Coordinador:EstadoColombiadelarteJorgeMarioDíazMatajiraAutores:AlejandroBrianzaAmarilysQuinteroRuízCarlosMauricioBejaranoCalvoCieloVargasGómezDanielGómezEfraínFernandoDuránCéspedesFranciscoCabanzoGinaPaolaMesaRuizJoaquínLlorcaJorgeBarcoJorgeMarioDíazMatajiraJorgeGómezAponteJoséAlbertoGallardoArbeláezJuliaNandaBejaranoLópezMaríaJulianaSotoRobertoCuervoPulidoRodrigoIvánDíazSánchez
El arte sonoro en
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1. Arte sonoro – Colombia 2. Arte y música – Colombia 3. Música – Filosofía – Colombia 4. Sonido en el arte I. Brianza, Alejandro II. Quintero Ruíz, Amarilys III. Bejarano Calvo, Carlos Mauricio IV. Vargas Gómez, Cielo V. Gómez Marín, Daniel VI. Durán Céspedes, Efraín Fernando VII. Cabanzo, Francisco VIII. Mesa Ruiz, Gina Paola IX. Llorca, Joaquín X. Bejarano Barco, Jorge XI. Gómez Aponte, Jorge Alberto XII. Gallardo Arbeláez, José Alberto XIII. Bejarano López, Julia Nanda XIV. Soto Narváez, María Juliana XV. Cuervo Pulido, Roberto XVI. Díaz Sánchez, Rodrigo Iván XVII. Universidad Antonio Nariño. SCDD21 781.861 Universidad Antonio Nariño - UAN. Sistema Nacional de Bibliotecas
Primera edición noviembre 2021 © Universidad Antonio Nariño. Fondo Editorial. Vicerrectoría de Ciencia, Tecnología e Innovación Carrera 3a Este # 47A-15. Bloque 4, piso 3 Bogotá, D. C., Colombia Teléfono: +51 (1) 555 4199 o +57 (1) 315 29820, ext. 3033 https://www.uan.edu.co/investigacion.uan.edu.co/oficina-fondo-editorial/
El arte sonoro en Colombia: estado del arte © Coordinador Jorge Mario Díaz Matajira ISBN (impreso): 978-958-5181-22-9 ISBN (online): 978-958-5181-23-6
Todos los derechos reservados. Esta publicación no puede ser reproducida parcial ni totalmente. Tampoco puede ser parte ni estar registrada o ser transmitida por cualquier tipo de sistema de recuperación de informa ción, en ninguna forma o medio (ya sea mecánico, magnético, fotoquímico, electrónico, fotocopia, etcétera) sin el permiso previo y por escrito del Fondo Editorial de la Universidad Antonio Nariño. Díaz Matajira, Jorge Mario El arte sonoro en Colombia : estado del arte / Jorge Mario Díaz Matajira...[et al.]. - Bogotá: Universidad Antonio Nariño, Fondo Editorial, 2021. 384 pp: 17x24 cm. ISBN (impreso): 978-958-5181-22-9 ISBN (online): 978-958-5181-23-6
Corrección de estilo: Jaime Sánchez Medina Diseño y diagramación: Héctor Suárez Castro Fotografías: Autores Impresión: Imagen Editorial Impreso en Colombia. Printed in Colombia Hecho el depósito legal que exige la Ley. Versión digital de acceso abierto disponible en: http://repositorio.uan.edu.co/
85
3.
Carlos Mauricio Bejarano Calvo Capítulo ¿Música o arte sonoro?
Tabla de contenido 5 Tabla de Contenido Introducción 9 Agradecimientos 27 PRIMERA PERSPECTIVAS,PARTE.DEBATES Y REFLEXIONES 29 Capítulo 1. Definiendo el arte sonoro 31
2. ¿Ha
Rodrigo Iván Díaz Sánchez Capítulo 5. Cuando niños, escuchando. Sobre la acción de jugar y la creación sonora
Julia Nanda Bejarano López Capítulo 6. Hablan ellas… 99 Francisco Cabanzo
Jorge Mario Díaz Matajira, Roberto Cuervo Pulido Capítulo dicho usted arte sonoro?
75
4.
45
51
Jorge Mario Díaz Matajira, Roberto Cuervo Pulido y Alejandro Brianza Capítulo De la música experimental al arte sonoro
8.
EL ARTE SONORO EN COLOMBIA 279 Capítulo Instituciones alternativas: otros procesos de formación y divulgación 281 Amarilys Quintero, Jorge Gómez Aponte y Jorge Mario Díaz Matajira Capítulo El sonido como laboratorio. Reflexiones sobre creación sonora a partir de la experiencia de trabajo en el Museo de Arte Moderno de Medellín 293
11.
El arte sonoro en Colombia. Estado del arte6 SEGUNDA PANORAMAPARTE.GENERAL
EN COLOMBIA 143 Capítulo circulación
7. Dimensión
Jorge Bejarano Barco Capítulo 13. De la prosaica a la poética en la experiencia sonora y musical de Medellín 301 José Alberto Gallardo
145
10.
