Desayuno

Page 1

CUENTOS, INFORMACIÓN, POEMAS SOBRE EL PRIMER MOMENTO DEL DÍA

DESAYUNO

Primero Bachiller “A” Instituto Luis A Huergo



DESAYUNO Cuentos, información, poemas sobre el primer momento del día Primero Bachiller “A” Instituto Luis A Huergo -2014-



Las acciones de la vida cotidiana (y las historias detrás de las acciones).

Si nos fijamos bien, cada acción que realizamos contiene en sí misma un conjunto de acciones más pequeñas. Pensemos en la acción de leer, que contiene la de abrir el libro, posar la vista sobre las letras, dar vuelta la página, cerrar el libro. O en

la acción de escribir, que se

compone de tomar una lapicera, apoyarla sobre el papel, conducir la mano en el dibujo de las letras,

detenerse

a

pensar,

continuar

escribiendo. Con “A”

el

grupo

andábamos

de en

primero estas

bachiller

disquisiciones

lingüísticas cuando nos encontramos con un poema

de

Jacques

Prévert,

que

tan

bien

representaba nuestros pensamientos y nuestro trabajo de ese momento:

DESAYUNO Echó el café En la taza Echó leche En la taza de café Echó azúcar En el café con leche Con la cucharilla Lo removió Bebió el café con leche Dejó la taza Sin hablarme


Encendió Un cigarrillo Hizo aros Con el humo Echó la ceniza En el cenicero Sin hablarme Sin mirarme Se levantó Se puso El sombrero Se puso La capa de lluvia Porque llovía Y se fue Bajo la lluvia Sin una palabra Sin mirarme Y yo tomé Mi rostro entre las manos Y lloré

Leyendo este poema nos dimos cuenta de que usando el mismo recurso de descomposición de acciones que veníamos trabajando en la clase, el poeta francés había logrado posar sus ojos en nuestro primer acto cotidiano, el desayuno, y lo había hecho trascender contando una historia. Nos propusimos hacer lo mismo: escribir un relato descomponiendo las acciones que construyen nuestro desayuno cotidiano y a la vez contar una historia. Las que leerán son entonces, el resultado de esta experiencia. Recomendamos su lectura teniendo un café con leche y una medialuna a mano. Que las disfruten mucho…

Prof. Gabriela Sued y el grupo de Primero Bachiller “A”


Cuentos


Desayuno. Sofía Bortolosso

Se levantó muy emocionado, por alguna razón sentía que hoy iba a ser un gran día. Así que pegó un salto de la cama y comenzó. Lo primero que hizo fue calentar el agua para el mate, es raro, él nunca toma mate a la mañana, pero hoy, todo podía cambiar, empezando por su desayuno. Fue hasta la alacena a buscar el pan tarareando su canción preferida que justo, estaban pasando en la radio en ese momento. Abrió la bolsita del pan, agarró dos panes y los metió en la tostadora. En cuanto se dio vuelta, escucho el “truck” de la palanquita

de la pava eléctrica indicando que ya estaba el agua. Sonriendo, la pasó al termo que le había regalado su tía de Mendoza a quien casi nunca veía. Tomó los primeros mates, aunque eran muy fuertes, a él… le gustaban. Cuando se terminaron de tostar los panes, los busco y les untó el queso crema y la mermelada de durazno que le encantaba. Y así, con todo listo, disfrutó de su riquísimo desayuno, diferente a los demás, pero a veces, está bueno innovar. Terminó, levantó la mesa, dejó todo en la pileta, se puso el saco, abrió la


puerta y llamó al ascensor. Se subió, cuando se quiso acordar, lo habían llevado a otro piso, no le importó mucho, siempre le habían caído bien los vecinos. La puerta corrediza se abrió y ahí estaba ella…


