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L! INSURRECCIO.N ~N_ FrLI.PilflAS " .:.;
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LA l_!!SURRECCUJN EN
FILIPINAS P0R
MANU E L I
SA$T~ON
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ex Diputado a Cortes, ex GoDernador civil en aquell as islas, Gonscjero de Administraci?n, ex Intendente general de Hacienda interino, Capitan en el escuadr6n V.oluntarios de Manila, etc., etc.
M A D R U) IMP. DE LA" V IUDA DEM . MINUESA DE LOS Ri o s
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il,f.igu el Se.vet, 18. - 'Ilelefono 651.
1897
AYALA
MUSEUM LIBRARY
1464 1~7
Esta obra es propie-dad de su autor, y no se podra reproducir sin su permiso. - Queda hecho el dep6sito que marca la ley.
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PROE MIO ' ~ -
A ,un p1.rnbr@ qi<le @faiece, tates mor- , biQas manifestaci@nes Cllales liis <ffiUe adaba de pteseirJ,tail.' gFan. pa,rte de} f)Ueblo tagal@, amtes {Jll!le ser discwti- · cl.p p@r los poMti<ws y juzga0.0 pom l@s il\llist0'ria<ilores, le il'lteresa ser @b~e't0 las ve:l!lexi(l)lil,es de l&s_IillJ:(l)TaHst a,s y l diagnostico de fos mMic0s., .p@re si estos elemelll.t(i)S cientifie@s, . J zgando el ma,1 al,udid:(l), l@ tfoeiaD,Ja~ _ sin <<1rna perd.ida del 6<iJilll.i[ibri.o elli: e cbnstitutiw:> Jill(l)Ta!~, · oMe-ndriase a mo C@:J)l.S<ilfa01(ima aitel!ll1.1J.aate rpmia h -ohos tan imauditos ·m!l:aies los de 1 presefite rehe!liion eR FiiJ.ipimas,
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PROD!IO
una explicaliva clara. una raz(m dft patogenia digna de no ser meno preciada por aquellos que legislan definen en juicios solemnes para lo presente y lo futuroJ>. Entendemos fuera fortuna singÂľ. lar para el gran numero de filipinos ingratos, delerminadores del triste cruel acaecimiento revoluciooa1â&#x20AC;˘10 de 1896, poder aplicar al hablar del mismo aquella frase del Dr. Laborde en sus interesantes cartas a su cnlega el Dr. Moreau: c<Un vent de fo-lie, a passe par laÂť, 6 lo~que es igua.l para nosotros: el pueblo tagalo acaba de sufrir un verdadero intenso acceso de locura. Solamenle evocando esta hip6tesis es como nosotros, testigos presenciales de los hechos, podremos con Lener en algo, no en todo ni aun en mucho, las durezas justisirnas que debemos producir y produciremos al calificar y somera y pobremente describir el delito perpetrado
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por los reheldes tagalos 0onitt1:a la secular magftaruirna d0milJilact6'Jil. espaifio~a en el extremo elriemte; eJil. el gran Archipielago ;t!iJi]ili'l!tG; en ese ;vasto imperio q~e, para la <Corgn,a de Espan.a, adguiirieron los 1Il.et'6icos · il'lc01:1¥ebi1Dies trsfuernos 'Ille M~,gaUa~ ues y ,de Legaspi, fiieles mterp:tretes de la s.abia ley con q'Ulle Es]i)a©.a trazil> el 1m'lcedhni'entg SlHJ!'Ve, htwma\miita.rio, vet,d'aderam~lljltie ,cristia:!ID.6 C(!)l'l. que aqu:enos in.di:os hal\1 sid@ re~iido~ en el tr'anscttl'SO' de todos les tiempos y edades. Desde la p6quedad de ilill\ilesrt1:as fuerzas de illltieiigeRcia ;a@ 'hos es posible aeometer, lil,i ]0 so:ili:am6s, em.presa tai ar,d,l!IJa cRail paFai · lil'(i)S~ o.tros 'flrnra fa, de Feiatar p@r m0do, c@mpleto; J~ien y fielmelilte, ,cila: .rin:surrecci<'Jn f.iliF>ima de _1896», de i{')tlrdurabie, e~ecraeta y t\e't1dca me-1ililo~ ria; lo qu:e merame~;ite_i,mt.~)l),t amos, por iliiilpulsos de nues,fulo patFio am(i)r y de nustno afecrfi© st'Ii),g~lar bacia
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Pft0£MIO
aquella espaiiola tierra, desde nuestra juventud IDUl' frecuentada, es: l. Recordar algo del estado politico-social en ttue hallaron los espafioles a los indigenas filipinos. · 2. Bosquejar cuanto entendemos debe ese pueblo filipino a la dominaci6n espafiola. ::S. Discurrir breYernente ·acerca de lo que en concepto nnestro se refiere al periodo preparatorio y prodr6m ico de la abonimable rebeli6n de los·tagalos a quienes aludimos. 4. Detallar un poco de la rebeli6n misma. 5. y ultimo. Puntualizar lo que nuestro juicio nos sen.ala como mas conveniente para la causa sanla de la integridad del territorio. 0
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Si por la pureza de nuestras intenciones el lector quiere disimular nuestras notorias deficiencias de forma, y sobre todo las que podamos
PROEMl0
reveiar en doclirinales ideas, r.ectbiremos mePced, hacia fa eua1 siern[Pre , pr0digarem.os el mas sincer0 i;ec0noc:imiento. ,',1
MANtrni. SAsmR@N,.
Mo.d,d d, 189'7. ,
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PRIMERA FAR TE
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. CAPfTlJL,O PlUMERO Sintesis del estado politico-social en que los espafloles hallaron a los pobladores de las islas FiUpin-as.
Entre las mmqt1istas y descubrimientos de pueblos iglilo tos, de qtrn puedan gloriarse gengricamen te los 456 millones de individt10s que coIDstituyen la raza Manca 6 ca,t1casica, no se ha l0grad0 Hna de las priJilleras ni e'.fec~uado uID0 sol0 de los segundos, por modo mas Conforme con la moral eris man.a, <iftle aquet que se evidencia en el descubrimie nto, con.quis,t a y regimen iIDstilttlido por 10s espai'ioles en el Archipielag¡o fi.lipi.0.0.
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LA JXSL~RECCI6N
Un pufiado de heroicos navegantes, mon~ando fragiles carabelas, ninguna mayor de 130 toneladas, dirigidas con brujula, cuyas obserYaciones no podian ser enmendadas, desconociendose, segun se desconocian, las oscilaciones de declinaci6n; un pufiado de hombres de espada, quienes la esgrimieron en mas ocasiones que para sostener el derecho de dominio, indiscutible por toda ley moral, natural y divina, fielmente interpretadas por la ley civil y por los c6digos internacionales, para dirimir contiendas y vengar ultrajes que de continuo y desde lo inmernorial venian manteniendo e infiriendose los pueblos que aquellos venian descubriendo; y un pu.ii.ado de misioneros (ii los frail es de Filipinas ! ! ) que acompafiaban siempre aquellas expedicioâ&#x20AC;˘nes y quienes con cristiana fe y palabra santa, brotada de sus labios entusiasta y elocuente, afrontando todo linaje de
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riesgos personales, fueron los ve:rdaderos coriquistadcm~s de aquellas bordas dy salvajes (> ·se,misaJv.ajes, ya fhleran estas com:ptlestas de aetas 6 de malayos : m1 pun.ado de nav;egantes, an pui'i.ad0 <il.e 11l@mlbres espada, un pwi.ado de frailes , de todos 1os cu.ales, ~eiigiosos, guerreros y navegantes , s6lo algu.R esc0rbutico por las 1wiva0iones solia 1@grar volver a -ver el lugar y si•tio de su cm1a: t res plililiado_s de 1il.omib11es, en m10 solo amalgamad0 s y patri<f>~ ticamente eon:fan.didos; he aftli l@s tres elementos ([Ile el cielo envi6, p011 medio de la Es;paina de Eelii;pe U, a las tierras ql!le comstit uyen. e1 Arohipielago magafilanico. Y con la foliz 1:legada de aqlliellos espai'i.oles inici6se arli, c@n fa primera misa celebr.ada en la iilID®@cadura deLrio de Butuan y afio de 1,521, la era <!lich0sa de la rntleva vicl.a, ia vida del Evangelio y de la civ11izaci6n pa\ra aqueli0s <il.esdichados plile-
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blos. presa de la ignorancia y de la barbarie. t.Cual era si no el estado politico social en que sumidos estaban'? Hallaron los espafioles en Filipinas menos de un millon de habitantes, divididos en tribus sojuzgadas por caudilJos 6 reyezuelos. Datos entre los bisayas, 1}faguinoo entre los tagalos, sin otro titulo de soberania que el impuesto por la mayor fuerza bruta y crueldades de quien con tales atributos de vida muscular y perversi- .. dad de sentimientos lo pretendia y lograba. Hallaron los espafioles en aquellas tierras oceanicas, por l\Iagallanes descubiertas y por Villalobos llamadas Filipinas, una exigua representacion de infinidad de razas inferiores. todas malayas y mongolico-malayas, de cuyos odios reciprocos y de cuya division y confusion es bnena prueba los treinta y un dialectos que alli se hablaban entre aquellas tribus, sin
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EN FILIPINAS
otro ohjetiv:o que el de guerrear UDas coN ot1ms hasta el fogr@ lilel extiermin.io de la mas de'bil. Halla:ron ios espa.fi.@ies unas raiDcherias, en las ctrn[es los habi tallites que poseiaD caracteres mas ma,rcadamente mai,a~os \lil@ telil1ia@ oir© f)i:0s que el Sol y. Batbrn:~a, al eaail reptFesentaban pom@gra.ficamente con. los atributos de los dos sexos, 'u®idos por un zig-zag 6, S h.orizontal, siill'- · bolo J!)ara elfos de la luz i:me11eada; _ ademas de a este Ra.tfuala @. dios fabr.icador y a[ Sol, adorahan a la !Mna y a las esfrellas, oomo los asil'ios, y a alg1mas aves y animaJes, singti!larmente el caiJ:ililan 6 C6c@drifo, @torgando gran veaemcitlln y ~es[J!)e:fail a, los Anitos y a 10s Dvnatas, es deeir, a idolos que po:r berencia rncibialil de· sus antepasacl:os los t agalos y i(j)s bi~ sayas : m1as gentes, que n0 teniai:n templos mi rito a-lgt!J!lil(j), . y s'i s0l.amente Ulil.:_a c1ase sacerd@tiail,, constictuida F>Of unas ouaaitas mmjeres em2
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LA l:SSl.'RRECCI6N
baucadoras ']Ue se denominaban cata/ona.~ 6 babaylanas, segun eran tagalas 6 bisayas. Hallaron los espafioles en aquel extremo Oriente un pueblo sin manLener documen lo ni tradici6n alguna respecto de su origen y antiguedad; gentes sin noci6n ni practica de derecho alguno positivo; pueblos Ilenos de supersticiones degradantes todas, ya fuesen estas del grupo de las inofensivas, cual la de! ÂŤBugniac ti siroc ti lato Âť, en virtud de la cual, una ceremonia celebrada en familia para cambiar de nombre a un nifio enfermizo, bastaba para asegurar la salud de este y cambiar en el mismo su endeble temperamento por otro de brillo, en organicas energias, 6 ya correspondiesen tales supersticiones a las sangrientas, de las cuales aun se practica en alg(m pueblo del Norte de las islas la que se refiere a una, la mas brutal interpretaci6n que puede dar la ignorancia a los
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fenomenos de rigidez cadaverrica. Cuando por ella et caoaver cl.el indigena pvesenta en rtiesura Mn <il.e(/].@ de sus ma:nos, el i,ndiivid'l!le <\IUe le sill~ cede en la jefa~trna de fami.Ha, obUigad0 qaeda pbr mandate del ml!ler,to a pr0dl!lcill' ilil:Iila vfotima, a maitar a otro, sea qaien fue1·e e1 depand@ p0r el acase, c0n eI fin cl.e q,u.e el asesinad0 pwr tal arterrador:a super:stici<f>:m. em'[imje at M[eci~ID :p@r enfermeGl.ad 6 afocto cua,lqmierra c@mulil, haeia fa region del eterm._o li>ielilesta(l' . . Hallooon fos esp>afioles geliltes tam desdiclha<!las em. tIDdfo ©~10:en y !l)'es<il.e lodo pl!l.nto die vista, q1.rn des Ji>mgs que se les di6 a C©Gooer ~a [1!)6lvora, ia aplica,roa a:l crnde 11lie pa,11-tea,rr 1> <d!el modo que el Dr. B0wring desadli>e en los litera,les terminos sigaiel11.ltes: «Guan.do llega este cas0 ~ahade a[ »en <:J:Ue lflllila ml!ljer ~EJ.drfggna <!la a »luz), se 1lama a rnabuting .hitat 6 »partera. Si el parti0 es lab@rioso, se »S'tl!p@ne dhn;a .de l0s, es[l)lil'i1tm.s d,aiiii1
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LA 1;sSURRECCI6N
---- --- -------»nos, J' para dispersarlos se dispar~ de la paciente >,trna cafla cargada de p6lvora, cuyo >>liro produce una gran explosi6n. »La crialura recien nacida se co»loca inmediatamente en una al»mohada 6 estera y se pone al aire, J1a fin de hacer que salgan los ma • »los espiritus del cuerpo, a cuyo »efecto encienden tres Yelitas de »cera, y las colocan en la barba r en »los dos carrillos del infante, expo»niendole a una desgracia. Estas »costumbres son en todo lo posible »reprimidas por los misioneros, que »procuran sustituirlas con las prac>> Licas de la Iglesia.» La observaci6n del Dr. Bowring es ciertisima, segun con toda verdad afirma un distinguido comentador de la obra Una visita a las is/as Filipinas, escrita por el citado doctor, ex gobernador de Hong-Kong y ministro plenipotenciario que fue en China, y poseedor t al vez del criterio
i,a la misma cabecera
EN FIMPIN~S
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i:nas desapasionaclo entre los ex1lraRjeros que hain descri,to fas tie,rras fiLipirrns y qae ham e0melilha©'0 la , gloviosa dominaoi@'!il! esii9aii.0la. Amt en NH1.y piroxirnos :pasaclos 'aoo.6>s se tenfan noticias de ·exi:slir erntve [as mas ig1wranltes famiMas imcil!ige1iJ.as CUS@S ama1ogos a 1@8 <[Ue tal!I 'VeFf<itiearneate relata el Pr. :Bowrigg·. Pero Uega'llla a mas, a .1 mieh@ mas,. la abyeoci(HiJ. de a<[iueHos :fJll!leb10s, porque los espafioles hal~ai;c:m entwe' ellos geB,tes de ~tan Mrbaras , sangrientas costumhres, segm.lil 00,:rrnienz11dalililente aliirm.a L'.Abte Migne., q~te sotian aql!letlos oe~ehrar [a mneFte dad a a algu lil0 de n 11esifi.r0s vale1:10s0s casteU<anos, s~rvien.<!lolles de vaso cormiLiil pan heli>!:}r et on\1neo del asesina<110 por alguma ti'echa de· las (!ft4e°iirsaiban, y hoy 0.san, de P'lllJil.! ta e:nvenenada e@n toxioos ([Uie Uevan 00m.o adilllereID.tes al arc@ ('J]l!le las despide. Hallar011 los espa,ftoles llll!I pue'M@
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LA L'ISURRECCJ 6N
enteco por la inanici6n, con gran error por alguien todaYia Hamada sobriedad de los paises ca.lidos: gentes aniquila das por la pirateria , sin tener idea de la propiedad territorial, ni de ia induslria ni del comercio, consisten te en aquellas fechas en s6lo el cambio de ganado con sus vecinos los chinos y los de Borneo. Hallaron los espafioles gentes que vivian conculcando los mas elementales preceptos del derecho natural y de la moral cristiana : un pueblo constituido por familias libres y de libertos que surgian de una esclavitud, la cual se adquiria y sufria por la venta que de sus propios bijos hacian los padres, 6 por el vil contrato con que un acreedor explotaba la¡ imposibilidad de que un deudor le pagase el importe de un bahaque 6 taparrabos_ Hallaron los espafioles unas tribus que no conocian la moneda, pero que, sia embargo, gemian bajo la
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pesadumb11e <!le rtrilrn t0s enormes pa-
gados eia especie, ademas de pfes~al' sin 11emrti1iMraei0lil a]gona ou!ati L@s , se1•vic i@s peFsonafos l'eclama%a el provec,ho cl.cl caci(if1lle, a qu,ien segulan JilO r s6lo el instinto de propia conservacid>n co,,nllf)o~idos . JfaMarcm los espi.w\otes gentes e111 ,rue los dona Uv0s 11edimian cle las penalidades im pctestias por fos deliLos mas graves; r,1,i,r1cln.el'ias, Pegi<!las on cada agrwpiaci6111 Jl)@ll un: dos•JilOha, s6lo en ocasio110s rodeado rile lo que so Jlamaibai::i prineii!iJales, m@no,J))olizadoros C<i>Til aqu6:I, rle l@do l@ :pooo prod1'lcian aq ucll as fo rLil(s~nias li erras cle miser'ia, desolaci6n y tnl!le rle. 'IB.fl el.las no era i JJl.d,isohnbllie et COfil,LraLo matrim oni al: cen s6lo reimlegrarsc de 1a d@ lo el mari(Jo 0 la m,11~ jor, seg·1111 ct1 M clo l @s d@s ftn ese el oulpa:bl e, podlm11, recllr,>11ocamcn te fepudiarse y casa1•se de nl!levo. Si em el malrimon io no so leg'11abilin J~.ij (!)s, pom!a el mal.'id@, con el bene,ll)laci L@
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!.A 1~SC1UlECC!6N
de su mujer, haberlos en esclava; y si entre los tagalos no se nol6 la poligamia, entre los bisayas era muy comun observar que un principal viviese con dos 6 tres mujeres, consideradas todas legitimas. Siempre que entre aquellas miserables gentes se practicaba algt'ln sacrificio en pro de la salud de un enfermo, colocabase al lado de este el animal que iba a ser sacrificado: generalmente era una tortuga de mar 6 un cerdo. La sacerdotisa heria a este animal, y con la sangre que se obtenia por aquella incisi6n, se friccionaba el cuerpo del enfermo y los de quienes cu idaban a este: sin embargo, hasta despues que al animal sacrificado se le extraia el higado, viscera con minuciosidad reconocida por la sacerdotisa, no podia esta establecer el pron6stico correspondiente al enfermo. Tal es en incompleta sintesis el estado de profundo abatimiento en
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que sumido estaba el escaso mill6n de individuos de raza mailaya, en sus .,_ ramas tagala y bisaya, qt1e hallaron , los espafioles; estado Llorribfe, si no de igual, de rp_ayor abyecci01M.:l ~ue ofrecian los dayaks Cl!) malayos de BoFneo, y sus co1.1generes ltis m.acasal'es y los javaneses.
Rapida enumeracilln de a:linmos conceptos por. los cuatles el puel>lo OOpino debe gwa- · titud ete~na y sumisl'6n cons'tante ·a [a dominacibn espafl.ola.
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1. Especiail ea,ra&tei· d(!)Eq•egvmeri polittieo instvtuid0. - M@'.llHilS cl.@ fires .siglos y medio cl:e d:omiuci6n. espafi.0- la ha!:). realiza(ilo elil a<iJ!tle~~a Es:paifi.a oceanica,el ·mas p0rtenili0s0 la¥0Fa!Me 0
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LA INSURRECC16N
cambio que las edades presentan en la hisloria de la humanidad. La dominaci6n espaiiola instaur6, y sin soluci6n de continuidad ha seguido en Filipiuas, desde el mando de Legaspi hasta nuestros dias, un sencillisimo regimen politico, concordando con todas las medidas de gobierno, lo unico que en aquel pueblo rudimentario, cuando lo hallaron los espaiioles, habia, que pudiera considerarse muestra de lo que siquiera tendiese a humanizaci6n y cultura: el respelo a los jefes de familia, a los ancianos y a los jefes de tribu. Pero al mismo tiempo nuestros anliguos monarcas. al acrecenta:r y ampliar sus cetros gforiosos con los territorios de las Indias, iniciaron en estos, y constantemente en ellos siguieron, una politica de asimilaci6n. Todos los gobiernos de la Metr6po1i han venido refrendando despues interminable serie de medidas
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inspiradas en -al ,m,ismo Jil}:agman:imo pvoceder, sin simi1m,· 0111 ta ·W§ll0Fii:t , colonial de naci6n a:l gun.a. (( iP-@f<iJ:Ue sieFHJO de i!i:ma !D0r01 ro.a 1@s >>Reimos de Ca:s~i!Iai y de las Inm.iias, la leyes Y: 0rdel!l me g0h~e1'Iil0 cle _
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»los l!l:Ms y de l@s @fa.'os (iiel!lia1lil: s~r >>lQ mas ·s(i lllilejant6ls y C(i)Iilf@rmes (l'[l!l:tl »ser pueda; f(')s de nuestro C@m~e»jo en 1as leyes ·y est aib'le0i:mien:fl@s »q:me pali'a aq:l!l,elL@s pn:rnbl@.f @,J)riJ:tl'l!lai~· ' »ren, pr0elltli:em 1,·editrci!J.' la 1orma y, >>rnanera det g©:bie'F!!lO de elllr@s, ail »estH@ y ordlem o@n qu:e s@lil regi:til@s
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LA JNSURRECCl6X
las liranias de los datos y principales que regian las tribus, ciment6 el organismo nuevo politico-administrati vo sob re la base tradicional de que el indio viviese bajo la tutela de sus principales, tutela privada, es claro, de las violencias que ofrecia antes de nuestra dominaci6n. De este modo, asumiendo cuanto a generales intereses atafie, daba la dorninaci6n espafiola a la administraci6n local , con generosidad admirable, una vida esencialmente comunista _ l Que le falta hacer a. la Administraci6n espafi.ola de lo que en buena ley debiera conducir mas derechamente al bienestaT de aquellos habitantes a quienes en tal grado de ignorancia hall6? La dominaci6n espafi.ola ha llevado a Filipinas en toda su extension, sin limitaciones de ¡raza, ni de tiempo, ni de distancia, no lo mas sustancial, sino todo euanto revela un
EN FU,iPlN~ S
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ISSURRECC!611
cla el ~Iioistro Sr. D. Antonio ~faria Fahie, de las mismas polilicas doctrinas que el senor Conde de Tejada de Valdosera, y por igual honradisimo, y ambos, hombres de proclamada conspicuidad y de estudio asiduo. A Filipinas fue, eonducido por el Real decreto de 31 de Julio de 1889, hasta el C6digo cii:il que en la Peninsula rige, sin que Lenga para aquellas islas otra alteraci6n que la establecida por Real orden de 31 de Diciembre del mismo afio, correspondiendo los titulos 4. y '12 del iibro '1. que se refieren al matrimonio y a los registros . .A Filipinas fue, por el Real decreto de '19 de Mayo de 1893, conducido el nuevo ÂŤRegimen municipalÂť, en el que resulta admirablemente combinado el respeto a la secular legislaci6n, con los progresos que en la vida local desarrollarse deben, para alcanzar en suma los que a todo el territorio interesan. 0
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De esa famo.sa [ey, en ciayo ifmstine aulor el Minislro Sr. Mau.ra, justo es declarar que ltQs e,lememi0s 't@<ilos de mas valirniento para la sana crttica, , recon@cem el mas e1i1i'l,usrias1la arfl.hel@ de establecer p0r el amo1· recipi·oc@ entre los tli)l!lebl0s c@loniaies y su Metr6poli los vinculos sagrados det~rmin,ados p-or ei! d.escQl'lrirnieBt@ y conquista, en tm sabio libro; Jlecie'liltemente publicaclo por el R. !P. Pr@ourad0i.· y Co11a.isari0 de Agl!lstiMs calzados misioneros de FHipiinas, Iibro Gjll'!e en atelilt'.@ B. L. M., S'l'l:sePiiti@ por los @tFos PP. Procmradores de Domi,nic@s, Frandsea1110s y J?.l!e@@leti@s, acabalilrns de recibir c<im h0nrosa satisfacci.6n, se lee 1o sig1Niell1te: «Rec0»nocerhos eF1 la ~xposici6r,i al a,u t0r »de un priviiegi.ado ita~ell!to, ili.1rigid0 »y halagado por SU levantacl© dese@; »distingmimos fa idea del bien de~ »progFes0 m11c11nicipaO, qtrn persigne; »pero a1 eafoarla en los m0l.des d~l »Municipio peni.msutar para ser lras3-
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LA INSURRI!CCI6S
,, >>ladada a aquellas abrasadoras lati11 ludes, se padece un error lamenta11ble: el decreer 6 juzgar similares los "pueblos de allende y de aquende.Âť Texto literal, que contiene concepto analogo al que nosotros expresam0s, sin elocuencia alguna, en est os olros terminos de escueta iranqueza: <-Por que el ilustradisimo Ministro de Utramar Sr. :Maura fue tan magnanimo? ;,Por que la dominaci6n espafiola en Filipinas viene siendo tan y tan ilimitadamente confiada y generosa con aquellas gentes de tan distinta raza, de ciYilizaci6n, a pesar de nuestros esfuerzos, aun no completada, y de costumbres todavia tan insanas? Y desde este l'.mico punto de yista, para mirar sin apasionamiento los hechos, podra alcanzarse la razon con que en las aplicaciones de la ley Municipal a que aludimos pueda -y deba achacarse alguna deficiencia a los instauradores practicos, aunque
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no faese ea modo afl:gtlno poF ;v;o[,u'Iil.tad t(i),rcid•a ocasi@0ad:a; sera Hoi•ho, y desde I~eg@ rawlilabl.e y segl!lll·o, ejercer el perfecto cl:ere0b.0 que ia , Adminisfiraci<!m espaiiola tien.e para acusar de ingM,t itud smpi!Jila' a los indios que la ta[ reforma fi,O SNIJieron bendeci:nla y gr~ada indeleblemen.te en la propia trama de Sll coraz6m; pero jamas podra nadie con jushicia,. del dictad6 de esta ley, conc(i):u<iJ.ada . con toda seeuilaF t1i1adioi@n iegislativa en FBip11ilas, deriv~~ o:tra C(i)S;a ep~e IJl@· sea Jo@r y, em:c0m1@ para el escla1·ecido Ministro Sr. Mal!I.Fa y M0nita1i1.er. 2. ° Cristia,nizaei6n de aq.uel ea;tmso . terrvtorio. - 'La dommacioa espaiii@la ha hlgwado en 1<1itip·m,as la evalilgeli.zaci:6n de ttn pueblo id6latra, colilvirtielildolo en INLl pueblo cristiano, merced a iJ.a comslante saJilta la1>or de 11uestros misioneros. Ra al!l.1JilileBtato la ,p0biaci6lil. e)i). el 90) jj)@T Hil(i) ~alb~ de kr que la enc0ntr6, p'Ues aGfuella
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LA JNSURRKCCT6M
superficie de 345.000 kil6metros cua<lrados, que es la totalizada por las sumas parciales de la exlensi6n que ofrecen las mas de J. 200 islas di.seminadas por aquel mar proceloso de los baguios 6 tifones, presenla boy, aunque sea desigualmente distribuida, una densidad de poblaci6n expresada por 20 habitantes para cada kil6metro cuadrado. Pero en realidad, la densidad de poblaci6n obtenida en Filipinas es muy superior a la de casi todos los pueblos de Europa, y mas superior aun en todos los de America, en donde tal ,ez uno solo de estos la haya adquirido igual, porque si de la superficie expresada se resta aquella que ocupa, poblaci6n que solo nominalmente esta bajo la soberania de Espana, superficie que, segun se lee en los interesantes concienzudos estudios del ex Intendente general de Hacienda de aquellas islas Sr. Jimeno Agius, asciende a 150.000 kilometros cuadra-
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dos, resuUa qNe nl!> soli1 20, sillilo U, los h.abitantes que en :Fi:liipinas 00rresponden a cada ul!l.idacl: de tat su, perficial rnedida.
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3. Orig en de la, pr0piedrul, t1Yrrit0rial. - La d.0mimaci0m es]))afr0la, qlt!J..e aeab6 con la piraiterfa y c0n. t0<ifas fas guerrras inteslinas, ere0 la pr9piedad territorial, entregandgla al ind,io que · simplemente @frecia labrar la,s tierras, en @ttya [lien.a p0sesi,6,lil cilesp!t!les_ , le ha gairanthado colil to<,)!a ~a fuerza de la ley Hipotecaria mjsma que rige eR ulila 1!1.ohable la Peninsula, J!lero difereI'lcia, y es que en . 'Fi.ii-pinas 110 la ha sujetad@ a c@lil•t ril!mci~p. a,J:gun& 0
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. 4. Reclutamient0 d{}l e,jbt·c;i;to indigena.-La domil'laci6n espaft@la cre6, y b..a venid@ maBteniend@, u.n redil!l: cidisi.m.o ejercito i·ndigena, C<:l·lilsti,; tuid@ 'riai t0turn p0r <v@i1m•1.itari:@s, <f> formado en virtad de ta,D expamsivas leyes de reem.piazo, <J.,ue haa per0
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LA J:<ISJ;RRECCI6N
mitido estas acudir a las fllas aquellos indigenas a los cuales les parecia bien acudir, siempre y n6 mas del uno por ciento de los que se sorteaban. Tributaci6n comparada. - La dominaci(m espafiola en Filipinas mantuvo duraote mas de trescientos afios el caracter de los tributos en aquel archlpielago, moralizando la exacci6n de los mismos y manteniendola siempre en exiguas proporciones, cuando eran tan enormes las que satisfacian los indigenas a sus caudillos; y al reunir nuestra Administraci6n en un solo concepto para tributar, los diferentes en que se re.caudaba en aquellos pueblos lo que para el sostenimiento de las leves cargas publicas se precisaba, cre6se el irnpuesto de cedulas personales por Real decreto de 6 de Marzo de 1884. El producto integro de este impuesto lleva al Tesoro canti0
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dad que no ilega· a siete millonis de pesos; y c©m0 Cil)UieFa que este i:m- puesto es e,1 iwco ti:ibuto, pt1es es sucedaoe@ de los q ue se reoalildalilan •'con el nomb.re de Tributos de n(J;twrales y de mestlizos, d,i,ezmos de rese'l'vados; indus-t1·ia de,.Z r@m, soooewwm, Cajctts de Comunidctd y otroi;; amexos a estos -conceptos, uesuata, que El@ ascien<il'e a un peso 10 que a cada aafural de las isias corresponcle satisfaoer al Esta-do p@r cambio de la vida tan 06m0da qlile esLe [e p't'0pemcioma. Esifie rtributo, ademas, viene a satisfaceul© en maym1 cuain.tia ef espafi0I pen.iililsular en acprnUas islas 1.1esiden,he y sea c-ual fuere eI es'tado y cond'ioi6R s0oi:a1l qme cl.isf:ru,te @ suka~ e1 oficial q11.into d'e Admimi•straoi6a oi, vil, tri:buta mas ~Ne el i11dige,ia;a mas a,oaudalado. iLa tributaci6n en Fi1ic. piHas, Him:itada !J.ll'l'lede deeirse a fo> que acabamos de exp.resar a granoles rasg0s, mielFltims fi{lile e'lit los Esta<!los de Eurnpa diiez iustros ha <[lile cada
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LA lNSURRECCI6S
habilante sa satisfacia de 2:5 a 50 pesetas! Y el liempo pasa. aumentando, si, la poblaci6n y la publica riqueza en todas esas naciones, pero habiendo de soportar, segtin patri6ticamente en todas ellas los contribuyenles soporlan, incomparables mayores gravamenes. La contribuci6n que satisface al Estado cada haJ)itante de la Australia asciende a 37 pesos, al propio tiempo que no llega a 16 pesos lo que satisface cada cindadano de Inglaterra. A 10 pesos 60 ceotimos asciende lo que paga cada habitante en Portugal; a 10 pesos 80 centimos el de Suecia y Noruega; a 11 pesos 20 ceotimos el de Belgica; a 12,80 el de Alemania; a 13,60 el de Austria Rungria ; a 17 ,40 el de Francia, aproximandose a 10 pesos lo que en promedio paga cada habitante en nuestra madre patria. Y si el nuern regimen politico administrativo en la India inglesa ha
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librado a aquellos ha'.bitanites ill'l<ligeuas de las violencias tri'bliltarias que en el actual imperi.o ililte>b11iitanio(i) earacterizar.on ta <ilornimaai0;m. cl:el mis'mo ejereiq.a por la Com.pm,fiia de las lndias, hasta las adversidades del Indostan, bieri aseg'lilra<il@ queda pa!l!a lnglaterra ~I moliliIDlooiiQ cdel mercado colonial, pingue rendim'iemte> para el tesoro y fill'l'Y provech@so a todo el pafa ¡~@1@filizad:oll' de aqae~ vas'ltisimJ;10 territorle>. Francia percibic1> hasta por serniestres adelaliltados l@s impHestos establecid@s en sus C(i)lmi'as (de la fad:0china sobre las trierras desUliladas al cultivo del arroz, entregamdose al Gsobierno, en espeoie, las I\lilil!lell1,asi Glll!le por ageates del mi.sm:(i) s,e dii.TigeNi y, el pr0duct0 de las que arrielil'da; intervi:miendo acl:emas el Gobiem@ fas veID.tas y enca.rgandose <il:e fa expiortaci6n de tIDd@s los pi¡0d0.ct(i)s agricIDlf.as del pais. Holanda, has1la e16ohiem.ID de Va'lil-
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MUSEUM LIBRARY
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LA !NSURRECCION
der-Bosch, del gran reorganizador de la Administracio n de Java, que resue1Lamente quiso implantar alli el regimen instituido por los espaiioles en Filipinas, venia, a pesar de aquel deseo, que a mucbos ha hecho afirmar similitud entre nuestras leyes de Indias y la Ordenanza de Holanda de 1650, exigiendo a los javaneses un lributo que representaba las dos quintas partes de sos cosechas; y aunque no se mantiene ya la esclavitud, el Gobierno bolandes percibe por el producto de los cultivos J de las industrias agricolas que explota (inclnso la del opio, solo de la cual obtiene millones de pesetas) la cifra importante con que atiende la totalidad de g¡astos de sus colonias orientales, y el deficit que oirece el de las occidentales: aun obtiene la metr6poli un superdvit. 6. Apmvech(JJfTl,ientos forestales. jLa tributaci6n en Filipinas, en aquel 0
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para construir embarcaciones destinadas a transportar los produclos agricolas! (Art. 26 del Reglamento citado.) 7.° Contribuci6n industrial y urbaY si la riqueza agricola no sufre carga alguna, si el comercio tampoeo la lleva sino por modo levisimo, la induslria, iab!. esta ha debido llegar en Filipinas a ser en realidad el gran principio en que se fundase la publica riqueza. pues ni la induslria agricola, ni la minera, ni la manufactur era, puede decirse que satisfacen un centavo, y eso que solamente esta ullima transige en los mercados y obtiene de millares de telares caseros cantidad muy importante, tal yez superior a la que con tantas Yentajas para aquellos pueblos transigia con anterioridad al famoso decreto de los comienzos de este siglo la Compaiiia de Filipinas. De todos rnodos, solo la tradicio:o,al na. -
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~patia de los indios 1iJipi1Dos es" ia que expllioo el escaso olesa~o'Mi@ de este poder@so factor (fo pr0sperida<il publica. La dominaci@'lil espaiiGla insti.1.tiydl, administra y cobra una oontribucio:J!l industrial, ea ilerrininos (\JM.e solo ~ gratitud imperecedera 0b1'igar olefue, puesto qu.e la tabla de exenciones a qae la Admimistraci@n [!i!UMii:ca se atiene, excluye ele esa contrifuuci@n a t0das las clases i[i)0br.es de la -sooie dad filipina, C0lil e~ tfin: (\l..e fa'¥or.etie11 todas las pequefias ind,ustrias; per@ es Cftte ademas fija iJ!lara las indu.strias grandes, 0uotas ciertamemit'e muy distanciadas de Ia pro1}orcion,alidad entre elllas y las uti1idacl:es su1nadas a quienes las ejer0en. La domi,iI1.aoion espafi.ola, hasta muy poco qa, !lm~'Ea IP'Fime1F0s <ile Jalio de 1879, no lhalbfa gravado la propiedad urbana en. aql!lel'la.s · islas en un solo centavo, y cr1rn,11Hi© el ~,g,;rarmde de los servicios publicos se lo · '
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LA INSURRECC16N
impuso. seflalaronse para las fincas de tal clase, de las cuales se perciba algu11a renta, el 5 por 100 de la liquida, deduciendo de la declarada el 40 por 100 en favor del duefio si la finca era de mampo.steria, y por igual concepto el 1>0 por 100 si la finca era.de materiales ligeros, para gastos de conservaci6n, reparos y huecos ..... IUna Hamada contribuci6n urbana que conduce a las areas del Tesoro publi<to la nimia, sarcastica cifra de -134.000 pesos, para relacionarla con las vhiendas, muchas de ellas esplendidas, que ocupan 8.000.000 de habitantes ! 8. ° Come,rcio . - i La trib u taci6n en Filipinas, lo mismo ayer que hoy y siempre, revisti6 y reviste caracteres de una verdadera dejaci6n de derechos por parte del Estado en beneficio de los intereses particulares, especialmente de los que corresponden a los indios filipinos. Cuando en
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aquella Iiber'tad. de ~111 comeraiG fJitue jamas tuvo mas, trabas qne las slilpuestas, se hiz0 pre0is·o ruictar aigl'l;oa iey · estancand0 8!1gwl'l wrtfc'l!I[©, soliase a:fuadir en 'ta pragm.atica 'liJl!le lo estableoiera lai sencil:1'isi!I:na pate,r nal il::ase, «domcl.e no se i!rr0gue 1;1eFfuici:0 algtmnG a los i:mcl.i:6sn. · Y a los e:xtramjeT0s, ya eI;t los c'©mienz0s de nuestra d@m,iJilaci6!i!., se les 0t0rgaF@Iil t@d©s 10s beNetic11@s <il.e · nuestras ieyes en fa[ marterfa. i,'ETJ. d6nde otr@ testimomiG iguaI 6 mayor del <llesprendimientt.0 y geliler©sidadi , del Esta<'to? Favorecien<il:0 tod© e110, y en veil~ tiginosa J:!>rogresi@n., p@r nada intern1mpi<il'a, fa eGwtraitaci«ii:m. y el eomerciG, hase Hegad@ en F1ilirp1nas a poder exhibir ~en l0s t,iempos q.ue -corrermos cuadtos comrparalliv0s em _ lfl:uest,ras Adiualillas <ilel v;af@r, y significaci6n que Gfrece·el sigl!liem,te: , ,,
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ADUANAS
Recaudacidn obtenida en las .Ad1tana.s de Filipinas desde el OJitO 1865 al 1894. Quioquenios.
1865-69 1870-74 1875-79 1880-84 1885-89 1890-94
Promedio.
869.549,76 997.833,04 1. 382. 994,79 2. 231. 303,23 2.328.466,76 3.929.767,94
Pero sobre todo desde el afio 1809, la dominaci6n espafiola, con su gallardo sistema de administraci6n, ha venido otorgando tal suerte de facilidades y de protecci6n para el comercio, que al Archipielago fili. pino ban acudido representaciones de respetabilisimas casas mercantiles de todas las naciones del mundo, y hanse instalado alli otras, principalmente inglesas y alemanas, que mueven sus propios capitales con exito rro logrado por espafioles pe-
Baer, Seni@t: & C. 0 Book & C. iF:indlay' rucma,rclrs('HilJ & ~-o, Ffomi1,1g: (J. 1\!q Forbes Mu11 & <e ..0 F11oe1ihs y, ;!Lu-tner. 0
Fressei y C. GriRol0rlil & <C. Gsul & C. Himszen. & C. lie'JilS & C'. 0
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NSURRECCl6S
Hindley & C. Holliday & C." Hollmann & C. Jhonston, Gore Boot & C." Keller & C. Ker & C. Kuenler & Streiff. Shevenger. Smih, Bell & C. Spitz. Spremgli & C. Stevenson & C. Strukman & C. Shun & C. Tillson, Hermann & C. Warner, Blodget & C. vVsinowski & C. He aqui los nombres de los principales importadores y exportadores a la cabeza del comercio de _F ilipinas, y creemos que con s6lo la lectura (no facilmente pronunciada por nosotros los espafioles) de los nombres que acabamos de estampar, y que corresponden a los respetables jefes 0
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el punto de ser objeto de las mas graves imputaciones de la critica y censura, mas siempre rnir6 ante todo el bienestar de aquel territorio espaiiol. Por cierto que no sabemos siquiera el verdadero valor de los cargos contra aquella Compaiiia fulminados, pues nos extraiiamos, y mucbo, baberlos leido, cuando fidedignamente supimos que en realidad aquella Compaflia, Hamada privilegiada, que comenzo a desarrollar la industria algodonera muy activamente y con gran exito en el Norte de Luzon, solo obtu vo por premio a tales esfuerzos en bien del pais y a los sacrificios qoe hiciera en pro del Estado, la amargura de las mas fieras acusaciones y el mayor desastre para los capitales aportados por sus accionistas. Es innegable que el movimiento mercantil por la dominacion espafi_ola desarrol1ado en Filipinas, mue-
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ve a enh1siast a apla'l.!ls@. M~1y eerca de 400.000 toneladas suma la capacidad de los huques dedicado s a la navegaci 6n exterior entrados em his puertos de Filtil_)inas en 1894 .. Es clato que tal eifra, exriresi@n del 1lol!le1aje de carga ai1li destinad0 , debe reg@cijamos; pero al propio 'tiemp@ halmi de sernos permiticl:o m.0s cl.l'IHla: el b.echo de cy:ue de fas 40(1U)00 tonelaclas dichas, soi(') 54.622 b.a~an silil(') 'tra:nsportadas por nULestr~ gloriosa nacional bandera. 9. 0 ,P,resupuestos.-'t,a clom,irnaci6JiJ: espaiiola en Filipinas b.a veniclo establecien do Cl!lam,tos servici@s 1,11ubHcos disirutan ~@s pueblos de ia Metropoli, y q t1e son los servici@s lile q1,1e gozan ¡ los . puebl@s mas cull tos del mun do. Has ta poco ha afool!l16 ei pago de Loclas las ¡0bligacio nes com p,resu:pl!lesâ&#x20AC;˘ti<:>s de 7, 8 y 9 millones de pesos, y ahora mJsmo los atiende' C(!)Ii un presupue st0 de 1
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• LA INSURRECCJ6N
ingresos en 15 millones y medio de pesos calculados, incluyeodo hasta los eventuales. La dominaci6n espafiola devuel ve al pais contribuyente, sin destinar a « Personal y material de guerra» mas que 4.000.000 de pesos, y sin menoscabo de la cantidad de mas de 2.000.000 de pesos con que los cc Fondos locales» dotan los servicios que mas influyen en el desenvol vimieoto de los intereses morales, inlelectuales y materiales de los pueblos. Esta dominaci6n espafiola, que jamas abrig6 el prop6sito de obtener provecho material en sus colonias, priv6 a los presupuestos de ingresos de Filipinas de los recursos i:mportantes que suministraba el monopolio del tabaco, articul~ cuya prodlicci6n y consumo ha fomentado la economia politica y la ciencia agron6mica, en contra abiertamente de lo preconizado por las ciencias medicas. Porque, en efecto, aunque es-
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tas, sin graJ.iJ.des eJ.il.tusiasm<ils, Ueva~ ron a su 1ierape11:tica l(i)aFa eml[llea,r la en dosis reivactas esa f)iamifia anua, de tallo herbaceo y .li>lanqaecim:a filor, la higiene juzga con jasta severidad Ert abuso del Nicotiana T,ab1JJcum de Linne.o. Y es muy dtgno recordem:@s C0IiEU:J en las mismas fechas- en que fa d0mio.aci6n espati.ola, c0m su tan bieTt concebida cuanto mal if1terpre'tada ley deI <ilesestamc@, cilal;Ja Iiluevas ev:idem,tes m11estras (i}e sa c0ndirnta tM'll generosa con los i:1!1.di0s :fiilfpinos, otras nacie:rnes, a Ja c~beza del mu,ndo civilizado, poseecl.<ilras de territorios c0l0nia.les inmens<ils , en: Fegi:oBes pr0ximas, atttD c@1111signa.11>a,J.il. y percibialil, segurni: ,co,m:s~gnam1. y perciben h@y, cantidades filihlY pr6x,imas a ~00 lnillon.es de J!lesetas per ei m0nop0JJ0 del 0pio, del Papavm¡ som'l'lli= ferum de Lililn.eo, cl:e esa extraiia fHilormidera de la Olllal mana 'l a lagrii:11J1!a que tantas hace v.e:rter, conduciendo 1
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a muerte prematura alas razas orientales, en deplorable enerrnci6n por los complejos efectos del narc6tico a que aludimos.
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psicol6gicas, fisiol6gicas y hasta patol6gicas, viene imperando por modo tan nobiHsimo afectivo en aquel te- , rritorio ( en el cual los indios cabalmente son quienes habian creado privilegios de casta), que la cuidadosa atenci6n otorgada por el Estado a cuanto a Instrucci6n publica se ¡refiere no tiene precedente en naci6n alguna de las que ban educado y educan colonias mas 6 menos lejanas de sus metr6polis. No hay Estado que supere ni aun iguale a nuestra Espana gloriosa en la adopci6n de medios empleados para obtener la cultura de aquellas razas oceanicas. Asi, se observa la existencia de muchos pueblos y barrios 6 visitas en el archipielago filipino, en cuyas loca1idades no hay cura parroco mas que como anexo, ni clerigo alguno coadjutor sino de accidental residencia, mientras que en aquellos mismos lugares no faltan permanente-
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mente servidas dos esc111elas, una para cada sexo . Ya no exis'te cap~tal <fl 0all>ece11a d'e pr@vincia ·em. 'Fil4pinas e:lil ' <'}lt1e n@ ·se haya imstalad@ algw es'tafulechn.iento o:ficial 6 de en.seiianui l_ilriva<il.a, ha,. bi'1,itad@ para <!t1111sa11 y lilFoli>ai,• e:m. el los pr~meros aii.os academicos- dt\l Ja segunda ense.ili.an.za, 6 a~glim ]nstitl!lto en d@nde se @li>ll'era.ga c@mipleta, e@n . los estu.dllios de aJ!llicaei611!} adi(ilmas. Hay e©legj@s de iJ.a excepci<n~allimportanefa de1 de Sa,nt@ 1:@m.as, Ate~ ne@ 'Ji iHilliJlicri,~ al y S_an J•ua,n <l1el.etmilil, atendi.end@ t@a@s eMos, n.Q slf>l:o a la instm0ci<f>n p'rirnarfa c<m Sl!l.S clases superio~es 6 puepaiva'torias para la ·segUl'wl.a, sirn.o a \tQ<il,ai est-a, 110.sia el :ba-· chillerato en Artes. -Funei@nailil a la vez en los mismos las principal.es c1ases 6 academias de a~011no y gi!Jil10asios bieR clirigiclos, si eID. t@das fatit:udes convenieliJltes, iID.diispeID.sa!Mes alli para la educaci6n de 1a i,nfancia y la ad0leseeID.0ia, pl!lesto <Jil!le la cl!is- '
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LA INSURR!!CCION
posici6n nativa de los temperamentos pide a voz en grito en aquellas regiones el cultivo de los musculos, para procurar el aumento de fuerzas radicales organicas, que la inaccion hace facilmente disminuir y la constante exudaci6n cutanea pretende declarar extintas antes que llegue a la edad madura siquiera, el natural de aquellos paises torrido-termales de Rochard. Alli Escuelas de Practieantes de !,fedicina, de Fannacia y de Matronas. Alli gran numero de Colegios privados y dos Escuelas normales, tipo, superiores, para maestras y maestros. Alli Escuela superi07â&#x20AC;˘ de Pintura, Escult;u,ra y Grabado ; alli Granjas modelo y Escuela -de Agricultura, a cuyo frente distinguidos Ingenieros agronom.os patentizan 1o que de ,aquel suelo fertilisimo puede y debe lograrse si se au;xilia con el arte la obra magna de la naturaleza. z, Y para la enseiianza superior?
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1Ahl ' . 1.a dominaci6n espa"a0la sos,men.e en cada di6ce.s,is, un Selil1liliil!ad<i> c@:m.ciliar, y dot6 a las fslas F:i[ipinas de · un.a Universidad cual ra Reat y l?oE!_tiflcia de Santo folilll:as, de tan a,Ilil.1Ji>li@ claus~ro, que en el1a se cursan todas ' las carre1·as Htemrias ; ol:e sus attfas esplendi~las, pr.@vistas ca<ila <ilfa de' mas medias de los utilisim@s de ex:.. J!>edmentaoi6n !Ji>aFa ia m@dema en-, semanza, y en cuyas al!llas ex;w1ican ciencia y pmedican viFttl<fi lwmbFes de ~wam consJ!>icrnilllad y esiudi@, 1/eligiosos y ·seglares que la practfoan, slfrgen a cieatos de cie1,1,tos j<i>vem@s indigenas osfieliltarrnd@ rtiifi,l!ll@s acatd~micos que ena[~ecem, p0rql!le dan ver.dadero valor' social a ql!lienes lo ob,. tienen, y C!J:Ue a [a 1•ez 0t0rgam a sns poseedores medias de subsistencia pFopia, por el derech0 y S'lil,S ap1foa,.. cion.es en. la praotfoa igt!lales a iJ:0s que se derivam de 1os titul0s similares 01ltenid0s elil. fos Uolivevsidal!l'es
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europeas, prescindiendo, que es bastante prescindir, del diferenle esfuerzo con que se conquistan en la una y en las otras. Y es que existe alli una politica universitaria a base de lenidades, para pruebas de aptitudes y suficiencias, que se infotma tambien en los mismos sentimientos de generosidad en que siempre y para todo se inform6 la politica general del Eslado en aquellas islas. Por ello asimismo la dominaci6n espafiola recibe en el seno de su organismo politico adminislrativo, para que la ayudeu (sin necesitarlo) en el cumplimiento de las funciones a este encomendadas, a los naturales filipinos, destinandolos a puestos activos, no s6lo subalternos, que estos los disfru tan todos, sino a car- . gos que no tienen otro limite jerarq1,1ico para los indigenas, que el mismo trazado por la ley en los distinto~ ramos del servicio publi-
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co para los espafioles peninsufares. l Ulla domi.Raci6n cuaUa es:pa•D<iJla, que cvea cue·rpos como -el ~e Medicos titulafes y- forenses eFt aquel'las islas, y D(i)m,li>ra ~ f@s i11,i1<itwi<ilim.0s (({lie los constituyen coFt sujeci@D a l(i) cl.iispuesto por e1 :{leal deereho de ~farzo · de 1876, regalando la :pr@visih de cargos taD importarn.bes (p@r ia indole .de sus oficios) en vfa,tmd cle eo:ni.el!l!rsos cerrados y tl!)lilili>licos, mas (i}e todas suertes ot(i)rganclo la~ plazas vaeant,es por mita:d [(i)at a Ji)0IiJJi:~suila,J;l0S e indigenas! .
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, 2. Sanidad. - La 0,(i)nwiitrnei61i1. espaii.ola ba mi-ra<do con preferente atenci6n; haciendolo un ofaj,etivo de sus mediJas l!)revis@ras·, 01:mnto tie•m,d,e a lo que es ba~e prim0r<ilial en la vida de los paeli>los, y !li)©F ell@ vi:eM ejerciendo su:Mime1ililente en filii}llirras 1 la tutela de que iN-vestida esta respect@ a la consm'iVaeiolil <il:e ta sa!Jni1di , poblica. Ccm ei may op esmep0•, y para 0
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LA IN5URRECCt6N
obtener la mas completa organizaci6n del servicio sanitario, ha crea- ,. do los centros directivos y cuantos establecimienlos, juntas consultivas, provinciales, locales y delegados facultativos son necesarios para cumplir tan altos deberes de humanidad. Precisa hacer ccinstar que si los servicios encomendados a la sanidad terrestre y marHima estan en Filipinas perfectamente montados, dignos de todo encomio y alabanza son los pertenecientes a la Sanidad mililar y de la Armada ; bien demostrado esta el alto concepto adquirido y el respeto que merecen en Espana y sus dominios y en todas partes los esclarecidos individuos que constituyen estos cuerpos, encargados de cuidar la salud del soldado de mar y 'tierra. La asistencia que estos logran, tanto en el campo de batalla cuanlo en los establecimientos permanentes y accidentales, en que se
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l!N FILIPINAS
acumula todo foap,t@ a:]oFta el .maaravilloso pr@greso medic@-q1llli·ri:1IDgrico de los tieJJril,pos m@deFl!l@s, prnefia nuestro aserto. ,3. Benefj,cencia. - La d@minaci6>11i espaiiola fiij6 S'l!l celosa r.nirmila eli1 lo . qNe a beneficerncia ataile simgufaFmenlte : en el Ililism@ siglo XVI ya queda1Jan en Espaiila muy }!IQC@s. plil!eblos, que no conitasen aigu®.a f.i!l.1ID.daci0n piadosa, algurr esta:tilecim.i1ento1 ben.efico cTead.0 por aquetlas esplenFristfadorosas figiut as de la ca111i:dad @ n,a, Santti@ill(m1as ·iil:e Villlanue~'fll, San Juan de D'ios, San Vieemte de Fa1:1J y otros saatos var0Res, <!,LUiemes em fa misma epoea, ¥ au.na.EJ.d@ S'l!lS eslfu:erzos si111 cuem.t@, hicieron. maravmas , para p@der erigir, segun lo fogra.ron, innum.erables estaiblecimient~s en que recoger a ~@.s men;este.r@s@s. Y el poder civil vi'lilo a e@mpietar 'l el movimiento desail'r@lfad:o emt,re ~a , caridad pu:b'lic~., por Ia faerza y v.1r0
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tud del ejemplo y predicaci6n de aquellos sublimes ap6stoles. Influidos los espaooles por esta santa atm6sfera, y conforme con la vertiginosa marcha seguida¡ en la metr6poli, a poco de fundarse por el inclito .Miguel L6pez de Legazpi la ciudad de Manila, sucesiYameote, y oon el producto de legados. donaciones y fundaciones, fueron creandose los establecimieotos e inslituciones de piadosos auxilios que para los menesterosos procuraba- la beneficencia particular. Y, al propio tiempo, inici6 la Beneficencia general los que a ellJi competen exclusivamente con las dotaciones del Estado, resultando, que muy pronto se lograron en la capital del Archipielago , como despues en las cabeceras de provincias principales, casas beneficas destinadas al socorro de tanto desvalido como en el orden intelectual, moral y fisico presentaban y siempre ofrecen aquellos pueblos, de clima tan
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eneFVa!il.or y kle :liiabitos m'tly di:sfaaciados de fos ]ftecep'tos mas .e1emellta1es d.e higien.e priva!il.a y pali>Liea. AIH estalil ej·eiicie:ulll@ Ille contttn'!il-@ y en. tocl'a su exil! e'l!l•si@lili !@s sagrad!©s Olfjj9i@s ll.e ]a car<idad, [as @J}i;as p:ias, ,. con su Real C(J/sa de Miswieerrdri(l), el . 1 @olegio de Sar11ta, iJsl1,bgZ, at cmal y,a en 1680 se le ®@n.ee<il!'ia algti.Eta emc@mienda em el Noi;te de lnizKJm; !1Ja V. 0. T. de Soo ftrar11eis-c0 ae AT:a'lhila,, fa de Sant@ JlJawing.@; el do!egio de 'Sar11 Jiuan, de Letrrcilrb de AIJWl'ta y,.g} D@ta1 de $a,ri,ta P.otmeiooa. . . . La !il.0m11lil:aei@lil eswal!l:@i][a, aliiemas de h1stiifi111,:ir e11 muchas calilticeEas 1fo ,prov'ineia· tos a,111ierg1!1!tis pa;a desai~1paralilos y el!l.fe'Fm:@s· !!J11e ~ hemos <ilic.ho, ha d0tado a la caJ>iitaJ !il.e las is:-;: ·1 las de cuant(i) cor;isti,'bl!lJi@, e•~ smma, 1:1n plaJil genei·,d para· ~umpfa taTI!to
l tan sagraoJ.:0 C!le:J»er C!i>fil@ se destal ca!ba ea. aqtrnl[as tier-Fas cile (!)ies@1;ill:eifu -
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• y aba>timiie-mt@. [ Alli elil Ma.m.!i.Ja se hils~itrntail'llr c@le-
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LA JNSURRECCI6N
gios como el de Santo Toma.,, fundado a principios del siglo XVII, y el de San Juan de Letran. este ultimo tambien tan antiguo como la Universidad, y del que ya nos hemos ocupado al hablar de instrucci6n publica; concedense en el numerosas becas de gracia; fue fund ado por Juan Jeronimo Guerrero hacia 1630. Alli el Colegio de San Jose, en el que, segtin tambien hemos dicho, se hallan establecidas las Facullades de Medicina y Farmacia. Es mas antiguo atin que el de Santo Tomas. El Beatorio de San Sebastian de Calwnpang. Alli el Hospital de San Juan de Dios ya fundado en 1596 y a la altura mayor de los â&#x201A;Źle su clase. Alli el Real Hospicio de San Jose acogiendo a fos ninos pobres. En el se reciben ademas, y muy especialmente, a los alienados, los cuales hallan en aquella casa hen.efica, tan fiel oumplidora de las severas reglas de
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L.\ lNSURRECCJ6N
sabia, segun las cr6nicas afirman, sin recursos, 6 con los muy escasos que su Prelado diocesano y el Gobernador pudieron proporcionarle, supo construir con gran pres Leza, el prodigioso Hospital por Sixto V llamado de Santa Ana; por Clemente VIII Misericordia; de Natu1'ales por el Papa Paulo V, y de San Lazaro, segun acabamos de denominarlo, que es como por todos se llama hoy. La tan admirable instituci6n de las Hijas de lei Caridad esta encargada del regimen. inlerior y de asistir a los enfermos de los hospitales civiles y militares, asi como el de la marina en Caiiacao, dedicandose ademas esas santas mujeres a la ensefianza en diierentes y muy import.antes establecimientos: La Concordtia, las escuelas inwnici:pales, el A.silo de San Vicente de Paul, el de Santa Isabel en Nueva Caceres, el de San Jose en Jaro, la Casa de Caridad de CeM, etc. En Manila, 6 a pocos kil6metros,
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La misma Orden de San Agustin cre6 y sostiene el A.silo de hufrfanas de Mandaloyan, llamado de Nuestra Seiiora de Consolaci6n, a. cargo de las Madres Agustinas de San Felipe Neri. Todas las eorporaciones religiosas de Filipinas han fundado y sostienen 6 dirigen y administran establecimien tos piadosos <le instrucci6n y albergue para los desgraciados, establecimientos que en una u otra forma y proporcion, son alendidos tambien por el Estado. 4. !tfonte de Piedad y Caja de Ahon¡os. - La beneficencia cre6 asimismo en Manila, el Monte de Piedad, euyos excelentes servicios pueden apreciarse con s6lo tender rapida mirada sobre las ciiras que revelan el desarrollo de sos operaciones, conduciendo a aquel magnifico establecimiento a un grado de esplendor y de pujanza excepcional. Tal establecimiento benefico tiene 0
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adjunfa la Caga de Ahorros,. i111tsifliittt:. ci6n que talil t0 moralliza, i.m.£1!1rn1i,elildo elil el hom:fure pFulileruhe estilillru10s para [a , ec@JiHHnfa, Iab@ric:,si<il'a<il y orden. La ve11tajosa ©riamfaacion · del l\1011t!te d,e Pieda<il y la Ca1a de Ah@rr(i)s, a~01allil.dose ])eciprocamen~ , te, <iletermi,n:a cornpleta seg,1!11.'idlad. y fijeza para el un@ y para Ta @tra, y hace que recaigan em. pr@ de los neeesitados y cle [os im.•p@iiten:tes i@s resu1tados de la ,rosperilil'ad lograda, por el establecimiento de que nos . ~ ocupamos tan. li la hge1'a, c@m@ de tod.os los .!!lemas llJ11irn so1@ e.m.mmiera:m0s, poF fos ])])Op<fls,iitos y cl.esee>s que tenem@s iil!e no molesta.r cofil exceso a tl:l!lest•r@s bolilcl!adosos tec'll0res. 1
5. Vias de eomW11,ica,ci6n . ~La de>minaciom espaiii.ola, asl)li,1'amd@ si:n. cesar a que l@s m:vl evrwiie'Tlfta y cinco pueblos qlile desigma ei momem.cMt@r de Filipinas vivam comHlilicamd:ose ent1'e si y 11:m.os <i:011l otve>s c0n la' 0
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mayor iacilidad, segun reclaman los intereses Yerdaderamente legitimos de todo orden, desarro116 cuanto hasta hoy desarrollar pudo dada aquella enorme extension superficial, las vias de comunicacion tanto terres tres como maritimas . l\focho hay que hacer respecto de las primeras, es claro: todavia hay pueblos sin caminos vecinales siquiera para poder cambiar sus productos con el litoral . En vias ferreas aun no se dis.fruta alli mas que una linea explotada en extension de 196 kil6metros desde Manila a Dagupan (Pangasinan); pero el movimiento maritimo adquiere vuelo extraordinario, ya por el establecimiento de lineas regulares¡ de vapores que en toda direcci6n surcan las aguas del Archipielago (en el cual al propio tiempo se mantiene importante navegaci6n a vela), ya por el aumento logrado en la navegaci6n de altnra, no solo con la metropoli, sino con los grand_es
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puertos de la Am.erica, de ·Ghiifla y del Jap6n. , 7. Servicios espeeiales. - Ai lilesarrolfo de t@das fos rm,erzas de J'!)rnduccroft q.1H1 e·l!l.· FH~pinas v~@'I!le @iera'!).cl.0se especialM!lell}:te desde @fu.a- • 0
:renta allos !ha, c0ntri1bnyen m11,1c,h<iJ los constanl'les S<M'vioi@s en,G@IilileRcl.a~ dos a los oo.eri!)@S esp>edales, cl!l.y,as actividades de cons•hllll·<ii emisaeifu.an. grandern.e:ate los J.:i:011iz01n.ties extel!liS(i)S
de aquella :r>ilbiliica l\i<iJ.ilil@za:. El cuei'Jil© cl:e ]ng@nier@s eiviles ( en el cual pr.estaID. <ilisitinglllil!l@s seF~ vicios i1Jam1bielil fois lm.g@n~@F(:)S mi1itares), a p>esmr oJ:e ~()) illillilC~@c !i}/1:le [ e ·oc_u,p~ atender ta e@~st:r_ueciii6>n y, iJ!'eparac1ones tile los ecli1,file10s lit@l !Blsta:1 do, dediea a las ill;eiitu\Js @lilras ~l!Lb1icas todos 10s esfu:l:erz@s ql!l'e. d!e1!!,1l:r0
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de las c@rrsig.m.ac-ioRes <3.el p>f@Sl!l[li)tit8S'to cabem·: s@n acl!mli.lfaM!\ls Nailm@nije las q:1rn Heva a cab0 eni esfi0s :frlitimos afios, sobre t01ilo em, pl!lemlt@s "j &ar0s. . Por lo q,l!le estos ail.~tim@s r@s:);!ec-
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LA INSURRECCl6:'II
ta, ajustase al notabilisimo plan general del alumbrado del Archipielago, que situara en accidentadas costas en plazo breve 40 luces cuyos destellos blancos y rojos, continuos 6 aUernados, tantos desastres estan llamados a evitar. Y este plan a que nos reierimos, volvemos a asegurar ha de verse pronto realizado, pues ya en 1. de Enero del aiio pr6ximo pasado, aparte de las luces que sostiene la Marina, el Comercio y las Corporaciones locales, lucian por cuenta del Estado 17 faros de los 40 que se ban de construir. Manila va a contar con un puerto monumental, grandiosa obra que por el mismo Cuerpo de Obras publicas eshi construyendose, y ya HHIY adelantado relativamente a los formidables diametros de aquellas darsenas. F1:rneiona en Filipinas, un distinguido ~uerpo de lngenieros de mon0
FJN FIL!PINAS
tes, cuya Lm.speoeiofil geneilla~, con ](i)S cuatro cHstr~tos :fornestailes em ~ue s~ . dividen ias islas y la Jefatura de comisiones especiales, diirige el a:pro<v,echamiento y cu'stodiia de h:>s montes del Estado; esta al fremJte de la parte tecnica elil la comp0sfoi,<fl'm. de ile,r,i;e' nos rnalengos; ;wra:otiea t@s estl'lGli0s reierentes a ta lfora <ilel AJJcil1lipielago; demarca la,s leguas · eQml!l.@aies~ informa sobre la 00ncesi@lil <ile iterrenos agrfoolas; pl·actica l@s .tJ1abaj:0s perioiales [(!lam la ¥emta <!le terrtili;rIDs .l!laldtos, auxiliandID a la Intenl!lencia general de Hiacielilda, despues (l]le practicar todos los servicios men.ci@Iiiados y otros que !a encomigmcl.a la 1 Direcci@m geoera[ de Ad1~i;nistFaei@Jil civil, de cey@ Centr(l) depemd:e la fnspecci6n genera:l de este ramQ, asi com0 de el clepemdem las demas fospeccion.es que e@rres]i)@lil.cl.ei a Fo, ' mentio y G(l)be~·~aci6li1. Alli e1 seni.cio ge©l@gi00-md1F1e11@ encornendad(l) a [a lrrs'{i)eccion gen.e-
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LA DISURRECCION
ral de Minas, Ia cual, con las tres comisiones en <Jue esta di...-idlda para llevar a cabo los servicios, practica los tan importantes de campo y gabinete que la indole de la riqueza minera requiere, ocupa.ndose muy espedalmente en el estudio de aguas minerales y en la formaci6n de cartas y estudios geol6gicos de todas clases. Alli un servicio meteorologico encomendado a los PP. Jesuitas, los cuales lo desempefian por modo admirable en su magnifico Observatorio de Manila, en el cual han acumulado los aparatos meteorol6gicos. seismologicos y magneticos de mayor precisi6n ; todo cuanto esta moderna ciencia ha descuhierto s aplicado ¡para la observaci6n y estudio de los fen6menos atmosferioos en los ultimos treinta ai'i.os, que es realmente prorligioso. Los trabajos meteorologicos del Observatorio de Manila son de grandisima importancia.
EN FIU,!'JNAS
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y si no la adquie.reQ ma,y-0·1.s p(i)r sms· ·· aplicaciones a la liia.vegaci6n y a Ia agrioultu<ra, y 'lilasta war-a fa sa.llild'.J!)filblica, sera porque fos tr-abajos a 11ue aiudimos n@ sea'lil: sulficieIDtemen:t\e conocidos, Io cual tam1poco consistirli en falta de oel0 por pa,vte de los . PP. Jesuitas en dti.fonddT· tan imp01·tantes estudfo>s.
8. Adrrui'l'llistmci6n :publi'ca en gmeral. - Coiporaciones 1·eligi0sas: -:--'- La d0minaci0n es-pafiIDla b.a instituido en Fili1:>inas 1;rn1a Adrn:i.1n4straci6n publica, talilto c:ientrat como provin.ciaa, en. modestisima esea[a; i[)0FID ail!l.,R asi, esta oompuesta de factores·analogos , a los que cpnsti1mir ptl©da'lil la A(l].mi' nistraci6n de los pue.Mos mas cliliibos deI orbe, y desde luego eX!cediencl0 1 a la mas expansiva de es·t0s. . Este '3.sert0 es incon.itrIDvevtible. :La Administraci6n pv.bbiica espaliiofa, que en el organism@ -de detatle, en Administraei6n J!)rovincfa,], no ~l!len0
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LA INSURRECCJ6N
ta en las provincias de Filipinas y en solo sus cabeceras congregados sino con 7, 8 o 9 funcionarios publicos peninsulares, jamas ha tenido represenlante alguno directo de la Administracion civil, sino que en los 1.055 pueblos que hemos dicbo se ouentan en las islas, la raza conquistadora no ha dispuesto de otro elemento para su representacion mas genuina que el Cura parroco, es decir, el fraile. EI fraile, custodio fiel de todos los intereses publicos en aq1rnllos pueblos que en Administracfom eclesiastica aun podrian llamarse parroquias-misiones, pues este y no otro es, segun nuestro pensar, el verdadero caracter con que hay que mh¡ar a los feligreses indigenas de las mas cu1tas parroquias. Es claro que entre esos indigenas, iududablemente, fos hay que son muy buenos cdstianos; peco tienen en general tan escasa retentiva, que solo con la asidua predicacion es como los in-
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LA INSURRECCION
indigena es Lambien el del populoso arrabal de Quiapo , y curas parrocos indigenas son aquellos clerigos que administran los lugares vecinos de Mariquina y San Pedro Macati, y Muntinlupa y los pueblos de Dinalupijan y de Calaca y de Lian y de Indang y de San Roque, San Francisco de Malab6n, Alionso, Magallanes, Ternate, Mendez Nunez, Tanasan, Santa Cruz, Torrijos, Mogpog, Bosoboso, Ang9na, Jalajala, Cainta, etcetera, etc. l Es que por acaso a la Administraci6n espafiola le fall6 en algun tiempo personal eclesiastico? Jamas. En ello s6lo hay lo que apuntado queda: el generoso afan que la dominaci6n espafiola ha evidenciado siem,pre en Filipinas de conceder al elemento indigena todo, todo, todo cuanto ha debido engendrar en el la mayor simpatia y confianza hacia los espaiioles. l Para que necesita la Administra-
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cion eswanola el aa,rxrili@ dei elei·@ in::. digema, cuando J!)ara_admiNisfa,>aF las par•r(i){<JtQias y las !ilmmer@sif/,imas misio·nes a~ilij estaMecidas se ha veI!lli.<!l@ c@nland•@desdo el desc1t111l11imieJJ1,'fi(i) y. CO.tl<1J.U-1Sta C(i)Il C€l1JJl!lr'OJCiones r efiigi0sros ,compuestas de fra,iles misi@ne,r:os li!©F , namero y caili.dad. bastamilies pata a tender a la e-Mangelizaei@n de a(il111~l ,vastisimo teFiriterni0, seg·t'l!il ya i11Miie>s corisignado; a la adim1illllistvraci6B parroqu ial; a la ~e talilit© y, fa1mf@ estableo~rnien to pia&s@ ce>il\li10 fos qme '. ~emos 'l;a,moien er;u,un:era<il.@; patEa pr,acticar ·c0li1Sltante, seem:laFmenille, , -0ticios auxiilial•es, rr>ero st'libstamcialiishnos ~m la A<il,mfa;1Ji.~'tili'aci@I.il p.t11ibli~ 1ca ; firaHes <i}tl'e ademas <3:e 0iedica;yse f a toda es.ta Saft.ta ~abor, :provech @sisima para e'l Estacl,@y; para,fa Reli, gi6:m, se cletili.caihMl -W <lledieam ~li1 aq1rnllos p1i1,ebios a '.las e'lilsefial.ilzas y apli1 caciones de las a'Ftes y m.e la ~nd•usLtrfa y agrieulitl!l.ra y del comeFci@, iIDJllil1sando a l@s im.cl' OS a la ~raetiea 1
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y ejercicio de todo lo que puede conducirlos al mejoramiento de sus intereses materiales? Con igual patri6tico teson cuidaron siempre los frailes de _Filipioas de la sagrada integridad del territorio y del orden publico contra todas las maquinaciones que entre aquellas variedades de razas se producian para alterarlo. Singularmente en hechos de esta indole intervinieron, siempre con exitos brillantes, aquellas corporaciones religiosas de Agustinos, Recoletos, Dominicos y Franciscanos, que desde el afi.o 1565 al 1606 sucesivamente se establecieron en aquellas islas, y que fueron las que hubieron de veneer los mas serios obยงtaculos presentados- a miestra dominaci6n. La falta de soldados espafi.oles, pues :nunca aquellos .invictos caudillos que regian el A:rchipielago, desde Legazpi hasta Malca1;11po, solian contar con mas de 400 6 500, obligo en cien
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ocasiones a las fraifos de Fi.H:t;>inas a trocar momenttat1eame9rte sus e0gl:l!llas por sombrerqs1 '3.e n.iito © <il'e buri, y al frentlf de muche'3.umbres armadas, por ellos dirigidas, 'acometieron. denodadamemte a Ios emem,ig·0s y a los perturbadores de aquehlos puebi(i)s que se oponiaooi. a que est(i)s enbraserr en el concierto social por l@s tra1>ar jos de nuestros misio·mep0s a:traJd@s. Esta tupida la historia de Fil,~19inas ae beroicos gloriosos lfu.ecfaos ['levam.os a ca.bo p@r fos fraiiles, tijjuiienes :ftlerroa los restauradores del publ.ieo -s0sieg@ en tan gr-aves"trastorn@& y rrevueltas. A los fraiies debenles l@s indios filipinos. etenila gra·titl!ldl e impeFeee-dero amor; mas la Achm.1imis·trncii'.m publica espamola les trilbl!l!ta y ha.bra de tributaTles d'e seguro, y por si.empre, las consideraciora.es y ei respeto que merecen los hombres.qae la gl<,>_: rifican p0r sus vl.rludes ci;vi.cas y .oristianas. Los seiiia'lados servici<l>s·de l0s kai-
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Jes en el Archipielago filipino comienzan, segun hemos consignado ya, en las pritneras expediciones. El P. Urdaneta es quien traz6 el derrotero mas conveniente para regresar de Filipinas a Espana. Nuestros Adela,n tados recomendaban a los frailes tambien la dificil gesti6n de continuar explorando aquellas tierras y aquellos mares, y con 12 soldados, ocho grumetes y un desgaritado, los PP. Cantova y Walter descubrieron y evangelizaron todas las tierras al Este de las Marianas siluadas. En aquellas tierras. sin embargo, y con . ocasi6n de ir a bautizar un neofito, fueron asesina,.,. dos el P. Cantova, su interprete y dos soldad0s que le acompafiaban a Mogmog, desde Jalahep, en donde quedara el resto de aquel pun.ado de valer0sos exploradores y conqlllistadores. Con :l 7 soldados lJ:eg6 a las costas de1 extremo Norte de Luzon el incli-
to Juan de Salcedo, y aqueUa foerza, auxiliada po~ t0s fr8!Hes Agm:S"tiaos "./' Dominicos, red11jo y ev.aingeliz6 las tierras de Cagayan, Isabela, l?angasinan y Nue-va Vi1icarya. Manila, Bataan y Elillacan ya eran cristianas desde 1578, es decir, a tos dos 0 ~res afios de predicacion sostenida por los Agustinos y los Francis@arios. Estos mismos, al propii(i) !Uem_[i)o, uis~ tianizabcl!n los [locos y fund!al>Ja,n. Laoag y Bantay, teni:torio pob.lad(i) por cliÂĽersas y fli,e11as razas. Mr. Gironier afirma, despues de hali>er visitado el- Avchipi<Hago, [a exis-tencia en el, en aqlrnHas epocas, de gen.tes de c0stumbres hasta antrop0fagas. Coa el auxi,lio de ios J.l>\P . Agustinos, pudo Martin de Goihi, <iJ:Uien s6lo con 80 soidactos castellan(i)S eonrtara, veneer la i'B.surNccitni1 r:nas grave que en Filipinas se J!)F(i)d1,1j,o , durante el memonaMe man.do de Legazpi. l Quienes sino 10s firaHes Ree0fo-
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LA INSURRECCION
tos, delegados por la autoridad superior de las islas, obligada a acuclir con presteza a otros lugares, dieron cima a la arriesgada empresa de reducir los cimarrones y los aetas, pobladores de la abrupta regi6n de Zambales y de la de .Mariveles, no menos accidentada? ;, Quien redujo verdaderamen te las tierras de la Union , fundando a Agoo, sino los frailes PP. Picazo y Baeza, y quien sino el P. Jimenez, Agustin-0, inici6 la evangelizaci6n en Albay, continuada tan activamente por los PP. Franciscanos, de la propia suerte que ]os Agustinos terminaron Ia iniciada en B&tangas por los Franciscanos? ¡ ;, A quien sino a estos o.ltimos se debe i en tres afi.os !, desde 1578 a 1581, la creaci6n de los pueblos de Naga y Bula, de Naboca y de Quipa~ yo, de Dact y de Inclan y de Paracale, en las tierras de Camarines Norte y Sur?
EN FIL1PINis
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l Quien sin.o los reMgigsos Fran.ciscanos, Agusti,ngs, D@mi:m!i.c@s y l0s PP. Jesuitas crisrtian:izarm!l i'a: Ji)f(i)vincia de Cavite, y quie•l!l! @ (!ftlihnes sino los primergs de es't@s reHgi0s@s fundaron 1os pl!lebl0s <il:e MMi,gon-· d6n, Silang, Indaxng y Malaib6n? Los frailes de esa l!l'Ovincia' la mayor ; parte de eHa administrada hoy p@r los Recoletos, faeroa los qmie re<ftugeron a todos los ililffi-eTes ~e la j?0bl~ ban: de esfos ya no q1ieaa am UI'l(i) solo: en eambio al6jam1se e,lil' la misma muclii.os ililgta't(i)s.' ;, Quien:es simo !gs fra,ifos Franoiscanos fm1darnn h'ls peeblos de t-a Lagll.na y Tayabas? Si J.illan de Salcedo destroz6 en. Pa1:ngasi!lilai;1 l@s 'res~ tos de la piFalica exJlledici6n. de ll.imah6n y Siosco: si: en hec-ho tan. hrillante reve16 val0r exce1i>ei@Il:al Gl!lli<lo de Lavezares, j~tbi!, siir;i la ilil~e,u¥efilci6n de los frailes Franciscal'10s si1ngularmente, que capitanear(i)n masas indigenas c@ntra a«:prelll@s pi,ratas, y
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sin los oficios sefialados del agustino Fr. Jer6nimo Marin, a quien ciegamenle obedecieron Lacandola y Raja Soliman, nose habria obtenido victoria tan sefialada contra af(uellas hordas, ni se hubiera impedido tan por completo el levantamienlo que se inici6 de muchos indios contra Espana. Pero ..... no podemos continuar; nos lo veda en absoluto nuestro plan trazado para el presente pequeiiisimo trabajo. S6lo para enumerar en' forma de general indice cuanto a la dominaci6n espaii.ola en este ramo de la administraci6n eclesiastica dehen los indios filipinos, precisariamos un gran in folium . Nos interesa, no obstante, en apoyo de argumentos que hemos de presentar m uy pronto, y para hacerlos de fuerza incontrastable, suplicar, coal lo efectuamos, a nuestros lectores recuerden los servicios que a la Patria y a la civilizacion vienern, desde ab vnitio, prestando las corporaciones reli-
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giosas en a<ip1elfas aparfadas 11egii(i)nes orientales. Talil g·ralilde er.a-la fo qllle [a gesti0in de l@s frailes iaspimFa a Legazpi y a todos los i'lus't:res earpitanes qillle 11,'8gian aq,urnllas •espafi.@las tlierras-, ql!lle el ,prime1, gobe1:nad(')r de Fibjipi..mas, , el fuudador de Mal'lill.a, pedlia «rm,as fr.ail es q_we so lda,dgs » pa1·a reg~r t!illil. . pais <il.e tan abiga.Fra<il.a c@nstirtNGiefrn, cual la que fuem.@s dicb,Q ')/lreseatalilan aquellas 2\!l razas errncaFrui.zadamelilbe enemigas fas tmas de las ('){ras. Y sjn embavg@, a t0s sfote a,iii@s de tfiHdada Malili.la, todo el .A1,1eh~pie lago estaba ya sujeto a la cllomiBaei0'.l1 ·espafioia, merr,ce<ll a fa inifhte•fileia m@ral /de aquellois fraile-s ~1rn desde Le.gaz pi hasta Dasmariftas favi.ev@n' foda / autoridad deiegadm. Y de ita~ Sl!lembe supieron atmerse la vohmhad de , aquellas masas, q'l!le los iDraifeS -Jl)l!l1 die:F(')fl coliltaJr co·m :farnrzas dec,id,i das en favor de los patrios in,tereses sfomr pre que precis@ fue: eri FHi,f)i'l.il.ias, ja: I
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LA il'ISURRECC!6S'
mas hubo fuerzas espaiiolas bastantes para Lan arduos problemas como alli se presentaban, ya lo bemos dicho; pero los frailes las suplieron en todas ocasiones y en toda forma, dirigiendo con prodigiosos exitos operaciones de guerra terrestres y maritimas, todas rapida y ejemplarmente llevadas a termino. i 23.000 chinos perecieron a manos de las masas indigenas capitaneadas por los frailes de la Laguna y Batangas, cuando alla en 1603 los chinos intentaron por segunda vez apoderarse de nuestras islas Filipinas! Los frailes dirigian las huestes que casUgaban, y llegaron a extinguir la pirateria que sobre los pueblos indigenas caia para corneter en ellos todo crimen y depredaci6n. Los frailes construian fuertes y presidios y fortalezas en estrategicas lineas escalonadas, para tener ;i_raya a los enemigos encarnizados de las razas que se cristianizaban.
BN 'iiILIPINAS
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Los frailes, en: fos primeros t\iempos de la .conquista de FiLlpi,nas, asumieron it6d0 gen.ero de a!JFibuofones y ~1unplier(i)n. t0da Sl'.\eFte d:e deberes, como lllan segl!l.ig.o cum.plieBdo CO!il. estos il!lltim0s des111ues de -haber perdido mucba-s de las p:ri, meras. No destinaban. sns activfolades maravillosas, cienta,rnente, a s6lo fos conceptos de paz y de ghlel!ra, q:me, fan inc0mp1e'fiameIJte siJ'ltetizamos, sino que a 10s veinti@in<e\o· afu.os de domiBaci6lil espa®.oia, ya 1os frailes habi,alll esc1dt0 y }'lm'li>Head@ ~;ramati'cas y diceionar,i0s · de todos los dia1 lectos ~1ue oomJ!)onian aqiug1Ja jerga lingiiistica del samscrifio , deriva<ft.a, aunque en. elilla se recoli10zca · m·l!l.y dificilmente Shl verd:ader@ 011i.gen, y , habian escrito y pl!l.bliead0 diversi1 dad de obras ge0grMicas y fil@sofiea-s acerca del caEacter de aqueHas ra~ zas, y habian estarn!IJado cartas de itinerari0s y derroter(i)S ,p al'a la J!i:a-
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LA 1NSURRECC16N
vegaci6n interinsular, IJUe duranle muchos afios sin alleraci6n alguna los sigui6. Cuanto sobre Filipioas se ha escrito hasta los comieozos de este siglo lo fue por los religiosos de las diferentes Ordenes, y sus producciones cientificas y literarias han logrado j usta, perdurable lama. i Cuanta y cuan legitima importancia adquirieron los estudios publicados por el P. Diaz, los hist6ricos de Fr. Domingo Martinez, los de igual caracter del P. Mazo, la obra extensa del P. Fr. Juan de la Concepcion, la de Fr. Joaquin Martinez de Zuniga, las de tan modestos tilulos como l@s Ensayos hist6ricos, estadfsticos y geograficos del P. Rivas, cura. parroco de Bataan, y las Memorias del padre Gaioza, misionero de Nueva Vizcaya; las C1¡6nicas del P. Santa Ines, y tanLas otras! De los 4.500 volumenes que se conocen escritos hasta hoy sohre Filipinas, y entre los cuales los bay de
EN FU,.Il'INkS
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merito indiscu.itible, ;, ctuiles de ma-
yor valfa que ba Flo,·a 'lliltipitna, de~ bida al sabio y vi.rt,uosisimb :traile agustino R. P. Blanco? l Qui em. puede nega;r1a a l@s estud.ios «il'ei P, €':'ombes, acabad0s de reprodueir e.m. muy . lujosa forma IJ)Or el entasiasta fil:i]j>inista el Dtputado a Cortes D. Wen· ceslao E. Retaaa? ¥ en .J0s lliemp@s act1rnles, c@m0 e11 los antiguos, los frai1es s@stien.en. su labor cienUfica y produeeu tral!>ajo~ de VeJ/dadera importancia y, de reconocido mgrito; a.h!i esta:m. los erutlii.tos estJJdli.os ultimamente 1mbliearl0s pC>r el P. Navarro, agl!lstino, y l@s wro~ndisimos sobre el ccPatrt>nato», de1. HusLFe do1ni0.ico Fr. Matias G-01;r;u;)z. ' c< L0s frailes fuan elevado a,};,pl!leblo pHpino al mas aJh@ punfo de oiviJizacion de QiNe es Sl!lSCeJ!>UMe una 1·a: i2a que hace menos de tires sig,l@s se ,hallaba en la mas completa ll>arbil.rie. » He aqui, em: te_i;:to Hlera.1, 1@ _q ae ,el Duque de Alencon deeia respecto
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LA INSDRRECCION
de las Ordenes religiosas de Filipinas despues del viaje de estudio que aquel ilustrado arist6crata llev6 a cabo por todo el Archipielago en 1866. Si, en los tiempos viejos, los frailes prestaban todos sus valiosos oficios a la causa de la Patria y la civilizaci6n, no s6lo crislianizando aquel territorio filipino, sino atendiendo, por delegaci6n de los Poderes publicos, a cuanto era administraci6n y gobierno del pais; si, los- frailes, al propio tiempo que evangelizaban y redimian de la barbarie ;i aquellas tribus de vida ignominiosa, cuidaban con e~mero las nuevas tierras de Espana,. y lo niismo celebraban misa y administraban los Sacramentos Santos, que acudian a veneer revueltas ya salvar naos de Acapulco, amenazadas de caer en manos enemigas, y a construir iglesias y cemen.terios, que a establecer escuelas y fortalezas, y caminos, y puentes, y calzadas, sin consignaciones de pre1
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EN FIMBINAS
supuesto; si, \lo mismo S@ ddsemJ,ma-ban por las espesuras de los abfl!lp-tos montes del Archipielag@ em mus- 路 ca de trib1i1s salvajes ~ue C'iviltiza.ir, que acudian <Wm@ em!bruj,ad@路res a J.as cortes de vecinos rein@s, <u!lyos hiio,. ma& tambien 1os fTai.les apread,i an, siend@ l@s l'.rn.icos que con mayor fa... ' cilidad riodi~n desempeiiiar fas idipl@.-maticas misiones, c@m.o a<IDm~!Jl,as <!JiUe para el Emperador dei Japoi!ID iJllev:a-ran en el navio !ile Farauada fr. G@m-- zalo Garcia y Fr. Francisc@ de San Miguel, en est.e s~glo mi:sm@, es <ilecir, despu~s ~ue p@11 los aires de des-preocu.paci(m.; tan :pr@pio\, de la ~po~ ca. y p@r leta-1 propagaitda de -determiliadas <;locbrinas, ha vemido res1!1ltando con injusticia notor.ia y, nias路 grave daflo :rnermada en el orden 1 social la h1flueacia de fos fraiiles em Filipinas, ban podido esto_s cHti-nuar sus ofiei@s patriotic@s; y, vi~i~ lantes siempre por igual de la inte-. gridad del ten路iit0rio, ell@s s0n quje, 7
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LA INSUIUU!CCJ6N
nes advirtieron en todas ocasiones, y en muchas sofocaron sin otro auxiJio los peligros que a la dominaci6n espaiiola amenazaban. Los frailes advirtieron y dominaron ellos solos la rebeli6n que en 1807 se alz6 en Ilocos contra Espana, y cuando aquella sublevaci6n renaci6 briosa poco despues, un solo fraile, el cura de Batac, la domino, siendo ahorcados en Laoag los seis cabecillas que quisieron asesinar a los castilas. Los mismos indios del Norte de Luz6n, puestos de acuerdo todos, los reducidos como los igorrotes, apayaos y calingas, con los aritas, quisieron exterminar a los espaiioles en otra conj ura que estall6 en 1'811, y los frailes la descubrieron: el Gobernador general de las islas la venci6. A poco de publicar Gardoqui la Constituci6n de Cadiz, en Filipinas; a principios de 1814, otra conspiraci6n formidable fue descubierta por los
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euras parrocos de Sarra,t, Pi'd)C!lig, Dingras y Vinitar, e'ID. Jb;ic@s N'@rte; tambiea enitonces se, pac't:11) [a cl.eg@llina de los casfillas. lQuien ])Uecl.e (i)lvicl.aF fa tigu.-r a Ji)atri6tica del Arzobisp0 de Ma,'ID.ila en .la eatastDofo.de ll.82(i)? l Quielil no :recu.erda C(i)F1 frl!lici(m ' intima la condil!lcta de los f·ra~[es en los sucesos ~ristes de 1823, tramad0s por el ma,s ast'l!1t0 de l@s colils·pirad(i)11es de Filipii0as? La . ~IilS'li1fEeeoi@m life 184113, capitaneada Ji)@r Apollinari0,, en: 'fay;abas, l)ero p@m.iendo en Ji)eligi;(i) ili@das las isias, lP@r qrnielil fue descubierta sin.o por el cura 11!l.e Ll!lcbia,n. y su.s cola,te. tales, fua,iaes fralilcisca,n@s? ' 1 Y }(i) qurn seria cu,rios© y obra d:e estricta jus'lfoia, f,uera. ia pl!1Micaci6n de los estl!ld>ios y sabias 0bservaoio11es y acl.iVerte.ncias sa,nishpas hechas po11 }(i)s fra,iies, ip(i)r t0d0s l@s ambit0s cl.till Archiiip>ielag@ diJsemfaa- _ dos, respe_~to a las tentalliiv:as 1!)11:le
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LA INSUJ\RECCJ6N
contra la dominaci6n espaiiola se hicieron en 1854 y en 1872. Bueno fuera tambien , y muy justo, se conociese en toda su extensi6n la conducta patri6tica de los frailes, su incomparable celo y su valerosa resoluci6n, dominando desde los lugares en que pudieron ser objeto de venganzas, l-0s trahajos que han producido la menguada sangrienta insurreccion del Catipunan. Despues de haber trazado con nuestra mano tosca el cuadro mezquino y vilipendioso que ofrecian los pobladores de las tierras Oceanicas, descubiertas y conquistadas por los espafioles, y de haber nosotros bosquejado por igual torpemente el cuadro de inconmensurables diametros relativo a los bienes que en aquellas islas ha producido la dominacion espafiola, 'esperaremos con absoluta confianza al juicio de nuestros 1ectores, . pues entendemos pensaran y sentiran, respecto de
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CAPfTBJiLO [V :Periodo preparatorio y prodromico de la insurreccion.
1.' Masoneria.-2.' 111,iga fi1~pina.-3.' Catipunnn .-4.' Siniomas.-5.' Patirioticas denunoias. -6.' Verdadero canacter de la ~nsu.rrecei6n tagala.