12.
Jorge Mario Díaz Matajira Capítulo Dimensión creación 187
Jorge Mario Díaz Matajira Capítulo 9. Dimensión formación 237 Efraín Fernando Durán Céspedes, Gina Paola Mesa Ruíz y Jorge Mario Díaz Matajira Capítulo Dimensión investigación 265 Efraín Fernando Durán Céspedes, Gina Paola Mesa Ruíz y Jorge Mario Díaz Matajira TERCERA EXPERIENCIASPARTE.DESDE
Tabla de contenido 7 Capítulo 14. En los límites del arte sonoro. Academia y sonido en la universidad ICESI de Cali 323 Joaquín Llorca y Daniel Gómez Capítulo 15. Una deriva con guión. Guión para performance radiofónico sobre la historia del colectivo noís radio 339 María Juliana Soto Capítulo 16. La experimentación sonora en Pamplona 345 Cielo Vargas Gómez Hallazgos y prospectiva del arte sonoro en Colombia. Conclusión 351 Jorge Mario Díaz Matajira y Roberto Cuervo Pulido Sobre los autores 367 Índice de tablas 375 Tabla de figuras 379 Tabla de ilustraciones 381
Jorge Mario Díaz Matajira 9
¿Cómo se imaginarían el arte en Colombia dentro de 50 años, sus manifestaciones, dinámicas, políticas, etc.? Si a cualquier persona, perteneciente al círculo de las artes, ya sea como gestor, creador, curador, educador, entre otros, le hicieran esta pregunta y bajo una mirada prospectiva, sin duda alguna incluiría al arte sonoro como parte esencial de dicho escenario artístico. No obstante, si esa respuesta la brinda alguien no tan cercano al medio de las artes, resultaría bastante difícil asegurar lo mismo. El arte sonoro, así como múltiples manifestaciones del arte contemporáneo suelen pasar desaperci bidas o indiferentes al público general que se nutre de los medios tradicionales de expresión estético-sensibles. Si bien las prácticas artísticas contemporáneas tienen una naturaleza propia de evolución, que muchas veces suelen corresponder a los avances de las nuevas tecnologías de la información y comunicación, los paradigmas de pensamiento colectivo y la educación, suelen mantenerse en la tradición. Tras siglos de especialización, el arte sonoro es considerado por muchos (artistas o no), básicamente como una expansión de la música o de las artes plásticas. Así pues, el arte sonoro ¿será capaz a futuro, de consolidarse como un género artístico autónomo, que ostente un lugar propio en las políticas públicas, en los programas académicos y en fuertes apuestas institucionales?
En el año 2018, en la Feria Internacional de Arte de Bogotá ARTBO desde la sección Artecámara, y bajo la curaduría de Carolina Ponce de León, se presentó la exposición Tecnotrópico1 dirigida por Andrés Hoffmann. Fue muy interesante ver esta exposición, como una verdadera representación del arte sonoro en un escenario que es por excelencia dedicado al mercado del arte en Latinoamérica.
Introducción
1 Tecnotrópico fue una instalación de múltiples artefactos sonoros dirigida por Andrés Moreno Hoffmann y asesorada por Ricardo Arias. Contó con la participación de varios artistas: Jorge Barco, Carlos Bonil, Falon Cañón, Miguel Kuan, Diana Medina, Andrés Felipe Ñañez, Pedro Ramírez, Juan Suanca, Leonel Vásquez.
Consideración
conceptual inicial El arte sonoro se erige como una nueva disciplina o un nuevo campo de conocimiento con naturaleza inter y transdisciplinar, donde la obra vincula al sonido como eje conductor de la creación y a través del cual, se han concen trado diferentes prácticas artísticas.
El presente texto ofrece un panorama general sobre el arte sonoro en Colombia como una primera etapa de recopilación, reconstrucción y clasifi cación de prácticas sonoras, ya que, en el país todavía no existe un estado del arte que recoja las obras que se vinculan al desarrollo de esta nueva disciplina, ni un registro sistematizado que permita dar cuenta de este proceso.
Introducción10 Pero lo atractivo, no es que el arte sonoro esté en los circuitos más comerciales, sino el alcance y reconocimiento que este género emergente empieza a tener en Colombia para dicha fecha. De igual forma, su práctica se empieza a conectar con un escenario educativo prospectivo contemporáneo, que ya venía promoviendo unos discursos basados en el pensamiento complejo, la inter y transdisciplinariedad, la investigación-creación y el enfoque colabora tivo competencial en un marco de nuevas tecnologías y globalización.
A partir de estas consideraciones, investigar sobre el arte sonoro se convierte en un importante reto. Es un campo contemporáneo de naturaleza abierta, que implica el cruce obligado de disciplinas artísticas y científicas, involucra por lo tanto procesos complejos sistémicos, avanza con el ritmo de la evolución tecnológica global y permite plantear un nuevo terreno educativo en la sociedad.
