Libro: Meditación, sanación espiritual y ascensión planetaria by Fundacion.LANIN.33

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Las leyes del Cielo son absolutas, y fueron creadas para que todos estemos bien. También está toda la información vivenciada en más de 5 años de encuentros, formaciones, intensivos y retiros de Sanación espiritual en presencia del Cielo. Tuve la bendición como coordinador, de ser testigo como Seres superiores a nosotros, a nivel auditivo, visual y vivencial, (en más de 1000 campos personales de ambos sistemas), me mostraron, y nos mostraron a los que participamos de ellos, por qué sufre el ser humano, y qué hacer para continuar el aprendizaje sin sufrimiento.

Lograr en Armonía Nuestra Iluminación Nuevamente Creada a pedido de Cristo para la materialización del Plan del Cielo en la Tierra.

Fundación LANIN 33 Directo del Cielo @FundaciónLanin

En un aquí y ahora, todo ser humano deja el vehículo/cuerpo físico. La diferencia con otras veces, es que en pocos años más, es a escala planetaria, para TODOS. Son tiempos sagrados, sin prisa y sin pausa, estamos ascendiendo y es literal. Nos excede el proceso, es la ascensión de todo el Universo. Mariano Pignataro.

Meditación, sanación espiritual y ascensión planetaria

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Está todo lo que necesitás saber a nivel espiritual, hasta que dejes el planeta Tierra. Con leerlo, estudiarlo, NO será suficiente, se materializará cuando te ordenes tanto en el sistema familiar como en el sistema cósmico, tal cual está escrito dentro.

Mariano Pignataro

Pasar del bien personal, al bien mayor de todos, y los más altos fines del Cielo

Es tiempo de despertar, estamos ascendiendo y es literal.

Meditación, sanación espiritual y ascensión planetaria

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Mariano Pignataro

Continuamos el aprendizaje en planetas de cuarta y quinta dimensión.

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Meditaciรณn, sanaciรณn espiritual y ascensiรณn planetaria

Editorial Autores de Argentina

Pignataro, Mariano José Meditación, sanación espiritual y ascensión planetaria / Mariano José Pignataro. - 2a ed.- Ciudad Autónoma de Buenos Aires : Autores de Argentina, 2019. 180 p. ; 20 x 15 cm. ISBN 978-987-87-0003-8 1. Autoayuda. I. Título. CDD 158.12

Editorial Autores de Argentina www.autoresdeargentina.com Mail: info@autoresdeargentina.com Diseño de portada: Maximiliano Nuttini Diseño de maquetado: Editorial Autores de Argentina Asistente de redacción: José María Aiello Fotografías en blanco y negro: Jorge Peralta

Queda hecho el depósito que establece la LEY 11.723 Impreso en Argentina – Printed in Argentina

Prólogo Querido Lector: Anhelo colaborar para que estas páginas que tenés en tus manos vayan directo a tu corazón, están escritas para todos; sí…..para todos. A quienes les resulte dificultoso conectarse en el primer capítulo, les propongo pasen a la lectura de “Algunas experiencias” (pág 83). Dichas vivencias podrán llegar a vuestro corazón y así retomar la lectura con un sentir diferente y desde otro lugar. Para quienes sentimos la presencia de Cristo y podemos entregarnos a Su conducción, reconocerlo como nuestro Jefe y Guía, estas páginas serán una bendición más. Brindan una guía para avanzar hacia la Luz, el Amor, la Fraternidad y la Unidad: ir hacia la Ascensión; sanando y ordenando lo que en nosotros y nuestro entorno familiar esté en desorden. Este es el primer paso, el resto es nuestra decisión. “Pararnos sobre nuestros pies” para ser conscientes del camino de la ascensión, es tiempo. Abrazo tu Alma querido lector! Elda Gladis Perez, Neuquén, Argentina.

Capítulo I Introducción Hola herman@s…, este libro ha bajado al planeta porque los tiempos así lo ameritan; estamos ascendiendo* al Reino de la luz y lo hacemos ordenados, en sintonía con todos los Seres que habitan el Universo. Acá encontrarás todo lo que necesitás para continuar el aprendizaje en armonía, sin sufrimiento. Somos Seres de luz, eternos, por ahora dentro de un vehículo/cuerpo físico, próximos a ascender a cuarta y quinta dimensión. El aprendizaje en esta tercera dimensión, material, está terminando para muchos. El proceso es vivencial, e individual, uno a uno, y nadie puede hacerlo por el otro hermano. Todo lo que necesitamos saber a nivel espiritual, está en este libro; luego de que te ordenes en ambos sistemas, cósmico y familiar, ya no necesitarás recibir de ningún otro hermano humano. Ascendemos cada uno, en conexión directa con nuestros Hermanos mayores. Para todos es igual, cuenta regresiva a un despertar colectivo, nos excede el proceso; sólo nos queda confirmarlo individualmente. * Ascendiendo: el Universo es una escuela de aprendizaje, seguimos la evolución en planetas de cuarta y quinta dimensión.

Despertate, es tiempo; estamos ascendiendo y es literal. No es ciencia ficciรณn, ni una moda, es la ascensiรณn de toda la raza humana, a escala planetaria; guiados por nuestros Hermanos mayores.

Meditación Es tiempo de conectarnos con nuestra familia de Luz, no estamos solos en el Universo, somos seres humanos aprendiendo en 3era dimensión; existen 56 dimensiones y arriba la Trinidad, que es la unión de 3 energías máximas que forman el Gran Padre/Madre, la energía mayor en la existencia. Nuestra familia es mucho más grande que con la que nos relacionamos en la Tierra, es tiempo de conectarse, son amor, nos aman a todos.

en rendición total al Cielo 11

La mente humana Por la caída en la Atlántida, por nuestra soberbia y orgullo, estando en la Tierra, la mente de tercera dimensión ha estado guiando al ser humano, cómo si fuera más grande que nosotros (una ilusión más debido a nuestra inconsciencia) La manera de ordenarla, es diciéndole la verdad, que es un instrumento nuestro, chiquita en relación a nosotros. En voz clara, cuando estamos sin humanos, le hablamos y le decimos “mente, sos un instrumento mío, chiquita, yo soy el/la grande. Cuando te necesite te aviso, mientras podés descansar”, y le hacemos una reverencia de agradecimiento, llevando el mentón un poco hacia abajo. Acto seguido, y en voz clara también “invoco a mi Yo Superior, soy una parte tuya en la Tierra, aprendiendo, como todos. Gracias por estar, gracias por la conciencia, te tomo y me uno a vos”, y llevamos el mentón hacia abajo honrando la jerarquía superior que tiene nuestro Yo Superior en relación a nosotros, ya que se encuentra en quinta dimensión. Lo hacés las veces que sean necesarias hasta que la mente se relaje, y empieces a ver todo desde la conciencia, en paz. En general con decírselo una sola vez, es suficiente.

Capítulo II Meditación con el mantra Om Mani Padme Hum Estamos en cuenta regresiva a una ascensión planetaria, el proceso nos excede; el Cielo nos acerca la meditación Om Mani Padme Hum como un código de acceso a Seres de sexta dimensión, donde meditamos junto a ellos, iluminando nuestra mente para así poder ver más claro. Es un pedido a Dios de iluminación, trabaja en el sexto (el tercer ojo) y séptimo chakra (la corona). A través de esta práctica, le pedimos al Cielo que ilumine nuestra mente. Honramos la jerarquía superior de los monjes que lo están recitando, llevando el mentón hacia abajo con las palmas de las manos unidas en el chacka cardíaco, y así podemos recibir. Siempre que queramos recibir de planos superiores necesitamos hablarles, en voz audible, y respetar la jerarquía superior que tienen en relación a nosotros, la cual se da por evolución de conciencia. Estos monjes son de la escuela cósmica Melquisedec que tienen entre sus servicios planetarios, la tarea de repetir las veinticuatro horas del día, el mantra Om Mani Padme Hum para el planeta Tierra y los seres que estamos acá. En esta meditación lo que hacemos, es subir a esa rueda de monjes y meditar junto a ellos. Lo hacemos repitiendo el mantra Om Mani Padme Hum 3 veces, 13 veces; en voz clara, audible y contando con los dedos de las manos para no perdernos, ojos cerrados de principio a fin. 13

En la práctica es así: Sentados con la espalda derecha, ojos cerrados. • Saludamos a los monjes: juntamos las manos sobre el chakra cardíaco y llevamos el mentón hacia abajo en dirección a la unión de nuestras manos (de esta manera cumplimos con la ley de jerarquía cósmica, que es por evolución de conciencia). Luego nos incorporamos, espalda derecha. • Repetimos 13 veces el mantra Om Mani Padme Hum en voz clara, audible, contando con los dedos de las manos para no perdernos (respetamos la ley de libre albedrío, le estamos pidiendo directo al Cielo, sin intermediarios humanos). • Al finalizar las primeras 13 veces, entramos en el primer silencio: este silencio es para poner una intención, para sanar algo personal, para enviar luz a un ser querido o a un grupo de personas, o luz al planeta. En este intervalo cada uno elige una de las opciones. Como seres humanos no tenemos la cualidad de ayuda directa, no existen sanadores humanos encarnados. Uno puede ser como máximo, canal de la sanación del Cielo, el poder y la sanación real siempre son de planos superiores. Es por eso que en el primer silencio enviamos la intención desde nuestro tercer ojo hacia algún Ser superior (el que cada uno sintonice en ese momento, todos existen y están unidos arriba...) y desde el Ser superior direccionamos hacia alguna de las opciones anteriores mencionadas. Si elegimos mandarle luz al planeta, por ejemplo, visualizamos a Rafael Arcángel, Buda, Cristo, por ejemplo y desde ahí direccionamos hacia el planeta. Para algo personal, puede ser Buda, la Virgen María o Shiva entre otros, direccionando hacia el Ser superior que elegimos y de él hacia nosotros y soltamos. Para una persona o un grupo de personas, la intención a algún Ser superior y direccionamos, mandamos la intención hacia la persona o el grupo; soltamos y seguimos en silencio. Es posible que un Ser superior se presente cuando entramos al primer silencio, sino lo elegimos nosotros. 14

Cuando enviamos la intención es solo un instante, lo hacemos y soltamos, para no interferir con la energía. Si no sería como estar controlando a Seres de mayor conciencia a la nuestra. Lo que hace el Cielo es iluminar esa, o esas almas para que vean más claro y tomen la decisión correcta, por ley de libre albedrío más no pueden hacer. Y a la vez es muy importante cuando nos iluminan desde planos superiores. Los tiempos del silencio, son definidos por quien guía o hace individualmente la meditación. • Cuando lo sentimos, repetimos por segunda vez 13 veces el mantra Om Mani Padme Hum; en voz clara, audible y contando con los dedos de las manos para no perdernos. • Entramos en el segundo y último silencio: Aquí sólo es observación interna, no hay nada que hacer. • Repetimos por tercera y última vez 13 veces el mantra Om Mani Padme Hum en voz clara, audible y contamos con los dedos de las manos para no perdernos. • Al finalizar nos despedimos de los monjes: Les agradecemos colocando las manos en el chakra cardíaco y llevando el mentón hacia abajo (ley de jerarquía cósmica). Nos incorporamos, seguimos con los ojos cerrados el tiempo que lo sintamos. Por último abrimos los ojos, volvemos a Tierra. Cuando respetamos la ley de libre albedrío y de jerarquía cósmica, recibimos del Cielo. Por más que nos amen a todos, sólo pueden darnos cuando estamos ordenados. La ley de libre albedrío establece que tenemos que hablar directo con el Cielo, que nadie lo puede hacer por el otro, ya que el proceso es individual. Y la ley de jerarquía es por evolución de conciencia: un ser de mayor conciencia tiene más jerarquía que un ser de menor conciencia; la manera de respetar esta ley es en rendición total, mentón abajo. No hay nada que podamos enseñarle ni sugerirle a un Ser superior, por eso es superior... hasta irnos del planeta nos toca recibir. 15

om mani padme hum (SeĂąor, ilumina mi mente)

Capítulo III Hablar con el Cielo – nuestro YO Superior y Guías personales Nuestro Yo Superior está en quinta dimensión, baja una parte de él y somos nosotros acá en Tierra. Venimos con un plan de vida, los hay de un día de embarazo, llamados pérdidas de embarazo, hasta los 100 años más o menos; todos igual de importantes y es en base a lo que cada Yo Superior necesita aprender. Termina el plan de vida, queda el vehículo físico y el ser sigue..., no hay muerte, en los cementerios sólo hay vehículos en descomposición, es un negocio más. Estando encarnados nunca estamos solos; de base, todos tenemos a nuestro lado un guía y un protector las veinticuatro horas. Cuando invocamos cotidianamente honrando la jerarquía superior de nuestros Hermanos mayores, comenzamos a sentir la guía, la protección y la Conciencia del Cielo. Sentirse “solo” es una ilusión, podemos estar solos en el plano físico sin compañía de humanos, pero siempre estamos acompañados por el Cielo. Cuando alguien tiene miedo, se está olvidando que está acompañado; no está hablando con el Cielo y como en el Cielo se respetan las leyes, aunque tengamos las 24hs un guía personal para guiarnos y un protector para protegernos, si no les hablamos y no honramos la jerarquía superior..., nada pueden hacer. Ellos también están en aprendizaje, así es para todos en el Universo, en la mayoría de los casos aprendiendo de la paciencia. Están al lado 17

de todos los seres humanos esperando que despierten, se alineen, y así poder ayudarnos. Para recibir hay que hablar, “invoco“, es lo más directo, en voz clara y audible; honrando la jerarquía superior. Aquí les explico una forma fácil y directa de hablar con el Cielo. Comenzaremos haciendo una postura de manos conocida como “mudra”, con las siguientes características: • Mano izquierda abierta en chakra cardiaco, señal que nos auto-sostenemos, el Cielo nos quiere ver parados en nuestros pies; hablando con el Cielo, recibiendo guía, protección y conciencia. No nos quieren ver sintiéndonos como si fuéramos víctimas, ya que no lo somos en ningún caso y de lo que sufrimos, nos suavizan el aprendizaje por compasión de Dios, hicimos mucho más daño anteriormente en esa misma energía de lo que hoy estamos sufriendo. Es así en todos los casos. • Tres dedos mano derecha hacia arriba, saludando a la Trinidad (mayor, índice y pulgar) Con este mudra está resuelta la ley de jerarquía, desde nosotros honrando a la energía máxima. Para recibir necesitamos completar con el libre albedrío, invocando en voz clara a Seres superiores. Así pueden darnos, así recibimos. Cerramos los ojos, en voz clara y audible decimos: • Invoco a mis guías personales. • Invoco a mi Yo Superior. • Invoco a Jesucristo por ejemplo, (o el Ser superior con quien sintonicemos en ese momento) y nos quedamos el tiempo que sintamos en silencio, recibiendo del Cielo. • Cuando lo sentimos abrimos los ojos y volvemos.

Nos podemos quedar varios segundos o minutos, es para hacerlo cuando no hay humanos o cuando todos están haciendo lo mismo, para no llamar la atención. La ascensión no es show, ni una moda, es la evacuación de toda la raza humana a escala planetaria. Es un proceso interno, verdadero y directo con el Cielo. Sin prisa y sin pausa vamos despertando, el proceso es individual, sólo podemos mejorarnos cada uno, y nuestro orden, será una bendición para muchos. El Cielo está bajando la energía para que la masa crítica despierte, cuando 144.000 humanos despierten al proceso real de ascensión, hablando directo con el Cielo y en rendición total, se producirá el despertar de todos. De eso se encargan nuestros Hermanos mayores, el Plan de Cristo está en marcha.

mudra de invocación invoco a mis guías personales invoco a mi yo superior invoco a cristo “Señor te pido, que todo lo que suceda hoy y siempre, sea para el bien mayor de todos, y los más altos f ines del Cielo”

Sanación Espiritual Todo desorden mental, emocional o físico, que llegó a una enfermedad (desde un dolor de garganta hasta un cáncer), siempre, es porque una o más leyes del sistema familiar y/o cósmico no se están respetando. Estar ordenados y sanos es un sinónimo; la humanidad sufre en la Tierra por la soberbia (creerse superior o igual a Seres de mayor evolución y conciencia) y por el orgullo (creerse superior a otro hermano humano). Todos somos chiquitos en relación a Seres superiores y nadie es más que otro hermano humano. Como estamos ascendiendo al Reino de la luz y lo hacemos ordenados, desde planos superiores de conciencia han bajado la solución a todos los conflictos y sufrimientos del ser humano, mediante la herramienta de “Sanación espiritual en presencia del Cielo”. Nos permiten oír, ver y vivenciar, las leyes que nos rigen en todos los temas desordenados del ser humano, dándonos la solución a cada uno de ellos; el movimiento es individual, uno a uno. Nos iluminan para que veamos más claro y tomemos la decisión correcta que nos llevará a la armonía en nuestra vida. No pueden hacerlo por nosotros, la ley de libre albedrío es respetada en todo el Universo.

Capítulo IV La herramienta de Sanación espiritual en presencia del Cielo En los encuentros vivenciales de Sanación espiritual en presencia del Cielo, Seres superiores a nosotros ponen luz a todos los temas desordenados que tenemos; abarca todos los casos que llevan al sufrimiento del ser humano, y la solución en todos los casos, produciéndose la sanación si nos ordenamos a las leyes del Cielo. Una herramienta divina que permite a nuestros Hermanos mayores estar presentes en el lugar donde se realiza el encuentro, y así iluminarnos e iluminar los desórdenes que tenemos en nuestro sistema familiar y cósmico, mostrándonos desde lo vivencial, cómo retomar el equilibrio en nuestra vida. Es para todos los seres humanos, para las personas que sufren en todos los niveles, sea mental, emocional o físico, quienes no logran comprender muy bien por qué, es también para aquellos que están relativamente bien, pero les falta la conciencia del proceso que estamos transitando como raza. Es para todos. El coordinador de Sanación espiritual en presencia del Cielo, es sólo un canal, que guiado por el Cielo, interactúa entre los Seres superiores y los seres humanos para mostrarnos la sanación en todos los casos, si el humano se alinea a las leyes.

La ascensión es vivencial, ascendemos diciéndole “sí” al proceso y en rendición total al Cielo. Estamos yendo al Reino de la luz, planetas de cuarta y quinta dimensión, donde la base es la paz y el amor, en aprendizaje eterno. No podemos “llevarnos materias de tercer grado, pasamos a cuarto y a quinto sin previas”. El Cielo ilumina y nos muestra con amor, intensidad y firmeza, todo aquello desordenado que debemos acomodar para ascender.

Capítulo V Sistemas Cósmico y Familiar - Sus características Son los dos sistemas principales a los cuales todos pertenecemos:

Sistema Cósmico

Es el verdadero y así ascendemos, es el que nos encuentra a todos los seres humanos hermanos, todos nuestros Hermanos mayores distribuidos en 56 dimensiones de conciencia y arriba la Trinidad, que es la unión de 3 energías máximas que forman el Gran Padre/ Madre o el Jefe. Cristo es parte de esa Trinidad y es quien está al mando del proceso de ascensión planetaria. Fuimos creados 21 mil millones de seres humanos, de los cuales hay aproximadamente 7 mil quinientos millones que estamos encarnados en el planeta, vivos estamos todos, algunos con vehículos físicos y el resto sin el. Los que estamos en vehículo/cuerpo físico, en un aquí ahora debemos dejarlo. Antes de caer por la soberbia y el orgullo, estábamos en la quinta dimensión. Por compasión de Dios, nuestro Yo Superior siguió en esa conciencia; desciende una parte de nuestro Ser total y somos nosotros acá en la Tierra; venimos a aprender y nivelar nuestras acciones pasadas. El aprendizaje era para entre 7 y 9 encarnaciones…, por el libre albedrío nos distrajimos en la ilusión de la Tierra, y tuvimos que encarnar muchas veces más.