Desayuno Irina Castillo

Él se levantó a las 7:30 de la mañana con una gran sonrisa, parecía estar de muy buen humor. Se levantó de la cama, y se dirigió al baño para ducharse. Mientras se bañaba, yo me vestía. Fui hacia la cocina para preparar el desayuno. Cuando de repente apareció y dijo: “Dejá, hoy lo preparo yo”. Acepté y me senté en la mesa, esperándolo. Hirvió agua mientras fue hasta el mueble y agarró dos tazas. Puso el

agua caliente en ellas y colocó un saquito de té en cada una. Después echó azúcar y las revolvió con una cuchara. Agarró pan, lo cortó en dos y lo puso en la tostadora. Retiró las rodajas, las llevó hacia un plato y las untó con queso crema. Llevó el desayuno a la mesa, se sentó, me miró, y me dijo “¿No te acordás que fecha es hoy?” “No” le respondí. Sonrió y sin hablar, tomó su té, lo dejó sobre la mesa y comió su tostada. Observó el reloj, se levantó de la mesa, y rápidamente se vistió. Se puso la camisa, el pantalón, su saco se colocó y los zapatos ató. Buscó las llaves un poco apresurado, al salir de casa me besó, y se fue. No entendía por qué estaba así esa mañana, hasta que fui a la cocina, y me encontré con una nota que decía “¡Feliz Aniversario, amor!”


Desayuno Stephanie D´ Atri

Se despertó a las 6.45 am. Se levantó de la cama, bajó las escaleras, fue a la cocina, abrió la heladera, sacó la leche y la apoyó en la mesada, abrió la puerta del estante donde se encuentran las tazas, agarró una y cerró la puerta. Agarró la leche, volcó media taza, buscó la chocolatada en polvo, tomó una cucharita y vertió dos de chocolatada en la taza, cerró el pote de chocolate y lo guardó. Batió la chocolatada y luego llenó de leche la otra mitad de la taza, revolvió nuevamente, agarró la taza, abrió el microondas y la metió adentro, lo cerró y programó 1 minuto para que se caliente. Agarró el sachet de leche abrió la heladera, al abrirla se cayó una botella de agua que estaba

abierta, dejó la leche en la mesa y fue al lavadero, buscó un trapo, volvió a la cocina, secó el agua caída en el piso, recogió el trapo, lo escurrió, lo llevó al lavadero y lo puso a secar, volvió a la concina, agarró la leche y la guardó en la heladera. Abrió la puerta del microondas, sacó la chocolatada, apoyó la taza sobre la mesa, cerró la puerta del microondas. Abrió la heladera, sacó el pan, cerró la heladera y puso dos rodajas de pan en la tostadora, la enchufó, bajó la palanca, espero 5 minutos para que se tuesten, sacó las tostadas de la tostadora, las puso en un plato arriba de la mesa, desenchufó la tostadora. Abrió nuevamente la heladera, agarró la mermelada, la


puso sobre la mesa y cerró la heladera. Fue al baño, prendió la luz, abrió la canilla, se enjabonó las manos, se las enjuagó, cerró la canilla, se secó las manos con la toalla, apagó la luz, regresó a la cocina y se sentó a desayunar. Terminó de desayunar, subió a su habitación, agarró el pantalón y la remera de la escuela y se los puso se colocó un par de medias

blancas, luego se puso las zapatillas, agarró la mochila, corroboró que estén la plata, la tarjeta sube y las llaves adentro, bajó las escaleras, saludó a sus padres y se marchó a la escuela.


Desayuno Ariana Fischtenbaum

El lunes a la madrugada, Paula no podía dormir, tenía una mezcla de felicidad y angustia. Aquella noche, se había levantado cinco veces al baño y fue a la cocina tres veces para comer algo. Siendo las 5:00 a.m., empezó a marearse, se sentía mal, llamó a su esposo, pero para cuando él se levantó, ya estaba mejor. A la mañana de aquel día, luego de dormir tan sólo tres horas, Paula y su marido fueron a desayunar. Ella tenía mucha hambre y le pidió a su esposo que le hiciera el desayuno más completo.

Él entonces, cortó en rodajas el pan, las colocó en la tostadora, sacó la manteca y la mermelada de la heladera y la cerró. Cuando estuvieron listas, les untó manteca y mermelada. Abrió la heladera nuevamente y sacó la leche; en una taza, echó tres cucharadas de café instantáneo, volcó la leche en la taza y colocó dos cucharitas de azúcar. Lo calentó 1 minuto en el microondas. Paula comió las seis tostadas, tomó el café con leche y se quedó con hambre…Ahí, su esposo comprendió que ella estaba embarazada.


