roma de la Ciudad de México. Originario de San Sebastián Tecomaxtlahuaca, era diputado federal por el VI distrito de Oaxaca, con cabecera en Huajuapan de León. Anteriormente había sido diputado local y dirigente estatal de la Confederación Nacional Campesina (CNC-PRI). Sergio Vera se convirtió en el cuarto diputado federal de este distrito que murió durante su gestión legislativa. Le antecedieron Alicio Rafael Ordoño González, fallecido a causa de un paro cardiaco, en la antigua cámara de diputados de la calle de Donceles, en 1982; Ricardo Hernández Casanova, muerto en el Hotel Regis de la Ciudad de México, durante el sismo del 19 de septiembre de 1985; y Donaciano Ambrosio Velasco, fallecido el 8 de abril de 1990, a consecuencia de un accidente automovilístico ocurrido dos meses antes. El antecesor de Vera, Eloy Argos García Aguilar, había fallecido el 6 de septiembre de 1992, apenas un año después de dejar la curul. Paradójicamente, Eloy García fue contrincante de Luis Guevara en la elección de 1988 para diputados federales. El cadáver del profesor Vera, como se le conocía en el medio político, fue trasladado a su tierra natal. A su paso por Huajuapan fue motivo de un homenaje póstumo en el Portal Valerio Trujano de esta ciudad.

La última visita de Sergio Vera a la Mixteca Treinta y cinco minutos duró la última visita que el diputado federal Sergio Vera Cervantes realizó a esta ciudad. Y como en los mejores días de campaña, un prolongado aplauso le acompañó hasta el vehículo que lo trasladaría a Tecomaxtlahuaca, su tierra natal. Sin embargo, esta vez su 118


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cabeza cana y su rostro risueño no pudieron responder a la despedida que le tributaron decenas de personas congregadas frente al palacio municipal. Ahora, su figura menuda y robusta era transportada en el interior de un ataúd metálico hasta la carroza negra en la que realizaría su último viaje. Eran las 23:35 horas del viernes. Treinta y cinco minutos antes, entre las torretas luminosas de las patrullas de la Policía Municipal, la carroza de la agencia funeraria Gayoso con placas de circulación 2856-AF hizo su arribo al centro de la ciudad, entre los claxonazos de los taxis del sitio Ricardo Flores Magón, estacionados frente a la catedral, que tributaron así el último saludo a quien fue diputado local, dirigente estatal de la CNC y diputado federal por este distrito, hasta que un paro cardiaco lo convirtió en el cuarto legislador federal de la Mixteca que muere en funciones. A la entrada del palacio, el presidente municipal Javier Mendoza Aroche39 y los legisladores locales Mario Mendoza Chávez40, Baruc Alavez Mendoza41 y Celestino Chávez Gutiérrez42 recibieron el féretro y lo colocaron en el Portal Valerio Trujano, bajo el escudo nacional y un crespón negro que eran flanqueados por nueve coronas luctuosas. Funcionarios, dirigentes políticos y decenas de ciudadanos con rostros severos y algunos con lágrimas en los ojos, escucharon respetuosamente los honores a la bandera nacional, ejecutados por la banda de guerra de la Policía Municipal, mientras la presidenta del DIF, Martha Solano de Mendoza, auxiliada por algunas mujeres, colocaba sobre el féretro una bandera tricolor. 39

Político priísta originario de Huajuapan de León. Ha sido presidente municipal de Huajuapan (1993-1995), dos veces diputado local y delegado regional del Gobierno del Estado, entre otros cargos. 40 Originario de Huajuapan de León, ha ocupado diversos cargos: diputado local, diputado federal y delegado de gobierno en Putla de Guerrero. En 2004 fue candidato del PRI a presidente municipal de Huajuapan. 41 Político huajuapeño miembro del PRI. Fue presidente del Concejo Municipal designado para el periodo 1986-1989, al no tomar posesión el Ayuntamiento electo de Huajuapan. Ha sido diputado local en dos ocasiones, diputado federal y delegado de gobierno. 42 Político originario de Santiago Juxtlahuaca, ha ocupado diversos cargos, entre ellos el de diputado local por el PRI. Fue presidente municipal de Juxtlahuaca, postulado por el PRD, pero meses después de la elección se reintegró al PRI.

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En medio de un silencio impresionante que sólo era interrumpida por los ruidos lejanos del tráfico nocturno, el presidente municipal dirigió el último adiós al político mixteco: “Sergio diputado, Sergio amigo, Sergio luchador social, donde estés, seguirás luchando por los que tanto amaste, los campesinos”. Una voz masculina rompió el silencio de la noche y le interrumpió en tres ocasiones: la primera para corregir “no, somos muchos”, cuando Mendoza Aroche decía “estamos aquí un grupo muy pequeño de tus amigos…”; la segunda para agregar un “jamás”, cuando el orador decía “nunca te olvidaremos”; y la tercera para rubricar con un “¡Viva Sergio Vera Cervantes!” las últimas palabras del munícipe. Después del toque de silencio, seis miembros del cabildo (Mendoza Aroche, Javier Tobón, Ricardo Carrizosa, Fidel López, José Juan Aguilar y Javier Luna) montaron la primera guardia de honor. La segunda la integraron el representante del gobernador Diódoro Carrasco, Rubén Vasconcelos Beltrán; el delegado de gobierno en la Mixteca, José Isidro Martínez Pastelín; y funcionarios de la representación gubernamental. Les siguieron los diputados locales, dirigentes políticos y gente del pueblo. Después de que la bandera nacional fue retirada del ataúd, el presidente municipal pidió tributar a Vera Cervantes un aplauso, “para despedirlo como lo hacíamos cada vez que visitaba Huajuapan o la Mixteca”. La ovación no se hizo esperar, se prolongó por más de un minuto y llenó la Plaza de la Libertad de Expresión. Y otra vez el silencio cuando el féretro era introducido en la carroza. Otra vez las torretas luminosas y los rostros nostálgicos que observaban las luces posteriores del vehículo que se desplazaba por la calle Antonio de León y después daba vuelta hacia 5 de febrero. Los taxistas volvieron a hacer sonar lo cláxones de sus vehículos mientras escoltaban la carroza que abandonaba lentamente esta ciudad que Sergio Vera no volvería a pisar más. 1 de octubre de 1993.

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Historias de Huajuapan

El 7 de noviembre de 2000, dos días después de cumplir 68 años de edad, la veterinaria Paz Cruz Ceballos falleció en un accidente automovilístico ocurrido en el kilómetro 199+500 de la supercarretera Oaxaca-Tehuacán-Cuacnopalan, a casi 25 kilómetros de la salida a Nochixtlán. La doctora Paz, como le conocía la gente, fue la primera mujer postulada por el PRI para la presidencia municipal y estuvo a punto de pasar a la historia como la primera en gobernar Huajuapan: en las elecciones del 3 de agosto de 1986, obtuvo una amplia ventaja sobre su contrincante del PAN, Manuel Cubas Maza, pero ese partido denunció presuntas irregularidades, entre ellas el robo de varias casillas, y como medida de protesta retiró a sus representantes de los organismos electorales. Después de una serie de negociaciones entre el gobernador Jesús Martínez Alvarez43 y las dirigencias municipal y estatal del PAN, el mandatario propuso una salida política: calificar la elección a favor del PRI, con el compromiso de que ninguno de los integrantes de la planilla electa acudiría a tomar posesión de su cargo. El 15 de septiembre44, la doctora Paz y los integrantes de su planilla no acudieron a rendir protesta, por lo que el agente del ministerio público Rolando Calderón Robles45 recibió la 43

Inició su carrera política en el PRI, ocupando diversos cargos: presidente municipal de Oaxaca (19678-1980), secretario general de Gobierno (1980-1985); diputado federal en 1985; gobernador interino de Oaxaca, en sustitución de Pedro Vázquez Colmenares; y diputado federal por segunda ocasión, ahora por el Partido Convergencia (2003-2006). 44 En 1986 y 1989, las elecciones de concejales se realizaron en el mes de agosto, para “empatarlas” con las de diputados locales y gobernador del Estado; los integrantes de los ayuntamientos electos tomaron posesión de sus cargos el 15 de septiembre. En 1992 se volvió a reformar la ley, para que los ayuntamientos iniciaran su gestión el 1 de enero. 45 El artículo 27 de la Ley Orgánica Municipal establecía que, si a las 10:15 de la mañana no estaban presentes los integrantes del Ayuntamiento entrante, el agente del ministerio público recibiría la administración, en tanto el gobernador del estado designaba a un encargado provisional.

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administración y la entregó a Baruc Alavez Mendoza, quien había sido designado por el gobernador como“encargado provisional del Ayuntamiento”. Meses después, Alavez fue ratificado, ahora como presidente de un Concejo Municipal integrado de manera partiría por regidores del PRI y del PAN. Paradójicamente, la primera presidenta municipal de Huajuapan, Ramona González García46, tuvo que asumir el cargo por mandato del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, pues al candidato ganador de la elección, Francisco Círigo, le fue revocada la constancia de mayoría a menos de 48 horas de la transmisión de poderes, debido a que supuestamente no acreditó a satisfacción de ese organismo el cumplimiento del requisito de residencia.

La doctora Paz, la presidenta que no fue

La doctora Paz Cruz Ceballos en la inauguración de la feria de 1986. A su derecha, el gobernador Jesús Martínez Alvarez derecha (Cortesía de Gloria Cruz Ceballos).

Eran poco más de las siete de la mañana de ese miércoles 7 de noviembre del año 2000. Conducía el vehículo por la supercarretera a Oaxaca, apenas dos kilómetros después del entronque de Nochixtlán, cuando me rebasó una ambulancia con la sirena abierta. De manera instintiva, levanté el pie del 46

Empresaria de filiación panista, fue la primera mujer que gobernó el municipio de Huajuapan (2002-2004).

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acelerador para disminuir la velocidad. No habían transcurrido quince minutos cuando empezamos a encontrar algunos vehículos que circulaban en sentido contrario al nuestro, con las luces intermitentes encendidas. Lupita me advirtió: “Despacio, debe haber un accidente”. A la altura del kilómetro 199 el tráfico se empezó a tornar lento, al distinguirse a lo lejos las torretas de la ambulancia y de una patrulla de la Policía Federal Preventiva. Casi a vuelta de rueda pasamos junto al automóvil Datsun de modelo antiguo que estaba detenido en el carril que conduce a la capital del estado, con el frente totalmente achatado o desprendido. Sobre el asfalto yacían dos cuerpos cubiertos con sábanas blancas. Sin reponerme de la impresión, seguí conduciendo hacia la Ciudad de Oaxaca, pero al llegar a la caseta de cobro sintonicé el 89.7 para escuchar el noticiario de don Manuel Humberto Siordia. No tuvimos que esperar mucho tiempo para oír el reporte de Juan Antonio Illescas, quien informó que en el accidente, registrado a las seis y media de la mañana, habían fallecido José María Guzmán Ceballos, quien tenía su domicilio en la colonia Aviación de Huajuapan, y dos mujeres no identificadas. Los primeros datos indicaban que el automóvil habría chocado contra un vehículo pesado, cuyo conductor invadió el carril contrario y huyó después del impacto. Aunque el nombre del chofer del automóvil nos resultaba desconocido, nuestra consternación aumentó al saber que las víctimas eran de Huajuapan, de donde seguramente habrían salido minutos antes que nosotros. A pesar de todo, seguimos nuestro viaje a Santa Catarina Juquila y después a Puerto Escondido. El jueves por la noche regresamos a Huajuapan. Cuando fuimos a dejar a mi madre a su casa, mi hermana Araceli nos recibió con la noticia: “Murió la doctora Paz”. Ante nuestra incredulidad, nos explicó que el vehículo en que viajaba con su hermana Leticia y uno de sus primos se había accidentado dos días antes en la supercarretera a Oaxaca. Entonces caímos en la cuenta de que el accidente que habíamos 123


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presenciado era el que le costó la vida, y que uno de los cuerpos que vimos sobre el asfalto era el suyo. En los días posteriores, buscando mayor información en los dos principales diarios de la capital del estado, me percaté de que contenían versiones contradictorias y datos imprecisos. Sólo uno de ellos mencionaba en un pie de foto – una de esas fotos sanguinarias y crueles de los cuerpos sin vida– que la doctora Paz había sido candidata del PRI a la presidencia municipal de Huajuapan. Su encuentro con el general Cárdenas Originaria de San Marcos Arteaga, hija de uno de los primeros migrantes que en 1945 salieron de la Mixteca para trabajar en los campos agrícolas de los Estados Unidos como parte del programa Bracero, Paz Cruz Ceballos fue también una de las primeras mujeres que abandonaron la región para cursar una carrera profesional en la Ciudad de México47. Su primera experiencia migratoria la vivió en su temprana infancia, cuando se trasladó a Huajuapan de León para concluir la educación primaria en la escuela Federal Tipo (hoy Valentín Gómez Farías) y cursar la secundaria en la Lic. Benito Juárez. Aunque en esa época las expectativas de las mujeres eran limitadas, sobre todo porque en Huajuapan no existía ninguna preparatoria, Paz se trasladó a la capital del país para cursar el bachillerato. Consiguió una vivienda a sólo unos metros de la Preparatoria 1 de la UNAM, ubicada en San Ildefonso, pero le asignaron la recién creada Prepa 5 en la Calzada del Hueso, por el rumbo del Estadio Azteca, por lo que todos los días tenía que trasladarse hasta el sur de la ciudad para asistir a clases. Su padre deseaba que fuera abogada; ella quería estudiar enfermería y después odontología. No obstante, al terminar el bachillerato se inscribió en la facultad de Contaduría, porque consideraba que esa carrera le permitiría estudiar y 47

Entrevista con Gloria Cruz Ceballos, hermana de la doctora Paz (26/III/08).

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trabajar al mismo tiempo, pero en los primeros días descubrió que no llenaba sus expectativas. Como la mayoría de sus ex compañeros de la prepa estudiaban en la facultad de Veterinaria y le comentaron que estaba a punto de abrirse un nuevo grupo, solicitó su cambio de carrera, sin que su padre lo supiera, y mantuvo el secreto durante un año. En 1962, al concluir la carrera, trabajó una corta temporada en las granjas avícolas de la familia Romero48, en Tehuacán, Puebla, y estuvo en el istmo, pero su intención era regresar a la región, para estar cerca de su familia. Con esta idea, obtuvo una audiencia con el general Lázaro Cárdenas del Río –en esa fecha vocal ejecutivo de la Comisión del Río Balsas– a quien solicitó apoyo para obtener un trabajo en Huajuapan49. El general le dijo que en la primera oportunidad que hubiese la tomaría en cuenta, y así lo hizo. Poco tiempo después, la doctora Paz ingresó a la Comisión del Río Balsas como supervisora, lo que le permitió regresar a la Mixteca. Al desaparecer dicha comisión, se dedicó al ejercicio de su profesión y a la farmacia veterinaria que había abierto poco después de su regreso a Huajuapan, la cual generalmente era atendida por su hermana Eva, pues a la doctora Paz le gustaba mucho andar en los pueblos50. A finales de la década de los ochenta fue nombrada directora del Centro Caprino de la Mixteca, pero su estancia en el cargo fue corta porque sus problemas de salud se agudizaron, pero también porque decidió dedicar su tiempo y sus energías al apoyo de un proyecto muy importante para ella: la creación de la UTM. Habiendo vivido en carne propia la experiencia de tener que emigrar para poder continuar sus estudios, la doctora Paz vio en este proyecto la posibilidad de evitar que los jóvenes 48

Originarios de Santo Domingo Tonalá, Oax., los integrantes de la familia Romero se han convertido en los principales productores de huevo del país. 49 Entrevista a Paz Cruz Ceballos, realizada por Emilio Fuego y publicada en la revista “Yucunitzá” en 1993. 50 Entrevista citada con Gloria Cruz Ceballos.

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tuvieran que abandonar la región para cursar una carrera. Como presidenta del patronato Amigos de la Universidad Tecnológica de la Mixteca apoyó las gestiones para obtener los primeros apoyos que la universidad requería, pero también organizó actividades para recaudar recursos que permitieran solventar algunas de las necesidades que en sus inicios tenía esa institución. “Una vez rifaron un carro; ella trajo varios talonarios y le vendió a toda la familia, pero los que no pudo colocar los pagó, sin importar si en ese momento tenía o no algunos otros compromisos económicos”, relata su hermana Gloria. El apoyo que brindó a la UTM en sus primeros tiempos, mereció el reconocimiento del rector Modesto Seara Vázquez, quien expresó: “Fue la primera persona que tuvo fe en este proyecto, que entregó su tiempo y sus recursos para conseguir los primeros apoyos en pro de esta universidad; por ello, la universidad siempre tendrá presente a la doctora Paz Cruz Ceballos”51. La experiencia amarga Dos factores fueron determinantes para el ingreso de la doctora Paz a la actividad política: “Era muy humana, se preocupaba mucho por la gente, porque había visto cómo vivían las personas de los pueblos, y siempre trataba de ayudarlas. Yo creo que eso influyó mucho, pero también lo traía por herencia, pues a mi padre le gustó mucho participar en la política”, refiere su hermana. Aunque siempre militó en el PRI y apoyó decididamente a los candidatos a puestos de elección popular postulados por ese partido, la doctora Paz nunca buscó un cargo público. Sin embargo, a mediados de 1986 aceptó contender como candidata de su partido a la presidencia municipal de Huajuapan: era la primera mujer en la historia de este municipio que aspiraba a ese cargo. 51

Homenaje póstumo a la doctora Paz Cruz Ceballos, efectuado en el auditorio de la UTM el 7 de diciembre de 2004 (Utemita, órgano informativo de la UTM, 14/XII/04).

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Paz Cruz Ceballos durante su campaña por la Presidencia Municipal de Huajuapan (Cortesía de Gloria Cruz Ceballos).

Ganó la elección por un amplio margen, pero el PAN y su candidato Manuel Cubas Maza52 impugnaron el proceso. Aunque la Comisión Estatal Electoral calificó la elección a su favor, ni la doctora Paz ni los demás integrantes del ayuntamiento electo acudieron a rendir protesta. En su momento no hubo una explicación al respecto, pero en la mente de los priístas y del resto de los ciudadanos quedó la idea de que esta decisión respondió a una negociación política a nivel estatal. A la distancia de los años, su hermana Gloria refiere que la doctora Paz no hablaba del tema ni con su propia familia, y aunque trataba de mostrarse fuerte, sus hermanos percibieron que esta situación le afectó moralmente: “Tiempo después, una persona nos comentó que a mi hermana le dijeron que si ella se presentaba a tomar posesión, el licenciado Heladio (Ramírez López) no iba a quedar como gobernador, y por eso ella prefirió sacrificarse, porque sabía que él podía hacer mucho más por todo el estado. Eso es lo que nos contaron, pero yo no sé si fue cierto, porque mi hermana jamás nos dijo nada, nunca hablábamos del tema”. A pesar de esta experiencia, la doctora Paz se mantuvo fiel 52

Abogado miembro del PAN. Fue dos veces candidato a la Presidencia Municipal de Huajuapan, en 1983 y 1986.

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a su partido hasta el final de su vida. Víctima del destino Si a la doctora Paz no le hubiesen robado el bolso en el interior de la Catedral cuando se levantó de la banca para comulgar, días antes de su muerte, tal vez aún estuviera viva. Sin embargo, su destino estaba escrito: “En la bolsa que le robaron tenía la ficha de la consulta de mi hermana Leticia, porque días después la tenía que llevar al hospital; por eso tuvo que ir ese día a Oaxaca, a pedir que le repusieran la ficha, pues no se la podían dar por teléfono. Todavía vino a despedirse de mí en la noche, y le pregunté si necesitaba dinero; ella me dijo que llevaba suficiente, pero que si llegaba a ocupar, sería a su regreso”, recuerda su hermana Gloria. Como lo hacía cada vez que salía de viaje, la doctora Paz había solicitado los servicios de su primo José María, quien era taxista. Tenía previsto salir a más tardar a las tres de la mañana, pues tenían que estar en el hospital antes de la siete, pero aparentemente se les hizo tarde. Sentada frente al escritorio de su consultorio médico ubicado en la calle Galeana, Gloria Cruz Ceballos, con la humedad en los ojos por las lágrimas reprimidas, reflexiona: “Si no le hubieran robado su bolsa, no hubieran tenido que ir a Oaxaca; y si no se les hubiera hecho tarde ese día, a lo mejor nada les hubiera pasado; pero ese era su destino, ¡ya estaba de Dios!”. Dos días antes de su muerte, la doctora Paz había pronunciado la oración fúnebre en el entierro de un familiar, en San Marcos Arteaga, y a manera de despedida, había dicho: “Tal vez pronto estaremos juntos”. ¡Qué lejos estaba de imaginar cuánta profecía encerraban sus palabras! Sólo tres cruces A pocos metros del kilómetro 200 de la supercarretera a Oaxaca, casi a la mitad del camino entre Nochixtlán y 128


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Huitzo, tres pequeñas cruces indican el lugar donde la doctora Paz, su hermana Leticia y su primo José María, perdieron la vida por la imprudencia de un conductor cuya identidad nunca se conoció. Hace unos meses, con motivo de las reparaciones realizadas a la carpeta asfáltica, fueron retiradas, pero al terminar los trabajos las colocaron nuevamente en su lugar. Las decenas de automovilistas y pasajeros de unidades del servicio público que recorren todos los días el trayecto de Huajuapan a Oaxaca, o viceversa, pasan a su lado sin reparar en ellas. Nada las hace diferentes de las muchas sembradas a los lados de la supercarretera que desde hace 15 años ha cobrado decenas de vidas. Pocos, muy pocos, son los que saben que en ese sitio, a unos metros de la curva en descenso y del puente, acabaron los días de una de las primeras mujeres profesionistas de la Mixteca, promotora de la creación de la universidad, amiga de políticos, obispos y sacerdotes, conocedora de los pueblos de la Mixteca: la doctora Paz, la presidenta municipal que no fue. 29 de marzo de 2008.

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La noche del viernes 23 de febrero de 1990, el presidente municipal de Huajuapan, Luis Guevara Camacho53, y el diputado federal Donaciano Ambrosio Velasco54 sufrieron un accidente automovilístico cuando se dirigían a la Ciudad de México para asistir a una reunión del Consejo Nacional del PAN. Fueron trasladados al hospital de traumatología de Magdalena de las Salinas, en el Distrito Federal, donde Guevara falleció el domingo 25, convirtiéndose en el único presidente municipal en la historia de Huajuapan muerto durante su mandato; Ambrosio quedó en estado de coma hasta el 8 de abril, cuando murió. Luis Guevara había tomado posesión el 15 de septiembre de 1989, después de realizar una huelga de hambre para exigir el reconocimiento de su triunfo sobre el candidato del PRI, Galdino Martínez González55. A su toma de protesta había asistido Diego Fernández de Cevallos56, en representación del CEN del PAN. La jornada electoral del 6 de agosto fue altamente competida y estuvo marcada por un incidente grave denunciado por el PAN: 53

Médico y catedrático originario de Huajuapan de León, Oax. (1943-1990). Regidor del Ayuntamiento (1981-1983), candidato a diputado federal (1988), dirigente distrital del PAN y segundo presidente municipal de extracción panista en Huajuapan. Trovador y autor de varios poemas inéditos, en uno de los cuales sintetiza su filosofía de la existencia: “Nadie sabe el durar de su vida/ y es preciso entregarse/ cuando hay tiempo de hacerlo…” 54 Abogado originario de San Pedro Yeloixtlahuaca, Pue. Fue uno de los principales dirigentes del PAN en Huajuapan en las décadas de los setenta y ochenta. Candidato a diputado federal en diversas ocasiones; síndico municipal del Ayuntamiento de Huajuapan (1981-1983); dirigente municipal, consejero estatal y nacional de ese partido. 55 Profesor originario de Huajuapan de León, Oax. En su juventud militó en el PAN; a finales de la década de los setenta se incorporó al PRI, donde fue presidente del Comité Municipal, candidato a la Presidencia Municipal y dirigente regional de la Confederación Nacional Campesina (CNC). En 2004 se integró al Movimiento Ciudadano por la Democracia (MCD) que apoyó la candidatura de Gabino Cue a la gubernatura de Oaxaca. 56 Abogado y político nacido en 1941. Fue consejero nacional e integrante del Comité Ejecutivo Nacional del PAN; coordinador de los grupos parlamentarios de ese partido en la Cámara de Diputados (1991-1993) y en el Senado de la República (2003-2006); secretario de Política Interior del “gabinete alternativo” creado por Manuel J. Clouthier después de las elecciones de 1988; y candidato a la Presidencia de la República en 1994.

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las urnas de la casilla 6 de Magdalena Tetaltepec fueron robadas antes de que se contabilizaran los votos, por un grupo encabezado por Omar Luna Hernández57. Sin embargo, en el cómputo el Comité Municipal Electoral contabilizó los votos de esa casilla. Tres días después de la elección, Luis Guevara se instaló en huelga de hambre en una casa de campaña ubicada frente al Palacio Municipal, donde recibió la visita de los ex candidatos a la presidencia de la república Manuel J. Clouthier (PAN) y Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano (Frente Democrático Nacional), así como del dirigente nacional del PAN Luis H. Alvarez58, y del coordinador de los diputados federales Abel Vicencio Tovar59. La madrugada del lunes 28 de agosto, al cumplir 19 días de ayuno, Luis Guevara recibió en compañía de Maquío Clouthier la noticia de que la Comisión Estatal Electoral había nulificado la casilla de Magdalena Tetaltepec, lo que le permitió obtener el triunfo por 3 mil 9 votos contra 2 mil 934 del candidato del PRI. Treinta y cinco días después de su visita a Huajuapan, Manuel Clouthier murió en un accidente automovilístico registrado en el municipio de Culiacán, Sinaloa, a la altura del kilómetro 158 de la carretera México-Nogales.

… Y el tiempo parecía haberse detenido. El pueblo se volcó para dar el último adiós a su presidente municipal. Entre bandas de música y llantos silenciosos, ante una multitud que había empezado a reunirse desde la madrugada, cuando llegaron a la ciudad los restos de Luis Guevara, cayeron las primeras paletadas de tierra sobre el féretro gris. La tarde moría. Al terminar la oración fúnebre 57

Funcionario de la sucursal del Banco de Crédito Rural en Putla de Guerrero, Oax. Fue coordinador regional de la CNC en la Mixteca, cargo del que fue destituido en 1994 por su presunta participación en un fraude con la legalización de vehículos extranjeros. 58 Candidato del PAN a la Presidencia de la República en 1958; presidente municipal de Chihuahua (1983-1985), senador por esa entidad (1994-2000); miembro de la Comisión de Concordia y Pacificación (COCOPA) y Comisionado para la paz en Chiapas. En 1986 realizó una huelga de hambre durante 41 días, en protesta por el supuesto fraude electoral contra el candidato del PAN a gobernador de Chihuahua, Francisco Barrio Terrazas. 59 Abogado, político, periodista y maestro universitario (1925-1994). Diputado federal en cuatro ocasiones; durante las dos últimas, fue coordinador del grupo parlamentario del PAN. Secretario general del CEN del PAN y dirigente nacional de ese partido en los periodos 1978-1981 y 1981-1984.

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pronunciada por Francisco Javier González Garza en representación del CEN del PAN, el ataúd descendió a la fosa entre las notas de la Canción mixteca, el Dios nunca muere y Las golondrinas. Los rostros contraídos, los puños crispados, las lágrimas a flor de piel.

El féretro con los restos de Luis Guevara saliendo del atrio de la Catedral (Cortesía de Olga Aída Ballesteros).

El panteón municipal fue insuficiente para albergar a la gente, gran parte de la cual permaneció en la calle hasta el final de las exequias. Insuficiente, como lo había sido la Catedral para albergar a los deudos: un pueblo entero. Una hora con diez minutos se requirieron para que el féretro recorriera las seis cuadras que separan el templo del camposanto. Decenas de coronas precedían el cortejo; el sol empezaba a negar su luz y en el ambiente resonaban las palabras pronunciadas por el obispo Jesús Aguilera Rodríguez durante la misa de cuerpo presente: “El corazón me ha traicionado. Creí que el venero de mis lágrimas se extinguiría ante la tumba de mi padre, pero no. El corazón me ha traicionado, porque hoy lloramos ante los despojos mortales del que nos distinguió con su amistad, con su magnificencia como médico, como hermano, como laico comprometido en uno de los campos más difíciles en nuestro México: el de la actividad política”. El río humano avanzaba penosamente. A través de un

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megáfono, un grupo de religiosas entonaba cánticos, mientras las bandas de música lanzaban sus notas al infinito. Los miembros del Cabildo cargaban el ataúd que luego fue reclamado por la gente del pueblo que acompañó a Guevara hasta el final, como en los días de triunfo. El viento sacudía una gigantesca bandera blanquiazul empuñada por los integrantes del sector juvenil del PAN, la misma que testificó las giras de Guevara-candidato y la asunción al poder de Guevara-presidente. Otra bandera, la mexicana, había sido depositada sobre el féretro en el Palacio Municipal, minutos antes de que el cortejo fúnebre partiera al templo. Funcionarios y hasta adversarios políticos entre quienes destacaban el dirigente municipal del PRI, Geraldo Lara y Lara, y los integrantes de la dirigencia municipal del PRD, acompañaban al munícipe. Contingentes de las escuelas de la ciudad formaban una interminable valla. Un anciano sacerdote comentaba: “En toda mi vida nunca he visto en Huajuapan un cortejo fúnebre tan impresionante”. En la entrada del cementerio los integrantes de la Comisión Nacional de Emergencia abrían paso a la vagoneta en que viajaban la madre y la hermana del munícipe. Frente a la fosa abierta, su esposa Olga y sus hijos Patricia, Ana Lilia, Luis Manuel y José Miguel manifestaban una entereza impresionante. Sobre las solapas de sus sacos, algunos asistentes lucían botones azules con la leyenda: “Muy bien hecho Guevara”. Eran más de las 7 de la noche cuando el río humano se empezó a dispersar. El llanto de las mujeres y de los ancianos se prolongaba por las calles adyacentes. El presidente municipal había quedado allí, entre coronas de flores, entre puñados de tierra que centenares de manos arrojaron a la fosa abierta. Allí, solo… ¿Por qué se fue, doctorcito? Por segunda ocasión, Luis Guevara Camacho había entrado al Palacio Municipal acompañado por una multitud. La primera vez fue aquel viernes 15 de septiembre cuando, en 133


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presencia de Diego Fernández de Cevallos y tras una huelga de hambre que se prolongó durante 19 días en demanda de respeto al sufragio, asumió el poder y delineó su programa de gobierno.