El libre albedrío es limitado, en una consulta interna a nivel alma en el año 1992, se nos dio a elegir quién quería ir al Reino de Cristo y quien no, la maldad no pasa por vibración y muchos por apego a la materia, no quisieron. Como la mitad del total de los seres humanos que somos, dijimos sí, corrieron el meteorito que iba a caer en 1999 (como bien lo había visto Nostradamus, llegarás al 1000 pero no al 2000“) y se cambió al proceso de ascensión al que estamos experimentando ahora. A muchos nos faltaban 3 o 4 encarnaciones para completar el proceso; al no haber tiempo de entrar y salir, es que los aprendizajes se han acelerado, teniendo los cambios en pocos años sin dejar el cuerpo físico.

Sistema Familiar

Es ilusorio, ya que todos somos hermanos; son roles para aprender en la materia. La familia terrestre fue creada por la caída, el costo de acciones individuales bajas, impacta negativamente en los que más amas. En el próximo estadío viviremos en comunidad de almas afines, relacionándonos en conciencia con todos los Seres del Universo. Hasta que caiga el velo y la humanidad eleve la conciencia, para estar en armonía es necesario respetar los roles y las leyes del sistema familiar. En base a nuestro aprendizaje, desde nuestro Yo Superior elegimos a un papá y a una mamá, para cada uno de nosotros son nuestros únicos y mejores padres, para nuestro aprendizaje en esta encarnación..., y están directamente relacionados con lo que tenemos que balancear de vidas pasadas. Entramos al sistema que está compuesto por papá y mamá biológicos, hermanos de nuestros padres, abuelos, hermanos de nuestros abuelos y así para atrás; pareja, hermanos, hijos. Este es el sistema familiar básico de la mayoría de los seres humanos, los que fueron dados en adopción, se incluyen los padres adoptivos.

Siempre recibimos de nuestra familia: estando ordenados, la fuerza luminosa; estando desordenados, los conflictos y sufrimientos de ellos (creándoles más dolor del que ya tienen), los cuales desaparecerán, sólo cuando también se ordenen. Es uno a uno, sólo podés mejorarte vos, estamos en el juicio final, cada uno arreglando cuentas con el Cielo. Todo está y fue visto siempre por Dios, sólo podemos engañarnos nosotros..., al Cielo es imposible. Tu mejoría, sin ayudar directamente a otro, será una bendición para muchos. Cuando nos ordenamos, la fuerza amorosa de nuestros ancestros nos impulsa hacia adelante, hacia la vida...; dándoles un alivio al ver que su descendencia está en armonía. Es lo máximo que podés hacer, mejorarte vos y acá está todo para que lo hagas y lo vivencies. Las energías y conflictos del sistema familiar al que entramos, habla mucho de nuestras acciones en vidas pasadas. Entre todos los miembros del sistema hay un hilo invisible que nos conecta. Si llegué a la Tierra y por ejemplo, mi abuelo desencarnó antes, igual estamos vinculados ya que no hay muerte; mi abuelo sigue vivo, sólo que no está en un vehículo físico. La diferencia entre alguien que desencarnó y nosotros, es el vehículo físico. Venimos con un plan de vida y aprendizaje, la duración dependerá en cada caso y es en base a lo que cada Yo Superior necesita aprender, los hay de 1 día de embarazo llamados pérdidas de embarazo, de 30, de 60, de 100 años..., ninguno es mejor que otro, es de acuerdo a lo cada uno necesita transitar y aprender. Quedarse mucho tiempo encarnado con dolor es karmático, es porque más lío hicimos anteriormente, ya que igual en algún momento nos tenemos que ir y será en un aquí y ahora. Termina el plan de vida y el vehículo/cuerpo queda y nosotros seguimos el viaje, somos seres eternos.

Ahora baja en conciencia porque en el próximo estadío no tendremos ni siquiera aparato reproductor, vivenciaremos la eternidad de nuestra alma. Nacer y morir es sólo una ilusión de este plano de 3era dimensión, el cual está culminando. Todo encuentro en la Tierra, familiares, enamorados, asesinos y víctimas, etc., arriba somos muy afines, es por eso que nos encontramos aquí para aprender.

Capítulo VI Leyes que rigen los sistemas Cósmico y Familiar Leyes del sistema Cósmico

Como mencionamos anteriormente, este sistema es el verdadero y así ascendemos, es el que nos encuentra a todos los seres humanos hermanos, todos nuestros Hermanos mayores distribuidos en 56 dimensiones de conciencia, (Seres de dimensiones superiores, santos, maestros ascendidos, la Virgen María, Arcángeles, etc.) y arriba la Trinidad que es la unión de 3 energías máximas que forman el Gran Padre/Madre o el Jefe. Cristo es parte de esa Trinidad y es quien está al mando del proceso de ascensión planetaria.

Ley de Jerarquía y Libre Albedrío

La Ley de Jerarquía, establece que un ser con mayor conciencia, tiene más jerarquía que aquellos de menor conciencia. Si queremos recibir de un Ser superior (para los humanos son todos los de 4ta dimensión para arriba), debemos honrar esa jerarquía; esto se materializa llevando el mentón hacia abajo, en rendición total. Nada podemos enseñarle ni sugerirle a un Ser de mayor evolución y conciencia, hasta irnos del planeta nos toca recibir.

Están para guiarnos en cada aspecto de la vida, para protegernos y bajarnos conciencia; desde arriba saben qué es lo mejor para cada uno de nosotros. Honrar la jerarquía no basta para que puedan asistirnos, además tenemos que dar la aprobación para ello respetando nuestro libre albedrío. Se materializa hablando en voz audible con el Cielo, cotidianamente, invocándolos, agradeciéndoles, comunicándonos directo. El proceso es individual, nadie lo puede hacer por uno. Al mismo tiempo es colectivo, porque es para todos. Al hablarles, honrando su jerarquía superior, se produce la conexión directa del Cielo con cada uno de nosotros que lo hacemos. De esta manera pueden guiarnos, protegernos, iluminar nuestro ser para ver más claro e ir tomando las decisiones correctas, las cuales nos llevarán a una ascensión ordenada y en paz; así ascendemos al Reino de la luz. Invocamos en voz clara y en una voz que podamos escuchar, primero a nuestros guías personales (de base todos tenemos un guía y un protector las 24hs a nuestro lado), después al Yo Superior (es nuestro Ser total que permanece en la quinta dimensión) y luego al Cielo alto (Cristo, Arcángeles, Shiva, Buda, por ejemplo) al que sintamos o el que se nos presente en ese momento de acuerdo a la situación que estemos transitando. Luego llevamos el mentón hacia abajo, honrando la jerarquía superior que tienen por su evolución de conciencia; así recibimos. Es vivencial, de nada sirve creer en lo que estás leyendo, sólo sucede cuando lo hacés. Al alinearnos a nuestros guías personales, al Yo Superior y al Cielo alto, activando este movimiento, ellos nos hablan por oído interno, los sentimos a nuestro lado, nos muestran el aprendizaje de manera vivencial. Sin que se materialice un hecho doloroso para que aprendas, ya está lista la energía para seguir aprendiendo en armonía, sin sufrimiento. Ese es el Gran cambio, dejar de aprender por el sufrimiento causado por la soberbia y el orgullo; seguir aprendiendo desde la conciencia.

Cuando el humano les habla directamente y honra la jerarquía superior, el Cielo feliz! ya pueden guiarnos, protegernos, bajarnos conciencia, amor y paz. Nos aman a todos, la limitación es del humano que hasta ahora no permitió recibir; ya es tiempo... Nuestro Yo Superior cuando ve que nos conectamos en total humildad, se expande, se alegra. Bajamos a la Tierra a aprender y esta información la elevamos a nuestro Yo Superior para que siga expandiéndose, equilibrando; nuestro logro acá, impacta directamente en su expansión y evolución.

Ley del Balance

Es lo que conocemos como el karma y dharma; lo que nos pasa es lo que nos tiene que pasar, en base a lo que hemos hecho desde la última caída hace 13.500 años aprox, hasta la actualidad, “no existe la buena suerte ni la mala suerte”, en Dios todo es justo y necesario, todo es energía que vamos atrayendo por sintonía y aprendizaje. En Dios todo es justo y necesario, todo es energía que vamos atrayendo por sintonía y aprendizaje. Todo lo bueno que nos pasa es el dharma, allí el Cielo no necesita actuar..., está relacionado con todas las buenas acciones pasadas y presentes. Todo lo malo que nos pasa es el karma, es nuestro sufrimiento, de esto, por amor de Dios, se nos suaviza el aprendizaje; en todos los casos hicimos mucho más daño anteriormente en la misma energía que hoy estamos recibiendo y sufriendo. Queja y Critica, son energías que debemos dejarlas, que no salgan de nuestra boca. Son densas, nos tiran para abajo..., yendo en un sen-

tido contrario al proceso de ascensión que estamos transitando. No va hacia otros seres, ni hacia nosotros mismos. Si nos quejamos, criticamos, o nos hacemos los pobrecitos poniéndonos en lugar de víctimas, nos perdemos el aprendizaje y seguiremos atrayendo las mismas situaciones dolorosas, una y otra vez. El Universo no está en contra de nosotros, nuestras acciones desordenadas pasadas son las que generan el sufrimiento; nada es personal, aunque nos mudemos de país, seguiremos con la misma energía desordenada en el lugar donde nos toque residir, sólo cambiarán los hermanos “actores”, ya que lo que estamos atrayendo es la energía a equilibrar. Las cuentas pendientes se arreglan con el Cielo y no entre nosotros. El perdón desde el humano no va..., perdonar a alguien que nos hace daño es orgullo, nos estamos atrayendo en un 50% cada uno (el asesino es atraído por la víctima de asesinato, el violador por la víctima de violación, y así en todos los casos), esto no libra al perpetrador de su responsabilidad, tendrá que arreglar cuentas arriba ya que todo fue, y es visto por el Cielo. Lo único que podemos hacer es mejorarnos nosotros y que ninguna energía desordenada entre en nuestro campo de acción. Pedir perdón a Dios tampoco sirve para sanarnos, ni perdonarnos a nosotros mismos (sería muy fácil eso...). El que nos perdona, nos redime, es el Cielo, ante el real arrepentimiento de nuestras acciones pasadas. Para saber el karma que nos queda, son las energías que nos muestran otros hermanos humanos en nuestra vida, las que nos molestan; las que hasta ahora nos quejábamos, criticábamos, nos poníamos en pobrecitos; el afuera nos marca cómo estamos en nuestro interior y las materias que nos quedan pendientes para ascender al próximo estadio. Para todas las energías es igual la mecánica del orden, por ejemplo:

Cuando nos molesta la envidia de otros, o estamos siempre con el tema de la envidia en la cabeza y permaneciendo en nuestro vocabulario, la energía de la envidia está en uno. Hemos sido y/o somos envidiosos con otros hermanos y no nos arrepentimos de eso. En este sentido no importa ni quien nos envidia ni a quienes envidiamos, ya que a los que envidiamos nos atrajeron energéticamente por su envidia anterior. Así llegaríamos hasta la Atlántida en donde se produjo nuestra última caída; desde ahí se cuenta el proceso, lo anterior ha sido sellado, equilibrado. Ahora estamos dando el ejemplo de la envidia, es para todas las energías bajas (la soberbia, la manipulación, la crítica, el menosprecio, el abuso, la violencia, el engaño, el orgullo, el abandono, la lujuria, el maldecir). Cada uno chequeará qué materias pendientes le quedan para equilibrar y sanar, las cuales son mostradas por otros hermanos humanos. Volviendo al ejemplo de la envidia, hemos sido o somos envidiosos con otros y nunca nos hemos arrepentido de serlo; es por eso que atraemos la energía de la envidia, para que aprendamos lo desagradable que es que te envidien. Como las cuentas se arreglan con el Cielo… necesito hacer contacto con ellos; estar en un lugar físico sin humanos, primero invoco a mis guías personales, luego a mi Yo Superior y luego a alguien del Cielo alto, por ejemplo a Cristo, en voz clara y audible. Luego de invocarlos llevo el mentón hacia abajo en rendición total, honrando sus jerarquías superiores. Una vez hecho esto, siento al Cielo en vivo a mí alrededor, este es el momento de arreglar cuentas. Seré sanado, perdonado, cuando me arrepienta; para llegar a ello el primer paso es tomar responsabilidad de mis acciones en voz clara: “Señor, tomo responsabilidad de haber: robado ó estafado ó violado ó manipulado ó engañado ( menciono la energía a ordenar)”

Una vez realizada la toma de responsabilidad en voz clara en presencia del Cielo, ya he logrado un gran avance, algo en mi interior se acomoda hacia la luz. Esto no me sanará, pero será el paso necesario para que realice el siguiente. La sanación se produce con el arrepentimiento, si una vez que tomé responsabilidad, mi ser lo siente… me estremezco, en voz clara le expreso al Cielo las palabras terrestres que transmiten lo que me está pasando. “Señor, lo siento” Si es real..., imposible engañar a Dios, somos perdonados, redimidos; lo que ocurre es que desaparecen los hermanos “actores” que me envidiaban, o hasta sigo en contacto con ellos sin que la envidia esté presente desde la observación de mí ser, ya se cortó la dinámica que lo materializaba en la relación entre ambos. Esto funciona igual para todas las energías, si alguien es abandonado es porque abandonó mucho más en vidas pasadas y no se arrepintió; atrayendo hermanos-actores que lo abandonarán; y algunas veces ni siquiera el otro tiene la intención de abandonarnos, eso nos excede, será evaluado por el Cielo. Si nos afecta como abandono, esa energía necesitamos ordenarla con Dios. Si recibimos maltrato es porque hemos maltratado a otros anteriormente, el maltrato está en nuestro interior..., y así con todas las energías, una vez las ordenamos, nuestra vida en la Tierra está en equilibrio, sin situaciones o energías que nos afecten de manera negativa. Alguien te abusa, lo estás atrayendo; eso no redime a quien te abusa, él va a arreglar cuentas con el Cielo, pero no nos toca a nosotros encargarnos de eso, ya que igual no podemos. Todo está siendo visto por Seres superiores, el proceso es uno a uno. Con el despertar y orden al proceso real de ascensión de 144.000 almas que forman la masa crítica, hará que toda la humanidad que va al Reino de Cristo despierte, y haga el proceso también. 34

De eso se encarga el Cielo, hay un Plan en marcha, mientras la mayoría de la humanidad sigue sufriendo, distraída en la ilusión de la Tierra. Cada uno debe arreglar cuentas con el Cielo, lo mejor que podemos hacer, es mejorarnos nosotros; eso será una bendición para muchos. Sin ayudar de manera directa, con nuestra mejoría, estaremos ayudando a la ascensión de todos. Si te molesta la soberbia de otro ser humano, vos sos el soberbio; si el otro es o no soberbio no es tu problema, ni podes interceder de manera directa, ya que arreglará sus propias cuentas con el Cielo. Lo importante es que ahora ya sabés que sos soberbio, y cómo hacer para ordenarlo y que desaparezca de tu campo. El Cielo es muy compasivo, amoroso y nos facilita el aprendizaje, ya que es mucho peor lo que le hicimos a otros en vidas pasadas, de lo que estamos recibiendo en esta encarnación, esto es en todos los casos... Más allá del tiempo terrestre que el individuo tenga en esta encarnación, hemos sido creados todos en el mismo momento. Al no quedar tiempo para desencarnar y volver a encarnar, es que estamos teniendo un aprendizaje acelerado, sin salir del vehículo físico, estamos viviendo y cerrando todas las vidas desde nuestra última caída. Ascendemos a cuarta y quinta dimensión habiendo concluido el aprendizaje de tercera. Nos dan el resultado final del examen para pasar, no lo pueden hacer por nosotros. Nos lo dicen, muestran y hacen que lo vivenciemos para que se nos facilite. Nos aman a todos. Con la apertura del Faro del Mundo, el Centro de meditación, sanación espiritual y ascensión planetaria en Junín de los Andes, se potenciará la iluminación del planeta.

Ley de la Pertenencia

Esta ley dice que todos en el Universo tenemos derecho a pertenecer, no nos toca ser jueces de nadie. Podemos mejorarnos cada uno, en este libro está todo para lograrlo... No podemos ayudar a nadie de manera directa, solos, a nivel alma. Simplemente no es posible (operativamente nos asistimos unos a otros), de eso se ocupa el Cielo; estamos en el juicio final, cada uno rinde sus cuentas de manera directa. Estar ordenados para esta ley, es honrar a todos, e ir adentro, al interior de nuestro ser. Honrar es reverenciar; no quejarnos, no criticar, no tratar a nadie de pobrecito (ya que nadie lo es y le están alivianando el aprendizaje), y no querer ayudar de manera directa en el alma, con el dolor ajeno, porque igual no podemos, nos excede. Somos todos seres experimentando en el Universo, viviendo el proceso individualmente y a la vez de manera colectiva. Si honramos a todos los seres: a los Seres superiores a nosotros (para poder recibir), a hermanos de la misma dimensión y a los seres de segunda dimensión (impuros en relación a nosotros que coexisten en el planeta por responsabilidad nuestra, ya que al caer fracturamos segunda dimensión), podremos estar en equilibrio por esta ley. Honramos y vamos adentro, el proceso es interno. El afuera, la obra de teatro, nos muestra cómo estamos internamente (existen casas, autos, vehículos físicos, porque es un planeta material, es una maqueta en donde se produce el aprendizaje de los individuos). No te distraigas en la ilusión de la Tierra, lo importante es el aprendizaje..., el resto es efímero.

Si criticamos o luchamos ya sea con otros hermanos humanos o con seres de baja vibración, nos desordenamos; ya que nos tomamos esa energía y no mejoramos nada afuera. El Cielo no lucha contra la oscuridad, no existe tal lucha, con su sola presencia... o se retiran, o se rinden al Cielo y son redimidos, esto es por vibración. La oscuridad más grande es de segunda dimensión, coexisten en el planeta por nuestra caída en la Atlántida donde llegamos a quebrar la conexión con la 2ª dimensión por la soberbia y el orgullo. Son hermanos nuestros, con otra conciencia y aprendizaje, a los que tampoco nos toca juzgar. Y visto desde el alma, han permitido nuestro crecimiento, ya que sabemos por dónde no ir. Honro la oscuridad si se me presenta, y direcciono mi ser hacia el Cielo, invocando a mis guías personales, Yo Superior, y el Cielo alto en rendición total. Cuando me alineo a mis Hermanos mayores el miedo desaparece, ya que siento sus presencias en mi vida, la guía, protección y conciencia. No nos toca meternos en el aprendizaje del otro, tampoco podemos ayudar. Si queremos ir a ayudar a alguien de manera directa, nos tomaremos su dolor y no sólo no lo ayudamos, sino que nos desordenamos y así todo empeora. Ni Cristo puede ayudar a alguien que no quiere ser ayudado y que no honra Su jerarquía. Si alguien se para frente a Cristo y se cree tan grande como Él, no hay manera de que Cristo pueda ayudarlo; lo impide con la soberbia. Honrar es: • • • •

No queja. No crítica. No tratar a nadie de pobrecito, ya que nadie lo es. No ayudar a nadie directamente con los temas de su alma, porque igual no podemos.

Lo que sí es propicio y podemos hacer, es enviar luz a través de Seres superiores; orar, rezar, volviendo al proceso interno. Quedarme esperando el accionar del Cielo, sería estar evaluando la forma de proceder de los Seres superiores y eso no es ordenado. Por lo tanto, mando la intención, suelto y me ocupo de mi mejoría. Saber que voy bien es vivenciar una vida en equilibrio y armonía. La ascensión hacia la luz no es un proceso de miedo. Por eso están coordinándola para que sea en paz, hermandad, fraternidad, conciencia y amor.

