Tormoy, de muebles nuevos o muebles de segunda mano Paseaba por las calles de mi ciudad, sin rumbo fijo, ensimismada en mis pensamientos, dando vueltas, llegando a pasar varias veces por las mismas calles, pensando, pensando, y sin llegar a ninguna solución a mi problema, la verdad es que no sabía qué hacer, miraba los distintos escaparates que me encontraba en el camino, ninguno me llamaba la atención, quizá porque no fueran verdaderamente interesantes o quizá porque no tenían nada que me pudieran ofrecer o que a mí me pudiera interesar o al menos ni siquiera serme mínimamente útil. Para ello, habremos de realizar una modificación de todo el mobiliario de nuestra oficina, de absolutamente todo, desde lo más básico, como el material más imprescindible de oficina, hasta lo más obvio como pueda ser el mobiliario propio de cualquier oficina. Pero antes de continuar contándoos mi historia, quizá debiera deciros cuál es el problema que tantos quebraderos de cabeza me está dando últimamente, aunque la solución no es complicada, la elección sí lo es; sin más, os cuento cuál es esta problemática en la que me encuentro: en mi negocio nos encontramos en una tesitura, nuestros beneficios han bajado un poco, nuestras instalaciones se han quedado obsoletas, tememos que algunos de nuestros clientes se puedan pasar a la competencia, con el consiguiente menoscabo que ello supone para nuestro negocio y nuestros planes de futuro y de ampliación. Por tanto, es necesario y de suma importancia que demos un cambio de rumbo si queremos continuar en el mercado; pero creo que este cambio no ha de ser sólo del uso que hagamos del marketing para mejorar nuestra presencia en el mercado en el que nos movemos, cada vez más competitivo, sino que ha de ser un cambio más profundo, estructural, creo que ya lo tengo, que hemos de cambiar nuestra estrategia de venta y de aproximación a nuestros clientes; pero también es de suma importancia para la mejora de nuestra empresa el realizar una transformación tal que cuando nuestro cliente pase por delante de nuestras instalaciones, éstas le resulten tan atractivas que no tenga más remedio que entrar en nuestras oficinas, que se sienta casi como obligado; sí creo que esta es una buena opción. Algo parecido es lo que me pasó, cuando caminando mientras pensaba en las distintas opciones para la mejora de mi negocio y me encontré con las instalaciones de Tormoy, la sensación que tuve al ver sus instalaciones, el mobiliario, la calidad de los materiales, sus precios económicos y aptos para todos los bolsillos,… me hicieron sentir impelida a entrar, y una vez dentro, resulté gratamente asombrada por la variedad que se abría ante mis ojos, y la amplia oferta que se anunciaba ya desde los primeros pasillos. Por este motivo, por la grata impresión que me causaron las instalaciones de Tormoy es por lo que tomé la decisión de volver, al día siguiente, con mi socio, para que él pudiera valorar la amplia variedad que se ofrece en estas instalaciones, francamente ideal para cualquier oficina, ya sea mediante el empleo de muebles nuevos o de muebles de segunda mano. La diferencia realmente, la encontramos en el precio, puesto que la calidad es prácticamente la misma. Una cosa que vosotros también comprobaréis cuando visitéis las instalaciones de Tormoy es el cuidado que tienen con los detalles, tanto es así que os resultará difícil diferenciar qué mobiliario es nuevo y cuál no lo es, sino de segunda mano. Pero, esto no supone problema alguno, ya que otra de las ventajas que nos encontramos en Tormoy, y que vosotros también podréis comprobar, es el gran planten de técnicos y especialistas profesionales en la materia, que se encuentran en sus instalaciones, dispuestos a asesorarnos sobre cualquier duda que podamos tener, y a aconsejarnos según lo que más y mejor nos interesa a nuestros propios intereses y a aquellos de nuestra empresa. Pero no se acaban aquí las ventajas que se nos ofrecen en las instalaciones de Tormoy, sino que además no nos habremos de preocupar por el traslado del mobiliario que adquiramos, ya que se encargan ellos de realizarlo y en un periodo de tiempo asombrosamente breve: tan solo en un máximo de 21 días, siempre que nuestras oficinas estén ubicadas en territorio español, trasladarán a nuestra ubicación elegida todo el mobiliario que hayamos adquirido en las instalaciones de Tormoy, ya sea este mobiliario nuevo o de ocasión. Así que, en prácticamente nada de tiempo ya podremos comenzar a disfrutar de nuestra oficina con el nuevo look que este mobiliario le habrá de dar; y yo que estaba tan preocupada por cómo iba a poder hacer frente a los gastos de una remodelación de nuestras instalaciones, ojalá hubiera sabido antes de las instalaciones de Tormoy, cuántos quebraderos no me habría
Tormoy, de muebles nuevos o muebles de segunda mano ahorrado, y cuánto tiempo habría ganado. Pero ahora que conozco sus instalaciones ya sé dónde he de acudir cada vez que quiera adquirir algún tipo de mobiliario de oficina: a las instalaciones de Tormoy, haced lo mismo y no os arrepentiréis.