Goia magazine edición febrero marzo 2017 by GOIA MAGAZINE

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Moda sostenible: ¿Realidad o utopía?

El denim protagonista indiscutible de Colombiatex 2017

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Medias de red

Miguel Becerra Diseñador, psicólogo, asesor...

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Street Style Sara Montoya

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Desfiles de moda ¿Exactamente para qué?

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DIRECTOR Raúl Quinayás EDITOR DE ESTILO Carlos Castellar EDITOR DE CONTENIDO Raúl Quinayás COLABORADORES María José Arboleda Vanessa Londoño Kathe Carabalí DIAGRAMCIÓN Raúl Quinayás PRODUCCIÓN FOTOGRÁFICA Oscar Tengana Ferney Jaramillo Gianella Ipia DISTRUBICIÓN www.goiamagazine.com CASA EDITORA Jaguar House Sello editoria CONTÁCTENOS goia.magazine@gmail.com LA PORTADA FOTOGRAFÍA Ferney Jaramillo MODELO Fátima Cabezas AGENCIA NovaModels VESTUARIO Miguel Becerra ACCESORIOS Fabián Felipe Arte & Diseño STYLING María Alejandra Gómez LOCACIÓN Café mi tierra - Menga

LA PERFECCIÓN: NO EXISTE TAL ESTADO.

i algo he aprendido es que toda creación humana está sujeta a la evolución: por tanto, es susceptible de mejorar. No importa quién seas o cuánta experiencia sumes en el oficio; siempre habrá una versión mejorada de aquello que acabas de crear. Obviamente lo ideal sería que fueses tú, quien en un proceso de mejora continua, realizase ese trabajo. Pero no, casi siempre es un tercero quien se lo propone, un alguien que dirá que eso que creaste está mal y que él puede hacerlo mejor. Lo importante de esto, es que esta persona se puede clasificar en dos grupos. Por un lado, los que realmente logran desarrollar la versión 2.0 de la pieza ya creada. Y por el otro, aquellos que en su intento de mejora, no solo terminan arruinando algo que está bien hecho; sino que enlodan su nombre y reputación, pues lo único que consiguen es un desastre. Al respecto, algo curioso es que constantemente cambiamos entre uno u otro grupo: un día somos magnánimos creadores y al siguiente, sediciosos críticos del trabajo ajeno. No quiero decir con esto que debemos abstenernos de dar nuestro punto de vista sobre una creación de la cual nos han pedido opinar; ni tampoco que no aceptemos críticas a nuestro trabajo. Cada observación proveniente de un tercero, es una cara del cubo que no habíamos notado; una porción de estiércol que huele mal, pero que nutre como ningún otro abono la tierra. La perfección será entonces una utopía; la crítica, efímera; la mejora, continua; y el proceso creativo, una serpiente que engulle su propia cola. Raúl Quinayás Director GOIA Magazine. Twitter: @GOIAMagazine

ART DECO DISTRICT MIAMI

NAF NAF Paris, presenta su nueva colección Day by Day Primavera – Verano 2017 inspirada en una mujer que irradia feminidad y espíritu libre caminando por las calles del “Art Deco District” de Miami. Rayas y nudos de inspiración náutica se complementan con siluetas frescas de algodón, en una paleta de tonos crudos, beige almendra, azul chambray y navy. Los bordados tropicales en denim y los bordados étnicos predominan en esta primavera - verano. Y vemos un mix de colores intensos con unos más sutiles en vestidos, enterizos y las faldas cortas como prendas protagónicas. Las telas fluidas en este tipo de prendas serán claves para reflejar la tendencia.

EN UN RATO

De manera especial Naf Naf propone una delicada cápsula de lingerie en tonos vinotinto, verde, azul, negro, marfil y blanco, en texturas de encaje y algodón para ser utilizarlos en diferentes ocasiones o como prenda exterior, destacando así el carácter y la femineidad de la mujer actual.

MAKE LOVE NOT WALLS DIESEL refuerza su campaña “hagamos el amor, no barreras” con un interesante spot. En donde se envía un claro mensaje en pro de la diversidad mostrando a una pareja de hombres contrayendo matrimonio y cerrando su vínculo con un beso en los labios. La marca se une así a un movimiento emergente que está en contra de las políticas del actual presidente de los estados unidos Donald Trump. En el video, distintos géneros, razas e ideologías. Se juntan en escenarios donde la felicidad y el amor son los protagonistas. La moda se convierte en una expresión de la sociedad y con esta campaña, el odio y la discriminación, son derribados como el muro que separa a los protagonistas. #makelovenotwalls