Leyes del Sistema Familiar

Como vimos anteriormente, es un sistema ilusorio, la verdad es que somos todos hermanos. Fue creado por la caída de la Atlántida, uniendo las almas individuales con los que más amamos. Los miembros de la familia terrestre, en el alma somos muy afines, acá cumplimos roles para aprender. 38

En el próximo estadío viviremos en comunidad de almas afines, hermanados en fraternidad. El Cielo nos guía a salir de manera ordenada, ya que es la única manera de hacerlo en armonía y recibiendo la fuerza luminosa de nuestros ancestros. Siempre recibimos del sistema familiar; desordenados, los sufrimientos de los ancestros. Ordenados, el amor de ellos que nos impulsa hacia adelante, que es hacia donde todos debemos mirar e ir. Para mantener ese orden necesario, debemos cumplir con las leyes que rigen a este sistema:

Ley de la Jerarquía

Así como en el sistema cósmico la ley de la Jerarquía se da por evolución de conciencia, en el sistema familiar, es por orden de llegada a la Tierra. El que llegó primero tiene más jerarquía que el que llegó después. Es decir, todos nuestros ancestros: hermanos mayores, padres, abuelos, tíos y así para atrás, tienen más jerarquía que nosotros. La sanación/orden, en esta ley se materializa honrando a todos los ancestros. No queja, no crítica, no tratarlos de pobrecitos, no querer ayudarlos de manera directa en el alma,ya que igual no podemos. Por ejemplo, si quiero sostener el alma de mi abuelo y soportar su dolor, no lo estoy honrando, así me desordeno, sintiéndome cada vez peor; además de no solucionar el sufrimiento de mi abuelo, que no es ningún pobrecito, como nadie lo es, le ocasiono más dolor, al ver a su nieto mal. Si hasta ahora te quejabas de tu padre porque te abandonó, más allá que haya sido así o sólo sea un sentimiento que te llega, tenés que tomar responsabilidad de haber abandonado en vidas pasadas y si te arrepentís de verdad ante el Cielo, dejarás de sentir eso hacia tu papá

(ley de balance cósmico); cambiando el sentimiento por agradecimiento hacia él, ya que pudiste sanar esa energía en tu ser. Si este es tu caso, es la razón de haberlo elegido como padre, para tu aprendizaje en esta encarnación, es el único y mejor papá. Así es para todos sólo va cambiando la energía a ordenar. Hasta que esto no lo hagas, de otros hermanos “actores”, (parejas, hijos, amigos), también sentirás que te abandonan; el abandonar es tuyo más allá que el resto lo tenga o no. Por eso elegiste a ese padre, que ni siquiera es tu padre, ya que somos todos hermanos. Agradecerle por el aprendizaje y honrarlo, es lo que hará que ambos estén mejor, aunque también siempre es un proceso individual. Esta ley además habla del orden de los hijos; las pérdidas de embarazo y los abortos son tan hijos como los que están encarnados. Sólo tuvieron otro plan de vida, igual de importante que el de los demás, es en base al aprendizaje de cada alma. Si una pareja primero abortó o perdió un embarazo, para esta ley es igual, ambos son tan hijos como todos, (la diferencia que hay entre aborto y pérdida de embarazo es que el que abortó, tiene responsabilidad ante el Cielo..., hasta que no haya arrepentimiento no se irá la angustia de haber abortado) y luego tiene dos hijos más encarnados criados como el primero y el segundo, eso les creará sobrepeso, problemas de conducta, drogas pesadas, accidentes, enfermedades, etc (el desorden en el alma en un momento llega al físico y se manifiesta de alguna de estas maneras). Cada hijo ocupa un lugar por orden de llegada a la Tierra y debe ser respetado para la sanación. En este ejemplo, el primero es el aborto o la pérdida, el siguiente es el segundo y el que sigue es el tercero. Basta con ponerlo en la luz, y comunicárselo a los hijos encarnados, con eso ya se sana esa parte que les causaba sufrimiento a todos los miembros.

La manera de ordenar y sanar es diciéndoles la verdad: “vos sos el segundo y vos el tercero; hay un hermano antes de ustedes que no encarnó”. Si abortaron o no, la pareja arregla sus cuentas con el Cielo, con nadie más tiene que hacerlo. Al ordenar a los hijos y ubicarlos en el lugar que les corresponde, todos estarán bien y no habrá sufrimiento por esta ley.

Ley de Pertenencia

Todos en la familia tienen derecho a pertenecer; nadie puede ser excluido. Si el sistema excluye a alguien, otro miembro del sistema lo va a tener que representar. Ejemplo: un tío con problemas psiquiátricos, la pérdida de embarazo, un aborto, un familiar asesino, todos son parte de la familia y tienen derecho a pertenecer más allá de sus acciones individuales, las que tendrán que ordenar con el Cielo. Excluirlos es no nombrarlos, apartarlos, generalmente se hace por dolor, tristeza, vergüenza o ignorancia de esta ley. Al excluirlo, otro miembro del sistema lo representará, en el caso del tío con problemas mentales, algún miembro del sistema manifestará esos síntomas psiquiátricos. Un familiar asesino que mató y nadie habla de él por vergüenza, como nadie puede ser excluido alguien comenzará a manifestar y desarrollar la energía asesina dentro del sistema familiar o sea que representará al familiar que mató. El desorden sucede primero en el alma, si no es ordenado pasa al mental, después al emocional, luego al físico, manifestándose en la materia el desorden en el alma, representando a ese familiar excluido.

El orden y la sanación se producen honrándolos a todos, no excluyendo a nadie de la familia. Al honrarlo e incluirlo, quien estaba enfermo psiquiátricamente representando al familiar enfermo, comienza a sanarse. Al ordenarse en el alma, baja al mental, emocional y luego al físico. Así cada uno se para en sus pies, y vive el proceso en base a sus acciones, ya nadie tiene que representar a nadie. Si una pareja tiene dos hijos encarnados y una pérdida de embarazo o aborto, y se les pregunta cuántos hijos tienen y contestan dos, hay uno excluido; que está vivo, escuchando todo, sólo que no está en un cuerpo físico. En las aperturas de campos en los encuentros de Sanación espiritual en presencia del Cielo, ese hijo que no encarnó, se lo ve enojado, triste…, no es porque fue abortado o pérdida de embarazo, ya que ese era su plan de vida y aprendizaje en base a lo que hizo en vidas pasadas; está enojado y triste porque los padres no le dan un lugar en su corazón, no lo nombran, lo excluyen. Esa energía de tristeza está en toda la familia, generando enfermedades, depresiones, suicidios, de alguna manera la energía se expresa en la tercera dimensión, en la materia. Como nadie puede ser excluido, alguien comenzará a representarlo, generalmente un hermano, que se siente atraído por el hermano que no llegó a encarnar; al no abrazarlo los padres, lo hace algún hermano por ellos. Que alguien que está encarnado, que no sean los padres, abrace a nivel alma a alguien que está desencarnado..., provoca enfermedades, accidentes, drogas pesadas, suicidio. Lo único que logra la sanación, es el movimiento de los padres hacia esos hijos, incluirlos, darles el lugar en su corazón como hijos que son, abrazarlos. Cuando esto sucede cambia la energía hacia la luz para toda la familia, esa alma asciende al reino de Cristo bajando bendiciones para todos.

Pedirle perdón a un niño abortado, no tiene sentido, ese era su plan de vida (abandonó, abortó, o mató a hijos en vidas pasadas y no se arrepintió, para su aprendizaje en esta encarnación, son los únicos y mejores padres, así es para todos siempre). Igual no iba a encarnar, lo único que quiere ese niño es que sus padres le den un lugar en el corazón, que lo abracen. Cuando eso sucede cambia su energía impactando positivamente en el resto de los miembros, está feliz y listo para ascender. Ya nadie tiene que representarlo, cada uno vive su proceso personal. El cambio es total para todos, de ser una energía de sufrimiento, pasa a ser luz y amor para el sistema.

Ley de Balance

Esta ley en el sistema familiar, consta de 2 partes:

Una indica que si algún miembro de la familia cometió un crimen, debe tomar responsabilidad por lo que hizo y sufrir las consecuencias de sus acciones, caso contrario, miembros del sistema familiar van a tener que balancear esas acciones. Por ejemplo: si alguien estafó y no tomó responsabilidad, a alguien lo terminarán estafando. Si alguien asesinó y nunca tomó responsabilidad por lo que hizo, otros miembros de la familia tendrán que balancear esa energía. La energía asesina se manifiesta en matar, que te maten, suicidio o accidente mortal. Todo esto dentro de la obra de teatro de la ilusión de la Tierra, porque en verdad, nadie mata a nadie, somos Seres de luz eternos. Y si matás tenés un infierno adentro, es multidimensional, ambas cosas son verdad. Un asesino que se arrepiente de verdad ante Dios, es perdonado; si no mató a nadie… y a los que mató, atrajeron al asesino, porque a su vez estaban balanceando vidas pasadas. Tal vez en esta vida te han estafado varias veces y nunca estafaste en ella a nadie, por un lado estás balanceando lo que ese miembro de la familia hizo y no tomó responsabilidad de su accionar; por otro lado,

estafaste en vidas pasadas y no te arrepentiste, por eso ingresas a ese sistema, a esa familia. La familia terrestre dice mucho de lo que hicimos en nuestras vidas pasadas, es por eso que elegimos entrar en ella. Otro aspecto de la Ley del Balance, es el dar y recibir. En las parejas todo lo que ocurre son responsables 50% y 50%, de lo bueno y de lo doloroso, de todo (abortos, maltratos, crecimiento, abundancia, etc). Las parejas son hermanos aprendiendo desde la intimidad, el tiempo que dure el aprendizaje. En un aquí y ahora terminará ese rol, nos crearon individuos y el viaje del alma es solos, aunque dure toda la encarnación, en la eternidad de nuestra alma es sólo un momento. A los ojos del Cielo somos iguales hombres y mujeres; nadie es más ni menos que el otro. Si se toma responsabilidad cincuenta y cincuenta, ambos relajan por esta ley. Si en lugar de eso, alguno de los dos siente que el otro lleva más o menos responsabilidad, al estar fuera de la ley, les genera desorden/sufrimiento. Las leyes son absolutas; han sido creadas para el mayor bien de todos, para que todos estemos bien. Podemos elegir respetarlas y estar en armonía, o no hacerlo y seguir sufriendo. Otro ejemplo; una mujer golpeada atrae al golpeador en un 50%, el golpeador por su lado va a arreglar sus cuentas con el Cielo en su momento, de eso no nos ocupamos nosotros, ya que somos chiquitos en relación al Cielo y hay muchos Seres superiores encargándose del juicio final y viendo todo las 24 hs. Esa mujer golpeada atrae a perpetradores y como vimos en la ley de Balance Cósmico, es así porque lastimó en vidas pasadas y no se

arrepintió (recuerden, en todos los casos nos suavizan el aprendizaje para balancear lo que hicimos antes). Mientras están en pareja, son 50% responsables cada miembro; si la persona abusada está en una postura de víctima, seguirá atrayendo esa energía; aunque se separe de esa persona y cambie de lugar de residencia, atraerá seres con energía golpeadora o abusadora, ya que somos atraídos por la energía; nada es personal. La sanación sucederá cuando tome responsabilidad por todos los que lastimó antes (ahora sabe lo doloroso que es por recibirlo) y si el arrepentimiento es real, el Cielo la perdonará, dejando de estar presente la energía de violencia en su vida, caso contrario seguirá atrayendo a seres agresivos. Si tu pareja te engaña, a veces ni siquiera lo hace, basta con que sientas celos, como vimos en la ley de Balance Cósmico es porque has engañado a alguien en esta vida o en vidas pasadas y no hubo arrepentimiento, por eso atraemos esa energía en nuestro campo. Mientras sigamos en una pareja, es cincuenta y cincuenta, cuando se termina una relación, responsables cincuenta y cincuenta ambos de todo lo que ocurrió. El Universo es una escuela de aprendizaje eterno, acá en la Tierra es de manera dolorosa por estar en un planeta material caído. Entre padres e hijos: no es 50 y 50, ellos nos dieron la entrada a la Tierra, nosotros los elegimos en base a lo que tenemos que aprender; como son, son los únicos y mejores padres para nuestro aprendizaje en esta encarnación. Todo hijo para estar en equilibrio tiene que honrar a sus padres, menos de eso, estará desequilibrado. Honrar es reverenciar, no queja, no crítica, no tratarlos de pobrecitos porque no lo son, ni querer ayudarlos de manera directa en su aprendizaje de alma, porque igual, no podemos, sólo causaría mayor dolor para todos.

La vida está hacia adelante; la energía de impulso hacia ella, viene de nuestros padres, de nuestros ancestros y nos empuja hacia adelante; la pareja, los hijos, el trabajo, la tarea planetaria, la ascensión, todo está hacia adelante, y así es para todos. Para ir hacia la vida ordenados, para salir de la familia recibiendo la fuerza luminosa de la misma, sí o sí, necesitamos realizar 3 pasos siempre respetando el orden de los mismos. Una vez realizados, ya no necesitamos mirar hacia atrás. Si por el contrario, no lo hago, aunque mis ancestros desencarnen o me mude a otro país, mi alma va a estar mirando para atrás, hacia ellos; de esta manera le estaré dando la espalda a la vida y si tengo hijos ellos también estarán haciendo lo mismo, buscándonos, dándole la espalda a la vida también; eso en la Tierra se manifiesta en accidentes, drogas pesadas, trastornos de conducta, enfermedades, suicidios, darle la espalda a la vida crea todo tipo de traumas y sufrimientos. Los 3 pasos son: 1) Honrar a mis padres y en ellos a todos los ancestros de la familia, reverenciarlos (no queja, no critica, no tratarlos de pobrecitos, ni querer ayudarlos en el alma) Aunque tenga que higienizarlos porque son muy mayores mis padres o darles dinero para que subsistan, si lo hago honrándolos todo estará en armonía, el proceso de honrarlos es interno. 2) Tomarlos como son, el movimiento es del hijo hacia los padres, no dependemos de ellos para estar en equilibrio. Sólo podrás tomarlos si antes los honraste. La manera de abrazar indica también el orden, los chiquitos abrazan de abajo (brazos debajo de los brazos de los grandes) a tus padres, abuelos, tíos, siempre es de abajo.

Los grandes abrazan de arriba (nuestros brazos arriba de los brazos de ellos) a nuestros hijos, sobrinos, nietos. Pareja, hermanos, amigos, un brazo y un brazo, de un lado o del otro. Cualquier manera de abrazar diferente indica desorden en la relación, y eso lo sentimos en el alma. Por ejemplo, si en una pareja el hombre abraza de arriba a la mujer, está cumpliendo el rol de padre o protector, y no lo es, ni su padre ni su protector. Es su pareja (hermanos aprendiendo desde la intimidad, el tiempo que dure la relación y su aprendizaje, 50 y 50, iguales ante los ojos de Dios). Si los hijos abrazan de arriba a sus padres, ellos toman el lugar de grandes, generando desorden para todos. Tanto la relación entre las parejas, como con el resto de los hermanos humanos, el encuentro y aprendizaje es de 50% cada uno. Cuando se toma responsabilidad de todo lo ocurrido, en partes iguales, hay armonía en el vínculo. Estamos yendo al reino de la verdad, al reino de Cristo, y la verdad es que el padre y la madre son los grandes y los hijos son los chiquitos. Cuando vivimos en verdad fluimos en paz, el Cielo nos está mostrando cómo se ordena en base a la verdad; es vivencial. Si realmente hiciste los 2 pasos anteriores, podrás hacer el siguiente. 3) Girar hacia adelante, habiendo dado los pasos anteriores, tendremos una sensación de armonía en la espalda, sintiendo la fuerza luminosa de nuestros ancestros que nos impulsa hacia adelante.

La única forma de ir hacia adelante en armonía, es honrar a nuestros padres y en ellos a todos los ancestros; tomarlos como son, para nuestro aprendizaje los únicos y mejores; y luego girar hacia adelante con un calorcito atrás que nos impulsa a la vida.

Cuando estoy mirando hacia adelante, pareja si tengo, hijos, trabajo, tarea planetaria, guías personales, Yo Superior, todo está hacia adelante. Entonces si mi abuelo mató, aunque esté rindiendo cuentas con Miguel Arcángel, esa energía no me bajará a mí ni a mi descendencia, si estoy ordenado mirando hacia adelante. Si lo critico, me llegará la energía bajando no sólo a mí, sino también a mis hijos. Al ordenarme al menos mi abuelo verá que sus descendientes están bien, sacándole un peso a su alma. En el sistema familiar sólo somos chiquitos cuando miramos hacia atrás, a nuestros padres y ancestros; una vez que giramos hacia adelante, somos iguales con nuestra pareja y el resto de los hermanos humanos y somos los grandes en relación a nuestros hijos y nietos. Nunca debemos pasar los dramas ni a la pareja ni a los hijos, ni a ningún otro ser humano, la sanación de la angustia personal en el sistema familiar la recibimos sólo de nuestra madre si somos mujer, y de nuestro padre si somos hombre. Claro que primero debemos honrarlos para después ir a abrazarlos. A partir de la adolescencia, el hombre a nivel alma, no tiene nada más que hacer con su madre si quiere estar en equilibrio, nene de mamá no lo fortalece, el hombre recibe la fuerza del papá. Nena de papá tampoco es ordenado, la mujer toma fuerza de la madre. Si sentís llorar, es el único lugar donde te calmarás, podes hacerlo con un almohadón invocándolos (el ser se canalizará ahí), luego lo tomás y llorás todo lo que quieras hasta que te calmes, luego agradecés y volvés a girar hacia adelante. A nivel cósmico, invocando cotidianamente a nuestros guías personales, a nuestro Yo Superior, y al Cielo alto, recibimos todo

lo que necesitamos para estar en armonía, si les hablamos en rendición total. Así como la manera de abrazar marca un orden, las palabras también. Papá sólo a tu papá, mamá a tu mamá, al hijo se le dice hijo, amor o mi amor es energía de pareja (si no tenés pareja a nadie), te amo a todos. No va, ni mi vida, ni mi corazón, ni mi rey, ni mi príncipe, ni mi Cielo, para estar en armonía, va sólo la verdad. También hay un orden cuando nos sentamos a comer, caminando o en la cama: Va el hombre, a su izquierda la mujer, a su izquierda el primer hijo y así sucesivamente, cuando la mujer se pone del lado derecho del hombre se pone en rol de madre (se pone mandona, autoritaria, y el hombre débil, chiquito), esto es porque el hombre no tiene resuelta la relación con su madre entonces toma a su pareja como madre..., generando sufrimiento para todos. En este caso el hombre tiene que honrar a su madre, tomarla y girar, y relacionarse en verdad de roles con su pareja, así hay armonía para todos.

Entrega del dolor que el/la hijo/a tomó de sus padres.

“Querida hija, por favor, devolveme todo mi dolor y todo mi sufrimiento, que eso es mío, y vos sos muy chiquita para tomarlo, devolveme todo que yo soy el grande“ (padre a hija que había tomado su angustia).

Ascensiรณn planetaria Es el proceso que estรก ocurriendo en todo el Universo al cual todos pertenecemos. Como seres humanos encarnados nos toca vivenciarlo desde el planeta Tierra.

Capítulo VII Ascensión Planetaria Estamos en cuenta regresiva a una ascensión a escala planetaria, la cual se dará totalmente dentro de pocos años terrestres. Seremos evacuados ya que ningún vehículo físico puede soportar la limpieza de un planeta, que esta vez, se purificará por el fuego. De los seres humanos encarnados, un 70% se irá de manera traumática (a esta altura de la lectura, ya saben que nadie muere) por elección personal, al mantenerse en el orgullo, la soberbia, la maldad y el apego a la materia. Nada se puede hacer desde lo humano con eso, ni Seres superiores pudieron cambiarlo; la guerra mundial y el calentamiento global será su desencadenante. El 30% restante elegimos ir al reino de la luz, proceso guiado por muchos Seres superiores a nosotros, con Cristo al mando del proceso de ascensión planetaria. Es en paz, amor, hermandad y fraternidad. Los próximos estadios evolutivos son hacia: La cuarta dimensión (es el primer peldaño del Reino de Cristo, lo que entendemos por el paraíso, todavía hay ilusión ya que nos apegamos a la luz; el vehículo físico será 16 veces más sutil del que tenemos ahora, sin aparato reproductor ni digestivo, el prana será nuestro alimento).

