CFIE de Medina del Campo (Valladolid)
TRATAMIENTO DIGITAL DE LA IMAGEN Curso Básico de Photoshop
José-Manuel Benito Álvarez IES Emperador Carlos (Medina del Campo)
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TRATAMIENTO DIGITAL DE LA IMAGEN Nota: este curso parte de cero, pero requiere que los asistentes sepan manejar el ratón y conocer el sistema operativo para acciones básicas, por ejemplo, crear y guardar archivos y carpetas. Si alguien quiere ir más allá, puede pedírmelo y, si está en mi mano, se intentará.
PRIMERA SESIÓN: PRESENTACIÓN DE LA APLICACIÓN ADOBE PHOTOSHOP es la aplicación más extendida para el proceso de imágenes digitales. La gran ventaja que tiene es que se ha convertido en un estándar profesional y la encontraremos en todas partes, de modo que las imágenes tratadas en Photoshop, o con formato de Photoshop las podrás ver en cualquier lugar. Otra ventaja de Photoshop es que es una aplicación multiplataforma, esto quiere decir que se maneja igual en Windows que en otros sistemas operativos (efectivamente, existen otros sistemas operativos, como Linux o Apple MacOS, el que uso yo): Photoshop es idéntico en todos esos sistemas, y es posible compartir archivos sin problema alguno. Adobe Photoshop no deja de ser una aplicación profesional de gran complejidad y potencia. Exige mucho del ordenador y del usuario. Pero, como resulta fácil de personalizar, podemos empezar con una serie de procesos básicos que cualquiera puede llegar a dominar. Con el tiempo podemos ir aumentando nuestro conocimiento, porque Photoshop es inagotable; el programa crecerá con nosotros. Como hemos dicho, Photoshop necesita muchos recursos por parte del ordenador; sobre todo necesita memoria RAM. Curiosamente, la frecuencia del procesador no es muy significativa. De hecho y aunque parezca insólito, entre un equipo con un micro de 1,5 GHz y otro con 3 GHz, apenas hay mejora de rendimiento. Por tanto, la clave de un buen equipo para imagen reside en disponer de toda la RAM que podamos instalar (de 1 a 2 GB, y como mínimo de 3 a 5 veces el tamaño de nuestra imagen). VERSIONES DE PHOTOSHOP: ésta es una aplicación veterana, apareció en 1987 para la plataforma Apple MacOS y no ha dejado de mejorar. Nosotros vamos a trabajar con la Versión 7, pero ya ha salido una actualización llamada Photoshop CS. En realidad es la versión 8, pero se le ha cambiado el nombre por motivos de marketing (CS significa Creative Suite: una suite informática es un grupo de aplicaciones que trabajan acopladas: por ejemplo Microsoft Office es una Suite administrativa y Adobe CS es una Suite de diseño gráfico viene con aplicaciones para dibujo, presentaciones, edición web, maquetación, etc.)
ALTERNATIVAS A PHOTOSHOP: ¿Realmente necesitamos Photoshop? No enfrentamos a una aplicación realmente cara, supera los 1000 € (por eso, nosotros trabajaremos con una versión gratuita de prueba como la que se puede descargar en http://www.adobe.es/products/tryadobe/main.html). Si no necesitamos tanta capacidad y deseamos una aplicación legal, tenemos opciones mucho más baratas.
The GIMP en acción (impresiona ¿no?)
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Importantes alternativas son Corel Photo-Paint y Paint Shop Pro, su potencia es notable aunque inferior (en origen, estos dos productos se distribuían y desarrollaban desde empresas separadas, pero ahora pertenecen a la misma corporación, por eso se pueden encontrar en la misma web: http://www.corel.com/servlet/Satellite?pagename=Corel2/Products/AllProducts). También en el ámbito profesional disponemos de GIMP, una aplicación realmente poderosa, multiplataforma y ¡totalmente gratuita! (que procede el mundo Linux, generalmente dedicado al software de libre distribución llamado Open Source), la pega es que resulta bastante complicada de usar (http://www.gimp.org/). En el terreno de los fotógrafos aficionados hay una gran variedad de programas baratos, sencillos y lo suficientemente potentes. Es posible que nuestra cámara digital o nuestro escáner traiga alguno de regalo (Ulead PhotoImpact, PhotoRetouch, MS Picture it! StudioPhoto…). Yo voy a subrayar que existe una versión simplificada de Photoshop, llamada Elements 3 que, por unos 85 €, es “casi” igual (aunque se le han quitado opciones que, teóricamente, sólo usan los profesionales) y, además, es mucho más fácil de usar porque está especialmente diseñado para aficionados como nosotros (realmente vale lo que cuesta). Si nuestras inquietudes fotográficas creciesen, pasarse de Elements a la versión profesional es muy fácil porque son casi idénticos en su uso (http://www.adobe.es/products/photoshopelwin/main.html).
Photoshop frente a Elements
Lo que sí es necesario, cuando te dedicas a la fotografía digital, es un programa de Catalogación de Imágenes. Con las cámaras digitales es fácil y divertido hacer cientos de fotos que luego se descargan al ordenador. Por eso, conviene adquirir un programa que servirá para rotar, recortar, clasificar fotos, almacenarlas, crear álbumes, solicitar copias por Internet, enviar correos electrónicos, pasarlas a CD, etc., incluso realizar sencillas correcciones. Aunque Windows XP ofrece algunas de estas utilidades, el programa más recomendado para esta labor es ACDsee, que cuesta unos 60 € (http://www.acdsystems.com/). Otras opciones menos extendidas, pero también aconsejables son Portfolio, FotoStation, Adobe PhotoAlbum… Algunas son gratuitas y muy viables, pongamos el ejemplo de Picasa 2, que veis en la foto (aunque yo echo de menos ciertas cosas, está lleno de posibilidades y podéis descargarlo en http://www.picasa.com/):
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El aspecto de Picasa es muy elegante y su manejo fluido e intuitivo, a pesar de estar en inglés CONSEJO: los discos duros de ordenador pueden fallar en el momento menos oportuno. Por eso, es imprescindible hacer copias de seguridad periódicas, no sólo de las fotos, también de otros archivos. Los programas de catalogación facilitan esta tarea enormemente.
TRABAJAR CON PHOTOSHOP Ya supongo que queréis trastear con las fotos inmediatamente; pero, lo primero es lo primero. Somos docentes y, cuando llegamos por primera vez a una clase, seguro que no empezamos a explicar así como así; como mínimo tenemos que conocer a los alumnos, colocarlos adecuadamente y explicarles las normas. Lo mismo tendremos que hacer con Photoshop: debemos establecer las “Preferencias”, organizar todas las cosas que aparecen en la pantalla y conocer los instrumentos que utiliza el programa.
ESTABLECER LAS PREFERENCIAS Abrimos Photoshop, vamos al Menú Edición>Ajustes de Color: y en el menú desplegable principal seleccionamos Gestión de Color Desactivada, no es muy profesional, pero de este modo evitaremos complicaciones (los ajustes de color son muy delicados y no podemos detenernos en ese aspecto). Además, nos aseguraremos de desactivar cualquier casilla que esté en la parte de debajo de la ventana. Después, pulsamos OK.
ORGANIZAR EL ÁREA DE TRABAJO Photoshop tiene un arsenal de utilidades realmente aterrador, están repartidas en la Barra de Menús, arriba en posición horizontal; la Barra de Opciones, justo bajo de la anterior, también horizontal (que va cambiando según el contexto); el Cuadro de Herramientas, situado a la izquierda en forma de columna llena de pequeños iconos; la Barra de Estado (abajo) y las Paletas flotantes, que generalmente aparecen a la derecha en ventanas con diversas lengüetas (o solapas) y submenús emergentes o, lo que es peor, repartidas por toda la pantalla (¡una locura!).
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El arsenal de Photoshop desplegado, pero no tengáis miedo, haremos la colada (por cierto, si su apariencia es algo distinta de la de vuestro ordenador, es porque se trata de otro sistema operativo: MacOS)
Seguro que al abrir el programa habréis reparado en la cantidad de ventanitas y paletas flotantes que han invadido la pantalla. Como diría el autor y experto Ben Willmore, ¡Han olvidado dejarme algo de espacio para trabajar! Afortunadamente, podemos hacer una limpieza bastante efectiva (recuerda que para mover paletas se usa la misma técnica del ratón que para mover ventanas, “arrastrar y soltar”, pulsando en la barra azul de las paletas las movemos en grupo, en la lengüeta las movemos por separado). De todos modos, siempre hay quien prefiere no tocar las cosas, por temor a estropear algo o a no encontrar lo que buscamos cuando lo necesitamos, si queréis, lo dejáis todo como está, no pasa nada. •
Haciendo doble clic en las lengüetas podemos contraer o expandir las paletas flotantes; pulsando en minimizar también se contraerán.
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Podemos cerrar las paletas que no necesitemos pulsando en la x roja de cerrar (siempre podremos recuperarlas en el menú Ventana (yo, por ejemplo, he cerrado las paletas Información y Explorador, porque aparecen ellas solas cuando las necesito).
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Podemos colocar algunas paletas en el llamada “Área de Paletas” situada a la derecha de la Barra de opciones (yo, tengo allí las paletas Navegador, Explorador de Archivos e Historia).
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Podemos arrastrar los grupos de paletas a la parte inferior de la pantalla mientras se pulsa la tecla mayúsculas, y mejor si están contraídas (no hay que ponerlas cerca del borde derecho inferior de la pantalla), de modo que al expandirlas se desplegarán hacia arriba y se volverán a colocar abajo al contraerlas.
La Barra de Menús de Photoshop funciona como la de cualquier otra aplicación informática (ya sabéis, menús que se despliegan cuando haces clic en ellos, algunos con submenús anidados, y esas cosas), por tanto no vamos a detenernos en ella, comentaremos lo que se necesario en el momento oportuno. ¿QUÉ PASA SI ME EQUIVOCO? Como podréis imaginar, Photoshop, igual que cualquier programa informático, dispone del comando deshacer, al que se accede a través del menú Edición>Deshacer…; también con el atajo de teclado Control+Z. Otras posibilidades son los comandos del menú Edición>Paso atrás y Edición>Paso adelante y, por último el comando del menú Archivo>Volver que nos devuelve el archivo al estado de la última vez que guardamos. Más adelante hablaremos de la Paleta Historia y, como último consejo en este campo, es conveniente trabajar con copia del archivo original.
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EL CUADRO DE HERRAMIENTAS A la derecha aparecen las herramientas esenciales de Photoshop agrupadas por categorías, tal como se ve en la figura. Cada herramienta tiene sus propios ajustes que aparecen en la Barra de Opciones, en la parte superior de la pantalla (prueba a seleccionar herramientas distintas para comprobar cómo cambia la Barra de Opciones). He aquí un listado de las herramientas de arriba abajo y de izquierda a derecha: 1. Herramientas para Seleccionar, para mover y para recortar: a. Herramienta Marco, sirve para seleccionar zonas de forma regular (si te fijas, en la esquina inferior derecha del icono hay un minúsculo triángulo negro, esto significa que se puede desplegar un menú para cambiar la forma del marco) b. Herramienta Mover c. Herramienta Lazo, sirve para seleccionar formas irregulares (al igual que el marco, el triangulito negro indica que se puede cambiar el tipo de lazo) d. Herramienta recortar e. Herramienta sector 2. Herramientas para Pintar, Borrar y Retocar a. Herramienta parche y tirita b. Herramienta Pincel y lápiz c. Herramienta tampón d. Herramienta pincel de historia e. Herramienta Borrador o goma de borrar f. Herramienta Bote de pintura plana y degradados g. Herramientas de difuminar y perfilar, (enfocar, desenfocar y dedo) h. Herramienta esponja 3. Herramientas de Trazados a. Herramienta de Selección de Trazados b. Herramienta de Textos c. Herramienta Pluma d. Herramienta formas de trazados 4. Diversos a. Herramienta Anotaciones b. Herramienta Cuentagotas o medidor de color c. Herramienta Mano de desplazamiento d. Herramienta Zoom 5. Herramientas de color (para configurar el color frontal y el color de fondo) 6. Herramientas de máscara (para hacer enmascaramientos ocasionales) Supongo que algunas de estas herramientas te parecerán intuitivas y otras un completo misterio (a mí también, no te preocupes), algunas no las llegaremos a usar. Ahora mismo podemos practicar con alguna.
EL EXPLORADOR DE ARCHIVOS: Abrimos la primera foto, sugiero la que se llama pulsera.jpg; para localizarla vamos a usar una utilidad de Photoshop llamada Explorador. Es posible que tengamos el Explorador en el Área de Paletas situada a la derecha de la Barra de opciones, si no es así podemos ir al menú Archivo>Explorar… Entonces aparecerá una ventana (similar al explorador de Windows, con la ventaja de ciertas utilidades sin salir del programa) con los directorios y archivos del disco duro por la que podemos navegar con simples clics de ratón. Esa ventana nos muestra miniaturas de las fotos, por lo que podemos encontrarlas fácilmente. También podemos renombrar los archivos, rotar las fotos, borrarlas, crear carpetas, etc. Para movernos por el disco duro, tenemos un árbol a la izquierda, o una carpetita con una flecha, o un menú desplegable. Nuestro archivo esta en el CD de Prácticas, en el directorio (o carpeta) llamado Fundamentos. Repito, abrimos la foto llamada pulsera.jpg (no es mi mejor foto, lo sé, pero nos divertirá un poco) con un doble clic de ratón.
SELECCIONAR: podemos empezar pulsando durante un instante en la herramienta marco para que se despliegue el pequeño menú y elegir el marco elíptico. Así, podremos seleccionar una cuenta de la pulsera arrastrando el ratón sobre la cuenta que más nos guste (como son todas iguales); veréis que la selección queda resaltada con un óvalo de rayitas discontinuas que parecen moverse (se llaman “hilera de hormigas”). Si no nos sale bien la selección tendremos que anularla, para eso vamos al menú Selección>Deseleccionar y probamos de nuevo, esta vez con la tecla Mayúsculas pulsada al mismo
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tiempo que arrastramos sobre la cuenta (veréis que la selección es un círculo perfecto ahora, y no un huevo como antes). De todos modos, es difícil que hayamos seleccionado la cuenta con precisión, no importa: calculáis que el círculo de hormiguitas sea más o menos del mismo tamaño que la cuenta y colocando el puntero del ratón encima, podréis arrastrar la selección hasta que coincida. Si, de todos modos, la selección no coincide, sin deseleccionar vais de nuevo al menú Selección>Modificar>Expandir, para aumentarla, o Selección>Modificar>Contraer. Pero la técnica más potente es ir la menú Selección>Transformar Selección; aparecerán entonces unos puntos manejadores que se pueden mover para aumentar o reducir la zona seleccionada; si al mismo tiempo, pulsamos la tecla Control, podremos deformar libremente la selección, para alterar su forma y después, moverla, hasta la máxima precisión (para terminar hay que pulsar la tecla Intr.). También podéis añadir nuevas zonas a la selección: sin deseleccionar, pulsando la tecla mayúsculas mientras arrastráis en otras zonas del documento; y, quitar, pulsando la tecla Alt.
PINTAR Y BORRAR (¡no deseleccionéis!): ahora coged la Herramienta Pincel. Habréis notado que la Barra de Opciones cambia según la herramienta. Nos interesa (de momento) ir al segundo menú que hay empezando por la izquierda, el que hay junto a la palabra Pincel y que tiene forma de punto con un número debajo (es la cifra que indica el tamaño del pincel). Si hacemos clic ahí, se despliega una ventana con pinceles de diverso tamaño para que seleccionemos el tamaño que queramos (puede que aparezca un deslizador con el que también es posible determinar el tamaño del pincel). Vamos a coger, por ejemplo, uno de 200 (píxeles o puntos de diámetro) y pintamos. Observaréis que sólo podemos pintar en el área que habíamos seleccionado (el resto está protegido, es decir enmascarado). Ahora os dejo trastear un poquito a vuestro aire con las selecciones y los pinceles (hay cientos de posibilidades), pero primero vais al menú Edición>Deshacer Herramienta Pincel, hasta borrar las pinceladas con las que hemos practicado antes. Después el menú Selección>Deseleccionar para poder seleccionar o emborronar toda la foto a gusto (también podemos ir al menú Archivo>Volver. Podéis abrir otras fotos; ya sabéis: Archivo>Explorar…, navegando por el CD de Prácticas en la carpeta Fundamentos, abrid con un doble clic Buzz.jpg o Tomates.jpg. Con Buzz os voy a sugerir algo: teniendo la herramienta Pincel, haciendo clic en el Cuadro de colores podéis pintar con vuestro color favorito y, después, en la Barra de opciones también hay otro menú llamado Modo, que estará en “Normal”, desplegadlo con un clic y elegid otros modos: •
Los modos Aclarar, Trama o Sobreexponer (que van juntos) iluminan la imagen como si ésta tuviera una luz interior del color elegido, se parecen pero actúan con sutiles diferencias (NOTA: estos modos sólo funcionan si el color elegido no es negro).
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Probad también los modos Superponer o Luz Suave
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Otras dos opciones parecidas son Tono y Color, que sólo cambian a Buzz, pero no el fondo blanco (siempre que tengáis un color diferente del negro). El modo Tono respeta los grises, y el modo Color también colorea los grises (sólo respeta los blancos puros).
¿Curioso, verdad? (Probad otros modos). Podéis variar también la transparencia de la pintura en la Barra de Opciones manejando el menú Opacidad (aconsejo primero devolver el modo a Normal). La imagen Pinturas.JPG es muy adecuada para practicar diversas herramientas de selección…
TEXTOS: Más adelante volveremos sobre los textos, en este momento nos limitaremos a conocer la herramienta, podemos escribir la palabra “Buzz” y comprobar que, en la Barra de Opciones podemos elegir el tipo de letra, el estilo, el tamaño y muchas otras cosas más. ZOOM: para ver la imagen más grande o más pequeña, podemos seleccionar la Herramienta Zoom, cuyo icono tiene forma de lupa. Con la lupa seleccionada y la tecla Alt podemos hacer que la lupa sirva para acercarnos o para alejarnos de la imagen; podemos usar la barra de opciones para obtener varias vistas predefinidas (encajar en pantalla, píxeles reales y tamaño de impresión); podemos arrastrar la lupa sobre el área a ampliar o podemos pulsar simultáneamente las teclas Control y + o Control y -.
Por último, podemos usar la paleta Navegador situada en el alguna parte de las paletas. Con el deslizador de la parte inferior del Navegador ampliaremos o reduciremos la imagen al tiempo que un cuadro rojo nos muestra en la miniatura la parte visible en la ventana. Si colocamos el ratón sobre el cuadro rojo, éste se convertirá en una mano y al arrastrarla, nos moveremos rápidamente por la imagen.