1l.. Masoneria. - Enitemdem.0s y, h0Dradame11,te a:firmam@s q,u.e, ea conce:Jil'to nuestr0, el origem, la c~prnla prirn-i,tiva cl.e i-a i:msu1,rec<>;i@m , de 1896 e11 Filipinas se halllla eilil la , masoneria, dentro de esa i¡J\stitua-ion universal y extiroo.a .qitie, segiullil ffl/1!11 chos opina,m, hizo tarnbalea.r 'y au.B 1 derrib6 otras imstituciones pol,i ticas secufares, y a l¡a c-~1al achacam,le Jas historias 6 fas leyendas acontieci0
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mientos que lograron en el mundo resonancias de excepci6n. Nada sabiamos de esa sociedad secreta; s6lo despues de producido el alzamiento de los tagalos contra la dominaci6n espaiiola en el mes de Agosto ultimo, y cuando el publico general rumor nos inlorm6 de que tal movimiento tuvo por fundamento y base los trabajos mas6nicos operados en las numerosas logias que se indic6 funcionaban en el Archipielago, fue cuando sentimos impulsos de patri6ticos d~beres por llegar a conocer algo siquiera del organismo de la francmasoneria y su desarrollo y fines por la misma perseguid6s en la tierra filipina. Conocedores en algo del caracter de los indios ( en poco por lo visto, a pesar de los treinta a.iios que venimos tratandolos) ; sabiendo de que suerte en aquellos cerebros, cuyos hemisferios evolucionan manifiestamente p@r modo mas incompleto
BN FJLIPINAS
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que en la raza b1anca, hal!lan. poderesos atractivos to().as las cosas inextricables, a las que por solo esta condici6n dec1a•ral!l u,Hi-ravilfosas 6 sobrenaturales, no nos ca'l,lSO extraiieza alguna llegar aJ. eonocimiento jle que en el pueblo fi.1ipin(i) hwbiese iffiuchos que ac0giese111 C©Jil tant0 entusiasmo la propaganda mas@nica, y que a dGcenas de docenas hubieDan podido hrnd.a~·se logias 'Y mas l(i)gias. Adquirir, aunque 00 sea mas _que para usad(i) en secreto y fH!l·r hroma, un n(i)Irl'l.bre n.111e-vo de 1Gs ·<que mas · ruido hain pr0d.'ucid(i) el!l el mundo; emplear en cartas y papel<ils a gui,sa Ide timbres margi.ID.ales, C(i)IDO he~al,._ dicos, escuad.ras y ,miveles e i111icia, les; vivir s@ste11iendo ~orresponden.cia con persolilalidades de viso en fa 1dirversidad de Jas n:1).cienes; l1a.maEs<il ; y considerarse como hermaID.as , priucipes y de magnates y ha,sta de ~ a~g110 rey que en su pN>J!)LQ [!)ailaci0
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estableciera renom brada anglo-sajona logia ; cumpl iment ar f6rmulas con los ojos vendados ; presta r juramentos para destru ir supue stas tiranfas ; sufrir amarr adura s, aunqu e vulneren substancialmente la piel ( en los indios filipinos, erosionada de continuo por los eczemas de raza}; recibir pun.ales como armas venga doras, acompafiantes fieles en vigilia como en el sueiio, de los mas6nicos sectarios; verse orlado por tan extraiio marco, cual el constituido al iniciarse con unas docenas de pun.a les y cuchillos simb6licos, esencial atribu to de la familia nueva, que segun expresi6n de los que le rodean, se crea el adicto a la masoneria; todo ello es lo mas apropiado que en exterioridades concebirse pudie ra, con el fin de conmover profun damente la partic ular sensibilidad de la estruc tura nerviosa, defectuosisima en aquellas razas orientales. En ellas hay ademas que reconocer
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LA INSURRECCION
mun. 217, que cre6 en los valles de Cagayan, extremo Norte de Luz6n, hasta los que instal6 en Jol6, extremo Sur del Archipielago? Desde luego, en una carta q ue aquel propagandista fechaba en Manila en 31 de Marzo de 1896, afirmaba haber constituido en su propia casa las logias «W alana », «Luz6n », «1Iodestia », «Dalisay», «Taliba>>, y aii.adia haberse celebrado en la misma, «la Ten. Mag. de la Constituci6n del gran Cons . Reg., que qued6 instalado en aquel lugar». Con mete6rica rapidez, la masoneria acumul6 en Filipinas todos 6 casi tod0s los elementos de mas relati va capacidad intelect ual entre los elementos indigenas. No halla cabida en nuestro escaso eatendirii.iento, ni lugar en nuestro entristecido coraz6n, la idea de que, dependiendo aquella organizaci6n mas6nica filipina, ya del «Gran Oriente Nao~onal», ya del «Gran Oriente
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Espanol»-, pudieran obten.er de est@s tolerancia siquiera paFa: los preiEJositos separatistas que abr-igaba!ll los · naturales de a1ueMas islas ii la masoneria a'filiados; y aJ haceir esta declarac,i6n, t0do el que 11<:>s COJ:!OZ<m la pr9clamara siRcera. , No podemos ser en este ordeR 1ile razonamientos sospechosos para ·dde : jamas lilernos teRid@ aisposici6n alguna a forma,r parte de tal secta, por(i)iue s@riH>s cristian.os viejos ; per0 reJ!)tihiml!los que llli podem@s creer ni cree'ln@s pud-iera c,mtro ailgu.n o mas6nico, c0ni·J)ll!lest0 de espa:iaoles peni0sl!liares, toierar, ilil.ti nrn•c ho menos fo>mentai: a sabieadas la propaga0i6n de <il'@ctrinas q,ue, <il'et,3!l'rolladas cual la masonemia l@ efeatuaba en FHipinas, plildieran da,r 011i- . gen a eong,regaci(m de etemeR,t@s Separatistas. : Y sin embargo, al lad0 cl'e esta fir'11,e convicci6n re,ilte11am@s fa q,i:J:e tambien tercamen.te manteaemos, a
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saber: la masoneria ha sido el medio que reunio los elementos generadores de la insurreccion filipina. El filibusterismo supo explotarla grandemente. Para ia defensa de esta tesis disponemos de bastantes datos y antecedentes; de muchas correspondencias masonicas de fija autenticidad, y si hacemos gracia a nuestros lectores de no exbibir el grueso de tales datos, es porque no queremos resultar mas pesados de lo que ya venimos siendolo: no pretendemos ( pues ademas ser.ia vano empeflo) que este nuestro pobre li-: bro resulte un ejercicio literario mas 6 menos entretenido, lo que deseamos es que se derive de el algo provechoso a los intereses patrios. No tenemos inconveniente en afirmar, al reves, con gusto reiteramos nuestra absoluta creencia de que la masoneria espaiiola ignoraba los ver. daderos fines de los masones filipinos; pern probado esta, en concepto
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LA INSURRECC16N
insignificante. Un par de docenas (tal vez aritmeticamente no mas), que constituian la colonia tagala en Madrid, de acuerdo con unos cuantos paisanos suyos que iormaban la de Barcelona, y otros pocos que componian la colonia filipina en Paris, se agitaron incesantemente, hasta que en 1892 habian ya conseguido la generalizaci6n de logias mas6nicas en el Archipielago bajo la dependencia del «Gran Oriente Espafi ol» exclusivamente al principio, y bajo la de este y la del «Gran Oriente Nacional» despues, porque tambien este ultimo consigui6 reunir proselitos para la instalaci6n de otros muchos cen~ tros mas6nicos en las islas. A nadie puede maravillar el exito de tan activa propaganda, teniendo al frente los atributos de caracter asignados a los indios en general. Los hay el!lt'.re estos muy sagaces, como hemos dicho, y a este orden indudablemente correspondian todos los fi-
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EN FILIPINAS
lipinos rem1id.os en Madrid, Baroe10.:. na, Paris y iHong-Kon.g, c@n e'l fin. de irnpl'llsar en el A:rchipielago la 0'bra de organizacion de la mas@rn~.ria; n.ecesitaban. explot ada [l!)ara sus verclade.ros planes. C:0:0. el fin. de ocuLtaP esto,s, en tanto en cua,ID:to se _esparoian por aquellas islas los centros mas(lnicos, era objeto de los trabajos constantes de las l0gias cle Mialilib secundar con desenfad@ fa clifaimad@ra campaiiia emp11e.F1dida rp@:1:· <iLa S0.rp<Qi'aei6F1es lidaridad ii contra las c_@ religiosas, C©ntra [os rnailes, !i}ll,l:0 S@I! precisameIDte . qtaien.es Jaabian ecliucado coLJ. eariflosa -solicih10 a Jos mismos naturales fil:ip>iLJ.os (Jflile fiundarnn y redactaron y durant e cuatro 0 cim.-' co afl.os sostuvier@n la «Revistall (Jl!le os de citar; y cuya ct'lecci<fl1il ltcabam j oonstitNye verdadero iniamatorio hlbelo contra la dominaci6n espafl@la, puesto q1rn erec'tiva y vio'1en1.ame,i1:. te la agredfan, al :b>l!lrlarse coLJ. frrnici6n satanica de fos ministr0s qmi 8
sostienen la religi6n del Estado, y que alli registran la mas gloriosa historia en la civilizaci6n y cultura del pais. «Corto es el camino que hay que »andar, porque no queda mas que »una pequeii.a valla que saltar 6 »echarla abajo; ya comprendereis »que esta valla no puede ser otra »que la testa coronada. » Asi escribia el tristem enle famoso Faustino Villarruel en carta masonica, en la cual al propio tiempo pedia la extensi6n a Filipinas de la ley vigente de asociaciones en la Peniosufa, y la representaci6n en Cortes, dando en el mismo documento a que aludimos cuenta de la constituci6n de un nuevo taller, ouya aprobaci6n superior solicitaba. Pero hablemos con mayor claridad, que de toda ella es preoiso cuando de altos inhereses de la patria se trata. Los masones filipinos, 6 gran numero de masones filipinos,
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esta fuera de cuesti@lil que aca,riciaban Ia idea del separatismo, que el1ltre ellos vivia pr0i,1Jl1ndameli);te a:rFaigada: las insiste:mtes gestiom.es ·por los misrnos practica cl'as cerca de gobiem(!)s de. Estad©s vecinos, s0licitarrdo amparo y protecci6n para aca~ ·bar con la domina cib espafiola en Filipinas, comsttbuyem, prueba pieaa; pero ademas se ve evideliltemente compr,obada .muestra a:fiirmad.&n p@r las revela.ci@liles detaMadas em· ios docume:mt(i)s mas6mi:c©s, e<;n;1. sin.g1i1!lalli'idad ~n a.ql!te~l(i)S que relaitan ias vivas l.uch.as -soste'Hiidas eJ.il.1~re los distiri.t0s tlrgantsm@s · de fa mas<:Hl.eria filipina, lms el:l.ales·ta0.1t0 se fu@stiili,za1ron recipFocameID.te .. · _ ! · Para lo qie Hamam stt -regimen J gubemativ0 (![,l:l.,isieroD miucfu0s ma1 sones de las logias de Maimiia mca1 oa11 del que dieen Gru Orielllte Elspa fi(i)l _ · Ia conslitucron tlie a,na 6roo £ogia 1 Regional, 1i@da vez que les m,(i)rtiifiicaba mucho fa con.0.,ucta de I-a l@gfa 1
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LA IN·SURJU!CCJON
madre a «Natura Nilad», que afirman se les imponia descamdamente, y despues de quejarse de esto y del proceder del H. Panday-Pira, acusado de retener en su poder los anxilios metalicos que se enviaban a Rizal, dice una Memoria mas6nica firmada el 23 del mes de Nisan de 5.653 (a.·. I.·.) por IUllat, gr.· .}. y por Algiabarat, gr.·. ~8, lo siguiente: «Este es· »un pueblo Ueno de vida y energia »que se agita y revuelve ansioso de »romper los estrecbos y primitivos »moldes en que se venia encerrando »para evo1ucionar con mas desemba»razo. Hay entre nosotros una verda>1dera superstici6rrcontra todo movi»miento evolutivo, porque algunos »confunden miserablemente las ideas »subversivas 6 de rebeli6n con el esnpiritu de evoluci6n en el sentido ndel progreso. » Los masones, pues, no igiloraban de que ·suerte existia en su seno la idea de la rebeli6n separatista, y bien 0
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pudo por el propi@ insti~to me· MnservacjtJn inspirado, el mascmisrno, que tales ideas se]_i)aratistas al\rnigaba y ea tanto mas cl!l:oomtl@ was frrmes las acariciase, :traba.j,a1· tan acti- · v~ent~ co-mo·io efectuaba, en fililes de constitttlr .con solidez la Grganiza- , . ci6n de la secta ea Filipimas; iPt!eS sobre que tail lot·ro le p·rOJ.i)@rcionaba elem.enh@s <il.e farnrza m0Fa,l y lip.aiterial. para S1,1S planes 1,1lte'l:'iores, tie:p,,i a dentL'o de la instilhicion mas6nica, y segun espkitu y letra <lie los es1lah1tos que la rigen, aquella relati va garanlt.ia qyue estos cfl.e1ie.Fllli1lilalill l)la•ra atenuar po1· }(i) menos los riesg·os que corrieran al llevrur a la prautica sus aviesos 1irash(l)rnad@res 'J.i)la.n.es,. · Siendo masones, a 1a vez que ~e1 paratista s, l'os ind:ios fil.i,pin0s, eTutemdian pocler c0•nhair eGn 1a pr@tee.ci6>n que con tan.ta la,rgueza les 0f.rece aquella adverbencia en la cua1, al iniciarse en Ja rece,pci6i;i al g·rad@ ( logia un wprendiz, el veneraible de 1
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su
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LA INSURRECCION
le bace entender est_as significativas palabras: 1< Los masones estan obli1>gados a ayudarse los unos a los ))otros, cuando la ocasi6n se ofrece; »los masones no deben mezclarse en »las conspiraciones, pero si vos sabeis ))qru,e, wn mas6n se ha mezclado en cual»quicr aswnto de ese genera, y ha caido »victima de su impru,d,encia, debeis vos »tener compasi6n de su infortunio, y con »todo el lugar mas6nico deb6is emplear »toda vuestra infiucncia y la de vucstros ,>amigos para dismimwir la penalidad »que a aquel pueda correspmder. » Con s6lo esta tan mal enteadida protecci6o por la masoneria establecida, y (iJUe en ella en todas sus fases impera, -pado adquirir la sagacidad de los indios separatistas el convencimi_ento de lo mucho que los interesaba para cualquier fracaso organizarse m-as6nicamente. Y ya en fines de 1892 lo estaban _p0r ,eoropleto en todo el Archipielago. Hasta el sex@ femeruno formaba
ENâ&#x20AC;¢,FlhlPIN'A.S '
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LA lNStrRRl!CCION
dia civil veteran a de Manila, sefior D. Olegario Diai, de cuJa actividad, valor y celo, secundado entusiastamente por los distinguidos Oficiales. Jefes de las subdivisiones, y por las clases y tropa de ias mismas, afirmaba, en notable documento de va-'lor oficial, literatmente lo que sigue: No hay uno solo de los jefes y organizadores de las asociaciones filibusteras descubiertas, que no sea mason.>i Y por tanto, nosotros creemos que, aun cuando la masoneria no estuviese condenada por la Iglesia; aun cuando esta secta fuese Lal, y no mas y conforme la define Joaust, sin mas principios que la ley del progreso humano, las- ideas filos6ficas de tolerancia, fraternidad, igualdad y libe1¡tad, abstraccion heeha de la fe religiosa 6 politica, de las nacionalidades y de las diferencias sociales, la masoneria filipina, albergando a los separatistas para pro.te-
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gerlos, segun sus estatut0s, cuan\½0 · fracasasen .en. sl!ls planes, Bo J!)odJa menos de soc, como Yo !hie, 1!11'1 ID'liY prinoipai d<tieznable elememt(i) ·ue descomposiici6n p0'1ii.tic0-s0cia1l elilitue · . · aqueUas masas imm.rigenas. 2. ° Comite de propaganda y, Lig,a Filipina. - Un e0IJ1iLe de p'roplagal!l-
da, no ya e~ch1sivame:m:te J)))l;as@ni•eo ; sino eseaciaTmem,te re·v@ll!lciona-ri:0, tenfa a Sl!l cwr~@ l!Hst rili>1!1i1' fos escritQs producho de1 deselilfrelilo separ-atisLa. Folletos vio:lentos y eandenltes pr(i)clamas e:x!citadoras para rnaliiJtener una lcrcha, a fa e&ai1, eon ma1 disi1m1lacla nlip0eresfa, s1m@~eli1Jle,lll,te ,se la llama:ba refor l.ililista, l0gralil'aill' ,desde las imprentas de E&r@pa· y de . 'las colonias vecinas a Filipinas, 11e, gar a poder del Q@m.ite al,mrli<ifo, Jiabiase este ev.eacl'o (m Manila y 10 flll/0'- · 1 sidia un ast11• to mesbizo, iD@r@~et> C011degi;adarla em lo liJ\lOtan tes, figura ral, que habia a,rbolado grn·mfortuna
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LA INSURRECCJ6N
propia, litigando con las artes con que litiga la s6rdida avaricia sobre la riqueza ajena: aquel comite cumpli6 perfectamente el encargo de pro-pagar las doctrinas disolventes que contenian los libros a que aludimos: no los repartia gratuitamen Le, sino que, al reves, cobra.halos a buen precio, y asi, por la gran demanda que de ellos.hacian aquellas perturbadas masas indigenas, obtenianse importan tes recursos pecuniarios, aplicados al sostenimiento de aquellos indios filipinos que se habian trasladado a Espana y otros puntos de Europa y China, con el fin de dirigir los trahajos de tan pro.ata propaganda; y asi arbitraban 1os medios de atender los gastos qHe les ocasionaban los medios de que se valian para llevar a cabo esos trabajos mismos. No es preoiso es.tampemos los nombres de qcrienes disfrutaban a¡uxilios metalicos del comite de propaganda; constan en machos documentos que
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han visto la lllz prn.blica, mas !IHJS es 11ecesario ecmsign'a r al!lol,'a los de d0s grandes agitadores, -ei de Marcelo del Pilar, aquel antiespaiiol frenetico, ab@gado de Bulacan, que vino a Espana en ,1888 como clelegad·o del com"ite de propaganda, y q,11e se es- • tableci6 en BaFcelona, traslada10.d@ mas tarde su ;residencia a Madrid, y el de Rizal. A cargo de Marcel0 ctei Pilar, de la del€gacion <'!,el cornife, estaba «La So1id.a['i<ilad», cuyos redactores toclos forrnabam pa,r te de }(i) que se llarn<fl «Asociaci(rn l!l!ispan(!).: fhlipina », y a ella pertenecian asimismo los alilltorns de los mas ard0rosos escritos contra 1a d@mi,nacii!l.m· pspaii0la, los l'..una, L@Ji)ez y lliza1l, con ocho 6 diez imdios fil~pinos mas 1q_ue co.nstituiaa el nu.cleo d.e tanfi6 daiio coautor. Graves disidenoias surg~das em. el. 1por des6l'demes en to ec6B<fimi:c0, de; termh1aron que MaFcelo del :f>i1a,r y Rizal , aunque unidos pa.Fa el fin c@-
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LA INSURR1!CCT6N
mun con igual tes6n perseguido por estos dos agi tad ores, se separasen para laborar por procedimientos diversos cada uno, y en virtud de tal acuerdo, Rizal embarc6, dirigiendoâ&#x20AC;˘ se a Hong-Kong, con el plan de tantear desde alli la oportunidad de su instalaci6n en Filipinas. Crey6 Rizal hallarla sin duda muy completa en aquel mismo afio de 1892 con el mando de caracter-expansivo, bosquejado en los inicios del mando superior de las islas, ejercido por el esclarecido , honradisimo Teniente . general Conde de Caspe, excelentisimo Sr. D. Eulogio Despujol. Y para tantear, volvemos a decir, la disposici6n de animo que las autoridades espafiolas pudieran tener respecto del- tristemente famoso perturbador del pueblo filipino, Rizal, dirigi6 desde Hong-Kong dos cartas particulares al Gobernador general del Archjpielago; en ambos documentos declaraba el iluso sofista
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medico lagalo, su ad1lesi6n: a Espana, y solicitaba en reverg,ntes :termi.,. nos se le autorrizase p>ara irr a aql!l.e'" Has islas, C(!)D el film die il'ee@ger a til!l. tiamilia, cleudos, amig@s y ' cofoMs que quisieran segl!l..it1e, y c@mtribl'l!ir con ..el a la ·eol0nizaci6:n agric@la cle la extensi6.lil st1perliicial que se [e , concediese en Borneo por el Gol!lierno ingles. ~ El G0ber11ad'm'. gemera[ $r. C(!)lilffl.e de Caspe hiz(!) en. abso1l!lho cas(!) omiso de ia prime•i;a carta de :Riza:l; y aun miando tanipoe(i) le responclli6 directamelil:be a la segalilda, [a Sl!lperior autorilil.acl. de Fiilipinas, que no conocia, ni poolia COI).Ocer p01· su in-. existencia, disposici6lil alguna, n:i jm.[1icial mi .g1:1bernat1"\(a, cqu.e iimpid1iese ;la presencia de Rizal ,en et Archiipiglago, se oirigi6 a1 C6asl!ll de Espai1ia ,en I-Im1g-lfolilg, mallli!fes:M:mcl@le, em. . 1earta de la que vel'daderamente sen-. timos no transmibir cupia hl:teral, advirtiese al autor de1 Noli me ~angei:-e
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LA INSORRECCI 6N
de que suerte podia ir a Filipfoas y estar lranquilo alli, si su proceder era el exaclo cumplim ienlo de Lodos los deberes que con la Patria y leyes que la rigen cumple siempre el ciudadano honrado. Cuanto a los planes referentes a la colonizaci6n en lierras de Borneo, el Gobernador general decia al C6nsul de Espana en HongKong advirtiese a Rizal la extrafieza que le causaba tal delerminaci6n, tomada por un hombre que se decia tan arnante de Espana y de la tierra en que naci6, mucho mas cuando en esta exislian tantas comarcas aridas del trabajo agrieola, sobre todo en el Sur del Archipielago. Rizal fue a Manila, sin que en el Gobiern0 general hubiera de ello otra noticia que un parte del C6nsul de Espana en Hong-Kong, dando cuenta del embarqu e y direcci6n que aquel llevaba. Y en efecto; ya en la capital de las islas, olvidando Rizal sus proyectos
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colonizadores en Bo1:neo, si es que. en J1ealid ad de verda<!l l@s hubiera fo.rmado algmia vez; E1egam1d@ con hechos contradic1\0ri.os· ,sus J!ll10Jllias afirmacicmes desde Homg-Kon,g, rotundament~ por el dadas JJespecto a su a-partam:i.emt(!) de, cuan1i(!) RO f,uese eil t'raoajo ho:mrado pai·a pr@cu.rar .el bieneslar de su famiiHa, l@ ll_[l'le otmrp@ y preocu,p6 al :fomesto pr@J_,laga,r;idi,s-:; ta f;ae marutener _reiaci.oiJiles l'.n,t im·as con el ma~@f .li1l!ltl1!€ir(jj <de sllls J!)ai.sanos que disfru.tarain. la mas -venrtajosa posici6:n, social; se explica lbliem, el aifalR reve1ad©' en. a(IDJ>lelil@s lilll(i)J.il!lt}ifll1i@s, pues· a los pooos d\fas de peFmaFJ.eoer en Manila, Rizal c@nv@c@ y presid.im fun.a junrta de matum:iies, 11.@m,Tur~s .de /carrera y c0meI•oiaa'tes, i,lil.d'l!lstriail:es 1y propieta'l'ios de los mas aoaudaila= dQs, con el objeto que detaUadamen:; ' te les hiq;@ eo.lil@CeF, de co.mstilt1,1 ·,r' lil'I la ': sociec;lad sec1,eta c:iu.e 'ba·li>ia de il fa,. marse ((La Liga Fili:pina». 1»J0les un reglamentQ rnuy c0mpletQ qne iue · 1
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LA INSUJIRECCl6N
unanimemente aprobado, y «La Liga Filipina)), con sus juramentados, en virtud del pacto de sangre ante una • caJa-vera, sobre cuyo hueso frontal estampaban los adeptos como timbre, entusiasta beso, comenz6 a funcionar vertiginosamente por todas las islas, pero singularisimamente en las provincias limitrofes a Manila, y en esta con exito excepcionaL «La Liga» tendia a una organizaci6n verdaderamente avasalladora; con el fin de congregar en torno de sus aspiraciones declaradas para proc-urar el progreso del pais, con el proposito de lograr su independencia, mas tarde instituia nn Consejo Supremo en Manila, compuesto de diez y seis individuos, incluso el Presidente, y dos delegaciones del misrno, una en Espafia y olra en HongKong. En cada provincia se creaba un «Consejo provincial», y un «Consejo popular» habia de f1rncionar en cacla pueblo:· se establecia la dependencia
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BN FILIPJNAS
de estos ultimos respect(i) de 10s pr(i)vinciales, y estos e_stahaa sum(j)rdli:m:ados al Consej(j) Sa'J_))rem(i). Recaudaban ttn pes..o de entrada por cada afi.liado, y cincmmta cen1;i-· mos de peso como CU(i)fa men.suaJ despues. , La ruay(i)r parte de l(i)s naitu~ailes de mas valia y signi.fkaci@lil. de las provincias tagalas afifoironslil a «La Liga» . Rizal fue @bjeto de fa may(i)Ii Mig,ilancia: el G0bem.adl:0r gemerat,· sem.©·11 conde de Caswe, entemli.<fl s.fac1. dttda cuan preciso era conocer @I'I. todas horas lo (ftte a Rizal ocurpase ; y si dentro del O(i)rho periodo d.el mando. ejercido por el ca11'i>a.hle1I10s"!\l geiilerat Despujol ba.Uanse Jilfl'leibas rehacieJiltes para legiti110ar 10 oportu,n© de todas las medidas dictadas p0r esta celosa autoridad, con el fin de investigar minuciosamente I,a COH'l.Gtlcta ' del graLl ag,i>tador tagalo, rut1.<ilad0:r ' en Espaiia de la «Asociaei6m de 4ftf!i_.,. 1
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LA ISSURRECCIOS
pinosÂť, depravado au tor de follelos y Jibros, cuyo texlo contiene la burla mas sang1ienla contra la dominaci6n espafi.ola, a la cual injuria y calumnia de continuo; cruel inventor en Hong-Kong de la -ÂŤLjga Filipina>; e instaurador d~ la misma al declararla constituida en la casa de Doroteo Ong-Pingco. i ab! el tiernpo ha revelado tristemente la juslificaci6n que merecido hubiera rigores mas extremos, que de seguro habriao. resultado pro-rechosos a Ja causa de la patria y de la civilizaci6n y humanidad. Sin embargo, la deportaci6n oportunisima de Rizal y compafi.eros conjur6 por de pronto Jos peligros; los trabajos de la Liga se suspendieron, hasla que en 1893 se instituy6 nuevo Consejo Supremo de la misma. Presidialo Domingo Franco. El conde de Caspe, quien no podia predecir la extension de los trabajos de Rizal y sus trastornadores efectos en lo ulterior, por no haber alcanza-
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do aun en aq:ue1 iiiiem,wo ma(].it!li;,ez los venenosos fru.tos al@jados entre las siauosidades <ile la fu'ama 'l!lrd<ida en. nombre y iiHil mas lite rreform:as p@1Wi.co adrninisLrai~ivas, lin,1tit6sg, pl@F no ballar fanda.me'Fl,t0s de deFecho .para mtra- eosa, a deportar a Rizad y alg:u'll@s amigos de es1te, e'0.,tre 10s Cl.!l.ales ' se cop.taba Douobeo Cortes y ;Jose Basa, .de Ci;lvibe, pariemJlre 1.mf>ximo de aq,1.!J.el OJ:lll,e 10g.ru!> il!ll!lir e insita~a,rse en ~1 Jla]!l6n, litoman. lilasa. Attl'l.liJ!lil(;) a distint0s p;unitos, tod0s elfos faer0n , c0nd1.rnid0s irmmediaifiamente at Sl.!l.:r del Airchi]!Jileilag@. -Ea el JD'Fopio eqttipaje de1 encam,izado detrac'llor de la dominaci6n espanofo fuer@n TuaUa~@s fajos cl.e [f)Jo1@dlamas sepacat\listas. ,Y ademas de IR:izal, destii,filad@ a :Oa,. pitan (Norte rile Mi11lil.anao), a otros llugares de Jolo hler@lil dep@rtad@s l Ios daez @ d0ee i,nd:igtnilâ&#x20AC;˘as e0111 10s , cuales aquel agHad@r esila,ba en m¡as 1 frecuente tirat@, y a quiienes acaba' mos de aludir.
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LA INSURRECCJON
La requisa mandada praclicar por el conde de Caspe en los domicmos de naturales amigos de Rizal, y llevad~ a c;ibo por modo cumplidisimo, en una misma hora de la noche, por los gobernadores de'las cinco provincias de Luzon mas inmediatas a Manila, no di6 en aquel tiempo motivo para mas. Es de publica notoriedad la deferente atenci6n con que a Rizal se le trat6 en Dapitan por el Comandante politico militar de aquel distrito: aunque aquella autoridad delegada del gobernador general de las islas obedeciese procediendo asi a instrucciones, no puede negarse el reconocimiento que Rizal debi6 guardar siempre hacia el jefe de aquel distrito, siquiera :para cumplir bien sus deberes anduviera este pesquisando lo que Rizal hiciere, de todo lo cual aquel daba cuenta al Capitan general de las islas . Pero si Rizal fu0 en Manila hip6-
EN FI.UP,J NI\S
crita, Lransgresor de sas 0bligaci(i)-
nes como cimdadam,o espail.(i)l, en Oapitan tambien, a pesar d.e-sus i'edobladas pr0testas de n~ queter vivil' mas que e'Fltre sl!l falliOo.Qia, a la .enai deseaba trasladar a~lii r:,aira dedicarse a la: agriol!l.Hllra, res111Jbt6 faisari@; poFque demostrado esla, de m0d0 que bace fe en juicio, el viaje becb(i) a Singa]_))@ore por la !Jierma!lila de Ri.za:I, acompafiada de TimID'lieo Paez, c0n eif. fin de .0etar un ba,rc@ q1.rn arribase a Dapitan y irecogiese en su bordo -a Rizal, c@!ilduciendol@ al lap61!l Jl)alTJa unirse a li)ornteo C@rtes, que d.eSJi)lleS de indultado traslado am SU residencia, y a Marcelo H. · del Pilair, cuy@ / viaje estaba ya aimlil!nciad.@ desde !Espana. Este· solo incicl'ente evidencia el valor -de las amrmaei@nes y nega1tivas que podia c<mcederse a if.as 4•tte de , palabra 6 ji)o~· esorito estali>iecie•r a IMil todo fliempo y desde cn·al:qp1ier [ugar el conspirador, verb@ de la relile-
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LA fflSURRECCION
Ji6n filipina, Jose Rizal y Mercado. Ni este se resignaba a vivir en Dapitan, ni eran ciertos y efeelivos sus declarados deseos de cultivar tierras en Mindanao, ni en Borneo, ni en parte alguna, por mas que en el lugar de su deportaci6n adquiriese y plantase y sembrase las pr6ximas a Punta Blanca, entre Lubuc y Lumbungan; ni el queria para nada la casa que se le construia en otros extensos terrenos que compr6, ni para el era atractivo obtener la plaza de medico titular, que desdefiosamente decia «pod re aceptar». ;, Que representaba todo ello para las aspirac_ioDes siempre mal disirnuladas, por aquel hom,bre, que constantem ente sofi6 por las rnayores alturas de la iama? ;_, Que valia todo ello para quien por lograrla no pudo ahogar en su cerebro el vil engendro de «La Liga Filipina», cuyos adeptos se fusionaron todos con el Catipunan, y que tanto en aquella corno en esta
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18.l'i
juraron. e1 e:xternai.riio · de los espaii0les? Rizal, el imlio fitipin@ de m:ary<'>ir astucia quie aquel r>a>is vi@ gacer, a. lo que aspiraba en Da;pitalil IJ.(j) era sino a la fa.ga, en el ca-s<'> de que· las ciroum.sta11cias l<i ab@nasen, Q al le' vantamiento de sm cleportacipn ewalil.- · do la hubiese cumpHd(i) seis meses; este tiemp0 y n@ mas se 1·esigna,ba a
sobrellevwrla. « La Li,gai F:i1iipfaa » se disohio en 1894; pero la @bra de. ililizal n@
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moria sin embargo; el gran nttimer(!) de naturales q1rn la cons1riliuialil,- todos perlenecien.'tes a las clases mas acma0dadas, h1eron a Ii1nliFiir las fifas del Catipun.an. ·
3. ° Ca,tipunwn (1). - Mieatras m~ ' zal consti·t uia la «Liga Wili.pina)) pa,ra '
(1) Nosobros esoribimos ·Cabi,p unan con e y, no con K, p01•que cveemos· que este <v0pablo se descompone de esta manera : Tipon, 1.>ai-z; con la pauticula ca y la terminaci6n ,an se 0b.Liene el
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LA INSURRECC16K
reunirse en ella, segun hemos dicho, las principales clases del pais, Marcelo Hilario del Pilar ullirnaba sus trabajos para ioslituir el Catipunan, sociedad tambien secreta de anchisimas bases, con objelo de que las masas inciigenas se -afiliasen en ella y se jurarnentasen, siempre con la formula del pacto de sangre, en fines de obLener la independencia de Filipinas matando alevosamente a todos los espafioles. La cartilla de instrucci6n, que acompafiada de un pufial se repartia a cada calipunado, no puede estar mas terminante respecto del plan tan criminoso, que se ampliaba, es claro, al alzamiento y la lucha por l-1s armas, en el caso de qae no pudiera lograrse el exterminio de los castilas por el inicuo expresado medio : el de asesinarlos alesustanbivo que significa junta, asociacion, reunion mug estrecha, y entendemos que es lo que se ha querido expresar.
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vosamente. La organ~zacri61il dad.a desde Madrid por Marcel@ Hila ri0 del Pilar para regir el Catipunan, era muy pareoida a la que r.eguda~a la <(Liga Fi«ipina>> ; las · cu.@tas .q,u.e saflisfacian. lo~ asoeia:dos al Ca~iip1rnafli1 eran n1H:1.cho mer10res : 5(i) 0enL1mos de :peso a siu.· entrad.a y 0,f2 tfi8 , 6 sea un real iuel'te mensual11111.ewhe era lo que cada rufiliiadCJ fu.alil~a de elitre, gar a ios tes@reros central, prov,in,,. ciales 6 locales, depe-mcliieD.tes .respectivamente del C<'lilsej.o SupveripO de1 CaLipunan, y sus sub0rllliinad6s fos Consejos provi,Jil'Cia:les y l<i>s ]j)OJiHlIares. Sub<!lividfanse est@s· 'l!l.Lt:i>:@11os en. /seeciones (L•, 2.• Y, :ii:•~, y]l)a,r a eOiil.S•tibuir estas acbl!l:a•bain deleg,aoiones, eD relaci6n dJrec'ta con el C@nse~© Supre!\Ilo, en tan't@, en cual.il:to se i@gvaba la formaci6n de 10s gr,upos c0mpletos que habian de constiitai:r el Consejo populair. El Consejo Supremo se eom,:p0ri:ia 1
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LA l:NSURRECCION
de un Presidente y siete Vocales o Ministros. El tribunal de la secci6n 1. llamado tribunal superior, ejercia jurisdicci6n sobre varias provincias; componianlo un Presidente, un Fiscal1 un Adrninistrador, un Tesorero, un Interventor y un Secretario. El de la seccion 2. â&#x20AC;˘, tribunal delegado 6 provincial, se componia de uri Gobernador, P. M., un Administrador, un Interventor y un Secretario; su jurisdiccion era una provincia. El tribunal popalar (secci6n 3. ") estaba constituido por un Administrador, un Interv~n.tor y un Secretario; su juL'isdicci6n era exclusivamente sobre el t~rmino municipal. Las formulas de iniciacion en el ÂŤCatipunanÂť eran las terrorificas que ya hemos apuntado rapid.a y ge-nericamente al hablar de la masoneria, y siempre practicadas entre enmascarados, pues todos los que asistian 0
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a las sesiones cuorian SN .FOSt['.O COiJl un aolifaz; paJali>ras si,J11IDMIJ.icas Yt seflas convencionales extravaganlte&, dabanlos eJ; rnedio p.e · rec@n(j)gerse unos con otros; y en l(j)s dlia~0gos , sostemidos por los i:mlieiadO)res· y l(j)s Jniciados, eucornh'lbamse los mev.iitios y virtucles de aquellos derigos indigenils que sufrieron la pena de mu.erte por consecn1encia <ile la r-e- belion de Cavite en 1812. m ind!i@ que en la actual1idad posee ttfl foagmento de las :vesti:dtwas de aq:l!lelios rebel des oi;cil.enados in sacrls, cl!lya bandera tarnJ;iien era la ma.tanza de los castilas., se cree en J))Osesi@lil deil mas seguro . taHs1rn:iu :para C(i)Jil,ju.,i-ar todo generq de desg,racias. El Consejo S11,p·rein© del ci Cati@unan », acornpalii.aclo de los Jllresidentes de los Colilsejos p:r@vimciales y populares, se_ reunian en asamlli>lea, y todos los acl!le.F~os de esba ,eran ejecu tivos, Fue el pTimeT Presidem1te de] Col'l-
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LA INSCRRECCl6N
sejo Supremo del ÂŤ Catipunan ,, Deodato Arellano, y Roman Basa el segundo, siendo Secretario Andres Bonifacio. Dotado este de condiciones de inteligencia relalivameote muy superior a la que en general desarrollan sus paisanos, y hombre de audacia y de eoergias probadas, bien pronlo se impuso a todos, y destituy6 a Basa para erigirse en tercer Presidente del Consejo Supremo del ÂŤ Catipunan ,, . En Julio de 1892 babfa quedado constituida esta sociedad secreta de que nos ocupamos; pero hasta que Andres Bonifacio . ocup6 el puesto, que segun acabamos de decir asalt6, en el mes de Enero de 1893, no tom6 grandes proporciones. El inquieto y resuelto Andres Bonifacio es quien trabaj6 freneticamellte por el mas completo desarrollo del ÂŤCatipunan)); y en efecto, millares de millares de indios acudieron a juramentars e en el. Dios sabe
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cuantos b.abr'ia, pel'@ se re:lacionali>a'lil nominalmente mas de 5CJ.())(il()) eil:J. fas
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LA fflSURRl!CCION
ciados a <1La Liga Filipina» acordaron quemar sus archivos, segun lo efecluaron en 1894, los que constituian la asamblea del <1Catipunan» pusieron en praclica acuerdo igual; asi lo afirmaba Pio Valenzuela, y asi lo confirmaria Doroleo Cortes, huido en el Japon, segup versiones que creemos muy bien comprobadas. Igual caracler de fidedignas tal vez logren aquellas que recogimos con los nombres y apellidos de los priocipales elementos de la soci€dad filipina indigena que mantenia con sus propios recursos pecuniarios el acthisimo laborantismo de que nos ocupamos; mas no cuadra a nuestros inlentos de relatar sencillamente, escribir de modo que personalice; no queremos estampar mas nombres <que aquellos que nos es indispensable ci tar para coordinar los hecbos a que aludimos ; en nada nue'° podriamos auxiliar la acci6n de la jrusticia; al contrario, de ella es de
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la qu·e esperarse debe la: mas coniplela hist0ria de la rebe1i6n :proiih.1cida p(i)r el «Catipuna11» itagaJQ. En 1895, Anolres B(i)ni£alilt(i), 'Presiden.te de ese CatipunaB, qlle ampulosamente Ha.ma.ban «Alrtisima socied~d de fos hijos del pueblo' Kataastaasang Katipunan Nang M:aii:ga Anac Nang Bayan», y que simMlica~ mente indicaban con las iniciales K K N M A N 'B, ,c:rey6 liegada la . b(i)ra oportuna para el levantamient(i) en armas de las masas ilildigenag, C(i)Ntra Ia dGminaci6n espaiilola, • y ).:)QJ:que tal su.eediera , ardfo en deseos el menci0nado fliribund(i) coIJspirador. Transcurri6, sin embarg·o , t(i)dO ,a quel a:iio si,n pertuwli>acion rua,tei-ial . clel orden piliblic@. 1 , Amdres Bonifacio, obstinado y per1verso, C(i)ntinuaba en su i:Iicesante l1abor, y eJ.il 189fil, C(i)filO si fa propaganda vivisim.a de ma.1J i1fiest@s, .fof lletos, · fotografias y proclamas BO I fuese bastante para manten.er 'firm.e 1
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LA INSURRECCIOll
y ardoroso el espirilu revolucionario infundido en lantos millares de indigenas comprometidos por tan continua gesti6n separatista, comenz6 a publicarse un peri6dico escrito en tagalo; titulabase Kalaayao>J (Libertad) y con pie de imprenta de Yokohama; las exaltadas arengas que constituian el texto extravagante de aquella pnblicaci6o, las firmaban Dimas Alao¡g y .Agap-ito-BagunBayan. En esta epoca, Andres Bonifacio, idolo nuevo para aquellos indios filipinos, disponia de fuerza imponderable entre los mismos; pod.fa, en efeeto, segun conv.enido estaba, dar la sefl.al en el dia y hora que liien le pareciera para alzarse en armas; estas habianlas forjado a millares, blancas y de fuego, muy burdas estas ultimas, en el mismo Archipielago ; pero ademas se sabe que desde Jueio de 1:896 disponian de otras, recibidas del comite filipino que Ia-
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boraba en H(j)ng- lfong de a@ue.rdo con·los de Manila, y de las que habia proporci@nado @tltfo com-ite q:ue -presidia Doroteo €:ortes, qlilie:m no cejaoa de rprom:1rar, aUii1qtrn inu.1\iimente, elil Yokohama, , el auxilio cl.el gobierho del .fap6n , el Clilal manrtwvo y malil~ filene lealmerrl\e sns buemas relaci(!)nes con el de nll!lestra maclre Patria,, a pesar de la asiduidad C(!)f.l que fos tagalos ban s0licitad@ D@lilll.peF1as . La horrible trama uirdida p_01; el Catipunan ha:~ria, }i)Odido, lil@ obstante, lt6grar sus perYersos planes, sin que po1· de pr@nffio pFeaisaselllJ muchas a:rmas fos ind.i<i!S fi.Iipinos pa.ra conquistar SU iJild.e,pendeflCia. 28 de Junio de 1896-, cmtlildo toc:10 . estaba dispuesto para .dar eI,gFi,b@ .d@ rebeli6n, el Consejo Suprem.o del Ca,, fomnan di6 las in.stFuc0iones _pa,r a el procedimi:e1:i>lo qU10 ha;bia de emplearse : entre estas instr1,rnciones (y· no ofrecemos co:pia de tod.as eMas,_p0r el proposi:to qY.e tenemos de n@ daF
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gran extension a este volumen) figuran las siguientes en texto literal: <CSegundo . Una vez dada la sefial »de H. 2. Sep., cada hermano cum»plira con el deber que esta G. R. »Log. le ha impuesto, asesinando a »todos los espafioles, sus mujeres e »hijos, sin consideraciones de nin»gun genero, ni parentesco, amis»tad, gratitud, etc.»
«Cua,rto. Dado el golpe contra el »Capitan geReral y demas autorida:.. »des esp., los leales atacaran los »conventos y degollaran a sus infa»mes habitantes, respetando las ri»quezas en ellos contenidas, de las »euales se incautaran las cornisiones »nombradas al efecto por esta G. R. »Log., sin que sea licito a ninguno »de ntros . berm . apoderarse de lo »que justamente pertenece al Tesoro »cl:e la G. N. F.» ··· ······· ········ ··· ·· ····· ········· ···· ·· ··
I!JN FILIPI NAS
i 4,7 '
«Sexto , Al dia sig\mienie, {Qs hern11, ,,que estan des'ignacl0s ~ata~ seli)mi»tura a todos ]0s cadaveres de m0s ,,0dios0s o:prnes@res em. el Cam!JiW- ·de )JBagl!lmbayJ'llil, asi com© a J@s de 81:IS >lmujeres e J:11i1@s, e1ll <myo simi@ se1·a >)leva,ntado mas adelar11te u>lil. I'lil.Qlil:11'1,mento e0nmemorativ,(i) de· ]a ilil:de»pendencia cle ]a G, N, F. · · »S6ptvmo. L0s @adavems de hls »trailes BQ defuen &01' emierrad<ils, $lo .»no ([l!lema-dos,
······ ····· ·· ··· ·· ··· ••,•·.···· ············ ·· ··
»Y entDe fallJil.lllo nega el <ilia de »nlllestra Fed:encfon·, esta eomisi0n >>·ejecwlfrva ir(l cl.a1i1.d0 la Ji)al!lma seg-qu;a >/ql!le t0d0s habmemos de i•mJil@FteJJlil@S· /i,en :rrnesenciia de l<ilS aeoate@lroiem- · 1,tos, a fiilil <ile qi10 Ni'lil;gl!l®.@ 4e nMes:»tros herrn. pueda llal)'lilarse hiad-
l
»vertido, ' »En la G. iR. log. en Ma:rn.i!ia a" 42 ri de Ju ni@ de 18\i)I\L ta il)ll'imera le [a
»tan desead1a hidepe'lildenda <il:e F1iU- , i»pinas. - El flFesiden,te de la ((;0IDis
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LA JNSURRECCl6S
;>sion ejecutiva, Bollvar. - El Gran Maest. adj., Giordano Bruno.- El G. i>Secret., Galileo. lPara que necesitamos acudir a la traoscripci6n de mas documentos? El fragmento del que hemos citado y que estampado queda en estas anteriores lineas coostituye por si solo horrible sintesis del bochornoso programa trazado por los conspiradores tagalos con todos los rasgos de la mas salvaje crueldad. 4. Svntomas. - Si los detalles de tan vasta organizacion separatista nose conocian hasta el maravilloso descubrimiento de Agosto; si en el orden material auri no se habia turbado el s0siego publico en los comienzos de 1896, el orden moral¡ venia sufriendo desde antes muestras evidentes de grave quebrantam iento en los vincnfos de este 0rden, que deben por siempre unir aquella so0
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LA INSt;RRECCl6N
que citamos, los afiliados a la masoneria filipina venian ofreciendo sefiales en crescendo de tal espiritu inquieto, y desde 18~H, en que la masoneria habia adquirido bastante desarrollo, sus afiliados revelaron interes casi mayor que en cumplimentarlo en que se conociese el acuerdo por ellos tornado de no disponer el enterramiento de los cadaveres pertenecientes a las familias de los masones, por ricas que estas fuesen, sino por el modo con que se entierran los cadaveres de pobres de solemnidad. Singularmente en Manila y en algunos pueblos de las limitrofes provincias de Itatangas y Bulacan, tan importantes como Taal y Malolos, el descocado acuerdo a que acaba mos de refel'irnos causo verdadero escandalo en sus aplicaciones . El masonismo filipino, que abiertamente desde que se iniciara, escarnecia la Religion del Estado y se mofaba
EN FILIPINAS
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de sas minis~ros, cleoia en text@ Lite, ral: <<al arbol se le ataca bien p0r su »base: quHand0 a l@s :fuail:es los <il.e»rechos de que gcyza11J1, n@ '.macienclo»Jos efectivos por la volm1tacl de l@s »feiigreses, eli(i)s mismos ·se retiiraran iide Jas parroquia s. » , Pero ;,es que este siritGma caracteristico patognom 6nic0 del giFaYeooa.I social existente entre }(i)s ind!igenas tilipin.os en _estas epocas, em fas eua~ les el espiritu ,re1igios0 se tmi>ca,fua en ellos por el de despre(i)C:lilpaci611 y abandon@ de aqueBas cristiana s . ideas que du:railil.te siglos manltenialil la paz publica y iomemtafuan el biie1,1estar de. los pu~blos, se lim,i taba a dar a conooer si:mplemen.te como mal 1 unico, el odio de los indi@s · hacia /los trailes? No y mil veoes mo. :illst@ era pura y exolushmmeFJ.te lillil p11etexto pe11verso de tocla per-versiclad e 'injiusto de toda inj11sticia, p·er@ p11e1 texto s6lo: s6lo p0U/Jicci solwpada,. Con este sintoma se presenta nan
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LA ISSURRECC16N
en cortejo otros de valor excepcional que en nada se relacionaban con lo que a la adminislraci6n parroquial atafie, y la menor perspicacia, obligaba a refiexionar la gravedad que de seguro enlraiiar debia un tan completo cambio de caracter cual el que se venia revelando en muchos indios filipinos, los cuales desde su tradicional, aunque fuese hip6crita, sumisi6n y respeto hacia los espaiioles, pasaban a incomprensibles actos de la mas grosera altaneria. Pero l que mas? La mas fehaciente prueba de que la propaganda separatista habia causado el mas deplorable efecto en todas las clases indigenas, y que sin distinci6n de condiciones sociales, sexo y edad, vivian estas en 1896 en atm6sfera de s6lo odio contra la dominaci6n espa_fi.ola, bien puede obtenerse en hechos como el siguiente, de autentica fija. Hasta el aiio proximo pasado, todos los niiios indigenas que con
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LA INSURRECCIO!f
portancia en aquella prnvincia tambien era irecuentemente objeto de las visitas de Pedro Serrano. Vecinos de Manila de lo, mas pudientes tambien solian acudir con pretexto de cacerias a aquellos pueblos, asi como a algunos otros de la Pampanga, en donde la masoneria tenia muchos adeptos. Antes de que las autoridades pudieran hacer fructuosa la vigilancia que ejercian, los cazadores aludidos renunciaban pasajeramente a su afici6n, 6 cambiaban de cotos, para no salir generalmente de las viviendas en que se apeaban. lndigenas de alguna posici6n que tradicionalmente venian atendiendo a las necesidades escasas que en general se crean las familias de naturales con Jos productos de unas sementeras que dan en arriendo a sus cailianes, de pronto y en gran numero se interesaron, al decir de los mismos, en operaciones industriales, yendo y viniendo a la capi-
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altercados de duros tonos, que alguna vez terminaban en poco suaves golpes, regateando cinco 6 seis minutos a los caslilas que les tomaran .en alquiler sus carruajes. Pueril habria que declarar, si el hecho no perteneciese a los que por todos !ados y conceptos constituian el grave cuadro de sintomas que separaban la sociedad indigena de la peninsular y europea, aquel anhelo que agitaba a los indios filipinos pudientes, cuando paseaban en sus coches propios, de adelantar y ÂŤcortar la proaÂť a los carruajes que conducfan familias castilas. La servidumbre domestica, con teson inverosimil por lo desacostumbrado, discutia sus salarios, los cuales, obedeciendo a pauta ~:on la sancion del tiemp@ que ya los alter6 mejorandolos, soHa sefialarlos siempi;e el dueno de la casa. jSalarios diseutidos por los indigenas, al ir estos a servir a un cas-
ti!Q, Cl'lan<fo
de - ffCiJll!lefilas
is~as q11e st11:vg a fami.11ia pmdsa:Nai Sl'lya 1J.a dg rnsigmat'se a efge[l!la1F1'@ grttt1mifiamelilrte, y a !\I~ltl :flalillh@ va~e haber de serviF aiffi:os y mas ruii.@s, p@r eamTui0 de ll@s ~t1tereses asjgna~ dos p. 20 pesos q11e C(i)Jilil:O prestamo¡ mcibi6 de su. am@ y se:f,J.0!!, iJID<il i~gna ¡ trambien!
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LA INS1,'RREC.Cl6M
En los dias que precedian a fiestas religiosas 6 civico-religiosas en que hubiera de recorrer determinada carrera 6 trayecto seiialado una procesi6n, se anunciaba con tenaz insistencia, y por todas partes cundia el siniestro rumor de que tal solemne acto habia de ser el inicio de la matanza decretada contra los castilas. En unas ocasiones, por medio del pan de las tahonas 6 por medio del agua potable que profusamente las cafierias de Carriedo distribuyen por Manila y sus populosos arrabales, 6 llevandolo a la l'inola condimentada en las easas particulares de los cas1lilas, se propalaba la brutal espec-ie del intento que los indigenas tenian para destmir con un t6xico la dominaci6n espafiola; y, en efecto, dos veces muy claramente, aunque por favor del cielo no se obtuvieron los criminales resultados que se esperali>an, se reparti6 algun pan conteniendo, si no veneno que a refracta
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dosis matase, alg'un factor quimico . ' que en. [as proporoiones em qme ngu.r aha en aquel pan hien poolia causar perturbaci@nes en ei orga.mismo_ , Pot toda aqueUa ard:iente atm6sfera filipina habiase difu,ndi.do 1@ mas ¡ ~ele_j;efeo c@ilJ.ltra la s~nta eal!lsa de la ¡ Patria y de la civi,1izaci6.0.. l Que mas pruehas se quieren de que los mil:laves de c0nj~1rad0s tii ipinos aspiraban freneticamenbe al log,ro de su indepeNcl.emcia <!le I.a madre Patria, y que pemsa!Tuam y q,i,erfan lograrla deg0Uand0 a todos tos esp>aii,oles penin,sufares, (i_[hle los a@cumen tos haliados eN ,que elil -tod@ ton.0 asi lo consignan?
: 5. Patiriotioas denuncias. - Mu:y claro venia haciendose el esfado de /la1lente extensa c@nspb;aei@n eJil. que se agitaba aql!leUa 11egi6N del pl!lebto tagalo, deudora de tan,Lo beneftci@ a la dominaoi6n espan0la, e1;1a,l I@ es todo el Archipielago, pero mas favo0
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LA INSURRECCI6N
recida aim que el resto del mismo por la proximidad a la capital, en la que se acumul6 cuanto la vida moderna pide, que no es poco, para los pueblos mas civilizados que se conocen. IncreibJe parece haber podido obtener de aquellas masas comprometidas durante tanto tiempo el se- _ creto de sus planes y sobre el de una tan completa organizaci6n . Verdad es que se sefialaban penas tan terrorificas para el dominador cuales las consignadas en los estatutos que regian asociaci6n tan perversa; y en disposiciones complementarias como las que constan en documentos emanados de la comisi6n ejecutiva, se reiteraban en tales terminos, que solo asi se explica pudieran ser tan eficaces para durante afios ocultar tan trastornadores intentos. Mas confOFme iban acercandose las fechas en que el movimiento habia de estallar, tal vez de un lado el
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rego0i1o m!ism0 C@ll1. que lt@s con,sp:iradores aguar(!l'alban el tl(,'i'tl.,nfo, y de otra parte el peS(') qNe gtl,laViltaJlfo S(i)bre la conciencia de aigun arrepentido, prodnjeFQil !lil.@ ~m sosJ,i)echas tan ¡ abstractas, au.I'lqrue f,un.dadas, como las que en parrafos anteFiores tiemos c01'lsignad@, sirw afi.rm-aeiones concretas' y detalles l!le 'pr-ueba cle ~as mismas, e iDd,icit>s ve'fu.emeDtes g:ue a tan.to eql\livalia,n. N@ i[i)Odemos comoeer )j);i e0m@eemos mas que algunas, mu.y p@cas, de las nil.!lmer@si1simas cl.elil1:meias comâ&#x20AC;˘r>robadas plen.amente p@r desgracia, y que, Feforentes al esta1il'@ <!le agitaci6n no,tada eNitire elementt>s i-ndigenas, DO J!)Odia(Il metr@s _ de ser: consideradas como de impor.taNcia y rgravedad sumas, y ~si se considei;a1ban.. Los Pll'ela<"Jl@s <llriocesan.os y i!'Os regulares vivian ailarmadisimos ant@ . el desa,rroill'o l!le la masl!meFra, q'Ule sin recato ya procuralba p@.r tod@ 1medio r,ecim.ta!I! adept@s; :J!)er0 m-as 11
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concretamente el eximio Arzobispo de Manila, en cuya jurisdicci6n eclesiastica de las provincias tagalas mas hondamente perturbadas se ofrecian, es obvio, mayores muestras de malestar moral, elevaba denuncias tan interesantes cuales las de Marzo de 1895 y las de Octubre del mismo afio, describiendo con mano maestra el cuadro tristisimo de ins_ubordinaci6n en que se presentaban importantes parroquias y feligresias de su archidi6cesis. Y no se concretaba el virtuoso Prelado a la denuncia de hechos pertenecientes exclusivamente a la Administraci6n eclesiastica y al claro intento demostrado por los sectaries tagalos de cambiar la hermosa fase religiosa en qlie vivian los pueblos, sino q:ue el Prelado metropolitano n@ desdefiaha pQrmenor que por m0do mas 6 menos expresivo ,pudiera relaeionarse con la paz puh1i-ca; con la misma presteza con
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que denunciaba las alilo11maMdaoles de_ conducta seguida p@:r feligreses que lo~raban a11rojar cle s0s pa:rro- . quias; 1100 titas de @tF@, illNs R:ew.e- · rendos Cijras parr@cos, de concl:mota publica y privaola i.Tr.e{i)r@chaple, foUgaaos de sos:tener la @bstinada lacha a que aqtteUos procaces seotarios de Malo1os -Jes obliga.ban, bacia llegar a conocimfont@ sui[i)erfom l@s ti.Jiles <iJUe p.ersegmfa11J. .( seg,wn i!!ilt@rmes que reei'biera) aql!lellos 1tiilipi1D;os, que habiemdose trasladado tu1.0s y hilla@ @tros al Jar.i6n, vivian Jl'e1:rn,iq.0s en ¥ @k@'hrn1ma, eli1 el :ii@ ·1. 13[,11ff, y entire los Clilales se 1tai1Faba ll'l'l ch~- rigo c0adj l!ltor qtie logr<fl !tnrnlar la vigilancia de <iJUe era oJDj,~to en el I .Semimall'i0 Concil~ar !llie Mam.Ha,. ~lil dop.de estaba pernitenciaji}0. Igno.ramos el Htera1 te 4 pp 0.e l@s docume!r}foS !febacie.n,~es ,ql!le 1a ~9;.te se ad.ju~ta:t>.an; [(!)em &abemos (jte @1\ra luminosa CO)\D.llni~acton, e;i;t la cu;tl · el respetable P:relado .QJ..epr,@{i).@iiJaJ!l.@, 1
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describiendo el triste aspecto que presentaba el estado moral de provincia tambien limitrofe a Manila y Bulacan, denunciaba hechos concretos de aquel mal grave, de] que bien cabales noticias pudieron obtenerse por el sujeto arrepentido, contra quien se descarg6 wna plancha conminatoria, que asimismo unia el Prelado al resto de los documentos, que repetimos nos son desconocidos. Un Reverendo Cura parroco de la Orden de Recoletos, en importante pueblo de la provincia de Cavire, denunciaba, Ueno de celo, en sesi6n celebrada por la Junta provincial dos meses c.abales antes del 20 de Agosto del afio pr6ximo pasado, la existencia en su pueblo de gran numero de conspiradores, afiadiendo que aquellos conjurados se reunian en frecuentes banquetes, en los cuales se habian pronunciado brindis contra la soberania de E¡spafi,a y se hacian 'Votos fervientes por la .prosperidad
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LA JNSURRECCI6N
podian acudir, manejando el pretexto de festejar un bautizo 6 casamiento 6 conmemorar un entierro. En las mismas Iechas y en otras posteriores, con toda la urgencia que le sugeria su celo ÂĽ amor patrio, el mismo Cura parroco daba cuen ta de sus averiguaciones al Jeie de la Guardia civil de aquella demarcaci6n. Este benemerito instituto, cuyos Jeies de tercio, distrilo, lineas y secciones y hasta de puesto, excepci6n hecha de algunos de estos ultimos que, perteneciente a la clase indigena, <iometiera el deli to de lesa Patria, abandonando su jurada bandera gloriosa, vigilaba atentarnente por el orden publico, y en las mismas in.mediaciones de aquel pueblo, al que fundadamente aludimos en parraio anterior, el capitan de la linea de Cavite, el valeroso malogrado D. Antonio Rebolledo, asesinado vilmente mas tarde en Noveleta, aprehendi6 en altas horas de la noche una re-
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union de gen<te tan sospeiiho~a, liJU0 habiendo enviacl(i) al G(i)biem@ de la proviMia 41 indlividll!l@S, deeiaFar@l1t con.testes haberse c@lilgrega€!1o en la casa el'l liJ®:e foerom cl'eteBid:(i)s C(i)fil el objeto de rezar p@r el alma de un, ddhmto que fa)}Vel'ltarnm , pNes, en eiecto, en la citacla casa no se reo@rdaba el faUecimien.to de nadi.e. El puncil0Ji1oros0 hlrav@ capitan 1\leb(i)Uedo, aJ d·a r C'l!len.ta cle'liaUac!la de los hec1J.os a q·Ne aludi:m(i)s, solici'taba la co111ce0Jt•Faci6m de la ]l!le1·za tiJl!l@ cons-titufa- 1-a IIaea de su man{[@ eJil la ciudad de Cavite. · lJiJll.Q de l@s mas leailes es:paiFioh~s en Fi1ipinas 11acido, el h(i)nradisim@, il"Bstrado y valienbe j·efe die la secciQ:Jil. 1 de la Guardia civil de Pasig, el primer teniemte D. Ma,nil!lel S1tjaF, da!ha I poF conductio reglam.entari@ cueJll.ta ' el dia o de Julio del a,9;0 pF6xirm0 1 pasado de las formailes coJilfi.d:encias que habianle hecho sall>er de qu.~ suerte en s@[(i) a(i,(uel Ji)ttehl@, cabeza
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LA INSURRECCl6N
de la secci6n por el mandada, existian de 600 a 700 individuos afiliados c<a una asociaci6n de basemas6nica, »pero cwyos verdaderos designios eran »altamente politicos y antiesparwles, »pues encubriendo hasta_cierto punto a »los imliciados de la plebe el verdadero al»cance y tr(1111,scendencia para que se !es »comprometia a obedecer ciegamente 6r»denes superiores de la s@ciedad secreta, »se les va insidiosamente vertiendo ideas »mas claras del verdadero firn a que de»ben responder». Ademas de las denuncias que por los medios expresados y por otros conductos se obtenian, justo es no olvidar, para ag:rndecerles siempre, aquellas informaciones reservadas que de dia y de noche y en todas horas practicaba el Cuerpo de Vigilancia adscripto al Gobierno de la provincia de Manila. Impulsado el personal id6neo que constituia este Cuerpo por afan patri6tico de cumplir debidamente su difici1 importan-
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LA INSURRECCION
teatro, propiedad de celebre dentista procesado; averiguaban quien y quienes de aquellos indigenas, con justicia tildados de sepaFf).tistas, iban y venian del Jap6o ; obtenian datos, respecto a sacerdotes indios que pagaban cuotas mensuales para antiespafiola propaganda. Denunciaban, un embarque de armas en HongKong con destino al Sur del Archipielago y a las Bfaayas, en donde los laborantes empedernidos, que residian en el Jap6n constituyendo la Junta revolucionaria filipina , querian re unir elementos para turbar la paz al propio tiempo que esta se alterase en Manila yen el resto de las provincias. Recogianse las hojas clandestinas que contenian la candidatura completa de lo que los conspiradores llamaron primer Ministerio de la Republica filipina. Denunciaban, deber procederse a registrar algunos equipajes de naturales que regresaban de su viaje a Europa para hallarse la
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FlidP)N'A:S
i'i :Ii
justifica{li6n p@11 los he~Iaos <ll:e tail medrda ; li'l.e°n1ilttciaha,J.i}l, el casS@ eie11tt@ de c6mo en - tt1!1J lugar de la aa,1za<ilia de Sam. Marcelµilo, y, s@ fE)fe,'fle,'flG I@ jugar ai l.ai;w-1lelilm•is, se e0·Dgi;egalila'llil:. 1abora11tes
Hil.1fil'Y
s@speea@s@s.
Derrnnciabam, el efectiv:@ viaj.e i:\ Nolilg-&(i)mg, efeetu1ad@ ea 118 de Aib11H, de aquel ab@g:ad(i) y r,iQo fli)l'@i)ilie1l-a,r!i@ d.e· Taal, que figl!l'l'aill>a ai fa eali>eza ci}e
qui.enes• ea acy;iii.lel illtll)il0I1tam1it;::is,imi@ ptrnb1@ Tu.aMa!IilJ siol@ @!fuje1l@ de aQ~l!l'a;cit:lliles p<1rr tematvva, de rebelion, li1abiend6 shl@ t0(]}0s es•tos c@D scu jefe de]l)@Ftadt:ls al Sur _ol.el AFcihil)il:ielago, y en rebeldfaJos m,:m:@s como el @1:L'@', se sefl.alaba io@r ei €:uerl)lo llle Vi:. gi'lancia el l,ugar d:e @emlltaa-i&.m <!le aqmellos refil1Daclfaim@s sectrnri:@s, pr@~ 1rt6tipos cle la poUtti,ca; sola;pad:a, tain , di£corda.fl.me p0:r ciertio de aliJmeifa _ r qtte debia.n aclm.,i.11air, JilO!I,' el se'lil.lfiido de rectitudl elll. qoe se im:fol'maiTua aqY.ella Adtnimist-raci.oQ ·rpl!l!Mi!ca lite la provinoia, a la 0l!lal pe11theneciain
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LA INS!TRRECCt6N
los ingratos a los cuales aludimos. Al Gobierno civil se denunciaba por sus agentes de vigilancia las maquinaciones y sospechosa conducta de algunos indignos medicos titulares indigenas y de clerigos de igual condici6n que ya venian tildados desde la insurrecci6n de Cavite de 1872; figuraba entre los primeros aquel medico de provincia pr6xima, aunque no limitrofe a Manila, el cual result6 ser el importador mas entusiasta de las obras de Rizal, y ademas otro compafiero de ¡ ambos que formaba entre los l}rincipales conspiradores de la provincia de La Uni6n, trama felizmente con oportunidad descubierta por ei muy Reverendo P . Fr. Rafael Redondo, Cura parroco de San Fernando, cabecera de la provincia de La Uni6n, que con gran acierto mandaba en aquel entonces el Exemo. Sr. D. Antonio Diaz de Contreras. Denunciaba.ase proclamas subver-
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EN FILIPINAS
sivas, en las Cltl.a:les 10s .ffili'1>&stei:os tagalos, queriend0 exphrtia,r ei estad@ de ,tribu.ltaci0n pgr cM.\ti:t,las rpers\i)B:illes, a:liirmaili>aiiJJ iban es~as a swfiri'l' uH gran aumemto para las da~:ies men@s acomocladas. estair'todgs l'gs veci:1oenmaciahase, nos de San Jruami. cl.el Mem:te arffi.Had0s al Catipunam, y la precision de vigiIa,r a alguna rpetsona lilel element@ iilicl.(gen.a d.e rnas wis0 em l a caiwiital de la pr@<vill1cia cle ftoQ@S S'\!lr, tambien mandada por activo lilonradrisimo G-obema<ifor civil, el £:r. Lopez He11Ra1I!l:d@ . .DenuMiiil}anse, gralil :niumero cle l0gias mas<fmicas en l@s popufos@s arrabales cfo Mam.iia; em Salil.lta Cr1i1ez, eE. TFozo, en Qufap©, y reU-:mi@n.~s asimismo muy sospecoosas en SiniaI6m. y en Mailai'te; la :inqu,isimva de ~qrui.ei CueFl!Jlil tile Vig,Hamc-ia @ll>lm-v:@ algunas relacignes de alilept@s a las i,.sociacicmes seer-etas, y entre aque1tas figurahan las q1rn ·c0ml')reE1.dfan . ' 1
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LA INSURRECCION
, los 200 de ~1andaloyan, y se denunciaba, el envio al Gobierno japones de una moci6n suscrita por 18 6 20.000 filibusteros tagalos pidiendo a aquel Gobierno les otorgase protecci6n contra Espana y la anexi6n despues de las islas a aquel imperio. Tan improba labor coal la sintetizada, traian situados en constante acecho, vigilando por la paz publica, los elementos del orden civil, eclesiastico y milifar, cumpliendo todos a perfecci6n el deber que la Patr:ia impone. Preciso es considerar cuan dificil era resultase por el momento siquiera 00mJlrobado, con pruebas materiales de los hech@s, todo el raudal de denuncias a que acabamos de aludir; pero desde el instante en que alg,una muy importante de las misID&S resultab,a cierta, no pudiendo negar val0r efectivo a las demais, se eompre11de facilmelil!te la.general inq~tud iSentid_a por los elo:rp.eq.tos
ER FILIPINAS
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peninsulares y los 1Flsulares leales en expeotacion 0.e 10 que acoJlliteoiese. Por de pronto, y desde fitiera, fa opinion puTulica, paira afiF.lililarse en el concepto de (ij_flle rea'}J®.em:te e~dstian causas pai;a ·se]lltirse el malestar que- se experimentaba en temmes de proximos trasbornos del oruen piblico, podia apreciar a(i_(u.ellas d.iisposiciones emanadas de la a,l!1t@ridad superior de1 Avcrupielag©, iEoceefantisimo Sr. D. Ramon ]Mane@ Erenas, ijar<ijtttis de l?eiia fla,fia, · dei)))©Pta,FI<il© a los pertmrfuadores de la paz pulica en Mal@hi>s, a los agii.itad0res de 1'aru., a l©s _de la Pa·miriaif.il!ga y ·©tv@s puntos. No son men0s de 4@0 las d.e1portaeiones que el gen.eFru. :Rlaneo -decreto. La sola c0nsid.e:raci@n de este Jileeh.o, para -reiaci©Dalfl@, es elaJJ©, <UilD · las denuncias de <'JiUe .se ten,ia,'li©ti, cia, podia serviil' de iu:ndame:m-to afa ineertidumbFe en <iJ:•Ue vi<v:ia en aqi:ueHos dias la p0blaci6n peni,nS:l!J,[a,11.
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LA ll'ISURRECCI6N
Mas bi en pronto babria de disiparse toda duda: iba a denunciarse con pruebas fehacientes, el pacto de sangre entre tagalos para acabar con la dominaci6n espaiiola. Con la gran suma de medios que para hacer siempre eficaz la vigilancia, tienen en Filipinas los frailes, en virtud de la mayor identificaci6n que estos alcanzan con cuanto es vida ¡ y costumbre en aquella espaii.ola tierra, nada de extrafi.o tiene el glorioso hecho de que el exacto C.nocimiento de los detalles relativos al estado de latente couspiraci6n que tantos y tantos denunciaran en unos 6 en. otros limites, lo adquiriese y revelase inmediatamente un Religioso de condiciones de actividad tan excepcionales, como las evidenciadas durante su vida honrada ¡por el celoso Cura patroco de Tondo, el Agustino M. R. P. Fr. Mariano Gil. Las relaciones de este entre los naturales de la comarca tagala mas
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movida son y necesariamente hoo:t de ser muy extel'lsas. Am.tes de amministrar la imp@F'llam11l1sima :fi)arroqnia que 'fil(!)y si:rve, ·deseJ;EljJj)tiiilo d1iirante muohos afil:os (vein.tfoiinc@ cabales Heva de residencia tin el p~-is) otras ]i)ertenecientes a [as JilFOvimcias · de Nneva Ecija y Buiacam. Persiguiendo con tenaz e:mipefio hallar el grade> de certeza ()JUe pm!lieran tener ·10s liBd40i0s y s@spec1i.l.as que tenia de que en efeeto se estaba urdiet1do en. aqiuel pais una. grave tram.a cmtra el so~ieg0 puMieo, el Padre Gill l0gr@ eQmo :nlsultad(!) de su inquisitiva n@ticias que &reia ciertas y datos q1rn consideraba fi.de.dignos, que elev6 a ,c@nocicmiemto sttperior en los primer@s dias de Agos' to del a.no pr6xlmo r>asado : aos r>areee recordair qtte taJl ac@ID.teciese el dia 9 del ciitaclo mes. Transcurriernn diez dfas, y el :1:9 de Agosto de 1896, 1m il1dio, segttFa' mente de conciemcia liomra<il:a a,11:a. en 1
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su fondo, arrepentido de pertenecer al Catipunan de Tondo, del cual asimismo formaban parte gran numero de operarios compa:fi.eros suyos en . la imprenta del DiMio de Jl,famila, se presento al M. Revdo. P. Fr. Mariano Gil, acompaiiado de carta 6 tarjeta de la Superiora del Colegio de Looban, en donde aquel indio tenia una hermana educandose; afectaba aquel indio temores que le hacian andar rehacio en el camil!O de descubrir cuanto sabia, pero pronto supo el Cura de Tondo inspirarle confianza, y las aseveraeiones concretas y detalladas que aquel hizo, produjeron la mas grave denuncia, el verdader9 descubrimiento d_e los hechos de que se trata. El aludido indigena, Teodoro Patino, ofreciendo detalles de l0s mismos, senalaba al Religioso Agustino, Cara de Ton.do, el lugar y sitio en clonde, como prueba para patentizar la, verdad de lo que afirmaba, podria
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bal'larse una piedr.a 1it0graflica CO.Jil, clave que servfa ·ll))ara la ti!fada d:e - recibt%l ta:l.@Iil.arie>s c0F1res,pg'.!!!.0lien1ies a la sm~or.ipci@ft que mens'l!la'limem,tie venia ha.:ciend@se efocliiva emit.Te l©& · afiljacl'0s rult t:atipnan. y, (i):tros ffl"(')c,umentos a elJo refern·l'ltes , ;p·retenJ diendo estos sectarios, segmm. decla- '$J raba r0tundamente Pa·tiiiii.(i), la deg01' llaci6n de tod@s 10s castii[as. IJ Aquel indi(i) dedai;aba al rP. Gd[ el lugar y sitio e,n <\lllll8 se fo11i>rica11>a,m. l@s pun.ales q11ie se eiilltregal.lla,Jil. {I" ~@s catipunados: a<quel imdlio deF1iu1:1c,iail!la ··' la presencfa y Jile1·maMm.~ia d:e Ui(')(i) . hombres rel!loidqs y,a @m. el ~ilii© tlamado Tapusi, cdei rrme'Ji>lg de ~an Ma..: te@, bien. t'aCitimad@s r perti:recthadios, agua,rdan.do s01tameute [a seiiiail: i(!)3!ra alzarse en air.mas, C(')n :t8 <fl 2@.(i)(i)O , sectai;ios mas que asegl!l,r aba aqRei habian de detennJTia,11 [a ii,as.l!l<rrec~ , ci6n general de Manila y sus alrede' dores. Tod0s los term4us <!l.e ia delil~mcia
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iban a ser comprobados iomediatamente; para tal fin, el P. Gil di6 cuenta de lo delatado -por Patino, y sin perdida de momento, a los distinguidos tenientes Sres. Grun y Cortes, jefes de la subdivisi6n de la Guardia civil veterana del distrito de Tondo, y al activo, habil y valeroso capitan D. Olegario Diaz, comandante jefe del Cuerpo. El Cura de Tondo seiial6 los nombres de muy principales comprometidos en el gran complot de que se trata, y de los cuales, por ser asi, podia esperarse gran ampliaci6n de datos: una vez dado este grao pa~o, el P. Gil tendi6 a adquirir personalmente los interesantes cuerpos de delito a qne antes nos referimos, la piedra litografica, claves y documentos denunciados, y, en efecto, constituyendose aquella misma noche en la imprenta del Di,a,rio de Manila, acompaiiado del denunciador, alli, en el mismo lugar t y sitio marcados, dentro de aquel
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LA INSURRECCION
memoria la secular patri6tica gesti6n de las Corporaciones religiosas en Filipinas. Verdadero caracter de la insu6. rrecci6n tagala. - La formidable conjura que entre tagalos se urdiera contra la dominaci6n espafiola queda en concepto nuestro clarament e explicada, a pesar de nuestra poquedad en medios de expresi6n. Resumiendo, no obstante, lo que hemos dicho respecto a las causas proximas y remotas, determina ntes y ocasionales de la grave insurrecci 6n de que tratamos, habremos de afirmar y afirmamos no reconocer otras que, el coi;i.cepto de independencia explotado por la a todas luces injusta pro. paganda sostenida por las sociedades secretas, con firmeza extrafia entre aquella raza, contra la dominaci6n espaiiola. No creemos sea preciso para juzgar asi lograr excepcional desarrollo de aquellas faculta0
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des :intelectua:les reflexiva s q,ue constit1:1yen 1o que en el h@mhre se Llama la raz6n. La m.ason.eria filipi.na t!u.sioJitada c<'m la c1 Liga fiHpina » formadaJ por RizaJ, y esta fusi@nad:a e@m e[ Cat:i:p·a nan de Marcelo ff. del f>ilar, puesto que no prospera ron otras organ.izaciones de 'briangl'l1os pr@puest as, he aqui cua.0.to em n.uestrn sentir' e@IilStitu.ye el triste pr0ceso de la revolt1ci6n en Filipimas. l, CmH es su verdader@ c-aracter? z,Es du'bittable para alguien que el caracte1, de esta i[l;)Sl!lrrecoi6n. de gran ; J!)arte de los tagaJ@s es J!)l!IW y sil!lil, plemente sepaEatis ta? l, Que fundatrrnillt0 j:i)l!lede teRer Iil0[ ci6n contraria despues de lo que si' quiera someramelilte 11evaimos dfoho? • / Y ademas del cali1iicativo cl.e s~par' ratista, z,quien que recuercl:e el l!)I'Ocedimien to trazad@ p@r fos sea'tari0s del Catipuna n para lograr la i.n.dependenci a en aqueUas islas, dejara
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LA INStJRRECC16N
de permitirnos Ja adjetivemos mas y digamos q ue es un.a insurrecci6n separatista vandalica? ;, Que otros medios para emanciparse de la .Metr6poli hubieran podido idear las gentes mas incultas, foragidas y salvajes?
. SEGUNOA PARTE
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CA.P{'TUJLG V. cA!gunos detalles de 'la msurreccion . 1.' Efecto que pr0dujo en'bre !0s esp9.ii.0les pe.;;;
ninsulares el descubrimien to de la conjuFacion tagala. - 2. ' J.us bicia civil y mtlibaF. 3. • Fuerzas del Ejei,cito. - 4.' •AJzamiento en armas. Primeros encuentr0s. - 5.' CFimci6n del Cuerpo de vol.unta,vios de Mani)la. 6.' C0mbates en San Juan del Monte y luga/ res ve0inos. El G!'.)neral segundo ca1b0 'El. !Bernardo Eohal~ce. -?: Prim(lras medidas adoptadas por el Gobiern0 de ta Metmf>poTi.- 8.' Insur recci6n en Cavite. 0
1. . E{eoto que produjo entre las espanoles peninswlarcs I'll descwbrimiewt0 la oonspira.oi6n tagala . - Descubie·r ta la gran co0spi,Faci0n de 10s tagalos, segun acabamos lil.e ,decir,;_eli 1a 0
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madrugada del 20 de Agosto del afio pr6ximo pasado, vertiginosamente se desarrollaron los acontecimientos. Naturalmente, en la poblaci6n peniosular, y aun entre lqs insulares leales, la noticia fija de la conspiraci6n y sus barbaros fines produjo el sentimiento de indignaci6n que causar debia, y justamente exaltado el del patrio amor ante el peligro que amenazaba a la dominaci6n espaiiola en aquellas tierras, todos los peninsulares y muchos leales indigenas exclamaron en unisono entusiasta i yi va Espana ! Los espafloles peninsulares, acompaiiados de muchos leales indigenas, ofreciendo el hermoso espectaculo de la mas completa identificacion de miras para atender a la salud de la Patria, fueron en grandiosa manifestaci6n, presurosos, a ofrecer sus servici@s y su mas completa adhesi6n a la Autoridad superior de las islas, al Excmo. Sr. Capitan general D. Ra-
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2. Justicia cfoil y militar. -Despleg6se admirable actividad por el Juzgado especial nombrado a propuesta de la Audienci~ del territorio para la formaci6n del gran sumario correspondiente a tan enorme delito cual el de conjuraci6n tagala que se acababa de descubrir; el inicio de aquel proceso, las actuaciones en el mismo hechas por la justicia civil constituyen una pagina de gloria para esta, aunque tambien haya que rendir todo homenaje de consideraci6n y respeto a la justicia militar que sucedi6 a aquella, y de la cual el jlilzgado militar, a qlilien cortespoBdia entender en el proceso, obtuvo base muy CQmpleta para el esclarecimiento de los hechos. El Juzgado especial lo constituyeron el distinguido Juez Sr. Concellon y el Promotor fiscal Sr. Ruiz de Luna, quien conoci6 desde luego de la causa, interviaiendo en todo ello el Fiscal de la Audiencia Sr. Cas0
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taiios. El dia anterior al de la p1;1b1icacion del 'bando de~laralil.0.0 ei estado de guerra pidio la Fiscallia la iinhibici6n, por rtratarse de ae!liitos :rm>pios de la jurisdfoei@a mi11itar, y, en efecto, todo l@ 9-iligenciado pas6 -al Tribuinal presidid@ p@F el sefi@r coFoDel D. Franci,sco Olive, que 'hi.a prestado especial sefl.aladisim.o seFvici@, dtgno de todo f)remio y eRce>liil!jo, Elil virtud de mandamientos judiciales, y p@r d,isposici<f>n. gu1be:rn.ativ.a, la Guardia civi!l_ veterooa y el Cuerpo de vigilancia p:rocedtian a fievar a . cabo ¡prisiones y deteHi,o])les en gran aumero; falltaban luga,res apropiados para tan ta reclusi6D pa-_ s~jer,a 6 per,mal!l.eJ.illte. . I
3.° Fuerzas del ejbc.cito.-La guairnii.eitfm de Malilila er,a muy eseasa. 11300 so1dad@s ))l.eninsuiaires ! Poe@ ipas poc0 menos l@s mismos elementios de fu~rza mater,iial co11 que en Manila se contaba <mando estall6 la
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insurrecci6n de Cavite en 1872. Nuestra raza valerosa no suele tener la previsi6n como atributo de constitutivo. Lo fia y lo confia todo, y por entero se e11trega, a sus heroicos temples, esperando eon estos veneer todos los peligros. Ya que despues de las tristes experiencias adquiridas con la insurrecci6n tambien separatista de 1872 en Cavite no se destinaron al Archipielago filipino 6 u 8.000 soldados espafioles, y que no menos de este numero se hubieran mantenido siempre alli, habria sido muy conveniente la ida de 500 6 1.000 frailes misioneros mas, y podian haber venido a servir en las iglesias de la Pe.ninsula los clerigos indigenas, que por su condici6n de espafioles insulares no hubieran sido desconsiderados por los espafioles de aqui, de natural generoso y afectivo. Aparte de los pocos .artilleros que guarneGian. la ciudad de Manila, el
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resto de fas tropas en la mi.sma e-r,an· indigen.as; la conifia:nza en eUas poc.11.ia ser 0bjet0 de J:.J.iJl)@tesis-, e·1m men.este11 ii.J.il.fS]ili!E1il.sen, y rf)l!l.q1:,e l@s 1J!teeh@s poil' gra:n. fortun.a !)iirarla f !in.s· dieron en .aqiuelfos momen tos; aigo menor es la que in.sptran boy. 9(i)(i) li.@mbres de Ios ba:tallones 1. y 2. de1 Eegimienito numer0 7(i); itmhs ;[i)Ocos de! 73 y 7,4 y clel 1mtal[0ID. c.11.iseipHnaFio; GOO del Dep6sit0 de trainseu~tes; 200 hombFes, ]llOOO mas, pertenecientes a los regimieDtos d!e -Legazpi e iberia, mim.s. (;)$ y 69; 25@ <lei batali1011 de ingemi.eF©S y, , pi:w~e del regimi.eID.to cle eabaJlleria ~:Fa el 00n.tin.gente con qllle en Manila se iogr6 reunir, ademas d_e ~a secei0m de la C&uardia civil veterama y de ttlil.©S 11!0(i) hombres perteRecie:l!l!tes a[ mi.sm@ institut o de 10s te1,ci@s 20, 2{ y 22, ?l <;J,iia 25 de ~gosto con alguna iueF~a de InfaRrteria de maFina y, alg;uria ruerza de la dotaci@n cle 10s cru©e~os. Con tan escasas tFopas, ~a Ca1 is
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pitania general hizo notables combinaciones para acudir a tanto lugar en que se alteraba el orden, y a ellos acudia. Al:tamiento en armas. Primeros encuentros. - Por tedos los contornos d~ Manila y provincias limitrofes cundia la agitaci6n; se notaba en muchos barrios por las columnas reconoddos que todos los hombres aptos para las armas que en ellos hubiera, habian desaparecido de sus bahays. En una gran reuni6n de conjurados Andres Bonifacio dio el grito de rebelion, y, en efeeto, el dia 25 de Agosto, a las doce en punto, gentes de los barrios de Manila, Caloocan y Tambobong¡, constituyendo una partida armada al mando de un indio llamado Lah6n y del capita.R de cuadrilleros de T0ndo Pedrn Nicodemus, se presentaron en lucha, pernoctando en :eafilac, despues de recorrer los 4.
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barrios de Baeza y Talipapan ; en aquel lugar, segµlil las n11siOJiles arl!lt0rizadas que ten.e.mos, aq1rnlll.a partida b.aMa l!l.e rneiMr- cimdeRes de Ma, nila, -y; mientiras est0 acontecia, los .Jefes de misma reYJilierolil lilil!l(WQS a,:filiados al G~tfpuman, los cuaies, despues de sufriF la incision cl:el pac-. to de sangre, <mgrosa1r0lil aqueHa partida, que al amanecer cil'ei 26 estaba CO]]}'puesta de 1.0(l)(i) l.il@m/lJrnes ' ·aproximada,nil.ente: Escasas foerzas de ~a Gl!lardiiai civil, al mando del teniente coman~ darute de ta secchfilil <ile 'faHm1ib@mo·I!l•g, :p. Manuel iR:@s, salier0n a ba:li'ir To · que, segun runr10res, era s@lo um gfia~ ~o de tuJisames (i{U.ha,Man asa:Ilta0:o rasas y secuestrado ehilil'OS e!'l ~a_ llintanag y Nova!.ic1les. l La pequefi.a c0l.tu:m'Ela no hallo 11@lvedad hasta la mafi:alila dlel sigl!lien~ te dia 26, el!l qNe eliseminad@s lf)Or entre cariiave:rales ·es)!lesos de aliJiuetla jurisdicci6n del barrio de :Banfa.e, la
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vanguardia divis6 grupos que contestaron con un disparo al i quien vive! que se les dirigi6. - Desde las diez de la mafiana hasta las tres de la tarde de aquel dia dur6 aquel hecbo. de armas distioguido, en el que la escasisima fuerza de la Guard.ia civil de Tambobong huho de formar el cuadro y descargar hasta el ultimo cartucho, para contener aquellas masas y abrirse paso por entre las mismas, cuando estas creian iban a apoderarse de la columna, en la cual s6lo iban tres peninsulares: el teniente jefe, el sargento y un cabo. Los insurrectos gritaban a los guardias indigenas, di- ¡ ciendo que matasen a los tres castilas mencionados y se uniesen con aquellos; pero los guardias se portaron cual debian, y despreciando tan infame invitaci6n, lucharon valerosamente, hasta que ¡despues de haber causado a los sediciosos doce 6 catoree baijas, entre muertos, pri-
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sionetos y heridos, l))Ud@ [a Jl(fquda colu.mDa {3(') 1l@mfu1·es ~ del tiemfo!ilt ..., Ros, llegar a Ca[oocaN, 11eti1ran.et0se los h1su:rreetos l:;)0:r Pas0Ng·-Tam<fl y pc;:,r Bago~Bantay, a Sa.n .'lium1l!I d'e] . , Monte. I Paira cas1'.igair a los i·ebel<!les a1uti@,res de las depredaei@mes de 'Ba1iNifauag y de Caloocan, a..a<if!Nelil@s malvados ililSUJ'Pec't@s q,me imfoial.M.Iil S'.1!1 -0ampana asesin.ando, y mas :WT@piame:nhe dicho descuartizando, caatr0 1 chimos <ile l'os 1!8 <q•me se·c nestraJJan: en, los prime.ros m0me0t0s , y ma'talildo 1:12 ch.iMs mas dueili.os de tiem~ idas•' cle CaJIMeailil, salli6 01ira co}ul!lil,/mita para 0pera11 . en c0mbinaci6n te@n los g;Nartruias <!lei ifi.elil..iernbe Ros; 1aqnella la mandaibai el de igua!. &lase Sr. Arroyo, y mas tarde, c0m0 <q,uieJ ra qu aum.emtase la pi:11esem_itaeiilla · / d e grup@s rebeldes por aqmeHos colil..tornos de Calo@can , acudiern'!,1 las I c@tutnnas al malildo del comai~dl.taiml te Aguirre, coml))uesta d'e f6(i) h@m-
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bres, y la del coronel Pintos: la escasa tuerza de caballeria con que se eontaba hacia prodigios de resistencia, y a las dos o tres horas de haber llegado a Manila, mandada por su bravo Jefe el teniente coronel Togores, se dirigia al sitio de los sucesos de Caloocan, en fines de operar con las citadas fuerzas en aquella zona. un movimiento envolvente: la tuerza de caballeria ( 60 hombres) y una compafiia de infanteria constituia columna al mando del mencionado Jefe Togores: 107 hombres del ÂŤ Cristina Âť, al man do de su segundo comandante y dos oficiales con el medico de la dotacion, se situaron trategicamente en aquella linea y ocupaban la estacion del tranvia de Malabong. Los insurrectos, que sumaban gran numero, juzgando la escasez de nuestras fuerzas, pero al propio tiempo la habil combinaci6n de estas y arrojo de las mismas, dispersaronse por los montes de San
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Mateo y en direcei@n de l(!)s de Angat, guareciendose los de mas bru.tales brios, entFe las brenas ~lel Catap.rus, en ii.as inmedfaciones de 60soboso. Ver<itadero p~rtem.to fue l@g:rar salvai.r SU ;vida, en la acometida salvaje dada por los re!beldes en N@valiches, ~l Reveremd0 Cl!lra i(!)arro~o de aquel viHorrio, que em:tre b@s<ques de gua~aili>as disem.i:na su p@liJre oa-serio, ool!lpado por m.uehas gentes de mal vivir, ya 1'-7 tkil6metros de Manila si,til!lado : doce dias ca,b ales 11evaba a1 fren.te de ag:l!lel1a accidel!l:tada parroqui-a .el Rdo. P-. ·Agustino , FF. Agapito Pen.a cuandg su,fr-i@ · el gran asedio a que alMdim@s. · . ! Parte de las foerzas del E3erciifi(!), lcp!le anduvierol!l en ag:uella ope1m1ci6n contra los de Balintauac y Ca/toocan, 19ersegl!lian a l@s dis;peFs@s, ~y otras iban a lfona:r otras exigen' cias del servicio en distintos ifi)Ulfl1tos conflagrados. E:m. Pil!leda O©l!l<rr-i<f>
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tambien lo que en Caloocan, Novaliches y Taguig: por todas partes surgian brotes de aquel mal. En estas primeras operaciones de guerra ofreciase, sin embargo, ya, como agradable consoladora esperanza, la de que las tropas indigenas no estuvieran, a pesar de las maquinaciones del laborantismo, tan descompuestas como en un principio se crey6; los soldados indios se batian con serenidad y bravura; aun cuando haya que lamentar y maldecir heohos aislados de deserciones viles, en general mere¡ce aplauso el Ejercito indigena, y nosotros se lo enviamos., des.de' nuestra pequefiez, muy sincero, a los leales. Pero tampoco debemos echar en olvido a las clases indigenas civiles, que han patentizado y evidencian amor y respeto y fidelidad a nuestra madre patria; para ellas guardamos los mis.mos nobles afectos que gran parte ( la mayor de nuestra ya no
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na, a reconocer otra mas extensa comarca. 5. ° Crea,ci6n del Cuerpo de volwntarios de Manila. - Entre los elem.entos peninsulares de Manila, experimentabase natural, honda, creciente inquietud: las importantes detenciones de personas principales entre los indigenas, detenciones elevadas a prisi6n todas ellas ; los planes conocidos de loR rebeldes para apoderarse de aquella ciudad; el hecho de haber descubierto entre los criados de los cas'tilas a muchos juramentados en el CatipUJ1an; las noticias con frecuencia llegadas de conflagraciones en diferentes lugares producidas; la nocion exacta de la escasez de fuerzas militares, ante la en.ormidacl de la ~onspiraci6n; el co nocido hecho de la declaraoion de. guerra, acuerdo tornado en numerosa junta por el C~msejo supremo del Catipuna:n -convocada, todo esto, y
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mas de esto, jus'fi.Hicaba plena:me,iate la agitaci<fm. de ios fa,i.mos. No en p0co la cahn6 e1 decret@ dictad0 p@r el ih!lsh:e geJi.terat :B[a~co c@_n fecha 3(i) de Ag@s1i@. , Tan acertada €li,sposici6n alilforizaba, en us@ cle ·}as faou[tacles ffte etue la Sl!liperior au.t0rida61' de las islas hallabase invesmda, la crea-o. ci6n de l!l.D Cl!ler)il@ d.e v:0ll!l•n,ta1L·i@s, que COiil tanit.0 e!!.1Jtl!l.Siasm0 se i:miiciara, por esJilGntaID.eo, v.ehemeID.te irp,pulso de pat.rio amor, eIDtre los espaii@les peninsulares residentes en )la ciuclad de tegaz~i : j6vem.es y viejos, frailes .y segla;res, ll!llil'Cionarios' /Publicos y particulares, .c@rnercian/tes e iml.l!lstria~es, saml'@S y il!rasta /enformos, . reaccionados vivamente ante el peiigro amenazad@r ffte la irntegrida<ll clel tierri1tori@ y Ii.le ~as homadas viclas de l@s es.pan.oles peni'l1lsu1ares q,u.e lo FJOMafuan, e'.ID. ln.ePmoso tropel se aeumulaT@n en l@s 1ugares fftesignados para el digtiitii-
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cador enganche en aquella milicia nacionaJ . Coincidia con aquel decreto el cumplimiento del mismo, pues un distinguido, valeroso, dignatario de la Administraci6n publica, el Director general de Administraci6n civil, D. Javier Bores y Romero, constituy6 un nucleo de fuer:i;a de caballeria, base para un escuadr6n, que en cuatro 6 cinco horas se present6 en formaci6n correcta ante el palacio de Santa Potenciana, residencia accidental del Capitan general, senor Blanco. Esta superior autoridad de las islas , acompaiiado de ¡todo su Estado Mayor, salud6 aiecluosamente a aquella fuerza nacional desde los balcones de aquel palacio, en premio al acto de cordialisima adhesi6n qu'e aquella estaba expresando por modo tan elocuente . Antes de la publicaci6n de aquel decreto, y en espera del mismo, ya el celoso gobernador de Manila, por
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propios impul.sos y p@r ios que vehemeu:Jiemente le exJ!lresai;an fos espafioles de la capiital, habia preparado e1 allistam,ieI!l,t0 volu!)!lta1riio, y el repamto ·cl.e las p©cas a11mas de ql!le disppnia; puede decirse que las it1e11~as ciudadanas, cFeacilas .vor: la citada disposici6n, c0existian con. esta, pues, a p0co cle ser colilocida, quedaban. comsti'tl!lidos cl esoua0.1r6n y bataH6n de ieales vohmtari0s de Manila, c0ngregando haj(!) ia gl(!)1.d0sa bandera rll'e ta J!lafaria a rt(i)d'0s l@s espan0les peninsulares y leales tnsulal'es, (ijtlB tamliliel!l en. hastarrn.i'Ee m1111.mer0 aspira1i>alil! ( atmqlile me es-tos ultimos no todos la mereoierarrn., semuy pr©ati0 se C©liilli)r0b0 j al risfrute de h0nra tan iflsigl!le ~Hail ca de formar parte de a<i{Uel Cueq>@ lne v@hrn.taFii©s. Ademas del bata116n y escuadr(m: la que nos refe111m@s, iban a c<1mstiituirse dos guerFillas: 1a de San Mif uel, que se farm@ in.mediatament e 1
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y la de San Rafael despues, las cuales, dotadas de excelente material nautico y terrestre, tanto por mar y aguas de los rios y lagunas navegables, cuanto por tierra, prestaron senalados, heroicos servicios, vigilando zonas insurrectas, en las que libraron rudos COJilbates. El Casino cre6 tambien una ronda que presto arriesgadisimos servicios y una guerrilla despues. Si el Ejercito regular conquist6 en Filipinas, en esta como en todas ocasiones, paginas de gloria i.nmarcesible, ¡ DO seria justo dejar de consignar coD caracteres indelebles tambieD el heroico proceder tle los voluntarios de Manila, en sublime pugna uoos con otros para prestar los servicios que mas riesgos acusaran, y en ansias vehementes de compartir coD las tropas en todo sitio y lugar los J!)eligros que se presentasen. Solemnisima fue la ceremonia en que se hiciera la bendici6n de la
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bandera y estanda.rte, sagrada enc.. sena, <!le aqrniehlas fuerzas E)OJlll!lfares: se llevo a eab@ en la Ca~edral de Man.Ha, y oncia,n.d.@ el patri6liic© :virtl!loso Arz0fuisrp@ met1·op0ti.itaID.o <il:0a fray, Bernardi.Q.o Nozaleda, quien en senU.da'. c0n,NH>vedora plat ica e:x:pres6 el !valor y significaci@n de · aquel acto grandi@so, al cual asisti6 el Ca])lita,n general, orlad0 de sl!l [s,ta<il@ Mar:y@r y c0misiones de1 Ej.ercito, el cual evidenci6 el ~s19irit11 de com)!lieta confratem,idalll en. 14,ue se itrspiFa®a C©'.El aquellas ruerzas €-iu.<ila<!lamas que el amor patri:@ y leis acon,tecimiem,f@s er@,won. El Caipi'ta.J!l geIIleral, D. Ram6n Bl_anco, dirigi6 a los vollmtarios I IH>table a1ocu.ci@n: :11uera <ire fa Capi; tania general, es clar0, pNdiim@s leerj la en las dos cuartiHas q:ue 0riginales del pun0 y· Ietra de aqp~e)ta an,ibo' Fidad iban a impFimirse y a seF eon [ merecida profosi6n 0irculada. Aquel ,, · documemto dfoe asi : ((Voluntari0s:
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LA INSURRECCIOS
â&#x20AC;˘
>1 Acabais de realiza.r el acto mas grande y mas trascendental de cuan.tos puede llevar a cabo un ciudadano armado: el juramento de su bandera: juramento sagrado y solemne, que imprime sobre el alma del que lo pres ta una huella que jamas se borra. Âť Cierto que todo espafiol amante de su patria esta obligado, a defender la bandera nacional, y que siente latir involuntariamente su pecho al contemplarla; pero esa noble sensaci6n se extrema y sube de punto cuando esa bandera es la propia, la que, jurada despues de beodecida, se convierte en ensefia venerada del Cuerpo a que pertenece, en el que ihstantaneamelilte se despierta hacia ella el amor mas vehemente que lle.va hasta el sacri:ficio a los que bajo sus pliegues se cobijan, y convierte en heroes basta morir en su defensa a q,uienes fueron momentos aates tranqHilos y pacificos ciudadan@s.
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.EN 'FI),IPIN AS
»SegtffO estoy de ~prn t0d0s , -pres a todav ia de emooi<lm. tan !il@ble, os sentis Meflos de eHtt'l!lsiasm0 haeia vuest ra precio sa ensRiiia, y <:J:Ue d:eseais" en el fondo d'e vl!lestros pecho s oca~i0nes ()Il que comlilatir y ve.flc-er Ji>ara coron arla con el laure l de la victo ria, que no dud(i) obte:adireis si IJlegara el caso de pone r a prueb a vuest ro valor y firme za, CO!iltando siemp re rpaFa defen der esa lilandera y ese estan darte , y moriF anrtes q1rn p0r nadie sean hotiacl.©s, eon. Ulil V0lunta rio mas en v1rnstr0 Gene ral elil Jefe, Ram6n Blanco.» · Repet imos lo que ya hemo s dic'b.0: la mas grata impresi6m. gu.ard ara por siemp re-tod o aquel que prese nci6 eri iManila el vei-dader0 acont eei,mie.flt0 :Cqu.e acaba mos de sintet izar. ' La mulii tud de bee.mos pa!FciaJes 1cl.e rebeli@N OFUe Fapld ameB te' cundian oblig6 a la aut0r idad sl!lperior de'l Archi pielag o, en a(!_(uella mism a ,fecha, 30 de Agosto, a decla rar e11t
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LA 1:-ISIJRRECCION
estado de guerra las provincias de Manila, Bulacan, Pampanga, Nueva Ecija, Tarlac, La Laguna, Cavite y Batangas. 6.° Cornbates en Soo Juan del Monte y lugares vecinios. El genera,l segwndo cabo D. BernMdo Echaluce. - Despues de lo de Caloocan, se vi6 el intento de los rebeldes : a todo trance querian caer sobre Manila. La conflagraci6n era general en todos los alrededores, y la tendencia de los insurrectos era reunirse en San Juan del Monte para entrar por Sampaloc: en esta direcci6n el primer' encuentro se verific6 en Santamesa. :Habianse reforzado todos los puestos de la Guardia civil y los destacamentos : al de San Juan del Monte acudi6 una secci0n de artiileria. En el euartel de Ia Luneta queda-. ba l!lna fraerza de 100 hombres, no mas, que eran los unicos disponibles para reievar la guardia de la
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carcel y _presi diQ de i1M.1l'l:ri d, (lJ®Je tleV'aba cl!latFo dfas <'itlSt @diaJil.cl.@ a<!Jiirnllos ecl.ifici:(i)s. La g·lila,rmici6m. <ile Ma- nila y escas@s ref,l!l.erz@s ~u;e Feci}i)i0 · 111:abia sid@ <ilistri1'11lli4a saTuiamem.te ]_i)Or el gen.eFai E~ha1l!lce 1 n<:Hl!lll\l:IJad(l) jefe ' <!le las fl!lierzas fiJiQe - hafl»fam de con.stiituir la dlefen.sa til e l a ca]!)iitail de las islas : er_a tam C©lilill_r)leta' la llinea ' exterior QJue '' liJara tail fi.m tr.azara €ll veterano general S€g"ffl.Jil&'.(i) call>@, (lj'M'e aqueHa Ho.ea, airF-alilcalilcl.@ ~<ite la Cal.)itamfa clel [[iHaert('), en. d'@:ruite estaiban las fuerzas <!le desem.®aJJJC@affi maan.do del va1eros6l ca'Ji)iltal!l <!le mav~@se'iiiov Lazaga { i1J. J@aeyttillli) , t e:F~J:inaba: em Sampa,loc. 'l.1@d@s l@s Mcrnfo@s a,pla1!l-:dian los twllrnites <!le cl.efenisa fuec'h(;)s k or el genera[ Ec:Jn.ahlce em e]i:teti©-, €ls e inte-r i ores Hneas. _· L os 1(i)0 hom!br.es deI cm.ac11te~ ele la t,rmet:a [iHer ten€lcian. a1l vegtm.4en~@ ~nHmero 7Cl, e ibalil ma,m:dladl@s po·L' ei 1 jeapitan Avila y l ©s [t)J1imer0s 'lleiwie:ialtes D. D@mingo M'l'lin@z y, Bonil[la. A'li
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LA !NSURRl!:CCJ6N
frente de esta tan reducida iuerza, se puso el general segundo cabo D. Bernardo Echaluce, cuyas brillantes doles mililares y civiles tantos prestigios solidos Mule creado en Filipinas. Cuando esta fuerza lleg6 al polvorin situado sobre la rnargen izquierda de la calzada que conduce a San Juan del Monte, desde Manila, la tropa que custodiaba aquel edificio habfase ya batido con los rebeldes, quienes trataron denodadamente de apoderarse de aquella importante posici6n. No lo alcanzaron; heroicarnente la defendieron 60 hombres entre artilleros peninsulares y soldados indigenaS' del num. 70, al rnando del hraYo capitan Rambau, y la caballeria al mando de Togores, con gran oportunidad llegada, dispers6 la masa deinsurrect@s qNe acosaba a los valientes defensores rlel polvorin. Viendo los rebeldes frustrado su plan, al diseruinarse por las ~asas â&#x20AC;˘Y bosques inmediatos, un gran nucleo
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LA INSURRECCION
Bonilla y .vlufioz : escaso trecho habian recorrido, reconociendo cinco casas no mas de aquel lugar, aquellos dos pequefios pelotones que habian tornado izquierda y derecha de la caU"etera, cuando la secci6n del tenie0te Munoz, a cuya cabeza iba el bizarro veterano general Echaluce, acompafiado del capitan de Estado Mayor Sr. Gueriguet, sufri6 nutrida descarga disparada por los rebeldes fuertes en la citada casa de Vista alegre, 6 mejor dicho, desde los muros que la rodeaban: las bajas que la secci0n experiment6 exaltaron el natural valor de aquel pundonoroso ofioial, ya la acometida brutal de que acababa de ser objeto ¡ respondio ordenando al pufiado de soldados ciue llevaba, a vanzasen has ta los muros. de donde procedia el fuego; alli fueron, por entre las malezas y ondulaciones del terreno que determinan muy dificil acceso a la casa por la parte aqterior. Orden6 el teniente
EN FIL!PINAS
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Munoz e,l asalrto de aqael I!l1l!uro, y dand@ heroico ejemJp[@ a i@s suyos., el fue q1J.ien,, rev61v;er en_ ma1110, lo coron6 el iJ!>rimer-@ : ullila vez en el, los rebeldes, que emprendiei;am cl.esc@mpuesta retirada lb.acia el im,terior de aq·uel tenen© extens@ y_tl!lpiolo de v:egetaci6n, hk,ievom 0tras d.escaFgas. viniemd@ un pro~ectil a b.eri:r en ei cuello gravisimamemte a1 teniemite Mufi@z; practicaN,d@ este ,esfl'l.erzos suprem@s Jllla,ra lecvanta.rse de1 si:ti@ en que :fuabia eaicl.@ Im.er-id@, il!NiJJ i[})l!l0V@ dispa.ro de!. mismo fosurrecto ql'le a el le hiri<fl · maM> al s@lcl.ado q:ue [e ayudaba a Ievan.tarse: Munoz, en rapido supreme esflileFz0, se apoder6 del fasil cl.e es'.lie, y e@nsj,guim mata1F a aquel rebelde: m@m.ent@s desptti.'ls, 1 tel valeroso oficial era Feeogi<il.o [i)Qr el ;bravo capi!tan Rambao, q1J.e se ]))US@ al frente de aq1J.e1la seeci6m y la de IBonilla: la mas c0mrple;tra vicfio.Fia se Jogr6 sobre fos. ins,1nil'ect@s d1e «:Vista, ,alegre». La pequefia c0h!un:n.a signicfi
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LA INSURRECO!ON
reconociendo el res.to del caserio hasta el Dep6sito de las aguas, y como por todos lados se presentaban grupos de insuurectos, ]a artilleria, destacada en aquel edificio, y la guardia civil veterana, al man.do de su capitan D. Olegario Diaz,' operaban valerosa y acertadisimamente, ajustandose a las disposiciones del general Echaluce, quien para batir a los rebeldes de Sau Juan del Monte con tan escasa fuerza cual la que disponia, no precisaba fijar su atenci6n en a(!Juellas reglas que se establecen para los combates ofensivos de divisiones ( que es la hierza cuyo mando a su jerarquia correspon.de ), y J?eglas qYe :fiijan los servicios de seguridad, y el c6m@ se :han de formar 1as van.guardias, y el orden de marcha concentrado cuando se espera el ataque, y los reconocimientos preliminares de la acci6n y las r~servas, y qiuienes y c6m0 bian cl.e encargarse de la aeci(m demostrativa y de la
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LA P.fSURRECCI6N
mo fueron los cabecillas juzgados, e inconlinenti se les fusil6. Hicieronss despues 200 prisioneros mas, aim en armas por los alrededores. Nuestras bajas, pocas: Felipe Cella, Jose Tolosa y Juan B. Barbosa se llamaban los soldados peninsulares muertos en aquel combate, y 15 heridos. En distintas direcciones, pero la mayor parte hacia Montalban, corri6 el resto de los insurrectos, no en menor numero de 2.000, que tan completamente fueron batidos por el general segundo cabo. Cuan importante era esta accion, ya se sabia en Manila mientras se libraba; pero el Capitan general, que combinaba, lo repetimos, maravillosamente la pequeftez de los medios de que ilisponia, no habia podido colocar en auxilio del general Echaluoe mas 4ue- 50 hombres en BalicBalic y otros 50 en Sampaloc. En el mismo dia hubo gran revuelta en Pandacam; milagrosamen-
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te salvt'.> su vida, oci!l.Jta1i1dose en. el quizame de SU oonvento, el CU'l'a de aquel pueblo, P. A11eiaarH, pev@ ma,,taron fos 11ebeldes illl.famemente a un -,irtHJl:er@ pero.dnsu.~ar de i1@s tres crue <.\ust@dia.ba1'l er polvorin.. Al pi-o]>io tiem.po n.umerosQs grlllpos 1ile rebeldes se pre~ntaban en las semeli1te·ras que hay entFe Santamesa y·Ma riq•uima, y ma'S numer@sos aY.lil eliJJ Ca11rngan y Maybonga~ barrios de Parte- · ros; est<;>s ultim@s, entre 11ro.a y tres de la madruga~a del mism@ dfa 30, se dirigieron. a Pasig, en: cl!lyc, J;IU:efufo se les agregaron hasta constituir una parUda de 2t.(i)(i)(i) hom1ares, cay@ ob-jetivo fue ocup·a:r el ·c11arbel de la · /S'a ardia civil . Debemos 1·ec@FdaoF liJIUe en este pueblo estaba el dis-tinguidi1simo oficial ST. Sityar al frelil'te <te su seccion; aquel primer tero.iernte ,cuya luminosa denar,icia d'e los Jilrj,,,. /meros d:ias de foliQ sera siempre ti-Jtulo legitim9 de gl@ria pa,r a tan !fu.@n' rado espafiol. Rep1eg6se el ibe!l'ie.a1ie 1
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LA INSURRECCI6S
Sityar con los pocos guardias (j5!) que tenia a sus 6rdenes en la torre de la iglesia parroquia1, logrando dispersar a aquella masa despues de dos horas de vivisimo fuego: en cuatro barcas que de antemano tenian preparadas los rebeldes se llevaron estos los muertos que tuvieron, arrojandolos al agua junto al puente: en el cementerio del pueblo solo se enterraron cinco, conducidos desde Pateros, en donde el sargento de Taguig con diez guardias, y un cabo con seis de los rnismos, enviados por el teniente Sityar, habian sostenido a la entrada del pueblo refriega fuerte coa 200 rebeldes . Los numerosos grupos de insurrectos repartian profusamente proclamas redactadas en tagalo, excitando a los indigenas a lo que ya hemos dicho querian los cabecillas lograr: la tom.a de Manila ; en los arrabales de esta y el'l los 2'1 pueblos que desd@ cuatro kilometros de dis-
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tancia el que men©s, 1lasta 21: el (!J:M:e mas, 00nstiituye11 fa provincia, en todos e1los y en sus barrios an.exos se HbFaban oombates , se lhelllia alg•ttlll en cue:Ii1tro o se notaban ltrifa1cas . 'J. Primeras medidas ad0p,tadas :po·r el Gobierno de la lrfetr6poli. - No se 0
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desconocia tan. en abs0lrl!l.1lo en lspaii.a el malestaF <ifl!le se ex]))eri.mel\l,tailila en. Fi1irinas por la pr(i)paganda de las soci'e(i]ades secretas. 1..@s G0bernadores genei;aies lo lh,abia'lil. C(i)municado : las olases peninsN1ares resiclenites en. el Anhi'f)ieiag@ 1o illil.formaban particula•ri:nen.,te. Los Gobiern.os Jiberales, y muy 1 singl!llarmelillhe el Sr. Abarrnza, Mi~ nistro de Ultramar en. el wdtimo Gabinefe presiclido Jl©r et Sr. Sagasfa, l'llabian expmesfa,l 11@1nrndamen,te s11 , cr.iiterio propio y el del Gobiem!!> cl'e que formama parte, o@Dtrario el.1!, ab- · , sohlto a permi,t ir la mas0nenia e:m. Filipin.as. Cu.an~@ al Go'bierao <!le 10s
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LA tNSURRECCION
conservadores, hacemos igual afirmaci6n, y nosotros, que no hemos tenido ni aqui ni alla mas medios de inquisitiva que los solicitados lo m~s . discretamente que nos ha sido posible, y nunca en altas esferas, hemos logrado saber, por modo cierti&iino, que el Gobierno actual se ocup6 y preocup6 desde su advenimiento al poder de tal asunto; hizo entender a cuantos jefes de 'provincia se destinaban a aquellas islas cuanto interesaba impedir el desarrollo de las sociedades secretas en aquel vasto territorio ,¡ y , sobre todo , aquella Real orden reservada que hemos podido averiguar se dirigio por el senor Castellano, actual Miilistro de Ultramar, en 2 de Julio del afio pr6ximo pasado, al Gobernador general de Filipinas , contiene un perfecto plan trazado para impedir la constituci6n de asociaciones secretas en aquellas islas. Ni desde agui ni desde alla se consentia ning1ma.