Y a quinta dimensión (es la vuelta a casa…, nos integramos a nuestro Yo Superior, ya no habrá ninguna parte aprendiendo por el sufrimiento al haber terminado dicho aprendizaje; de quinta dimensión para arriba, los vehículos son sólo luz). 55

De cuarta dimensión hacia arriba la base es la paz y el amor, el aprendizaje es eterno para todos los Seres en el Universo. Estamos finalizando esta etapa de 13.500 años desde la caída en la Atlántida. Se completará con la segunda venida de Cristo, esta vez será dentro del corazón de cada humano, todos los que ascendemos a Su Reino despertaremos a nuestro Cristo interno. Ascendemos ordenados a las leyes del sistema cósmico y del sistema familiar terrestre, en rendición total. Agradeciendo el gran amor y las bendiciones que desde el Cielo descienden. La Fundación L.A.N.I.N. (Lograr en Armonía Nuestra Iluminación Nuevamente) está coordinando el proceso, siendo el brazo de acción del Cielo en la Tierra. Hay un Plan de Cristo en marcha, la evacuación es por Junín de los Andes donde habrá un Centro de meditación, sanación espiritual y ascensión planetaria; se abrirán 4 vórtices centrales para iluminar el planeta, la humanidad que va a Su Reino, será atraída hacia ahí. Distintas ciudades han sido activadas como puntos de rebote de la energía mayor, ya que será vital llegar ordenados para que la alta energía se asimile en armonía y gracia.

Capítulo VIII La Fundación L.A.N.I.N.

(Lograr en Armonía Nuestra Iluminación Nuevamente) Retornamos a la quinta dimensión integrándonos con nuestro Yo Superior, como estábamos antes de caer por la soberbia y el orgullo. Ahora con mayor conciencia por el aprendizaje realizado. La fundé por pedido de Cristo, la tarea es coordinar la ascensión al Reino de la luz, es Su brazo de acción en la Tierra. En unos años el planeta será evacuado para el bien mayor de todos; sin prisa y sin pausa, en paz, amor y conciencia. No existe la muerte; somos Seres de luz eternos, ahora en un vehículo físico porque el aprendizaje lo estamos haciendo en la materia; en un aquí y ahora todos dejamos el cuerpo, la diferencia de otras veces es que es a escala planetaria. En poco tiempo será muy doloroso estar acá; la Tierra será limpiada y mejorada, haciendo imposible la permanencia durante tal proceso. Para el planeta es hermoso, también asciende, es un ser vivo y eterno igual que todos, sólo que no es humano; será mejorado, limpiado, bendecido. Por elección personal, un 70% aprox. de los que estamos encarnados se irá de manera traumática, (tercera guerra mundial, calentamiento global por el Sol, hambruna), ni la maldad ni los que están muy aferrados a la materia eligieron ascender al Reino de la luz; esperarán en un espacio intermedio hasta que la Tierra sea limpiada, para luego regresar a un lugar más luminoso que el actual, siguiendo su aprendizaje encarnando y desencarnando unos 2000 años aproximadamente, siendo el sufrimiento la manera de evolucionar. 57

Alrededor de un 30% elegimos ascender al Reino de Cristo, somos guiados por el Cielo hacia la paz, el amor, la hermandad y fraternidad. Esta es la tarea de la Fundación L.A.N.I.N., coordinar en Tierra el Plan del Cielo, cuyo objetivo final es la creación de un Centro de meditación, sanación espiritual y ascensión planetaria en Junín de los Andes, Argentina, el cual será un faro para todo el mundo y conexión hacia cuarta y quinta dimensión, en otros planetas. La herramienta de Sanación espiritual en presencia del Cielo es sólo momentánea, es para que la masa crítica se ordene desde lo vivencial a las leyes que rigen en el Universo, al cual todos pertenecemos y hacia donde sigue nuestro aprendizaje, que es eterno. Es para todos, excede cualquier separación ilusoria de la tercera dimensión, color de piel, países, religiones, partidos, es para todos los seres humanos que habitamos por tantos años este bendito planeta y estamos concluyendo este aprendizaje. Habrá mucho trabajo que hacer, la bendición es que somos guiados por nuestros Hermanos mayores, y Cristo está al mando de todo; sólo rendición nos toca, es algo muy grande que nos excede por mucho a todos. Los que sientan el llamado interno y quieran ayudarnos, muchas gracias..., en nombre de todos. A fines del 2004 fue mi inicio activo dentro del Plan, el Cielo me pidió que pinte cuadros, jamás había tomado un pincel…, igual sólo necesitaban un canal. Desde el año 2005 a 2009, parte de mi tarea fue pintar una serie de cuadros. En 2008, con toda la información que estaba recibiendo, en un momento me superó mentalmente…, llegué a casa y me acosté en posición fetal. Lloré, pedí que por favor me confirmen que todo lo que estaba recibiendo era así, a esta altura ya veía a nuestros Hermanos mayores. Imploré por unos 30 minutos; abrí mis ojos y dos ojos me miraban, a los segundos pude ver todo Su rostro, Cristo estaba frente a mí confirmándome todo…, le agradecí y le dije “no entiendo nada, pero te sigo”.

Su aparición quedó plasmada en una de las obras que estaba pintando, como Su firma de toda la colección, ahora es el cuadro “Jesús”; está en una dimensión superior, sólo se ve cuando la luz lo ilumina. En 2010 me pidieron crear una fundación y que pase la titularidad de los cuadros a la misma, que del terreno elegido y de la subasta se encargarán Ellos. Así lo hice, las obras son el medio para completar el Plan de ascensión, las cuales serán subastadas cuando la energía esté lista y el Cielo lo disponga. La apertura del Centro de meditación, sanación espiritual y ascensión planetaria en Junín de los Andes, Neuquén, Argentina, es en primera instancia para el despertar de la masa crítica de 144.000 seres humanos, al proceso real de ascensión. Lo que hará que todos los que asciendan al reino de Cristo también lo hagan. Será el Faro del Mundo, comandado por Cristo y trabajarán Seres de dimensiones superiores a nuestra raza, nuestros Hermanos mayores…, en sintonía con los humanos que estemos participando de la tarea en la Tierra. El Cielo eligió un lugar físico, donde se abrirán 4 vórtices centrales para iluminar el planeta, y potenciar la bajada de la luz del Cielo a la Tierra. La humanidad será atraída hacia allá, alistándonos para la evacuación en paz. En toda Argentina y Uruguay la tarea de cada uno, será expandir conciencia y amor hacia nuestros hermanos, que irán llegando desde el Hemisferio Norte atraídos por la luz y el amor de Dios. Son tiempos sagrados, estamos ascendiendo y lo hacemos ordenados.

Subasta de cuadros Son el medio central que el Cielo eligió para completar el Plan de ascensión en Tierra, al estar en un planeta material, es canalizado en materia. Tanto el título, la imagen, y el texto de cada obra, son mensajes directos del Cielo para la raza humana y los tiempos que están llegando. Se anticipan por amor, ya que al ser conscientes no hay miedo ni sufrimiento. La inconsciencia y soberbia es lo que nos produjo tanto dolor durante tanto tiempo. 60

jesús “En septiembre de 2008 se plasmó la imagen de Jesús en un cuadro que estaba pintando (la misma está a la izquierda arriba de la imagen) apareció frente a mis ojos al pedirle una señal de confirmación de que todo lo que iba recibiendo, pertenecía a un plan divino. Además de Jesús se pueden ver otros Seres de dimensiones superiores en la obra; por ahora a nuestra visión física, le es posible visualizar otros planos de esta manera. Para mí ha sido la confirmación ultima de mi tarea acá en la Tierra, los que quieran sumarse, son bienvenidos; es necesaria la participación de todos.”

Base: u$s 3.000.000

sirius “El planeta de cuarta dimensión que está esperándonos después de la evacuación de la Tierra.”

Base: u$s 130.000

de perfil “Así son algunos de estos Seres extraterrestres (todos somos extraterrestres…, fuera de la Tierra, sólo cuando estamos encarnados somos terrestres), de infinitas formas ya que vienen de distintos mundos; lamentablemente el ser humano los ridiculizó por medio de películas de cine, generando una imagen de ellos como seres destructivos, bélicos e invasivos. Nada más lejano a la realidad, son Seres amorosos que están acá para ayudarnos, si es que damos la aprobación interna a ello.”

Base: u$s 650.000 63

ascensión “Hacia el Reino de la luz, es el proceso que la mitad de los seres humanos, (entre encarnados y desencarnados), por elección individual, estamos viviendo. Saber que son Seres superiores a nuestra raza, los que hacen posible este hecho y rendirse, hará más agradable este paso a cuarta dimensión. La experiencia del paraíso se materializará cada vez más.”

Base: u$s 500.000

la gran madre “Ser de dimensión 56, en su plano real es una luz enorme, para que podamos entenderla en este plano material, se manifiesta también de esta manera. Sólo tuve que descubrirla de la tela, fue apareciendo por partes; primero el ojo izquierdo, la nariz y la boca, más tarde se materializó el resto.”

Base: u$s 180.000

el faro del mundo “Nuestros Hermanos mayores ya están en Junín de los Andes, esperándonos. Este es el lugar físico elegido por el Cielo para la materialización del Centro de Meditación, Sanación espiritual y Ascensión planetaria el cual será el faro para el resto del planeta Tierra. El libre Albedrío es limitado, la Tierra será limpiada y mejorada como un proceso natural y evolutivo del Universo. La salida es para todos, ningún vehículo físico puede soportar la limpieza de un planeta, la cual se realizará esta vez por el fuego.”

Base: u$s 144.000

el vórtice “Seres de dimensiones superiores están descendiendo en vórtices con forma de tornados y en naves de distintas formas geométricas. Por ahora el ojo humano no puede distinguirlos, sólo las cámaras digitales.”

Base: u$s 70.000

redención “El amor no es una cualidad que tengamos los humanos en tercera dimensión, sólo hablamos de él. Es por ello que Seres extraterrestres de distintas dimensiones cósmicas, están trayéndolo al planeta.”

Base: u$s 60.000

el amor de cristo “El 33 es la energía de Cristo en números, sinónimo de Amor, Cristo y Amor es lo mismo. Es su segunda venida, esta vez dentro del corazón de cada humano que elegimos ir a su Reino, somos bendecidos al recibirlo en nuestro corazón.”

Base: u$s 330.000

compasión “Caímos como raza (por segunda vez) hace 13.500 años, por mal uso del poder; nos creímos los todopoderosos. Sólo hay uno y es nuestro padre/madre Dios. Vuelve en nuestra ayuda por compasión, aunque nunca se fue ya que estamos dentro. El mensaje está bien claro en la imagen, esta vez va en serio... hacia donde vamos no hay lugar para la maldad. En 1992 tuvimos una consulta interna a nivel alma a la cual dijimos “si”, nos queda confirmarlo en Tierra. Es uno a uno y nadie puede hacerlo por el otro hermano; ascendemos ordenados tanto en el sistema familiar como en el sistema cósmico, a los cuales todos pertenecemos.”

Base: u$s 880.000

transmutación “La asistencia de Dios en nuestro ser, primero el caos luego la transmutación”.

Base: u$s 160.000 71

sanación cósmica “Energía de dimensiones superiores a la nuestra, operando en nuestra sanación, una gran bendición.”

Base: u$s 150.000

llegando “La llegada a la Tierra de Seres de dimensiones superiores (acá los conocemos como Ángeles, Arcángeles, la Virgen, Shiva, Buda, etc...) Algunos pocos por ahora, los recibimos con esperanza y asombro; la mente del ser humano se eleva y capta algo de lo que está viniendo. Un ser humano con una estrella en la mano da la voz de aviso; algo hermoso está llegando.”

Base: u$s 220.000

el alquimista “La alquimia es la transformación mágica, esta obra nos muestra como con magia, unas pinceladas sin ninguna guía ni forma... se pueden convertir en un encuentro profundo de amor entre un hombre y una mujer. Este cuadro me ha impactado mucho, lo descubrí cuando estaba terminando de colorear la galera del mago. Cuando lo ví, me rendí a la obra que nos regalaron los Seres superiores, por eso la firmé así”.

Base: u$s 120.000 74

te suplico “El niño, el adolescente, el hombre, Jesús, el pedido a la mujer, la madre, la santa”.

Base: u$s 90.000

bendición “El reconocimiento de la parte femenina del Todopoderoso, es posible con la meditación, con la visión interior”.

Base: u$S 180.000

yo superior “Su mirada refleja la conciencia del Ser en quinta dimensión. Todos los seres humanos acá en la Tierra, en tercera dimensión, somos una parte de nuestro Yo Superior que está en quinta dimensión. Venimos a aprender y a nivelar los desórdenes de las vidas pasadas desde la última caída que tuvimos como raza, en la Atlántida, hace 13.500 años aprox. Para muchos gracias a Dios, es la última encarnación acá; es la vuelta a casa, volvemos a reencontrarnos con nuestro Yo Superior. Ya no tendremos ninguna parte caída aprendiendo por el sufrimiento. El proceso es guiado por nuestros Hermanos mayores con Cristo al mando, ascendemos comunicándonos de manera directa, en rendición total. Somos bendecidos, el movimiento es individual, uno a uno y nadie puede hacerlo por otro hermano”.

Base: u$s 90.000

elección “Sudamérica, tierra elegida por Seres de dimensiones superiores, como lugar de sanación espiritual y ascensión; Argentina como bien predijo Solari Parravicini, faro del mundo. Ya está funcionando como un gran imán cósmico, atrayendo a las almas que eligieron la paz, la bondad, la conciencia, la ascensión”.

Base: u$s 90.000 78

hacia adentro “Paz, armonía, serenidad, amor, hermandad, es lo que está viniendo del próximo estadío. Estos Seres cósmicos nos dan una muestra de ello” .

Base: u$s 30.000

unión “Es momento de compartir la experiencia, con la sabiduría de lo nuevo, energía que traen los mas bajitos; de esta forma, todos nos beneficiaremos, es hora de permitir que los niños nos enseñen... a eso vinieron (esta obra la realizamos mi hijo Lucas y yo)”.

Base: u$s 80.000

el despertar “La esencia del ser humano, los inicios de su evolución en tercera dimensión; abre sus ojos y ve por primera vez, sólo es cuestión de tiempo. El proceso ya comenzó en lo más profundo de los humanos, es de adentro hacia afuera”.

Base: u$s 350.000

Algunas experiencias En 2015 comencé el viaje de retorno al hogar. Las señales fueron llegando con mucha certeza, venía de un año de muchos cambios. Un día en facebook encontré la promoción de un retiro de “Sanación espiritual en presencia del Cielo”, coordinado por Mariano Pignataro. Me resonó instantáneamente y le envié una solicitud de amistad; la aceptó y a partir de ahí mi vida cambió. Fui al retiro sin saber de qué se trataba, sólo sentía que debía estar ahí. Convivimos cuarenta y tantas personas desconocidas durante una semana, pero muy afines en el alma. Con algunos de ellos el contacto de las miradas fue mágico, apenas nos encontramos nos reconocimos en el alma. El regreso al hogar y el descanso del alma comenzó cuando comenzamos a meditar el mantra Om Mani Padme Hum y a abrir campos. 51 años con una angustia existencial, que después de muchos años de terapia y otras herramientas la reconocía y controlaba. Sin embargo esa angustia volvía; creía que honraba a mis padres, pero en realidad mi relación con ellos era sólo amorosa. Una vez abierto el campo, vivencié que no los honraba, pues trataba a mi madre de pobrecita y enjuiciaba a mi padre. Vivenciar en el campo ese sentir y hacer el movimiento al orden: honrarlos, reverenciarlos, no quejarme de ellos, no criticarlos, no tratarlos de pobrecitos, ni querer ayudarlos directamente…, cambió y sanó ese vínculo. Este movimiento, que no es fácil, si lo fue porque estuvo sostenido por Seres de mayor conciencia y comenzó a bajar con los días a la tercera dimensión y recibí, durante el retiro, un mensaje de mis padres sin reclamo, con amor. Así se sucedieron a lo largo del retiro muchas sanaciones, movimientos al orden, ya que más allá del campo personal, participé repre83

sentando a otros humanos en otros campos y a Seres superiores. Cada representación tenía algo de mí que tenía que sanar. Esta alineación personal trajo orden, sanación en mi familia. Una de las bendiciones fue conectar al invocar a mis guías personales y a mi Yo Superior, dejarme guiar en rendición total. Es decir, no actuar desde el ego, sino pedirles guía y dejarme guiar, invocando a diario, varias veces. Resalto, en rendición total, porque yo creía que estaba rendida a lo que mis guías me decían; sin embargo, cuando consulté sobre qué hacer cuando se terminara mi contrato de alquiler (vivía en la ciudad de Neuquén, Argentina), sentí consultar por dos opciones: quedarme en Neuquén o irme a la cordillera. Al momento de abrir el campo me salió de los labios, sin pensar, ¿o irme a Buenos Aires? y hacia allá me guiaron. Al principio me di cuenta que no estaba totalmente rendida. Que no estaba invocando a diario y comencé a hacerlo, me rendí, sabiendo que nuestros guías y nuestro Yo Superior siempre quieren lo mejor para nosotros. En dos meses levanté todo en Neuquén, lugar donde vivía muy bien en todos los aspectos. Estando en Buenos Aires, comprendí desde la mente por qué me habían enviado para acá: para entrar en tarea planetaria bajo las órdenes de Cristo, hacer servicio en la Fundación L.A.N.I.N. y compartir a diario con los hermanos que reencontré en aquel primer retiro. Mi trabajo, que hasta ese entonces era de terapeuta corporal dando masajes y consultas florales, se transformó en utilizar esa herramienta para entrar en contacto con otros seres humanos y compartirles las leyes que nos rigen en los dos sistemas a los que todos pertenecemos. No hay más tiempo para perder en la ilusión de la Tierra, estamos ascendiendo. Participé de los dos siguientes retiros que se hicieron y asisto a todos los encuentros de Sanación espiritual en presencia del Cielo que puedo, ya que en cada encuentro algo nuevo sucede. No es necesario ir a todos los encuentros, ya que cuando aprendemos las leyes y nos alineamos a ellas, sucede el orden. No obstante, es una bendición asistir, participar, recibir el amor y sentir cómo la fraternidad se despierta. 84

Podría seguir en los detalles, pero mi experiencia la resumo en que hoy mi familia está en armonía. Igual estamos saliendo de la familia terrestre, mas para salir de ella hay que hacerlo en armonía. ¡Gratitud al Cielo por tanto amor! ¡Vivo en una sucesión de milagros! María L. (Buenos Aires - Argentina) Toda mi vida he buscado cómo poder ser mejor, en esta búsqueda me crucé con muchas herramientas para mi evolución. Siempre creía que era una niña pobrecita: ¡qué dolor que no me querían mis padres y bla bla bla...! Fui a terapia muchos años y pude comprender algunas cosas desde la razón, pero no las sentía totalmente en el alma. Hace años conocí Sanación espiritual en presencia del Cielo. Fui sintiendo a medida que participaba de sanaciones de otros y mías el orden, porque aprendí a honrar a mis padres, y sentir que fueron y son los mejores y únicos para mi aprendizaje en esta encarnación. También sentí el amor del Cielo y realmente esto es vivencial. Porque podría llenar de palabras de todo lo plasmado en cada sanación, pero realmente es algo vivencial: ahí está el alma y el Cielo; la razón queda callada para dar lugar al ser. Mejoré, me ordené, hoy llamo las cosas por su nombre. No me hago cargo de los problemas de mis mayores y no se los cargo a mis hijos. Nos vamos liberando de cargar con cosas que no nos corresponden. Amar, sentir, respetar es parte de la clave. Aprendí a amar a todos mis hijos (encarnados y no); aprendí que todo es por algo y que la vida es para adelante, no para atrás. Aprendí a ordenarme, soy consciente de lo que hago y sus consecuencias. Aprendí que no estamos solos, no sólo lo escribo, sino que lo siento en mi corazón. Sanación espiritual en presencia del Cielo me ayudó más rápido que mis años de terapia. Viví la sanación en mi alma y la sentí en lo más profundo del ser.