Los últimos honores a Luis Guevara en el Panteón Municipal (Cortesía de Olga Aída Ballesteros).

Aquel día había entrado a la sede de la comuna en medio de la algarabía popular, entre vítores y porras que coreaban incesantemente Gue-va-ra, Gue-va-ra. Esta vez, la multitud desfilaba silenciosa, doliente, ante el féretro del líder para tributarle el último adiós. A pesar del frío inclemente de la madrugada y de la espera de siete horas, decenas de vehículos aguardaban el cuerpo del presidente municipal frente a La Ermita, mientras la multitud consternada esperaba en la esquina de las calles 2 de abril y Trujano. Cuando llegó la carroza fúnebre, estallaron los cohetones, repicaron las campanas de la Catedral y fluyeron las lágrimas de hombres y mujeres. También con lágrimas en los ojos, los integrantes del Cabildo recibieron el féretro en las puertas del palacio municipal y lo trasladaron hasta la planta alta del edificio, habilitada como capilla ardiente, pasando entre la valla formada por miembros del Ejército Mexicano. Manuel Bautista, Fidel Arámburo, Abel Legaria y Jacinto Oropeza montaron la primera guardia frente al ataúd. Luego 134


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siguieron el resto de los concejales, los familiares, el diputado Alejandro León Montesinos y el delegado regional de gobierno Baruc Alavez Mendoza, quien transmitió a la familia las condolencias del gobernador Heladio. Durante el resto del día desfilaron frente al féretro los integrantes de las uniones de locatarios de los mercados públicos, alumnos de las escuelas de la ciudad, representantes de instituciones bancarias, dependencias oficiales y clubes de servicio. Afuera, la gente esperaba la salida de un grupo para poder entrar. A las cuatro de la tarde, después de un homenaje póstumo, Luis Guevara iniciaba el último recorrido por las calles de su ciudad, ahora en un ataúd metálico y cubierto por una bandera tricolor. En la calle, rostros crispados por el dolor, enormes ojeras, flores en las manos. Frente a la puerta del palacio, una anciana, con lágrimas que resbalaban suavemente por sus mejillas, preguntaba hablando quedo: “¿Por qué se fue, doctorcito? ¿Por qué se fue, si lo necesitábamos tanto?”. Y el tiempo parecía haberse detenido…. 26 de febrero de 1990.

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CAPITULO 3

Pueblo de cantera60 No es casual que la inmensa mayoría de las viviendas de San Miguel Tulancingo, pequeña población del distrito de Coixtlahuaca, sean de cantera rosa61, ya que a menos de dos kilómetros de distancia del centro de la localidad se ubica una mina de ese material, la cual se extiende más allá de lo que la vista puede abarcar. En el enorme montículo se aprecian claramente algunos sitios de donde se ha extraído la piedra, pero la mayoría permanece inexplorada. “La cantera es del pueblo y todos los que la necesitan la toman sin que tengan que pagar ninguna contribución al municipio; para todos hay”, explica el presidente municipal Aristeo Pérez Juárez, a quien acompaña el síndico Lorenzo Velasco Velasco. Sin embargo, ambos están conscientes de que los yacimientos de la población rebasan con mucho la demanda de autoconsumo de sus habitantes; y saben que, de comercializarla, los ingresos serían cuantiosos y podrían servir para impulsar el desarrollo de esta comunidad. Pero no han hallado el apoyo ni los contactos necesarios para vender el producto, a pesar de que en ocasiones anteriores lo han intentado ya. 60

San Miguel Tulancingo se caracteriza por sus ricas minas de cantera rosa, blanca y gris claro. En 1988, cuando fue elaborado este texto, tenía casi 100 viviendas y menos de 300 habitantes. 61 Las únicas viviendas de tabique son las de algunos paisanos que viven en las ciudades de Oaxaca, México y Veracruz, y que de esa manera pretenden marcar una diferencia con quienes viven en el pueblo.

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Saben que la piedra es altamente apreciada en las grandes ciudades, donde se le considera un artículo de lujo. Están sentados sobre un costal de dinero, pero siguen sin encontrar los mecanismos que les permitan aprovechar la enorme riqueza que poseen. Aunque los habitantes de este poblado mantienen una leve esperanza de que su situación cambie, tantos años de demandar apoyos gubernamentales sin obtenerlos, tantos años de promesas incumplidas los han desilusionado y los han llevado a la convicción de que lo que consigan en beneficio de su pueblo tendrá que ser por medio del trabajo comunitario, del esfuerzo propio. Uno de los más escépticos es Aureliano García Hernández, quien truena contra los ex funcionarios y ex candidatos que han visitado el pueblo durante sus giras de trabajo o de campaña, porque han realizado promesas, han alimentado la esperanza en los pobladores y luego se han olvidado de ellos. En cambio, el ex presidente municipal Guillermo Ciprián muestra su satisfacción por su trabajo al frente del municipio y por lo que el pueblo ha logrado con sus propios medios, sin ayuda gubernamental. Comenta que, como ocurre en muchas comunidades de la región, también aquí todos le huyen al cargo porque implica trabajar mucho e incluso poner dinero de su bolsa. “El primero en entrarle al trabajo debe ser el presidente municipal, porque si no, los demás nomás no le entran”, asegura. Por eso, las autoridades en turno han encabezado los tequios para la construcción del Palacio Municipal, la reconstrucción de la fachada del templo y otras obras que se han realizado con el único apoyo de los paisanos radicados en el Distrito Federal, en Oaxaca y en Veracruz; han tenido que participar en el transporte de la cantera desde la mina hasta el centro de la población, utilizando sólo bestias de carga o rudimentarias carretas. Empujados por su ejemplo, los vecinos también han aportado su esfuerzo para estas obras: los campesinos, los albañiles, los talladores de piedra y hasta los diseñadores, como el ahora anciano Urbano 137


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García Hernández, quien sin tener conocimientos de arquitectura elaboró el proyecto para el Palacio Municipal y dirigió toda la obra, lo que le ha valido que a sus 70 años de edad lo sigan requiriendo de otras poblaciones cercanas como Magdalena Jicotlán, donde actualmente dirige los trabajos de la remodelación del templo. La tarde llega inexorablemente. La brisa que cayó al mediodía sobre el pueblo ha desaparecido y el cielo está despejado por completo. El viento frío y la humedad que nos recibieron por la mañana al llegar a la población y nos acompañaron durante el recorrido por sus calles sorprendentemente limpias, por sus fachadas y los letreros con los nombres de las calles prodigiosamente tallados en cantera, por su casi paradisíaco río, por el centenario tule al que la población debe su nombre, es ahora gélido; silba y golpea con violencia. A punto de abandonar el poblado, los lugareños nos piden que demos a conocer su situación a las autoridades, con la esperanza de obtener algún apoyo. “No estamos acostumbrados a sentarnos a esperar que todo nos venga del gobierno, y la prueba es que todo lo hemos hecho sólo con el trabajo del pueblo; pero si logramos que nos apoyen para la venta de la cantera, podremos hacer mucho más; eso es lo único que necesitamos, un poquito de apoyo”. Y allí quedan, entre esperanzados y escépticos, observando el vehículo en el que nos alejamos. Al abandonar el pueblo vuelvo la mirada para dar un último vistazo a ese cuasi-paraíso enclavado como oasis en ese semidesértico distrito de Coixtlahuaca. Las sombras empiezan a caer sobre los campos de un verdor intenso, mientras al frente se distinguen ya las tierras flacas, los suelos calizos, que conforman el paisaje casi lunar de esta zona. 23 de agosto de 1988.

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Como en el Cerro de la Estrella de Iztapalapa, en San Sebastián Progreso, pequeña localidad de la Mixteca oaxaqueña ubicada a sólo 15 kilómetros de Huajuapan, cada año se realiza una escenificación de la pasión y muerte de Jesucristo. Esta tradición nació en la primavera de 1981, meses después de que un grupo de paisanos radicados en la Ciudad de México se reunió en un departamento de la colonia Santa María la Ribera para organizar las festividades del pueblo. Allí surgió la idea de representar la semana santa en vivo, para atraer la atención de los habitantes de Huajuapan y de las localidades cercanas. Aunque inicialmente no contaban con el apoyo de sus autoridades y tuvieron que solventar los gastos con sus propios recursos, los organizadores lograron su objetivo, pues el número de espectadores se ha incrementado cada año, a pesar de que posteriormente empezaron a realizarse representaciones similares en otras localidades como Santiago Huajolotitlán, Santa María Xochixtlapilco, San Francisco Yosocuta y Santiago Miltepec. Arturo Herrera Hernández, quien entonces tenía 27 años de edad y radicaba en la capital del país, fue el escogido para representar el papel de Cristo, y lo hizo durante veinte años consecutivos. En el año 2001 pasó la estafeta a Vidal Ramírez Gómez, quien esta primavera cumplió su octava representación.

Morir otra vez en la cruz El Cristo de San Sebastián Progreso estuvo a punto de ser juzgado y condenado a muerte en ausencia. Sin embargo, cuando Efigenio Gómez Cruz ya se prepara para sustituirlo, Arturo Herrera Hernández desciende apresuradamente de un vehículo e ingresa a la escuela particular Vicente Guerrero para cumplir –ahora no tan puntualmente– con su cita anual. 139


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El Cristo de San Sebastián Progreso con la cruz a cuestas (Cortesía de Graciela Gómez Hernández).

Desde las 11 de la mañana la impaciencia se había apoderarse de las mil 500 personas que ya esperaban en la plaza de la comunidad el inicio de la representación de la pasión y muerte de Cristo. Al ver que los minutos seguían transcurriendo, Rutilo Herrera, hermano de Arturo y director del grupo de actores, con la preocupación reflejada en el rostro, dio la orden para que el Cristo sustituto, se vistiera. “Ya lo vieron en Huajuapan, pero no sabemos por qué no ha llegado”. La noche anterior, Efigenio tuvo que hacer el papel estelar durante el prendimiento. Faltando 20 minutos para el mediodía, ya caracterizado con la peluca, las barbas y la túnica blanca manchada de sangre, con las manos atadas al frente, Arturo empieza a caminar hacia la plaza del pueblo, escoltado por los 13 soldados romanos y seguido por las mujeres de Judá, para iniciar el vía crucis. En ese lugar ya se encuentran las imágenes de yeso del Nazareno y de la Virgen Dolorosa, a quien minutos antes un grupo de mujeres colocó una nueva indumentaria. Con lágrimas en los ojos, las mujeres del pueblo habían limpiado 140


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su propio rostro y el de sus hijos con la túnica negra. A punto de iniciar el recorrido, el sacerdote franciscano Enrique López se dirige a los presentes y los exhorta a vivir “respetuosa y plenamente” esta simbiosis de liturgia y representación teatral. A las once de la mañana con cincuenta minutos, bajo la sombra de varias jacarandas y un eucalipto, inicia el juicio. Minutos después, el cuerpo de Judas Iscariote, personificado por Ramiro Herrera, se balancea colgado del eucalipto, cual vívida estampa de la traición, a un lado de los puestos de refrescos y fritangas atestados de visitantes. Entre golpes nada teatrales de los soldados romanos, apenas unos metros atrás de las imágenes de yeso, y entre cantos con aire de lamentos (Perdón, oh Dios mío/ perdón y clemencia/ perdón e indulgencia/ perdón y piedad) el Cristo de carne y hueso inicia el trayecto hacia el cerro, sobre la arena y las rocas que queman como brasas. La gente busca mantenerse cerca de él para apreciar las caídas del Nazareno, los fuetazos que los soldados le propinan con verdadera saña, su encuentro con la Virgen y con las mujeres de Judá. Aún falta una distancia considerable para alcanzar la cima, pero algunas personas se adelantan para asegurar un buen lugar y presenciar lo más cerca posible la crucifixión, pues el número de espectadores se ha incrementado considerablemente. Cuando el reloj marca la una de la tarde con quince minutos, el Nazareno llega al cerro y es despojado de sus vestiduras. Mientras es colocado en la cruz, se escuchan las palabras del sacerdote, quien afirma que “el crimen más grande de la historia se registró cuando el hijo de Dios fue llevado a la muerte, sin poder apelar a ninguna autoridad”. Mientras las palabras del sacerdote se esparcen a través de las bocinas, los trece centuriones atornillan las soleras para asegurar las manos del Cristo en la cruz. Desde las ramas de los árboles cercanos, algunos niños y adolescentes observan la escena. El silencio invade la cima. A la una de la tarde con veintinueve minutos, la cruz es 141


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elevada y en la parte superior es colocado un pedazo de madera en el que se lee, en español: “Jesús de Nazareth, rey de los judíos”. Vienen luego, las siete palabras, representadas por el Cristo crucificado y comentadas por el sacerdote Enrique López. Finalmente, faltando dos minutos para las dos de la tarde, la séptima palabra brota de los labios agónicos del Cristo: “En tus manos encomiendo mi espíritu”. Todo está consumado. Un cohetón estalla en el cielo para simbolizar el rugido de la tierra que, según La Biblia, se percibió al morir el redentor. Respetuosamente, los hombres se quitan el sombrero e inclinan la cabeza. Durante algunos momentos, reina el silencio. Después, los trece centuriones bajan el cuerpo, lo envuelven en una sábana y lo trasladan hasta la escuela particular del pueblo, donde el Cristo vuelve a ser Arturo, el casi cuarentañero que ha muerto crucificado trece veces consecutivas en este cerro. Minutos después, despojado de la túnica y de la corona de espinas, sin la cruz a cuestas, con el pelo corto y el bigote cuidadosamente recortado, Arturo se pierde entre los integrantes del cuadro de actores, quienes comentan las incidencias de la representación. Mientras tanto, los visitantes inician el retorno por el camino de terracería que conduce a la cabecera municipal, Santiago Huajolotitlán. El pueblo, que apenas unos minutos antes lucía lleno de vida, vuelve a ser uno más en la inhóspita geografía de la Mixteca, con sus calles polvorientas y llenas de rocas, sus muros de adobe y su templo de paredes desnudas… hasta el próximo año, cuando la representación de la pasión y muerte de Cristo volverá a atraer a millares de visitantes, unos invadidos por la fe, otros llenos de curiosidad, algunos, incluso, por el morbo, y unos más de simple sed de folklore. 9 de abril de 1993

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Arturo, de Cristo a Barrabás.

Arturo Herrera en la cruz, en la representación de la Semana Santa en vivo (Cortesía de Graciela Gómez Hernández).

De espíritu aventurero, Arturo Herrera Hernández ha sido profesor, integrante de la Fuerza Aérea Mexicana, indocumentado, productor de chile y jitomate. Aunque por segunda ocasión ocupa el cargo de agente municipal de San Sebastián Progreso, una de sus mayores satisfacciones es haber representado durante veinte años consecutivos el papel de Cristo en la Semana Santa en vivo en su pueblo natal. Sin embargo, su afición por el teatro y el deseo de seguir apoyando la escenificación que data de hace 28 años, le han hecho pasar de mártir a villano, pues por segunda ocasión representará a Barrabás, el criminal que fue liberado a cambio de que Cristo muriera en la cruz. Entrevistado en la oficina de la agencia municipal de esta localidad, a sólo 15 kilómetros de Huajuapan, Arturo recuerda que la inquietud de representar la pasión y muerte de Cristo surgió en 1979, aunque no fue sino hasta dos años después cuando se pudo concretar. Entre los principales promotores de la idea estaban sus hermanos Efrén (ya fallecido) y Rutilo (hasta la fecha director del cuadro de actores), así como algunos familiares y paisanos radicados en la Ciudad de México. En la primavera de 1980, poco tiempo después de haberse 143


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mudado a la delegación Magdalena Contreras, por el rumbo del cerro del Ajusco, recibió la visita de sus hermanos, algunos primos y un paisano llamado Agustín Torres, quienes le propusieron que representara el papel de Cristo. Aunque no había considerado esa posibilidad, aceptó porque no había otra persona que reuniera las características necesarias, pero lo hizo con la idea de que posteriormente se buscara algún joven que lo sustituyera. Sin embargo, el tiempo fue pasando y nadie se animaba a representar el papel, por lo que Arturo lo hizo durante dos décadas, de 1981 al año 2000, hasta que fue sustituido por Vidal Ramírez Gómez. Los primeros años no tuvo problemas para participar en la representación porque laboraba como profesor y aprovechaba el periodo vacacional de primavera para viajar al pueblo. Sin embargo, en 1985 decidió separarse del magisterio e ingresar a la Fuerza Aérea Mexicana, donde laboró como escribiente, alcanzó el grado de sargento primero, pero tuvo que cambiar frecuentemente su lugar de residencia. “Estuve en el sureste, por Tabasco, también en Nayarit, en Durango, pero al llegar la Semana Santa yo veía cómo le hacía pero llegaba, a veces en la víspera, y a veces hasta una hora antes, aunque a veces tuviera que decir una pequeña mentira para poder viajar”. Contra lo que pudiera pensarse, durante el tiempo que estuvo en la Fuerza Aérea le resultaba muy difícil prepararse físicamente para la representación, ya que el trabajo de la oficina le absorbía. Sin embargo, su condición física le ayudaba a soportar el calor y el recorrido sobre el suelo rocoso, cargando la cruz de casi 75 kilogramos de peso. “En la milicia yo andaba con las botas pesadas todo el día, algunas veces tenía que dormir con botas por necesidades del servicio, por eso la piel de los pies estaba tierna y cuando venía aquí y tenía que caminar descalzo, se me asaban los pies. Lo que más llegué a sentir fue cansancio, pero en una hora me recuperaba”, relata. Para protegerlo de los latigazos, sus hermanos le confeccionaron un chaleco de lona, pero Arturo consideraba 144


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que le restaba naturalidad a la representación, por lo que dejó de usarlo después del segundo año, aprovechando que se había descosido y algunas partes sobresalían de la túnica. Desde entonces, en cada representación recibía los golpes a pellejo vivo, a pesar de las protestas de sus hermanos, quienes lo consideraban masoquista. Después de representar por última vez el papel de Cristo, Arturo emigró a los Estados Unidos, donde permaneció seis años, porque “quería probar lo que era ser mojado”. A su regreso, se dedicó a las labores del campo y construyó un pequeño invernadero. A sus 54 años de edad, se siente satisfecho de haber servido a su pueblo, primero en 1984, cuando inició la construcción del edificio de la agencia, sin apoyo del municipio de Santiago Huajolotitlán, del que dependía en esa fecha. En 1996, formó parte del Comité Pro Segregación de la agencia, que dos años después logró su incorporación al municipio de Huajuapan. A la lucha que se libró en aquella época, atribuye la desaparición de su hermano Jesús, de cuyo paradero nadie ha vuelto a saber. Sin embargo, considera que el haber tenido la oportunidad de representar el papel de Cristo durante dos décadas, ha sido una de las mejores experiencias de su vida: “Lo que me dejan estos años es una gran satisfacción, porque después de que nadie se paraba por aquí, ahora no caben cuando llega el Viernes Santo, viene gente de muchas partes y esto se llena. Para la comunidad es importante porque ahora es bien conocida, esto como que la eleva de rango”. Por eso, el año pasado, al regresar al pueblo, se reintegró al cuadro de actores, aunque ahora en el papel de Barrabás, el cual piensa repetir este año. Con una sonrisa rubrica: “Pasé de mártir a villano”. 17 de marzo de 2008.

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El espejismo del billete verde62. Deslumbrados por la ilusión del billete verde, alucinados por el american way of life, atraídos por la aparente prosperidad de quienes retornan a sus lugares de origen después de varios meses o años de estancia en la unión americana, unos 60 mil mixtecos procedentes de diversas comunidades siguen emigrando a los Estados Unidos, en lo que ha sido un éxodo incesante desde los años cuarenta, cuando se puso en marcha el programa Bracero. El fenómeno migratorio en esta región, al igual que en otras entidades del país, empezó a manifestarse en la posguerra, cuando los Estados Unidos enfrentaban una imperiosa necesidad de mano de obra y abrieron sus fronteras a trabajadores latinoamericanos, principalmente mexicanos, para satisfacer sus necesidades de producción agrícola. Aunque los trabajadores que emigraron como parte de este programa procedían de diversos puntos del país, en la mayoría de las entidades la migración fue sólo un fenómeno temporal; no así en la Mixteca oaxaqueña, donde las condiciones de extrema pobreza de la mayoría de las comunidades, el deterioro ecológico que ha pauperizado las escasas tierras de cultivo, y el olvido por parte de las instancias oficiales arraigaron este fenómeno y lo convirtieron, para muchos de sus habitantes, en la única alternativa para aspirar a mejores condiciones de vida. En localidades como Zapotitlán Palmas, ubicada en la 62

Con la colaboración de Georgina Almazán y Guillermo Círigo.

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Historias de Huajuapan

zona limítrofe con el estado de Puebla, a sólo 15 kilómetros de Huajuapan, los hijos de los primeros migrantes constituyen una segunda generación que sigue abandonando su lugar de origen para cruzar la frontera, aunque ahora en condiciones diferentes: si en los años cuarenta la migración se organizó a través de un convenio entre los gobiernos de ambos países, los nuevos braceros tienen que hacer frente a las leyes norteamericanas que pretenden frenar este fenómeno, a la persecución de la policía migratoria y los grupos racistas; y si logran llegar a territorio norteamericano, a la discriminación y explotación de muchos patrones que se aprovechan de su condición de ilegales. En Zapotitlán Palmas el flujo migratorio data de hace casi cinco décadas y actualmente se estima en un 50 por ciento de la población. En cambio, en Asunción Cuyotepeji la incidencia es relativamente baja y reciente, según refieren los habitantes de la comunidad. Aunque en muchos casos la motivación para abandonar sus lugares de origen es la necesidad económica, en otros es la aspiración de regresar como los paisanos que retornan después de una temporada de trabajo en el extranjero: con flamantes vehículos, suficiente dinero, ropa y costumbres diferentes. Sin embargo, pocos advierten que, frente a la aparente prosperidad de quienes retornan, la mayoría de los que salen no pueden cruzar la frontera, o son deportados y tienen que esperar en Tijuana u otras ciudades de la franja fronteriza mexicana, en espera de una nueva oportunidad para ingresas al paraíso de los dólares. En el más trágico de los casos, son asesinados por la policía norteamericana, por grupos racistas o por los propios polleros. Entre los deportados recientemente se encuentra Benjamín Martínez, originario de Santa María Camotlán, quien tuvo que retornar a su lugar de origen al ser expulsado por la migra, después de medio año de estancia en el país del norte. Luego de asistir al taller Derechos Humanos para Migrantes, organizado por la Unidad Regional de Culturas Populares e impartido por las abogadas Pilar Noriega y Alicia Ilillamín, del Seminario de Estudios Chicanos y de las 147


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Fronteras, considera que si volviera a insistir en su aventura ya no estaría tan desprotegido, pues ahora conoce sus derechos y sabe a dónde acudir para recibir asesoría de los gobiernos de los estados de la unión. Por su parte, Isaías Hernández Martínez y Macario Martínez Martínez, originarios de Zapotitlán Palmas, han cumplido seis años de estancia en los Estados Unidos y tienen una situación estable en Washington y en San Diego, respectivamente. Aseguran que no tienen problemas por su condición de migrantes, pero conocen muchos casos de paisanos o conocidos que han sido deportados o rechazados en la frontera. Macario Martínez afirma que la fuerza de trabajo de los mexicanos es muy importante para los Estados Unidos, por lo que los migrantes deben luchar por el respeto a sus derechos, por un mejor salario y un mejor trato, cuenten o no con documentos. A su vez, Eli Neri Carrasco, quien no es migrante pero tiene familiares que sí lo son, considera que debe haber una mayor difusión de los derechos de los trabajadores migratorios. Sin embargo, ni leyes, ni explotación, ni atropellos de los derechos humanos detienen a los migrantes. El éxodo continúa no sólo hacia los Estados Unidos, sino también a los estados del norte de nuestro país. Y continuará porque las acciones y programas gubernamentales se han orientado más a los efectos que a las causas. Habrá de subsistir porque en muchas comunidades mixtecas, las únicas alternativas para sus habitantes son “la necesidad de una sombra, la esperanza de una lluvia o la muerte”. 26 de noviembre de 1992.

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El 13 de marzo de 1995 un autobús procedente del estado de Sinaloa volcó en la carretera México-Querétaro, en las inmediaciones de San Juan del Río, cuando el conductor se quedó dormido después de manejar durante 15 horas consecutivas. Como resultado de la volcadura, murieron 27 personas y otras 30 resultaron heridas de gravedad. Horas después del accidente se estableció que la mayoría de las víctimas eran trabajadores migratorios originarios del municipio de San Martín Peras, Juxtlahuaca, y dos de ellos de Guadalupe Nogales, del municipio de San Francisco Tlapancingo, Silacayoapan. Los cuerpos de 25 de las víctimas llegaron a Oaxaca vía aérea la tarde del 14 de marzo y dos días después los ataúdes con los restos de las 18 personas originarias de San Martín Peras –entre ellos cuatro niños– fueron trasladadas a su lugar de origen, después de realizar una escala en esta ciudad.

El retorno de los migrantes a San Martín Peras Cinco meses después de que salieron cargados de sueños y esperanzas, catorce adultos y cuatro niños originarios del municipio de San Martín Peras, perteneciente al distrito de Juxtlahuaca, regresaron a esta región. Pero a diferencia de los años anteriores, cuando volvían felices con el dinero que lograban ahorrar durante su estancia en los campos de cultivo de Sinaloa, hoy lo hicieron en silencio, en patrullas con los códigos encendidos, y en el interior de modestos ataúdes de madera. Eran casi las 17:30 horas cuando a lo lejos se pudieron observar las torretas luminosas del convoy integrado por diez patrullas de Tránsito, así como de las policías Preventiva 149


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Estatal y Judicial del Estado. Entre las miradas curiosas de los automovilistas y peatones que circulaban por la carretera, las unidades fueron entrando a las instalaciones de la gasolinera ubicada en la salida a Oaxaca, y se distribuyeron frente a las bombas para ser abastecidas de combustible. En ese lugar les esperaban una patrulla de la Policía Federal de Caminos y Puertos, y otra de Tránsito del Estado, para escoltar el convoy hasta su salida de la ciudad. Con la consternación reflejada en el rostro, el presidente municipal de San Martín Peras, Francisco López Carrizal, descendió de uno de los vehículos. Al ser entrevistado, refirió que se tuvo que trasladar a la Ciudad de Oaxaca para identificar los cuerpos de las víctimas del accidente ocurrido este lunes en el estado de Querétaro, pues entre las pertenencias de algunas de ellas fueron encontrados documentos en los que se hacía referencia a su municipio. Entre los 27 cadáveres que llegaron el martes por la tarde a la Ciudad de Oaxaca, reconoció a 18 de sus paisanos, entre ellos cuatro niños, quienes habían emigrado en el mes de octubre, con la misma ilusión de todos los años, para trabajar en la pizca de jitomate en la comunidad Costa Rica, del estado de Sinaloa. Sin embargo, esta vez el viaje de retorno, las ilusiones y expectativas, la esperanza del reencuentro con el terruño y con sus seres queridos, terminaron en un puente, a más de 600 kilómetros de su destino. A diferencia de los años anteriores, ahora los trabajadores migratorios regresaban a su tierra como nunca lo imaginaron: en un avión Hércules de la Fuerza Aérea Mexicana con matrícula XC-EXC que había tocado tierra el martes a las 17:09 horas en el aeropuerto Benito Juárez de la Ciudad de Oaxaca, y luego en un convoy policiaco hasta el lugar de donde salieron cinco meses antes. El presidente municipal de San Martín Peras explicó que las condiciones de pobreza que se viven en la comunidad obligan al 70 por ciento de sus habitantes a emigrar cada año hacia los campos de cultivo de Sinaloa, la mayoría de las veces con toda su familia, como parte del fenómeno 150


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conocido como migración golondrina. Una de las familias que viajaban en el autobús que volcó en las inmediaciones de San Juan del Río, llevaba un año completo en esa entidad. El munícipe reveló que las autoridades estatales ya le solicitaron una relación de las víctimas para tramitar la indemnización a sus familiares, y ofrecieron apoyar a estos últimos con recursos del programa Jornaleros Agrícolas. Los dieciocho ataúdes distribuidos en las bateas de las camionetas pick up –grises los de los adultos, blancos los de los cuatro niños– enmarcan la breve charla. “Vamos al pueblo, a enterrar a nuestros muertitos, y luego tengo que regresar a Oaxaca, porque hay seis cadáveres que no hemos podido identificar pero que podrían ser gentes de nuestro municipio”, explica. Cuando los empleados de la gasolinera terminan de abastecer de combustible los diez vehículos, López Carrizal aborda el que encabeza el convoy y asomándose por la ventanilla abierta comenta: “Esta es la peor tragedia de que se tenga memoria en la historia de nuestro pueblo; nunca había pasado algo así”. La tétrica caravana continúa su recorrido, entre las miradas respetuosas de los transeúntes que se detienen a su paso, ahora por el tramo urbano de la carretera Cristóbal Colón y por la calle Trujano, hasta llegar al Palacio Municipal. Después de una escala muy breve frente al edificio, los diez vehículos policiacos reanudan su marcha por las calles Antonio de León, 5 de febrero y Mina. El reloj marca las seis y media de la tarde. Las primeras sombras empiezan a caer cuando el convoy abandona en silencio la ciudad y toma la carretera que conduce a Juxtlahuaca, desandando la misma ruta que recorrieron en octubre del año pasado. Este sería su último viaje a San Martín Peras, tierra de migrantes y rezagos ancestrales, donde, como diría Fidel Samaniego, la pobreza se hizo vieja… pero no se va. 16 de marzo de 1995.