Desde un rastreo sobre el tema en el contexto nacional, se encuentra un vacío a nivel de la producción investigativa que abarque el arte sonoro como una totalidad. Por un lado, las diferentes prácticas artísticas sonoras se encuentran desarticuladas muchas veces en los bordes de disciplinas reconocidas, como las artes plásticas y visuales, la música o el diseño, entre otras; por otro lado, algunas instituciones de educación superior han intentado generar diferentes tipos de actividades, con el fin de brindar un espacio a la produc ción sonora, pero sin estudios sistemáticos de mayor profundidad.
Con base en lo anterior, bajo el propósito de realizar una caracterización de las producciones artísticas que sobre el hecho sonoro han tenido lugar en Colombia y especialmente desde los años noventa, década en la cual se comienzan a registrar los primeros encuentros internacionales en la región, se registran las páginas posteriores.
2 Rocha, I. M. (s.f). ¿Qué es el arte sonoro? En línea, recuperado de http://www.artesonoro.net/ artesonoroglobal/QueEsElArteSonoro.html
Aunque se establece una tradición histórica de tan solo 40 o 50 años atrás (aproximadamente a partir de los años 70’s), se puede hacer un rastreo de todo el siglo XX y encontrar los precedentes de esta práctica actual en las vanguardias artísticas de principio de siglo, donde las fronteras disciplinares artísticas se desdibujaron. Cabe aclarar que, aunque el nombre proviene de las artes plásticas y visuales, disciplinas como la música ya venía expandiendo su campo de acción contemplando el sonido como una materia, estableciendo intereses más directos hacia la espacialidad, experimentando con objetos, aceptando el ruido y el sonido “no musical”, y, promoviendo nuevas formas de
3 Molina, A. M. (2006). Ecos del Arte Sonoro en la vanguardia histórica española (1909-1945). I Muestra de arte sonoro español MASE. Lucena-Córdoba. Nota #1.
Jorge Mario Díaz Matajira 11 Actualmente, no existe un marco conceptual definido o consensuado y así mismo, está dispuesto a múltiples interpretaciones. El arte sonoro, se relaciona directamente con obras artísticas que utilizan el sonido como vehículo prin cipal de expresión, representa una manifestación artística que se relaciona con elementos del sonido, la acústica, lo visual-táctil y verbal. Así pues, se generan interacciones entre los diferentes lenguajes artísticos donde se redimensionan las propiedades de cada práctica, por lo cual se puede establecer una dimensión temporal a la experiencia plástica, por citar un ejemplo (Rocha, en línea)2. La existencia de este campo es nueva y ha evolucionado gracias a la tecnología de grabación y audio. Según Molina (2006)3: El vocablo Arte Sonoro (de la traducción anglosajona Sound Art) empezó a utilizarse a finales de los años setenta del pasado siglo para calificar determi nados trabajos de artistas visuales que utilizaban preferentemente el sonido en sus obras, y que no necesariamente estaban basadas en parámetros musicales; y lo que era más importante, que en esta obras sus dos componentes visual y sonoro no podían disociarse, sino que tenían la misma importancia, aspecto éste que se separaba claramente del lenguaje audiovisual del cine y vídeo, donde el sonido ha sido a lo sumo un refuerzo de la imagen. Su teorización no se hará hasta la década de los noventa, a partir de exposiciones monográficas sobre el tema en museos y galerías, con la intención doble de enmarcar una nueva práctica artística, y con ello la búsqueda de una identidad diferencia dora con su propia historia y antecedentes, que servirá para su impulso tanto creativo y económico, ya que necesitaba su eco en el mercado artístico para su desarrollo, como así ha sido en los últimos años (p. 21).
Esta evolución de la música, generó múltiples prácticas no convencionales que volvieron borrosas sus fronteras. Sin embargo, los músicos jamás llamarían arte con sonido a su práctica, puesto que siempre nominaron su hacer música con alguna característica nueva: música concreta, música electroacústica, música acusmática o música experimental, entre otras. Por esta razón, el concepto se asocia al mundo de la plástica, pero en la práctica, tanto la música como otras disciplinas, ya habían ampliado su rango de acción.
Introducciónescucha.12
Complementariamente, los procesos de interpretación, como pilares para facilitar la creación de inferencias y relaciones, privilegiaron la interacción con el contexto objeto de estudio y la perspectiva de los participantes, buscando comprender los procesos de creación artística bajo el hecho sonoro en el país, a partir de datos cualitativos. Se diseñaron dos instrumentos de recolección de datos. El primero, un Excel robusto y sistemático que permitió clasificar los registros a través de diferentes categorías y cruces. En este instrumento se recolectó la información de 1106 obras asociadas al arte sonoro en Colombia especialmente entre los años 1990 y 2017. La muestra abarcó múltiples fuentes como la web, las universidades, bibliotecas, redes sociales, los eventos y las personas, que incluyó obras de artistas colombianos y extranjeros que han presentado su trabajo en el país. El segundo, una entrevista semiestructurada que se aplicó a más de 35 artistas que trabajan con el sonido desde diversos enfoques, selec cionados por trayectoria y bola de nieve. Es importante aclarar, que la muestra excluyó en forma directa e intencio nada el registro sistemático del campo de estudio que se centra en la música
Desde las vanguardias como antecedentes hasta la actualidad, se han desarrollado diferentes prácticas sonoras que se han asociado al arte sonoro como una especie de concepto “sombrilla” gracias al sonido como fuente principal de expresión: el radioarte, la poesía sonora, el paisaje sonoro, la escultura sonora, la instalación sonora, la acción sonora y la arquitectura acústica, entre otras. Aspectos metodológicos El proceso de construcción del conocimiento se estableció desde una pers pectiva mixta, con peso heurístico-hermenéutico. Partiendo del compromiso por generar el estado del arte de la producción de arte sonoro en Colombia, se hizo necesaria una estrategia para el tratamiento de fuentes de informa ción en coherencia con un análisis sistemático, a partir de datos cuantitativos.