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MANO: es una herramienta muy simple que nos permite mover la imagen dentro de la ventana, cuando la tenemos muy ampliada, es útil y sencilla y aparece siempre que mantengamos pulsada la barra espaciadora al tiempo que arrastramos con el ratón, aunque tengamos otra herramienta seleccionada.
LAS PALETAS FLOTANTES Ya hemos hablado de ellas más arriba, para censurar lo que ocupan en nuestra pantalla, ahora vamos a ver para qué sirven… Se llaman Paletas flotantes, porque se quedan delante de la imagen; se agrupan en ventanas, pudiendo cambiar de una a otra por medio de las solapas o lengüetas que las identifican. A menudo, se asocian a las herramientas. Se pueden contraer o expandir, cerrar para que no estorben y abrir desde el menú Ventana. Para mi, las que destacan son la paleta Historia, la Paleta Color junto a la Paleta Muestras (de color) y las dos paletas relacionadas, Capas y Canales:
Las paletas flotantes más relevantes de Photoshop (puede que las paletas estén en otro lugar de tu pantalla).
HISTORIA: os va a encantar esta paleta, es como una máquina del tiempo. Todo lo que hacemos con la imagen se va anotando en esta ventana y si nos equivocamos o cambiamos de opinión, podemos deshacerlo o rehacerlo, no una, sino hasta 20 veces (o más): haciendo clic en la última acción que queremos recuperar volveremos al estado de la imagen en aquel momento. Al cerrar la imagen, la paleta Historia se borra, pero podemos hacer que algunas cosas queden registradas si hacemos una Instantánea (pulsando en la cámara de fotos en miniatura que hay en la parte de debajo de la paleta Historia).
COLOR Y MUESTRAS: Nos permiten elegir los colores con los que vamos a trabajar, la diferencia es que nos enseñan los colores de formas diferentes. Estas paletas trabajan en combinación con la Herramienta de Color, que está formada por dos cuadros superpuestos (Color frontal y Color de fondo). CAPAS Y CANALES: estas dos paletas son complicadas, pero muy importantes, de modo que iremos aprendiendo cosas sobre ellas a medida que vayamos avanzando el curso. •
Capas: actúan como su apilásemos unas imágenes sobre otras (pensad en aquellas muñecas de papel, las Mariquitas, que había que vestir con trajecitos recortados). Las capas pueden ser opacas, y tapar
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lo que hay debajo, o pueden ser parcialmente transparentes, dejando ver sólo algunas zonas inferiores, o pueden ser translúcidas… La verdad es que la forma en que se combinan las capas es interminable y son fundamentales para hacer montajes, correcciones y diversos efectos fotográficos. La primera vez que abrimos una foto JPEG en Photoshop, sólo tiene una capa llamada Fondo; además, sólo algunos tipos de imágenes pueden ser guardadas con capas. •
Canales: son parecidos a las capas, pero están formados por los colores básicos con los que se crea una imagen. Hay varias formas de manejar los colores (por eso, los canales pueden cambiar) pero los dos tipos fundamentales son RGB y CMYK. RGB es una foto hecha con los tres colores que proyecta el monitor del ordenador: Rojo, (Red), Verde (verde, en inglés Green) y Azul (Blue). La otra opción, CMYK, es la imagen compuesta con las cuatro tintas de la impresora: Cian (Cian, un tipo de azul claro), Magenta (más o menos un rosa fucsia fuerte), Amarillo (no se ve, pero pone amarillo, la Y viene de Yellow) y Negro (la K viene de Black). Si la foto es en Blanco y Negro, el ordenador la denomina Escala de Grises, y sólo tiene un canal, el negro. Podemos conocer y cambiar el modo en que se forman los colores en el menú Imagen>Modo. Es posible que, en la paleta Canales, aparezcan otros aparte de los de color, se trata de los canales de tinta especial y los Canales Alfa de los que luego hablaremos; pero, básicamente, contienen información extra, diferente de las referencias cromáticas.
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SEGUNDA SESIÓN: TIPOS DE IMAGEN DIGITAL Los ordenadores pueden manejar muchos tipos de imagen digital, algunas de ellas son el Vídeo Digital (DV), las animaciones (GIFs animados) y las imágenes estáticas. Éstas últimas son de dos clases fundamentales:
IMÁGENES VECTORIALES Los gráficos vectoriales se usan en dibujo técnico y en diseño grafico de carteles. Podrían describirse como gráficos compuestos de líneas y colores definidos matemáticamente; tienen los bordes nítidos siempre, aunque ampliemos la imagen, y las líneas se controlan por medio de puntos de anclaje (que dan las coordenadas) y manejadores (que dan vectores, es decir la dirección y la potencia). Ya sé que expresado así es difícil de entender, la cosa se entiende mejor con ejemplos. AutoCAD y Corel Draw son aplicaciones muy populares en el entorno Windows, en cambio, Photoshop no es un programa de dibujo vectorial, si bien, tiene algunas herramientas sencillas llamadas Trazados y los propios Textos son también imágenes vectoriales.
A la derecha un ejemplo de programa de dibujo vectorial, muy sencillo, integrado en la Suite de StarOffice. A la izquierda una línea vectorial comparada con una en mapa de bits; la vectorial se verá siempre nítida, por mucho que aumentemos la imagen, ya que el ordenador recibe las instrucciones matemáticas para redibujarla “al vuelo”; una en Mapa de bits comenzará a verse con los bordes dentados a medida que la ampliamos, cada uno de esos cuadraditos negros y grises son los bits que la componen, también llamados píxeles.
IMÁGENES DE MAPA DE BITS Como se ve en el ejemplo anterior, las imágenes en mapa de bits están compuestas por pequeños cuadrados coloreados que dan la forma. Cada cuadradito o punto de información, que es como la baldosa de un mosaico, se llama píxel. Photoshop es un programa especializado en manejar imágenes hechas con píxeles. En fotografía digital, los píxeles son el resultado de la información que recibe el sensor de la cámara en cada una de sus celdas. Cada celda da un píxel. Cuantas más celdas tenga la cámara, más píxeles y cuantos más píxeles, más definición. Una aclaración, mayor resolución indica más detalle, pero no necesariamente más calidad, ya que la calidad (dejando al margen al fotógrafo), también depende de la óptica, y del sensor de la cámara, entre otras cosas. En Photoshop se usa la expresión Modo Mapa de Bits, para referirse a las fotos de blancos o negros puros. Sin colores ni grises; en esos casos, yo prefiero hablar de dibujos en “arte de línea”.
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DIMENSIONES, TAMAÑO Y RESOLUCIÓN DE LAS FOTOS Pongamos mi cámara, que tiene un sensor con cuatro millones de celdas, es decir cuatro mega píxeles; y las fotos que hago con ella tienen una retícula de 2.272 píxeles de lado por 1.704 píxeles de alto. Esto es lo que se llama coloquialmente resolución de la cámara, pero, en realidad esto es la capacidad de captación de la cámara, la resolución es otra cosa. Imaginaos que tenemos que embaldosar una sala rectangular de 40 metros cuadrados y pretendemos que el suelo tenga un dibujo. Si usamos baldosas de 33 cm. el dibujo tendrá poco detalle, porque sólo podremos poner 360 baldosas. Si usamos las de 25 cm. podremos hacer el dibujo con 640 baldosas. A medida que pongamos baldosas más pequeñas, necesitaremos más y más, pero el dibujo se irá definiendo. Imaginad que, como los romanos, conseguimos baldositas de un centímetro (teselas), entonces necesitaremos 400.000 piezas y podremos dibujar con bastantes pormenores. Id más allá, pensad en un salón con 4.000.000 de baldositas (de un milímetro).
Bien, si lo hemos entendido hasta aquí, ya tenemos la mitad del problema resuelto. Ahora vamos a pensar al revés, suponeos que tenemos que hacer el mismo dibujo, también con 4.000.000 de baldosas, pero de 33 cm. Daos cuenta de que el detalle de la imagen será el mismo, pero el tamaño no. Ahora la imagen supera los 750 metros de largo por 600 metros de ancho (creo que nuestra sala se ha convertido en un estadio). Con las piececitas pequeñas, teníamos 1000 baldosas por metro, y con las grandes tenemos tres baldosas por metro. Todo este rodeo es para que entendáis por qué se dice que una imagen tiene tantos píxeles por pulgada, es lo mismo que baldosas por metro. De hecho un píxel no tiene una medida real, depende de la resolución; es como las baldosas, podemos elegir su tamaño. Por ejemplo la resolución estándar en pantalla es de 72 píxeles por pulgada (72 ppp), mientras que la resolución típica de una imagen digital impresa es de 300 píxeles por pulgada (300 ppp).
Para ver esto en Photoshop vamos al menú Imagen>Tamaño de imagen, y se abre una ventana donde podemos ver las dimensiones en píxeles, el tamaño del documento y la resolución. •
Las Dimensiones en Píxeles de una foto se determinan con el número de puntos o píxeles que suma una imagen (por ejemplo, 4 mega píxeles, ó 6 mega píxeles en total, y, además, el número de píxeles de anchura por el número de píxeles de altura).
•
El Tamaño del Documento se refiere a sus medidas en centímetros o pulgadas (generalmente después de pasada a papel: por ejemplo, 10x15 cm., o 18x24 cm., aunque se pueden seleccionar otras unidades de medida).
•
La Resolución es el número de píxeles por unidad de medida (por ejemplo 72 píxeles por pulgada en un monitor, o 300 píxeles por pulgada en una foto sobre papel). Decimos que 6 megapíxeles tiene “más resolución” que 5 megapíxeles porque a igual tamaño sobre papel mete más píxeles... más puntos de información..., pero es una forma coloquial de hablar. Podemos preestablecer las resoluciones para los documentos nuevos en el menú Archivo>Preferencias>Unidades y Reglas. Para comparar la misma foto hecha a diferente resolución, podéis abrir Photoshop, y en el menú
Edición>Explorar,
abrir
el
CD
de Prácticas,
el
directorio
Imagen/Compresión, las fotos llamadas Mantis2.psd y Mantis3.psd.
llamado
Prácticas/Tipos
de
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FORMATOS QUE MANEJA PHOTOSHOP Ahora explicaremos que, dentro de las imágenes de Mapa de Bits existen diversos formatos; todos ellos los maneja Photoshop de modo que nosotros no notaremos casi la diferencia. Empezaremos por los tres tipos de imagen que utilizan las cámaras digitales cuando hacen fotos y después hablaremos del formato nativo de Photoshop: •
JPEG o JPG (Joint Photographic Expert Group): Es el formato más común, el que elegimos casi siempre. Su ventaja radica en que reduce el la cantidad de memoria que ocupa el archivo por medio de la compresión. Comprimir una foto con JPEG es muy eficaz; además, se puede aumentar la compresión a gusto del usuario para que la cantidad de memoria sea menor. La escala va de 10% a 100% de calidad, siendo 10% la calidad mínima y 100% la calidad máxima (a veces va de 1 a 12, pero sería lo mismo). Una foto de 6 mega píxeles comprimida en JPG a máxima calidad ocupa 2 MB, mientras que la misma foto con mínima calidad se reduce a 150 KB. La desventaja del formato JPG es que la compresión destruye datos, la imagen se deteriora, por eso sólo es recomendable cuando la cantidad de megas es primordial, por ejemplo para enviar correos electrónicos o para colocar fotos en páginas Web. De todos modos, si usamos la máxima calidad, como simples aficionados que somos, tendremos suficiente y nadie va a notar la compresión. Podéis suponer que la compresión JPG es como recoger un póster para que os quepa en la carpeta. Si sólo lo enrolláis, sufrirá poco, pero si lo dobláis, estaréis estropeando el póster. Cuantas más veces lo dobléis y desdobléis, más se arrugará y deteriorará. Grabar muchas veces una imagen JPG puede producir este efecto, degradando la imagen. De todos modos al abrir una imagen JPG en Photoshop se descomprime y ocupa una cantidad de memoria muy superior al archivo original. Las cámaras digitales, a veces, no dejan cambiar el nivel de compresión JPG; otras, con más opciones, permiten elegir tres niveles de compresión JPG, que se suele ser 1º: buena calidad, poca compresión; 2º media calidad, media compresión y 3º baja calidad, alta compresión. Mi consejo es que, si no tenemos problemas de capacidad con la memoria de la cámara, elijamos siempre la mejor calidad y el mayor tamaño.
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TIFF o TIF (Tag Image File Format): Es un formato estándar y sin compresión, lo que significa que es compatible con todo tipo de aplicaciones informáticas y que las imágenes no pierden calidad y admite capas. Además, el archivo guarda una etiqueta oculta (tag significa eso, etiqueta), con datos sobre las especificaciones del archivo. La desventaja es que ocupa mucha memoria, unos 18 MB para 6 mega píxeles. Si vuestra cámara permite hacer imágenes TIFF, reservadlas para ocasiones especiales, ya que la tarjeta de memoria no dará para muchas fotos, además, la obtención del archivo es lenta, y la maquinita puede estar más de medio minuto bloqueada con esa labor.
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RAW (Crudo): sólo las cámaras semiprofesionales o profesionales usan este formato. La cámara graba en la tarjeta de memoria los datos en bruto, sin procesar, y luego “se cocinan” en el ordenador, que consigue mejores resultados que la cámara. El proceso es complicado y no todos los programas pueden hacerlo. Photoshop 7 utiliza un módulo añadido para esto (Adobe Camera RAW). Se dice que el formato RAW es equivalente al negativo en digital, porque a partir de él pueden obtenerse resultados muy diversos según el proceso (a modo de interpretaciones personales). En mi opinión, al menos de momento, es un formato que queda fuera de nuestro alcance.
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PSD (Archivo Photoshop): Es el formato nativo de Photoshop y el más adecuado para trabajar en una foto para su edición, ya que soporta capas, canales alfa, canales de texto y trazados vectoriales… No se pierde calidad y es un estándar soportado por casi todos los programas de diseño gráfico
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(incluidos los de Vídeo Digital). Su única desventaja es el tamaño del archivo, con fotos de 6 mega píxeles es de unos 11 MB (por capa).
20 18 16 14 12 10 8 6 4 2 0 JPG (maxima calidad)
JPG (minima calidad)
TIFF
RAW
PSD
Tamaños de los archivos en MB de la misma foto de 6 mega píxeles en diferentes formatos
OBTENER LAS IMÁGENES Podemos imaginar tres situaciones en las que solemos obtener imágenes para Photoshop: desde una cámara digital, desde un escáner, o fotos que ya estén en el disco duro. En dos de los tres casos explicaremos el proceso desde dentro de Photoshop; sin salir del programa.
1. OBTENER LAS IMÁGENES DESDE LA CÁMARA DIGITAL El método más sencillo es conectar la cámara al puerto USB. Si tenemos Windows XP, el ordenador reconocerá la cámara y abrirá un cuadro de diálogo preguntando qué deseamos hacer. Podemos abrir la carpeta que contiene las imágenes y trasladarlas al lugar que escojamos en el disco duro. Desde allí, bastará pulsar el botón derecho del ratón y desplegar el menú Abrir con…>Photoshop 7.
Abriendo una foto con Photoshop, desde el escritorio, a través del menú del botón derecho del ratón
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2. OBTENER LAS IMÁGENES DE UN ESCÁNER Si vamos a usar un escáner, también podremos hacerlo directamente desde Photoshop. Esto es posible gracias a que la mayoría de los escáneres tienen un estándar llamado TWAIN que se ubicará en un menú de Photoshop al instalar el dispositivo: Archivo>Importar>escáner TWAIN (siendo “escáner TWAIN” una expresión genérica que variará según el modelo) y se abrirá una aplicación secundaria distinta de Photoshop, desde la que controlaremos el proceso de escaneado. El manejo de la aplicación puede ser diferente según el escáner. Lo ideal es escanear a una resolución adecuada según el destino que demos a la imagen. Una resolución de 300 ppp es la mejor para imprimir (aunque los escáneres permiten resoluciones mayores, no son necesarias y ocupan mucho espacio en la memoria; a no ser que pensemos en ampliar la imagen o alguna parte de la misma). Si sólo vamos a usar la imagen en pantalla (multimedia, web, correo electrónico…), bastará una resolución de 72 ppp. Si no sabemos qué uso vamos a dar a los archivos, optaremos por la mejor resolución. Por otra parte, si escaneamos dibujos en blanco y negro puros, es decir en “Arte de Línea”, es más efectivo elegir el modo escala de grises, para evitar el dentado de las imágenes y la pérdida de detalle.
Acción para escanear una imagen directamente desde Photoshop
Al terminar el escaneado y cerrar la aplicación secundaria, se genera un nuevo archivo Photoshop que podremos procesar a nuestro gusto.
3. OBTENER LAS IMÁGENES DEL DISCO DURO Para abrir imágenes, desde Photoshop, lo más cómodo es usar el Explorador de archivos para buscar la imagen designada en el disco duro o en la propia tarjeta de la cámara: menú Archivo>Explorar. Así tendremos una navegación más cómoda y rápida, ya que no será preciso salir de la aplicación.
José-Manuel Benito Álvarez
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MODOS DE COLOR Y CANALES DE COLOR La representación del color es uno de los temas más peliagudos de la fotografía digital. Baste decir que una misma imagen puede parecer muy diferente en función del modo de presentarla ante nuestro ojos: la cámara, el monitor, el papel fotográfico, una imprenta profesional, la impresora… A veces, dos equipos iguales ofrecen unos tonos diferentes; ocurre, incluso, que la misma impresora cambie el modo de representar el color en función del tipo de papel o la marca de la tinta. Al método seguido para igualar la representación del color digital al margen de Photoshop se le denomina Calibración y si depende de Photoshop se llama Gestión de Color. Desgraciadamente, tanto una como otra son complejas y necesitan un equipo adecuado y un profesional, a pesar de no garantizar los resultados, por eso no vamos a tratar ese tema. Por otro lado, Photoshop y, en general, todos los programas profesionales de diseño, tienen varios modos de presentar el color. En todos los casos, la imagen se crea fundiendo tres o cuatro colores primarios que generan toda una Gama de colores secundarios. Cada uno de los colores básicos tiene su propia capa llamada Canal (aunque realmente son capas, este es el modo de no confundirnos en el lenguaje), y cada modo de color tiene diferentes canales o colores primarios. Color RGB: Es el modo natural del monitor (también de la cámara digital, el escáner e incluso, nuestros ojos). RGB proyecta tres rayos de luz, uno rojo (R), otro verde (G) y otro azul (B). Si miramos muy de cerca una televisión veremos que se compone de puntitos de estos tres colores (en un ordenador también, pero los monitores tienen más resolución y los puntitos son más pequeños y es más difícil verlos). RGB ofrece una gama de colores bastante extensa y, en mi opinión, es el mejor entorno de trabajo, por eso, en este curso siempre trabajaremos en modo RGB (salvo alguna excepción).