Hoy estoy parada sobre mis pies, mirando la vida con felicidad y amor. Sin olvidar que siempre están mis guías personales y el Cielo dándome la mano si se los permito, como a todos. Claudia D. (Buenos Aires - Argentina) La primera vez que asistí a un encuentro de Sanación espiritual en presencia del Cielo, lo hice para conocer la herramienta. Luego de escuchar las leyes cósmicas y familiares, me di cuenta que tenía que incluir a dos hijos que no habían nacido y que ahora sabía que estaban vivos y eran parte de mi vida. Cuando pasé adelante y abrí campo, mi intención era cortar el vínculo con mi ex marido, del cual me había separado hacía muy poco y de un modo muy conflictivo. Puse en el campo un representante para mí y otro para él y el coordinador se encargó de colocar a quienes representarían a mis dos hijos. Enseguida, una de las representantes dijo que había más hermanos, que no eran sólo ellos. Me sorprendió, ya que estaba segura de que eran sólo dos, pero había una posibilidad de que fueran mellizos, porque sentí siempre que me atraían. Se agregó otra persona al campo y para nuestra sorpresa, seguían diciendo que había más. Ahí fue cuando el coordinador me preguntó qué pasaba..., muy confundida le conté que me había realizado varios tratamientos de fecundación y de inseminación pero que nunca había tenido resultados. Entonces siguieron agregando hijos hasta llegar a los seis, de los cuales un par eran mellizos. Los vi, los reconocí, les di un lugar en mi corazón; desde ese momento saber que era mamá de seis hijos me cambió la vida. Hoy no siento la nostalgia que siempre pesaba sobre mi corazón y la tristeza que sentía al ver a mellizos por la calle. De más está decir que seguí participando en diferentes encuentros y mejoró el vínculo con mi ex marido pudiendo tratar el divorcio como personas que se eligieron para aprender. Estoy muy agradecida de esta herramienta, ya que veo cómo a medida que se van ordenando las diferentes situaciones, ese orden se manifiesta en las personas involucradas. Aunque no estén presentes físi86

camente en el campo, lo hacen a nivel alma y el orden igual se plasma en cada uno. Gracias al Cielo, a mis guías, a mi Yo Superior y a cada uno de los que participan de cada encuentro, porque así vamos ordenándonos para que la ascensión se produzca en paz y conciencia. Graciela D. (Mar del Plata - Argentina) Durante el primer encuentro de Sanación espiritual en presencia del Cielo al que asistí, estaba viviendo una situación de desencuentro (que no me incluía, pero si me afectaba). Era entre mis hijos y uno de ellos con su padre, al que no le hablaba desde hacía meses por una fuerte discusión. Planteado el tema se abrió el campo, donde los representantes -sobre todo ese hijo y el papá-, estaban muy duros, enojados y parados en su soberbia. Con la presencia de Seres Superiores, aunque en ese momento el alma del padre no pudo rendirse, si lo logró el alma de mi hijo. Se produjo el orden debido, de acuerdo a las leyes y las almas lograron conectarse con mucha paz. Luego de sucedido esto, no hablé con ellos para contarles, ya que ninguno estaba pronto para recibir esta herramienta a nivel mental y sus almas aún no estaban abiertas para escucharlo. Sin embargo, ya había sucedido el movimiento asistidos por los Hermanos mayores que estaban en el campo. Una semana después mi hijo llega a mi casa y me comenta que había pasado por la casa de su padre, que estaba haciendo reformas y que le había dicho que él se encargaba de arreglar su dormitorio. Así fue que comenzó a ir casi a diario y su padre me llamó para contarme, muy feliz, lo que estaba sucediendo. En una semana más, este hijo que no se hablaba con otra de mis hijas, volvió a hablarse como si nunca nada hubiera sucedido. Lo que se ordenó en el campo, sin que se les comentara para que no hubiera ninguna incidencia psicológica, se plasmó en la tercera dimensión. Contribuyó mi rendición al 100% y la certeza de que lo que el 87

Cielo ordena, si no lo desordenamos nosotros por el mal uso del libre albedrío, hecho está. Viviana Sosa C. (Montevideo Uruguay) Mi hermano menor trabajaba en una empresa de telefonía y debido a su cargo, tenía que afrontar a diario muchas quejas de los usuarios. Empezó a manifestar estrés laboral: noches sin dormir, encierro, hasta que comenzó un tratamiento psiquiátrico donde le diagnosticaron varios trastornos, entre ellos ansiedad y pánico. En un encuentro de Sanación espiritual en presencia del Cielo me dieron la oportunidad de exponer esta situación y lo que el campo mostraba era que no se estaba incluyendo a un hermano, que había sido una pérdida de embarazo de mis padres. Por lo que mi hermano encarnado estaba queriendo abrazar a ese hermano desencarnado. Todo fue ordenándose hacia la luz y hoy estamos muy bien. A mi hermano desencarnado lo tengo en mi corazón tanto como a los otros tres encarnados. He participado de varios encuentros, dos formaciones y un retiro en Junín de Los Andes. Doy gracias al Cielo por iluminarnos y mostrarnos el camino hacia donde estamos transitando. El proceso es interno y es muy gratificante sentirlo. No hay palabras para expresarlo, es vivencial; estamos despertando. Pablo V. (Santa Rosa, La Pampa Argentina) Mi experiencia con Sanación espiritual en presencia del Cielo, comenzó hace un poco más de 5 años, puedo decir con la mayor honestidad, en que en uno de los peores momentos de mi vida. Una reciente separación, un hijo de un año y un mundo hacia adelante lleno de preguntas. A raíz de ese estado había perdido también mi trabajo y me encontraba solo en una ciudad que jamás había elegido como propia. 88

Momentos feos, en que muchos días y largas noches coquetee con pensamientos feos y turbios, que no llegué a cumplir, no era el suicidio en sí, pero si en esos momentos alguien hubiese intentando quitarme la vida, no lo hubiera evitado, pero agradezco a la cobardía y ahora entiendo al Cielo también, no haberlo llevado a cabo, aun tenia mucho para dar en esta vida. Recuerdo siempre lo que más me llamó la atención, en esa época nos sacábamos fotos luego de cada sanación, ver las caras al finalizar comparado con nuestro adusto rictus al llegar fue sorprendente, habíamos llorado, reído, enojado y arrodillado frente a Cristo la sanación de cada uno estaba en marcha y eso lo reflejaba nuestra mirada. De ahí en más mi sanación en cada tema se fue dando de forma guiada, milagrosa, física, mental y emocionalmente, encarando la vida con fortaleza y seguridad. Finalmente llegó el 1er retiro en Junín, que disparo mi Ser y mi camino, la fortaleza de mi fe y la confianza plena de los pasos, guiado y bendecido. Como organizador de encuentros de Sanación espiritual en presencia del Cielo, luego vi pasar decenas de asistentes con tantas diversas y a la vez similares problemáticas, ya que todas venían del mismo origen, leyes incumplidas, desorden, conflictos, un alma dormida. Todo me fue dando más certezas, Sanación espiritual en presencia del Cielo es la herramienta de la verdad, nos muestra la verdad del origen de las situaciones y con la verdad sanamos, en definitiva seguir una ley, es darle a esa ley la verdad de su mensaje. Cuando quieras, como quieras, donde quieras, gracias Señor. José María A. (Bariloche Río Negro Argentina) Es una herramienta maravillosa…, ni mis diez años de terapia lograron la redención, la paz y la evolución en mí como abrir campos en Sanación espiritual en presencia del Cielo. Mi profesor de yoga que lo conozco hace 13 años, me decía: tienes que hacer Sanación espiritual en presencia del Cielo. Era muy descon89

fiada y tenía un ojo abierto y el otro cerrado, pateaba siempre la pelota hacia adelante. Hasta que un día dije: sí, voy. Estaba pasando por un momento difícil en el trabajo, con allanamientos por tráfico de papeles en mi casa. Se trataba de una sociedad familiar y los hermanos se pelearon, quedando en medio de la tormenta. Cuando asistí a la primera sanación entendí que tenía que honrar mi trabajo, ya que gracias a él había pagado mis estudios, mi primera Sanación espiritual en presencia del Cielo y mi primer retiro. Así fue como en un mes asistí a cuatro encuentros, donde pude trabajar la relación con mi mamá y mi papá. Vengo de un hogar violento, de jugadores. Me ordenaba y me volvía a desordenar, hasta que aprendí que es cotidiana la invocación a nuestros guías personales, a nuestro Yo Superior y el alto Cielo; el honrar, la no queja, no critica, el no juzgar, es todos los días. Ana Patricia S. (Buenos Aires Argentina) Presentaba episodios de depresión, los cuales aparecían en mayo y concluían en agosto-septiembre. Fui asistida por psicólogo y psiquiatra, quien me medicaba con antidepresivos y estabilizadores de ánimo. Esto ocurrió durante largos años, dejándome devastada, maquinando de qué manera podía acabar con tanta angustia y sufrimiento, pero nunca llegué a intentar un suicidio. Sí lo pensé. Mis hijas estaban muy preocupadas, sobre todo la menor con quien convivía. Me esforzaba por salir de ese estado pero me era imposible: la voluntad me había abandonado. Luego de este período nefasto volvía la luz, hasta el mayo siguiente. Cada año era peor. Me sumía en un sueño interminable, porque era menos doloroso. Fui a un encuentro de Sanación espiritual en presencia del Cielo de dos días (octubre del 2014). Me encantó, el lunes quedaba un solo turno para sesiones individuales y lo tomé. A partir de ahí todo empezó a cambiar. Me amigué con mi madre, me deshice de la carga de la culpa y la bronca, empecé a honrarla a ella 90

y a mis ancestros. Empecé a sentir un calorcito en el pecho. Se lo conté a mis hijas, asistió la menor y la mayor lo hizo unos meses después. A partir de ahí la energía empezó a fluir de una manera concéntrica y para afuera, como cuando uno tira una piedra al agua. Se forman círculos que se van agrandando más y más, como la energía, y llega a más y más gente. Entonces tuve un insight. Me di cuenta que hacía tiempo que estaba probando diferentes cosas que me habían llevado al mismo camino. Como que la vida fuera un gran árbol y hubiese empezado por las hojas, para luego llegar a las ramas y después al tronco y las raíces. Reiki, masajes japoneses y ayurvédicos, registros akáshicos, cuencos tibetanos, mandalas, pero el eje, lo nodal, la columna vertebral de ese árbol, fue y sigue siendo Sanación espiritual en presencia del Cielo. Ahora voy feliz por la vida, disfrutando de un bienestar que nunca había experimentado. Agradeciéndole al Cielo todos los días por el día nuevo y por lo que ha hecho en mí. Me siento eternamente agradecida. Maria Teresa P. (Santa Rosa-La Pampa, Argentina) Tengo 33 años transitados en esta encarnación, después de una crisis necesaria y fundamental, decidí entregar mi tiempo al Señor y le pedí ser su instrumento. Después de intensos cambios, los días que estaba programado un encuentro de Sanación espiritual en presencia del Cielo en la ciudad de Crespo (Entre Ríos), una persona me avisó que tendría ese fin de semana una formación profesional (me dedico a la terapia en psicomotricidad), le respondí sin dudar que el Cielo estaba ante todo porque lo abarcaba todo, y que el encuentro era una prioridad. Hubo un antes y un después en mi vida al experimentarlo, fundamentalmente referido al orden. El orden que trae paz permanente y la fuerza espiritual para transitar el camino en armonía, alegría y amor. El orden en el reconocimiento y la alineación a las leyes del sistema cósmico y sistema familiar en mi experiencia personal, originaron grandes bendiciones. A pesar de no haber sido seleccionada ese día 91

para plantear mi problemática personal, participé vivenciando el amor incondicional al representar la energía de Seres de dimensiones superiores que nos asistieron. Aprendí las leyes y realicé luego el proceso al llegar a mi hogar y sigo haciéndolo, ya que el aprendizaje es constante y eterno. Se trata sobre el amor, vivenciar que esa es la verdad que nos convoca en este plano, es la experiencia más hermosa que transito día a día. Otro conocimiento que generó el encuentro fue reconocer que nada es personal, sino que todo es energía y que lo que le reprochamos a otros está habitando en nosotros mismos. Esto promovió la conciencia en mí de que sólo puedo ocuparme de mí, y cuando mejore, lo demás vendrá naturalmente, porque estaré atrayendo a mi campo lo mismo que irradio. Mucho de lo que el coordinador fue nombrando, lo comprendí por conocimientos previos o por terapias personales que realicé. No obstante, fue Sanación espiritual en presencia del Cielo la herramienta que me permitió realizar los pasos concretos y necesarios, que me brindó la forma en que yo podría materializar lo que estaba escuchando. Los datos fueron precisos y, confiando 100% en el proceso, es posible transitar en paz el camino. Otra bendición absoluta fue la que trasladé a mi campo profesional, donde realicé en muchas situaciones, indicaciones específicas (que nos fueron transmitidas en el encuentro), las familias las ejecutaron y los niños mejoraron notablemente la dinámica en su vida, inclusive superando síntomas físicos y emocionales. Asimismo, en el campo individual, la atracción se expande simplemente mejorándose uno mismo, eso permitió que muchas personas se acerquen, escuchen y vivencien en sus propias vidas que la herramienta de Sanación espiritual en presencia del Cielo contiene la Verdad en sí misma. Confiar en el proceso, significa para mí, ya no mirar atrás porque eso equivale a dar la espalda a la Vida y la Vida está hacia adelante; y en cambio reconocer que todo lo que sucedió hasta aquí, es completamente perfecto y en sintonía con el Todo. Aunque ahora existe una diferencia, que siempre estuvo latente y no la podía materializar: reconocer que no estamos solos, que fuimos siempre y somos permanentemente bendecidos por el Amor del Cielo 92

cuando arreglamos con ÉL nuestras cuentas y nos arrepentimos realmente del daño que causamos en esta encarnación y en vidas pasadas. Recorro los cambios que se produjeron en mi vida, en la aproximación a personas, en los acontecimientos, tanto en los que me llevaron al encuentro de Sanación espiritual en presencia del Cielo, como los que se desarrollaron posteriormente y no puedo menos, que maravillarme día a día por el inmenso Amor con el que el Cielo nos conduce, cuando nos dejamos guiar por ÉL. ¡GRACIAS! Que Dios derrame su luz siempre sobre todos, por una ascensión en paz. Bendiciones. María Eugenia K. (General Ramírez, Entre Ríos, Argentina) Era una persona que de pequeño hablada a mi manera con Dios, viví una vida como cualquier otro con errores de interacción social comunes a todas las personas, viendo normal este tipo de actitudes; debido a ello era también que recibía en mi vida el reflejo de mis acciones (que en ese momento no tenía interiorizado que ésas sensaciones y emociones eran debido a mis actos presentes/pasados). En ciertos períodos sentía tristeza, angustia, malestares, depresiones, dentro de una vida en la cual considero que ha sido buena con sus altibajos y en la cual me llenaba de incógnitas sobre ella. Preguntas sobre cuál era el objetivo de la misma, el por qué de estas emociones, sin tener un padrón de comportamiento claro que me guiara a cómo se debe vivir y cómo explotar al máximo la vida de uno para poder conseguir lo que todo el mundo busca, la tan deseada felicidad. La realización hasta encontrar quién es uno, esa esencia personal que nos lleva a ser quien realmente somos y para que estamos aquí. Una tarde como suele suceder con estas situaciones, mi hermana me invita a un encuentro de Sanación espiritual en presencia del Cielo. Fui sin esperar ese gran aprendizaje que empezaría ese día, estuve participando en la apertura de campos de otras personas, una de ellas mi madre; sintiendo a cada persona que representaba. 93

Me fui de ese lugar recordando aspectos y palabras que resonaban dentro de mí como si las hubiese sabido desde siempre, explicadas por el coordinador y vivenciadas por nuestras propias almas y cuerpos. Paz para mí fue sentir mi verdadera esencia, la comunión con todo lo que se ordenaba en mí y me realizaba como persona, me sentí simétrico, ordenado, con un empuje y fuerza inexplicable; me sentí suave y fuerte, íntegro, completo, con claridad total sentí el verdadero amor sobre todo lo existente y sin interés alguno sobre cualquier situación o cosa que perturbara dicha sensación, me sentí FELIZ. Entendí que la felicidad no es algo que les toca a algunas personas elegidas, está en uno, que es para TODOS, que para poder llegar a ella hay que actuar según ella, según lo dicte el Cielo y cada uno de estos enormemente hermosos Seres llenos de ese incalculable amor. Sanación espiritual en presencia del Cielo fue la llave al lugar que había buscado toda mi vida y el cual busca toda persona; fue encontrar el camino en donde realmente está la mejor versión de cada uno de nosotros esperando ser despertada. Este fue mi despertar, fue encontrar nuevamente la verdad sobre el vivir y como disfrutar esa hermosa experiencia. Mi vida siguió su curso con la diferencia que desde ese momento era regido por otro tipo de actitudes y leyes, las cuales contienen tanta simplicidad y fortaleza tales como no criticar, ni quejarse de los demás; no juzgar, entender que lo que das es lo que vuelve en perfecto balance, sin culpa ni maldad, con una sincronicidad tan perfecta, que de cumplirse el resultado es tan perfecto como su accionar. Este resultado es la felicidad que es el mayor beneficio y premio por vivir con amor y armonía, potenciado para mejor, en cada situación había un aprendizaje, bendecidos aprendizajes, mientras estuviese ORDENADO. En este camino y como era de esperar cometí muchos errores a medida que avanzaba en los cuales me DESORDENABA y volvía a sentirme como antes, emociones y sensaciones de malestar, tristezas y demás, en donde volví a participar de otro encuentro y ordenarme; empecé a interiorizar más las leyes de estos sistemas y cada vez me encontraba por más tiempo ordenado, entendiendo los padrones que generaban mis estados emocionales pero sobre todo entender cómo vivir 94

en armonía, amor y felicidad lo que inevitablemente te hace mejor persona y lo cual es sumamente contagioso ya que mejora todo tu entorno. Se encuentra la dirección real de la vida, su sentido, y se empieza a ver más allá de lo que conocíamos, a entender la vida y disfrutarla; entran nuevas personas a tu vida con los que se entablan tratos armoniosos, se mejoran relaciones con personas de nuestro entorno o se cortan lazos con otras con las cuales había conflictos. Desde ya puedo asegurarte por experiencia propia que así será, toda persona sin importar sus creencias, ideologías, pensamientos, tiene que saber que esta herramienta está brindada por el Cielo para que cada uno de nosotros pueda cumplir con su plan de vida y vivirla de la mejor manera, sin limitaciones ni conflictos, sin prejuicios, sólo vivir siendo la mejor versión que uno mismo pueda ser. Cuando se empieza a transitar este camino y aprender de cada situación, una vez aprendida son sensaciones de liberación dentro de tu corazón, es sentir a Dios completo dentro de tu pecho, corazón y alma, una sensación sin precedentes que te libera por dentro y por fuera llevándote a querer experimentar más. Direccionar tu vida a través de las leyes de dichos sistemas y descubriendo muchas otras ya que es un camino de aprendizaje eterno. Cada uno tiene su propio aprendizaje y este es el camino para poder explotarlo al máximo, SE TU MEJOR VERSIÓN y Sanación espiritual en presencia del Cielo es la mejor herramienta para que puedas serlo. Emmanuel F. (Córdoba, Argentina) Les compartiré mi experiencia con la herramienta contándoles una breve reseña del primer encuentro que tuve la bendición de vivir: Sanación espiritual en presencia del Cielo llegó a mi vida hace dos años atrás. Tuve la bendición de organizar un encuentro en Córdoba, lugar donde resido. En aquel entonces que se dio esa oportunidad, no sabía de qué se trataba, igual no dudé en hacerlo. 95