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Ni callada ni dormida

El Ejército Popular Revolucionario (EPR) nació el 1 de mayo de 1996 como resultado del acuerdo de 14 grupos guerrilleros, entre ellos el Partido Revolucionario Obrero Clandestino–Unión del Pueblo (PROCUP) y el Partido de los Pobres (PdlP). El 28 de junio hizo su aparición pública en el vado de Aguas Blancas, municipio de Coyuca de Benítez, Gro., durante la conmemoración del primer aniversario del homicidio de 17 integrantes de la Organización Campesina de la Sierra Sur (OCSS). El 28 de agosto del mismo año atacó de manera casi simultánea instalaciones policiales, navales y militares en los estados de Oaxaca, Guerrero, Puebla, México y Michoacán. Asimismo, realizó acciones de propaganda armada en los estados de Chiapas y Tabasco. En Oaxaca se registraron ataques del grupo armado en la capital del estado; en La Crucecita, Huatulco, con saldo de 13 muertos y 23 heridos; y en Tlaxiaco, donde el saldo fue de dos policías muertos y un civil herido. Aunque de manera esporádica el EPR ha realizado otras acciones de hostigamiento y de propaganda armada, ninguna de ellas se acerca a la de esa jornada sangrienta de agosto de 1996, que arrojó un saldo de 42 muertos –entre ellos dos civiles y dos integrantes del grupo armado– y por lo menos 48 heridos, uno de ellos civil y 3 miembros del EPR.

Tlaxiaco: cuando la guerrilla nos alcanzó Un disparo de arma de fuego rompió la tranquilidad de la noche de miércoles en el centro de Tlaxiaco. El policía Gregorio Leonel Sánchez Santiago, quien estaba de guardia en la puerta del Palacio Municipal, no tuvo tiempo de percatarse de lo que ocurría; una bala disparada a quemarropa se incrustó en su sien derecha y le causó la muerte de manera instantánea. Momentos antes debió ver a 152


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sus atacantes (probablemente dos personas que caminaban por el portal del Palacio Municipal, fingiendo platicar despreocupadamente) pero no les dio importancia hasta que uno de ellos extrajo de entre sus ropas una pistola calibre .45 y a menos de un metro de distancia le disparó a la cabeza. Casi de inmediato, desde distintos puntos del parque central y de la calle posterior empezaron a surgir proyectiles de armas de grueso calibre, todos dirigidos hacia el edificio de la Comuna, en cuyo interior se encuentra el cuartel de la Policía Preventiva Estatal. Los casi veinticinco elementos al mando del delegado Alejandro Barroso Rodríguez tomaron sus armas e intentaron salir para hacer frente a los atacantes. El sargento segundo Francisco García López cayó a sólo dos metros de la puerta de madera que da al patio, abatido por las balas que provenían de la calle. Sus compañeros se parapetaron junto a los gruesos muros de adobe y repelieron la agresión. Desde el exterior, los atacantes gritaban “¡Salgan, perros, hora sí vamos a matarlos!” y “¡Salgan, policías, no sean putos!”.

Elementos de la Policía Preventiva Estatal trasladando el cadáver de su compañero Gregorio Sánchez Santiago, abatido a la entrada del Palacio Municipal de Tlaxiaco.

Durante más de una hora, los agresores siguieron disparando y gritándoles con el afán de provocarlos, pero los policías continuaron parapetados, manteniendo a raya a los 153


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atacantes, algunos de los cuales vestían de negro, otros con ropa de mezclilla, otros más con uniformes camuflajeados, pero todos con el rostro cubierto con pasamontañas o paliacates. Al percatarse de que no podían avanzar hacia el interior del edificio, los atacantes abordaron los vehículos en que habían llegado y abandonaron la ciudad, aparentemente con rumbo al estado de Guerrero. Cuando tuvieron la certeza de que los agresores habían huido, el comandante Alejandro Barroso y sus hombres abandonaron el cuartel. Mientras un grupo realizaba un recorrido por el parque y las calles del centro, otro se trasladaba al estacionamiento, donde debía estar en servicio Guadalupe Cruz Martínez, pero no lo encontraron. A quien sí hallaron fue al comerciante José Felipe Morales Montes, quien fue alcanzado por una bala en la espalda, en su puesto de revistas. En el recorrido encontraron también un fusil de asalto AK-47, comúnmente conocido como cuerno de chivo, y cuatro maletas que los rebeldes habían utilizado para guardar las armas y los cartuchos. Minutos después, los elementos de la Policía Judicial del Estado encontraron otro cuerno de chivo y algunas ropas tipo jorongo. En el interior de una de las maletas había volantes con el encabezado Manifiesto de la Sierra Madre Oriental. Algunas bardas de las calles céntricas mostraban pintas en color rojo, con las leyendas Con la lucha popular el EPR triunfará y Viva el EPR. Era la primera evidencia de que la guerrilla que se había manifestado desde el primer día de 1994 en Chiapas, y apenas el 28 de junio de este año en Guerrero –dos estados colindantes con Oaxaca–, había llegado a la entidad. Empieza el tiroteo De acuerdo con los testimonios de funcionarios, jefes policiales y vecinos, los integrantes del grupo armado empezaron a llegar poco antes de las diez de la noche en tres vehículos, uno de ellos un camión verde de volteo y dos camionetas cubiertas con lonas, y se dispersaron por el centro de la localidad. Eran unas 50 personas –algunos 154


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testigos hablan hasta de 80– con morrales e indumentaria similar a la de los indígenas de la zona, por lo que no llamaron la atención de los escasos transeúntes ni de los comerciantes que aún estaban cerrando sus negocios. Dos de ellos caminaron hacia el portal y se acercaron a la puerta del Palacio Municipal, platicando para no llamar la atención de Gregorio Sánchez, el policía de guardia, lo que les permitió acercarse a menos de un metro de distancia y dispararle con una pistola calibre .45 a la cabeza. Cuando se escuchó la detonación, los rebeldes ya estaban ubicados en lugares estratégicos, rodeando el Palacio Municipal, con el rostro cubierto con pasamontañas y paliacates. Quienes llevaban jorongos se habían despojado de ellos y mostraban ropas negras o uniformes camuflajeados. De las maletas y morrales habían extraído sus armas M1, UZI y AK-47, y disparaban casi sin tregua contra el cuartel de la Policía Preventiva, sobre todo desde la calle posterior, que debido a su desnivel, les permitía un mejor ángulo de tiro. En la Plaza del Reloj, a sólo una calle del Palacio Municipal, el comerciante José Felipe Morales, de 42 años de edad, había visto a las personas que descendieron de los tres vehículos, pero no les dio importancia. Eran las diez y cuarto de la noche. Empezaba a cerrar su puesto de revistas cuando escuchó los disparos; metió a sus hijos al puesto y trató de cubrirse él mismo, creyendo que el tiroteo terminaría pronto; pero los minutos pasaban y parecía no tener fin. “De repente sentí algo caliente y un dolor muy fuerte en la espalda; no pude aguantar el dolor y me doblé cayendo al piso. Yo creo que me tocó una bala perdida, porque venían de todos lados”, refiere. En el interior del cuartel de policía, el comandante Alejandro Barroso escuchó los primeros disparos y dio la voz de alerta a los elementos: “Corrí a agarrar mi arma, empecé a disparar y le dije al personal que hiciera lo mismo. A cada rato nos gritaban ¡Salgan, policías!, y nos decían groserías para provocarnos, pero aquí nos quedamos repeliendo la agresión; por eso es que no pudieron entrar, si 155


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no, ¡nos acaban!”, relata. El tiroteo duró casi una hora y media. Cuando dejaron de escucharse los disparos, el comandante Barroso salió con sus elementos a realizar un recorrido por el centro de la población, pero los agresores habían abordado nuevamente los vehículos y escapado con rumbo desconocido. Fue durante este recorrido cuando descubrió que Guadalupe Cruz, quien estaba de servicio en el estacionamiento, había desaparecido: “No sabemos qué le pasó; ojalá se haya escondido en algún lugar, y no se lo hayan llevado estos individuos”, comenta con preocupación el jefe policial. Poco después de la media noche, empiezan a arribar varias patrullas con decenas de elementos de la Policía Preventiva procedentes de Putla de Guerrero, Huajuapan de León y la ciudad de Oaxaca. Mientras algunos elementos se distribuyen en el centro de la población, otros realizan patrullajes por los caminos de la zona, sin encontrar rastros de los atacantes. También en los primeros minutos del día llega al Palacio Municipal el personal de la agencia del ministerio público del fuero común. Se detienen junto al pilar de la entrada principal, donde el cuerpo de Gregorio Sánchez, con el uniforme azul oscuro y la chamarra negra, yace en medio de un charco de sangre. Alguno de sus compañeros ha colocado una veladora encendida cerca de su cabeza. El secretario del ministerio público toma nota de la posición en que fue encontrado el cuerpo y recoge del suelo un casquillo calibre .45. Mientras el cadáver es cubierto con una cobija oscura, el personal actuante ingresa al patio del Palacio Municipal donde se encuentra el cuerpo de otro policía, bajo un sarape a cuadros, a sólo dos metros de una pesada puerta de madera que muestra en la parte superior un emblema con la efigie del Flechador del Sol y la leyenda Policía-Oaxaca. 13/a. Deleg. Seg. Pub. del Edo. Tlaxiaco, Oax. Junto a la puerta semiabierta, cuatro elementos armados y dos mujeres, aparentemente familiares de las víctimas, presencian cuando el secretario ministerial y sus 156


Historias de Huajuapan

acompañantes recogen las decenas de cartuchos percutidos que se encuentran dispersos en el patio y dan fe de los enormes agujeros en las paredes y la puerta. Minutos después, cuatro elementos colocan sobre la cobija el cuerpo de Gregorio Sánchez y lo llevan hasta el interior del patio para colocarlo junto al de Francisco García, quien aún tiene la gorra puesta. En el exterior, como únicos testigos del paso del EPR, quedan una mancha de color rojo oscuro sobre el muro y el piso de la entrada del Palacio Municipal; en las calles desiertas, varias patrullas y decenas de elementos armados; y en lo alto, la luna llena que hace menos oscura esta larga noche en la ciudad que en algún tiempo fue llamada El París chiquito y que hoy se ha convertido en noticia nacional.

Las calles de Tlaxiaco al día siguiente del ataque del EPR.

Nosotros también somos pueblo Con la luz del día empiezan a conocerse las noticias de los acontecimientos registrados en la capital del estado, en Huatulco y en otras seis entidades del país: casi de manera simultanea al ataque a esta localidad, miembros del EPR dispararon contra las instalaciones de la 28ª zona militar, en la ciudad de Oaxaca; otro comando atacó la base aérea, el hangar militar y las oficinas de la Procuraduría General de la República (PGR), ubicadas en el Aeropuerto Internacional 157


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Benito Juárez, dañando una avioneta; y tres integrantes del grupo armado irrumpieron en las instalaciones de la radiodifusora XHOCA-FM, La Grande de Oaxaca, amenazaron a la operadora Mary Aragón para obligarla a leer un comunicado, pero se retiraron cuando les explicó que la estación funciona de manera automática por las noches. Asimismo, atacaron instalaciones y unidades móviles de los cuerpos de seguridad y el Ejército Mexicano en Ciudad Altamirano y Acapulco, Gro; en Nuevo Necaxa, Pue; Naucalpan y Texcoco, Edo. Mex; y en la carretera Villa Madero-Carácuaro, en Michoacán. En Chiapas realizaron bloqueos en varias carreteras para distribuir propaganda, y en Tabasco tomaron las instalaciones de una radiodifusora para leer un comunicado. Dos horas después del ataque al cuartel de policía de esta ciudad, cuando corrían ya los primeros minutos de hoy, integrantes del grupo armado atacaron las instalaciones de la partida de Infantería de Marina, las policías Judicial Federal, Judicial del Estado, Preventiva Estatal y Municipal, así como las oficinas de FONATUR en La Crucecita, Huatulco. El saldo de los ataques en el estado de Oaxaca fue de 15 muertos y 24 heridos. Como si quisieran demostrar que no son “una pantomima”, como los consideró Cuauhtémoc Cárdenas el pasado 28 de junio, cuando irrumpieron en el acto realizado en el vado de Aguas Blancas con motivo del primer aniversario de la matanza de 17 campesinos a manos de elementos de la Policía Motorizada del estado de Guerrero; o como si fuera un acto de venganza por estos hechos, los miembros del EPR dejaron una estela de muerte y luto a su paso por las cinco entidades donde realizaron acciones armadas: 42 muertos y por lo menos 48 heridos. Mientras el grupo armado reivindica los ataques, a los que llama acciones de hostigamiento y asegura que son “una respuesta a la escalada represiva y a la militarización desplegada por el gobierno antipopular contra el pueblo y el movimiento armado revolucionario”, uno de los elementos que hacen guarida en las calles aledañas al Palacio 158


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Municipal, argumenta: “No, lo que está haciendo esta gente no está bien; aquí nos mataron a dos compañeros y hay otro al que no encontramos; y los mataron sin deberla ni temerla, porque nosotros ni sabemos por qué están luchando, ni tenemos la culpa de lo que está pasando en el país. Nosotros también somos pueblo, estamos aquí por necesidad, porque tenemos una familia que mantener, y apenas ganamos lo suficiente para irla pasando. Yo creo que están mal, y que con eso se van a echar a la gente encima, porque están actuando como viles asesinos”. Temor e incertidumbre Son casi las cuatro de la tarde. En el patio del Palacio Municipal, frente a la entrada al cuartel de la Policía Preventiva Estatal, se encuentran dos ataúdes metálicos color gris, cada uno de ellos con cuatro cirios y varios floreros en derredor. Junto a los féretros, varias personas, con los brazos cruzados sobre el pecho, rezan en silencio. Son los familiares de los policías muertos. Afuera, en el parque central, se observan algunas patrullas, y en las calles cercanas hacen guardia elementos del Ejército Mexicano que empezaron a llegar en la madrugada. Decenas de personas ocupan las bancas del parque y comentan los acontecimientos de las últimas horas. En los puestos de la calle, la actividad parece normal. Sin embargo, el temor que prevalece en la población casi se puede tocar con las manos. Jacobo Pérez López, vecino de esta localidad, reconoce que entre los habitantes de Tlaxiaco hay indignación por lo que pasó, pero también temor: “Estamos indignados, porque en el tiempo que llevamos viviendo aquí nunca había pasado algo similar; pero también hay mucho temor entre la gente, tenemos miedo de que esto se pueda repetir”. Entrevistada en su puesto ubicado a unos metros del parque central, Concepción Martínez Sánchez confirma esta percepción: “Tenemos miedo de que regresen, por eso estamos pidiendo a las autoridades que manden más vigilancia, suficientes elementos para que los ciudadanos 159


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estemos seguros”. Por su parte, Delfino Pérez, familiar de uno de los policías victimados, insiste en el llamado a las autoridades: “Necesitamos que haya más vigilancia policíaca, porque la mayor parte de la gente de Tlaxiaco es pacífica, pero la que viene de otras comunidades es la que hace estas fechorías. La gente está indignada, pero también tiene temor de que vayan a regresar. Al principio se pensaba que era gente del MULT que venía de Copala, pero ahora se sabe que vienen de Guerrero. El gobierno del estado debe ver por las comunidades y mandar más elementos de seguridad para que la gente pueda vivir tranquila, porque ya se vio que con los pocos que hay, con 50 ó 60 guerrilleros que vengan, los acaban”.

El comerciante Felipe Morán en su domicilio, minutos después de salir del hospital.

A su vez, José Felipe Morán, el comerciante que resultó herido en la Plaza del Reloj, y que esta tarde regresó a su domicilio al ser dado de alta en el hospital del IMSS, expresa: “Tenemos miedo porque no sabemos cómo vaya a seguir esta situación; la gente está angustiada porque piensa que esto puede volver a pasar, porque somos vecinos de Chiapas y Guerrero, donde la guerrilla está muy fuerte”. Ese temor se reflejó también en la suspensión de clases en varias escuelas de la ciudad. Sin embargo, el delegado del gobierno del estado en la zona, Fidel David Hernández 160


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Hernández, confía en que las clases se normalizarán mañana: “Hoy hablamos con los directores de las escuelas para que regresen a clases con toda confianza; los niños no corren ningún peligro, porque hay tranquilidad en todos los municipios y porque además de la presencia de las corporaciones, ya contamos con la vigilancia del Ejército Mexicano”.

El regidor perredista Agustín Chávez convocando a la población a luchar por la “desmilitarización” de la zona.

Contra la “militarización” A sólo unos metros de distancia, en la Plaza del Reloj, el regidor perredista de Gobernación y Reglamentos, Agustín Chávez, megáfono en mano, invita a los habitantes a una reunión “para conocer toda la información que se ha generado en las últimas horas y analizar esta nueva circunstancia de la región Mixteca”. Asimismo, los convoca a colocar moños blancos en sus ventanas y puertas, para “luchar por la desmilitarización de esta zona y por la defensa de los derechos humanos”. Abordado durante una pausa, reconoce que la gente tiene temor, pero lo atribuye a la presencia del ejército: “Nos preocupa que se den acontecimientos de esa magnitud. No quisiéramos que en Tlaxiaco se dieran prácticas violentas que sirvieran de pretexto para la violación de los derechos humanos, que ya existe en la zona. La gente tiene temor de 161


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que se den enfrentamientos con el ejército, porque eso pondría en riesgo a la población civil, pero sobre todo a la gente que está luchando por cambiar la situación que hay en el país”. Reitera la necesidad de que los gobiernos federal y estatal vuelvan la vista a esta región, donde subsisten rezagos ancestrales, para evitar que se repitan hechos como los de anoche: “El gobierno debe poner atención y dar respuesta a las múltiples demandas de la zona y de las comunidades indígenas; hay demandas educativas, de salud, ecológicas, relativas a los derechos humanos y a la impartición de justicia. Esta situación origina los conflictos de este tipo, que no quisiéramos que se dieran”. El delegado de gobierno en la zona difiere de esta opinión: considera que los llamados a luchar contra la presencia del ejército y los cuerpos de seguridad son “provocaciones que sólo nos llevan a la confusión y al caos”. Asegura que la demanda recurrente de las autoridades municipales y de los habitantes de la zona, es que se intensifique la presencia de las fuerzas del orden: “La gente está pidiendo que arriben más elementos, sobre todo del Ejército, que patrullen las comunidades, los caminos, las rutas de los Achiutla, de los Tayata, de San Juan Mixtepec y de Chalcatongo para dar garantías a la población. El ejército es una institución con la suficiente calidad moral para mantener la paz y la tranquilidad”. Aunque reconoce que en la zona subsisten rezagos que se deben seguir atendiendo, asegura que los ataques del EPR carecen de justificación: “Lo de anoche fue un asesinato artero. Mataron a dos policías, está desaparecido otro; hirieron a un civil, un comerciante que estaba cerrando su puesto, e incluso tirotearon al presidente municipal y al síndico de aquí, de Tlaxiaco, tuvieron que salir corriendo, esquivando las balas, pero afortunadamente no les dieron. Fue un crimen, un crimen cobarde y artero”. A menos de 24 horas del ataque del EPR a esta localidad ubicada a unos 180 kilómetros de la capital del estado, las actividades de sus habitantes casi han vuelto a la normalidad. 162


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En la Plaza del Reloj, a unos metros de donde Agustín Chávez continúa convocando a los ciudadanos a “luchar por la paz, por los derechos humanos y contra la desmilitarización”, algunos indígenas tejen sombreros de palma. Las sombras de la noche empiezan a caer y con ellas, las cortinas metálicas y las puertas de los negocios empiezan a cerrar, mucho antes de lo acostumbrado. En una de las calles que conducen al Palacio Municipal, un voceador grita a través del megáfono: “¡Compre su periódico, vea toda la información del ataque de la guerrilla aquí en Tlaxiaco, entérese de todos los detalles aquí en su periódico!”. 29 de agosto de 1996.

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CAPITULO 4

Manuel de Jesús Clouthier del Rincón Maquío (1934-1989) nació en Culiacán, Sin. Fue agricultor, dirigente empresarial y uno de los líderes más carismáticos del Partido Acción Nacional. En 1984, después de haber sido presidente de la Confederación Patronal de la República Mexicana (COPARMEX), ingresó formalmente a ese partido y dos años después fue candidato a la gubernatura de Sinaloa, frente a Francisco Labastida Ochoa63. En 1987 participó en la contienda interna por la candidatura del PAN a la Presidencia de la República, ganando a los otros dos precandidatos, Jesús González Schmal64 y Salvador Rosas Magallón65. Previo a la elección del 6 de julio de 1988, realizó una intensa campaña electoral que permitió al PAN elevar de manera significativa su votación nacional, aunque fue superado por Carlos Salinas de Gortari (PRI) y Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano (Frente Democrático Nacional). Ante la caída del sistema que generó serias dudas sobre la legalidad de los resultados electorales, Clouthier emprendió una serie de acciones de resistencia civil. En protesta por las denuncias de fraude en los comicios de Jalisco, Guanajuato, San Luis Potosí y Zacatecas, en diciembre del mismo año realizó un ayuno de una semana en la columna de 63

Político priísta originario del estado de Sinaloa, del que fue gobernador en el periodo 1987-1992. Ha sido titular de diversas secretarías del gabinete federal, entre ellas las de Energía, Minas e Industria Paraestatal; Agricultura; y Gobernación. En el año 2000 se pasó a la historia como el primer candidato del PRI a la Presidencia de la República en perder una elección. 64 Político originario de Torreón Coah. Fue dos veces diputado federal por el PAN, candidato a senador y a gobernador de Coahuila; secretario general del Gobierno del Distrito Federal al inicio de la administración de Cuauhtémoc Cárdenas (PRD) y diputado federal por el Partido Convergencia (2003-2006). 65 Oriundo de Tepic, Nayarit, fue diputado federal por el PAN (1964-1967); candidato de ese partido a gobernador de Baja California en 1959 y 1971; y precandidato a Presidente de la República en 1976 y 1987. Murió el 07 de febrero de 1996.

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la Independencia de la ciudad de México. Cuauhtémoc Cárdenas acudió a visitarlo y acordó con él algunas acciones a favor de la democracia. Tras la ratificación de los resultados oficiales a favor de Salinas de Gortari, Clouthier integró un “gabinete alternativo” para vigilar las acciones gubernamentales y prosiguió su lucha política, ahora en pos de una reforma electoral "verdaderamente democratizadora". Manuel J. Clouthier visitó Huajuapan de León en tres ocasiones: en noviembre de 1987 como precandidato del PAN a la Presidencia de la República; en marzo de 1988 durante su campaña presidencial; y los días 27 y 28 de agosto de 1989, para apoyar a Luis Guevara en su huelga de hambre. El 1 de octubre de ese año, poco más de un mes después de su última visita a Huajuapan, Clouthier murió en un accidente automovilístico en el kilómetro 158 de la carretera MéxicoNogales, en el municipio de Culiacán.

Quiero ser presidente para desacralizar la figura presidencial: Maquío

Maquío Clouthier con Luis Guevara, en su última visita a Huajuapan (Cortesía de Olga Aída Ballesteros).

Sentado frente a un modesto escritorio en las oficinas del PAN, Manuel Clouthier parece otro cuando habla con el reportero. Sereno, con voz suave y casi paternal, el popular Maquío responde las preguntas sin prisa, meditando las respuestas. Sin embargo, en todo momento está latente el 165


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temperamento fuerte, combativo, que proyectó durante su campaña por la gubernatura de Sinaloa. Su tono amable y mesurado no resta firmeza a su expresión cuando afirma: “Quiero ser Presidente de la República para desacralizar la figura presidencial, bajarla del nicho en que se ha encarnado y subir allí a quien debe estar: el pueblo, que es en quien reside la soberanía”. Para el empresario sinaloense de 55 años de edad, el problema fundamental de México radica en la carencia de democracia en lo político, en lo económico y en lo cultural, en la falta de libertad en todos los órdenes: “Hay que balancear el poder, ir hacia formas más democráticas en la política, en la economía y en todo; que unos a otros nos cuidemos, que se acaben el absolutismo del poder y la figura presidencial como Dios o rey omnipotente”. Dirigente empresarial durante muchos años, Clouthier no considera que su condición de empresario sea un factor adverso para su carrera política: “Nunca he negado mi origen empresarial, porque empresario es también el taquero de la esquina que hizo una empresa, y empresarios somos la mayoría de los mexicanos, no sólo Don Gastón Billetes. El haber creado empresas y generado riqueza me beneficia en lugar de perjudicarme, y eso lo constaté cuando fui candidato a la gubernatura de Sinaloa. El empresario es bien visto por el pueblo porque genera riqueza y empleos. A quienes la gente no ve bien es a los que se alían con el gobierno que los oprime, pero no porque sean empresarios sino porque se rehúsan a tomar su responsabilidad como líderes de la comunidad. Pasa lo mismo con un periodista que se rehúse a asumir su responsabilidad histórica como líder formador de opinión y la distorsione en lugar de transmitir la verdad”. Aunque asegura que respeta a sus contrincantes Jesús González Schmal y Salvador Rosas Magallón, así como a los candidatos de otros partidos, el ex presidente de la COPARMEX y ex jugador de futbol americano está seguro de ganar la votación en la próxima Convención Nacional del PAN, y también de llegar a la Presidencia de la República: “Como empresario yo siempre estudio las cosas. Si estoy 166


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aquí es porque tengo la certeza de que voy a ganar la candidatura del PAN y luego la Presidencia de la República. Creo que las posibilidades son reales porque el pueblo está cansado, ha sido vejado y empobrecido, ya no hay credibilidad en el gobierno, ya no hay liderazgos; además, porque toda la América Latina ha cambiado hacia formas más democráticas de gobierno, y en México este proceso de cambio ya ha iniciado”. Vestido de manera sencilla, con pantalón azul marino y camisa blanca de manga corta, Maquío habla sin prisa, se reclina en el sillón y por momentos clava la vista en algún lugar del techo de la oficina. Aunque se muestra serio durante la mayor parte de la entrevista, su sentido del humor se manifiesta cuando, al preguntarle por el costo de su precampaña, responde que es menor que lo que gasta Gobernación en espiarlo; o cuando advierte: “Si el PRI pusiera como candidato al Santo Niño de Atocha, también lo echaría a perder el sistema”. Y también se hace presente cuando expresa: “El candidato del PRI ahora trata de robarse mis propuestas de campaña, decir lo que yo ya he dicho, nomás que a él no le creen porque es parte de un sistema que hace 6 años habló de renovación moral y se robó las elecciones, habló de un 70 por ciento de inflación y ésta terminó en 140. Para que veas como están las cosas, te voy a platicar algo: en todos los lugares le pido a la gente que levanten la mano a quienes les esté yendo bien en este país y nadie la levanta. Sólo una vez una persona la levantó, y su amigo de al lado le dijo „Pues has de ser narco‟. Pero cuando les pido que levanten la mano los que crean en el gobierno, ni los narcos la levantan, porque ni la mujer de Jorge de la Vega Domínguez66 cree en el PRI”. Confeso del único “pecado” que no se perdona en este país, el de disentir, Clouthier cita a Octavio Paz: “La única forma digna de vivir en México es vivir en la disidencia”. 66

En esas fechas Jorge de la Vega Domínguez era Presidente del Comité Ejecutivo Nacional del Partido Revolucionario Institucional (PRI).