ASÍ CIERRA EL NEW YORK FASHION WEEK Marc Jacobs cierra la semana de la moda de Nueva York, con una pasarela que rinde tributo a la estética setentera y al Hip Hop como movimiento cultural que revoluciona el lenguaje de la moda. Elegantes chaquetas a cuadros, tops ajustados y gorras redondeadas, fueron parte de una colección que fusiona el vestir casual con el estilo urbano. Una evolución de la estética rapera, en donde las grandes sudaderas quedan sepultadas en el olvido. Con esto Jacobs no solo sienta precedentes a la hora de desarrollar propuestas de vestuario cada temporada; sino que lo hace de igual forma, con la manera en que exhibe sus colecciones. En esta ocasión elige la calle trasera de la armería de Lexington y delimita lo que fuese la pasarela con dos filas de sillas, en donde una evidente variedad de modelos, desfilaron la colección otoño invierno 2017 – 2018 de la firma.

PASADO Y PRESENTE CONVERSAN EN UN MISMO LENGUAJE La marca RAPSODIA lanza su colección Spring / Summer 2017. En ella veremos túnicas y maxivestidos que se complementan con chaquetas de distintos largos; Trajes de baño, kimonos de estampas florales y abstractas que contrastan con textiles únicos. Tonos suaves, así como una gran presencia de bordados y transparencias livianas. Los accesorios, por su parte, son el complemento perfecto de una estética despreocupada que asciende a un nuevo nivel. La colección se describe como una nueva concepción del estilo étnico-contemporáneo; como un viaje al corazón de culturas ancestrales a través de sus tesoros arquitectónicos, una propuesta para envolverse en un halo de misterio.

EL DENIM, PROTAGONISTA C INDISCUTIBLE DE COLOMBIATEX 2017 POR: VANESSA LONDOÑO @nelo119

olombiatex de las Américas, ritual que cada año se celebra en Medellín, dedicó en su última edición un día exclusivamente al denim. En efecto, en un recorrido de tres días por esta feria (que reúne empresas nacionales e internacionales con el objeto de presentar las últimas tendencias en el sector textil, insumos, maquinarias y químicos para la industria) fue fácil percibir que esta joya textil, además de ser una de las fibras más versátiles en cuanto a confección y moda se refiere, se ha convertido en un imprescindible. El denim está en constante evolución, es por eso que para esta ocasión parece que hubiese llegado con más fuerza que nunca, ofreciéndonos todo un universo de vestuario, adaptándose a las necesidades de todos los consumidores y demostrando una vez más que es un tejido que está siempre a la vanguardia. Entre tantas

experiencias cotidianas, la influencia multicultural, la irreverencia juvenil y lo disfuncional, este versátil material se despliega en un sinfín de tendencias que vienen a acompañarnos y a brindarnos toda su potencia e innovación. Uno de los must have más impactantes de la temporada es el famoso “Poncho Folk”, que con su particular diseño ha logrado reinventarse y acoplarse a diferentes procesos como el TIE DYE, recocidos, laser y corrosiones, destroyed, deshilados, etc. Otra de las prendas que se hacen necesarias para todos los adictos de la moda es el “Cargo Fit”, ya que su comodidad nos permite desarrollar actividades relacionadas con el work wear, una influencia donde la funcionalidad y la simpleza son protagonistas. Entre su variedad de color y de texturas se destacan los tonos terrosos, craquelados, los efectos de envejecidos y camuflado.

En la constante creación de identidades, la muy conocida “Youth Colture” convierte lo normalmente aceptado, en prendas irreverentes: por ejemplo la clásica “chaqueta vaquera”, que con toques personalizados, procesos de despigmentación, parches e insignias y garabatos en laser logran dar a tu outfit un toque único y especial. Los ritmos de la vida ejecutiva y social nos han convertido en seres imparables. Es por eso que el “Skinny” ha logrado mantenerse de pie en este constante movimiento de tendencias, gracias a su confort y elasticidad que permite un uso frecuente. Entre lo más representativo de su diseño se encuentran las arrugas 3D, los cortes irregulares y desflecados, el realce de costuras y los tactos gamuzados. Es por eso que el Jeans Wear es uno de los universos que mayor presencia tiene en las ocasiones de uso. Nada más emocionante que experimentar e incluir en nuestra rutina estas propuestas tan dinámicas que nos brinda la posibilidad de crear la mejor versión de nosotros mismos. Este fue parte del panorama que se visualizó en Colombiatex de las Américas este 2017. Una visita a cada pabellón bastó para descubrir la magia y la diversidad de información, que dentro de su concepto de feria invita a todas las organizaciones a actuar con rapidez para enfrentarse al #NUEVOJUEGO. 9