Algo muy fuerte se movió en mí, confiando plenamente en que de algún modo esta herramienta iba a ser “buena” para muchos, me propuse cumplir con esa tarea, la cual fue una bendición. Hasta allí, nunca había organizado un evento de ningún tipo, tampoco sabía que era la herramienta ni conocía al coordinador. Seguir mi intuición, seguir el llamado de mi alma fue el motor a un cambio radical en mi vida. Todo se ordenó para que se concrete ese encuentro, recibí el apoyo de hermanos amigos que brindaron el espacio para el mismo, y esparcir la noticia fluyó armónicamente. El día llegó y más allá de la ansiedad que este tipo de tareas genera, siempre sentí una tranquilidad y confianza que venía de algo más grande y sutil a la vez. Lo conocí a Mariano Pignataro, transmitiendo cuál era su misión y su tarea en ese momento y en ese lugar. Algo inentendible aun para mi mente, pero mi alma sabía que íbamos por un muy buen camino. De aquel encuentro, recuerdo la primer sensación que me brindó la meditación. Un medio poderoso de comunicación y transmisión de luz del Cielo. Me estaban entregando una herramienta sutil y sagrada para toda mi vida, y mi alma rebosaba de alegría. Escuchar la explicación de las leyes, puedo definirlo como uno de los mayores alivios que escuché; fueron respuestas a los cuestionamientos y “problemas” más comunes que todos los seres humanos tenemos. A medida que el coordinador hablaba, sentía más tranquilidad. Y algo que hacía mucho no sentía, comenzó a vibrar nuevamente en mí, eso que venía esperando hacía mucho. Es difícil escribir en palabras la sensación de algo tan grande, ya que toda explicación resulta insuficiente, trataré de manifestarlo lo mejor posible. Contando una experiencia personal, un recuerdo o una promesa, como más les guste interpretarlo; para mí es el latir de mi existencia. Al nacer me diagnosticaron pulmonía y pulmo tórax, una enfermedad que no me permitía respirar bien. Los resultados obvios que esto puede generar, los médicos diagnosticaron que sólo un bebe en un millón podría sobrevivir a algo así y si lo hacía, esto dejaría graves secuelas físicas. Mis padres lo lamentaron dolorosamente, le habían 96

recomendado comenzar a hacer un duelo por su reciente hija; dicen no olvidar nunca esa dolorosa sensación. Uno de esos días, por medio de un familiar, le llegó a mi mamá la Imagen de la Virgen de Lourdes con la recomendación de rezarle para que a través de Su bendición pudiera “salvarme”. Mi madre lo hizo con toda su Fe. Al poco tiempo cuentan, comencé a mejorar y milagrosamente sané, sin secuelas, ni lamentos; sólo sané y a los pocos días me dieron de alta. Esa experiencia marcó para siempre mi alma… porque nunca dejé de preguntarme ¿por qué? y ¿para qué?, me habían dado esa “oportunidad”. Recuerdo de niña sentarme en la cama, y orando preguntarle a Cristo para qué me habían dejado vivir esta encarnación, cuál era mi misión… Desde aquel primer encuentro de Sanación espiritual en presencia del Cielo mucho de ese cuestionamiento se aclaró. A medida que escuchaba las leyes, tanto cósmicas como las del sistema familiar, mi alma relajaba. Mi mente callaba y mi corazón vibraba emocionado; todavía mi mente no entendía todo, o no podía verlo, pero mi alma sentía un momento crucial, como si “eso” que tanto había esperado, llegaba. Cristo por medio de esta herramienta me estaba hablando, me estaba diciendo que estaba llegando y que todo había sido perfecto. Desde ese día, mi tarea fue continuar con la organización de encuentros y ser testigo de la sanación de muchos hermanos, que desde el destino de cada uno tuvieron la bendición de vivir el despertar de la conciencia, que no están solos viviendo su experiencia en la Tierra, que tenemos guías personales que nos acompañan las 24hs, que nos aman y están para ayudarnos. Que existen leyes que nos rigen y que al ordenarnos a ellas podemos sanar cualquier situación, física, social, familiar, emocional, etc. Por medio de la participación de estas distintas sanaciones tuve la bendición, de desprenderme de karmas de vidas pasadas, de energías negativas, como lo es la energía del robo. Tuve varias malas experiencias en las que fui asaltada y hasta violentada, y el miedo que sentía por ello era recurrente en situaciones de riesgo. Participar en campos de sanación de hermanos, limpió mi sistema de esa energía, y no sólo 97

el miedo se fue, sino que hasta el momento nunca más tuve que vivir experiencias de ese tipo. Recuerdo el primer campo personal que abrí, fue un nuevo encuentro con la Virgen de Lourdes ya que se presentó en vivo. Su imponente presencia fue tan hermosa y sanadora que aún me emociono al recordarla. Su sola presencia provocó en mí un llanto desgarrador, inexplicable. Lloraba desde lo más profundo, sintiendo, a la vez Su compasivo abrazo como cuando una Madre consuela a su hija, me sentía pequeña y amada por Ella. Podía sentirla, escucharla a la vez, sentía que me sanaba, me renovaba. Se volvía a presentar dejándome sentirla en todo mi ser, dándome su apoyo, en un nuevo renacer. Como en un reencuentro, rendirme a sus pies fue lo más sanador que pude experimentar. Me preguntaron que sentía y la palabra que brotó de mi boca, fue arrepentimiento. De qué?, aun no lo sé, pero un viejo dolor se fue para siempre. No fue necesario rezar, ni hablar, ni gritar, sólo rendirme; permitiendo que Su abrazo llegara a mí, permitiéndome recibirla en todo mí ser. Así, de a poco, en el momento justo y necesario, fui librándome de viejas tristezas, algunas irreconocibles, ya que vienen de otras vidas. Pude reconocer mi lugar en la familia, reconocer a mi familia. Pude entender toda la vida desde otro punto, parada sobre mis pies, consciente de que no estamos solos en el Universo, de que “ese algo más” del que tanto hablan existe, que nos aman, que nos están dando la oportunidad de ser felices, de descubrir nuestra verdadera existencia. Nuestra raza ya está lista para pasar a otro plano, sólo depende de nosotros confirmarlo. Por todo esto y más, digo que la herramienta es y fue una bendición. Es a través de ella que nos es posible vivir eso de lo que tanto han hablado las religiones, es a través de ella que podemos concretar cualquier situación energética, es a través de ella que Seres de mayor consciencia vienen a darnos Su bendición, es a través de ella que nosotros, los humanos, podemos sentirlos y permitirnos estar bien. Vivirlo por nosotros mismos, sin que nadie nos tenga que contar nada. Por eso digo que haberla conocido me cambio la vida; una vez que despertamos ya no hay vuelta atrás. Vivir ese despertar es la mayor bendición que un ser humano puede sentir. 98

Los invito a todos quienes estén leyendo esta narración que abran sus mentes y corazones y permitan sanarse y reconectarse con lo más sagrado que tenemos, nuestra alma. Para llegar así a completar nuestra existencia desde el amor y la paz de Cristo. Romina C. (Santa Rosa de Calamuchita, Córdoba, Argentina) Descubrí esta maravillosa herramienta hace 3 años, fui guiada para acompañar a mi madre quien, siendo una buscadora innata, estaba interesada en conocerla. Desde entonces el proceso de sanación ha sido realmente maravilloso y he asistido a muchos encuentros. Sin embargo la sanación que nunca olvidaré fue la que viví en un retiro. Allí, esa última tarde comprendí que no existe mayor poder que el “Amor de Dios”. Nací en una familia con algunos aspectos desordenados, sin embargo el amor de Dios me permitió, a pesar de todo, llevar una vida de abundancia, plenitud, hijos sanos, trabajos prósperos, un gran compañero de vida, amigos entrañables y por sobre todas las cosas buscar el aprendizaje en cada lección que se presenta. Sanación espiritual en presencia del Cielo me ayuda a entender las leyes cósmicas y familiares para vivir en orden y conciencia. Agradezco al Cielo y a mis guías cada mañana al despertar por esto. Laura L. (Buenos Aires, Argentina) Desde pequeña he ido buscando y necesitando la presencia de Dios y la Virgen María en mí. Busqué y busqué, durante muchos años, he pasado por varias experiencias, algunas me gustaron mucho y me llegaron al alma, otras no tanto. En un momento, no recuerdo bien cómo fue que me llega el contacto de Marcela y de los Encuentros de Sanación Espiritual en Presencia 99

del Cielo, no dudé en hablarle y decirle que quería participar, sin saber bien de qué se trataban. Varios meses después, pude asistir por primera vez, fui con mi hermana Verónica. Las dos estábamos felices de que al fin pudiera darse, aunque no teníamos ni idea de las bendiciones que nos esperaban. Ese día éramos muchos y no sabía si me iba a tocar abrir campo para presentar alguno de mis temas, pero eso no me importaba demasiado, me bastaba con sentir cerca a Jesús, albEspíritu Santo, la Santísima Virgen María, el Arcángel Miguel y Rafael y muchísimos Hermanos Superiores más. Todo estaba en sus manos. Estaban ahí asistiéndonos a todos, para el Bien Mayor de Todos y los fines más altos del Cielo. Todo lo que pasó, desde el primer momento, me llenó el alma de ese Amor Incondicional que sólo Dios puede brindar y me fue mostrando que más allá de que el Cielo está con nosotros en cada segundo de vida, depende de nuestro libre albedrío pedirle asistencia y mantenernos ordenados. Al segundo día, salimos sorteadas, primero mi hermana, respondiendo al perfecto orden del Cielo, ya que ella es mayor que yo, y luego fue mi turno, aunque ya venía aprendiendo de todos los campos anteriores, viendo mis materias pendientes y desórdenes… Cada uno de los movimientos que iba coordinando el Cielo a través de Mariano, el canal, con un amor y un respeto sagrado, eran bendiciones para mi alma. Alivio, Paz, Luz, Verdad, Conciencia, Liberación, profundo Agradecimiento… Maravilloso, Hermoso. La increíble experiencia de honrar a mis padres, más allá del vínculo que tengan entre ellos y en lo que yo sienta que me hayan faltado. Honrarlos sin reclamos, y en ellos, a todos mis ancestros. Devolverles su dolor y poder sentirme bien parada en mi vida, tomando responsabilidad de mis actos y respetando el lugar que me corresponde como la tercera hija de cuatro hermanos, con la maravillosa e infaltable asistencia de mis Guías Personales y mi Yo Superior. Ocupándome sólo de mí, sin intentar ayudar a otros, lo cual es imposible, porque se ve clarísimo que el proceso es individual. Gracias a esta herramienta del Cielo pude ver que mi sueño de la maternidad ha sido cumplido. Sentir y ver a mis nueve hijos felices, 100

esperando que vaya por ellos y les dé un lugar en mi corazón, en mi vida y en mi alma, realmente, fue una alegría suprema. Sumada al alivio de limpiar de mi alma y mi cuerpo vínculos de pareja ya pasados y terminados. No queda nada sin resolver, ningún tema sin abordar o iluminar. Ahí está Jesús mirándonos el alma, orientándonos hacia la sanación y a su encuentro. Realmente, no quería que ese Encuentro finalice… deseaba seguir vivenciando esa Confianza plena, esa Rendición Total que, tanto el coordinador (Mariano), como el resto de los hermanos presentes, me transmitían y contagiaban. Así fue que lo más hermoso e inesperado vino después… cuando cada día, sola, sin humanos, en la intimidad de mi hogar, a la hora que lo necesite, puedo conectarme directamente con el Cielo, sin intermediarios. Puedo volver a ordenarme y mantener la Sanación (en la mente, en el sistema familiar y en el sistema cósmico). Decirle a Jesucristo (Padre, hijo, Espíritu Santo) y a la Virgen María: ¡GRACIAS POR HACERMELA TAN LIVIANA! ¡GRACIAS POR LA CONCIENCIA! ¡GRACIAS POR MOSTRARME EL CAMINO! ¡¡¡GRACIAS, GRACIAS, GRACIAS AL CIELO POR TAN INFINITO E INCONDICIONAL AMOR!!! Marcela Lorena (San Martín de los Andes, Argentina) Voy a tratar de transmitir mi experiencia, aunque ya no tengo palabras terrestres para tanto…, porque el Cielo te sorprende día a día… Ahora sí, el tiempo está suspendido en la eternidad… se viven tantas cosas en tan poco tiempo... La vida me atraviesa en conciencia hacia la plenitud… el corazón se expande y mi alma canta de alegría... Durante años me sentí como ¨dormida¨…, sentía que en algún momento tenía que despertar.; y ahora sé que el aprendizaje es eterno. 101

A partir de mis 20 años realicé distintos procesos de psicoterapia, siempre reflexionando, analizando y analizando, (aspectos míos, situaciones de vida, temas familiares, de trabajo, etc) para mi crecimiento personal; pero había algo profundo que no podía resolver. Hasta hace pocos años iba y venía con las emociones, la reflexión y el análisis de todo tipo y color, hasta que tomé conciencia que ya no tenía sentido seguir con esta historia. Desde la mente no podría nunca llegar a las respuestas que necesitaba. En este camino de constante búsqueda interior comencé una terapia gestáltica con la expectativa de aquietar la mente y en el segundo año un taller de sanación de vínculos con el deseo de hacer un movimiento interno que me permitiera sentir que estaba todo bien con mis padres, ya que todavía no lo había logrado, no entendía por dónde iba. Ambas cosas me conectaron con aspectos necesarios a trabajar en mí, pero seguía existiendo algo profundo que no podía resolver. Transitando mi segundo año de esta terapia, a partir de agosto de 2014 pude comenzar a vivir encuentros de Sanación espiritual en presencia del Cielo y a partir de ese momento puedo decir, desde el corazón, que mi vida fue un antes y un después. El proceso de terapia se cerró rápidamente, ya que con esta herramienta había resuelto en breve lo que venía a trabajar en la terapia. Fue hermoso ver las caras y expresiones de alegría del terapeuta, sorprendido del efecto producido en mí. Bello poder comprobar que cosas que resonaban en mi interior son reales. Ahora soy feliz difundiendo estos encuentros que tan sanadores han sido y son para mí y que me han permitido entender cosas que en tantos años -utilizando muchas herramientas- no había obtenido respuestas. Seguro también que era mi momento, hubo un llamado desde el alma. Puedo transmitir desde lo vivencial el poder sanador que tiene esta herramienta que te conecta con las leyes que nos rigen, con lo que tu alma necesita en este proceso de evolución para continuar con su aprendizaje desde la conciencia, despertando por fin de la ilusión de la Tierra y comprendiendo este maravilloso proceso de ascensión. Siento una gratitud infinita al Cielo y a cada uno de los que son parte del camino!!! 102

Este cambio profundo de mirada, de actitud, permitió pararme desde otro lugar frente a las distintas situaciones de la vida, todo fluye de otra manera, todo se resuelve, no hay dramas, hay aprendizaje eterno. Hermoso poder dejar de gobernarme por la mente y dulcemente integrarla para que opere favorablemente para mi crecimiento espiritual; hermoso abrir el corazón y recibir del Cielo, no hay palabras terrestres para expresarlo, hay cada vez mayor conciencia …, hermoso sentir la asistencia del Cielo las 24 hs. Cada uno en su proceso individual e interno, el despertar nos va llegando a todos sin prisa y sin pausa, en rendición total!!! María Andrea P. (Montevideo, Uruguay) Siento desde lo más profundo de mi corazón compartir mi experiencia a través de Sanación espiritual en presencia del Cielo, ha sido una bendición desde la primera vez, en el primer encuentro del que participé un 31 de enero de 2015. Aunque no abrí mi campo personal, sané y recibí cada una de las leyes, de repente a muy poco tiempo siento ir al primer retiro en Junín de los Andes, una bendición cada día, cada experiencia, cada acto de conciencia. En este retiro intento abrir campo el día jueves y mi actitud hizo que el coordinador me dijera que no era ni la forma ni el momento, por lo que volví a mi silla agradeciendo el aprendizaje y con la sensación de que me habían cerrado las puertas del Cielo. Esa noche en un cruce de pasillo el coordinador me dice “no es personal” definitivamente sabía que no lo era, al día siguiente a la tarde el coordinador me dice que el Cielo me habilitaba para cuando lo sintiera. Dejé pasar ese día o más bien no sentí el impulso, el día sábado último día en el que íbamos a abrir campo, mi alma me expulso de la silla y me sentó al lado del coordinador; cuando me pregunto cuál era el tema, le dije que era mi dificultad para avanzar, que en realidad no era que no avanzaba sino que era tan forzado que me rompía el cuerpo y ya no quería eso para mí. 103

Me consultó como estaba constituida mi familia y allí también surgió la duda de cuántos hermanos éramos y cuando me preguntó cuántos hijos tenía, mi alma se precipitó y dijo “no sé” a lo que yo dije cómo no sé… si crié y tengo dos hijos que son gemelos… a lo que el coordinador dijo “vamos a verlo”. Se desarrolló el campo, ingresaron mis padres, supimos cuántos hermanos tenía y llegó el momento de mis hijos; entraron los dos hijos que crié (todos mis familiares canalizados por las personas que asistieron al retiro) y el coordinador dijo vamos a probar, y allí entró un tercero y todo estalló en amor! A mí se me salía el corazón del pecho, era amor, puro amor, él me reconoció, también a sus hermanos y sus hermanos a él y se le preguntó si estaba listo para el tubo de ascensión (hasta ese momento pensábamos que era una pérdida de embarazo), a lo que respondió no. Le dije al coordinador que sentía su vibración, siento que está encarnado. Él está cumpliendo su misión de vida en otra familia. Es parte de todos los que conformamos su familia biológica. Hemos decidido que sea el Cielo quien nos reencuentre cuando sea el momento. Mis hijos hoy tienen 25 años y son trillizos.. Marisa S. (General Pico, La Pampa Argentina) Junto al padre de nuestros hijos tuvimos una vida con aciertos y errores, ternura y peleas, malestares, bienestares y ABUNDANCIA! Nuestro entorno que me gusta llamar entor-si, ahora vibra armónico y amorosamente alineado con las jerarquías y leyes del Universo, con la asistencia y guía de nuestros Hermanos mayores del Cielo. Todo fluye porque nosotros nos alineamos. Sanamos nuestra alma, honramos nuestros padres, ancestros y todo va..., como el río Limay que sin prisa y sin pausa corre a encontrarse con el río Neuquén para crear en ese punto llamado Confluencia, el río Negro. Que sigue su camino hacia el mar-océano Atlántico, con su ritmo propio, el vibrar de la vida y la magia de ser ríos!!....mientras nosotros desde la magia de ser humanos en aprendizaje, con una familia 104

bella: dos hijos, dos nietos, una nuera, un yerno, en charlas de cenitas íntimas podemos decirnos: HOY, AQUÍ Y AHORA TE ELIJO DE NUEVO!! No convivimos y gracias a Dios estamos más juntos que nunca, desde nuestras almas en amor, armonía, alegría, juego, mucha risa, espontaneidad y complicidad! ....todo lo que habíamos dejado escurrir por nuestras manos - como las aguas que pasan con el río - que nos vaciaba y nos separaba cuando vivíamos juntos. SI...hay un después de la experiencia de Sanación espiritual en presencia del Cielo.....y es MARAVILLOSO!!! GRACIAS HERMANOS!! GRACIAS PADRE CELESTIAL..., DIOS..., UNIVERSO..., POR QUERERNOS FELICES!!! Nora y Osvaldo (Neuquén, Argentina) Conocí la herramienta “Sanación espiritual en presencia del Cielo” por una invitación de un grupo de mujeres, todas familiares entre ellas, yo era la única invitada. No sabía que iban a hacer, sólo sentí ir. Durante el encuentro no me tocó abrir mi campo personal y sin embargo cada alma que me tocó representar, fueran hermanos o Seres superiores, movía algo en mi interior. En las vivencias de otros me mostraban las mías. Al mes hubo un encuentro de dos días organizado por la Fundación L.A.N.I.N., allá fui. La sensación no la puedo describir, mi alma sabía que allí estaba lo que necesitaba y que tanto había buscado. Desde ese encuentro toda mi vida cambió. Siempre tuve la sensación de estar acompañada y puedo confirmar que es verdad. Viví dos episodios de robo en mi lugar de trabajo y experimenté el amor del Cielo y su protección. Fue muy fuerte y muy real. A pesar de las armas no tuve miedo, me sentí tranquila y experimenté que mi cuerpo estaba ahí y mi ser observaba todo desde lejos.