Color CMYK: Es el modo natural de las impresoras domésticas y las imprentas profesionales. En este caso el color no se forma con rayos de luz, sino con tinta, por eso los colores primarios son los cuatro que contiene el depósito de tinta de nuestra impresora o las planchas de la imprenta y que son los cuatro canales de la imagen (de ahí que también se llame cuatricromía). Por un lado, está el cartucho de
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tinta negra (K), por otro los colores, que pueden estar en cartuchos independientes, o en un solo cartucho, aunque los depósitos sean distintos: Cian, Magenta y Amarillo.
Como el modo CMYK no consigue tantos matices como RGB (su gama es inferior), si vamos a imprimir las imágenes en la impresora o si las vamos a mandar a una imprenta, es conveniente comprobar antes el resultado.
RGB obtiene una gama de colores más extensa que CMYK
Podemos ir al menú Imagen>Modo>CMYK, para convertir al modo de la impresora y comprobar como cambian los tonos; pero, es probable que suframos una pérdida en la gama cromática que sólo recuperaríamos con el comando Deshacer. Otra opción es no cambiar de modo, sino simularlo, tomando un rodeo. Para practicar esto abriremos el archivo Prueba de color.psd (con el Explorador de archivos será más fácil encontrarlo: id al CD Prácticas, al directorio 2 Tipos de Imagen y, dentro de él, al directorio Modos de Color): 1.
Si ya habéis abierto el archivo, id al menú Vista>Ajuste de Prueba>Espacio de Trabajo CMYK, con este comando le estamos diciendo a Photoshop que tenemos planeado sacar una copia de la foto por la impresora
2.
En segundo lugar, menú Vista>Colores de Prueba, así estamos pidiendo al programa que simule el aspecto de la foto al imprimirla. Comprobaremos los cambios a ojo de buen cubero.
3.
Para estar más seguros podemos activar el menú Vista>Avisar sobre Gama, y Photoshop resaltará en gris aquellos colores que sí se ven en modo RGB pero no en CMYK. Al imprimirlo, el ordenador elegirá el color más parecido, pero no igual.
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Los intensos azules RGB de esta fotografía no pueden ser reproducidos adecuadamente por la impresora. La gama CMYK es más limitada y Photoshop nos avisa de que tendrá que cambiarlos por otros parecidos, pero no iguales
¿Por qué yo prefiero RGB? RGB tiene una gama más extensa de colores, es el modo apropiado para cualquier imagen destinada a Internet, vídeo, televisión, etcétera. Muchos de vosotros estaréis acostumbrados a sacar vuestras fotos por impresora, pero la mayoría de las impresoras domésticas de inyección de tinta se instalan con un controlador propio que actúa como si fuera un dispositivo RGB. Igualmente la cámara capta las fotos en RGB y es así como las proyecta el monitor. Por mi parte, yo imprimo muy pocas fotografías, ya que me parece caro y no estoy contento con el resultado. En lugar de eso, las llevo a un laboratorio donde las revelan por métodos fotoquímicos (idénticos a los de fotografía con carrete). Como el sistema consiste en exponer la imagen sobre un papel fotosensible que reacciona a los rayos de un proyector, también en este caso concreto, RGB es el modo más conveniente. Por último, muchos de los filtros o efectos de Photoshop no marchan bien o, simplemente, no funcionan en modo CMYK. En mi opinión, CMYK sólo es adecuado en el caso de que vayamos a enviar trabajos a una imprenta profesional.
Color LAB: Este sistema sigue un concepto distinto de los anteriores ya que separa un canal de Luminosidad, en el que está registradas las luces de la imagen, y dos canales de color, para mí sumamente misteriosos llamados Canal A (que mezcla los colores que van del verde al rojo) y Canal B (cuyos colores van del azul al amarillo). El Color LAB se usa muy poco, y sólo de un modo temporal (nunca es el destino de una imagen), aunque es útil para algunos efectos en los que hay que discriminar los colores del brillo y es el de mayor gama cromática por lo que su uso no supone pérdida de información. Escala de Grises: Es un modo sin colores, por lo que sólo tiene un canal que recoge 256 tonos de gris. Sirve para la clásica foto en blanco y negro, pero también es el paso para obtener duotonos o pasar al “arte de línea”.
CAMBIAR DE MODOS DE COLOR Ésta es una tarea sencilla porque sólo hay que ir al menú Imagen>modo>… y seleccionar el comando deseado. No obstante conviene tener en consideración que pasar de RGB a CMYK o a Escala de Grises ocasionará la pérdida de ciertos tonos o de los colores, por eso es conveniente hacer una copia de seguridad antes. Asimismo, si tenemos capas fusionadas de algún modo especial en RGB, al pasar a CMYK los resultados pueden ser inesperados por lo que conviene eliminar las capas yendo al menú
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Capa>Acoplar imagen. Por otra parte, algunos filtros, efectos o acciones sólo son accesibles desde determinados modos de color.
CANALES ALFA Y MÁSCARAS DE CAPA Estos conceptos os van a resultar bastante extraños, en realidad, a mí me cuesta mucho comprender su funcionamiento y sólo he comenzado a cogerles el tranquillo con la práctica. Un canal alfa es, en realidad una capa oculta que guarda información. Por ejemplo, si tú has hecho una selección de un fragmento de una imagen muy complejo y, cuando la has usado, piensas que podría resultarte útil más adelante, la única manera de guardarla es convertirla en un canal alfa. Éste no es más que un dibujo de tu selección archivada en la paleta Canales, debajo de los canales de color, pero invisible en la foto. Podrás recuperarla cuando lo necesites. En este curso, algunos ejercicios requerían hacer selecciones y recortes muy complicados y yo los he guardado como canales alfa para que vosotros podáis usarlos fácilmente. Una máscara de capa es parecida. La única diferencia es que se guarda de otra manera. En lugar de asociarse a los canales de color, se enlaza con las capas. Sirven para enmascarar, es decir, ocultar zonas de la capa que no queremos borrar, pero que tampoco queremos que se vean. Enmascarar también es proteger una zona de la capa o de la imagen de las acciones que vayamos ha hacer. Es como cuando barnizamos las ventanas y ponemos cinta adhesiva en los bordes de los cristales para que no se manchen con los brochazos.
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TERCERA SESIÓN: PROCESOS BÁSICOS PARA MEJORAR LAS IMÁGENES REENCUADRAR El reencuadre puede tener dos objetivos muy concretos: El primero es cambiar la relación altura/anchura de las imágenes, ya que la foto no siempre tendrá como destino su proyección en una pantalla. A veces habrá que integrarla en una publicación (una revista, un periódico) y habrá que adaptarse al hueco o caja de la página; es posible que deseemos ampliar un detalle o componer un montaje. En esos casos, el formato original de la toma puede no ser el adecuado. Además, si vamos a una tienda de revelado, el tamaño de papel puede tener una proporción altura/anchura diferente de la de nuestra foto digital; en la tienda recortarán según les venga en gana, por eso es mejor llevar las fotos ya reencuadradas (así no cortarán partes que consideramos esenciales).
Un recorte sin cuidado puede eliminar partes importantes de la imagen
Reencuadrar es también un medio de componer una foto que no sea exactamente lo que deseamos; por ejemplo: eliminar elementos no deseados con el reencuadre, si sale demasiado techo, si algún objeto distrae la atención o si deseamos alterar la orientación del encuadre:
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El encuadre horizontal mejora la composición de esta foto Aunque este no es un curso de fotografía (y yo no soy un experto), como los reencuadres, con el objeto de recortar las fotos, son un tema interesante, me permito el atrevimiento de dar una serie de consejos básicos: •
Buscar motivos sencillos y patrones compositivos simples; que no haya demasiados elementos, que el espectador recorra la foto de un modo ordenado y sepa qué es lo importante enseguida.
•
Concentrarse en lo esencial, evitando que entren en cuadro elementos secundarios demasiado llamativos o que roben la atención (no hay que perder de vista el entorno y repasar lo que queda dentro del plano).
•
La norma más básica para un fotógrafo aficionado es evitar que los centros de interés queden en medio de la imagen. Lo mejor es buscar puntos un poco laterales de la foto, para eso se usa Regla de los Tercios, llamada así por la forma de dividir la foto. Por ejemplo, el horizonte, si se ve, nunca debe partir la foto por la mitad, debe ir por la línea del tercio superior o del inferior. La Regla de los tercios es aplicable a todos los géneros fotográficos.
•
Componer con el color: significa que el centro de interés de la foto puede lograrse también a través de las combinaciones de colores, y que ciertos colores (el rojo, por ejemplo) enseguida atraen la atención de la vista, por lo que deben reservarse para los elementos importantes, y evitarse en los demás (si es posible).
•
Antes de tomar la foto yo creo que hay que acostumbrarse a aprovechar los recursos de la cámara: probar de vez en cuando el encuadre vertical, el flash de relleno a plena luz del día, el zoom, el macro. Por supuesto, hay que revisar las fotos en la pantalla para comprobar que están bien y hacer varias fotos cambiando de posición.
•
Experimentar y Practicar es algo recomendable en la fotografía digital, porque no perdemos nada, salvo unos segundos, y que alguien nos llame pesado o nos miren mal.
•
Romper las reglas: como las normas no son la ley, podemos romperlas si nos da la gana y encuadrar o componer como queramos.
El instrumento utilizado para reencuadrar es la llamada Herramienta Recortar. Para practicar abriremos la foto NiñoMa.jpg, situada en el directorio del CD Practicas/Procesos Basicos/Reencuadrar. Os recuerdo que, además del menú Archivo>Abrir, tenéis el Explorador de Archivos que puede resultaros más cómodo: menú Archivo>Explorar. Repito, abrimos NiñoMa.jpg y seleccionamos la Herramienta Recortar. Fijaos bien en la barra de opciones porque es muy práctica. Tiene casillas en las que podemos indicar la Anchura, la Altura y la Resolución; más a la derecha tenemos dos botones, uno en el que se lee Dimensiones (al pulsarlo rellena las casillas con las dimensiones de la foto que esté abierta en primer
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plano y las recuerda para futuros usos) y otro que dice Borrar (al pulsarla borrará los datos de las casillas). Si dejamos las casillas en blanco (o las borramos) podremos recortar libremente la foto; si rellenamos las casillas, obligaremos a Photoshop a recortar la foto según esos parámetros. Esto es muy útil si queremos unas proporciones concretas. Por ejemplo, para conservar las de la pantalla de un ordenador, que son 640 en anchura y 480 en altura (o al revés si el formato es vertical). Si dejamos la casilla resolución vacía, Photoshop ignorará las unidades de medida y no hará cambios en el tamaño; pero si la rellenamos, el programa tendrá que alterarlo (yo, casi siempre la dejo vacía).
Como la foto del niño tiene un encuadre mejorable, vamos a cambiarla por una en vertical, pero respetando las proporciones del formato y siguiendo los consejos dados arriba sobre composición. 1.
Para eso, RELLENAMOS la casilla Anchura con la cifra 480 y la casilla Altura con 640. La casilla resolución la dejamos vacía para que no cambie el tamaño de la foto.
2.
A continuación, ARRASTRAMOS el ratón por la foto seleccionando el área que queremos conservar. Veréis que, al terminar de arrastrar, se producen varios cambios:
3.
a.
Lo que queda fuera aparece como velado o matizado en gris (u otro color).
b.
El cursor del ratón cambia según la zona de la ventana en la que esté. Podemos cambiar el tamaño del recuadro de recorte arrastrando los cuadraditos de las esquinas; podemos girar el área de recorte; o moverla situando el ratón dentro de la zona seleccionada.
c.
También la barra de opciones ha cambiado. De momento, nos interesan los botones de la derecha, el que tiene forma de “Prohibido de color rojo” deshace la selección y anula los posibles cambios; el que tiene forma de “Visto de color verde” aplica el recorte.
Cuando estemos satisfechos con la selección, ACEPTAMOS pulsando la V verde o la tecla Intr. Podemos repetir la práctica con la foto Sforza.jpg, también en el directorio del CD
Practicas/Procesos Basicos/Reencuadrar. En este caso, el paisano que cuidaba el caballo nos distrae y queremos dejarle fuera de plano; pero, de nuevo respetando las proporciones de pantalla 640x480 (las proporciones de Anchura/Altura al contrario que antes). Seguimos el mismo procedimiento (para eliminar los datos que han quedado del recorte de la foto anterior, pulsamos primero la tecla Borrar de la barra de opciones de la Herramienta Recorte; después introducimos los nuevos datos).
Recortar es una buena forma de recomponer y mejorar una foto
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CORREGIR NIVELES Es muy común que, bien por un fallo nuestro, bien porque la cámara no funcionó adecuadamente, o por cualquier otra causa, las fotografías parezcan apagadas, como si careciesen del contraste y el color adecuados. En la mayoría de los casos, sin entrar en cuál fue la causa del error, casi todos los programas de fotografía digital pueden corregir esto de una forma automática; Photoshop, además, proporciona herramientas manuales mucho más flexibles.
NIVELES AUTOMÁTICOS Para experimentar, abriremos la fotografía Elsa.jpg, situada en el directorio CD Practicas/Procesos Basicos/Niveles. Una vez abierta vamos al menú Imagen>Ajustes>Niveles Automáticos. Ya está. Existe otros comandos automáticos similares, podemos deshacer la mejora de Niveles y probarlos. Conviene revisarlos para saber qué resultado nos compensa más. Vamos al menú Archivo>Deshacer Niveles Automáticos y los probamos. Primero, menú Imagen>Ajustes>Contraste Automático; después (deshaciendo otra vez), probamos el menú Imagen>Ajustes>Color Automático. Es posible que con esto ya estemos satisfechos, pero habrá quien quiera ir más allá. para eso están los controles manuales, cuyas posibilidades pueden ser casi ilimitadas.
NIVELES MANUALES Como acabamos de decir, hay muchas posibilidades, sin embargo, aquí sólo trataremos una, los Niveles. Pero antes hay que comprender cómo funcionan, al menos ligeramente, y para eso tenemos que enfrentarnos al Histograma que podemos consultar en el menú Imagen>Histograma (además se puede ver y manipular en el menú Imagen>Ajustes>Niveles). En principio, debe bastarnos con saber que es una gráfica con forma montañosa, que representa la luminosidad de cada píxel de la foto; al ser una herramienta habitual en fotografía, muchas cámaras lo tienen en sus menús.
Para entenderlo debemos mirar la banda con el degradado que hay bajo la gráfica. Ese rectángulo muestra los 256 tonos de gris de la imagen, desde el negro hasta el blanco, y encima la proporción que hay de cada tono. Como veis, en el ejemplo hay dos cúspides (que indican que hay mucho gris oscuro y mucho más gris claro), y tres zonas bajas, tres hundimientos (que indican que no hay negro, hay poco gris intermedio, y tampoco hay blancos). Por lo general, si el histograma no está completo (y en este vemos que no, porque faltan los negros puros y los blancos puros), la imagen necesita corrección.
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Del mismo modo, el histograma nos indica si la foto está oscura o quemada. Estaréis pensando que eso se puede ver sin el histograma, y es cierto en casos muy evidentes. Pero no es tan fácil si el error es sutil. Por eso los profesionales usan tanto el histograma. Podemos practicar interpretando histogramas de las fotos del CD Practicas o las vuestras. El Histograma perfecto debería tener forma de Campana y caer suavemente hacia cada uno de los lados. Sin embargo, no siempre lo perfecto es lo más bonito.
Una foto quemada o sobreexpuesta tendrá el histograma ladeado hacia la derecha; una foto oscura o subexpuesta lo tendrá hacia la izquierda. En general los datos son utilizables siempre y cuando no se formen las cúspides en los extremos (blanco o negro), ya que en esos casos los píxeles han perdido toda la información y no se pueden recuperar. Por eso, es conveniente revisar el histograma en la cámara por si hubiera que repetir la foto.
Vamos ahora a practicar con una o dos fotos. La primera es la foto que ya teníamos abierta Elsa.jpg. Abrimos el menú Imagen>Ajustar>Niveles, y veremos el Histograma, pero justo bajo la gráfica hay tres triangulitos o Deslizadores que podemos mover a lo largo del esquema: uno para las sombras, otro para los tonos medios y otro para las luces. Lo primero es lograr un contraste adecuado, después mejoraremos la luminosidad.
1.
Mejorar el contraste: hay que mover los deslizadores de ambos extremos justo hasta que lleguen donde empieza a haber píxeles en el histograma.
Para controlar mejor la operación, pulsaremos la tecla Alt mientras arrastramos los deslizadores de la luz y de las sombras, veremos como la imagen se vuelve completamente negra o completamente blanca. Por ejemplo, si arrastramos el controlador de las luces mientras pulsamos Alt, la foto se pondrá negra, al mover el triangulito irán apareciendo puntitos claros que nos alertan de que esos píxeles están perdiendo información. En cuanto veamos que los puntitos se vuelven manchas, es que nos estamos pasando y debemos parar. Lo mismo pasa con el deslizador de las sombras, solo que la imagen se vuelve blanco y los puntitos oscuros. Esta es una forma de saber con certeza que no estamos dañando la imagen en lugar de corregirla.
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2.
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Mejorar la luminosidad: esto es más subjetivo, se trata de arrastrar el deslizador central hacia un lado o hacia otro (muy sutilmente), hasta que veamos, a ojo, que la luminosidad es la adecuada. Siempre que nos equivoquemos podremos deshacer de varios modos, bien pulsando el botón Cancelar, bien pulsando Alt y el botón Cancelar se convierte en el botón Restaurar, o bien por pasos pulsando las teclas Control+Z al mismo tiempo. Podemos hacer estos dos pasos en todos los canales a la vez o canal por canal, seleccionándolos en el menú Canal de la ventana Niveles.
3.
Aceptar pulsando OK cuando hayamos conseguido la corrección satisfactoria. Haremos una segunda práctica dependiendo del tiempo que tengamos: Abrimos la imagen Irene
y su amiga.jpg en el directorio CD Practicas/Procesos Básicos/Niveles. y procedemos a corregir el contraste y la luminosidad tal como se ha explicado ya. Pero ahora daremos unos pasos más para obtener un resultado óptimo. Para ello usaremos los tres cuentagotas que hay en la ventana niveles (abajo a la derecha). Sirven para decirle a Photoshop qué píxeles de la imagen son respectivamente negros, grises o blancos. Como los puntos grises son los más importantes, los dejamos para el final.
Aunque todos los cuentagotas corrigen el color, el blanco y el negro son más adecuados para ajustar el contraste; el de color gris, en cambio, es el que determina la calidad de la luz. Esta técnica no siempre es viable porque puede que no haya punto gris o que no seamos capaces de verlo. De todos modos, en la próxima sesión vamos a profundizar en este método de corrección.
1.
Configurar Punto Negro: teniendo abierta la ventana niveles (menú Imagen>Ajustar>Niveles) seleccionamos el cuentagotas de color negro y hacemos clic con él en un punto de la imagen que creamos que es negro. En nuestro caso la cinta de una de las muchachas es negra, así que nos sirve. La imagen se oscurecerá, pero esto sólo es temporal.