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Asegura que un buen gobierno no es el que hace muchas cosas, sino el que deja que el pueblo las haga: “Es como un buen director de orquesta que no se pone a tocar el tololoche y los demás instrumentos, sino que dirige a sus músicos para que éstos los toquen bien. En México, el fracaso radica en que el gobierno se puso a tocar todos los pitos y le está saliendo una melodía muy fea”. Pese a que el PAN ha denunciado fraudes electorales en Chihuahua, Sinaloa, Coahuila y otros estados, a Maquío no le quita el sueño esta posibilidad: “Hay que hacer muchas cosas antes para no tener que hacerlas después; una de ellas es buscar que los mejores hombres vayan a la contienda del 88 para golpear al sistema todos al mismo tiempo. Yo he convencido a los líderes que pusieron a temblar al sistema en el pasado cercano para que me apoyen, pero no sólo de palabra, y ya tengo su promesa de que entrarán a pelear las candidaturas de los estados. Los liderazgos auténticos generan un despertar cívico-político y el pueblo se tendrá que volcar, porque además es la única salida que tiene”. Para Maquío, uno de los pasos que se dan en todo cambio social es el surgimiento de los liderazgos regionales “que se encargan de traducir a un idioma más entendible lo que dicen los intelectuales”, tal como lo hicieron Madero y Zapata al plasmar en el “Sufragio Efectivo. No reelección” o en el “Tierra y Libertad” lo que decían los intelectuales de su época: “Los Zapata y los Villa de esta época ya están surgiendo, son Pancho Barrio, Rodolfo Elizondo, (Guillermo) Pizzuto, (Salvador) Rosas Magallón, Fernando Canales, que son los que pusieron a temblar al sistema”. – Y si a pesar de todo hay fraude electoral, ¿qué harán el PAN y Maquío? Clouthier sonríe ligeramente, medita un momento y luego responde: “La pregunta que me acabas de hacer es la más socorrida de los amigos de la prensa; eso quiere decir que también ustedes, los formadores de opinión en los estados, saben que hay fraudes electorales en México, ya no es sólo el PAN el que lo sabe. Entonces valdría la pena preguntar a la prensa si cree que el problema de los fraudes electorales sólo 168


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compete al PAN y a los líderes o candidatos. Es obvio que todos ustedes, los periodistas, que también son mexicanos, también deben combatir esta situación. Yo pretendo despertar la conciencia social para que también la prensa, al igual que todos los sectores de la sociedad, se oponga a que esto acontezca. Lo que va a pasar en México en el 88 ya rebasa el ámbito de los partidos políticos, pues va a ser la lucha de un pueblo que busca y se da la libertad y la democracia que anhela”. Lapidario, Manuel Clouthier señala que el sistema político mexicano es total y absolutamente decadente: “Por eso el presidente de la República, quien a mí en lo particular me dijo que no se valía que el sector empresarial actuara en política, ahora busca afanosamente afiliar a los empresarios a su partido. De ese tamaño es el miedo que tienen, y la contradicción entre lo que dicen y lo que hacen, y eso es también un signo inequívoco de decadencia política”. Hasta el final de la charla, salpicada de anécdotas y expresiones populares, Maquío reitera su convicción de que habrá de ser el candidato del PAN y el próximo presidente de México: “Yo tengo mucha familia y muchos negocios como para andar perdiendo el tiempo jugando a las comiditas y a las elecciones; y también tengo muchas medallas como para andar buscando colgarme una más. Estoy convencido de que voy a ganar; si no, no estaría aquí”. 16 de noviembre de 1987.

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Heberto Castillo Martínez (1928-1997) nació en Ixhuatlán de Madero, en la Huasteca de Veracruz. Fue uno de los líderes históricos más respetados de la izquierda mexicana. Su activismo político le llevó a la cárcel en dos ocasiones: la primera por apoyar el movimiento ferrocarrilero en 1959-1960 y la segunda por su participación como integrante de la Coalición de Maestros Pro-Libertades Democráticas, en el movimiento estudiantil de 1968. También apoyó las luchas de los maestros normalistas en 1958 y de los médicos en 1965. En 1961 participó con Lázaro Cárdenas en la formación del Movimiento de Liberación Nacional y en 1974 fundó el Partido Mexicano de los Trabajadores (PMT), por el cual fue diputado federal en la LIII legislatura (1985–1988). Fue uno de los principales impulsores de la unidad de la izquierda que se concretó en 1987 con la fusión de varios partidos –entre ellos el Mexicano de los Trabajadores (PMT), el Revolucionario de los Trabajadores (PRT) y el Socialista Unificado de México (PSUM)– para crear el Partido Mexicano Socialista (PMS). Este partido lo postuló como candidato a la Presidencia de la República en 1988; sin embargo, el 3 de junio, a un mes de la jornada electoral, Castillo declinó a favor del candidato del Frente Democrático Nacional (FDN), Cuauhtémoc Cárdenas. Al concluir el proceso electoral con la ratificación del cuestionado triunfo de Carlos Salinas de Gortari, Heberto Castillo participó en la fundación del Partido de la Revolución Democrática (PRD). Murió en 1997, siendo senador por el estado de Veracruz. Sus restos descansan en la Rotonda de los Hombres Ilustres. Heberto Castillo visitó Huajuapan de León en febrero de 1988, aún como candidato del PMS a la Presidencia de la República.

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El PRI no quiere ver las propuestas del PMS

Heberto Castillo durante su visita a la Normal Huajuapan (Cortesía de Neftalí González Huerta)

El candidato del Partido Mexicano Socialista (PMS) a la Presidencia de la República, Heberto Castillo, es contundente al afirmar: “Cuando Carlos Salinas de Gortari dice que la oposición no tiene tesis y sólo se conforma con criticar, es porque no quiere ver nuestras propuestas concretas”. Entrevistado en el trayecto de la Normal Experimental Huajuapan al centro de la ciudad, donde se realizaría un mitin de apoyo a su candidatura, Heberto puntualiza: “Contra la tesis del Fondo Monetario Internacional de reprimir los salarios y liberar los precios, nosotros pensamos que los que hay que liberar son los salarios y reprimir los precios; contra quienes insisten en que la prioridad del país debe ser el pago de la deuda externa, nosotros sostenemos que se deben suspender los pagos y destinar esos recursos para impulsar la agricultura, la pequeña y mediana industria; es decir, debemos atender más al pueblo y menos al extranjero”. Con paso ágil y una vitalidad que no parece corresponder a sus casi 60 años de edad, el candidato explica que la propuesta económica del PMS fue presentada el 15 de diciembre por la mañana, antes de la firma del Pacto de 171


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Solidaridad Económica (PASE) y consistía en aumentar los salarios al nivel que tenían el primero de enero de 1987, e inmediatamente después congelar los precios y salarios para bajar la inflación a cero, y reducir las tasas de interés para apoyar a los agricultores y medianos empresarios. “Al mismo tiempo, se implementaría una reforma fiscal para gravar las utilidades de los grandes empresarios, no los ingresos, y desgravar los ingresos de los trabajadores”, agrega. Heberto habla con tono pausado y sereno, aunque por momentos tiene que elevar la voz para imponerse a la música de la banda que nos antecede: “Nuestra propuesta social contempla pugnar por reformar la Constitución para consagrar los derechos del niño, a efecto de que la sociedad sea responsable de él; consagrar los derechos de la mujer; entregar las tierras que están en litigio para acabar con la especulación de más de 60 años; limitar la propiedad urbana, porque nadie tiene derecho a poseer latifundios urbanos mientras la gente no tenga donde vivir”. Por momentos, el ex preso político, fundador del Partido Mexicano de los Trabajadores (PMT) e impulsor de la unidad de la izquierda mexicana, se interrumpe para saludar a distancia a quienes aplauden desde las aceras, pero de inmediato retoma el hilo de la plática. Asegura que el modelo que Salinas de Gortari propone se basa en que el país siga como va, pero con métodos modernos. “Se están vendiendo empresas a particulares y extranjeros; se está negociando con Reagan; se está vendiendo al país… pero eso sí, de una manera moderna”, ironiza. La pregunta es inevitable: – ¿Insistirá en la exigencia de un debate público con Salinas? Y la respuesta es inmediata: – Por mi parte no; él ya dijo que no quiere, y en mi tierra dicen que “gallo que da la espalda, pierde”. Al aproximarnos a la esquina de la Carretera Internacional con la calle Trujano, las muestras de simpatía se multiplican. Otra pregunta inevitable, estando en la Mixteca de Cárdenas, 172


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tiene que ver con la posibilidad de una declinación a favor del candidato del Frente Democrático Nacional: – ¿Están canceladas definitivamente las posibilidades de una candidatura única y una coalición con el FDN? – El PMS es una organización que no nació para una elección, sino para tomar el poder; gane o pierda, tiene una perspectiva después del seis de julio. En cambio, la Corriente Democrática (escindida del PRI) y el FDN tienen como perspectiva para el 7 de julio su desintegración. Caminamos ya por la calle Trujano. La distancia se acorta y cada vez estamos más cerca del lugar del mitin. – Antes de ser candidato usted hablaba de que la izquierda debía dar la pelea por conquistar el poder, no por un simple avance democrático. A varios meses de distancia y después de haber recorrido gran parte de la república ¿sigue pensando lo mismo o el enfrentarse con la realidad le ha hecho cambiar de opinión? – Mi confianza en el triunfo ha crecido por la respuesta popular que he palpado en todo el país. Hay un descontento generalizado, un descrédito del partido en el poder, pero a la vez noto un despertar cívico y una mayor participación en la lucha electoral. Creo que se va a modificar mucho la cifra de abstencionismo porque ahora hay interés. Estoy convencido de que hay un cambio sustancial con respecto a 1985. Estamos casi en la esquina con la calle Colón, el lugar del mitin. Algunas mujeres arrojan confeti al candidato. El maestro de ceremonias anuncia su arribo y la gente aplaude, mientras forma una valla hasta la escalerilla de madera. Heberto da una palmada en la espalda al reportero, mientras le tiende la mano, dando por concluida la charla. Luego, trepa al entarimado con agilidad y alza los brazos para recibir los aplausos. 16 de febrero de 1988.

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Si se viola el voto, el pueblo debe tomar el poder, advierte Heberto.

Heberto Castillo en el mitin de apoyo a su candidatura (Cortesía de Neftalí González Huerta).

“Si el gobierno no respeta la voluntad popular expresada en las urnas y viola el voto, no nos detendremos ante nada y llamaremos al pueblo a tomar el poder en sus manos, cualquiera que sea la forma de hacerlo”, advirtió el candidato del PMS a la Presidencia de la República, Heberto Castillo, al presidir un mitin de apoyo a su candidatura en esta ciudad. Ante más de 300 simpatizantes reunidos en la equina de las calles Colón y Trujano, dijo que su partido lucha por una sociedad plural en la que prevalezca el respeto a los derechos de todos los mexicanos, y rechaza cualquier tipo de dictadura, sea del signo que fuere: “Estamos a favor de la pluralidad de ideas, no de la imposición de un criterio único; de ninguna manera deben existir un sólo partido, una sola radiodifusora, un solo canal de televisión o un solo periódico”. Flanqueado por banderas tricolores y rojiamarillas, el candidato pemesista aseguró que, si llega al poder, el próximo primero de diciembre será “un día de fiesta nacional agraria, porque una de las primeras acciones que realizaría como presidente de la República sería repartir los más de diez millones de hectáreas que están pendientes de ejecución, a pesar de que las resoluciones presidenciales ya han sido estudiadas y vueltas a estudiar”. 174


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Otra de las acciones sería la suspensión del pago de la deuda externa, a pesar de que el presidente Miguel de la Madrid ha criticado severamente esta propuesta. “Se le olvida que Juárez suspendió el pago de la deuda porque era un presidente patriota”, expresó, provocando que la gente coreara reiteradamente ¡Si Juárez viviera/ con nosotros estuviera! Acompañado por su esposa Teresa Juárez, por el dirigente estatal del PMS Eloí Vázquez y por el diputado local Antonio Gómez, el candidato aclaró que su partido no lucha por la desaparición de la propiedad privada ni de los medios e instrumentos de producción, sino por la limitación de éstos “a dimensiones razonables”. Al negar que el PMS luche contra la Iglesia y la religión católica, se autodefinió como un “cristiano progresista” y se comprometió a respetar las creencias religiosas del pueblo mexicano. En otra parte de su intervención convocó al pueblo a establecer “un pacto contra el pacto (de Solidaridad Económica)”, porque éste no ha beneficiado ni a los trabajadores, ni a los pequeños y medianos empresarios, ni a los comerciantes: “Es un pacto, sí, pero con el gran capital extranjero”, subrayó. En lo que pareció una alusión al Frente Democrático Nacional, Heberto Castillo aseguró que el PMS no ofrece al pueblo de México “una aventura electoral sino una alternativa de lucha permanente”. Por una educación socialista Previo al mitin, el candidato del PMS participó en una conferencia-debate en la Normal Experimental Huajuapan. Durante casi cien minutos, dialogó sobre diversos temas con estudiantes, profesores y ciudadanos. Al referirse al tema de la educación, afirmó que nuestro país necesita una educación socialista “que promueva el respeto a la propiedad privada de los medios e instrumentos de producción, y que sea natural en el aspecto religioso para 175


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garantizar el respeto a las diferentes creencias de los mexicanos”. Aseguró que durante su vida ha aprendido que la alternativa socialista “es la misma de quienes lucharon por un reino de justicia e igualdad” y que el socialismo que su partido pregona “tiene mucho que ver con el verdadero cristianismo”. Agregó que tiene la convicción de que es posible avanzar hacia el socialismo a través de la vía electoral, pero advirtió: “Si hay fraude, va a haber bronca”. Heberto Castillo llegó a esta ciudad en su autobús de campaña El socialista, después de encabezar un mitin en Santiago Teotongo –considerado el principal bastión del PMS en la Mixteca– y de ofrecer una conferencia a las alumnas de la Normal Vanguardia de Tamazulapan. Al término del mitin efectuado en el centro de la ciudad, presidió una cena con periodistas y dirigentes locales del PMS. Mañana retornará al Distrito Federal, al concluir la tercera etapa de su campaña por la Presidencia de la República. 16 de febrero de 1988

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Luis Donaldo Colosio Murrieta (1950–1994), nació en Magdalena de Kino, Sonora. Fue miembro destacado del Partido Revolucionario Institucional (PRI), del que fue oficial mayor en 1987 y presidente del Comité Ejecutivo Nacional (1991-1992). Durante su gestión, el PRI perdió la gubernatura de Baja California ante Ernesto Rufo (PAN), quien se convirtió en el primer gobernador de oposición en la historia del país. Colosio fue coordinador de la campaña de Carlos Salinas de Gortari a la Presidencia de la República (1987-1988). En la administración pública ocupó diversos cargos, entre ellos el de subdirector de Política Económica (1980) y director general de Programación y Presupuesto Regional (1982-1985), ambos en la Secretaría de Programación y Presupuesto. En 1992 fue nombrado titular de la Secretaría de Desarrollo Urbano y Ecología (SEDUE), que posteriormente se transformó en la Secretaría de Desarrollo Social (SEDESOL). Fue diputado federal en la LIII legislatura (1985–1988) y posteriormente senador por el estado de Sonora. En 1993 fue postulado candidato del PRI a la Presidencia de la República para las elecciones del 21 de agosto de 1994. Cinco meses antes de los comicios, el 23 de marzo, fue asesinado por Mario Aburto Martínez al término de un mitin de campaña efectuado en la colonia popular Lomas Taurinas de Tijuana, Baja California. Los resultados de las investigaciones del crimen no fueron satisfactorios para la opinión pública, ya que se pasó de la hipótesis del asesino solitario a la de un complot, sin haberse llegado a demostrar plenamente ninguna de ellas. En agosto de 1989, Colosio visitó Huajuapan de León, concluyendo una gira de tres días por diversos municipios de Oaxaca, entre ellos la capital del estado, Zimatlán de Alvarez, Ejutla de Crespo y Tuxtepec. En esta ciudad presidió un mitin de apoyo a las candidaturas de Galdino Martínez González a la Presidencia Municipal y Alejandro León Montesinos a la diputación local por el XV distrito del estado, y retornó de inmediato a la Ciudad de México.

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El PRI se moderniza para estar a la altura de los tiempos: Colosio. El presidente del Comité Ejecutivo Nacional del PRI, Luis Donaldo Colosio, aseguró que su partido ha iniciado un intenso proceso de renovación, transformación y modernización, para estar a la altura de los tiempos y las exigencias actuales. En el corazón político de la Mixteca oaxaqueña reconoció que en la jornada electoral del próximo domingo se pondrán a prueba la fuerza organizativa y de movilización de su partido, pero confió en que éste obtendrá el triunfo porque ha participado con respeto a sus adversarios y a los ciudadanos, y con ánimo de ganar de manera legítima e inobjetable. Confió en que, al someter su trabajo político al juicio de la ciudadanía, el PRI refrendará sus triunfos en todo el estado, porque en ésta su nueva etapa ha trabajado conscientemente, con organización y previsión. “Nuestro partido se ha preparado para contender y contiende para ganar”, aseguró. Ante un numeroso grupo de simpatizantes que soportó la espera de casi tres horas, y entre las “dianas” de las bandas de música que amenizaron el evento, Colosio afirmó que en la Mixteca hay tradición, cultura e historia, pero sobre todo un esfuerzo común de sus hombres y mujeres, quienes ven de frente y con la cara en alto el futuro de esta región y del estado de Oaxaca. En presencia del gobernador Heladio Ramírez López y de los candidatos a la Presidencia Municipal Galdino Martínez González, y a la diputación local Alejandro León Montesinos, el dirigente manifestó que durante su estancia en la entidad ha constatado que los oaxaqueños coinciden con el proyecto nacional de desarrollo político y social que impulsa el PRI. Entre gritos de Co-lo-sio/ Co-lo-sio, He-la-dio/ He-la-dio y Aquí/ allá/ Galdino ganará, el líder nacional del PRI y el gobernador del estado firmaron como testigos de honor el pacto de unidad de los priístas de Huajuapan, signado por Felipe Reyes Guerrero en representación de los ex dirigentes 178


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municipales del partido y por David Morán Maceda por los ex presidentes municipales priístas. Luis Donaldo Colosio expresó el apoyo del priísmo nacional a los candidatos Galdino Martínez y Alejandro León, y exhortó a los simpatizantes de su partido a dar “el último empujón” para llevarlos al triunfo en la jornada del 6 de agosto: “Con respeto a los adversarios y a la ciudadanía, con esfuerzo, tesón y perseverancia, vamos a ganar el destino y el futuro para nosotros, para nuestros hijos y para los hijos de nuestros hijos”. En su intervención, el candidato a la Presidencia Municipal, Galdino Martínez, delineó las prioridades de su programa de gobierno para Huajuapan: la redefinición del municipio en la economía; el control de precios; y la descentralización de la administración pública municipal. Asimismo, se comprometió a entregar a su partido un triunfo “claro y contundente” y a servir a todos los ciudadanos desde la Presidencia Municipal, sin distinciones ideológicas o partidista, a partir del 15 de septiembre próximo. Al término del acto, Colosio regresó a la Ciudad de México, al concluir su gira de tres días por las regiones de los Valles Centrales, la Cuenca del Papaloapan y la Mixteca 2 de agosto de 1989.

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Cuauhtémoc Cárdenas nació en la Ciudad de México. Militó 25 años en el PRI; fue senador en 1976; subsecretario forestal de la Secretaría de Agricultura y Recursos Hidráulicos (1976-1980) y gobernador de Michoacán (1980-1986). En 1987 encabezó la Corriente Democrática del PRI, al lado de Ifigenia Martínez y Porfirio Muñoz Ledo, entre otros, y finalmente abandonó las filas del partido. En octubre de ese año aceptó la candidatura del Partido Auténtico de la Revolución Mexicana (PARM) a la Presidencia de la República, a la cual se sumaron los partidos Popular Socialista (PPS) y del Frente Cardenista de Reconstrucción Nacional (PFCRN), para formar el Frente Democrático Nacional (FDN). Un mes antes de la elección, el candidato del PMS, Heberto Castillo, declinó a su favor. Cárdenas fue derrotado por el candidato del PRI, Carlos Salinas de Gortari, en una de las elecciones más polémicas de la historia reciente de México. Después de una serie de protestas por el supuesto fraude electoral, Cárdenas recorrió el país para promover la creación del PRD, del cual fue presidente fundador (1989-1993) y es considerado “líder moral”. En 1994 y en 2000 contendió nuevamente como candidato a la Presidencia de la República, pero fue derrotado por Ernesto Zedillo (PRI) y Vicente Fox (PAN-PVEM), respectivamente. En 1997 se convirtió en el primer Jefe de Gobierno del Distrito Federal electo por votación directa. Desde 1987 ha visitado en diversas ocasiones la Mixteca de Cárdenas llamada así en memoria de su padre, el general Lázaro Cárdenas –conocido cariñosamente como “Tata Lázaro” –, quien como vocal ejecutivo de la Comisión del Río Balsas realizó numerosas obras, principalmente de infraestructura hidráulica, y convivió durante muchos años con los habitantes de las comunidades marginadas de la zona. De sus visitas a esta región incluyo dos: la del 25 de agosto de

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1989, cuando manifestó su apoyo al ex candidato del PAN a presidente municipal, Luis Guevara, quien realizaba una huelga de hambre, y la del 4 de junio de 1994, cuando recorrió municipios gobernados por el PRD. Esta última estaba programada inicialmente para el 24 de marzo, pero fue diferida debido al asesinato del candidato del PRI, Luis Donaldo Colosio, ocurrido un día antes.

Defender los votos del PAN en Huajuapan es defender nuestros propios votos: Cárdenas.

Cuauhtémoc Cárdenas entrevistado por el autor en una de sus visitas a la región Mixteca.

El dirigente nacional del PRD, Cuauhtémoc Cárdenas, convocó a los integrantes de su partido a defender el voto emitido por los ciudadanos de Huajuapan a favor del PAN, “porque la esencia de la democracia se basa en el respeto al sufragio, gane quien gane y pierda quien pierda”. A sólo unos metros del campamento donde Luis Guevara mantiene una huelga de hambre en demanda del reconocimiento de su triunfo electoral, Cárdenas arrancó la ovación de los casi dos mil perredistas reunidos en la esquina de las calles Colón y Trujano al reiterar: “Defender en Huajuapan el voto de Acción Nacional es defender nuestros propios votos y el derecho del pueblo a elegir a sus gobernantes”. Al precisar que el PRD no busca sustituir al partido de estado para mantener un régimen corrupto y patrimonialista, 181


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convocó a sus seguidores a solidarizarse con todas las luchas que se desarrollen en la entidad en defensa del voto ciudadano, sin importar a quién favorezcan. En ese sentido, los exhortó a expresar activamente su solidaridad a los pueblos que luchan por la defensa de sus derechos, “independientemente de los partidos que hayan postulado a los candidatos a quienes la conciencia popular reconoce como ganadores”. Afirmó que el proceso electoral del 6 de agosto estuvo plagado de irregularidades y que el gobierno está negando al pueblo de Oaxaca el derecho de elegir a sus autoridades, pues intenta desconocer los triunfos auténticos de la oposición. Advirtió que de poco servirá que haya mejores leyes si la organización ciudadana no logra hacer respetar la voluntad del pueblo: “Donde el gobierno ha reconocido los triunfos del PRD ha sido porque nos hemos organizado para impedir el fraude, desde que el gobierno lo estaba maquinado con la manipulación del padrón electoral”. Cárdenas dijo que la enseñanza del reciente proceso electoral es que el PRD debe fortalecer su campaña de afiliación para ampliar sus bases y mejorar su organización en todo el estado, preparándose desde ahora para las próximas elecciones. Anunció que el objetivo de su partido en las elecciones federales de 19991 será obtener la mayoría en el congreso. Advirtió que esto sólo será posible si tiene presencia y organización en todas las secciones electorales del país, y si logra incorporar a su lucha a todos los sectores, especialmente al magisterio oaxaqueño “que ha librado una lucha importante para el magisterio nacional”. Cuauhtémoc Cárdenas expresó el reconocimiento de la dirigencia nacional a los perredistas mixtecos, por lograr el triunfo en 11 municipios de la región. Breve saludo a Guevara. Al término del mitin, Cárdenas abordó una camioneta tipo 182


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suburban, pero al pasar frente al Palacio Municipal ordenó que el vehículo se detuviera y descendió para dirigirse al campamento donde el ex candidato del PAN a la presidencia municipal, Luis Guevara, era saludado por decenas de personas, con motivo de su cumpleaños. Ante el asombro de los presentes, el también ex candidato presidencial del Frente Democrático Nacional estrechó la mano del huelguista y le dijo: “Voy con el tiempo justo, pero quise venir a saludarlo porque estoy enterado de su lucha y quiero manifestarle mi solidaridad y la de mis compañeros. Le deseo éxito”. Visiblemente emocionado, el panista respondió: “Muchas gracias, ingeniero. Yo también le deseo éxito porque sé que, aunque estemos en diferentes trincheras, los dos estamos luchando por la democracia”. El breve saludo fue enmarcado por el aplauso de panistas y perredistas, quienes corearon al unísono Cár–de–nas/ Cár– de–nas/ Gue–va–ra/ Gue–va–ra. Cuauhtémoc Cárdenas abordó nuevamente el vehículo para dirigirse a Silacayoapan, donde encabezó un acto de apoyo a las autoridades municipales electas de esta región, emanadas del PRD. 25 de agosto de 1989.

El hijo del “Tata” en la Mixteca de Cárdenas El candidato del PRD a la Presidencia de la República, Cuauhtémoc Cárdenas, advirtió que su partido no permitirá que el 21 de agosto se caiga el sistema de cómputo, como ocurrió en las elecciones de 1988: “Lo que caerá es el sistema político, que se encuentra en proceso de descomposición”, vaticinó. Al iniciar una gira de tres días por los estados de Oaxaca y Puebla, aseguró que el PRD llega a la contienda de este año con una mejor estructura organizativa que la del Frente Democrático Nacional en 1988, lo que dificulta la posibilidad de un fraude electoral; sin embargo, si el PRI se 183


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empeñara en cometerlo, aceleraría su propia caída. En ese sentido, anunció que buscará una alianza con todas las fuerzas políticas que quieran sumarse a la defensa del voto. Cárdenas concluyó en Huajuapan la gira por Acatlán de Osorio, en el estado de Puebla; Mariscala de Juárez, San Nicolás Hidalgo, Santiago Tamazola, Santiago Yucuyachi, Silacayoapan y Santo Domingo Tonalá, en el de Oaxaca.

Cuauhtémoc Cárdenas con Héctor Sánchez en Huajuapan (Cortesía Correo Mixteco).

Durante su recorrido por esta región –donde el centro de la fe no son los templos sino las oficinas de correos y telégrafos que mantienen viva la esperanza de los que se quedan, concretada en los dólares que mandan los que se van– dijo que, de llegar a la Presidencia de la República, luchará por transformar las condiciones hostiles que enfrenta las comunidades de la zona. Para ello, promoverá las inversiones públicas y privadas en el campo, para impulsar una agricultura alternativa que permita aprovechar las tierras áridas que constituyen la geografía de la Mixteca. Asimismo, reactivará el Fideicomiso de la Palma (FIDEPAL) y pugnará por la generación de empleos productivos que permitan frenar gradualmente la incesante emigración que padecen los pueblos mixtecos. En Santo Domingo Tonalá, a sólo cien metros de la casa de descanso propiedad de su familia, Cárdenas fue recibido con tres bandas de música y cohetes. Ante mil 500 simpatizantes, criticó la corrupción y la falta de continuidad en los programas oficiales, lo que ha contribuido a mantener 184


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a los campesinos en la marginación y el abandono. Fiscalía plural para el caso Colosio. Por la tarde, el candidato llegó a Silacayoapan, donde los perredistas mantienen en su poder el Palacio Municipal desde hace un año y medio. Allí le dio la bienvenida Javier Vargas Vera, presidente del autodenominado “Cabildo Popular”. En San Nicolás Hidalgo fue recibido por las autoridades municipales de extracción perredista. Al término de la comida en esa localidad, ofreció una improvisada rueda de prensa a los representantes de los medios que cubren su campaña. A pregunta de los reporteros, se pronunció porque la investigación del asesinato de Luis Donaldo Colosio sea asignada a una fiscalía plural e independiente, para que no le ocurra lo que a la comisión pluripartidista que se desintegró por carecer de facultades ministeriales. Dijo que el caso Colosio “aún está muy oscuro” y que el informe del fiscal especial Miguel Montes García en nada contribuye a esclarecerlo. Demandó que las investigaciones lleguen a sus últimas consecuencias y que se rinda un informe satisfactorio, porque el pueblo de México tiene derecho a conocer la verdad. “Que no vaya a ocurrir como en el homicidio del cardenal Posadas, que se dio una explicación que no convenció a nadie”, advirtió. Sobre el conflicto armado en el estado de Chiapas dijo que lo deseable es que se logre la paz antes del 21 de agosto, pero aseguró que las elecciones se realizarán sin importar el estado de las negociaciones entre el gobierno y el Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN). Cuauhtémoc Cárdenas se trasladaría este sábado a la región de los Valles Centrales y el domingo estaría en el Istmo, concluyendo así su gira por la entidad. 4 de junio de 1994.