Jorge Mario Díaz Matajira 13 contemporánea, puesto que esto implicaba una exigencia mayor de tiempo, recursos y ampliación del objeto de estudio. Sin embargo, de forma indirecta e inductiva, sí se tuvieron en cuenta bastantes referentes relacionados a dicho campo, ya que existe una relación histórica e ineludible entre las prácticas contemporáneas del sonido y la tradición musical. Así pues, al mirar en retros pectiva, la música y el arte sonoro devienen en múltiples y constantes puntos de encuentro, sus prácticas colindan constantemente y muchos artistas creadores confluyen entre una u otra práctica. Por esta razón, dentro de la categoría que se denominó “tipologías” del arte sonoro, se ha incluido la subcategoría Música, la cual, en forma genérica abarca prácticas específicas de música electroacústica, acusmática, concreta y experimental, entre otras, todas relacionadas a la música contemporánea asociada a espacios de carácter y tradición académico. Sin embargo, es netamente por efectos de organización de los datos y no representa ninguna postura conceptual. Es decir, el arte sonoro no se está considerando necesa riamente más amplio e incluyente que la música, ni viceversa.
El análisis de los datos se realizó a partir de categorías deductivas e induc tivas que se organizaron en cuatro grandes grupos tal y como se muestra en la siguiente tabla 1: Tabla 1 Categorías Naturaleza de la obra Dimensiones Tipologías Emergentes Obras de creación Circulación Escultura sonora Definición Otra producción Creación Artefacto sonoro ¿Música o arte sonoro? Formación Música Perspectivas y prospectivas Investigación Paisaje
Fuente:
OtroArquitecturaacústicoEspacioEcologíaPoesíaCreaciónInstalaciónsonorosonoraradiofónicasonoraacústicasonoroacústica propia
Introducción14 Primero, por naturaleza de la obra, que explica si las obras son de creación artística u otro tipo de producción, por ejemplo, de tipo escritural (tesis, artí culos, etc.); segundo, por dimensiones, que explican el proceso de existencia de las obras en el país a nivel macro, desde la circulación, creación, investigación y formación; tercero, por tipologías que representan las diferentes prácticas que se asocian al arte sonoro (paisaje sonoro, escultura sonora, etc.) y cuarto, las categorías emergentes de las voces de los participantes.
La formación, con 194 registros, es la segunda dimensión más grande. Sus datos representan que el 17% de la producción, se ha dado por procesos
Para comprender los aspectos generales del arte sonoro en Colombia, vale la pena observar ciertos aspectos en su conjunto. Se exponen entonces, la producción total por dimensiones, la clasificación de los registros por tipo logía, el nivel de creación por ciudad y la representación de extranjeros en el país; por último, un panorama por décadas según los niveles de obras regis tradas año por año. Desde un levantamiento total de 1106 registros, se han consignado los datos que dan cuenta de obras asociadas al arte sonoro producidas o circu ladas propiamente en el país, tanto por artistas colombianos como por artistas extranjeros que han transitado. Adicionalmente, se han tenido en cuenta algunas obras de artistas colombianos que han sido creadas o han circulado fuera del país, como referentes que complementan el panorama. Se regis traron obras concernientes a más de 380 artistas colombianos, y más de 100 extranjeros. Dimensiones Las dimensiones representan la clasificación principal de los datos descri biendo su proceso presencial en el contexto. De esta manera, los registros informan sobre fases de circulación, creación, formación e investigación. En la figura 1 se puede observar el número de registros por dimensión y su repre sentación porcentual. La circulación explica la visibilidad de las obras artísticas a través de dife rentes circuitos: bienales, ciclos, conciertos, exposiciones y festivales, entre otros; así pues, 607 registros representan que el 55% de la creación sonora está circulando. Es la dimensión más considerable.
Generalidades
Jorge Mario Díaz Matajira 15 Circulación607(55%)161(15%)CreaciónFormación194(17%)Investigación144(13%)
Más allá de la observación específica de cada dimensión, vale entenderlas como una totalidad que se interrelacionan y complementan, en algún punto confluyen las cuatro dimensiones y en otros puntos convergen entre dos o tres.