2.
Configurar punto Blanco: Es el mismo proceso, buscamos el blanco más luminoso de la imagen. También es fácil de localizar, ya que es una de las rayas blancas del hombro izquierdo de la misma muchacha. La imagen se iluminará.
3.
Configurar Punto Gris: Ahora el punto gris. En esta foto hemos tenido suerte, la otra muchacha tiene pantalones grises, aunque se vean muy poco. Así que, seleccionamos el cuentagotas gris y hacemos clic en los pantalones. La imagen quedará equilibrada y podemos pulsar OK y guardar los cambios.
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A continuación vamos intentar algo más complejo en una foto que, aparentemente está bien, pero necesita un proceso mucho más laborioso. La foto para practicar se llama NiñoJe.psd, en el directorio Practicas/Procesos Básicos/Enfoque y desenfoque.
UN PROCESO INTEGRAL DE MEJORA Si ya tenemos abierto el archivo, observaremos que es una foto que no está mal del todo. Tiene una buena composición, los niveles justos y no necesita corregir el color. Además el niño ha salido natural y con una mirada intensa. Pero el fondo es demasiado nítido y distrae la atención del espectador: se ve claramente a otro niño, con la cabeza cortada por el plano, y la sombra proyectada por el flash es poco artística (todo eso son errores de la foto). Lo ideal hubiera sido un desenfoque del fondo por medio de los controles de la profundidad de campo de la cámara; es decir, abriendo el diafragma al máximo. Pero mi cámara digital es una compacta y en estos aparatos no es posible reducir la profundidad de campo ni generar desenfoques selectivos, aunque usemos controles manuales. Así que lo haremos con Photoshop. Lo que sigue es engorroso, aviso.
CREACIÓN DE UNA CAPA Primero hay que seleccionar al niño con una de las herramientas de selección libre, por ejemplo, la herramienta Lazo y sus variantes. La selección no es demasiado complicada salvo en el pelo. Pero, precisamente para que el resultado sea natural y no llame la atención hay que ser especialmente cuidadoso. Ahora que la cosa se ha puesto difícil es el momento de indicar que las selecciones del pelo son prácticamente imposibles con el ratón. En su lugar hay que usar una tableta gráfica con un lápiz sensible a la presión. Así, el proceso se hace más natural y más cómodo. Dado que no tenemos ese utensilio, he hecho la selección en casa y la he guardado (he ido al menú Selección>Guardar Selección y le he dado el nombre niño; la selección se ha guardado como un Canal Alfa en la paleta canales, con ese nombre. Si pulsáis en la paleta canales podréis ver su miniatura en forma de silueta negra). Así que lo más fácil para vosotros es ir al menú Selección>Cargar Selección…; y aparecerá una ventana en la que pulsar OK, y el trabajo de selección estará hecho. Esta es una de las maravillas de Photoshop y sus canales alfa.
Lo siguiente es crear una capa nueva con el niño. Para eso vamos al menú Capa>Nueva>Capa vía Copiar. Si ahora pulsáis en la paleta capas veréis que se ha creado una capa en la que sólo sale el niño (llamada Capa 1) y, debajo, hay otra con la imagen original completa (que se llama Fondo).
En la paleta capas veréis que la capa activa aparece resaltada, un pincel indica que no está bloqueada; podéis cambiar de capa haciendo clic en la miniatura de otra capa (pero no en el cuadradito). Más a la derecha hay un ojo que indica si la capa es visible o invisible; podéis jugar a hacer invisible una u otra. El damero gris indica una zona transparente. Arriba hay más menús desplegables, uno en el que debería de poner normal es el que configura el modo de fusión de la capa (algo que veremos más adelante) y otro en el que pone opacidad, que es un deslizador para hacer más transparente u opaca una capa. Los demás los vamos a ignorar de momento (ya es mucho), salvo un par que están abajo: el que tiene forma de cubo de basura sirve para borrar capas, y el que tiene forma de hojita de papel con una esquina doblada sirve para crear capas.
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ENFOCAR Aunque no es necesario, vamos a practicar los modos de enfoque con la CAPA 1, la que tiene el niño. La otra podemos ocultarla pulsando en el ojo. Para apreciar mejor el efecto del filtro que vamos a usar ampliaremos la imagen. Hacemos clic en la herramienta Mano y en la barra de opciones pulsamos el botón Píxeles reales (si la ventana no se agranda con la imagen pulsamos en maximizar). Ahora vamos al menú Filtro>Enfocar, sin soltar el ratón observamos por un instante que disponemos de cuatro filtros de enfoque: Enfocar, Enfocar más, Enfocar bordes y Máscara de Enfoque. Los tres primeros son mecanismos muy poco flexibles, así que los ignoramos y usamos el otro: Filtro>Enfocar>Máscara de Enfoque… Sale un menú de lo más incomprensible con tres deslizadores, Cantidad en tantos por ciento, Radio en píxeles y Umbral en niveles.
•
Cantidad o porcentaje: El enfoque actúa aumentando el contraste entre los píxeles y este parámetro mide el porcentaje de contraste a aplicar, lo más usual es moverse entre 50% y 150%, menos apenas se nota y más crea unos halos muy feos en torno a las zonas enfocadas.
•
Radio o distancia: El radio determina la distancia a la que se aplica la máscara de enfoque a partir de los píxeles enfocados (que el programa elige por su contraste con los de alrededor). La cantidad que suele usarse es de uno o dos píxeles de radio.
•
Umbral o tolerancia: Para elegir los píxeles a enfocar, el programa nos pregunta si tiene que haber mucha o poca diferencia con los del alrededor. El parecido entre píxeles se mide en niveles, más niveles quiere decir que Photoshop es más tolerante, menos niveles que es más exigente. Suele usarse una cantidad entre 2 y 15 niveles de umbral. Pensad que separamos a nuestros alumnos por edades. El umbral es la tolerancia. Una tolerancia uno sería separar los de cada año, una tolerancia dos sería admitir que se junten de dos en dos años, etc. La tolerancia es una opción que aparece en muchas herramientas de Photoshop, por ejemplo, la varita mágica, el bote de pintura, etc.
Vamos a elegir una cantidad de 75%, un radio de 2 píxeles y un umbral de 3 niveles, aceptamos. Aunque no hay recetas, y cada uno puede aplicar la máscara que más le guste, en general, algunas fotos aguantan mejor que otras. Para imágenes destinadas a Internet puede usarse un porcentaje mayor (200-112), para imprimir en papel, es mejor aplicar una máscara de enfoque moderada (90-1-4, ó 75-4-3, ó una muy poco destructiva: 55-1-0). Si nos pasamos, aunque en el monitor parezca bonito, al pasarlas a papel
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se notarían unos halos en los bordes de las figuras. Podéis jugar para ver los efectos (dando al comando Edición>Deshacer Máscara de Enfoque, cada vez).
DESENFOCAR Ahora vamos a ocultar la Capa 1 (la del niño) y trabajar en la capa Fondo (la de toda la foto). Desenfocaremos el fondo para aislar y resaltar la figura del niño. Podríamos simplemente aplicar el filtro de desenfoque pero al estar también la figura principal, quedaría un aureola borrosa alrededor que resultaría extraña. Para evitarlo vamos a borrar los bordes del niño con la Herramienta Tampón de clonar, que copia un área más o menos extensa de la imagen y la pega en otra zona. Seleccionamos la citada herramienta, después movemos el ratón hacia la barra de opciones y elegimos un pincel grande y de bordes suaves (300 píxeles). Colocamos el cursor (que tendrá forma de un gran círculo) a la derecha del ojo del niño y pulsamos la tecla Alt. (veremos que en cursor se transforma en un punto de mira). Hacemos Alt.-clic (con lo que estamos indicando al programa que esa es la parte a copiar). Soltamos la tecla Alt. y empezamos a pintar en los márgenes de la cara del niño para borrarlos. Estamos “clonando” un trozo de la foto sobre otro trozo. No hace falta ser muy preciso; no importa que se note, después vamos a desenfocarlo; tampoco hace falta borrar todo el niño, solo los extremos.
Con borrar los extremos de la cara bastará
Ya podemos aplicar el desenfoque. Lo mejor es que cojamos la Mano para no clonar nada más por error. Vamos al menú Filtro>Desenfocar>Desenfoque Gaussiano… En la ventana que sale un deslizador y una casilla que dice Radio (que, sencillamente, es la cantidad de desenfoque a aplicar). Probamos diversas cantidades y Photoshop nos mostrará una previsualización del resultado. Yo he elegido 30 píxeles. Pulsamos OK.
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Hacemos visible la capa del niño para percibir el efecto. La foto ha mejorado, pero aún hay demasiados elementos en el fondo que nos distraen, la causa fundamental es la coloración cálida y variada. Así, pues, el siguiente paso es reducir ese colorido.
DESATURAR Usamos esta palabra cuando hacemos que los colores sean más apagados, más cercanos al gris. Lo más simple es ir al menú Imagen>Ajustes>Tono/Saturación… y reducir, con los deslizadores, la saturación un 45% y la luminosidad un 30% (aproximadamente).
O ir al menú Imagen>Ajustes>Variaciones… Sale una gran ventana que suele usarse como un método sencillo de corrección de color y luz de una imagen. Nosotros pulsamos la casilla Saturación y damos dos clics (no doble clic) en Menos saturación.
Sin salir de la ventana Variaciones, pulsamos en la casilla Medios tonos y hacemos la misma operación: dos clics para oscurecer un poco el fondo. Finalmente pulsamos OK. Todavía queda una mancha roja en la parte inferior derecha de la imagen. Ya os he comentado que el color rojo roba mucho protagonismo, así que vamos a eliminarlo con la Herramienta Esponja (es posible que no la veáis porque está agrupada con otras dos llamadas Sobreexponer, con forma de chupachups, y Subexponer, con forma de mano haciendo un O; así que nos tomamos un segundo para buscar la Esponja y seleccionarla). En la barra de opciones de Esponja elegimos un pincel grande (300 píxeles), Modo Desaturar y Flujo 50%. Antes que nada, debemos asegurarnos de que la capa activa es Fondo y pasamos el pincel por encima de la mancha roja arrastrando el ratón las veces que creáis necesarias para eliminar el color.
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Como veréis, ahora nada robará el protagonismo del niño en la foto. Pero, por si sobra tiempo en la sesión de hoy, vamos a dar unos últimos toques.
SATURAR Lo que vamos a hacer es una versión casera de un truco muy socorrido en publicidad. Se trata de resaltar un poco ciertas partes de la cara para hacerlas más expresivas; en nuestro caso los ojos y la boca. Este retoque debe ser sutil, que no se note, de lo contrario sería contraproducente. Como en este curso estamos aprendiendo, no importa si nos excedemos un poco, de hecho, en la imagen de ejemplo los efectos están un poco exagerados.
Usaremos las tres herramientas agrupadas: Esponja, Sobreexponer y Subexponer. Ya habéis visto una de las utilidades de la Esponja, quitar colorido, ahora la emplearemos al revés, para saturar los colores, las otras dos tienen un funcionamiento similar pero distinto. Sobreexponer ilumina los píxeles, los quema, y subexponer los oscurece. •
Esponja: Vamos a darle más color al iris y a los labios. Seleccionamos la Herramienta Esponja y en la barra de opciones elegimos un pincel de 100 píxeles, que será un poco menos que la niña de los ojos y los labios. Como queremos ser sutiles, bajamos el flujo al 20% o menos. Damos una ligera pasadita por las niñas de los ojos y por los labios. Repito, el efecto debe ser muy sutil, no debe llamar demasiado la atención.
•
Sobreexponer: blanquearemos un poco la retina con la Herramienta Sobreexponer (que tiene forma de chupachups). Seleccionamos un pincel más pequeño, de 65 píxeles y en el menú Rango>Iluminaciones (de este modo, el efecto respetará los píxeles medios y oscuros y sólo iluminaremos los píxeles claros), Exposición 13% para que no se note mucho. Pasamos el pincel un poquito por el blanco de los ojos, con cuidado de que no se note demasiado.
•
Subexponer: la miniatura tiene forma de mano haciendo como una O, su funcionamiento es muy parecido al anterior, y nos servirá para oscurecer las pestañas. Los parámetros van a ser muy similares, un pincel de 65 píxeles, una exposición del 13% y menú Rango>Sombras (para oscurecer sólo los píxeles más oscuros y respetar el resto). Un par de pinceladas en las pestañas y damos por terminado el trabajito.
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CUARTA SESIÓN: PROCESOS BÁSICOS PARA SOLUCIONAR PROBLEMAS IMÁGENES INCLINADAS Este es una contrariedad muy común, a veces inevitable. Se aprecia mucho más en las fotografías de paisaje, en las que la línea del horizonte nos delata. Solucionarlo es sencillísimo. Tomaremos como ejemplo el archivo Segovia.JPG situado en el directorio del CD Practicas/Solucionar Errores/Horizonte Inclinado. La imagen está claramente ladeada, hay que corregirla. Esta es una de las posibilidades, pero hay más formas de corregir este tipo de errores (en Photoshop siempre hay varias formas de hacer las cosas). •
Buscar una referencia: Necesitamos una línea vertical u horizontal. En paisajes marinos es muy fácil tomar el horizonte como señal. En el caso de los edificios es más complicado. Lo ideal sería elegir una vertical a plomo (pero los objetivos pueden distorsionarlas). Como en este caso se usó una focal cerrada (un tele corto, equivalente a 114 milímetros), podemos fiarnos de las verticales; así pues, la torre de la catedral es el mejor indicador. Pulsamos en la Herramienta Zoom y arrastramos el ratón para ampliar el detalle de la torre.
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Medir la inclinación: pulsamos en la Herramienta cuentagotas durante un instante para que se desplieguen las otras herramientas asociadas. Una de ellas tiene forma de regla y se llama Medición. La seleccionamos. Con la regla de medición seleccionada vamos al detalle ampliado de la torre. Hacemos clic en un extremo de la cornisa y, sin soltar el ratón arrastramos hacia el otro extremo. Observemos ahora la barra de opciones; uno de los datos que nos ofrece la barra es la inclinación en grados: en mi caso da -88’5º (pero puede variar levemente). Como una pared a plomo debería tener -90º, la diferencia de 1’5º es la medida que anotamos:
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Corregir la inclinación: Sin abandonar la Herramienta Medición, para no perder de vista la inclinación (así no tendremos que memorizarla), vamos al menú Vista>Encajar en Pantalla, para ver la imagen completa. Seguidamente al menú Imagen>Rotar lienzo>Arbitrario… y en la ventana que surge introducimos la cifra que nos dio la regla de medición: 1’5º. Pulsamos OK y la imagen girará hasta enderezarse.
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Recortar la imagen: Al girar la imagen han quedado unos triángulos que hay que eliminar. Seleccionamos la Herramienta Recorte y recortamos la imagen lo menos posible, pero eliminando todo resto de los fragmentos blancos de las esquinas (el método se explicó al principio de la anterior sesión, podéis consultarlo o si tenéis dudas, llamad al profe).
IMÁGENES CON LA PERSPECTIVA DISTORSIONADA La distorsión de la perspectiva es una consecuencia común cuando se toman imágenes con focales muy abiertas y cerca de un motivo arquitectónico: los edificios parecen tener las paredes inclinadas como si fuesen a desplomarse hacia atrás. A menudo, este efecto ayuda a dar una idea de grandiosidad; pero otras veces es mucho mejor corregirlo ya que la fotografía ganará bastante. De nuevo estamos ante una técnica que en Photoshop resulta sencillísima (más difícil de explicar que de hacer). Para practicar abriremos la imagen Casa peso.JPG situada en el directorio del CD Practicas/Solucionar Errores/Corregir Perspectiva. Pulsamos la Herramienta Recorte y seleccionamos toda la imagen arrastrando el ratón. Una vez terminada la selección, en la barra de opciones pulsamos la casilla Perspectiva para habilitar el modo perspectiva. Entonces, con el cursor pinchamos en el cuadradito manejador de la esquina en lo alto de la derecha y arrastramos hacia dentro, por el borde superior, hasta que la fila de hormigas quede más o menos paralela al muro. Hacemos lo mismo con la esquina de arriba a la izquierda, arrastrándola hasta que quede casi paralela a la pared. La zona de recorte ha adquirido forma de trapecio, con los bordes inclinados igual que los de nuestro edificio (La Casa del Peso, de Medina del Campo). Entonces pulsamos la V de color verde de aceptar y la foto se corregirá automáticamente.
EFECTO BARRIL Al usar focales muy abiertas, como grandes angulares, para fotografiar motivos Geométricos cuadrangulares, es normal que la imagen se distorsione, como si la viésemos por una mirilla. Para
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solucionarlo se venden módulos de Photoshop que, a partir de los datos de la toma, pueden corregir la deformación. En nuestro caso, usaremos una herramienta que viene de serie en el programa. Abrimos la imagen Cuadro.jpg en el directorio del CD Practicas/Solucionar Errores/Efecto Barril. La pintura aparece como hinchada, por lo que reduciremos la distorsión con el menú Filtro>Distorsionar>Encoger. La ventana que sale es bastante intuitiva nos permite comprender como funciona el filtro enseguida; únicamente que no veremos toda la imagen completa mientras no pulsemos varias veces en el pequeño signo menos que hay a la izquierda. Una vez vemos la imagen completa, aplicamos un porcentaje del 6%, que, en este caso bastará; si ponemos más el resultado será excesivo.
FOTOS OSCURAS (SUBEXPUESTAS) Las fotos subexpuestas son algo común cuando usas una digital compacta. Bien porque no te has dado cuenta de cambiar los parámetros (olvidaste activar el flash, por ejemplo), o una sensibilidad ISO limitada (suele ser como máximo 400) o, lo más común, porque la potencia del flash es bastante escasa (unos tres metros). A menudo nos confiamos y nos sale una foto oscura, a pesar del flash, porque el objeto de la foto estaba demasiado lejos. En muchos casos es posible recuperar la toma, no siempre. Para saberlo hay que revisar el histograma, que, en una foto subexpuesta, tendrá casi toda la información acumulada hacia la izquierda. Si tiene algo de pendiente hacia abajo, en el lado izquierdo, es recuperable. Pero si la montaña no tiene caída, aunque en la pantalla consigamos algo, la calidad se resentirá demasiado.
Dos histogramas de fotos subexpuestas, la primera podrá parecer bien en la pantalla si la corregimos, pero perderemos mucha información valiosa, la segunda es perfectamente recuperable.