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Luis Héctor Alvarez Alvarez es un destacado político nacido en Ciudad Camargo, Chih., en 1919. Fue candidato del PAN a gobernador de Chihuahua en 1956 y a presidente de la República en 1958. En 1983 fue electo presidente municipal de la capital de su estado natal. En las postrimerías de su mandato realizó una huelga de hambre durante 41 días, en protesta por el “fraude electoral” en los comicios de 1986. Durante dos periodos consecutivos (1987-1990 y 1990-1993) ocupó la Presidencia Nacional del PAN. En su mandato el partido obtuvo las gubernaturas de Baja California, Chihuahua y Guanajuato, pero sufrió la escisión de cuadros importantes como Pablo Emilio Madero, Jesús González Schmal, José González Torres y Bernardo Bátiz, quienes lo acusaron de apartarse de los principios doctrinarios y entregar el partido a los neopanistas como Maquío Clouthier, Vicente Fox, Francisco Barrio y Ernesto Ruffo67. Al concluir su gestión al frente del partido fue senador (19942000) e integrante de la Comisión de Concordia y Pacificación en Chiapas (COCOPA). Durante la administración de Vicente Fox (2000-2006) fungió como Coordinador para el Diálogo para la Paz en Chiapas. Desde diciembre de 2006 es titular de la Comisión para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas. Luis H. Alvarez visitó Huajuapan el 3 de febrero de 1958, durante su campaña por la Presidencia de la República68. El 20 de agosto de 1989, siendo presidente del CEN del PAN, volvió a esta ciudad acompañado por el coordinador de los diputados federales panistas, Abel Vicencio Tovar69, para expresar su apoyo a Luis Guevara.

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Ernesto Ruffo Appel fue Presidente Municipal de Ensenada, Baja California (19861989). En 1989 se convirtió en el primer gobernador de extracción panista y el primero emanado de la oposición en la historia de nuestro país, al vencer a la priísta Margarita Ortega Villa, en Baja California. 68 Martínez, Luis de Guadalupe, La lucha electoral del PAN en Oaxaca, Tomo I, 2002. 69 Abel Vicencio Tovar fue Presidente y Secretario General del CEN del PAN y diputado federal en las legislaturas XLVI, XLIX, LI y LIV.

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No habrá reforma electoral si se consuma el fraude en Huajuapan: Luis H. Alvarez

El dirigente nacional del PAN, Luis H. Alvarez (der.) con Luis Guevara (izq.) en Huajuapan. Al centro, Olga Ballesteros de Guevara (Cortesía de Olga Aída Ballesteros).

El presidente del CEN del PAN, Luis H. Alvarez, anunció que la actitud de sus 101 diputados federales en el periodo extraordinario de sesiones en el que se discutirá la reforma electoral estará condicionada al reconocimiento del triunfo de ese partido en el municipio de Huajuapan de León. Entrevistado al término del mitin de apoyo a Luis Guevara, quien cumplió 13 días en huelga de hambre, el dirigente advirtió que el debate para la reforma electoral podría entorpecerse si el PRI se empeña en consumar un fraude electoral en este municipio: “El debate parlamentario será más fluido y democrático si no se atraviesa este atraco al pueblo. Va a ser muy difícil un debate amargado por un fraude, porque el gobierno deber saber que no abandonaremos al pueblo de Huajuapan”. Acompañado por el coordinador parlamentario del blanquiazul en la Cámara de Diputados, Abel Vicencio Tovar, el líder panista dijo que el pueblo de México no admite dilaciones en la implementación de las normas que permitan una real apertura hacia la democracia, ni está dispuesto a permitir que se siga violentando la voluntad popular, como lo pretende hacer el PRI en Huajuapan al 187


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negarse a reconocer el triunfo legítimo de Luis Guevara. Admitió que el reconocimiento de los triunfos en Baja California es un signo alentador para el pueblo; sin embargo, el sistema no debe pretender que con ello ha cubierto su cuota sexenal de apertura hacia la democracia: “Deben respetarse todos los triunfos legítimos, sin importar quién los haya obtenido, porque esa es la esencia de la democracia a la que aspira el pueblo desde hace muchos años”. Aunque dijo que la ratificación de Ernesto Ruffo como gobernador electo indica que “estamos en el umbral del cambio”, manifestó que son preocupantes los signos posteriores a las elecciones de Baja California, porque indican que las prácticas viciadas del PRI para burlar la voluntad popular no se han erradicado. “La actitud del PRI contradice en los hechos el ofrecimiento del presidente Salinas en el sentido de que se reconocerán los triunfos electorales a quien los obtenga legítimamente”, aseveró. Luis H. Alvarez anunció que el PAN convocará a sus comités de todo el país para realizar un movimiento nacional de apoyo a la ciudadanía de Huajuapan y a su candidato Luis Guevara, hasta lograr que la voluntad de los electores de este municipio sea respetada. A su vez, Abel Vicencio afirmó que la actitud zigzagueante del gobierno indica que no está dispuesto a un cambio radical, pues a sólo unos días del inicio del periodo extraordinario de sesiones para analizar la reforma electoral, permite que se cometan atracos tan vergonzosos como el que se pretende consumar en Huajuapan. “Es decepcionante que el gobierno no tenga los arrestos suficientes para evitar que los hampones electorales sean quienes tomen las decisiones y modifiquen la voluntad del pueblo”, enfatizó. Los dirigentes consideraron que la propuesta de Luis Donaldo Colosio para la reforma electoral es “insuficiente” y refleja la falta de sensibilidad del PRI ante el reclamo de cambios profundos en la vida política del país. “El PRI no tiene voluntad política, sino miedo político”, concluyeron. 20 de agosto de 1989

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Diego Fernández de Cevallos Ramos es un polémico abogado, catedrático y político nacido en 1941 en la Ciudad de México. Es miembro del PAN desde 1959. Ha sido consejero nacional e integrante del Comité Ejecutivo Nacional. Después de las elecciones de 1988, fue designado secretario de Política Interior en el gabinete alternativo creado por Manuel J. Clouthier. Fue coordinador de los grupos parlamentarios del PAN en la LV legislatura de la Cámara de Diputados (1991-1993) y en la LIX del Senado (2000-2006). En sus tiempos como coordinador de los diputados ejerció un fuerte liderazgo, por lo que se le bautizó como El Jefe Diego. En 1994 Fernández de Cevallos fue candidato a la Presidencia de la República, siendo derrotado por su homólogo del PRI, Ernesto Zedillo Ponce de León. Como director de una importante firma de abogados, ha obtenido sentencias favorables a sus clientes en algunos casos contra dependencias del gobierno, por lo que sus adversarios políticos lo han acusado de tráfico de influencias. El 15 de septiembre de 1989 asistió como representante del CEN del PAN a la toma de protesta del ayuntamiento de Huajuapan de León, encabezado por Luis Guevara.

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A cumplirle al pueblo, no sólo al PAN: Fernández de Cevallos. El representante del Comité Ejecutivo Nacional del PAN, Diego Fernández de Cevallos, manifestó que el nuevo ayuntamiento que preside Luis Guevara Camacho está obligado a cumplirle al pueblo de Huajuapan, no sólo al partido que lo postuló. Al término de la toma de protesta a los integrantes del nuevo Ayuntamiento, el representante panista aseguró que ese partido no concibe la actividad política como una lucha de facciones o de apetitos personales, por lo que, una vez superada la contienda electoral, “todos lo que aman a Huajuapan deben comprometerse en la realización de un trabajo diario, sereno y generoso a favor de este municipio, sin distinción de ideologías”. Al afirmar que las acciones facciosas no podrán generar condiciones favorables para el pueblo, aclaró que el de Luis Guevara no deberá ser un gobierno panista, sino de extracción panista, pues está obligado a gobernar para todos y a respetar los derechos de todos los ciudadanos: “Por ningún motivo debe caer en los vicios que en Acción Nacional hemos combatido desde hace 50 años; debe demostrar que se puede gobernar en bien de todos sin perder su ideología e identidad partidista”, advirtió. Agregó que “si como oposición hemos exigido al gobierno que cumpla la ley, como gobierno estamos obligados a hacer lo mismo y a dar ejemplo de que la tesis y planteamientos de Acción Nacional tienen vigencia no sólo como discurso político, sino como práctica diaria de gobierno para beneficio del pueblo”. El representante del CEN del PAN advirtió que los integrantes del Cabildo que encabeza Luis Guevara no serán “conserjes”, pero tampoco enemigos del gobernador; por el contrario, buscarán conjuntar los esfuerzos y las voluntades de los tres niveles de gobierno para impulsar acciones en beneficio de los ciudadanos de este municipio.

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Diego Fernández de Cevallos en la toma de protesta a los integrantes del Ayuntamiento de Huajuapan (Cortesía de Olga Aída Ballesteros).

Finalmente, dijo que Luis Guevara y los integrantes de su Ayuntamiento no pueden considerar que su triunfo electoral está concluido, pues ahora tiene el reto de iniciar un gobierno auténticamente democrático: “Sólo verán coronado su triunfo político personal si también el último día de su gestión tienen congregado un pueblo dispuesto a despedirlos con honores”. 15 de septiembre de 1989.

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Carlos Salinas de Gortari nació en la Ciudad de México en 1948. Fue el 70° Presidente de los Estados Unidos Mexicanos, del 1 de diciembre de 1988 al 30 de noviembre de 1994. Miembro del PRI desde los 18 años de edad, fue coordinador de la campaña presidencial de su antiguo profesor, Miguel de la Madrid, en 1981-1982; al término de ésta, fue designado director del Instituto de Estudios Políticos y Sociales de ese partido (IEPES). En la administración pública ocupó diversos cargos, entre ellos el de subdirector de Programación de Economía del Gobierno y asesor de Miguel de la Madrid, hasta llegar a secretario de Programación y Presupuesto. En 1988 ascendió a la Presidencia de la República en una de las elecciones más polémicas de la historia reciente de México, efectuada el 6 de julio. La noche de la elección, los datos que liberaba la Comisión Federal Electoral fueron interrumpidos cuando favorecían al candidato del Frente Democrático Nacional, Cuauhtémoc Cárdenas; cuando se reanudó el conteo, las cifras eran favorables a Salinas; este episodio fue bautizado como “la caída del sistema”. Durante su mandato, Carlos Salinas impulsó importantes cambios económicos, sociales y políticos en el país, entre ellos la firma del Tratado de Libre Comercio de América del Norte; la privatización de empresas estatales, incluida la banca; la creación del Programa Nacional de Solidariad (PRONASOL) para combatir la pobreza; y las reformas a los artículos 27 y 130 de la Constitución, que posibilitaron respectivamente la desincorporación del ejido y el restablecimiento de las relaciones Iglesia-Estado y diplomáticas con El Vaticano. También reconoció los primeros triunfos electorales importantes de la oposición. Al final de su mandato enfrentó situaciones inéditas en la historia del país, como la insurrección armada del Ejército

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Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) en Chiapas, los asesinatos del cardenal Juan Jesús Posadas Ocampo, del candidato del PRI a la Presidencia de la República, Luis Donaldo Colosio, y del diputado priísta y ex cuñado suyo José Francisco Ruiz Massieu, así como una de las peores crisis financieras, que estalló en los primeros días del mandato de su sucesor, Ernesto Zedillo. Casi tres meses después del término de su gestión, su hermano Raúl fue detenido acusado de diversos delitos, entre ellos la autoría intelectual del asesinato de Ruiz Massieu, cargo del que fue exonerado 10 años después. Carlos Salinas realizó un ayuno durante un día y después abandonó el país para radicar en Dublín, Irlanda. En 1996 y 1997 fue citado a declarar en la Embajada de México en ese país, con motivo de las investigaciones judiciales del asesinato de Colosio. Como presidente de la República, Carlos Salinas estuvo en Huajuapan de León los días 21 y 22 de febrero de 1992, en lo que fue una gira histórica, por dos motivos: 1) Ha sido la única visita de dos jefes de estado, pues en su segundo día de actividades estuvo acompañado por el presidente de Costa Rica, Rafael Angel Calderón Fournier; y 2) Fue la primera visita oficial de un presidente de la República en más de 23 años, desde el 26 de noviembre de 1968, cuando Gustavo Díaz Ordaz colocó la primera piedra de la Preparatoria número 3 de la Universidad Autónoma Benito Juárez de Oaxaca (UABJO), pues aunque José López Portillo visitó Huajuapan el 25 de octubre de 1980, sólo lo hizo para supervisar los daños provocados por el sismo del día anterior. La noche del 21 de febrero, el presidente Salinas inauguró los mercados Cuauhtémoc y Porfirio Díaz, así como las obras de remodelación del parque Independencia, y participó en una verbena popular en la que actuó la Orquesta Primavera. Al día siguiente, después de recibir al presidente de Costa Rica, inauguró la Universidad Tecnológica de la Mixteca; presidió una reunión de evaluación del PRONASOL con los 570 presidentes municipales del estado; y puso en marcha el sistema hidráulico Yosocuta-Huajuapan (acueducto, planta de tratamiento y planta potabilizadora).

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Dos presidentes en Huajuapan: Carlos Salinas y Rafael Calderón El presidente Carlos Salinas de Gortari aseguró que Oaxaca no caerá en el olvido, porque está en el mapa del interés nacional e internacional y seguirá contando con el apoyo del gobierno de la República. Al presidir la reunión de evaluación de los Fondos Municipales de Solidaridad con los 570 presidentes municipales de la entidad, el mandatario anunció que en el presente año la federación destinará a Oaxaca recursos federales que equivalen a casi seis veces más de la cantidad que el estado recibía al inicio de su gobierno.

De izq. a der. Manuel Bartlett, Fidel Arámburo, Rafael Calderón, Carlos Salinas, Heladio Ramírez y Diódoro Carrasco (Cortesía de Foto Salazar).

Explicó que, a través de los programas normales el gobierno federal canalizará a la entidad 380 mil millones de pesos y a través del PRONASOL otros 65 mil millones. Reiteró que seguirá respondiendo con hechos a Oaxaca y se comprometió a concluir en el presente año la construcción de la carretera Sola de Vega-Juquila-Puerto Escondido. En el corazón de la Mixteca, donde Valerio Trujano sostuvo el sitio más largo de la Guerra de Independencia, y hace una década las fuerzas de la naturaleza devastaron la ciudad, convirtiéndola en un páramo de ruinas, el presidente 194


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hizo un recuento de las obras construidas en los primeros 24 meses de su gobierno, con la participación y el trabajo de los oaxaqueños apoyados por la federación. En este municipio gobernado por un ayuntamiento emanado del PAN, el mandatario dijo que el PRONASOL no distingue banderas ni ideologías, porque las autoridades deben gobernar para todos. En ese sentido, ofreció: “Seguiremos atendiendo a todos los municipios del estado, sin importar de qué partido hayan surgido sus autoridades”. En respuesta a las demandas planteadas por el gobernador Heladio Ramírez y el presidente municipal Fidel Arámburo, anunció la creación del parque industrial de la Mixteca, que servirá como detonante del desarrollo integral de la región y generará nuevas fuentes de trabajo para todos sus habitantes. Asimismo, anticipó que a través de los programas de solidaridad se construirá la red de agua potable que permitirá aprovechar a su máxima capacidad el sistema hidráulico Yosocuta-Huajuapan para satisfacer las necesidades de los habitantes de esta ciudad. Minutos antes el presidente municipal Fidel Arámburo había comprometido el esfuerzo del pueblo de Huajuapan para seguir trabajando al lado de los gobiernos federal y estatal en la solución de los problemas sociales, Al iniciar su segundo día de gira por la Mixteca, el presidente de México había recibido a su homólogo de Costa Rica, Rafael Angel Calderón Fournier, “no en su carácter de mandatario sino de amigo”. Después, ambos presidentes acompañados por el gobernador Heladio Ramírez y el secretario de Educación Pública Manuel Bartlett, presidieron la ceremonia de inauguración de la Universidad Tecnológica de la Mixteca, en Acatlima. Al término de dicho acto arribaron al centro de la ciudad, entre el entusiasmo de la multitud que formó una valla desde la Carretera Internacional hasta el entarimado construido frente al Palacio Municipal, y que agitaba banderas de México y de Costa Rica al paso de la comitiva. Los mandatarios pasaron bajo un arco de cucharilla de maguey construido en la esquina de la calle Trujano, y recorrieron a 195


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pie las cinco calles que les separaban del Palacio Municipal, entre bandas de música y acompañados por jóvenes ataviadas con vistosos trajes regionales. Al concluir la reunión con los presidentes municipales, el mandatario de México inauguró el sistema hidráulico Yosocuta-Huajuapan que beneficiará a los habitantes de esta ciudad, al asegurar el abasto de agua hasta el año 2015. 22 de febrero de 1991.

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Jorge González Torres militó en el PRI. En 1986 fundó el Partido Verde Mexicano (PVM) que después cambió su nombre por el de Partido Verde Ecologista de México (PVEM). En 1994 fue postulado por este partido como candidato a la Presidencia de la República, y en 1997 a la Jefatura de Gobierno del Distrito Federal. Es padre de Jorge Emilio González Martínez –conocido en el medio de la política como El niño verde, a quien heredó la dirigencia nacional del partido– y hermano de Víctor González Torres, el Doctor Simi, quien en 2006 aspiró a la Presidencia de la República declarándose “candidato independiente”. Durante su campaña electoral de 1994, Jorge González Torres se convirtió en el primer candidato presidencial que visitó localidades indígenas de la Mixteca, como Santiago Cacaloxtepec y San Juan Copala.

Un candidato ecologista en Cacaloxtepec En esta pequeña localidad ubicada a sólo unos kilómetros del pavimento, pero a varios años luz de la atención de los gobiernos, el candidato del Partido Verde Ecologista de México a la Presidencia de la República, Jorge González Torres, aseguró que la gente no quiere programas económicos sofisticados que nadie entiende y que no resuelven nada. “Lo que la gente del campo quiere son soluciones concretas a sus problemas: más escuelas, más clínicas y que les paguen un precio más justo por los sombreros que elaboran”, enfatizó. En su primer día de gira proselitista por la región Mixteca, y luego de escuchar las quejas de los lugareños, quines manifestaron que los intermediarios les pagan entre 90 197


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centavos y un nuevo peso por cada sombrero, González Torres se refirió al contraste existente entre la miseria de los pueblos y los exorbitantes gastos de campaña de algunos candidatos presidenciales. Aquí, donde la gente vive de milagro porque los dos pesos diarios que obtienen por la venta del sombrero no les alcanzan para garantizar el sustento de su familia, el candidato ecologista demandó poner en práctica soluciones reales para los problemas de las comunidades campesinas. Se pronunció también contra la deforestación que un grupo de personas adineradas lleva a cabo en Oaxaca, donde al igual que en otras entidades están exterminando los bosques. Censuró la contaminación de los ríos y el tráfico de animales que provocan el exterminio de la fauna. En una reunión caracterizada por la anti solemnidad, ante un centenar de indígenas mixtecos, en su mayoría mujeres y niños, González Torres aseguró que la problemática de Cacaloxtepec es la misma de muchas otras localidades, y se comprometió a dar a conocer en todo el país la miseria que aquí se vive. “Llevaremos su voz a los foros nacionales, para que se sepa que aquí los explotan los intermediarios con la venta del sombrero, que aquí el campo no tiene ningún apoyo”, dijo. Sostuvo que esta situación no puede continuar así, y agregó que la pobreza y la falta de atención provocan los estallidos de violencia, como ocurrió en el vecino estado de Chiapas. “La paz sólo puede establecerse sobre la justicia y la democracia”, reiteró. Aquí, donde el 50 por ciento de la población ha emigrado para huir de la pobreza, González Torres había escuchado los planteamientos de los indígenas, quienes le manifestaron que la suya es la primera visita que realiza un candidato presidencial a este lugar. Luego de escuchar a la banda Nueva Generación Mixteca y de obsequiar cubetas de plástico y calendarios a los asistentes al acto proselitista, el candidato visitó el templo del lugar y se postró ante la imagen del santo patrono, Santiago Apóstol, la misma que tuvo que ser restaurada 198


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después de que hace un año se quemó parcialmente. Riesgo de violencia en Oaxaca. Abordado por los representantes de los medios de comunicación que cubren su campaña, González Torres dijo que la principal preocupación del gobierno de México debe ser la solución del conflicto armado de Chiapas. Advirtió que en Oaxaca, donde la pobreza y el abandono son el común denominador, pueden surgir brotes de violencia si no se atienden los problemas de los más necesitados: “El gobierno debe volver los ojos a Chiapas y a Oaxaca con auténtica voluntad de resolver sus problemas”. Dijo que el riesgo de la violencia es mayor mientras menor sea la atención que se brinda a las comunidades marginadas. Hizo un llamado al gobierno establecido y a los candidatos de los partidos políticos nacionales para que no centren su atención en las urbes, sino en las comunidades campesinas e indígenas, pues de lo contrario, los chiapas pueden multiplicarse en el país. El candidato presidencial continuaría su gira proselitista este miércoles en Santiago Tamazola, dentro de su recorrido de diez días por el estado de Oaxaca. 14 de junio de 1994.

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Andrés Manuel López Obrador nació en Tepetitán, municipio de Macuspana, Tabasco, en 1953. Es uno de los principales líderes del Partido de la Revolución Democrática (PRD). En 1976 se afilió al PRI y en 1983 ocupó la presidencia del Comité Directivo Estatal de ese partido en Tabasco. Cinco años después se sumó a la Corriente Democrática y finalmente abandonó las filas del partido para integrarse al Frente Democrático Nacional (FDN) que postuló a Cuauhtémoc Cárdenas como candidato a la Presidencia de la República. Fue candidato del FDN a gobernador de Tabasco en 1988. Tras perder la elección ante su homólogo del PRI, Salvador Neme, asumió la presidencia estatal del PRD en 1989. En 1994 fue postulado nuevamente a la gubernatura, ahora como candidato del PRD, siendo derrotado por Roberto Madrazo (PRI). López Obrador denunció supuestas irregularidades, entre ellas que su contrincante rebasó los topes de gastos de campaña, por lo que realizó una marcha de protesta a la Ciudad de México. En 1996 asumió la dirigencia nacional del PRD, al vencer en la contienda interna a Heberto Castillo y Amalia García. En el año 2000 ganó la elección para Jefe de Gobierno del Distrito Federal, imponiéndose al candidato del PAN Santiago Creel, y separándose del cargo en julio de 2005 para iniciar su precampaña en busca de la Presidencia de la República. Su gestión al frente del gobierno del Distrito Federal estuvo marcada por un golpeteo político con el presidente Vicente Fox, que llegó a su punto máximo en 2004, cuando fueron difundidos algunos videos que mostraban presuntos actos de corrupción de colaboradores cercanos de López Obrador, y en los primeros meses de 2005 cuando la Cámara de Diputados le retiró la inmunidad judicial por desacato a una sentencia de la Suprema Corte de Justicia de la Nación. Ante su desafuero, que consideró una estrategia del gobierno federal para excluirlo de la contienda por la Presidencia de la

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República, López Obrador inició diversas movilizaciones de protesta, hasta que la PGR anunció que no ejercería acción penal en su contra. En 2006, López Obrador se convirtió en candidato de la Coalición por el Bien de Todos (PRD-PT-Convergencia), sin contrincante interno al frente, pues Cuauhtémoc Cárdenas decidió no buscar la que sería su cuarta candidatura. En la elección del 6 de julio fue derrotado por el candidato del PAN, Felipe Calderón Hinojosa, en la contienda más cerrada de la historia, ya que la diferencia de votos fue de sólo 233 mil (0.56 por ciento). López Obrador denunció un supuesto “fraude electoral” y exigió un nuevo recuento “voto por voto y casilla por casilla”, impugnando formalmente el proceso ante el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), pero éste desechó las impugnaciones y validó el triunfo de Calderón. Al conocer la sentencia del tribunal, López Obrador y sus seguidores realizaron diversas acciones de protesta, entre ellas el cierre del Paseo de la Reforma, una de las avenidas principales de la Ciudad de México, durante varias semanas. Los legisladores de los partidos que postularon a López Obrador, impidieron la entrada del presidente Vicente Fox al salón de sesiones del Palacio Legislativo para entregar su último informe de gobierno, y pretendieron impedir la toma de protesta de Felipe Calderón, al apoderarse del recinto parlamentario. El 16 de septiembre, López Obrador fue proclamado por sus seguidores Presidente Legítimo de México y el 20 de noviembre rindió protesta a ese cargo. Una década antes de la elección presidencial, durante su campaña interna por la dirigencia nacional del PRD, López Obrador realizó una breve visita a Huajuapan de León, un día después de haberse reunido en San Cristóbal de la Casas, Chiapas, con el subcomandante Marcos del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN). En los días previos, había sido duramente criticado por miembros de su partido, principalmente por sus contrincantes Amalia García y Heberto Castillo, por emitir un documento en el que denunciaba un supuesto complot instrumentado desde el extranjero para obligar al presidente Ernesto Zedillo a renunciar al cargo. En el documento mencionado, López Obrador expresaba: “Condenamos cualquier rumor, cualquier intento, cualquier acción cuyo propósito sea debilitar las instituciones nacionales (…) Si para salvar a la República tenemos que apoyar a

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la Presidencia, no vamos a titubear en hacerlo, la ocupe quien la ocupe”. Diez años y tres meses después, el 1 de septiembre de 2006, López Obrador decía: “Ya decidimos hacer a un lado esas instituciones caducas que no sirven para nada e impulsar la revolución de la conciencia para que el pueblo decida. ¡Que se vayan al diablo con sus instituciones!”. Un dato relevante de su visita a Huajuapan es que se hizo acompañar por el diputado federal del PRD Flavio Sosa Villavicencio, quien diez años después adquirió relevancia internacional por encabezar el movimiento de la Asamblea Popular de los Pueblos de Oaxaca (APPO), que generó violentos disturbios durante más de seis meses en la entidad.

Reglas claras para unificar al PRD: López Obrador

Andrés Manuel López Obrador en una de sus visitas recientes a Huajuapan (Cortesía de Correo Mixteco).