Figura 1: Dimensiones: producción general educativos desde talleres, cursos, laboratorios o proyectos de grado, entre otros. A pesar de ser la segunda en importancia, hay una diferencia conside rable en 38 puntos respecto a la circulación. Esto es coherente con la naturaleza de los procesos artísticos que se han caracterizado históricamente por la praxis antecediendo a la teoría. Así pues, en Colombia las dinámicas forma tivas hacia el arte sonoro están iniciando y algunas más que otras, empiezan a formalizarse en algunas instituciones. Aunque todos los registros dan cuenta de la creación, se han clasificado en esta dimensión a las obras que no registran ningún evento de circulación. Así las cosas, 161 trabajos registrados representan el 15% de proyectos que no se visibilizan en los contextos específicos de exposición o concierto. Por su parte, 144 registros representan el 13% de producción asociada al arte sonoro como productos de investigación, los cuales se evidencian en artí culos científicos, ponencias, conferencias y libros. Ahora bien, cabe aclarar que una fracción de la producción académica y libros, aunque circulan por las instituciones del país, no necesariamente ha sido producida en Colombia, por lo tanto, la investigación es una dimensión que aún es incipiente y tendría todo el potencial de desarrollarse plenamente.
Clasificación
Introducción16 Los 1106 registros en su totalidad, finalmente son creación, ya sea artística o científica. Por su parte, la circulación incluye la creación pues es el medio de visibilizar las obras; incluye también los productos de formación e investigación pues dichos productos también circulan a través de sus instituciones u otro tipo de eventos, verbigracia, los artículos circulan en las revistas científicas y los talleres, asignaturas o cursos son abiertamente expuestos en las comunidades académicas o artísticas en cuestión. En este sentido, en contraste con el 15% que representa la dimensión creación, es decir aquellos proyectos que existen pero que no han circulado, sería posi tivo observar que el 85% restante de la producción asociada al arte sonoro está circulando por el territorio. En la dimensión formación, un porcentaje alto está determinado por las tesis doctorales y proyectos de grado en pregrados y maestrías. Por su naturaleza epistemológica, estos proyectos son perfectamente asociables a la dimensión de investigación, por esta razón, se puede proyectar casi un 30% de producción total con perfil académico. De igual forma, bajo la coyuntura de Colciencias, la nueva categoría de investigación-creación reconoce que los procesos de conocimiento artístico y sus resultados creativos son comparables con la generación de conocimiento científico tradicional. De esta manera, la obra de arte como creación y su proceso, son consecuencia de diferentes metodologías que pueden llegar a dar cuenta de conocimiento científico. Escenario que permitiría entrecruzar las dos dimensiones en cuestión.
de obras según su tipología: La tipología es la categoría que clasifica las obras según su práctica sonora4: paisaje sonoro, escultura sonora, instalación sonora, etc. En la tabla 2, se muestra el número de obras registradas organizadas según su tipología. La mayor tipología denominada “otro” reúne conceptos emergentes, son obras que representan diferentes nominaciones dadas por sus creadores (ver tabla 3), fuera de la nominación inicial (ver tabla 1); con 416 registros representan el 37,6%. Es interesante observar aparte de “otro” que el mayor número de obras registradas están asociadas a la música con casi el 20% del total; esto evidencia la relación estrecha entre el arte sonoro y la música.5 La instalación 4 Ver tabla 1. 5 Para ver más sobre este tema ir al capítulo capítulos 3.
La tabla 3 muestra la especificidad de la tipología “otros” con las múltiples y más representativas nominaciones que los artistas han dado a sus creaciones. 260 registros emergen sin ninguna denominación o especificación nominal respecto al tipo de obra. Esto representa el mayor número de registros en “otros” y el 23,5% del total, lo cual es interesante, ya que denota que muchas veces en las obras no hay un interés particular por categorizarlas desde su creador y los curadores. Respecto a las demás, vale la pena resaltar una serie de prácticas que se suelen asociar al arte sonoro, que tienen una presencia importante en el contexto nacional e internacional, y que surgen con las siguientes nominaciones: performance sonoro, deep listening, acción sonora, noise, live Coding, circuit bending, performance telemático, improvisación sonora, plástica sonora, etc. Tabla 2
Número de obras según su tipología Tipología No. de registros Otro 416 Música 218 Instalación sonora 170 Paisaje sonoro 114 Arquitectura acústica 41 Escultura sonora 34 Artefacto sonoro 33 Ecología acústica 25 Creación radiofónica 19 Implicación social 18 Estética colombiana 11 Espacio sonoro acústico 5 Poesía sonora 2 Total general 1106 Fuente: Instrumento de recolección de datos
Jorge Mario Díaz Matajira 17 sonora y el paisaje sonoro son las prácticas que siguen en jerarquía entre las más representativas de lo que se hace en Colombia. Contrariamente, la prác tica menos observada se encuentra en la tipología de la poesía sonora, tan solo 2 registros representan un 0,1% del total.