Desayuno Martina Gier

Me desperté con el ruido de la alarma, una vez más estaba llegando tarde, no quería ir al colegio. Después de 10 minutos, cuando me dispuse a salir de la cama y cambiarme, note que ni mis padres ni mis hermanos estaban despiertos. Decidí irme a vestir, luego levantarlos y finalmente, una vez habiendo desayunado, ir al colegio. Así que empecé de esa forma, una vez que termine de vestirme mamá y papá se habían despertado por su cuenta, y me retaron por dejarlos seguir durmiendo. Mi mamá muy enojada tanto conmigo como con mis hermanos por no querer ir al colegio me dijo que yo debía prepara el desayuno a toda la familia, ya que ella quería “seguir durmiendo”, obviamente, lo dijo en forma de burla para mí y mis hermanos. Fui hasta la cocina aun sin ánimos de ir al colegio, y comencé a preparar el desayuno. Primero abrí la alacena con intenciones de buscar la chocolatada en polvo para mis hermanos y el café para mi padre y para mí, una vez que lo obtuve abrí la puerta de la heladera, saqué la leche, cerré la puerta saque unas cucharitas de los cajones y comencé a revolver las


respectivas bebidas. Cuando termine con las chocolatadas se las entregué a mis hermanos, y al café de papá y el mío los puse a calentar, abriendo la puerta del microondas y cerrándolo, marcando la cantidad de tiempo necesaria. Al mismo tiempo que sonó el pitido del microondas que anunciaba que el tiempo había terminado, sonó fuerte e insistentemente el timbre, mi padre se acercó hasta la puerta, miro por la perilla y observo que mi tío Alberto estaba parado frente a ella con una bandeja de medialunas


Desayuno Bruno Gonzalez

.

Ella se levantó de su cama, un poco triste. La noche anterior su esposo y ella habían tenido una fuerte discusión, pero no le puso mucha atención. Bajó y preparó el desayuno, puso la cafetera a funcionar, preparó las tostadas y cuando todo estaba listo, puso el desayuno sobre la mesa. Él bajó muy enojado por la situación de la noche anterior, se sentó a la mesa, sin dirigirle la palabra, bebió su café y comió las tostadas. Se vistió y luego se levantó.

Él le dijo que la discusión de aquella noche no fue como todas las demás, sino que se había dado cuenta de que el matrimonio ya no podría seguir funcionando como hasta entonces. Ella confundida, le preguntó qué quería decir con todo eso. Él abriendo la puerta para irse a trabajar dijo: -Quiero el divorcio. Abrió la puerta y salió. Ella, muy triste, se arrodillo y comenzó a llorar. Se levantó y todavía con lágrimas en la cara se sentó y tomó su desayuno.


Desayuno Facundo Piccinino

Desperté, tristemente, como todos los años ese mismo día. Me levanté, preparé el desayuno para mi familia y para mí, como siempre, un té con leche para cada uno y tostadas con dulce de leche. Me lleve el pan con dulce hacía la boca lo mastiqué unas 15 veces y lo tragué, no los mire ni les hablé, ellos estaban igual de tristes que yo. Se llevaron la taza hacia la boca, tomaron la leche, me levanté fui al baño, hice pis, me lavé las manos y me las sequé. Cuando volví, ya no quedaban tostadas, me tome el té, se levantaron, se cambiaron y se fueron, después de unos 5 minutos lloré.


Desayuno Maximiliano Reissenauer

Suena la alarma y la apago, me despierto y me visto, voy a la cocina, me preparo una leche, ya que es lo único que tomo en mi desayuno los días de colegio, al tomarla, derramo un poco en el pantalón y mi mama me reta, estoy muy despistado y nervioso. Cuando termino mi “desayuno”, luego de unos cuantos desastres más, voy al auto, en el viaje, veo los mensajes en mi celular, de la

noche anterior y no puedo evitar sonreír. Al llegar al colegio, bajo del auto con cierto nerviosismo, empiezo a buscarla por entre la multitud de alumnos, y cuando me iba a rendir, la encontré, ella me sonríe, con esa sonrisa que siempre paraba a mi corazón, yo le devuelvo la sonrisa y me acerco, y tomados de la mano, entramos al colegio.


