De Matute al barrio de Arellano

Por César Valencia

Cómo vivo la amistad de Colo Colo y Alianza Lima, desde pequeño he sabido dicha relación dada después de tan trágico accidente, desde el 2011 –2012 empecé a ir al estadio, siempre a Popular Sur (Galería). En ocasiones veía camisetas de Colo Colo en la tribuna, algún campeonato o actividad, lo cual generaba atención e interés por querer tener una camiseta así, pues podríamos tener siempre la de Alianza Lima y únicamente vestir otra camiseta la de Colo Colo, presenciar eso ya marco en mí el saber y reconocer aquella hermandad, estando en primer lugar muy agradecido, conociendo también, valorando y descastado que siendo un equipo del país vecino (marcado según la historia por muchos conflictos bélicos) sea quien nos ayude en tal situación. En el 2016 tuve la oportunidad de estar un período en Chile, desde antes de viajar estuve buscando en Google Maps donde quedaba el estadio de Colo Colo, David Arellano, pues ir a conocerlo sería un hecho si o si a realizar. Una vez en Chile pude compartir con hermanos Aliancistas quienes vivían allá y conocían a gente Colocolina, lo cual hizo no demorase tanto en conocer gente Alba, yo soy músico y así fue que empezó la aventura yendo a ensayar con la banda de Arellano en el centro cultural. Empecé a conocer amigos, y así fue que llegó la primera invitación para ir al Estadio. Pasó el tiempo y se volvió algo habitual, un viaje a región y muchos partidos más en la ruca, me iba aprendiendo las canciones, ya estaba viviendo la hermandad en persona, la gente en galería reconocía mi camiseta y podía sentir esa amistad, sentirme como en casa. Me sentía uno más al cantar y gritar un gol del cacike. Conocí grandes amigos, fue tanto así que yo ya empecé a sentir algo más que una amistad. A fines del 2016 pude asistir a la final de la Copa Chile, donde me hacen una pregunta. ¿Tú sientes los goles de Colo Colo? En ese momento no respondí, pero supe que era algo más que una hermandad, tanto tiempo sin estar gritando en persona goles de mi Club empecé a darme cuenta que no solo era por amistad o hermandad el cantar y gritar los goles de Colo Colo, sino que se había convertido en parte de mí. Aguante la hermandad más linda qué hay en el futbol. Alianza y Colo Colo, simplemente uno solo.