Introducción18 Tabla 3 Especificación de la tipología “otros” Otros No. de registros Sin nombre 260 Performance sonoro 27 Deep listening 17 Acción sonora 16 Pieza sonora 12 Noise 11 Live Coding 10 Performance telemático 8 Improvisación sonora 7 Circuit Bending 4 Laboratorio sonoro 3 Plástica sonora 3 Acústica 2 Audio guía 2 Ensamblaje 2 Música Visual 2 Acción ruidista 2 Fuente: Instrumento de registro de la investigación Representación de la producción artística en Colombia y el mundo Esta representación muestra el volumen de producción artística sonora que se ha dado en el país y se ha incluido la obra de algunos artistas colombianos que han desarrollado sus propuestas artísticas fuera de Colombia. Esto responde a algunos procesos naturales de circulación de proyectos que transitan en el extranjero, especialmente en festivales y en otros casos, es la creación resul tado de la permanencia del artista en contextos internacionales, por residencia. De los 1106 registros se excluyeron algunos artículos científicos dada su naturaleza indeterminada para establecer un lugar específico de creación y circulación. Así las cosas, bajo un consolidado de 1020 obras se establecieron 873 registros en Colombia y 147 fuera del país, lo cual se representa en la figura 2:
Por su parte, el 86% representa el cuerpo de obras registradas en el país. Bogotá se presenta como el principal centro de producción artístico sonoro de Colombia (ver Tabla 5), propio de los procesos que tradicionalmente se han centralizado en la capital; su nivel de creación representa más del 50% del total, los lugares de circulación suelen ser variados, se destaca el Festival en Tiempo Real como uno de los eventos más constantes en el tiempo y su producción responde también, al mayor número de universidades que promueven la formación
ciudad que más registra obras asociadas al arte sonoro y se caracteriza por tener una circulación constante durante todo el año; su producción sonora representa casi el 20%. Aquí se resalta la institucio nalidad y la iniciativa independiente que colaboran entre sí, como el Museo de Arte Moderno (MAMM), el Parque Explora y Exploratorio, Platohedro, el
Jorge Mario Díaz Matajira 19 En873Colombia(86%)
Fuera 147Colombiade(14%)
Figura 2: representación en Colombia y el exterior
El 14% representa la presencia del arte sonoro creado por colombianos en el exterior y es significativo resaltar que dicha producción se extiende por el mundo entero. Tal y como se muestra en la tabla 4, Europa se manifiesta como el continente con mayor número de obras con el 50% de presencia colom biana, le sigue América con el 40% y en Asia tan solo un 2%. México, España, Inglaterra, Estados Unidos y Alemania, son los países donde se registra una mayor producción artística sonora por parte de colombianos, lo cual es cohe rente con la tradición histórica y formativa en estos lugares. De otro lado, es interesante notar presencia colombiana en países con menor filiación sonora como la India, Japón y Tailandia.
Medellínartística.eslasegunda
IntroducciónSuiche,20 colectivo Éter Lab, entre otros, quienes adelantan cada año la Semana de la Escucha, además del MAMM que tiene una sala exclusiva para el arte sonoro6.Encontraste con Medellín y Bogotá, emerge la ciudad de Manizales que concentra una de las producciones más altas de arte sonoro especialmente en la semana que se realiza el Festival Internacional de la Imagen de la Universidad de Caldas; su nivel de producción representa un poco más del 7% con un alto nivel de calidad y representantes internacionales.
Seguidamente, ciudades como Cali, Pereira, Bucaramanga, Armenia, Ibagué y Pamplona entre otras, han evidenciado producción sonora durante el año en diferentes clases de eventos, pero con un nivel de creación que no supera el 4% del total. No obstante, vale la pena mencionar que existen registros en otras regiones que evidencian obras de arte sonoro a lo largo y ancho del país, de esta manera, se encuentran trabajos en la isla de San Andrés, en Girón Santander, o en Pasto por citar algunos ejemplos.
Tabla 4 Representación fuera de Colombia País No. registrosde País No. registrosde País No. registrosde México 26 España 22 India 1 Estados Unidos 18 Inglaterra 20 Japón 1 Argentina 9 Alemania 14 Tailandia 1 Canadá 2 Francia 8 Brasil 1 Suiza 6 Costa Rica 1 Italia 6 Cuba 1 Canadá 2 Ecuador 1 Austria 2 Uruguay 1 Portugal 2 Holanda 1 República Checa 1 América 60 Europa 84 Asia 3 Fuente: Instrumento de registro de la investigación 6 Para ver más sobre el MAMM, leer los capítulos 7 y 12.
Jorge Mario Díaz Matajira 21 Tabla 5 Representación en Colombia Ciudad No. de registros Bogotá 493 Medellín 174 Manizales 65 Cali 34 Pereira 17 Bucaramanga 6 Cartagena 6 Ibagué 4 Armenia 2 Pamplona 2 Otras regiones 70 Total 873
Haciendo un panorama de la producción artística por años, se puede observar que, del total registrado, tan sólo 43 obras, no precisan año de creación; este valor representa un 3,8%; de esta manera con el 96,2% se pueden establecer algunas tendencias por décadas que se podrán apreciar en las figuras posteriores.