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'LA INSURRECCJ6N
juez de guardia, adopt6se una serie de medidas, entre las cuales fueron desde luego conocidas la clausura del Circulo Hispano-Filipino y del Gran Oriente, cuyos centros se hallaban instalados en una misma casa habitaci6n de la calle de Relatores; la detenci6n de los individuos que componian la Junta directiva del citado centro mas6nico; la incaulaci6n de cuantos documentos tenia archivados la seeretaria del mismo, y los registros que la policia practicaba con toda urgencia en diferentes distri tos de esta Corte. Siete individuos de aquel circulo de la calle de Relatores fueron conducidos a la ca.reel p(1blica; todos negaban se dedicasen a trabajos filibusteros, y el Sr. Morayta, haciendo afirmaci6n igual, protestaba de toda suposici6n contraria respecto a el en telegrama fechado en Puigcerda: contra aquel senor habiase tambien dictado auto de prisi6n. "
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El Gobietno, despues de i;ecH.i>ir 1u1 telegranna <!lei 6-oben1ad0F ~em.eraiJi·de Filipinas de focha 2!9 Ag;@sto, en el cua1, en previsi.(m de s(mi0s acontecirnientos, manifestabal0 O(i)nven.iente que creia reforza,r con 1..0(i)O ln@m~»res el ejevcito del Am:ihi wielag(i), ,ac0rd6 enviar inmecl.lia!lamente 2.0(i)O: 'un ba:tf1.H6n de infanteria clie Ma1faa y otro de cazadores, armad0s toclos de Maiiser y bien mmnicionados, remitiend@se acil:emas G.@O(i) fasiles ROOili•Bgtom, mt<!Hil'efo ~eforraacl:o <iJiel 89. Disrrusose, ·ademas, la :im,me<iliata salida del cmcern ls/a de Cuba y ia del !sla de Luz6n para cuand@ estaviese lusto. / En ei teleg;rc\Jma en ~iue el Sr. ,Mia[ I nistro de UEtramar coml!1!mtcaba , Gobernador tales acaerd0s, decia ademas en texto litera:I 10 q:l'le sigurn: «Ap,roli>ada la forma~i6N b-atall6lil V,0luntarios, y el G@biern0 Veria C(i)IJ. gusto se formelil 0'tros, iptres es!E)era mucho del pa~ri(i)tism0 de fos es])at5
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LA TNSURRl!CC16N
residentes en el Archipielago. Âť El Gobierno estaha dispue~to, bien lo ha demostrado, a enviar a Filipi uas inmedialamente cuanto hiciese falta para el restablecirniento de la paz en Filipinas y garan tia de la integridad del territorio; la prensa, la opinion de todos los partidos poniase de su lado para facili tarle todos los medios necesarios y defender Ia causa nacional, sin importar nada los hi.mensos sacrificios que el pais venia haciendo en la guerra de Cuba, sobre la que habia que verter hombres y dinero, como por copioso raudal en que arrnbatadamente corre el agua. La decision de, afrontar la nueva desdicha que nos traia la gran insurrecci6n tagala, no podia aloanzar mas patri6Licas n:ruestras que las hermosas exprnsadas por esta gloriosa naci6n , :poseerlora de tan grandes virtttdes. Ad1nirable espectaculo el ofrecido
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por esta madi;e '{ilaJtti'a, qtrn·, 1Jnabie1ild@ de atemfor e11 la& @J;l@:mrns ,pr©]JO'.E'Ci@nes que ;iltencl.,ia Jia gu.evra (!f o Cl!llli>a; como acailDamos tile meek, Tu.aeia zaF:par descl:e,J@s l[:lllleTtes de Bareel@Ji.la, tcacliz y Ca,rtag;ena, coa dies1:ino al ,,i,e Mantra, no ba:re0s (i!Ye tvansp@rtasen ·1.nil '.l!lii dos iool:i1 'b.@mtbres <ifll'e se e@msiderasem ero. el p.ril'Iiler lil!l@,men..fa!l h>·astantes, sin@ a les va1»@res sigt11ie•N•te& y la f,~rnrza q,ue se e@t4sigllla: CATAUJ'NA
Q,qte SIJ!li:6 eZ 3 de Se:ptiembr.e, c.0n<di1rniendo un ibaitaM6n de i,n ifa.nteri{l. <!te Mairina., 2.2 jefes, iL3 sa,rgen,t0s-, 882 s0lda.d0s. . '.M0NTSERRAT
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8 de Septiwnibre: con 3 jefes, 28 0ficiafes, !25 sa.r:g,entos, [.015 h1divid1:t0s de ti1>o]!)a de
jinfanterfa de Ma,rina y cazacil.0ues. 1
AN'.IJ0N[O LOPE2i
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14 11,e Septi em,bre: 27 0fioiwles, 15 sa,1>gent os, 770 s0ldad0s de iBfanteria. de Ma.rfaia. ISLA l>E iLUZ0N
18 de SeptienilJre: 66 jefes y 0:fieira,le.s, 59 sarge111t0s, l.936 solda.i10s, caiado1>es •
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LA JNSURRECCJ6N
CoL6N 6 de Oct1dwe: 55 j efes y oficiales, 40 sargentos, 1.288 soldados, constituyendo una batP,ria de artilleria y un escuadr6n de caballeria. CoVADONGA 18 de Oct//J,lrte: 6 Jefes, 63 oficiales, 57 sargentos, 1.873 soldados, cazadores. ALFONSO XII 7 de Nortiwib1¡e : Generales Polavieja, Zappino, Lachambre, Cornell, Galbis; 10 jefes, 16 oficiales, 12 sargentos y 639 cazadores, mas 9 oficiales, 10 sargel).tos, 245 soldados infanteria de Marina.
LE6N XIII 12 de No'Diembre: 4 jefes, 32 oficiales, 52 sal!gentos, 1.681 soldados de cazadores. SAN FERNANDO
27 de No'Oiembre: 3 jefes, 26 oficiales, 21 sargentos, 1.042 soldados infanteria de Marina; 2 jefes, 22 oficiales, 28 sargentos y 900 cazadores. ISLA DE MINDANAO
9 l)iciembre: 23 oficiales, 24 sargentos, 1.233 soldados, cazadores.
B·N '.FILIPINAS
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ISLA DE, l'uwz&N
i'l de JJieiemlJre ( desd'e iBa~cerona): 29 jefes -y 0ffoia1Ies, 46 sarge,nt0s; l.6$0 s01~ dad0s. ANT0NQ0 L©PEZ 17 12iciembre ( deslile 'Ellllr,ce!0E.a tamili>ien~: ' 20 jefes y 0ficiales, 29 sa:i:g·erut0s, 1.M4 tS0ldad0s. M0N:11E;v.[•D.E© 18 lJieiemb1·e ( des de W.a[encia) : 35 e:fes y oficilllles, 61 sargent0s, 2.006 so'lda(l:os .
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. MAGM!LANlES
119 JJiei•emlme (desde Cadiz): 43· jefes y oficial.es, "/7 sargent0s, 2.6iJ."l s0rdail:0s. 0©L6N
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20 i/Jicitmibte ( desde Jila1·celona): 3!il jefes
y oficiales, 58 sa11gen,t0s, ~.$23 s0Mad0s.
He aqm: las e~pedoici0n:es en.viaiilas
a FiHpi[laS d'l!lL'an'lle t0s euatiLI© ,meses ultimos de :t89tli, i0s cwatro prim:e:r@s de la insuuecci@.li1 tagab: hem0s t.enido interes enc <iletaUa~la,s ~@ [')(')Sible, y c@n. eUe> enttendemos i•~lilece~ sario adue~1, :IJI}as tiestim@lil~@s relaifiivos a 1a serenidacl: y re,sGlu:eWn c<%1
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LA r.lSURRECCJ6N
que la Metropoli afrontaba, ademas de la guerra de Cuba, las complicaciones aleves que traia la que en el Archipielago filipino presentaban contra la dominacion espafiola los sectarios del Catipunan tagalo. Como no pretendemos, segun hemos dicbo, escribir una cronica lo mas metodica y completa que nos fuese posible de los hechos de la insurreccion tagala, nos limitaremos a nuestros propositos y solamente a grandes rasgos podremos sintetizar, agrupandolos en la correlaci6n que podamos, los principales sucesos. 8. La inswrrecci6n en Cauite. En Cavite, provincia limitrofe, a la voz y vista de la de Manila, la insurrec.cion tagala tomo gr3:ndes proporciones. Esta provincia confina por el Norte con Manila, asi coroo con la de Batangas por el S. y con La Laguna 0
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por el iE., limitat1<d0la p(i)F el 0. fa bahfa y 1,a i.sfa d:e1 <C<!mregid@r. La componen 21 '(i)lilenl0s: Atfonso, Amadeo, Bac~0r, Bailern,, 6Jwrmor11a., Ca\ vite t Ca1pi1taq, Cavite riejo, lmus, ln-, dan, La Caridad, MagaUanes, Ma.ragond6n, Aiierndez JVur~ez, N,a.iG, N0ve.Jfota, Perez Dasmarvrias, Rosario, Santa Gruz, San Roque, San Fmnoisco de Malab6n, Svlarn y Temate. De esbas 21 miaorr@~ quias siete s0n a~ministradas :p0r curas parroc0s irnlfos. Em. las 1:20.@(i)@ h:ecta.i;e&_s de Si\il[l;)ertieie asigmada a esta J!ll'@vin~ia, haHase ter,ren0 ida1r10 en t0'11.0s fos JHte/ bl0s costevos y en algum)S <!lel i,Ii1te~ ri0r: el rest0 soil tienas muy aceitfontad.as, especia[rn.elJlte las <!}'l!le '\l!HMl tenecen a los plileb10s Cfllle se apr0;ximan al Sungay, cuyas verhlen,tes y laderas som casi. i.mtramsâ&#x20AC;˘i,twhlles. En escasa proporcion el abaca, el cacao y el c:afe: a1g0 mas de azl!lcair , y IDUCb:O a¡rroz; estas IS(i)lil fas JH10ducoiones agricolas de ila prnvincia,
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LA .INSURIU!CCIOS
mereciendo tambien especial mencion las hortaJizas y las frutas, entre estas singularisimamente la que se obliene del 11-farigifora fndica, de Linn, pues, en efecto, la mamga de Cavite es , la preferida en todo el Archipielago. Los bosques de esta provincia ofrecen mas de 80 especies frutales, entre las cuales privan el acle, la narra, el bana~i, el canete y el tindalo. En los terminos municipales de Indan, Silan y Maragondon, y aun en los de Alfonso y Bailen, desarrollanse especies frutales muy abundantes en resinas y gomo- resinas de _ excepcional valor; _pero los cavitefios no las explotan ni en poco, ni en mucho, ni en nada. En general, sus aficiones indusLriales no se demuestran alli mas que para el lavado de ropas, de las cuales, por cierto, se quedaron con todas las que en su poder estaban, pertenecientes a la mayor parte de los habitantes de Manila, cuando estall6 la insurreccion.
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Serpean p0r la provincia d.e Cavite rios y arroyos que nacen ea los montes d~ Inda-111 y $i[alil, desembocando qnos en el maF y otr0s en la laguna de Bay. Las comunicaciones entre todos los p1iebl0s de la O"t9sta scm bas,ta1nitie buenas. La provincia tiene zonas nrny pa1(1.dicas: algun0s ptle]J>los s@tll media:namente secos y reg1!Ilann.en1le . sanos. Hay muchas canteras abiertas, pero de piedra Manda y ai-enosa, n.ing11aa dura y compacta. La d0rninaci@n espanola p1¡o<ilig0 ' en la provincia de Cavite 1os medios ; de civrilizad61il y cuitura. Alli cre6 , emtre las emsenadas de Bacoor y de Canacao, un aâ&#x20AC;˘rsenal, sobre superficie de 2.500 rnetrns, con dependencias ariexas (i}Ue a 1alile tos millares d¡e indios han dado pan. y ense.iianzas para que los hijos de , estos lo alGanzasen ea g-mn~es ta,J!le-
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INSURRECCJ6N
res de ebanisteria, piotura, arboladuras, velamenes, armas y herrerias y fuodiciones . Alli, un astillero y dos varaderos para buques de alto y pequefio porte. Alli ; escuelas y hospitales; alli, buenos ec1ificios p1'.lblicos y una gran fabrica de tabacos, antes del desestanco. Imposible parece que en la provincia de Cavite se hayan podido congregar tantos enemigos de la dominaci6n espafiola, y sin embargo, nada mas cierto ser esta comarca la mas levantisca de las islas: la mas maoifiestamente dispuesta a rncibir los dafios de las doctrioas insanas . Las que alli se esparcieron por medio de folletos y de algun peri6dico que mereci6 las censuras eclesiasticas, coincidieron ( si es que no determinaron de por si), COD la insurrecci6n de 20 ge Enero de 1872, movimiento de rebeldia tan. esencialmente separatista como lo es el actual:
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LA INSURRECCION
complot para la matanza de los castilas, que habia de ser llevada a cabo por los presos de la ca.reel de aquella capital. Tao grave conjura fue descubierta la vispera de estallar por una ilustre dama, la senora dona Victorina Crespo, esposa del gobernador senor Parga, que supo habilme.ote obtener en terminos Lan preoisos la delacioo de aquel complot, cuanto que el marido mismo de aquella mujer llamada Pania (Epifania), que iue la delatora, intervino directamente en la compra de armas para distribuir a los presos. Denunciado el hecho al Sr. Parga por su propia esposa, en el acto procedi6 el g-obernador de Cavite a la detenci6n de los comprometidos y sospechosos: se inco6 el proceso. El distinguido nterano general Rizzo fue a Cavite oomo delegado del Capitan general en funciones judiciales, y fueron estas tan activa, tee-
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nica y provechosameL1te desempeil_adas para Ia causa de 1a Patria, que eiJ. dia t2 ,d,e Septiemb:re, es elecir, a h>s diez del acontecimi.e.lil to, se ejecu taban las sentencias d.~ pena de muet路te por el C0nsejo de guerra impuestas a 13 individnos, alil1i@:res de aqu.el c0mplot y princi.pa[es c@lifl:l;)[[;@me'llidos en la rebeli6Iil: los llia@ia eitre ellos muy acandlalados. Para fomnar el cuadr0 ni tr0pas ha.Ma elil Cavite: desde MaFJila aci:11ruieroID. las necesarias; de ellas j@,r maba [!)arte cl.0s D@mpamas de voluID.1ta'rios q,ue iba,ID. a[ rnalildo de su comandante e'l seii0r Hevia. Todo el elemen.,to espafi.01 r>enim.sttla r y los insttfares leales- cl.e Ca:vite, : con. la n@ci61il exaeta de 10 maravi~ 路 Uosamente q11e el descubriimden.t<il de la conjura logrado por la senora de Parga salv6 sus vidas, ben:dicen路 el 1 , nombre de darna tan escla,recida, a la cnal seguraimen,te la Pa,liria 119re-路 miara.
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I.A INSURRECCJON
Los indhiduos pasados por las annas en Cavile eran: Francisco Osorio y :\Jaximo Inocencio, ricos propietarios; Luis Aguado, cootralista; Victoriaoo Luciano, farmaceutico acaudalado; Hugo Perez, medico; Jose Lallana, sastre; Antonie, San Agustin, comerc.iante; Agapito Concha, ' maestro; Eugenio Cabezas, relojero, y los dos alcaides de ]a carcel. A los primeros se les atribuia una fortuna de mas de dos miHones de pesos. Desde las primeras horas de aquel dia 2 de Septiembre a que nos referiamos, la insurrecci6n en Cavite cundi6 como meteoro por todos los pueblos, cual reguero de p6lvora. Los curas parrocos que, arrollados 6 adrnrlidos por algun hoorado feligres, pudieron escapar de las aleves manos de los rebeldes, se presentaron en la capital de la provincia y refirieron tristemente el estado de conflagracion en que quedaban
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EN 1'lbU1!NAS
sus pueblos: arnlil i1in0raba,n tos !Pa_. dres la su.erte de mueh©s de sl!ls lile1'f))laJJ1@s, asesinados htnTi:b'h~lilile1ilifre. €@rt tailes n0ti10ias iruidl!Jse y, se rhaintl'lv@ crecielillte en la <Cali>eee;r a I . 1u1 estaolo de co.li1.~inu.a afairm-a, qiae afr@nta'l'on l@s esJila!Fl.oles }ileni.nsl!l~a.res, coraducietiH!l'o a ias senoras y n,ii~ iios ail Arsenal, ·'IilaFa may.C)r ~a11·<l!mtia de las preci0sas vidas de est0s tiernos seres. Defel.il.derlos C©fl esta rn·edida, era exi ~encia del de1li>er mas y m 1u y 1Nstifii eada: bas ta elemental I P'a.Fa eom1Jl)l/elilcl.erl(j) asi, decir 9e en a<ifl!l,eU@s instan bes, a l0s rnli>eldlils la prIDVilJil.eia fil(il CavHe lil:(l) se poijia oponer e:EJ. ~a ea,]l-idla!l ':prnopiamlil[il,- , /Le l!:1.icha otra resiste.0cia q:ue la'. dlil /diez soldadl:ls de i.n.fambe-ri'a id'e Ma.d 1na, maudaci.L())S i)_:)())I' Ulil. sa,rgel!il•t@, y unos 40 espai1i:@Les a l!Jitlililnlils Jl)f@v.lilylfi d.e fusiles el geNe:ra:I J'efe de1 rneuoio_- . In,ado .Arslilrra!l. iEsta escasa ltl!le•rza Dl!le 1~ que_ pra:ctie0 to~@ el s01:vici()) d~ vi-_ ·_ . _· gllancia y cushod,ia, d:e dta y U:e m0. 1
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LA l~SL'RRBCCl6N
che. en el interior de aquella capital. Poco dcspues ya se vi6 reforzada tan pequena guarnici6n con la llegada de iogenieros al mando del capitan Angosto, y una compaflia de infante.rfa indigena al mando del capitan D. Francisco Cabrera; con ello, y a pesar de lo exiguo de los medios de defensa acumulados, se restableci6 la tranquilidad en aquella plaza. Comenzo la insurreccion de Cavite con el hecho ocurrido en la casa Tribunal de Nove-leta. Sabiendo que en aquel edificio habianse reunido gran masa de indigenas en visibles muestras de agitaci6n, el capitan Jefe de aquella )jnea, D. Antonio Rebolledo, acudi6 con resoluoi6n a aquel lugar, acompanado de cuatro guardias, y creemos que de un sargento. La denodada actitud del capitan Rebolledo, penetrando con tan escasa fuerza en el Tribunal, Ueno de conjurados, a nada generoso indujo
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EN F:ILIPINAS
a estos,
sino que , al reves , s610 vie-
rolil. em a<!J:w~I heroico- hech:0 0easioft
fav0rable para inaugurrar crrnmta segNra alevosfa, y asi · l0 Jllevarnm. a cabo, asesinando vHm.ente a aql!lei hrav0 hon-radisim o oficial: la esp(i)sa y tiemos hi~0s de este maFti,r rueron secuestrad os y conducid0 s a San Fran cisc@ cle MalaMn , y e:n ,{!H-lder de los insurrecto s vivieron 1lasta q11e la divisi0:a Lachamhr e [0s relil.;imi6 del cautiverio och(i) meses despl!les. Dos de 1os g·uaFlil.ias (Jitle ac0J,I1,paiiaban al capitam. Rebo1lelil.o pasa- r@nse a las filas iBSl!lli'rectas en el J_'1·i1mnru. cle .Noveleta, no sabe.lil11(i)S si buen0 6 de ma[ grad0. , A los sublevados de Cavile Viej,(i) e ~mus unieronse ias fuerzas de la,G1aardja civil que cu.bndalil la limea, ~ tlgual fuues ta s1.rnrte que la sufrrida ~ or el capitan l'leh0He(i]l(i) co11JFier(i)R ~otros distinguid@s oficiales ,del m,i slmo instH11t0 , a cuyas famildas asijmismo se ll'evaron cal!lUvas J(i)s re-
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LA INSURRECC!Olf
beldcs. En horripilante descomposici6n, el cadaver de alguno de aquellos valientes oficiales, jefes de secci6n de la Guardia civil de Cavite, em recogido dias despues en las aguas del rio de Imus por la columna al mando del senor general, jefe de Estado :.\fayor, D. Ernesto Aguirre, y e~te bizarro hombre de guerra tribut6 cuidadosa y solemnemente a aquel cadaver, todos cuantos sagrados homenajes permitieron las circunstancias dificiles en que se encoIJ trara: aquel eadaver habia sido el teniente Sr. Chac6n, .otro de los primeros martires de la insurrecci6n tagala. Y tambien el teniente, jefo de la secci6n de Naic, Sr. Perez Herrero, al dirigirse a Noveleta por asuntos del servicio, fue villanamente asesinado, pereciendo en igilal forina, y por segura traici6n de uno de los guardias que le aeompafiaban, el sargento comandante del puesto de
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Quintana, c:uando iba a Sain Fralilcisco de MailaM111J. Los c@nverut0s y las casas-ha:CieJild'<ls de ios ireJligios@s ru,ero·Iil. t(i)fcl'as asa~tadas y saqtteadas GlesQfe el primer m@me-n'l'.o: T@s rebe1des ma' taron C£tlelJisimamem,te afos fuaiiles y legos C/J.il'le afili estah>aa en S'lils h.1.gaJPes de paz y de trafuajo. No l[lesg,]taria . ciertamen'te mayor iiil.b,ilJ.mama 'm.ereza en el mairUrfo srnf,ri:<!1@ el.ill Nagasaki if)Ol' nue:;;'tros sainlllos misi@,lil<M'@S del Jap<im,, que Ia por l@s rehel'1tes de Cavi,'lie pa'1lelil.tiza<il_a, e:m. el martiiri@ hecfu@ sl!lfrit a [©s ,~e~igi.@s@s de <if:.ti1i:efies se. ap0derair@n a<!('lilelt@s ,sa!lvajes / sectarios del Catiipulilan. :Sfon p11li>Hl cos y no1i0rios s@:m, l0s de'llailles d.e . aquellos ccrl1 illeaes ilila:w:cl.i:tos. · Los infames p;v0cederes de fos i-11:surFectos elil fa · comarca Cavitena singularme0,1ie, no ]j)@<ilralJl desaiprutecer d:e la mem@r-ht d!e ~a !Jj)Fes~Ji!jlje y futm·as generncio:m.es eiil aqael f(e}rri1 torio esi{!lailiol, y esos pr@ce(!],e!L'es s@J!l!
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LA JNSURRl!CCION
la caracteristica de la rebeli6n tagala, con todos sus horrores: asi la iniciaron, y mancharon para in ceterwwm con indeleble tacadura. En "los primeros dias de Septiembre, los rebeldes estaban ya apoderad0s de toda la provincia, excepci6n de la capital y los dos pueblos inmediatos, que pueden oonsiderarse barrios anexos. Efectuaron los insurreetos algnna correria a pueblos de las Jimitrofes provincias de la Laguna y Batangas, e insurreecionaron contra la dominacion espafiola otros pueblos y barri0s; pero al mismo tiempo se irradiaba el mal haeia otras regiones, complicandose g:ravemente elil provincias eomo Nueva Eeija, y extendiendose a Batangas, Bataan., Bulacan, Morong y otras, aun.que en menor intensidad. ¡ En Cavite, la rebeli@n podia contar oon elementos muy apr0piados para prodncirla: es de abolengo. ademas de levantisca. crimi11al: el band(l)le-
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. recluto aili.l!i n.l'u.clilai geDte eD l!N '.FII.IPINAS
rismo iod.o tiem:po: Binacayafi e Im1,1,s, espeoiaJmeate, m1t11ievon g1mesas par~i.., ,das Ille tullisan.es, que en m;uebas ocasiones no se limitaban a (i)perar cri' miuosamente demtro d'e aq1rnlrla pro~ vimcia, sino que liJ.aciam corirerias vam1dalicas, maritimas y terrestres, Ji>Or los de MindorID, Bu.lacam y, f>am,panga . Los princip!lles ~efes de la insurrecci6n en Cavite, erari, des:pues de An0.ves B0Iilifacio, tJll!l@ ejen~ia el mando S'lllpremo, Emilio Agwitnaldo, tituJado geirnraHsimID, indio pl!l.ro, jo. vem cl:e vei!.\lJU@Šb.@ a. l!lei,1i111la a,n@s (il'U.e habla mecl:ianamente el castel1ano; natural de CaYi:te Viej0, y ca:J_i)~taa 1 muaicipal de. esfie pu.eM0, n@ tieM bienes de fortuna, pe.ro ven.fa disfru, tando <J_e graa imHl!l.e1,rnia enbre iC>s ind,igenas; es hi1o de Cairl@s Aguinaldo, .hombre que la dis1irl!1b@ tan extensa em ag:u.ellla j uris<illiŠei6m, qu.e, habiendo sid0 mochas ,veces g@Tuern.adorcilfo, cacla vez que v0tvia a 1
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LA I!'fSURRECCI6N
tornar la vara solian los indios del pueblo decir: «Nang bubai uliang panguinong dios» (Ha vuelto a resucitar el Senor). Antiespaflol declarado; ya en 1872 estuvo preso por aquellos sucesos . · l'iene Agt1ina1do ( Emilio) varios hermanos, ejerciendo todos, desde hace muchos aflos, los principales cargos de aquel municipio. Arist6n Vitla,rlllieva, de cincuenta a sesenta aflos de edad, tambien titulad0 general, natural de Noveleta, de cuyo pueblo tambien ha sido gober:aadoroillo; es otro de _los jefes activos de la insurrecci(m: tambi~n es pobre y sin instruccion alguna. El padre de este estu vo en·presidio: lo indt1ltar0n, y las generosidades de la dominaci(m espaflola, perdonandole los anteeedentes _que aquel travieso cavitefio tenia, lo :hizo despues gobernadorcihlo . Otro general de los rebeldes de Cavite es Mariamo Alvarez, hombre de
~N FILIPINAS
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cincuenta afi.os, poco mas 6 memos; vecino y natural Gl.e N0ve1'eta; propietat·io. Tambi~n ha sid0 varias v:eces gobemad(J)FciHo cl.e ali,{l!let ~ll!lel!lb,>; un hi,jo suyo lo era en la actaaliril.ad. IDe es~e nada se [aa,b'.ia 0itill0 de@iir ?omo antiespaiiol; pero su gesti©n. municipal es tac:b.adla de i!f.'11Il:1orailid:ades extensas. Estos eran fois de mas viso , · se puede formar c0m.cept@ dei va[o:r y sigmiJicaci611 de i@s cl'e];lil.aS. Para c@:ntem.eF y veacer la FeheHt>n,. cavite.fia, ei Capitan genera[ nomJbrti al general ID. Diego m,e l@s !Riiro·s, C@;mandan~~ genetal, G(i)bernacl.or mili/far de I.a li):rovimcia y ~laza <ile Cavi1te; este joven Gen.eral es cliglil.oisirno ; hi1o y sucesor de ao(lrnl ilustre 'Fe/ niente general que en tie:n:a de Aini~ , ca, y memorable .gitterra- de 18~(i), / supo grabar en la hi.storia el ya 'liJ.(i)n.r- ro'So apellid(i) qlile Uevara, po,r m@1 do que nacl.ie des<il.e a(i,{•l!l~Has fechas deja de promrnciarlo sirri rendkle
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LA [NSURRECCl 6l'I
el homenaj e de respeto que merece. EI General Rios, en Cavite, no conto ni por un moment o fuerzas bastante s para dominar la insnrrec ci6n acometiendola en sus numerosos lugares, cada inslante mas pe1¡trechado s y defendidos por trineheras y por cuantos medios las malas artes sugieren ; s6lo podia, pues, por entonces aguarda r mayores e indispensables recursos, defendiendo la plaza y sos mas convenie ntes lineas estrategicas para lograrlo. Contra los rebeldes de Cavite fue el dia 3 el muy distingui do Jefe de Estado Mayor General D. Ernesto de Aguirre: asimism o cont6 ¡¡con escasisimas fuerzas; menos aun de las ' calculadas, pues ni los 100 hombres que del Arsenal habia de recibir para reforzar su pequefi.a colctmna pudo obtener, por los sucesos que en aquella plaza habian t(mido lugar; mas asi y todo, aquella fuerza recorri6 la mayor parte de los pueblos de
KN FIL!PlNAS
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la prrovimoia comp11emdidos_eri la rregi6n de Para'Li:aque, Bac&or e Imus,. librando rudo com'bate en los dos frltim.@s, e'Iil, fos gl'la1les hizo 1mme11osas 1:fajas a los enemig;@s, reunidos a mriiUares y akin.cher ados. No llevaba el ieneral Ag1,1irre ruerzas @arra c0mtinuaT la operaoion , ni aun. para in.iciaTla, como valienteme:n.te la iNici'lfi; asi es que hubo de rregrresa.r a Maiil.ita oumplien.d@ 6rdenes st'lperiores, sin duda algtrnia ,ema111adas <il:e la pradencia: n.@ debia esta aut@riza,v sacri,mdos que n.o resolviiain el ca;@. Las fuerzas del gen.e¡r al Aguirre, aviJvadas en sus val'ientes energias p@r este ti-eneral, de verdader o temple para 1a 1guerrra, se }l@rta1100 ml!ly :M en . en aquella jornada, mas corta de lo qae en su dese@ segrnramen.te estaiba. En 1 ella resuLto c@mthso el g,emeral Ag.lil!irre, siendo el fuego tan f@rmida,lille, que bubo en. la coluimina herido e1 cual recibio cinco lila,laz@s: el sargento D. Victorian o Vecido.
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Co,'ntinuan al~os deuailes de la ins11!'vec~ I cion.
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LA INSURRECCIOS
na con las de Nueva Vizcaya, Bulacan, Pangasinan y Pampanga y con el mar Pacifico. Es bastante sana y fertil y de extension superficial capaz para proporcionar la subsistencia a tres veces mas de poblacion que la que contiene: 23 leguas de N. a S. y 34 de Ji:. a 0: 63,29 kilometros y 94,93 respectivamente. En los dias 2, 3 y 4 del mes de Septiembre a que nos referimos, la 1.abecera de esta provincfa, San Isidro, a 101 kil6metros de Manila situado, fue objeto de un furioso ataque de los insurrectos, siendo admirable la conducta alli seguida por las Autoridades, colonia peninsular y las redNcidisimas fuerzas eon que la causa de la _Patria podia contar al1i. Uanera, uno de los mas traviesos cabecillas tagalos, capitan munfoipal de Cabiao y Balmonte, que ejercia el mismo cargo en Gap.in, intentaron oon teson tomar aquella capital: las iuerzas reunidas para tal
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fin por estos _d@¡s rebeldes, sumaban 3.QOJ) hombres. 'EB la tal.lde d'el di,a 2, 500 de est0s, ta mayor )jlarte armadas cl:e airmas blai1i1cas, y Il.(!) melll.os dJ 100 con fasi.les, em marcha acomPll-Sada, precedidos de mt'.1sfoa y band.eras, dirigianse por la ca1le d.e Magallanes hac-ia el Clilartel d.e la Guar4ia civil. En torno del gobernador de la provincia, Sr .. D. Leonardo Vafils, h.abialilse colilgreg¡ad@ t01il0s l.@s 1~oc@s espafioles peE).irnsulaFes qllle al4i :btabia ; resu.eltos estaban estos a -sacri'fiqar sus v.idas al grito de jViva Elspafila! : eiJ! especM.cul@ e-ra conm@'Vedor. Habia ])Odicl:o, el jefe cle la provincia teiegrafiar aJ Capitan general kianifestand0le c@n seren:a exaotitu<il fa gFavedad ole la si-tuaei@Jil. e:n li{:Ue se ~allaban, y el general Blaneo, n@ _ teniendo fuerzas disponililles rpara 1 nviar en. s@c@l'ro <ile a<:J.tie] a fll) @Maci6n amenazaola de li'l-estrucci61il comleta, segun los designios reve1ad@s por l@s insurrectos, invent6 l!lna c0-
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LA INSURRECCJON
lumna de 200 hombres de infanteria, del Dep6sito de transeuntes: <;li6 el mando de esta fuerza a un hombre de condiciones superiores, excepcionales, de indiscutible merito y valor, al comandante Sr. L6pez Arteaga, quien, con su improvisada fuerza, parti6 con_ toda presteza hacia San Isidro. Mientras tanto, en esta capital unos cuantos Guardias civiles, al mando del capitan Sr. Machorro y del primer teniente Sr. Belloto, reiorzados mas tarde con otro oficial jefe de la secci6n del pueblo de San Antonio y cinco guardias, hicieron proezas, justa y entusiastamente por hodos encomiadas. El valeroso capitan Machorro pereci6 en la contienda: en un segundo avance- que hizo con el prop6sito logrado de desalojar a los rebeldes de la casa de un notario, al cual, como a toda su famiiia, aquellos habian herido, saqueando despues la easa y destruido lo que de ella no se llevaban., una
descarga de aquellos fora:gidos produjo al bravo ea,pitan MaG110rr0 lii.e:rida mortal de necesidaill ; a p(i)C@ .'de recibida muri0 tan beNemerit o oficiaL . Sucediole • en el mand@ de aque1 punado ·de guarritias, el ]Jf'imer teniente Bellot0, ya memcio1liado, y el cual habia que9-ado oustodia•nd(i) C(i)D tres 6 cuatro guard.ias ( de los que s6lo uno de eHos p@seia el fusil re~ · glamentario ), los presos <p:ie ha.Ilia en el ,cuartel.; mas a!.\l.ites de ql!te 'el teniente EeJil.oto se encargase de la fuerza r educidisima qme perdia a su. capitan, _el sargent(i) MoNm@, que iba ' con este, despues d~ .r;ecoger a su Jefe, heddo tam. gravemente C(i)ffi@ acaham(i)s de <lech· , c0n!lii nu6 ~@n sus guardias h.acie:ndo nutrililo fttego sobre la"s casas de enfrente a la del citad0 n.otari@; esta la ooupa1 ban los nuesh·os y aquellas los Febeldes, <p.rn al!l.mentaF@I!l em gJJal!l numero aquella rrnche . N@ se·acercar@n
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LA INSURRECCION
estos de nuevo al cuar et por tan pocos defendido; pero asaltaron las residencias oficiales menos el Gobierno, saqueando y robando otras particulares e inceodiando los Juzgados de primera instancia y el de paz, la Promotoria, y llevandose tambien los fondos de la Administracion de Hadenda ptiblica de la provincia, y los de fa casa agencia de la Compania de Tabacos. Cuando los valientes peninsulares y las fuerzas de Belloto temian la explosion de un general incendio en la Cabecera, pues se vi6 que los rebeldes habian preparado dos carros cargados de petroleo para prod ucir dano tan enorme, en la nocbe del 3 llegaron los 200 hombres al mando de Lopez Arteaga a San Isidro: la oportunisima sal vadora entrada de tal oolumna fue sorprendentc para todos, y bendecida por aquellos bravos defensores que la_ causa de la Patrfa tenia en Nueva Ecija.
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EN FU,U,INAS '
Los. L'ebeldes, ame<ilre.nbados, d.iMonse a 1a fuga mas ·cl:eso·rclenafil:a, · y en la que, p@r ser asi,• e-xperirnentaFO'lil :aumerosas bajas. Para proteger et desemfua1rc'i> &t\l fa polumna Arteaga, el esf@rzado g(j)bernador civil de la provincia, St\lfil(i)r 'Valls, que ray.6 a gran altlra en aquellos acontecimi'entos, orden@ .al ten.ielilte :eell@t0 acucliese ~urnrza, y en eiecto, tan va'.lien.te BeU0to com(i)' ei malogrado capitan a qu,ien. Sl!l~t\ldi6 en. ei ma,n.clo, acu.di6 pers©n.-almenrte aoonipan.ado de / tres <JUardias 1 al desempe:i:i.© cil.e sl!JJ coIIrnti<il@. Una hora rile retard0 en e'l arribo·de la eolJumna Arteaga a San 'lsidr@, y pev{il.ida toda espera'l<l.za, a pesa.1· <ile ta,n ta ,valent:ia por parte cil.e 10s n.uestrns; 1 en el instante mismo era <i_!Ue [@s rebeldes ocupa,ban :)>:a la ]>laza y se cliis/ponian a incencl.i.ar la casa Gobii_erno, contra la cual cl.escargaban, n:t!1.ltrido ffuego de fusileria y en. [a · q,ue estai.ba iya concentra<ila toda 1a c@l@n.ia I:Je-
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LA lMSURIU!CCIO!{
ninsular, lleg6 el coman.dante L6pez Arteaga, a quien, con general aplauso, se le ha visto en meses llegar a coronel; result6 este ser para los espafioles peninsulares de Nueva Ecija lo que Bluker para Wellington: lo que seguramente, a no impedirlo un poco de fango, hubiese sido Grouchy para Napole6n I en Waterloo: el unico remedio posible. 2. Otros acaeci1nientos. Una proclama de los rebeldes. Servicios de los voluntarios. EscuadJra y Capita'TI/UL de puerto. - Los buques de guerra sin abandonar posiciones: frente a la costa insurrecta unos, otros estaban en continuo movimiento, y estos (con otros barcos mercantes) transportaban las tropas y vigilaban en todas las aguas del Arcbjpielago . El dia 11 de este mes, t,raian al veterano general Jaramillo, desde Mindanao, con 500 hombres de aquel ejercito, y a pooo fondeaba el ÂŤVillalobosÂť 0
EN ' FILIPIN KS
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conduci-endo fue:tzas de ra Gua,r dia ciwil de Iloilo : ~uimto tarnfrlien llleg6J
el «UrannQ ii, que con mas refiuenos tr.aia al generaf Ri@s, y alg@ mas tarde e1 «Sam. JQa!pilini>, c@n iuerzas de 1a Guardia civil y algmias comJlaiii.ias sueltas, ilesta@alilas en l>as regiones de los ig0rrotes y apaya@s. Es obvio q,l!le f),0:r rnod0 atg·unti li>astaban estos refuerzos; mas c@m@ tQdo en el mum.d0 es Fela,ti¥@, ja ~tegada de los mism@s era in'lleresam.,te y salu<fa.<!1.a c@n geneTai satisfacci6n. Las fuerzas de la Eseuadra, aae- · mas de I@ di.elm, @peraJ'ian sin cesair, t~niend0 a raya a los insuirFectos de t@dos lQs pueMos c0ste_rns, cafi.oneando a los que 0CttJ)labam Lineas de Fl!le,,. gos para nuestreis 1ntql!les, vigiland0 per,fectarnemite el cumf)H.miem.,to d:e , las 6rdenes q,ue cerrabam la Ill:a¥egaf i<f>n de distimtas z;@:ro:as, C(i)JlilO la c@m[Prendida entre el aFsenal de Cavite y racoor, y aparte de t0a.0s est0s senrrios, hacian desemba11cos l))ara ]l)atiF-
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LA INSURRECCION
seen tierra firme, segun muchas veces lo efectnaban, e impedian el paso que a los rebeldes tanto interesaba tener libre, el del mar de Mindoro, que limita aquella isla extensisima (de 8.000 kil6metros cuadrados) sin comunicaciones interiores que no sean peligrosas y terreno tan accidentado que habria hecho dificilisima la persecuci6n de los rebeldes que alli se guareciesen ; los barcos de guerra; ademas , cruzaban de continuo, no s6lo por las extensas costas de Luz6n, sino por todas las del Sur del Archipielago, para impedir el desembarco de los auxilios que pudieran recibir y esperaban los insurrectos. Sosteniendo estos, por cuantos medios a su alcance estaban, la propaganda activa que venian haciendo con objeto de generalizar la insurrecci6n en estos mismos dias, diri- _ gieron a los soldados indigenas una proclama, en la coal, un ejemplar
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por los nuestros arrancailo de 1.Io.E1. p@ste de barricada muy inm.ecl..iato a I)jnus, decia lo siguiem.te: , «C01it,paneros: ya vei.s la desgiracia >rque nos amenaza; matad a los jefos >1castilas, y si 110 lo haceis asi, a nos>>otr@s nos m.ata,FaB. » El texto era tagalo, dioiencl@ liite~ ralmente: ccCa p11a tagalog damd'ar111i1 a,m.g ami,n . »lfaaday. Pata1in ang }ili.0.u.1!1 ny alt »cum,-hiodi tag,urin an.g· magca ma»tayan. >) . En los 'lil1ismos pdmeros clias oJ.g Septiembre las fJueFzas v@1U!ataFias completaba.a SU orga.nizaci6n, cc,msitituyendo lllD elem.en.t@ al!lxiliar de '.g;ran valfa, Jilarn el Eljere~t@. L@s ,Y@'l untarios dispuha•li>anse C@l!l entusiaslmo pabri6tico admirable l@s servicios a l@s que se les Stup@ni;t 11n1as riesgos, y presta!ba,n 'hasta fos qllre de ellos no se demandabal.i1: pra<:H11cando un reconootmient@, iban a las IPin~s y Pa,raiiaqtte l@s w:oluntairi@s
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INSURRECCI6N
de Caballeria a las 6rdenes de su primer jefe el limo. Sr. D. Javier Bores Romero, y al encontrar un convoy de municiones destinado a las fuerzas del general Aguirre, esponhaneamente ofrecieronse aquellos a auxiliar su custodia, y efectuandolo asi, al dia siguiente de prestado aquel servicio el Director general de Administraci6n civil recibia el siguiente documento: «El Intel'ldente militar de las is»las Filipinas- B. L. M. al limo. »Sr. D. Javier Bores y Romero y »tiene la inmensa satisfaeci6n de »expresarle, como jefe del brillante »escuadr6n de volunta.Fios que man»da, el rec0nocimiento que le em»barga, asi como a todos los jefes y »oficiales del Cuerp0 de Administra»ci6n militar, por la decidida e im»portan:tisima proteeci6n que, tanto »en el convoy de municiones que »ayer sali6 para las fuerzas que »operan al mancl.@del Excmo. Sr. Ge-
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LA 1:SSUllRECCJ6N
Sr. D. Joaquin Lazaga, que lo era del puerto de Manila a la vez que comandante de Marina de la provincia : este teslimonio era irrecusable. La Capitania de puerlo de la cal}ital de las islas estaba al frente en tal tiempo, como durante toda la compaiia viene estandolo, de interesantisimos servicios para la causa de la Patria. Con la vigilancia no mas a que la obligan 12 6 15.000 individuos (no seran menos), los indigenas que forman las dotaciones de los buques surtos en las aguas de su jurisdicci6n, tiene, en circunstancias como las actuales, labor bastante para ocupaci6n provechosa indispensable al orden publico. El senor Lazaga trabaj6 alli lo incalculable; es justo declararlo. Las corporaciones religiosas, los Cuerpos de voluntarios, el Casino espafiol, los comerciantes, los particulares, todos pot' propio nobilisimo patri6tico impulso, hacian donativos
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im}')ortantes en metalico, viveres. tabacos, Ulilif@rm:es, b;tlilderas 'Y estandairtes para fas iueFzas del !Eje.roito y las vollwlilfarias. Era me 'Et@tar ~1 inte1.1es que t(rnian de :fi.g,1na1¡ entire \os patri(i)tas donantes, peni.nsulares ~ insulares, algunos i:n1!Mgenas mestizos de gran caudaJ. que taliil.bien ~O11cu:rrier01.1 c0n sus oiool.(i)s a, aq,uella explosiâ&#x2014;&#x160;n de sentimientos de gener@sidad, ,pem correspomd1iencl:@ s:i!_n dl!lda los natu:rales a qui,en.es a111d.imos a i@s de la politica solapa.da, Ji>r0'tl.t@ se les vi0 aprisionad@s }')Or complicidad elil 1a renehl6n .. Pou la presidencia <ile la Audielilcia, o mismo que por la Oirecci@a general de . AdI10i1nistraci0n civit, Intendencia general d'e Hacienda publica y las <ilepeL1dencias J'>Poviaeiafos y locales, dictabanse decret@s y 6rde!iles de destituci6,D de sus ca['gt(i)S a muchos empleados suballerlilOS ilil. digenas, CfUe ilban resu.litan.do complicados en los suces0s.
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LA DISURJU!CCl6N
Y gran numero de estos, a la vez que otros indigenas adinerados, duefios de establecimientos mercantiles, armadores, industriales y propietagios, eran detenidos y elevadas a prisi6n sus detenciones. Docenas de docenas de Jueces de paz, maestros, escribientes y auxiliares de las dependencias del Estado, sufrian esta penalidad, que ell muehos casos se hiciera mayor por sentencia firme de los Tribnnales. Grave <Wnjura descmbierta en la Cabecera de Camarines, Nueva Caceres, determinaba la detenci6n y con- . ducci6n a Manila en el vapor Isarog, de aquel Notario tan conocido y acaudalado, B. Manuel Abella, el cual rendia exteriormente todo respeto y homenaje a los castilas, fiel a la politica solapada, puesto que en privado, siempre ilos irijuri6. Con este fue pres(') su hijo y tambien condncido a la capital ¡ deL Archiipielago, acompafia<iio de Tom.as Prieto,
EN FILIPINAS
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Floren.cio Lerma y otros CQ!llJi)li@ados. Pgr cmnpensador eam:bio, otFos iµdigenas, eom@ D. Maurn ll:eyes, capiM.n munici,p al de Pi;ned'a, eviden.ciaban su lealtad, y se veia.n en ltos misrmos dias condecoraclos c@n }a cruz del Merito rrnili.ta,1· y civil {i)Or sus honrad.0s servicios . La Orden de San Agl'lstin cedao al escuadr6n «Voluntari€ls de Manila», para su i.nstaiacio:n en el ;n;iism.o, el edificio q,crn recien.,tlemen.te ilii.a1b!ia cgnstru1d'@, rile herm@s@s diame'tJF@s, · cbncordan.,'tes con la m.agiNitud de los que hace siglos osteB.ta e1 historico convento de San Agustin, al /cual esta unido el grandioso l@eail. a · ql!le Dos Feforim.os. El Sr. General 'Bianco ampli6 el plazo de induit@ eoncedido a los rebeldes, y como ta,l medida corresponde a un sistema que los tie,n e .@puest@s, n,ada tiene de exitFa,n.o el liJ.eeho de que faese distin,if:amente apreciada pgr uno~s y p@r otros ;
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LA INSURRECCI6N
ibanse conociendo los crueles detalles de los crimenes cometidos en las personas de los Religiosos sorprendidos en las Parroquias y casas-haciendas de Cavite, y la justa exallaci6n de los animos contra tantas infamias, no abonaba gran disposici6n del juicio para ponderar ventajosamente la eficacia de disposici6n alguna que expresase lenidades 6 blandura muy propias de los magnanimos sentimientos de nuestra raza, por lo esencialmente cristiana, faeil:mente olvidadiza de los mayores agravios que recibe, pero obligada a recibir las lecciones de la experiencia. Continuaban, y en aumento, los hechos de guerra: Una pequefia columna, al mando del capitan D. Antonio Bernardez, sostuvo duro combate en Silang. Aquella fuerza, para castigar a los rebeldes del citado pueblo, habia ido por Biiiaa, cuyo capitan municipal, con 20 indige-nas. leales, acorn-
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pailo a la coll!l~Tila, y co1il. es'la se -ba-
tio afjuel l\t@nFad@ FrHlliliCi'F)e, n·asta ei/ue 1ulf ])'L'6;Yecti11 !il.e s'l!ls :i;elilet,fos paisaJilos de Siiamg le cl'e1 jdl m.ll!ledo, ~uestra ]_l)e(;J}Lrniiia C(i)i111m,na: <!lesai@j6 ~e sus posici@nes al. e,lilemig@, caa~amlole 58 muerhos y mas de 200 heL'idos: £1 de fos prime:v(i)s y; 20 Ide i@s segun<!los buv0 la' c@lm1mna m;aifilffl'alila por el v:aler@S© capiMlil Beri&a,Fdez, P0r esta f1rnvza se S\i!\Jj)@ liletaMadamente rlle q11u~ suerfie i.ii.ahfalil 1@s de Silang a:sesinad@ ail 'lieni ente d:e itir Gfuanlia civi.l de aq-1rnl11a se00i1if>lll, y a l(!)s gfila,l '(ras (jfl!le C0lil ·se fllaillliOOJ ' fuech._o faertes en. [la t©rre <'le la
er
,f' glesia. Llegan ai Manifa, iIDgm~sa,md@ elil
la ca.reel de 'Biiliibid, hos sed'ici@s©S pr@cedeliltes de la p!11@WiID.cfa !il:e iJ..a Uni6n. Ea la mism.a fecfu,a, dg de Sei>l iemillre, coa resl!lrrlad0s mllly; fa,v orales se practico w.1a Feconocil!IIDieBti0 sobre Ins p@sici<!lnes de N@\Ve'leta ~Ca-
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LA JNSURRl!CCI6N
vile) . Llev6 a cabo esta operaci6n imporlante, apoyada por una compafiia de ingenieros al mando del capitan Angosto, una comision compuesta del comandante de artilleria D. Joaquin Arespacochaga, el de igual clase de ingenieres Sr. Urbina, y el capitan de Estado Mayor Sr. Zuloaga, con una compafiia de ingenieros. Al rebasar el pueblo de San Roque, hall6se esta reducida columna con 1.200 insurrectos: el choque fue muy duro. Los valientes ingenieros aguerridos en Mindanao lucharon c@mo huenos, y el caft.onero Leyte, apoyandolos, envi6 tan certera metralla sob re los rebel des, que las bajas sufridas por estos fueron numerosas. Las sensibles experimentadas por los n.uestros fueron el comandante senor Urbina, gravemente herido de dos balaws, y siete individruos de tropa . ¡ Hizose justicia cabal al merito contraido en aquel dia por el comandante jefe de la Šornisi6n, sefior
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ccManila 18 de Sep6iembre de 1896.
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iR:eswltand(j) hal1awse wr0cesalil@ €ll Sr. D. Francisco l,. iffi.nas, C@nseje:uo honoritico de Ad1mtn,istraeii/Jn, €llil us0 de las fu.cultad'es dl'€l eyu€l me ha~ hl0 iF1.vestido, velilg@ en dJis,p>@l.i1e,r liJ;l>Ie ces€l ett el ejereicio d.€l sus funcio®:es, · sin perj,l!lliei@ de Ila Pes@lillci@Iil l!l]ll€lri@r crue arit@pte -el Gohiern© de~- M., ail q,0.e dare · c~enta @p.@ ·rt1!1Jilaililllen-te Ile esta: mecl.M.a. - C@IililiN!ill.iqMse y ~l!l'bliquese. - Bfoffwo. I
D. FraBcisco R0:x:as e_sta1ba ~a, C(!)J1lj . otros much0s pri,nci!f)aies ru.e Ma-Bi~a, preso em la !Fnerza. ::: Al pFopio lliemp(i) iF1digemas me i11eativa p0sici@lil s©cial @an dete&,ilii©s . . ea v:arias provincias ]j)F@Kimas, y, el!!,
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LA INSURRECCJ6N
esta fecha misma, Ia del decreto anterior, venian a Manila ¡l4 complicados de Batangas. 3. Decretos del Gobierno general sobre embargo de bienes. - Arreciando el mal, procurabase por todo medio curarlo, y la Gaeeta del 21 contenia el importante decreto que literalmente transcribimos y que dice asi: El curso de los actuales acontecimientos hace fundadamente suponer . que se fomenta la rebeli6n con medios 6 recursos materiales de personas que directa 6 indirectamente cooperan a este delito, y en ateiicion a que es priocipio esencial de defensa y necesidad urgente impedir que este estado de cosas continue, en USQ de las facultades de que estoy investido, veogo en ordenar lo siguiente: ArtiCldo 1. Se decreta el embargo de los bienes de toda clase pertenecientes a las personas que constase se hallasen incorporadas a los re0
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EN FILIPINA-S
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beldes y de las , que eD cualqrnier, concepto sirvan a la cal!l,sa <ile fa msurrecci6n, ya residalil en. e1 extiranjero o en territoTio naei:01,1al. , ,»Art 2. Los frnhos y ren.tas de tos expresados bienes se cdmsideraran. aplicados a gastos <le gueFra mientras otra cosa n.o se dispoml?;a, y sus dnefl(i)s sin derech0 a i·eclamaci6n de ninguna c1ase. »A!L't. 3. No se !L'eputara vaJida ning,mia traBsmisi6N <ile derechos reales relati va a los bienes <ile fos rebeldes, Bi-contratQ alg1nil,(i) que recaiga sobre los '@TO&l'l.C'll(i)S de l@s mlis,mos bienes despues de la pnblieacien de este decreto. i »ArL. 4. La, al'l.rtoridatl SU[fl)eri0r militar de estas islas queda facu-1tada para designar las pers0F1as en cu~os l5ienes haya de trabarse el em1:iargo, previos l<ils iID.jjorroes q1rn eon~ dere necesarios, y ;para adop'llai' fas edidas condtlcentes a dicl:rn iffi.n. >>Art. 5. Los rebeldes <i£l!le se acorn 0
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LA JNS tiRRECCJON
jan y sometan a las autoridades en el plazo que fije el bando que dictara al efecto la autoridad militar, quedaran ex.imidos del embargo de sus bienes. Art. 6. Este Gobierno general dictara las disposiciones oportunas para la ejecucion del presente decreto . »Publiquese y comuniquese. »Manila, 20 de Septiembre de 1896. - Ra,m6n Blanco. » Y el dia 25 de este mismo mes se publicaba el decreto complernentario de aquel, y que literalmente dice asi: _ 0
«Gobierno general de Filipinas. ii Manila
25 de Septiembre de 1896.
En atencion a los motivos de mi decreto de 20 del corriente, sobre embargo de bienes a los rebeldes e infidentes, y como complemento del mismo, vengo en dispon.er lo siguiente: 11
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EN F~Ll1'IN'AS
. »Artieu'lo tE . iffilil virilm.d d@ fa fa:cultad coF10@dii<ila a[ Ca,)iliitam g·em1:mailJ die estas Is~as, p@il! el aFli. 4. !!l!e mi liliecreb@ de 2/il del acblaa[, <iliidfu.a au1l0Fiidacl' me pr0po'I:lru.1Ya las [li)e·rs0.mas @ : Jl!l:y-0s IJ\Jienes haya d'e trabat'se @i (Mm1. barg0 a f\{Ue el I.\D.,tstno d:e0reto se re- . mere. »Art. 2. L0s gast@s a <iJ:lile se c0:mitrae el art. 2. de1 citado dee!L'et@, 's eraa, ademas de l(i)S de g;uer£a, fas ,. i ndem.1illi,iacioEJes die has dfal!i.@s ca~sad@s (m cumpli:JJ.i1,in'fl0 <ile @r<½eus (de }a:s a,1mtor,idades y iJefes milUa1les, a,s,f 9~m@ 10s g;as1l@s (ij•M@ I!l.iH'>t,i:v:e la ejecneiom de e.ste · y <tel a,mltle,ri@r deeret@: I »Art. 3. L@s <ilafu:@s '<qae sea,11 J11>r!)duoid0s por aceidien.tes de la gae'rra, ineviitaMes .@ f@,r~tL<i.'b@s y ,l(i)s cica · sfo!ilados ri011 foe rzas re'beldles, m,@ serarr· 0liljeto de irn½efl!ln,izaciifm, poipaite del Esfia·d@. _ >> Art. 4. La at1:E1lac,i:0m a qUJe' se 11efiere el art. 3. dei decil'ehcl de 2(i) del a01mal, coflil:;preHdelia: las 'ewaj,emaci0a: 0
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nes, Lransmisiones, gravamenes, y los demas contratos 6 actos realizados desde la citada fecha sobre los bienes, derechos y acciones que deban ser embargados, en cuanto de cualquier manera puedan dificultar 6 hacer ilusorio el embargo. »Art. 5. Para llevar a efecto el embargo y administraci6n de bienes de que se trata, se aprueba Ia adjunta lnstrucci6n. »Art. 6. Para Ia ejecuci6n de los · decretos y de su Instrucci6n, se crea en estas Islas una Junta que se titulara << Administradora de los bienes embargados por rebeli6n e infideneia >>. » Art. 7. La expresada Junta se compondra de un presidente, que lo sera el General S'egundo cabo de estas Islas, y de once vocales, que lo seran : el Ilmo. Sr. D. Gaspar Castafios, fiscal de la Audien.cia territorial ·ae Manila; el Excmo . Sr. D. Jose G:rego:rio R0cha, propietario; el Hus0
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trisimo Sr . .D. Venanci:0 13an,as, director del BanM espan.01 fUirpi'Il@; eI I,l mo. Sr. D. Joaqmin Santama1·ina, ~ndustria1; D. Valentim, Te.tis, c0Jmlercjante; 0. A1mt0Rio' Correa, Administrador de la Compafiia general de Tabaeos de Fu.ipioas; el 11Dlil@. senor D. Jose Moreno Lacane, decamo d'ei Colegio de A~ogados de .Manila; el Hmo. Sr. D. l\faat.rnl delJ. Bl!lsto, iiJ-. rector de la Escueia Agrcm@mica; el llmo. Sr. D. Aurelio Ferrer, ordenador gen.e:rai de pagos; e'l !limo. sefi.@r D. Luois Sein-Echaluce, segunclo jefe de la Secretada de este Gobierlil@ general; D. Lllis de la ·P1.rnn,te y Olea, 1Ietrado consl!lUor de la Intendencia general de iflacienda, y ID. Jose /Munoz Repiso, tenien.te auditor lil.e ,Gl!lerra. / >>Art. 8. 0 ta ~umta 1lentlt1;a 0.0s s·ecretarios, elegid@s de ent\re sus v@«a1Ies, y el personal auxHi:ar y sl!1ha~terfno ~ue la misma J tJmta deterrni'lil:ara . I,y nombrara. .
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LA JNSURRl!CCJ6N
i,Art. 9. El dia siguiente al de la publicaci6n de esle Decreto, se constituira la Junta, eligiendo los secrelarios y organizando la dependencia. ÂťPubliquese y comunique se.-Ra0
m6n Blanco. Âť
Estos decretos y su adjetiva instrucci6n fueron tambien objeto, no de conlroversias ruidosas ni de acaloradas discusiones, porque bueno es no olvidar de que suerte, a pesar de las impresionabilidades de nuestra raza y de nuestra versatilidad constilutiva, son respetados y cumplidos por los espaii.oles peninsulares de nuestras provincias de Ultramar, cuantos prMeptos dictan las superiores autoridades de las rnismas; pero en analisis y critiea prudenles alguien consideraba tales disposicion.es completa:mente innecesarias, en atenci6n a que coR solo la aplicaci6n de las contenidas en el C6digo de Justicia militar, se lograba
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1,
com,ignar la parlicipaci6n de cada procesado en los mismos, habrian de adoptar las precauciones que la ley determina, a fin de que las responsabilidades no resultasen ilusorias, embargando al efecto los bienes de los encartados en cada sumaria; esto es ni mas ni menos lo que diariamente se hace en los diferentes delitos que se cometen; la diferencia esta exclusiYamente en que si en un delito de lesiones menos gra ,¡es, por ejemplo, se da lugar a una responsabilidad civil insignificante que quede asegurada con el embargo de bienes en escasa cuantia, en un delito de rebeli6n que impone a la patria tan cuantiosos sacrificios pecuniarios, debe desde luego procederse de una manera radical al embargo de todos los bienes que se hallen con relacion a todos y cada uno de los procesados. Pero es que ademas de esto, -el primer decreto de embargo por el
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Sr. General Blanco dictado, resulta1
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ha menos eficaz, porque se referia
solo a las reatas, por l@ cual se 00n.seguia con s11 aplicacion IiF.lillCh(i) menos de lo que logrado se htlbiera _ con la aplicaci6 n usual y corrielilte . del C6digo penal, ya que segun las disposicioiiles de este, una vez que Ta sentenci'a fuera firme, se pr@cederia contra los bienes mismos embargados1 realizando su veata · e ingresando su imp0rte en las areas del publico Tesoro ; asi es como esta se hubieva resarcid0 en alg·o de los g·ast0s extraovd inar.ios y ·e11ormes de la guerra, y ademas b.ubiera privado de recursos a los berede:J10s y del!ldos de los condenados, · que probabie mente fos empleari an en lucha coril:r.a fa les hi0ie; 1Patria, segulil sus p.rinci1Pa1 ran', en una o en otra forma. ' 4. Refiberzos del vnterri0r. Oflros ;combates. Bendici6n y jwra de las ban!deras de los voluntarios. La m(1frina de 0
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LA INSUJUU:CC16N
guerra. Nuevos documentos referentes al Catipunan. Pteparati1:os para reeibir las tropas procedentes de la Penlnsula,Sucedianse los encuentros, en los que siempre nuestras armas eran las victoriosas; mas no cesaban los insurrectos en s1,1s empefios, ni los laborantes en sus maquinaciones. En la divisoria de Manila y Cavite, diariamente las fuerzas alli destacadas se batian al practicar los reconocimientos; lo mismo acontecia en la linea de Caloocan-Tarnbobong, en donde el destacamento de ingenieros tenia a raya a los rebeldes de aquella comarca desde Balintanac a Ba~za; entre estos se acariciaba de continuo el plan de caer sob1¡e Manila, especialmente sohre Tondo, con el fin de poner en libertad los 1.300 6 1.500 presos de Bili:bid, cttya caFcel y presidio cnstodiabaFl fuerzas del ej~rnito y patrullas de volu.Dtarios . Tan pr0L1to ~omo llegarem los reftierzos que era posible obteL1er del
EN FJ'b!PINAS
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interior del Archipielago, et geMra1l Blanco iba 0cuparnft@ las J;lro;yti:noias centi;ales _para exting'ttir l@s focos de reber 6lil , y comemzalba a acerca,:rfuerzas hacia Cavicte, para iocaH~arla en aquella pr@vim.cia . , Apenas lleg6 el geRerail lammiUo cotl las lr@pas qae v:e,mian c@J.il el de Mindanao, salfa en direcci<i>a dell Sur de Cavite con el fin cl.e irnrp>erliiF se corrieram l0s rebeldes eM acifue1 sentido: lm 1>ataM@lil se s,iitualli>a ea Santo Domingo c0m igual fin i[i)Or Ia p.arte de Siiang: el Leyte vigilaba ta c@sta, caii0neand@ al em.ero,i1g0 y (!testruyend.@ las emli>arcacioaes meno:ves ~e que este disponia: el punto de acceso hacia Ma@Ha y Ba[acalil estali)a . 1ebidame'.l'lte custodiacl'o. ¡' , J Continuarban. e:0. los ,11mmos dias de e'ste mes .haciendose pi,:isiones de complicados eR la ms1,rnrecci0m, y se 1 n.viaToR dos exped,icioaes de cile]JOFados a Ca,roliJias y al Slllf del Arc'hiielag@. 1
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I.A INSURRECCION
Fueron fusilados los cabecillas del movimiento de San Juan dcl Monte, Sancho Valenzuela, Eugenio Silvestre, l\1odesto Sarmiento y Ramon Peralta. Las protestas de patriotismo y adhesi6n que a las autoridades elevaban los pueblos, eran muy numerosas, y habrian resultado decididamente compensador consuelo de la amargura que aquel movimiento¡ insurreccional tan extraiio causara, si hubiera sido licito conceder a todas aquellas manifestaciones el valor absoluto de la espontaneidad patri6tica, porque no tuvieran precedentes de decepciones, como las hubo, y no escasas, tail.to en Manila cuanto en las demas provincias tagalas. Forzoso era, aunque asimismo digno de estimaci6n, juzgar con igual criterio de recelo aquellos entusiastas recibimientos que los indigenas hacian a nuestras columnas, exterioridades agradables con las que no
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cqncorcl.arolil sitHl'l;J!)l'@ ullteriores 'actihides. · :Tres oo,;m.ha,tes ~~0rta,m~es, gh!)rios@s par:a lllllJ.esitmis arma&; mh:r.ii'ronse elll. .la pr0v~m,eia de !Elat , eh los pNebllois <!);e T:i,'ty, tial!l y ail.ii,,. sa:y. Si: Gl<t:1ro y vfol01d0S(i) :1))81Im l(i)S mrtiestros fu.E3 el que se ili:hro ipn. eil fl!):rimero, el de Lian ~g;~ [Pagima bril/lia,:n- ' te. Con 'W h0mib:Pes •resisti:@ el ca;,e, pitan Artii®.alll@ :liter.a a©(i)me'llidla d:e 2.(i)@(j) insmrrec1ios de Ca¥iite; cmue ellltra!liia-m en: iffiafalilgas a sl!ll\i~evrur [a: provincia. ~e[ll)leg:alilia fa ifil!ferza de· Artiinam.o e;m, la casa-lil.a:cieBcl.a <ile $alill 3/ose, sa,frio ltres <½fas lt1e asedio, cal!t~and© muclilas l-iafas aJ.@lileiID'.il:i•g@. Dos 'p,om.rad0s p<tnins•wlares, qu.e ~a:mifuten replegados en aqru.@[fila oasa-hacie:m:<ila ~e ba~ian con <,hmaed0 at ladl.0 ele Air~ " fiano, fiueTOi!l tal!l gravemelllifie heri(i)S, que amb@s s11e·tflO'Jlil,IDiei·@!F} fl)©@0s fas d.esin1~s de ser c01I1ducid,~s a· ,a:i:ii,la. 'Fuerzas al ru,aml:o <le1 ~e-lil.iem,e coronet Ri[!(i)ll lev,a(li)Jiat1r(i)lil ei si,ti(i) ·
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LA INSURREOC16N
de Lian, batiendo y dispersaodo a los rebeldes, que en precipitada fuga corrieron hacia el Sungay. En Talisay hubo tambien refiida accion en la que fue berido el teniente coronel Sr. Heredia, y en la misma zona sucumbi6 un honrado militar, bijo de aquel pais, natural de la Pampanga, el bizarro capitan D. Agustin Blanco Leyson, que perseguia a los rebeldes despues de haberlos desalojado del barrio de Magat, correspondiente a Tananan. Los rumores cundidos sobre alteracion del orden en las Bisayas habian producido gran alarma; pero por fortuna desapareci6 esta al conocerse como imico fundamento de aquellos el hecho de haber sido batida por completo por fuerzas tie la Guardia civil gruesa partiida de mal~ lu~chores que babian atacado el pueblo de Passi en J!loilo. Digna de todo encomio era la conducta seguida en estas azar<'>sas circnns'ta.neias por los
EN ~HJIPINAS
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hahita:Dtes, de a!\{11iel te,L'ri11io:ri(i), y Sililgl!l~a-rmemite los de fa . eapiltaJ, creamdo f.uerzas v@lla.1n1ba,J[ias de fas cl!lal es m}n bata!H6 m se desmii oa_ba a L'1!11JO[i),. ta ~esti@n diel g0bermari1.:())[' F. M. <il:e -~(iJnel[ a l)f(i)'Vinc-ia, Sc D. Ricardlb J)'l(irn.et, eomnel jefe .de afi,!;uel ibe11ei(i) de la 6-uardica pLvi[, asilil!l.iSl'I1l(i) eya jl'lstaroenfie ail_ aba<lla y 1rnmy riligma d'e eDcomio ia aloou.ei@'ID. €(•Ille dlir,igi@ a sus sub(i)r(i}iua(i}0~ . En los m[bim©s clias ,de Sei1l)tielililibre encl!lent1ros y e01Jllil l!>ates en Mariqru,i.,, n,a, Muntin~l!IJ:lfl' y o!Jr,os Jirnm•t(i)S OOl!4'lS o, menos il.ilmediait0·s a ~as !llineas cl,e <DavHe. El dfa 3@ S(i)Sbl!lv0se p@r et eapitan 'Du:ra:n, de la 6ua1·<ilii.a eivill qie la de Manila, lill.0 dle illOOllJ))@r tamcia ~n rebeMes Gl:e Sa,m M:a:te(') y !Eos@boso, _qiue ,se haili> iaR pu.esfo I lJmj@ la «iJlirecoi@m de los de E!J.,11rnmgiom'a,m, sa~ . (!ftteand@ el .J_i)uefu'l@ de Caimfa, .de 0u.yo tFiilill!liID:atl se _t1eva•r©N foel'as· ias 1
. armas. _ Apoderabamse l@s iDs•uFreo1i@s q11,1 e
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LA INSURRECCI6N
habfa en estos puntos, asi como los que salian de Ca-rite por la parte de Silang, de cuanto les fuese util, y por ello robaban lo queen las haciendas de los particulares habia; de la que en el barrio de i\lamuit (Calamba) posee el laborioso industrial don Miguel Amatriain, espafiol peninsular, yecino de Manila, secuestraron los rebeldes al administrador de la misma Sr. Martinez, habiendose pasado ¡ a los insurreclos los mismos colonos de la hacienda, que no eran menos de 300, y llevandose a Silang 200 cabezas de ganado vacuno queen aquella finca habia: muchos millares de reses robaron los rebeldes por las inmediaciones de Ja provincia de Ca vite, concentrandolas en la zona en que se habian hecbo iuertes y de la que ereyeron sin du:da no ser desalojados 'jamas. Verific6se el domingo 27 la solemne cewmonia de la bendici6n y jura de ban.deras de los voluntarios
EN FllLIPINA§
d'e Manilla: ya hemos sinteti1ZaCil:o e1 3;e0ntecimieni0 en otcas :pagi.1'1:as, a.l hablar <il:e la ereaciibn cl..e esil\as fa!leL'~as ®acicmaaes . 'Jieri:i1ill',nad0 en estas - [eclrras m-ismas et emplaza,mient(i) cle [a ait1tiUetia Witworht y Krupp sobrre fos li>a:llllartes tle Cawilte, Ma.nib percillilia dliarfamente el vivo ca,iii@Ae@, ~lite tao.to desde ac;iueUas li>amerias, eua,nt@ desde los b11ques surtos en aql!le~ puertQ, se desca1rgaTua S(!);bre 1(j)s jill!leblos i1:1stffreot(j)s <!le Nove4e-ta, Cav.ife Viej@ y iIBac@@r. L(j)S servicios de i!,a mairina ille gNerra en las agaas (llel .Archtill))iMag0, p'l'airi muy seiiia1lados Em fa actu.aiL ip,13u.r1Teccion tagala : n0 ,selo l.(j)s gra1:1- _ /des 'baroos, srin(j) trod0s, hast.a las la,a J(l,has: la Gtwlor.a, de 317 tom.etadas, ea~ 1saha. con 10s disparos eertev@s ol.e ~u fpequeiiia ametrallad0ra N@,rdl@mJeiit, mucho dailo a 1(j)s re~eides: v,eiB~ires muertos les bri,z0 ea las ma,,pgenes del Pasig €llil la so:la n.oC:lile del 2~ .
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LA INSURIU!CCION
al 25 del aclual: el teniente mayor de Muntinlupa los reeogi6. Los barcos grandes cafioneaban las posiciooes del enemigo desde las obligadas lineas de fondeo que ocupaban, y los barcos pequeflos se aproximaban basta abordar las costas, haciendo destrozos en las viviendas de los insurrectos a muy corta distancia en muchos lugares instaladas. Memoria quedara muy permanente en Cavite de aquella expedici6n que con el general Rios hicieron el Villalobos y el Leyte, y el Bu-: luian con la lancha de vapor del Cristina y dos del Castilla, dotadas con una pieza Krupp por lo menos cada una, y empleando el fuego de sus ametralladoras por la proximidad a tierra. Contiouaban las prisiones: a pesar de que las asociaciones secretas habian destruido sus archivos en las 'fechas que hemos indicado, a cargas se recogian documentos de interes
EN FILll'INAS
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por la constante labor de iID.quisitiva y pesqu:isa <iJ!l!le se 1wacticaba, ya por el Cuerpo de vigi.lancia, ya p,or el Jefe de la Guardia eirvil veterana, comandanti:e !D. Olegal'i0 Diaz, curos servicios es dificil apreciar en el jllls~o valoF «iJJUe tienen.; se · iba dand0 euenta cle los trabaj0s rev01uc,icmarios que se practicaban, y si estos eran activQs ante~ del esfallidQ <!le fa insurrecci6n, despues clel, grito de Balintanac, rayaron en ei frenesi. 'En el ll!lltim@ d,i a <lle es,le mes, confii~ deID.cias recibidas J>Or el Diirector general de Administraci6n civi<l sefi@r B@res y R(!)mer(!), ie prn]i>orcio·lilahan. la ocasi6n cle prestiar ta» irnportallte servicio, Cl!lal el de ocupar dociunentos de graID. interes referirntes ai Ca~ipunan, en un sitio de M~ih1big, Jen la direcei6n de Malaite y la Erm.ita, capturando, cClm las fuerzas del escuadr6n que I~ acompaiiaban, a los individ1:10s a qrnielles se haUar0n aquellos interesan.tes pa)ileles.
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LA INSURliBCCJO!II
Con tanto testimonio indudable del gran numero de indios comprometidos en el Calipuoan, no parecia tan arrebatada la resolucion de Andres Bonifacio para dar el grito cle guerra en el instante en que se logr6 el descubrimiento de la trama, pues los elementos indigenas que se precisaban para llevarlo a termino, resultaban reunidos con mucha anticipaci6n y en gran numero. El alma entristecida iba a experimentar muy pronto gran consuelo con el advenimiento de las primeras tropas proeedentes de la madre Patria. Manila discutia los detalles para celebrarlo con solemnidad: todo agasajo propuesto pareciale pequeiio. El Ayunhamienho, corporaciones civiles y militares, trazaron sus planes paFa tributar a las fuerzas espafiolas que s~ aceFcaban un digno entusiasta recibimiento, y en efect0, comenzaron a constril:irse arcos grandiosos, extensas grecas de guirnal.,.
EN FILIPINaS
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das tupidas de fl0res y foiiajes; arrn•azon.es para Ca:l')rieb.e)S(!)S jmeg0s de llumilllaria y esc1:1d0s c@n las mas significativas inscripcio:nes dedicadas a la Patria y SI!!. glorios0 ejercifo de mar y tiem·a. Habiase senalado la · rea11rera qae babiaB de seg\!lir las tropas desJ_;)ues de su desemba111c@, hasta sus alojamientos, y una v:ez efectuado aqu el en la Capitan,i a del puerto, pasarian las ~1.rnrzas expe<fiiGioI!larias J;)0r las caliles de Sa.D Fernando, R0sari©, Plaza del F. M0rab ga y puenhe de Espana, entirnnd@ en 'Manila por la puerta del Pa,rian, y ,siguiendo pQr las calles Real y Cabildo, atravesar la Plaza de Palaeio I p_.rra ser agasa1ad.as eli!: ta de Mo, non es. Todas estas prevenciones da,l>an "Vida y animacion desconoci<ila a Ia ciudad de Legazpi, preoc0pada bacia euarenta dias con la formridai!Me re1 beli6n de.l@s tagal@s '~ol'ltra la dcm1inaci6n ·espa,i ioia, expuesta a heca-
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LA JNSUBRECCION
tombe de perdurable memoria, dada la escasez de recursos con que con-
tara al estallido de la alevosa perfida conjura. Con la esperanza tan proxima a realizarse de los medios para obtener la reaccion necesaria y opuesta a la acci(m revolucionaria 'amenazadora, finalizaba el mes de Septiembre, transcm:rido en grandes zozobras, concomitantes con actividades sin cuento y con hechos de valor heroioo ejecutados para soste)ler la causa de la Patria.
CA.PTTU:L.O
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Prin.cipa.les acaecimientos en el mes de Octubre de 1896.
1.' Llegada del_transatlantico e<Catalufia))._-, 2. ' Mas protestas de adhesi6n .-3.' Nue:vas prisiones en Camadnes. - 4.' Un hren sanitavio y otros donativos. En la Pampanga. C0nducta de lng-latevra. -5." D<;icreto referente al excelentisimo Sr.. D. Pedro P .. Roxas. -6.' C0mbates en las inmedia-ciones de Cavite. Suces0s vaFios.- 7.' lLlegada de~transaUlantico e<Mon,tserratl>. Obsequios hrihutados a los expedicionarios. - 8. • Sigue la propagaµda revoluc\onaria . - 9.' Mas incidentes y combates. Nuevos refuerzos peninsulares. - '.LO. F,iesta dei Jl>ilav en Manila. Nu_evos acaecimien·tos. Mas 'fuer-' zas expedicionarias. Banquete que a las mismas ofreci6 el escuadr6n e<Voluntavi0s de Manila». Com bates en Nasugbu, 'faHs8J, lililog'Bilog y otros lugaFes. Suces0s en· Mindor,0.11. Politica de atvacci6n . Una circiulan de! Ci~ bierno general. - 12. Regress a Espana el' 1general .Echaluce. Nuevas pll!l'tidas rebeldes. Sublevaci6!l en Mindanao. Conspiraoien en
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LA ! NSURRECCION
Jol6. - 13. 1-.ombramiento de! gene~al Polavieja para el cargo de segundo cabo. Idem de los genero.les Sr es. Zoppino, Lacham.bre, Corne! y Galbis. - U. Aspecto de la insur recci6n al terminor el mes de Octuhre.
Llegada del transatllintico «Catal·ur1a» .-Sabiase el paso por Singapore del barco que nos traia los primeros rei uerzos; y, en efecto, en la mafiana del 1. de Ootubre el vigia anunci6 al vapor «Ca talufia» fondeado a las diez y media en la bahia de Manila. La explosi6n del entusiasmo pu.blico fue hermosa. En se-i.s horas Manila entera se visti6 de brillante gala. Cuanrlo la Lropa expedicionaria que aquel barco conducia, desembarc6 a las tres de la tarde en tres vaporcitos que atracaron al muelle de la Capitan:ia de puerto, la capital del Archipielago ofrec:ia cnadro sorpren denhe. Las fuenzas que conducia el «CataJ:ufia» eran de infanteria de Marina al mando del coronel D. Juan. Herrera. 1.
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El Capitan gener~l Sr. Marques de P~na-Plata, el Arzobispo ·m.etrow@'ti- : t;:mo, tod.os l@s geDerales (!J!Ne em Ma.:' n'.ila b.aibia, 1os alt@s fmrni@n.ad@s ei'1iles, Comisiones de todas las Ord.enes y Corporaciones :religiosas, el ~yuntamiento baij@ J;lilazas, Com,isio~ nes de los volmnta1rios de iro.fan,teria, -caballeria y guerriUas, represemtal/il- · 'tes de la Prensa y n,u.,mero.sisim.o l_i)lllblico, acudieron a 10s m,u,eUes.<ll:et Pasig a recibir, poseid@s dei fol!lri,1 e"&tl!l-siasmo que ta,m graficamenhe, ])@I' la sinceridad C(:)fl 11pm se sielil,te, se im-· terpreta en nmestra raza, a a<fl!leiltas iuerzas expedic,ionarias. , Fueron estas pah'i6tiea,men'1'.e area1gadas poF 1 e} Ca,l_i)Han geru1mul, (lJ·l!l:iet1 darl~~ fa bienven.ida les ~efla.Jana ya el s1t10 y lugar de combate .en Ca-vite. i Cl!lanta falta mos haFtan, l_i)U.es ni siquiera veinticNa-w,9 'lhoras de 1descanso les concecl.i.era ·et general iBlanco, tan humanitario y tan aman.1le de que los solcl.ad@s d'i.skll/teD las
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LA INSURRBCCION
comodidades compatibles con la indole de la gloriosa institucion a que pertenecen l Con atronadores aunque s11blimes gritos de i viva Espana! recorrieron aquellos soldados la carrera trazada, cubiertos d@ fl ores, que las damas desde los balcones les arrojaban llenandolos de bendiciones al verles pasar. ;, Como olvidar el aspecto de la plaza del P. Moraga, en torno de la que formaban las fuerzas de voluntarios, irguiendose en el centro de la misma aquel grandiose arco levantado por el escuadr6n ÂŤ Voluntarios de ManilaÂť para conmemorar la llegada de aquellas tropas peninsulares? â&#x20AC;˘ Recorrido el trayecto, los soldados de infanteria de Marina rompieron filas en la Fuefza, y alli, confondidos en fraternal abrazo unos y otros, eran delirantes los coloquios que se sostenian entre los recien llegados y 10s que en Manila estaban ya, ha-
EN FIL1PlNAS
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biendo corrido e1 . grave manifiesto riesg0 de pei¡der la~vida p(l)f @l. alev0so plan urdido e11~rre los mii.tlares de oonjurad0s de1 CatipuoaliilJ, :La venida de aâ&#x201A;Ź{~1elfas ¡t ropas, auJit no siel!ldo estas mas que ias asignadas a un batall6n, .troc6 por c@Iil!lji>leto el nahual triste estado lile 10-s al'limos entre los peninsuilares e insulares lea.Jes: a la c0nstricci@n del espiritl!l, un movimieat(I) de expairsi0n le sucedi6, y hasta a J@s mas pes,imistas parreciafes 't<!>lil(I) pe[igr0 conjurado. Se ohsequ.,i6 esplendidameitt e a Jos e:&pedici0E1ari0s. Em. e] Aytulilota'" 1 miento se sirvitf> un delicad(I) Zu;n,ch I con que lo$ Jeies y, (l)fieia'les de 1a 1 g:uarnici6n y l0s vo!hmtari0s agasa; jaban a los Jefes y oficiales 1'ecien I llegados. El Capi,tan g:emera[ h0nr0 I con su presel'lcia aojuel rfrate11na~ banI quete. A la tr0pa se [a si.rvio . tambieo una comi:da' ext'Fa@rdinaria, y I se repartieron eatre ella mucifu.0s mi-
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Hares de tabacos y cajelillas de cigarrillos que se habfan reunido por. los generosos donati vos de los voluntarios, fabricantes, particnlares y corporaciones. Al anochecer de aquel mismo dia, y coo tan tierna calurosa despedida, cual lo habia sido la manifestaci6n por su llegada, el batall6n de infanteria de Marina sali6 para Cavite, en donde con igual entusiasmo fue recibiclo, y en don de bien pronto comeoz6 a verter su generosa saogre en aras de la integridad del territorio . 2. Afas protestas de adhesi6n. Menudeaban en los primer.os dias de Octubre las protestas de adhesion a la causa de la Patria, pero tambien se acrecentaban los hechos de rebeli6n, y las noticias que a ellos se referian perturbaban mas y mas el estado moral hasta de comarcas le janas de Manila. 0
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Entre las protestas a <ifUe ai1u<;l,itiigu.raba mrni suse'l'ita J)H!JF l@s maestros del Dtis•trito Ji>. M. de·Benguet, de Ia ct1at ofrecem@s itranscri1}!lc1<'m literal, porque eila contiene en conceJ_!lto nuestro de.r;mostraci6ra palmaria de qu.e los elemen.tos im1d!i,genas, no descomp1,1estos por Ia }!IFO,J!la~ ganda fuo esta de las sociedades secrelas, conservan la n@ci6n de 10 que a Espana deben, impicdieD(fales, }!)OF con sigui-emte ,. la ley lie la, gmH tl!l:cd. c@meter act©s c@i1il,1lra la Naci6n gfo-: ri<iJ'sa que los i;,ediirniera de s'tl pdm,ibi.vo desdichadisimo estacd.o. la mencj,onada protesta dice asi: IlJ/OS,
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Ad-
/ dlmo. Sr. iDi.reet@r ge:n.evat de mi. nisltacion civil.-]11m@. seiicrn:La infamia y la i.ngrat~bl!ld, q1ue ~ ©:El sus indignas accio:nes estan cometiendo algunos de nuestros compaiaeros., los maestr@s <;le la :i;rn@vi,ncia de Cavite y otras, en ag;Fadecimiento a Ios henefi<,ii0s (1'1ue liluesbra
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LA INSURRIU:CION
»bondadosa Espana les ha hecho, »sacandoles de! polvo de la ignoran»cia y encumbrandolos al honorable »puesto que entrc las naciones cul»tas ocupa con preferencia el Magis»terio docente; abusando de esa »ciencia santa por el constante tra»bajo que Espana se ha impuesto »para conducirnos por el·camino de »la virtud y Ml progreso, cual hi»jos pr6digos ban abandonado tan »honroso poesto para volver · el cu»chillo de la ingratitud contra su »propia madrn. Compafieros tan in»digoos desapareceran para siem»pre de la lista del alto inslituto »a que pertenecemos. Nuestros pe- »cbos, que jamas oculta.ron en su co»raz6n re~entirnieoto alguno contra »la Patria, protestan unanimemen»te ante V. I. contra actos tan re»pugnantes e impropios del Magis»terio filipioo . Querem0s hacer ma»nifiesto antie V. I. y el pueblo fili»pino, el sentimiento de indigna-
EN FILIPINAS
))oj6n grandisima qne abrig·ailil nues-= ))tros pech0s co11Jtra esos salvaijes, »d.ignos unicamente de _tigura:r entre »las fieras que habitan 1os cl.esiertos. i>A Espana debemos todo lo que hoy i>somos: si contamos con un pedazo »de pan para alimemtar a nuestros _ ))hijos, a e1la se lo debemos; por lo »tanto, decididos nos haHa.mos. a de•i>fender con calor tan herm.0so pa»bell6n y a morir abrazad0s a el si »preciso fuera. Nuestro fa1stitut0 pe~ »dagogico, haslfla ia fee'b.a iinta:cha'»b:le en absolruto, no p0dra ocl'l:ltar »esa manclia ign_ominiosa que acai>ban de echar en su timpida bande1>ra sus desalmados hijos de Cavite; i>pero nosotros, c@D 1ti:esgo l\le nl!l.esmtras vidas, haremos que l!l.esaJ!>a:rez/>>ca de su historia : jamas perm.itire:»mos que afrenta tan impropia del .·i> maestro fHipino, pueda gravitar p(l);r ·(»mas tiempo soli>re nuestras aitivas. »y htmrada.s frentes. i C@lil'IJ!>a-l1ieros, »vuestros herman0s los de Benguet
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,>os Jlaman para que, unidos en ad1>mirable consorcio, unamos rmes»tras protestas contra el atentado de ,>lesa naci6n que los maestros de Ca'>Vite acaban de patrocinar, y para >lque juntos demos el grito de iViva »Espana! i Viva Filipinas espafiola! )> I Viva la Religi6n Cat6lica ! y podai>mos con nuestras ensefianzas de»volver la tranquilidad al noble pue1>blo filipino y a nuestra redentora »Espana. - Ilmo. Sr. - El maestro »de La Trinidad, Nicolas Camacho; )>el maestro de Tublay, Benito Zeml>brano; el ma~stro de Daclan, Emig»dio Octaviano; el maestro de Caba»yan, Andres Valbuena, y el maestro »de Galia)J.o, Rafael Lagazca. » Con mucbos documentos analogos podriamos llenar paginas de este pobre indice, y nada mas, que de la in-surrecci6n tagala venimos haciendo: las protestas eran muy numerosas y entusiastas.
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3. Nuevas prisiones en 'Camarines. ~ La _prisitm. y co!lc:ltrnci6J.a if Maaii-a de aquel r10tari<ir aca<lildalad<il de Nueva Caceres I[). Mamuel Ab@lfa, ihlaMa producido ei C©EI<ilCirmient0 ex:acto de l@s principa~es hechos en la g-ra,&CORjtua de Camarines , y los valdenles ,,oluntarios de aqu.e11a-cabecera aipTe11.endieron y conc1uj,erom asirndsn1ui) a la capital de las islas 18 6 2(') in.diigenas, entre los ouales ha!J>ia tres ct~rigos, aotivos propag·andis'tas de la insurrecoi6n y <!_ll!le seTviam en la cated'Fal de aquef!a cli6cesis, elil. la cual mas les huli>-iera vaHdo aclim!irar et ejemp10 y virtades de slil esclareci(!),o Pirelado el Rmo. P. fray Arsenfo Campos. Con. aqueU(i)s 20 C(i)mplica<il<ils hi~ :ipreso tambien el cabecilla 'camito, eiI cual estaha preJilaL1aJ11d@ fa l))arWla • qe rebeldes que baili>ia de caer S<il'lilve iNueva- Caceres paFa ases~mar a i(i)s spanoles alOi establecidos. · 0
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Un ttren sanitario y otros dona20
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ti'VOS. En la Pa¡mpanga. Conducta de lnglciterra. - EI Casino espaflol, que ofrecia constantes muestras del mas acendrado patriotismo, entreg6 en estas fechas un tren sanit.ario completo, donativo que fue muy agradecido por el senor general Blanco. Al propio tiempo enviaba a las fuerzas y columnas que m.andaban los generales Rios y Jaramillo y los coroneles Pintos, Marina, Pazos, Camifias y demas jefes y o:ficiales que operaban tan activamente, otros donativos que se colectaban con vertiginosa ac- _ tividacl, y con los cuales obsequiabase tambien a las fuerzas de la escuadra. Inglater:ra n@ticiaba al gobierno de Espana baber orde.nado a los gobernadores de sus posesiones en la India y costa de China iimpidiesen }(')s trabaj_os de los laborantes filipinos, y realmente las medidas que adopt6 pateliltizaban s11s bhl'eRas relaciones eon la madre patria.
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La Gaceta de Singapore del i2 de SeiPtiembre conten.ia el sigui:en.te Decr.eto da(!].(i) por el g00emad.or ole l©S ..E1trecb.@s: «S,iendo asi que subsist(~ Ja i!)a..z y · ami,stad en.tre S. M. la Reina y, S. M: cat6lica ei Rey de Espana; y siendo, ·asi que ciertos subdih@s del dicTu@ Rey de Espana en ciertas ;partes de su domin.ic> llarnacl:as las islas Fi'li'J!)inas se han rehela,fa contr-a Slil autoddad y existen h(i)stiil' da<!les en:tre la d.1ii;ha Majest.ad cat6Jica y ~@s dich0.s su'bdit@s rev,(i):lt@sos, y sii~ncl;@ ast cprn S. M. la Reina d'esea· que ninguna · expedici6n naval Ni militar sea orgara de11tro de S'l!JS d'om:i.'lllfos - >11a, dizada t' I if en. contra de }0s ~@minios eJ.il. .Filli,, P,inas de S. M. cat6lica ni 1m niFl.garia otra parte. ~©r i@ It.an.to, y(i), siir 1:tiarles Bullen. El'ugh Miiifohi.efil, ]l@reste advierto y severaflil.ente prob:i00 toda person.a dentro de esta C(!)l(i)' ia de nh1guna mane~·a [(i)rnpa,re, ©r°'
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LA INSURRECCJ6N
ganice, pertenezca 6 ayude a preparar, orgaoizar 6 ser empleado en cualquiera mision, en cualquier expedici6n naval 6 militar para ir contra los dominios de S. M. cat6lica en las Filipinas u otra parte, bajo las penas prescriptas contra toda persona que oienda el acta de 1870 ÂŤForeign Enlistment ActÂť y todo otro estatuto y ordenanza prev.istos para estos casos. Âť Otro decreto de la misma fecha notifica que la exportacion de arm.as, municiones, polvora s pertrechos militares y navales de cualquier puerto 6 punto de esas colonias, para estas islas Fili pin-as, esta prohibido por el termino de tres meses, contando desde el 12 de Septiembre pr6ximo pasado. En San Fernando de la Uni6n for016se en est@s dias una compafiia de voluntarios, cle la que constituian la secci6n de reserva todos los Re-
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verendos Curas parr@cos; de aquella iiqerza era primer 1efe Iilafi@ e~ g·@1lernador de la prnvin.cia ( Sr. Cernkeras), y Ca'.)!litan D. R.a,imulildo oe A/li>ai_:roa, h@Elrado espafiol peE1iE1s11lar. En la Pampa,Bga, provincia qt1.e lilesde el primer mom.elilto lhlabia ya llevado por la el@cuente voz del Cm,a parroco de Bac@:lor, el agiasti•Ho faray, Antonio Bravo, hermosa energica p'l'Otesta con,tra Ja i,nstiwi,ecci@lil, el cel0s0 gobemad@r civil Sr. CaJil.ovas Vallejo Jn.abia oijrigid@ c0'iil. entusiasm,@ la ~reaci6n de UEl cueri.;io de v@lunifiarios; y en est@s dias revisti:© elil aql!lella c0rnarca, irnportand a extrerpa, el acto de ra bendici<brr de la ban~ <11.(i)Fa y emtrega de la misrna a [os de ~aeolor. La Cabecera de la PamtPa'.nga solemniz6 tambieEl lliliUY cum,pli~amente tan agradable acho.
Is~·-
Del'Jreto referen,te al excelentisimo D. Pedn·o P. Roxas. -1a Gaceta de a1Yila, c@rrespondielilite ai 2 cl.el pre5.
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sente mes, publica el decreto si..-guiente: ÂŤtlesultando hallarse procesado en la causa que se sigue por rebeli6n el Excmo. Sr. D. Pedro P. Roxas, Consejero honorifico de Administraci6n, en uso de las facultades de que me hallo inveslido, vengo en disponer- que cese en el ejercicio de sus funciones, sin perjuicio de la resoluci6n ulterior que adopte el Gobierno de S. M., al que se dara cuenta oportunarnente de esta medida. Âť Comuniquese y publiquese. Blanco.Âť La calidad de la persona a quien se refiere el preinserto decreto hizo fuese este rnuy comentado. El Sr. Roxas habia abandonado Manila en virtud de licencia que para venir a la Peninsula, y ateniendose a las prevenciones reglamentarias, le habia sido concedida por el G0bernador general, quien no tenia ftindamento de negativa : naturalrnente
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llam6 la atencimn el procesami.ento del S.F. Roxas a l@s f)@cos clias. Desconociend0se los aut(j)s de1 gran proces(i) de la insurrecci 6n, e ign0randose, por tanto, el arte @ la parte que en ella pudiera tener el rico . propietario D. Pedro P. Roxas: sim. saber nadie de q0ienes nŠ entendiamos en tan celebre prŠces0, si dicho Sr. Roxas era jl!lsta 6 injustamente acusado, lo ([l!le mas pa.Tuul.(l) di6 a los rumores eundidos respect(!) del acamdalado ]Pr<!ll}ieta,ri@, aetiv@ cqmercian te y entelildid(l) industrial del harri@ de San Miguel ole Manila, fue sin duda ailgmia el b.echo de abandonar el barc0 que l(l) condltla Espana en el pueFt0 de Si,n gapoore: con ello alteraba el Sr. R@xas ~u itinera:rio al sa~ir de Ma>nila, y es claro que por el solo hecho de llil.aberJo asi efeet!lrndo deseâ&#x20AC;˘m,barca,n~o en lugar distinto del. de su desino, acogiendose a extman~e,r a ban' era, sob re el Sr. Roxas cay6 taa
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LA INSURRECCI6N
balumba de comentarios, dudas _y suriosiciones, que ni el tiempo transcurrillo, ni siquiera la solemne severa actitud del ilustre hombre publico Sr. Romero Robledo, llevando a las Cortes, ocho meses despues de la )Dhlb1icacion del decreto de qU:e nos ocupamos, briosa defensa en favor del Sr. Roxas, pudo proporcionar a este la satisfacci6n de que en el_ orden moral recuperase pronto y J!lŠr enterŠ sm pei;did0 extenso presti,gio, sino qne ei concepto publico, receloso aun, aguarda el fallo de los tribunales de justicia para haeer la que eorresponda al rico veeino die Sam Mi,gael de Manila, el cnal ha.Ma si.do siempre tan coJilsidera,do p(')r todo el elemento peninsula,r. Los mas benevolos para aquel opuiento caJl)itaUsta, pensaha,n acerca de este partieular extremo, lo que coa toda fuerza de 16g'ica expres6 el seIl(')f Castellano, Ministro de Ultra-
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mar, contestando al Sr. Romero Ro'bledo. Desp1JJ.es de analizar notabiemente el caso del Sr. Roxas, el mencionado Consejero de la Corona decia literalm ente: «Enhorabuena que haya recl;iaza»do el indulto por razones de digni»dad, como ha dicho el Sr. Romero »Robledo, porque el h1d'l:llito supone »siernprg deJincueneia; pero lo q1,1e »no sg explica es qug, sintiendosg »inocente y tenigndo medios de pro- , »barJo, ao ce:miparezca a,n te ei juez »para ()!Ue su imocencia sea recemoci»day procfamada. De ahi que cuan1. »do el Sr. Romero Robledo pedia .al 1JGohiern.o la l!tonra de I')_ Pedro »Roxas, yo me sentia 0hligado a conI ))testarle que no es en este sitio d0n»de eso se puede pedir y conceder, »porque aqui no se adminis tra justi»cia ni cabe hacersela ail reo consti»tuido en rebeldia. Aqrni lo umco »que se puede pedir, y a lo unico
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LA INSORRl!CCI6N
"que. el Gobierno puede acceder, es
Âťa que, si los tribunales no cumplen 1>
con su deber, se les haga cum plirlo. Âť
6. ° Combates e;n, las inmedia ciones de Cavile y sucesos varios . - En los primeros dias de Octubre menudeaban los hechos de armas. En el reconocimiento practicado el dia 4 entre Las Pin.as y el pueblo de Bacoor, nuestras fuerzas causaron muchas bajas a numerosos grupos rebeldes que intentaban oponerseles: aquellas fuerzas hallaron dos cartas, una de las cuales iba dirigida al capitan municipal de Las Pinas, en la cual un jefe insurrecto reprendia a aquel municipe, a quien Jlamaba traidor, por no haber cumplido su oferta de incendiar las casas del pueblo en que se alojaban tropas, y quemado otras deshabitadas. La otra carta iba dirigida al capitan de cuadrilleros, quien tambien estaba en connivencia con los Febeldes.