Desayuno Sofía Rigazzi

Ana se levantó se vistió, se lavó los dientes, se peinó, agarro sus cosas y se fue. Se fue a un bar. Estaba muy triste porque empezó mal el día, al que no esté el al lado suyo además no lo vio desde la noche anterior, estaba más preocupada por triste. Vino el mozo, que era su amigo, le pidió un café con leche y una tostada (como siempre). A ella le encantaba el desayuno era su comida preferida del día. Cuando le trajo lo pedido el mozo le pregunto qué le pasaba que él veía que estaba triste, porque ella iba a ese bar todo los días. Ella no le quiso responder. Él se fue. Ella lo veía irse y teniendo una lagrima en su ojo agarro la taza y tomó un sorbo. Se preparó la tostada con

manteca y se la llevo a la boca sin dejar de pensar en el la mordió y la masticó. Se terminó el café con leche y las tostadas. Los ojos los tenía rojos el mozo le trajo una servilleta para que se secara. Ella se levantó y el mozo la abrazó le trajo la cuenta que ella le había pedido y se fue. Justo antes de que se fuera le llego un mensaje de texto. Era de EL. Lo abrió le decía que fuera directamente a Puerto Madero que era urgente entonces le pagó con la plata justa más propina. Salió corriendo ahora la tristeza se le convirtió en preocupación llegó al lugar citado. Al encontrarlo él se puso de rodillas y le propuso casamiento. Ella aceptó


Desayuno María Victoria Rocha

Me despierto a las nueve, supongo. Me doy vuelta y él ya está a mi lado, mirándome con sus profundos ojos color café. Nos dirigimos hacia el comedor, me dice que me siente que él va a preparar el desayuno. Es raro, pero ahora lo menos que quiero hacer es el desayuno, estoy ya con mucho trabajo, que ahora venga y tenga que preparar el desayuno, lo único que haría sería tirarle el desayuno a la cara. Hizo una buena elección. Cuando me doy cuenta estoy sonriendo, creo que casi riendo, soy un poco agresiva con mis pensamientos en las mañanas. Sin darme cuenta, mis ojos están en él. Primero enciende la cafetera y luego la tostadora, coloca unas tostadas. Cuidadosamente agarra dos tazas y las coloca debajo de la cafetera. Saca las tostadas, las pone

en un plato y de paso agarra las tazas de café, no sé cómo lo hizo pero cuando estaba por sorprenderme, estaba sentado en frente mío. Se va hasta la cocina y agarra un saquito de azúcar, vuelve, se sienta y lo abre cuidadosamente. Da vuelta el saco de azúcar como si tuviera todo el tiempo del mundo. Lo revuelve, da un sordo a su café y da un suspiro de gusto. Toma una tostada, le da un mordisco y luego un sorbo de café. Así hasta que terminó el desayuno. Se puso de pie, levanta la mirada hacia mí y sin sacarla, se pone el saco negro, mi favorito. Sonríe, se acerca sigilosamente e inclina su cabeza, me besa y sale caminando rápido, casi corriendo sin dejar de sonreír, se va. Cuando caigo de lo sorprendida que estoy, sonrío.


Desayuno Guido Romero

Me levanté una mañana, muy contento y alegre, como un día cualquiera, un día más en mi vida. Preparé el desayuno para mí y toda mi familia (mi mujer y mis 2 hijos). Primero enchufé la tostadora, puse el pan lactal y esperé a que se tostara. Agarré una jarra y volqué el café que había sobrado de ayer a la noche. Lo calenté y se lo serví a mi familia. Agarré el dulce de leche y lo dejé sobre la mesa para que el que quiera, lo pusiera sobre su tostada. Notaba algo raro en ese desayuno: mis hijos tenían ojeras, cosa que nunca tenían, y mi mujer… ¡MI

MUJER! No la notaba contenta como todas las mañanas, es más, no me hablaba, y si lo hacía me respondía con monosílabos. Pensé y pensé que podía ser el enojo de aquel desayuno. Era 27 de Abril, y se me hacía familiar esa fecha. En fin… mi señora se levantó de la mesa después de haber desayunado, se cambió, se puso la campera y se fue para el trabajo. Mis hijos hicieron lo mismo, y se fueron para la escuela con mi mujer. Yo hice lo mío también y un segundo antes de salir suena el teléfono. Era mi Tía Norma que me decía: FELIZ ANIVERSARIO


NENE! … y se cortó por mala señal. Después de ese día, mi señora me pidió que nos distanciáramos por un tiempo. Con las excusas… que ya eran obvias. Ya no hay nada más que decir. Ah! Sí, me arrepiento todo el tiempo de ese día.