Antecedentes Inicialmente, se han encontrado algunas obras anteriores a los años noventa, las cuales se han agrupado como antecedentes. En la figura 3 se evidencia que desde el año 1935 hasta el año 1988 la producción de arte sonoro aparece con poca frecuencia, con intervalos de tiempo irregulares, y de forma aislada7; el promedio en 53 años es de 0,4 obras por año; sin embargo, vale la pena resaltar la producción de los años 1968 y 1969 que demuestran un número considerable de obras registradas y que se explican gracias al trabajo del artista Gustavo Sorzano. 7 Cabe aclarar que antes de los setentas y ochentas, no se hablaba propiamente de arte sonoro, por lo tanto, los registros que se enuncian en la figura, responden a obras que se asocian al arte sonoro y sus tipologías. Ahora bien, sí existía un número mucho más grande de obras asociadas a las prácticas de la música contemporánea.
Fuente: Instrumento de registro de la investigación
Producción artística por años
Introducción22 Producción sonora desde los años noventa Por lo que se refiere a la década de los noventa (ver figura 4), hay un conside rable aumento en la creación sonora, se puede decir que es la década en la cual inicia el desarrollo del arte sonoro en Colombia. Es de especial atención los años 1992, 1996 y 1998 que demuestran el mayor número de obras; en 1996 hay un registro de 16 productos, un promedio de 1,3 obras por mes. En esta misma línea, comparando los años 1968 y 1998, se observa un aumento de casi el doble de la producción sonora en un lapso de treinta años, sin embargo, el promedio durante la década es de 7,5 obras por año y en términos generales la curva es ascendente hacia finales de la década. Durante esta época se dan importantes eventos como el Festival Internacional de Música Contemporánea, el primer Festival de los Tiempos del Ruido, los ciclos de conciertos La 3ercera Oreja, los Jóvenes Compositores del Colombo Americano, entre otros eventos. Es una época que suelen recordar los artistas por su efervescencia y apoyo interinstitucional. 1935 1953 1956 1967 1968 1969 1970 1971 1972 1975 1979 1982 1985 1988 1 1 1 1 7 5 1 2 2 1 1 1 1 1 Figura 3: Producción por año - Antecedentes 2 4 10 3 4 8 16 7 13 8 1990 1991 1992 1993 1994 1995 1996 1997 1998 1999 Figura 4: Producción por año-década noventas
Figura 5: Producción por año-década dos mil
200010 2001 2002 2003 2004 2005 2006 2007 2008 2009 13 13 16 13 216 25 29 63 49
En este periodo se registra una mayor dispersión a nivel de la circulación. Se evidencian múltiples eventos y lugares como el MAMBO, Matik-Matik, los eventos de Plataforma en la Fundación Gilberto Alzate, y muchos otros de tipo más independiente. En 2009 Surge el Festival en Tiempo Real y se da la Bienal de Arte de Bogotá con el evento Confluencias, por citar algunos referentes de la época. En la década comprendida a partir de 2010, se puede observar la misma tendencia de crecimiento apresurado en extraordinarios volúmenes de creación. El año 2017 registra una producción de 182 obras asociadas al arte sonoro con un promedio de 15 obras por mes, superando tres veces el promedio del 2008. Este año es de especial atención porque se registró como referente el Festival de la Imagen XVI que se realizó con ISEA 2017, generando un alto cacheo de obras sonoras. El promedio durante los ocho años que lleva la década es de 83,5 conservando la tendencia de aumento en tres veces más que la década anterior y continúa la curva ascendente hacia finales de la década.
Jorge Mario Díaz Matajira 23 Entre el año 2000 y 2009 (ver figura 5), la tendencia continúa en ascenso y en grandes magnitudes. En el año 2008 se registraron 63 obras con un promedio de 5,25 obras por mes. Nuevamente, haciendo una comparación desde 1968 hasta el 2008, se observa un aumento desorbitado del 900% en un lapso de cuarenta años y de más del 400% en tan solo diez años entre 1998 y el 2008, lo cual implica un crecimiento acelerado en los últimos períodos. El promedio durante la década es de 24,7 obras por año, tres veces mayor que la década anterior y continúa la curva ascendente hacia finales de la década.
Figura 6: Producción por año-década dos mil diez
El año 2018 representa algo de su producción en los primeros 5 meses. Se puede predecir una producción similar o mayor al año 2016 y una constante en las tendencias anteriormente descritas.