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El proceso es también sencillo. Practicaremos con la foto NiñoJ.JPG situada en el directorio del CD Practicas/Solucionar Errores/Foto oscura. Si probamos la opción de los niveles automáticos, el resultado será malo, ya que sale verdosa y rojiza, escasa de azul. Debemos hacer una corrección manual. Vamos al menú Imagen>Ajustes>Niveles… El histograma tiene mucho negro, pero no afecta a la figura principal: se debe a la chaqueta que lleva puesta, por eso juzgamos que es aprovechable. La gráfica muestra un gran espacio vacío a la derecha, esto indica que faltan los medios tonos y los blancos. Para recuperarlos deslizaremos el triangulito de la derecha hasta que comienza la ladera de la montaña. Como el proceso consiste en iluminar la imagen, si queremos asegurarnos de no quemarla, mientras arrastramos el triángulo mantenemos pulsada la tecla Alt.: en cuanto veamos que las zonas o los píxeles de los colores básicos se vuelven puntitos blancos, es que estamos forzando y hay que parar.
El resultado no es como sacar una foto correcta, pero se parece bastante.
FOTOS QUEMADAS (SOBREEXPUESTAS) Es fácil pensar que las fotos quemadas se pueden arreglar igual que las fotos oscuras, siempre que cumplan ciertas condiciones y siguiendo los mismos pasos: corrigiendo los Niveles. Es cierto, pero yo voy a aprovechar para mostrar otra técnica. Practicaremos con la foto vieja_pared.JPG, situada en el directorio del CD Practicas/Solucionar errores/Foto quemada. Trabajaremos sólo con la paleta Capas, de modo que no usaremos los menús para nada. •
Duplicar capa: si la paleta Capas está replegada, la desplegamos haciendo doble clic en la lengüeta correspondiente. Colocamos el ratón encima de la miniatura de la capa, que se llamará Fondo, veremos como el cursor se transforma en una manita. Arrastramos la miniatura hasta el icono que
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está en la parte inferior con la apariencia de un papel con la esquina doblada (es el segundo, después del cubo de basura). Aparecerá una nueva capa llamada Fondo copia.
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Configurar el modo de fusión de la capa: Seguimos en la paleta capas, movemos el cursor al pequeño menú que hay en la parte superior, donde pone Normal, pulsamos un instante para desplegar el menú y elegimos el modo Multiplicar.
En otras imágenes es posible que no baste con esto. Si la foto sigue sobreexpuesta haremos una tercera copia de la capa también en modo multiplicar, y así hasta estar satisfechos. Si la imagen queda demasiado oscura, vamos al menú Opacidad y reducimos el porcentaje lo que sea necesario… También para aclarar una foto oscura existe un método equivalente: duplicamos la capa y la configuramos en modo Trama.
EQUILIBRAR RANGO Hay fotos que contienen zonas muy iluminadas y otras muy oscuras. Se dice que estas fotos tienen un Rango Dinámico excesivo. Las herramientas descritas hasta ahora aclaran u oscurecen la imagen más o menos globalmente, pero en este caso, se sufriría pérdida de detalle en las luces o en las sombras y las copias saldrían muy mermadas. Para equilibrar el rango dinámico, en el cuarto oscuro tradicional se usaba una Máscara de Contraste tediosa y compleja que, sin embargo, en Photoshop es asombrosamente simple gracias al sistema desarrollado por el fotógrafo americano Richard Pahl. Abrimos la foto Sepulcro del Abad.jpg del directorio del CD Practicas/Solucionar Errores/Rango Dinámico. Al estudiar la foto apreciamos que la escultura del primer término está sobreexpuesta, mientras que los jóvenes del segundo plano están un poco oscuros. Una opción sería usar las herramientas Subexponer o Sobreexponer (que se parecen a las técnicas de revelado tradicional usando reservas y quemados). Pero en mi opinión será más efectivo usar la Máscara de Contraste digital.
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Para empezar, duplicamos la capa Fondo (menú Capa>Duplicar capa…), después pasamos la nueva capa a escala de grises (menú Imagen>Ajustes>Desaturar); el tercer paso es convertir la capa a negativo (menú Imagen>Ajustes>Invertir). Ahora desenfocamos la capa con un desenfoque gaussiano entre 15 y 30 píxeles (menú Filtro>Desenfocar>Desenfoque Gaussiano, radio 22 píxeles). Por último, en la Paleta Capas, cambiamos las Opciones de Fusión a Superponer. Si no fuera suficiente (que sí lo es), podríamos duplicar la capa que hemos trabajado y obtendríamos mayor corrección. El resultado podéis compararlo ocultando la capa superior con el icono en forma de ojo de la Paleta Capas.
REDUCIR RUIDO ¿Qué es el ruido? En fotografía digital el ruido es una serie de motas de color y brillo aleatorios que no tienen nada que ver con la imagen y que contaminan y reducen el detalle. A veces el ruido es monocromo y otras tiene colores aberrantes (azules, verdes y rojos). Aunque el ruido a menudo no resulta molesto y hasta cierto punto es admisible, en ciertas fotos es tan llamativo que es necesario reducirlo (eliminarlo del todo es imposible). El ruido digital no es como el grano de la fotografía de carrete, ya que éste, a pesar de todo, contiene información y da textura, beneficiando la estética de la imagen. Por el contrario, el ruido digital no es nada estético y muy perjudicial para representar los tonos de piel.
El ruido es muy común en las cámaras digitales compactas, sobre todo a partir de sensibilidades de 400 ISO. Esto se debe a que este tipo de aparatos tiene un dispositivo de captación muy pequeño y, por tanto, recibe poca luz. Por regla general, las Compactas tienen un CCD entre 5x4 milímetros y 9x7 milímetros (es decir, como los botones de un mando a distancia), las réflex digitales denominadas APS (que son la mayoría) tienen el captador CCD o CMOS de 23x15 milímetros, así que con los mismos píxeles dan muchísima mejor calidad. La casa Olympus fabrica réflex digitales con sensores de tamaño especial, denominados 4/3 (Cuatro Tercios) que son un poco más pequeños (18x13'5 milímetros, es decir, la mitad justo que un fotograma de película de 35 mm.), pero que dan una notable calidad y poco ruido. Por último, un reducidísimo número de modelos réflex (cuyos precios son prohibitivos) tienen un sensor llamado Full Frame, que mide 35'8x23'8 milímetros (igual que un fotograma de 35 milímetros, quiero decir igual que un negativo o una diapositiva de carrete).
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Los sistemas más sencillos para reducir el ruido de las fotos están en el menú Filtros>Ruido, destacamos el filtro Destramar por ser automático y sencillo. Otros filtros como Mediana o Polvo y Rascaduras también sirven para eso, pero requieren la introducción de parámetros. De todos modos, estos mecanismos no obran milagros y la reducción de ruido implica siempre pérdida de detalle. Yo aconsejo probar con Destramar o con Mediana con un radio de uno o dos píxeles como máximo. Si eso no funciona o perdemos demasiado detalle, tendremos que reducir el ruido por canales. Para la práctica, abrimos el archivo El grupo descansa.jpg situado en el directorio del CD Practicas/Solucionar Errores/Reducir ruido.
La foto, hecha en el Museo del Prado, donde están prohibidos el trípode y el flash, fue obtenida con una compacta digital ajustada a 400 ISO de sensibilidad. Para conocer los datos de la toma recurrimos al menú Archivo>Información de archivo…, eligiendo en el menú desplegable de la ventana de Información la opción EXIF. También el Explorador de Archivos (Archivo>Explorar…) muestra los datos en un rectángulo en la parte inferior izquierda de la ventana. EXIF es un estándar digital para guardar información de la fotografía en forma de “metadatos” ocultos, junto a la imagen misma.
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Ir a la Paleta canales: Seleccionamos la Herramienta Mano, en su barra de opciones, pulsamos el botón Píxeles Reales, para ampliar la imagen (si la ventana no se agranda al mismo tiempo pulsamos en Maximizar). A continuación desplegamos, si fuera necesario, la paleta canales para ver los canales Rojo, Verde y Azul.
•
Revisar los canales: pulsamos en la miniatura de cada canal para ver su estado. El canal azul es el que más ruido presenta, pero también es más difícil de arreglar porque no tiene el detalle, por eso lo descartamos (otras veces, el canal azul será el más adecuado).
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Aplicar los filtros: Vamos a usar el filtro Mediana en los canales Rojo y al Amarillo. Pulsamos la miniatura del canal Rojo (nos aseguramos de que es el único que tiene el ojo y el único resaltado en gris). Vamos al menú Filtros>Ruido>Mediana… y marcamos un Radio de 2 píxeles. Hacemos lo mismo con el canal Verde, pero el Radio que seleccionamos es de 3 píxeles. Pulsamos en el canal RGB para ver el resultado: ha mejorado, sobre todo la piel, porque hay menos ruido, pero hemos perdido detalles en los cuadros del Museo. Si lo deseamos podemos aplicar una Máscara de Enfoque, como se explicó en una sesión anterior. Es posible anular los efectos de los últimos filtros con la Herramienta Pincel de Historia. Seleccionamos la mencionada herramienta y un tamaño de pincel (pongamos de 100 píxeles). Después, en la Paleta Historia colocamos la miniatura del Pincel de Historia en la posición que queremos anular (por ejemplo, en la primera Mediana): “Pintamos” en las zonas que queremos recobrar con el color frontal negro (por ejemplo en los cuadros) y vamos anulando los filtros, sólo en los sitios “pintados”.
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BALANCE DE BLANCOS Una vez más, debemos enfrentarnos a un concepto abstracto y difícil de explicar, el de la Temperatura del Color o Balance de Blancos. El concepto básico es que la luz no siempre tiene el mismo color, de modo que el blanco puro no siempre es igual, y por la misma razón tampoco los grises. El tono dominante de la luz en realidad contamina todos los colores de la foto. Se sabe que, en comparación con el sol del mediodía o con el Flash, son más anaranjados los atardeces; la luz de una bombilla o de una vela es más amarillenta, los fluorescentes más azules (como la nieve o las zonas de sombra en el exterior) y, la iluminación es verdosa a la sombra de las hojas,; en fin, en las ciudades las luces son de muchos colores… En la vida real no notamos que la luz sea de diferente tono, porque nuestro cerebro es capaz de corregir las contaminaciones cromáticas. Las cámaras digitales tienen una herramienta llamada Balance de blancos, que, en teoría cumple la misma función, pero, en la práctica, no siempre pueden. También existe la posibilidad establecer una balance de blancos personalizado. Pero rara vez se utiliza. Los profesionales usan una fotografía de referencia sobre una cartulina de grises o patrones de color como los de las figuras y, a partir de ahí, saben cual es la dominante de color y la corrigen. Nosotros tendremos que hacerlo de un modo más casero.
No siempre hay que corregir la temperatura del color, ya que habrá casos en los que nos interese conservar el ambiente original, por ejemplo, en atardeceres y amaneceres, en conciertos de música, obras de teatro y otros espectáculos…
Abrimos el archivo Comilona.jpg en el directorio del CD Practicas/Solucionar Errores/Balance de Blancos. El proceso a seguir es idéntico al de la sesión anterior, abriendo niveles y estableces los puntos negro, blanco y gris con el cuentagotas (menú Imagen>Ajustes>Niveles). Sin embargo, esta imagen tiene ciertas peculiaridades; en primer lugar, dado que la luz no es blanca, sino rojiza, es difícil saber cuál es el punto gris (porque está teñido). Por otra parte, el punto blanco no puede ser una fuente de luz, como una lámpara, un reflejo metálico o vítreo, o una ventana, ha de ser forzosamente un objeto que refleje luz blanca, no que la emita. Esto implica que debemos buscar con más cuidado.
No es problema localizar los puntos blancos y negros, si a ojo no podemos, vamos al menú Imagen>Ajustes>Umbral…, saldrá una ventana con el sempiterno Histograma y un solo deslizador. Moviendo el deslizador hacia la izquierda veremos las zonas negras: pulsando Mayúsculas+Clic marcaremos la zona negra localizada con un “punto de mira”; moviéndolo a la derecha veremos las blancas (recordad que no valen las lámparas ni los reflejos en metales, ni en cristal): pulsando de nuevo Mayúsculas+Clic marcaremos la zona negra localizada con otro “punto de mira”. Cuando hayamos
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acabado pulsamos Cancelar, y veremos la foto con las dos zonas indicadas seleccionando la Herramienta Mano y el botón Píxeles reales para explorar mejor. Luego abrimos el menú: Imagen>Ajustes>Niveles y usamos los cuentagotas negro y blanco respectivamente, como ya se explicó el otro día. El elemento gris hay que buscarlo por métodos artesanos.
La foto es de un amigo (“Silver Dolar”), recién adquirida su cámara réflex digital APS. Este compañero estaba aprendiendo a usarla e hizo esta toma en una fiesta para practicar y como souvenir. Puesto que yo estaba allí puedo recordar que los platos tenían un dibujo gris. Lo que me permite aconsejaros que, al fotografiar, a veces, es necesario memorizar ciertos detalles, y la presencia del color gris más que un detalle es un factor esencial. Aunque no tenga mucho que ver con este asunto, podéis aprovechar para estudiar el ruido de la foto, comparado con otras fotos mías tomadas con una compacta. Como veis, el tamaño del sensor es fundamental en este aspecto. Existe un método más complejo, y preciso, desarrollado por Ben Willmore basado en la herramienta Curvas, que también aparece en el menú Imagen>Ajustes>Curvas…
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QUINTA SESIÓN: RETOCAR IMÁGENES (PRIMERA PARTE) En esta sesión veremos algunos ejemplos de retoque, sólo algunos porque es imposible abarcar todas las posibilidades de Photoshop para retocar imágenes.
EL MODO “MÁSCARA RÁPIDA” Casi todos los ejercicios que hechos hasta ahora se basaban en lograr un objetivo y buscar los medios. En este caso vamos a hacer una excepción. Vamos a enseñar a usar un instrumento que puede dirigirse a múltiples fines: lo hemos adaptado al retoque, como ejemplo, pero tiene más aplicaciones. Las máscaras de Photoshop pueden ser de dos tipos, unas sirven para hacer invisibles determinadas zonas de la imagen y, las otras sirven para protegerlas de las acciones que vamos a realizar. En ambos casos se usan pintando con herramientas de pintura (pinceles gomas) o con herramientas de selección.
Practicaremos con la fotografía llamada Cerambicido.jpg, en el CD Practicas/Retoques Creativos 1/Máscara Rapida.
1.
Seleccionamos el Modo Máscara Rápida con el Cuadro de Herramientas (está casi abajo del todo, tiene forma de cuadradito gris con un círculo blanco dentro y, al colocar el cursor encima, el cuadradito se vuelve rojo).
2.
Seleccionamos la Herramienta Pincel y un tamaño grande (300 píxeles), nos aseguramos de que el color frontal y el color de Fondo son el Negro y el Blanco respectivamente (si no es así, pulsamos los cuadraditos en miniatura que hay a la izquierda de los cuadros de Color).
3.
Pintamos encima de la flor hasta teñirla totalmente de rojo; para refinar la máscara podemos cambiar a un pincel de 100 píxeles y coloreamos el tallo también (no estamos pintando realmente, estamos enmascarando, la imagen no está sufriendo modificación alguna).
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Si nos pasamos no importa ya que podemos borrar las zonas enmascaradas con la Goma y afinar la Máscara seleccionando pinceles más pequeños… Pintando y borrando… El proceso puede que nos lleve unos instantes (como es una práctica no importa que seamos un poco menos cuidadosos).
4.
Volvemos al Modo Estándar, es decir, salimos de Máscara Rápida (pulsando el otro cuadradito de al lado, el que parece una obra de Malevicht: Círculo Blanco sobre fondo blanco), y la selección vuelve a su color normal rodeada de la fila de hormigas.
5.
Vamos al menú Imagen>Ajustes>Desaturar. Así quedará toda la foto en escala de grises, excepto la flor y el insecto.
6.
Anulamos la selección en el menú Selección>Deseleccionar. El ajuste será más o menos adecuado en función de lo cuidadosos que hayamos sido al aplicar la Máscara Rápida, en cualquier caso nos hacemos una idea de las posibilidades de la herramienta.
BORRAR ELEMENTOS Aunque para los puristas no sea lícito, borrar formas que deslucen las fotos o llaman demasiado la atención robando protagonismo al elemento principal, es una opción que no sólo se practica en fotografía digital, sino que es una tradición en la fotografía clásica. Especialmente en la que va enfocada a publicidad, propaganda política, retratos de bodas… Por qué no borrarle las arrugas a la abuela o los granos al sobrino y, así, cuando se vean en las fotos, se sentirán mejor (se ha hecho desde siempre). Trabajaremos sobre una foto conocida, Sforza.JPG que ya usamos para practicar recortes de reencuadre en la tercera sesión. Su grabasteis el archivo lo abrís, si no, podéis encontrarlo ya recortado en el CD Practicas/Retoques Creativos 1/Borrar Elementos. En este ejercicio borraremos aquello que afea el entorno del caballo. Usaremos la Herramienta Tampón que —quizá, si dio tiempo— ya hemos usado en una práctica anterior. Esta herramienta toma una muestra de los píxeles de la zona fuente y los aplica a la zona de destino. Se usa como un pincel, que está calcando una parte de la imagen de un sitio a otro. Por ejemplo, si hay un objeto en un cielo azul y queremos borrarlo, el Tampón copiará los píxeles de otra parte limpia del cielo y los colocará sobre el objeto indeseado, cubriéndolo. En el caso que nos ocupa practicaremos borrando el abdomen del hombre que cuida el caballo, la cuerda que sujeta al animal, una bolsa de plástico que hay en los matorrales y el cartel señalizador de la carretera… Para tomar la muestra de píxeles la zona fuente, después de haber seleccionado la Herramienta Tampón, pulsamos la tecla Alt y el cursor se transformará en un Punto de mira, hacemos Alt+Clic. Soltamos la tecla Alt y pintamos, haciendo Clic con el tampón en la zona destino. Consejos: conviene hacer la clonación en una capa aparte, para conservar intacta la imagen original; habría que usar un pincel de bordes difusos, de tamaño ligeramente superior al objeto a borrar. Hay que ir cambiando de fuente para que no se note la clonación, ya que si no lo hacemos, aparecerán motivos repetitivos o borrosos. A veces convendrá bajar la opacidad de la clonación (al 50%, por ejemplo), para que el resultado sea más natural. Es mejor hacer varios clics que arrastrar el tampón clonador. Cuando la zona a clonar sea el horizonte, un camino o un surco, etc., hay que procurar que la forma tenga continuidad y no líneas quebradas, para ello hay que cuidar que el clonado sea lo más paralelo posible. Para clonar en una capa diferente, vamos al menú Capa>Nueva>Capa… y pulsamos OK en la ventana (o le ponemos un nombre a la nueva capa, algo así como Zonas clonadas). Después, en las opciones de la Herramienta Tampón pulsamos la casilla Todas las Capas. El tampón tomará la muestra de cualquier área de las capas de debajo, siempre que no sean transparentes, pero sólo pintará en la nueva capa activa. Así, si nos equivocamos, bastará la goma para borrar los errores.