Informaci贸n



Los beneficios de desayunar Sofia Bortolosso, Victoria Rocha y Javier Salvatore. FUENTE: “LeaNoticias” FECHA: 10/12/13

El desayuno es la comida principal del día ya que aporta

la

cantidad

de

nutrientes

necesarios

para

el

funcionamiento correcto del cuerpo. Para conservar la salud y mantener la figura, hay que tomar un buen desayuno cada mañana. Un buen desayuno ayuda a controlar el apetito. Lo que consumís en la mañana puede influir en la sensación de


saciedad durante el día y también ayuda a controlar el azúcar en la sangre. Aparte de esto mejora la digestión, evita el estreñimiento y mantiene el tejido muscular Otros beneficios que te da el desayuno: Repone la energía Aumenta el desempeño intelectual. Ayuda formar hábitos alimentarios. Favorece el desarrollo infantil. Un desayuno equilibrado, evita la obesidad. Previene

las

enfermedades

cardiovasculares

y

diabetes. Previene las adicciones. Estimula el crecimiento. Proviene las hipoglucemias. Evita los males cardiacos. Mejora el estado de ánimo y el carácter en general.

la


¿Qué ocurre si no desayunamos? Sofía Rigazzi y Martina Gier Su omisión genera un desequilibrio en los hábitos

alimenticios Consecuencias principales: 

Decaimiento

Falta de concentración

Mal humor

Disminuye la capacidad de: 

Locución o expresión

Creatividad

Resolución de problemas

No desayunar aumenta un 27 % la probabilidad de contraer enfermedades coronarias.


Si no desayunamos, en el resto del día estaremos de mal humor o no nos podremos concentrar bien, debido al déficit de glucosa que produce el ayuno. Además necesitamos alimentarnos correctamente ya que a primera hora de la mañana el organismo lleva ya entre 8 y 10 horas sin recibir ningún alimento. En edades escolares, el desayuno condiciona el aprendizaje y acarrea descenso del rendimiento, esto quiere decir que quedan particularmente afectadas la capacidad de expresión o locución, de memoria, de creatividad y de resolución de problemas. Una investigación presentada en el Congreso de Neurociencia 2012 celebrado en Estados Unidos comprobó que cuando una persona no desayuna, a las horas, el cerebro se siente atraído por alimentos dulces y grasos favoreciendo una dieta desequilibrada. Los alimentos más grasos resultan más atractivos para quienes están en ayuno. Éstos ingirieron un 20% más de calorías.

Ariana Fichtenbaum y Facundo Ruarte

¿Qué alimentos deberíamos consumir en el desayuno?


Para que un desayuno sea considerado muy bueno, tenemos que combinar los alimentos para poder obtener la mayor cantidad de nutrientes posibles. En la mañana nunca puede faltar: Los lácteos, como leche, yogur o queso que nos dan calcio, hierro y zinc. Tampoco cereales, o pan, que nos otorgan hidratos de carbono, ni frutas que nos dan vitaminas. Te recomendamos estos menús: 

El jugo exprimido de naranja, un vaso de yogur con cereales y dos tostadas con mermelada (a elección )

Un vaso de yogur y dos panqueques con frutas.

Un vaso de licuado de banana con leche y un tostado de jamón y queso.


Un vaso de leche con chocolate, dos tostadas con queso y dulce y una fruta.

Con las propuestas que te damos, nos podemos dar cuenta que tomar un desayuno sano no significa que tengamos que comer alimentos que no nos gusten, sino alimentos sabrosos y nutritivos para empezar el día despiertos y con mucha energía.

Fuente: “Aprende Con Natura” Guido Romero


Poemas



Castillo y Rocha

Gier



DESAYUNO es un producto del trabajo en el aulo del curso Primero Bachiller “A” del Instituto Luis A Huergo. Si te gustó, dejanos tu comentario. Muchas gracias.



Turn static files into dynamic content formats.

Create a flipbook
Issuu converts static files into: digital portfolios, online yearbooks, online catalogs, digital photo albums and more. Sign up and create your flipbook.