Cada proceso creativo es en sí, un viaje. Un camino que, como el del héroe (o heroínas) está lleno de obstáculos y también de experiencias memorables. El bosque oscuro es uno de esos trances dentro del hacer creativo, en donde se fantasman las inseguridades y temores respecto del propio hacer. Cuando pensamos en un bosque irremediablemente vienen a nuestra memoria los insondables paisajes de los viejos cuentos de hadas: lugares llenos de peligros, monstruos y moralejas. Pero también como hábitat de espíritus elementales: seres antiguos que también merodean en los bosques personales, esas enmarañadas selvas de flora exótica, espacios de extravío íntimo, donde las ideas, deseos y pensamientos quedan ocultos del escrutinio ajeno bajo hojas, ramas y raíces. Esos bosques con sus caperucitas salvajes, lobas rojas y abuelas ermitañas dejan de ser criaturas extrañas y se tornan cotidianas compañeras en el acto de dibujar, de dar contorno a lo que reside en la memoria cierta y mentirosa. Somos las muchas manos de mujeres diferentes entre sí, unidas a los negros ríos de la tinta que aquí son convocados, en el viejo arte de contar historias. Presentamos “El bosque oscuro”, fanzine creado y publicado por el colectivo homónimo, alumnas todas del “Taller de cómic autobiográfico”, dictado por Marcela “Maliki” Trujillo, dibujante, pintora, autora y pionera de este género en Chile. Este, el primero de muchos números, reúne los trabajos realizados durante la pandemia
Fanzine nº1 - Invierno 2021
parte de de 2020.