1.
El Abdomen: Usamos un pincel de 65 píxeles (modo normal, opacidad 100%), tomamos una muestra (Alt+Clic) a la misma altura del final de suéter, pero un centímetro más a la izquierda.
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Vamos clonando con clics progresivos encima del jersey y los pantalones, procurando que el camino, la hierba seca y el pasto verde tengan continuidad. Si es necesario cambiamos de fuente tomando muestras en otros sitios (Alt+Clic)… 2.
La cuerda: Vamos tomando muestras (Alt+Clic) de zonas adyacentes que se parezcan al lugar que oculta, hay que esmerarse en que el surco oscuro no quede interrumpido de forma brusca o antinatural.
3.
La bolsa: Con un pincel de 45 píxeles habrá suficiente, tomando una muestra aproximadamente medio centímetro a la derecha (Alt+Clic) y un par de clics bastarán para eliminarla.
4.
El cartel: es más delicado porque hay que conseguir que la línea del horizonte no resulte quebrada. Para alcanzar más precisión usamos la Herramienta Zoom (la lupa), o el Navegador (menú Ventana>Navegador) para ampliar la imagen por lo menos un 200%. Volvemos a seleccionar la Herramienta Tampón y tomamos la muestra justo en la línea del horizonte y hacemos clic encima del cartel a la misma altura. Probablemente tengamos que intentarlo varias veces; nos veremos obligados a deshacer (Control+Z) hasta que acertemos. Pero una vez encontrado el punto, será coser y cantar.
Lo ideal sería suprimir todos los postes de teléfono y cables de la luz, pero como ejercicio basta.
AÑADIR ELEMENTOS PRIMER MONTAJE: CORTAR Y PEGAR Comenzaremos con un ejercicio sencillo abriendo los dos archivos del directorio CD Practicas/Retoques Creativos 1/Añadir Elementos/Montaje Niños. Abrimos primero el archivo Mario.PSD que ya he preparado borrando el fondo. Es algo que podéis hacer vosotros en casa con otra foto para practicar, pero he creído conveniente ganar tiempo (he usado, principalmente, las herramientas Máscara Rápida y Lazo para crear una selección del niño y borrar el resto) el proceso lleva un poco
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de tiempo al principio; pero, a medida que se va adquiriendo experiencia se va agilizando. En este ejercicio usaremos la Varita mágica, una herramienta que selecciona todos los píxeles iguales. Aumentando la Tolerancia de la Varita mágica en la barra de opciones, la selección se ampliará a píxeles parecidos. Más píxeles cuanta más tolerancia. Esto es bastante útil ya que en las fotos es difícil que haya superficies homogéneas debido al ruido o a las variaciones en la iluminación. Incluso el cielo tiene gradaciones y no todos los píxeles que lo forman son iguales, aunque al principio nos lo parezca.
En el Cuadro de Herramientas, seleccionamos la Herramienta Varita mágica y hacemos Clic en el fondo blanco. Después, vamos al menú Selección>Invertir para seleccionar sólo al niño. Como medida intermedia vamos a hacer que el recorte sea más suave por medio del menú Selección>Calar… (y tecleamos un Radio de Calado de 2 píxeles). A continuación, vamos al menú Edición>Copiar. Ahora abrimos el archivo Juan1.jpg y en el menú Edición>Pegar; y cambiamos a la Herramienta Mover para colocar al niño pequeño entre las manos del niño mayor, como si lo estuviera cogiendo. Como la silueta del niño tiene alrededor restos de píxeles blancos del fondo original, los eliminamos por medio del menú Capa>Halos>Eliminar halos…, marcando un píxel en la ventana que emerge. Para dar más realismo al montaje, necesitamos crear una sombra proyectada por la figura del pequeño. Podríamos hacer una automáticamente en el menú Capa>Estilo de Capa>Sombra paralela (y modificar los ajustes para que sean más convincentes). Pero dará mejores resultados si la pintamos a mano…, y no será difícil, ya que la luz ambiental es difusa y no tenemos que ser precisos.
Vamos a la palera Capas, seleccionamos la capa Fondo y, en la parte de debajo de la paleta, pulsamos en el icono que parece un papel con la esquina doblada para Crear una Capa Nueva Al haber seleccionado la capa Fondo, la nueva capa aparece sobre ésta y bajo la del niño pequeño. Con la nueva capa seleccionada, que será totalmente transparente, pulsamos en la Herramienta Pincel, en la barra de opciones marcamos un pincel mediano, de 100 píxeles, y una opacidad del 50%.
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Pintamos en las manos del niño con cuidado, simulando una sombra. Si nos equivocamos podemos deshacer (Contro+Z), o, en último caso, reducir la opacidad de la propia capa en la paleta.
SEGUNDO MONTAJE: FUSIÓN DE CAPAS Este será más sencillo aún, pero utilizaremos herramientas más potentes de Photoshop. Los archivos que tocan son los del directorio CD Practicas/Retoques Creativos 1/Añadir Elementos/Montaje Luna. Primero abrimos el archivo Luna1.jpg y actuamos de un modo parecido a como hicimos antes: menú Selección>Todo; menú Edición>Copiar. Abrimos ahora el segundo archivo, llamado Flores de almendro.jpg y el menú Edición>Pegar. Con la Herramienta Mover colocamos la luna según la regla de los Tercios, en la parte más vacía del cielo azul. ¿No queda muy realista, verdad? Pero ahora viene la magia de Photoshop: Vamos a la paleta capas y en la parte de arriba de dicha paleta Configuramos el Modo de Fusión en Trama. ¡Magia! Y no hemos tenido que alterar ninguna imagen, ni hemos perdido información, ni siquiera hemos tenido que trabajar.
El modo Trama en Photoshop actúa como si proyectásemos la capa de arriba con luz sobre la de abajo. Es como si la luna fuese un foco proyectado sobre una pared pintada de azul. El negro simplemente desaparece, porque no es luz, y los píxeles claros se tiñen de los colores que haya debajo. El modo Trama, por tanto, es muy útil para hacer montajes con imágenes que tengan el fondo oscuro, como fuegos artificiales, chispas o la luna…
EFECTOS DE MOVIMIENTO Cuántas veces hemos visto instantáneas en las que el dinamismo se sugiere por medio de una estela que sigue, por ejemplo, a un deportista, o a un animal… Esto se hace por medio de un barrido, es decir, se acompaña el movimiento del sujeto con la cámara, pulsando el disparador (pero sin detener la marcha), para que el fondo salga movido, pero el tema principal, nítido. Es una técnica que requiere práctica y no se puede hacer con la pantalla LCD, sino con un visor óptico, para no perder de vista en ningún momento el tema (los visores electrónicos EVF, aunque están mejorando a cada momento, se quedan literalmente ciegos, en el momento de tomar la foto). En este ejercicio fingiremos el efecto barrido de un coche; haciendo que el vehículo, que estaba estacionado, simule circular a toda velocidad. Abrimos el archivo Coche2.psd, del directorio del CD Practicas/Retoques Creativos 1/Filtro movimiento.
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El secreto de este ejercicio radica en conseguir que cada parte de la foto simule diferentes tipos de movimiento, por tanto, hay que empezar por separar el coche del fondo, en una capa diferente, y las ruedas, como tienen movimiento circular, también hay que ponerlas en sus respectivas capas. Como en todos los casos, la selección de objetos complejos es tediosa y puede ralentizar el curso, por eso, ya las traigo yo hechas de casa, y guardadas como canales alfa (disponibles en la paleta canales).
Los canales de color RGB se ven resaltados en amarillo, los canales alfa, que en este caso son selecciones guardadas, se ven sin resaltar y son como siluetas blancas sobre un fondo negro.
1.
Lo primero es duplicar la capa Fondo para trabajar sobre una copia y respetar el original (esto es algo aconsejable siempre que vayamos a retocar, otra alternativa es utilizar un duplicado del archivo; conservar el original es como conservar un negativo, algo muy importante): menú Capa>Duplicar capa… o, bien usar el método de la paleta capas, arrastrando la miniatura de la capa al icono en forma de papelito con la esquina doblada.
2.
En segundo lugar, menú Selección>Cargar selección… y en la ventana seleccionamos el Canal Rueda trasera (como se ve en la figura) y vamos al menú Capa>Nueva>Capa vía copiar. Volvemos a la capa Fondo Copia y repetimos la operación cargando ahora la selección Rueda delantera, y de nuevo al menú Capa>Nueva>Capa vía copiar. Por tercera vez lo hacemos, pero ahora para el canal Coche (asegurándonos de volver a seleccionar la capa Fondo copia), con el que también creamos una capa. Es importante que las capas de las ruedas queden encima de la capa en la que hemos copiado el coche.
3.
Después, una vez más, volvemos a seleccionar la capa Fondo copia, y nos disponemos a aplicarle un desenfoque de movimiento. Menú Filtro>Desenfocar>Desenfoque de movimiento…, debemos ajustar el ángulo a 0º, que es la horizontal, y la distancia a 100 píxeles; pulsamos OK. Ya hemos conseguido gran parte del efecto.
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Por último vamos a simular el giro de las ruedas. Seleccionamos una de las capas de las ruedas (los pasos a seguir serán idénticos en ambas ruedas, así que bastará con explicarlos una vez). Con la capa de la rueda elegida, es importante que cojamos la Herramienta marco y seleccionemos la rueda, sólo la rueda, quedando el eje en el centro del marco (por eso, será preferible el Marco elíptico: pulsando brevemente sobre la Herramienta Marco, se desplegará una ventanita donde están otros marcos opcionales). Menú Filtro>Desenfocar>Desenfoque radial… con los parámetros: Cantidad 20 píxeles, Método Giro, Calidad Óptima. Pulsamos OK y repetimos los mismos pasos con la otra rueda. Nadie se daría cuenta, si no fuera porque el coche no lleva conductor ;-)
DISTORSIONAR Y CARICATURIZAR Haremos un ejercicio más relajado, aunque usaremos una serie de herramientas que en Photoshop se emplean para cosas muy serias, en la fotografía profesional. Son herramientas de distorsión que, a pesar de su nombre, sirven, básicamente, para hacer operaciones de cirugía plástica: pueden aumentar los músculos, reducir michelines, agrandar los ojos, hinchar los labios, enderezar narices… Nosotros, como diría el pintor Jean Dubuffet, vamos a dar “Un poco de risa y un poco de miedo”. Tuve que pedir voluntarios entre mis alumnos y conocidos para que se dejasen fotografiar con el objeto de hacerles estas trastadas, y algunos consintieron, así que no tengamos reparo.
UN POCO DE RISA… Practicaremos con el archivo Jonnathan.jpg en el directorio del CD Prácticas/Retoques Creativos 1/Caricaturas y Otros. Con la Herramienta Marco Elíptico seleccionamos la cabeza del joven y después vamos al menú Filtro>Distorsionar>Esferizar… Una cantidad del 50% bastará. Pulsáis OK para ver el resultado. Después pulsamos deshacer (Control+Z) y, sin quitar la selección volvemos a hacer lo mismo, pero alternando las opciones del filtro entre Normal, Sólo Horizontal y Sólo Vertical. Por supuesto, podemos exagerar la deformación para dar más risa… O centrarla sólo en los ojos para hacerlos como platos (hay que experimentar con la creatividad).
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Ahora, con esas mismas herramientas, vamos a aplicar una sesión de musculación a un amigo mío. Abrimos el archivo Shwarzenegger.jpg en el directorio del CD Prácticas/Retoques Creativos 1/Caricaturas y Otros. Usaremos filtros parecidos, pero alternaremos la selección con la Herramienta Marco Elíptico (hay que pulsar un instante en la Herramienta Marco, o pulsar con el botón derecho del ratón, para que se desplieguen las herramientas alternativas). En la barra de opciones, marcamos un Calado de 10 píxeles y la casilla Suavizado (para que el retoque sea más natural). Con la Herramienta Marco Elíptico seleccionamos una área ancha y corta de la foto, y movemos la elipse para quede parte de la selección fuera de cuadro, afectando sólo al abdomen y no a los pectorales. Menú Filtro>Distorsionar>Encoger… y aplicamos una proporción entre el 30% y el 40%. Pulsamos OK. En segundo lugar creamos una nueva elipse de selección para uno de los pectorales (si no queda bien colocada la movemos para que quede bien centrada). Menú Filtro>Distorsionar>Esferizar… Aplicamos una proporción del 70% y pulsamos OK. No hace falta que creemos una nueva selección, basta con mover la que ya está hecha al otro pectoral, y en lugar de usar la ruta habitual del menú Filtro>Distorsionar>Encoger… podemos tomar un atajo (porque Photoshop recuerda el último filtro aplicado) y pulsamos Control+F o menú Filtro>Esferizar. Hacemos la misma operación con el hombro izquierdo.
Aunque lo estamos haciendo de un modo un poco desmañado, estos retoques trabajados con paciencia y habilidad en lugar de risa, podrían engañar a cualquiera.
José-Manuel Benito Álvarez
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UN POCO DE MIEDO… Practicaremos con el archivo Natalia.psd en el directorio del CD Prácticas/Retoques Creativos 1/Caricaturas y Otros. Después vamos a usar un módulo llamado Licuar que es capaz de distorsionar la imagen como si fuese de plastilina; Licuar es bastante exigente con el ordenador, por lo que, dependiendo de su capacidad, es posible que notemos que se ralentiza un poco. Podemos centrarnos sólo en la cara usando un marco de selección o máscara rápida (el ordenador irá más rápido): Menú Filtro>Licuar… Se abre el archivo en una ventana (si vuestro ordenador se atasca con todo el archivo, podéis seleccionar sólo la parte que vais a editar y luego entrar en Licuar). Este módulo es como una aplicación entera en sí misma, (con sus propias herramientas y opciones) y podría llevarnos mucho tiempo llegar a conocerla a fondo, por eso vamos a conformarnos con rascar la superficie. Del Cuadro de Herramientas de la izquierda, nos interesan (por ahora): Deformar, Inflar y Desinflar (muchas de ellas tienen sus equivalentes en el menú Filtro>Distorsionar). Todas ellas actúan como pinceles, de modo que, en las Opciones de la derecha podéis elegir el tamaño del pincel, la presión y la potencia por medio de deslizadores (variaremos el tamaño del pincel conforme a las necesidades, pero la presión la dejaremos en torno al 15% y la potencia la ignoraremos). Con Licuar es muy fácil excederse, por eso es conveniente recordar que podéis usar las herramientas de máscara para que la distorsión no afecte a ciertas zonas, y que disponéis de la lupa y la mano. La ventaja del filtro Licuar… es que es más intuitivo y potente, pero también más difícil de controlar.
Con la Herramienta Deformar, un pincel de 100 píxeles y una presión del 11%, vamos transformado la risueña cara de la joven en una mueca siniestra. Podemos alterar la mirada con la Herramienta Inflar.
Después, con la lupa, nos centramos en los dientes, aumentando la imagen hasta un 200% (dos clics). Otra vez con la Herramienta Deformar, pero con un pincel muy pequeño, de unos 6 píxeles tan solo, afilamos los dientes, como los de un carnívoro. Un último toque consistirá en hacer las orejas, la nariz y la barbilla puntiagudas, por el mismo procedimiento. Podemos añadir más detalles aterradores, como os pongo en las imágenes.
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SEXTA SESIÓN: RETOCAR IMÁGENES (SEGUNDA PARTE) TEXTO EN PHOTOSHOP OPCIONES BÁSICAS DE TEXTO Para añadir texto a los archivos de Photoshop, basta con pulsar la Herramienta Texto en el cuadro de Herramientas, la que tiene un icono en forma de T. Pero, como era de esperar, las posibilidades son enormes. Lo primero que apreciamos es que hay dos tipos de herramientas de Texto, las que permiten escribir (una en horizontal y otra en vertical) y las que crean una selección con la forma del texto, una máscara para rellenar, recortar, etc. (también en vertical y horizontal).
Creamos un documento nuevo en el menú Archivo>Nuevo…, y, en la ventana emergente elegimos un Tamaño preestablecido de 1024x768 píxeles. Seleccionamos la Herramienta Texto y pulsamos en el centro de la imagen. Escribimos, por ejemplo, la frase Texto en Photoshop. Como veis, el texto se convierte automáticamente en una capa independiente (cuyo nombre es el texto tecleado) y podrá ser editado y modificado en cualquier momento (siempre que no guardemos la imagen en formato JPG). Vamos al menú Selección>Todo y quedará seleccionado el texto (con unos colores muy raros: en negativo). En la Barra de Opciones del texto, podemos controlar diversos parámetros (de izquierda a derecha y sin dejar de seleccionar el texto): •
Cambiar la orientación del texto entre Horizontal y Vertical.
•
Cambiar el tipo de Letra (escogeremos el tipo Arial Black, porque es muy fácil de ver y leer)
• • • • • •
Cambiar el estilo (regular o romana, cursiva, negrita…; Arial Black no permite estos cambios) Cambiar el tamaño (tecleamos un tamaño grandote, de 72 puntos). Cambiar el suavizado (esto lo soslayamos) Cambiar la alineación (elegimos centrada) Cambiar el color (podéis elegir, yo de momento lo prefiero negro) Deformar el texto, con las opciones de la ilustración (lo mismo, podéis jugar).
José-Manuel Benito Álvarez
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Abrir las paletas Carácter y Párrafo (con más alternativas que de momento sólo interesan a profesionales). Realmente, las opciones básicas son sencillas e intuitivas. Así que pasamos al siguiente ejercicio.
ESTILOS DE TEXTO Con el primer documento de texto que hemos hecho en esta sesión vamos a dar un paseo por los estilos de texto. Seleccionamos la frase Texto en Photoshop y vamos a la paleta Estilos (directamente si no está oculta o, si lo está, en el menú Ventana>Estilos). A la derecha de la paleta, un triángulo delata la existencia de un menú, lo pulsamos y vemos numerosas opciones, bajamos hasta Efectos de Texto y pulsamos OK en la ventana de confirmación.
La paleta Estilo ahora muestra una larga panoplia de efectos que podemos aplicar al texto con sólo hacer clic. Podemos irlos viendo para conocerlos, comprobaremos que algunos son más estéticos que otros. ¿Quién sabe cuándo tendremos ocasión de usarlos todos? (para anular el estilo podemos pulsar el pequeño icono con forma de señal de prohibido que hay debajo de la paleta). Aunque hemos elegido estilos especialmente diseñados para texto, podemos aplicar otros estilos, texturas y efectos de la paleta. Por otra parte, también se pueden cambiar ciertos parámetros manualmente en la paleta capas.