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Asistí a un retiro en Junín de los Andes y pude ver que soy madre de tres hijos que no encarnaron (fueron tres pérdidas de embarazo) que me ven y me escuchan como su mamá. Fue una hermosa sorpresa vivenciar esta verdad y desde entonces algo más se acomodó en mi ser. Agradezco al Cielo cada día el camino que recorrí, todo lo que viví hasta llegar a este momento. Gracias al Cielo por todo su amor. María M. (Montevideo, Uruguay) Transcurría el año 2.011, asistí a un encuentro de “Sanación espiritual en presencia del Cielo” donde por primera vez conocí esta herramienta divina. Participé en el campo personal de otra persona y entre otras cosas pude vivenciar lo que la Gran Madre de todos -La Virgennos estaba transmitiendo, nunca olvidaré sus ojos y sus palabras: “Hay un Plan en marcha y a los tiempos del Cielo lo vivenciarán”. Luego vino el primer retiro y hubo más encuentros y retiros a los que asistí. Cada uno es único y vivencial. Sigo sanando, vivenciando las leyes y tomando conciencia que el aprendizaje es eterno, que el Cielo nos ama a todos y que para todos es igual. Todos tenemos Guías personales, Yo Superior y al Cielo Alto para transitar una vida en conciencia en estos tiempos sagrados de ascensión. Marina Ester (Exaltación de la Cruz, Argentina) En 2.014 participé por primera vez de un encuentro de “Sanación espiritual en presencia del Cielo”, desde entonces en cada uno de ellos experimento las leyes del sistema familiar y cósmico y al Cielo asistiéndonos para que transitemos una vida en armonía. Puedo ver como salen a la luz los desórdenes que nos afectan, las materias que nos falta rendir para pasar de grado a nivel alma y los movimientos que hay que realizar para ordenarla y sanarla. 106

Puedo vivenciar que vamos confirmando en el plano material el aprendizaje que recibimos en el alma y que nadie puede hacerlo por nosotros, ni siquiera un Ser Superior ya que Ellos respetan nuestro libre albedrío. Al primer encuentro llegué reconociendo como hijos, sólo a los que había criado. Desconocía que los hijos que no encarnan (pérdidas de embarazo) tienen un plan de vida distinto y que están tan vivos (en otro plano) como los hijos que vi crecer. Vivenciar esta verdad fue transformador para mi cuerpo y mi alma. En aquel instante que reconocí a mis hijos no encarnados, se esfumó la angustia de años y hasta ese momento, inexplicable. Les transmití esta verdad a mis otros hijos y a su padre,- que no habían asistido al encuentro- para que conocieran la Ley de la Pertenencia del Sistema Familiar, su implicancia y pudieran ubicarse conscientemente en su nuevo lugar dentro de la familia. Continué el proceso de inclusión de mis hijos haciéndoles un lugar en mi corazón, poniéndoles un nombre, reconociendo su lugar por orden de llegada a la familia y honrando sus vidas y sus destinos. El Cielo mostró también que en relación a mis padres no tenía cuestionamientos hacia ellos, sentía amor y gratitud por todo lo que me habían brindado, no obstante desde el rol de hija mi vínculo no era ordenado. Se vió en el alma que por querer ayudar a mi madre había tomado “su” dolor y sufrimiento y en relación a mi padre me sentía “nena de papá”, es decir, inconscientemente buscaba tomar fuerzas a través de él. Todo eso me debilitaba como mujer. El orden y la sanación ocurrieron cuando le devolví a mi madre “su” dolor y sufrimiento entendiendo que como hija, en relación a ella soy “chiquita” y nunca podré ayudarla en el alma cargando su dolor. Y cuando tomé la fuerza que viene a través de ella y de todas mis ancestros mujeres en lugar de tomarla de mi padre. Honrarlos, no juzgarlos, no criticarlos, no querer ayudarlos en el alma cargando con su dolor, me permitió tomarlos como los únicos y mejores padres para mi aprendizaje en esta encarnación y girar hacia adelante, hacia la vida. 107

Gracias al Cielo y a ésta herramienta que nos muestra de manera vivencial los pasos hacia el orden me liberé del sufrimiento. Hoy cuando necesito tomar fuerzas invoco a mi mamá (en una almohada) la abrazo y tomo la fuerza que viene de ella y de mis ancestros, un rato nada más, y luego giro hacia adelante para avanzar. La línea de hermanos también se ordenó. Aunque mi hermana y yo fuimos criadas como las únicas hijas, desde niña sentía que tenía hermanos varones. Esto fue confirmado por el Cielo en un campo cuando mostró que dos hermanos varones, menores a nosotras, no llegaron a encarnar. Recibí esta noticia con mucha alegría y emoción, y pude empezar a vivir con certeza, lo que mi alma sabía desde siempre. Al cabo del tiempo en otro encuentro, llegó más alivio y bienestar al revelarse que tenemos otro hermano varón por parte de padre, es el menor de todos y está encarnado. Mi sistema familiar se fue ordenando. Yo empecé a reconectarme con el Cielo, con nuestra familia de luz, de manera directa. Renovando mi vínculo con Ellos, se activó mi despertar. Las situaciones que hoy se me presentan las vivo en conciencia. Se fue la identificación con el sufrimiento y llegué a pararme en mis pies. Logré entender que nadie es pobrecito, que todo lo que nos sucede es perfecto y nos dá la oportunidad de equilibrar errores cometidos en el pasado, en esta encarnación y en las anteriores. Desde que redimensioné lo Superior, fui tomando conciencia de mi pequeñez en relación al Cielo. La humildad le fue ganando a la soberbia, religándome con lo divino desde un lugar auténtico. La forma que tenía de vivir lo cotidiano basados en los argumentos de mi pequeña mente humana, intentando resolver a mi modo las situaciones, “chocándome con las paredes” fue sustituida por una conexión directa con nuestros Hermanos mayores para recibir, guía, protección y conciencia. Sólo Ellos saben “qué es lo mejor para todos y Sus fines más Altos”. Por eso hoy ante cada decisión importante consulto al Cielo, y ante cada decisión cotidiana también. De esta manera Ellos me bajan conciencia, armonía y el sufrimiento no tiene lugar. 108

Confirmo a diario mi elección de vivir siguiendo la voluntad del Cielo, en agradecimiento total por Su infinita bondad y por facilitarnos amorosa y grandemente el proceso de ascensión que estamos transitando. Alicia, Luján (Argentina) Mi nombre es Daniela, soy de la ciudad de Neuquén Capital, la primera vez que participé de un encuentro de Sanación Espiritual en presencia del Cielo fue aproximadamente hace un año y medio y me encontraba en una crisis profunda. El Cielo me fue mostrando con intensidad y firmeza en cada campo cuales eran las acciones que tenía que hacer para dejar de sufrir. Podía ver los movimientos que tenía que hacer, pero como los quería entender, no los llegaba a sentir y vivenciar de manera verdadera. Ese fue mi mayor aprendizaje. Cuando comencé a experimentar la conciencia de que era guiada por mi alma (Yo Superior) y todo el Cielo, pude hacer los movimientos hacia el orden. Cuando ordené a la mente –y se aquietó la razón, empecé a conectar con la verdad y ver que dentro de mi sistema familiar “yo soy la chiquita” y mis padres son los grandes, recién entonces pude sentir la armonía de la que el Cielo me hablaba. Hasta el más mínimo paso y cambio son fundamentales. Parte de mi proceso fue y sigue siendo conectarme cada vez más con la Humidad, la Rendición y la Fe. Miro mi recorrido y no puedo más que agradecer al Cielo por tanto Amor, tanta paciencia en mi aprendizaje y tantas bendiciones. El Cielo me mostró que somos seres humanos, estamos aprendiendo y si en el camino nos desordenamos siempre podemos elegir volver a ordenarnos, eso también es parte del proceso de aprendizaje. Daniela (Neuquén, Argentina)

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Llegué a Sanación espiritual en presencia del Cielo en 2015. No sabía de qué se trataba, sólo tenía la certeza interior de que debía participar. Ese encuentro fue un bálsamo para mi ser, era lo que estaba buscando -¡sin saberlo! - Todo lo vivido en el encuentro me generó un gran alivio, en el alma sabía que todo lo que había escuchado era verdad. En ese momento estaba atravesando un proceso de crisis, que se había materializado en una profunda dolencia física, mental, emocional y espiritual. En la obra de teatro de la tercera dimensión (3D), se había traducido en duelo por la partida del plano físico de mi padre, una separación, enfermedad, crisis profesional y existencial. La magnitud de mi desequilibrio había sido tal que me había impulsado a dejar de lado la “estructura racional y científica”, para emprender un camino de búsqueda de sanación física y espiritual, a través de distintos tipos de terapias holísticas. Ahora sé que esa crisis fue una bendecida oportunidad para iniciar un proceso de orden, sanación y conciencia. Si bien alguna de las distintas terapias que había probado me habían servido de paliativo, realmente puede empezar a sanar al ordenarme a las leyes que nos rigen en ambos sistemas, gracias a la conciencia recibida en los encuentros de esta bendecida herramienta que han bajado de Planos superiores para asistirnos en la ascensión. A través de la apertura de campos, pude vivenciar los movimientos que llevan al orden de acuerdo a las leyes, así como la sanación que producen. Este proceso de sanación (=orden) implicó no sólo la desaparición de dolencias físicas de larga data, sino también un cambio total en mí, que se tradujo en cambios en mis relaciones, vínculos y en las distintas actividades de la 3D. Desde ese momento, tengo conciencia -y vivencio cada día- que nunca estuve ni estaré sola, que los Hermanos mayores vienen en tarea planetaria a asistirme, como a todos los que dijimos “sí” en el alma. Que la muerte no existe, es ilusión de este plano material, que estamos todos vivos. Si me molesta algo afuera, o entra alguna energía en mi campo, me habla de una materia pendiente que por Amor de Dios, tengo la posibilidad de hacer el proceso con el Cielo para sanarla y que desapa110

rezca definitivamente de mi campo. No existe la buena o mala suerte, no existen las injusticias, en Dios todo es justo, lo que vivenciamos a nuestro alrededor es la manifestación de la ley de balance. Y nada es personal, nos atraemos por sintonía y aprendizaje. Si nos encontramos en Tierra, es porque somos muy afines en el alma. Desde entonces vivencié muchas confirmaciones, sé que cada día es una bendición y que todo lo que recibo es producto del infinito Amor de Dios. Desde entonces soy testigo consciente (en la medida de mis posibilidades, de mi pequeñez) de la materialización del Plan de Cristo en la Tierra. Agradezco las gotitas de Amor, Paz, Conciencia, Luz, Bendiciones, que bajan los Seres superiores. Otro cambio maravilloso que agradezco al Cielo en mi ser es la paz, tanto interior como exterior. Antes de conocer la herramienta, el ruido, el bullicio interno, me parecían naturales, normales. A medida que me fui ordenando a las leyes, ese bullicio fue desapareciendo y se fue instalando la paz. Cada día vivencio la presencia y asistencia de los Hermanos mayores, quienes me iluminan con tanto Amor y Paciencia en mis aprendizajes, como lo hacen con todos (siempre estuvieron, incluso cuando no lo sabía). También siento plenitud, porque me siento alineada al propósito de mi alma y a lo que vine a hacer a esta encarnación. Siento que la vida es como un fluir de aprendizaje eterno, en Amor y Asistencia. Y como chiquita que soy en relación a los Seres superiores, puedo aprender un poquito del Amor, gracias a que lo recibo de Ellos (no es de este plano). Aquí y ahora sólo necesitamos la humildad de abrirnos a recibir y confirmar en Tierra, ese sí que ya dijimos en el alma. Muchas gracias Hermanos mayores por venir a buscarnos, volvemos a casa. ¡Abrazo al alma hermanos! Paula C. ( Junín de los Andes, Argentina) En lo personal quisiera transmitir como viví en mi familia, en mi trabajo, en mi cotidianidad, todos los cambios y transformaciones, pero 111

lo más importante para transmitir en estas líneas es la sensación incomparable que tengo de haber encontrado el sentido a mi existencia, el por qué de todo lo transitado. Es ir escuchando las señales inconfundibles que me transmite el Cielo, así podemos encontrarnos a nosotros mismos; parados desde un lugar en el que nunca había estado y del que no se puede ni se desea volver. Encontré en la sanación y el orden, a través de vivir varios encuentros, la respuesta que necesitaba para darle sentido a mi encarnación. Fue a partir de pedir en un campo tarea planetaria y fue sintiendo y confirmando a través de aperturas de campo lo que debo ir haciendo en mi día a día. En esta etapa de mi transito por la tarea guiada por el Cielo, voy encontrándome con los cuadros de la fundación L.A.N.I.N. y a través de ellos sintiendo que avanzo, que hago, que sigo el impulso que el Cielo guía, en acción y con paciencia.... y aunque no entienda bien por qué, ni cómo, ni cuándo, en rendición total y en convicción total, de que la tarea es mi único y mejor camino, sólo avanzo. Gracias Ana por llevarme hacia Sanación espiritual en presencia del Cielo, gracias Mariano por ser el canal para poder vivirlo, GRACIAS AL CIELO POR TODO, POR TANTO AMOR...” Verónica A. (Neuquén, Argentina) Mi nombre es Santiago, tengo 29 años. El plan de ascensión de Cristo coordinado en Tierra por la Fundación L.A.N.I.N. y la herramienta “Sanación espiritual en presencia del Cielo”, llegaron a mi vida en un momento crítico para mí. Gracias a que mi madre y sus hermanos participaron de un taller vivencial coordinado por Mariano Pignataro en el año 2015 en la ciudad de Neuquén capital- Argentina. Gracias al Cielo en ese taller, ellos pudieron ordenar el sistema familiar de mis ancestros por el lado de mi familia materna. Luego de este taller, al mes, mi madre nos cuenta a mí y mis dos hermanos encarnados, de su experiencia y la importancia de respetar las leyes del 112

sistema familiar, como así también, las del cósmico. A su vez, nos contó que no somos sus únicos hijos, que en total somos seis hermanos, luego nos enumeró y ordenó a cada uno en su lugar. El reconocimiento de mis hermanos desencarnados permitió que dejáramos con mis hermanos de tener depresiones profundas como hasta ese momento teníamos. Mi vínculo con la Fundación y la herramienta, se generó en junio 2016, en el taller de formación realizado en Martínez, Provincia de Buenos Aires. Ahí pude escuchar y vivir lo que mi madre nos había contado y poder tener la posibilidad de pedir tarea planetaria al Cielo. Desde esa formación, estoy ordenándome en el sistema familiar, mejorando la relación/vínculo con cada uno de los integrantes de mi familia, siendo testigo de cómo la luz baja también a ellos manteniendo y mejorando mi orden y también ordenándome en el sistema cósmico, pudiendo honrar las jerarquías de nuestros Hermanos mayores para poder recibir y ser partícipe del proceso que hoy en día estamos viviendo hacia el Reino de la luz. Desde entonces soy consciente que el proceso es día a día, agradeciendo por todo lo que recibimos en el día, tomando responsabilidad por las energías que hayamos identificado o nos hayan tocado internamente, para poder seguir avanzando en mi aprendizaje. Hablando para solicitar asistencia, guía y sanación para poder avanzar en la vida aprendiendo sin la necesidad de sufrir. Muchos cambios se han producido en mi vida y todos han sido para mi mayor bien y el de todos los que forman parte de mi vida a diario. Agradezco a Cristo y a todo el Cielo por haberme guiado a conectar con la herramienta, la fundación y toda la comunidad que hacen que este camino sea aún más hermoso de transitar. Amén. Santiago Julian R. L. (C.A.B.A., Buenos Aires, Argentina)

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Como psicóloga he estado en terapia desde los 15 años, a lo largo de mi vida he experimentado casi todas las corrientes psicoterapéuticas psicoanálisis, gestal, sistémica, cognitivo conductual, etc. Todas han revelado diferentes aportes y soluciones a mi vida personal en diferentes aspectos. Pero fue a los 36 años que mis guías me llevaron a Sanación espiritual en presencia del Cielo. En ese momento mi sistema familiar constaba de mis padres, una hermana menor, mis abuelos maternos, paternos, mi pareja y mi hijo. Recuerdo la primera vez que estuve en presencia de la herramienta, llegaban a mí las respuestas a las preguntas que siempre me había hecho, ¿de dónde vinimos?, ¿para qué estamos en este planeta?, ¿hacia dónde vamos?, ¿por qué me tocaron esos padres?, etc. Comencé a participar en los encuentros de sanación y en el momento perfecto me tocó abrir mi campo. En ese momento de mi vida la relación con mis padres era bastante conflictiva, principalmente con mi madre, la culpaba de haberlo dejado a mi padre para irse con otro hombre, por lo cual yo ocupaba un rol de madre, protectora y hasta pareja con mi padre, mientras que con mi madre una relación basada en el odio, la bronca y la soberbia. Prácticamente esto estaba devastando mi vida, causando estragos en mi vida matrimonial y estaba perjudicando la vida de mi hijo, al cual al ser familia por adopción yo estaba sintiendo nuevamente la exclusión, el rechazo y el abandono que en mi mente consciente adjudicaba que se lo estaban haciendo a él. A partir de las participaciones en Sanación espiritual en presencia del Cielo y las aperturas de campo, pude identificar claramente donde estaba el desorden. Vivencié que lo que pasa en las parejas todo es 50/50, que yo era muy chiquita para meterme en la relación de mis padres y que aquellos padres a los cuales detestaba, o subestimaba fueron los padres que yo elegí para mi mejor aprendizaje; los únicos y mejores padres para mi vida. Y pude al fin y de una vez por todas, honrar mi vida y mi destino. Todas las otras terapias alimentaban mi lugar de pobrecita, tratando desde una mente racional entender lo que pasó y por supuesto nunca lo logré desde este lugar. Sólo desde un lugar, en mi conexión con mis 114

guías y mi Yo Superior, entendí que todo aquello que me pasó fue perfecto para mi aprendizaje. Pude pararme en mis pies y mirar a mi pareja como mujer, honrando cada situación de mi vida; las tristes, las dolorosas, como así también aquellas lindas y felices, al fin y al cabo todas pertenecen al mismo hilo. A partir de ese momento mi vida cambió completamente, sentí que debía trabajar desde este lugar con mis pacientes; el despertar de la conciencia. Ya no era útil sostener el lugar del pobrecito, donde siempre había una víctima y un victimario. Sino que el despertar era eso mismo, despertar. Así fue como de a poco fui hablando de los sistemas, de las leyes que nos rigen en ambos sistemas, y todo fluyó como el Cielo lo dispuso, en armonía y en paz. La herramienta de Sanación espiritual en presencia del Cielo, trajo mucha bendición y paz a mi sistema. Ahora estoy en orden, sé cuál es mi lugar en mi árbol, y honro la vida y el destino de todos aquellos que lo componen. También gracias a esta herramienta pude honrar los padres biológicos de mi hijo, un niño el cual es entregado en adopción cuando nace, viviendo sus primeros ocho años en un hogar de menores, hasta que nos encontramos. Lautaro era un niño con mucha agresividad, desconfianza y resentimiento hacia el mundo y principalmente hacia sus padres biológicos. Él también formó parte de los encuentros, y también abrió su propio campo. Como mamá adoptiva, he sido testigo del milagro que ocurrió en su vida, el Cielo siempre presente permitió que él pueda también honrar a sus padres, honrar a los padres que lo trajeron a este mundo y le dieron la vida, porque él los eligió antes de nacer. Así como también nos eligió a nosotros, sus padres adoptivos para que lo cuidemos y criemos. Fue hermoso el abrazo que en el campo nos dimos los cinco en el alma, sus padres biológicos, él y nosotros. Ambos padres agradeciéndonos, nosotros a ellos por haberle dado la vida y ellos a nosotros por criarlo. 115