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El general JRfos ©CU.Ji)@ el.il estas focb.as mismas el i-stmo ae Nov,e1eta, q~'edando ta Caridacl. y Sal.il R0(!1ue cleift'lilitivamel.ilte ~ n,w~st110 if_i!@der: al/1:i, en 'Dalahicam,, se ifu.izo @am Iil~estuas tropas un <e\am]l)amem1i0 tl!lerteniemte atrincherado, que los iID.s1!1rrectos se atL'evieron a artaca,r, siem<ilo valerosamente rechazad@s, eailaisamcl.oles muchas loa1as. Tambien, elil el p@lv@rili1 de itlli,Iila,,, cayan se s@S'biWVQ virva Fefvi.ega, en. la q1,1e i@gro solilaa@ 1:niev(i) tri,l!l'lilf@ la i.'lilfante·ria cl~ Ma1rina y la Mai:rl:ma m:e desernli>al'CQ. , El _Ca:l),)itlial!1 Thi. ilil@geH@ Vazquez Hl:a.nd:aba ei clestiacamefi,t(i) · -Ol'e aquel tuerte, situado a ~(i) met~0s 4e bosque espes0, ei;JJ el <iJ!l!le l!llil acti10 chapeo ensam1ch<fJ 1a z0na de in,siflaea ~aci@n. El enemig·o, €Il grn,n nllflJme{0, io atac6, S(i)S1:el.ilriel.ild'@ fil(i)S 'h@L'as nutri<Jisiru(i) fl!lego: mas rife, 15(i) mrnertos y de 3(i)(i) heL'i.dos le 0all!ls@ fa her(i)ica lil:efe:asa cl.el capiitan 1faz-. q1rnz de Cast110. ·
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LA INSURRECC!6N
lniciase en los primeros dias de este mes una suscrici6n publica en favor de las viudas y huerfanos de los oficiales vilmente asesinados en Cavite. El dia 5 orden6 el capitan de puerto que un remolcador, el Relwmpago, procurase el salvamento del General Calvo, bergantin-goleta abandonado por sus tripulantes indigenas para unirse a los sublevados de Cavite. Era aquel buque perteneciente al honrado espaiiol peninsular, consejero de Administraci6n, D. Rafael Calvo, cuya vida y hacienda tan a disposici6n de la eausa de la .Patria esta siempre. El Relampago, que hall6 el General Caliâ&#x20AC;˘o varado en las playas de Naic, pudo ponerlo a flote y conducirle al Pasig. En las mismas fechas y procedentes de Bulacan, Cavite, Batangas, Pasig, Tambobong y otros puntos, entraron en Manila :presos de importancia, entre ellos el gran propa-
M?,
EN Fl~IPINAS
andista del Mataipangm.a Mal0leis, llamade> Zamora, puest@ in.mediataI)Ilente a disposici@lil. elet g:eiberrnaifo!F militar de la plaza, y pm; ,lil(')tori@s actos de d:e.slea,l1talili, se c@.n.itimtialb a destituyendo gran nurnero de Sl!l®al- · ternos irnitigem.as en l@s distint@s ramos de la Administracion. 7. Llegada del fll•ansatlantieo «Montserrat». Obsequi.os trifbwtados d Los ewpe&oionarios. -A las oelrn de la maiiam.a del ~ia 6 fonde@ en Mani,l a el vapoF M0ntse1rrait, trayem.!i)•0 -a su. li>@11- do um. nt1trido ba1\alMn de cazadores: 1. 051: plazas dis't<riib,m•idas em. seis /compaiiias, lo formaban. Em. iguales /termimos que el Glia 1. _de!. actual,, a la llegada de las tropas qiue c0nduto el Cataiwria, se u,1ami.fest6 el ~egocijo pubHcei, y de'l ~ropio fil(i)<fo se recibi6 por las au't!@ridades y <;@1111Oraciones a los vailientes ca~ad011es dei batall6n num. 1 expediciomari0, q,l!le desemba11car0n a. las ci,no@ de fa tar0
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LA lNSURRECCION
de, recorriendo trayecto engalanado mas grandiosamenle todavia, puesto que se habia dispuesto de mas tiempo que para el dia primero; desde la Plaza de Palacio, dirigieronse las tropas recien llegadas al lugar de su alojamiento: a los cuarteles de Meisic, en donde fueron tam bien agasajados con una comid~ extraordinaria por los voluntarios de infanteria, y con valioso obsequio de 18 jamones de York, 12 cuarterolas de vino, 2.000 tabacos y 1.500 cajetillas, poT el escuad r6n (( Voluntarios de ManilaÂť. Los Jefes y oficiales del brillante batall6n de Cazadores nu.m. 1 fueron al dia siguiente obsequiados con fraternal esplendido banquete que el batall6n de Voluntarios les ofreci6 en el Ayuntamiento: pronunciaronse alli los mas entusiastas brindis que el ardoroso amor patrio inspirar pueda, y suscrito por los Sres. Bores Romero, Pazos, Hevia y Lecea, en re1Jresentaci6n de los alli reun.idos, se
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eJev6 al trono an telegrama que expresaha ea seNti(ilisimas frases el mas pTofuindo respeto y la mas firme ~dhesi6D hacia la Patria y S'l!lS instituciones. ' 1 La prensa de Ma0.Ha reseiiaba estas solemnes fiestas vertiendo ratlcl.ales de elocl'lencia ipor el c@mz6N dictada, y la inco:a-iparable pluma de Carlos Peiiaranda cantaba em deiiea~ dishna p1·osa y en inspirad0s ¥ersos, las gloriosas tradiciones del Eje.reit@ espaii@l. El cablegrama a q11e Nos l:ilernos reierido, elevado al troNQ wor lo.c;; · Jila_tri0tas c~~-eNsaies ~er Ayl!lN:taliniento, rec1b10 en el act0 respuestia digna cie:rtamente de quieri ~a d,i ctaba, pues el mism0 dia ~ :veetfuiase ea Manila el siguiente despach0 te'legra:fico:
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« El Ministro de la· Gl!lerFa al 60loemad0r ge:liler.al. - Sir¥ase V. 'E. b.acer presente batal15n, escuatiltr6n
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LA INSURRl!CCION
voluntarios, que S. M. y Gobierno han recibido con el mayor jubilo sus inanifestaciones de adhesion, y coniian que su levantado ejemplo sera eslimulo poderoso para sostener ahi espiritu nacional. Âť Las Ordenes religiosas, la milicia de Cristo, vivia identificada con la del Cesar; al siguiente dia del banquete celebrado en el Ayuntamiento, los frailes y legos de San Agustin, servian ellos mismos en el Cuartel de l\foisic una comida esplendida a los soldados espafloles que acababan de llegar, y en la cual reino el mas vehemente patri6tico en tusiasmo. Los PP . Jesuitas, desde sus severas misticas sobriedades, alli muy arriesgadas, ofrecian a las tropas algun suculento gaudeamus, y al propio tiempo otras representaciones de los frailes agustinos, recoletos, dominicos y franciscanos, reunian en el amplio comedor del Hotel de Oriente
a los Jefes y 0fidaJes qwe maBdabap ~a tropa expedicionaria : en taiil her- . mosos aclos, en. 'los c;pae com.iemlll@ del mismo pa;a y bebiend(;) del misJP(i) vi,lilo, claban. los mi~:i:ta:res y 10s religiosos la f0rmula compl&ta de la estrecha fra'tern.a:l uJilanimidad de pareceres y de sentimientos patrios, produjeronse pen: unos- y p(;)r otr@s entusiastas oonm0;ved(;)Tas ma.wifes..: taciones. El Teniente c0rcmei Sr. 1eoea, [!))rimer Jefe del batal1I.6l'l de Cazad19res recien llegado, en .el0c1:rente bt il4mate irase, asi c@mo e'l comaad@ilte Sr. Navas, exJilres:a:r<rn Sl!lS sublimes (c onceplos de 'Patria y !ReHgi0m, qe1dicando sen~il!lo reeuerdo a Jas vfoti!mas de }Qs crueies secta,r ios del Ca~ tf;ipÂľnan: El esclarecid@ P. Doi,nin.,icg Fr. L0renz@ Gaccia Sem1i)ete, vivamelilâ&#x20AC;˘te mocionado, traz6 gaiUardamenteacabado croquis de cuanto a fa teirigiifm y a :J.as armas debia el Aoohil)lielago
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LA INSURRECCJON
filipino. El Cura parroco de Santa Rosa recit6 despues del elocuente memento bist6rico del P. Sempere dos decimas que constituyen una de las mas inspiradas poesias que conocemos, y cuando aun resonaban en aquel recinto patri6lico los vivas y los aplausos de atronadora efusi6n, se impuso, por ser de natural mas extensa que la que reclama el diapas6n normal, la voz de un gran sacerdote, orador insigne y profundo pensador, de un fraile que tant.o Hora y hace llorar oprimiendo su propio cardias y el de sus oyenles cuando predica acerca de las crueles amarguras sufridas por el Martir del G6lgota, como cuando canta con incomparable fuerza de conviccion nuestras inmarcesibles glorias nacionales: la voz del M. R. P. Fr. Evaristo Arias, queemiti6 en aquella ocasi6n solemne a que nos referimos las mas agudas agnoniosas notas para la causa santa -de la Patria.
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8. Sigue la pi·opa,gandci r~vo'luci0naria.--,- La labor <ilel Catipu.man R<il se deten.lia: C©Htinu,ali>a la pr0pag,anda a J!)esar de l@s ltracas©s lqlfile stllfr-ialil llos rebe'ldes y df ~o extens@s que eran fos trabajos de vigi~ancia p©·r • parte de todas 'la:s autori.<ila~les y fMerzas e instituflos a quiem,es <wrresp@:rrdia ejercerla. Diariamente se descubrian nuevos cen,tros de C(,)nspiraci6n, praotieand0se e1il em@s fas mcisiones del pacto, y se ocupaban utiles y timbres de rnaevas secci@nes 'Y mucili1.as refacfones <ile caitip111ilad0s. L0s ecmspiracl•0res ne se limitafuailil. a exaltar los anilllil.os contra la d:omi,m.aci6n espano1~ ea las tierras de Lu~6n: eB.viabam eIDi,sairios a itodas ):;)aiJ!~es, procumndo aHeraF el ©rd'ea en :ella15 para obligar a que se disernip.a1seli1 las tropas espafi.olas y las leali;is ·lildigenas por t0d0 el Arch,ipielag0 : , uisieron subievar las qm.e de esta clase gua'rneciafi la isla de MiBdaao, y al efeoto envia;ron un 'de1ega--, 0
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LA JNSURRl!OOIOl'f
do del CaHpunan de Manila a aque1 vasto territorio. El comandante general del mismo, general de divisi6n Sr. Cappa, se apoder6 de aquel comisionado. La Gaardia civil iba ponieI:ldo a disposici6n de los gobernadores de las proviocias machos complicados en los saceso.s, que procedian de otras provincias que aquellas en las que se aprehendian. Hasta en provincias tan remotas como la Paragua se destituian subalternos indigenas por desleales. Tanta criminal burda especiota se propalaba por los conspiradores, que el gobernador general, Sr. Blanco, en drcular a los Jefes de provincia y distrito, les deefa: «Habiendo llegado a conocimiento »de este Go.bierno general que los »rebeldes, al convencerse de que no »cuentan con el apoy© del paiS', ex»citan. los anill!OS de los pacificos »hahitantes de estas islas propalan-
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notfoias ta1sas y a,1:u;1 haoiendt> ediietos 0ticiales ap6i.:wi1fos 1
fcircular
/,en. hi>s q'tle se arn'll.llil!ciaili!J .e'l aum:elilt@
»cl.e tribl!lt@s y · se asegura <'J'M l@s •fif»lirpi-rn.0$ todos seram1 @bje1!Q die med,i,& ,das de ext11emado vigor, b.e crr.efol.0 ' »necesario que, en m.ombre lll.eI G@>lbierno de ia naci@n ~)@r mi am.ftori- ,idad repFesentad@, se' <ilesmientan »tan call'I.Inlil1iosas , esl_i)ecies, y se J?e))cuerde (lJIJle Espwma c@mlfiim-l!lal'a su »noble con<il.l!l€ta}l:e bratawcorn itraifie:r»nal afoctQ a: sms :bli,j@s lleal.es, y qillre. )>nunca ai\ilmentara los .gravamemes, , »en co:acew'llo de pema,. 11,9•1Jo0u,~'amtilo, I »por el contra~iQ, .f©miemta,1· ~as ri= 1 »quezas y el b1enesta;i, elel pa1s. Em · ))es te concept:@, 11ecom.i.e@IJl,@ mantle 1 , 11V. E. publfoar .p©r ballllili1 11os en to~ • ; »libs los puebl@s de ]as ~rQyi1rnias >lde sm mam.d@ eshe teiegrama ci:rol!l»iar, reiterat1<il0 f@s coTilceptQs <ilel »mism@ elil cas,tiellaM y en el dialec~ Hto de la localilll.ad. »
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LA INSURRECCI6N
Otros incidentes y combates.-
En Morong se produjo gran alarma: 200 insurrectos quisieron asaltar la Cabecera; en elJa estaban el vicario, el cura parroco de la misma y los de Pililla y Tanay : el valeroso cura de Baras gan6 con esfuerzo la casa gobierno, valientemente defendida por el gobernador P. M. Sr. Dujiols, rechazando y persiguiendo a los re- â&#x20AC;˘ beldes, una escasa fuerza de la Guardia civil, al mando del teniente senor Lahlente, que les caus6 muchas bajas: encomi6se en aquel hecho la conducta de los cuadi.illeros de Morong. Hubo encuentros en Muntinlupa y Las Pifias, y otro de importancia sostenido contra grandes grupos de rebeldes, por el capitan Anrich y teniente Perez Egido en Bulacan, en el camino de Norzagaray. Los insurrectos intentaron en-gaiiar, fingiendose amigos, a la escasa fuerza mandada por Perez Egido, el cual aoudia
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al sitio y lugaF que pa:ra operar el,l\ . combinacton b.al>iafo senalado d:esde e'l pueblo de Santa MaFia el capita;Ii Alilrich. / Hic,ier(!)iiles Tuasta,m.tes ba~as a las redeldes, que practicaron esfuei:zos inauditos ;parn copa,r a l@s n'lilestros en gran inferioridadi numerica. Se les cogieron provisjones , meaicamentos, un paf1uelo c@n ·las marcas de Mariano Lla,aera, y l!IJil sell@ c@n la inscripcion «RefJu.iblica n~ng Katagaluna,n ».. El capita,~ gemeral S11 .. Marql!les ·ae Pena Plata sal,i6 en estos dfas de Ma,nila, sirn d11da r.>ara estrn.diiar <ilesde /Calamba la liaea de aislamient@ para los i,nsl!IFrectos cle C:avite: regFes6' ~pronto a Manila. sarbizarre ei sostU1vo 12 (lJ,ia m geo,to Valverde con unos pocos guardias civiies y otros 'leales vecinps del f)Ueblo ·ae Montalba.11 trn cornbate vi- _ visifI}o con gran grupo de 11ebeldes del bwrio de San Rafael : entFe las
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LA INSUI\RECCION
numerosas bajas que se causaron al enemigo por la escasa fuerza del_sargento Valverde, figuraba muerto el cabecilla Espiridi6n Lozano. tO. Fiesta del Pila1¡ en Manila. Nuevos acaecimientos . .Mds tropa1s peninsulares. Banqutte y agasajos que a las mismas ofreci6 el escuadr6n  Voluntarios de Ma%ila. Com.bates en, Nasugbu, Talisay, Bilog-Bilog y olros lugares. Sucesos en Mindoro. - Solemne acontecimiento fue en Manila la celebraci6n de la fiesta del Pilar. Habianse puesto de comun acuerdo para que en este afio tu vi era el mas or ~esplendor todos los aragoneses, navarros y riojanos residentes en la capital del Archipielago, y lo lograron sorprendentemente. Acordado por los organizadores de aquella solemnidad ( de los cuales disfrutamos la honra y dicha de formar parte) que, en atenci6n a la gravedad de las eircunstancias, no se
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diese mas caeacter -(iJl;le el r.e1Hgioso a 'tal fi~sta, excepc·i6n hscha d~. nn.a gra:tt romilal[a, q 11ui emcam1.ti6 tam.,t(l) p>@l' ¥0 geamde ql!le '€R si es el. p01:mlar -0a.ntQ de Arag@n, Navarra y imiJJoja, euant0 p0r lo n11ev0, n.ovisj,1liJ.(i), <p,te 'el espectacul@ era em Mam1ila, y 1ura , fraterqal comida de 15()) clllll>iertos en. el co11ven,h0 de Santa Cruz, habHaclo por el Cum warroc@' •el yfrtl!IOSO y. patriota reli,gi0s0 Recoleh0 firay. Mamerto Lizasoaia, n.0 b.UI:b@ mas g:Jle la solerrwisiEr!)a Misa em. la !i}l!le rta Turi:Ual'lte el@Cl!lencia 'deil can6nig@ ma- · gist>Fal Sr. Sa,Iil.C'lil..ez cl!e Lttt1.a pr1iuh11j@ 10raci6n. sagrada cle exce~eional valia. 'Hizose gran tiracla de 1llil [l)J.Mrner@ conmeJiliorativ(i) del ifarnos@ · cifa ·q ue se celeh>raba: a(!Jtrella puli>lfoacion la .en:tainez0 srnblime pelllsaun iento d'ei Arzobispo metrnp@1,imamo Fr. BemaF~ diililo Nozaleda, y 51,1:scril>ialil ifuetlezas l'itera!Fi.as y gra,D<ireza$ hish@fi<~@-fii.l@s@ficas, las piumas rn.ej@r. :te,lilil,Ii!l,ad'as de ·Manila. - Gralildi6s© fun~ el espee1
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taculo: de el, para que nadie crea que el amor de gremio pudiera hacernos prnsentar con trazos de exageraci6n lo acontecido en aquella fiesta hermosa, no decimos mas por nuestra cuenta ; pero transeribimos un fragmento del extenso gallardo relato que hacia el acreditado peri6dico El Comercio, expresandose asi: << Sugestionados como estamos, creerase que, por efecto natural de la viveza y del entusiasmo de que al escriibir eslas lineas nos sentimos poseiclos, hablamos con hiperbole; nacla menos cierto; aparte todo sentimiento propio, las fiestas celebradas hoy en el templo parroquial de Santa Cruz, han sido magnificas, esplendentes sobre toda ponderacion. Sepanlo los aragoneses, navarros y ri:ojanos: en esa magRificencia, en ese esplendor, ea esa imponderable bril!lanlez, han. reflejado sus psiqui-cos seotimientos, su- carino rayano en idolatria. hacia la mas hermosa
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de las advocaci@nes de Ia VilfgtHl, el }/lilar. »Todos los espaii.@les,- al:lin sifll tener la f011h1na de haber reciitlido el nombre cristiano en aquellas regi@nes santifi.cadas coa la excelsjlfjucl. cl:e Virgen taa beUa, tile Virge'l!1 tan pF0tectora, que en ta bist@ria de 1as patrias glorias desempefia papel imnportantisirno, sientense orguHosos en colocar s@hire sus pechos prelerentemente el recl!lerdQ del Pila:1·, y esto s11p1rnst0 e incl:LI:li>ifiaJMe p@'l' lms hechos, la fiesta de esha manana 'fu.a side imponente 'maBi'festacioI\ del 1pueblo espafiol en estas p@rciones 1que rodea el (i)ceamo ea sus '1!1.liLimos coa1ii.'1;les, y q.ue ;[))@r ~o mi,smQ vienen a indicar qu.e Espana, la "Ji>atria <ile Retaredo, del M@nje de Pampiiega, de San Fernan.cl@, de la Isafuel1 her@i:ca, es tan grainde, tan i11c@1!l.m.e1!l.surable, q11Je tiene sl!ls limities e11 i@s 1~mHes de la tenestre esfora.» CoiMicl.fa con el esplend@ros~ aco1!l.-
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tecimiento de que acabamos de ocuparnos, otro de tanta significacion, cual el de entregar la bandera nacional al balallon cazadores ex pedicionario num. 1, recien llegado de la Peninsula. Aquella bandera se bendijo en el hermoso templo de San Agustin, solemnisimamente, dirigiendo a los soldados de la Patria que la recibian graodilocuente alocucl6n, el Revdo. P. Fray Miguel Fonturbe, cuando termin6 la misa onciada por el Provincial de la Orden, el Muy Revdo. P. Fray Juan Zallo. El 14 de Octubre, por disposici6n. del Gobernador general, embarcaban en el vapor Manila, para ser conducidos a Cartagena y transportados desde alli a Fernando Poo, 151 deportados. En las primeras horas de la mafia na del mismo dia desembarcaron mas fuerzas peniasulares, llegadas en el vapor Antonio Lopez, proceden-
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te de Cartagena, y habiehdo nech0 notable travesia: 28 siogladuras desde aqu.el puerto. l'ailil vaLios0 vefuerzo estaba const"tuido pmr U!il llaltall6n de infanteria · de Marina y ~00 artilleros. Con iguales explosiones de patriotismo y com. identico pmgrama que para. el l.!ecill>imienh@ cl:e las anteriores fuerzas expedici@.ID.arias hemos &intebizado~ se con,m©mor6 el anibo de estas tr@-pas, alojadas en fa Esouela N0rma,l fus primeras, y en el c-uarte1 cle Espa·:fua 1as fuerzas d.e artilleria. Urias y @trasftleron agasajadas gvao<il:©meimte con. comidas extra@rclit1arias por el es1 cuadr6n de vohrn1ta,rios primer@, y. despues por los PP. lJesu.ftas, a _ou10 servicio estaba el e(!]iificio en qu© se alojaba la infanteria d© Ma.ri~a; tam.hien aquellos obse(j!uiat·oEJ. oum:plida~ mente a esta l11rnrza. Pero del banquete dado en Ia, m.ism.a noche del 14 ,por ©l escuadr6n «Voluntari0s de Maaifa» en l;um0r
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LA INSURRECCI6N
de los Jefes y oficiales de la recien llegada fuerza expedicionaria, queda perdurable memoria en Manila. 200 comeosales asistieron: el entonces teniente, hoy capitan del escuadron de voluntarios, Magistraclo Sr. Martinez Nupla dirigi6 notablemente los preparativos de aquelbaoquete, ofreciendo brillantisimo aspecto el sal6n de las casas consistoriales en que se celebr6. Nos duele no disponer de espacio para resefiar tan gran fiesta; precisariamos para lograrlo por modo medianamente exacto destinar a tal intento 100 paginas de este nuestro pobre mernoroodum: mas no siendonos esto posible por RO traspasar los limiles de n uestro prop6sito, diremos que el derroche de ingenio, de verbosidad, de raza y de patriotismo que alli se hizo, no solamente cautiv6 a los de dentro de aquella sala grandiosa, sino que conmovi6 a los de foera.
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Y con razon para que aconteciese asi. · Despues del discl!ll'so elocu.e:nte de ,tonos guberDamental'e s pr@nunciado 'por ·e l Excm0. Sr. D. Vicenfo Ca d"0s Roca, c@mandante general de aquel apostadero y escuadra; ma[og,:ado contraalm.ira.n.'te q'lle ya hla desaJ!)arecido de entre nosotros para recibir en la eterna gl@ria el tFJ_nimi@ de sus bi·iridis aUi J!)TOvirtudes, i ah! la mas legW;expresaban nunc-iados ma incligDaci6D y, l@s aceJ.i}Jtos mas belicosos contra la flera ingratitu.d de ,, los tagalos. Los S1·es. Bores y R@mero y He,via, ' comandantes· del escuadF6n y baita1 1116n de vohm.'tlavios, l<.Js S-res. C@,, , menge, presidente dei Casiu, 'Peiiarapda, Caro, el P. Marian0 Gil, el caIJitan. cle infanberia de Martna D. Jose Poch, el Sr. 'Lazaga, ca.pi1M,lil del puerto, el Sr. Va.Jle (D. Gu.mersindo), el Sr. Pe-qa, aucl!i:tor gene~·al cl.el Ej·e reito, Uria, gobernadoF civil , de Ba1
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taan, Lalaux, director de El Espaflol, y no recordamos si algun otro, fueron los entusiastas oradores de aquella solemnidad , en la que tambjen us6 de su pobre palabra el humilde au tor de estas paginas: De aquel banquete se guardara fl.el memoria, lo repetimos. Llegan el 17 mas tropas : los batallones de cazadores nu.ms. 2 y 3, al mando de los tenientes coroneles sefiores Lopez Morquecho y Victoria Rebollida: se les tribu t6 tambien la mas- calurosa entusiasta recepci6n. El dia 18 tuvo lugar un brillantisimo hecho de armas en Nasugbu (Batangas). EI general Jaramillo, al frente de columna compnesta por Guardia civil, infanteria indigena de los regimientos 70 y 73 y del primer batall6n de cazadores, y apoyado por los cai1ioneros Leyte y Bulusan, que contribuyer on e:ficazmente al exito con su artilleria y dotaciones de desembarco, desaloj6 de aquel pueblo,
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EN J;'ILIPIINAil
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' en el c1,1al se halliruiil b.eclil@ :fuertes, a ~a:n masa d@ in,s1ill'11ect0s (!ll!l:tl @ireriel'on tenaz llJlesislte'lilcia, s0b11e 'li0!ilJ0 ~n rflres gra:moles edlifiiroi(!)S, prnpieclad 1 'del Sr. D. Pe!ltr!i) P. m,(!);x,as; ;12~ llilJtter•t(!)s se fos b:iciel'QFI y gram Il.,l!llTiileT@ cle hericl0s, experirnel!lta,md@ l@s fitte,stros 2 de i(!)s primer@s y, 28 de fo>s segund())s: aFJoderiir@mse muesba,s tt,ropas de muchas afIIDas. '.E1 geN,mm[ J;a,. ramiHo ray6 a g'li'.an a1lillmJl;a e'IJl rliam ci. lebre j@rnada, .@ifil la e1,1ad se O@!lllolllili@ , heFoica'l\rH2:ni~e :nuestra if'.Popa cl:e maJt.y tierra. ·· 1 Acq,u•e!JJla zg:m,a estail>a eD t~es cil.~as mru~ m0vi:tila: eli1 las ii11me<ffiiaei@l'l.es de Calaca hatia vich0.d osa,me:nille e[ .~e,nien,te Ga.rcia: Case1i'o, lefo dg l'a secci6o de la guarolia civi~ de 1'i3-ail, ql!lg · lhabia salidjij gm eofomna '{i)©'f 01,,dgQ de:1 Jefe «ilel o:estaca,met1t0, l!rna 'f)·arti(ila de ret>elcles. lasifl!lgrzas d,gl: .Baijjj,aeter@ soshenian c@@ f0rhu1a elilcllelil,tvos eoa los· insml!Fectos de 1'a1lis&}!;, 'Em el ·~eyl 9 fue graveme1111te l:rnrido el titJ•mienhe1o@-, '
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LA lNSURRECClOl'I
ronel Sr. Heredia y el leniente Pirla. Con fuerzas de su regimiento 74, con el que tan brillantem.enle habia operado en. Mindanao el coronel Pazos, consiguio sonado triunfo en el barrio de Bilog-Bilog contra 1.000 insurrectos, frente a Talaca. Estas tropas, de la linea. Baiiadero Tananan , dirigidas por el general Aguirre. tenian gran cuidado en impedir llegasen a Talisay y Silang los numerosos grupos fijbeldes que a toda costa querian, bordeando el Maquiling, acudir a aquellos lugares. En Mindoro fue asaltado el convento, robando los rebeldes la caja parroquial. El celoso gobernador de ia provincia Sr. Lillo recorrio con el cafionero BulUisan toda la costa y capturo importan.tes agitadores, los cnales fueron condncidos a Manila en el citado cafioner9 y en el Brutus. 11 . Politica die atmcci6n. Una circular del Gobierno general. - De gran
EN FILl'P{NAS
3-iJI!
impoI'tancia por su _F)F@pfa i.ndo1e; de eficacia seglilra ~11 otros eHmas habitados :[i)Or raza· memos SlJI[l.iH~rsUciosa; de magnal:ilimtcl'ad li}(i) 4am. pr,em.iada rior el gx~1l@ cual dellliera haJnerlo resutfalfto, foe la ch·cl!J/lar 4i~ 1 rigrd'<l a los J~fes ·de iJ)ir@iViJJil(CJ:a, di:strito y Jefes m-il:itai:es ·de ,wDl!liml:ilas v.olantes, d:i:otada, [WOr .e[ Sr. 0:elilera~ Blanco en 11, lile Octubre. El docum:enrt@ t,alil expresiv@a IJlUe alud:imos dice asi: «Gobie:rno gmie1·a1l• de F~Pi,pifnas.-$c- cr-etwria. - Seoci6rv de politica,. -tJir,,cu/a,r. - El gra:ve sl!l:ces@ cyi!te) ha fa~/nido realizaciom em· a!lgunas de esitas IpFovincias, de l!J:alilei;se Iev:an.tado e;n armas contra liltteshras in-sti,h1ci(i)lile& , rnuchedumlirnes iJ•l!lsas, ]!)l!Ie~e ]a eon.I siderarse c@·mo a(i)mq_nad@, JiH!les· el movimiento ir1srnr~ecoi@Iil.a[ se harlla actuahnenfie (Ht DH'ly C(i)Ffia exte·lilsT6>lllJ · localizado. >> Mienhras ese s11ces0 se cl'esm·ro-
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LA INSURRECCJON
llaba manifestandose por actos de fuerza de los sediciosos, necesario era extremar las medidas de rigor, sin consultar extensas justificaciones ni otra cosa alguna que pudiera entorpecer lo rapido y energico de la represi6n; pero desde el pun lo mismo en que se balla la insurrecci6n totalmenfo sofocada en casi todas las provincias de Luz6n, es de todo punto preciso, por altas conveniencias politicas y de gobierno, cambiar el sistema de correcci6n, informan- do el que se adopte en senfido de la mayor templanza y moderaci6n y en espiriLu de atracci6n . Porque s6l o por estos rumbos se podra obtener, de nna parte, justificaci6n y¡ ejemplaridad en los casLigos que se impongan, y . de otra y ¡ mas importantisima parte, el hacer que r-e.nazca en los pt1eblos la tFanquiJidad que tienen perdjda, ademas de por otras causas, por temores cle castigos desacertados; y el que se inicie un mo-
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EN ll'IL!Pi'l!!<AS
vimienfo de reg,vesi6R 11ada la eausa: de la PaitFia ]))@F parhe f.dJe a:queticis que pueda!El ,s.enbirse imleiJiirnrd<ils· lfta-_ cia la de la lf'ebeliJ(/Jm,, pIDr ·tibiezais u otros m@ti v;os. En taL ¥.irtud, euidar ra V..... muy. espec-ia1men.te d'e n0 disponer J»risi@n.es que l!l@ se haltelil jusUficaclas pIDr uma grave CID:!'ll@lli:eacion en ios sueesos aebuates, 6 oo conduzcan a i.lil.w~sti;gar las eal!ls·as (!);e estos, de incu.lca,r alilem·as e:m el am1imo (il.e1 veefoda d<il · la seg·urlolad de que Ill@ ban cl:e d.i<1:tarse rep11es i@:Jiles in.justificarl!as, y la d.,•e (\l]l!l,e el p~·@B)6siifio de!J. G@b·~emlil.0 es de fa ~ayol'! in1 dulge1il.cia respee•b© <11.e iltod'@s a(j{lile'l'hos I ql!le, sin haiber i,flterveniid:0 a@tri\!a Ni ' gravememte em. fa re1>e~i:oD; mll'es1
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tren a·rrepelil:ti0i1ielillli0 sfarnero & llilI!Hil
leal adhesi@n, ·x fiIDcalroeID.tte, p@ncka 1 V..... en J:>ractiea il:r0da 0lase <11.e ·me"' I d.ios adec1,rncl'0s para tJ:Ue @so.s plilehlos vuelvan a la vid'a 00111®:ail ellt lf:0! dos sms 011denes, y, M rest,a,blezea pil'r I completo en el~(i)S ia li:L'a:Jil(iJ;t:iiJ~tlil~d y
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la paz moral de que tan necesilados estan. ÂťDios guarde a V.... muchos anos . .Manila, 11 de Octubre de 1896. Blanco. -A los jefes de proviocia y distrito y Jefes militar~s de columnas volanles. Âť â&#x20AC;˘
Con el espiritu y letra de la precedente disposici6n, segurament e nadie se identific6 por modo tan completo como el Sr. General Aguirre, lealisimo amigo del Capitan general de las islas, ademas de fiel subordinado; y el paso por todos los pueblos y lugares de la comarca Laguua - Batangas de este general y sus tropas era celebrado, aun inmediatamente despues de hecnos de armas importautes, con fiestas de paz, bailes y luminarias. Pero l es que tates muestras de adhesi6n por aquel distinguido soldado recibidas, y en las que-la buena fe podia asignarlas sineeridad, tenian este caracter? jAh! Despues de
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EN Fil!.IPINAS
las deee:pciones su,faridas
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M 1ugat
a pensaFl@ as1: la aetaa1l insuF1'e0ci@.lilJ de Filipinas ha paitientizad(i) tan en absoluto lo perfectio que es el il!ldio en el arte del fingimientg, (i[Ue sera difici,l hallar quien le igua.J.e en. expresar Jrn~jor las aparieMias de los sen.timientos mas opu.est@s a los que posee. Nosotros, despues de taNta decepci6n, ya no pod,remos creer facilmente en la sinceFidad de aqw~ll@s i,.n<iLigenas. Ai- Ji)r@pi@ tielllil•fl© <iJ]U acl!Hliam los vecinos de puebl@s de pr@¥-incias liimitrofes a Manila, que recibian con frecuencia visitas de los natQ.rales de mas valimient0 y sigmifieaci@n, a ade11irse a la cal!l.sa de la l?atria•, agaa1jando ruidgsamente a n.1ues-tras va1~he~tes tr0pas, pub1' cabanse va!l'i@s decretos como el siguiente: ccM(J,nila 19 de Octubre de 189(1.
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»En vista de <!J:•Ue el pir@fes@r (ffil!l.11foo del Laborait01·i@ muniei1pal de
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esta capital, D. Antonio Luna, aparece complicado en los actuales sucesos, de conformidad con la Direcci6n general de Administraci6n civil, a propuesta de la Inspecci6n general de Beneficencia y Sanidad, y en virtud de las facultades de que me hallo investido, vengo en declararle separado d!;ll expresado cargo, sin derecho a percibir haber alguno, sin perjuicio de lo que resulte del.expediente justificativo a que haya lugar. ÂťComuniquese, publiquese y vuelva a la Direcci6n general de Administraci6n civil a los efectos que procedan. - Blanco. Âť lQuien que haya residido algim tiempo en aquellas tierras de la Patria puede ignorar que 1os interesados en disposiciones cual la que aca~ bamos de transcribir eran los que mayores muestras de respeto daban a la dominaci6n espafiola? Exterioridades mentidas; politica solapada,
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eso es lo qu.e NB.icamenhe :praeti.caba0 los enernig0s de Esria,fla em !Fti1li!f>'iriias. 12. Reg1·esa a la Peninsula el genercal Echa;luoe. Nuevas partidas. Sublevaci6n ~n Mvndanao. Conspiraci6n en Jol6. El Genera,l segHd@ Cafu@, el vateroso, ilus·liradisim0 geuexal iD. Bernardo Echaluce, estaib a seriamente enferroo: sintomas evidenfies, pat@gnom6nicos, de un estado de a0em.ia ~erebral pr@<ilJuger@n la (i)rdeJ.il. term.ililan,t e de [0s <il,i sti,mgl!lid(i)s medic0s que le asistian. para su. regreso a la Peninsula. Y asi lo efectu6, ernbar, candose en el Antonio L6pez-. Cabatle1 roso por modo e~cepciolilal, el ilu_stre veteran@ de la gl0ri0sa AFtilforia espaflola n0 qu4so aiban<ilomar aquelfa ti't.rra de la PatFia, silil relildir homenaje publico de respeto y afecto ha/ cia su genera,l y buen amigo el set iior Marql!l.es de Peii.a Ji>lata, y hacfa las autoridades cle Ias is!:as y e0r,po raciones religiosas y socie«fod h@da, \
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de q11ienes tan grato recuerdo se llevaba. En nota afoctiva despediase desde las columnas de la prensa de todos, esquivando con verdadera humildad toda ocasi6n de que se le expresase solemnemente las simpatias extensisimas de qu~ gozaba el valiente habil caudillo de San Juan del Monte. Casi a hurtadillas se embarc6 la vispera de su salida; mas no hubo de valerle la treta, porque antes de que zarpase el barco que lo habia de conducir a la Madre patria, desde el Capitan general hasta los mas modestos funcionarios y .particulares, acudieron a dar el adi6s de despedida al esclarecido militar de quien se trata. Aim no hemos visto, a pesar del tiempo transcur.rido, las interpretaciones practicas que a los poderes publicos ataiien para el prernio del bien obrar respecto al ¡general Echaluce; pero es seguro n0 ha de resl!l.1tar olvido para el mismo; si tal aeon-
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teciese, seria enorme lesion de 1os principios mas elem en tal.'es de la jl!lslicia distributiva, pues no pued'.e perderse de la mem.oria la conducta seguida por el General segundo caibo de Filipinas, el cual dmante tres anos consecuUvos pateF1tiz6 1\an relevantes cualidades de soldado y <ifo hombre de gobierno y adm.inistraci6n. Vecinos de Taal, Lemery, Calaca, barrios de BayuyungaD y @tros le-vantaronse en armas, form.a1.,1<il.0 gFue~ sas partidas que iotenta,r 0n el 23 pasar el Pansi)llit, vadeamdolo por .San Nic0las, cuy0 destacament0; con el auxilio del de Taal , qve presur0s0 ' acudio a prestarlo, bati6 e0m.plet:amente a los rebeldes. EI geme:rall Jaramillo desde Balayan y el general Aguirre desde el Baii.ader0 intervinieron provechosarnente: el prime, ro aun encontr6 los gmi;>os a la ~e1 recba del Pansipit, acaba.ID.do de dispersarlos, y el segundo aca.M de
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cubrir la cuenca de la laguna de Bombon. Los infames soldados iodigenas que componian la tercera compafiia disciplinaria, defensora del Fuerte Victoria>> en Mindanao, se sublevo acuchillando traidoramen te a sus jefes militares y al distinguidQ medico de Sanidad del Ejercito D. Felipe Trigo, quienes milagrosamente salvaron sus vidas acribillados sus c-uerpos. Com_etida tal infame fechoria, los re-. beldes huyeron por Piedras hacia los montes de Dengayan; para perseguirlos Iormaronse dos columnas al mando de l@s tenientes coroneles Lasala y Sanda; la del primero los batio, dispeFsandolos en Aguaran: la segm1da los castigo de nuevo ¡en Opal, cogiendolos algunos rezagados . Por otra parte,-el cafionero Manilmio hizoles muchas bajas. Se desartno al resto de la fuerza discip1inaria. Un saFgen.to y un cabo indigenas afiliados al Catipunan de los tagalos,
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al poco tiemeo de :prestar SUS Servicios en el regimiento n.t1m., 68, que guamec:ia el arch1pielag@ de Jol6, alcanzaron hacer prose111tos para [F)roducir una sublevaci6n en. Jolo. El plan era el de siempre: matar a todo.~ las cas-tilas. El va:1ien1te gen.eFal. Eiirnrtas estuv0 admirable en este gravisimo caso: descubierta Ia conjm·a, inmediatamente form6se C<irnsejo Slitmarisimo y faierom pasados po1· la's armas dos sargentos, cinco caliios, 1!1:n corneta y un somate:m,: otros cGnju-rad0s fl!ler@n 00.ndema<il.os a cade:m:a perpetua. El general Ell!ler'llas, gober'Ilador de -J~l6, prest0 s@ii,ilad.is,ilfilo servicio, muy eID.c@mia<il.G rior it©dos. E1 Capi han ge.n,era] Sr. B~alfil©© 8,[Ii>lau1dia al dar parte de l0s hecb.0s la in.teligencia y energia de aquel bra,vo militar. 1 , Te,minaba el mes Ille Ocituibme con l operaciones muy vivas en. tomQ de la comarca mas seriamen.te 0cupada \ por Ios ins1urectos, !fl!lera de fa de I
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Cavite, librandose en todas ellas nuevos victoriosos combales para nueslras arrnas. Las lineas defensivas dejaban a cubierto de toda irrupci6n por mar para la parte mas rica de Balangas, pues los inteligentes generales Aguirre y Jaramillo la impedian con la situaci6n de sus tropas sobre Ja izquierda del Pansipit, desde San Nicolas a Lamery, y con la del Baiiadero. El general Aguirre cerr6 estas lineas al ir en apoyo del general Jaramillo, quien baLi6 por completo una partida de 1.600 rebeldes en la orilla derecha del citado rio. Mas de 100 muertos les caus6. Al propio tiempo los reb~ldes continuaban presentandose por cien lugares distintos, cometiendo toda suerte de depredaci6n e iniquidad. Villanameute asesinaron al valeroso tenielilte de voluntarios D. Francisco Chofre, de la importantis ima casa industrial Chofre y Compafiia, ya un primo suyo, empleado en la misma
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casa y soldado. d!:l vo1mntari0s: iban a sacar vistas fotograficas de los akededores del NaIDgea. Ca,rb(i)nizad@. sin poder ser reconocid0 casi, ·ajj)areci6 cl cadaver del primero d',e aqaellos j6venes temerarios, y horriblenrnn te 'mutilado el de1 segund0. Una c@lumna al mando del teniente cor0rrel Oloriz y comandanrte de Estado Mayor Olaguer, fueron a batil: l@s insurrectos de aquella zona, entre Mariquina y San Mateo.
13. Nombrn,mier11to. det ge,ner:al Polavieja para el car-gn de segwndo cabo de Filipitnas. - El 21, de o~il!lhre re-cibi6se en Manila un telegrama q,u e ,decia literalmen.te: «Se ha firm.ad~ hoy el Real decreto por el que se nombra seg1mdo cabo de esa Capitania general al 'FenieDte g·eneral ex_-celentisimo Sr. 0. Caimifo Polqvieja 'y del CastiHo. » · · '. Tan luego se conoci6 el tele~rama 'referente al nombramie1mto de se-
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guodo cabo en favor del General Polavieja, s006 la especie de que este ilustre General serfa quien relevase en el mando superior de las islas al Sr. General Blanco. La antigiiedad que en el cargo de Teniente general disfruta el .Marques de Polavieja, el ilustre soldado voluntario de 18~8. cuyo heroico comportamiento en cien victoriosas jornadas que cubrian de gloria las armas nacionales en tierras de la Patria misma, en las de Africa, en las de Santo Domingo y Cuba; su extensa reputaci6o, mucho menor todavia que su propio valer; el recuerdo de su mando en la isla de Cuba, conteniendo el alzamiento en atmas de los insurrectos de aquella gran Antilla en 1890, inicfa.do para emprender una guerra nueva, todo ello y lo mucho mas que de ello hay, hacian cree.r que el General Polavieja habia de suceder en breve al General Blanco en el mando superior del Ar.chipielago, y se anunci6 el
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pronto regresq. a la Perninsula dei insigne Marques de Pefi.a-Plata. A la vez que se com1rnica:ba a !Filipi.mas el n@m.h>raimiemtio dlei Ge11eral Polavieja para el carg(!) de segm1do cabo, se cl.aha cuenta de los que se • otorgaban a los gemern,l es de divisi:@EJ. Sres. Zappino , y Lachambre y a los _ de brigada Sres. GaHilis y Cornel, quienes acompana,r i•a n , al GerrnraJ Polavieja, y, que segmm el text@ dei telegrama @'fi0ial €2Il (iJUe 'ta1 as1nd@ se comunicaba, iban destiinados al Ejercito de Filip_inas pa,ra qu.e ei Capi<tam generaf l@s empTease segMlil t e. • . creyera conv,ernen ,_
4spect0 de la, insu1·1Peccion al terminar el mes de' <Jetubre. - Tg.r. 14.
minaba Octubre con el pr0blema planrtea<ilo en l(!)s mism(!)s terminos : al auimen'l:o de :hierzas })lelililil:sufares habia correspondli<fo iJI1ip0.rtant e aumento de fuerzas insurrectas muy L diseminadas. ~ra mer:rester recitlilir 23
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LA IXSURRBCCION
mas refuerzos; pero se continuaba batiendo a los rebeldes que se preseotahan, formando partidas numerosas eo. las vecindades de Manila, sin abaodonar el manifieslo obstinado prop6sito de caer sobre ella y poder emprender a la vez el plan de reconquistar la provincia de Cavite, pues ya bemos dicho, y bien sabido es, que casi por entero estaba en poder de los rebeldes. No se eonocian con precisi6n Jos elementos de guerra con que estos contabao; pero era cosa clara la importancia de los medios por aquellos acumulados en toda la zona. Por nuestra parte, ademas de hombres, se precisaba sumar mas recmsos de material d~ campaii.a; es claro que el Tesoro publico acudia con cuanto era posible: consumia en las obligaciones a cada paso agrandadas las propias existencias de sus¡areas y las sumas que como anticipos de inmediato reembolso arbitr~a; asi y todo haciase indispen-
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sable prestarle cuant(!) auxilio el pa~ trioHsrno t0graF f)t,rnl\iera. _ El Casio.(!) espa:fu(!)l biz© 1wge-nte llamamienito a tal deher. Si alcanzabaa exito las suscr·ipci(i)nes por aq1rn1 centro abieFtas para l))P0c1,rnar obte- • aer recursos meta1icos y desfii,'J.itarl@i'i a proveer de material C(!)nvefrieirte y aun ind,ispensaMe al lllstacl.o, com.o el tren sanitario y lanchas de vap@r, socorriendo a,l propio tiemr,o a viadas y hu_erfanos de l(i)s que m01·ian. · en la gl!le'l:Ta, y l_l)a:ra p11em~ar actos como el d'e _ios telegrafil.stas ingen.ie'- ms de Kafaganan, cuand0 el dol0r@so hedho llevado a calilo per la t~rceFa compa:fuia disci:l})ti,naria, la :remon-ta voiluim,ta,Fia QJl!Le ailllri:6 pa,r a propor:ciona;r cabaU@s al Ej'ereito iitia dando gran resaHado, estflbleciendose entre los .gobernacl.Qres de Ltizon verdaoer0 pagila:to de estimu,l@ para e'l!lviar alf Casi,lilo cl'e Mani-la eol'll tal fin e.l may,@F !llltlmero de calll>aales que les e:ca P?Sible o~ten.er p0r de-
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nativo de los leales. Todos los gobernadores de las provincias se dislinguieron por su celo en este servicio ; pero alcanz6 en el la mayor altura el Sr. D. Joaquin Oliver, que estaba al frente y aun hoy manda la provincia de Pangasinan ; el solo ofreci6 donar, en representaci6n de todos los pueblos de aquella, los i60 caballos que era preciso reunir para el escuadr6n peninsular, pr6xi. mo a llegar a las islas. Considerabase preciso disponer de muchos recursos mas de los que se coDtaban en aquellos dias, para aco~ meter las operaci@nes sobre el gran foco insurrecto de Cavite, aun cuando la opini6n se inquietaba por momentos, y no oeultaba su_anhelo de atacar aquellas posiciones en que el enemigo cada dia se iortificaba mas y mas. Alli practicaban Jos rebeldes simulacro ridfoulo de una organizaci6n que llega:ron a sonar detinitiva, y laboraban euc1Bt0 podian para el
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levantamiento de tod9 . el pais c@ntra la dominaci6n espaii.Qla, que gshe y no 0tro, c@mo venim©s afi:rmanoL@, es pa11a nosotirns er caracter de la ·illiisurrecci6n tagala. No pudiend@ evitar ya la 1')esadez · ·im.so:pQrtable de 11n1estras }llrresel'l:tes paginas, la agrandaremos, siempre esperanzados _ de perd6n, traascribiendo literalmente aigun@ .de los muchos1 p0r n@s©trns c©msi<!l:era<i.l'©s testimonios bona fide para mrnstras afirrnaciones. Una carta e~v:iada ifi)@I' l@s d.e Cavite a signif\icadc, i•ncl'ivi<!11rn i.m.digena pudiente de Batangas, ,expres_aba, entre las injusticias y em•b ustes que contiene a~11l!lel d©011wemt©, el se1ll.ltimiento de imdependencia que informa a los rebeldes tagal@s, en los terminos siguiernt:es:
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«Hay un sell0 marginal fo·rmado »con una letr..a H1 inscripta en -el »centr© ae wm. eirnu.I-o de :rayas en
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I.A I:SSURR!CCION
))forma de greca, y despues tres 1111»ciales: K: Ki K - Z. LI. B.-Mi,,nisterio de Fomento. - Aunque no »tienes el gusto cle conocer a esle tu ))hermano que te abraza, me tomo Ja ,,liberlad de escribirte, por el gran >>deseo que tengo de que tu y todos »los que estao a tus 6rdenes se vean ))libres del peligro, pues siendo tan »listos como sois, no os moveis ni »haceis nada por la union que tanto »desean los filipinos para desasirse »de la esclavitud en que hemos na»cido por nuestra sangre, y de con))segnir la debida independencia de »nuestra raza. Por consiguiente, her»mano querido, esfnerzate y entu))siasma a todos tns _subordinados, »que yo creo qne todos te seguira:n, »pues segun las noticias que he re»cibido, todos vosotros estais dis»puestos a hacer frente a nuestros »odiosos enemigos, ya fin de que no ))OS sucedl!_ nada, no creais los fala»ces consejos de los espaiioles, pues
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»desde el principio tio nos 1tan: he»cho :oingan biem, antes aJ c0atra»rio, todos b.an sido emgaiios: :porJo »cual, tan ;prmato com@ recifuas esta, »n@ tengas mied0, guanlal:@ Jentr@ »de tu coraz6n y esfuerzate e:a eaga·»flar a tl,1s enemigos, a :tio de que lil@ »sean sorpreadidos mtroh0s de ·10s »co.mplicados, cosa que serfa u,r,ia »lastima. - 'fer1 enbemdddo, q1rnrib »nermaoo, q11e aqui en nuestro cam»pamer1,t0 estam0s o@mpletamentie »t1:aQquii0s y rein a la paz y la aJe»gria, y nos consuel~ e] riensar que »ya estam@s coms·ig11ie:n,d0 la vioto; »ria: ya no quieren '.batirn.@s :ol!lel,J, »tros enemig@s, y s6io se conten.tan / »con bombardearnos, n,@ h!aoielil.d@ »conseguido matai·nos mas <iJUe dos; »fi>Or eso, ten emteJ.il.cl.rido <!Jl1e este >1auestro pt70r,>@si'to es l!llil!a graeia cl.el l »eielo para 10s indios , - N0 crea1is 1 »a las mentiras (i).e l@s peri()dicos, »pues t0dos S01il. e11gaii.0s a l@s (l]'~ .esa, ,paca atemorizurlos, co~! sucede.-
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LA 1/ISURRECCION
»Recibe un abrazo de este tu herma»no que te compadece, ya todo tran»ce desea libertaros de las garras de »nuestros enemigos. -Emiliano N. »de Dios. ii
He aqui la fiel version al castellano del ol'iginal tagalo a que aludimos, y en el, como en millares de documentos interoeptados, se observa una sola nota: la de querer obtener aquellos pueblos su independeneia por medio de la matanza de todos los castilas. El sectario Ag.·. Car.·., de las logias de San Fernando de la Uoicm, escribia desde Balabac, a cuyo punto habia sido deportado por el Sr. General Blanco, lo que sigue: · «Querido Gabino: Me alegrare que »esta mi carta te halle bueno de sa»lud ... .. Estando a(m en San Feri>nando no pude escribirte, porque es»tabamos preparandonos para levan-
EN Flh!PINAS
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1>larnos degollando a los blanc0s .. »Tenemos _aun espera:n!la, aynql!le »estamos aqui desterradbs, porliJue »soil nrnchas aurflas al\mas que hay »en Naie y son fambien. muchos l@s i1que nos siguen; por lo tan.to, proc11»rad em1pezar ya a:bii el aJzam,iembo, a »fin de que se dividan las tropas que »vienen de Espan.a, mayorl!lilente , »porque ellas seran las qm:e m.@s b.a-, »ran sufrir mas a los filiph1.0s. »Procurad, pues, em}!)e!lal' ahi prom.to »y que se !le¥ante ahri tloda la gente, »pues seguramente hay ahi tam.bien »armas que llev6 un va;por y dicem »que son 'todos Mausser.-Si t0davia »no hay armas, m.aada preguntat a'hi »en Bamtay ail ·capiita1IJ. f., ,por(!J;ae 'el 11es el que las habia de reoibiT para 11que no se apercibieran. - Nos0tros »hemos tenid@ mafa Sl!lerhe; {:l@r<:J:ue »estamos ya encerrados; per.o aun- »que sea asi, pronto p@drernos salir »1ibres, porqu.e se han distribu.ido fas »armas y no fa1tara quien venga por
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LA INSURRECCION
J>aqui de los nuestros a Jibrarnos. ,,Sabre pronto lo que haceis ahi vos»otros. - Esto es lo que te a visa tu ,,hermano mayor que te quiere, nAg.·. Car .·.» La insurrecci6n naci6 en las provincias tagalas ; pero obstinadamente los conspiradores trabajaban para generalizarla en todas las islas.
Slntesis de los P,rincipales acaec~i.entos en el mes de Noviembre de l/8â&#x20AC;˘9 ,6 .
+ 1.
Breves cor1Jsidemci@i/1Jes wcevpa del pub/Ii.ca en los rpvri--rmeros d!F,as de No.viemb~e.-.iW~,.; el mes 0
I estado de la @pirlli6n
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LA ISSURRECC16M
de Noviembre activisimo periodo de la campafla promovida en Filipinas por los tagalos contra la dominaci6n espaftola. Libraronse multitud de combates gloriosoa siempre para nuestras armas, mas lograndose en alguna ocasi6n la victoria a costa de dolorosas, enormes perdidas, causadas a nuestro ejercito ¡p or la gran superiorida d numerica del enemigo, en fuerLes posiciones atrincherad o. Mientras en el Archipielag o se vivia en tal actividad de guerra y se preparaban los recursos para terminarla, segun se creia habria de suceder, tan luego fuese reconquista da la provincia de Cavite, en la madre Patria se tomaban de continuo disposiciones para enviar mas fuerzas y mas material de guerra. Al nombramie nto del general Polavieja para el cargo de Segundo cabo, seguian los de los generales de rnvisi6n Sres. Zappino y Lachambre, y los de Brigada, Sres. Cornell y Galbis.
I.
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LA INSURRllCCION
mente que s6lo una de represion severisima era ]a crue cuadraba al caracler salvaje impreso por los rebeldes tagalos a la insurrecci6n del Catipunan. N6 eran la pericia ni el valor los atribulos que se analizaban en el general Blanco : esos atributos los patentizo ante el mundo el Marques de Pena Plala; no eran su ilustracion â&#x20AC;˘evidenciada, ni SUS talentos reconocidos, lo que marcaba diferencia de criterio para juzgarle: se discutia la magnanimidad de su caracter, producto tal vez en estas ocasiones de dos factores que, con ser heterogeneos, podian sumarse para pToducirla: sus sentimientos humanitarios y su propio calculo, fundado en la escasez de medios materiales de ¡que dispuso; tal era el tema que condens6 alta atmosfera de critica, elevada mas de una vez a acre censura, en tomo del Marques de Pena-Plata. El t\iempo es el ql!le ialla sobre el valor substancial de unos y otros procedi-
EN ' FU.ml!'!AS
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mient(i)s ,' y aun~e antes de q:ue -asi acontezca, ya [E>Ued.a coBsi•g]lar:se de parte de euat de l@s que se ernpiea!Iil esta Ja may@r raz@n; fo q:ue M soi© ' pide en tas graves asm1tos J a _cir., eumspeccion, ::;ino la jNstiicia, es' Iil(i) dudar, sobre la J!>Ureza ,<fte ~as i.ll!t~Dciones 11i dei lililil'(i) 'lili d,e 1@s ·Ciltros. Hasta q_ue <iruei cl'eselilgafi© vi,lil(i) it aleccionamos aeerca cl.e fa i'Iilg'iJ'atiif:Ju<fli' de los taga.ilos conba Ia cil@ml)laCi@n espano:Ja, Ji.10sot11@s miism(i)s., i!i.lf@r- • malli.do.rws eB espiirifa die la maiy@i· COiiltianza e;n aqhell@s il'ldiigeTuas, Ji.l©S lll(i)v!'.a:m@s en la esfe'lla: <!le IilNestra:s , ' jurisdlieci@nes cN[ltiivam,do esa jp@hti:ca I de a,tracci<blil. COD esmere>: FJ.il'as (/lespues de alcanzar 'lil©c:i:00 f,i,ja cl'e C©lllil:© se interl,')retaiTua emtre quiemes ma-F)eja,rnn sofo la p01'4ltiea s0la;pada, la pi@).i)fa concteneia nos rn1anc0 e1 ci!eher de mirar c0a j,l!lstiQS ['ecetos cl!Lanto 1')T@~ cedieFa el:e muestr@s lil.,i190cJliitias ene•migos. El m.ay@r @ meMr g!l'.a:d@ ~e esos reoeio§ era ~o qu _diifere!lcfa,ba
1 '
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LA UISURRECCI6N
los criterios, y aungue no ha lugar a duda de que el del Capitan general Sr. Marques de Pena-Plata concordase esencialmente ¡con el que sosteniamos la mayoria de la opini6n peninsular en Manila, pareciaoos distanciado uno de otro, y creiamos ver len litudes en los procedimien tos para el castigo de los rebeldes, que vehementemente queriamos nosotros fuese rapido. Era explicable el hecho por la diferencia de responsabilidades. 2.
Aids tropas peninsulares. Otra vez Rizal en Manila. - La llegada del vapor Col6n aument6 el dia 3 de [No0
viembre nuestros .. recursos: traia 1.383 hombres ( un batall6n de cazadores, un escuadron de caballeria y una bateria). La 0vaci6n que se tribut6 a estas fuerzas fue, cual la otorgada a las anteriores, inmensa. Reclamado por el Juzgado mi1itar, en el mismo vapor Col6n lleg6 a .Ma-
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EN F,l!l:,n>INAS
nila el doctor Jitizai, ef!10 p©c@1 awtes · habia sido elilrviad(') a l!Jspa,n a a diis-posicio0 d.el G'@li>!ie,rmo d1ria me'lll'/f>Jl)(')'li por (:)p(il..e:m det SF. General1 iB[ami0, d.ada em. m@ment©s en (i[lQe, a: 1)1(!) d111-dar, la perrnanenci.a e0 lvlamiiJ.a llliel gran. agitador tagal@ era u:m estim:l!l.l@ para lciR iNsurreot:0s; c<msti.tll!!Jira g1mve riesgo, diat iaaarnmte a:m.l!llll:ciiad.'0. El ace·rrimo enemigQ 61:e l0s _espallii@les, a q11jenes cf>menzo ·a i.11.il~•Ull-ia~· desde fa prim.era wagima, l~meru'terce- • ra, de s•l!l Noli me tarog;iYte, (F)aita ltel'm•k · mar 0rgaro.izaind1© [a <i Liga F:i!Uipiimt », e@lil CUY,QS Ji}l'OCe©iiil!IilireJil.t.Os, CQ.Iill)_(i) C(i)Jil. 1
1(:)s <ii.el Catii;pl!lman, cl:e~fa'El a<qu:eiQ0s
Iser todos degQllad0s, ·bie:!ll [J_]l{)(/Lia .obsel'var, aun.q•t1e esfu viese airwilsr0ma,,. do, los horribles eiec·ti(i)S die fa pu@:Ji)ai ganda que haibii a c0l!lsu:miol:0 tanita:s 1aotividades de sm. eei·eTuJJ@ _en c@~-ges- , · ticm cr6nica. Q:y,en.ol@, seg11m10i:a, Iii.es~ ~ de su enca,rceiam,ie'lil•1'.@ .el O@:Jil)tiiJilu@ I estampicl.@ de D,11eslll110s cafii:@mes y, et 1nu:tricl.o fueg0 de tfim$iforfa; 01!lseirvail!l.,.~ g4
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LA INSURRECClON
do, aunque a traves de las rejas de su prisi6n, el movimiento de entrada y salida de tropas; la conducci6n de convoyes de heridos por la grosera metralla de las lantacas rebeldes, las balas explosivas y las lanzas envenenadas de los crueles sectarios por el mas que por nadie congregados a millares para destruir la Patria y la Religi6n y procl~ar una salvaje independencia, pod.fa Rizal holgarse de que su consejo dado a Valenzuela no hubiese sido cumplido y de que Andres Bonifacio, el presidente efectivo del Catipunan, hubiera producido el levantamiento del pais aun prematuramente. Rizal aguardaba en la Fuerza el fallo de los tribunales de Justicia militar, y aun cuando nadie, conocedor de la constante demoledora obra ¡ ejecutada por agitador- tan fanatico, pudiese dudar ni dudaba de cual habia de ser la justa se:ntencia que aquell<!ls dictasen, mostr.abase el tris-
EN FIUPINAS
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temente celebre pr0pagandis'ta tagalo confiado &e la imfJ.uencia que ejerciera en SH calidad de jefo de la rebeli6n: en sus inc0mparables vaffilidades, jamas crey6·que l0s rigores de la ley pudiera,n caer sobre el. _
3. Los rebeldes de Bwlaclin. Combates en las m<ilrgenes del rio Nangua yen San Afateo . Otros en,cuentros y dif,er·entes sucesos y qioticias . - 'La po1itica S(i)lapada en Bulacan, no p@clia ·alcaniar :may0P altiura s~t hi'fl)@c:rita retii,nainienlllo : hlilbo alfi capita•□ mumcipal que p0r su condu._cta d11ral'l:te los d-0s primeros meses de insmrrecci6n, lilabiase visto co1,1deccmado J!)(i)F su lealtad con !a med.alla file!. MePilto ' civil: babia ido a Manila pa,r a rrogarr 1 a los RR. Curas parroc@s de alglil.nos pueblos, que se habian retirad@ al convento de San Agustin, acu~ diesen de n,ueviil a sus :par:r@qlil.fas, em doll.de Eafila mah> hall>:ria de a-ci;)l!lte~ . cerles. Y, en efecto, a fas 24 h@ras 0
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LA DISURRECCI6N
aquel taimado municipe alzabase en armas capitaneando de 400 a 500 hombres, y se lanz6 al campo, apode-randose de cuanlas armas existian en el Tribunal de su pueblo en aquella zona; casi todos los principales que manifeslaban adhesi6n a la causa de Espana, con mas insistentes exterioridades, resultaban favorecedores de las partidas rebeldes y reclutadores de las mismas. En toda la provincia podfa observarse y sospecharse el hecho, pero muy especialmente en Polo y en Bocaue, en Agon..9y y en Pombon, y en muchos barrios importantes, cual el de Pamaranan, de Malolos : las partidas formadas alli se comunicaban IDuy facilmente cuando merodeaban por la costa ; pero tambien les bastaban cuatro 6 cinco horas para reun irse en mimero no menor a veces de 5 6 6.000 y acudir a los llamamientos que, desde la sierra d.e Angat con frecuencia les dirigiaIJ1 los cabeeillas Jiraldez y Liane-
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ra. Para col.),centrar acprnnas fuerzas in.surreetas emplean ~ms ~ebe1cl..es ldos sen.ales: la mas g¡enera,l 6lS la de encender hogueras a 6 ;n 8 metms de ' distancia una de 01lFa' dam.dos~ I0s llamados como advertidos, en.cendien.do 0tras ea e1 mismo seatii:d0, mientras con toda pres~eza pr0CttFan congregarse para acucl.ii.r al cumplimiento cl.e lo ~prn se les manda por tal medio. 'l'aml:ilien 1!1.san para igua~ fin el de ios globos eam,ti;v0s, (iJ}l!le sol@ tieneN en sttspe&s<:> dlllranifie mecl.ia hora. En Cacaron de Sire, refm~io de ¡ l0s baFidfol.@s de may@r tFi:ste fama em. 1 Ias provin.efas de Man'4la y Bm.lacan, I y lugar del que -v0lveremos a- ocuf parn@s, ib.acian l0s rebelde,s 1m1ad.blo ' uso de es'tos gl@bos. Las partidas insurectas, ademas de atrinc'bterarse eN fas Jl)Osici@,I!i.es mas ventajosas de la co-marca, hacia,n frecuen tes vandalfoas c@rrerias; ellas descami1ar@li1 1os 'LFeries del ferr@carril de Dagupap.; ellas aoometier0n
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LA INSURRECC!6JII
varias veces el pueblo de Caloocan; ellas erao las que atacabao coovoyes de viveres como el que pasaba por Quibiga, entre Malinta y Novaliches; ellas eran las que cayeron sobre Bataan, asaltando Orani y Hermosa y Moron; ell as las que asesinaban y secuestraban y las que se apoderaban de Los ganados de la comarca, y ellas eran y son las que, despues de haber comelido tanto crimen, para exaltar Jos sentimientos de los indigenas contra los espaiioles, quienes solo en buena lid pleitean, pretenden llamarse y se titulan ÂŤbibin ta na sa-tin maflga ca pa.titÂť ( vengadores de sus hermanos). Entre la sarha de embustes y -supersticiones que manejaban los conspiradores de Bulacan para inscribir adeptos, era muy empleada la absurda especie de que los indios qwe eran aprehefldidos por los espafi.oles eran inmediatamente conducidos a remotas tierras, para destinarlos alli a servir de bestias de car-
EN FILIPIN>\S
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ga, y decian q1:1e mientras est@ se efectuaba ( el traslad@ de resideJllcia) se les taladraban 1as ma.nos para nnirlos de dos en dos }:)Or ~eda(i) de grueso alambre que les lbfoiera imas dilicil, si no imposible la iu.ga: asi levantaron pueIDlos ente1¡@s : coa ca1:umnias tan irufai:nes C(i)IiilO inver@similes por su propia exptesi6n. ;_, Cuantas al:mas lilab>ia en An:g:at el 20 de Noviembre al enilra,r en aque1 ~ueblo i.mportante 1rna de m1.estFas coltun,nas? Cinco l(!)er.sonas : @l coad:j~tor de la pa:rroqu.ia, ef caJPita1il municipal, otro caÂŁ!1itan l)as&<ll@, el ju.ez de paz, una mujer Hamada C(J)beza, iA,na y un in.di viduo de la princ~ 'palia. 1 Y la rec(i)nstituci6n en este, como ,en todos los pueblos e.n que tal aconlte~ia, haciiase dificil. Al!llf.il. c@D el tin~ con que proce&i6 en. Angat el jefe de tla columna a que nos â&#x20AC;˘.referim.@s, fuerza destacada paira aquei p11eb10, a los tres d~as de permanencia, no se 1
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LA INSURRECCIO:N
pudo obtener la vuelta al mismo mas que de 32 vecinos, y hasta un mes despues, el 8 de Diciembre, no se logr6 la vuelta a sus hogares de unos 400 habitantes de los que poblaban Angat. Cuentan los rebeldes de Bulacan recurso poderoso para esquivar -con exito los encuentros con las tropas que les persigan: tal es los montes de San Mateo; cuanto se diga para aftrmar lo abrupto de aquella cordillera es poco; un ciento de hombres, disciplinados no mas, sin que lie: guen a ser valerosos, pueden detener un Cuerpo de ejercito que se destine a darles caza; en estribaciones de aquella cordillera, el valiente sargenlo Valverde, del pueblo de Montalban, se bati6 coo nueve guardias civiles y de meseta en meseta, hasta llegar a San Mateo, contra dos 6 tres mil hombres de Llanera, entre los e1rnles It> menos iban 200 soldados indigenas desertores. Valverde oper6
£N ll'I-L)PINA,S
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LA INSURRl!CCI6N
carretera olro parapeto de 2 metros de elevacioo, coostruido con piedra sin labrar y con pilones de los que sirveo para la limpieza del pa lay: una triochera de camino cubierto dominaba la trio ch era circular, y por aquellos medios protegidos quedaban los 500 hombres enviados por Llanelia a aquella interesante posicion. Con el fin de auxiLiar a Valverde y sus valerosos compafieros de armas, salio el capitan Arroyo con una columnita compuesta de 60 cazadores del batall6n num . 5 expedicionario y 12 guardias, itegando a las diez de la mafiana del dia sefialado al paso del rio Nangca de que se trata: una vez alli, rompi6 el fuego, que nutridisimo sostuvo durante siete horas, y cuaodo a las cinco de la tarde se ha116 sin municiones y con heridos que precisaban cristiana tecnica asistencia, emprendi6 ordenada retirada a Mariquina, siendo tenazmente hosti-
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EN FILIPmA-S
lizado por. el eBemrgo, al cual canso muchas bajas. El capita.a Arroyo pidi6 refuerzos a Mallilf.l; mas amifles d!e · que llegaran aun sostuvo el dia 4 n1J1evo victorioso combaite coiil.bra las mismas posiciones rebeldes, auID.que con tan escasa fuena Ro las tomase. Con tal problema en aquella zona, el Capitan geirnral orden6 la salicila de toda la fu erza <!i~pon,ible del regimien,to nu®. 70) pa~a que elil.. San . Juan del Monte se J1lUSiera a fas <i>r- • denes del c@r<mel Pii nrt@s y de eslie recifuiera instru.cci@mes. El cl.!is•~ilflgl!l.iid'o coron.el, qu.e taato ha tra,bajado en la actnal cwmjj>aii.a, 1m,i6 a a,i1;-ue)la i~erza mandad'a p@r el capitan Inigo . }'1 los teniemtes iBu ,i,IJ.a e Hiaiii.ez, <ilomesl!a de 85 individia@s de twpa, iauso los gastad@res, u.,nos 10 0 ,12 wrl'eros de aq,uel destaeament o, y; el piitan D. Ra.m@n D.@1:1da, cl.el m.i,sm.0 erpo: mas am ~iguo ql!I.(~ el cl e iakmteria Sr. lii.igo, t@m6 1>0rda el
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t•a,io de •IJOella irnpa ooasl!itlltda 1
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LA INSURRECCl6N
en columna destinada a procurar a toda costa franquear el paso del Nangca y salvar el destacamento de San Mateo . La pequefia columna march6 inmediatamente a cumplimentar orden tan apremiante, y reforzada por ultimo con 35 cazadores, 12 guardias y 6 cuadrilleros, despues de conferenciar con el capitan Arroyo, quien les inform6 del numero y posiciones del enemigo, hizo rumbo directo hacia las mismas. i 142 hombres ihan a hatirse contra 6.000! ... . Cuando aquellos pocos se aproximaron a estos muchos, fuertes en los atrincheramientos que tenian hecbos, nuestro pufiado de soldados se_ dispuso a\ comhate con arreglo a los mas sabios preceptos para librarlo . Abrazaronse los dos capitanes al acometer tamaiia empresa, y la columna marcho en esta forma: el capitan Inigo con el teniente Bonilla y 32 hombres formaban la extrema vanguardia; el capitan Dorda con 90, el
EN F!Lll>INJl,S
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centro, y el teniente Ibanez, coa 20 hombres, cubria la ,i,etagitilardfa y la impedimenta. A la salida cl.el bar:ii'io "de Bayambuyam ~lugar -Y sitio en que taR iinfamemente rueron. asesinados los jovenes Chofre y Morris}, ya ball6 esta columna una vang~iar'11Ua enemiga 111ue comenz6 a :ln.os1i[ii~ zarla; pero con tan.to lil.eDJuedo la d.el capi:tan Iflig'0 a~a,Š@ a aq,u ellai, q!l!le huyo a la desbandada, en diirecci6n tile sus atJ?incheramien'tos sobr,e e1 Na,mgca. La columma Dorda lfog6 al ri@, venciendo los obstaoulos de vege'haci6n que ell g'l:',urdes masas interoepta1han el cam in@: ea la termiiRal .d:ei mismo, el fuego de fusUeria y lan,tacas descargad:o co!i).tra la c@l11i1.m r1m if!iil.e rl.utridisimo: a el contestailla.Jil briosanl.en te los nuesti:os, cmyas gm.erriJ.11.as , y asimism0 las reservas, esta~ lhan tumbadas porno ser p@sible que madie es tuviera alli de pie; <ftespu.es de dos horas de lucna nmy cl.mra, se acord6 que el capitan Ifiigo, el cual,,
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LA INSURRECC16N
por sus servicfos en la Guardia civil, conocia a palmos aquel terreno, desplegase por el ala derecha con el fin de lomar el primer tambor y poder batir de flanco las lrincheras y parapetos, mienlras Dorda, con el teniente Ibanez, se batian de frente. Cuando Inigo dispusiera avanzar a la bayoneta, el resto de la columna habia de hacer lo mismo en el sentido en que venia batiendose, es decir, de frente. Asi se hizo, y el exito fue colosal. Aquella masa rebelde se descompuso de tal manera con aquel ataque tan perfectamente calculado, que la columna asalt6 todos los parapetos como un solo hombre: no puede decirse quien fue el primero, porque por igual concurrieron todos al memorable hecho que sintetizamos. Hubo un instante en que el valeroso capitan Dorda crey6 muerto a su compafiero el tambien intrepido capitan Inigo, pues un rebelde se encar6 coo este disparandole una escopeta de
EN FNIIPlNA,S
dos cafiones farngo celilfra!J; p«wo c0nw , al mism@ tigm,p0, c@n 'llila'.)il@r (ortu~ na, 'gl capiM.,m lil.iii,go dl:sf>aF@ su rrfil.e c0ntra aqme1 rebelcl,e, este f,ue el qu.e cay6 m.uerto, resu[:tand@ se11 um eabecillla, desert0r de ~a Gl!la,rd'.ia eivhl,. La columna rec0gi@ fill!lC'll.OS p1wtrechos, y parca lf10 dar :tlm.gar a liJ:Me el enemigo se rehiciese, a ;pas@ 1~gevo le p©rsigu,i6. Al aproximarse F11Ne.s:'tm@s .soJ61ad0s al pueblo d:e Sa]!); Malte0, i,leli.l@s .de jubil0, victoreand@ e0m enib11sias1J;ilil,o'a: la Fat11ia y al Rey, @~e1u1>il ttleF-le 'lffa,·@tie0, y c11eyeF1.do pF@cet!l:fa me foerzas · ~D.Slil.Ffec1Jas que a,taca,liJam, a(!Jlll:eiila i°©' caHdad, se destac6 m;ia avaID-zada . c©mliluesta de [a gen.he lif'lil..e ·mas [lil@lil!fa correr, ya euy,ei 'fu.-eF1fa:1fueel-teate-riJ!te B@oH[a: la peq-l!len,a ruerza e;x!i>lorad@.r a se detuv:@ am1fo l!lFl gram 1imcem:dio qye los rehleldes lliahian i[i)F©<l'llleido a la eID.traifa d'e Sa,m Mait@0, C©n el fin de ©bliga,r lii la c@1u.mna a liJ:11.e to- -
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mase la dexeclila, @CU[lilad:a i(il@r c11sas
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LA ~Sl,"RRECCION
de materiales fuertes, llenas de insurrectos, los cu ales la habrian Iusilado si, no adverlidos los nuestros de la iofame treta, siguen aquella direcci6n alevemente indicada. Por entre las llamas pas6 la columna Dorda, apareciendo al otro lado dei inceudio un grupo de 200 hombres vistiendo uniformes de infanter:ia y Guardia civil: gritaban i viva Espana!, y llamaban por su propio apellido al teniente Bonilla; pero en los instantes en que haciendo cesar el fuego .por creer que eran de los rnrnstros, hubieran estos caido en pod-er del enemigo, vivo fuego desde el Con vento y voces del sar.gento Valverde, que encerrado en el mismo hacia tres dias se defendia heroicarnente, hicieron conocer el en.gaiio: atacando las fuerzas de Dorda e Injgo a los rebeldes, los hicieron retirar hasta la tercera ca,],le paralela al Convento, en donde aun quisieron fos de Llanera rehacerse, luchando
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El!I FJLIPINAS
durante algu.n. tiempo Mn. empuje; inutil esfue11zo: vencieron los nuestros en toda ia Umea; abFieronse las· puertas del C<!mvelilto; Valverde y, S'IJ. pun.ado de guarilias estaban en. salvo; de las. setenta b.oras (!JUe habian S·J!frido el asedio, treiH:t a las sop@rtaron sin comer y sin agna siquiera: el pozo de que el Convent@ se surtia hallabase sHnado a 6 melil1os de 1u1.a trinchera rebel<il.e. En lo mas i;eci© Ile la Ji)elea se vip que de la ~ejor casa del plil.eblo sacaroJ;t a LlaF1era en an:a. camil'la, l)lara q•ue n@ cayese en. :J!)©der de nuestra lf:ropa . Frolilablemente este eabecilla, que es de los mas l'i,stos 4ue tiemen los tagalos, habia st1irid.(,f lgun ataql!le de sw J9acl:eeim~ent0 cr6nico. 1Janera es un liLem0toieo. 237 muertos bien coJil.tados ca.t1s6- al I ~ne;migo la pe(iJ'lileFia c0l1mp.lil.a J!lorda; l:iste regres6 a Mainili;i con los (,)azahores, Gua'11dia civil Y artililer@s uni&os en Ma11iqui,na a la irnfanteria cl.e Ilfiigo, (!Ued~nlil@ .este (,)a•pjMp c.©n. la
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LA INSURIIECCION
fuerza de su regimienlo en San MaLeo; Inigo condujo los heridos de la colnmna a Mariquina; destruy6 los atrincheram ientos insurrectos; recogi6 armas y municiones; quem6 los cadaveres en descomposici6n todos peligrosa, y al dia siguiente uniase el valiente Inigo con la fuerza de su mando a la columna del insigne comandante L6pez Arteaga, quien, persiguiendo al enemigo, despej6 rapidamente todas las inmediaciones de San Mateo y provision6 todos los destacamentos . El cablegrama en que el Sr. General Blanco daba cuenta al Gobierno a.el importante combate sobre el Nangca y San Mateo era tan encomiastico cual merecia la conducta de nuestras tropas. i,Era este bizarro glorioso comportamiento caso ins6lito 6 poco frecuente? No por cierto. '.fal conducta ha sido, es y sera de seguro por siempre entre soldados espaiioles la
EN FILll!INAS
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pauta para CUliB,PliF Jos debeTes Cifl!le impmen I.a Pabria y ~1 :ffi.ey; la h0nr,a y la jnstieia. , En estas mismas fechas, el Capitam general felicitaba ealurosamente a los g~Iilerales Aguirre y Jarami<lfo y h1erzas a sus 6n!leliles, p@r i@s t11tii1JJlilfos seiialadisimos logra<!l.@s en. cuain,,, tos co!illbates se libra,ban eID. las lineas del Baiiaduo y Pansipit y en el resto de sus der:naFcacioiies. l0s asa,M(;)s y los Fob@s cl.e .giamado e-li} easas y macieID.C!las cl.e IJilenirI:1-sl!lta,rgs • e incligenias p·l!lmfon1fies, sobre tocl.o, se . sueedfan ·colil heeuenoia; peFo Ill!li'lstras pequenas colmrmas y paltFaMas pastigaban tia'l:es crfail'lenes COiil (!}u:ve-· ~a, sin repas11am el llll\1:lim::(M'@ <!le ~l!l•iellles t0s c0metfafl, y as·i teniialil a estos a raya. - En Cabuyao, unos pocos cazadores I l ma:ndo del teID.iente Semdra :fuatfan, asta poner en precipHada fuga, grtl@ rebeicl.e de d• iez v.eoes mas litie.rza ~
r•mOrica,
I
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LA INSURRl!CCfON
El teniente Salcedo, al frente de su fuerza, un sargento, un cabo, un corneta y 30 soldados, bati6 por eompleto a mas de 200 rebeldes en ]as inmediaciones de Malinta . A quema ropa reci bio un balazo en el antebrazo izquierdo aquel distinguido oficial. En el mismo dia, el Teniente coronel Pintos, con 70 hombres, batia, causandoles gran .numero de bajas, a gran numero de rebe]des, que en precipi tad a fuga pasaron el puente Zapote para internarse en Bayanan. En Binangonan 10 guardias civiles desertaron con armas y bagajes al enemigo y se unieron a un grupo de unos 250 6 300 paisanos capitaneados por el ex gobernadorcillo¡ de Cavite. Atilano Santana; constituy6 este con tales elementos una partida. El capitan Duran, que mandaba la Guardia civil de Pasig, a pesar de su mal estado de salud, reuni6 una seeci6n de la citada fuerza y otra de infanteria del 70; y sali6 en persecu-
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ci6n de la misma; despues de anochecido lleg6 a Cavite, y rec@rriendo la calle principal ~e aqu1 -_lillil'eblo, .al apr0ximarse a la tenn inaciom de la' misma,. en donde. esta instalad.0 •el Tribunal, fingiendose · k>s 1·e.beldes fuerzas Buestras, a[ gdt0 cle ivi.w,a ,Espana! invitaban a Duran a acmlir alli ; cuando estaban las fuerzas de Duram casi a bQca cle jarro de l@s in:Sl!lrrectos, el iliu.ego nutridisi,mo tlJUe esflos hiicieron nos cal!ls6 1ma porci6n de bajas; al verse el capitan ,Duw.an el!l. v•l!teft@ i{!)@r fim.e1·zas 1iaili1 su-: peri0res, ataco a ia bayQneta a,l Tri. bunal, apoderarod.Qse de et, y desd.e · alli respondia CQD f@rm.idaible erieii/ gia al flleg@ (lJUe @tros grupos le cl\i1 rigian desde el C0nvenit0 y 'desde el puente; los rebeldes aband,on.aron I estas dos posici0nes, dejamd@ gran ~ rastro de sangre; reti,r ar01:1 sus Tuajas; pero, auri. desconocienqolas, I debe a.firmarse fueron. mucbas. iPor I esta acci6D lil!l.e·, Dm1rii!o asaeJ1.!llib - a
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LA INSURRECCJ6N
comandanle y se le form6 el juicio cQnlradictorio para la Cruz de San Fernando; mas no pudo disfrutar ¡ largo Liempo eslos honores juslisimos, pues Duran, victima del catarro intestinal comun que su[ria, exacerbado con los trabajos de su aotiva campa.iia, muri6, Esta partida de A, Santana quiso tomar .Morong y Antipolo. Duran y la guerrilla de Ricoy lo impidieron situandose en el pueblo, por lo cual ¡ retiraronse aquellos a los montes de Bosoboro. El capitan Duran los persigui6 despues, librando un combate despues del cual aquellos rebeldes dirigieronse a Bulacan para unirse a las gentes de Llanera . Por todas par~es mucho mal; pero en todos la1los mucha proeza. Era tambien caso halagiiefio observar en general la conducta de los mestiz.9s esparwles, no s6lo apartandose de la rebeli6n iufame, sino distinguiendose muchos ¡de ellos por su
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valer(!)SO comportamien'to en. luchla abierta en _pro de la causa cl.e la Patria. A:si comŠ en, eUecvanltsimient(j) de Silang el mestizo espaftCll ,Caram.an.:. zana, unielild,0se a la Gua,rdia civil, ~e baU0 contra el puebl(j) todo sublevado, hasta <'J:Ue lteroicamente sl!icumbi6 en ia lucha, en otlras lC1ca1idades imitahan los mestiz0s espaifi.(!)les proceder tan leal. _ En SaJilta Rosa, p(!)r ejemwlo, el mes.Uz0 esparfi(j)l PedlN Perlas, cl:escl:e er momeD;to eJil que la- insurrecci@I!l estano, @rganizait>a C())lil atiiiŽ.c()) J IC1s vecinos d._e aq1.rn1 pueblo para la defelilsa del mtsm()), y con a,rmas qme se ~rocur6, much.as de ellas eogi<las a t os rnism(!)s reheldes, de tail: slilerte se dispuso, q1:1e a'l!ln eual!lao much.as veces lo intentar0n, ja,mas pmLier0n los insurrectos emtra[' en Sam.fa iil:osa. . En San Miguel de May1uno, tinviad()) insistentemen:te por 11.mera e'l mestizo espaiiol Gregorio MWFii_[uez. . para gue se le uniese, es,te le con,tes-
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to valientemenle que ÂŤel no se unia ,1 los iofamesÂť. Jose Juan Serapio, mestizo espaiiol de mas de setenta afios, fue el guia mas eficazmente auxiliar de la columoa Arteaga y contribuy6 mucho a que el pueblo de Santa Maria se mantuvie ra en la obediencia. Ceferino de Leon, tambien mestizo espaiiol, abogado, en la misma provincia de Bulacan, tan movida desde el principio, pero sobre todo despues de las acciones de Binacayan y Noveleta, que quisieron los conspiradores explotar, como si por el hecho de sufrir los nuestros muchas bajas el triunfo hubiese sido de aquellos, se mantuvo siempre en honrada, decidida, patri6bica conducta, ayudando al Cura parroco de aquel pueblo, al M. R. P. Fr. Joaquin Garcia, quien no quis@ abandonar ni un solo dia su parroquia, amenazada de continuo por Llanera. Ohros muchos nombres pudiera-
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mos y debieramos c@nsi:gna'r; mas con los ejemplos oitados basta para apreciar el hecho em g;em.eral, d@ l<i! diferen.te que b.a sido el proced~r¡ de los mestizos es,pafi.oles del d@ 1os ptros. elementos etnograficos. . La gtrnrrilla de v¡0IunfiaFi0s de San MJguel, que venia prestand@ excelem.tes ser vieios, recibia _estos dias una buena compailiera: la de Sam Rafael, por el Sr. Inchausti i.IDi.cia<ila, y la cual, con el vapor Napindan, c0menz6 a p11esfiar l@s servicios de viglfom.cfa costera liJ:1Ue tan iji)Fovech0s0s re- . suLt aron. , Recibi6se en Manil.a el S de. N@'viembre la noticia de que el diia aBte-: rior 7 habia emba.rca:d@ em el vapor 1Le6n XIII e1 gen.eral P@lav,iej~com. di,recci6n a estas islas; le acompaiia1 ban Ios genei:ales 1acharnbre, ZaJl)i pino, Galvis y Cornel; aquei l!>arco .rtraia ademas a bord0 cua.tro CO])l);;pa¡f fli,as de cazadores y dos de infanteria 1ue Marina.
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El Catipunan, del Norte ( segun los sellos marginales de las comunicaciones de los rebeldes a quienes nos. reierimos) trabajaba activamente en Bulacan: conminaba por aquellos. dias a la principalia de San Rafael con asaltar el pueblo si sus vecinos todos no se unian a los rebeldes: la principalia rechaz6 la propuesta, y unida a su parroco el R. P. Fr. Pedro Quiros, formando una secci6n de 70 individuos, dispusieronse a resistir; eran tantos los insurrectos por aquellos contornos, q,ue para batirse los leales de San Rafael con mas exito replegaronse-sohre Balignag, y desde alii, pasando por_Quingua la columna al maodo del capitan D. Fernando Aurich, los dispers6 con gran numero de bajas , pe.ro habiendo destroz:ado los rebeldes, en su retirada tumultuosa, los barrios de Sabung y_Buenavista. Grandes placemes rnereciera la conducta de la columna Aurich y la del R. P. Cura
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parroco y pl'i.nci;palfa de aquel puebl@. La - eolumna Arteaga, ce>mpuesta . de 200 h@mhres en a1ll.Lel.~0s mo:me!ID.tos en ql!le desde b.acia tDes dfas operaba contra las nurnerosas partida~ que pulula,ban p@r San Mahe@, librtfl eB. Jas vecindades de MontalMn fiero eombate contra 3.000 inslllrrect(i)s a ilas 6rdenes de Liai;tilel'a yi Pedro iFr3Jlilcisco. Ademas cle los ml!lc'h@s q,ue consig1-.1iieFoR Meva,rse los Felilehll.es, G@ ca:clav·eres de est@s dejar@lil abancl.6nados en el campo cle talil ,ren,ida acctol'l. P@F ©@'lililp~icacl,@s en i@s a:clll!lales sucesos, y fl)resel.),tando t@d'@s. las ~~nales del pacto de sangre, elilt raban · en Manifa en est(i)s 1dias <;:ieWtGs .i)ie tjientos de presos; sci d.estituiain medii.c@s titula,res' irn1i,g@as de afg,umas 1 rovincias pr6xirnas y lej'amas de Ma~ iila; era fusil.ado por de1it@, de trariioa el seIDaforista de Pli!lllita Saro.(tfao: Holiloraili@ Olil.rnlbia, y se [1eci,11lia,a bticias de much.as salva1es trope-
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lias realizadas por los insurrectos tagalos, y todas tan alevosas cual aquella del fuerte Victoria, en que 100 tagalos acuchillaban a 5 castilas, defendieodose estos tan valientemente como lo hicieron: un ojo, una pierna y un brazo perdi6 alli el capitan Sanchez Arrojo. Sale a operaciones sobre Cavite el Capitan general D. Ram6n Blanco. Binacayan y Noveleta.-Enormes eran los trabajos que pesaban sobre el Ca~ pitan general en Manila; en su residencia accidental de Santa Potenciana se veia en todas horas de!- dia y de la nocbe, sin excepci6n, el bullir continuo de los hombres de guerra que iban_y venian a dar parte de los hechos acaecidos y a transmitir 6rde.nes: todo activjdad y apresto. El Capitan general Sr. Blanco salio para Cavite el dia 7. Queria, sin duda, dirigir personalmente las importantes operaciones que era me4.