MÁSCARA DE TEXTO Abramos, por ejemplo, la imagen Pimientos.jpg en el directorio del CD Practicas/Retoques Creativos 2/Textos. En la Herramienta de Texto elegimos Máscara de texto Horizontal (tipo Arial Black, tamaño 100 puntos, alineación centrada) y pulsamos con ella en el centro de la imagen, justo sobre el pimiento amarillo (de repente todo se volverá rojo, indicando que estamos trabajando en Modo
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Máscara). Tecleamos la palabra Pimientos y pulsamos la V de color verde de arriba a la derecha. El texto se ha convertido en una selección a la que podemos dar varios usos: •
Podemos pulsar Suprimir para dejar un espacio en blanco (o con el color de fondo) con el texto; esto no es muy práctico, es mejor escribir un texto normal del color deseado.
•
Podemos copiar para pegar en otra imagen o crear una nueva capa con el texto abarrotado de pimientos.
•
Podemos rellenar la selección de un color, un motivo o un degradado (menú Edición>Rellenar…) o cambiar la Fusión con el fondo también por medio del comando Rellenar… (ciertos modos de fusión sólo funcionan con un color seleccionado que no sea el negro ni el blanco).
•
Podemos contornear la selección con uno o varios píxeles del color que queramos (menú Edición>Contornear…). Etc.
OPCIONES DE FUSIÓN PARA TEXTO Antes hemos visto como rellenar un texto con el contenido de una imagen, pero ese método no me acaba de gustar, porque el texto se rasteriza y no es posible editarlo. Por eso prefiero seguir la siguiente fórmula que practicaremos con el archivo Burbujas,jpg en el directorio del CD Practicas/Retoques Creativos 2/Textos. 1.
Con el archivo abierto pulsamos en la Herramienta Texto (estándar de Texto Horizontal, no la máscara) y, si tiene parámetros alterados los cambiamos a tipo Arial Black, tamaño 100 puntos, alineación centrada, color negro. Tecleamos la palabra Burbujas.
2.
Vamos a la Paleta Capas y duplicamos la capa Fondo que estará bajo la capa de texto Burbujas (os recuerdo que podéis copiar la capa siguiendo dos métodos diferentes, yendo al menú Capa>Duplicar capa… o en la Paleta Capas, arrastrando la miniatura hasta el icono con forma de papelito).
3.
Ocultamos la capa Fondo (pulsando en el ojo) y movemos la capa Fondo copia hasta que quede encima de la capa de texto Burbujas (esto se hace simplemente arrastrando y soltando dentro de la paleta capas). Veremos que el texto queda oculto por la imagen.
4.
Vamos al menú Capa>Agrupar con anterior y la capa frontal desaparecerá excepto en las zonas en las que coincida con el texto (fijaos en como se representa la capa Fondo copia en la paleta capas, movida hacia la derecha y con una flechita en ángulo que nos avisa de que está agrupada). Si seleccionamos la capa texto Burbujas en la paleta capas, podremos moverlo como un objeto, o editarlo para cambiar el contenido.
Este sistema me gusta más porque es más flexible y versátil. y no perdemos información ni en la imagen ni en el texto. Además, podemos aplicar ciertas opciones al texto (como sombras paralelas, por ejemplo) para que gane en interés.
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Profundicemos un poco más en este tipo de retoques. Cerramos Burbujas.jpg y abrimos el archivo Guantes.jpg, en el directorio del CD Practicas/Retoques Creativos 2/Textos. Operamos en principio de manera semejante: 1.
Con la Herramienta Texto tecleamos la palabra Guantes, duplicamos la capa Fondo y ponemos la copia sobre la capa de texto Guantes (pero ahora no ocultamos la capa Fondo). Seleccionamos la capa Fondo copia y en el menú Capa>Agrupar con anterior. Como no hemos ocultado la capa del fondo, no veremos el texto, porque ambos tienen motivos idénticos.
2.
Seleccionamos la capa de texto Guantes con la Paleta de Capas y en la misma paleta Configuramos el modo de Fusión: a.
Probemos sucesivamente con los Modos Multiplicar, Subexponer color, Subexposición lineal, Trama, Sobreexponer color, Sobreexposición lineal, Superponer (el efecto casi no se ve, es como una marca de agua) y Exclusión.
b.
Ahora vamos al menú Capa>Estilo de Capa… y probamos algún estilo. Por ejemplo, sombra paralela (con los siguientes valores: opacidad 75%, ángulo 135º, distancia 28 píxeles, extensión 0%, tamaño 40 píxeles) y, de nuevo en la paleta capas volvemos al modo de fusión Normal. Podemos probar otros comandos en el Estilo de la capa.
Este procedimiento me encanta porque puedo editar el tamaño del texto u otros parámetros tranquilamente.
PASAR DE FOTOGRAFÍAS EN COLOR A BLANCO Y NEGRO Convertir una fotografía en color a Blanco y Negro es tan sencillo que, evidentemente, no necesitamos Photoshop para hacerlo: menú Imagen>Modo>Escala de Grises. Aunque esta ruta es la más corta no es la mejor, ya que para imprimir o revelar habrá que convertir la imagen de nuevo a RGB. Además, los aficionados con experiencia en fotografía de carrete en blanco y negro (aquéllos que incluso tienen su propio laboratorio casero) advertirán que el resultado es de escasa calidad puesto que el modo escala de grises sólo tiene 256 niveles de intensidad.
De hecho, en Photoshop, la conversión de color a blanco y negro es todo un arte. Siento deciros que, en este campo, me falta técnica y experiencia. Sin embargo, puedo orientaros ligeramente. Practicaremos con la imagen Arboles.psd del directorio del CD Practicas/Retoques Creativos 2/Blanco y Negro. Probaremos la opción ya citada, la más sencilla, con el menú Imagen>Modo>Escala de Grises y luego otros métodos (debido a mi inexperiencia, yo suelo actuar por el método de Ensayo y Error, usando siempre una copia del original para evitar la pérdida de información que supone eliminar los colores): •
Desaturar: El primer paso es no convertir la imagen a Escala de grises, sino utilizar el menú Imagen>Ajustes>Desaturar, solo con eso la imagen es más rica en tonos de gris.
•
Extracción de Canales: Otro método sencillo es abrir la Paleta Canales y elegir un solo canal haciendo clic en su miniatura. Podemos comprobar cuál es el que más nos gusta y pulsarlo para que sólo se vea ese canal. Abrimos el menú Imagen>Modo>Escala de Grises y nos saldrá una ventana de confirmación, pulsamos OK.
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•
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Modo LAB: Es parecido al anterior ya que es un método de extracción de canales. Primero pasamos la imagen a modo Lab en menú Imagen>Modo>Color Lab; después, en la paleta canales, seleccionamos sólo el Canal Luminosidad. A continuación cambiamos al modo Escala de Grises como se acaba de explicar en el punto anterior.
•
Mezclador de Canales: Los devotos de la fotografía tradicional en Blanco y Negro suelen utilizar determinados filtros coloreados para aclarar u oscurecer selectivamente determinados tonos. Estos filtros no añaden ningún tinte, sino que actúan como correctores para resaltar elementos concretos de la imagen aumentando su contraste (por ejemplo, un filtro anaranjado intensifica el cielo). En Photoshop se puede simular el efecto de los filtros coloreados por medio del menú Imagen>Ajustes>Mezclador de Canales. Al abrirse la ventana para ajustar los parámetros, pulsamos la casilla Monocromo que está abajo a la izquierda. Después ensayamos deslizando los triangulitos de los Canales de Origen hasta encontrar un resultado a nuestro gusto. Es muy conveniente que el porcentaje de los tres canales juntos sume 100, de otro modo estaríamos dañando el contraste de la foto. Al pulsar OK la imagen permanece en modo RGB, pero desaturada.
Los expertos en fotografía en blanco y negro podrán emular los filtros de color de toda la vida, únicamente tienen que adivinar qué combinación hay que usar para reproducir la corrección de éste u otro filtro concreto. O bien actuar por Ensayo y Error, como hago yo, pero con más conocimiento de causa. Por otro lado, una vez obtenida la imagen en blanco y negro, podemos mejorarla con la herramienta Niveles.
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DUOTONOS En la fotografía de carrete en Blanco y Negro, un Duotono consiste en dar un tinte determinado a los grises de la imagen. Al usar dos tintas, en lugar de una sola, aunque la imagen sea en blanco y negro, ganará en riqueza de matices, sobre todo al imprimirla porque ya no tenemos 256 niveles de gris, sino el doble. Quizá el duotono más conocido sea el sepia, pero desde siempre existen más variantes de color. Con Photoshop las posibilidades son muy amplias, más de las que podíamos imaginar en el cuarto oscuro. 1.
DUOTONO: Como acabamos de indicar consiste teñir una fotografía en blanco y negro dándole un aspecto más rico y sugerente. Originalmente, se usaba una “Segunda Tinta” que iba en el papel de revelado, pero con Photoshop se aplica sobre la propia imagen. La opción habitual pasa por convertir la foto a escala de grises por alguno de los métodos descritos arriba y, después, teñir la imagen; pero también se puede hacer directamente en RGB. Abrimos la imagen Ventanas.jpg en el CD Practicas/Retoques Creativos 2/Duotono: a continuación os propongo dos posibilidades: a.
Desde Blanco y Negro: Una vez transformada la imagen a escala de Grises vamos al menú Imagen>Modo>Duotono…, entonces se abrirá la ventana Opciones de duotono. En esta ventana podemos elegir las dos tintas. Es habitual dejar la tinta 1 en negro y jugar con la tinta 2 (se hace clic en el cuadro de color para elegir la gama, y en el cuadro con la diagonal para alterar la curva de contraste: es importante que las dos curvas no sean iguales, sobre todo abajo, sino las sombras se empastarán demasiado). Si no estamos muy familiarizados, podemos cargar uno de los Duotonos que vienen con Photoshop. Pulsamos el botón Cargar y exploramos hasta la carpeta Pantone® Duotones, por ejemplo. Si no nos gusta podemos ir cargando otras muestras y ver el resultado antes de aceptar.
b.
Desde Color: es tan fácil como ir a la Paleta Capas, crear una capa nueva (o, con el menú Capa>Nueva>Capa…, yo he denominado la capa con el nombre Tono, para no perderme). En el cuadro de herramientas seleccionamos el Bote de Pintura y elegimos un color con los cuadraditos de Configurar color. Hacemos clic en la imagen para llenarlo todo del matiz elegido. A continuación, en la Paleta Capas, cambiamos las Opciones de Fusión de la capa al modo Tono. Podemos cambiar el duotono substituyendo una y otra vez el color del bote de pintura y echándolo sobre la capa que hemos creado (la imagen original no sufrirá pérdida y podemos experimentar cuanto queramos).
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2.
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SEPIA: Las fotos de color sepia son una tradición en la fotografía que surgió por necesidad, pero que se ha conservado por estética. Virar la imagen a un tono sepia es, verdaderamente, un tipo particular de Duotono, así que el proceso básico ya ha sido explicado (solo que la segunda tinta a elegir sería marrón o naranja). Casi todos los programas de tratamiento digital de imagen poseen métodos instantáneos para obtener fotos sepia, y Photoshop no podía ser menos. Podemos optar por un Duotono del directorio Pantone® Duotones (buscando los que se llamen orange o brown); o bien aprovechar uno de los automatismos de la paleta Acciones (menú Ventana>Acciones), seleccionamos la acción Tono sepia (capa) y en la parte inferior de la paleta pulsar el triángulo (play) para Ejecutar la selección.
Si espiamos en las paletas Capas e Historia, podremos ver que el sistema que ha usado Photoshop es duplicar la capa Fondo, desaturarla y aplicarle determinados ajustes con el control Tono/Saturación, como se ve en la figura (haciendo doble clic en la capa superior podemos editar dichos ajustes).
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VIRADOS MÚLTIPLES En el cuarto oscuro tradicional, los virados múltiples se conseguían con sustancias químicas llamadas viradores que reaccionaban a la luz a distinta velocidad, produciendo efectos cromáticos diferentes según la imagen original. En Photoshop, como habréis imaginado, todo es más sencillo. Vamos a utilizar un método que me enseñó mi amigo David Haydon, parecido al de los duotonos, con la imagen llamada Humo.jpg en el directorio del CD Practicas/Retoques Creativos 2/Virado.
Sobre la imagen seleccionada creamos una nueva capa transparente (por ejemplo con el menú Capa>Nueva>Capa…) y la llamamos Virado. Igual que hicimos antes, con el Bote de Pintura, la rellenamos de color, preferiblemente un anaranjado o un marrón terroso (pero todo va en gustos). Después Configuramos el modo de fusión para la capa a Luz Suave. El efecto puede cambiar según el tipo de imagen y según el color que usemos como tinte.
EFECTO “FLOU” Este efecto consiste en hacer algo borrosas las imágenes para darles delicadeza y dulzura. Seguramente a todos nos viene a la mente el famoso fotógrafo británico David Hamilton y sus tomas llenas de sensualidad y nostalgia. A menudo las viejas estrellas de cine lo exigen porque disimula las arrugas y embellece los rostros, consiguiendo mucho glamour. En fotografía tradicional este efecto se conseguía poniendo un filtro difusor ante el objetivo, o, simplemente, una media. En Photoshop se procede del siguiente modo (abrimos el archivo Esfinge.jpg del directorio del CD Practicas/Retoques Creativos 2/Flou): Duplicamos la capa Fondo arrastrando su miniatura al icono de la Paleta Capas con forma de papelito (o, bien, menú Capa>Duplicar capa…). Sobre la nueva capa (Fondo copia) aplicamos un desenfoque muy fuerte con el menú Filtro>Desenfocar>Desenfoque gaussiano…, con un radio de 20 píxeles. Ahora volvemos a la Paleta Capas y Configuramos el modo de fusión para la capa a Trama. Por último, también en la Paleta Capas, reducimos la Opacidad de la capa al 80% (sugiero que
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comprobéis el resultado de cerca, pulsando en la Herramienta Mano y en la barra de opciones, en Píxeles reales).
EFECTO “SABATTIER” Este extravagante efecto fotográfico fue descubierto a finales del siglo XIX por el doctor Armand Sabattier. Consistía en revelar las zonas claras de un modo natural, e invertir la luminosidad las zonas más oscuras, casi como en un negativo. Mientras que en el cuarto oscuro este efecto es complicado, en Photoshop es muy fácil. Lo practicaremos con la imagen Acueducto.jpg en el CD Practicas/Retoques Creativos 2/Efecto Sabattier. No es un retoque que me guste demasiado, pero nos permitirá tomar contacto con una potente herramienta de Photoshop llamada curvas. La tenemos en el menú Imagen>Ajustes>Curvas… Aparecerá una ventana con un cuadrado cruzado por una diagonal. Esa línea puede ser modificada a través de puntos manejadores, como si fuera elástica. Los cambios en la curva pueden generar variaciones insólitas en la imagen. El efecto Sabattier se consigue dibujando una curva en forma de U (que invierte los tonos oscuros, respetando los colores y los tonos claros), pero podéis trastear todo lo que queráis (cada vez que queráis volver a la imagen original debéis pulsar la tecla Alt y el botón Restaurar): las curvas en A invierten los tonos claros, las curvas en M no sólo invierten los tonos, sino también los colores…
La Herramienta curvas, usada con sutileza, es la mejor elección para corregir el color en imágenes digitales, pero el método requiere conocimientos un poco más avanzados.
MARCOS SENCILLOS En el menú Archivo>Abrir recientes tenemos algunos de las fotos con las que hemos estado trabajando. Elegid una y vamos a crearle algunos tipos de marcos sencillos. Si usáramos Elements podríamos acceder a los marcos preestablecidos con un solo clic. En Photoshop sólo hay unos catorce. Eso no quiere decir que no se puedan hace millares de variantes, pero de un modo más artesanal y tedioso.
El método más sencillo es añadir un marco de color plano. Para elegirlo tenemos que hacer un clic en los cuadrados de color del cuadro de herramientas. Pero debemos pulsar en el cuadrado que está
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debajo, para Configurar el Color de Fondo, que es el que se aplicará a nuestro marco. Después vamos al menú Imagen>Tamaño de lienzo… En la ventana que sale podremos ver las medidas del archivo.
Si decidimos, por ejemplo, poner un marco de medio centímetro alrededor, basta con que en las casillas de Anchura y Altura, pongamos un tamaño de un centímetro mayor (medio centímetro en cada borde) y pulsamos OK. Una forma mucho más sofisticada es ir al menú Ventana>Acciones. En la esquina superior derecha de la citada paleta hay un círculo con un triángulo dentro. Lo pulsamos para desplegar un menú y, entre sus muchas posibilidades elegimos cuadros.atn, que está casi abajo del todo. Photoshop cargará una serie de Acciones enfocadas a crear marcos. Las acciones de Photoshop son similares a lo que se llama en informática Macros, es decir, un conjunto de comandos encadenados que obtienen un objetivo determinado. De este modo, con un solo clic puedes automatizar una tarea que implicaría recurrir a varios menús, herramientas y comandos. Podemos grabar nuestras propias acciones cuando repitamos habitualmente alguna fórmula en muchas fotos, y usarlas cómodamente cuando lo necesitemos. La Paleta Acciones es, pues, como una grabadora con sus mandos Play (un triángulo), Rec. (un círculo) y Stop (un cuadrado).
Para probar diversos marcos podéis seleccionar su nombre en la Paleta Acciones y pulsar Play, luego de comprobar el resultado, vamos al menú Archivo>Volver y recuperamos el estado original de la foto (también podemos ir a la Paleta Historia y buscar la primera Instantánea de la foto). No usamos el comando Deshacer (Control+Z), porque como las acciones incluyen muchos comandos, no sería muy práctico.
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PANORÁMICAS SENCILLAS En Photoshop 7 no hay una herramienta específica para crear panorámicas pegando varias fotos. Sin embargo, tanto en Elements con en la versión actualizada de Photoshop, la llamada CS, hay un práctico módulo llamado Photomerge (en la imagen) que facilita la labor enormemente. Como no hay otro remedio, nosotros lo haremos a mano.
Las panorámicas requieren cierta práctica, y es aconsejable el uso del trípode, así como usar la focal más cerrada de la cámara (un tele corto), para evitar la distorsión de las imágenes y procurar que se solapen; de lo contrario será muy difícil conseguir que casen. Sin embargo, con práctica y mucha paciencia, se consiguen panorámicas y mosaicos aún con focales de 25 mm., otorgando un campo de visión espectacular, sin necesidad de desembolsar dinero en costosos objetivos.
He preparado varias fotos que forman una panorámica bastante amplia. He elegido estas imágenes porque son muy fáciles de montar, aunque no son las más interesantes del mundo. Abrimos los archivos Pano1.jpg, Pano2.jpg, Pano3.jpg… (directorio del CD Practicas/Retoques Creativos 2/Panoramicas). Sobre la primera imagen vamos a la Paleta Capas y hacemos doble clic en la miniatura de la capa Fondo; de este modo, se convierte en una capa independiente. A continuación vamos al menú Imagen>Tamaño de lienzo… Observamos las dimensiones del archivo. Como vamos a pegar muchas fotos a lo ancho, ampliamos la anchura (60 cm., o así), tecleamos el resultado en la casilla Anchura y fijamos el Ancla a la izquierda (también la altura, fijándola en 21 cm.); pulsamos OK (al haber fijado el ancla a la izquierda, el soporte de la foto crecerá hacia la derecha, dejando espacio para las otras imágenes).