Todavía recuerdo y me emociono al recordar ese abrazo con su papá biológico, sabiendo que ahí se fortalece con sus dos padres; el biológico y el adoptivo. A partir de ese día, sus ojos reflejan paz. Cesaron al fin las conductas autodestructivas, la ansiedad se apaciguó y floreció la calma, el buen humor, la bondad y el amor. Gabriela Ñ. (Neuquén Capital, Argentina) Mi nombre es Liliana y quiero compartir mi experiencia con la herramienta de “Sanación espiritual en presencia del Cielo”....siempre fui buscadora espiritual practicando distintas terapias.....estoy convencida que esta es LA HERRAMIENTA.... En noviembre de 2014 asisto a un taller y conozco por primera vez de que se trataba.- Entendí de acuerdo a las leyes absolutas que rigen el sistema cósmico y familiar, que estaba desordenada y que seguir así significaba enfermar mi cuerpo (todo desorden en el alma repercute en lo emocional...lo mental y luego lo físico). En ese momento no estaba bien de salud aunque no se sabía que padecía.- En marzo de 2016 me diagnostican “mieloma múltiple” (un tipo de cáncer que afecta a los huesos), comencé el tratamiento con medicina tradicional y también a trabajar firmemente con esta herramienta que nos ofrece el Cielo, ya que en un taller el Arcángel Rafael me hace saber que con mi rendición llegaba la sanación; y por qué se desencadenó la enfermedad, que fue lo perfecto para mi aprendizaje en esta encarnación. Desde entonces comencé a dedicarme más a mi “ser” y dejar un poco el “hacer”, decidí delegar responsabilidades laborales para tener más tiempo para mí.- Fue tiempo de toma de decisiones sabiendo que el Cielo me acompaña. En noviembre de 2016 mi enfermedad estaba controlada. Sé que falta mucho por hacer porque el aprendizaje es eterno, hoy me siento muy bien sabiendo que el Cielo me asiste siempre, no estoy 116

sola, hay Seres MUY GRANDES que si les hablo…, me escuchan y me responden desde mi rendición.....Dios es generoso.....!!!! Liliana Estela W. (Bahía Blanca, Argentina) Sanación espiritual es presencia del Cielo es la verdad en sí misma. La primera vez me atrajo rotundamente, sentía la tarea tan latente en mi corazón... Escuché al coordinador atenta y el escáner de mi mente se aclaraba, caía todo velo de la ilusión teatral. Al participar de los campos y vivenciar la energía de Seres superiores, de familiares desencarnados y encarnados, no quedaron dudas. Nadie muere somos luz y ahí vamos! Vivimos una obra de teatro ilusoria para equilibrar el daño que ocasionamos. Fui ordenando mi sistema familiar el cual se transformó en algo liviano agradable y lleno de amor. Con el tiempo ordené mi sistema cósmico, y hoy invoco a mis guías personales a cada momento y ahí están, felices de acompañarme. Eso si que es amor!, gracias fundación L.A.N.I.N. Camila N. (Villa Serrana, Uruguay). Conocí esta maravillosa herramienta a través de dos amigas. Al participar de un encuentro intensivo en Buenos Aires, sentí una gran familiaridad con el trabajo que realizaba hasta entonces como facilitadora en Constelaciones Familiares. Me llevó tiempo darme cuenta de las profundas diferencias entre ambas, hasta poder reconocer que lo vivido y aprendido me sirvió para llegar hasta este momento de cambios de conciencia: soy humana y no puedo sanar ni ayudar a nadie directamente, tampoco interferir en los aprendizajes de los demás; soy sólo canal de Jerarquías Superiores que al coordinar un campo “me pongo al Servicio Mayor” como testigo del Amor de Cristo por TOD@s. Mi aprendizaje continúa eternamente. Aquí y ahora; 117

soy pequeña frente a estas dimensiones que me miran con amor y esperan pacientemente…como a tod@s! El Cielo se hace presente en cada campo, manifestando su infinita misericordia por nuestras vidas, presentes y pasadas. Es un tiempo de liberación y de oportunidades para volver a “Casa”. Cada uno elige aprender desde la conciencia o el sufrimiento. Es una elección personal: libre albedrío. Humildad, Rendición y Gratitud son condiciones indispensables para esta tarea de amor. Continúo trabajando en mi persona y agradezco infinitamente al Gran Alma que nos une en este camino, permitiendo que nos encontremos para seguir aprendiendo. Quisiera compartir también, la experiencia de haber representado a este libro en un campo que abrimos en Junín de los Andes, durante un retiro espiritual: “el libro se desplazaba hacia Jesús y se apoyaba en Su pecho, escuchando los latidos de Su corazón”. Sentí hermosas sensaciones y plenitud. Este libro nace en Su corazón. GRACIAS AL CIELO! María Cristina De L. (Neuquén Capital, Argentina) Mi primer encuentro con Sanación espiritual en presencia del Cielo fue la experiencia más maravillosa que he tenido. La primera sensación fue estar en presencia de lo más alto del Cielo, fue sentir esa energía tan fuerte y amorosa, que no se podía creer, a pesar de ser creyente nunca antes había sentido esa sensación, tan real, tan hermosa y con tanta paz. Los encuentros me ayudaron a mí y a mi familia (aunque ellos nunca asistieron) a poder ver y resolver muchos temas que generaban conflictos y que ya sanaron. Espero poder seguir asistiendo a los encuentros porque en cada uno de ellos sigo aprendiendo, creciendo y acercándome más al Cielo. 118

Que La Paz, el Amor y la Consciencia sigan descendiendo a la tierra, para TODOS, para TODOS!! Nora Hemilse A. (San Carlos de Bariloche, Argentina) Mi nombre es Mauricio, tengo 43 años, cuando conocí la herramienta estaba hace muy poco saliendo de una separación, vi el cartel en un auto, le pedí a Dios me ayudara a entender el proceso y apareció. Lo primero que pude evidenciar fue en forma desestructurada y pragmática la realidad que no estamos solos y que el Cielo está más cerca que mi respiración. Y conocí como aplicar la practicidad espiritual en mi vida, conocía todas las leyes pero la herramienta me permite evidenciarlas en forma directa. Genero con el paso del tiempo una relación fresca con Dios, reconfirmé que no estamos solos, y por otro lado que lo que acarreamos en nuestras vidas y en los sistemas en que estamos tiene explicación en mi, pudiendo evidenciar el por qué y sobre todo para qué de lo que sucede en nuestras familias. Me pude parar sobre mis pies más que nunca y asumir que no soy ningún pobrecito y ser responsable de lo que me pasa y constatar que cuento con ayuda divina de mis guías, mi Yo Superior, de Cristo y Hermanos elevados. Este para mí es un paso para elevar nuestra conciencia, me pasa lo que me tiene que pasar, por eso he dejado la queja y la crítica hacia el resto y hacia mí mismo. Celebro la vida sabiendo que todo es una ilusión y vine a aprender, hasta que el Cielo diga esta etapa termina, manda Cristo, todo lo que hago hoy es hablar sin intermediarios con el Cielo y es saber que me pasa, porque me tiene que pasar. No hay castigos en mi vida, lo que realizo y vivo es un aprendizaje para mi ser y mi despertar. Tengo paz en cuanto a eso y sólo trato de hacer buenas obras, empezando por mí, sólo puedo hacerlo desde mi, es la mejor manera de ayudar y elevar intenciones al Cielo por otras personas, ellos se encargan, todo está siendo visto y esta herramienta ayuda en la vida de la 119

gente, no es todo, sólo es una herramienta, maravillosa herramienta que Dios quiso que llegara a través de Mariano Pignataro a mi vida, gracias a Dios y las personas que son hermanos aprendiendo igual que yo, gracias Mariano y gracias amado Señor Jesucristo, sos fiel, glorioso y Todopoderoso, te amo Señor gracias por tu compasión. Mauricio Javier V. (Bariloche – Rio Negro – Argentina) Siempre estuve en la búsqueda de la verdad y de que Dios me hablara, respondiera mis preguntas, sanara mi vida, pero nunca imaginé que eso sucedería literalmente algún día. Desde la adolescencia peregriné por templos y monasterios de las religiones más populares de occidente y hasta exóticos ashram de India y de otras partes del mundo buscando ese contacto sublime. Por la promesa de diferentes gurúes de que a través de ellos podría contactar a Dios viajé a Brasil, Europa, Sudáfrica e India, los años pasaron y llegó la desilusión. Aún no sabía que Dios estaba a mi lado. La primera vez que me sanó el Cielo fue en marzo de 2013. Sanamos varias generaciones de la familia, mis bisabuelos, abuelos, padres y yo. Lo destacado de toda la sanación fue la liberación de Seres de baja vibración que había en el alma de mi abuela, ya desencarnada hacía 20 años. Con la explicación de la ley del karma entendí por qué mi abuela dejó su cuerpo de manera traumática, asesinada. Había atraído esa energía perpetradora por tenerla también en el alma. No era víctima como hasta entonces creía. Y desencarnar no la llevó a experimentar paz como también suponía. Otra experiencia fue cuando los médicos me detectaron un pólipo y un mioma en el útero, con el conocimiento adquirido hasta entonces pude darme cuenta que esa alteración en mi cuerpo era resultado de un desorden en mi alma relacionado con la maternidad, probablemente tenía que ver con un hijo excluido, una pérdida de embarazo. Hice un ejercicio de reconocimiento de ese hijo pero el dolor psíquico continuó. 120

Asistí a otro encuentro coordinado por Mariano y el Cielo me mostró toda la información para hacer mis movimientos hacia la sanación y me contuvieron y transmutaron todo mi dolor. El pólipo representaba a mi hijo, (muchas mujeres perdemos hijos sin darnos cuenta cuando el sangrado no es significativo), pude conocer su sexo para darle un nombre, acto imprescindible para ser más consciente de su existencia, de que me ve y me escucha, de que nos podemos comunicar, de que está vivo, pero en otro plano. Esta conciencia sólo la dan los Seres superiores. Pude ver que el mioma representaba al padre de mi hijo, y al estar su alma allí presente él pudo enterarse de su paternidad y honrar la vida y el destino de nuestro hijo. Lo sanador para mí en relación al padre de mi hijo fue reconocer su lugar, que hasta ese momento no honraba y excluía por desconocimiento de su paternidad. Todos sanamos, cada uno se reconocía desde su lugar de madre, padre e hijo. Y esa paz, orden y reconocimiento permitió a mi hijo seguir su destino hacia la luz divina y elegir ascender a un lugar más alto en el Cielo. Me recibí de Licenciada en Enfermería en la Universidad de Mar del Plata. Después de ejercer esa profesión durante 23 años, empecé a entender que todo lo que sufrimos en el cuerpo si bien puede ser paliado a través de la medicina y la ciencia no existe la cura total si no sanamos el alma. He visto miles de casos en donde tarde o temprano la enfermedad regresa o se manifiesta en otra parte del cuerpo. Cuando finalicé mi formación en constelaciones familiares ya había asistido a varios retiros de Sanación espiritual en presencia del Cielo y empecé a formarme como coordinadora, tomando clases con Mariano. Me fascinó ver que el Cielo podía sanarlo todo, como nadie ni ninguna técnica humana podía hacerlo. Sanar el sistema familiar y el cósmico. Sanar hasta la presencia de energías bajas y Seres de la oscuridad en el alma, que alteran la mente y la vida de las personas y sus familias. Energías que traemos incluso de vidas anteriores y que sólo Seres celestiales y luminosos pueden liberar el alma. Yo misma lo pude ver 121

dentro de mi sistema familiar. Sanamos todos, hasta mis ancestros desencarnados. En diciembre de 2015 asistí al último retiro de ese año en Junín de los Andes. Durante una meditación recibí un mensaje canalizado por quien conducía el ejercicio: un ángel me informaba que “tenía que dejar mi trabajo”. Por un lado fue sorprendente y por otro confirmaba mi deseo de dejar la enfermería y dedicarme a Sanación espiritual en presencia del Cielo. Al día siguiente tuve la oportunidad de abrir campo y mi pedido fue “¿qué tengo que ordenar en el alma para dar este paso de dejar el trabajo actual y dedicarme a la Sanación espiritual en presencia del Cielo?” El Cielo me mostró que esos pasos eran honrar a mis guías, a mi Yo Superior y a la Gran Madre Divina con mayor conciencia. A ordenarme en mi rol de hija en relación a mi padre y a devolverle su dolor a mi madre. Reforzar la conciencia de que “yo soy la pequeña y ellos los grandes”. Había un representante para un futuro trabajo en SEPC que no pude tomar en ese momento porque la energía no estaba lista aún, la sanación que estaba sucediendo en mi alma por estos primeros pasos, todavía tenía que bajar a los planos mental y físico para que se plasme en la materia y en mi vida en concreto. No obstante El Cielo con mucha misericordia me respondió en qué momento tenía que dejar mi trabajo. La respuesta fue fuerte para mi mente, dar ese paso era vertiginoso para ella, pero para el alma era lo más bello y hermoso. Era ver su anhelo cumplirse de “Karina chiquita” rendirse a la guía divina. Gracias a mis guías y Yo Superior, al mes estaba de licencia y a los tres meses renuncié definitivamente a la empresa a la que prestaba servicios. Desde entonces todo fue sucediendo sin prisa y sin pausa. Guiada por los Seres superiores empecé a asistir a los retiros de formación y luego a coordinar encuentros de Sanación espiritual en presencia del Cielo. En rendición a ellos y a Cristo, nada de lo que hago es por mí misma, se que tampoco podría hacerlo ya que esta herramienta fue 122

creada por Ellos para alistarnos a la ascensión planetaria. El aprendizaje es eterno, y la sanación en mi vida y la formación mediante retiros, continúan. Ellos me dicen Qué hacer, Cómo, Cuándo, Dónde y Con quién. No hay lugar para mi mente, todo lo consulto y lo confirmo a través de mis guías, Yo Superior y el Cielo Alto. Esta conciencia se la debo al Cielo que me enseña e ilumina cada día. En cada actividad que me guían hacer, Nada hago, Nada sé, no hay lugar para saberes anteriores ni experiencias previas. Sólo soy un instrumento para que ellos hagan. El Cielo es el que sabe todo, ve todo, sana todo y a todos. Eso es algo que me excede a mí y a cualquier humano porque somos muy pequeños frente a todo y frente a Ellos. Gracias al Cielo Entero, los Honro y Amo. Karina Gabriela P. (C.A.B.A. Buenos Aires, Argentina) Soy una mujer normal, que estudió, trabajó y trabaja, se enamoró y se casó, tuvo hijos y....Gracias a Dios, a corta edad tenía abundancia, había cumplido todos los designios de esta sociedad para una vida “perfecta”, pero nada me producía una completa satisfacción… Me sentía mal, esto era todo? Me quedaba sólo esperar envejecer y “morir”... no estaba conforme, pero no quería más bienes materiales, ni más reconocimiento, ni más éxito, mi inquietud era más profunda... mis padres no eran felices, mis hermanos tenían problemas.... Me cargaba en los hombros la culpa por no poder ayudarlos, dividiéndome en que quería ser madre, hija, hermana, esposa y una profesional perfecta... eso me frustraba, me producía ira, hacía todo a medias y me frustraba más... Decidí hacer algo por eso, me inicié en Reiki, Registros Akashicos, vidas pasadas... aunque había mejorías, no duraban mucho y aún no estaba completa. Un día una gran amiga, una hermana, me envió un vídeo... un hombre hablaba de Sanación espiritual en presencial del Cielo... lo escuché, todo lo que conocía de pronto se integraba y tenía una armónica relación! por fin tenía forma!. Al tiempo tuvimos la bendición de que 123

Mariano Pignataro visitara nuestro pueblo para brindarnos esta hermosa herramienta. Al inicio miraba todo y oía atentamente; que difícil era incorporar toda esa sagrada información, sobre todo cuando tu ego fue alimentado durante años para sobrevivir en este plano; cuando aún creemos que somos mente y no pequeñas gotas, pequeños Seres de luz con una mente como instrumento a nuestro servicio (y no precisamente para nacer, adquirir bienestar material y morir). Fuí llamada a integrar un campo... cuanta energía!!!. Y luego se abrió mi campo, y me entregué a observar, ahí entendí mis desordenes, mis responsabilidades, mis posibilidades reales de sanar, de por fin, realmente sanar. Salí y qué bien me sentía, me habían mostrado que lo que necesitaba no me iba a ser dado mágicamente, sino que de mí dependía entregarme a ello, humilde, chiquita y como instrumento del Cielo; esa noche dormí como nunca. Mi padre sin tener conocimiento de que había ido, también sintió el efecto, fue inmediato! Pasó el tiempo, no dejé un solo día de invocar guía, protección y conciencia.. Pero, tampoco terminaba de respetar las leyes, siempre volvía el desorden, continué yendo a las sanaciones que se realizaban, cada vez mejoro mas mi campo, cada vez era más fácil y rápido mirar hacia adelante, hacia la vida, que generoso y paciente es el Cielo. Se debe ser responsable, constante y CONSCIENTE!, no perder de vista el camino que se abre ante nosotros, aquel que venimos a recorrer para aprender, y podemos elegir que sea sin dolor ni sufrimiento, ese que se va disipando a medida que nuestras necesidades son materiales y egoístas. Espíritu, cuerpo y mente, se van desequilibrando... No basta invocar sin conexión, sin conciencia, sin un acto sincero de entrega y rendición total; cuando eso se logra llena el alma, los caminos se abren, se ve todo más claro, el mundo, la realidad, se siente amor. Es un proceso constante, se debe sostener con el libre albedrío, es cotidiano. Gracias a esta herramienta aprendí lo pequeños que somos en relación a los Seres superiores. Que la iluminación no se alcanza parado sobre peldaños materiales, aprendí a honrar a mis padres, a mis hermanos, a todos, a agradecer las enseñanzas, a hacerme responsable de todo aquello que me toca, a sentir y a arrepentirme del mal que hice, a 124

querer vivir esta vida en orden, para mirar hacia adelante, para el bien de todos! Hoy gracias a Dios y a todos nuestros Hermanos mayores, conozco mi tarea, confío y me entrego a la guía, al proceso. Podemos ser felices, cumplir nuestro plan de vida sin dolor, y no es por el camino del ego y la soberbia; la confirmación de la fe, es un proceso “sin prisa y sin pausa”, y sólo de nosotros depende ascender sin sufrimiento. Sánate, ama, aprende y enseña, trasmití esta bendita herramienta, aun estás a tiempo de disfrutar el tiempo que queda en esta obra de teatro, estamos ascendiendo, es para todos, no lo dudes, despertate! María Candela F. (Santa Rosa de Calamuchita, Córdoba)

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Gracias al Cielo por tanto Amor y Su Bendición en este proceso que estamos transitando. “Que la Paz, el Amor y la Conciencia sigan descendiendo a la Tierra para Todos, para Todos”

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ÍNDICE Prólogo �� 7 Capítulo I �� 9 Introducción �� 9 Meditación �� 11 La mente humana �� 12 Capítulo II �� 13 Meditación con el mantra Om Mani Padme Hum �� 13 Capítulo III �� 17 Hablar con el Cielo – nuestro YO Superior y Guías personales �� 17 Sanación Espiritual �� 21 Capítulo IV �� 23 La herramienta de Sanación espiritual en presencia del Cielo �� 23 Capítulo V �� 25 Sistemas Cósmico y Familiar - Sus características �� 25 Sistema Cósmico �� 25 Sistema Familiar �� 26 Capítulo VI �� 29 Leyes que rigen los sistemas Cósmico y Familiar �� 29 Leyes del sistema Cósmico �� 29 Ley de Jerarquía y Libre Albedrío �� 29 Ley del Balance �� 31 Ley de la Pertenencia �� 36 129

Leyes del Sistema Familiar �� 38 Ley de la Jerarquía �� 39 Ley de Pertenencia �� 41 Ley de Balance �� 43 Entrega del dolor que el/la hijo/a tomó de sus padres. �� 50 Ascensión planetaria �� 53 Capítulo VII �� 55 Ascensión Planetaria �� 55 Capítulo VIII �� 57 La Fundación L.A.N.I.N (Lograr en Armonía Nuestra Iluminación Nuevamente) �� 57 Subasta de cuadros �� 60 Algunas experiencias �� 83

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Lograr en Armonía Nuestra Iluminación Nuevamente Creada a pedido de Cristo para la materialización del Plan del Cielo en la Tierra.

Fundación LANIN 33 Directo del Cielo @FundaciónLanin

Meditación, sanación espiritual y ascensión planetaria

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Mariano Pignataro

Pasar del bien personal, al bien mayor de todos, y los más altos fines del Cielo

Es tiempo de despertar, estamos ascendiendo y es literal.

Meditación, sanación espiritual y ascensión planetaria

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Mariano Pignataro

Continuamos el aprendizaje en planetas de cuarta y quinta dimensión.

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