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nester llevar a cabo en tal provincia; :1.1eya lo hemos aicho, se t-11ataba conquistaFla. Pero l.era!'l ya bastal'l-. t~s los medias acumrulados? l,Haliiia Uegado Ia h.ora de que el plan gen.er~ de ataque contra la zona insu.rreda, formad(i) pox. el General en j'eie de nuestro ejercilto en Fiitpinas, se desarrollase en . toda su plenitud? l. Iba el general iBl.aF1c@a t:avite @fuedeciendo al trazG cle su pr@pio croquis, 6, sieBdo el Marq,u es cle FeiiaPlaba b:@mbre de tiem,pl.e tiaifi vaie路rns(i) o@ml:l coIDCiliad(i)r, era 路 ailM lfucv:acl.0 a~go prematuamenrte, po,r Jil,ue~tFas herm0sas pa1lui6tieas vehemelil6im1, ~entidas y ex:pDesad.as sin const11taF 路 ilis ['eglas &el aFte m Hirta;r? N0 l(i) saem.os, ni et1alesqwiera qu fmesen uestras relaciones afectii vas y bt11roraticas con el Sr. Gelil@Fai Bra,m:c0, 1 ubieraJnos podid0 ;veuiguadG: a ste, el deber le habria im;wuesil@ siencio absot路l!l't0; a rn0s@1lF@s, 10s Fesetos nos vedaban preguntaFle. El'
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hecho fue que al dia siguiente de la Jlegada del Sr. General Blanco a Cavite se celebr6 una solemne Misa de campafla, y a las veinticuatro boras se libraron dos formidables combates sobre Binacayan y Noveleta. Fueron simulta.neos: al emprenderse la operaci6n sobre Binacayan, se cumplimentaba tambien la orden de que otra columna atacase las posiciones insurrectas de Noveleta. Binacayan. - Para lograr la toma de las posiciones enemigas de aquel Ingar, se form6 una columna compuesta de 1.612 hombres entre infanteria de Marina, dos companias indigenas del 73., una de artilleria y 60 hombres de ingenieros de la sexta compafiia del unico batall6n que de. esta fuerza hay en el ejercito de Filipinas. Esta columna iba al mando del c0ronel D. Jose Mari[la Vega, biza,.. rro jefe cuya hoja de servicios corvespondientes a!la campafia actual
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de Filipinas bastaria parn su perpetuo enaltecimiento. La vanguardia se eEc01,nelil.0.@ al Teniente coronel 016riz. · Principi6 el ataque: 1os ba.rcos de guert~ disparaban sus cafiones 'C©I!tra Bac0or, Cavite Viej@ y N@veleta; la escuadri.lla de Tuotes tren.'te a Binacayan rompi6 sus ruegos c0m.tra las trineheras enemigas, defelil.didas -en aquellos mome•p.1t0s p0r grnm n.ccamero de rebe'ldes. La colum.na, en tan.t©, aguardaba en los polvoriaes -de Binacay~-n. [fuasta qHe l!a seiil.aL lil~ «alfo el fuego», dad:a a las f11erzas flavaJes, permitiese el av:a®.ee por la playa: ilia, al 0percarse €ste, efl ·la ~_xtrema valflgua110.fa1 1!11Ml1 se0©i6>,n de ~radores del regirn•ient@ 73, al man1do del valiente cal))ita:n D. Emillio Guarido y CasteU6, ya 'ouh>ierto 0.e gforia aTutes de c11mrff1r ~eim,ti0iD.c0 a,fios, y a esta ,fuerza seg,ufa una fcompafiia del 73 y la de ingenielros e:xpresada; Jl!1,iHa1res d~ tebel1fos,
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ocultos durante el bombardeo inicial de este combate tras de sus trincheras y parapetos, hicieronse ver a la aproximaci6n de la columna; y cuando la vanguardia de esta no distaba mas de 40 metros de los atrincheramientos rebeldes, una horrible cerrada descarga mat6 al capitan Guarido, malogradisimo soldado a quien la Hisloria militar y patria consignara pagina de honor y de grandeza, cnal si bubiera llegado a conquistar las mas altas jerarquias: las tenia al frente para obtenerlas, segun los principios de la mas estricta justicia. Roto el fuego por el enemigo, inmediatamen te la guerrilla de vanguardia extendi6 el suyo, y con la compaflia del 73 despleg6 por el ala izquierda, quedando en guerrilla tambien sobre la playa ta primera secci6n de ingenieros, al mando del teniente D. Luis Blanco. El fuego de fusileria y lantaca sufrido por esta secci6n fue tan vivo, que experi-
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ment0 numerQsas bajas, i.ncl11s0 1a de su valerQSO jefe el lf:eniern~e 'IB'la1,1co, el cual cay6 gravernen.te herido de bala en el brazo izq:uierofo : a,un: asi, tan distinguido oficial c@ntinu6 mandando a sus soldados todo lo que hacer debiam. hasta <40e se le-s acabaFon las munici:@'liles. £sta columna disponia de 1ma s@la pieza de vieja artille:r,ia: UR caii6n corto de bronce, a cargar por fa b@ca y en mal estad'0,; hl!l®Q ([Ue it'ec@rrtair los tetoMs a T@s [Jilr@yec1ii1les .Jilara qlile 1:rndiera:n eliltrar p@r la noca de aqnel cafi6n.; pero deoe advertirse que aiun cuand@ 1iJOCo liludiera espefaFse de aqu:e1 iRstru.menito de g\ilie-. tra tan an.tictiad©, el cab@ y J0s aFbi~erns que lo servfan m.@ cesairnlil U•lil ~nstante de hacer fueg0; lo que aconrteci6 fue que no abrieFon brecha al/guna. Mientras se sostenia muy vhm el fuegQ de fusihmia pol' amli>as pairtes c@nternilientes, el coB@T}el Sr. Marina orden6 a,l teniente de ingenierns 1
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D. .Mariano Campos construyese las escalas de asalto , valiendose para ello de los ponos de caiias que a granel se elevaban en aquellos lugares y que frondosos se erguian entre la . cotta atacada por la secci6n Blanco y la trinchera separada de aquella por el foso , contra la cual peleaba la fuerza indigena del 73. Hora y media de duraci6n llevaba el combate, y disptlestas las escalas para el asalto de la cotta de Binacayan , se mand6 el ataque a la bayoneta; uni6se a la vanguardia una compania de inianteria de Marina que hasta enlonces no habia tornado parte en el fuego, y bajo la protecci6n del de iusileria que prodtljo la compania de artilleros peninsulares, desplegada por el ala derecha, se verific6 <d glorioso asalto y torna de la expresada cotta. De los varios juicios contradictorios result@ que el primer teniente de infanteria de Marina Sr. San.chez Barcaiztegui fue quien la gan6 primero,
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cor(i)nar;id(i)~a a:Ji gfilt(i) &e i viva Esp ii.a! Y una vez C(i)Pt>i.:iada aqY.efila c0bta, la segunda secciom &e i®ger;iier,(i)s, la riaancliada {Hilr el 1len,iemite Sr. Camlil.[ljl(i)S; y el 1·esto ·ae ~a ~uerza (IDl!le htallilia t@m.ad@ pa1te em. el asa~t@, '.l'@I!lil.1)))i@ el fuego , comtra el. gram fil,wme11(i) <il;e casas disemio adas (\l]l!le Jj)(i)f aitli !lirall.i>ia y. contra los hlgi>t~wos ([t1,e se Feplegab~n. sobre Cavite ViejC>, @ sea smfure las trincheras ole Sl:l vet agl!la!lld1ia. iEiil esfie estado det C(i)Jilil®a1te os:if>se el It@~ que cl,e « a~t(i) el fl!leg(i) », y: se <lli@ c@IJilii:enz(i) a fa <ilestrt1@ oi0Iil! de la c0tta
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por Binacayan. Unas 150 casas rebeldes serian las destruidas y no menos de 200 las bancas gue se inu tilizaron, por ser de las que el enemigo se servia. Fueron muchisimas las bajas que este sufrio; no pudieron contarse, porque demostraban gran interes en recoger sus muertos y beridos; pero las nuestras tambien fueron muy importantes: ademas del capitan Guarido y de los tenientes Dominguez y Flores, perdimos hasta 70 mas entre oficiales e individuos de tropa. Jornada gloriosisima, pero triste. Cuando no ¡estaba aim destruida por completo la cotta a que nos hemos referido, tornada tan heroicarnente a los rebeldes, y echandose la ¡ ¡noche encima, el coronel Marina consider6 prudente, y asi lo era, suspender el movimiento de avance hasta nueva orden, rehacer la cotta aludida, invirtiendo los frentes de ataque, con objeto de dejar alli dos
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-00mpalillas <ifUe dg'fondfo~a,n 1a '[)QSici6Jl gaiaada,, y cl!fsp0(i)Je& liJU~ el :r;esto ·~ de la cohumrna se Fetka:se a perl'lloe~ ta1r em l@t, p0lv0Fiines de ~ililacayan. J.ia c0lnmna fo1e . en esta posicioa grandemem~e mofogta<ila, pues <durante toda la n.@cbe Cll.el !'l, y b.asta Ia madrugaCll.a del d\ia sigti.i-enite, mtimerosas foerzas reheMes de iBac0QF, Imus y Ca vile Viejo, ac@mpam.aotfas de .musfoas y c0metas, y .wv@ducfontili@ griteria inferfilai, simii1ar, segw.n 1@ que be1J1110s leid0, a [a tifU.e l@s ma1-r@'qMfos s@stenfom durante l@s COJ1.Ii1ID3.~ bes, y soi!,re t0dl0 · al im.i:ciat·l0s, em Jliuestra gl0:ri0sa· gl!ter-,i;a (!]!e kftil;a, fiacierOili aclJivisimo . ~t11eg0 .S©'ID'.fe, , Ijl'UestFa eolum:uila MU1nma elil! B1naea- _ y,all! acampada; a~ue!: :hrngo lill!llLFrlfto ' tan. sosbeHid@, sin elililbaFg0, no -0aus6 ma:s que l!l@s ba~as.: Mlil soMa~o ~ u.n. ~hiLio cmrgad~r _de la i11:1e:r;za e mgen1er0s. C@mven.c1dos l@s reelde.s de io iuifriuctu@s@ a:Hli de sw \ cci<I•, y c<m "'."ohas bajas •• ''"
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filas, se .retiraron; dirigiendose contra la cotta perdida por ellos el dia anterior; tampoco lograron su empeno. La eolumna Marina precisaba por lo menos, para continuar con _exito sus operaciones en aquella zona, dos piezas de monlaii.a; aunque en el campamenlo se tenia notici.a de que el coronel Marina las habia pedido con urgencia y de que iban a llegar, esperaodolas iouLilmente, se retardo la salida de los polvorines para contin uar el iniciado avaoce en el dia anterior.¡ A las siete, poco mas 6 menos, de la maii.ana del 10 salio la columna de Binacayan en demanda de la cotta ¡horas anles tomada; en ella organizose la fuerza para avanzar: infanteria del 73 y fuerza de inianteria de Marina, con la seccion de ingenieros, . al mando clel teniente coronel don Ma1'celioo Mui'ioz, de los capitanes Sevillano y. Valderrama y del tenien-
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te D. Mariano Cai:µpos, co:nstiitui,__a,n la vanguard.ia de la columE1a Marina en aq uel d.ia glori()so y tremendo, · para la misma. En efecto; a las ocbo de Ia mafiana empez6 el avance por la calzada que conduce a Cavite Viejo y ({UJe casi sigue 1a direcci6n misma <!le la playa . Recorridos por la guerrilla de van g uardia expkwadora rnfil@S 11.(j)(!) metros , y vie11do e1 teniente e0r.@n~'li Muii:oz, de infam.terfa de l"-farina, ui;11.rn no se presentaba enemig0 algm1@, . ,pero que a muy i[i)0Co tveeb@ se veia 1!1Da in.mtrnsa tFimchera y g1mm '1!1'u:~ mero de casas 6 bahais c@avenienteb'iente -dis)ilueshos en torn@ de a~ueila, ordeno a la gu..e rrHla oi:tada hif iese unos cuamt0s dispar0s papa ~erciorarse si el enemigo estaba 6 n@ parapetado ; sabia rnecliida de pFevi~i6·m. qme teadia a c@:n0cer desde cier~a distancia si 1iabia que reliiir ,6 no 1combate antes de sHua11se en punto . en, q1rn hubiera . de '.haeerse fu~go _.a · . 1
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boca de jarro sobre los rebeld'es que montasen la triucbera de que se trata. Los disparos de la guerrilla exploradora fueron debilmente contestados; mas con ello ya se averiguaba la presencia del enemigo en aquel lugar, y por consiguiente, se ordeno que una compaiiia de infaoteria de Marina se desplegase por el ala derecha, al mismo tiempo que otra del 73 se desplegaba por el ala izquierda. Asi fue avanzando aquella fuerza con el cuerpo de la columna, hasta que lleg6 a muy cerca del re- â&#x20AC;˘ codo que forma la calzada de Binacayan a Cavite Viejo e Imus; y creyendo el enemigo estar en condiciones ventajosas ya para combate, desde todas las casas amparadas por los atrincheramientos, y desde estos mismos., rompi6 en verdadera lluvia de proyectiles contra los nuestros, causandonos numerosas y sensibles bajas . Agrandando su radio de accion,
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pronto lleg6 . toda la columna al recl)d@ altidido, ya 1os quimce o vei'lilte minutos de luob.a dura, · se diispuso un ataque a ia bayometa, c1:uN~limentandose tal toque a la carn:e.ra; yendo la secci6n de ingenierns · a la ~abeza del cuerpo de la oolumna ·y siguiend@ cent este p@r i!:a calzada misma. Tan int:r.epido movimiero.to <le avance-hizo <4ue la ©abeza de 1,a columna rebasase las gl!lerrilla:s que a la misma seiiial de ataque a la bayom.eta habiam1se ciles]Jiegado i[!) CH' el bosque y avanzando de ig·ual modo, segnn ordeR dtd rnal@grado corn,amd:ante de imfanteria de Marina don Nm·berto Maiturone, muerto gl0riosa~ ,lillente momenhos despnes . I En aquel avance cayQ g:ravisima:meute herido p0r }os infames prr@lyectiles de una la1F1.taca eHe·1•1iente de linfanteria de Marina tarnbien don %Hermenegildo Una,je, el cua,l hu:bo 1de s11frir la amputaci6m def hraz@ iz-
r •iecdo, siendo ma,avifilosa la con-
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servaci6n de su vida, por la cual con tanto exilo luch6 el esclai¡ecido medico militar D. Casto Lopez Brea. La intensidad del fuego enemigo producido por millares de iosurrectos que descargaban proyectiles de fusiles Mausser, Remington, de escopetas de caza y basta de salon, melralla de clavos, de hilo telegrafi co y balas explosivas, unida cl la del que nuestros soldados pwducian, convirli6 aquel Ingar, ameno poco antes, en sitio de desolaci6n y muerte; las empalizadas de cafiabojo con que consLruyeran los rebeldes sus parapelos, los ponos que quedaban erguidos con otras vegetaciooes altas y de arbustos y rastreras, todo quedaba alli triturado y deRparramado por aquel ensaogrentado suelo: ni los unos ni los otros podian recoger con la presteza que el caso requiere las bajas snfridas en aquella descomunal pelea, en la cual bubo compafiia nuestra que perdi6 las dos ter-
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ceras partes de S'U fuena. TorJ,os las jefes y oficiales de la ©(i)ltJ)nna cayei,oa tl!ltre~tos 6 b.eFidos, desdtl_er C(i)rQn.el Marina, ya ge11era1, ha,sta e1 segundo teniente EIHis moderno de aqu.ella fu.ei-za, <:J.ll0 p0r cier,fo S0i© hacia Gtla:renta y ocho lil.oras q11e habi•a experimentad(!) la saitisfaeoion d'e ves'hi:r 1~or vez :r,,rimeta [as homr.@sas ii~signias de tal emple0: e] aludfido ofilciat era el Sr. BoTrajo, qu:e am perdi6 Sl!l vi"1a, gl01.d@samemte sacri.ffi.eda a 1a causa de la Patria. , Alli Jilll!IFi6 talJI!lbien el C(i)mandante Sr. Matm·tme, el cma[, al i.r em a0xi~i@ d:el cap.than D. And·L'es Sevi/Jilano, herr/ido gravemente, recit>io talil cev~era . scarga sobre el J1leCh@, (ill'le eay@ elil! dondo, subitaneamenhe rnHerh0. En duc.idisimo oi1rc,1d(i) f,l!Ieroa ~s,fanisfo heridos por segun.llla vez el C(i)onel Mari.na, y ademas el teniente (i)ronel Mlilfi@z, y el e11,:piMm d!e filslla' o Mayor Guerigu~t y el t,elilieBhe de ingelilieros :0. Mariano Caqii.pos; fu-e,
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este el ultimo berido que bubo entre los jefcs y¡ oficiales rle aquella columna valienle y sufrida; a boca de jarro dispararonle al Lenienle Campos un lanlacazo que apenas le dejo tejido ileso en todo el costado izquierdo. Alli cayo gravemente herido el le-: niente Yanguas, del 73, y sufrio verdadero destrozo de una mano, por un melrallazo casi amputada, el teniente coronel Oloriz. Alli fue berido el capHan Salas, de ingenieros, y los lenientes del 73 y de infanteria de Marina Sres. Hernandez y Valdes. Sentimos no recordar los apellidos de los demas oficiales que con ta9ta decision y arrojo lucharon alli; mas ya hemos dicho con trisleza, y con amargura lo repetimos: todos los jefes y oficiales de la columna quedaron fuera de combate, a excepcion del capitan Valderrama, cuyo sombrero resulto taladrado por proyectil que no le hirio por fortuna en un solo cabello: fenomenos
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de las balas, que l@s ofrecen i.nverosimiles en sus trayect@rias. Mlilert0s <i> beridos L0dl.0s il.c;is jefes de esta iuerza, y conrtiauaJild¡0 la lucha, l,que habia de aconhecer? 1o qw~ necesaria y fatalmente se produjo-; y fue que, envue1ta la c@lllil.mna J_!)@F cliu.;: pidas masas insu.rrectas y privada de direcci6n tecnica, mornenM.nea e ins1'.intivarnente rekoced.i.6 par1ie de ella con poco ordelil hasta Uegar a fa c@tta sobre la playa de Binacayan, tomada el dfa amteFior, y de la que n.abialil salido en el <il.e rlialil. descl!ichada j@rnada. Gi'acias a ia severa ene1'gia m0stFada ppr el coronel MariI;ia despues de h,eridp por tercera vez, l0s soldad0s lilrira- ¡ dos de la m.lilerhe relil,icieF0F1se, y. ttiuert~s en aquella cotta plldieron conterier el impetu salvaje de aq1rnllas hor4as , que vociferaban , seg11m bern0s dicho, furiosas, a~ormefiri.e:nd.o COiil u,Iil.a 1uperioridad nurnerica calc~lada en 20 por 1. Los mediicos de fa co1umna, Sres. Pena y G-il, ~i,nhielild.,0 !il@ rec0r-
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dar eJ apellido del tercero, asi como el de la dotaci6n del cafionero Cebu y el P. Capellan de aquella columna, distinguieronse de modo que para todos ellos se tramit6 el expediente para la Cruz de San Fernando. Por su denodado proceder en esta formidable acci6n obtuvo la Cruz roja de primera clase el redactor de El Espanol D. Antonio Navarro, cuya valerosa conducta tan bien supo imitar mas tarde su compafiero Juan Caro y Mora en Silang. Noveleta. - Ya bemos dicho que al emprenderse el dia 9 las operaciones sobre Binacayan, otra columna habria de dirigirse sobre las posiciones insurrectas de Noveleta. La fuerza que las atac6 pertenecia tambien a infanteria de Marina, artilleria peninsular, infanteria del 73 y una secci6n de ingeoieros, soldados indigenas como es sabido. Esta fuerza tenia por base para operar nuestras trinoheras construidas sobre la entr;ida
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misma del istfilo de N0veleta (50@ metros pF@ximamem.te), s01>11e l0s hordes cl.e la 1aguna de Dalalilrican. A las seis de la mafiana del dia 9 se si-. tu6 esta columna en las trincheras mencionadas. Tambien estaba destiJada a sufrir tan rud@ c@mli>aite omal la de Binacayan. Aque11a fl!lerza [ievaba a su fren.te al g·enernl Ri@s y al coronel de infanteria de Marilla sefi0r Diaz Matoni; se dividi6 eB dos partes: una de eshas constituia @@1miliufila de ataque; 1a 0t:ca, cle reserva err las trin.cheras. la c0Iumna · cle ata<que @omponianla, de cabeza a c0la, dos secc~ones del regimient0 num. 73, peFtenecientes a la C('.)rnpa,iifa del ca!i)itam1 · ID. Eulogio iWernandez Lat@ilre, ti,lil I . • soldado modestisim0 y excepci@nalmente afortunaclo: a 38 aociones y loal\allas habia asistido eD Cuba y en la Peninsula cuand@ enhr6 ell la de Noveleta, de que Jil@s o@H[l!)a,m 0s; en todas ellas su c@nd~1cta hie eno@mia<!la y premiada, qttn.q1rn no con lar~ l
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gueza correspondiente al merito, cuando es de natural h1Jmilde quieu lo contrae; mas logr6 en cambio la fortuna singular de que , asistiendo a tanto hecbo de guerra, no haya sufrido un solo rasguiio. A la compaiiia de Fernandez Latorre pertenecia tambien el tenfonte Sr. Ruiz Dominguez, el cual, estando desempeiiando un cargo civil de emolumentos reglamentarios, que lo hacian mas importante, e1 de Administrador de Hacienda de la Union, lo abandon6 para tomar parte en la campaiia en que perdi6 su vida, sosteniendo heroica lucha en este dia. El teniente Valle mandaba otra secci6n de la misma compaiiia. Seguia a esta fuerza la de ingenieros, al mando de su capitan Sr. Angosto y del tenien te D. Luis Castaii6n; desptues, otra secci6n de la compafiia Fernandez Latorre y dos c0mpaiiias de infanteria de Marina, sin que recordemos el mombPe de sus jefes. ¡
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Asi se em.]_i)li1ffA.dio ta 1ililaa,cha, g'liliada la ]Ulerza Ji)Cl'I,' UII11 gram. C0l'l'©Ce<il@r d~l tenren©, el SJ?. M•ier, qJl!le perten.ece a!; <Cm,erp0 de foili)@gEafos, y euya cornducta en aliluel dia, foe cai1UI1'©Sa= I -~ melilt e aplaudida. 1 La coiumna Diaz Mafo0!i caminallla ea direcd6il del cuarte'l <!le ia Guardia civil, ed.ifiicio t@mad@ l))Or fo s rebeldes desde los :[i>rilJilileP@s in.siflamJ.tes : de la i:rasurrecci@Iil , y eJJll ei cl!lal se reo0'1,dara, hem.@s d.icifu.0, halfuia si<il0 viUanamen,tie asesinad0 et capiM1n ElebolJedo, ai:p)0de11am1d@se f@s i:ns·ttr,r,ec;t0s -de cmantas arnIDi:as, rnm!Flii:<,:i@nes y pertreehos ha,Tufa a~lii . · / f>a,ra completaF el J!lfaEl de afa~l'te", t9maro0 en aguas cl:e la ba:fu.fa linea aitll combate l@s ca:ii@lil.er@s Butusan, fleyte, ViZla;lobos y €;eb1~; el p,F1meF@, rha:l).dado por el temier1te de Gavi@ ~- Pedr@ Sanz, es rite p0Fte de 2(i)!2 tf neladas, de segmil.da dase y mon,t a 4n cafi6n Hon>t©ria de~. !L cle i: y d@s , ~metrallad0ras N?11de\ilfelifl ; et Ley,te, 2'l
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de la misma clase y de 151 toneladas, mandado por D. Manuel Peral, dispone de igual armamento que el anterior; el Villalobos es de primera clase y de 300 toneladas de porte: iba mandado por D. Josa Maria Estanga, y monta dos cafi.ones de 42 de tiro rapido, J dos can.ones rev6lvers de 57 ; el Cebii, mandado por: el teniente de navio D. Miguel Barrera, es de porte de 532 toneladas y monta un Krupp de a 8 y una ametralladora de 25 Nordenfelt. Estos pequeilos barcos, protegiendo la marcha de la columna, hicieron muy certeros disparos, destruyendo muchas casas y edificios de Noveleta y de San Francisco de Malab6n. Sohre la importante linea del Sungay habia de operar, segun lo bizo con estrategfa y bravura, el general Aguirre, que el 8 babia salido d.e â&#x20AC;˘ Calamba para dominar la cresta del expresado monte, y despues de te-
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nie'l/, a raya a] enemi:go elil sills p@siaiones <ile Amadeo y MeJoJ.<ll.ez Neili:ez, caer sobre 'falisay ; tanto la marcha de Aguirre por aquellas intrillil.cadas abruptas montaflas, cuanto la toma <!le Ta;lisay, constitiltayen 1ima lite11m0sa operaciGJ:J\l l.ilil.Hiltar por t@d@s OJ:l!l,iel!les la conoceIJ. eNsalzacfa . lPor que se fl!le de firente ccmtra las posiciones insu.rrectas de N@veleta? «That is the, qt1estion ». En arte Il'JiMtar 'tambien hay J90<:l0S pri:Ftci- · p~os afus0twt0s; por es('), sfo1 .tiluda en c@m.cepto de much0s, ei reeonoci~ienlfi0 ofensivo 6 la t0rna de N@veleta, podia haherse efectuad!f por I , • tro camino: J9Or la pfaya. 'Jleaiam. , ms atri,JJ1cheram,ie-m~@s de N@veteta · or foso cle <ile:fensa un riachuelo, ej1@r di(}h@ , un estero fangos0 invaeable; cortado segun 10 eshaiba su aemte eii aquel sentirl@, era poc@ acil c0NquistaJ' fas posiei@nes e!'le,,igas, mienbras cyu:e ,I,JlH!lcfbi@s, repeimos, crefan mas factible el l@gr0
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LA INSlTRRECCI6N
de aquel plan de ataque marchando la columna por la mencionada playa; las cenagosas aguas del citado estero se extinguian a 60 metros sobre la superficie libre de las bajas mareas, y la columna, yendo por alli, habria podido rebasar de flanco el atrincheramiento de los rebeldes, y por consiguiente ser atacados estos por retaguardia. No podia pensarse siquiera (y seria injusto el cargo que se hiciese por no haberlo efectuado) en construir puente alguno para que, pasando por el, la columna asaltase las posiciones rebeldes de Noveleta; porque si efectivamente misi6n que corresponde a los ingenieros del Ejercito es la de construir puentes y ejecutar las obras reclamad-as por la tecniÂŤa de la guerra, la misma ley que establece aquella obligaci6n pide muy sabiamente que las construccion.es militares se lleven a cabq con mayor garantia de Ia que podia ob-
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tenerse em. el reducidisirn0 paso Iii.el istmo de Nove'l.eta, por aquel obligad0 pm1to. Ni los ingem.ier©s (]l!1e alli habia, lil.!i tod0s \os del iE'.jerciil:© de iFilipinas, eran. bastantes para tal. t3mpresa. l Quien hubiese q11edaq0 1\ie pie, · constrnyen.do @bra a 7 IDetros de distan.cia de un gran mimero de insurrectos que sin cesar dlisparaban a boca de jarr0 proyectiles de todas clases? La s1tmacion [l!)ara la column.a e1;a muy desventaj0sa : el camino por don.de i:ba era de 8 nrntros de ainch11ra; la fouerza no ]i)IDdia mas qm.e ir forrnada correcta:mente I pea euatro; las manglarns de mw y etro lado del carni.n0 irnped.ialil., ·es far@, des]i)lega 1· g1,1erriHa a[g-11n.a. De esta suerte mal'chaba, sin emargo, por aquella reducida paata, [ uestra valiente ruerza, 0ualil.do a1 0c0 trecb.o el malogrado :primer te~iente Sr. Ruiz Dominguez, q1,1e iba ee vanguardia exploradora, di6 aviso , e pr0selil.il:arse elil. el eam•i•00 1J1na e0r1
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tadura de 3 metros de ancho por 2 de profundidad, y que ponia en comunicaci6n los dos manglares de derecha e izquierda; rapidamente sevenci6 aquel obstaculo: con tierra y con ramajes, la tropa rellen6 la oquedad aquella; y continuand@ la ¡marcha por modo tan arriesgado, lleg6 a distancia de 100 metros pr6ximamente de la gran trinchera rebelde, muy oculta por un recodo del camino, cuyos lados est.an tupidos de aromo~ vegetacion, ademas de espesisima, agresiva por el gran numero de puas de que esta armada cada planta. Caminando un poco mas, la tropa lleg6 a sitio de una expansion del terreno que se presenta a 40 metros del horde del estero aludido; y aunque eran muy reducidas las lineas de aq uella superficie, desplega-ronse en guerrillas dos secciones del 73; el res to cl.e la fuerza se quedaba sobre el mismo camin@ sin poder hacer fuego, por tener delante aq1rnllas secciones: era
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pura y simplemente fuerza cle s0sten. Se inicio un 1111eg@ terribfo: por fa primera descarg·a cerrada cay,er~l!l 1muert0s 6 heridos la :mitad cabal de los que· constitufan las dos secciones cl.el i3 ; se ref0rzo la guerrilla imne- - , diatamen.te com la secci@n de inge~ nieros y la otra secci6n ~1ue quedaba del regimiento 73, y asi reemplazal!ld.0 de contin.,110 los m:i:uedos y lfteridos que camsa1>a el enemig0 en la extrema vang·ua:rdia de 1.ll!lestra cof umna, se S(i)S'fiU'V(j) el co!Jilba:te hasta acabarse fas municiones de dicha :6merza. Eran las chlez de la m.a@.ana cuand0 est@ acoID.teci6, y elil esta primera parte del combate, en tan malas condieiomes para l0s nw.estr@s em~ peEiado, sufrimos mas de 1©0 bajas. Alli cay6 herido el c@ronel de i:nfaateria de Marina Diaz Mat0ro.i; aU:i fsueron heridos el capitan SeviUaM y el teniente D. Manuel Valdes. i Qm~ dia tan aciago para la :i nfa.Jil/teria de Marina! AUi mm:i6 tambien el teniente
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Ruiz Doming uez, y alli fue herido el de ingenie ros Sr. Castafion muy gravement e. La vangua rdia se retir6 para ser sustitui da por cuatro compafiias de fuerza peninsu lar exclusivamr.nte : dos de infanter ia de Marina y dos de artilleri a, siendo protegid as por dos - piezas de montaf ia; cada instante mas ruda Ia lucha, estas piezas de artilleri a hicieron todos los disparo s de su dotaci6 n, despues de haber perdido cada pfeza dos veces todos sus sirvient es, por el horrible fuego granead o que incesan lemente hacian los rebelde s, y al que l0s nuestro s con tanta valentia contesta ban . A'Ias cuatro de la tarde diose la ordeti de retirada , y asi se efectu6 por escalones, volviendo el resto de la column a a nuestra s trinche ras cl.e Dalahic an, despues de dejar en lasegunda parte de tan ruda pelea otras 100 bajas; alli cay6 muerto el segundo teniente de artilleri a Fernan-
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dez; a:Hi cay6 gEa-vememte heri.<il@ ei priroero de la misma arma ID. Ll!llis 'de la GHarGlfa; afil.i snfri<f> tamlllien. grave lesi61,1 eT de faafalilJlieria cle Ma.rina Figl!leroa. ; Es j,1!1sto de li@das S\iler:fles con.sig- · narr fa va['iente C(!)Ba11cta <ile miestras· tropas ea est a ~ornad'a, a1!ln cuand© un completo exi t(!) mo rprelillliase tant 0 esfu.erzo y t amtt@arFaN()_[·tl!e <!li e vafor hasta geaial eolllil@ el opIBe altai se admriri6, pwes em a111elfa f) ©Sici@ •m e[:lemig·a, qlile lil© era aceesiiIDle, 'bJ.a:IMa s@td!ados cl:e ~a c01tllflil.'Fra,, f6s Clila[es, ea iilil.edfi@ d'e aql!lei m 0nt i!fem ifl!l!eg0, J_!larFa hacer mas ejemp~a~' el C!)illlie el[@ s i)i)r©diucia:Et c©nrtt'a el enemig@ il_)ara}!)etacl.o, se s111i>ian tl!ilil(j) 3! ll,liL(!) a earn.a extr:em© del !_))rell\H iM p1!IeIIDte c@lgia,,, do, es dleeiF, a JllOC@s !_))as@s <de l@s vebeldes, y es elar0 [@ (j_[lile iJ:n!lli>ieEa de ac0nteeer: verlos caer !lililil'lert@s al . mi.®.·ut@qil!le a!llo:wtahlam a(iJ•Relll a her@k ea temeFaria aetilli!!1cll: :[i)a1Fa ]!)311\,i,rse . •Oerr@ches de aili>negaei@H y de ¥a-
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lor individual y coleclivo; pero tales proezas nos costaron en los combates de Binacayan y :'\oveleta 1cerca de 500 bajasl jLoor etemo a los heroes, y consuelos de Dios y de la Patria hacia tantos hogares espafioles entristecidos para siempre en unas desdichadas horas! Dis traidos, nos apartamos grandemente de nuestro prop6sito: queriendo narrar en un solo volum,m, y de no grandes proporciones, nuestra tesis, ·en el proemio de estas paginas consignado, de modo alguno podemos detallar, cual en muchas ocasiones lo efectuamos: un muy incompleto indice; no puede ser mas este pobre libro. 5. Toma de Talisay. Gue1·rillas de San .iJiliguel y San Rafael. El «Covadonga». Combates en Santa Cruz (La Laguna) y lugares vecinos en Las Pinas y San Jose de Bulacan. Co1nbate en Novaliches. Otros ataques de las 'rebeldes en 0
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Zambales, Bataan y Bulacan. Acci6n de San RafaeZ.-El generai Aguirre .,li!li>r6 oluro, refiidisi mo c0mba1le el dia il.2: elil. liln movimi entg env0lvelllte, C@Iil. rapidez y acierto operado , t0m6 a la 1 bayonet a las fuertes posici0n.es del enemigo en Talisay (Batmngas). L@s rebeldes sufrierQn muc1ias ba,j as, ell'tre ellas tres cabecill as im.porta ntes en la comarca ; ias ntQestras :liuei¡on G soldados muertos y 2 @ficiales y il.2 iBdividuos de tropa heridos. Las guerrill as de¡ tos voluintarios 1 segwian irestaJ.il.d@ Gl.e c0'J.il.tifill!l@ exceJentes servicio s; pe,'(!) fuii.e de excepcional valor el que en estos d.ias 1levara a caho en coill!binaci6n con la coh!lTnna Lopez Arteaga . iLa gl!leFriMa de San Miguel, dotaRd0 las lane1las de vapor Holfast y Conchita y la de San Rafael e1 Napindan, Hegaron aPamaira~rn0.g- BaM, vencieli1~@ los gbstaculos que el rio de Bulacan les pFesentaba , conduci endo a bordo ru.e las citadas embarcacio0.es la coium,n.a (fol
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comandante Lopez Arteaga. Dividi6se aquella fuerza: una columna a las 6rdenes del capitan Pardell atacaria aquel barrio insurrecto de Malolos; la otra, con Arteaga, iria a Masacul, a 5 kil6metros de distancia de Paombong. La columna Pardell fue en derechura, recorriendo agua al muslo 2 kil6metros de playa, a su lugar de combate; lo emprendi6 en el acto, y Arteaga, que oy6 el fuego cuando ya estaba en camino de Masacul, volvi6 en auxilio de Pardell y sus 130 hombres. Pamarauang-Bat6 fue destruido, y icon cuanta raz6n! : cientos de lanzas de punta envenenada tenian alli preparados los rebeldes, cuando los nuest'ros tomaron el barrio citado. Se les hicieron 30 muertos. Se hizo rumbo de nuevo a Masacul: en la guerrilla de San Rafael iban, como o:ficiales de la misma, lQs distinguidos magistrados de la misma Sres. Ricaiort y Felez : en la de San . Miguel, el de igual clase y distinci6n
D . .Ail.ilerfi(j) 'EUl]i)© [; ilbaim 1iamili>iem emtre a<[Mel p1,1:iliacl:@ de v:aHemtes v@irnliltari:(i)s el me<!li.e(i) ti.illu~ar <iJle Ma'-'llir~ , Sr. J.lodJJigNez iffierJ1iz, tenien.me de iV(i)hmta,JJi(j)s, y fos Sres. Fadainfie, Cespedes, G,liliociilem.cl:o, Jlueso, EHanc(i),. Escalera, Toral, .AJililif)UeF@, ·el liJLIJl.strado y activo reda~to•r de El C0.merci0, Conde, y 0tr0s mas, (jfl!le sel'!llti.mos O(i) consignar por el desord.eD de JilJl'l,estras notas de cartera. · Era MasaeJ!]l R© ifu.abia men@s ole .4.0@0 i.msl!l1rrect0s, qlile li!ruyer@I'li a l a la:[!)r@·ximaci@:n de la c@l1lilm.11a, a~a,n d(iH~al!ld(j) su caimpa:nnent(j). lil.e casetas nwmera-das. Se les a•]i)resa'll©lil <il.(i)S casCQS, liln@ <!le e-ll(j)s earga<!l.@ de a,rFoz, cyue remolcifl a Main,i ia la Maria z,,1.visa, del Sr. D@ro.umguez. Se ies e@giei;om mlllclil@s <!l:@c1:1memb0s 'S dos ilf>ailillil.@ras y @r<!l.enes de ti1iu[ad(i)S geID.era,les. Reg·l.'esaron las gmerriUas a Ma,m,i la: poco des;pues, la de Sam Flafaei. mandada po1.1 Iinclilalils·tii, Slil ca[PJiitaim, ' sg batia en 13aeo(i)F i[i)ract>iean~@ r@e©-
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nocimiento sobre la costa. Atacaronla los rebeldes, y se defendi6 aquella briosamente; los disparos de los guerrilleros con sos fusiles y la ametralladora que montaba el Napindan, deshicieron una gran trinchera y causaron grandes destrozos en la casa conven to, por los insurrectos ocu pada. El dia 14 lleg6 a Manila el vapor Covadonga: traia 2.000 J?.ombres de la Madre patria, los cuales fueron recibidos con el natural vehemente entusiasmo que se manifestaba a la . llegada de todas las expediciones. El pueblo de Magdalena (La Lagu-: na) me en estos dias saqueado por los rebel des; el Cura parroco de aquel pueblo, protegido por sus feligreses, se refugi6 en un bosque in.mediato, salvando asi seguramente su vida. No tuvo fortuna igual el juez de paz del vecino pueblo de Majayjay, situado en las hermosas perspectivas que ofrecen las comarc1;1s del Banajao y del Dalitiuan. Aquel hon-
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1:ado juez peni:nsl!lla¥, D. • MM11rnl $1:1arez, q,ue reg,resaha cl:e Cafamba, · fue haHado Jil0r los rebeides que 0cupar0Iil Mag<ll.alena, y alli, a la entrada cl.el plileblo, lo asesinaF0N vilmente; .estaba indefens@; pero Iil.0 importal>a: 1 los retielcl.es tagal0s q1J1e·riam. verte11 sangre de cast:itas, 61.e frai[es 6> cle le. gos 6 de ]aicos, ~es era igl!lal. Aquella partida cl.e insurrectos, OQmpuesta de 250 hombres, se 1rni.6 a @t11as hasta fon1rni:- eN j1mtQ mia c0:rn@ de 1.200; :peD@ cuan@@ cayer0ID. sobre la call>ecera de la ·fPT@vincia ( Sa,Rta C:ruz), eran ya mas de 2.000 para el iorfaileF ataql'le a la misma. A las seis y meaia <!le la rnafia,lll.a d'e1 12 se presem.tar0:F1 aillli: la e@l@nia peninsular, eon el g0Ji>emad0r civil de la provincia Sr. Marq.ues de SoMer al ~rente, se port6 o@m@ valien,te, rnl'lrien.d'@ eon gloria um.0 cl.e l(')s <iJU,e la comp@n!'.alll., el lileroico @ficia~ a1maceme~© de la A-lllmii,n.istmci6n de Hacienda de la pr0vincia, el
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honrado aragones D. Enrique Vela: este fiel i11te1~prele de las glorias de su cuna, con serenidad muy propia de la regi6n en que naci6, muri6 peleando contra los rebeldes, recibiendo un balazo montando la barricada que defendia y en la que espir6 con la sonrisa en los labios, despues de haberlos puesto en maxima expansi6n para dar dos gritos: jViva Espana! jViva la Virgen del Pilar! Avisa do el Sr. GeJ;J.eral Aguirre del plan que tenian los rebeldes de la La guna de atacar la Cabecera y Pagsanjan, acudi6 rapidamente a desbaratarlo y al castigo de los insurrectos, habiendo antes de este hecho tornado valerosamente el pueblo de Talisay, despues de ciI).co dias @n que la columna del general Aguirre habia efectuado penosisima marcha por las estribaciones del Sungay, en las cuales, y linea del Bafi.adero, quedaba el coronel Pazos y el teniente coronel Benedicto, qu,e habia libra-
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EN FIUPINrAS
4(j) tamli>iien rucl.(i)s o@mlllates eiil fa C(i)Jjllarca 1 cu.aI aGfuel em 11p,rn J(i)s refuel~es mataF(i)11 a1 ea@iita.m 'mlam,c(i). , Ya e@m a>lil!tiefi0riaal!li a la ~legaola l:l.el general Agu.irre hali>ia!El aitaaa(i):0 ;'I. Samta Cn1•z tas nuerzas 1,1ebett!les, se~ 1 gifl.n h.emos dric'\il(i): .ln-ab{an!@ efectmad(j) en @easion en ~f'lil:e N© 1.ta,fuia en a(!_[uella cabecera mas cle 2(0(!) fu@mbres disp@ni.ro1es :paira I'l!lefuar C(i)filt•; a Ios mas me 2.(i)0(i) q,ue dliivil!liol@s en coli.:mmas Ia ac(i)metieFom:. tos jefes militares cle la escasa iu.eFza aJr destJeada, y el goilileTmad0r civi,1 <Wlil [(i)s y'lll!1ntarios, se hatiern,m C(i)Iil dem,i:eoitJ, (j)Mei.iti:en.dQ sefuaiad(i) tri!Uillilf©, 'Y aHwr,ferse l@s rebe-l~es Ji)(i)F ia l(!liaya, ifu.af ia La Lagu11a, em aqNe1lla oliirli·eeci6ID. fimliJrn,jad@s p@r la seedoID. <ilie a11titFle(!_[ue habia a;JJ.ii, c0mple:t6 fa viet@ria eh iuego de las ametr,aaiad011.as (fo ~a JiJia'l'b(J;, swrta e.a a(iJfl.lle11.-as· ag·mas. Ma•s 0.e $Cl lillUerh@s se bfai.ernm: a 10s l1nsunect@s aq,l!le~ ol~a; [!)e110 lili.l•as cilllft:r@ h•im fue el castigo <i_!m~ smif,riierom,
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cuando terraces al siguiente atacaron de nuevo a la misma Cabecera de La Laguna, porque llegadas ya las fuerzas que alli acudian desde Batangas, bajo la acertada direcci6n del general Aguirre, determinaron nueva sefialadisima victoria en toda aquella zona; los insurrectos tuvieron mas de 300 muertos . Se reforzaron, y 3.000 hombres contaban cuando comenzaron a atrincherarse en Samba; pero alli tambien tal fue la acometida que les di6 la columna clel teniente coronel Jimenez, que, muy mermados aquellos, tuvieron que dispersarse. En la refriega perdieron un tituJado general Abad, sastre y teniente suplente de Pagsanjan; este usaba unas tarjetas que expresaban su titulada jerarquia y las prodigaba por toda la z0na. En este pueblo, ex cabecera de la provincia, se titulaba nada menos que rey un capitan pasado, Santiago Cris6stomo. Los ins urrectos ha-
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Man illilstal ah eli1 el ~@cail de fa esoueIfa de a(ij'l!lel :pueful@ 11!1'D !n,@S1iJiillail «il:e ~angre, regu[armenfie ]i)'l'©viist@ de :material. Em. Maja;)'1ay y, Fac~e tel. µian fad:rnicad6R ~e armas 'Y m:1!1.11ili1ciones. Em el de '.Pila se lib111(i) comba- ' !te, era el qu.e lil.ubg l)Jl:le ametraUal.' et convenlto en ql!le J@s i11s1:1r11eeh@s se l'l.i:cieron fuerhes, despu~s de tomarles a la li>ayone1ia mNa · ~mertie tFfa'lc:fu.era . Un bando de i.l!ldt1llto C!l_ictatil.@ !i)(i)f. el gin1eJ1at .Agl'l,i n1e pP@<il:1:1.jo elil v,eilFIJtiel!l.aitF@ tfu@ras et Fet0rn0 a f>agsaim:ja,n clei 4(j) p@r H')(i) ~e i< l!lS veeimos al1 , ados e1!1 arruas, y lile ml!l.efu@s mas , erteneeiem,bes .a 0trns pmeM@s. €:@sM.1bales p@e0 t.rabaj0 am,pairaFse 6 cl.esampal.'a1rsg a las d1isp@ski.@JJ1es (!IUe en Slil prnvecb@ se dlicta.hla0.. ffintre est@s rebeldes <il.e La Lag:11ema, como en tire los de Cavi.1fig y, Tal,i say, se mo.to el emJ!)~M lill!le fuaeiailil «il:e Igs 0rn.alililentos sagrados: las e-awas plnviaies, C!latmiHicas y, eslf'@las, s@Jirng
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todo, servian de insignias para las mas altas categorias civiles 6 militares. Reforzada la columna del teniente coronel Pintos, que tan estrategica posici6n ocupara, liar6 en Laspiiias, sitio de Dalig, una nueva importante acci6n, por espacio de tres horas, con gran numero de los rebeldes, que se declararon en precipitada fuga, viendo el movimiento envolvente que sobre eHos hacia la columna Pintos. Toda esta feerza se porto muy bien; la de caballeria oper6 en aquella ocasi6D brillantemente. Mas de 200 bajas se liicieron al enemigo. Contra el destacamento de 65 hombres del regimiento 73, que habia en el pueblo de San Jose, cayeron furiosos 1.500 rebeldes. Aquella rne-rza se defencl.io heroicamente: en nada le arredro tan enorme desproporcion m1merica: la mandaba el teniente D. Pedro Garcia Gallego. En lo mas recio del combate, cuan-
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d@ l@s siil!iiados Iiabiain <fa practioar mayor esFl!lerz@, Beg·@ a aquel 1li1gar la coltlHMila Lopez Arteaga, <i{l!le d'es.tr0z0 a los insurrectos, ca<tJ.saI!ld@ies I mas de 200 muer,fi@s a la l!>axouta. 1 Em ra noche del diia 18 ataca:ru a · Novaliches 2.500 rebeides: 30 cazadores, al mawl'o del seg·ui;i<i@ l!eni.emte D. Ignaci@ Cres]JJO, y 1.Cl guawdJias civiles, al del saFg·ent(i) :0 . .Mariaft@ Pablo, repl.egados sobve er e@I!lVeI!lt@, pri.mevo, se defendieroI!l ~a,ler(i)samente; mas RO se 1iilililitallon a esl!@, ;;;in@ q.ue fli)ara ele¥ar su c@ndl!lcta a b.ech0 ,Jaernic@ ent1,1e l@s mas, et we(j)_l!lefi@ destacamento-, cu:a[ld@ ya estaba me11i1m1:ad@ por el 'titteg(i) de l@s insurrectos, ern:riremdio fa @fensiva, apodera.FJ.dose de irnp@rtlamte ]>Osiei6m. Noticiado el jefo de a(!J;tlel'la z@ria mmtar, ten.i.enibe c@r@l'lel Sr. G<mzalez Atlile1J<!l.i, del hecho qtte se estalila ventilaNdo en N0,va£icliles, e@n t©ma ]>·resteza eavi<i> Bli} aiux:.ili© cl.el <!l.estaca-
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mento, que ya llevaba doce horas de fuego, lropas al maudo del senor comandante Gonzalez Llanos y del tenien le Piq ueras. El teniente Crespo perdi6 de su escasa fuerza 6 cazadores y 3 guardias civiles, muerlos sobre el campo de batalla, y ademas tuvo 12 soldados heridos. lmportante hecho de armas . La columna Llanos foe durante todo el camino batiendo grupos que la molestaban y causando bastantes bajas al enernigo. En Sobie, y junto a la fabrica de ladrillos del futuro Arsenal, fueron nuestras avanzadas de infanteria de Marina atacadas por gran numero de insurrectos; dispersaronse estos despues de sufrir grandes perdidas. Mayores fueron, pues llegaron a 100 muertos bien contados y otros tantos heridos, las queen el pueblo de Orani tuvieron los rebeldes por el embate que recibieron de una co-
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lumna, compuesta de 2 c0mpamas del batallon de Caza<il:0res auim. 5, al mand0 de su comandaate SF. Baquero; desalojad0s del pueblo, y irnes1 tos en preci!J!liltada foga, aejar@n elil poder de la columna gran ]l,Umero de armas y m1emicicrnes, mas 2(i) Jilrisioneros. En Calumpit, el destacamenilo y los leales voluntari0s Feunid0s l!latieronse y obtuvieron triunifŠ sobre gran partida insurrecta. Los rebeldes hicier@n en fos. IDism@s (11,ias 0.es1c arrifar l!lil tren que, airrastramdo convoy, se dririgia descl.e Manila a Bi.Ilaca.111:. En San Rafael rin6se una acci6Ii formidable J!)Or la col.umna L0pez Arteaga. Cuando t0s insmrect0s se habian fortificad-0> grandemente ¡en aquel puebl0 y cortad0 tod0s los puentes, cargo sobre elilos la c0iumna al man do de L6pez Arteaga, la cua1l, con el. arFoj0 p0r t0aos admirado en tantos y tantos hechos vie-
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toriosos, cuales los que registraba aquella fuerza, tom6 a la bayoneta, una a una, todas las trincheras, casas - iuertes, conven:to, iglesia y tribunal por los rebeldes ocupados. Mas de 800 muertos se les hicieron alli; nosotros tuvimos herido no gravemente de arma blanca el capitan don Juan Segovia de la Puente, y hasta 14 heridos mas entre clases e individuos de tropa. El Capitan general Sr. Blanco felicito calurosamente al bizarro Lopez Arteaga y fuerza a sus 6rdenes. El Gobierno de S. M. hizo lo mismo despoes y ascendiole a teniente coronel. 6. ° Conspil-aci6n en Vigan (Iloeos Sur). La guen'illa del Casino espanal. Acaecimientos en l0s ultimas d¡las de este mes. -Una secci6n de voluntarios de la capital de la provincia de Ilocos Sur condujo a Manila mas de una docena de individu0s de los Jl)rin.cipales de Vigan. Los PP. del Semina~
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do de aq1:rntla cim!Iad hali>iai1!1 recibid(!) mi.a den.Nllil.C-ia que :tra,111smi!tier0n ~111 ei acto a I.as aiNtoridades y til)Ul€l d.i0 lugar a las detelilCi(!)rrns elevatilas a prisi6n en ~Hibid , S't1 Jridas p@r aquell@s a quienes a1l!ldim(!)s . La o~Fcunstanciai de tigmar entre gst(;)s e1 rucalde y el siBdic@ de a(;fl!Hll Ayuntamient(;), coJili otF(;)S c@ID.Cejales g ind{genas que ostentaba0 ti'1m:f.0s academicos, di6 iIDJpo:rta,,rnia suma a fos c0men,tari0s <ql!le S(!)Jiire ta[ :hteclii@ se 11.foiel'aa. Se sup0 q1rn en a(fl!leHai G(!)maFca habia traba1jad.o activaim(mte p,~ra la conispiraei@111 ltllil. afi~ia<il,(i) a~ G.aibip1rna,Iil, q,ue aU,i es-ta~a aguardantil.o las arums de ('J_Ule ~:recisa1Tua111 pa11;a ~1 leva•n tam,ie111t@. · 'IDfgna <ile el@gi@ sincero fme ia C(i)flducta die to<!l'@s fois / 1 jj • l • ,l ' e1em.en •0s !_!>en1llil.sw1ai'es e• 1n.sl!l~ares . 1eales en aqNeH0s d'ias, y ml!l!y sen.aada, '}i)ara sef sieH:ll}_!)re agradecida, a del ceh~so g(i)bernad(i)F ci!vill: ~e fa 1)r0vincia, Sr. 'Upiez 1ller111an.d(i). Presentaruse 500 re'lllefoles en Ta-
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lin, y fuerza del batall6n cazadores num. 6 los bati6 por completo en. distintos lugares, pero sobre todo en Bomb6n y Bayuoum bay. Los vapores de las obras del puerto prestaron muy buen servicio en aquellas operaciones. Bien sei'ialado fue el que dias despues, el 29, prestaba en aquellos mismos lugares la guerrilla de San Miguel, que, dotando el vapor Orani, se incorpor6 en el barrio de Junosa a una columna al rnaodo del capitan L6pez del batall6o cazadores numero 1. Batierons e estas fuerzas en las es tribaciones del Susun, causando 40 muertos a los insurrecto s. El comandan te de la guerrilla de San Miguel, Sr. D. Alberto Ripoll, Magistrado, recibi6 muy expresivo telegrama de felicitaci6n del cornandan te general de La Laguna, Bataogas, expedido desde Calamba en la misma fecha. El Casino de Manila, aquel centro
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espafi.ol que venia cl.ando tan «widen.tes pruii>as de paJtriohismo y. testimonios tan valios0s de cristiana ca" IJidad, prodigat1d0 :toda suerbe de alrivfos y c0rnrnelos, en esbos mismos dias, y segun unan.ime aeu.erdo t@mado en. solernf.le jmnha, a la c1rnl expuso el Sr. Comenge, con ias galas y brillan:teces de SU elocuencia nativa y erudici@n sin. par, el l[i)«msa!iJili@t0, cre6 una guerrilla titulada dei «Casit10 espa,fiol», destinada al a,111menb0 de vigiilaincia en la l'!iahia, 1·i@s y esteros navegables, a impedir la pesca a 1· s enemig@s, a ai{!lresa11 y echar a J_i)iue las embarcaciones ~nsu,rrectas prestar a la vez sus servicios en ·erra firrme, c0mba,tielild@ a l@s sediiosos. Gran alarma produj@ elil Manila en 0 noel:ite del 26 el estl'lreJil0.0s0 es~ ampido de una caja de p0lvora de0sitada efil• el polvorin de Pa•mdacan, que ademas de ocasiolilar desperectos en el etlificio, determine g,r a-
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ves lesiones en cuatro individuos. La extensa zona de trepidacion que aqud explosivo desarrol16 comprendia los barrios de San Miguel, Malate, Paco y Sam paloc. La lancha de vapor al servicio del Capitan general, y en la cual por disposicion de esta superior autoridad embarc6 el senor teniente coronel Tuser, primer ayudante de S. E., sall6 a reconocimiento y recogio los heridos en tal accidente. En la misma fecha embarcaba en el vapor Covadonga, para regresar a la Peninsula, el contralmirante Excelentisimo Sr. D. Vicente Carlos Roca, siendo afectuosisima la despedida que se hizo al preclaro marina, a quien, no solo los suyos, sino todos los leales, tributaron los homenajes de respeto y afecto que merecia por sus virtudes y caracter. Las depredaciones cometidas por los rebeldes no tenian tasa; el se¡cuestro, el asesinato, el robo, el pi-
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llaje y el <ilestrozo, 1erwn las 11suales armas que marrnjaban para el logro de sus idea,les : ;, c11uiles seriaia es~@s? A p@c@ de1 descatTilam.ient@ del tren en la 1inea de Dagupan, arranoaban de su iglesia al C1,1ra me Mermosa (Bataan), al F .'Vara~, t an (lJtte~ rido de sus feligreses; secuestraban en La Laguna al ayudante de m.ontes Sr. Rami.rez de Arellan0, iti.j@ primogenito de lil0nradisfr0ll.~ espaiiol pelilinsular, ~O aiios dedicado a euseiiar a los inddos medio dignos de en el c0JiID.eFla subsistemcia oliltener â&#x20AC;˘ 1 do y. la industria; caian sobre el cbnvento de Majayjay, para ap,oder~rse tambiem. <ilel Cura parFoco,, at e la iealtad de alg1m@ de sms feliQ eses salv6 en rnral esc@ndite; Foaban en Sibul y en toda la campia l@s galilados ([l!le a sa paso 1ilailfa1)!fm, y en l@s poblados las easas de tfdos los pudientes; c0n la tea incena¡ aria destruian hasta l0s hogarns en q e siernpre e11eoIDti;a,};)an [0s cemsu:e-
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los de la caridad, como la hacienda de Malinta y otras pertenecientes a las corporaciones religiosas y a particulat'es. Los combates se sucedian unos a otros, y en las proximidades a Cavite, tanto en los puntos avanzados del N., cuanto en el S., habia escaramuzas diarias en las descubiertas, aun cuando en todas ellas se castigaba al enemigo. Asi terminaba el mes de Noviembre; tal cortejo de malandanzas no impedia que con espiritu sereno los espafloles peninsu,lares y los insulares leales, se aprestasen a celebrar el grandioso comnemorativo del dia de San Andres del 30 de Noviembre de 1574. El invicto pabe116n hispano no podia peligrar en lo mas minimo en la tierra espafiola, en que con tan escasos medios de fuerza se supo desarrollar la que se precisaba colil.tra el formidable cumulo de elementos con que a Manila acudieFa el pirata Li-Ma- Hong, queriend0 tomar-
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la, a sat1gre y fuego y stiifri@d:<il la mas C<ilmpl.eta destF1rnci6Ili ie sus G2 b~,rc<ils y (l).el e1e,rci.tli(i) q,u e t@stritJl!l.laTua, p(i)r e1 ad-mi.rable esifuerzo <il.e 1n 1 l)Uiiad<il de espa@.oles: fi(i) eran mas los que en. traoee rli a,n. ©.l!l1'(i) C(i)ntaiha (\i-ui.do de Lavezares. La fi esta de Sam. .An~r{ls celehF6se en Manila, en esbe afi(i) de 1896, coR solen.rnidad exce:p>ciomat PG>·r im1iciativa del vi11f'.t1<ilS@, qtl'eri(l).@ y respetacl.<il ArzofuiS]lO metirQJ)l@Jiita·no ID . F:i;ay Bernard:~m<il Noza[edla, resueit,abase la al.iltigua patri6tica As(i)ciaci@n civicor~Hgiosa de Saa AI:J.d1res, y al arelil~- , episcopal Jilalacio acudfan en. tr,(i)pel c , n,f,uso y hermos@ l@s es,pai10l.es rlioos, m0vidos p@F el aM,m. de ser iinsirt(:)s en aqu~lla Nermand.ad 0.e g'l<ilt" osisim.o abolemgo. Atflrni!Famlo el aun.amienillo (iJlrn · frecian los leales hijos de la H.fule Espana, bien podia lalllzapse a tocl:os J.ient@s el hist@rfo(:) «oo iml)l@rta » a oobeldia irul•me ile l•s tagalos.
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C!PITULO IX Sintesis de los princ~pales acaecimientos en el mes de Eliciembre de 1896. 1.' El general Rios al centro de Luz6n. Una cartilla sanitaria. Mas servicios de los vol~ntarios. Mlis compates. - 2.' Asesinato de! revevendo P. cura plirroco def'Iermesa.-3.' Llegada de! general Polavieja y del alto personal militar que le acompaiiaba. T.oma de posesi6n del cargo de segundo Caho. Hip6tesis acerca de la contrariedad que pudo sufoir el Marques de Peiia-Plata. Nombramiento de Capitan 'generaJ , Geneva! en jefe de! ejercito de Filipinas, G0bernador general d:el Avcl\'ipielago en fav0r de! Marques de Polacvieja. S'u toma de posesi6n de! mando, y alocuciones. - 4.' Nuevos encuentros y combates. Causas e!evadas 4 plenario . Donativo de Pangasinlin. Otra conjura en la plaza de Cavite. Acci6n de Meycauayan. - 5.' Despedida de! general Blanco. Su e'spada de honov. Banquete de la c0lonia inglesa. A bordo de! 'Leon XIIJ. - 6. Decvete ,del general Polavieja sobre la concentracien de ba29 0
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rrios. - 7.' Varios eomhates. -8.' Noehebuena. - 9.' Una circular de! general Polavieja. Su decreto suspendiendo las elecciones mnni~pales.
1. El general Rios al centro de Luz6n . Una cartilla sanitaria. Mas servicios de los voluntarios, y otros comba0
tes. - El general D. Diego de los Rios, que por la escasez de medios de guerra no pudo desarrollar en Cavite t0das las actividades de su valeroso caracter, rue nombrado comandante general del centro de Luzon ; el 1. de Diciembre sali6 para su destino. Aquella extensa zona reclamaba cuidado, sobre todo Bulacan, en cuya pr0vinoia la insurrecfi6n tomaba vuelos. Mucho podia esperarse del joven general que a los e1rnrenta y cinco aiios de edad eontaba treinta y siete de servicios efectivos. En Catal'uiia, en las Vascongadas, en Cuba . y en Afri~a, habia ganado todos sus emple0s, vertiendo .en dos ocasiones copiosameate su sangre, no defibri0
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nada por excepcional f<::mtmrn en l@s enervadores climas en qtrn la nutria. Aarhes de Cavite, el ge0eral Rios ~abia pFestad0 ya muy linrnnos seFvicios en Filipinas: en Mindanao halb ia s-ido soldacl.@ afortunacl.o en hechos de armas :laill iimip@rtam11tes au.'a i el de Tugaya; pero ademas fue aHi babilidoso politico. Form6 consejo de gtrnrra, y por sen.te0cia de este el gemeral 'Rios f.usil0 al datto Warris, el mas enti\arnizado enemigo de Espana : des1m¢s de este hecho de justa, pr@vecli).(i)sa, indispensable en.ergia , Ri@s pact6 b@n el sultan Amay la ocupaci6n de a tierra de Garrassi y la paciificacicrn de1 fornd0 de la Laguna de Lana@, l@grando que el dia 4 de Septiemlirne de este mismo aii.o de 1896, aquel sl'l.litan hicieFa su presen.taci6n ofieial en Maralrni, a la tlegada del dignisimo general Cappa, comandanrte general de aql'lel 'Vasto- territorio. Es muy interesante el traitad@ por Ri0s
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hecho con el principe Sibuguey, en virtud de cuyas estipulaciones los rnoros pobladores de la costa Sur de Mindanao, en los senos de Sibuguey y Dumanquilos, debian ser los primeros que satisfaciesen el impuesto de vasallaje, exiguo por su cifra, pero grande por su significaci6n : cuarenta y ocho-horas de tiempo les dio para pagarlo, advirtiendoles con entereza de que suerte iria el a cobrarlo si no cumplian su compromiso, como suele suceder entre aquellos mahometa nos; en tal ocasi6n cumplieron lo pactado. Cuando el general Rios lleg6 a Manila desde Mindanao, lugar para el de proezas y habilidades, segun acabamos de decir, doliase la opinion publica en la capital de las islas de que el general Rios hubiera de trasladarse a 110-Ilo, gobierno de las Bisayas, para el que desde Espana vini_era nombrado: el senor general Blanco, informado de aquellas palpitaciones de la publica )
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opin,i(m, a la cual p0r propi@s tem: peramelllit0s el Marqi1,1es cl.e !Pena:.P1.a~ ta siempre observa atentamelilte, destin6 al general Rios a ia coma,&da:n cia gelileral de las proviil.ilcias cl.el centro de Luz6n, y a ellas rue el nomli>rado, estableciend0 su cu.artel general en la Pampamga y comemzancl.0 a operar coliltra los rebeldes, que ya eran. persegmi.d@s iF1cesam1.tliernente ,p0r nuestras tropas. El dia 1. ~ cl:e este rm.es puli>licabase por e1 i~1.!l!strad0 clire0t@r-s'l!lifui-ns[!i1ector de Sanidad Mi.litar de aquel ejercit0, :0. Joa~1,1,i n Pla P¡l!lJj@la, u dentifico hu.malilirtairio tra,fuajo cliign0 de especialisima menci6Iil. Consistia en una completa c0lee0i6n d~, reglas Tu.iigienicas praoticas Jilara el us0 de las tropas, especialmemte e11ropeas, <ql'le se enc0mtralDaF1 elil caimJilain:a. ~i: 'b.,l!tbieran podido lograr aplicaci6n e0mpleta los saibi0s preceptos higiendc0s dictados por el clisti1l.ilgiuiid0 jefe de la Sanidad dei Ejerciito en/Filipi,nas, es
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bien sgguro que la acci6n pernioiosa de aquel clima sabre el europeo no se hubiera sentido por tan doloroso modo. Tan digna de estudio como de encomio es la cartilla sanitaria del Dr.Play Pujola. Por todos los alrededores de Manila y por la ciudad misma, pero muy singularmen te por los de San Lazaro y Sampaloc, tanto los voluntarios de caballeria, co11 su comanda11te el senor¡ Bores Romero al frente, como los de illfanteria, a las 6rdenes del suyo, el pundonoroso jefe de artilleria Sr. Hevia, montaban guardias y patrullaban de continua: Hevia abandonaba las c6modas bien retribuidas funciones civiles de administrador de la Pampanga, por las para el mas propias de su carrera militar, aunque en aquellas como en estas se distinguiera siempre, segun se distinguia: los voluntarios, ademas, practicaban constantes extensos reconocimientos , constituyendo tales
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actividades, n0 solamen,te garaa1tia fija del oFden, sin@ consuelo inmens0 p>arn los espuritus pre@cupados, :ilio decailll@s, eliltre l@s pe:niims0.fares e imsulares leailes; las pa.tmhlas, l0s Fetei:rns y las parejas fijas de estas fuerzas en c@nstaate l\Iil,Q¥imienito, auxiliando a las del Ejercito, desempeiiaban oficios qiue jamas dehen seF olvidados. Pe,11@ ni el tiem;po tra!ilil:Sc0.nilll0,, lili los castigos sufrI,-folos por fos obstinados reheldes tagalos les amilanabap, . sino que est0s agranlllai!la1JJ.r <1,ada vez ras Sl!l ra<ilii@ de (i):evasta<il!@Ta acci'<fJn; f, por ser asi, el dlia 2 de Dfoiembre el sen9r general Blanco dili:taba un 1 and@ por el euail se dedairaJ1>a,a elil estado de g·0.erra @tFas Jjrnovimcias, cuales Bataan y Zambales , ai.f)liican.d0 a las m,ismas las prevelilci01il.es de · 10s band0s a:nteriores ae 3(!) ole Ag0sto y 25 de OctubFe. Despues del incendio de 'Mailinta, los rebelllles asaHar@n 1a ,oasa lha<1,ien-
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da de Lolomboy, y los menajes de las mismas iban a adornar muchas casas de insurrectos del primero de estos lugares y de Polo; de este pueblo y de los de Tinajeros, Meycauayan y Obando, habia muchas gentes en armas. El dia 2 el Capitan general senor Blanco dirigia al Sr. Ministro de la Guerra el siguiente telegrama: ÂŤElevadas plenario causas principales contra 60 promovedores rebeli6n, titulados ministros, consejeros y generales, brevisimo plazo seran falladas consejo guerra. Âť En esta misma fecha, una columna de 300 hombres a las 6rdenes 9-el capitan D. Juan Valderrama, tom6, despues de rudo combate contra 2.000 insurrectos al mando de los cabecillas Llanera y Torres, el campamento que estos tenian en Sibul, con gran atrincheramiento en BalingCupang. Al mismo tiempo libraba con igual
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vict0rioso resultad o el teliliente c0- , ronel ÂĽintos, en l?a:r~iiaqu.e, otro combate con los insurrec tos de Cavite, los cuales, a pesar de l@s continuos reveses que llevaban en aquetla linea, no cesaban de molesta r diar,iamente a las tropas que la cubrian . Y con eslos encuen.tros de Sibu:l y Paraiiaq ue coincidian otros habidos en distintos 1ugares; pern partic1lllarmente en las inmediaciones de Salilta Cruz, el dia 3 de' Diciembre se libr6 uno irnporta:liltisimo pC>r la c@hurrna al mando del teliliente MD@rnel D. Aniceto Jimenez, comand anrte lmilitar de La Laguna, en donde con ltantos exitos t;rabaj6 este bravo jefe. / La gran partida insur.recta presentada en Sambat, al mando del titu1 lado general !Eligio y su lugarten ien1 te Valentin, fue verm:aderamente aest trozada por nuestras fuerzas, :(llerel ciendo en la refriega aquel renombrado cabeciila.
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Asesinato del cW1¡a pa.rroco de Hermosa (Bataan). - Cuando los rebeldes dieron asalto al citado pueblo de aquella provincia de. Bataan , bist6ricamente pacifica, siempre tranquila, a pesar de existir aun en ella, no obs tante su proximidad a la capital del Archipielago, bastantes rancherias de aetas 6 balugas, en las crestas de aquellos montes que forman la cordillera de Mariveles, secuestraron al cura parroco, al virtuoso dominico Fr. David Varas : al pronto no se supo que hicieran de el; solo con la noticia del secuestro regresaron entristecidos a Manila los religiosos de su convento de Santo Domingo, que acudieron a Bataan para prestar auxilio a los parrocos que de el precisasen; pero en estos dias se conoci6 el horrible asesinato, verdadero martirio a que sujetaron en Hermosa los rebeldes a aquel sacerdote ejemplarisimo : despues de cortarle las manos, arrastraronle
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hiasta ei barrio mas lejano cle los diez de que aql!lel pueb1@ se c@mp@ne, y am mutilaroRle hasta desmenuzarle, lj.rrojancl.o por urnm0 a um esterc0lero l@s restos de aque1 martir, ql!le bn ta.I dia subi6 a la gloria. Sus hermanos de Mbito dedica.D@nle s0lemnes exequias, cual todas 1as <flrdenes habian hecho con los 11eligfos0s q11e tambien habian sucwmbiclo vicbimas de la ferocidad de los insurrrectos de Cavite. 3. Llegada del general Polavieja y ~el wlto person();/ ~ilitar, q,ue le acempaŸ1.aba. Toma posesion del ca1rgo de segur1r ~o C(J;bo. Hip6tesis acerrca de la contrariedad que pudo su;frvr. el Marques de PeriaPlata. Nombramiento de C(J;pitangeneral, Gener(J;l en jefe del Ejercito de Filipinas, Gobernador general del Ai¡chipiel-ago en fO!Vor del Jfarques de Polavieja. Su toma de posesi6n del mando. Alowciones.-A bordo del trasatlantico Atfonso Illl, y despues cle un viaje efectuad0 en 0
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veinticuatro dias y diez y siete horas, es decir, el mas rapido que se conoce, lleg6 a Manila el inclito general, Excmo. Sr. D. Camilo Polavieja y del Castillo, marques de Polavieja, de justisima reputada fama. Soldado victorioso en cien combates dentro del patrio y en extrafio suelo, evidenci6 las mas allas dotes militares, patentizando ademas como producto de sus talentos reconocidos y de una ilustraci6n s6lida, resultado fijo del .asiduo estudio, cuando lo practica quien posee buena retentiva, especiales condiciones de hombre de gobierno. Las revel6 muy a las claras. Manila lo recibi6 solemnemente: no puede darse mas espon tanea manifestaci6n de publica simpatia y regocijo. En ella tom6 parte el Capitan general, el ilustre Marques de PefiaPlata, acudiendo deferente y solicit0 a recibir y agasajar, con las formulas mas completas de la cortesia y del afecto, a su preclaro compaiiero
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de armas y a i0s dis,fJi.nS11mi<il.@s generaJes qlle le ac©rnpa®.abam. Eran gstos l0s 5res. Za;ri:pino , Lachambn~, Cornel y Galois, t(!)ul(i)s ellos de !mist(i)ria militar escla,EeciG'a. El ·general iP@lavieja se p©sesi©.n<il de su cargo de segllllil.d© Cal!>@, (&gheFnador militar de MaiJillHa, en el mi:smo dia de Sil desembaF(!J•lle, 3 d.e D,iciembre, cesarnulo el'l a(!Ju@l el veteFano general de ingeliliieros ~v. Rizo, que interinamente 1© desem,perffiali>a. De la subin'specci<flm de fas aFmas ge11erales e iasfi:iitttt(i)s del 'Ejercito h1iz© ynt1.1ega al sen.er genua1 P0laviej,a ei 1eteian0 ccmmel 10 . Ftarndsc@ (illive, fil!l.e, em su cal,idaol de secreta,rio em~argado del <il.espacno, las temfa a SH , arg0, sim cl.es-poseerse del de jHez ilitar, en el mrni tan activ.amemte enia trabajand0 desde el tris·te ab 'ni'flio de la in.sl!l.rreccion, segu.n he.m0s consignad0 em. otrns 19agtr1as. Con la llegada del general B@favie.a a um.en to la e:x];Je0taci<iln: fa prensa
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LA. lNSURIU!CCJ6N
de la Peninsula afirmaba que el Marques de Polavieja sucederia inmediatamente al Marques de Pefla - Plata en el superior mando de las islas; la opini6n en Manila creia lo mismo, pues no queria creer que un teniente general tan antiguo y distinguido en esta alta jerarquia acudiese a Filipinas al desempefio de funciones altas, pero al fin y al cabo subordidinadas directamente; se esperaba eonocer de uno a otro momento la renuncia del senor general Blanco, y la tardanza en ello extrafiaba a 1a opini6n; aun cuando por la costumbre, no por ley organica, transcurridos tres afios de mando, podia decirse ÂŤel general Blanco esta cumplido Âť, lo excepcional de las circunstancias podia muy .bien alargar el periodo de su mando; no lo sabemos, pero de nuestra cuenta, por la interpretaci6n que damos a las naturales exigencias del amor propio, cuando bien entendido, nobilisimo, y por-
EN FM!JIPIN AS
• que conocemos fos aLtos
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grados del pundonor en que e] Mar()Jues de Pefla-Plata vive, pensamos y <.foci.m@s que el genera.Ji Blalile0 H qme,ria abandonar el Archi,pielago hasta ve0;cer el mism0 in totum la insarreeoi<fm tagala; hali>iafa li'esis&id,0 ma.li'aviill@samernte sin recu.rsos; ven.ia batiendola en sus derivaciones parcia1es, en tanto en cuamt(!) congregafua medios para destruiFla en sl!l g11an ;f(!)c@, y cuand@ se aproximaba ef instante de poseerlos, el general B'lanco · n(i) queri.a marehaFse; es 0bvi(i) <i]]Ne asi ac@ntecfa. Transctrnrieron seis u och(!) <lias; el Gobierno <de S. M., feliciitando al Ca,l)itan general S.r. !Blanc(i) ]l©F sa gesti6n en el .Archi>pielago y stt cond.ucta ante la insu1rre(::ci611. tagala, fuabia «aut0rizad@ » al seiii©li' Mar(!J'l!H~S de Pena-Plata a regresa,F a la Pem11111sula. Con el enemig(!) al fre1:1te, tal ' merced debia agradecerse, per@' no ]l(!)dia usarse, y ei ge11.eraa ,E'tanc@ de
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LA INSURRECC16N
cierto Ja agradecia, pero no la usaba. Tampoco por la misma causa dimitia.
El dia 9, la prensa de Manila publicaba el cablegrama siguiente: ÂŤLa Reina al general Blanco: Acabo de nombrarle jefe de mi Cuarto rnilitar. -MARiA CRISTINA.Âť Y otro cablegrama nombraba al Marques de Polavieja Capitan general, General en jefe del Ej ercito de operaciones de Filipinas, Gobernador general del Archipielago. Con el solemne ceremonial de rubrica, el dia 13 de Diciembre se posesion6 del mando superior de las islas el senor general Polavieja; y terminada la recepcion. en Corte de -todas las Corporaciones y Cuerpo Consular , el nuevo Capitan general abandon6 la casa Ayuntamiento, siendo objeto de calurosisima ova-
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EN Fm!PINAS
c10n en la gran plaza de Palacio. Antes de volver al de Santa Potenciana, el Capiitan general entrante di.r'igitl>se a!1 Jl>a:lacio Arzohispal cl.evoiviendo la oficial visita que le hiciera el respetable pFelado rnetrop01ita:no. El general P0lavieja diidgi6 tres notables alocuciones: resplandecientes de patri0¡bisrn0, e;videnciaban a 1a vez el oabaif. concept@ (l_p11,e a los pocos dias de su permaro.encia en el pais habia ad(l{uiric\o el mrnvo Capi'tfa geBenal del estado en <Jil!le se b/1,Haba el territori0 lile su man.d@. tjontienen tales documentos prograIfa tan completo, aunque sintetico; tf PFesan 00n tal c1ati.dad. el camjino que el general Bolavieja se pr0ponia s~guir, y seguiria dadas las oondidi0nes de sa caracter y firmeza de d<mvicci6n, que no po<ilernos resisti:F deseo de¡ transcribiTlas literahnent , a pesar de nuestros pFop6si tos ,e no agraR<ilaF el presente ilili>r@. Los
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LA INSURRl!CCI6N
solemnes documentos mos decian asi: ÂŤ HABITA.NTES
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que aludi-
DE FILIPINAS:
En criticos momentos vengo a encargarme del mando superior de este archipielago; se unieron la ingratitud y el olvido de los beneficios recibidos con los bajos sentimientos de criminal ambici6n, para que una insignificante minoria arrastrase a masas ignorantes, que ni saben lo que quieren, ni saben ad6nde van, sembrando el espanto y la alarma en un pais que habia sido siempre modelo de tranquilidad y de reposo. Al t<;>mar posesi6n de este Gobierno general, dirijo mi saludo carinosŠ a todos los babitantes de Filipinas que permanecen fieles a los sentimientos de hidalguia y de lealtad que son caracteristicos en el pueblo espanol. Cuando S. M. la Reina Regente (que Dios guarde) y el Gobiemo me honraron con su confianza, conocian los
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EN .FlhlPINAS
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procedimienfos que yo empleo para gobernar. Para los leales nQ tengo mas que sentimi.entos de afecto y de J!lroteccion; parn 1os traii.dQres, toda la energia me parece poco, todo el rigor me parece despr@porcionadQ a la magnitu.d del crimeu que ha,n cometido con'tFa su Rey y conitira su Patria. Pern he de hacer una disti:mci6n entre los que son traidores por maldad y por ambici6m, y aqu.eUos qu.e fueroa auastrados en la corriente cniminal solamente por sii ignorancia, y que fu.eron sedll!lcidos po,r el l:lpgaiiiŠ y pŠr la cal1u.rnmia. A }0s ql!le ~e arrepientan, a los que comprendan do lo malo y torpe de su conducta, s otorgare el penl@a qu.e ]l\l.erezca u sincero arrepembimieaito. A l@s cpue ersistan en su empefio desleaJ, les plicare todo el rigor.de la ley.No espereis de mi, :b.abita,ntes de iFi.ipinas, programas de gobiern@. Soy in.as amigo de dem@strar con los 11.ehos mi patri(i)tismo y mi bu.en de-
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LA INSURRECCI6N
seo, que de anunciar tiempos venturosos con deslumbradoras promesas. Contando con la cooperaci6n de todos vosotros, contando con vuestra lealtad, ~0 espero poder decir en plazo corto a la Reina y al Gobierno que este pueblo ha entrado en la normalidad de la vida y que se prepara a desarrollar su prosperidad material, cuya base es la honradez y el trabajo; y podre decir tambien que ya nunca sera posible que se repitan en este hermoso pais sucesos tan tristes como los actuales, en los que se han desconocido los grandes beneficios recibidos y se han olvidado los constantes desvelos del Rey y de la Patria.- Vuesflro Gobernador genera,l, CAMILO G. DE PoLAVIEJA.Âť 1
(( SOLDADOS DEL EJERCITO y
AR-
MADA:
El mundo entero proclama vuestras virtudes m.ilitares. El valor, la sobriedad, la abnegaci6n y la disci-
EN FlnIPINAS
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plina, s~n cualidades Fe(lor,10cicl.as u.niversa.<lmente en el soldacl:o espaftol. La Patri.a Jilecesita h@y de voso1i¡r os ; la Reina tien.e su. espeFalil,za pl!lesta en sus lea1es tvopas, talilto peJilinsulares como incl.rigenas; vu.estro General en. Jefe, co:m:tand@ con vm.estra bravura y con vuestra leaittad, t ielile segllridad en la vict\oria. No n.ecesit@ rec@['daros cua'l es ¡ vuestro deber. Al soldado espaiiol nadtie le enseiia sl!ls debei;es: 111ace sanielildol@s, l@s siente; sa:fue que liia de ser valien,t e hasta la temeridad; saib e gjlie si:l!l. disci:plli.10.a II@ H8!]' tirimm.fo posibie ; sabe que las 0fensas se laf alil con sangre, y ,que la vida l!l.ada jVale cuand@ se traita de defender la honra de la Patria. I Ha llegado la b ~ra de ll!l.char: lub1temos como buenos, y nos haref @s dignos de aque1los que tan ailto (PUSieron en todos Hernpos el l(;):@m~ ~ re de la gloriosa bandera espa:ii.oia. Vuestro Gmeral en lefe.
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LA INSURRECCJ6N
« VOLUNTARIOS:
Al grito de sedici6n de los traido- · res contestaron los leales con un grito de adhesi6n y de entusiasmo, ofreciendo vidas y haciendas ante el altar de la Patria. Vuestra arrogancia de los dias del peligro me responde de vuestra conducta mientras dure la insurrecci6n. Cuento con vuestra ayuda y con vuestro concurso, y espero que en breve plazo podreis convenceros ,de que no ha sido esteril vuestra abnegaci6n y vuestro patriotismo. - El General en Jefe, CAMILO G. DE PoLAVIEJA . »
La Gaceta de Madrid del 13 publicaba el nombramiento de segundo Caho de las islas en favor del Excelentisimo Sr. D. Enrique Zappino y Moreno. El Capita.fl general Sr. Marques de Polavieja organiz6 en estas mismas
EN FILIPINAS
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fecbas las fuerzas e0. @Jjleraciones d.el modo siguiente : Di visiolil de Laglll'n.a, ~aitaogas y Tayabas, at man<il'o d.e1 genera~ de d.ivisi6n Excmo. Sr. D. Jose de Labhambre y Domihg1rnz. General de ti.a iiJrimem bFigada de esta divisi6n (Laguna), lExceleliltisimo Sr. D. Pedro Cornel. Idem de la segl!llilda ( Batangas), Exom©. Sr. 'D. 'Ni.colas JaJFaimiiHo. Brigad.a de Morong, Fasig y Norte de Mani.la, Excmo. Sr. D. Francisco G-albis . 1 I Brigad'a de1 centr@ de Luz6n, ExJeleri.tisimo Sr. D. Dieg0 d.e los Rios. Jefe de Estado May@r de la Caipitaia general, Excm©. S1·. it). Er nest@ . e Agui.rre.
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Nuevos encuentros y combates. 'a.usas elevadas a plenario. :J!Jonativo de angasinan. Otra conjura en Cavvte. 1Acci6n de Meycauwyan . - EI coman4. 0
lialilt e general del celil.itr0 de 1 ttz6Jn.,
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LA lNSURRECCl6N
D. Diego de los Rios, daba cuenta del combate sostenido por la columna del comandan te Baquero en las inmediaciones de Orani, a cuyo pueblo, despues de catorce horas de marcha, lleg6. Los rebeldes sufrieron grandes perdidas al oponerse al paso de la citada columna por los rios Bucayog, Briosa y Bayoro. Baquero fue muy expresiva mente felicitado por el general Rios, quien le habia encargado la operaci6n de que se trata, y por el Capitan general despues. Elevabanse a plenario en estas fechas mismas mochas causas seguidas por conspiraci6n, rebeli6n y sedici6n a los principale s au tores de la insurrecci on, y por el delito de traici6n y rebeldia eran pasados por las armas en la mafiana del 14 los reos que procedian de los lugados de la ca.reel de Tarlac. El Chwrruca conducia presos de Vigan y San Fernaado ; el Uran'IMI, de Pasaeao, y el vap0r Reyes, conducia
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a1 Mamil:a e'lil l@s mism©s <ii.fas a <il.etemidos e:m: B@hol, Samna1r, U@Ho y (Cebu. • jLos cuerp©s de ,-v©lmnita.Pi(i)s crea,,,. d0s en estias dos l!l.ltimameDte exl_i)resadas eabeeeras fuenril'ecia,n ·x jll!lraban c©n eF1t1:1si-asrmo tas ifuaimde1ms; pocos dias desptH~s cetebraloal'l igl!la~ s©lemne act0 l0s voll!l!mitari@s de tafamteria y caba1Jerfa,, ereados en la ca,li>ecera de Batal.ilgas, y, @'t'110S pueib\@s iwporham-tes l!le Ja pr@vi,meia. El dia fO f©lil<il.elf> eil V,3l_l!)OF Leen MfJJi con rn,l!l.evas Jiuerzas l))eliliiim,su~a1res; :t\ii:er©lil Decilll>idas e@m ~as e@lilsiguiie:m:;tes m.uesuras . • de reg©e110, .. :pues 1a re' ~eticioa de a(!j]tleBas exwe<il:ieiHeS B:(i), enihibiaba en: lo mas !illlU.ID.iimn e~ en~llsiasmo seF1tid© y dem.@stFacl.0 por !l!gtrnl cl.:esde la :prniimera. / Vercl.adero agradaMe ac©F1teciien.to fl!l.e tarnlilien 1a ~le~ada a Ma1la del g0bermador civil de Pal.il,gas.i.an, Sr. ID. J@aq11il!l (i)]iver, cel@s@ iciador det d@nativ@ (!J;tle la JilP©iViln-
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LA INSU RRECCJ6N
eia mencionada hacia al Ejercito y al escuadr6n de voluntarios. Consistia en 170 cabaUos para la artilleria y 10 para el escuadr6n citado. El Gobernador de Panga~inan venia acompaflado de numerosas principalias de la provincia, que tan leal se ha mantenido como tantas otras por fortuna, y el acto de entrega del donati vo a que nos referimos result6 agradabilisimo, no solo por su esencial valor, sino por la forma patri6tica en que se llev6 a cabo. El Gobernador de Pangasinan fue objeto de justas alabanzas, como tarribien lo fueron otros gobernadores: todos cual mas, cua] menos, segun los recursos con que contaban, hicieron otros donativos de importa,ncia, en representaci6n de las provincias de su mando . Todos los medios nos hacian falta; el teson patentizado por los rebeldes tagalos venia a destruir por completo el concepto g¡eneral que hasta la
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presente i!l!I.S1:IF11ecci6l'l se tenfa de aqu.e[ws i.ID.<il.i0s. Nueva conjura se tram6 en Cavite, ~n. la cahecera, (!Itrn era, c@m0 hemos dicho, casi lo u.nico qtle l'l@ 0cupaban los rebelcl:es. L0s pr,esos de aqtlella caFcel ptbhlica l@gFar.@lil fugarse , col'l el prop@sih(i) de degoifar a los castilas y uni1rse a las i.ID.Sl!lrrectos ql!le teID:ia:n a fa vista 0.e a<iJ:n!lel!la capital. Un escFil,iente de la ca.reel era, segun los presos hlgados declaraba,n, quiielil: T@s excih@ 1:1lila y 0foa vez a poner en pra.0tica tal plan.. Cuan<!l/0 tmB¡N,ltuariamelilte ah>anl!l.onaron Iugar de su reclwsi@n, asesillilar0n. alcaide (peninsuJa,r) y la pegueiia l!lardia <i{Ue i(i)S Ctlst@dia~a : l@s itlgados flleron e.ID. las calles duramen.te castigados, disti,nguienl!l.ose losespaii.oles todos de a<iJ:tletla ~a'fueceim en nasgos de valor inlilsitad0s: '1!12 de hquellos presos haUaron fa mNerte bn las ca,Nes y atreded0res ole 1a ci,utiad; de 12, de los 147 escapades, _se
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LA INSURRECCl6N
ignor6 el paradero, pues 23 mas fueron hechos prisioneros y juzgados en proceso sumarisimo. El 16 tuvo debido cumplimiento la ejecuci6n de las sentencias de pena de muerte dietadas por el Consejo de guerra. En Manila, en el mismo dia, eran fusilados 6 reos condenados por el tribunal militar a tal pena, como autores del delito de rebeli6n y auxilio a los insurrectos de Bacoor y Cavite. En las mismas fechas, se sostenian combates tanto en la provmcia de Bulacan como en las limitrofes de Manila y Cavite, muy frecuentemente . Del librado en Meycauayan por el general Rios sobre aquellas canteras y los barrios de Langca, y que fue muy importante, el Gobernad0r general daba cuenta en los siguientes terminos:
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«Miinistr0 Guerll'a. Manila, 1:Z IDiciemlire ~896.
Sa1bieiJ!J.m@ <q•ae cainteras Me~caua;)laD ei;an, r,ef1lilgi0 y redluct@ mas imp0rtaF1te parti0.as :ra,1,1faean., otispn1s·e que geneFal Ri0s, c<!Hl U1(i)(i) 'n0lm.bres, maroluase s.0:fure e ~as. Aier maflana ata.c6 eL1v0lviend.0 ~@sici0nes defeDdidas com fa.mtacas, d'e. las <'}Ue se p0sesi@n6 eJil pa.Ft© dilil.FaID.<:lie ~l 0.fa, aeam'Ji)and@ EH!l ellas y :lieuNinjllild@ d.esa~0jar eJileJililiig:0 ma,:ifua>D·a lhoy; destrlily@ sas tFi:m;ciiteras, casas !l'ertifica<il:a,s y e@seeiJJ.as, tibiJSl)H~FSa•I!lU(l)s. .!D.e~,6J clil.a·renta y, s1.·e·be mNer,t@s ver 6Jue se le env@iviaiG Ji)@sici@es; resis.teDCia me d:efuH, amlliiHJNe ~0m.stante, retira1:ui1© la,Ji1taeas <B:lilr.ain~e l_a noclue. Q\ilee..6 em Dues<lirn p0der , llil ialc@n~te. N@s@tP@s, <d@s heridl@s. En RaFaifiaqlile, deSJill!les deseufuieFa ayer y h@~, enmll>@sca<ilas jpFepairaas dliez muertos enemiig@, aip0de~ andose cODv:0y SlilililsisteJ'ildas c0n
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LA INSURRECCI6N
149 carabaos. Sin bajas por nuestra parle. Hoy han sido fusilados esta capital siete reos sentenciados juicio sumarisimo por espias, y ayer lo fueron en Cavite veinte de los presos que se rebelaron en aquella ca.reel asesinando alcaide y centinelas. Polavieja. Para librar la importante acc10n de Meycauayan, el general Rios form6 dos columnas: una a sus propias 6rdenes; otra a las del coronel de Estado mayor Sr. Barraquer; la vanguardia de esta ultima la constituian tuerzas a las 6rdenes del teniente corolilel L6pez Arteaga y del comandante de Estado mayor Olaguer-Feliu, que tanto tambien se ha distinguido en esta campafia. La cotta que enclavada en las canteras de Langca fue ocupada por los rebeldes, empujados por los soldados de-1 73, ani-¡ mados por el teniente Barrientos,
EN FIUPIN'4.S
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fge tomada p@r la foeFza a 01:1y0 frente iba el coronel Ba!Frariruer, el tenien:te ti@F@nei iL. A.rbeaga y el comandante Olaguer-Feliu; esta fuerza ma1:1ab6 avanzand@ siempre p@F aliburas que dominaban aquella colita; y Gomo este movi.mien.to se C@N'llbinaba con los denias, el c1:1er_Jj)@ de 1a columna qu riba al mando inmediat@ del gen.era! Rios avanzali>a a1 pr@l_!)io, tiempo por Lict@n, en liinea recta, porque c0n presteza, el capilM:n de iqgenieros Angosto habia sabido chabULtar un pl!rn.m.,t~ [Parra ellJ.@ necesa~io. Cuando los rebeldes vieron perter en este ava!lilce, @pera:d@ e111 fa madrngada del 17, sus numerosas trincheras y destrnidas sus c@Has y ¡, uchas/ casas, despues de hali>er visŠ descender hacia fa gra,m. eotfa y. arrio de Langca, la& :ruerzas de Barraquer, L6pez Ar'beaga y Olaguereliu con la c0mpafiia Pa,rdeH y¡otrra de cazadores, n@ espera,ron mas, sino que emprendforoD fuga desorde-
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nada , dejando 47 muertos, como consigna el parte oficial que hemos transcrito, pero llevandose otros muchos, que no podian contarse por la gran extension de los fuegos, no solo de la vanguardia y cuerpo de la columna, sino de las lineas de flanqueadores mandadas por Tru liens, Bad ell y Valderrama : estas guerrillas causaron al enemigo muchas bajas; solo dos heridos tuvo la fuerza del general Rios, el cual, terminada aquella operacion , por la que fue muy felicitado, dividio convenientemente las fuerzas, y marcho a San Fernando con los oficiales a sus ordenes y ayudantes, entre los cuales iban los Sres. Camus, Diaz de la Cortina, valeroso teniente ayudante del escuadron de voluntarios, y el ingeniero de montes Sr. Guillema, adjunt0 a la brigada Rios, con el principal objeto de levantar planos. El teniente coronel Lopez Arteaga, con el eapitan de la Guardia civil
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Anricn, que se habia d,istim.guido mucho en a(iJ11JeUa z@lila, regries<f> a la cabecera de Bulacan. Tambien tomaron parte en esta acci6n, peleando como buen@s, l@s ,jovenes oficiales Sres. MarLin.ez Campos y Polavieja, revelando en aqm~lla ocasi6n, cual seguramente sabran hacerlo en todas, 1a n.@cion liJil!l.e tienen del pr0pi0 deber, agr.a11dado por el lustre de los aperndos que llevan . baMate@ Sam de ernt@ Ei destacam Li6 hasta dis,persar-los p@r c@m.pleto hacia las sierras de Bosoboso n11Jjner<;>sos grupos rebeldes que se habian ati;i!ilcfu.erad.o en el J;ia:rri@ de ancal. Una emboscad.a, habilmente disen Las Pi,iitas, hizo que el teuesta ~ ~ ienhe 0vide 1 C@Fl UlilOS euan,t@s guar/cl.ias civiles y cazadores, pusieran en 1Precipitada fuga grupos de rebeldes Ide Cavite, matand@ eFl 1a Fefriega dos 1cal;Jecillas, UFl@ de l@s cua[es er.a 31
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el incendiario que prendi6 fuego a aquel pueblo, consiguiendo s6lo que ardiese su propia casa y cuatro mas. El dia 17, tambien fuerzas del general Jaramillo, mandadas por el capitan Ceballos, y que no eran mas de 100 hombres, balian fuerte partida insurrecta en Nasugbu, causando al enemigo 36 muertos, sin tener los nueslros mas que un herido y dos muertos. El Capitan general Polavieja felicitaba telegraficamente al capitan Ceballos. En Malabong fuerza de la Guardia civil al mando del teniente Ros (30 hombres) luvo un encuentro con 80 rebeldes fuertes en_ los can.a verales de los islotes de Dampalit y Gasac; 7 muertos se causaron a los insurrectos, sin que los nuestros experimentaran baja alguna. El 19 sostuvo el teniente coronel Ruiz Capilla, que mandaba entonces la linea de Parafi.aque y Las Pin.as, duro encuentro con una partida de
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1.000 insurrectos, a !!]:Uienes hiw mas de i.i(i) ml!lerhos ea Bayuyl!laaa; l>atieronse los rebeldes con flisiles y lam1.tacas. El general Lacb.amlilre paFtiei]_!laJba en el mismo dia otro encuentro en Buluan, barrio de San Ju.aID1 de B@cboc (Batangas), en el. que el tenieate Villalta bati6 y, dispers6 1.rna partida insurrecta de tuerzas muy S'J;I[PerioFes. Quedaron en. las mismas feem.as completados l0s servicios de vigHa,a - ¡ oia en la zona batangu.eiia que corresp@nde al grailil. Lago de B@mbon, con las lamchas Amelia y Consuelo, (!IJUe surcaban aquellas aguas al mando del alfe11ez de n.avio Sr. Gaveda. El coronel Arizmendi cu.bFia lforna en el Baiiadero. 1 El com~ndalillte gemeFa1 de La 1aguna, Batangas, comunicaba desde Calamba el dia t 1 queda,r establecio.a una 1irn~a telet;1;Fafi1ca de eampa,fila de 13 kil6metros, que desde el. cuar-
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tel freote a Santo Domingo iba a unirse a la lioea general. Hacia grandes elogios del personal, y singula rmente de D. Marcial Perez. Observanse en estos dias bastant es deserciooes entre los soldados indigenas. El Capitan general pedia relaciones de ellas y disponiase mezclar siempre la fuerza indigena con la peninsular. El rnovirniento de las columoas para apoyarse reciprocamente era admirable, yen medio del cumulo de cosas a que habia que atender, no se omitia detalle en los procedirnientos: cuanto la ley pedia se cump1imeotaba escrupulosamente. El dia 13 se celebraba consejo de guerra para el juicio sumarisirno instruido a 7 rebeldes capturados en Bacoor, cooduciendo efectos para los insurreclos cle Imus, y se hacia acudir al acto al capitan municipal de Parafi.aque, al teniente de ganados y al juez de paz de Malibang. La politica de la guerra que se se-
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glllia era de ¥erdadera {eliil.11.9la,r;iza; se ad1Verbia a h>s jefes de c@hunus y · des'taeamentos que l))(!)f el se>l(!) hecl'H~ deI 0li>servarse la i1rnisi6rn. <il:el ]Jacto . D(!) se apFisi(!)nase a l@,; tagal@s, sin@ qµe se eerci(!)Faselil si aqueUa sefia1 correspondfa a a1gullil ililMeEttie, CiJiUe con violemcia pN<i1o s1J1rri da, y se· Gl'e~ase a le>s tales em 1ilbertad, aullil euai~d@ sujetos a vigilancia. Consignarnos si(iJu!iera a la Hgera estos detaH:es, ~0rq1l!le g}ll0s c0·m,testalil negando c@n ia realida0 0e T@s ili16leh0s afd,rmaeiones c@nltrarias, <i1ispelilsables jll@r l@ €11isha,tl!tes fj}Ue se h~n. hech@ de f@s h!1g:a1,es a CiJU6l se te'fieren. / Notose eEJ. est@s cl.fas ailgw.Ba ag~1la<)i6n en la imp(!)1·tagte vi.lla <!le ID.. ipa, (JD Batangas, y gl coF@lil:el Faz@s, (iJfl!l.e ,cndi6 a aqugl ~l!lg:air, regrees@ a 1'araauain, dgjand@ 11,ma eom,pafiia de· guami e-i6n en. la c>i,fada i@cailidad, que adernas estaTua Gl!lsli@d"ada p@r i erza de v0.1umta.ri(!)S ma 11dad@s p@r 1
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el valeroso agustino cura parroco Fr. D0miag0 Laprieta. lFt:ierza de artilforia y una compafi1a de cazadores de Ia division Lacha,mJ.ire sostuvo combate entre Los Ba..fi.0s y Bay (La Laguna~, derrotando ail e,aemi,g@ y a;poderandose de tres la>ntacas cargadas. Los miadrilleros de Bifian e0. el barrio Loma rechazail!On el mism@ c)ljia l!l'.Ela partida insurreeta. En estos mismos dias 18 y 19 de Dieiembre se c11e6 u,aa fue,rza de vofo,l,J.tari@s em Nueva Viwa:ya; pal111!LUas de las f:ueFzas del general Rios virgilalban de e@ntinu.o la linea ferrea, y eDtre Gl!liglllâ&#x20AC;˘i.nt@ y Malol@s sorprelillll:ier@n grnp0s reheldes a los .,, que eaasaron 5 muertos. 1.000 insurrectos en~raimn en. San Ildefonso incen,dfalild@ la casa tdbunal y el c@nvento: el c01ocu1JF10ante Sarthou, qu.e saH0 desde Baligu, los batio y . dis-piers@: sl!ll>levar@Jilse en Sam, Jose ial!l'igeJilas de! 68 .en nfl!lm,ei-0 de 28 o
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JO; u110 de estos cayo en p@der de una columna que los persiguio en di1recci«f)li} de Meyca1J1ayat1. U11 reconocimi.ent6 sobrn Talisa~. p@r fuerza del i 4, causo al eneruig@ '12 Hil.'lllert6s sin expeFimentaF l@s nl!lestms baja alg1ma. El c6mamdante Albert bati0 en Majara graB.d'es grl!lf)6S reli>.eMes, causandoies 3(i) tnl!lert@s. ta coll!lliJil.na All'>ert tttvo d@s herid@s y varios c6ntlitsos, coatiimand:o su :mareba y operando eD combimacion. com. otras I dos, todas al mat1do del coronel d~l · i3, s<'lbre los momtes de ' Am.tipoio y Mari<quilila. En el die Baclas, y des,. pues de activa persecucion., el tenientie Maten, de la Guarrdia civil, batio el 'liilioo gniJ))@ (!}l.ile quedaba de la disu.elta partida capitaneada p@r M. Castillo. En teFret1os de Nasl!lgbu, y a poco , de la refriega sosteoida por el capita'lil. Ceii>aHos, et de igl!l.d clas~ Tiscar baitio ail! elilem.igo, causaB.cloie 23
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ml!lertos y apoderandose de 23 carret0E1es 0:e palay. Emb0scadas preparadas en inmediaciones de S_au. Miguel de Mayumo y eEl. Boca1rn, en las q:ue solian albergarse muchos rebeldes, causaron a estos, en. earga a la bay:oneta, 14 muertos en. el primer punto y 7 en Navaon-Gailan, barrio perteneciente ·al segm1do. L(!)s nuestros, siilil l'lovedaa alguna. · Cerea <ile Herm(i)sa (Bataan), fl!lerza enviada por el coronel Barraquer batio den(i)dadamen.te grupos rebel des, a·l©s qure eaus@ 1. 7 muert0s, cogiendoles cine@ ca.hallos y muchas armas blancas. La .colu.ml'la de Santa Maria cargo s0bre el barrio del Cristo en la mafiana de1 24 de este mes y bati@ y disperso g-ruesa partida que estaba at11imclil.erand0se en a<l(uel 1ugar. Cuat110 C(i)}umnas se destaea,roa sob11e Longa, en las margenes def Calumpit, para impecl'iF 10s m0vimient0s
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, de c@Nce11traci@,lil qme los ililsl!l1Tect0s ~pernban elil aqNella zona. La Clle Cllaguer-Je1iu atac@ ~ 10s rebeldes en Sa11 JiClse, ba<tiencl:ot0s y ii.Hspersamd0l0s comple'tamem.he, cal!lsandol.es 5t .ml!leF~os, cQgiendIDfos a-rmas ~, mu.niei@lll.'e~ y destrnyenoJ.0 varias tri.1!1oh.eras. iE1 00m.ao.ol:mlilte Oiag·uer fue m,u.y feiiciitacl:o. La colttmiID.a <!let rl!eni.ewte cor@Iilel de Ia G'1mrclia civil Oyarzabaf, ([l!le operaba 'ta,mbi.en. muy activarneNie, afoamz6, batri.6 y 0.dspe1rs0 las foerzas rebel.des ()Jlile ~abiam1 enilirad@ en Nueva Eeija y a las cuales wersi>gui6 desde Tartac, ·elil d@nd,e r:ecihio 11efu.erz0 de 1150 eazadores. t a c0llilmna de iaHuag barti@ al en.emi•g@ e,t1 eL mi.s'!Jll.O dia elil. et barri0 de Sain PeJF@ y: lh-s~0s, ean1sa,nd:0:le siete mueFt@s 'Y Cllest:rny·enclo ~Ra ftlertie lfarricacla por a1l!lei c0nstrni«!la em. e:1 }:las@ cl.el pm.erute <!le a~u.et lliagar; no sufili\ie•i ·H fQS m.uestrns baja ·a,lguna.
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· Los destacament0s de MuntiR1upa y SantolaD! rec·htaz.aro.m. gra.m.des gru-
p@s tile 1·elileldes, causalildoies bajas y ap@d.e,raiaii10se Clle airmas y mul!l.isenalad@
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em:fuarc(i)' de armas r>ara los ililsuuect(i)S. Pertenecientes a'l regimieID.to numero 7@, desertaron desde Tarlac algunos S(i)ldados de los que el ac'tivo c6roID.gl Camifias habia dejado eID.ferm.os. En el barrio Balasa, que corresponde a la comandaJiJ.cia general del territorio limitrofe con Manila, libr6 combate con fuertes partidas reunidas el c@maID.dante Albert, caiu.san,.. doles 30 muertos y 7 herid0s; q. de est0s sufrieroID. }f))s n uestros en tal enclientro, ¡acaecido el dia 26. En esta mis,m a fecb.a se libr6 ot:ro rRd:o comhate eID. li)alayaip: 2.0@@ ion~ surrectlios il!ler0n batidos y dispersad0s dejaDdo 98 rnuertos, mientra.s que por nl'lestra parhe tuvim(i)s un ofidal contuso y 3 soldados heridos. Los rebeM.es initell!ta.rm.il en este dia asafta:r el barrio Zaw(i)te, el'l BiiiaID.; fl!ler0ID. rechazados y perseguidos, cayeado prisionero un tal Lopez
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LA INSURRl!<XllON
Bemardino (a) Dino, nno de l0s autores cl.el asalto al convento de Pagsanjan, en el tlia del alzamiento . Sosllruvose por el destaeaiment(j) cle Calatagan m1 combat.e c0ngruposnumeros0s de reTueldes que iban mandadŠs p(i)Y el eabecilla Ptrnsalan, el emu pereci6 en la refriega, victoriosa para l0s nuesbros, como todas: H2 mueyt(j)s se les hicier0Iil. Otra warlida d'e" mas de 600 ililstlrrectos fue batida y dispersada en las immediaciones de Aliltipolo por las il!lerzas <fo cazad'0Tes y del 7.0, destacadas en Cainta, y el mismo dia (22 Diciembre) colmnhas del centro de 1.uzon castigabam a dos partidas mas, m:ia de fas cttales iD1tent0 cortar la via ferrea entre Polo y Meycauayan, y la 0tra entrar <!l.e nuevo en Sallil. M.ig1rnI <!l.e Mayl!lmo. El capitan Amrich ataco en 13oeaue, de la misma provincia de Bulacan, a liliumeY(i)sa parhida rebelde que invadiera aquel pueblo y que se babia
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hecho fuerte en el @onvento; los rebeldes fuernm desal.ojados. de aquelfa ,r0vinc ia y batidos hasta su. completa !hu.ida, babiend oles camsado la co. lumna Aurich 80 ba,jas. El coronel Marina batio en los _d,ias 22 y 23, en las inmedia ci0nes del Nangca , una partida de rebeldes muy numero sa q ue mandab a Herm6gene s Bautista , la cual dejo 27 mu.erios en el carnp>0, Ue~alilclose much0s hericlos. Nos pareci6 ct1riosa la orden hallada a uno de los rebeldes muertos en aque1 combat e; y se refiere¡ a la petkion cle auxi.lios para librarlo . Dice asi: General l'Ierm6genes Bautista . En vista cl.el parte dado por el capitan A'tilan0 de ql!le se hallan a rmestra vista fue-rzas enemiga s :nuestras y de nuestro katipun an y qu.e c0n ellos vienen m1:1chas a,rmas y un capellan c0nrtrario a iD.Uestra causa, se servira l!lsted relilnir toda su fu.erza en lit1:1estra real herreria . -Herre ria, 20 <!le Di-
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ciembre de 1896.-Vuestro , N. C. P. ' (a) A'cm•a. 1> Contiirnando las mismas foerzas del cor@nel Marina la persecucion de estos rebeldes, bal'laron otra a la <mal atacaron a la bayoneta desde el piiimer ililstante, hacielildole 43 mlll,e rtos, en lugar proximo a Cainta. El comandante Sarthou, en la divisoria de Bulacan y fa Pampanga, batio el dia 24, con fuerzas del bataHowi de cazacl:Qlies num.. 4, del regimiento Dum. G8 y unos cuantos guardias civiles, grnesas partidas reu nililas, a fas c1:1.ales ca1:1.s6 357' bajas: britlante operacion fue esta, ejecutada e'l:1 Dalayap, bairrio de San Luis pr6x:irno a Batit1.ag y a terrenos la Pampanga, COIDQ 1:temos dicho. , En ta,1 Feiliiega suct1m:l'>io el cabeci • lla Daniel de la Crnz, que no era tagalo, sino natural de Iloc@s. iE1 co·m andante Albert sosb1vo en las mismas fechas varios Mmbates c@n los rebeldes entve Balara y
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£:rnz Naitigas (Mariqmima~ y en. Ca[0oea1n y ~ase;n1.g-fam6. Se obsenaba el gra.m ;irfalll q•tte telil.fan l0s rebeldes de a:]j)@deracse d'e qttiiemes <!le · ewtre e]Jl!os se pm~semtabam a ind•tdb@, y secuestFall>an ea estas fechas a tod(i)s C·ttamt0s J9(i)dfa:n, d'e fos (Tlile en. a<iui eas@ se faaUasen; un grup(i) <lie ims•ttrrect@s <!l:ivid'idos se ap@cl.er@ de siete u: oeh@ d.,e aque]l(i)s en las imnel!l!iaciones de Malab0I!l'g. Eil gemerat G-a1U11is Fecorri6 1a Z0lila, y las f,meFZas q,1rn a su.s emdenes (i)peiL'alhan tllil et Norte cil e la ,rovincia de Mam,ifa C3iil!lSa1'(i)ll elilJ [(i)S u,m mos seis dias d'e iD,iciem.:b:ve 1())8 !\ill,Nerlos
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cubri6 toda la parte Sur de Bataan, sin desatender Zambales, encomendada a su vigilancia. Se comprendera bi1m, aun con el tain inco)j]J)p]eto extracto que venim0s haciend0 de las operaciones, la necesidad sentida de echar mano de t@do recurso; y en estas mismas fecp.as, el Capitaa general, Sr. Marqliles de Polavieja, pr0ponia al senor Ministro de fa Guerra utilizar los servicios de los retirados ea necesidades de las fuerzas voluntarias mientras durare la g1:1erra, volviend0 a su situac:d6Iil coo los empleos y v:entajas que obtavieren. El Gobierli10 de S. M. c0ncedi6 la autorizaci6n s0licitada. Las fuerzas del veterano general Ja:rammo 11echazar@n en Ealayaa fuerte acomelida de los rebeldes de Cavite. El menciolilado geoeral acudio ¡ a sal var a<i_p,rnl pHrnhlo, amenazado de caer sobre el 3.000 insurrectos de Maragomâ&#x201A;Ź1.6n.
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El coronel Pintos daba cuenta de haber librad@ un combate eatve Soo. Juan del Monte y Santolan, foerzas de este ultimo punto, dispersando gran grup(i) jmmrecto, causand01e 15 0 2@ bajas y cogiendole un falc0, nete y muchas armas blancas y municiones. En otro reconocimiento practicado en. la limea del Baiiader0 wor el capitan de ingenieros Tejon Marin, · cargo este a la bayoneta sobn;i grn.p0 artrimcheuado; al c1!1al le hizo i muer. tos y 12 heridos, apoderandose de la , posi.cion que ocapaba. 5. 0 Despedida del gmeral Blanco. Su espada de honor. Banquete de la co-
lonia inglesa . A bordo del «Le6n Xlll» . -El e1ecto jefe del cuart0 miliitar de S. M. la Reim.a, el Capitan general D. Ramon Blanco !Enmas, iba a regresar a la 'Pen1nst1fa en el vapor Le6n Xlll, que zarpaba el dia 20 con aquel rumbo. 32
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LA INSURRECGION
El general Blanco era en aquellos dias muy visitado en su residencia de Malacafiang; no fue de las menos s@lemnes la des]_i)edida que le hicief(\)Jil los cm~rpos de -volunrtarios. Al recibir a Ia numerosa representa ci6n de'l escl!ladr0n de M!aH.ila, su comandante, el Sr. Bores Romero, expreso los seritimientos sinceros de respeto y afecto que la fuerza a sus 6rdenes guardaba al Sr. Mar<iJ:ues de PefiaiPlarta, contestand o este verdadera mente ernocionado por sa1Htaci6n tan. se'Iltida; igu.a1es con.movedoras , maniiestaciones prodlujero_nse al recibir a los vohrnharios de il'lfanteria, a. l@s que formaban las guerrillas y a fas demas corporaciones civiles y Nililitaves.. ¡ Con un banquete que aun solo llamado :l1amiliar ~pues asi lo deseaba el Marques de Pena-Plata) result6 0.e grafi tono, la eolonia inglesa resi0.e'lil.te en Manila obsequi6 la noche antes del dia de su embarque al se- _
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ficH: geNeral manco, as~-stieNdo a tan ag-radable act.0 el nuev0 Goberna<ilor general, Sr. Marque11 de P@lavieja; el 1 segnlild@ Caho, Sr. Zappino; el G@Tuernador ~ivil, Sr. tuengo; los ayuda11tes de los geI'lerales invitad0s, y numerosl'Js representantes de la distuaguida c01on.ia inglesa, la coal debi6 quedar sa-tisfochisima del rest1.ltad@ de aqirnna fiesta. Ei · Ayuntamiento de Manila habia regaiadG al sefio·r g·en-imiil Blanco, corn.o tribttito de admiraci6n por sus , victorias en Mindanao, tni.a '11.ermosa 1 espada cl.e hon0r; habia okeeido ~I Mar<Jues de Pefia-Nata al recibirla 1 en agradeciimieat@ remdir1a a los pies <ile la Santa V.irgen q1rn se venera en Anti polo; pern surgio p@r aq.rtellos dias Ja maldita rebe1i6li1 tagala, y, es claro, N@ p:u.ufo personaime,flte cumpli,r Slil VQto el Marques de Ji>e:maPlata, acuddeFJ.do al santu.ario de Antip01o. Per ell@, y CQlil gcaN solem.milila<d 11eligi0sa, ~izo la viispera de sm.