Al cumplir 66 días de campaña en pos de la dirigencia nacional del PRD, Andrés Manuel López Obrador se pronunció por establecer reglas claras que permitan la unidad del partido, respetando la pluralidad y buscando conciliar a las corrientes que lo integran. Reconoció que las principales divergencias se dan entre los dirigentes, pues la militancia tiene muy claros los objetivos del partido. En este sentido, dijo que la búsqueda 202


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de la unidad interna debe ser una de las prioridades del nuevo presidente nacional. En el corazón de la Mixteca oaxaqueña, donde el PRD mantiene una presencia importante, dijo que uno de los principales retos de la nueva dirigencia nacional será fortalecer al partido y mejorar su organización interna, pero no sólo con miras a los procesos electorales, sino para mantener una actividad permanente en defensa de las causas populares. Bajo una fina llovizna, el político tabasqueño aseguró que, si obtiene el triunfo en las elecciones internas del 14 de julio, creará una fundación y constituirá un fondo para apoyar a los familiares de los más de 300 perredistas asesinados durante el gobierno de Carlos Salinas de Gortari, “quien pretendió acabar con el PRD mediante la represión directa, pero también creándole una imagen de partido violento y alborotador, tanto en el extranjero como en el interior del país”. Al afirmar que ha constatado personalmente el abandono y la miseria que los migrantes mexicanos padecen en los Estados Unidos, se comprometió a establecer oficinas de orientación para migrantes en cada una de las ciudades de la frontera norte de nuestro país. “Con esta medida podremos defender a los miles de campesinos mixtecos que se ven en la necesidad de abandonar sus lugares de origen en busca de mejores condiciones de vida”, reiteró. Ofreció a los perredistas provenientes de diversos municipios de la región que, de obtener el triunfo, regresará frecuentemente a la Mixteca, pues no conducirá al PRD desde el Distrito Federal, sino desde las comunidades, junto con los militantes de todas las entidades del país. Apoyar al presidente para salvar al país Abordado al término del mitin efectuado en la esquina de las calles Colón y Trujano de esta ciudad, López Obrador se mostró respetuoso de las críticas de sus adversarios Amalia García y Heberto Castillo por el apoyo del tabasqueño al 203


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presidente de la República, ante una supuesta conjura internacional para obligarlo a renunciar. Explicó que el documento La defensa de las instituciones y el rechazo a la renuncia presidencial, que dio a conocer hace algunas semanas en Misantla, Veracruz, es muy claro: “No es un apoyo a Ernesto Zedillo ni al PRI, sino a la institución presidencial, sin importar quien la ocupe. En el PRD no podemos apostarle a obtener el poder pasando sobre el cadáver de la República. Soy profundamente nacionalista, y por eso, ante la existencia de una conjura internacional para obligar al presidente a renunciar, no me puedo quedar callado, porque el objetivo de los grupos de adentro y de afuera que promueven la salida de Zedillo es apoderarse de la riqueza del país, sobre todo de nuestros yacimientos petroleros”. Al negar que su postura sea populista o demagógica, o que esté dando “bandazos” con respecto de lo que opinaba hace algunos meses, como señaló Heberto Castillo en un artículo reciente de la revista Proceso, López Obrador aseguró que estos señalamientos se ubican en el contexto de la contienda interna por la dirigencia nacional del partido: “No hay que olvidar que en la guerra, en el amor y también en la política todo se vale”, dijo. En cambio, se negó a opinar sobre la pugna entre Porfirio Muñoz Ledo y Cuauhtémoc Cárdenas, por las declaraciones del dirigente nacional del PRD, quien aseguró que el ex candidato presidencial fue el principal responsable de que en 1988 no se haya seguido adelante cuando el FDN estuvo a punto de llegar al gobierno, y que el ahora líder moral del PRD se habría entrevistado con Carlos Salinas de Gortari después de las elecciones del 6 de julio, según revelaciones de Manuel Camacho Solís. Al respecto, López Obrador manifestó: “No tengo los elementos ni la información suficiente para opinar sobre el tema; además, no es prudente echarle más gasolina al fuego, a unos días de nuestra elección interna. Los dos (Cárdenas y Muñoz Ledo) son personalidades muy importantes dentro del partido, y ambos merecen mi respeto”. 204


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En relación con la irrupción del EPR en el acto conmemorativo del primer aniversario de la matanza de Aguas Blancas, Guerrero, dijo que falta mucha información al respecto, y esto ha generado confusión en la opinión pública: “No podemos descartar que se trate de un montaje, un grupo disfrazado de rebelde para generar confusión e inestabilidad en el país; pero también debemos considerar la posibilidad de que sea un verdadero grupo guerrillero surgido por las condiciones de injusticia y opresión que existen en el estado de Guerrero”. Sin embargo, al margen de la naturaleza y el origen del EPR, advirtió que el riesgo de que surjan otros movimientos armados sólo se podrá evitar si el gobierno atiende las necesidades prioritarias del pueblo mexicano en lugar de dar preferencia a los extranjeros. En relación con el encuentro que sostuvo ayer con el subcomandante Marcos del EZLN en San Cristóbal de las Casas, aseguró que éste se dio en términos respetuosos y cordiales. “Acordamos reunirnos muy pronto si gano la elección interna, como seguramente ocurrirá, y le dije que las puertas del PRD estarán abiertas si el EZLN decide optar por la vía electoral, aunque siempre seré respetuoso de sus determinaciones”, reveló. López Obrador, quien estuvo acompañado por los aspirantes a las dirigencias estatal y municipal del PRD, Salomón Jara y Heliodoro Ambrosio, respectivamente, y por el diputado federal Flavio Sosa, se trasladó a Santo Domingo Tonalá, donde encabezó un mitin de apoyo a su candidatura, y por la noche regresó a la ciudad de Oaxaca. 3 de julio de 1996

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La Asamblea Popular de los Pueblos de Oaxaca (APPO) surgió el 17 de junio de 2006, tres días después de que la policía intentó desalojar a los integrantes de la sección 22 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) que mantenían un plantón permanente en el primer cuadro de la ciudad de Oaxaca. A partir de esa fecha y durante casi medio año, la APPO realizó plantones, bloqueos de calles y carreteras; tomas de edificios públicos y estaciones de radio; instalación de barricadas; quema de vehículos y edificios, entre otras acciones, en demanda de la salida del gobernador Ulises Ruiz Ortiz. Asimismo, protagonizó enfrentamientos violentos con los cuerpos de seguridad estatales y posteriormente con la Policía Federal Preventiva. Flavio Sosa Villavicencio, principal dirigente de la APPO, fue encarcelado el 4 de diciembre de 2006, acusado por una docena de delitos, entre ellos asociación delictuosa, sedición, robo, secuestro, y daños por incendio, y permaneció en prisión hasta el pasado 19 de abril. Originario de San Bartola Coyotepec, Oax., Flavio Sosa fue fundador del PRD en la entidad, diputado federal por ese partido y dirigente de la Unión Campesina Democrática (UCD). En el año 2000, siendo vocero estatal del PRD, se sumó a la campaña de Vicente Fox; posteriormente integró la organización Nueva Izquierda de Oaxaca y en 2004, junto con el Movimiento de Unificación y Lucha Trique (MULT), formó el Partido Unidad Popular (PUP) que postuló a Héctor Sánchez como candidato a gobernador del estado. Un año después solicitó su reingreso al PRD y fue nombrado consejero nacional de ese partido. Según versiones atribuidas por el periódico La Jornada a “los gobiernos de José Murat y Ulises Ruiz”, Sosa habría sido asesor de ambos mandatarios, e incluso al inicio de la actual administración estatal habría ocupado una oficina contigua a la del ex secretario de Gobierno, Jorge Franco Vargas.

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El 26 de noviembre de 1996 Flavio Sosa visitó Huajuapan y otros municipios de la Mixteca, como parte de su campaña por la dirigencia estatal del PRD. Diez años menos un día después, el 25 de noviembre de 2006, participó en la jornada más violenta desde el inicio del conflicto de la APPO, que culminó con el incendio de por lo menos 25 vehículos y una decena de edificios, entre ellos el Tribunal Superior de Justicia del Estado, el Teatro Juárez y el Hotel Camino Real; saqueos de comercios; al menos 60 lesionados y 152 detenidos.

Fin a relación “casi perversa” con el gobierno: Flavio Sosa.

Flavio Sosa fue liberado el 19 de abril, después de permanecer un año cuatro meses en la cárcel (Fotografía OEM).

Al reconocer que el PRD ha mantenido una relación “casi perversa” con el gobierno, el aspirante a la dirigencia estatal Flavio Sosa Villavicencio se comprometió a transparentar las relaciones entre ese partido y las instancias de poder. En su primer día gira por la Mixteca en busca del voto interno, aseguró que el partido del sol azteca debe retomar la experiencia del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) que ha negociado de cara a la sociedad, en contraste con el PRD que lo estuvo haciendo en forma secreta en el caso de la reforma política “auque finalmente se cayeron los amarres que Porfirio Muñoz Ledo tejió durante dos años”. Entrevistado en esta ciudad admitió que en México y en el resto del mundo existe una crisis de credibilidad en los partidos políticos, lo que se ha traducido en altos índices de 207


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abstencionismo porque los partidos están cerrados a la sociedad y los ciudadanos no confían en ellos. En ese contexto, dijo que su candidatura surge de un proyecto político abierto, no excluyente, porque actualmente “hay un muro divisorio entre la sociedad política y la sociedad civil; pero si se logra que ambas se comuniquen se dará un paso cualitativo para superar muchos de los problemas del país”. Advirtió que si el PRD quiere lograr el apoyo de la mayoría de los ciudadanos, deberá abrirse a todos los sectores de la sociedad, en vez de tratar de representar únicamente a las clases populares, y convencer a todos los ciudadanos de que se puede transitar a la democracia de manera pacífica, pues de lo contrario seguirán surgiendo grupos armados y se enfrentará el riesgo de una colombianización del país. Acompañado por el regidor Neftalí González, el dirigente local Pedro Silva y el aspirante a la dirigencia municipal Heliodoro Ambrosio, el también legislador federal aseguró que si obtiene el triunfo en los comicios internos luchará por dar vida orgánica al PRD para hacer que camine de manera permanente, pues es un gigante que sólo se mueve en los procesos electorales. “Debemos darle una sola orientación política que no ha tenido hasta hoy, crear una escuela de cuadros y destinarle recursos suficientes”, agregó. Metido de lleno en el terreno de la autocrítica, aseveró que la pluralidad que se vive en el PRD y que se manifiesta en la existencia de corrientes internas es la fuerza del partido, pero cuando no se actúa con madurez se convierte en una limitación. En el caso de Oaxaca, reconoció que el PRD no ha funcionado como partido, pues quienes le han dado vida son las corrientes políticas internas. Aunque aseguró que no está dividido porque en su interior existen más coincidencias que divergencias, manifestó que el principal reto que enfrenta es “dejar de crecer como corrientes para empezar a crecer como partido”. A pregunta expresa admitió que el PRD no ha presentado alternativas para sacar a la Mixteca de la miseria, a pesar de 208


Historias de Huajuapan

que tiene un compromiso histórico en ese sentido, por la fuerte presencia del cardenismo en esta región. Al término de la entrevista Flavio Sosa se trasladó a Mariscala de Juárez. Mañana visitará los municipios de Silacayoapan, San Agustín Atenango y Santo Domingo Tonalá. 26 de noviembre de 1996.

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Víctor Manuel Camacho Solís nació en la Ciudad de México en 1946. Fue miembro del Partido Revolucionario Institucional desde 1965 y uno de los principales operadores políticos de Carlos Salinas de Gortari, de cuya campaña presidencial fue coordinador. Ha ocupado diversos cargos en la función pública: subsecretario de Programación y Presupuesto (1982-1985); diputado federal en 1985; secretario de Desarrollo Urbano y Ecología (1986-1988); jefe del Departamento del Distrito Federal (1988-1993); secretario de Relaciones Exteriores durante un breve periodo en 1993; y Comisionado para la Paz en Chiapas, en 1994. El 23 de noviembre de 1993, cuando el PRI postuló a Luis Donaldo Colosio para la Presidencia de la República, Manuel Camacho contravino las reglas no escritas del sistema priísta al negarse a felicitarlo públicamente y manifestar su descontento por la designación. Meses después, ante el poco arraigo de la campaña de Colosio y el posicionamiento de Camacho como Comisionado para la Paz en Chiapas, cargo que no lo inhabilitaba para aspirar a la Presidencia, se desató una serie de rumores en el sentido de que el candidato priísta sería obligado a renunciar y su lugar sería ocupado por Camacho. Estos rumores obligaron a que el presidente Salinas tuviese que desmentirlos públicamente, al advertir a los priístas: “No se hagan bolas: el único candidato es Colosio”; y que el mismo Camacho negara esta posibilidad, justamente un día antes del asesinato del candidato. A pesar de todo, algunas voces lo señalaron como el principal beneficiario del crimen, lo que lo distanció del partido y de Salinas, hasta que en octubre de 1995 renunció públicamente al PRI. En 1999 regresó a la política y fundó el Partido de Centro Democrático, del que fue candidato presidencial un año después,

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obteniendo únicamente el 0.6 por ciento de los votos. En 2003 fue electo diputado federal, postulado ahora por el PRD; en 2006 se convirtió en uno de los principales colaboradores de Andrés Manuel López Obrador en su campaña por la Presidencia de la República. Manuel Camacho Solís visitó Huajuapan en abril de 1988, siendo titular de la Secretaría de Desarrollo Urbano y Ecología (SEDUE). Durante esta visita anunció la creación de un parque en la colonia Reforma, con una inversión inicial de 100 millones de pesos. Finalmente, dicho parque fue construido en la colonia Aviación, en los terrenos del antiguo campo aéreo, y recibió el nombre de “Cecilia Ocelli” en honor de la entonces esposa del presidente Carlos Salinas. El parque sería declarado “zona de reserva ecológica”, pero con el paso de los años ha perdido terreno de manera paulatina.

Camacho Solís anunció cien millones para un parque recreativo

Aspecto actual del parque ecológico Cecilia Ocelli.

Con una inversión inicial de 100 millones de pesos, la Secretaría de Desarrollo Urbano y Ecología pondrá en marcha el proyecto para la construcción de un parque recreativo que estará ubicado en la colonia Reforma de esta ciudad y será declarado zona de reserva ecológica. El anuncio lo realizó el titular de la SEDUE, Manuel Camacho Solís, en respuesta a la petición de la profesora María de los Angeles Santillán Velasco, directora de la 211


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escuela Leyes de Reforma. Al concluir en Huajuapan una gira de trabajo por la entidad, en compañía del gobernador Heladio Ramírez, Camacho Solís se comprometió a gestionar ante el presidente Miguel de la Madrid los recursos necesarios para este proyecto. Externó su confianza en que el presidente autorizará los 100 millones de pesos que se requieren para asegurar la situación jurídica de los terrenos y posteriormente iniciar los trabajos de construcción del parque recreativo. En otro orden de ideas, Camacho Solís informó que está a punto de concluirse el Plan de Desarrollo Urbano de Huajuapan que garantizará el crecimiento ordenado de este centro de población y facilitará el acceso de sus habitantes a los servicios públicos. Asimismo, dio a conocer que ya está terminado el proyecto de agua potable y alcantarillado de la ciudad. Reconoció que el problema de la contaminación de la presa Yosocuta por causa de la descarga de drenajes en el río Mixteco requiere de atención emergente, y confió en que antes de que concluya la gestión del presidente Miguel de la Madrid estará terminado el proyecto de una planta de tratamiento de aguas residuales y se contará con los recursos necesarios para iniciar su ejecución. El secretario anunció también que la SEDUE llevará a cabo un programa de restauración de templos y monumentos coloniales, dentro del cual se contemplan 41 en la región Mixteca, entre los que destacan el ex convento de Coixtlahuaca y la Catedral de esta ciudad. La inversión para la primera etapa de este programa será de 700 millones de pesos, de los cuales se destinarán 200 para el conjunto arquitectónico de Coixtlahuaca. 27 de abril de 1988.

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Heladio Ramírez López, originario de Santa María Ayú, agencia municipal de Huajuapan de León, es un destacado político miembro del Partido Revolucionario Institucional. Fue presidente de la Asociación de Jóvenes del Sureste de la República Mexicana, fundador y presidente de la Tribuna de la Juventud y presidente del Comité Directivo Estatal del PRI. Ha sido diputado federal (1976-1979); tres veces senador de la República (1982-1986, 1997-2000 y 2006-2012); y gobernador del estado de Oaxaca (1986-1992). Fungió como titular de la Comisión Nacional de Zonas Aridas (CONAZA); del año 2000 a 2007 fue dirigente de la Confederación Nacional Campesina (CNC). Durante su gestión como gobernador de Oaxaca impulsó importantes obras y acciones en el municipio de Huajuapan, entre las que destacan la creación de la Universidad Tecnológica de la Mixteca (UTM); la ampliación, adoquinamiento y reencarpetado del tramo urbano de la Carretera Internacional; la remodelación del parque Independencia; la construcción del acueducto Yosocuta–Huajuapan, la planta potabilizadora y la planta de tratamiento de aguas residuales; de los mercados públicos Porfirio Díaz y Cuauhtémoc; del libramiento carretero norte; y de la unidad deportiva de Rancho Solano, entre otras.

La Mixteca avanza sin paternalismos: Heladio El gobernador Heladio Ramírez López aseguró que los aires de la intolerancia, el fanatismo, el autoritarismo y el paternalismo ya no soplan en la Mixteca oaxaqueña “porque ha llegado la hora del desafío histórico, la realización y la esperanza; se ha trascendido el ámbito de la utopía y se está construyendo una firme realidad con el esfuerzo conjunto de pueblo y gobierno”. 213


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El gobernador Heladio Ramírez entrevistado por Javier Guevara al término de su informe regional de gobierno.

En la Mixteca, donde prevalecen marcados contrastes sociales, de donde emigran los hombres pero también las tierras y hasta el agua, y donde 600 mil oaxaqueños dispersos en un millar de comunidades siguen marginados de los beneficios del progreso, aseguró que en los primeros cuatro años de su administración se ha puesto en marcha un proyecto para combatir la pobreza y dispersión de las comunidades de esta zona e impulsar su desarrollo integral. Al rendir en Huajuapan el primero de sus informes regionales de gobierno, expresó que la voluntad de transformación que corre por las venas de los mixtecos ha permitido desterrar las inercias, descubrir que éste es un pueblo vigoroso, creativo, capaz de superar las adversidades naturales o humanas que ha padecido durante su historia. Añadió que en esta región nada ha permanecido quieto, pues se vive una conmoción social y política que se ha traducido en obras de beneficio social: “No hay pueblo sin obra, no hay rincón alguno que haya quedado al margen de un vigoroso esfuerzo de construcción; pero tampoco hay obra sin pueblo, sin una activa organización que la concibió, la hizo y la respalda”. El mandatario reconoció que la pobreza no ha sido erradicada de la Mixteca y de la entidad, pero afirmó se han logrado avances importantes en la cruzada que los pueblos y 214


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el gobierno libran para desafiar valientemente el verdadero mal del siglo: la desigualdad y su caudal de miseria. En presencia de legisladores, autoridades y líderes de los distritos de Huajuapan, Juxtlahuaca, Silacayoapan, Teposcolula, Nochixtlán, Tlaxiaco y Coixtlahuaca, Heladio Ramírez manifestó que al tomar posesión de su cargo se propuso frenar la emigración, evitar la violación de los derechos laborales y humanos de los mixtecos que salen en busca del sustento, estrechar los vínculos entre las comunidades mediante el mejoramiento de las vías de comunicación, construir más aulas, dar atención a la salud y reflorecer las antiguas culturas, las artes y tradiciones. Por ello, aseguró que esta comparecencia ante el pueblo mixteco no fue un simple acto protocolario, sino un balance objetivo “de lo que el pueblo y gobierno han logrado en estos cuatro años, y de lo que falta por hacer para trazar juntos el camino hacia un futuro mejor”. Al referirse a la celebración de los primeros mil años de la cultura Mixteca, aseguró que este pueblo “no claudica ante los desafíos del mañana, ni archiva su pasado histórico, sino que busca ponerse otra vez a la vanguardia de una proeza de transformación natural y social, sin nostalgia ni congoja por lo perdido”. En ese sentido, dijo que las reformas constitucionales aprobadas por el congreso estatal mantienen la fidelidad a la esencia de los pueblos oaxaqueños, consolidan el legado de sus antepasados, pero se abren al futuro que representa una oportunidad histórica de transformación. Reconocimiento del cabildo panista Al término del acto efectuado frente al Palacio Municipal, los integrantes del ayuntamiento emanado del Partido Acción Nacional entregaron al gobernador un pergamino que lo acredita como huajuapeño distinguido. Al entregar el documento durante la sesión solemne del cabildo, el presidente municipal Fidel Arámburo manifestó que este reconocimiento obedece a la apertura y respeto que 215


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el gobernador ha mostrado hacia el Ayuntamiento. Reconoció que el apoyo del Gobierno del Estado a este municipio indica que el mandatario ha cumplido su palabra de apoyar el esfuerzo de los pueblos de la región, sin distinción de ideologías. Al término de la sesión solemne del Cabildo, el gobernador colocó la primera piedra del hospital del ISSSTE y de la unidad habitacional Antonio de León del FOVISSSTE, que en su primera etapa consta de 150 viviendas para trabajadores federados. Previamente, presidió un acto cívico en el que se realizó el abanderamiento del Instituto Tecnológico de Tlaxiaco y de la Universidad Tecnológica de la Mixteca. 18 de noviembre de 1990.

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CAPITULO 5

María Cristina Guadalupe Vega Hoyos, conocida en el medio artístico como Kitty de Hoyos, nació el 8 de febrero de 1941 en México, D. F. Su madre fue la cantante de ópera María Borinquen. Estudió actuación durante tres años en la Academia de Andrés Soler. Siendo una niña debutó en un teleteatro dirigido por Manolo Fábregas. Participó en decenas de películas, entre ellas La sombra del caudillo (1960), Cada quien su vida (1960), Los signos del zodiaco (1962), La fiebre del deseo (1964), Los cuervos están de luto (1965) y La Loba (1965). Fue una de las primeras actrices en desnudarse en la pantalla, lo que la convirtió en símbolo sexual del cine mexicano y le valió el mote de la Marilyn Monroe mexicana. También hizo teatro, telenovelas, radionovelas, doblaje y espectáculos de centro nocturno. Víctima del cáncer, falleció el 28 de diciembre de 1999. En 1986, Kitty de Hoyos presentó en la Casa de la Cultura de Huajuapan el espectáculo Historia de romances y corridos con el actor, director y productor teatral Roberto D’Amico.

Kitty de Hoyos, entre romances y corridos Faltan unos minutos para las ocho de la noche. El local está repleto y hay un ambiente de expectación no exenta de curiosidad. En el foro de la Casa de la Cultura, la austera escenografía recibe de lleno la luz de los reflectores. Tercera llamada, tercera, comenzamos. Y el aplauso brota cuando Kitty de Hoyos –la belleza hecha mujer– aparece vestida de rojo, con rebozo y botas de color gris. Roberto D‟Amico, de recia personalidad, arranca también el aplauso del público. Aunque el espectáculo se llama Historia de Romances y Corridos, la primera parte no se presenta por la dificultad 217


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para trasladar la escenografía en una gira como ésta. El silencio absoluto en el recinto contrasta con el ruido que llega de la calle, cuando Kitty y Roberto explican la estructura del espectáculo en el que se distinguen siete momentos: corridos de la revolución; de coquetas; décimas y glosas picarescas; corridos del Estado de México (muy similares por su estructura a los viejos romances españoles); la tragedia de los indocumentados en los corridos de la “migra”; la muerte (obsesiva idea en el pueblo mexicano con toda su carga de tragedia y de fiesta); y finalmente la inigualable picaresca de Chava Flores70, el poeta urbano. El corrido, hijo directo de los romances hispanos, y la más genuina de las expresiones literarias populares de nuestro país, fluye y cautiva. No es el corrido a la manera de López Tarso71, sino una expresión con un toque diferente. Los mismos corridos que hemos escuchado centenares de veces, cantados o dichos, nos parecen ahora algo desconocido, casi mágico. El corrido, muchas veces olvidado, menospreciado y hasta despreciado, adquiere una dimensión misteriosa y poco conocida: expresa mexicanidad y amor por lo nuestro. Así, Catarino Maravillas recorre la sala en la voz de Kitty que lo mismo acaricia los oídos que estalla con esa bravura y donaire de la mujer mexicana. Roberto, el mexicano pendenciero, borracho y enamorado, da vida a personajes conocidos, lugares comunes de nuestra historia musical y poética popular, y encanta con su voz bien timbrada y rica. Kitty, la soldadera, la coqueta, la mujer orgullosa que provoca la risa franca cuando saca los defectos del hombre; la mojada que sufre, se angustia y se desespera; la que canta y llora; la que teme a la muerte y se burla de ella. Kitty, la actriz excepcional que con su sola presencia llena el escenario. Roberto es lo mismo el bravucón o el macho que el cínico o el marido cornudo. Es el pueblo quien se expresa y se sublima en este par de 70

Compositor mexicano considerado el cronista musical de la Ciudad de México. Algunas de sus composiciones más conocidas son La Bartola, La tertulia y Sábado Distrito Federal. 71 Autor mexicano de teatro, cine y televisión. En su faceta de declamador, dio amplia difusión a los corridos mexicanos.

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actores que reviven su historia plagada de actos heroicos y de hechos cotidianos, que por serlo no dejan de ser fuente de inspiración de los juglares anónimos o conocidos que han hecho del corrido más que una tradición o un género musical y poético: lo han vuelto una parte de nosotros mismos. Y llega la muerte que genera una actitud compleja del pueblo mexicano ante lo ineludible e incierto. Mientras los poetas “cultos” (Sor Juana72, Sabines73, Villaurrutia74 o Pellicer75) la contemplan con angustia, respeto o temor, los poetas populares anónimos la ridiculizan, se mofan de ella, la tornan festiva, como para que no quede duda de que al pueblo mexicano la muerte “le pela los dientes”. Magistralmente mezclados versos “cultos” y romances del pueblo. De lo trágico a lo burlesco. Del respeto por la muerte, a la fiesta en torno de ella. Quizás ésta sea la parte más impresionante del espectáculo. Aquí los recursos de los actores se manifiestan en toda su dimensión. El público subyugado, incapaz de apartar la vista del escenario. Después de El retrato de Manuela terminan los “corridos que han hablado de sueños, corridos que han hablado de amor”. La ovación ensordece, llena y deja la inmensa satisfacción de ver un público que sabe pagar con aplausos generosos el talento y profesionalismo de Kitty y Roberto. Tal vez Historia de romances y corridos, espectáculo presentado en la Casa de la Cultura, tuvo una sola falla: terminó cuando todos queríamos seguir disfrutando de él. 26 de marzo de 1986

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Sor Juana Inés de la Cruz, conocida como La décima musa, es la más importante de las poetisas y dramaturgas novohispanas. 73 Poeta mexicano originario de Tuxtla Gutiérrez, Chis. (1926-1929), es considerado una de las figuras más importantes de la poesía mexicana de la segunda mitad del siglo XX. Autor de Horal, La señal, Maltiempo y Algo sobre la muerte del mayor Sabines, entre otros libros. 74 Poeta originario de la Ciudad de México (1903-1950), integrante de la llamada Generación de los Contemporáneos, de la que formaban parte Salvador Novo y Jaime Torres Bidet, entre otros. 75 Poeta originario de Tabasco. Algunas de sus obras son Piedra de sacrificios (1924), Hora de junio (1937), Exágonos (1941) y Con palabras y fuego (1963).

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Susana Alexander, des-concertante y erótica … Y de pronto, cuando todo mundo esperaba ver a la villana telenovelera, el pequeño foro de la Casa de la Cultura de Huajuapan se llenó con la carismática presencia de Susana Alexander, elegantemente ataviada con un vestido blanco, con olanes plateados, y un saco que le da un cierto aire de “mujer fatal”. La hermana del “maldito” Arturo Serrano, la villana de La traición y de muchas otras telenovelas, da paso a una mujer diferente, desconocida para quien sólo ha seguido la trayectoria televisiva de esta controvertida actriz. La Susana Alexander de esta noche es incluso diferente de la que vimos en Si me permiten hablar y en Tuya afectuosamente. La de hoy está muy distante del prototipo de mujer que ha caracterizado en los teledramas: es la mujer enamorada del amor, la que considera el sexo como su leitmotiv, la que se empeña en que el público descubra que el erotismo es belleza y es poesía, que es algo más que el pretexto para el chiste de doble sentido, el albur o la procacidad. La Susana Alexander de esta noche, la que arranca las carcajadas del público cuando anuncia que el suyo es un espectáculo “didáctico, educativo y cultural”, presenta un monólogo fuerte, erótico pero profundamente estético. La austera escenografía –una cortina al centro, un teatrino a la izquierda y un baúl a la derecha– son los elementos indispensables para crear ese ambiente de charla familiar que la actriz mantiene con el público durante la hora y media que dura Des-concieto, espectáculo original de la propia

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Alexander y de Rossana Fuentes-Berain76. Con el mismo tono de plática trivial, Susana va mezclando poemas eróticos de autores como Kira Galván77, Isabel Freire, Gabriel Zaid78, José Emilio Pacheco79, Juan Bañuelos80 y hasta Alfonso Reyes81. Toda la versatilidad de esta actriz aflora cuando pasa de lo chusco a lo serio; de lo ligero a lo sublime; de la frase directa y sin recovecos que raya en lo agresivo, al más profundo romanticismo. Son muchas las transfiguraciones que sufre sobre el foro en lo que sin duda alguna es un espectáculo que demanda toda la capacidad y el talento de una verdadera actriz. Crea todo un universo de personajes cuando escenifica un fragmento de Pasto verde de Parménides García Saldaña82, con estilo de telenovela. Y por si fuera poco, muestra una faceta desconocida: la de cantante. En Des-concierto nada se deja al azar, todos los detalles corresponden a una gran producción, aunque los recursos sean modestos; las transparencias que se proyectan sobre la pared del fondo han sido seleccionadas cuidadosamente, y aunque algunas de ellas podrían ser consideradas fuertes para el público de Huajuapan, en ningún momento se acercan siquiera a lo pornográfico. Los noventa minutos transcurren sin sentirlo. La gente brinda a Susana un aplauso prolongado y estruendoso, y la 76

Periodista mexicana. Ha desempeñado su actividad profesional en diversos medios, entre ellos los diarios Reforma y El Financiero, y la agencia Notimex. 77 Poetisa originaria de la Ciudad de México (1956). Una de sus obras más conocidas es Un pequeño montón de piel para nadie (1982). 78 Poeta y ensayista mexicano. Algunas de sus obras son Campo Nudista (1969), Reloj de Sol (1995), Cómo leer en bicicleta (1975) y De los libros al poder (1988). 79 Escritor originario de la Ciudad de México (1939). Algunas de sus obras son No me preguntes cómo pasa el tiempo (1969), Morirás lejos (1967) y El principio el placer (1972). 80 Poeta chiapaneco nacido en Tuxtla Gutiérrez (1932). Autor de La espiga amotinada (1960), Escribo en la paredes (1965) y Donde muere la lluvia (1992), entre otras obras. 81 Escritor mexicano (1889-1959) considerado por Jorge Luis Borges como "el mejor prosista de habla hispana de todos los tiempos”. Autor de Ifigenia Cruel, Arbol de pólvora y Quince presencias, entre otras obras. 82 Escritor mexicano originario de Orizaba, Ver. (1944-1982). Autor de El rey criollo (1971), En la ruta de la onda (1974) y Mediodía (1975). Colaboró durante dos décadas en revistas especializadas de rock.

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actriz, juguetona, agradece con una reverencia. El público abandona el patio repleto de sillas, mientras en el salón habilitado como camerino la actriz inicia la destransfiguración para volver a ser la mujer vestida con sencillez, toda de blanco, que al mediodía, sentada en una banca del parque Independencia, con un helado en la mano, firmando autógrafos a un grupo de preparatorianas, decía al reportero: – ¿El amor? Es esencial. Me ha provocado muchos dolores de cabeza, muchas lágrimas, pero también muchas risas y muchas sensaciones. No, definitivamente no concibo la vida sin amor. 30 de noviembre de 1987.