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Vamos a la segunda foto, menú Selección>Todo, después menú Edición>Copiar. Volvemos a la primera imagen y menú Edición>Pegar. En el cuadro de Herramientas elegimos la Herramienta Mover y colocamos la imagen para que ajuste sobre la anterior lo más posible (para ajustarlo mejor, podemos reducir la opacidad de la capa al 60% en la Paleta Capas, una vez ajustadas, la devolvemos al 100%). Repetimos la operación con la tercera toma y con la cuarta, y así sucesivamente (no hace falta terminar la panorámica, basta con practicar un poco). Como veis, debido a que tomé las imágenes a pulso es imposible que encajen a la perfección: algunas están más altas que otras, la gente se movía, el sol se escondía tras las nubes y cambiaba la luminosidad…. Además hay que jugar con las capas, colocando unas encima de otras en la Plata Capas, para ver el mejor resultado. En la imagen superior veis uno de mis intentos. También, conviene borrar la parte más visible de los bordes con un goma de pincel grande (100 a 200 píxeles) y escasa opacidad (40%) para suavizar las transiciones.
Para afinar la foto hay que hacer varios retoques, distorsiones, clonaciones, etc. Hasta conseguir que casi no se notase el collage.
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SÉPTIMA SESIÓN: EXPORTAR LAS IMÁGENES Las fotografías, e imágenes en general, tratadas con Photoshop, tendrán básicamente dos propósitos: ser vistas a través de una pantalla, o ser vistas estampadas en papel.
CAMBIAR LA RESOLUCIÓN Hasta ahora hemos estado trabajando con la resolución y el tamaño de los archivos tal como salían de la cámara o del CD. Ahora debemos determinar ambos parámetros en función del objetivo de las imágenes. La resolución de una foto destinada a ser vista en una pantalla no es la misma que la que debe ser impresa, por eso es necesario saber cómo cambiarla.
Desde que yo uso ordenadores, la resolución para cualquier imagen que vaya a ser vista a través de una pantalla (televisor, monitor…) es de 72 puntos por pulgada (este estándar se mantiene a pesar de que, actualmente, los monitores de ordenador tienen una resolución en torno a los 94 ppp). En cambio para copias en papel la resolución puede ser muy variada, en función de la calidad que se quiera obtener, aunque yo pienso que 300 ppp bastan y sobran. De hecho, en la mayoría de laboratorios comerciales y fotomecánicas profesionales te sugieren esta cifra. Hay dos formas básicas de cambiar la resolución y el tamaño de una imagen, una es el comando Tamaño de Imagen, la otra ya la conocemos, es la Herramienta Recortar. Más tarde volveremos a manejar los recortes por lo que ahora nos centramos en la ventana TAMAÑO DE IMAGEN: es un menú que aparece en la ruta Imagen>Tamaño de Imagen… Es lo más adecuado antes de imprimir. Se abre una ventana de diálogo e información como ésta:
Lo más lógico es que queramos adaptar las medidas por un lado, y la resolución por otro. Abrimos el archivo Arbol seco.jpg (en el directorio del CD Prácticas/Exportar imágenes). Pongamos que deseo imprimir la foto con 20 centímetros de anchura y 15 de altura. Con la casilla Remuestrear imagen sin activar, tecleamos la resolución de impresión (300 ppp). Observamos que la anchura y la altura se cambian. Nos interesa saber el tamaño original del documento se parece a lo que deseamos obtener. Si no hay mucha diferencia vamos bien, aunque es un poco más pequeño.
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Para poder alterar las dimensiones sin que Photoshop reduzca la resolución, hay que activar ya la casilla Remuestrear la imagen (dejando pulsada la opción Restringir proporciones): esta acción rompe el vínculo en forma de cadena con el tamaño. Ahora introducimos la anchura y el programa calcula la altura. Queda un poco corto de altura, pero ya estamos satisfechos. Al pulsar OK Photoshop crea los píxeles necesarios para adaptar el tamaño, es lo que se llama Remuestrear.
IMPRIMIR IMPRIMIR CON PREVISUALIZACIÓN Como el comando imprimir tiene escasas opciones de control, conviene imprimir siempre con el menú Archivo>Imprimir con previsualización…, en el que podemos revisar el modo en que saldrá la imagen por impresora, configurar la página, reducir la escala e, incluso, acceder a funciones avanzadas de Gestión de Color.
Si la imagen no cabe en el formato de página, podemos Escalar para ajustarla, manualmente (arrastrando los cuadraditos de las esquinas o tecleando el porcentaje de escala), bien de un modo automático. También podemos determinar los márgenes de impresión y, evitar que la figura quede arrinconada en un extremo del papel, moviéndola o centrándola, lo que es muy práctico cuando usamos papel especial y vamos a enmarcar la fotografía.
IMPRIMIR VARIAS COPIAS Si deseamos sacar varias copias de la misma fotografía aprovechando al máximo el papel, podemos recurrir a los automatismo de Photoshop. Un ejemplo muy didáctico es sacar muchas copias de
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nuestra
foto
de
carné
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para
ir
usándolas
a
medida
que
las
necesitamos.
Menú
Archivo>Automatizar>Conjunto de imágenes… En la enorme ventana de diálogo que sale tenemos numerosas opciones, las más importantes son Seleccionar, para buscar el archivo; Tamaño de página (8x10 pulgadas es algo menos que A4) y Composición (donde elegimos el tamaño y número de copias).
Si queremos hacer la misma operación para muchas fotos, por ejemplo, las fotos de carné de toda la familia, en la parte de arriba de la ventana, seleccionamos Usar>Carpeta y seleccionar con el navegador la carpeta donde tenemos las fotos (no lo hagáis aquí, que lleva su tiempo).
IMPRIMIR VARIAS IMÁGENES EN UNA HOJA Pensad ahora en que tenéis que hacer la lista de los alumnos de un determinado curso. Pues existe otro automatismo que permite hacerlo con un par de clics de ratón. Vamos al menú Archivo>Automatizar>Hoja de contactos II… En la ventana seleccionamos la carpeta donde tenemos la fotos, el tamaño de la hoja de papel que vamos a usar y las columnas y filas que debe tener el documento. Si en el título de las fotos hemos puesto el apellido del alumno, además de ordenarlos alfabéticamente, podemos indicar que aparezca bajo la foto.
Otra interesante utilidad de esta automatización es hacerse un pequeño álbum de fotos. Sólo hay que poner menos figuras y más grandes. Sin embargo, hay aplicaciones mejores que Photoshop para esto.
José-Manuel Benito Álvarez
CFIE de Medina del Campo
TIENDAS DE REVELADO Ya os he comentado que cuando tengo fotos decentes, prefiero llevarlas a una tienda de revelado que imprimirlas en casa. No uso el revelado on-Line porque soy de los que “disfrutan” de una Línea Telefónica Básica, y no ADSL (para enviar las fotos a revelar por Internet necesitas ancho de banda). En cualquier caso, creo que cómo lleguen las fotos al laboratorio es lo de menos. El revelado comercial para imágenes digitales suele ser de dos tipos: •
Impresoras de Sublimación: Se trata de impresoras muy parecidas a las de chorro de tinta, pero, en lugar de tinta líquida utilizan pastillas sólidas que se convierten en gas (sublimación) antes de estamparse sobre el papel. Como la mezcla de tintas se hace en estado gaseoso, las impresoras de Sublimación consiguen colores reales con cada punto de pigmento. Por ejemplo, el gris real existe en las impresoras de sublimación, o el rosa, o el verde oscuro. Por otro lado el papel que usan es especial y va revestido de una película protectora. En una impresora de chorro de tinta, cada color se consigue a través de la impresión en papel de cuatro puntitos, el cian, el magenta, el amarillo y el negro. Al ser puntitos microscópicos y muy apretados, el ojo los percibe como una sola macha de una tonalidad, pero son cuatro colores. Una zona gris, por ejemplo, se consigue separando los puntitos negros, pero la impresora es incapaz de pintar el gris real. Esto es lo que se llamada tramado de difusión. Esto hace que, a misma resolución (por ejemplo, 300 ppp) las impresoras de sublimación den una imagen con mayor calidad y brillo que las de chorro de tinta domésticas. Al margen de las tiendas de revelado, están apareciendo pequeñas impresoras de sublimación para uso doméstico cuyos resultados son muy buenos para impresión directa de fotografías.
•
Revelado Fotoquímico: en este caso, un ordenador conectado a un proyector RGB hace las veces de la ampliadora del cuarto oscuro. La imagen es proyectada sobre papel fotosensible, el mismo que se usa para negativos de carrete. De este modo el revelado es muy similar al tradicional y, para mí, el que ofrece mejor relación calidad/precio, siempre que no vayas con las fotos de dos en dos. En cualquier caso, en las tiendas y kioscos de revelado tienen unas medidas de papel
estandarizadas y sus aparatos tienen una resolución óptima (que suele ser 300 ppp para revelado fotoquímico y 310 ppp para revelado de sublimación). Como la mayoría de los clientes no se preocupan más que de disparar y revelar, en la tienda se ven obligados a realizar un procesado previo para adaptar el tamaño y la resolución de las imágenes a las características de sus aparatos. Por ese concepto (manipulación) cobran una cierta cantidad aparte de lo que cueste cada copia. A veces, quienes realizan el proceso son profesionales, otras veces, serán meros empleados, en cualquier caso seguro que van mal de tiempo. Por eso, lo mejor es llevar nuestras fotos ya listas y que las “manoseen” lo menos posible. Os pongo una lista de los tamaños de papel fotográfico normalizados en las tiendas (en negrita los más comunes):
6x9 cm.
9x13 cm. 15x20 cm. 20x30 cm.
7x10 cm. 10x15 cm. 18x24 cm. 24x30 cm. 9x12 cm. 13x18 cm. 20x25 cm. 30x40 cm. Para adaptar nuestras fotos a estos tamaños, debemos usar la Herramienta de Recorte, en el Cuadro de Herramientas; rellenado los datos en la barra de opciones, por ejemplo como en la ilustración:
Tratamiento Digital de la Imagen
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Después arrastramos la Herramienta de recorte por la foto, colocamos el marco de recorte de modo que no elimine nada importante y la composición resulte equilibrada y elegante, y pulsamos en Aprobar operación de recorte (la V de color verde de arriba a la derecha). Habrá que alternar las medidas de la anchura y la altura según sean las fotos Verticales u Horizontales (apaisadas). Vamos grabando las fotos en un directorio que denominaremos “13x18”, luego otras las pondremos en otro directorio llamado “10x15”, y otras en el directorio llamado “18x24”. Clasificándolas por tamaños (así, en la tienda sabrán enseguida el tamaño de copias que queremos y no habrá confusión) lo grabamos en un CD-R y lo llevamos al laboratorio.
INTERNET HACER UNA WEB DE IMÁGENES Suponiendo que tengamos un Servidor en Internet donde “alojar” nuestros archivos y nuestras fotos, Photoshop ofrece un sencillo sistema para crear una página de imágenes. La verdad es que las opciones son muy limitadas y el resultado de dudoso gusto. Otros programas, considerablemente más baratos, por ejemplo, algunos de los que hablé la principio del curso, hacen esta labor mucho más fácil y eficiente.
Menú Archivo>Automatizar>Galería de fotografías Web… Se abre una gran ventana de diálogo donde vamos eligiendo: uno de los once estilos o apariencias de la Web (por ejemplo Gris y azul Horizontal), la carpeta de origen donde tenemos las fotos (el directorio del CD Prácticas/Exportar imágenes) y la carpeta de destino (creamos una en el ordenador), donde generará los archivos para la web, y las opciones del título de la Web, el tamaño de las vistas en miniatura y el tamaño y calidad JPEG de las vistas ampliadas, el nombre de las fotos…
José-Manuel Benito Álvarez
CFIE de Medina del Campo
Al pulsar OK se crean los archivos y subcarpetas que debemos subir al servidor de Internet. Pero antes podemos comprobar su aspecto en un navegador abriendo el archivo Index.htm en la carpeta que hayamos seleccionado.
ENVIAR CORREOS ELECTRÓNICOS Yo soy muy aficionado a enviar a mis amigos fotografías a través del correo electrónico. Muchas veces ellos también lo hacen. A veces no se dan cuenta de mis limitaciones telefónicas y las fotos que recibo ocupan 500 KB o, incluso 1 MB. Como supondréis, estoy bastante tiempo mirando la barra de progreso de la descarga, entre ansioso y fastidiado. Cuando intento explicárselo, se defienden argumentando su ignorancia. Eso es bastante normal.
Para que una foto se vea bien en el correo no tiene por qué exceder de los 640x480 píxeles y unos 100 KB de memoria. Si, en algún caso, alguien desea una copia para imprimir podemos hacer una excepción, pero debemos suponer que van a verlas en la pantalla, nada más. Para conseguir esta resolución y obtener la máxima calidad, Photoshop ofrece una estupenda herramienta llamada Guardar para la Web (podríamos usar también la opción Archivo>Guardar como…, pero el proceso tiene varias ventanas sucesivas y no vemos los resultados hasta haber terminado la operación). Abrimos el archivo cielo rosa.jpg (directorio del CD Prácticas/Exportar imágenes) y el menú Archivo>Guardar para Web… y se abre una ventana de aspecto complejo. Vamos por partes: 1.
Arriba hay cuatro lengüetas, si pulsamos en la que pone “Optimizada”, podremos ver el archivo original que vamos a guardar comprimido y reducido (debajo de la imagen aparecen datos del tamaño y la memoria que ocupa, estos datos son cruciales para obtener buenos resultados).
2.
A la izquierda hay seis herramientas, usaremos sólo la mano y la lupa.
3.
A la derecha, bajo los botones de Guardar, Cancelar y Listo, hay un cuadro de Ajustes. En el menú debemos elegir JPEG Media o mejor, si es posible, JPEG Alta (se refiere, claro, a la calidad).
Tratamiento Digital de la Imagen
4.
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Abajo a la derecha, otro cuadro con dos lengüetas, debemos seleccionar la que pone Tamaño de Imagen. Después, donde indica Tamaño nuevo, teclear el tamaño que deseamos generar. Como digo, mi consejo es 640 ó 480 píxeles (depende de la orientación de la foto); basta con teclear la primera medida (anchura), porque la otra se calcula sola. Pulsamos Aplicar y se realizarán los cálculos. Con la mano revisaremos la calidad de la foto y
comprobaremos su tamaño y cantidad de memoria en el texto de abajo. Si no nos gusta, cambiamos la calidad o el tamaño hasta estar satisfechos. Entonces pulsamos Guardar, le ponemos un nombre y tendremos un archivo de calidad y lo suficientemente ligero para enviarlo por correo.
ALGO DE BIBLIOGRAFÍA Aaland, Mikel (2001): Photoshop Elements. Anaya Multimedia. Ang, Tom (2002): Manual de fotografía digital. Ediciones Omega. Kelby, Scout (2003): Manipula tus fotografías digitales con Photoshop. Anaya Multimedia Langford, Michael (1986): La fotografía paso a paso. Ediciones Hermann Blume. Willmore, Ben (2004): Adobe Photoshop CS Avanzado. Anaya Multimedia.
ALGUNAS WEBS ÚTILES Foro de Fotografía Macuarium: http://www.macuarium.com/foro/index.php?s=581632aac4aebfd6910fc2540391264c&showforum=5 The Luminous Landscape: http://luminous-landscape.com/ Imagen digital: http://gusgsm.com/ Qué sabes de: Fotografía digital: http://www.quesabesde.com/camdig/noticias.asp Egpis: http://www.egpis.com/pshop.shtml Revista SuperFoto: http://www.superfoto.net Es.Rec.Fotografía: http://www.esrecfotografia.org/ Arte y Fotografía: http://www.difo.uah.es/curso
José-Manuel Benito Álvarez
CFIE de Medina del Campo
ÍNDICE PRIMERA SESIÓN: PRESENTACIÓN DE LA APLICACIÓN ..............................................................2 Trabajar con Photoshop ..............................................................................................................4 El Cuadro de Herramientas ........................................................................................................6 Las paletas Flotantes ...................................................................................................................8 SEGUNDA SESIÓN: TIPOS DE I MAGEN DIGITAL .......................................................................10 Dimensiones, tamaño y resolución de las fotos .......................................................................11 Formatos que maneja Photoshop..............................................................................................12 Obtener las imágenes.................................................................................................................13 Modos de Color y Canales de Color.........................................................................................15 Canales Alfa y máscaras de Capa ............................................................................................18 TERCERA SESIÓN: PROCESOS BÁSICOS PARA MEJORAR LAS IMÁGENES ...............................19 Reencuadrar ...............................................................................................................................19 Corregir Niveles .........................................................................................................................22 Un proceso integral de mejora..................................................................................................25 CUARTA SESIÓN: PROCESOS BÁSICOS PARA SOLUCIONAR PROBLEMAS ................................30 Imágenes Inclinadas ..................................................................................................................30 Imágenes con la Perspectiva Distorsionada ............................................................................31 Efecto Barril ...............................................................................................................................31 Fotos Oscuras (Subexpuestas) ..................................................................................................32 Fotos Quemadas (Sobreexpuestas) ...........................................................................................33 Equilibrar Rango........................................................................................................................34 Reducir Ruido .............................................................................................................................35 Balance de blancos ....................................................................................................................37 QUINTA SESIÓN: RETOCAR I MÁGENES (PRIMERA PARTE) .......................................................39 El Modo “Máscara rápida” ......................................................................................................39 Borrar elementos........................................................................................................................40 Añadir elementos........................................................................................................................41 Efectos de Movimiento ...............................................................................................................43 Distorsionar y Caricaturizar .....................................................................................................45 SEXTA SESIÓN: RETOCAR IMÁGENES ( SEGUNDA PARTE).........................................................48 Texto en Photoshop ....................................................................................................................48 Pasar de fotografías en color a Blanco y Negro......................................................................51 Duotonos.....................................................................................................................................53 Virados Múltiples .......................................................................................................................55 Efecto “Flou” .............................................................................................................................55 Efecto “Sabattier” .....................................................................................................................56 Marcos Sencillos ........................................................................................................................56 Panorámicas Sencillas...............................................................................................................58 SÉPTIMA SESIÓN: EXPORTAR LAS I MÁGENES ..........................................................................60 Cambiar la Resolución ..............................................................................................................60 Imprimir ......................................................................................................................................61 Tiendas de revelado ...................................................................................................................63 Internet........................................................................................................................................64