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maro1ia entrega de aquella espada PP. Rec@letos, q,ue la deposita1·olil en Sa0 Sebastian hasta condrl!ldida a su sag:racl.o desli'.tlo. t a cl:espedilila t:ribl!ltacl.a al senor general Blanco en la Iillafiana cl.el 20 de -nieiemfurre f,l!le afectu@sa: fos elernent@s @fii.cia,les, y a la ea,beza de e1l0s el m:iev@ Gohernador general, Sr. Marq,1!.les de P<il]avieja, aol!ldier<iln a fos mhlelles de la eapitanfa del J!rl!leFt<il, e11t d@ncl.e la Teglamentaria ftl.erza <!lei EjerG.it<il cem ban.dera y ml!lsfoa y ~uerzas cl:e volnntarios Jiii.d:ernl!l! ](i)S' Tu.onores m~Htares q1.1e c©l:respoID:<d!iam a la! alrta jerar<iJimia cl.el ilustre viarje1:1@. La lancha de Maiia'car:i1i.am,g, qlle le eonoohlcia a }i)(')rd@ del Le6n ¼III, fue convoyada por las en ql!le ibalil la e(;)misicin cl.el .Ayumfamien,t@ y las l"ltlll'Jile•iiosas rep.resentaeion.es de l@s v@11111i1r1la:ri@s del escl!ladr@JiJ: y ifuataU@n de Mam.Ha; por Ia <iJ:l!le c@11tcl.lu:efa al sen@r genernl de Ma1Fim.a; por las de las gl!lerriHas de
a l@s
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Salil. Miguel y San Rafael, y por la A.nita, que e0mducia a fa principaHa del gremio de samgteyes. fi~stinguidas damas de la s@ciedad de Matlil:ila iha,bian acttdid@ al Le6n Xlll, cuy.a -extensa euh ierta re,sultaba escasa pa~·a contener el gFan nurneuo de ~e.rsonas que rendfan al ex 6obema!il©i' genei;al de Fiiirpin.as el homena~e m.ebido, no exclnsivam.ente a la alta p@sici@!il socia[, s·ino a {(!)s atribu.it@s de qufoli1 O(!)l!l jmsticia la (!)Clillpa. Asi y t(!)41,(!), apreciand@ el r caso, con men@s fl!t@rza d~ mofiles-· / tia l:lL'(!)p>ia, el gerneiml Blalil.C(!) p(!)dia echar 0.e m.e1rns, len,i end@ elil. cl!lenla las veliiemencias de miestra raza, lo rl!l:idoso d:e man iifestaeiones simila,res q_Me C(!)NdQcfam al freaes•i a qu.ienes fas pFodmjeran. El ge0eral 13fanco pod!ia regresar a la Peni®.stl!la C(!)n su, conciencia 'liFait1q1!1<fila, pe,ro qttejoso de ta fovtu~ na. iPor CJUe as•i? Apuntaola queda lll.Ueslra @pilll.[Oll
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en muy pr6ximas anteriores pag1nas: el caudillo de Pena-Plata y de Marahui, tal vez precisaba ejercer el gran dominio que sobre si mismo tieae para impedir la vislumbre si<iJ!Uiera de sns tristezas al abando~ 1.rnr aq;1:1ei te1'ri'torio de SN hon;rado mando. Su politica de prudencia, de tem,planza, de verdadera atracci6n, no habia logrado evitar la fierra ingrati1tl!1d de los tagalos, ouya concl.ucta ya esta vist@ cuan ladina y solapada e1'a: la pol-itica suave de] gemeral Blanco imterpretaronla mueho mejor los moros de MiDdanao. Y cualildo la suma de rnedios de guerrca sit'l!laba al Marq{/1,es de PenaPlata en, condiciones me lograT el castigo de los cub)i)ables, lo cual con el aplauso de todos los espaiioles le hubiera [P'L'Oporeionado, e1 estiruendos0 de aquellos quienes Gon mas vehemenoia ~que tambien hay que con_sidera:11 19a1tmiotiea? p>ediiamos la q1:1e juzgabam(!)s sa,lmla};)le Ilmyor dureza, no
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pod:ia querer el ill!l.stre gerrnral abandonaF aquel territorio conflagrad@. Esta.mos seguros cle que al oonfort qu.e le brindaba la zona templada, el general Bianco hahria preforido mi,1 veces--continuar en los rigores de la torrida, y de que mas atractivos para el tenia seguir ocupando tan fragil vivienda, cual la qrue le albergo en ei ca!ilJ1 parrnrnto de DalamicruR, que disfrutar su iI'l'stalaoi6n, si no ampul0sa, copioda, en la calle cle Jl!l.afl cle Mena.
6. iJem¡eto di}[ general Polavieja referente a la e0ncentraci6n de bartios.Respetando los verdadero s intereses ' del orden material y atendiendo a los clel moraJ. e ~ntelectual, el gemera.l Polavieja clicto a los pocos dias cle posesi@nado d~l Jililam.d@ de las islas un im;portimltisimo deoreto. Tal es el re'ferente a la concentrac ion de los barrios a mas de dos kri.MmetFos de sus parroquia s y, 'tribunales situa0
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<il!os. A1mso i.ntoleFable era, en efecto, Ia cl!isemi-macion sistematica, generalizadisima, de tantos y taatos ha:bitantes que sin intereses que cuidar se apartaban cl.e los centros de poblacioa colil miras manifiestameete aastardas. Burlar :J.a accion de la justicia que l@s buscaba para hacer ef~ctivala responsabilidad criminal a que estaba.n atfectos; lim.rlar la acci@m adminJstrativa, y 111>rarse p(i)r ende del pago de eedulas qw.e Jes eorresponde; evitar las reducid:isimas cargas municipales; prescindir del cmnplimiento de todo deber. religioso; foIQentar el atraso, 1rngand@ a sw.s hijos ¡ la <il.ebiolla instr,11cci6Ji1.; amparar a quienes ibam a explotar Ia ignorancia de muchos campesinos, iniciandolos en las sectas de enemigos de la Patria y de la Religi611; todos estos males prodace 1a ¡especial distrib11ei@n rural de IDl'lchos vecindarios de algun.os pueblos, y en plena insurreeeion sus
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males se agrandaban con la protecci6n que los l'ebeldes tenian. en los caserios :taa d.istanciados de los pueblos a. que pertenecen. La medida ado-ptada p@r ¡ el general P@lavieja sobre tan. inter.esante extrerno fae muy bieD ~ecibida por la opini6n puhlica, colilocedora de las razones 4ue de tod0 orden habfa para tomarla, sobre t@do en. la zona unica a que se ap1.icaba, y q:ue corpprendfa los terri.torios de las provincias de Bataan, Balacan, ManiIi, Cavite, M(i)l'Hg, Lagulila y Ba, tangas. ¡ El articulo 1. del decreto que a Ia ligera anaUzamos i.rnp0n~ Ia obligaci6Fl de C(imcentrar el veciNdari0 en los termiaos siguientes: <<1. En el improrr@gable plaz@ de quince d'ias, c0n.tad:0s desde 1a pablicacion. de este deereto, los capitanes mm1i.cipales, de acuerd0 ccm los reverep.dos padres curas l!)ar11@c0s y aaxHiad0s por cuatro delegados de 0
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la principalia, hara.a que sean trasladados e incorporados a los pueblos respectivos toaos Ios baFrios que en la actualidad se hallan situados a mas de dos kilometros de la iglesia parroquial. Lo mismo ha.ran con todas las chozas y viviendas aisladas, aun cmmdo se hallen a menor distan.cia. » Y el articulo 6. cleterminaba las pnrdeli.ltes excepcicmes qtte reclama eJ complejo problema de Ia agrupacion. Dicho articulo - dice literalmente,: «G. (hrndan exceptuados de las anteriores disposiciones: 1. Los barrios ©OI!lstituidos p(i)r agrupacioID.es de mas de cincuenta casas 6 que represem,ten ilillereses de consicle'raci6n y caracter permanen.te, ya por contar co:a.ecliificios de c0I!lstrucci6n s6lida, explotar industrias de importancia 6 reunir otras cireu.Iilstancias para servir de base a la creaci6n de nuev@s pueblos 6 pr(i)seguir las ta0
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reas del €1.esm.emte 6 roturaei6J.1l tile -:li>(i)sques; 2. L0s etili:fircios y eamarines til'estimatil@s a C(i)n::t\ener lilllaqmim,a~ ria, guardar frmfi0s 6 atl»ergat teliilfi)(i)ralm.el.ilte a sus du.efie>s y apar0er0s dl!lram1Jte el :werio<il!@ de las faenas agrfo@las; 3. Las vivielildas anejas a l@s vadeos lit (i)tros se11vicios de utilidad pu.,Mfoa. » Sefialabanse en er rest0 del articufodo ei m@d0 y 'forma co'lil. <J1!16l hallifa de 11:ii-ocederse a la tras:taeiom de las casas, y <!Iietaba reg1as para iilastalar/ ras eJil i!i)S 1rnevos [ugares, traza:nd@ l@s 1Mrnv@s barti0s segum. :piden ios saibi@s preceilj)tos de la higiene esrpe©ial de las p0Maciooes; Este d:eeret0 fue, segwn ®Jlm(i)s ai:m.rmad@, muy apiaud,iol@. 0
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-f1ai·i0s c0mbates. - C:@DtirJJllabam los hee!ll(i)s de gl!lerra si0 im,te-
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'l'l'U!Ji)Ci6111i.
:llll 2:il s0st:i1w(i) lilur@ comli>arte elll. el pa6lbfo de Sal.il J0se (13u[aca®') fa co-
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lu.mna al rnando de1 comandante de Esta(!)_o mayor magl!ler-Feli1:1 . Hal'>ianse apodeFado los rebeldes de Llane11a, en numero de 4.000, de aquel pueblo, fortificandose en el por medio de tres trincheras y ocupando la iglesia:, el convent@ y to(i).os los edifieios s6lii'1os. Olaguer los atac6 denodadarnente y los desaloj6 de ellas, dispersandolos por completo, ca:usandoles 51 mlilertos y muchos hel'idos: 3 d,e 10s primeFIDS y t3 de los seg1ua0Qs :liueron. fas bajas suiridas f!)Or nuestra colu!mna. A las 6rdenes de Olaguer, pelearon con bravura, aquel dia, Visiers, Otero, Valderrama, Saoc'b.ez Gi:ralt, Fuentes, :BaFrie11tos, Lara y @tF@s 0fieiaJ:es distinguid0s q,ue no recordamos bien. Fuerzas de cazadores y del regimient@ 70 del destacamento de Cavite batieron po:r completo 600 inSlll.rreet@s elil! las ;proximidades de 1'aytay; se aclll.artelaban l@s rebeldes en. un camat'in del monte Majara.
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Nuestras tropas les cau.saron muchas ba,j as y dest.1rnyeron aquel alojamieato, (!ll!le creiam permanente, seglfln las ob:ras qu.e hicieF(i)B en. el. •Fuerza al m.and(j) cl.el teaiente Beniitez l:)ersigu'i6 IHimJ.erosa pa11tida que atacara el cu.artel de Santo :Domingo, en Ca!.laml!la, catlsa-ndole bas- . tantes hajas y J:i)(i)niend(j) al enemigo en precipitada :£11ga hacia Sifang. c»tro combate re.5.ido se libr<f> el dia 2:3 en. Mun.UnlnJlla: gram.des partidas de fa>1surr-ectos atacar-on nuestr()) destacamemito de aq·u.el 1ugar; los fabiq-ues todos .d el ed;ihio de maaerra e:m <iJtle nu..e stras fuerzas se alojaban, if,l!ler(l)R acribinados [li)Or fas -l'i>alas enem!igas, tma de las cua!les mat6 iiastanital!leamente al tetiielll:te de [a Giua1:dia civil t!J. An,to:m.io Esteban. Los imsurrectos era;a en gra~ nu.me1 ro; el jef@ d:@ nu.@stro destacam.en,t@ hl'lib@ de diS,Jll(l)B.er que los soldados hiciesen hi.ego, [li)OF mejo•r memio de aefensa, desdelas baaq:•Netas s@br'e el
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muro de cerramiento del cuartel; y viendo los reheldes lo esteril de su empeno en tomar aquella posici6n, emprendieron retirada hacia San Pedro de Tnnasan : el ruido del combate habia advertido a los de Binan ( Lagum.a) ; y habiendo salido fuer,.. zas del batall6n cazadores num. 1 y voluntarios, batieron al enemigo, a quien mas tard_e castig6 duramente el comandante Carb6 con fuerzas de cazadores num. 7. En el ataque de Muntinh1pa sufFieron Ios rebeldes muchas bajas; l0s nuestros, el oficial Sr. Esteban y 6 heridos. En rMonocimiento practicad0 por el senor coronel Pintos, en la tarde d.el 24, tuvo un encuentr0 con Jos rebeldes entre Sante>lan y San Juan del Monte, eaasand.o al eJil.emigo 5 muert0s y 15 he'fidos, sin ql!le los Jill!Ies' tros experimentara n baja alguna. 8. Nochebuena. - Las tFOJi>aS solfan ser agasajadas frecuentemente 0
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con patri6ticos donativos qu.e co11 parllfoularidad les hacian. el casiN@ de Manila, el alto comercio, los pa,rticulares y corporaciones; pero era menesteL' conmemorar la Nochebuetl.a, y aun cu.ando el soldado espa~ nol no siente la rwstalgra de stt ouna cuando ha de cumpiir su deber lejos ile ella, bueno era llevar aquella noche a su cuartel 6 campamento un recu.erdo de fiesta tan expans'iva en fos ¡ hogares de la Espana Cat6~ Hca. La generosa actitud de los penin' suJares ¡era tal, que solo en virtud de unas pobres liNeas por nosotros escritas y llevadas a las cohimnas de El Comercio s0Hcitaudo un aguina1ldo para ¡ Zos soldados, condujeron a los cua.Tteles, destacament0s y columnas, ilillportante refuerzo a las vitua~ llas q:u.e por la espontanea imiciativa de los <!lonantes se ha.biam ernviad0 a la capitarifa general para ser distribuidas eNtre las trnpas. De efec-
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tuar el reparto de aquellas que por nuestra cari:nosa excitaci6n se reunier0111, quedarom encargadas las corporaciones religiosas, las cuales por Sl(l parte obsequiarofl a nuestro valer@so Ejercito muy cumplidallileE!te. 9. Un(}; circular ael gener<il Polar vieja. Su decreto suspendiendo las elecciones municipa;les.- Es el general Polavieja hombre de g,ran entendimien to y vohrntad, ademas de valeroso y priJ.dente. Desde su llegada a Manila traba1aha e@n irwoE1cebible asiduidad: es ml!l'y probable qae aqt1el exceso de actividades intelectuale s que desd@blaba, y q_l!le al pronto no conmovieron su organismo, ya quebrantado por la enervadora accion de los climas ca.lidos, fl!lese resr>onsable de l@S trastornos ql'le mas tarde experimento , relacionados con sos anteri011es padeceres. Rapido para el coB.cepto y de re0
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tentiv.a excepcional, el general Polavieja pu<ilo en pocos dtias aquilafar y agrandar la nocion que del Archipielago fiiipino tenia adquirida. Sus alocuciones al posesiolilarse del mando dieron ya formula qt1e trazaba , la 6r'bHa en que h'al>ia de g:irar su celosa gestioa; Ji)ero q,l!liso sin duda el general Polavieja, despues de estudiar, meditar y res0lver el plan m.ilitar que habia de Ilevar a cabo, fijar biefil a fas claras la condacta a que la administrad6D publica de- ¡ bia -atenerse : para ello dictaba im1 portarnte circular, reflejo tiel de su pensamiento y de su acci6n coastanfle y n(i)toria, porque e'D la honradez del Ma,r ques de P(i)iavieja lliO puede caber la hipotesis siqNiera de una discordancia emtre lo que siente y lo que dice, mi entre lo (ltle dice y lo que hace. ' .En deseos de ([lle ntlestFos benevolos lectores no se Ji)riven de U:.D dafo mas .para jl!lzgar, ofrecemos a con33
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tinuaci@n el texto literal <lel document@ a que n@s referimos, y que cl.ice asi: «GomERNO GENERAL DE .FILIPINAS.-
Las circunstancias extraordinarias en ql!te se encuentran estas islas, hacen necesario que me dirija a V. S. para indicarle someramente las mas principaJes :ueglas de c@nducta a ql!le ha de ajustar sus actos . e@m© ai1mtori:dadl del tierritorio que esta enc©mendado a su gesfion. La perturbaci@n ID©ral que se nota en este Archipi6lag0 <lesde qme en algun punto de su extenso territorio se fua a1tera<IDo el @:11den pµ1>liM, es de todo pmrto necesario que desaparezca i.nmediatamente, y para con; ara V. S. ni su seguirlo n@ es~aliJ_R consejo amist@so, ni el ejemplo de sus actos, <iprn han de retlejar fielmentie la C©Iil!Jiianza <JUe es necesario inspirar a todas las clases sociales, m·i si<ilJ tdera aq1,1eMos 0t:u0s Jj)F©cedi-
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mien.tos de prudente energia que fueran precisos para conseguir que todos los habitantes se dediquen, n0 s6lo a sus habituales ocupaciones agricolas, industriaJ.es y de comer, cio, sino a sus tradiicionales fiestas y recrea,ciones; teBiiendo mimy presente que pam c0nseg11ir aquel objeto con mayor prontitud y eficacia, nada tan a prop6sito ha de encontrar V. S. como mantelil.er y excitar los sentimient(!)S de respeto y prestigios que se deben a nuestra Religi6n. La causa mas honda e importante de esa perturbaci6a que se nota en estos p1:1eblos, debese p¡rililcipalr:I!lelilte al desairrollo y anaigo que en a1gu:nas regiones, han adquirido las asociaciones seeretas cle todo genero, por lo cual este Gobierno general recomienda a V. S. ml!ly e,speciailmente que p0r todos l@s medios que su eel@ y patriotismo le sugieraa, persiga y destr1:1ya tan funestas socie-
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<lades, que por el hecho de ser secn~tas son ilicitas y penadas por la ley, y p@F los fines reales 6 aparentes q1!le se proponen, contrarias a la Religi@n y a la Patria. N0 se le ocuUara, ;por tanto, la imperiosa n.ecesidad qtrn existe de :rornceder elil. esta cuestion con la prudente y energica ra, pidez de acci@@, siecnpFe compat'iibles con fa seL'enililad de jnicio y disci,eci6n necesarias para evitar injustiefas. Nada hay tan eficaz para .mantener 10s prestigi:@s de la aut@ridad como la practica constante de purisima m.@ralida<il. en to(i]los los 6-rdenes de la Administr aei6n publica, raz6n p@F la cual esLe 6:obieFno general esta resm.elil@ a ser iro.ex(!)rallle con ,todos los que siquiera vacilen en asuntllos de esta .B.altm.raleza, sien<il.o, por tanto, imprescin dible que V. S., c@mo representaro.it:e de :mi Autoridad, extverne sm. vigilancia , aplieando la ley con todos sus rig0:res y
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.,
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dam.do cl'lelil,ta a este Gobierno g0R0ral de, tod@ I.@ crue se relaciome eon es1:a imp(i)rtantishna m,u~sti<fln. ,'P~F@ IilO fua,s ta a las aw1:@Ticla:clces y agentes <ilel G@biem(9 de todQs (mle · nes mant01'1er e0nstantemel!l:te I.a Jiltl~ reza cle su gesti<fln pu.bilii.ca, sino que' es Jil.ecesari.0 CJ_lile reflej,rn ademas en toda Stl c0ndtlc~a fa s~re-midad y ahn.egaci6R qw.e el lltey y la Patria tienen. <ieFech@ a esperar de todos, n@ ah>alild!@Iilalildl:@ jamas sus p1!Ies-tos, auJil. cuand'o se pFesentelil ci[!©l!IJJ.tstancias d,i.,f.i,!;liles, .<!{!1!10 tienem. fa obligaci<fln de af1r@lilhar y r'1)s0h1er con honra ]Jers0na[, ae fa J.i>atuia y d:el. illley. 1?ara I.as Felaci@mes e@n. stls g0h>ernad(9s l1i.a de hi1spirarse V. o. em mi al@auci6.I!l dirigi<il.a a il:os :hah>iitam1tes tie estas Islas, (i}'lil'e Fefieja miis proee~ cMmieni"lios y m,i cri.te1·ii@c@.Iil l1espe0to al afec-tio y Ji>r@becei@'l.il OJ:1!10 'ha d:e dem@st.ira.rse a Eos leales yi al rigor y eneFgfa que deben emplearse com l@s tvaia.ores iile stl f.ley y de su Patda,
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LA INSURR.ECOI6N
distingui.en.d@ los qMe' lo sean ¡por maMad, me a<iueHos otros qu:e fuer<m arrastFados po1.1 ignorancia y por engafi.o. De la presente circular se servira V. S. acusar el oportuno re, cibo. Di@s g1H11rde a V. S. machos afi.os. Mao.Ha, 25 de Diciembre de 1896. 1> :Ottram:te este ultimo mes de 1896, ililabian de litace11se elecciomes rum1icipailes, la ren0vaci6n de una parte de los triibunales de los pueblos, colil aneglo a lo preceptuado en el Real dec1.1eto de 1.9 cl.e Mayo de 1893, con arreg,l@ a ~a Iey Mmrna, segyn ail.Ii generaJ!meDte se <!lice. El aFt. 10 de este Real dec1.1eto pm.1-tualiza,bien. claramen,te el procedirniento para verificarse tal ren@vaci6n electiva ante el tdbu.nat municiJiHl!l c@mpleto, con. as,istemcia del reverend@ 6 devo'.:0 c-,mra pan,¡r@co, @on cuy0 visto bueno y el del capitan mumicipal, el acta de
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eieccion. se rernibe ail gobernadoF cl.e la provi:ncia, q1u.ien¡ da cl!lenta a1 Gobernador general. ¡ Atm estando, segnn i(i) esta la citiada iey, pr(i)vista de medios de gobiern@, en. cirou1stancias tan turlmlel'l'tas, el!lales fas qme ailterabaa Ia paz pubHca, no podia teneF aplicaeion; y eliltencil.ieilld@lo asi, sin dl!lda, _ el Gobernad(i)r gefileral, Sr . Marques , de Polavieja, dict6 un decreto suspemcli.emd0 las eleeci0n.es, (i)Currieado a la imperi@sa mecesidad de qMe a l@s tril!umales m.amticipales acl!lcil.tiesen. incligenas de recom0ciaa ¡tiaefildad a la cam1.sa'. de ia Patria, aun,;prn hiese si1m el voto de fas primcipa.lias, <!Ille, infil1:rnniiad.as p@r fos ac(i)ntecimieiiltos, hacian. correr el riesgo de 1ma mala elecci<flm. El decret@ inteFesam1.lte a <l{Ue n@s reforimos decia Wte:ralmemte:
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ÂŤManila, 24 de Diciembre de 1896.
En ateMi6n a las dificul.tades que de la _ins1:1.lfrecei0n se han @casionado en aiigu.nas provincias de la isla de Luz6n para l.lev!lr a efecto la renovaci6n de u.na parte de los iribt11i1.ales rnt11Illidpales en la forma <Jue preceptu.a el art. 10 del Real deeret0 de 19 de Maye> de 1893, y en 1.1so de las atribuciones que me estao cgnferidas, ve.1o1gG en decretar lo siguiente: Se Slilspelilden las Articalo 1. ~leceiones q1:1e deben tener iugar dura.nte el :prese,11te mes de Diciembre para la rern')vacion de la tercera parte de los ca!fgos qu.e cGnstituyen los trilnrnales municipales en leis pueblos en que n@ se hayan verificado en esta feclil:a, perteneeie11tes a las 11wvincias de Manila, Bufacan, Pampanga, Nlileva-Ecija, ta Lagu.na, 'Farlac, Cavite, Bataan y Zambales, so-
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bre l:as cuales existe Ia <declaraci@n de estado¡ de g:uerra. Art. 2. Los gobernadores de tas provincias citadas propondran a este Gobierno general el cese de los mu.lil.icipes que por cualqufor causa no deban eon.tinuaT fom1ancl.0 pade de los tribl!lnales, y al mismŠ tiempo el nom.hramien,to de los que bayan de sustituides interin du.ren. las actuales circunstancias y se pl!lede dar deTuid(i) al!lmpllimienbo a la ley. Jl..as pr,op11estas pava estos nombramientos, seran acompaiiadas de los informes de los RR. 6 DD . cu.ras parrocos y de todas aqu.ellas en,tidades que para mayor ilustraci<!ln juzgue:n co:nv;emiente oir fos referridos g0berrn.adores. PuMiquese y dese cu.en.ta al Ministerio de Uitramar. - Polavieja. 0
'Panto el-pr.einserto decret(i), cuan.to la circular qu le al'ltecede, sinitetizaban por parte del senor general
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Polavieja un co:acepto exactame:Qte concorclante eolit el 'formado por todo el elememto peninsular; no se rnar<>l6 la IillHis miâ&#x20AC;˘mima difereH<slia de criterio en.tve el lil'fl0 y el otr@; para tofil:0s los espaili.oles eran. objet@ de aplauso las jl!l stas, justisimas d:isposiciones del Gohlerna:dor geDerail. 1 1
CAP1TULO X i Continua la sintesis de los principales acae,
cimientos del mes de Diciembre de 1896. 1. • Asesinat0 de 10s· RR. PP. curas ptirroc0s de Moron y Bagac. Combatei; en aquellos iugares. - 2.' Consej0 de guerFa- para ver y:
fallar la causa contra D. J0se RizaL Sentencia y ejecuei6n de la pena de muerte impuesta a
este reo. ~ 3. 0 Otras sentencias y ejecuciones de la misma pena. Importante res0luci6n dictada por el ·capitan general, Sr. MaFques de Polavieja, referente a la administraci6n de justicia. - 4.' Otvo impovta:r;ite consejo de ~erra Feferente a los de CamaFi,nes. - 5.' Conspiraci6n en. Elu'la'Gtin. Con.sejo de @U0FFa de 0ficiales generales. Gaball0s de Australia. Mas tropas expedici0narias. - 6.' El general Pola:vieja visits Cavite y el campamento de Dalahican.
J.tsesvn111t0 de los RrR. PP. euras par,rocos de Moron y Bagac. Comoates en aquellos Zugares. - il'Iorrible crimen y f.
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elili ll!lg·air sagrado se comeU@ en la madil'l!lgada del 25. en Moron., peql!leJii.o pueblo, hafuitado por pescadores, en la costa de Bataan. El o@n:dadose> ctJra parL'oco cle aqmill pueblo. reverendo pad.re fr. Dmaingo Cabrejas, de la Orden Fleooletana, estaba ee1e1mlil!ld6l el samto sacrificio de la · :m.isa, e1rn1ado la Ji)(i)blaeion fl!le asaJ~ ta«fa: por una pmrHda Feoelde, que la sa«ifl!le@ totalm.emte: del menaje del conveBto nacla ql!led@. Fieramente asesina«ll'o el iR. Cl!lra pairr@co, coJil salvage regoeijo exbililieL'Ofi 1os infames alillt01:es d,e tal)]}aii:o (<lrirnen e1 cadaver <ite a~mel martir, cuya ;preciosa sang:re salwic0 Tos Jilafu(i)s sagL'a:dos del altar y, tifio Sill pa'vimemJt(!), holtaclo por la saerilega: pta:nta de 10s freRetic<,>s se@1iairi0s del ca'1'.iptlaan, lQs Cl!la:les, a[ pr.eparnrse a Emir desp1'1es de coEliUilter ham eli1@rrnni @rimen, 0.ebaj@ de ttnos madlilrilimenes ql!le lftabia en fa ililltisma igiesia colO'<mr(i)n ei cadaver ira:gme:Iilifiado lei virt1J10s@ menci«'ma-
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do pad,re recoleto. En aquel mism0 sitio le reconocio el medico del Cq¡istina Sr. Piso , el cual iba acompa iiado del c0ntad ordel mismo barco Sr. Solorzano, volunta rio de aqueHa expe- dicion, que en el vapor Al1Yrta destaco sobre el puerto de Moron. el disting uido comandalilte del cruce'f<,, Sr. Cadars0. Era este conoce dor del a vamdalic@ hech0, por noticia . pasado capitan un Okmgapo llevara del n dotacio la de Com las fuerzas Cristina al mando del alferez de navio D. Carlos Jl>iE.eda, unigro nse 1 en e:l Alerta 30 s01dados indigen as que al ma1ulo de un capitan , pertenecian a la column a Barraq uer y que p0r este habian sido en vi.ados. Navegadas las 14 millas que separan Olongap@ de Moron, estas fuerzas sostuvi eron com.bate con J os reheldes, hasta que estos se dispersarnn p0r completo; mas U[ila y otra vez fueron ~astiga Cilos, porque el coronel Barraq uer, fraccionando su co-
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lumna, con el comaodante Baquero y otras al maodo de los capitanes :Eurguetie, Alarc6n, Estevez y Lasen, oper6 un movimiento de persecuci6n que desterr6 a las partidas rebeldes, las cuales aniquiladas se diseminaron por 1os inaccesibles pieos de Mariveles. Los crueles asesinos que entraron en. Ora:oi y en Hermosa, secuestrar@n tambien y mataron al P. Sap. Juan, cura parroco de 13agac, pequefio pueblo q1:1e en tiemp0s perteneciera en Io ei vH y eclesiastico al d'e Moron. En las iomediaciones de aquel los bati6 el capi:tan Bu:rguete, obten,iemdo la vic ti@ria de que desde Orani di0 cuenta a Manila el coronel Barraquer. 2. ° Consejo de guei¡ra para ver y fallar la causa contra D. Jose Rizal y Mercado. Sentencia y ejecuci6n de la pena de muerte impuesta
a este reo.-
Parn juzgar a Rizal, veriflc6se el dia
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26 el consejo de guerrra c0rresp(i)n-di<mte: lo presidi@ el telil.ie'mte coroJilei de cabail.leria D. Jose T0g0res~ El esJ!laCi(j)so l0cail. cl.estfoad0 en el cl!ladel de Espaiia a 1a ceh~bracion cl.el c0nsej0 de g1rnrl'a de q1,1e se tFata, resuM0 escaso }l)ara conteJiler e1 gran m1mer0 de personas que deseaban presenciar el acto. Act(j) en realidad solem,u , en el 01:ial :p11d.o ap1,1e,;m.derse por complet0 tod@ I@ concerni.ente a fa rebelion: de !Gs tagalos ge~ ililerada [li)Or la Liga Fi.[i.J!l!I!la de Rizal: N@ acertamos a ex,plicamos poF ~:m.e s1:11irte d.e c0Dside11acio11es, del orden teclilico y de con.veniencia soc,ial, cl'eje de estarr iiilformada la opi0i6n p1!1.Mtica a estas l\tQras, attn([l!le estas lo sean de guerrn t0davfa, CQn el eonocimiento d.eta.Uad@ d.e la ~ausa seguiq.a por 1a justicia ,ro.iHtarr contra el medico i.nd:igena D . .fose Rizal y Mercad.@. La puMicaci@n de los deta.Ues de ta[ pr@ceso, imipediTia en ~sG1l!lt@ el
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menor desacuerdo entrn la fantasia (facultad que priva tanto en los .animos de Dlilestra raza) y la realiru.ad de los fu.echos . ,Del conocimiento de la verdad, por triste que esta sea, siempre se deriva:m provechosas ensefianzas : jainas plileden tener igt1al caracter las falsas que resu:lten; del ¡desc~mc,cim1iento d'e los hechos . Rizal, el reo ql!le ifua a ser jruzgado en aijlilellos diras, estaba acusado de los de1itos de rebeh6n, sedicion y a¡soeiaciones iUeitas. Los actos de Rizal, habial'l.Se hechw muy publicos: ieran tawt@s y tantns â&#x201A;Ź[1:lienes , l@s eonocian-! pero ia,s indaga'liorias del acusad!o y Ias <il.eclaraeioues de cargo C@lilti-a el m.'ismo, por el juzgado mi. litar re0ifuidas, ven<ilrian a ofrecer lilNa resultancia tan eiara para f~Jlar, qu~ bastara el eomllm sentido a efect11ado en justicia . Y ail unison@, se aplaudiria por f6Jdos la a0cion de esta, con sus rectas
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severidades iaclispen.sables a la humaina sooietaad. ltl teniente auditor Sr. 'A1co€.er• forr.nu16 briUam.te aC11saci&n ,f!lsca!l. Despm~s de bosquejar c@n man(i) maestira el triste desolador Cl!l.adro de la insu.rrec<'liom fiJirpi·ma, o:frecido por [a i:mgra-titl!l.d de mmares de ind-igenas ,w.t1,tra ia d@mima€.i6li1 espafi(i)la, ql!l.e tan:t.0 los ha .eirntrliecid@, <ilibtljo con rara perfeoci@n la pe-Fsona de Riza.11, demostra,ndo hasta la ecvidem<;iia (\Ille los constan.tes tr-abajos . de este agitad@r del element@ imHgema, itHir0n. siem]1)Fe . e11calil'1inados a lograr la ·independencia de las islas por toda erase de medi(i)s. El luminoso dictamen acusa<;iion a que n@s re.ferim@s, analizaJ,>a ClHl!lillto Ri<zal produjera c@ntra la Patria clesde q11e cmmpH6 ios 19 aili.os de edad, el tan fau1.es1i@ 'E)r@pagandista. i[)e.spues de aqruelJ.a ,oda con que acudio a,l ceFta,Jl!eiil de 187!!), n.o oeso el laib(l)ran:te tagalo en su predica@i6.n cont ra fa 1
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soberani a de Espana en Filipinas : su 11:ovela publicad a con pie de imprenta eN Berlin, y tihdada Noli me tangere, es una diatriba constant e contra la Religion cat6lica, a la que escarnece, y contra las personas y cosas de lai Administraci<fln espafiola; al freResi llega en la expresi6 n del , concepto que le mereciam os los espafioles, a qui1rnes nos llama mosca;s y colados y can(l;llas, saludand onos con otros dislates de no menor audaz imji:mia y calumlilia. En el vertigo de sus odios contra 11os@tros los espafioles, Rizal foe desde Manila en (t} aiii.(i) 1888 a1 Ja,p()lil, y de alli vino a Madrid, y desde aqui fue a Paris y despl!l.es a Lond:res para volver a la corte cl.e Espana, elil cuyas ca,p itales hizo, en una 6 en otra forma, siempre manifies tamente propagan da fiHbushera. Otra producci 6n 1iteraria de Rizal fue El _Filibusterismo, libro q,ue no desa<rrŠlla ot110 tema q1rn el cl.e eRsal-
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zar la memoria de l@s tres curas indigenas fiJUe sukievon. la pen.a de mrnerte por haber tom.ado tan acti::va part.e en. la insurrecci6n de Cavite de 1872: en ta,l libro, amenaza Rizal a la maci6n esp>aii@la, porque no dej(') imp1me el aillentad@ que col!lt,ra la soherania de fa misma cometieron aquellos clerigos ( que tam' bien qnisierom degollar a los castilas), y a q,uienes Rizal apeHidaba
mwrtvres. En H\l92 ob>tenia por miestra in~ cmnnensNrable magnaniliilidad el in1' dulto de ¡ su familia, que estaba deportada, y premiaba tal merced del modo ([tie ya dijimos ail 1l.ahi81' de La Liga Filipina, es deci.F, creando esta, que fue pFimer jal6n, propiamente dicho, del actual movirniento separatista. El fiscal disocrrre por rnodo convinceat'.e acerca de la influemcia pern:iciosa fiJUe-- las logias mas6nicas ejercieron sobre los indigenas, des-
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trl!liyem.do entre ~llos las ereencias reHgi,©sas; ~ara lograrl(i) venian aqueUas fam,Jt,aiam.do con gran insistencia y tlegalil<!l.o a instalarse cevca de 200: e:0 el AFcliliir>ielag0. Et ei©cu:ente act!lsa:cl@JJ fiscal St\lfior A,lc@cer estm:lia hrng(i) ta Liga Filipfom y seiia[a el Jilrimoi'~ial @bjeto de la m is,rm1a, que ftle allegar recursgs para fos g.ast0s del lev(J/f/)tamiento en wrmas d µn de e0nse9ui1· lw ilndepmidencia de las islws. iED la reumi@m celeib,eada ell fa casa de D0110te0 Oirl.g-1?1ngc@, y a la C1'lal asistfar@n rtaHitos imdigemas pndientes, Riza1, segun pr@;pia maniifestaci<b.lil! <q1!le C©lilsta ellli Sl'l indagartoria, di1o, emtre (!)tras mBchas c@sas, q:ue -era importantisime elf. estableeimiervto de la Jl,iga Fil,ipwia c;onforme a1l reg,lamento de q11,11e era aut,0r ( ya desd:e H@ngK@ag hah>iaJo Femitid.0 a Moises Salvad@r, (Jll!le 1;esid:ia en Mamila), y rpo·r es•te media le-wnt,1111: tus artes y el comertig, po.r,qMe el puebfo, siendg 1iie0 y estan- · 1
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do unido, conseguwla su 1ibe1¡tad y hasta su independe;n;cia. Si p0r la ~ro])ia C(i)Iil.fes,ion de Rizal res11lta estŠ probado ell ,autos, tlfiliiil.'biem. [ 0 esta por 11111m.chas deolaraciones Jl)restadas, y entre @Ch(i) 6> (!}ie.z de las pr.im.oiwa:les des-ta.case la de Ma1:1tin. Consfantimo p.urntua1lizan()'.(i) l))(i)f comJillet(i) el p:la,n y afirma~1-0lo ,qne el @li>jet0 ae aqueMa asociacicrn1 era matar a los espan0Zes y pr.oelamar la indepe;n;dencia de,l pa4s; qlile lltizal era el j~fe supremo, presiden.te hon9rari0 dei C:atipul'lafi, y qu.e sliJ. 'Fetrat(i) ifigwraba ell et salon ae a0t(i)s de a(i)iutdll a asociaci6n. Explica el fiiscal, tenielil.te amHil.itior, 1a 0rga,n,izaei6n cle fa Liga, de ia cu'al ya fi(i)S@tr@s en. capit~los a,mteriores hem:@s da<ilti p(i)'bire s:imtesis, y dernuestra fa imjil@rtfl!lllcia de las explica0i(1Htes <!ladas por litiza1l a preguBtas que el juez in.strl!lctor le hi oie1m Fespecto a las confor.emoias q'l!le en Slil destierr,o die !E>apirllaD tuvo
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aquel agitador medico tagalo con personas de significacios complicadas en estos tristes sucesos. So pretext@ de que iban a consu,ltarle supt!I estas <!lolencias, a Dapitan acudieron los que m:as tarde resultaron jefos del movimiento. Rizal. agravo con sns propias declaraciones su s,itu.aeion: dijo a su compaiii.er0 Vaie:m.z¡uela, cuando fue este a darle cuenta de qqe se proyectaba el alzamieli1to, que este e,r a prernatt1ro, que debia esperarse hasta d!isponer de armas 'Y barcos. El gran agitador de las f)aSi(i):m.es powufaires con1!.ra los poderes publicos-, el principal culpable de la rebe1io:m., .wensaba sin duda poder exculparse con. a0JueUa manifeslacion, sin pa.rarse a pensar de que Sliterte eJilseilia la :histo11ia Cl!lan am.~ cil es detener la marcha de un movtmient0 de tal naturaleza ya iniciado, y de ~ue sl!lefte sas promovedores perecieron siempre arrollados iJ!l<i>r el. Nada podia amengua¡r las res-
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ponsa-bilidades a que :Rizal se fu.abia . hecho acreedor: aqruellas demoras ql!le aconsejo para alzarse en armas no eran parada 6 retroceso en sus designios de efectuarlo , porque Riz(JJl continu6 la obra de propaganda filibustem, esperando .mome111to propieio pam asegurar el em-iito del levootamiento : este se adelant6. ' lP,or el descubrimieilto hecho en virtud de las revelaciones ¡de Patin@? lPor las ambicioBes de Andres B@ifacio? De cualquier modo y de todos, Ri, zal era el promovedor principal del delito de rebelion, y debia sufrir la pena <[Ue para el H,1:ism0 seiiaJa el C@liHgo.
La direcci6n suprema de la insurrecci6n fivipina estwvo siempre vinculada en la persona de Rizal. l Qui.en podria iilvalidar las deolaracicmes testimoniadas em. la cal!lsa, vertidas por Alejandro Reyes, Moises Salvador, J0se Dizon, Pedro Serrano, Pi~ Valenzue-
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la, MarUn Co111stalil'tino y Aguedo del :R@sai·io, Deodato Arellano y tantos otros? Riza,l, pues, habia de satisfacer a la jttsbicia el tributo de que le era deudor. Los dos delitos de que el iscal le acl!lsaba quedaban en la ca~1sa perfectamente comprobados. As0ciaciones ilicitas y el de haber promovido e inducido con sus continuos trabaj0s (mtty bien relatados en el diictamen de ✓g;iae :nos 0cmpamos) la actual 1,ebeH@n. En aNil.bos delitos tenia el acusado la 'participaci6n de autor, co'lil circunstancia agrav.:a,rnte, sin nfailg1ma atenuante. En su e@nsecuencia, el fiscal, en aombre cl.el Rey, pid!icf> la pena de muerte para D. Jose Rizal y Mgrcad.o, como autor de los expresados delitos: en el caso de i.ndulto, no podrian rnm,i,tirse fas accesorias de inhaibHitaci6n alils01toota p€lrpetl!la y suj€lci6n d!e aquel a la vigilancia de la autoridad por el tiempo de su vida,
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debiendo sa,tisfaeer en coneepto de iID.demlili.zaci6n la camticl.adl <ile -weinte mi1 pesos; todo con arregl@ al Codigo J!le,nal vtign~@ en e1 Archi1pielago. L@ mas fielmeN1te cp!1e sabemos, venimGs siF1tetizaID.cl.o el fl(i)tab~e cl.tctame_n. del teFlien,te al!ldit<ilr tfi.scail Sr. Al@0ce1c; per(i) no li)Gdemos resistir al d.eseo cl.e qu.e i:rnestiros benev@los l~ct0L'es conG~can lo q,oe, segan nu.estras notas, c@nstituyo el final del el<ilcttelilte strnitid@ dictalJlilen a ('J'l!le 1il.OS mfeFim@s. 'Beeia el :F)arra,fo final de este; «Vais a cl.ecidir, d:esernipe/ ,>ifuando la al!lgl!lsta rnisirfllil Cite jUieees, »de la sUierbe fotwra: de D. .'f@se JitiJ.. i>za,1; per(!) tenecl! preselil.te (ijl!le en. es(i)S »s©.le1ilmes mo1illentQs (i)S pi<ilem jmstii,cia las mmclil.as victi,Jllil.ais ([l!le, c01.1t ))JiEl(i)tliV(i) <ile l aQb:1:al Iilll.O'Vimefil}[O in~ )>S0Jrreccic:n1a,l, ffl:lil:<Wm.e•Jil el s11eft@ »eterrw en esta tie,rra <iJtle siemp:re »dehe ser esJ!)afi.@la; (i];l!le asimismo i>os pitilen jm;'lieia esas ~posas eJlli1,jas de ill!lncl.0001·0s@s ofi.oia[es vil'l a1
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»namente ultrajadas por una muche»<ilumb.re desenfrenada y crne1; que »os pidelil justicia rnillares de ma»dres que, con el llanto en los ojos y »la angustia en el coraz6n, siguen »paso a paso los accidentes de esta »campafi.a, pe:nsando constantemen»te en sl!ls hijos, que con la bravura »propia del soldado espanol, lu<fuan »sufriendo Ios· rigores de un clima ii tr@wical y las ·asechanzas de una »gl!lerra traid0ra, p@r d:efen!iler ei ho»mor y la in'l!egridad de Ia Pafria; y, »por ultimo, que os pide justicia el »fiscal, como representante de la »ley. >J Asi terminaba la notable acusaci6n fisc3!l, por absoll!lta 1u1animida<il. de pareceres encomiadai. ' Vino despues una habil defensa del reo, hecha por el primer teniente de artilleria D. Luis Taviel de Andrade, ([l!lien, a 1>esar de sus esfuerzos, lille :nadla atenua<ll'or pudo a naaie coavencer; e invitado Rizal a que anadiese cuanto le pareciera, en
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debiles f,r ases in:bemto en van.o desvirtl!lar las acl!lsaci11n1es de sl!ls paisa'lil.Os, evi.den.ciand@ el i19rincipal papei ~ll!le el tu¥iera en la !fel!>eli6n. Y term4nci> la vista l))Mblica reunigndose el C(i)n.sejG a deHbefar sec~efaEI'1et1te p0r espaeio de 1!1.0ra y media. Prn,t 6 se conooi<f> la stfl!lil~Iilcia de muer,te dictada p0r ei Co:nsejo de g1rnrra y firrnada por ei Capitan geae.ral , el 2!1) se dispu.sg en fa Grdei:i. de la Ji>la'za 10 necesar.i0 para ql!le fuese ejec1!11tada a fas siete d.e la Hlam.alila de1 sigu.4ent e di,a :;}@. Pers<malmen.te jamas tratamos a Rizal: coi:i.ociam0s sus ililjustos enconos contra l0s espaiii.oles; aim antes · de ;Fm0duci:r este ag1tador ias fci>rmulas alilominalbies de s·u Liga FiUpina para a!lcam1zar 1a ilildl:epenelelil@ia de aqueHas islas, eraa 1ililJl!ly sahidas las despreciativas f.rases que siclil recato ea ml!lch.as ocasi01iles verti6 C@I'lllira nuestr(i)S podel'es pmJ;,1icos.
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'Per@ acudimos a fa Real Fnerza de Sanfiiag@, hagar de SUI prisi6n, y ani averigaam@s de qne modo en las ultimas ltwras de sm existencia, y despmes de sosteaid!a 1llelila eatre las pasioaes qae desoe la jmventud se habiaa aJl)od:erad@ de aquel espiritu amTuici:os@, y la vish1mbre, ([Ue ya bastaba, 6> el giran. reffoj@ de las verdad!es @pues:tas al©s enormes err0res eB que vivio, Rizal <!li.6 1!liloestras de arrepen.t.imiem:ho: fail exit@ a,Ieanz6 la @bra :pe1·severanteme.m:te ejec•111tada por los PiP. de fa C@mpaii'H a d~ Jesns, <que lil@S warece ree@r<da1· faeron [os padres Marcfu yViJfaelaim, ad,em:as del P. RoseH, a <i(ttiea n<ifsotiros ~isl'lil.os virnn@s em tan sam•ila fafuor ©CUiJ,i>adisimo. Riza,l escribJio l!le so ptti:uo y letca soiler.Iiu11e Fetraetaeilf>,Iil!, q;ae decia i!itera,1m.elilte asi: , «Me <ll,eefar@ erut0lic0, yen esta Rei·gtcfJJJl elil que Racii y: me ech1que (1,fniev.0 vii vi.r y moriir. »Me retract@ de t66l@ @oraz(m d.e
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cuanto en mis palabras, escritos, impresos y conducta ha habido contrario a mis cuali<il.ades de hijo de I.a Iglesia Catolica. Creo y profos0 cttanto ella enseil.a y me someto a cirnnto ella manda. Ab@mino de la masoneria, eomo emem.iga €fhl.e es de 1a Iglesia, y com0 socieclad prohibida por la Iglesia. Pl!lede el prelado diocesano; como a,l!ltori.dad sl!lperiioreclesiasti~a. !hacer 'l))Ublica esta rna:nlifestaeiom espontanea mia, para reparar el escandalo que mis actGs ha-yan podido causar y: para qNe iDios y los lil.@m.. 'b res me perd@nen,. >) Manila, 29 de Diciembre de 1896. -Jose Riza,Z.-Ei Jefe dei piquete, Jua,n dilil Frnsno. -El. aym<ilante de plaza, Eloy Mam·e.» Rizal se confes6, recibi6 la sagracl:a eom'l!l.ni01.i1, y a presencia del jefe y oficiales de la ftterza contrajo rnatrimonio con Dona Josefina Bracken. C@nduci.do al h1,gar senalado, y sin baberse prodmci<!lo a~guin@ p@r mas
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q1rn eran de buUo los que se predecia1,1,, verifi06se la ejecucion, siendo este re@ fusilado de pfo, pues no qujso arrodillarse. Dios, en su bondad infinita, se habra apiadad'o del alma de Rizal, co@peFal!l!ilo ha] vez a la salvaci6n de la mi.sma el perd6n que clesde la gloria le hayan otorgado las almas generosas del gran numero de espafioles, religiosos y seglares, que perdienrn. S1iIS' P't'eciosas vidas por los planes cr~minosos del desdichado iluso medico tagalo. 3. Otrqs ejecuciones de la misma pena. Importante reso1uci6n dii,ctada p01¡ el Capitan general Sr. P0lavieja referente a la a,dmini,straci6n de justicia.Aunque aflictivas para el animo, relacionaoas con la magnitud de Jos crimefl.es cometidos por los rebeldes taga:J'(')s, NO eFan m,wc,h as las ejecttcioJiles de pena de muerte que se llevabal!l a cabo; pero como todas estas 0
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se efectl!latian em ei mismo ibl!l,g ar y sitio, Manita v.e1ilfa prese111cian!il0 el triste esi{!)ectact1l(i) a qllle D(i)S refori~ in@s c@n d0l0r@sa ilreoo.encia. Desde el 3 de Ntwiembre, eilil q:u.e . se •iilllsil6 ai :paisalil@ ff(i)norat(i) 0,nrn' bia, e1 de la gram iraici@ill del sema1 foro elil el sen@ de iBa[ayam1, fu,a sta el , 30 d:e r>iciembre, en <lJlite fote rusilacl(i) : lilizaL babian su.tdl½(j) igmat pema por delitos tamlilien de trafoi61il otrGs indivioluos: el 14 de este lftl,tim@ mes, ]!}r-oc@pio Evangeliista, Fr,a1J1cisc@ Ismael y Ped-v@ '.r@r11es: brnl>iaa sid@ ejecY:tad@s en gaftote vii ;ri@r rol'l@ en cuadrtlla y doble b.@mi.ddi@, el dia 1:5, l@s re@s Greg0Fii@ Jac@b, A1:1to111,i@ P-@rlmcas, Mate@ G,asrn,:im1 y Fl0rent:ino .fac0b: f.uer:on f.usi:lados el, 17, :[i)@r el d:eli.ito de rebeli6111, Leon til;e l@s S,a111t0s, te<fn1 Valerio, G.aspa,1· de l@s Sali.l,t@s, A:gaMn1 de I.a Cruz, Maximino Austria, Nic@las y Vicente Marqruez, y J!l0f ret>eli6n y es:Ji)iomaje G1J1:ario]3@111@ Gaspar. 1
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Fara evi'fiar ,:f,R l© p©sifule espectac1d@ tan friste, debiendo hacer mas efectiva la ejemplaridad de la J_l)e¥1a, asi e@m@ para atemder a otros ililtevesa,t1tes extme.m@s, el general Pol;avieja dict6 11es01uci6i;i que, por coFresji>olll.der al gntJ!)O de las que mareain eriterio'pr©pio, vgm.<l!J'.H>s precisad@s a reprodl'lcir en text0 if.iterail, qtte es e1 s~gl!li.ente : «l a concemtiraci6n elil esta 0apital dtl Cil!lainltos ilild\j_vfol1'lt>S S@l.il en. pr0viindas <!letemid.@s @ presos, en 00ncept@ (l]'e presunt@s <Wl'I'l)))licados u la act"l!lal re1fueH<f>n:, es @rigem.de graves dif.lcl!lUalites Ji>ara Ia @rden.ada administrac:i:@0 l e jfl!Istieia, 0TusM.0ulo para el ol!len rggimem in,te!l'i@r oe fos prisiones y, hasta 1>arrera i.'Flfraequeaible al restab'lecirnnitllilito de fa paz m(i)ra1 en esta sociecla<il: faal.'t@ agitacl.a . nNeeesitad@ ei espiritm publico del -refH))SO :rierdido meses ha, no consegmfra recuJ_i)era!f1@ !interin sm atem~ i@lill es•be soHeitada 100i: e'l cl:@fo>roso y
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horrible espectacuL@ (i],e ci,nti.J:nias ejecuci@nes de pelila caipitaJ; cmmwH, do el Mio de Ila 1ey a llarga d~s~aneia <llel lugar en qme s,m iimJilerio fu.e deseonoeid0, ameri,gm:ase la eje11Ii1.plaFfolad de 1a 'li)em:a, descoMCri,endg u10 de sus prililciiwales fines; coaft!,!1:@d'.id(i)'S cefiltemares ole lf)r@eesad@s en f@cales , foltos cle segl!l•r idad y <il'e liig-iene, corre tam1t0 riesgo fa salu.d pilillM!i:ca c@m@ el exitio feliiz de ac(Maciones qiue re0tamam1sev,e ra iric@!lil,lJl.tli'caci6o y e:fi<:.az ct1stodia; d.istit'ii1> 0.rfolos l@s prefer,et1tes servicios de Ja alllminis/traci@n de jm;;rticia eliltre l@s jefes y oficfa~es resitilen.tbes eR Manita, se l~s re£,a:rga e@m [:leli10s0 -y asiclUI@ ttralfuajo q:u.e e:m. c11eciente aJUIID:en.t@ reta1,1da · la ~m.stanciaci@ITh y termilID.@<!le pFMesos impgr-taliltisiEnos; y coFrve-r tida, en fifl, la cai,ital elil unico cel.il.rtr@ de q:ue irradi,a la 1,usticia, sienliese e)';}J 1os clemas !Jill1<ebl(i)s :filipin(i)s dehil y tardio. e[ imJ,i>eri0 de Ia ley. »'fan graves males rec1amaL1 p,ron35
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to y mg:ente remedio; y con el fin de cu>Jil.segu.irfo, he teaido a bielil. dispon.er lo siguiente: »1. Los com andantes generales de fuerzas en operaciones, y donde est@s n0 residan, la al!l.toridad milita·r jefe de cmerpo, @ el de may<;>r graduacion e@n mando de tropas, ordenaran la instrucci6n de causa por todo delito de que tuvieren conocimielilto, si, con arreglo a las <lisposici@iiles de!. t:6digo de Justicia mifirar 6 a l@s 'fuandos vigentes, debiese someterse a la juriscdicci6n de Guerra, nombrando al efecto juez instructor y, secretari@, sin perj·u.icio de darme iamecilliat@ eon<;>cim,iento de la preve0ci6n: de la cal!lsa y de dichos nombramientos, para mi aprobaci6n cuando sea procedente. ».2. L<;>s detenidos c@mo presuntos reos de 10s dehitos a que se retiere el artiieulo am1ieri@r seram. pl!l.est0s sin percdid'a de tiempo a d.isposici6n de las respectivas autoridades 6 je0
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ies militares, cualquiera que sea la autoridad que haya Ol'denado la detenci6a y el caracter y dependencia de la fuerza pu.h1ica 6 de los agenrtes que hayan efectuado la aprehensi6n, h1gresando los detenidos en Jll carcel 0 local destinado a este efec'to en la poblaci6n, si ofreciere las necesarias condiciones de seguridad, 6 el'l la de la cabecera de la provincia en otro caso, 6 en el que asi lo disponga la autoridad miLilar. Âť3. Los jueces 6 instnictores po,dran detener rior si mismos a los pre/ suntos cuipables 6 encomeEJdar directamente su ca}!)tura a todas las aut@ridades y agentes cl.e las mismas, asi {)Omo a la Guardia civi[, que sin dilaci6n ni excusas llevaran a efecto la aprehensidrn; en. la iatelige@cia de que si no llegara a realizarse por negligencia 6 falta de celo de los encargados de tan importanbe servicio, les exigire la mas estrecha res}!)onsabilidad. 0
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»4. L@s mismos j ueces insLructores procederan ])01' si mismos, 6 ·daran directamen:te comisi6n a otras autoriclacles 6 a sus agentes, para que procedan al registro de habitaciones, examen de documentos y demas diligeacias jrudiciales etne procedan, coa las f011ma lidades que las leyes prncesales prescriben y son de observar en. tiempo de guerra. »5. Los expresados juecp,s sustamciaran <ilon el lil11aytl>r celo los procesos a q1rn estas pre,;c~ipciorrns se re.ffi.eren, prescindiendo ae diligencias inutiles e incoando desde lnego la correspomdieote pieza de embargo p@F cada p.rg<ilesado, tenierido pFeselilte, para aeordatr la eua0t!ia de aql!lel, que el Estado ha de indemnizars.e en lo posible de los cuantiosos sacrificios que la rebelion le im19one. »6i. 'Frum ]l1l'©'li1l0 @@m.0 las causas se encuentiren en estado de consl!llta, _en los diferentes periodQs que esta 0
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procede, se me remi,t ira0 si;Jil dilacion por condticto cl.el BJ1ismo jiaez instructor, del secretario 6 del ofil.cial a g11ien. comisio:n.e para este servicio la autoridad militar. »7. Las causas se instrnira0 en la iocallidad. en que se haUen ios presos, siernpre que por mi au.toridad n@ se disponga lo contrario. 11 En la misma Iocalidad se celebraran los correspondienites consejos de g1rnrra y se UevaFan a ejecuoion las semtencias firlilles.· »8. Las autoridades y jefes militares a que se reliere el articuio primero soliei:taran de mi autoridad, u.tiliza:nd.o los medios mas 1·apidos de comunicaci6n, los jueces instruc'llores, fiscales, secretarios, vocales de consejos de guerra, aseso:res y Ctlantos elementos necesiten :para la mas ra,p ida y orden.ada admimistraci<fm de jl!lsticia, remitiendome lGs procesos inmediatamente despues de dictada la seritericia, a fin de que no se •de0
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more la aprobaci60 de esta, ,man.do este ar11eglada a las leyes. 1>9. Las mismas autOL'idades y los jefes militares ofreceran a los mora<!l(i)res _li)acitfoos cle las loea1idar,Jes y, can,i,pos <!le su respecti vo mando la mas :tirme garnntia de q,rn no se les causarain m@Iestias irmecesa,Fias ni se les imfe1·ira et mem@r <!laii© en sus Tuienes, y casti'gaFalil. con el mayor ·rigor Cl!Iaclilt(i)s abusos se cometain e@ntra las ,personas o la propiedad c0m(i) i.nfraceion.es de la severa diseipfo1a (iJJUe del!ie maDtenerse en las t,r(i)pas. »-Y 1'0. To<ifas las dilliigei;icias q1:1e se instru1an por hech@s relaeionad0s con la aelua1 reb'elion tendtran. desde ei, primeF m@mentii) earacherr jcl!ldfoial, y, al efecto, <mand@ IilO hlilbiere disp0mih>le jefe u @fieia1I pa,ra ejercer el earg@ de 1,uez, _li)r:acticara fas actuac.doN~s el juzgad@ ordiriari@, auxitiamd@ en t0do easo fas demas autoJ1i4lllad!es a la judfoiaL 0
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»MaBifa, 25 de Diciemb re de 1896. -Camilo G. de Po-lavieja. »
S010 la lectura del docurne nto que acabam os de transcri bir, da cabal idea de 10 convenfonte que habia d'e resultar su estriota aplicaci0n ; y asi acontecio. 4. Otro importante conse,jo de guerra refere'f/lte d lo de Camarines. -El dia 29 de Diciemb re se ce.Jebr6 otro consejo de guerra para ver y fallar • 1a causa seguida por el delito de rebeliom. contra los clerigos indrios Severiano Diaz , cura parroco de la catedra l de Nueva Caceres ; In0cen1 . cio Herrera , coadjut or, y GabTiel / Prieto, parr0co de Malina(') , del Malinao de Ai.bay, 110 del pueblo q.ue lleva igual nombre en las Bisayas; las dos localidades so11 importa ntes 'f)Or su poblacion y riq:ueza. Respect0 del MaH'lil.a@ a que 11Os referinios, del de Albay, diocesis d.e Nueva Caceres, 0
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<ilebernos decir que solo los dos barri€ls que tiene como aaexos , QuinaLi y Sipit, habria a de satisfac er, si la tributa ci6n en Filipin as fuese cual la de la Penins ula, la cantida d que al 'Fesoro pu.blico aporta todo ei pueblo, Jimehlo que cuaado su censo era lile mas cle 10.QOQ almais, com Sl!lS 1.626 casas y sus extensa s fertilis imas tierras de arroz, y sus industr ias de caza ¥ pesca, singula rmente esta ultima pagaba menos de 2.000 pesos, es decir, menos de 1:ma peseta por • atrna. Adema s de l0s bes ctuas indios que el consej(') de guerra de este dia ,(29 Diciem bre) iba a j uzg31r, figuraban los paisano s Tomas Prieto, farmac eu tico , tenient e de alcalde y alcald'e interililo qlile f,ne de Nueva Caceres; Manue l Abella, notario de la misma cali)i!ta,l ; Dom.img(') .\.bella, hij0 <i.lel a,mterior, abogad@; Camilo Jacob, fotografo; Macario Valeliltin, caiho de sereno s; Cornelio Merca-
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do; Mariano N., escrioiente de la Administraci6~1 de Hacienda; Florencio Lerma, mu.sico, 'Y Ma,riano Melgarejo, empleado de Obras publicas. Presidia: el coJ.ilsejo el telilien1ie e@ronel Sr. Moreno Esteller, y se cele, braba en el CI.Hl'Ftel de arti.11.eria die Espana. Actuo como secretario el jUJ.ez instrnotor Sr. Desi;)Ul.jol (0. Ramon), J:)rimer teniente de infanteria. Por la lectUl.lia ~ue es~e sefi@.r b.izo <ile lo dilig¡enciado se vino en como- â&#x20AC;˘ cirnien.lo cl:e q1i1e el cel@s@ g@bernador civil de-aquella provincia, senor D. Jil.ican!l@ Lacosta, p0r co&secuemcia de una confidencia que le habia hecho saber como habia reGibido Tomas Prieto uma pai'lida de armas, procedio ala detencion de este pr0oesado, el cual, espontaneam ente, deciar6 todo el plaTl vasto de la conspiraci6n de Camari:nes, trazada de perfecto acue11do con l(i)s de Manila y <::aville. El pr0yectad0 crimen, l!ietallado por Prieto ¡, tenia . por base la
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matanza de los castilas reside11tes en aquella p.rovincia, y habia de llevarse a cab@ el dia 26 de Septi,m1bre. Aquel Victoriano Luciano, a quien ya senalamos C(!)l!llO uno de i@s conspiradores de mas viso en Cavite, fue qtt.ielil! desempeii.6 el eocarg0 de ,hacer llegar ~ los de Camarines un baroto cargado de armas, las gue seriaa <ilistri@lill'.das por los C(!)m.prendidos en. fa ¡ causa objelo del consejo ¡ de g1Hmra de que tratamos. Fl(!)Femeio Lerma foe designado C(!)mo jefe activo del movimien t0, y Abella (hijo), C(!)ID. Camil(j) Jacob, lugartenie ntes de a~uel. Evidencia da de todo plilnto qued6, merced a l(j) actuado p@r el juez ins1 lrt1ct0r Sr. Juespm.jol, la colpahiHd ad de :t2 procesado s, destacand ose ent.re estos, po.r los may(!)res.grad(!)s que en aqlilella alcanzara, el cura de Ma1,inao, Gabriel Prieto, qn.ie fui3 quien sedlug0 a so l.ilerm.aino Tomas, el iarmacea,tico ex alcalde.
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EstGs reGs cl.e CamariID.es pro®l!l~e, las mas . graves acl!1sacrnnes . FGD C(i)lil.ha iD. Fran0ise0 L. Ruas y CG'lil~ra el sastre Vililarreai. De talilto val(i)r eralil [as de€.laraci·@lnes y acasa.cicmes y careos veri:fiica/dos entr,e este>s ]j)rocesados, tl}Ue vtw' daclero iu,j@ cl.e iegaH:clad foe el m@ltabie .tvra1ba,jo de la acl'lsaeiifm: fiisca:l, enc0mendacla a[ ~elilie:a~e au.cl'it0r seEior ¥aliespi111osa: la ]j)l'0]j)!ia climfesi6n cle 10s pf0cesad(])s [0s illCLtlfa, lil0 simplememte em la c0·ID.spiFaei0lil, sin0 e'n la rebeli@lil misma, segu.lil. con. ~ri11ainilie ele>caelilei.a 'Y vigm;osa argumemtaci@n. fl)roba,ba el Sr. ValteslpiiI'losa, pi11eseli1Jland0 los a,ctos ejeeutad0s Jil0r aql!leH(i)s. · En t0d(i)s l0s peri(])dos rile su e>11aei6l!l il!ril(i)del@, er fiseai c0nve11cia; · pero elil f(])s que desHinm·a a [a acusacib clel erimen come'Hdo por fos clerig0s if.Ierrera, '.IDiaz y Prieto, am·an.~ c@ eN,tuisiasta F111id0sa alJ!mlbaci@m, dacfa p0r el al!lcl!itorio a tan cla,11Gs
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LA INSURRECCI6N
razonamientos; mas como la ley no tolera tales manifostaciones, las a~lv.ertemcias del presidente del tribunal las C©Iill'YMvieron en el instante mismo en que se iniciaran . Y descartaclo alguno de los encartad:@s (lJ)Ue Fesl!ll to inocente, las c0I:1elusiones cl.el fiscal fueron :. 1. ~ue se habia cometido el de1iit@ de rell>elion iJj)revisto en e1 articui© 23(i) co.lil. reiacion al 229, y en el · 232 del Codigo penal. 2. Que .eran responsables del dellito de rnloe11i0:E1 J))revisto en el articulo 23(i), y p(i)r l@ taI'lho debea sufrir la ultima pena, los individuos mencio»aclos, melilos el Mariam.o, ordenanza, para <qaien el fl.seal reclama veinte aiios de reclusi6n. Ht1H1Fadamente cum;plieron su di:litcil ©Olili1etid!Q de <ilefoasores el eapitan de ingenieros Sr. Di'az, que lo eFa cl.el clerigo Prieto, y fos tenientes de a'l!'Hneria, infalilheri!a y cabal!eria, senores S011za, Taviei cle An0
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drade, Salgado RivatluLla y L6pez :talanco, que defend.ieron a l0s demas acusados . Algunas frases de estos, proaunciadas en son de espa,iiolismo, TlO p(i)dian me11(i)S de ser 000.sideradas burdo sarcasmo, cruel hipo;cresia, 1rnes mililgiitn v;al@r pod.fa c@a:cederse a 1os conceptios de quienes supieron durarnte una la1L'ga vida por ente1•O, fi.ngir cl!l.a11do estaifuan entre los espafioles peninsulares las may0res mYestras de res,pe·fi(i) y c@n.sideraci6n hacia estos, a los cuales, el prototipo de tal ficci611, aquel acal!l.dlafado n.o;ta.rio Abella q1:1e figuraba en el proceso q1:1e analizamos, nos llamaba / carabaos blancos I siemp1·e ~l:le, b.ablan<ilo entre ios ilildios, sere1eria a l(i)S es pan oles de la Peninsula. T@dos los reos c@mpremdidos ea ( stia oausa, ;rnenos Tomas Prieto, que se satis:tizo con lo dicho p0r su de ensor, sin querer a,fiadir nacla, preentaron instancias de excusas y rotestas de caj6n, con todas la£ apa-
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LA INSURRECCI6N
Fiencias de haber sido confeccionadas poF l!lin.a mislil!la rna1,10. Y termim6 el eonsejo, ail cu.a,l tambien . habia acudido gran concurreRcia. {:(i)mo quiera (!J'lile la sentencia se oicto y ejeel!lto eli1 fechas ya corresli)@lildientes a 18~7, es decir, dentro del afio actual, ¡euando sinteticemos los hechos del dia en que este se efectuara, ollreceremos algu.n p@rmenor s@mre el ruismo. 5. ° C0nspiraDi6n en Bulacan. Gonsejo de guerra de oficiales genM"ales. Mas tropas eu;pedicion(Jfrias. Caba!l'los de la ¡ A!ustrwlia. -En 13ulacatn comtifrnaba la agitac,jom a p:,esa,r 0:e f(i) castigada (JU'e velil:fa sieado la veoeldiia de los tagal@s. En los u.lHm@s dias del mes de D,iciembre hicieronse important.es prjsfoliles de vecililos pudfolil1tes, aboga(l}@s de l'a cabeeera y ]llP@p:,ietiaiDi@s elil la m,isma; !ft1er(i)n: l@s principales, entre l(i)S detenidos, Aguado Valen-
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til'll, Ambrosio Delgado y SilviM Catil'ldig. En v;a,rios puel:i>los de la misma :provi,li1cia se efecttHlit'Olil otras detenci0Nes. 'E1il Mafol(i)s, las de Luis Reyes, Ga!himo TaJ.i})t0co, Pcmciam(i) ,'iffo)lilgs0n y if>ear0 Santiag0, siend(i) 'tamoien aiprehel'lilid.os Jos jl!leces de paz de Bairasoa1m, ipa0n.Tu,;mg y Ffagonoy, co0 otiros v;ecin(i)S de Meyca1ua, ya,n, Mari'la(i) y Polo princi.pailmernte. La nueva eomsD¡ilraei<!m. urdida en la cabeceFa de la ,r0vincia, ,,p m d,i@ m0tiv0 a las prisi(i)'IHils a qmie acabamos de almli<r, era ta:N viUa,ma, eual 4m t(i)(i}(i)s los lugares d:e1 Arnh41pielag(i) en. q:u.e se 'traim6, y tan traitfora y, sotapa,da, cua,nto q,ue }(i)S ~ue en eUa estaban e0mprometidos com(i) jefes, lhali>ian asistido a 1ml!l bam.quete dad(i) eN h@l'lo,r del Sr. Lopez Arteaga, ascendid0 a ~enieDte e@rolilel, y que ejeroia tam.hMB en at11ueH0s dias el , carg0 de gobemad(i)r civil de fa provincia. IDesde el lrugair del barnquete aludlid(i), sa~ieron }(i)s ai1reeto11es de
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la tat c@t11t1ra a celebrar una j1mta del Catipunan, en el cual ya babian aeoil'dad@ el as@Sinat& del Sr. Lopez Arteaga, del P. Valdes, cura parroco, y: de los demas espaiioles de la cabecera y de todos los de la provincia, liJtle asi estaba concertado en el imfame plan. Era esta la tercera averiguada intentona que fraguaron los conspiradores de -Bl!llacan, los cuales venian auxiliando con todo genero de recursos a los rnbeldes en armas. Se nombr6 para la formaci6n de sumaria al juez instructor D. Francisco Pintad(!), mistinguido comandaate cle ingeoieros, quien actu6 tan :rapicl'a corno acertadamen te . Mas de 80 prisiones se hicieron de sujetos cle viso y sig1Jificaci6n, figurarnio entre, ellos dos bijos del capitaa mnlilicipat y a,lgu:Jil te}egraista, con otros pr incipales y propietarios , segttlil .heiilil os olfoh.o, Cile aql'l.ella cabecera, que contaba con un maudo ci-
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vil tan prestigios0 y con un.a administraci6n parro(!Juial a cargo de un .kaile, Fr . Francisco Pernz, v:erclader0 dechado de vi.rtudes, entre las que resplandecia la atenci6n, protecci6n y am.pare a sus felig·reses por modoq'U!e nadie p>odra nega1·. En. la 0rden general de la plaza correspondiente al 30 de Diciemhre se publicaba la siguiente: «Pedida Ji)Or el senor juez instructor cornandante- cl.e la Guardia· civil D. Juan Ga•r cia Aguirre fa i>e1Hii6n t½e consejo · de guerra cle oficiales ge' nerales que ha de ver,y fallar Ia cau:Sa instruida contra el seglincl.o 1ienien he cle la escala cl.e reserva cle infa.nteria D. Benedicto Nijaga, y paisanos Braulio R,i vera, Fausti!Ilo Villa11ruel, FraBCisco L. R(i):xas, Fae,stino Manalac, Luis Villarreal, Ram6n Padilla, Pio Valenzuela, Jose Enco, ose Reyes, Antonio Salazar, Aniceto Avelino, Jose Dizl!>n 1 Moises Sal36
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LA INSURRECGJON
vad@r, l)(i)miDg@ Franco, Numeriano A(i)lri.am.o y Antcmi.@ Lun.a y Novicio, p@r l0s de1it©s de traicion y rebelion, ei Ex:cmo. Sr. Capitan general y en J·efe de este Eje1rcit0 se h.a servido · dis,p@l!1eF <iJ:Ue el re:ferido consejo tenga h1gar el sabaclo 2 de EJilero, a las 8 d(;l fa mafi.aaa, em el cl!lartel <Ile Es1oafia, sie.mdo presidid(2) }')Or el exce-_ lentisiilil1l(i) sefwr gene11al segmnd0 cabo :0. :Euiqtl!le Zappino y Moreno, asisliemd@ a el e<:>Iilit@ voeales l0s exceleH- · Msiilil1l©s seii@lles gen(;}rales de b:rigacla D. F,rarnicis~o 'Gl.izz@ Raooirez, D. Pe~ dro M:a11,-t.imez 6aro!e, [). Ernesto de Agl!limre y Beng(i)a y D. Francisco Galbis x Al!>eli1a, mas l@s sen@11es c@roneles D. Emriq1rn Petlicer y Pascual de P<i>vill y D. Carl@s Reyes Rich., y, em. ao,ncg]i)t@ <il:e Slilp>lentes, 10s de igttal em]jl1e@ D. iFramci.sc@ i\l.(i)sa]es Bacilino y iD. 1Leon. Espiau Mo:i;a, asistiemdo al ac,to, c@m@ asesor, el temiente audif(i)r de prirm.era clase D. Ad@lifo Vall@s:pin@sa.
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»Por la presen,te qtrndam imvitaol.0s al ach> t@d@s fos seiores jeies y 0ficiales ban 00s <!le servici@. »L@ que de (i)fden (!}e S. 'E. se prnMil ca em la gemeral de este die!- para sm I conociroiento y cum]>lirnie[,J.to. -El genemrl jeie <ile E. M. G., Ernes,t0 de Aguirre.»
' sofo la iectura de l0s nombres C0n y apelli!il.os qme eonsigaa la oFden de ·
Ia plaza que ainteceme, se i4ega a c0- ,,. nocil\lil.ie,nt@ dei i:F1Jteres excep'Ci@mal que temia esbe comsejo; iba a j,l!IZgar ~ parte ole fos l))Finci:patles ahltores d,e la p·ro11mganda ;precursora <!le la re'bei6n y, <!le 1@s ffU1e facilitarom lllileol.ios materia!les para llevM'la a cab@. A~ term:inar D:iciembl'e Heg6 el v.ap@·r Sa,'flJ Femand@ c0F1dnoiencl:.0 <i!es<ile . ~a,Fcel0na e'l 8. batat1@n expeclici@llil:ario. Fhleron estas tiropas lfecibidas co'li1 el e11:tusiasl00)0 c0111. €fll.le se 1·ecibfan todas, ailcanzando este et maxilllilUlili1 de imtensidad en la plaza del 0
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LA INSURRECCI 6N
P. Moraga, en la que los vi tores a Espaita, al Ejerci,to y al general Polavieja foeron atr<madores. El batalt6n expedici onario se aloj6 en el cl!l.arte1 de Arn0~eros . .Aguardabanse mas refuerzos: mas de 5.00(;) hombres , que ya venian navegando desde la madre patria, en los vapores Col6n y Magallanes; este ttltimo, 1u1C> de los muchos barcos tip ie la Compa,ni a Trasat1autiea tuvo .q ue adquirir en propieda d 6 a flete, para prestar con admrirao1e oportunidatil !os serviciQS que viene prestando; el Magallanes desplaza siete mil 'lloneladas; mas de 3.000 hombres podfa transljlortar. La Compaiifa di6 ,el man.do de este buque a m10 de sus mas expertos capi:taBes, eua~ es el Sr. D. Jer6nimo Galiana. Continua ba el aumen t@ de recursos tile todo geNevo; neeesitab ase un gll.nado ÂŤile coN<il.iciones para el arrastre de las grarnies piezas de artilleria
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que componfan la bateria expecl.ici0naria; y <:\@m(j) los eaibaHos cl.e Filipinas, attmque vci.untari@sos, solo pueden servi,r, en buena ley de estetica, 1 J)ara la caballeria cl.e los liliptttienses, el senor general Blaliloo en.vio con el objeto de adoiui,rir otr(j)s de mayores brios una comision a fa Al!l.stralia. El capitan de artillerfa Sr. Martinez Pison, y el veterinario Sr. Pestana, la c@nstituia[l y la cumplieron ad.:. mirablemerute, pues tr a1eron a Manila y con ml!ly pequefio coste de acl.quisicitn1 herm.osos ejemplares muy ¡ 'a propiados para el servicio a que se les destinaba. Abscntos se queda, baim los irnilii(j)s C(j)ntempland:o aq1i1ell0s animales cl:e tan erwrmes dimensiones.
G. El Ca,pit&n gmera,l, Marques de Polwvieja, visvta la pla~a qe Caviite y el campammto de 1)aJla1llica,n. - El dignisim0 Capitan general de las islas, acompafiado de sus ayudantes y de 0
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LA INSURRECCI6N
algun jefe del Estado mayor, visit6 el dia :il(!) la: plaza d.e Ca:v.ite y el cam.pamento de Dalahicaa, reconociendo minuciosamente todas las pos1c10nes y detalles de lugar y medios. Sabiamos coo iFrecusables testimol!lios qurn ei Ma:r~ues file P0lavieja b.abia ad~u1rido c@n e1 estudio sobre los planos conocimiento cabal, no s6lo de la comarca insurrecta, sino cle toda la isla de Luz6n, y con las tan rnal!li,fi estas c0ndici0nes que para pereibir tie1.rn e1 entenclilliliento cla1/l!Simo cl.el general Polavieja y su retentiva prodigiosa, segun ya hemos dicho en otras ocasiones, hasta extr~ii.a im:rrnes,i6n causaba oirle describir, !1')1rnh rnUzand0 t(i) mas mim.imo, la historia y geogra.Fia de la regi6n. Lo que el. general Polavieja callaba eran s'lils ca,l culos y plan de campaifl.a q,u.e iba desarvo1lando en la m:isma. N(i) ifl!le, sin embargo, dificil sup0ner, a quien algo atentamente obser-
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v,a:ra el m.ovfanieat@ tile t.r@1i>as p@r el tiene11al en jefe senalad@, ~rue el primer pr(i)posit@ l_l) O,r eshe aeariciado era .aisla.r bien por c@mp:l:eto a t(i)s rebelides de Cavii.te para fr contra en0s, 1en n0 ililter:rumpi'lla acci<i>m, ta,m: pronifl(i) Irn.bi:eran Uegaclo :las foerzas _cal,' cufadas c@Iil gnaD acierto indas@elil sables p(i)r el CapitaD general, Marques de !P@Javieja. i Cruan exaetos y previsores eran }(i)s cafouios . qme s@ibre el numer@ tite s0Mados y medios maiteriales para ven.Ger ta i'lilS'l!lrrec-· ciolil f@rmara et general !P@favieja ! El tiemJll@ · p•r.eseDte hase (meargad@ ya d:e evidemciar.l@; per© j([l!liera :Dios qu.e cl: (JUl.e li<ransca'i'ra iil.(i) lo €1:emMes~ trre eom mas fm,erza ! , El: Ca,riitan ~en.erai i·egreso a Marnila titespues de aq1,1elfa raipi.da mi~ada p@r el ternltida a las p0sici@nes n1aesbras <!le Cav.ite y sas veein.dad.es, sieBdo tambiem. faeil Sl!l[)on,w qu.e . no era11!1 estas el objetiv0 E!lel Mar-q,ues de ~@lavieja pa,r a i.nieiar desde
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LA INSURRECCIO N
ellas la reconq¡uista de la zona caviJefia, sino que, .al reves, seria fundamental en los planes de ataque forrnacfos por e1 Capitan generttl de las islas efectuarlo por las lineas opuestas.
CAPITULO Xl : Continuan detalles de la insurveccion 'y se arguye contra supuestas causas.
d. • Breves refl.exiones acerca de! estado de la r ebeli<i\n taga1a al fin8!lizar · el aii0 d896. 2.' - De la proclama separaMsta ll.allada en Paraiiaque.- 3.' Jj:lementales avgument0s demostra~ivos de su sinraz6n. Derechos civiles y polllicos. Moralidad adminisbrativa. - 4. • Con/ tra la ~njusticia de cargos hechos a las <i\rdenes religiosas. - 5.' Mas ·hip«'ltesis acerca de los planes de! Ca,pitan general, Sr. Mavques de Polavieja.
1. 0
Breves refiexiones acerca del estado de la rebeli6n ta-gala aZ (inalizar el ano de 1896. - El tiempo tram.scurri~ do desde Agosto, en que cestall6 la rel>eli6n de los tagal<'.1s sectal'ios del Catipunan , venia a consbituir ya, al termina,r el a,fl@, triste irFef1'llalille
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LA INSURREQCION
p-rueba de que los indios filipin@s no solil tan generalmet!il'fle se.ncillos cuaJ creiam(i)s auJil aqlile1los que desde ha mocho tiemwo los hrartabamos, sino (IUe, pqr el 00Btrari(;), hay en elfos podia y, terql!ledad invewsimiles. Al terliliJJi'Iilar el afio de 18~@, el aspecto geneual de Ja jnsurecci6n en natla variaTua; pl!les al Ji)ropio tiempo que act1rn1dabam0s medios para combatida, seguia: esta oom irasis-tencia tenaz, fan,t@ en l!os cam,pos ct1.ainto en 1os J!).ob1acil:os; en l@s primeros, y aulilque siem pre fm~se pa!I'a werder, reniam: los rebeldes cont!h1uos combailies ; y en los segundos, Jilerseveraba,r.i :l@s C©l'lSl))iirad@res em: el ejercicio de Slil ernpirioa, absu11da, inhu.mana ' ci1rl!lgia meiilor, hiifientlo 1rlilcisal!])_elil, fie J@s m,u.sculos braquia,les de tantos . ig·m@i·antes tagal@s, c\il'afos l@s li{lle se atiHaff')an M Catipunan, herma,mC!> acl.!l!llltie·rino tle la JLiga Filipifila. Si el Tu:rHtal asesii;Ja1i0 ba.:lilia sid© el tris1le i.nid0 ~e la rebelii6m fagala; si
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el 2 de Septiem bre con feI'oz ensafiamiento lo habian cometid 0 em. Caville en las persom.as de los reli.gii@s@s ql!le adminis traban gran niumero de parroquias , en las de 1os ben.emeritos oficiales de la. G1.rnrdia civil y 'en algl'lnos paisano s; si. en [u.chas p,osterriores yen d4stint@s h1gares b.abianse maitcha do con ig11al crimen, perpetrado contra castilas indefen sos, el mism@ medio salvaje cofil'tinuaban empleaNd.o al terroin.ar el mes de Diciembre, en, cuyo dia ultimo asaltaban en ei camin0 ql!le oonduce desde Bitlacan. a Baligua g, la car['om ata en que iba el p1,1@pietario D. Gabriel Villanuev a, y apodera nd0se los se<liciiosos 1ilel mismo, internaronl@ en' el osque, en el cual se hail.6 d:escl!larizado su cad.aver. Y eso que n.o era fraile, como tamoco lo fueram tantos y tantos espa'oles que d~ igual m@do ShlCHm:ieFon.. No; la insurreccion. tagala era y es
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excfosivalhente com.tra la dominaci©li1 espaili.ola; era y es ei producto (!);e fa pr@pagamda separatista; era y es la expresiofil maitlerial de l<i>s sent~1rni.emt0s de odi.o, transm.Hidos a ;mi.Hares tile tagafos ii)0f Ufi(l)S CUaDfios ~e en.tire e11<i>s extra vi.ados , que :balil venid(') elilga,ili_amdon0s infamemente con su po Utica solapada, · No se pm.ede d!udar aeerca del mnico ea11a:cteF SilJj)araitista de la in.surrecci,@n ac.lmrul' en Fi.i.l!ipinas. L@s tagalos ]0 vienem <ilem0s~Fandi0 con gran snma de hech0s, de l@s cuales, cuan,tos saili>em@s relatam0s, con la escasa fortl!l.,ma !!J!l!I.@ cwadJFa a la peqttefiez <ife lin1estras a]))titmiles; l))ffl'O adernas~ elfos lo Tu.all.il dijcho dalfame•I!1te, · y a confesi@n de :par:te, relevaci6n de prueba. 2: i/j)e, la rpr.oclama separatista hallada en Par:aftaql/1,e. - Jfallose p0r nm.estr@s s0Mad0s, f\ijada elil a~gl!ln<i>s arli>@les de fos alrededores <ile 'Parafiaf!Jll!l.e, lillila p!!(i)©l31ma elil la enal, y baj0 0
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del epigrafe «Hibic sa in(J/11,g Espar,;a,,», deciam literalmemte en versi<fm espa:f.lola: « Salt6 por fin por el Oriente para >1los tagalos, 10b madre Espana!, el >1dia de Ia veogamza y oolio ccmtea,i l>do dura11:1 te 'fires sigl0s en. el piela»go de pen as y desventuras ..... No »puede hablar Filipinas de otras ca»ricias recibidas de Sl!l madre Espa»iia, sino de sus onerosos tributos, »multiples gabelas y pesados main.>idatos <iJ.U.e unc:>s so:bre otros nos ago»bian ..... Nos tiemdes to<fa c'.tase de »lazos, como la contni'buci6n del »alum<brado. Despidese Fflipinas de >>ti, :nosotr0s a qu.ienes has dejacilo hen fa miseria, nos despedimos de ti, >madre sin entraiias. »Adi6s, adios, adios, es nuestra >Uitima desped,icla. »·
3. E lementales argwmw,tos demosrativos de su sin1 az6n. Dereohos 1:ivilcs poUticos. Mora;lidad admin1fistrativa.0
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LA INSURRECCI6N
En toda la sarta de ridiculas in.exacHtudes ql'l'e contiene la proclama a ([Me en el parrafo anterior aludimos y frag1mmt amos, no se ve otra cosa sino la injusticia enorme con que se a,gitan. los co,nspiradores en aquellos ptieblos fiHpil'l(i)S, buscando inutilmen.te a,r gmnentos c0ntra la dominaci6n espafiola. 6De d6Dde los pueden obtener? iDel regimen politico administrativ@? Creeil'!l0s 'basta y so!bra co11 Clilalilto fuemos apuntado paâ&#x20AC;˘ra poder negar en redondo todo pretexto acerca de este punto . Q1!le se compar em l0s derechos civiles y pohlieos de que cilisfrntan mrnstr(i)S indios tilipi@os coll 1os q11e tifmeB los naturales de otras col(i)nias <irnganizadas s6lo en favor de fos etiropeos q11e las poseen, y en las qne se a:Ji)lica11 al indigena sus leyes h isto:rigas y s1!ls primitiv0s codigos, llenos Cile¡ durezas, no atenuadas p(i)r beneficio a,l gnno de la ley distinta
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qu.e en ai;paellos mismos rige para el element o conquistador. Que se compare nuestro regimen politico vigente en Filipilil.as aun con aquellos otros qne rigen colonias por 1 medio de instituciones representativas vn honore, ya que eID. ellas el veto del gobiemo. metropolitico alcanza a todo cuanto en las mismas se legisla, reservando~e al propio tiempo el poder central el n@mbramiento directo del personal para todo cwrgo. ¡En lo economico, l chlal es la oonpucta de Espana en Filip in as? Ni un 'solo producto rnopopoliza nuestra nacion generosa en. sus proviIDcias 1 de Ultramc,\r : esta muy lefos de destinar los mercados c0loniales para la col0caci6n de nuestras pr0ducciones peninsul ares, tan to las del suelo c1.rnnto las de nuestras artes e indust1'ias. Espana no niega a SUS colonias el derecho de pmduci,r articulo,s similares a los de la Madre pat,ria, ni por modo alguno impone
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LA INSURRE(l010N
:reservas para el comercio. Espafia Iol.O ])lercibe en. Filipinas tribtlto alguIlO esriecial para los naturales de aqueHas is1as, siJJl@ qlie, por el contrari@, los HbeFa de aqmellos que en la pen:imsuliJ. se satisface11. Ji}a imp@rhafltie partidpacion en todos los empieos de la Administracion publica a los ir.idigenas, y, segun b.em(i)s dli.eifuo a0teriormeE1.te, hasta por -mita<il miistr_ibuye, efltrn penins1!1lares e iBstilaFes, eli.t algnm ram.o, los destin.(i)s. i., 'Elil qlile C(i)loJJlria pi;acticamenhe g0za la masa de oaturales los derecfu@s de eindaclaflia por ig11al que los e<HHfl!lisrtaellores? ;,, En rlonde la igttaldad d!e ifeF Pe~icl0s 1:111ws y otros por el mismo eodig@~ i.,Como aplica la sabia l11glatern los preceptos constit11tiv@s del sebf gove!f'nment en la Indfa yen la China, posesi01;1.es 111n1:y seme j,antes a las Dt1estras clel Oriente? i,De qme derechos indivi<iltlales d~. k â&#x20AC;˘mtan los malay@s de CaJel!lta y de
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los Estrechos de Mailaca 6 los coolies de Hong-Kong? Y si alguien nos advirtiese que de todos sus dereclil.Gs gozan los babitaliltes de la Nmeva Gales del Sur, ha, briamos de rogarle nGs permitiera uma p11eg1:n;1ta , que seria la de l qll!le numero de representantes de la raza indigena existe alli? La nacion francesa estab1eci6 en Cochinchina diferencias tan substancia,les de legislaciori, com@ las que juzgan al ciudadano frances que ~Hi reside por el CodigG Napoleon, 6 :J.as que fiigurali1 en el propio primitif OCodigo d~ los cochinchhtos para ijuzgan\. estos. TGdas lilttesttas ley~s paFaâ&#x20AC;˘ los indios filipinGs, desde el descHbrimiento y coru.<>rtJista de aâ&#x201A;Źfueillas tierras, stan dotadas de un espiritu lib eral sin preceden:te en paris algumo; y uando, eamin:a~d(i) siempre en el ismo sentido de avance., generoamelilte, los 11emos llevad@ a la uni37
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fica«;\Mm de dereclil.0s, e1los vienen a oar 1n1 v.ergoDzoso salt0 atras, revelalildo l@ hil: eficaz de miestr@s esfaer:Zos en sm 'l_i)'F@. f(i)F gra,a f@ rtuna, la linsurreccion de gram ])laJ1te de 10s tagal(i)s no es fa i111.s1:1rrecciem tJ!e FBipinas. EI presente J.ilil@'vi1miient0 insnrrecci©n.al es exel11siva @bra, pro~ucto u•Iilico de la a,lilil.ibfoion ahi>jada eri 1u1a mocelila de ..,ereThr(i)s perh1vfaa(i)'(i)s por :pasioo tan «ilelezmable, q0e si atenta a la tran(LJl!lili.dad ilil<il'ividl!lal <ile qu.ien la su'.l)m~, C(i)n:mueve y ~iend:e a lilesorgan.iza,r p@r C©'fitagio t@d@s l@s fun<itameot@s s@ciales. Gra:ve y gravisitma es, en c@mcepto 11mestr<il', la imstil.nrecciifm. actiMal en FHi:}lliililas; ;wer@ aJ nn. y. al calll@, desJ)l'l!les tile mn a.n@ <il.ei pervers@ ejemplo @frndd(i) po:r ~©s rebe[iiles (ilel Catipu<nan, la Iilil'ayor parbe d:e fas wrovin«;\ias y diistl'it@s del Arelai'l_i)ieiag0, inch1s0 fa mayoria de fas cil'e Lwzol!I:, vivem. en paz y t ral.il(4)l!l•:Hifolad. Si algun recela
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existe, no es cier-tamemte por ahora , en las p,r(i)vincias di.stanciadas de la capital dei Arclilipielago; es deci•r, eB aqaeHas f•1rnra d.el radio de aoci6m d.e los agitadores ambici0>s0s qv.Je generar0n el movimient0 contra la d.ol!ll-inacion espaii.ola, y clan> esta ,que tai agradable ien6meno expancle el corazoI'l por la esr>eranza de 10 no mu~r diiicil oine lila de ser ha<;Jer oesar la arrnrrnalidad em Filipimas causacl'a por unos euantos secta,rios, que explotan la ignoramcia supina elil las ~apas in.feri,ores de a,quella sociedad ind.:igena, toda de li>ajo nivel, mas ,por @llo mism0 muy digI'la, en tamto ·en cuant0 se manrflemga ft@l a la san-ta cawsa de la Patria, de se't' regida con tocl.a atenci6n y cu.idado, 0freciend01e, c,on ~a inepi;ochabilidad de ftuestros prMederes, ei saludaole Jilraetico e~emplo de qae se eNalrtezca. Es obvio «!Ille habi·e ado @torgado la dominacion. espan.0>la a 1os imdios fiilipinos tod0 cuaN.to pide la moraJ.
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crisfiiain.a, y mas de lo que en huenos principios convenia conceder eri el orden politico y social, para no fomentar causas de desequilibrio perturibador, no puede ha.Harse ni se litaUa, raz6n alguna 6 pretext@ para fa incomprensible actitud de tan gran nurnero de tagalos contra la Metr6poli: no hay atenuante para los calificativos que tal conduota mereee. Tambiem es :bien oierto1 qme no li>asta -lileelarar la vigencia em. un territor,io de un coojunto de disposiciooes suaves, expansivas y justisimas, para que en el se disfrute paz moFal, garanti~ may fija de ia paz materia!, au0que no la 1a11ica, porqae es indispensable la exacta concordaNcia entre aquellas , leyes y la conducta de sus aplicadores. Mucho menor numero de las primeras r,esullfiariailil deficielil.tes, si ]a ouena volunta<il: de l@s segulildos no ofreciesti alguoa vez sol'uciones de
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C(i)ntinuid.ad ])Or c1:ialq:uier lina1e de consideraciem:es jam.as merecedoras de dis<mlpa, Ri Ji)(i)r pereza, Ri po'r , mali-eia, n.i por ignoram.c,ia. ;,A qu.iea i.e 0carre negar e'l ilinportamte ]9apel que jl!lega ea e1 esta:d.o politico soc,i at la roora!lidad ad:ministrati va? ;, Como M ha de ejercer influencia la c0ndt1cta sa,na 6 iasana de los fun.cfonari6s puhlic('js, para e1 concept@ de Pittria <iJUe ban uleteri,er 16s demas? J?or ser asi, cuand.6 alguna vez, en es(i)s 1tlHili1inosos, c@n.stantes, pr@ve1 clrnsfaim@s traibajos qil!le la :i_mmsa i period!istica rea,liza analizando todas las euestiones de in.teres :pubHco, hem.6s vist(i) afirmar qâ&#x20AC;˘lil:e la inmot¡alidad admilnistratwa era una de ias pr-i:acipales ca'.l!lsas generad.oms del separatism(i) e:m: Filipimas, n@s hemgs dolido de nuesbra taa escasa perspicacia, ya que eli1 casiJ treinta aiios que ll(i)S honramos perteneciend.o a la administr.aeiol!l civil de aquel pai,s, no
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hernos JilOdido llegar a tao rotunda absoluta afirmaci6n. ¡ No nos arguye la coocieocia propia de haber faltado en lo mas minimo a lo que reclama el personal decoro, antes todavia, y con tanto imperi0 cual lo pide la ley moral y la escrHa: muchos millares de indios han podido ver y han visto en diferentes comarcas del Archipielago, nuestro proceder sirviendo en. la puM,ica a<dmiiJJilistraci@n; n.o queremos ni .w.edimos ningangenero decontemplaciones _para juzgar la conducta del funcionario del Estado; j usticia estl'icta, la mas severa. Decian nuestros an,lepasacl0s, ponie11dole en el alto sagrado luga,F <iJ:Ue por la indole de sus oficios le corresponde, que todo medico era Minister et interpres naturm. Parodiando la frase, nosotros decimos que cada espan.01 peninsular debe ser en Filipinas un Minister et interpres llispanim, es decir, un ministro, un fiel iuterprete, un re-
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presentante diglilo de [os verdaderGs intereses de 1a Patria, a la cual gl@rifi.ca 6 maacilfa ia c01ildl!lcta de sus ' hij.os. Asi pensarn@s y asi lo .hemos 1 dicho antes de esta 0casi<fm.. Alg,mo I de nuest:vos belilevol@s lectores re' oordaFa en orue termi.Iil0S bablamos, sobre este particulaF extrerno, eN miestro pobre libro 'Bwta;ngas y su provincia, publica<lo em 1895. En UTl folleto interesantisim@ que ~obre las principaZes euesti01ies referentes d nuest1ras prnviJnoias de U.bt1·amarpublicaba 35 alii.os ha el esclarecido ,'D. Vicente Vazlip!lez Ql!lei,p0, auhor<lel primer regfamento por que se rigi6 fa Diirecci~n de iUUFamar, eeatir@ que ali{11el ih@nrad@ funciona.ri(!) dliligi@ durante mucho Hempo, pa,r a gloria de la Administraci6n espafiola; decia ...... «i .• cuesti6n. Aptitud y moralidad de los errvplead0s de Ultramar .Esta cu.es1M1Iil· es muy delfoada if)a11a coasignarla por esc·r ito respecto de los empleados, 110 ya <le un ramo,
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sin0 tile tocl.os los de la Administracion. Solo sobre el terreno y previos iafcmilles biea autorizados, puede decill'se lo Ci_lU!e con vi:ene hacer con. los que lil@ 1lenali1 dehidamente SU!\ 0hligaci.0nes. » A deticiencias de legislacion no pued:elil acbacaL'se ciertam.ente fas liF'ile se observar@lil! en la OQfildtrnta d~ Il(llestros funcimiarios puli>licos de mtramar; J,9ero es qoe nosotros afiad,ime>s, Mme> prgduclo de personal muy sgstenida obseFvacion, que la iamoralidad adrninistrraHva ao ha iJnperado elil Filipin:as jamas por mg«il! o qu:e pueda'0i cl.edttcirse eargos gen.e:ricam1ente colil~r'a. la adminrstraei©n <!l:el Es'liad@. · Si .algtrna imoorreccion en ocasi(!)nes se produj(l) a1lH, foe gene.rralmeate casti-gada eon tQdas las de la · Iey, y al acusado se le pudo ver clnran:te cuatr(!) @ seis meses de cesante, sin. mendigat· eatre q•uienes 1labia,1ll sido su.s C(!)m,paneF@!il um p@co de paa, del cu.al
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carecia en absoluto: no seTia, pues, de gran hulto la frregularid ad por ei cometida, aun. cuan.d@ esta circuns,tancia no la excuJpase_. iQue l)uuionario publico elil iFHipinas arholo fortuna, para consideFar aseguracl.a ' S1!1 suli>sisfieac ia fuera del servi,cio del Estado? Un numero <!ligito hastara <!le . seguro para exr:,resar los cas@s que se hayan presentado de alguna duda, desde cincuenta aflos aca . Cuando el ernpleado penins11l~r en FiHpinas apen.as puede subven.ir a ~as necesi<;l.ades mas elementates de 1a vida practica con los s1rnldos que disirnta, cada dia mas mermados por 1los descuento s, qnebrant@s por giro, v el emorme aumen.to de [os articnios de primera n.ecesidad; cuando el ernpleado de aquella administra cion pub1ica tien.e qn.rn aceptar en muc.Eias ocasiones, sin posible defensa, hasta la Jlil!uerte, puesto qlll'e mieatras n.o lleva tres afi.os ¡ de residencia en el pais no tiene derecb@ a nsar lii~encia
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:fiuera del mismo, a1m cuando este, p0r su acci6n enervad<'>ra y por sru suelo paludico e infectivo, conmueva el organis~o de aquel con fen6menos de una aclimataci6n que jamas logra; cu.ando el _iunciouario d.el Estado, fo11!1e akamza la fortuna de servir kes afi.os su empleo y los detrimentos de salnd le aconsejan repararla viuiendo a los benditos climas de la Madre Patria, apenas pnede optar a tamaiio bemeficio, porq11e son pocos los q,u e euentan con los 506 pesos importe d.e sus pasajes de ida y vuelta; cuando es menester llegar al natural termino de la carrera administrativa y vivir com prndencia (iJtle raye e11 eseasez, para eonseguir economizar el 10 por 100 del sueldo que se disfruta; cuando todo esto y alg<'> mas triste que esto es lo que por todos se ve elittre l@s emplea<!los de Ultramar ge-neralmente, no hay gran raz6a, ni pu.ede h.acerse argumento alguno de la inm@ralidad achacada con tanta
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exageraci@Ill a la adtnil!liis-tracio!ll p(lbl!ica espaifl.ola eB Filipim.as. May0r extelilsil!n~ t<i©ne este mat e,11 fa nati~a disp@sic,icfrn de L@s indi(i)S a,nxi.:1iat·©s de a([trnllas..oticinas tllet EstaG.Q al m©i ro(i}eg en tomo d.e los servicios 'bmr(i)cratic@s d.e detalle, sieJild.o muy di.Meil, s,i '.1!10 imp(i)s,fl:Ille, baHar- 11:lfi med.,io emcaz paL'a que tales sulilaillberm;>s de' ~en <ile colitechar era las me2iqui.Bas, ridiculas, pero cgmsta,n:tes pr@povGi.0Des con que J"ij) efec'lruan, y s!iend(i) asi, corno 1@ es, mas ~ust0 res1i!lta ti.ldar a ~~s misrnos imdigen.as <ii.el deslii.@n@r q1ite s@'fure la admi®.istrac,ion cae, <tu@ di.rigir c@n.tra [@s ernpleaol@s :I!)f@@edeRtes <lle la Peliiinsnfa carg0s, l!J(i)f 1@ generic@s, deSJIIL'Ovistos de t@&(i) fu1ndam©mto. !En r:tlll©S'tr@ pequeiii.0 liifum taim~ien i(:ll!1blicad.@ elil. el aili.0 aclual c@,Iil.' el titull@ «t::(i)l@l'lizacib «de Filipin.as.fa,mii.iFaeioa ~©n.i.lil:sU1J:a1r 1>, c-FeeJiIH)s resttlta bi(m pr,(i)li)ado d.e que :briste su©Fte el cataJ:11'© gastr@-irnt:est-inal,
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la disenteria cr6nica y la anemia consecutiva al paludismo, ademas tile las fiebres pemiciosas, destruyen al.li los vigorosos organismos de los europeos; pevo mas desconsolador todavia que el J?iesgQ corrido por los emplead0s espafioles en aquellas tierras de la Patria, en las que imperan las citadas causas morbosas, es·sufrir la tan generaHzada cuanto err(rnea creencia de lo productiva que es alli , 1a imnoralidad administrativa, :pues mas ql'l·e las l'esiones substanciales del 0rganismo, deben dolerle a-I hombre que se estima aquellas gl'le la injuria y la ca1umnia puedan. <iletermim.ai· s@bre su constitutivo moral. Acontece tambieID. en este asunt© lo que en otros muchos : atribuyese a deficiencias de l.ey lo que exclusivamente consiste en que no se aplique rigorosamente aql'.iellQ que tan por corn:plet0 modQ preceptuad.© esta. , Ha podido alguna vez observarse,
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en efecto, q:,ue 1m fmneion.ario pn'btieo, en mas (i)Casiones l_'l erlieneciet1:te a Fa:m0s de i:aamovflicladl. ·deolaracla, ,aua ~uamd@ ]la<i::e2ica ext,raiIJ.<:>, que a :plarn:tliUas d:e Libre provi.siifla, se aipartase de aa l:imea recllla em el cmnpli. , mien.to <,le S'liIS deberes, e imprnbada materia,Imem1le 1a ialta, pe·r,0 C(i)fl ¥ehemen.tes iaclicios de eH.a, qlile queirnantaron para siernrpre ei J!)ers011iat pr,estigi0 de acqueL, hiriendo 10s de la admi:mistraci@l'l de qilrn form.aha pa;rte, mo se vi6 C(i)nltrnriad@ C(i)N pe:malicl.ad algu111a, :mi aun privad@ de grandes medros en la carre1m €JU@ debio peirder. Estios oasos, p(i),r fod:u-. a, en la admilllistvraci@a 6.Li:pina S(i)Jil. ,. ay poem;;; y si ibien h.an ·clebid0 cal!lsar grave da.fio al iB.<il:ividuo, por m@do algNH es licito, gem€9rali.;,:alildo el coneept(i), desca,r gar st>:bre ti0da: fa admi.nistracion pu.h>Iica l@s clemrnst@s y tfotracci@nes q,ue sfail e@no~imielllt'(i) de l(i)s b.eehos se «ilescargan sobre Io:; fu.rmofom.arios del Estad.0,
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entre los cuales la escasez de sus b.aberes produce victimas a cientos. â&#x20AC;˘ No. Verdadera notoria h1justicia ~s :(ile:nsar y decir qtte la inmoralidad administrativa haya influido, ni en p@co, ni e:n mucho, ni en nada, en la ach!rnl aMrmaiisima sitttacion de Fili pinas .