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Betsy Pecanins nació en Yuma, Arizona. Hija de padre norteamericano y madre catalana, vive en México desde 1977. Es cantante y compositora; ha destacado por la fuerza y la calidad de su voz en todos los escenarios de importancia de México y en diferentes foros del extranjero. Ha grabado 14 discos y 11 colaboraciones con diferentes músicos. Ha cantado a dúo con Tania Libertad, Margie Bermejo, Cecilia Toussaint, Eugenia León, Amparo Ochoa, Guillermo Briseño y con el blusista Papa John Creach entre otros. Interpretó la voz cantada de Lucha Reyes83 para la película “La Reina de la Noche” y participó con canciones en las películas “Hasta Morir”, “Dos Crímenes”, “Cilantro y Perejil” y “Asesino en Serio”84. Betsy Pecanins actuó en el foro de la Casa de la Cultura de Huajuapan el 8 de octubre de 1986, presentando su espectáculo “De la vida del Blues”.

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Cantante mexicana (1906-1944), creadora de una nueva escuela en la interpretación de la canción vernácula mexicana. Se suicidó a los 38 años de edad. 84 Página oficial de Betsy Pecanins.

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Betsy Pecanins: el blues es un canto de libertad Platicar con Betsy Pecanins es una experiencia apasionante: es entrar de golpe en el mágico mundo del blues, “canto de libertad que conmueve y rasca el alma”, como lo define la cantante. Es incursionar en esa faceta poco explorada de la música, conducidos por la plática ágil, fluida y apasionada de la cantante, sentados frente a un par de huevos divorciados en el restaurante del hotel Laredo. Esta es la segunda ocasión que Betsy actúa en territorio oaxaqueño, pero la primera que lo hace en Huajuapan. Su primera visita a Oaxaca fue hace algunos años cuando fue invitada para ofrecer un concierto en catalán, con motivo de una semana del arte español, y fue una experiencia “muy rica”. – ¿Qué espera Betsy del público oaxaqueño en esta gira, en la que por primera vez actuará en localidades del interior del estado? – Yo nunca me propongo “qué esperar”. Hay diferentes públicos, hay públicos que dan más y otros que no dan tanto pero que son muy receptivos. En todo caso, si algo espero no es del público, sino de mí misma: espero poder comunicar lo que tengo en el corazón.

Betsy Pecanins actuando en el Tercer Festival Cultural de la Mixteca, en 2003.

Delgada, menuda, de piel blanca y ojos claros, Betsy habla de su gira por el estado de Oaxaca, mientras toma un sorbo 224


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del vaso de jugo de naranja: “Lo que presento en esta gira es básicamente, pero no exclusivamente blues; partimos de él pero dentro de esto tocamos diferentes ramas como el rock, el jazz, el reggae, además de que traemos temas en español con este mismo sentir, y eso nos ha permitido acercarnos más a la gente. – ¿A qué atribuyes que el blues no llegue a los grandes públicos, que no reciba la misma promoción que otros géneros musicales? – Yo creo que se debe a que el blues no es una música “de moda”, sino que expresa una gran libertad, es un canto muy crudo, muy de la tierra. Tal vez haya quienes lo consideren un ritmo ajeno a nuestra cultura, pero está visto que la música no tiene nacionalidad, tú lo viste anoche en el concierto, la gente se emocionó y se entusiasmó. – La buena música, el buen teatro, el buen cine ¿pueden ser también productos comerciales, o si lo fueran perderían su esencia? Betsy escucha la pregunta con atención, clava la mirada en el reportero y responde sin prisa, pausadamente: – La palabra “comercial” nos da mucho miedo todavía. Como que todavía sentimos que cuando algo se comercializa pierde calidad, pero hay productos comerciales que tienen una gran calidad. Más bien, es una cuestión de niveles: un espectáculo de alto nivel tiende a tener poco público y uno de bajo nivel puede llegar a más gente. – ¿Entonces la masificación y el nivel de un espectáculo son inversamente proporcionales? – Sí, pero el nivel y la calidad son cosas diferentes, insisto; hay productos que son de un nivel alto, como puede ser un concierto de música clásica, pero no en todos los casos son un producto de calidad; en cambio, algunos espectáculos de bajo nivel, digamos, algo más popular, puede ser de excelente calidad; esto es que el nivel por sí mismo no nos indica que algo sea mejor o peor. Y aparte está el aspecto comercial, el mercado, lo que gusta más y lo que gusta menos, y eso no siempre tiene que ver con la calidad, y a veces ni siquiera con el nivel, sino que depende de otros 225


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factores. La cantante continúa hablando con entusiasmo. Confiesa que la respuesta del público en el concierto que ofreció anoche en el foro de la Casa de la Cultura le emocionó porque sintió esa empatía que el artista siempre busca con quienes están del otro lado del escenario; pero no le sorprendió: “Yo siempre he pensado que el que la gente pueda sentir y gustar de un espectáculo como De la vida del blues no es una cuestión de preparación, sino de sensibilidad; y tú puedes encontrar un público sensible en las grandes ciudades pero también en las localidades pequeñas; y la gente que estuvo anoche en el concierto es un público sensible, y eso permitió que se estableciera la comunicación entre ellos y nosotros”. La cantante termina el desayuno. Mira el reloj y se disculpa, apenada: “Tenemos que viajar a Oaxaca y preparar todo para el concierto de esta noche, tú sabes”. Pero mientras bajamos las escaleras que conducen a la recepción del hotel remata: “El blues es mi pasión, mi vida misma. Es una raíz muy importante dentro de la historia musical moderna; no es una música de moda, pero vive en nuestra modernidad muy fuertemente”. 9 de octubre de 1986.

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Alberto Cortez nació en 1940 en Rancul, provincia de La Pampa, Argentina. En 1961 grabó el tema “La escalera”, bajo la dirección musical de Paul Mauriat85, y en el mismo año un disco acompañado por la orquesta de Waldo de los Ríos86. En 1967 su carrera artística dio un giro total, con los dos recitales que presentó en el Teatro de la Zarzuela de Madrid. Ha grabado más de 40 discos y publicado 5 libros: “Equipaje”, “Soy un ser humano”, “Almacén de almas”, Desde un rincón del alma” y “Alberto Cortez por los cuatro costados”. Entre sus canciones más conocidas se encentran “Mi árbol y yo”, “En un rincón del alma”, “Mariana”, “Te llegará una rosa”, “Callejero”, “Juan Golondrina”, “Quien quiera beber conmigo”, “Aromas” y “Qué suerte he tenido de nacer”. En el año 2000, su canción “Cuando un amigo se va” fue considerada entre las tres mejores canciones en castellano del siglo XX, de acuerdo con una encuesta de un periódico de Chile. El 13 de noviembre de 1986, Alberto Cortez ofreció un concierto en el foro del Club de Leones, bajo los auspicios de la Casa de la Cultura de Huajuapan.

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Director de orquesta francés (1925-2006), considerado un maestro de las armonías y contrapuntos en la música popular. 86 Pianista, compositor, arreglista y director de orquesta nacido en Argentina (19341977). Es recordado por realizar arreglos a la música clásica para transformarla en música popular. Se suicidó en Madrid a los 43 años de edad.

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Una larga noche de aplausos y canciones El público se puso de pie y aplaudió frenéticamente durante más de un minuto. Vestido todo de negro, con los brazos cruzados sobre el pecho e inclinando ligeramente la cabeza, Alberto Cortez agradeció la ovación de los más de 350 espectadores reunidos en el Club de Leones de Huajuapan. Parecía el fin de una actuación exitosa; sin embargo el cantante argentino apenas había salido al escenario. En los teclados, Zito Zelante prolongaba el intro en espera de que el aplauso se extinguiese. Finalmente, el público comenzó a sentarse cuando la voz de Cortez llenó el local: Yo no quiero llamarme/ como me llamo/ yo quiero que me llamen/ fábrica, campo/ pueblo del sur, amigo/ sudor, trabajo. Eran las nueve y media de la noche. Casi la mitad de las sillas estaban vacías, lo que sería explicado más tarde por el director de la Casa de la Cultura, Pánfilo García Vázquez: “Nos faltó tiempo; apenas hace diez días nos ofrecieron la presentación, y aunque sabíamos que era muy apresurada, no quisimos dejar pasar la oportunidad de traer a Huajuapan un espectáculo de este nivel”. Sin embargo, al cantante parecía no importarle la escasa asistencia: contagiado por el recibimiento poco usual –“Uno está acostumbrado a que la gente le aplauda cuando termina de actuar, pero muy pocas veces te encuentras a un público que te ovaciona de pie cuando todavía no has cantado”–, se entregaba en cada interpretación. El público respondía con más aplausos cuando escuchaba las canciones conocidas, como Los demás, pero también cuando incluía temas de su más reciente disco Sueños y quimeras, como Alma mía. La ovación subió de intensidad al término de ésta, que fue la tercera melodía consecutiva, cuando Cortez saludó al público: “Felices de estar aquí, además en la Casa de la Cultura, aportando un granito de arena a esa cultura popular que tenemos que rescatar entre todos”. Conforme los minutos transcurrían, el público se iba dejando envolver por los temas de contenido humano, de rebeldía, pero también de amor y de ternura, hilvanados con 228


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las reflexiones del cantante, a veces crudas, a veces ingeniosas. Temas de reflexión: A partir de mañana empezaré a vivir/ la mitad de mi vida/ a partir de mañana empezaré a morir/ la mitad de mi muerte; de ruptura de los convencionalismos: Quiso volar igual que las gaviotas…/ y los demás dijeron “¡pobre idiota/ no sabe que volar es imposible!”…/ Más extendió las alas hacia el cielo/ y poco a poco fue ganando altura/ y los demás quedaron en el suelo/ guardando la cordura; de amor a la vida: Qué suerte he tenido de nacer/ para tener acceso a la fortuna/ de ser río en lugar de ser laguna/ de ser lluvia en lugar de ver llover; o de contenido filosófico e imágenes poéticas: Era nuestro perro y era la ternura/ esa que perdemos cada día más/ era una metáfora de la aventura/ que en el diccionario no se puede hallar/ Era el callejero de las cosas bellas/ y se fue con ellas cuando se marchó/ se bebió de golpe todas las estrellas/ se quedó dormido y ya no despertó.

Alberto Cortez durante su actuación en el Club de Leones de Huajuapan (Cortesía de Gustavo Reyes García).

Luego, cae en la rebeldía y en la crítica ante la cruda realidad de las guerras que cuestan miles de millones de dólares, en un mundo con hambre: Cuando piensas lo que cuesta cada bomba/ cada avión o cada carro de combate/ mientras mueren tantos niños en la sombra/ como espectros acosados por el hambre; o ante la realidad de los niños de la calle, expresada en Juan Golondrina (El chaquetón raído y 229


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unas maracas/ la libertad al hombro y un gorro extraño/ allá por la salida hacia Cuernavaca/ la calle tiene un duende de trece años) o en Cachorros de hombre, que es su continuación: Cachorros privados/ de amor y ternura/ cachorros golpeados/ por la desventura/ en todos los tiempos/ y en toda la tierra/ semillas al viento/ que el viento se lleva. Y la frase lapidaria: “Ninguna persona bien pensante puede dormir tranquila; ninguna persona bien sintiente puede mirar a los ojos con sinceridad; y ningún gobernante que se precie de serlo puede colgarse medallas o reconocimientos del pueblo, si siguen habiendo niños que nacen, crecen y mueren en la calle”. Cortez suda copiosamente, se quita el suéter negro, pide agua y explica: “Estas luces son para teatros más grandes y más altos, pero en un local como éste hacen que quienes estamos en el foro nos sintamos como en un asador”. Pero el intenso calor de la sala no es obstáculo para que aflore la sensibilidad cuando interpreta los temas de amor; de un amor que subsiste e incluso se fortalece con los años: De ayer a hoy te quiero/ de todas las maneras/ empieza desde cero/ te quiero como quieras/ si quieres como amante/ febril y arrebatado/ si quieres anhelante/ si quieres sosegado; o, expresado de otra manera: Te sigo queriendo/ como el primer día/ con esta alegría/ con que voy viviendo; del que sobrevive a pesar de la ausencia: Te llegará una rosa cada día/ que medie entre los dos una distancia/ y será tu silente compañía/ cuando a solas te duela la nostalgia; del amor condenado a la clandestinidad: Mi corazón no rechaza, Mariana/ nuestra pasión escondida/ más mi razón se la lleva Mariana/ por ser la fruta prohibida; o del que adquiere dimensiones de tragedia, plasmada espléndidamente por la pluma del poeta Joaquín Dicenta87: Una noche oscura/ se fue de mi casa/ cegaron mis ojos/ para no mirarla/ para no seguirla/ cerré las ventanas/ clausuré las puertas/ para no llamarla / y a la luz difusa/ de la madrugada/ me quité la 87

Dramaturgo español (1893-1967). Entre sus obras más conocidas se encuentran Leonor de Aquitania, Son mis amores reales, El libro de mis quimeras y El corazón viajero.

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vida/ para no matarla. Después de dos canciones que expresan una infinita ternura (Cuando te asomes al amor, pero ¿qué digo?/ si no has cumplido más de un año todavía/ regala una sonrisa a tu padrino y duérmete feliz, pequeña mía; y Miguitas de ternura/ yo necesito/ si te sobra un poquito/ dámelo a mí), el cantante hace gala de su buen humor: “Ya llevo 18 años seguidos de venir a México, con todo lo que ha pasado aquí, devaluaciones incluidas…. Yo ya cantaba en México cuando todavía Hugo Sánchez no fallaba los penales; cuando todavía los políticos podían dormir tranquilos… es decir, Irma Serrano aún no había publicado sus memorias; cuando los guaruras aún no escribían libros que ponían negros a sus jefes; y cuando Plácido Domingo todavía no asustaba a los niños cantando las canciones de Cri-Cri”. Y luego, hace que el público se entregue plenamente cuando empuña la guitarra e interpreta un popurrí con cuatro de sus grandes éxitos: En un rincón del alma, Te llegará una rosa, Mi árbol y yo, y Hay que ver. Con la última estrofa (Hay que ver, hay que ver/ cómo pasan los años/ parece que fue ayer/ que pisé un escenario/ con la primera vez/ tenía tanto miedo/ hay que ver, hay que ver/ hoy lo siento de nuevo), las luces de la sala se encienden, el grupo repite los últimos acordes del tema, a manera de rúbrica, y el público se pone de pie otra vez y aplaude larga, interminablemente. Sin embargo, el cantante no abandona el foro, agradece los aplausos, con un ademán los comparte con sus músicos, toma un sorbo de agua y comenta: “Bueno, ustedes no se preocupen, esto es lo que llamamos una salida falsa”. Y tras un momento de charla, que aprovecha para anunciar la venta de su nuevo libro (Soy un ser humano), interpreta cuatro temas más, presenta a sus músicos (Manolo Titi Sánchez en la batería; Santiago Reyes en la guitarra; Arturo Tito Ritrovato en el bajo; y Zito Zelante en los teclados y la dirección musical) y anuncia, ahora sí, el final: “Ojalá que el destino nos brinde la oportunidad de encontrarnos alguna vez; y si es así, ojalá que sea pronto”. Entre la ovación del público que por tercera vez le aplaude 231


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de pie, y el grito incesante (o-tra/ o-tra), Cortez interpreta el último tema. En el momento sublime, deja el micrófono en el piso y canta las últimas estrofas a pleno pulmón, llenado con su voz potente el salón: Cuando un amigo se va/ queda un espacio vacío/ que no lo puede llenar/ la llegada de otro amigo. Nuevamente las luces de la sala se encienden y otra vez la gente de pie, tributándole un largo aplauso, que se mantiene cuando el cantante lo comparte con sus músicos, cuando se arrodilla para depositar un beso en el piso del escenario; que se prolonga cuando se pone nuevamente el suéter negro de cuello en “v”, baja la escalinata, abandona el foro y sale por la puerta lateral; y aún cuando cruza la calle para introducirse en la recepción del hotel donde se hospeda. 13 de noviembre de 1986.

Soy tan comercial como cualquier otro cantante: Alberto Cortez Se niega a ser llamado poeta. Se considera “un simple palabrero, un versificador más o menos afortunado”. Se asume como “un cantante tan comercial como cualquier otro” y niega que sus temas tengan una intención política, aunque sostiene que la canción popular es un “tremendo instrumento del colonialismo”. Asegura que la música pasa por un momento de mediocridad similar al que hace dos décadas le motivó a musicalizar a poetas como Góngora, Santillana y Neruda. Considera que formamos parte de una especie “no muy afortunada”, pero a pesar de todo mantiene su fe en el ser humano. Recostado en la cama de su habitación del Hotel García Peral, Alberto Cortez fuma un cigarrillo mientras habla quedo, casi para sí. Pero su voz se torna firme cuando se le pregunta si se considera un poeta de la canción: – No, no, no. La palabra poeta es muy grande. Si usted me llama poeta a mí ¿cómo le tiene que llamar a Alfonso Reyes

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o a Amado Nervo88? Apoyado en el antebrazo, sin zapatos y con una camiseta blanca de algodón, no parece una de las grandes figuras de la canción popular. Con seriedad pero de manera amable y sencilla, se asume como un cantante “tan comercial como cualquier otro”: – Así como se vende una bicicleta, también se vende un Mercedes Benz. El tipo de música que canto le interesa a mucha gente, vendo mis discos y la gente paga por ver mis recitales; no me gusta mucho la palabra “éxito” porque eso es algo pasajero, pero he logrado el aplauso y la aceptación del público porque la gente pensante y sintiente tiene la necesidad de salir un poco de la mediocridad que hay actualmente en la música popular, que es un instrumento de comercialización por parte de las grandes empresas multinacionales. Yo me rebelo contra ello y trato de hacer una música latinoamericana que tenga sentido y raíces latinoamericanas. Reconoce que tal vez él mismo se hubiese perdido en ese “mar de mediocridad”, de haber continuado escribiendo y grabando temas intrascendentes como La mini–minifalda. Pero en 1967 su carrera dio un giro de 180 grados cuando ofreció un recital en el Teatro de la Zarzuela de Madrid, España, cantando temas de Atahualpa Yupanqui89, musicalizando los poemas 15 y 20 de Pablo Neruda90 y estrenando su canción En un rincón del alma. A casi veinte años de distancia, está convencido de que musicalizar a los grandes poetas –lo que también hizo Joan

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Poeta mexicano nacido en Tepic, Nay. (1870-1919), considerado entre los máximos representantes del modernismo. Algunas de sus obras son Serenidad, Plenitud, Perlas negras y La amada inmóvil. 89 Cantante y compositor considerado el máximo representante del folklore argentino. Fue autor de más de 350 canciones, entre ellas Luna tucumana, El arriero y Los ejes de mi carreta. 90 Poeta chileno (1904-1973), ganador del Premio Nobel de Literatura. Es considerado uno de los poetas más editados del siglo XX. Entre sus obras más conocidas se encuentran Odas elementales, Residencia en la tierra, Veinte poemas de amor y una canción desesperada y Confieso que he vivido.

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Manuel Serrat91 con los versos de Antonio Machado92– tuvo repercusiones muy importantes: – En aquel tiempo no existía quien hiciera canciones poéticas. Fue pasar del cero al infinito; de la mediocridad absoluta a la búsqueda de un verdadero camino, el de los grandes poetas, para demostrar que de la misma forma en que se podían decir estupideces en las canciones, también se podían decir cosas muy serias y muy bellas. Esto sirvió para desempolvar los libros que sólo eran adornos en las bibliotecas familiares; la palabra de los poetas abandonó las bibliotecas para salir a la calle, a caminar con los jóvenes. A pesar de ello, rechaza con vehemencia que sus canciones tengan una intención “culturizante”: – Quizás una de las cosas más vapuleadas, manipuladas y destrozadas de nuestra sociedad es la cultura. Por un lado están los “supercultos” que se aíslan, se encierran y se elitizan, y por otro quienes pretendemos descubrir al mundo que existe una cultura popular que también vale la pena. Aunque reconoce que en algunas de sus canciones hay un reclamo hacia “quienes mandan y no lo hacen adecuadamente”, rechaza ser considerado un “cantante político” o que se ubique a sus temas dentro de la “mal llamada canción de protesta que no es más que una tapadera para las intenciones políticas de algunos intérpretes o autores”: – La política es una ciencia y el arte es la sublimación del ser humano, por lo que en ningún momento debe ponerse al servicio de la ciencia para pretender establecer las formas de convivencia entre los hombres. Precisamente en mi más reciente libro, Soy un ser humano, le digo a la gente que más allá de cualquier ideología está el hombre, con todas sus contradicciones, imperfecciones y aspiraciones. Este libro se nutre de cosas humanas, emociones, sensaciones, anécdotas; 91

Cantante y compositor español nacido en 1943. Es uno de los pioneros de la llamada “nueva canción catalana”. A partir de 1969 musicaliza a poetas como Antonio Machado y Miguel Hernández. 92 Poeta español (1875-1939), integrante de la llamada “generación del 98”. Entre sus obras se encuentran Soledades, Campos de Castilla y Nuevas canciones.

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no tiene pretensiones poéticas o literarias. En todo caso serían versos aclaratorios para quienes tuviesen la tentación de ubicarme a mí también como un “cantante político”. – ¿Y cómo concibe Alberto Cortez al ser humano? – No creo que la nuestra sea una especie demasiado afortunada. Somos bastante depredadores del planeta en que vivimos; tenemos la enorme soberbia de destruir las cosas a nuestro alrededor y creamos personajes a quienes les damos un poder ilimitado para llegar hasta a autodestruirnos. Si echamos un vistazo a nuestro alrededor nos daremos cuenta de que la organización social de los animales es mucho más coherente y lógica que la nuestra. Sin embargo, Cortez mantiene la fe en el ser humano porque “en todas las especies del planeta hay valores rescatables”. Nacido hace 46 años en Rancul, un pueblo de la pampa argentina, Alberto Cortez ha realizado una temporada anual de recitales y presentaciones en México, desde hace 18 años. Por ello, la pregunta es inevitable: – ¿Qué representa México para usted? – México es un país con una enorme sensibilidad pero abandonado desde el punto de vista musical por su esfera dominante. Después de Guadalupe Trigo, que fue el último innovador, el último investigador de la música folklórica de este país, la composición en México prácticamente ha desaparecido, lo cual es lamentable. En estos momentos está totalmente abandonada, entregada a la música industrial, a la música que se difunde, la que estamos viendo diariamente, la que estamos escuchando en las emisoras de radio y que sólo responde a la urgencia de conseguir éxitos. Desde hace muchos años México tuvo una supremacía en momentos históricos de la música popular, pero hoy la ha perdido. Para mí eso significa México, un encuentro con esa sensibilidad del pueblo que tiene necesidades que van mucho más allá de la música que se le está ofreciendo actualmente. De manera discreta, Zito Zelante, el director de orquesta que durante el desarrollo de la charla permaneció recostado en la cama de al lado, ve el reloj y cruza una mirada con el 235


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cantante, pero éste no se inmuta y continúa respondiendo las preguntas con la misma amabilidad con la que accedió a dialogar con este reportero a pesar del cansancio por el vuelo Puebla-Oaxaca y por el viaje de tres horas y media por carretera hasta esta ciudad93. – ¿En qué momento de su carrera se ubica? ¿Ya ha alcanzado la cúspide o aún le falta algo para alcanzarla? – La cúspide es Huajuapan. Soy un caminante del mundo de la música y lo único que me interesa saber es que sigo caminando. Los cantantes somos personas públicas y por eso es el público quien tiene que determinar en qué momento estamos. Pero en un sentido subjetivo le puedo decir que estoy en la búsqueda, como al principio de mi vida, buscando cosas, tratando de encontrar nuevas fórmulas musicales y poéticas para poder cantar cosas con más claridad. No soy juez de mí mismo ni tengo tiempo de analizarme, porque tampoco quiero echar leña a la hoguera de mi vanidad o de mi soberbia. El reloj avanza más rápidamente de lo que quisiéramos. Ahora es Alberto Cortez quien lo mira de reojo y reitera: “La cúspide es Huajuapan y lo único importante es el recital de esta noche”. El cantante me despide con un fuerte apretón de manos y un “Nos veremos al rato”. Al salir de la habitación lo escucho dirigirse a Zito Zelante: “Si querés empezate a bañar mientras termino este cigarrillo”. Sobre una silla descubro el pantalón negro y el suéter del mismo color que el cantante usará en el concierto… 13 de noviembre de 1986

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En esa fecha no existía la supercarretera Oaxaca-Tehuacán-Cuacnopalan y el viaje tenía que hacerse por la antigua carretera federal.

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Tania Libertad de Souza Zúñiga, nació en Chiclayo, Perú, en 1952, pero adquirió la nacionalidad mexicana. Comenzó su carrera artística a los ocho años de edad. Su discografía comprende 37 álbumes, sin contar los que grabó en Perú. Ha grabado también un álbum de arias y un concierto en vivo en el club de jazz Blue Note de Nueva York. Su versatilidad le permite interpretar géneros tan variados como baladas, boleros, trova, salsa, música ranchera y música latinoamericana, entre otros. Ha compartido su talento con figuras como Armando Manzanero, Miguel Bosé y Pablo Milanés, entre otros. El 3 de septiembre de 1993, ofreció un concierto en el foro al aire libre del Seminario Diocesano, bajo los auspicios del Ayuntamiento de Huajuapan.

Tania: crónica de una noche pintada de negro

Tania Libertad durante su actuación en el Seminario de Huajuapan.

Un coro monumental de ¿cientos? ¿miles? de gargantas (imposible cuantificar por la oscuridad) lanzó al infinito las notas que desde Huajuapan, la tierra del sol, se han 237


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convertido en un himno a la nostalgia por el terruño: ¡Oh tierra del sol/ suspiro por verte/ ahora que lejos/ yo vivo sin luz, sin amor! Y entre todas las voces, potente, diáfana, expresiva, la de la peruana Tania Libertad cantando a José López Alavez94 en su propia tierra. La piel se eriza, el corazón se hincha y apresura el paso. Luego, el aplauso estruendoso, la ovación prolongada y el grito con matices de exigencia y de súplica: ¡O-tra, o-tra, o-tra! Parecía el fin de un noche pintada de negro: negro el firmamento; música con raíces negras; negro el vestido de Tania. La cantante accede, anuncia tres bises y hace que el grito del público renazca. Un público respetuoso pero emotivo, silente o efusivo en el momento oportuno. Ni la lluvia que cayó por la tarde e hizo temer por la suerte del espectáculo, ni el ambiente húmedo, ni la distancia enfriaron los ánimos. El foro al aire libre del Seminario Diocesano lució atestado, en su mayoría por adultos, aunque muchos jóvenes y hasta algunos niños hicieron acto de presencia y se entregaron de lleno a la cantante peruana radicada en México desde hace 13 años. El ambiente in crescendo; los detalles técnicos cuidados con meticuloso profesionalismo; el contenido balanceado y versátil, desde Raíz de Guarangó, un son peruano, hasta los temas románticos, las canciones de amor intenso expresado en un lenguaje que trasciende lo trillado. En el inter, música con raíces africanas, sin faltar los temas de José Alfredo Jiménez95. Con el rostro apuntando hacia el cielo, ahora sin estrellas, mientras la luna filtraba algunos rayos entre las densas nubes, la voz de Tania vibra y hace vibrar: Deja que salga la luna/ deja que se meta el sol/ para decirte cositas/ muy bonitas, corazón. 94

Compositor originario de Huajuapan de León, Oax. (1889-1974). Aunque fue autor de más de 300 obras, la más conocida es la internacional “Canción Mixteca”, que es un himno a la nostalgia por su tierra natal. 95 Originario de Dolores Hidalgo, Gto. (1926-1973), es considerado uno de los más importantes compositores mexicanos de todos los tiempos. Autor de más de 200 canciones, entre las más conocidas “El rey”, “Caminos de Guanajuato”, “Ella” y “Si nos dejan”.

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Menuda, esbelta, ahora sin la característica cabellera rizada y sin el lunar junto a la boca, Tania no sólo canta con la voz, sino con todo el cuerpo. Cada músculo, cada gesto, contiene una carga emotiva que logra la plena empatía con el público. Autores y canciones conocidas, otras de reciente cuño, son proyectadas con energía y sensibilidad, y pasean respetuosas pero alegres por los espacios del Seminario. Alvaro Carrillo96, José Alfredo, Chabuca Granda97, Félix Luna y Ariel Ramírez98, invaden los espacios y provocan el silencio, el palmoteo, arrancan el suspiro y hasta el grito bravío. En el clímax, un grito masculino provoca la sonrisa de la artista y la obliga a entrecerrar los ojos para concentrarse en la canción: ¡Yo sí me caso contigo, Tania! Y Tania responde con más música, música que le cala y cala al público hasta el fondo del alma. Música que expresa la dubitación amorosa: Sabrá Dios/ si tú me quieres o me engañas/ como no adivino/ seguiré pensando/ que me quieres solamente a mí. Música que la define como mujer y como cantante: No puedo vivir sin amar amando/ amar como te amé y me has amado/, amar, amar sin que sea un pecado/ amar, amar, amar/ amar amando. Música que mueve la fibra romántica, la vernácula, la rítmica. Música, música, música. Como encore, la Canción Mixteca, que sólo aviva la emoción y la avidez del público que la obliga a permanecer en el foro para tres bises más: Ojalá y Concierto para una Voz son los primeros. Y cuando todos pensábamos que el punto máximo se había alcanzado, la interpretación a capella 96

Compositor oaxaqueño originario de Cacahuatepec (1921-1969). Autor de numerosos boleros, inició una nueva etapa para la canción romántica mexicana. Algunas de sus canciones más conocidas son “Amor mío”, “Cancionero”, “El andariego”, “Luz de luna” y “Sabor a mí”. 97 Cantautora y folklorista peruana (1920-1983). Creó e interpretó un gran número de valses criollos y ritmos afro-peruanos. Sus composiciones más conocidas son “La flor de la canela” y “Fina estampa”. 98 Félix Luna (historiador) y Ariel Ramírez (músico), ambos de nacionalidad argentina, compusieron la canción “Alfonsina y el mar”, dedicada a la poetisa Alfonsina Storni. Luna compuso la letra y Ramírez la música.

