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LA NOCHE ES EL MOMENTO PREFERIDO DE LOS CHILENOS PARA LEER LIBROS
¿En qué ocasiones prefiere leer libros?
Base: 1.182 casos, Entrevistados que leen libros por gusto o necesidad
Leer En Sociedad
Leer es una práctica individual. Una relación entre el lector y el libro. Sin embargo, esta relación está inmersa en otras relaciones. A las personas les gusta hablar de libros, les gusta también que les regalen libros, y cuando leen lo pueden hacer en lugares públicos o privados. Con los cambios de tecnología, cambian las prácticas lectoras. Del mismo modo, el habernos visto obligados a encerrarnos en nuestras casas producto de la crisis sanitaria, implicó que algunos comenzaran a leer más, mientras otros dejaban de leer.
Para poder leer un libro, tenemos que conseguirlo en alguna parte, quizás basados en la recomendación de un amigo o en la lectura de una reseña, y ese lugar puede ser una librería, una biblioteca o un nuevo sitio de ventas online.
En general, lo que prima a la hora de elegir, es el interés propio por un título o un tema, y al momento de adquirirlos, lo más frecuente es que cada cual compre el libro que quiere leer, más que recibirlo de regalo, pedírselo prestado a un amigo o ir a buscarlo a una biblioteca pública. En este sentido, observar las prácticas lectoras con detalle muestra también la manera en que la lectura está inserta en una sociedad específica, como lo es la del Chile contemporáneo. La forma de la sociedad y de la cultura determina los hábitos frente a la lectura de los distintos habitantes del país. La edad, el género, la zona geográfica y principalmente el nivel socioeconómico, muestran que, aunque leemos, no todos lo hacen por igual. Las diferencias sociales según poder adquisitivo, influyen también en la frecuen- cia y las prácticas lectoras, siendo los grupos de mayor nivel socioeconómico los que más leen y los que más lo hacen por placer, mientras que los grupos de nivel más bajo leen menos, tienen menos interés, y tienen más barreras para poder desarrollar esta práctica. Así, pese a que la inmensa mayoría declara que le ha servido mucho en su vida, todavía hay quienes tienen menos acceso a la lectura, lo que no tiene que ver tanto con la posibilidad de comprar un libro, y sí puede estar relacionado con hábitos en torno a la lectura que se construyen desde la infancia.
¿Queremos leer más como país? Si decimos que valoramos la lectura, la respuesta debería ser que sí. Para esto, es fundamental conocer mejor a quienes ya leen para poder ofrecerles la posibilidad de leer más y con mayor variedad. Pero, aún más importante, es comprender y tratar de llegar a quienes no leen, para que, si deciden no hacerlo, no sea por falta de acceso, dinero, tiempo, o porque nadie les enseñó el gusto por la lectura.
Ya sea desde la importancia de la lectura en la infancia, la relación entre lectura y tecnologías, la función de las bibliotecas, el rol de las empresas, o la industria del libro, este estudio busca profundizar en los hábitos y prácticas en torno a la lectura de quienes leen y quienes no leen, para poder enfocar los esfuerzos de los distintos actores involucrados en garantizar el acceso a la lectura y así ir dejando atrás esa imagen, que aún nos pena, de que Chile es un país en que no se lee.