4. ° Contra la injusticia de ca-rgos hechos a las corporaciones religiosas .Al propio tiempo, algttien ha querido sefialar eomo cimcausa de la ins1,m 1eccion tagala la cond1!lota de los frailes en la admimistracion parroquial y elil el ejercicio d'e las escasi-' simas iuli1Giories poUtico-administrativas qne :ptactican; hase llegado a pedir en este orden reformas que, si se efectuasen, lo Clilal no esperamos, ¼endria:a a tal!\har la sociedad espa:iiola con indelehle taca de ingrata e injusta. A raza S1i1.peri0r ci.u1l la nuestr.i, c@R raz@n @sfentaclora d.e toda. no.bleza
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elil l0s prncederes, no ha cl'e seF p0sili>le ce11s11Farla poF el olvi<ilo 6 mem.osprecio de los servicios qu.e a la d0minacion espafiola en Filipinas y a la civiLizaoi6n y cultara del paâ&#x20AC;˘is -ban prestado fas CClrporaciones reiigiosas. No nos falrtaba ' mas simo qu.e, blasonando de hidalgos, cayeramos en el e1rnrme delito de pagar con mal el bien durante mas de trescientos afios recibidCl. No ~ememos ql!le tal sucecla, 10 repetimos; pero imp@rta a nuestra pr0~ia conciencia dejar bien sentado, _ aun sirviendo para: poco, aquel concepto por Ll.osotrns mantemido y forimado loco dolente, de qu¡e los carg(i)s dirigid@s co'Iiltra los ~i'ailes, ni tienen iundamento aJ.guLl.o de :raz6m l))ara hacerlos genericos, ni los han expuesto 1os rebeldes tagalos, ni la insarrecci@n de eshos es eomtra las corporaeiomes religiosas. Alil.i estan los frailes eLl. sus 1.mratos, por completo privados de todo recurso de fuerza ma-
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terial. Han sido algunos victimas del asesina~o y del cruel martirio, es cierto; per@ ien cuanto n.11mero? En igual que el de seglares victimas tambien de ignailes cr:hnenes. Alli estan los frailes en sus curatos baciendo ique? a(!fuello mismo, y cad.a dfa mas, que hacian cuando pocos afi.os ha el distinguido y severo protestant e doctor B@wring visitaba las islas Filipinas, expresand o sus-~ropio s Gonceptos de este mQd@: <1 He encoatrad o bastantes frailes ¡ 01lj¡et@ de especial respeto y afocto, y en reaHdad lo merecian, como guar- . dianes y restat1radGres de la paz de las famili'as y como protectore s de los nifi.0s en sqs estudios, y po:r otra pad'te asocialildo Sl!l S esfuerzos al bien.estar de Sl!lS respectivo s pueblos. iCtut"fil agra<ila3ille es el becho de ver la ju.sticia de tales apreGiaciones expresada honrad'am ente basta por testirnouios de talil~a valia cuales son los de ilustrados historicos adversa-
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rios de nuestrn religion. y de nue~tras costhlmbres! Y i cuan. aflictivo el de que p@r contraposici6n veamos pegado o dudacl.o aquello mismo, reconocido y aplaudid'o entre aquelios, por elementos propios de 1rnestra 'Patria y Religion, de nuestra raza y 'costumbres ! Democratas ardientes; i;epublicanos de historia accidmiltacl.a por las persecurniones de que faeron objeto, el!l consecuencia de la parte activa. que tomaraa en mov-imientos revolucionarios de aun.' no remotas fechas; liberales acerrimos cual a([uel Sr. Vera y Lopez que ~ustamen.te figuro en la po'Iitica patria, despues de permaneeer algmrns afios Jn Filipinas, esci;ibia sus conceptos eerca de los frailes de este modo : ÂŤA LOS PADRES AGl_JSTINOS
ÂťA vosotr0s, s1.wesores de aque>Hos varones ilustres llamados Ur>tdaneta, :Elerrera, Rada, Agttirre, >Gamboa, y tantos otros qiue tan al38
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»tos p1!1.sier0n sus esclarecri.dos nom»JiJres en la l'list(!)11ia sin ejemplo del »descubrimiemtio y p_(i)sesion de esos »rieos archiif!)ielagos: a vos(i)tr@s @s »de<ilic(i) este modesto trabajo. >;Frl!lto de catorne a®-os de estudios »e0onomic0s sociales sobre este f)ais, »11evadlos a cabo a impws©s unica1>men,te del amo>r santo a la :Patria, »quiero iilentifieaflo coa los que »c@mo yo imam: sahlid0 amar y am.am, »ante l@do y s@bre t@do, a: Bl!leslira »madire c@mu.n iffispaiiia. -El .Aut0r.» :B. Pa1lrici@ me la EsMs•t11ra, el J!lrediiecto 0JscfJiH!ll@ <!le Lista y de Lacr@ix; el desterralil@ a Olvera; el prog11esista de 1854, deeia en las Cortes ea lilna mlliy viva discmsi@Ii1 poHtica: «Y vuelV,:@ a FiliJ))ililas: las comunidlades religiosas me recibieroa con mi:a pveocl!lpa€-it!H11 natua:l, dados mis amtMede0tes, y en. 1a primera entrevista estuviNil@s rectiiosos unos de o1wos, y sin. embaFgo yo v@y a' de€-ir a11<!ma qne si presum@ hafuer
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dejado amigos en Filtipinas, es precisamente en las comunidades relig!osas. En un pais casi despoblado, con escas@s medi@s de comu.nica:cion maritima, 1,quienes, sino aquellos l\ombres que pueden hablar en nombre de Dios, seri.an. oq,rpaces de haem¡ q1UJe los indios adoren el nombre de Castilla como ador(J/TI, el nombre de Dins? Ei fraile va a distrit@s don.de no may medico ni Ji>otica ; el frai.le es todo alli ; y va con noble virtud . a socorrer todas las necesidades del im.(i).i@; le ense:ilia a labrar fa tierra; le ' pone en comu.nicacion con el Creado.r ; recibe en sus brazos al nino qu.e nace, y deposita en. tierra e~ cadaver de s1:1 madre. ,;,Que infiuenc'lja quereis sustitumr a esta? No ES POSI~ BtE ENCON'l'RAR NING-UNA.
!
Âť
'El c@,lilsecirnmte democrata, el Hiber 1 acerrimo, honradisimo Ministro t ntas veces, el Sr. Becerra, tenia tal c~mcepto de lo provechosa que era la p eseneia y permanencia de los frai.-
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les en Filipinas, que de una s@la vez, ¡ en vi,ritud de un solo Real decreto por el refrendado, se crearon 65 parroquias en aquellas islas para que las administrasen las corporaciones religiosas, y basta la creact6n de una di@eesis mas en el Sur del Archo.pie. Iago foment6. Muchos testimonios de propios y exti;:afios aJilalog0s a los que preceden. aportariamos a este tema, al liJlile s@i0 aiudiwl'l0s pQrque a estG, y n0 a mas, n0s at1toriza nuestro plan de ser 10 mas breves que podamos. No n.os seria dificil demostrar, concept@ por concepto, la injusticia notoria con (i]itte se b.a procedido por alguien al ataear geaericamente a las corp@raciones religi0sas de Filipinas. A ellas se las acus6 de oponerse por sistema a la il11straci6n de los indigeJ.il:as, cmandQ precisamente los iraiies la h1iciar0Jl J!lOF m@do mas eficaz <!JUe er sefialado por n.uestJla magaanima legislaci6n en su espiritu y letra.
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« Ordenamos que a los indios se les pongan maestros de lengua castella@a, a las que voluntariamente la q,uisie1ren aprender coma les sea de menos molestia y sin costa. » Asi, de este modo, tan justamente calificaclo de fa@tastico e impracticable, por el ilustrado escritor don Vicente Barrantes, d.isponia la ley de Indias la enseiianza en aquellas islas; y como «tal manera de mandar 01Utorizaba a desobedeeer», los frailes de San Agustin tomaron iniciativa en, el asuntQ, y en acuerdo capitulaf def aflo Hi96 clijeron: «Se encari>!a a todos los ministros de indios 1> ue asi como a t0d.0s 10s mucha. i> hos de la escuela se ensefia a leer escribir, se ensefie tambien a b.ai>li>lar nuestira lengua espanoia por 1> a mucha policia y provecho que » e esto se sigu.e. » 1Que mayor prU:eba se qu.iere para e har abajo el cargo sin fuiildamento q, , e se ha dirigido a los frailes pre-
»,
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seNâ&#x20AC;˘taDHil(i)los como enemigos de la ecl!ucaeion! l' c0a ta.m.to cuitJJado c0mo a la dei homlm~, 1lan aitelildido a fa ed1;icaci@n de fa mu.jer i~dfgeDa, mas inteHgente y lanoriosa, mas doeil y compasiva ql!le e1 var@n de aql!lella raza, sapeditado en el seno de la iamilia, por rpm.Dt(i) general, a la inflNeacia que con ju stisim0 m,do de mayor ~al:ia ejerce la ml!l~eF, p(i)seedora de las c11talidâ&#x20AC;˘a:des qme la asigBamos y (iflile 11(!) ha:y 0bservad@r en aqm.elfa . t1<:m,a: esp>aHola' qme no reconozea y . p,rnclarilil:e. Es,injl!l.sticia ,e:morrne sm.ip(i)ner qm~ las e@r,i;io;r;aciorrns reiigi0sas no iil:an. tr~bajac,l(i) ac,tivaNilente wara ed.U<~ar el ptt@M(i) fHipiHiQ; pero mas d.nro es tolav.ii:a que se dirija 6 se haya dirigido e(i).Flilma la:s rnismas el carg0 de ates@rar ri:qmezas. i Qia:g Jasth:na n0 s@a por t@<l10s a,precia<!la Cl!l!at m.erece la n@hilisima actit'l'.ldi de esas c@rp>(!)racio:nes reli1
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giosas, ll)rescrnciando impavidas c@a la 'tranqrnilidael de Sl!l comcieneia y la intima satisfacoion cl.el ibien o'brar, cuanto prod1:1ce contra las mismas la fantasia 6 la rna1a fe , la ignoran.eia o la mali.cia! ' lPor q_lile FH'> preseata.n los frailf~s ;de Filipinas los i11ve11tairios de sus supuestas fort1:1nas? lPor que no exhibe11 las cuentas eon los arrendatairios y coloaos de las haci,mdas que posMn? lPor que n(') muestran en testim.o°ifos notariales 6 dejan a mire inqu.isitiva, sus notas de gastos e ing-resos, paJ'a qu.e q111ien y quieaes quiet an las exami.nen? lf>@r qu.e lilO @fa:ecen esiacl.0 cilemostrati vo com fas el!lentas corrientes eb. ~u Procurncion, de todos y cad.a uno ~e los frailes que hall sido vilmente 1 sesina«a:os, para qu.e se sepa las deuas que estos ten.fan con aq,aelfas dqliliridas? · Es cosa t:riste, del grupo de las in-
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S@,(i)OFtali>les, t@rcer comceptt>s s@bre graves materias, por igaorar el verdiadero C(iHltemido de estas. · S'in em1barg('), a:bi estam1, segulil acaba:mos de dleeir, fas o@rporaoiones re1igiosas de Filipimas sope>Fta'Ildo injinrias de lilt1:es'lir0s enemigos, y dudas por algw,mos de lil©S@tros mismos aee·rea de extFemo c@mo el de que nos ocnpam@s, cuanclo tam semeillo l~s jilll,era dar a todos el mas solemne nrnntis . liF<il'f <ql!l.e no :i;ireseota:n l@s frailes l@s pFesl!l.piaest@s de gastos e ing-res@s (i]!e slils haeiernfas, que solo resultam asH@s de pie6lad, tat@ en Caga]'lilil Cl!lanto eR Min<it@ro, e-n San AL1t0mi@ como em San l@se, tiant@ en ManiJa cl'.laa,t0 en Cavi'te? lQ1:1.e can@m were'ibeJll: l!)OF hectarea en La Lagmia:? ;,F>@r qiue haB.se preferido si:em.pre, TuuscalilO:@las e0Il! anliel0, paira Sl!l al'i.(lillileT, }as fh1cas l!lrbamas col'l "lftle, ~as ayer (\{ll'e h@y, eontaba,n los kaifos ?
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Y cuando tan faeilmente se ;pue~e averiguair todo est@ y mayell1es clesprenclim1ient@s OJtle estos se pme<ilen ,demostrar elil rigor aritmetic@, i,fl quien es Hcito dedr qu.e .hay en Filipinas cu.esti6lil agraria nii opresion ! para ei nattlral desarmllo de fos intereses materiales, creado por las ' i?iorp@rad@liles reli.gi.@sas, emyos bienes han estado siempve a disposici01it dei Estado y al se:rvici@ de la caridad cristiana? Ni aJ Ulil@ Iili a la otra podFaJJl, ;entro de . poco &tender, p@rque la ¡ generosidad, el ca:si a!baad@lil@, q11e reside a ra adrn!inistracion de los escasos ibienes con <qu.e los frailes ,mentan, los lleva a la bamcarrota. Ensanchalil cada vez mas sus oblrigacioliles, cuand0 preeisarnente ven mas rnermad(i)S sl!ls le~f.timos haber,es. En nomhre, p'tles, de los priiltcipios mas elem1n1rtales de la ~usticia, rogam0s a }a opililh!m li)ul>Hca se fii,je en. este asun.t0, para hasa:r, sus apreeia-
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eiones en la realicl.ad cl.el caso, y no tomailildo en, cl!lelilta, segun. l!temos adv;erbici0, l0 que sol@ es prodacto de la igmo.rancia de los hechos, 6 de la malicia, que precisa trastFocados Ji)ara argnmenrtar mrnque sea con. falS(i)S visos de :f1:rn€lameiilf(i). l;>espr(i)vistC> en. ahsollilito de tal lo esta tarnbien. el oarg(i) relativo a la infierve0ci@n del cura prurroco en los as1mtos liJ:l!le se refieren a la administimcion geDerai del :Estado y a Ia local. Si! la experie1;1cia I.ws hace ver de (ll!le s1rnrte la l!lTla y ta otJ;a sieDten laJ rn1erJilila , cle aql!lletla intervenci@n, ipor que se ha de il'lsistir en que n:0 es altam.emte ventajosa? Sin ella, n0> ]!)Ne<ile por FJll(i)d:O alg11m0 marclilar com 11eg1,1Ja11ida<!l aliJ:lilel orga•0ismo p0litico-aclministrativo. iEa <il@nde il@s mecl!i@s de s1:J.stid'uei@lil? l Cl!laJ may01· garantia! e:n aq1rnllos puehf@s para los iatereses de la Patria y los 'f;)l'@f)ie>s «ile cada loealfolad l!Fl'.le de la misma forma parte? 1
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;,, En <iJUe . fechas podria contar la ¡ Adm~nistraciem pub'lica con element0s para ma11terrnr fl.a 011d@nada, indiispensa,b le accion fiiscalizadora de, la adminis traci00 general y local? l Cuaodo estaria form.ado un persomal idoneo, c0mocerllor cle a(l_[meHa vida y eostumbi;es y de aquel!g s dialectos, que sera muy diticil extinguir, dada 1a nativa disposicion (l_[,ue a la ne rien faire tienen aque~l@s iadigeraas? ;,,De donde se obtiene n los re~ur1sos extraqrd inari0s precisos para sufragar i@s am:memtgs de gastos <ifllle 0casionariia la indispen sable interYeJilcion laica que le sucecliese tan.to para lo politico ouanto pa,ra 1o adrninist.rativ@, aim cuam.do esa int.ervencion efil tgdo easo este :Pegu1ada p@iiey especial de caracter expansi vo cual el que respland ece en toda nuestra legislacion cofonia[? N@: no ereem@s facliible fa eonti1ni.acion del asom1>roso pr@greso que
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FHipi•nas viene fogrando en toda s·111erte de intei·eses, si de alli, p0r rudo g0lpe de desdieha, desapareciestiln 1:1,n dia tilsas ordel'l.es re1igiosas q;ue sl!lmimistran, a cada agrnpacion iw.digena, uJ.il ©onstante, ·cristia.no, civiUza,€1:or impulso, un auxilio (!{Ue Rtm :puede ser mas eficaz de· lo que lo es ah.0Fa a la AdministracioJil publica y al Estado, l!lna ruerza moral sustitutiva de la eDorme materiail q111e se precisara' al desap>aFtilCer aquelia, y que sosttiltHilria el <mien p11Mico, sf, Jller0 cl!li<ilando menos, por su propio caraeter, <'ilel @rd.em I!IlOFal pifacipalisim@ para el mariteiil:ilmiem:to de nuestro olomim.i@ con meDor esimwz0 y may~r erucacia, aun1 cmam:l\l:o tillil. la epoca y cirnuostaJJlcias a que la desvemtara Bos 11a traido, y n@ en modo a1guno c·mlpas JilfOJ!)ias, sea forz@so pe•n sar ewa11t inclJispensabTe es la Sl<l.ma de las &@s ele:m,.eliltos de f,1rnrza moral y materia.I, paIm FestableeeF y maHtener ht paz p>MMirca ea a~t1el Arc11:ipiielago.
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5. Mas hip6tesis acerca de los pla._ nes del Capitan general, Marques de Polavieja. -Remos apun.tado poco ha, 0
c0rno prodru~t@ de 'liHJ.estra propia pers@nal obse,r vaci6n, exclusiv amente de nuestra cuenta, q,ue el plan del Gelile11al en jefe del ejerrcHo <l'l.e FiHpinas, Sr. Marques de P@lavieja, se revelaba con claridad Fespecto a cuant@ a la giut~Fra pertenec ia: asegumr mas y mas el cerco de la pr0viacia de Cavite pa,ra alacarla en ope·racfones cont~nua das, siiril ililterruwci<frn, que Jmpidies en al enemig·o reacci©1nes, y siguiend o lineas Ol))Uestas a las imiciadas ea Noviemb11e; destiinar i t@das las fuerzas que era posible a castigar la rebeli6n en las provinci as ' ~iimitrofes, singl!llarmi11mte e·n Bl!llacan, la de may@r agitaoi6n , y guarnecer debidamen.te el resto de ias provililcias : queria el general P0iavieja, no s61© reconqtli star Cavilte, sino lograrlo por modo liJUe no se · irradiase per nimgu.1R ambit@ <ile
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a(\llile1 extenso tenitorio destello a1de tal fooo de luz tetrica, y mientras tant@ Fernmia los medii@s apropia@(i)S, exti-ngu,iJl :l@s brotes de Peli>eldfa 4ue slilr~ian :por las provincias l!lei C(i)!il'forno ÂŤil'e la cle Manila. De mamera q1rn , dejamdo Ji)ara un poc@ mas adelamte las @peraciones s0li>re 'CavHe, cuyo plan. ,.fo ataque aquiilataba cada clia, procuraba con veFtigim@sa actividafd veneer la insnrrecci@n en l@s @tros h1gawes, y asi, 'S(i)sten.iemdo combaites y mas combates, paFa 011rnstras armas vietoriosos siem}!)Fe y tan a<!lmirab1ernente eombiaad'os, cual el de Caearcm @e Sile, <i)]lile se prepa!Fo em 1as ultimas 48 b.0ras del m,es de Diciembre, teTminali>a el ai1io de 1896 em espera de qlil.e, en 10s primer@s meses cl'el act'lila:l fille 1897, quedase clie.finihivamelll.te resl!llellto el pr@bleJi.lilai emtaM,ado p@F la irua,me iniciaiiva de Andres E@â&#x20AC;˘Jili~acio en Ealintayac y s@stel!lido p@r e1 tes@.m de stt emulo Agmiaalgit!IM>
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do, ¡ el cual le sobrepuj6 por mod0 mas terminant e que el qu.e Bonifaci0 usara, para sobrepcmerse a los Basa y a los Arellano. No quevelllos dudar, ni dudamos un instante, que el sefior general Blanoo, ln1a vez poseedor de los recursos de guerra necesados, hubiera logrado el fin qu~ l@s srnpremos intereses de la Patria rec'laman. ; el restablecimiento de la paz publica en Filipinas; pero al foente ya, en la epoca a que nos referimos, del gobierno (!}e las islas el ge.lil.eral P0lavieja, tambien la confianza en. el logJ.10 de aquel fi.lJil po<ilJ,a ser ~ara t@dos 1absoluta. Del general i1ustre que, vencedor en oitm combates, acababa de prestar en veintid6s meses de mando en la . isla d.e Cuba tan se0alados servicios en el orden po1itico 'Y en el econ6mioo ; del Mar.ques de Polavieja, que habia obtenido tal!l.grandes provechos0s resultados contra el
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LA INSURRECCI6N
.ba~d@lerrismo compiejo de la gran A'.utiHa ; del haibil gemeral que habia lil.esl>aratado en Agost(j) <!le 1890 por vez prhnera, y ~1il Oc~ubre de 1891 }')<•W vez seg1.;u1da, los pla.nes bien con@dd0s de Maceo, Crombet y Castifil0, duefios en aque] entonces de todos [0s uecesarios materriales recurs@s para alzarse en armas en el de19artarnelillto OrieN•t at ; <ilel va.teroso ililiciad0.r en Saata Cla.ra y Matauzas de a(]p,rnl saludable cam.bi@ de opini<fln que en la iisla me Culr>a contl!lvo el m0virnnient0 de les ec0n6mico11, p@r virtl!ld de ~@ cual, u.1rn diferencia de 25.259.985 pesos 25 cemtavos, a fav@r de la exp0:rta0i@Iit, vimo el 31 de IDicie!Jlilfu·.11e de t89i a patentizav el gra<!l© de prosperidad ql!le afoanzaba aqueUa g-ram:diosa isla; del esclareci:lil@ l'JMHtarr, de t@da llilcha p0litica atJl)aFtad@, cl!l.iclad0s0, celosisimo admi.n.istFador <!le a<qlilel presttpl!lest0 (!):e 189@, cuyo saildo por si solo revela la wulcritl!l-d c@Jil que pMcedio el
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pePsonal ad~inistrativo , tan frecuente y despiadadal'I!lente censurado en la Gran Antilla, no podia dudarse tampoco, sir10 que el general J:'>olavieja debia imspirar la mas cc,n npleta fe en su gesti6n de todo orden. 1 Muy covta il!le, ~or desgrada para los pa trios h1tereses, la de este getneral ilmstre en el Archipielago magallanieo; pero tan 'brililante, q:iu.e nos apena el becho de que no sea ccmocida en todos sus tinteresaintes detalles, para qm~ la opini6n publica¡ pudiera formar concepto exacto y i:i.bcl.iese a tain admfrable la)))or el tributo que con j1usticia merece. / Dificil obtener mas 4ue cuanto el ~eneral Polavieja a[canzo en cient0 ~eintidos dias de manrlo en Filipi~as. Si inilportante era el Cwrgq q:ue rfcibiera, la Data que a su freate estrmpar puede, . deja un gran sallllo ~ sl:I favor: no hay exlllresio,lil aritmeca que I@ liquide: s6](i) la pablica timacion puede saUsfacer cuanto
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-
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.. ,..
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la 1?atf.ria debe al esclarecid0 soldado ,~rte con tanto a,derto la sirvio. Nosotros venimos, en estas desperjeiiadas paginas, sintetizandci la gesti<fm del gen.era! Polavieja, y aun ha<1.iendolo tan pobremente cual nos es dad0 efoctuarl0 clesde nmestra escasez de condiciones, creemos no ha de ser dlifieil, poF lo que hemos escrito, ql!le _el lector pueda apreciar de qm:e St'terte el general Polavieja persiguio la insurreccion tagala orgaNizanolo co1ttmBas, y trazando a las rnismas para operar por ,grupos 6 aisladas los calrnl.~lilos que habfan de seguir por las tierras altas y bajas y J!l0F las aguas <ilel mar y de los rios, coli1tra los rebeldes de B11lacan y de Moron., cle Bataan y Nueva-Ecija , de La Lag1ma y 13alangas .. Por los textos titerales de algamas p0cas disposiciones que hemos traascrito podra awrecirurse el valor y significacion de la paNta por el general Polavieja trazada a 10 poliitico-adminis-
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trativo; el impuiso ql!l.e saludablemente imprimi6 a la justicia militar, a la organ,izaci0n de las flilerzas wohmtarias moviJlizadas, a la imstrucciou de aquellos valieutes soldados ~ue lil.0S enviaba la Madre patria, silil tiener t:iempo para queen eUa a)i)Teft«diesen el manejo del fusil; creemos l!JUe con lo que hemos dicho, podra apreciarse cua:nto 'pro~ec'b.0 resulto para la causa de la P&tria de que _el general Polavieja enviase preventivamente fuerzas a Cagayan y a IloCOf- Norte, a M1ndoro y a Tayabas; de que ampli.ase e·n sentido muy ptactico lo preceptuado sobre resi[;)~lilsabilid.ad civ:i.l en los deli.tos de i fidencia y rebelion; de la eficacia e la admi.nistracion de aquel ejer~~ito obtuvo con la ci·eaci61il de tarntos 'p@sHos y factorias, de tantais enftrmerias y hospitales fl(i)tanrtes y em t erra firme, con que el general Pol vieja col0c0 el re.rnedio al lado rn,isde la necesidad.
j°
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SeEtimos mucho no disponer de mas espacio para detallar todos los anteriores conceptos referentes a la gestion del general Polavieja; nos ÂĽem@s constreii~dos a sintetizar tanto los heclil.os, que solo en forma de indliee, segum. hemos afirm.ado y segun se observa, podemos comprend'er en estas pagim.as los principales â&#x20AC;˘ de la epoca tie que nos o~lilpamos.
CAPfTULO XII Prillcipales acaecimientos desde L' de Enero 1 de !l.897 hasta la terminacion del mando del general Polavieja. 11.' C11car0n de Sile.-2.' Acerca de! pia,n de los rebeldes para el ataque de Manila y fuerza de Santiago especialmente. -3." Operaciones sobre fPasig y Taguig. - 4,. â&#x20AC;˘ Muchos encuen tiios y combates en el mes de Enero. - 5.' Opera'iienes en Feb_reFe, MRFzo y primera quincena de Abr,tl. Preparabivos -pa,ra el ataque de la provincia de Cavite. Nueva erganizaci6n de! ejercito de oper,aciones. - 6.' Instrucciones dadas p0r el General en jefe. - J.' El General eni jefe sale a eperil.ciones. l:nicio de l'as mismas. Marcha del general Lachambre hacia en Silang. Combates ¡en Mala<Jlling-ilog Munting-ilog. Toma de Silang. - 8.' Operacienes en e~ras zonas. Toma de Pampl0na. Toma de J;>asmariiias. Toma de Sa.Jitr.an. ~ 9.' Sedici6n en Manila. Operaciones en esta y ot:ras Hneas. -10. Continuan las operaciones de l!I division Liachambr.e. Combates en el Zapete y en P~esa del Molino. Toma de Imus. Terna de Neveleta. Ocupaci6n de Ca-
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v:ite Viejo, Binacayan, Santa Gruz y R0sa1do. Toma de San F1rancis-so de MalaMn. 11. Operaciones en las demas zonas. - d2. Enfer.medad del General en jefe,, exeelenbis~mo Sr. Ma-r ques de Polavieja. ¡ N6mbrase para susUtuirle en el mando de las islas y de su ejercito de openaciones a1 Excmo. Sr. B. Fernando Pr.imo de Rivera, marques de Estella. Nomb11a:miento de Capitan general, gobernador general del Mchipielago, hasta la llegada de~ general Primo de Ri,vera, en favor del iExcmo. $r. iO. Jose 1.acliambre Domcingue2l, tenâ&#x20AC;˘iente gene11al. - 13. Erntrega del mand,o y Tegreso a la ll'endnsula d'el Sr. Ma11ques de Polavieja. - 44. Il11eves eonsideraciones al termina,r el presente tomo.
11. Gacar,0n de S,vle.-Los comi@nzos d.ei aft(l) achiat n@ podialil ser mas 0
gloriosos para 11uestras armas. [El i!l.ia f. 0 de Enero se 1ibr6 1,n1 combat@ <!l.e graJil:&isima i,mpeirta0cia contra ei grn@so de las J!)articlas imsurreotas de Bulaean. 11 general Polavitija, dirigiend@ Ja c~mpcfifl.a eon tanta actividad e0mo aciert@, imprilillia a ias :fuerzas @n operacioaes un mov.-imiento ineesante, con. ei ifim de pacifiiea,r las zoMas separacl.as d!e Cavite
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y caer cil.es-f>ues sobre esha :pr@vililcia,
~@mo es sabido, rtoda en pod.er de los 11ebeldes Enemos la capital. Aju.star.1dose a este pialil, y J!lara cumplimen.~arl@, el gen.eral Rios lil.izo converger en la madrugada del dia 1. de este ~fi@ l.!laCJia ei bl!lgav y siilio de Cacaron. de Siie las fuerzas leales necesari as para li>atfa¡ a las insur11eetas que alli acaro.paban, al amparo de defonsas que se habian construid@, y de las naturales g:ue aquel terreno le~ @frecia. Cacar6n cil..e Sile es el punto mas centrieo en. 'la provincia de Ih1lacalil que presemta mejores cpndiciones para 1¡efugio de los que ~u.yen de la persecmci(m de 1~ justiqia . Sohre :una meseta (l_fue dom1na ra dosta d.e la bahia de Manila, ea l!lna ~amificacion de la gralil cordi:rtera de l~s Cai:aballos orienrtales, en la parte ~~ esta q1:1e en Um.ea recta va cil.escil.e : igaa a Angat, y en jurisdiccion. de site pueUo, al.ii, al lacl0 de Caca1r6:n e Bustos, esta Cacaron de Sile. An0
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tes de pemetrar en los m011tes vecin@s de ·1a Sierra «il:e Angat, abNodan.tes em, maderas jj)Teeiosas, se encuentran por t0dos lad(!)s indicios <1!.e ia rit')!l!l.eza lil'e aquel S'tl0s1:ieto: sin excava,r pr0fl!llilda'lililenle se halla el hieFr@, y enitre el la piedra i:m.an, la pizarra y el cobre ; sim explotaei6n existelil tam.,bielil ca:rb@liles mioerales y gramdies canteras de piedra 1\ima y de welllernal; l'tm gran d@nativ;© Ille la nat111mteza, del cual ei arte y Ia industi·iia paira nada se aJim>vecifu.an. Ca~ ·<ilaTon d.e Sife es l!!D wecp:iei1io p@blado. Jllem;iif.anse alii keeueliltem.en:t.e grandes masas de rebehles: 5.000 de est@s @ct1pall>ar1 aql!l.et lugar cuarenta y ocb(i) horas aD•tes <ile la brinante aeci@!lil: de gl!lerua que a il:a ligera _relatam@s. Se libr6 e@Dtra mas de 3.006, pOFl!Jlfle, descolilfi:aol.os ~e si mismos, pl!llddeFon escapar tliiH>s 2.000, aump:ie fi(i) s.il0 ser IDaH<llos f)Or 'l!lil'l.a 4e las @olmmnas li_ljtte eomm-iRadas operaron. 1a distr,il.\rneicbD de es-bas cofarum-
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Bas, hecha por el gem.eral Rios, fue muy ha,biL Con el fiin de qae el enetnigo no sospecb.ase el plan de ret@n@entrar liluestras faerzas S(i)@re Cacar6n , sim.o que, ai reves, pudieua creer p or la diseminaci6n, de las misbas, la inexistencia de taJ ptam, cl!.ividi6 em cinco columnas las f.lllerzas '<lestinadas al m©vimiel)lto envolven'te de qrue sg trat a. Estas colmnmas las mandaban el comandante Olag ue•r Felii1, (([Ue con 25@ 11.abia de OJ?erar el) los Hmites de la provimcia dg Ma• d1;1rante d0s con anterioridad ntla • I ViHa161il y el corone1 dlias; el 'li@i@ilie hterzas casi con Sarthou oornandm1te ·~uafos, elil PiRag y Sa11 Migll el de ayumo en direcci6a @J?uesta a Caar6n; el ten..ie1, te coronel L. Artea~ «>·a soh:re Ilagemog y PaornbO'lag tamien a distancia cllel verdadero objelV(i), y el capiM..n C1u1d 4ro y Giron, 1J.e coR 15()) hombres se siltlla:ria en a loma de S.a nt iago. Asi las J(!)er.:.
r' f.
se dispaso que al amaneoer ~el
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1. de Enero emprendieran marcha rapida sobre Cacar6n de SiJe, y asi se efectao, acudiendo a tal 1ugar la columna Arteaga, pasando por Bunsuran y Pandi; la de Olaguer por Macasanag-sapa y Pulang-sapa; la d0 Sartbou, p<:w Cu.pang y Masagana; la de Villalon, por Niogan y Paliquit; la de Cundaro por Aagat: esta habia_' de guardar CQRtaoto por sn izql!lierda con la de Olaguer Feliu. A las nrnwe en punto de la maiiana, hora rnarcada JilŠf el general Rios para el co'hlienzo de la acci6n, Oiaguer Feliu Ilego a distancia de 2 kilometros de las posiciones e¾emigas en Cacar@n de Sile; despleg6 ea or.den de combate dos compafiias; y pomiendose el jefe de la columna a la cabeza 'de otra compailifa en reserva, rnarcho esta i1merza sin hacer f,nego, y despreciando el inu.til qme el enemii¡o le hacia a 800 metros de distan~ia, 1lasita <Jl!le se coloco a 300 metFos d0 u na obra cerrada con parape0
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tos de tier1'a y pielilras, y aislada po.r fosos nwtu['ales constituidos por baa.-rancos qtte la hacian. de muy d.ificil acceso: desde la expresada distancia lo rompi6 nutrido y avanzando . Ademas de la obra de defe1:1sa liJNe cita1mos, y de1i1Jtro de ella, hahia un Fe-, ducto de ]_l)iedra apilada y un gran ¡ camarin: muchas trincherns tupidas de rebeldes y cubiertas con haces de paja para su di.sim1i1lo, dom.inaban ei terren@ i.n.mediato, prestanao gran proteccion a sus defeasores, y todos estos obstaculos estaban acumulados sobre los frentes de ataque de la eolumna Olagu~r Felii. Mas¡ de una ~ora sostnvo esta vi!visimo f1Ueg@, l~granao acaHar el d.ei en.emigo; pero bontinuandolo ios nuestros y a la bar oneta, por los angullos de izquierda derecha de aquellas formidahles , osicfones, se asalt6 la g1'ao cotta: . n tal instante mlilri@ g1oriosamente 1teniente'D . Luis Sa!ilz EIUielilil, qui.en t inutos antes Dabia ya sido herido
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de un balazo. El enemigo se pronunci6 en h11ida por el flanco derecho de la columna, pero dos medias compailifas Ie coFtaron la retirada. Dueiios los nuestros de la expresada cotta, en el im.cen.dio que se produjo ea et carnarin q:ue hemos dicho habia en el centro de ella perecieron abrasados mas de i@(i) re1>eldes: -en estos mismos momentos, lleg6 al siLio del combate la colt1mma L. Arteaga; unfofas Jas faerzas de este c@n las de Olaguer, contiouaron persiguiendo al enemigo. Ocul1io mocha parte de este en otr@s varfos atrincheramientos, cuando se vi6 descuhierto atac6' a 1rnestras ftlerzas con fuego de fl!lsileria y con arma blanca; mas dominando las columnas la exl!)resaâ&#x201A;Ź1a l@liiila, FJl!l<il!ieron 1os rebeldes bacernos muy pocas bajas en aqm.ella ocasi6n, miemti-as que, terminaclo el combate, se coDtarQR de 70 a 80 cadaveres de iRsurrectos e.n cacla una <ile las tnincheras, y
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sembrado de ellos el campo vecino: iO(i) ta·jas hicieron a,l enemigo en. tan memorabl e jornada las tro;pas de Olaguer; n.o men0s de 30(1) las ·de Arteaga; corno quiera (lUe el movimiento eavolvent e result6 cornpleto, la coh1mna Sarthou les hizo 2(i)Q 'tajas mas, habiendo todavfa aumentado el milmero de e1las con 36 rn•l!lertos que hicieron a los rebeldes diispersos las columnas del teJilien~e coronel Villalon y del capitan Cwndaro. Nuestras sensibles perdidas fuernn: el teniente Saaz Huelfm, del 6. de ckzad0res, y·24 ind.ividoos de tropa muer-bos; el tenieJilte Valdeloisa y 75 d.e tropa heridos. Hecho glorioso: t0dos los jefes de columna, todos los f 1foia1es y tropa, fue:von en1t11siastapiente recomendados p0r el geEJ.eral ios al Geaerat en jefe. 0
2. Ac,wca del plan de los rebeldes [ ara el ataque de Manila y fuerza de · antiago especialmente. - Los reteldes 0
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:no abandonaban s11 manifiesto propositQ de eaer sobre Manila: era este Sl!l constaate desideratwm desde que en los antros del Catipunan el herrnano Dimar(l!lJasan haJ;iia convencido a los asociados de lo util que les era, al alzaJ,'se en armas, entablar lacha simultanea por dentro y por fuera de la capital: Los conspiradores detallaron tan mi:ntlciosamente su plan para aE)oderarse de Manila, que con anticipaci6n. a[ mes d.e AgQsto ha~ biam acordado enviar ocho individuos al Japoi;i. con el fin de que .se instruyesen en el preciso termino de un :mes en el manejo de los canones, prQ(mrar adql!lirir algun@s de pequeno calibre y twmducirlos a los montes de San Mateo, en clonde aquellos indios que vinieran del Jap6n ya instrnfolos ensenarian a otros. A mas llegama el dese6> del Catipunan respecto a poder disponer de personal que p1:1cliera dirigir artiUeria: en la propQsici6n a que nos referimos, y
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que en aq1rnl in.fern.al centrn se discu ti6, se advertia, para en el caso d.e que 1ilO f1rnse facil a fos ti1ipinos que i;e designasen a1pren.der la insitrucci6n de artilleria, se proeurase con~rata:r japoneses practicos en la m:i.s!ma, y ([Ue est(i)s acl!ldieseID. a las islas para Jilropagar C(i)Il mas tiempo su enseiianza en el lugar mencionado eD los montes cl.e San l\fate@, en cuyas intrincadas laberinticas espesuras halla:ban escondrij0 seguro las arm.as y pertFechos de g¡uena (,JUe apum111l,aran. :EN Ia distrilmci6n cl.e est0s medios habia de tenerse gran ouidado en reservar los precisos para ia gente d.e San Juan del Mbnte, Mandaloyan y Pasig, ~orque estos pueblos C(i)Il sus barr10s anexos Eoadyuvarian. eficazmente al esflll.er[60 de los que asaitasen Manila: 30(i) ~ombres de [0s mas list@s y. m:anda, os por cine(!) jefes irian em lo geneal de la con1ilagraci6n clerecharnelile al ataque dtl la fo.erza cl.e Sa,ntia~0,
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y se designaban los sitios en que desde [a eateG.lra1 11.abian de ocupar los rebeldes como fiueFza de sosten pa,ra los que acometian la Maestranza. Se dispuso alquilar cuantas casas pudieran et1 las vecindades de este esta,b lecimiento pair.a estaF preparados al mejor exit0. En apoyo de ios 300 hombres que habfan de ir contra la fuerza de Santiago, otros 300 se situarian en cascos irente a Santa ClaFa; :t.5M Febeldes armados coii_bol<,>s y cle los procedentes de Saa Mateo y 1.@00 mas de los de San Juan del Monte y Mandalo,yan, acudirian a la Maestra,nza :para sacar armas y distrihuirias al grueso de las partidas q1rn velildrian <1lesde t@dos ios pueblos limitr0fes, ma,tando a su paso a todos las espanoles. Tal era muy ligeramente analizacl.o y s6lo en lo relativo a la tom.a de Manila el c1.1@qmis trazado eni la proposicion cl.el herIDamo Dimiarayasan y apr<,>bado por el Catipunan. Como
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complemento, se acordaba que en el caso de no poder verificarse la toma de Manila y s'tls aFraioales por el medio propuesto, se lograse aproveqhaod0se de la fiesta cl.e San Andres 6 de la del Corpus pam la matanza de l'os casti las. Manila e:ra la aspi:racion. de los catipunados. 3. Opemciones sabre Pasig y Ta guig.-En fos c"omienzos del presente afio se notaba ml'lcho movimiento en los pueblos de las , margenes del Pasig y¡ del interior en aquel1as z01il.as. Se ordeh6 el dia 1. la salida de tres c0mpafiias de in'fan:teria de marina hacia el rn-1eblo de Pasig; fuerds del escuadron peninsular c@n su c1mandante Ugarte a ¡1a cabeza sost~vieron dos b.oras y media de fuego p:jtra llegar ; el general Galbis fue en demaada de aquel pHeblo c0n. una cqmpafiia ; a Pasig tambien acudia el e~pitan Cabrera con. 80 hombres <ilesd] Cainta y otras fuerzas ; el destaca0
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IDem.,to de San Pe<!Iro Macati recibi6 refuerzo <!le 150 soldados al mando d.el capitan Samaniego; el capitan Ramos cu!i>tra el puente Malibay. La ftlerza de San Juan del Monte se aumentaba con una compafiia del 5. de cazadm,-es. EL cor<lmel Rtliz Sarralde acudi6 desde Malabong a la lin.ea Gmadalupe. La rnarcha del general Galbis fug muy accidentada : al llega.r al. sitio d'e Bamb'ang p0r el rio Pasig, hallo tupidas de re0eldes las dos orillas y obstruido el paso c@n €asc0s ; vi(lse alLi el general · Galbis obligad0 a sostene·r nutrido fuego com. grandes grnpos; pero a pesar de t@dQ, a fas d@ce de la noche logr6 1>asar y seg\NiF a Muntili1\npa, eD donde, racionado y aurnentando su fuerza hasta 190 hombres, volvi6 a Boca·do, deseli}j).il!)arean.d0 el d{a 2 en Napindan, atravesando Ji)Or entre 4.000 hombres, al man.do de Aguinaldo, y t0mando a la bayorn.eta trincheras imp0rtalilhes, pero n0 defendidas con 0
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tenacidad por l@s rebeldes , porqm~ se vieron amenazad(i)s en fa v@tagl!larqia por el c0roael _iffi.uiz Sarralde; Hego a Pasig, 1:iaitiiendo cal!lsaclo mochas bajas al enemig@, y Sl!lfriendo llas ftlerzas d:e 6 aibis ias bajas de 3 '1-uert?s, 1'1. hecid0s y 21 comtus0s, Cuancl.'o el gel!leral Ga'lbis lleg·o a f>asig, el p1,1e'blo estaba arcliernfo; el destacam@nto habia s111frid0 en ll!lcha tenima 6 muert@s, 2 heridos y 15 comtusos; per@ habia l0grado 1,a dispevsi@I'l dei efilemig,@. La c@lumna ,Ufert, qae _ desde Bosoboso veaia Fapidamente a Pasig', batio ios i;~be1<iles elfl la posici(m por est0s elegida, f~~n:te a l@s vad'@s cle Pateros y de Malawad-na-iba1!o ( piedrn a,n clita), eB dbmde babian_ cons'.truido trrinclileras .· h~sta Taglilig, y al lado opuesto seg~iaR los atrioncheramieni0s hasta ~l!lntinllilpa ( p@(]lilefia tief ra ). L'9s r ~beides aHi Hega(ilos fle Cavit e, al v~rse ameaazados J)O.r un IDQvim•ieri-
t ••wive"'- de la columna, Iwy<>-
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roa hacia el Sur, continuando Albert su marcba: a Patel'os y a Pasig. En Pateros habia estado Emilio Aguinaldo c0n el fin, segan el mismo aseguro, de conferenciar co11 Llanera. Lo que hmbo fue un plan urdido ql!le el Capita.a general averiiuo man.dando prendev a sus dos principales autores. QueriaD. cegar el Pasig. Se les frustr6 mna vez mas el proyecto de dar ur:Ji golpe sobre Ma~ nila, evitado por las pFeca:uciones ad0ptadas por el Capitan general. <iJ:Ue eran aplal!ldicl:isimas. 4. Muclios encuentrns y combates en el mes de Enero. - La actividad de nuestras tr@pas se @pon.ia admira~ blemente a>l vertigin(;)so movimiento que para entoFpecer 6 evitar las operaciones sobve la provi.ncia de Cavite emprendieron l0s rebeldes de ias demas pwviRcias limitrofes. Las i:nstnrncion.es de~ Capitan general a miest11as tropas se cumplimeRtaban 0
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a satisfaccion. EB la primera quiID.cena de EMro clecaia ya visibiemeBte el animo de l@s insurrectos; en Bulacan, despues del gtan reves que suifrieron en Cacaron de Sile, se presen•taban m.ue-b.os a iID.dulto, y las parti.1d as que merm.adas continuaban ·en e'l camp0 no tenian _un iBstante de rep@so. La que ataco en tales dias Palungubat y Santor file li>atida por completo p(i)r las fuerzas dei general Rios, las cuaies destruyer(i)n ademas los barrios. rebeldes· de Quingua y de Brigaa, batiendo ademas p0co des1;mes Ufl grupo importante in.depen<il.iemhe de las de Llanera, que apauef i@ p0r Bongabon y Pinagcandaba. Las columID.as Villal6n-Oyarzabal, de ia misma brigada Rios, desalojaron ~e importantes posiciones en la sierra de Sibul. a Llanera, baciend0ie pmchas bajas. iLa pa'L'li<'l:a re1lelde de 6jica fue tambien batida por la cowmna de Paombong, qwe en bancas
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. cayo al amanecer S(i)bre 1Iagon0y, y rnl!lrielildo en el combaite el cabecilfa pam,paL1go Mamiel Viray. La de ,Qaligl!lag sorpre11di:6 al imemigo en :m©oga-mayor y le hiz(i) 47, muert0s. Se premdi6 al genecal maestro Eusebi© Roqjiie, al cHal se le forrno jHicio ~ -S'lilmarisimo, siendo fusilado en la cabecera de la provincia (Bulacan). Esta imp0rta11 tiisima captura hiz<illa el teBie·ote coroMl Villal6n, el cnal, COiilt>cido el fueeb© ea la Peninsula, despl!l@S de haber sldo folicitado por el General en j,efe, recihi6 igua1 premi<il de S. M. fa :Reiina y del Min.istro d@ la Glil:erra. Afacada fo estaei{rn d:e Polo, sulifieron los rebeld:es (l}uo easHgo, y eD Hn enc1rnmtr(i) en la prime1ra zcma, entre fos muertos que se hieiero1il ail · eL1emigo se :liiallo el cadaver del caTueciHa Ll!lcas Namm1ti. C@n la generosa iUJtervenciolili del Clilra pat'foco se admittiercm. 44 presentad'<ils en l3l!11aea1L1.
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Como quiera que despues del gralil ¢xito obteai.do en las operaciones del Pasig y Taguig era faci.l C(im ocer los in.te1wtos del e11emigo para entrar en La Laguna y p0r el Oes'lie de Baitaogas, las fuerzas de la divisien Laphambre ejercieroli1 la mas pv@'Vecbosa vigilancia sobre aquellas lineas, emcomeacl.acitas a las eoimnnas me iBifian y del Bafiadero, com las de LianTuy-Balayan-Ca[aca. El general .fa~amillo fortaleci0 grandement e la lil'· nea del Pamsipit. de pueli>lo el /AmeBazado de nuev;) Santa Rosa por los !i.nsuFrect0s, el coronel Zabala, de fa brigada Cordel, lo salv,0, acmd!i.endo desde Bi.· 1 · maci.on y operan.cl @ en comb" maag on la columma de Santo Dornimgo, e Tu.icieron al en.emigo bastantes baj s: nosotros tuvimos siete heddos . . 1 general GaB'lis y el comandante lbert saliendo de Mariqui-na impi~ · ·erom Ia ma/cha de l.il.Ulil.ileFOsa fuierza i surrecta, haciendola repasar el Za-
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pok Eatre Mali.nta y Noval'iches sosencueEttrro. CON 10s rebeldes, a qailenes 1>ati6 y dispe1's6 et comandam.-te Carpio. Baqae1·0 les hizo eJ.il Magallom 2(i) bajas, entre eLlas 1m cahec-ilia. Olagaer, reconiendo ABgat, les him 47 ml'lert©s, arrasando ios :fuarrios rebeldes de 'Eabac y NiBga. Fue tambrien destruiclio p©r la columna d.e SaB Miglille1 un eampameJ.ilto tm es·trih>aci@nes de fa sierra: de Si:oul. Baqner©, en d@s dias de operaciones sob>.re :Ptmsalaa, liljzo al enemigo 53 maert@s. En estas misrna$ 'fechas, er gobernaol:©11 (i)ie Tayabas, temiente coronet T@rres, a~re:bte11dli6 ·10 eabecitlas, errtve ellos eT de mas i!mportaNcia, Mar: celin© 'Y©fo.ntim©. La partida q1rn en1wlil en Tiao.lilg se dis0Ivi6 por las cohHon.as perrsegnida. ~n Ia jHrilselicci6n (ile !San Jua.n de Ea-taiJ!l_gas, y p©.r fa c@hl-1illlllila de aquel iugar, foe 1la1tida la partida de1 cabecilla CasriUo, y a JilOCo la partida de tuv0
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Batin fue batida y dispersada por el teniente Polo . Los presos que se habian conduci. dG a Marianas con los que am existian, se rebelaron, arnenazando sedamente el ordeiil publico en aquellas 'tierras espafio]i].s tan distantes de Manila. La lucha que para reducirlos se libr6 fue durisima: 90 muertos y 4@ heridos se les hicieron. En esta primera quimcena de Ener0 se creo 1rna Jilaeva Comandancia general para las provincias de CagaJ~lil e Isahela, encomendandose al distingmido coro:nel Caminas. , To<las las provincias del Norte de l,uz6ll enviaron a Manila secciones ~e voluntarios de infanteria y caba. 1qeria, pertfectamente equipados y pertrechados. Al remitir los cle Ilof,Cis-N0rte, el pund0noroso goberna0r civil Sr. La Guardia, teniente caballeria, ofrecio ¡sus oronel ervicios militares, oferta agradecida or el Capitan generat
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E$ta autoridad superior de las islas ce)Iil1linl!lal:'>a pr@pulsand0 las ('lperacfomes, que ya Ro podian ser mas activas, y com,micaba singl!llarmente a Bulacan la nrgencia en batir por complet0 a Llanera, para poder efectuar l!l!na nueva distribmci6n de fuerzas, y dar comie~zo a las operaci@nes sobre Cavite. Asi se ejecutaba, y en la segu!ilda qttincena de Enero, tod@ eran c@mbahes y encuentros, accfom:es y escaramt~zas. El capitaa Boi\tlda ibahla y dispersaba en San Ildefonso la partida de Mendoza, quien pereci6 en e1 encuen:tL'o. Emboscadas de los nuestros en D1,1l'lilayat y P1!1li111ga0, cerca de Calildaba, h icieron muchas ba(jas al enernigo. Fuerza fraccionada def comandante Albert en reconocimiento sobre los montes filulao, Pantayarin y elil el cmso dei rio Nmag~a bati@ y <lispers@ al enemig(i) en Mapalasaâ&#x20AC;˘n y en Sapang. 25 mnertos causaron a los rebeldes los voluntarios y Ja
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Gu.ardia civil de Nueva Ecija en Cabanatuan, y 14 la coiumna de San Miguel en Paliquit. La columna de Angat y la de Alli>ert en el rio de San Mateo ·batian en sus respeotirn s lugares grupos vebeldes, causandoles bastantes bajas, y eran rechazados y batidos los insurrecto s que se presentabam. a la vista de Paraiiaq•lile y ot,ws que en Batangas amenazaba:a a Tu~. La cabaHeria cargo ce.1,1ca ole San Jaan del Monte contra grnpos que acabafua de batir Albert, haciendole~ 21 mlilertos vistos. En operaci@n combinad a con 1os Vf;ihmtari.0s de Macabebe, el capitan .Nngosto ataco y tomo unos atrinche·imieDtos qu.e ios 11e,beldes :fuabian. echo entre Angat y Nozaga,ray. Las o eraciones eran. tan decisi vas por t das partes, <i(Ue el dia 22 de Enero ' el general faFamilfo comunica ba no "trse ya partida alguna en aqlilelfa i . portante zona de Batangas limi-
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trofe c0n Cavite. Barraquer babia aniquilado los insurrectos de Bataan y .z amlDales. A pesar de- (Jlle Llanera conminaba con la aplicaciGn de Ia pena de m1,1erte a Ios que se acogiesen a indulto, las presentaciones eran numerosas , al!lnqu;e seguian l@s liiechos de armas. En la tdtima Seman.a de . este mes en.traron los rebeldes en Maniba11 ( Tayabas) y ea La Paz (Tarlac}: £1i1tlTOR batidos, dejallildo esta partida 53 m.u ertos sobre el camp('), sin que lo:,.s 1rnestros tuvieran mas (!p ;ie 4 beriGlos : querian pasar a Nueva-Eei1 a po:r ri@ Chivo. Los voluntarios de Macabebe batier-on a los rebelf.cles em. T-ibaguin, haci(mdoles 19 ml!lertos ; en Batafilgas el capita.a de Mig¡m:el cilestroz6 l!lID.a partida insur recta el'l el barrio Sampio de Ealayam ; hfzole 80 hajas , dejamdo 23 n1N1ertos aba11d(i)Ilaclos en el campo . El teniente c@ronel Vil1al@n bati6 en B1:1st0s y Bulasaean gran Jilumero
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de insurrecte>s, ape>derandose de su ,camparnento; hecho importan,te [P@r e1 cual, el Ca1pitan geMral pri.mer0, y el Ministro de la Guerra despues, le felicitaron. La columna del capita.Iil Cabanna bati@ a la parvida d el ex g@beFiilade>rciTio MigÂľel, apod.eramdose lile prisi@neros y d@cumentos de hnp@rtancia. La columl'la Orozco bati6 y dispers6 100 rebeldes en Sinifoan y_Cavinti. Con ser mucb.@s l@s hechos d.e armp.s (!{llle acabam.os de ci.taF, no S(!)D tod.os los que se libraron dural'lte el mes de Enero: mas enumeraran .segr, ramente qu i en.es se dediqHen a esCf ibi.r la historia de fa 'ta1m. interesa,n . t~ campaii.a contra la iBsu.rrncci6n ~e los t:agalos; siend.0 asi qMe nos9tivos no hem@s podid@ pvetel'lder ni i:J,retendemos tal empresa, esperamos perd6n de Buestvos lect@res y la signaci.on de est@s iF)ara fo incom.et@ de nuestro&detal'.les.
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5. Operaciones en los meses de Febrero, Marzo y primera quinoena de Abrit. Prepa,rativos pMa el ataque de las posiciones insurrectas en la provincia de Cavite. Nueva organizaci6n del ejercito de operaciones. - Las 6rdenes general@s del 22 de Diciembre y su complementaria de 13 de Eliero, organizaban el ejercito de operaciones en la isla de Luzon, del modo y forma que el General en jefe entendfa colilvenhrnte al mejor servicio; mas antes de dar comienzo a fas opera- ciones de Cavite, que era lo fundamental ya, en el estado de decaimiento en que se hallaba la insurrecci6Iil en ]as piroviricias vecililas, el gemeral Jl>olavieja organizo rnrnvament~ aquel ejertito de la manera que vamos a transcribir, ya que no nos sea posible, doliendonos de ello gramdemente, descFibir c0n la debi<ila pvecisio.m los demas ll1ecfu.0s. 0
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·Oi;ganizaci 6n-deLeje.rcito de ,operaciones en la -isla--de ,Luz6n. IlIY'1S10N Y C©MAJNl!ll\..NOtA G®NEHAL DE [!.A. 'LA.GT!JNA, BAillANGAS Y TAYABAS
Oom~dante geneml. Excm@. Sr. General de divisi6n D. Jose Lachambre .
i Ootnandante de infanteria . .
.
D. Rarfael Lac'hambre .
Ayrudantesde ,campo. )dem ae c.abai1leria ......... D. Jose Ocl,@a.
· Mem ~e inifanterfa .... . .•.. D. Federico Monileverde . . if,effe !!le Es•ta:d@ Mayo·r : '!1.'eEstado Mayor .. . . . .' niente coroneli ..... ... .. . D. iTena,ro Ruiz Jimenez. . ~ O@mandant e .... . ..... . .. . . D. Manuel ·Quin;tero .
Coronel de cabal:1-eria .... . . . D. Le6n Espiau. Idem de arti11!•eria .. . ...... . D. F.ran.cisco Rosales. Idl!em de .ingenier0s .. . .... . i i> . 'Francisco de ,Cas·tiro. Teniente coronel de caballe;ria . . ...... ·•.. . . . •.••• . .. D. Victor Espada. Capitan de ingenieros ..... . ID. Juan T·ej6n.
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Primera ·brigada. Jeje...... . . . . • . . • . Excmo,. S11. Ge,Jilera,l 0.e b1,igada I>. Pedro Corne1. .
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Teniente eoronel de ililfan,Ayudantes de earrvpo.. teria, . . . . . . . . . . ... . . . . . . . D. Jose_Mora Mur . 1 Cap1ta-n d'e iaem ..• .. ...... D. Mariano M;ora Mur. Ofi,cialJJJstadoMayor Ca,pi,tam . .. , ... , . ......•... D. 0ar.los A,lolilso. .hjectos r1, la lJrigada.( Capita!l de ~lilgenieros ...... J) . Ped ro de Anca. ( Coron.el a,e rnfa!il'teria.. . . . . . D. Pedro Zabala, para se,r empleado en mando de fuei;zas. F U EIRZA,S
Batall6n cazadores nums. 1, 2 y 12....... Jnjanter ia......... l'liegimiento,·de ,J.fn:ea nu m. '74, 2.° oa1lall6n. Dos guerriUa,s montadas .
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Completos . fdem.
Segunda 'brigada. Jefe .......... ..... 81·. Gene11a,l de, briga<i.ai I>. Jo.se Marilila Vega. Ayudantes decampo:\ Primer te.n.ientedecabaUeria D. Constantin o Gesem.
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l). Edua•r do Macias.
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Jefe Estado Mayor .. . Comanbnte .•..........•..
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~n1wttc'tiTas-::-Pi' imer te.p..iente de artHler:ia D. Jorge Femimdez Heredia.
Afectos pa1~a mando•I ,Cor.olilei de· i•lilfan,t eria .... ... . D. Vicente Ruiz ,SarPalde. en medias-origadas.'\, Idem de arMil1feria ....... .. . D. Vicente Arizmendi,
· In a'nter.ta
FUERZAS
1Ba•mieros taFlones de cazadores nu,6, y li5 .•••... .• .. . .. Comi;i1
l et0s. · · · · · · · · · · , '.Edell?- ID:1iiliis. 4 y H.. . . . . . . . 4 com1i;iafifas de cada uno. · . Reg1m1en.,to de linea nutn. 73 Un ba,tal'l6n. A1·tvlleria, ........• Idem de plaza............. Un bata116n.. Un.a: gue.rrHla m.onta<fa.
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Tercera brigade. I!:: Jef~ . . ....•.......• Excm.o. Sr. General de brigada D. Nicolas Jaramillo. A d a I Qai;iitan de infanter.ia.. . . • . . D. ¥a.ria,n0 Leena. • YI/,/; antes e campo ..t ·segwn:do -teE"ienite de fdem. . iii),. FeHi;ie Blanco.
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J~fe Bstado ]efayor.. C0man.0.ant e ........... . .. . D. Felesio Agu,i,1ar. En p1idcticas.. .. . • . 0apitan, (il:e i,ng·e:n,ier0s ..... . D. Manue1 GarcfaMora.Jes Coronel de infanterta ..... . D. EmilioG:aliste0, jefe de fa Urn ea. !ile Pa1il:si-pit. A fectos d la .origada. Idem id ..... ! • •••••• • •• • ••• D. Juan Nunez, para mand0 de fuerzas.
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Bata'lll6n eazadores num. 2....... .. . . . :. Idem id. num. 13 . . ......... . .•........ Regimie]!to de lt.nea num. 74 ...... . .. . . Idem id. n:um. 73 . . . . .. ... ........ . .... . Artillerfa ....... . .. ...... , . .... . .... • . , Ingenieros . . . . . . ..... . ....... . ....... .
Dos c0mpa~iad. Completo . Una compafiia. T11es compaiiHas . Una secci6n de montafia. iUna idem de 50 b.ombres; un par·ql!l.e m0vi:k Una guerrilla montada.
Centr0 para apr0visi'o]!ain •ient0, mun.iciones y hospita-1 de esta ,b 1·igada: Taat
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Fuerzas afecta3 al Cuartel gene.ral ~de 8$ia _dlvisio_!i. Regiimien~~ e Fi1'ipi<nas, n iifum. 31 . . . . . . itJR escua0.r6n.
(JaoaZleria...... . .. VoluntaFios m0vHizados de Il ocos Norte Un esc0.a<!l.r6n.
1Guer,riUa montada de Ilocos Sur .. .. . . .
.25 ca'b aUos .
Dos 0bt1ses b. c. de ir5 eentimetF0s. 9_ ceatimetros, b~teria montada . .,fr,tille?·ia ... ,,,, , .. · Seis piezas cl.~1mJ1en, t0 d,e m0,m,t a'li1.a. , ·•O.clho d!e11, ,l/eg, · Cuatuo Witworth. Ul!la compaf1fa de 150, h01:ll,b res (para la primera y seIngenieros .. "· .. . , . , g·iamtla bu,i1g,adiaj. Un parque m6vi l. . . V0l'u.nita1,i0s cl.,e,J Abra.. , .. ........ .. . , , 200 hombres. I d:em de Hocos Sur.. , .. . . . . . . . . . . . . . . . 300 hombres. Idem de Albay.. . . • . . . • .• , . , . , , . . . . 500 hombres.
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'.Elliospiitales <le ca:mpa-ma: 1'00 eamas e,Jil. Taal', r00 ,e,m Calamba, 1100 en Bifiang. Cei;i.tros de racio!)es, muR,i ciones y toda clase de recursos: Taal, Calamba, euartel <le Santo Doming,0 y Bi,f iang.
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Medios ti.e transportes: Media brigada, cuall,tos se puedan i'euniil' en el terri,t@rio de su mando y 600 ehinos.
Brlgada, independiente. Jefe ..............• Ei1,cmo. Sr. General de br>i,g ada r;. Fra,ncisco Galbis. \ Coma,ndante de infamteria .• D. Jose Sanchez Fano. /J.yudantesdecarn,:po.l Capital), de artilleria ........ D. Francisco Sierr,a. OficialEstadoMayor Capitan................... D. Juan Mendez de Vigo. t / Ca.pi tan de· a,ngeni.er@s.. . . . . D. Berna,rd.1,M Cerve'Ma. l ,c A -I'. t ;;•ec os ~ uar e ) Corol!lJel d,e Es·ta:d@ May,,0r... D. Jose Ba·r11aquer. genera•. ·····•· ... x Idem de cabaUerfa ......... :D. Salvador Ar-iz6n. TRO,'A,)
:Batallones de ca:>iadores .I HI· meros 3, 7 y 14.......... . Qompletos. Infanteria......... idem n.ums. 5 y H .. .. ..... . 4: compafiias de Cada UDO. •1T,res gue1111i!llas H1,01:1:tadas,. , Oaballeria • • , • · • · • •( Un escuadrc!i·n ,pen,hrsular.
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Artillpria.. .. ..... •_J)~orteros Mata, dos piezas b, e. de 12.cen:t'...i:netrgs, d0s idem id. de och6 centimetros, cuatro idem de
monitafia, d:0s idem antirreglamentarias, dos idem Kll•U.P acero, die 8 ce•n timetr0s ,(an,tfo:,Feg,~ameuiliaFi,a;;). Ingenieros •... ...... U~a e0mpaMa de 100 h0ml;n,es. Vol~tariosdeinfan•.1· L0si'10ng0s, 500 hombres; de 'la Un,i 6n, 110; de Cagayim, 173; de Isabela, 200. teria............ I, ~ T11a:nsp011tes: Media ,ar.iga<ira.
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COMANDANCIA GENERAL DEi:. CENTRO DE LUZ6N
Comandantegeneral. Excm0 . Sr. Genera,! de brigada D. Diego de los Rios. Ayuda'llltesde campo.'·I P!li•mer ,te:nie,Jil.ite de ,i nfaRteria D. Jm,an Moscos?.
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J:dem rd... . . . • . . . . . . . . . . . . . Jefe de Estad0 Mayor: C0~ mandante . ._..... . ....... listado Mayor...... , Ofi.cial de idem: Ca,pita.n .... A/ecto d la !Yrvgada. ·,0oi,0ne'I de i,n,f anteria .......
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D. MaJil.ue'.1 •Carr1'1ilo.
D. Jose Olaguer. D. F'ernand0 G. Z1'1.luaga. D. Greg0Fi0 Estra•iiia.
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FUERZA.!
Ba:tall'ones de caza0.0res lil,u ms·. 4, 5 y 9',......... 4 c0m:Fafiias de cad!a u.l!lo . I!diem ti•ilrF!).1. S . . . . .. . .•..•....•. , • . . • • . • • ... . . • . . 6 ,e01'.!'l,pai0,fas . Regi,mi.entos clle '1:linea Jil'"Ums. •68 y ·73 . ... .•. . . . . . . ;t compaMa . · Mem nu.1m. 70 y reg·i,mient0 i~fanterfa de ma•r ina num,. 2...... . ................ . . . ............ 2 idell!, COMAN·DANCIA GENBRAL BE MAN,1L.A Y ~fORONG
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Comandantegeneral. Excmo. Sr. Gemera,J clie div,isi6a D. Enrique 'Zappino.
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,~'T'en.ien·t e c0r:0,ru,e ,die, d,rnfan~ • ,te,1,fai ........... : . ....... D. ,fa:i,me Bosch. .&yudantes de campo. Capitan de i:nfan,t eria. . . . . . D. Calixto, G,ranados.
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FUERZA,S
, Batall6n cazadores num. 9.. 4 compafiias. Jnf((lll;teria •• .. . .•.. ' Idem id. num. lO . ... . . . . . . (;0m,pleto. Segu'1'1.a.o li>ata:110:n,, segu,:ndo regimiento. ·infalil•t eria de .mari,n a:ya.eHneanum.70, 3 compaii.ias.
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1------M t i U ~ -~ Reg.imiento de pl11,za.. . . . . . 2 comp11;flfae. Oa/baZZe1·.i'a • ...... ., ••~. Mem de F1,i1)i;i,i as B,ifum. 3L iii esc,l!J,ad,r0,n. Bata,lll0n dnifanteria Volunt&rios de Mani['ll,, Volun.tarios · • · · · · • · El escuadr6n de idem id.
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"Fi,eB:e •ad!em,a,s• 1,a, Gua·vd!i!lJ ·ei1¥iil. v,etera,Ba, la ,G,ua,ra,i ? ciiv,ill de 1Ias d0s ,Jll'0• vincias.,. y en Arti1I1Ie;via ios re<mrsos de la Maestranza. N@'i'!A.. - iEln a•tened10,n a la ,escasez we pers0nail d<e A,dl'!l•i,n iistvacib y San.idad mi,lfi,ta,r, los Comandan,tes g·exrnrales y Jefes de bFigada emp'l-earan en Ios cuarteles ge11erales corresp0ndieBtes .i los 0:ficiales de di.chos cuerpos <que ~e.ng·a·Fl! d.es1ii1n0 el'l. Sl!I!~ ·z0,:0,as <ille ,0pei1ae-i0,I1,es respectivas c0,mipatiMes c0n aque]l'0s caFg0s.
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Ma,n,i'la, 7 ,cl!e Febrer0 de 1897. a, .~
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LA INSURREecI6N
6. lnstrucei0nes dadas por el General en jefe. - N0 es absolutamente indispensable disfrutar la honra de p€lrtenecer, a la gloriosa carrera de las armas para apreciar cuanto significa y vale la tecnica que @rganiza un ejercito y la rrililchedumbFe de cosas qu€l interesa prevenir para el mismo, al hacer la guerra. Ademas de que esto 10 inspira ·el comun sentido, con muy poco que se lea el «Art€l mi1itar», se aprend€l bien. El mariscal de Saxe decia: « La gnerra se hace sin dejar n.ada al acaso, y en esto sobre todo se reconoce la habilidad de un general». Ahgra hien: el general Polavieja 0·rganiz6 el ejevcito cl.e Ll!lz6n y p,reparo las operaciones de Cavite ajustandose, (;lOmo en las demas y en to- , das, a lo promul.gado por la ciencia y sancionado por la practica. Es cla-r0 q:u:e no p@demos C01il 0cer ni cono- · C€lm@s fodas las 6rdenes generales y circHlares que dfotara, ni mucho me0
EN FIDIPlNAS
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JiHi)S las instrncci0nes verbales q,ae diera pa:ra l•a e~eCl!I.Ci@n de SU pfa:n de cam.pal!D!a; :p>er(!) el g1ram. n11iuoo1e,r(!) d'e las que a nuestrn c0Bocimiemto l1egar,0n, p(!)r n11aest110 tesifln_ en bl!lsca:rfas, n©s permitea ha.eer tail amm1a-
<;i0n ..
Aeercabase Ia fecba que aHa ea sas <yalcl!llos h,abia se,J1lafado el gemera,1 P(!)lavieja ;pa,ra el 001iFJ.1i enw de las ia <de operaciomes sohre la iE)r@virn@ Cavite: e11 las r,espectivas z@nas 0peraban las faHlrzas a eUas desliima&as: a lo~ lugares designados paJm <!leposiJt(i)s se c@nducian las mu.ai:cfomes, raciones y material sanH.a,rio c<·n1weaie111tJ~, tod@ ell@ calculado, te.niend.0 en cr enlta: fu_asta @ualql!l.ie r inte~Tl!l Ji)OiGlil temporal. en s·u s lineas de · comunio-i©,'.liles; se cl'etaillaba fuasta el Jill!llill0 e su,s•t ibuir las im.sigmiias <il.e los <!l,ifontes grad©s de [a jerar(fl!lia mlililtair r n otras me·m@s vist0sas, colocadas sobve el hombr9, e,n el arran(jJue tfo ma,nga libro, llsa, l• d,l sole
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INSUIIBE€0IGN
da0.@, :medida interesante para que u oficial 00 sirviese de p1.rn,terfa preferente a,l enemigo: co0 analog@ objeto, pa~·a que DO I@ fl!lesen h>s soldados, se les proveia de fimclas de myadillo, die ©Olo,r sufrido, wara ocultar el rojo vivo cle fas mantas cile oamlf)afia: que en forrna rle banda ernzaban su Jilech.@: se les provefa cle tuli>@s de can.a, bom• I bones, f)ara ql!le cargaclos de agua no s·l!lwriera J,a fropa a,t0rmentadora sed: 2@ mombEes ;p@r compaili.ia Uevaban e] bohil <i!e trabaj·(j), que es verdladera n:erramierota de ga,stador,, es decir, l!llla d:e a<i{tle1fas cin.©o cosas 11!le, segim Jj)j} axirna clel grnn Na•l\)©leo:rn, «es preeis(j) (ifl!l e :mo se se2aren nunea de1 sold:aao, su 'fiusil, s·lil:s eartl!lcla0s, sumocTuita, sMs viveres para cl'lalro dias y stt het ra:mi€lnta cl'€l gasta00r » : rna1i1da,ba €ll gem€lral e1i1 jefe la: mas €lscrYpl!ltosa exacti1h\lld en la redaeci0n de ~os F>a:rtes, siFl e1:.agerair <ill 'lil.ll!IITero de eHem,igos ID.i S\IIS bajas, paFa qllile fa condiei<bn de jefe
EN FIUPINAS
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no redundase el error en desprestigio de nuestras armas: prevenia revistar diariamente el armamento, C(i)rreaje, equipo y vestuario, singularmente el calzado : disponfa los utiles que estas habian de llevar para la cottfeccion de ranch0s y. transportar camillas: ordenaba exteasa y c0ncieuz11damente el camplimiento ad pedem literm de aq11ellas sabias disposiciones del reglament(i) de campana, para impedir el mas liger@ ab11so 6 desman por parte de la tr,opa, que debe siempre ceflir sus actos a ios prindpios de la mas seven disciplina : recomendaba sus i'Ils- , tf ucciones a los ofioiales de marin·a, S~mandantes de las lanchas que ha' ian de operar en la Laguna de Taal egurando el dominio de aquellas guas, y vigilar la isla del volcan en ·.1 cen tro de ias mismas: al general ' olavieja se le veia en 1a practica de quel otro principio consignado en 1 maxima Napole«irnica num. ~3, · de
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LA INSURRECCI6N
las c@mpiladas y arnpliadas por Garcia t:amiba, y que dice: ÂŤUn general en jefe no debe dejar jamas descansar ni a los vencedores ni a los vencidos. Âť Nosotros pudimos sabe.l! con que correccion y eflcaeia el geaeral Polavieja harooonizaba la accion de las fuerzas del ejercito con las navales, informando al comandante general de aquel apostadero y escuadra, el dishirtgl'lidisimo co.mtraalr.ni11ante senor Montojo, de todos los detalles de las @peraciom.es que habian de ejecutar las lluerzas de tierra, a fin de que la all'toridad de marina pudiera ordenar cort aeierto cuant(!) cre1ese necesario a ta eseuadra a sus @rdenes, a las cuales el Gene11al en jefe ponia tambien las fuerzas de infanteria de marina silluadas en Binacaya~, Da1ahican y pfazai de favite, con las tropas que la guar111:eciam. Pt1dimos _averigl!lar que el dia 7 de Febrero, el General .en jefe, Marques
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de Polavieja, al 11e:1m11i~irles fa nu.ev:a oFgandzacion del ejercit@, la CliJa;} he$OS tramseriil!(i) p@o0 ha, daba a f(i)s dornandaniles generaJes de Manila y Ntoror;ig, de La l.a~u:aa, Ba,t angas y Tayabas, 4el eentro (l[e: Luz@.li1 y !lie fa l5riga<la iindepen<iliente, Sres. Za)9Jj)iIil6, l.acbam.bre,' 1M@s y Ga1bis, extensas, concretas inst-rnccioaes, detaUalJl.d(i) el mo<il:Q y forma C(i)lil que halilian de cgncntTir ca<ila liln@ a fa ejec1rni.6n del plal'l; pudim.0s ccmQeer en (lJl!l,e termin6s se seiilaiaba a;l gerieral Zappimlo la mision de C(!)nservali a t0do lf;r,imoe e:1 (i)fden. [(illiliblic0 en Manila y sm pF0vincia, y <i!,e que s~erte: se eMomemcilaba a la intelig~ncia, ce'I:@ y pr(i)bada pericia de e:~il'e gen.era} ta viigilanda de la hnea 6Valiehi.es-Sain Mateo, asi C(i)filO la l'otecci@lll! cfte la c@marca h-abitada ¡ 0r [ea.Tes, el oorte y ~en.tr@ de M(i)F ng, para lihradai <ile l@s Femoaita' s e insu,nMtQs iile: fas Qt,ras zoaas la m,isma.
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LA INSURRECCI©N
Supimos de qu.e manera el general Polavieja encargaba al general Ri@s, encomiand:o la pericia, bizarria y clara :im-teti,gencia de este, acabar de lilirnar (lfe rebeldes la provineia de Bulacam, ya que tan!o em: ella se habiia l(i)grado, y extioguir po•r eompleto f(i)s rnerodeadores que quedaban ea Tar1ac y; Nueva Eleija. No nos fae irn ri@siible coiwcer aquellas detalla<ilas imstrmeciones d:adas por el General en jefe al general Galbis para cuantQ est e lii.abia de ejecutar en la ilmp0rtante Unea de Las Pinas-Alrna11sa-M-1!111tinill!lpa, 10s <3.estacamentos ql!le hahlia me c0hrir y el ot1cio fJ:l!le liiabiam d:e Cilesempemar el rest(;) «il:e iue'l!'zas r;moviles de l.a bFigada, y «ql!le htaMaiD de (i)perar iimpidien<il@ a t0do 1/r.anee crNzasem los relileldes ~I Fi© Pasig elil &emanda ())'e f(i)s montes de Salil! Mateo, crndeman.d©le, al propio trem•Ji)Q qiue esta misi@8 deiemsiva, el ap(i)y@ <!le 1a acci<i>Iil @fensiva d:el geIiler&I tadrnm,lilre S(i)lilre Silang, y
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'tambiel!l la march.a de este sobre Imus, l!>0r Ia izqt~ierda «ael fvente de aquella b.rigada cuyo centro habia de ser A.lmailsa, para opierar batieRclio la zona comprend ida entre aql!lel punto y San Pedro de Tunasan y el ~a,19ote hasta Sl!l curs(i) meclio. La co1µmna que tal hiciera habria de po1.l'erse el!l contacto C(')n fas frlerzas de Lacbambr e tan luego este acudiese a Pali-Paran g, con. el 'fin. de atacar 1a casa-hacie nda de Sali.tran . A la peri~ cia y discreci6n del distinguid o gene,ral Galbis, deja.ha el Genera1 en. j,efe la lconstrucc i6n eti AlmaBsa 6 en el punto que aquel estifilase ccmvernien.te, de un fuerte qu.e se arbillaria con Jn caii6n Krupp de acero de 8 centi,etros, fuerte que seria apoyo cempara la caballeria .' Otra co'1umna tral I la m!isma brigada habria cle Cl!l:Sdiar el curso inferior del Zapote y magaria sobre I3ace>©r, hacieiildose a,rgo de la artilleria de posici6n para 6R comhinaci6n con loS fuegos
Irir
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INSURRECCI6N
de la eseuadra el me0eionado pueblo en.v1J1elt(!) (PQF atrim.cheramieotos ~e, semados con 1os de la izqu.ierda del Zapote, constitl!lian exteosa lin.ea de serios obstacolos. Muy iL1completameote, es obvio, pl'ldtm0s saiber algunas de las mstrucciones con qlile el General en jefe trazara la campa:iia ofensiva que • habia de llevar a cah0 la division del valeroso general Lacha]]}fhre, de just(i) rnm:ornbre y fama. El general Polavieja dici> a ~ste la mayor suma de recur~os pa1ra Ia empresa, reservandose la brigada Galhis, que ya hemos dicho destinaba al aislamieRt0 de Cavite c©n Manila y a la amenaza de aitacar bnus por Bac(i)0f. L.a artilleria, exeepto la seccion de mom.tafia €fUe tenia el general Jaramillo, y la cahalleria, qNedaban afectas al cua:r~el genernJJ. de Ia division Laeballilillhre, asi como Ios volum.ta11i0s indigemas, con recomendacion de que se les fogl'lease para prepararlos a la
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persecuoi(m qNe b.ahriaJil. de empveader despl!les e@nitirn l(i)s restos de la reli>e1i@FL Al mi,sm@c0ar1iel geaerail eran agregados 1efes, ofireiaie·s y v0h1.ntari@s espaiii.@les cde i.rdante11ia cl.el escuaclr<'>n de Manila y de las guerf>i' llas. ill:l c0malildaJJ.1.:te hon0Tario de ia de San Migl!lel, magis brad@ Sr. !Ri' p@ll .de Casbr@, quedaba afect@ al , cuartet gene·ral corno ayudanlte de earn.po agregado a fas 6rcl:enes del general Lac'b.ambre : et de la miisma gl!lerritaa de San Mi.g11rni, D. Cad0s ~enaranda, e~·a tambien acl:jNn t@ al ena.rtel geaeral de la di vision al frente de 3(i) in:divi&11:rns de ia misma, (!fUe iaJil sen:alados servi,cii@s vemiia presan.d(i) des<ite f. de Sep-Hembre del afi@ an.beri@r, l@ mismo qu la de San Raifae1, que poc@ despl!les .se cr(;la1m. OS de la pri.meFa guerrma asistie(i)'I!l. 1n1 las 0];i)eracio'Jiles de Cavihe a @s comba,tes fl(;) Mu.ntiimg-iilog, Mala. •uin.g-ilog· y a la toma de' Siia.m.g, iend@ su pr@ceCl1.er rtan cl'iistinguiid@, 0
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LA INSURRECC16N
que algun individu0 de ella ha obtenido hasta cinco crw.ees rojas. Las fuerzas de Lachambre contaban ya con el parque m6vil de ingenieros a cargo del ilustrado coro0el D. Francisco Castro; c0n los hospitales de campafia que se designaa en la organizaci6n que hemos transcrito; con un dep6sito de 200.000 racioHes, 1!.220.000 cartuch0s de fusil y 800 disparos de cafl.6n en Calamba; coa H)0.000 Fadones y 1.200.000 cartuchos y 619-0 disparos de artilleria en Bifiang; con 100.000 raciones, Ul00.0~0 de cartuchos y 200 disparos de artilleria en Taal. El General en jefe detallo las operaciot1es por mo1fo notp.ble. No valga para nada auestra ,,afirmaci6n : ;, que signi,fica esta tet1iend0 en. cuenta la del general c0neepto y aquella otra que aun resuena en n.uestro propio 0ido, y ~ue Dos dfrigi6 el imsigee general Lachambre a,l honrarnos aceprtando nuestr0 abrazo de sincera en-
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tusfasta felicitacion? ÂŤEl general Polavieja ha dfrigido la campafia admirablementeÂť; esto en rigor de letra nos expres6. El general Lacbarnbre recihia acabado croquis del camino q11e babia 'de recorrer en su campafia ofensiva: ' habia de comenzar por las operaci0nes sobre Silang. Segun las instrucciones del General en jefe,' para efectuar estas, el gene11ai Lachambre habia de reconcentrar las brigadas Cornel y Marina con toda la artilleria, ~arque de 1nge!ilieros, caballeria , V(i)luntar-ios y medios de transporte que creyese convenientes, en el cuartel de Santo Domingo, y <ilesde aUi marI har s"bre Silang, por su frenfe, enol viendo por la izquierda los atrin~heramientos de los rebeldes, y a1Toad0s los ohstaoul0s qrne a su pas0 allase, atacar Silang !"Or Balate, a la ~zquierda del rio Imus y por la dere~hâ&#x20AC;˘ de este y al Norle de Iba, un;en.\ ose amhas fu0rzas por un puente
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LA INSURRECCI6N
sobre dieho rio. Vencido Silang, y clejan(l}Qfo bien gttarnecido, emprenderia la marcha en dos c0lumnas hacia Imus; la mas iiuerte por el camiao qu~ va a Perez-Dasmarifi.as, y la otra, de men0s fuerza, por el que conduce a PaHparaDg : reuuidas 6 separadas estas colttrnnas , marcharia n s@bFe la easa-hacie11da de Salitrau; y gttarnecid a esta, a la que creia el Ge11eral en j efe seria J')reeiso batir con los obuses de 15 c~n1'.imetros, contiE1.uar sobre Imus, en cuyas inmediaci(,)]:1es el Gene11al et1 jefe tomaria el mando de tIDdas las fuerzas para atacar a clieh@ :pm1to, Baooor, Cavite Viejo y Noveleta. Para evitar que los rebeldes reconcent rasen sos foerzas sobre ias del malildo del general Lachambre , el General en jefe habia ordenad:ID al general Jaralilililfo qlile la vispera de salir el general Lacnambr e clel coartel Ide Santo Dom-ing,o hacia S'ilang rornpiese el fuego sobre los atrincb.eFamientos rebeldes de f:layU:-
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yungaD., amagando al clia siguiente Jorzarlos para simufar la subida al Sungay por su vertiente meridional, y no cesando en estos movimientos hasta que el general Lachambre fue' se dnefio de Silang: lograd()) esto, el 'general Jarami1lo ccH1:tiauaria ias ! operaciones sobre Talisay _por la laguna de Taal con las lanchas armadas y cubriendo siempre el Pansipit. Para distraer tambien fuerzas reheldes, a la vez qme gubrir MaDifa, el mismo dfa qne eJ general Lachambre marchase hacia SilaDg, el general G-albis amenazaria a Bacoor e Imus, ~cupando la margeD. derecba del Za~ote por el c1us0 inferior, m.ientras ue, por el superior, fu.erzas de la isma brigada amenazariah envolerlo y marchar s0bre Paliparang, n donde, si se hacia posible, coยงuDicarian con las del general Laphamb,Fe _llU'imero y d:esplies en la i:easa-hacieID.da de Salitran. Aqui rebibiria el general LachaJ'.Iilbre mm-
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LA INSURRECCI6N
vas instrucciones para atacar Imus. Las fu,erzas navales a las 6rdemes del Excmo. Sr. Comandante general de Marina habian de ap@yar las operaciooes sobre Silang y sobre Imus, ca:nornrnndo los atrincheramientos rebeldes de la eosta desde la desembocadura def Zapofie .basta las trincheras de los rebeldes en Licton y simulando tambien un desembarco en Santa Cruz y en Naic. La infanteria de Marina de Dalabican amagaria solllre Nove1eta, y la de BiJil.acayan tirotearia ias trm-cheras rebeldes, mieotras el general Lachambre operase segilin le indieaba el General en jefe, Cl1yo Cl'larlel ge.l'leral se sHuaria ea Paraillaque 6 Las Pii.ii:as. Eucomiando jl!lstamente el valor y pericia del general Lachambre, el General en jefe, entre o~ras que no conocemos, 1e di6 las instn1cciones a que all!ldiiiJil@s. La primera q-uincena de Feorero fue mas tranquila que las aaterio-
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res. El dia 1.° al medio dia atacaron fos rebeldes Las Pifi.as, siencto recha,zados, <!l.ejando cine@ muert@s y huyendo hacia Bayanan. Elil 1l'arlac, la 1 Guardia civil acababa con los restos ,de la partida Paez. El general Ri(i)S :tennino las (i)peraciones :importantisimas sobre Ios esteros de Bt:.1lacan, asegurando la navegacion del rio de ' Santa Cruz. El dia 7 el general Corne! practic6 un reconocimie!'lto s@bre terreno ocupado por el enemigo en 7 kil6metros de extensi6n, destrtiyendo un campaliilento y tres trincbJeras. En la primera zoti.a de Bulacalil se batieron grupos de la partida Maglor,o, c&t1sandoles siete m uertos y C(i).:. Eieo<!l.0fes armas y cabalt(!)s. Alguo@s Erupos de Cavite lograron desembarcar en Zam bales, redoblando con tal b@tivo su vigilancia las ftaerzas d:e escuadra s0bre aquellas c0stas y as de Bataan. El valeroso capitan e la Guardia civH La Torre bati6 en balim y IIiHillilte de Tibagua 11.ma pair-
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LA INSURREGCI6N
tida de 100 hombres, haciendole siete muertos, sufriendo los nuestros ul!l. b.erido y dos oontusos. Hubo 0tras muchas ID.ovedades, de escasisi-ma importaneia todas.
7. E'l General en jefe sale a opM'aciones. lnicio de las mismas. Afarcha del geneml Lachambre hacia Silang. Combates en Malaquing:.ilog y en Mwnting-. ilog. Toma de Sitang. - Encai-gando el rlespacho al general segundo cabo Sr. Zappino, el General en jefe, sen.or Marques de Polavieja. salio el dfa 14 de Febl¡ero â&#x20AC;˘a operaciones, situando su cuartel general en Paraii.aque, a 10 k.Hometros .de Manila, sobFe la playa de aqnelia inmensa bah.fa y situado en el camiino que eonduce a la provincia de Cavite: la domi.ID.acioa esJilafioia fundo este pueblo eID. 1580, bajo la advocacion de San Andres. Habia dado prin.cipio la accion _ ofensiva qme pa,r a rec0nquiJstar di., 0
EN FILIPINAS
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cha provincia de Cavite trazara el General en. jefe: estrictameŽ.,te ajustado el general Jaramillo ai plan y 6rdenes que recibi6 de dicha supe'rior a11toridad, en la tarde del dia 13 atac6 bizarramente a la bayoneta el ,ftter'te Tran.quer@ en las vecindades de Bayuyungan; lo tom6 c011 pocas bajas, causamlo muchas a los rebeldes. El general Lachambre, al frente de las brigadas Cornel y Marina, sali6 de Sanito Doming¡o el dia 15 a las qnce de la mafiana en demanda de Silang. Al poc@ tl'echo dividierol.ilse estas fue1rzas: Lachambre con Corn el fha por el pnente de Carrillo; Marina en vol vie11do sobre SHamg por ei miso vado de Santo Domingo; ambas rigadas habian de re1mirse para la cci6n coro.un ea las proxiro.idades e Silang. Durante la noche del 15 16, estas rue:rzas vivaquearon eJil a mitad poco mas 6 menos del caino entre Santo Domingo y Sil.:mg,
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LA INSURRECCION
a:
'1 kil6metros respectivamenrte. Y aRilaNeci6 l:\l 16; al to(!Jue de <fr~ria emprendiose la ma:rcha sin novedad alglH,1a basfia las ctmlro de la tarde, en qtrn el hataH6n cazadores nitrnero H>, pertel'leciente a la brigada Marilil.a, q1i1e iba fraccionado, hallo uma ftlerte friochera sobre el barram0O y siLio de MalaGp!liog-il@g (grande ric> ):. el te1.1ieAhe coronel D. Antonio '.Fope'lie 1Il'ilancl6 1iomarla: defendieronla tenazmentie :los .reli>eldes; «ilet1tro cl'e ella eay6 Jil\N,ierto por un lan{aca__\ z@, destrozado, el comandante Vidal: l!l'Il c,uarto. de hora mas tar-Ole llegaba a aG1uel si!~io 1ai.li>rigada Come!, quien efilvi-6 sobre aq11ella trifil'ehera a1 c~ p-itall Villaba: 2j_ h@mbres perdio este brav@ o·fil0ial en atquelila empresa, (!{l!H~ n@ pttdl@ term,i narse ni despl!les de estas dos valieHtes· a<;iornetidas: ve.m.ia l a notlhe, y se acamp6 alH, h,\lstalanrl@ Y.lliJ. b:osl))ilal 0e sangre. Los ge11ierales ILacf.iaJil'ilfur;e y Cornet se reunrier@'lil : Ma,rirua deli>ia estar 1
EN FILII>INAS
6a'Z
muy cerca; pero 110 se veia. El gemeral Cornel, a las clos ae la madmgada, orden6 al teniente coronel del segundo de caza<il.01·es, D. Fo rLunaito Lopez Morquecho, que cog una compafiia, unica que no estaba de servi.cio, las guerrillas montadas y lilna seccion de t:iradores, se situase en el , camino que conduce ail rio de Ma.laquing -ilog, con el uri de que tan progto ,amaneciese lo vadease a distancia de ~00 rnetr@s de aqurnlla trim.chera y cayese sobre ella . A las cincb de la mafiana, y pomiendose a la caibeza de las foerzas de Lopez Morquecho el g~neral Cornel, se practico km. rec@.lil.ocimieJ)l. to; y, avanzaruclo, a:l 1 al alcance de los i nsurrectos, µegar icieron estos 1.ma descarga, cayeno heri<ilos el ayacla,m.te <ilel nrnl@grao general Zaba la, teniente Taboada, contuso el capitan de ingenieros . ~ Pedro d.'e Anca, ayudan,te del ge~eral Cornel, mas dos soldados beLos insu,reot•s sostenfao le1
.e•s.
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nazmente su p@sicion ; y em. vista de esto, el general <C0rnel dispuso que una seccion de cazadores hiciera sostenido fuego ohlicuo, mientras tanto el teniente coronel-L6pez Morquecho flanqmease la trincib.era por cualquier fil(i)do qm,e fo1ese : o:rdel!l termhllante, dada con la s@briedad de frase y la admirable energia con que las produce esa incomparable letra de las sabias Orden.anzas vigentes en nuestFo ejercHo, compuesto p@u fortuna siempre de qliienes saben cmnp1irlas. L6pez Morquecho fue reforzado por l:lna compaiiia del mismo bataU6n y dos piezas de aTtilleria de montaiia, al roando del capitan Massat. Marchaba esta fuei¡za p@r el filamco derech@, y a un kilometro de distancia, hallo un paso del barranco menciomado y otras dos trincheras sobre el mismo. Ernplazaronse las piezas, y b.aciemlil.(!) fmego tambien en direceion 0plicl:la, Jilrotegidas por Nna compaiiia, Lopez Morquecho mand6 a otra
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rqu.e avatlzase, previniemdo al ca,p itaa q1rn en e1 ruomeNto de eIDipFender la subida bacia la primera triB.chera meucioBada mandase tocar paso de ataque, y con toda la velocidad pol sible se echase encima cle la rn!isma. 1 Si u 1nlltalile0 e0,J.il es'te movim!ient o [0 : seria el <'J:l!le a la carrera ta:rnbien practicase L6pez Morquecho sobre la-s dos trincheras de la izquierda; y asi se efech16 co'Il notabilisimo exito, porql!le const ernados ,los rebeides al verse atacados de¡n:odadamente por la retaguardia, abamdonaron su.s atrincheramientos, dejando muchos cadaveres. Dado el parte corresp0n1diente y arrasados aquefil0s obstacu.los, por disposiei@li1 del general Cornel, la columna continuo su movimiento de avance sobre SilaNg. No hall6 novedad alguna hasta la llegada al rio de Mt11i1ling-i[(i)g (peqŽ.efto rio) y pu.mti(i) ea que se presen~aiba Till't puemte de cafia destreizad<:>, y uaa gran trinchera al frente en el lado
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@puesfo: a poca dislancia otro igual 0bstac~!o. El general Corlilel maEu;l0 al mismo teniente coronel, Fortunato L6pez M@rquecho, tomase aquellas posiciones en igual forma que las anLeriores, y a ellas fue el valeroso tenient e coronet, del todo Madrid tan conocido c1,iant6 de aque11os tagalos, que ha treinta aiios habian ya de agradecerle el amparp que a StlS vidas y hacienclas les preshara en Sl!l calil!laa de jefe de fa secci6n (;le la Guardia civil de Tambooo. Para atacar la trinchera de Mun.ting-Hog, L6pez Morquecho llevaba dos compaiHas y tres secciones de ti.radores: lo -abrupto cle aquel terreJilO irnpediale llevar fu.erzas montadas: haciend6 ruego oblicuo, 1leg6 hl!sta los 'hordes del barranco: L6pez Mouquecho se descolg6 por alli e@n los 300 11ombres a ql'lienes rnanda1>a, y eon igual rapidez y muy :pocas bajas relaHvamente a las que el
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caus6 al enemigo, tom6 aquella posici6n. La columna sigui6 su marcha; y apocl.erafldose de un fuerhe verdaderamente s6lido y de gran capacidad habia a menos de dos kil6meque 1 t1Jos de Silang situ.ado, nu esLras fuerzas se detuvieron, acampando toda la brigada. En los alrededores de Si, lang, asi como den.tro del mismo puebl0 y al resguardo cl.e rnuchos atrincberamientos, se veian millares de rebeldes. Continu6 el avance. En el horribfo fuego¡ que se produjo ihiciarlo, cay6 gravisimamente herido de dos balazos el teniente coronel Fort1mato L6pez; cofldujeronlo l fuerte que acabamQs de citar, asi como a todos los demas heridos, y en el mism¡o foso de la forla leza hieieronle la primera cura: el primer alivio que este bravo jefe sinti6, fue oon la noticia que treinta horas despues le dieron de haber entrado los Duestros en Silang, en. aqiliel pueblo
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ihrnamte tant@s meses lugar de las tristes iazrufiiasS de1 rey Victor. ta bl'igada Marina, desde qm~ d'ej6 iile verse e:lil Bimamba,n gan, envolvien:(i}io l@s bairrancos y cruzantilo el rfo pe(i_luefi@ por AgaMac y Ji>ooc, Heg6 a Uia, a m10s 1:iO(i) metros <die Silang. Torn@ el bar1do lile Munting-ilog, el!l d011de Irneg@ acam1[)0. AvaBzando, l!lR>i@se el g;eneral Laehambre a la bdgad,a lVfarima y contilillilO Ia gloriosa arriesgadfsiflila ma·rch.a. El enemig,@, adernas de ilos 0hstac1Jlos fiJ_)lile la mattwaleza al'li okece, tenia por defensa ioBl!lme•ra:h,les atrincherarnient@s y ired1:1ct@s casi imexpugmrubles; desc@4gand0se oon cuerdas ;por v:ertienties, ttlalil:<i)iYeaiilcfo aque! ser,rni'ller@ die (l),efen,sas, y t@mamdo a la bayoRela las trin.el!leras, se vevi,fi.co la tioma de Silang. Ei 00r01mel Zabaia, en la vamg1rn:r<il!i,a lile fa li>rigal!l!a C6mel, entr<i> e] priNrnro en a(l]1uei 11mel!Jlo, armMalild@fo b@ril:0 l!lesl.')w.es de 1;>asair el ri@ 'fih>agan, .qae ;[!)01' <ill@s ]))Ulil't©s lo ihl!ll::>o
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de pasar tambien el bizarro general Marina para dejar cogida por el flanco aquella formriclable posicic:lm. File i!al el panico que se apoder6 de los rebeldes, que mezclandose con nuestras tropas enti;aban en el pueblo, dejando gran numei;o de armas blan~ cas y de iliego RemingtoJil y Mausser, y abandonando mas de 500 ml!l.ertos coritados ~n el primer momento. La¡ bateria de montafi.a, man\lada p@F el capitan Masat, hizo destrnzos enormes en las masas. Los rebeldes nos matarot1 al capitalfi Jaen, al teniente Martinez y a seis soldados; hirit')r(i)n al comandante Rodriguez Navas, al capitan de c~bal1eria Maquieira, a los tenientes Elscol y ~obrin0, resl!lltando contu1 s el coronel Ruiz Sarralde, . el te- ¡ ente cowlilel Ortiz, capital.il Fernan~ z de Castro y 17 individuos de tropa. El 19 de Febrero, a las H y 30 d . la mafiana, se iz@ en el convento d Siiang el gl0riGso pabell6n espa-
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fiol, en medio del frenetico entusiasmo de los t1uestros, que se extendi6 a todo el Ai-cbipielago. El General en jefe estaba satisfechisirno de todos: del general Lachambre, a quien llamaba alma de aquella importante operaci6n, hacia los mas cumplidos elogios, asi como de los ~emas generales, jefes, oficiales y tropa. A todos sefialaba mereced@res de rec@rnpensas, dedica11do a las fute,rzas de lai Armada la especial menci6n que merecian los senalados servicios de esta. S. M. la Reina y el ¡Gobierno felicitaban expresivamente al General en1 j~fe y Ejercito y Armada; la augusta Madre de D. Alfonso XHl, at colilocer la heroica muerte del coronel Albert en el puente de Zapote, declaraba oajo SN pr0tecci6n a la familia de tan bizarr_@ jefe.