A manera de síntesis, la magnitud en la creación sonora en el país, y de algunos colombianos que desarrollan su trabajo artístico en el exterior, es directamente proporcional al progreso acelerado del siglo XX y principios del XXI; las nuevas tecnologías, la sociedad de la información y la globalización permiten una mayor visibilidad y conexión de la producción artística asociada al arte sonoro. Si bien es cierto que entre los años treinta y ochenta no se da un desarrollo del arte sonoro nacional, no se puede descartar la ausencia tecno lógica que actualmente favorece el acto de registrar y documentar. De esta manera en los últimos años, a través de las redes sociales, circulan y se hacen evidentes incontables prácticas sonoras. En esa misma línea, se evidencia un creciente y generalizado interés por el sonido; diferentes disciplinas tanto científicas como artísticas expanden y cruzan sus fronteras apropiando lo sonoro como objeto de estudio y conoci miento; emergen autores y propuestas que se vuelven referentes en las cuatro grandes dimensiones: la creación, la circulación, la formación y la investiga ción, aspectos que se describirán a profundidad en los capítulos siguientes.
Con base en las generalidades anteriormente expuestas, se ha organi zado el libro en tres grandes partes: la primera, del capítulo 1 al 6, pone de manifiesto diferentes perspectivas sobre temas en torno al arte sonoro que generan inquietudes, debates y reflexiones. El capítulo 1, abre el debate sobre el arte sonoro como concepto, a través de las diferentes definiciones que brin daron múltiples artistas de la escena colombiana. El capítulo 2, continúa el
Introducción24 2010 2011 2012 2013 2014 2015 2016 2017 2018 31 53 88 71 58 88 97 182 47
Jorge Mario Díaz Matajira 25 tema anterior bajo la postura que ofrece el maestro Mauricio Bejarano vinculando la contextualización histórica y estética. El capítulo 3, profundiza sobre la polémica ¿Música o arte sonoro? En la que Alejandro Brianza, Roberto Cuervo y Jorge Díaz, triangulan sus posturas con la de los artistas y algunos autores referentes. De la música experimental al arte sonoro, es la propuesta de Rodrigo Díaz en el capítulo 4 donde expone algunos referentes clave en esa transición artística desde la creación. Julia Bejarano, en su capítulo 5, invita a reflexionar sobre el juego y la escucha como aspectos ontológicos al ser humano que emergen en los procesos de la creación sonora. En el capítulo 6, Francisco Cabanzo, brinda la experiencia de cuatro artistas sonoras mujeres, a partir de sus diálogos personales con ellas. La segunda parte, capítulos 7 al 10, presenta el panorama del arte sonoro en Colombia desde la categoría “dimensiones”, profundizando en los procesos de circulación, creación, formación e investigación.
Conviene subrayar que la investigación en su naturaleza epistemológica representa un diseño metodológico en sí mismo, es decir, el estado del arte como método más no como la fase tradicional de cualquier proyecto. Así pues,
La tercera parte que incluye del capítulo 11 al 16, se denominó experiencias desde el arte sonoro en Colombia. Amarilys Quintero, Jorge Gómez y Jorge Díaz describen en el capítulo 11, procesos alternativos emergentes en Colombia para la educación, investigación y difusión del arte sonoro. En el capítulo 12, Jorge Bejarano Barco reseña su experiencia como curador en el Museo de Arte Moderno de Medellín (MAMM), resaltando algunas de las más significativas exposiciones. José Gallardo, en el capítulo 13, plantea un espacio de reflexión entre la prosaica presente en las diferentes manifestaciones poéticas sonoras en el ámbito de arte sonoro, la música electrónica y la música experimental de la ciudad de Medellín. EL capítulo 14, presenta un panorama del trabajo académico enfocado en el sonido como material y como mediador social, realizado por investigadores y estudiantes de la Universidad Icesi de Cali en el lapso de diez años, escrito por Joaquín Llorca y Daniel Gómez. Continuando con la ciudad de Cali, en el capítulo 15, María Juliana Soto narra la historia del colectivo NoísRadio en un original formato de guión. La sección finaliza con el capítulo 16, que incluye la descripción del trabajo e investigación sonora realizada por Cielo Vargas en la ciudad de Pamplona.
Finalmente, a manera de conclusión, se presentan diversas perspectivas, prospectivas, retos y dificultades que los artistas manifiestan desde su experiencia y trayectoria en el medio sonoro colombiano.
Introducciónpretende26 brindar un panorama general sobre el tema, dar cuenta de lo que hay y se ha hecho desde los años noventa. Sin embargo, cabe aclarar que no es una investigación histórica, aunque a veces atraviese narraciones de este tipo y tampoco busca ser crítico-analítica, aunque ciertos pasajes se perciban bajo dicha postura. Por el contrario, el proyecto ha buscado propiciar la pluralidad de opiniones con carácter abierto a la discusión, que no sean concluyentes, sino que continúen y propicien nuevas investigaciones y propuestas. De antemano se presentan excusas, si los resultados parecen ambiciosos; se han escogido la mayor parte posible de referentes, pero es imposible mencionar, describir y reseñar todo lo que hay, lo cual es una fortuna para el arte sonoro, pues se abre un importante camino de investigación y documentación en el país.
Jorge Mario Díaz Matajira Autor y compilador
El arte sonoro en Colombia. Estado del arte se termino de editar en noviembre de 2021 El cuerpo del texto del libro está compuesto en letra tipo Warnock Pro en 11,5 puntos.