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hace presagiar que, ahora sí, éste será el último tema. Primero callan los músicos. Tania se planta frente al micrófono y deja que su voz, limpia y rica en matices, acaricie los oídos. La poetisa suizo-argentina Alfonsina Storni99, eternizada por Félix Luna y Ariel Ramírez, vive otra vez su romance suicida con el Mar de la Plata ante ¿cientos? ¿miles? de anonadados espectadores. Luego, Tania se aleja del micrófono y canta las últimas estrofas a pleno pulmón. Sólo una tenue luz procedente del cañón seguidor ilumina su rostro y sus brazos, que parecen adquirir vida propia. Con las últimas estrofas abandona el escenario, con angustiosa lentitud: Te vas, Alfonsina, con tu soledad/ ¿qué poemas nuevos fuiste a buscar?/ una voz antigua de viento y de sal/ te requiebra el alma/ y la está llevando/ y te vas hacia allá como en sueños/ dormida, Alfonsina/ vestida de mar. El aplauso final, la ovación, son nada o casi nada ante el verdadero homenaje a una artista que sale “a morirse en la raya”, que se entrega como lo haría al ser amado: plena, decidida, incondicionalmente. Son nada ante el homenaje del silencio reinante durante las últimas estrofas: un silencio que no es silente sino expresivo, que posibilita la comunicación entre las almas; el silencio que enmarcó el romance de Alfonsina-Tania con el mar. Luego, el público sube al escenario en busca del autógrafo, pero Tania aborda presurosa un vehículo ubicado a un lado del foro. La gente se retira poco a poco y en sólo unos minutos el lugar queda vacío. El eco aprisionado entre los muros y jardines del Seminario es el único vestigio de una noche plena, redonda, negra, húmeda y breve... más breve de lo que todos hubiésemos querido. 3 de septiembre de 1993

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Poetisa suiza nacionalizada argentina (1892-1938), representante del postmodernismo, es considerada una de las voces femeninas más importantes de la poesía en lengua española de las primeras décadas del siglo XX. El 25 de octubre de 1938 se suicidó arrojándose al Mar de la Plata.

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Los ochenta mil proyectos de Tania Libertad Bolerista, intérprete del llamado canto nuevo, trovadora de coplas populares latinoamericanas, música vernácula mexicana y ritmos con raíces africanas, Tania Libertad rehuye los encasillamientos y los elitismos. Se siente mexicana pero no pretende negar su raíz peruana. Se deja guiar por la intuición y la emotividad; y uno de sus mayores anhelos es tener la suficiente vida para realizar los “ochenta mil proyectos” que bullen en su interior. Iniciando en Huajuapan su gira artística por el estado de Oaxaca, equipara la entrega del artista al público con la que se produce al hacer el amor.

Tania Libertad y el autor en Huajuapan.

Ataviada con una blusa blanca y un pantalón beige, ahora con el cabello corto, Tania responde con amabilidad, con voz que acaricia y en la que aún se aprecian acentos sureños. Bolerista desde los cinco años, habla de ese género y del disco que le abrió las puertas a los “grandes públicos". Lo define como un proyecto muy antiguo y rechaza que con él haya pretendido obtener fama y fortuna: “Yo ya cantaba boleros a los cinco años. Mi primera canción sobre un escenario fue Historia de un Amor, y a los siete años me sabía entre 200 y 300 boleros; a los diez años era cantante popular de la costa de mi tierra, y después, cuando entré a la universidad, me fui por la nueva trova”. 241


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La decisión de cantar boleros nació de una reestructuración de su vida personal y artística, hace ya 13 años, cuando llegó a México y se encontró sola. Entonces decidió asumir todos los géneros, cantar toda la música que le gustaba, bajo la premisa de que si a ella le emocionaba lo que hacía también tendría que emocionar al público. Ni ella ni la disquera sabían cómo iba a funcionar su primer disco de boleros, pero fue todo un éxito. Sin embargo, en los conciertos la gente seguía pidiéndole Alfonsina y el mar, Para vivir y los demás temas de su primer disco. No se propuso ser iniciadora de un movimiento musical, ni mucho menos “investigadora o rescatadora” sino sólo cantar a partir de sus emociones y de su necesidad de expresión. Cuando habla del bolero se apasiona y hace que uno se imagine a la niña a quien su madre ponía a escuchar estaciones de radio mexicanas para memorizar cinco canciones por día. Su rostro de facciones tiernas y firmes a la vez, sus manos delgadas, se apasionan y refuerzan la voz de la cantante cuando manifiesta su preocupación por la sobreexplotación que los medios están haciendo actualmente del bolero, porque “lo están convirtiendo en una moda y cuando las cosas se vuelven moda se agotan y tienden a desaparecer. Yo nunca he estado de moda, por eso permanezco”, afirma entre convencida y traviesa. Metida de lleno en el tema, califica el disco de boleros de Luis Miguel100 como “estupendo” y a Armando Manzanero101 como “un gran compositor”. Pero sostiene que “le daría mucho coraje saber que llegara el momento en que este género desapareciera porque los medios lo sobreexploten”. A Tania, quien afirma que sabe cantar pero no hablar porque carece de la técnica que le permita hacerlo durante 100

Cantante mexicano nacido en 1970. A mediados de la década de los ’80 grabó “Romance”, el primero de sus tres discos de boleros que acercaron al público juvenil a este género musical. 101 Compositor y cantante yucateco nacido en 1935. Autor de más de 400 canciones, de las cuales al menos 50 han alcanzado fama internacional. Entre sus temas más conocidos se encuentran “Somos novios”, “Esta tarde vi llover”, “Adoro” y “Voy a apagar la luz”.

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largo rato sin quedar afónica, le preocupa la palabra, especialmente la palabra en la letra de la canción. Es contundente cuando afirma que con el rap estuvimos a punto de perderla. Por eso le interesa que en sus canciones la palabra con carga poética y la música popular digerible vayan de la mano: “Yo no hago canciones ni para músicos ni para intelectuales; a mi me interesa enormemente el pueblo. En la medida que yo pueda tener un grado de comunicación con ese pueblo voy a ser verdaderamente artista popular; si no, voy a seguir siendo elitista, y yo creo que mi carácter elitista lo dejé hace mucho rato atrás”, puntualiza. Cantar a Consuelito, Greever y Valdelamar Con voz suave, dulce y ágil, Tania Libertad dialoga con los reporteros en un pequeño salón del hotel Casablanca de esta ciudad. Su vestimenta sencilla y su espontaneidad contrastan con la recia personalidad que proyecta sobre el escenario. Su voz se torna firme por momentos, sin perder el tono amable. A veces ríe espontánea y juguetona, y también por momentos refuerza sus respuestas cantando fragmentos de alguna tonada. Habla de los poetas y confiesa su predilección por los peruanos Juan Gonzalo Rosé102 y César Calvo103, y por los mexicanos Jaime Sabines, Octavio Paz104 y Marco Antonio Montes de Oca105. Y aunque defiende el valor de la palabra en la canción, precisa que no toda la letra de las 102

Escritor peruano (1928-1983) autor de poesía de contenido social pero también lírica. Entre sus obras más importantes se encuentran “Las cartas secuestradas”, “Geografía implacable” y “Los malos poemas”. 103 Poeta, periodista y compositor peruano (1940-2000) considerado en sus inicios un continuador de la lírica de Juan Gonzalo Rosé. Autor de “Poemas bajo tierra”, “Ausencias y retardos” y “Pedestal para nadie”, entre otras obras. 104 Poeta y ensayista originario de México, D.F. (1914-1998). Galardonado con los premios Cervantes (España), Ollín Yolitztli (México), T. S. Elliot (Estados Unidos) y Nobel de Literatura (1990). Autor de “El laberinto de la soledad”, “Libertad bajo palabra”, “El arco y la lira”, “Posdata” y “Sor Juana Inés de la Cruz o las trampas de la fe”, entre otras obras. 105 Poeta, narrador y pintor mexicano nacido en 1932. Entre sus principales obras se encuentran “En honor de las palabras”, “El corazón de la flauta” y “El jardín que los dioses frecuentaron”.

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canciones debe ser poesía, ni toda la poesía puede musicalizarse. Afirma que algunas canciones conocidas pueden ser poesía popular: “Por ejemplo, la canción Caballo Viejo tiene una parte hermosa, aquella que dice: Cuando el amor llega así/ de esa manera/ uno no se da ni cuenta/ amarse no tiene horario/ ni fecha en el calendario”. Menciona a Chabuca Granda, “quien no se consideraba poeta porque decía que poeta es quien tiene la capacidad de sorprender; pero a mi Chabuca me sigue sorprendiendo”. Mujer de “ochenta mil proyectos”, Tania Libertad revela su intención de montar un espectáculo y grabar un disco llamado Africa está en América, basado en música y danza con raíces africanas. “Es uno de esos proyectos que he venido posponiendo durante 20 años”, acota. Otros viejo proyecto –“por proyectos no paro y sólo espero que me alcance la vida para realizarlos”– es cantar en un mismo disco a Consuelito Velásquez106, María Greever107 y Emma Elena Valdelamar108. Comenta en son de broma; “Ojalá los periódicos de aquí no los lean mis compañeras cantantes porque me roban la idea”, y adelanta que ese disco se llamaría Tres Mujeres Apasionadas. Confiesa que también le gustaría grabar trova yucateca, y reitera: “Ojalá me alcance la vida”. Mujer apasionada, equipara la entrega del artista con hacer el amor: “Hacer el amor es simplemente hacer el amor; es esa entrega maravillosa, sin pensar en nada. Cuando uno se sube a un escenario es para entregarse, para desbordarse, 106

Compositora jaliciense originaria de Ciudad Guzmán (1924-2005). Su canción más conocida es “Bésame mucho”, que ha sido traducida a más de 20 idiomas y grabada por Sara Montiel, los Beatles, Celine Dion, Plácido Domingo y Joao Gilberto, entre otros intérpretes. 107 Compositora mexicana (1884-1951) cuyo verdadero nombre era María Joaquina de la Portilla. Autora de un gran número de temas románticos, entre los que destacan "Júrame", "Muñequita linda", "Ti-pi-ti-pi-tín", "México canta" y "Lamento gitano". 108 Bolerista originaria de la Ciudad de México. Entre sus canciones más conocidas podemos mencionar “Mil besos”, “Cheque en blanco”, “Mucho corazón” y “Devuélveme el corazón”. Sus temas han sido interpretados por Pedro Vargas, Julio Jaramillo, Javier Solís, Los Panchos, Armando Manzanero y Juan Gabriel, entre otros.

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porque si te subes con temores, con reservas ¡mejor no te subas!”. Afirma que se siente mexicana porque vive aquí desde hace 13 años, porque tiene un hijo mexicano y porque no quiere vivir en otra parte; sin embargo, se sabe peruana por su raíz, que no puede ni quiere desaparecer. Sin maquillaje, ataviada sencillamente, Tania es una de esas mujeres que fuera del escenario pueden pasar por una más, y así lo hace notar un reportero cuando comenta que horas antes la vio en el centro de la ciudad pasando inadvertida entre la gente. Tania ríe, se apena y explica: “Hay gente a la que le gusta apantallar todo el tiempo; a mí sólo me gusta hacerlo sobre el escenario y con lo que sé hacer: cantar”. Y apoya esa defensa a ultranza de su privacidad: “Yo necesito convivir con los demás, poder salir a la calle, sentarme a comer unos tacos, meterme a una cantina y tomarme un tequila, porque tengo que estar en contacto con la gente, tengo que nutrirme de ese contacto. Por eso no he querido incursionar mucho en la televisión”. Con un ademán y entre risas, Tania “pide paz”; explica que puede pasar seis horas cantando pero no hablando. Posa junto a los reporteros y poco a poco se va quedando sola para empezar a preparar su transfiguración. Horas después, sobre el escenario, es otra: es la mujer que „apantalla‟ cantando, que eriza la piel de quienes la escuchan, que se entrega plena, incondicionalmente a su público, en una cópula espiritual sobre el tablado. 3 de septiembre de 1993

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CAPITULO 6

Contra la pretendida muerte de la epístola. Reminiscencia de Guido Reni En la soledad de mi estudio, en el preámbulo de la madrugada y entre ruidos nocturnos, surgen evocaciones de rostros y lugares de mi pasado reciente o remoto. La música de Mireille Mathieu y la ausencia de seres queridos convocan a la nostalgia que se instala en estas horas robadas al sueño una noche de sábado. En el jardín cantos de grillos; ladridos de perros en la calle; ruidos lejanos de una fiesta procedentes de algún punto de la ciudad; y la luna, enorme, asomándose por la ventana. Soledad en mi alma. Con la música llega el recuerdo de las noches de viernes, hace ya muchos años, en el departamento de Guido Reni 80 en la colonia Alfonso XIII, con Raymundo (primo de sangre, hermano por afinidad del alma), sentados en la alfombra, escuchando música. Infaltables el Concierto número 1 para piano y orquesta de Tchaikovsky, Equipaje de Alberto Cortez y Más fuerte que nosotros de Francis Lai. A mis 16 años, en largas horas de charla, fui conociendo también a los monstruos sagrados de la literatura. A través de la vívida plática de Raymundo empecé a admirar a Cortázar, a Hesse, a Miguel Angel Asturias y por supuesto a García Márquez. En esas noches, o como resultado de ellas, me enamoré de la cándida Eréndira y aborrecí a su desalmada abuela que la obligaba a prostituirse para cobrarse la casa que se había quemado por un parpadeo de la joven; 246


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me apiadé del decrépito dictador de El otoño del patriarca que buscaba por los pasillos del palacio de gobierno el recuerdo de Manuela Sánchez (“¿Por qué te tengo que encontrar, si no te me has perdido?”); y me dejé cautivar por el mágico mundo de Macondo y su historia secular. Disfrutando de mis primeras copas de licor supe de la nostalgia de Raymundo por Huajuapan y Tonalá, y de sus propósitos futuros de abandonar la urbe y retornar a la apacible vida de provincia. En una de esas noches entendí por qué Equipaje le impactaba tanto: cuando era niño, uno de sus compañeros de escuela salía por las tardes en su bicicleta al antiguo campo aéreo y esperaba el aterrizaje de las avionetas para pedalear a su lado, simulando una competencia desigual. Un día perdió el control, invadió la pista y la avioneta le destrozó el cráneo. A muchos años de distancia, su figura afloraba con la letra de Cortez: “Porque tuve un amigo/ que se fue con el alma/ él volaba conmigo/ compartiendo mis alas/ entrañable paisaje/ de las cosas amadas/ mi canción, mi equipaje/ son vivencias del alma). Han transcurrido 16 o 17 años. Ya no hay más veladas como esas pero conservo el amor por la literatura y por la música. La nostalgia se hace presente en noches como ésta. Raymundo sigue viviendo en México, dejando “para más tarde” sus proyectos de retornar a Huajuapan. Yo, que planeaba una larga estancia en la que un día fue “la región más transparente del aire” vine con la intención de estar sólo un año… y ya llevo 15. A los amigos se los lleva el tiempo Hace unas semanas, ante montañas de papeles, intentando poner un poco de orden en el caos de mi estudio, hallé la primera carta de Mario Bonilla, y la nostalgia me invadió. Le conocí en 1985; vino a Huajuapan para presentar el espectáculo teatral Loa a Juana Inés, por invitación de la Sociedad Cultural Huajuapeña. Escribí una crónica sobre el espectáculo y se la hice llegar a través de Miguel Angel. La carta era de agradecimiento y marcó el inicio de una 247


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fructífera, aunque breve amistad. Su alma de literato se hacía presente en cada línea; sin proponérselo, simplemente dejando que la pluma se deslizara sobre el papel, hacía bellas crónicas del ambiente poblano. Cruzamos varias misivas y algunos telefonemas pero un día, sin motivo aparente, perdimos el contacto. No sé quién dejó de contestar la primera carta, pero debo haber sido yo, porque tengo que aceptar que no siempre tengo la constancia necesaria para mantener el contacto con los amigos cuando el tiempo o la distancia (¿tal vez la rutina diaria?) se interponen. Así me ocurrió con Jorge, Gerardo, Lulú Rosales, Julio Armando, Víctor Manuel y muchos más. La frase de Raymundo resultó profética: “a los amigos se los lleva el tiempo”… Las cartas que se niegan a morir Releyendo una columna de José Emilio Pacheco, he descubierto una cita de Monsiváis sobre la desaparición del género epistolar. El avance tecnológico ha significado la muerte (o casi) de las cartas clásicas; hoy se escribe poco. ¿Para qué hacerlo cuando se tiene la instantaneidad del teléfono, sobre todo si es celular? Y sin embargo, además de unos cuantos parias de la tecnología que no tienen línea telefónica, quedamos dos o tres románticos trasnochados que nos rebelamos ante la muerte de la carta y escribimos por el simple placer de hacerlo. A veces escribimos a quienes veremos en un rato más; o a quienes podríamos llamar por teléfono en ese instante. Tal vez lo hacemos porque de esa forma podemos expresarnos mejor; tal vez por no permitir que la pluma se empolve (no olvidemos que la función hace al órgano); o sólo por un romanticismo decimonónico del que aún no logramos liberarnos. Tal vez a eso obedezca la resurrección de la columna Divagando; tal vez sea un acto de rebeldía ante la pretendida muerte de la epístola; tal vez la necesidad de escribir cartas dirigidas a nadie… y compartirlas con los lectores. 13 de marzo de 1993.

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Carlitos es un niño de primaria que vive en la calle Trujano frente a la emisora de radio. Su mamá es integrante de la Asociación de Personas con Discapacidad de la Mixteca. Este jueves, al término de un desayuno-entrevista con los directivos de esa agrupación, ella platicó que el niño le pidió que dijera a los radioescuchas que su mayor deseo es tener muchos amigos. Por eso escribí la siguiente

Carta a Carlitos, un niño con discapacidad que no es del alma Cuando supe por tu mamá que lo que más deseas es tener muchos amigos, decidí escribir esta carta, pues me llamó la atención que un niño de tu edad sepa apreciar algo que a veces los adultos no alcanzamos a entender: lo que vale realmente la amistad. Y decidí también grabarte un casete con canciones de alguien que como tú posee la sabiduría necesaria para entender que la verdadera riqueza no consiste en la acumulación de bienes materiales o en una vida de lujos y comodidades, sino en la posesión de verdaderos amigos. Uno es rico en la medida que cuenta con personas con las que es capaz de compartir lo que de agradable o desagradable tiene la vida. En las canciones de Alberto Cortez hallarás muchos elementos para reafirmar esa convicción, para fortalecer el concepto de la verdadera amistad y para valorar la belleza de la vida. Sé que descubrirás o redescubrirás que la vida es bella y que cada día constituye un verdadero milagro que debemos apreciar y aprovechar. Sé que eres diferente a muchos niños de tu edad porque tú 249


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no puedes correr o jugar con la libertad que ellos lo hacen. Sé que tú formas parte de ese grupo de personas a quienes se llama comúnmente discapacitados; pero también sé que posees algo que tal vez muchos de quienes nos consideramos normales no tenemos: una gran voluntad, un enorme deseo de prepararte para ser alguien en la vida. También sé que los verdaderos discapacitados no son quienes tienen una limitación de movimiento, de audición o de visión, sino los que carecen de la capacidad de amar, de entregar su amistad sin condiciones, de valorar el milagro cotidiano de la vida. Los verdaderos discapacitados son los del alma, los que siendo jóvenes tienen un corazón viejo y los que siendo viejos lo son más porque olvidaron la pureza, la autenticidad y la frescura de los niños. ¡Qué bueno que tú no eres de esos! ¡Qué bueno que tu limitación física no alcance tu alma y tu corazón! Yo sé que debe ser difícil tener que superar lo que tú has tenido que vencer diariamente; pero también sé que puedes lograr lo que te propongas, porque las adversidades son las que realmente fortalecen el espíritu. Me despido de ti con un fuerte abrazo y con la esperanza de que me consideres un amigo. Agosto de 1996

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Historias de Huajuapan

… Y todo por unos limones (Crónica de una muerte estúpida) Una vida segada, una esperanza en el futuro cortada de tajo, un hogar enlutado… y todo por unos limones. Se llamaba José Macario. Sus padres son originarios de San Andrés Yutatio y vinieron a radicar a Huajuapan con la esperanza de encontrar mejores condiciones de vida. La esperanza acabó en espejismo: José, el padre, terminó cargando bultos con un diablito; Norma Lucía, la madre, lavando ropa ajena; José Macario, a sus 12 años de edad, vendiendo pepitas en la calle para contribuir en algo al raquítico presupuesto familiar y poder asistir a la escuela 23 de julio de la colonia Santa Rosa, donde cursaba el cuarto grado de primaria. En su momento fue el objeto de los sueños y esperanzas de su padre, quien anhelaba para él un futuro distinto, algo mejor que terminar cargando bultos en las terminales y en los mercados, que tener que “romperse el lomo de sol a sol para ganar el pan”. Fue el depositario de los sueños y esperanzas de sus padres; sueños y esperanzas que terminaron hechos añicos, destrozados por los perdigones criminales, mezclados con el chorro negruzco de sangre que manó de su pecho y se fundió con la hierba, las ramas y la tierra de la barranca. La sangre en el muro Como una muda protesta por el crimen absurdo, el muro de la granja que da a la barranca quedó salpicado de sangre; sangre inocente que brotó sin saber por qué lo hacía; sangre que manchó la hierba y las conciencias. Esa tarde José Macario estaba solo: su madre había ido a la Ciudad de México a visitar a un familiar; su padre aún no regresaba del trabajo. Salió a jugar con sus amigos; bajó a la barranca, su refugio habitual, y allí permaneció un largo rato, hasta que sus amigos se alejaron. Tal vez los limones que se veían jugosos desde el arroyo lo atrajeron con influjo 251


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magnético; eso nadie podrá saberlo ya. Escaló el muro de retención, trepó a la barda y trató de cortar los limones a través de la malla ciclón. Recibió el disparo en el centro del pecho y cayó al fondo de la barranca. En las casas más cercanas el estampido sonó apagado; en la barranca, José Macario yacía con el pecho floreado por los perdigones; en la calle la vida seguía su curso; en la barranca la sangre fluía a chorros y una vida se apagaba. Adentro, en la granja, sólo Dios sabe lo que pasaba, sólo El puede saber lo que habrá pensado quien disparó, al ver caer al niño como una fruta madura… sólo Dios…. Era un chamaco, ¡no tenían por qué matarlo! “No sé qué hora era, pero llegué a la casa y no lo vi. Creí que estaba en su cuarto, porque a veces cuando llego ya está dormido. Al rato tocaron la puerta, era mi sobrina que me decía: „¡Vaya usté a ver, es José, lo mataron!‟. „¿Cómo que lo mataron?‟, le pregunté y salí corriendo. Ya lo tenían los agentes en la camioneta. Como ya era de noche, yo todavía lo levanté para verle la cara; y sí, era él, estaba lleno de sangre. Yo no sé qué pasó, señor. Si el chamaco estaba cortando los limones me hubieran llamado a mí que soy su padre, yo lo hubiera corregido o le hubiera dado una cintariza, pero no tenían por qué tirarle un balazo. Tenía 12 años, ay está el papel, véalo usté, iba en la escuela, en cuarto año. ¡Era un chamaco, no tenían por qué matarlo! Dicen que fue el hijo de don Ernesto109, pero como ellos tienen dinero, ¡ni esperanzas de que lo castiguen! Yo fui a la presidencia porque no tengo un centavo, y el presidente municipal me dio un lote en el panteón y pagó la caja. Después llegó un señor que dijo que es licenciado, que iba de parte de la familia de don Ernesto, y me ofreció dinero pero yo le dije que no lo necesitaba. ¿Cómo cree usté que voy a aceptarles un centavo? Sería como si vendiera a mi propia carne. ¡Ay se 109

Los datos del presunto autor del homicidio han sido cambiados, porque cuando ocurrieron los hechos era menor de edad.

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lo dejo a Dios y a las autoridades! Que castiguen al que lo mató, porque a mi hijo no lo van a resucitar, pero yo no voy a vender a mi propia carne, cómo cree usté eso…” Y las lágrimas fluyen. La entereza que José había mostrado mientras esperaba que concluyera la autopsia da paso a la rabia, a la desesperación. Enrique y yo nos miramos, ambos con el nudo que atenaza la garganta, sin saber qué decirle porque, ¿qué se puede decir a un padre que ha perdido a su hijo en la forma más absurda y estúpida imaginable? Sólo “un tal José” Fue un crimen estúpido. Tal vez esto sea un pleonasmo, porque a fin de cuentas todos los crímenes lo son. Pero pleonasmo o no, fue un crimen estúpido y absurdo. Una vida segada, una esperanza en el futuro cortada de tajo, un hogar enlutado, un niño caído al impacto de los perdigones asesinos; sangre, hierba y arena mezcladas; la mancha en el muro y en la conciencia… y todo por unos limones. Pero a fin de cuentas ¿qué interesa? El sólo era José Macario. No tenía un apellido rimbombante ¿A quién interesa su muerte? Era sólo un vendedor de pepitas, hijo de un cargador y de una lavandera. Era sólo un tal José; y ahora ya no es sino una modesta cruz de madera sobre un montón de tierra. Ahora ya no es nadie y muy pronto quedará sepultado bajo paletadas y más paletadas de olvido: la vida tiene que seguir. Y sin embargo, no he podido apartar ni un instante de mi mente a Chesterton cuando escribió, refiriéndose a una pobre niña londinense a quien tendrían que rapar para quitarle los piojos: Que todo alrededor de ella, la fábrica social entera, tiemble y caiga, y que las columnas de la sociedad se sacudan y las cúpulas de los siglos se vengan abajo, pero a esa niña no se le tocará un solo cabello. ¿Qué diría Chesterton ante esto? ¿Qué habría que cambiar para que un niño no tuviera que caer abatido por los perdigones criminales? 17 de noviembre de 1989

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BIBLIOGRAFIA Ayuntamiento de Huajuapan, Revista Yucunitzá, 1993. Casa de la Cultura de Huajuapan, Gaceta de aniversario, 2003. Círigo, Francisco, 24 de octubre, el sismo de Huajuapan, Ediciones del Ayuntamiento de Huajuapan, 1988. Comisión Nacional de los Derechos Humanos, Informe de actividades del 1 de enero al 31 de diciembre de 2003. Hermandad del Señor de los Corazones, Angel de libertad y corazón del pueblo, 2002. Herrera Sánchez, Josafat, 2664 horas de heroísmo, 1991. Herrera Sánchez, Josafat, Ñudee, tierra de valientes, Editorial Jus, 1962. Herrera Sánchez, Josafat, San José, un barrio con historia. Legaria Corro, Genaro, Huajuapan recóndito. Martínez Cedillo, Margarito, Los comienzos de la evangelización de Huajuapan y la devoción al Señor de los Corazones, 2004. Martínez, Luis de Guadalupe, Huajuapan ayer y hoy, Ediciones del Congreso de Oaxaca, 2001. Martínez, Luis de Guadalupe, La lucha electoral del PAN en Oaxaca, 2002. Martínez, Luis de Guadalupe, Poesía mixteca contemporánea, Ediciones del Ayuntamiento de Huajuapan, 1998. 254


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Mendoza Guerrero, Telésforo, Monografía del distrito de Huajuapan, Oax., Ediciones del gobierno de Oaxaca, 1992. Ortiz, O. Porfirio F., El Señor de los Corazones en la procesión, 2004. Periódico El Imparcial de Oaxaca, varios números. Periódico El Universal, varios números. Periódico La Jornada, varios números. Periódico Noticias de Oaxaca, varios números. Revista Proceso, 10 de junio de 1996. Steffen Riedemann, Cristina, Los comerciantes de Huajuapan de León, Oaxaca, 1920–1980, Plaza y Valdés editores, 2001. Universidad Tecnológica de la Mixteca, Utemita, órgano de difusión, 14/XII/04.

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NI CALLADA NI DORMIDA HISTORIAS DE HUAJUAPAN Se termin贸 de imprimir en junio de 2008 en los talleres de Willis Proces, etc., etc, con un tiro de 2000 ejemplares.

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