8. Operaciones en otras zonas. Toma de Pamplona. Toma de Dasmarinas. 0
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'foma de Sa,litrdn. - .Mientras en la Z(i)ID.a de SHang se ohternLan tales glo11ias, en las (i)trras toolo iba 'bielil. Las :farnrzas €le Marina cooperaban admiirahlemen.te a la aeci6m oferilSiva. El ~ia 16, a:taca!ildo Binacayan m0:mer0'sas foerzas enemigaf', que cargarolil. coFJ. fu,ria sobre aC;Iuel tilestacamemto 'c on ftitego clie insi.leria y lamtaca, fuernn rechazad.as con gra.ndeswerdidas . El dia 18, U'l'l bote am1ado del CL'l[CeL'(i) Lezo, protegi(fo p(i)¥ fos itJ>egos de la eseuaclra, d:esa~(')j6 al en.emigo de s·~ s trhrclilecas, haeiendoie mas de 100 ml'lert(i)s : de llos naestr@s faer(i)fi herrid@s ilos aHe.reces de navfo senores Vial y M.rntinez y 1D i.ndiyiclu@s de tilotaci6n misma. . j iPara auxiliar los servieios de f-arr, disp())miase tambien de medios e roere@elil especial m<mci6>n; n@ era jasto dejar de agradeeerl(i)s y 1Ji>lamd,irlos. Ade:rnas d'e fas emibl\_r~aciQn~s tile las guerriHas de Salil
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1ign•I y San Rafa•l en contiDtto
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v1c10, aAgunas casas navieras y la Compailiia Maritima, asi como las obras del Puerto, segun ya hemos dicho, pusier@n a disposici611 gratuitam,rnte del General en jefe, siendo desde l1uego aceptado el oirecimient0, m1. imp@rla:Iilte material nal!ltico, que Ji)rE,lstaba singularmente en estos d.ias muy buenos oficios. La Compafi.ia Trasatlantica, en todas ocasiones a.Rlrnlosa de servir a la Patria, y porta.nd@se eo esta @casi6n como en t0das, cedi6 seis gabarras armadas con cafi.orrns Nontoria de 9 centimetros unas, con Krupp de 8 y medi0 facilitad0 por Marina otra; para tOO hombrgs de ililfante.ria la Cliarta, tocl!as cou compieto arreglo y c011 sus ¡ costados revestidos por corcho y Iona. Otras dos destinaba a la bahia de l\fanila y el Pasig: todas con capacidad para HlO combaitieliltes y todas de hie!Fl'O de 2 pies 4 pl!llgadas de calado y racio11adas. El genel'0.1 Jaramillo, despl!l.es de
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311,\lll><[er.arse el 13, seg,(rn anterior:me]lhe fu.ernos dieho, dei fu.1wtie Tra,nq1rnro, asaH<f> el de 'Biglilay e11 diia f(;) despues de p>e]l(l)Sa marcba 11:acia el INcmtie, ea la q:ue fu.nloo de h'anspor. tarse a ibrazo la ~,rtiUeria. 'El capii, tan Fita ayl!lcl.6 al S(l)Mado indi{6eFl.a , Gam!lelildo <iia,ray para c0r0Iilar a(ij_l!le' Ha fo>rti..ficaci@D, elil Cl1y;0 a,taq:ue IilOS hlrrier.on al coma:ndaDte N6gYera y irl te0.ie:1tte Macf.as. El mismo gel!leral iJ.arami,ilJ@, el cl.ia: !1.6, t0m.o EayNyungan y ~alil Gabriell y iIBaraq.uil0n.g, murielilclO 0e i@s nuest'F@S en tal em.[)resa el caJ.lliM,El ie&a· y 28 iE1fiii!vi.d'l'los de tr@r>a; l@s r.ebeicl.es tl!lier0n m1.1eb.as baj.as.13. ana11t1er, al!l1n Dt0nces c@r@nel, ei !1:n <1le Fielilre'l)o, [es~Yes ~ d.e batirsg .c@n 2.000 h1sur rect(:)s que teriazmeE1te se le, (:)])0fan, se ali)@d.err~ de ili@d@s i@s atrinb.e:r.a.aaielllitos lil'u.e defel!l.dian :Paml@n.a, a la d.erecha del rio Zapote, " d,e este m,ism(i) p1rnbl0. i Qll!le exi.to, 1
.ir••
:lorao I C..,tro horru; ru!li,6 osle
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cudisimo com.bate y termin6 tan brjHantemeDte, qme las faerzas en persecuci61.il. de los rebeldes rebasaron el Zapote y alli mismo en la orilla izquierda .acuchillaron cientos de rebeldes. Estos nos mataron. al teniente Ral!liz Soto y 18 soldados mas, y nos hirieron a los capitanes Burguete, Torres y Suarez y 43 individuos de tropa. El c0ronel Barraquer, que b.abfa dirigido esta acci6n, afirmalla desde aquel instanle el lilomini@ sobre todo et curso inferior del Zapote por su oriUa derecha. Sohre este mismo rio tuvimos la desgracia de que muriese gloriosamente e1 coromel Alli>ert el dia 17, excediendlilse por sl!l arroj@ de las 6rdenes que tenia para amagar, pero ao pasar el rio <!lespues de tomar los atrincheram,ien tos pr6ximos al puente.(i)Or lilonde eJ.1!lis0 crnzarlo, a pesar de aqâ&#x20AC;˘l!leUas, y sin q:me tampolilo mod.erase sus im.(i)etus el rec1J1erdo de seis hijos, a los cua1es no pod.fa legar
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(i)tra cosa: sim(i) h.@JHlr y gloria. En esle hecho tambien 00s h.iirieron a:l capita,R Varela y 27 s@1dados ma.s. IEl ge1.;Hn·al Lachambre o,rganizo SiQang sin. per<Jer momet1to. Cumpiia 'bi€ln. y fieLmenhe las imstli'HCCL@J.iles ,del Gefleral en jefe, qlile ex.actamen:te c@neordariam. com el pv@pio criteri0 d€l Sl!l il.ustre !l!lgarten.iel.'lte. El Mari,scal de ViHars deciia: «Em. la gl!lerra, t@do depende de impHer al enemigo, y consegl!lid@ €lsto, de n@ dar1e :tiernpo de vQlver a 'tQma,r aiieliltp. » Y el .gralil proscrito en SaJil ta Etelila sentaba c@m@ pri.ncipi@ qu.e fi.ma march.a rapicla aumenta la m@fal dei Ej erei1l@ y s11s medi@s de itlillfo».
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El g<mernl Lac.hambre saH6 eR la . aiia.aa deI 24 de FebvelfO de Silang,
~Olil dos coiumm.as: un.a en d€lma:ada ~e Faliparang, la @t~a s@bre :PerezDasmarifi.as. Ai,iz@Iil, eov@lviend@ el f urso saperioF d€ll Zap@te, ha:Tuia de . balf.ir 1os b@sques vecim.os de ~aii,pa-
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ra,ng y llll11irse a fa l:\)rimera. 5e fingi.:. ria,1\1 ataques s@hre el rfo Baeo(!)r y !'fus esforos ; se a.magaria otra accion ;p@r Noveleta, t(i)d@ lo cual. y mas aun prevenia el Ge1i1eral en jefe, con el fiD de d'.islil'lin1llir las merzas reheldes ()Jlrn JlJ.1ubieraIJ1 de opQnerse a Lachamlrne. La esGuadra seguir:ia cafi0neand0 13acoor y sus i:nnumerables tri.ocheras. A cmaitrn kil6metJ.10s de Dasmari:iias, eiil el baFri@ de Sampaloc, em,[lllezo resisteli1cia viva c0ntra las iuerzas L~cl:lambre. Ael!ldiier(!)n a a(!Juel hi1gar much0s Febehil:es capitaneados por el titulad0 g,ene'flalisim·o 'Emilio AgtoiliJ.,a,M@: coDceDtradas estas fueFzas refue1@:es en fog atFiflCB.eramientos iamediat0s a iDasm:arifi.as, la c0ll!llnma 11wirneipal, C(!)I'l los generales C0rnel y Mairina, [(i)s homo t0d0s, arr0lia•Jild(i) al emermig(') y desptegand@ e·liJ. la ma,rcha h.•asla el rnism@ pueblo baticl'@ ]ll@r la artil1leda de 9 QentimetrGs.
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,. El gemeral Marina afac6 de frente ,tJn la v.angliard:ia : fi(i) pu.cl'o filanquear la izquierd.a p(i)r impedirlo ttn. prolfundo baTraEHl(!), y Cornel envotvit> la derecTu.a por 1.m terrem(!) todo irnmdad(j), Marina, sin esperar la 00h1:m: )la ViHal6m, que venia por Pailiparang, eia cu.yo si!tio se h.abia UJiilido con Arizon, y viiend0 q111e el. (i]fa avanzaba, se apodero de d.os trimcb.eras de piedra qrue defelildian. la en lrada de Dasmariilias, y fue t0n.iand(!) el p,u ehlo casa [[H!lr casa, teE1azmente defendidas. A 60 metrŠs de distaneia {1:rnron ibatidos p(j)r la arHlleria de molil.ta, ilia la igtesia y el convento. for r endiadŠs aql!leUos edrifkios, ll.Ii} grl!l~o de 80 reoeldes pretendio salir de ell(!)s, y en h1cha cl!lerJilo a cuerpo erecieroin todos. Em t(i)mo de la igle~ . ia se enc(i)nfamro.m. once granadas argadas y de graEl calibre. Por caHe , aTalela a la que MaTina recorri6 gaand01a pas0 a :paso, eEJ.tro Comel acieudo lo mismo, eafi(l)meaml0 y
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r>ersiguiendo a los rebeldes en fuga . .Agninaldo huy6 e11 el primer periodo del combate, dejando encargado del mando a Estrella, tambien titulado general. Era este un ex sargento de la Guardia ch,i l, ascendido a segm1do teniente antes de la insurreccion: tambien lmy6, y le sustituy6 en el ultimo periodo de esta accion el cabeciila Felipe Garcia, que FQ.tJ.ri@, siendo identificado su cadaver. En Dasmariiias lucharon mas de 5.000 rebeldes, de los cuales L500 procedia11 de Imus. Llego la columna Yillaloo, la cual en el camino por Paliparang habia tornado tres trinchera¡s, causando 15 m.trnrtos visb0s al enemigo: mas d.e 400 se reeogieroo en Dasmariiias pertenecien.tes a los rebeldes : nue~tras 1>ajas .h ieron el capitan Bernis de eazad011es y 19 i11dividuos de tropa muertos; heridos, los comaodantes Carpio y Saeg_z de Tejada, capitaoes [baili.ez y t::astalil., telilieotes Carrion, Salafranca, Gira]t y Mons<ilrrat, todos
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de infanteria; teniente de artilleria Sendras y el de cahaJleria Velasco; Maciias, ayudatite d'e1 general Mmfa, y 101 individ.uos de tropa y 10 colil:tttsos. Para forma:r concepto exaetlo de la 1 fpericia de n ~1estros gmrnrales en la actual campaiia de Filil))i"lilas y de1 vailor de aql!lellos soldados bisoiios, de aquellos quilil,tos- sin instruoci0,n, silil:o I.a somera que en unos p@eos dias pudie:roEl recililir en el Arch:ipielago, seria 1'.!til conoeer lli>s terminos eii. que el general Lachtambre elilCo. mi.aba a los tllilOS y a.los otros 81!1 UaBtos Jn.ec:ti.os de g1rnrra intervi.no f dlirigi6, pero muy singularrnente . en este de que lil(')S pcmpamos, y eB que los ' -.;ebeldes habian. cifrado ~us mayores esperanzas . El. General r n jefe Fecomrpenso a tod@s con arrei io a sus at ribmd:ones, y· propmso a los qu:e mas se disKiNgl!liefOl!1 para -1as gracias q_urn ei no podia otorgar . . El Ca]i)ita'lil gene1·al segutia di1·i-
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giendo su plan y custodiando con la brigada Galbis la orilla derecha del Zapote. Lachambr e desde Dasmarifias habia de ir y hie a Salittan. Al amanecer del 7 de Marz@ sa1i6 el general '.Lacharnbre h.acia aque1 pmeblo,. Llevaba un convoy e impedimenta. Con tres bajas en los maestros se tomarom todos los at,inchera:mientos que el enemigo temia en a~uella direcci6n. E1 coronel Ariz6n, envolviendo la casa-haci enda, 11apjdarnente se apoder6 de ella. Los rebeldes afbai[i]:<ilonaron. mtras fuertes posiciones para reconcentrarse en su desorden.ada Fetirada sobre una trinchera de 1.000 metros, apoyada en su extrema d:erecha por u~1_redacto que oortaba por completo el camino de Imus. J)esp1!Ies de rnd@ cmnbate, la media 'brigada Zabala tom6 aquella posici6n; pero muriendo gloriosamente este geaera,l en. el asalto de aquella gran trinchera con 10 imdividuos de
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tropa mas, y res\illtando ln.erido el tenii.ente Farfante,, ayudante del geneli:al malogrado que acababa 路ae f)erpebuar, murieado, el a;pelLido que teaia, Zabala. Tambiea sl!l.frier@n alli lesiom.es mas 6 rnenos graves los ca'pitrunes Nart y Rubio, ios teBiemtes 1Fernancl.ez y Castro y 25 路 soldados mas. El General en jefe 0rden6 a La,chamnre ql!l.e desde . Salitran fuese al Zar>0te eon el fin ld.e opera,r en c@mbiBacion con otras foerzas. 9. Sedici6n en Jfanvla. Operacion'es en ot1ras zonas. - El dia 25 de-' Febrer@ a1canzaron por r>roducto de su incesante inicua labQr l@s const>iradores de MaID.ila los medi@s de dl.etermi,mar una algarada ql!l.e caus6 1 arrna general en la ciudad de Legaz1 : l!l.n grnpo de carab.ineros irndd:geas se sublevo em e'I. caartel proximo ~ 路 Pasig situado; y matando a Hn sar.eID.lo eurof)eo, Migl'lel Lozano, e hiiendo al olicia[ cl.e guard:ia, D. .:rose 路 0
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Aliltoni.o Rodriglflez, se declararon en 11ebeH6n, esperando que todos los catipunados de los barrios proxirnos se 10s l!l'lilieran y apodei;arse de Maflila . La Vet1trana, foe rzas del 1nismo ins'titn to a q:ue los sediciosos pertenecian , y sorore tod.(;) la colttmna del teBielilte corolilel Jimenez, los castig6, singularmente en San Lazaro, merecida y seveL'a:mente. En la revlilelta, los ililsurrectos asesinairon al tenientie c@roLlel Fiei'Fo, que, v:estitll0 -de paisano y rlesde l!JU carruaje, los increp6 por sa feelrnria . L(;)s vohrn1ia:rios de Malil.ila prestaron en .es·t a acci90 exeelentes servicios, batieJi).dose eon exito el'l los arrahales y acudiendo tod:os a la cl:efonsa de Ia capital: 30 imcl.ivi(i],lflos, pri:mcipales au.tores de aqtJel!a i:nfame sedici@n, hrerolil objtit@ de (WU:sejo s-uiNrnrisim.o : los 27 carralil•iritiros g_Me se alzaroID. llevaFo:n.se 36 fusiles. El comwlot qu ed6 deslilecb@, y fa energia con que des.d e el p.rhner mo·m ento proce<ili6> el
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general Zappimo, encargado del despacho, pues el General en jefe estaba en Sl'l Cl'lartel general de Parafia(l_[ue, devolvi6 la calma a la capital. Algunos grupos se presentaron en estas fechas por Hagonoy, Santol, San.ta Rita (Pampanga), q1:1e se hi'cieron desaparecer inmediaitamente, siendo por igual batidos los q_ue querian reanudar la insurrecci6n en Bataan, que las fuerzas Barraquer habian dominacilo por c0mpleto. Continuancilo las operaciones en Bulacan, se bati6 a los remontados e~ las estribaciones de Sierra Sibul. En Balayan ( Batangas ), un ¡ grupo if'ebelde que incendi6 varias casas fue Fechazado con gi:anciles perdidas. 1 En los primeros dias de Marzo, la bolumna del Sur de Bulacan atac6 fn campamento atrincherad.o en el ,iti0 Ag6n, cerca de Novaliches; despues de tFes h@Fas de combate, 10 tom6, dejando lo!'\ t¡ebeldes 102 t uertos sobre el ca~po: 20 de ellos
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ves1lian tu1iforrnes de la Guardia civil y Carabineros; identific6se entre los cadaveres el <ile Pedro Pacheco, jefe de fas partidas de San Mateo. El general Jarammo bati6 en los sitios de Dayapan y Samb6n las partidas qae habian si<il@ desaloja<ilas de Bayl!lyangan: Jes hizo 40 muertos y dos prisioneros, experimentando los nuestros tres herid:0s. Otros muchos enc1,ien-tros se proclJl!leian en los prirn@os de Marzo en 'Bulacan y se descuhrieron trabajos para levantar las ;provi11cias <ile I.a F'amwanga, TaFlac, Nmeva-Ecija y La Laguna: vanos es:hierz0s. El teniente de la Guarclia civil de Mailabon.g sorprel!lllli6 en Thrnj,eros un grnpo de co0spiradores encerraâ&#x20AC;˘ dos en una casa, desde la cual h.jcieron at ser descubiert0s tenaz resistencia. Siete lile el1os murieron en la contiencla. En La Laguna, el oomandante Lopez Herrero ocnpo el dia 13 de Marr2Jo u1 ca.li.lilpaurnnto atrinchera-
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do en e1 earnin.o de Siniloan . Dujiois sorprendio grupos en Guadalupe haciendoles 7 bajas. En Bulacan hubo enc1rnntros los dias 1:3, !1.4 y 15 como ,siempre favorables a nuestras armas.
11.0. C0ntinuan las. operaciones de la 'divisi6n Lacha,mbre. Combates en el Za- . pote y en Presa de Mobino. Toma de [mus . Toma de Noveleta. Ocupaci6n de Cavi-ie Viejo, Binacayan, Santa Cruz y Rosario. Toma de San Francisco de Malab6n. - El 9 de Marzo saH6 de Almansa una colnmna de 9 compafiias al mando del teniente coro1,ilel Salcedo: cFuz6 el Zapote, y totnando las trinchera s que Jo defen~ian por aquel pm1to, se p0sesi0n6 ~el camino que conduce a la casahacienda de San Nicolas: habia de ~gtlardar con<tacto con las 'itlerzas de Lachambre a 2 kilometros de aquefria casa; la coltlmna Salcedo tuvo ~us LaG@ste, es deeir, fals@s gl!lias, y estos la condu~eron, no a sa lugar 44
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de cl.estino, sino a sitio en que el enemigo concentr6 tlefensas con mu. chos refuerzos que recibi6 de Bacoor e Imus. Quisieron los Febeldes envolver a la fuerza de Salcedo, ocupando aquellos el f~ente y el flanco · izquierdo, cl.ejaDdo tambien trincheras a retaguardia; pero el engaiio fue · burlado por el valor de los nuestros. · EI enemigo,. rechazado a la bayoneta, . iue perseguid@, de.j,ando 100 rnuertos en las trincheras, que fueron toma. cl.as en h1cha cuerpo a cuerpo. Nuestras bajas faieren1 los tenieBtes Oteglili, Zaragoza y Mu_iiios heridos ; 2 capitianes contusos; 8 individuos de •tr@pa mi.rnrtos y 30 heridos. En este · dia, la Esc1rn<\lra casi redu.j@ a ceni. zas todo Bacoor y bombarde6 con · tir@s m.uy certeros Cavite Viejo, Bi· nacayalil., No¥eleta y R@sarfo. En la misma fecha, y en los dias =1'0 y H, los Febeldes atacaron sus posiciones pe:rdidas de Salitran y · Daslil!la-rinas: irnHil fel'ltativa; pere-
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cieron unas cuaBtas docenas de ellos mas, y nosotros tuvimos 10 heridos, 7 en el primer pueblo y 3 en el se, gund(!). El general Lachamli>re sali6 de Salitran el dia 9 parn contixrnar la marcha trazada po,r el. General en jefe. La retaguardta sostu vo por cort0 tiernpo vivo fuego con los rebeldes, a los que se hicieron. bastantes bajas, e hiriend(')n@s eHos ail teniemrte Girald, del G. de cazadores, y a 5 de tropa. Despues de vivaquear en Pasong si.m novedad, y pasando el ho Paliparan, el general Lachambre ,fue 'por las lomas de Sam Ni,wlas hasta Presa de l\folino, obra de S(i)lridez, muy bien heoha, como generalmente lo estan las construidas por los frariles, autores tambien de la a que .aJudimos, situa<!la en 1rna de las dos bocas del Zapote. Presa de Moliino estaba muy fortificada,: bien supo ,el general Laclilarnbre ubi.Hzarla para las obras de defelilsa qnrn aHi practi0
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c.6. ta va1iemte bdgada Marina acometio a los rebeldes de a«11uella posicion, los elirnles, poco teftaces en defendeda, la desalojavon dejarnlo 5 mueFtos y cogien,doles nrnchas arrnas, m0n,iciomes y cuat:r© Ja,ntaeas. C@ifilltint1tl Lachambre su ma:rcl:ri.a hasta Pafilili.PlOlila, dollil!il'.lancl.0 b.asta este ptlnt@ todo el Zapote: eft ambas 011'iMas acampo. Desde Paml.ill@lila, el general Lacm.ambve :11ne a e©Dfererniciar e©n el General en jefe, q1:110D le reeibi6 e@n fas ma:y@res prnebas de corn.side:raci<f>n y afect@, 011<denalilcl'0[@ fa t@ma de ll!n..l!ls. C,dn imp@siMe Ie fue al Gemeral <Hl jefe p0@erse al treRte de las lf(')pas pa11a · irF Jilersmialmente al ataque de a:qmiel h1gar, ya I@ demostFalJ'em·os al habiar de la gra-vedad del mal q1,rn Ie a<iJJnejaba en tales (!)fas. ABtes de q1,1e se efeet1,1ase la m.archa: de la . tilivisi@m Lacha;mhre a ]1mms, el Geneml em. jefe @rganiz@ u•a a li>rigada mas papa @pera11 con: t@-
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do medio p0s,ible contra aquel baluarte de l@s tagalos. 1.a Iil.ueva bri.gada iba man<ilada por el general Arizon, Fecien ascendido a tal jerarquia, y se habia constilttido eon cuatro . compaiiias del batallo:n 13 de cazadores, pertenecient e a ta brigada .fararnillo; dos compafiias de cada u,na ' <!le las otFas brigadas, y algunas fuerzas mas de la brigada iin<ilependieNte, de la c~rnl, por enfermedad del general Galbis, que regresaba a Espana, habia t0mado eI maNd6 iBarraqaer, ya general tarnbien, ascendi(:10 en aqit1.ellos cliias. Regresando el general Lachambre -Ii stt campamento del Zal)ole, prnont(i) termino la construccion de l0s _fuerfes para aseguraF aquel sitio, y e!lil breve tambiel!l di6 fin a los reconociinientos necesari<,>s q,ue practico. Los ~ruceros Castilla y 0-risttina <lisparaban s0bre Imru.s con iNco:neeli>ible tcierto, dada la distancia y Qbstacus 'I"â&#x20AC;˘ en e,ta se presentahan para
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impedir el objetivo; eI resto deda Eseuadra seg0ia caflonean.do y apagaba I@s iuegos de las tril!lcheL'as rebeldes de Bacoor y ca¡vite Viejo. El 22 de Marzo emprendi6 ia divisi6n Lachambre en demanda de Imus. Salio de su campament o del Zapote, y a las cuarenta y ocho horas cabales se izaba en 1a t@rre de la iglesia de aquel pueblo nuestra gloFiosa band'era nacionaJ.. No se creia geaeFalm.erite qlfle tamafla empresa pudiera lc;:,grarse en tiem_(i)o tan escaso: en Imus se temia gran lucha; lo que no se .d'udaba era clel exih0. C@menzaron los rebeldes a dispuiarlo a la d..ivisi61l li..aclilam.bre em. fas mismas orillas de Paliparang, y extremaron su defensa ell adelante. La primera re-¡ sistencia la venci6 pFonto y l!lien el regimiento 74; y eon.timialildo su mareha la divisi6n c0n gran convoy de viveres y 1mrnici0!les, lleg6 sin novedad hasta 1u1 kil6metro de Salitran. Alli pem@ct6, siendo h0stiliza-
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cl.a por continuo tiroteo. El 24 en ma,r cha ofensiva m~niobr6 para alacar una formidable trinchera recientemente construfola de 0.@s kilometros de longitud, qne cerraba por com.pleto el camino, apoyando sus extrem.0s en los b(i)sques y barrancos . Por tres puntos distint"os se asalto, sembra:ado de cadave,r es de â&#x20AC;˘ insurrectos aquel suefo, y sufriendo l0s nuestrQs sensibles perd.idas. Alli murieron heroicamen te peleando los ilenientes D. C~m-~tantino Grund., ayud~nte del general Marina; D. Juan P,erez Igua1 y D. Miguel Garcia, c0n cjnco individuos de tropa. Fueron en -~1 mismo siUo heridos lgs capitanes Mariano Ruiz y fi. Jgaquin Saenz ID. I 1e Gracia; los te:aientes D. Serapi(i) ~anchez, D. Atanasio Medina Chueoa, D. Ramon Gozalvez, el medico ID. Ameliano Rodriguez y 100 indiyiduos de tropa. Tomada esta trindhera enorm.e, la division acampo Jn Malagasan, entre el rfŠ Imus y el
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camino de Dasmar1iias, y c0ntinuo
el avance eavolviendg las posiciones
enemigas, que cubrian por entero aquel lugar, q:ue era ·Ia Meca de los rebel des. .Despues ·de la trincb.era que aca1>a,m 0s de cifar, se prese:nt6 otra entre JLumaEJgbayan y Tansagluman, ' de 3.000 metros de extensi6n. Se atac6 con un fuego convergente, muy pr0l01i1gado, de todas las c0lunnas, y el eaemig@ la <ilesa10j@, siel!l.do perse.guitl.0 en-li!1cha cuerpo a cuerpo. Mas cle 400 cadaveres dej6 alii. En la primera de estas trincheras se recogi6 mortalmente herido a Crispuio Aguinald0, tituiado tenielfllte genMll;l, hermano c!le Eiiiili1io, el generalisimo. La d'ivisi6n Lac:hamlilre tnvo alli tambiea bajas muy sen.sibles: murieron gloriosamente los c~pitanes Sanchez MingNez y Salg:ad0, el teaiel!l.te Ortiz y 22 indiivi«iuos de tropa ; fuerolil! h.eridos elteniente c@ronel CaL'si; los capitanes Hidalgo, L6pez y Comas; los 1
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tenientes Gonzalez, Ant0lfa, Ruiz, Vizcaiu, ~ernandez y Fragl!ler@, colil U9 individuos de tropa. A la vista de Imus, la divisi6t1 Lachambre, perdida p0r el et1emjgo toda esperanza, cubri6 su retirada, produciend0 un ,v0raz inoendio, elil cl!lya Hnea, desde la hacienda hasta el pueblo, se produjer0n muchas y estruendosas expfosiones : dos Tuoras conh!lvo el avance de nuestras t ropas tan criminal m.edi0; a!l cab@ de ifial t,iemp@entraron apoderandose del puebl0 y de anuella: hacienda que l@s PP. Recoletos telilialil en e1, y q1J1.e veniia secularmente d:estinada a servir de casa de safad, en la cual, sin gast0 algl!lo, la recuperaban o defendian mu.:. chos espanoles peninsulares sin reparar Sl!l ccmdici@11 social alta @ ba1a: todos cua,n tos querian, sin que jamas estuviese deshabitada; b.acienda y casa en lai cl!lal iFW 'tenfa.l'l grrun interes los frailes en procu.rarse ililsecticidas para c0nservar Jlas especies
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agricolas queen ella entraban, por(']]l!le em la m~sma, si no en mayor proporci6n, vol vian. estas a salir en forma de oadivas cristianas: el !50 ,p or 100 de las que de alli salian, aun en concepto de prestamo, no eran reintegradas n,imca. l,Quien lo ignora? Aun era densa la humareda causada por aquel il!lcendio qm.e los re. beldes prodl!ljerora en Imus, cuando nuestras tropas de la divisi6n Lachambrn eliltraroli1 el!l aquel baluarte de la tagalia iagrata, y al huir en horrible confusi6n sas moradores, dejaron em poder de los Iiluestros, daeftos legitimos del territorio, haces informes de iusHes Remington y Mausser, y cai'iones y lantacas, montones de armas biancas, dept>sitos de p>@lv.ora y mi.rnici@nes y fabricas de caftones y fusiles. A qna seftal que se di6 desde el campanario de Im.us, la d'esbandada b.abia ¡ sido geaeral, agolpandose en tropel las turbas catiJ1ntl!ladas y sus perverS(i)S directo;res
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formabaJil parte de aquella tmidad tactica de heroicos artilleros, que con tan.ta fama lmcharnn en los inverosimiles accidentes de la tierra vascongada. N@veleta, .eil pueblo al cual lo_s reheldes, despues del acta de Santa Cro;r,, ea que camll>iaron los nombres de todas las localidades de la zona, le llamaban los 1nismos Magdi1rnn., que quiere decir vencedor, fue facHmente veEtcida y atacaiildo Lachambve de re. ves los faertes atrincheram ientos que la- d.efendia1D . Los 11ebeldes, desde la lucha de [)asmarifias , ya n@ se :batian desde superfilcies cerradas; querian el camp~ libre. Lacl:iJ:ambre, que desde Manila regres6 a Cavite acompafiado del cuartel general y de mmchos jefes y oficiales qme iban a incorp@rarse a sos brigadas en el transporte de guef1'a Isla de Cuba, fue a Eacoor, aban.donado p@r l0s rebeldJes, y de a1H a Imms. El 30 salio COD' Sl!l d"visi6lil sabre Noveleta, Cavite Viejo y, Bin.acayan: en el misrm.o
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dia el general Barraquer envio un convoy de 240 herid0s a Manila. El _calor que ¡se experimentaba era ins@portable, presenta.00.ose en las ti;opas muchos casos de congestion, y .iel general Polavieja ordeNO que en 1 los C(i)1Iilvent0s se establecieran erilfevmerias para los oficiales, y en las iglesias otras para fa tropa. En la marcha a Noveleta iiba a la vanguardia la bFigada Arizon, la de Ruiz Sarralde en el centro y la de Marina a ])etaguardia. A las nueve de fa mafiana, estas_:tvopas c0memzanm a ser molestadas por el fuego enemigo : en el barrio de Balimbing, jurisdiccion d.e Imus, alH l')rincipiaron los rebel<H.es a qu:erer iml')edir el avance de los nuestros: a las cine<'> de la tarde e sostuvo con ellos fuego IlillllY vivo 11 el barrio de Baca<'>. it.a division acaffi!l')O entre !.os rios lang-ilang y Ladron, quedando la rigada de retaguardia al otro ¡ Iado el primero ; la de vangua[¡dia at otr0
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lado del Ladr6ID., y el euart~l general, con la brigada -Rmiz Sarrald:e, entre fos d(i)S rios men.ci,mados. Este es el sitio que se imama Dos Bocas. Desde el saii@ fa division Lacha:m.bre en. demamda directa cle N(i)veleta; y como . <llesde IDos Bocas se amenazaba a tres pueblos !!listimtgs, el 6:l;}neral en. jefe • vio cumplido su IJl.10Jil6sito, pu.esto -qrae aJ sitnar en aquel lugar la divisi@m, im:picli@ se comcelilhrase el enemig(i) el!l. 'HID. sol@ w1mto, sino qirn teni<a que iiloividir sos faerzas. Segllia ·la di vision el :mismo grden qtte en el dia atD,terii(i)r. La mediia lilrigada Ariz<f>H ya ail amaneeer sostuv.o nutrido fuego, y este se ge·Ji1,mvliz6 a las siete de la mariana ; m1tonces avamz6 el geID.erai Lae-lilambre con Sill caartel gen.erwl, rawida:m.eote hasta Ym,irse a aql!le];]a Turi<gadla de vaJil'guaFdi.a, ordtrnam!ifo ail general Marina avanzase tambigm, vadeando el !Ll.aEg-Hang. Umi:ose el gemeral Maripa al C1ilartel general y brigada Ari'z<fm, sostenien-
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do nutrido fuego. Pasado el rio Ladr6n, por otro nornbre de las Canas, iban nuestras fuerzas por e.mtre sementeras que forman parte del llano extenso que alli hay, todo el privado de vegetaci6n alta : en aquella su' perfieie palayera se enclilen.tFan el pueblo de San.ta Cruz, el convento , de Tejeros, Rosario y San Francisco de Malab6n a la izquierda; Noveleta esta a la derecha, ooulta por espesos gru:pos de ca.fiaverail: al ampar0 de ¡ estos precisamente hacian fuego l0s Febeldes, y cada instante mas nutrido, hasta que lleg6 la columna Marina. Desenvolviend0se ~sta por la iz. quierda y atacando a la bay0neta, el enemigo se dec,lar6 en pFecipitada inuida en direcci6n de San Francisco de Malahan : sobre aqu.el tlanco situ6 el general Lachambre artilleria que, ¡ c'ortaba la retirada a los rebel.des, y ¡alas doce de aquel dia entro la division, menos la bTigada Ruiz Sarralde, en Noveleta. Estas ultimas fuer-
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Zl;I.S se incorporarort tres h0ras despues; R.ufa Sarralde se hafufa tenido que detener, batiendo al enemigo ql!le le hostilizaba. Las bajas sufridas por la division en estos dos ultimos dias 31 de Ma,rzo y 1. de Abril f'1!ler@[i}. 6 indivicluos de tropa muer...: tos, _1 capi:tali1 y 39 sold'ados heridos c0n 4 contusos en la primera de estas fechas, y e , la s¡e gunda tuvo la hrigacla Marina 6 muertos, 50 kerfolos y 9 contusos: fas de Arizon y l;'luiz Sarralde -3 heridos. Dentro ya de Noveleta, aun s-e batian los rebeldes desde muchas casas; en este pueblo Ll(i) se veian, com@ .en los demas, 'tanlos clestro:tos por los incendi@s. En el rnanda,b a el d1rniio de la casa en que se alojo el general l.achambre ; b.abia siclo juez de paz; l!lsaba el titulo de O(i)ronel jefe militar, lilallandose en su cl0micHi0 mucl:iJJ0s e imp0,rhaF1tes ~@c11me-nt0s relativos al CaMp1uilan. El general Lachambre continuo a 0
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Cavite Viejo, no sin dejar debidamente organizado el pueblo de Nove4eta : alli quedo uma comandancia militar a cargo t'!lel teniente coronel Velasco, del 1. de cazadores , con ,seis compaiiias, dos de estas pede,neeielilfies a cada Ulila de las brigadas. Se entr6 en Cavite Viejo sin resistencia. Abandonadas Ia multitud de trincheras en <liseminaci6n por todo el camino, y cerrados los importantes caserios que hay entre este pueblo y el de Noveleta. Los fuegos de la Esc¾ad[a ha!bian causado qrncho dafl.@; pero ademas una granada lanzada con gran acierto por el teniente Va1 ra desde la bateria de Porta-V:aga, ¡ estroz6 tocl:as las easas que se ha ~ aban a la derecha de la iglesia y de 1ioda aquella parte del poblado,, pues ~Fodillljo un imce:mdi@ formidable. En el Sang1u:1ian-bayan, 6 sea el <Consejo popular de Cavite Viejo, fiiuraba eq primer Mrrnino ,Baldoero Aguinaldo; este era el que Ha0
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maban Pangulo sa bayan; era padre de iEmi1i@ el generalisimo y de aquel â&#x201A;Ź:'rispnlo que hemos dicho muL'io en la toma de Imus, en las trincheras de Anabo. Ooupado militarmente Cavite Viejo (Magdalo de los rebeldes~, cumpliemdo fas instrirnciones que del General en jefe recibio, Lachamlilre c0ntinu6 su mar~ha ~ Binacayan , sia haliar resistencia tamp@co; alH estaba en completo abandon@ Ia- eNewme tri.ncl;iera c0mtra la cual t an heroicamente luoh@ y de la ql!l.e con tanta gloria se apoderarn el general Marina el 9 de Noviemhre deI ano anterior, trinchera acasaim atada, aspilderada y arHllada, de extemsion y 0.e espesor in.ver@similes y fil.anqueada por l!l.na serie d¡e trin.cheras de menores dia. metros, perfectarnente construidas todas ; desde a:Hd foe el gemeral Lad.i),ambre a i@s p0iv0rines <il.e 13i1ilagayan, qne eran 1;n1estra linea avanzada y que tan molestados habian si-
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do en todas horas por el tu.ego del enemigo. En todas aquellas operaciones, antes de acampa,r en Dos-Bocas, el gene,r al Lachambre habia: venido arrollando y destrozando a los rebeldes, ¡ qu.e exwerimentiarcm m.1'.Lchas hajas, sufriendo los nuestros la del teniente Adelardo Martin y 9 de troJ_l)a 1 muertos, y el tenieate Davila , el medico Prats y !:16 de tropa heridos. Terminadas estas gloriosas j0rnadas, y antes de emprender el general ~achambre fa marcha para recupetar los pueblos d'.e Rosario, Salil Francisco de MalaMn y Santa Cruz, qu.e podian considerarse las definitivas de fa reconqYista de la provi.ncia de Cavite, el general Lachambre pidi6 la a1:1torizaci0D corresponciien-te pa,r a conferenciar de nuevo con e1 General en jefe, el cua1 le manifesto acudiese a Manila, mas dejando preparadas las operaciones pendientes seguinlas sin descanso, aprove-
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dhandos.e de 10 ma:ltrecha q,t!te estaba la moral entre los rebeldes que quedaban en arElil,as. Y asi se efegtu6. Despues de brevisima estancia del general 1i.acht:m1bre el.il Manila y de haber conferenciad o con el General en jefe, volvi6 a if:a comarca de :sus brillantisim os triunfos. Desde N@veleta, hostilizado por el enemigo, que en ~grandes m.asas reUFl:ido en Saa Francisco de Mala,b 6n destac6 sobre aquel lugar gran nnmen> de rebeldes con intento de rescatarla, siendo rechazados eon gran des perdidas, y sufriendo los nuestros las de 7 muert@s y 30 heridos, sali6 el gemeral Lachambre, :para recobrar San Francisco de Ma1ab6n. ptrnblo cuyo termino muni.cipal con:tina rpor el N. con el de Imus, . por el S. con el de Sil;:tmg, por el E. con ei Clle Sa,n :Pedro de 'F~ID.asan, y por el 0. con el de Naic; es un terreno rm1y fertiL El.il aql!lel pnebl0 hahianse reconcentra do todos los principales
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element0s. Alli orgamiza0d0 y diri~fond.o fa defensa colil gran empeiio 1 estaiban Andres 13on.ifado y el' generalisimo Emi!lio Aguinaldo; alli se re, unieron los Marian0 A1va11ez, p11eside'Bte d.el Catipmian de N0v,ele1 ta ; A. ris.ten VillalfltUeva ( Kam ffl!lt1.:mt), , Htulado Min-istro de Za Guerra; Hiego Mojica, Mvnistr-o de Hacienda; !Pascual Alvarez (Bagl!lmbunay~, Mi'/1,istro de la
Gobernaci6n; Frias, JJiroistr-o de Gracia y Justicia; et telefonista Ja@into Lumb11eras (13agumbayam). ql/J,e se h(J/bia heoho Ministro de Estado; cEI'Iililian0 EL de ,Dios, titufad0 Mrinisflro de Fomento, y mu4:tlii.isimos mas, todos el1os osten: ta,n do titu.los com@ los que sirven para exlji):resar nuestras mas :respetabfos clases y jerarquias. Am estaba a1lirni tristemente c€lebre Nocmn, vil instrnmento de fa~ torturas que pa~ decier0n los religi0stis y espa,m.oies peliliinsulares -cautivos «il.e l@s reheldes, sob:re t©d.0 despn1es que Uego al'li Pacian0 Rizal accHiBJila'fl.and0 a la
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vittcla de su h.erma1i10, el gran agitafil(i)I' de la Tagalia. 'r0d0 hacia creer que min C(Hll la fe perdida, ofreceriam arL1 los rebeldes gran hu;: ha. Era San Francisco de Maialil@Il su nltimo .baiuarte, y, ea efecto, se fuatiero:n coll vigor, pero p@F corto tiernpo. La division Lachambre f.ue hostilizada desde p0c0 d.espues de su salida,' mas la resistet1.cia efectiva la (i)Jrecieron. los relileldes cuando nl!lestras faerzas estaba'Iil a :1!.500 rrrntros del pueblo, KID. lugar t(:)do en.charcado, coID. los tiaID.cos al)oya<,J,os en las 0ri1las de dos ri@s; irrvadea'ble ei Canas, las tr0pas avanzarol'll baj0 el iuego de las trimcliteras eBemigas. Media li>riga<ila Marillila atraves<b el Lad1161il y la (i)tra media con la ole Arizon. ataco de :frente y COD gran denl!lem:o al pueMo. I . Bubo lrt1cha desespera<ila, ifi)ero eorta, com6 h.emms d.i.elilo; y preparad0 el asa~to pQr la artilleria, lo efectua,r0D lilm.estL¡as foerzas, eŠgiero:d(i) 30 prisioneros y dejan.do los e1rnmigos mas
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~e 400 cadav eres sobre el campo . El :general' Lacha mbre se apoder6 alli :ae can.ones de bronc e y hieno y muchas lan.tacas y de graa canitidad de â&#x20AC;˘fosiiles de aiferen.tes sis tern.as. Muchas bajas se eausa1ron. al e11emig0, ' segu.Iil aeaba mos de expre sar; pero fas nues1 tambi en liuer0Il! nume,r osas n VacapiM al n - tFas. Alli nos hiriem t Aycar ez, Vazqu les il lles ya los teF1iel el sos ctmtu F1do resl'lita y Barrac:bina, tenien te c0r0net CarM y los tenien.tes Garcia, Sanch o 'y Vi2carra . Las bajas entre los individ:U0s de tropa ksce:ndieron a 120. Con la toma de este puebl o se rescatarnrr ia viuda e 1hlijos del capita n Rebol ledo, asesinado en Noveleta. Segui dame nte se ocupa ron R(i)sario y Santa Cruz; en el prime ro de eslos puebl os fue muy etii.caz el auxilio de la Escua dra caiioneandol(i) con gran acierto, asi como a San Francisco de Malab6n, causa ndo moch as bajas a l0s rebeldes, y experimem.-
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ta:m.(!}(i) nos@tvos las Ille 2 mariner0s :fu.ericlos. L(i)s vecinos de Santa Cruz se ]Jresentarolil todos acogh~ndose al decreto de i0<il!liIMo, malilifestaNdo ser Jeales; · que si no se lmbian pvesentadlil antes era Ji)Or el temor ql!le les inspiraran las amelilazas de los insurreet@s; en efeoto, eralil tales mied'os 1t1Fl.dacllils; acabali>an. de ver de <ilJHC s1!lerfie 1os rebeldes quema:JiJaN Ia easa y se aplilderaba0 cle 7 ~ 8.Cl@O envases de palay ql!le pgseia en aq1!1el rnrnbl@ et ex g@li>1M!JJHid0,1·ciUo D. Kermenegiido dei Rosario, 1ndigema ftel a Ia Ma<\lre patria, que poF modo al gl!lnQ b.-ai!Ma (ij_l!lerid@ adherirse al CatipuRaD oMandl@ cgruninad'.o 11ue basta com el fmsiiamie:m.t@ en la sementerai de iQaiga; acafualoan de ver · de que s1!le·rte se'amemazlfl a iincligena ta0 leaI IW1il'Hi> D. Ca\alililo Afuuij, q·a ien abandome> t@lft@s s1!1s li>ienes antes que formar Jl)arle entre los catipun,acl,gs <del p1:1ebto Ille 1/t(i)sari@; ilildigeRa arnante de Esp>afil.,a talil fii:rme COffiQ aquel ea-
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;pitalil de San.ta Crnz, Gil Vabrncia, iJruie salvo den(i)cladamemte de fas gairras de :l0s rebeldes a seis kai1es de los de la pr(i)vimcia de Cavtite, y a la 1 .fami:Lia del espanol pendmsl!llar seiil.or /Mier, qne corrio l@s mism0s ri:esg0s ,<!Jue aqttellos [1eligi(i)s0s. La i9.eclara1oi~n. de los imd,i(i)s de Santa <I:rnz poNia consid.erarse simcera, Ill(i) Jilrocluct0 de la p0liiitica S(i)lapada.
H. Operaciones en otras Uneas. Sucesos de Calivo. -Mientras se ha'IDian cl'.esarn~Mado las ultimas ope1¡aciones t . IJ.(i)S ib.em@s referido en fa JilFOvincia de Cavite, el'1 0tras zonas se 1 roducian .fuech@s de armas dii,gn.0s de men.ci@n, atm cu.ando [(i) mism0 po,r s1,1 coliljumto ql!le en sus 0'etam~s se viese el deca,i mienfo de 1os reheldes. E1 ge0.eral Ja[1afilill(i) baitio elil. vecindades de Ba1ayam, en San Peclriiiio, insurreetos a quieJ.iles so:mpre'lillil.io acamf)a:nd0se, y cal!lsad(i)Ies 23 rnuet'tos y m11chos lierid(i)s, exliler-i-
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menitaodo Ios miestros las bajas de 5 de los iltimos y 2 que desaparecie-
t1Qn. Las prnsentaciones erain much.as. Elil llulacan la efectl'l.6 al frente de UD gram. gMpo el capitan mlllnieipal de Norzagaray; en PaterQs hizo lo rnismQ l!ln grupo de 71~ indiviCil,uQs; en Manila mas de a.000 familias se aeo.giei:-on a iNdnlto. Mmy cerca de la divis@ria de MaBila y Bulacan, en PasQ de Blas, la e@hrnma Olag1rnr-.Fe1iu rifi6 accion c@n IQs veheldes, eausali.ldoles 2:57 baj.as y dispersaJild(i)i@s por · cQmpleto. Arl!i. J!)errdjimQs al capi:tan Izquierdo y 6 solda!il.(i)s, reslilltalildo tambien· heri<ilos el eapitan Ros y el ten•iente iilon Le@p@ld@ Bej,a:rano. . En reoolil@cimientCJ por Na:s11gbu, e1 ~-efli1eval Jaramillo, OCJE1tintiaad:0 operaciJOJiies , cllestrnJ6 @tro campam~rnto atrincherad@. El tel!l.ien.te cor@n.el Jimenez atac<'l en el 2 de Abril al enem.igo q.ue @cupa:'lila ruerte :posici:@l!l em siti@ p:r6lximo a Manila, to-
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7.15
m.ancl:ola a la bayoneta y causancilo al elile·mi~o '114 muertos, ©©giendoie liI!l.il!l.chas armas, mm1icion.es y viveres. A.Hi nos h!i:rieron a[ capita.a Avila iy 4 de trop>a. iE'lil fa Lagl!l.lia de 'faaJ:, fa lan.~ha Amalia eeM a pi()Jue 2 bar1cas tr~pu'laclas por reibeMes de ios ;col'lrt@mos, hacien.do:lies 3 ml!l.ertos, y 5 de es1ms tuvieron los Febeldes el'l el bauio MaJrin, babfol.o por patru['las de cazado-res. Acaeci6 en est@s · dfas en tierr.as de Bisayas una im. tent0na re;v:0tl!l.0ion.aria, rapidam.elilte sofocada p@r el Jcierto con que se opero . .!UI'l fanatico, MaJmad(l) Castilll@, levant<fl gem.es en armas er1 e1 partiido tie Aalan; abia cemstihu.ido mm Catipun.am en Maliih0g, barrio _de CaHv:@, en la :pm-: vincia de Ca]i>iz. El gobemador poHtico :mi.Ii,t ar de ia m:isma, Sr. Tog@:ves, p1!1s0se ail l:mb1'a con el MiiliHlilildante general de Panay y Negros; se o·rga' izo l!l.Tia ex;pedici<ilR ;par.a l!leva.rla a cabo elil. el crucevo lJZZoa, COJil eIDll!l.m1
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LA INSURRE:ClllON
na de clesembarco compuesta de marineria y Guardia civil, al mando del segundo comandante del citado barco, el teniente de navio de primera D. Francisco Rapallo. Operaron estas fuerzas .flanq0.eando todo el t:erreno eli1 torn(i) de Calivo, en 50 kil61rn~tros de extensi6EI, y fraccionadas en secciones, pusiernn en precipitada f.uga a masas sedici@sas que, aunque a distancia, quisieron oponerse a los nuestr(i)s; cogier@T!lse varios prisioT!leros, que declararon el vasto complot alli urdido en connivencia con los tagalos, ocupandose documentos de imp@rtancia a bord0 de la balaodra Jolie T,rinithy, de la propiedad del tal Castillo, 1il@mbraclo p0F los del Catipun.an jefe militar de aquella zon.a, en la cual mmio. Al llegar el comandante general, distimguido coronel senor D. Ricardo Monet, a Calivo, di6 bando de gl!l'e¡r ra em v.irtud de} cua1 se presentaF(i)Il muchos sed.iciosos, y en lucha abierta con los principales com-
â&#x20AC;˘
EN FILIPINAS
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pr@metid@s que qu.isier@!il flilga,r se de ~u prision, pereciero n 19 de ellos. La conduota valerosa y prudente del conmel Monet y de las foerzas <lie la iMarina y Guardia civil que compu1sieron la expedici on a Calivo foe meveciolamente enc@:lir.11iada, p1rns exUngui6 por completo el germen de gra,_ve ma[ que apu,ntaba en aqueUa coma,rca . La Guardia iba extinguie ndo los grnpos de mal1lechores que queda~ ba,J11 e& Nueva Ecija y @tiras coma,r cas. En la de Batangas , durante los dias 9, 10 y 1t, de Abril, el general /aramil119 destruyo los w1tim0s atrin..c heramien tos que los rebeldes teian, y persiguie ndolos po¡r las estribaciones del Batulao, hasta la completa dispersio n de aquellos, a qu.ienes caas6 mticbas Thajas. Y aum.enta ban las presentac i0nes; se reconstit uian de una vez pueblos enter0s c0mo Santa Cruz y N@valiches. Hasta el secretari@ de Llaner,a
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l!.A INSURRECCION
se ac0gio a ina.ulto en El'llacan con un grnpo de 542 re1>eldes. A millares eliltraiba11 di<8.!t'iamente las familias en lQs pueblos reconquistados de la pro;vincia de Cavite. La insu,rreccion estaba militarrnent e vencida, aua cualildo era men.ester miliitarme:nte impedir reaccionase. Solo desli)Ues de .que l@s tagalos recapat:Jtasen, y colilsiderando la magnitud de la injusticia y error por ellos c@NH~tida y sufrido, se mostrasen veFdaderamelilâ&#x20AC;˘t e airrepentidos cl.el dafto causado, es cualildo podria 'Volverse ,al secmlar 'J!)atriarcal regimen poliiico administrati vo por fa dominaciolil espafiola alli i.nstaurado y pFacticado sin s0h1cicm de co0tinuidad , ab initio. 12. Iinfermedad del Gceneral en jefe, Excmo. Sr. Marques de P0lavieja. N6mbrase para sustituirle l}n el mando de las islas y de su Ejercito de operaciones al Excmo. Sr. Capit<iln genl}Tal de Ejercit0 D. Fernando Primo de Rivera, marques
EN FILIPIN AS
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.de Estella. Nombramiento de Capitan gene'ral, .Gobeirnador general del Archi,pielago hasta la llegada dl}l gen,l}'l'a,l P.ri'mo de Rivera, em favor del Excmo. Senor D. Jose Lachambre y Dominguez, tenien. te general. :__ Por atender a la salud de la Patria, ha ro11chos anos que el general Polavieja menosprecia la suya propia. Su prolongada estancia en los climas ca.lidos [e hiri.6 fa entraiia que mas :fijamente hiere el constituti vo de los e0ropeos: el higad@. Con. exacerbaciones y remisiones en tal padecimiento, el general ' afront6 en Cuba manifiesto Polavieja riesgo de su vida y en Filipinas de igual modo. A poco de instalar su ¡ cuartel general en Paraflaque, el paludismo de la regi6n le acometi6 en iorma franca, pero intensa; una :fiebre intermitente diaria de acceso <il@ble alter6 profundamente la calma que hasta aquel instan.te venia disfrutando en el organismo de dicho general, la entraiia de amtiguo lesi@-
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LA INSURREec16N
nada; y al!lnque la fiebre se domino pronto, sus secnelas en lo laepa,tfco hicieron entender a los medicos la urgente absoluta necesidad de que, en el primer barco, el ilustre general Polavieja regresara a la Peninsula. Asi lo explils@al 6ohierno de S. M., en cuyo poder existir debe la luminosa consulta celebrada por los distinguidos individuos del Cuer,po de Sanidad ini1itar, que la celebraron presididos por Sl!l Jefe Mcnico er Exceleliltisimo Sr. Inspector' D. "Joaquin Pia Pl!ljola. El deber que nos hemos impuesto de expresar nuestro propio con.eepto acerca de los prineipales hechos que en e~tas paginas c@lilsig0amos, lilO quedaria bien eumplido si no di.,jesemos lo que pensamos respecto de la enfermedad que aquejara al senor general Polavieja; nosotrei1s creemos en la eerteza absoluta del oiiag0.@sti.co hecho sabiam.ente por los medicos militaF<ilS y en fo indispensable del
' 72t
EN FIIJIPINAS
regreso del GemeFal en jefe a la Peniinsu1a; per@ al pr@pio tiemp,o tambien pensamos que, si mie11tras las 0peraci@n.es mas activas, tanto ea fa i(>rovincia de Cavite cuanto en las 1demas zonas, cualquiera que fuese 1e1 €stad0 de 'Salud de} gemeral Po1avi€ja, jamas por c0nsideraci6n a1gu11ila hubiera este dejado ei fierritori@ de sm mando, una vez lograda fa reconquista de aq11el1a provincia y casi €:xtinita ii.a rebe!ilfm l\ln las demas , el general ilusfre de quiem. nos ocupamos tambien 1mbiiese enfermad(i) io i/astante para aban.cl:omar ac111reUas iislas en el caso de (i_{>Ue en. la Metropoli ,ee !hubiera dudado respeobo al €D'Vi0 e los mediios que el general P(i)la-l ieja creia precisos para asegUFar cleffi:nHliv:amente la [PacHii:cacicfm de aqtte-
~~~~ -~i-~~~~~ -~~ -~~ -~~:~~~: .· .. ....... ·. ·. ·. ·.::::
········································ ······································· 1El Gobi€rJil.0 de S. M. nomhr0 al i6
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M
INSURREC&ION
seiiior Marqu.es de Polavieja Presid.en,t e de la J1mfa Commltiva, sin perjuicio de c0n.tinuar en el mando hasta Sl'l em.baF14ue, y para sustituirle en eI mando Ille Filipinas se nombr@ al ExcnHi>. Sr. Capitan general de Ejt'.lrcito D. Fernando JPFimo de Rivera, marques de Estelia. :P-or la Presidem:cia cl;el Comsejo de Ministros se expidi6 otro decreto n@mbrand:o para el mismo maiildo, hasta la lleg:ad.a del seiii@.r gen.eral Prim@ de Rivera, aJ! Excm@. Sr. D. Jose «de 1..achambre y D@minguez, ya ·elevado Ct>lil general a·p lauso a la alta jeFa,r qofa de tefiliente general por su gfori!))sa campafia en la pr@vililcia de t:avite. I.a Gaceta del drfa 15 de Abril pullllicaiba el sigu.iet1te decret@ del Gobiern0 gen.e:i;al de las islas : «Manila 15 de A'ori,l de 1897.
»FJiabieD<iose dignado S. M. admit\i,r fa cl.imrisio111 ~ue p@r razones de
EN FUJIPINAS
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salu.d he presentado del Gobierno general de estas islas y demas car-gos a:nex@s, con esta focha hago ent1:1ega . de eUos a:l Excmo . Sr. Teniente general D. Jose d.e Lachamlhre y Do1 miaguez, desigllado por el Gobiemo , Supremo para ejereerl@s ililterina, menb~. Comuniquese ypuMiquese.P0lavieja. » ·
13. JJJntr,ega del mando y negq·eso a la Peninsula del Sr. Marq_ue-s de PoZavieja.- Este h1siigne general em.itreg6 el 1 man.do de las isHis al bizarro gene1;al Lacbambre. iColiFlo qt1.edaba en tal fecb.a aquel territo,ri@ que · eJll. tanta exten.si6n estuvo cornfilag11ado? Bien a la vista estaba el estado eo que le {l.ejo el ilustre marques de Polavieja. Se veian pacifi.cadas to<llas fas prnvincias Norte de Luzon y :Bataan, Zambales y Manila; algtrnos rem.oniados en Morong form.and.a pequ.eftos grup@s laliro-facciosos, los cu.ales no sumarian en j @n1io 3Q(i) horn-
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LA INSURRECCI6N
bres; tamp0cG queda,b an partidas en Nueva 'Ecija, y Pampanga y Pangasinan perfectamente tranql!lilas, excepci6o. hecha de las sierras de Sibul, en donde se manteHian 500 rebeldes, tas desprovist0s de armas, q1:1e se sabia no¡ Uegali>a a 5tl el nu.mero de fusiles con quâ&#x201A;Źl contaban; en la provincia de Bulacan reinaba la calm.a cuando tanta intranquilidad 1labia irnnperadJo a11i y tantas docenas de co.lilillba~es se hafufa:lil renido ; en Tayabas mo habia mas de 100 tulisanes con armas blancas. En Batangas, pacificada toda la pa:rte -oriental; en la 0ccidesta[, desde el :Pa:n.sipit hasta la 00sta clie Ternate, com:FJVeRdida toda la parte de Cavite, qm:edaban en armas los pueblos de la sierra con partidas diseminadas por ambas vertientes, pueblos que s@Jo p(ill' miedo .lilQ .se prese.n,ta,Tua.lil a indul o,. pues los ['eTueldes los telilfan atemorrizados con sus amenazas. Los paeblos tomados en la pwvh1cia de Cavite, rapi-
EN FIIJIIIINAS
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dameate reconstibuyelildose; el 13 de Abril se sumaban mas de 24.000 presentados. Con e1 mn de c0ms0iidar las o}_i)eraciones ejecntadas; cerradas por complet0 con la creaci(m. de aquelil a tan estrategica comaI'ldanci-a mi[Har del Desierto de Manila todas las salidas para los pocos rebeldes ~p:ie quedaban en las proximidades del Sungay; el general Polavieja, para n@rmalizar p@r en.iliero aqueUa ~ierra de Es'(ilal'i:a con las poco, numerosas fuerzas con que contaha, entreg6 a su. sucesor una nueva notabilisima por todos aplaudida -organizaci6n militar para Luz6m, col!ltet1.ida en la Ordelil. general del Ejercito de 12 de .A!frril, y c;_i:ue, por QOt1.siderarla obra de estadio, la ilFaI'lscrilbimos tambien liiteralmente:
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1'A INSURRECCl0N
EJÂŁRCITO V CAPl'fANiA GENERAL OE FILIPINAS E. M. G. -
SECCIIDN DE CAMPANA
0Fden general de! Ejereito de! dia 12 de A'.bril de 1897 en Manila. El Excm0. Sr. Genei;a,l en jefe se ha servido d'isp0ner quede disuelta la divisi6n y comandancia general de La Lagt1-na, BataBgas y Tayabas, y que las tropas en operaciones y de guarnie-i6n en esta isla se organicen en la fŠrma siguiente:
Brigada de Taal.
Jefe de la origada: Excm0. Si;. General D,. Nieolas Ja,ramdU0 . .
Ayudantes de Campo y oftciales a las ordenes: Capitan de infanteria D. Mariano Lecha. - P1:i:mer tenieBte reserva dnfan-. teri,a D. Felipe Blanc@. - Segundo teniente de infanteria D. Leop0ldo O'D0ilell. Oftcial de .Iilstado Mayor: 0a:pitan de ingenieros en practicas en el C\rnrp0, don Manuel Garcia Moi;ales. Comisario de {Jluerra: D. Francisco G6mez.
'EN FILIPINAS
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Escolta: 'IJn eabo y cµatro soldados del regimtiento caballeria num. 3L rnFANWERIA
Batall@n cazadores a11m. il.2. Ba:ta11.6n cazadores nu.m. iJ!3. Ba-taill&:n cazadores n.u.m. 15. VohmtaTios de Albay. A!RTIJ;.1.ERIA
Una bate:ria: de1 sex,to ll.'egimiento de· monta,iia. ING.E NmROS
'Dos secciones de la tercera compaiiifa del batalli'.ln de iagenieros y un pequefio farque. /
TROP-AS nE 'AIDMiINISTRAieIQN MI!Wl'AR
· Una secei6n de traasJ,Jortes de 20 hom·l:ires y-los obreros J,Jrecisos. , / ,En 'il'aa:l, un hosJ,Jitai para 100 eamas. , DEP6srco DE
vi VERES, MUNICIONES v EFECTOS DE. UTENSI•LiO.
f.os sufi.Gtentes para las necesidades de la l:irigada.
L1;n,ea de aprO'Oiswrw,mAento y e1'aeuaeidn: llor el mar.
Esiaciones telegrdflaas: Las de la provin- . cia de Batangas.
728
LA !NSURRECGION
Linea Tanauan-Baiiadero. Jefe de la linea: Teniente coronel del batail6n cazadc,mes num. 11. FUERZAS
Cuatro compafiias del bata!16n cazadores num. 11. Voll!lntarios de .A.b11a.
Linea de apromsionamiento y wacuacion: En epoca de seca por Calamba, y en la de lluvias p0r la Laguna de Bomb6n, San Nic0las a '.L'aal, que t0ma entonces la de la brigada en este punto. ' Estaciones telegraficas: Tanauan y Calamba. :E..as 0tras cua,iro compaiifas del baia,ll0n cazad0res num. n estaFan destacadas, dos y media en la pr0v:incia de La Ii,aguna y una y media en la de Tayabas, a disposiâ&#x20AC;˘ei6n de i0s respectiv0s jefes milita11es, gobernad0res de ellas.
Brigada de Silang. Jefe de la britfJada: S11. @eneral D. Vicente Ruiz Sarralde.
Ayudantes de Campoy oficiales d las ortenes: Primer teniente de infanteria doll Jose Garcia Otermin. - Primer teniente de infanteria D. Antonio I!>alf>an.
EN ~IIJIPINAS
7·29
Oftcial de Estado Mayor: eapitan de Esta.do Mayor D. Victor- Mart/in. : Comisarvo de 6'ue1·ra: ]l). Fra,1rnisc0 ' iBiedma. , JJ!scoita: Ut1 cwbo y cuatii0 s0ldad0s del ! regimient0 eaballeria nili.m. 3L 11:IFA.NT!l'RIA.
Regim.iento infanteda num. '14.-Se:iiOF c0r0nel l!l. Diego de Pazos. Batallon cazadores n.um. 1, bwta1io·:a ea-zadores num. 2, volruntari0s de U0c0s. M'.ed:ia brigada, se:ii.011 c0r0nel clel il1egimie:a.to !irufauterfa num. 69 D. Pedrco de1 Re.a l. ARTI•L LERIA
1ll"na baiteria del se:d0 il'egimient0 de m0nta:iia. [,NG<ENlER0S
Segttnda e0miJ!laiiia deil l;Jwta116n de i:agenier0s c0n ttn ;pequefio parl')_ue. TROPAS DB A!DM[Nr8WR&0ION IDLITIA.R
Uaa secci6n de tJia,nsp0i,tes de 80 h0mbres y iJ.0s 0b1,er.0s que se conside:ca:n 1nieeisos. A. Sil~ng se trasladara e'l hospitat de Ca-
730路
LA INSURRECCION
lambai, asi como 1as factorias, dep6sito de municiones, efectos de ingeniel'o y demas; te-niendo existen.cias suficien.tes para las neeesidades de la bF,i gada.
Lmea de apromsionamiento y er;acuacion: Por el camino que concl.uce por earmona a Bifi.an; en este pueblo permanecera el h@spi-ta~ y los cl.eJ!)if>si,tos de vfveres, m1miciones y demas efectos. Estaciones telegrdficas: Silang, Bifi.an, Perez-Dasma1:ifi.as en comunicacic!m dir,ecta con Imus.
Br.igada de San Francisco de Malabon.
Jefe de la origada y gooei路nador politico miZitar de la prar;mcia de Camte: el Excelentisimo Sr. Gen.era~ D. Rafael Suero y Mal.'coleta .
.Ayuda11;tes de (,Jampo y oficiales d las 01路denes: Capi,t an de infainteria D. Rafael Fer-
nandez cle Castl'o. - Capitan de caballeria I>. Fer.min Perez R0ddguez.
Oflcial de .Estado Mayor: Capitain de Estad@ 'May@!' ID. igBaci-@ Desf>uj@l. Comisario de Guer1路a: D. Fedr@ .A.mboade. Eseolta: Un cab@ y euatFo s@ldados del Fegimient@ caballleFia num. 31.
EN FMJPJNAS
IN1FJl:NTERIA 1Regimiento
infaute11ia Rlil.m. 73. - Seii0r ' cor0nel D. Francisco Ili>ale6n. , Batall6n cazad:011es Rum. e, lbata116:a cazad0res nam. 14, w0!'1:l!Iltavi0s Ca:ga:y:an. ¥:edia li>r,i gada, sefi0r c0r0nel Iil. Antonie ¥0:atwno. I
ARTH:.LERIA
' :Una ba..teria de~ se~to regimiiento de montafia. il:NGEN'lEROS
Una secci6n de la tin·cer.a c0m,p aiiia de1 bata!,16n de ingen,ier0s y un peq,uefi0 parque. 1
. ;,..
!l.'ROPAS il!>E =MrNISTRACI0N iMlILITl\.R
~ Un.a secci<fm cle transp0rtes d!e 20 h0m-
f
~:-:::sF:::e:::::: ::i::::d~:a:0::::
r l c0n 100 ca:mas.
li!EP0SiT0S DE 'Vi!VERES, 'M)WNWI0N ES Y RF,E©1
TOS !E>E 'UTENS!'LI0
Los suticientes palla fas necesiclades le a brigada.
732
LA INSURRE€CiijN
Lvnea de apovisionamdento y 1!'1)acuaci6n: 'F@r ;tii'e1ma, hasta San.ta Cruz, y ffiuvia,l p0,r el mo « 0afias » a,l mwr. Ademas se na ili1stalado una, linea !Deca:UJvi,l'le desd!e Cavi-te Niuev0 a Noveleta. Iilstaeiones telegrdflc(J;S: San Fi:ooeisco, N@veleta: y d.e este ]JU.Ut@ c<in real general y Ca;vite Niuev@.
Brigada ile Imus. J-efe de la origada: Exem0. SJ.'. (General D. Jase Past0r.
.
.Ay,1/,(,dante de ()(11n1,po '!I oftciales ti las<»'·denes: ©apirlian. de infaJilJteriai 'D. Luis ·easti:@:vei:d:e. - Segund0 · teniente de in.fan.,terfa D. Rafael 'Ji.'astoi;. Ofleial de JiJstado Mayor: Ca,pitan de Estad@ M'ay@r I>. GaibFieE Visman.os. @omisario de Guer1·a: ]i). E:nFiqu.e Diaz J Fel'lilalil<i!ez C0si0. EseoUa: lJll 0a!o0 y cu.atFo soldados del regimien:to ea,bwl-leria R11m. 31. ~Nl;'!A!NQ'ER•Ill.
\
PrJmer, ili>ata'1tlifin de1 segund0 regimiento i,Rfa)lteria cl.e Marina. - Sefi.@r c0ronel d0n iFlerm,:ln iIDiaz Matoni. Ba•t aMb eazacl.0res :nim. 3. Batalil@n eazau@i!es nlflm. "I.
EN FDIJlPINAS
733
ARTILLERllA.
iITDa secci0n del se;.,r,.t<;i regirniento de mon·t ana. INGENiiElR0S
Una secci0n de la sexta c@rn(Pafi1ia ileI pataU0n de ingenierGs y un peq1:iefi0 p_a,rqu.e. f TR0Pll.S J;)E A'J;l.M!INrBTRA©lfflN M[[L'ITAR
, Una secci0n de transportes de :I:O hombres. En Imus un h0spitail e0n il.0O camas. DEP0SITOS DE vtvERES, MUNICI0NES Y EFECT0S llE N4'ENSILIO
J-os suicientes paia cuib:Fir las necesidades de I.a brigada.
Linea de apro'Visionamiento y evaeuaeion: :JiloF el d0 de su nGmibre al ma1,. :i Estaeiones telegr.dficas: Imiu.s, qiu.e en}aza c0n ia Fed general p0r ifi!ac0or y PeFezDasmarii'i.as y c0n la brigada de San Fran• t isco de 'Malalildn y Noveleta.
omandancia 111ilitar del Desierto de la pro~incia de Manila.
Coma,ndanif,e militar: Se:iior coronel d.011 · iu.an Nu,fi.ez Liu.ci0.
Oficial ,secrretario.
734
LA INSURRECCI6N
0ftcial de Administracion miZitar: Oficiail pl'imero D. Manuel A.nt611. FUERZA'.S
Batallan cazadores num. 5. Voluntari0s Ilongos. Voluntamios Uni6n. Vohmta,rios de la rsabela:.
Linea de apro'Visionamiento y e'l1acuaci6n: Por Pa,rafiaque ~ Muntinlupa, donde eontinuase un pequefio dep6sito de viveres y municiones. Bstaciones telegrriftcas: Parafiaque, . Las Pifias, A.lmansa y Munttnlupa.
Gomandancia general -de Manila y Morong.
eomandante general: Excmo. Sr. General gobernador militar de Manila D. Enrique Zappin0 .
.A.y,ud.antes lie Campo ?I o,ftciales ri las ordenes: 80,man.dan,t e de infan.teria iD. ©a,1ix-
t0 G11anado.-©apitain de infa,n teria D. Ernesta Zappino. 0ftcial de Bstado Mayor: Capitan de Estado May0r D. Luis Roig. rn,FA.NTElRiA.
1\res «0mpafiias d1el regimiento IllUID. 70. Cuatro conipafiias del bataM6n cazadores num. 9.
EN FM,!PJNAS
,,
7.35
Batal[<f>n eazaderes nUcm. iLO. Des eompai'j,fa,s de! seg,u.ndo il;Ja,,taJUil>n del primer reg,i mien,to de i;nifainte11ia Marina. !D0s eempaMas del segl'l.Rd© batalHm del segm1d0 r.egimieRt© de i,:nfanterif:a Ma,r,i na. Baitall<fin. v01untarios de iMan4la. CA.BA.LL'ERIA
Regi,mienoo num . 3:J:, a excepci&n de las esco1tas. Escu.adr,il>n pendnsu:la,11. Escuadr6'l!1 de voluntaries de iManilJa. illTILLERf:A.
iltegimient© de plaza. Una bateria del sexto regimient0 de m0n taiia. / 'liJna bater.la de nue-:ve ceRJ1IDmet:uos. rne:EN[ER0S
'Una secGiil>'l!l dei ibataHl/n:i. de [ngenier0s. TR©P.A!S ililE !A!DMffiNI'8ffiR,. M')r6N MU,[TA.R ¥
GUARDIA CIVfJ\l.
'La <'Ire :las d:0s r revincias y la seeci6n veiliera'l!la.
Comandancia general de las pr,ovincias del centrro de buzon. ComanaOlll)te gener(JJl: Exem0. Sr. Gttnera!l D. Diego de los Rios.
736
LA INSURREt:CI6N
Ay.udantes de Cami/po y oftciales ti las 6rdenes: Capitan. de i:nfan.terfa D. Juan Moscoso. -Teniente de artineria D. Eduardo lJ&er. Ofici,al de Estado Mayor: Capitan de Estado Mayor D. Fernando G6mez y Zu1ua:ga. Escolta: l:J:n ea:bo y cuatro soldados tlel reg¡imieD!to eaballe11fa n.um. 31. INFANTERIA
Una compafiia del regimiento num. 68. Una compafiia del regimiento num. 70. Una compafi,fa del primer regimiento de infa:nterfa de Marina y otra; del segu:ndo. Bata:116n. cazadores num. 4. Batall6n cazadoPes II.Um. 8. Cuatr0 compafiias batall6n cazadores num. 9. Volu:ntarios Rios Can0;vas. V0hmta11i0s PampaI1.g0s. ING'ENIJEROS
Una, secc-i6n del batall6n de i,ngenieros. GUARDIA CIVIL
1.a d'e las p110vineias del te1mi,t0ri0.
I./iJnea de apr.o'Visionamiento y evacuaci6n: El :lierroca..rril de Mani[a a l>agupan. Las fuerzas de caballeria en operaciones,
737
EN J;1JLIPINAS
1:111a vez concentra das en. est;a eapital, excepci6n hecha de las escoltas, se dedica1 ran en primer termin0 a l'emontars e. I El resto de la artiUeria que nose cita en esta @rden general, (lrue se encuentra en operaciones en la isla ae L11z6n, se c@Rcent'rara tambien en Manila. 1 - La Guarilia civil q ne presta sus ser;vfoi@s en los cuar teles generales se i"qcorporara en primera 0portunid ad a los tercios a (lue pertenece para dedicarse al del Institwto. Las de! 22 tercio qu.e se encuentra n en esta isla marchara n a las Bisayas, pe110 sera preciso que preceda ordeu de este euartel general. La evacuaci6 n de enfermos 6 'heridos de /las :fiu erzas qe Oavite y ManOa se efectiuara con las tres gabanas hospitailes cedidas por la Oompaiiia Trasatla.ntica y obras de1 puert@. Diariamen te saldra de esta capita;[ una gabarra remolcada p0r una dle las lancb.as de las guerrillas 6 de las obras di.el puerto, ajustando se al turno establecido, y fondeara sucesivam ente en Sauta Cruz, Binacayan y Parafiaqu e, donde han de acudk los enfermos y. herid@s que hayan de evacuarse; las escalas debera,n hacerse de modo que a Santa Gruz se l~egue c0n alta marea para facili~ar el embar(lue .. 47
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LA IN'SURREGCl@N
Cuando sea preciso en la 'Laguna de Bay se dad, ]a 0portu1Ba 011den por, este Estad@ _ Mayor, pa:ra <qae l<'l preste una de las ga'barras.
Territerie q1Ue eomprende· oa.cla. u,no de los a.n,teriores ma.dos. l3R _1 G.A.D.A.
DE
'r.A..A.L
Toda fa JDr@vineia de Batangas men0s el territ<'lrio <qu.e se halla a;MN011te de! arr<'ly@ P0.lo y costas <!le la Ji.aguna dP. Taal, siend<'l esta de la ja11is<!licei6.!'! de la l!>rigada, y Ia: lLnea imaghiaria que tiefile la punta de 'LiFJa: e0n el vertice <!ler m«mte Mala.ray.at. ~~NE.A. JilE TANAUAN-BANADERO I
El rest0 0.e la provinei,a de , Bafangas, mlis la parte 0.e Ta pro;viI'wia de la Lag1rna e0mipre11dida -entre [0s ar110y0s Siranlupa y Fans@·!. BRlGADA :BE SI LANG.
L0s Himi,t es 0.e fa lifilea: 'l'amauam-Baiiadero, ia ·pamte 0.e c0sta cle 1a Lagana de Bay comprendid!a enjfre la d!esem'bocad!ura arroy,o Sii11a:n~u.pa y los !:£mites de Ia pr0;vi11ci,a de la :Lagana e0:n la d!e Manila, «ileseendiendi0 p@11 e111fo Zapote l:J:.asta el pas<'l Ma-
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739
ledang y al Norte desde este punto por el , paso Alibambang al bartio de Magasang sobre la carretera de Perez-Dasmarifias a Imus al vado de Pasong- Castila en el rio , de.San. Agustin. BRIGADA DE SAN FRANCISCO DE MALABON
Sus lii;ni~es son Este el rio de San Agustin desde Pasong -Castila hasta SU uni6n con el rio Ladr6n, el mismo rio hasta su desembocadu ra en la ensenada de Bacoor y toda la parte de costa de la bahia de Manila al Norte y Oeste de la citada desembocadura. .
BRIGADA DE IMUS
Al Norte la costa de la ban.la de Manila entre los rios Zapote e Imus, al Oeste este rio y el de San. Agu.stin., al Sm- los Hmites Norte de la brigada de Silang y al Este el rio Zapote.
I
COMANDANCIA DEL DESIERTO DE MANIâ&#x20AC;˘LA
Toda la parte Sur de la provinr;ia de Manila limitada al Norte por la linea de la embocadura del brazo mas occiden'tal del rfo Pasig a Parafiaque.
,40
hA J,NSURRECOION
C©MANDANCUS GENERALES DE MANILA 'Y M0R0N Y DE LAS PR©V'INCUS DEL CENTRO
DE LUZ6N
'L@s mism0s <iJ:1:1.e b.0y tien.en se:i'ialados. llWSTR(IJC:OIOiWES PJ\RA LAS FUERZAS DE LA I?R0VJN€IA DE €AVlll"E
©
EN €0N,XCTO C0N ELLA
Descl.e Ltteg·o a!l si,twaTse c@n las fuerzas C!J:Ue se les asigna @cl!lparan los puntos que hoy se emmen1iran gua,1mecid0s si n0 i;eciben ordenes en contrari0; cuidarran de tener @o·n.stan.te enlace sus '.fuerzas con las Mmit110fes, bien enlmndido que estos no ·exis·t en <mand0 se trate de la persecuci6n d'el enemig0. SU: princi,pa1l misil'in sera 1i,m piar de Tebehlies sus i'espectivas demaircaciones, para lo cual wr.0cliJirara tener en eonstaNte movimient0 c0l.umnas mas 6 menos numerosa,s segun el terren.0 <g)Ue han. de TecorFer y 1rnticias que ten.gan del eEJemigo . .Atraera,n ])01' to<ilos l@s medios p0sibles · a l0s llJ.'Ue se Iiallan e11 el campo insurrect0, pa'Fa 10 c:ua~ mantend'ran una exquisita vigifancia a fin de que las tr0pas hagan tiueg,0 tn:icamente a ios <')ll!le se preseNten de u.na manera lirnstil, fav0reciencl.0 la :uec0ns,
EN FILIPJNAS
741
trucci6n de l0s poblad0s en los pumtos con, venientes con arregl@ a lo dispuest0 . Nose destrllirai mais que lo abs0l1!1itamente indispensable pa,a l:a seg·u,r idad de l0s puestos y vias de comunicaci6n. Se recomienda el saneamient0 de los p0b'lacfos, carainos y campos, enrterrando l0s cadaveres y quema,nd0 :Los animates muert0s (jjtle hayan (llledatlo al descll0iert0. Los Excll!@S. Sres. O0ma,ndantes' gene11ales de artilleria e ingenieP0s, [nspeetor c!l:e Sanidatil eiEn,tendente militar, tendran mlly presente esta ord'e!.'l g·ene1·al, para dentr0 de sus atribuciones respectivas . tomar por su parte cuan..tas medidas fueran necesarias al mej6r servic,i0, ya es,te fin pI10cura/ ran tener noticia exac1ia y foecuente de las existencias <il!e vi'l'eres, munici0nes, estancias de ilrnspital y de.mas ' eoaceJ.>nien,te a sus cometid0s, previniend0 coa su eel@ las necesid.ades de las t1'0pas. El Exem0. Sefi.0r Intendente milirta,r pondra especiaJl cuidacl.0 de (lUe en la eapitailidad de las brigadas y demas [li)Ul!lt0s 6 puestos d.onde sea p0si0le se Sllministre pan. Como c0nsec11encia a es-ta mrnva organi,zaci6l!l, los sefi.0res jefes y oficiales que no tienen destino el!l el'1a v0lveran a desempefiar sus anteri0res carg<i,S. - El cor@•
7~2
LA INSURRECCI6N
nel jefe de Estad@ Mayor gener111l interino,
Apolinar 8. de Buruaga.
Es ilildisct1tible que al entregar el man.do el insigne general Polavieja a su digno sucesor el general Lachambre, qtte p@r breves dias lo ejercio, muy pFestigiosamente por cierto, la insurreccion estaba militarmente ve:ncida y a~onadados los elementos que la propulsaron. El general folavieja, despY.es de tender su mirada inteligente por el campo de la inSl!l.f!Feeei(m, hal:i:ia diciao: « En Cavite esta el escandafo , y el peligro en Bulacan.» Ahora bien: en la pri;mern ~e estas dos provincias quedaba lo ql!le hem©s cimsignado: algunos grupos rebeldes ea las proximi<ilades cl.el St1ngay, condenados a mori:r p@r ina0ici0N 0 a Meil exter.m.ini© dentro del est!recho geometrico ciret1l© en que se les encerr6, sin ql!l.e eD el hubiera l!I.D solo punto vulnerable , es deeir, de acceso
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EN FILIPINAS
facil para la h:uida: en Bulacan, desde el hecho de Cacarong de Sile, 6 lo que es igual, desde 1. de Eoero,los rebeldes habian venido tan a me-¡ nos, que efil Abril ya no contabam ios 500 hombres que perman.ecian alzados en toda la comarca mas de 50 armas de if:uego. El escandalo habia cesado y el peligro habia desaparecido . ' iEs que mas tarcie, en el mismo territorio de la provincia de Cavite, que durante nhleve meses viviera emtre des6rdenes y crimenes, am1 se produjeron hechos de guerra glorios<:>s para rmestras armas, pero duros y a otra gesti6n ya encomendados? iEs que todavia hubo am un Maragond6n yum Naic? iEs que pm,- fuera y mas Larde aun se han librado combates, cuales los de Puray, San Rafael y Aliaga? 'Fodo ello â&#x20AC;˘ ha sido el soplo del Catipaoan sobre los resc(i)ldos del g:ran incenciio ailli apagado por el valoi' de nuestras 0
744
.,.
LA INSURRECCION
tropas, hi1comparamlemente dirigidas p@r el general Po1a vieja y llevadas peritisima y b.eroicamente a los lug-ares de combat@ por el general Ii..aehambre y por todos los dermis generales, j,efes y ofiefales del Ejercito y Armada, euyos n.omllires ·debe consignar em caracteres indelebJ,es la historia patria, para rendides el triTuuto que merecen . . ;, Es-taba previsto p@r el general ' P@tavieja el caso €le que a:<Juel resc01do, del apagaol:o fuego, en la pro-: vi.lil!cia de .Cavite y en las demas se avivase po-r l@s vi1mtos y de nuevo amenazara la destrucci6n de lo q11e se iG>gr6 salvar? Nos@tros no conoceNiUils io intimo de lo que eiJi general 1?@lavieja rad0 decir al gobiern0 de la Metr@pQli; p1wo sabemos ~ensaba, ·(ifl!le para co1,1s0]idfa:r. ei triuID.fo y no 'hace>1· ester:il la sangre derramada, emi pwecisQ que la ;f>atria h.iciese nuevo esimer2;0 y 1'1:e:vase a Fiiipin.as 20 batai~ones mas. lr'elilsaiF estQ, euand(j)
EN FILIPINAS
745
no se hab:ia sufrido la menor contra/ rredad, sitH,, al reves, cuamclo todos los hechos de guerra constituian interminable serie ,de triunfos , aun cuaodo estos costasen la vida en r aquellos !1.22 dias de ma,ndo a 1 ge1 neral, 3 1efes, 16 ofiiciales y 2'79 soldados, y dejasen heridos, mas 6 menos gravemente, 'a 7 jefes, 73 oficiales y '1. 200 iadi vi duos de tropa; pensar esto cuando el general Polavieja, vict(i)rioso pero enfermo, veiase obligado a regresar a la MadTe patria, y, por consiguiente, desear ' tal aumento de fuerzas para mayor suma de medios de sus sucesotes, ' era la de1nostraci6n mas evidente de que el general Polavieja compre1ildi6 perfectamente la extensiim del mal entre los fan.aticos tagalos. Es seguro que lo que el general Polavieja pensaba, por patriotico deber fo expNsiera al G@lilierno de 1a 'ÂĽ1etr6poli, y si asi acontecio, jah! ; nadie puede dudar que la gestion de
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ÂŁA INSURRECCl6N
este i1ustre general, aunqae rapida, fue ta:111 glori0sa eorno compfeta:: vencio cuanto tenia al frente, y dio formula para yencer lo de despues. EI 15 de Abril embarco el general Polavieja para efectuar su viaje de regreso ai la Madre patria. El magnifico vapor Le6n XIII, de la Trasatiantica, le conducia. Si grandioso babia sido el vecibimiento que la ciudad de Manila habia hecho al Marques de Polavieja, no hay que l)(llilderar las irclamaciones y sinceras muestras de respeto, admiracion y carino qMe cal!IdiHo tan ilustre recibio al abandonar la capital de las islas, dejaIDO:o err ellas la mas placentera eterna memoria. En la mafiana del citad0 dia, Masila eJiltera ac11dio a kis :rnuelles del Pasig, para dar triste entusiasta adios de despedida al general esclarecido p(i)l' tan l.'lotorias virtlitcies. Hi~ cieJ?onsele los h~nores de_ordenanza, y, ernbaire(J en la lancfua de MaJaca-
EN FILIPIN!S
, I
7fi7
, fl.an.g, coID.v©yada [(!)Qr todas las stu·tas 1sn las ag1.ms de aqprnl ri@, y <:Jl:1@ c@ndujercm hasta el Le6lfl! Xlll a t0das las at1if:(i)ricla<iles ci vi1es, m.iHtares y. eclesiasiticas: ailad ti.hiaiID., en.1tre talil literm@so conv(i)y, la Felisa, ia Polavieja, el P. Ca:pi!M,n, la Cristina, la Ilo-ile, fa Mariposa, lievainclo a Slil b©rGO los 1 henem~ritos v@lufiltarios <ile[ bata1l6o y escVIa(!)iroo de Mani.la y g'lllerri11as <il1s Sain Mi.gHl, Sam 'Rafael y del Cas•i!Ilo espafi(')l, l@s cua1es habiail em.tregad© ei dia aliltes al gemera1 !1?0lavieja 1ma, esplendi.da placa C(im.mei moratiwa de fa alltJ.;iesi.dm y respet@ que trofesabali1 a s'tl i!m.si,g11e Gem.eral en jefe. iL@s [l;)arc0s extFal!ljeros t0m.ar@n iParte en: aquell(i)s agasaj@s, y e1 de ta an nacla in.gfosa, qVIe estaloa. fondeacil@ en la bahfa, le sa.J!mm:6 c0n lt©s misJ.'lil©S h@nores C(i)fi ((J!Ue Buestra a,rti~leFfa de 1a plaza le de~lllicl.ie'ra: A las n:neve y media se levaFon las mn.cdas del Le6n XJffl: fas tnrbias pr©cel@sas 1
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LA. INSURRECCI6N
aguas de aquella inmensa bahia de 33 legnas de bojeo y 18 brazas de profun:di<ilad estaJ.>an tranqnilas, sin duda para no impedir lo solemne de aquel des:file de embarcaciones por la proa del gran trasatlanhico que eon.<llucia al ihastre soMado, a quien nosotros tainbien -saludamos con un entusiasta i Viva Polavieja !
.
~REVES GQNSID'.ERAOi'~NES A'L TEFl.MrNAR !EL PRESENTiE TClMO
Han resunado jnt1.tiles los esfuer·ws que hem.os practicado para C(i)fil~ p:render em. um sofo> ,,olumea tod© cuant@ creiam@s deber decir acerca de la 1NsuRRrmcrn6N EN F.ruP[NAS: l@ ahundalilte de fa materia y rrnestra I extrafi.a sin.taxis lo :ban impediido; pere> tambien nos obligaria a fa pub1icaci6n de aigl'.m a:pen.dioe el hecho triste de prolongaFse, ctial se prolomga, el estad'o a:noFma[ en aqt1el terl'itodo de la Patria, y fa c@rntimuacion de los trabajos que foera del mismo ejecuta el laborantisrno para mantener la gl!lerra. Tan in.completamente como.el ~ect0r acaili>a de observar, la b.em©s des-
750
LA INSURRECCI6N
crit0 desde que estallo hasta _el dia 15 de Abril ultim0, y siguiendo el misrno orden cronologico, continuaremos eli1 el sigN,ieillte tomo sintetizando los principales hechos que hayan tentdo lugar desde la expresada :fecha hasta ia del 31: de Diciembre del afi.o actual. i Qui.era Dios que antes de ella eneuentre fin Ia insurreccion tagala, y que no hayamos de poner a prueba la paciencia de nuestros lectores, escri.Tuienldo Ulill tercer volmnen ! ¡
FIN . DEL TOMO PRIMERO
lNDICE
I I
Pftginas.
Capitulos.
PROEMIO.... . .. .. ............. _I. -Sintesis del estado politico social en que Zos espanoles haillaron a las pobladores de las islas Filipinas .. .... .. ........... : ..... ll.-Rapida enumeraci6n de algunos concepfos par. l0s cuales el pueblo fi,lipino debe gratitud eterna y sumision constante a la dominac.i6n espanola . -1.' Ei,peee cial camicter del 11egimen polmco instituido.'- 2.' Gr'istianiza~ ci0n de aquel elltenso ter,rito-irio. -3.' Origen de la ptopiedad. territorial. - 4. 0 Reelutamiento del ejercito.ind,i gena.~5.' Tributaci0n comparada.-6.' Aprovechamientâ&#x201A;Ź!s forestales.-7.' Contribuciones industrial y urba. na . -,-8.' Comercio.-9.' Presupuestos..... .. ................
5
13
27
752 €apltulos.
fNDIC E
PSginas.
III. - Contin!'ta la enumet·aci0n de eoncepfos ae igual indole :que las ante1·i01·es. - 1.' JnstrucGi6n pub1ica. - 2.' Sanidad. - 3.' Elenefi cehcia pub1iea y pa'.Uticular.4.' Establecimienfi0s piados0s.5.' Monte de -Piedad y Caja de Ahouros. - 6.' Vias de comunieaei0n . - "l.' Se11vicios especiales. - 8. • Administraci6n publica en general. €:0rpoi:aciones neligiosas . ...... ..... .. . .. . .. . .. .. .. 57 IV .-'P.eciodo prepmratorio y ptodr6mic0 de la insurrecci0n. - 1.' Ma~ -sonei:ia. - 2.' Ji..iga filipina . 3.' Cattpunan. - 4.' Sintomas. - 5.' :Watni6ticas denuncias . 6.' Verdadettci ca.r acter de la in surveeci6n tagala . . . . . . . . . . . . . . 103 V .- AZg,wnos detaUes de Za insurrecci6n. - :Ii.' Efecto q,ue produjo entue los espalioles peninsula,r es el deseubr~miento -de la conjuraci6n tagala. - 2.' Jlusticia civil y militar. - 3.' F uerzas del ejercito. ,- 4.' A1'zamien to en armas. F'rimeros encuentuos.- 5.' Cr ea~ ei0n del cuer po de vo'llun tarios de Ma,n ila. ~ 6.' Combates en San :faan del Monte y h1gares veciin os. Ell Qeneual segundo Cabo
iNDICE
Capltulos.
753 Paginas.
D. Bernardo E_c haluce . .....:7.' Primeras medidas adoptadas por el Gobierno de la Metvopoli.8.' Insurrecci6n en Cavite...... '187 VI.-Continu an alg,unos detalles de la insurreccion. - 1.' Sucesos de Nueva E~i,j a. - 2.' Otros acaecimientos. Una proclama de los insurrectos. Servicios de los voluntarios. Escuacka y eapitan,i a del puerto. Dgnativos. Medidas para destituir de sus cavgos a los complicados en Ia rebeli6n. Ampliase el decreto de indulto. Combates en Silang y Cavite.3.' Deeretos de! Gobierno general soore emoal'go de olenes. 4.' Refuerzos del interior. Mas combates. 'Bendicl6n y jma de las banderas de los voluntarios. Nuevoยง documentos referentes al Cati,punan. Preparativos para recibir la primera expedici6n de tropas procedenles de la Penip.sula....... ............. ...... 251 Vll.-Pnincip ales acaeoimientos en el mes de Octubre de 1896. -1.' Llegada del trasatlanUco Cataluna. -2.' Mas protestas de adhesion. - 3.' Nuevas prisiones en Camarines. -4.' Un tnen sanitario 48
7M Capitulb'i.
fND ICE Pitginas .
y otros donativos. En 1a Pampanga. Conducta de Ing,Jaterra. -5.' Decreto referente al excelentistmo Sr. D.Pedro P-.Roxas. -6.• Combates en las inrnediaciones de Cavite. Sueesos varios. -7.' Llegada de! trasa~lantico Monser,rat. 0 bsequios tributados a los expedicionarios. -8 'Sigue la propaganda r evolucionaria . -9.' Mas incidentes y combates. Nuevos Tefuerzos peninsulares. - 10. Fiesia de! Filar en Manila. Nuevos acaecirnientos. Mas fuerzas-. exped.icionarias. Banquet.e que a: las mismas of,reci6 el escuadd)6n ((Vo1untarios de Manil a "· Cornbates en Nasugbu, Tal~say, Bilog-Bitog y ot110s luga,r es. Sucesos en Mindoro. - H. P o!Hiea de atraeci6n. Una ciTcuiJar de! g obierno geneFal. -12. Regresa Ii Espana el general Echaluce. Nuevas partidas r ebeldes. Sublevaci6n en Min danao. CoF1spiraei6n en J016. -13. Nornbrarniento de! genePal P olavieja paFa el caFgo de segundo Caho . Idem de l'os ge-nerales Sres. Zappino, 'ILachambre, Cornely Gal•bis.-14. As-
fNJJICE
<:;apltulos.
755 P aginas.
pecto de la insurr,ecci0n al terminar el mes de Qctubre . . . . . . 295 VIII .-Sintesis de los principales acaecimientos en el mes de No oiembre de 1896.-1.' Breves consideraciones acevca de! estado de la opinion publiqa en los primer0s dias de N 0viembre. -2.' Mas tr0pas peninsula1¡es. Otra vez .IRizal en Manila.-3. ' L0s rebeldes de Bulacan. C0ml\ates en las mar,genes de! rio Nangca y en San Mateo. Mas encuentres y otr,0s sucesos 71 noticias. - 4.' Sale a operaciones sobre Cavite el Capitan general D. Ram0n Blanco. Binacayan y Noveleta. 5.' 'il'oma de Ta:I.isay. Guerrillas de $'an Miguel y San Rafael. El Co1Jadonga. Comba tes en Santa Cruz de la Laguna, Las Fifi.as y otros lugares. fdem en NovaHches y en San fose de Bulacan . Acci0n de San F\afael-6/ Conspiraci6n en Vigan (Hoc@s Sur). Tua guerrilla del Casin0 espafiol. Acaecim.ientos en. 10s ultimos dias de este mes . . .. . : . . . . . . . . . 363 IX.-Sintesis de Los principa!es acaecimienfos en el mes de .Biciemb11e de 1.896. - 1.' m genera:! Rios , I
756 P{jginas.
Capltlflos.
al eentr0 de Luz6n. Una cartii'la sanitaria. Mas servidos de · i0s voluntarios: mas eombates.2.' Asesinato dei R. ii". Cura pan0c0 de I'Iermosa.-3.' Llegada del generai Polavieja y de! alto personar militar cprn Je acompaiia1ba. J:0ma, p0sesi6n de! cargo de segThl!dO Cabo. Mip6tesis acerca de la contra-niedad que pudo subir el Marques de 1."eiia-Plata. Nombramiento de Capitan general, t'ie1:ier,al en jefe de! ejercito de FiUpinas, Gobernador genera-I del Arcp.jpielago, en favar del Sr. Marques de P0lavieja. Su r0ma de posesi6n del mando y alocuei0nes. - 4.• Nuevos eBeuentmos y, e0mbates. Gausas ele:v.adas ti plenani0. ID0nativo de F!angasintin. Qtra conjuva en ia plaza de Gavite. Aeci6n de Meycauayan.-5.' Despedida del general Jillanco. Su espaila de h0no:r. Banquete de la c0lonia iBglesa. A b0vd0 del Leon XIII. -6.' :IDeeneto 'del general !l"olavieja sabre la concentraci6n de bai,rfos.-'i'.' Va!L'i©s e0robates.s.0· N0el!ebuena. - ~-' Una, cireular de! general F0ia~ieja. Su
iNDICE
Ca,pitulos.
':/57 Pagjnas ..
decret0 ,suspendiend0 ias elecci0nes mu~ icipales . . . . . . . . . • . . 449 X.-0ontinua Za sintesis de los principales acaeeimientos del mes de Diciembre de 1896. -1. 0 Asesinato de los RR. l?Ji'. Curas parr0oos de M0r0n 1f ~agag. C0mnates eD aquetl0s lugares. - 2. • CoDsejo de guena paua ver y fallar la causa contra don Jose Rizal. Sentencia y. ejecuci6n de la pena de muerte ~mpuesta a este re0.-3.' Otras sentencias y ejecuci0nes de la misma pena. lmp0rtante Fesoluci6n dictada por el Capitan general, ~r. MarCfues de 1?0lavieja, i:eferente d la administraci6n de ,justicia. -4.' Otro importante consej0 de gue:vra referente a los de Camarines. - 5. • C0nspiraci6n en Bulacan. Consej0 de guerra de oficiaies generales. Cabalios de A,ustr,ailia. Mas tropas expedicionarias. - 6.' El general Polavieja vislta Cavioo y el cam-· pamento de Dalahican . . . . . . . . . 523 XL-Continuan detaUes de Za insurreceion y se arguye coni-ra supuestas causas.- 1.' Breves 1Jefiexiones acerca del estado de la r~
758 GaJ)Itulos.
iNDICE
Pflgioas.
beli6n tagala al fina,1izar el aiio 1:896. - 2.' De la proclama sepa:uatista hallada eIJ, Paraiiaque.3.' Elementales a:rgumentos demostrativ0s de su stnraz6n. DeFeeh0s eiviles y p01itic0s. Mor,ali'll.ad administrativa. -4.' Contra ia mjustieia de cargos he= ehos a las 6ndenes re1igi0sas.5.' Mas hip6tesis aeerca de los planes del Capitan general, seiiio:r Manq;ues de P0lavieja.. . . . . 569 XH .-P1'inGipales acaecimientos deslle l!.' de Enero de 1897 hasta la termpnaci6n del mando del general Polavieyja. -1.' Cacar ong de Sile. - 2.' Aeerca del plan de 10s rebeldes para el ataque de Manila y fuerza de $a!).lliago especialmemte. - 3.' Operaciones s0bpe Pasig -y; Taguig.-4.' Muches encuent:ros y combates en er mes de Enero. - 5.' Operaeiones en iFebr.ero, .Ma:rzo y primeta quineena dll Ab:r,i'l. :Prepa:rativ0s pa-ra e] ataque de la proavineia de C::acv.ite . .Nueva organizaei6n de! ejercito de operaciones,. - 6.' lnstrucciones dsdas por el G~nenal en jefe. - 7.' El General en jefe sale a operacio-
759
iNDICE
Capltulos.
P3.ginas ..
nes. Inicio de las mismas. Marcha del general Lachambre hacia Silang. Combates en Malaquing-ilog y en Munting-ilog. Toma de Silang. - 8.â&#x20AC;˘ Operaciones en otras zonas. Toma de Pamplona. Toma de I)asma,11iiias. Toma de Saliwan.-9.' Sedici6n en Manila. Operaciones en esta y otras lineas.-10. Contimi.an las operaciones de la divisi6n Lachamb11e. Combates en el Zapote y en Presa de! Molino. Toma de lmus. Toma de Noveleta. Ocupaci0n de Cavite Viejo, Binacayan, Santa Cruz y Rosario. Toma de Sa:0. Francisco de Malab6n. -11. Operaciones en las demas zonas.-12. Enfermedad de! General en jefe, excelentisimo Sr. MarC[lles de Polavieja. N6mbrase para susOituirle en el mando de las islas y de su ejercito de operaciones al Excmo. Sr. D. Fernando Primo de Rivera, marques de Estella. Nombramiento de Capitan .general, gobernador general del Archipielago, hasta la llegada del gene11al Primo de Rivera, en favor de1 Excmo. Sr. D. Jose
'7,60
fNDICE
Ptgin.as.
Gap!tulos.
Lachambre !Dominguez, tenien, te general. -13. Entrega del mando 'Y 11egreso. a la l"eninsula del Sr. Marques de Polavieja... 613 BREVES CONSIDERACIONES AL TERMINAR EL PRESENTE TOMQ.... • • • • • • • • • • • • • • • • • •
749
ERRATAS PAguia.
86 160 175 232 235
1
I
Linea.
20 HI 17 14 9
Dice.
Lease.
-- ---
Jalahep .. . ... .. Jalalep. dominador ... . . denunciador. de 400 ........ . de L400. fruta1es.- . .. . . .. forestales. dele:imables .â&#x20AC;˘â&#x20AC;˘. exem;ables.
'I,
II