Fotos: GIANELLA IPIA

Street Style

SARA MONTOYA @saramontoyam FOTOS: GIANELLA IPIA @gianella_ipia31

MODA SOSTENIBLE: ¿REALIDAD O UTOPÍA? POR: MARÍA JOSÉ ARBOLEDA @lamajacol

a industria de la moda es una de las más poderosas del planeta, y suele ser catalogada como poco amigable con el ambiente y causante de un consumismo nocivo. Miles de videos inundan las redes mostrando lo perjudicial de procesos de confección, lavado, manejo de desechos, e incluso una muy poco compasiva gestión de talento humano. Todos estos factores han rotulado a este sector como ‘enemigo del planeta’ y poco sostenible. ¿Es esta su única cara? Al caminar por la londinense Oxford Street, avenida en la que tienen sede todas las tiendas de ropa de acceso masivo, es notorio el interés del consumidor por adquirir ropa con las últimas tendencias, pero a precios muy bajos. Por otro lado, el actual mundo digital permite con sólo un click obtener una prenda imitación de diseñador, maquilada en algún país pobre, y a precios francamente ridículos. El fenómeno del ‘pronto moda’, o ‘moda rápida’, maquinado hace unas décadas por el meticuloso Amancio Ortega (fundador y expresidente del Grupo Inditex) cambió el ritmo de la industria textil y de moda. Colecciones expuestas en Milán, París, Londres o Nueva York llegan ahora a un cliente común y corriente, que nunca podría acceder a los precios de alta costura, pero que está interesado en la moda y disfruta renovando su closet con regularidad. Esto se logra con varios ingredientes: un equipo de diseño inmenso que se dedica a monitorear pasarelas, editoriales de moda y fotos de celebridades en su vida diaria. Con esta información crean colecciones dignas de desfile, y en menos de 10 días están dentro de un taller en Bangladesh, India, China, Turquía o Marruecos dando la línea para su rápida y barata confección. Miles de trabajadores, con remuneraciones ínfimas, cosen y cortan día y noche para cumplir con las metas exigidas por la empresa. Así es como en menos de dos semanas todos ustedes, que leen este texto, tienen acceso a moda de última tendencia, casi igual a lo visto en pasarelas, y a precios absolutamente accesibles.

Al enfrentar críticas alrededor del mundo, la industria de la moda no ha podido callar ante este gris escenario. Casas de moda de tradición han querido darle la mano a esta cruzada en contra del abuso, y otras de consumo masivo han procurado aportar un grano de arena al despiadado ritmo de producción. La inglesa Stella McCartney es una de las líderes en la creación de moda sostenible. Ropa y accesorios elaborados con materiales totalmente reciclables, y su fabricación por comunidades principalmente africanas que están recibiendo apoyo durante el proceso. Como menciona la misma diseñadora: “Los bolsos Noemi están hechos en Nairobi, Kenya, y son producidos con el Programa de Moda Ética (ITC). (…) Es importante hacer este trabajo en Kenya – no sólo apoyar a las mujeres y darles un ingreso, sino también incentivar este tipo de línea industrial en pequeñas comunidades”. Por otro lado, la gigante sueca H&M está tratando de hacer un aporte al planeta con sus línea “H&M Conscious Collection”. En esta colección H&M pretende ofrecer ropa de mejor calidad, con materiales sostenibles y con procesos de producción amigables con el ambiente y con el ser humano. Menos lavados, sólo fibras naturales, y menor contaminación. También, Connect4Climate hizo su aparición en la semana de la moda de Milán en el 2013, logrando impactar a los espectadores con una campaña en pro del planeta. Con el apoyo de

la Camera Nazionalle della Moda Italiana (Cámara Nacional de la Moda Italiana), diseñadores y empresarios se comprometieron a trabajar por la creación de una moda sostenible. Materiales, procesos, e incluso medios de difusión que aporten a la humanidad, y conviertan a la industria de la moda en una amiga del medio ambiente. Es claro que falta mucho por hacer; pero al menos la voz de protesta se ha hecho escuchar. El consumidor de hoy no sólo quiere -o va a querer en unos años- moda barata, sino querrá dejar tierra firme y un cielo despejado para sus hijos; un planeta sin tantas fracturas y heridas incurables, al que le hemos hecho daño por lavar textiles en ríos y dejar que químicos los arruinen, y por destruir sin piedad prendas que han sido elaboradas en materiales no reciclables. Esperamos que dicha voz de protesta sirva para que, por ejemplo, no volvamos a ver el sufrimiento de las miles de víctimas de catástrofes como el colapso de la fábrica en Bangladesh hace unos años. Caminar por las calles con la última tendencia (y esto viene de alguien que ama con locura la moda) no es lo suficientemente determinante para acabar con el mundo y con quienes habitan en él. Sigamos apoyando iniciativas de creación de moda sostenible, y de contrataciones justas para quienes la confeccionan. Todo es posible. 13

ada año empieza con diversas propuestas. Diseñadores, estilistas y revistas especializadas dan sus pronósticos sobre cuáles serán las tendencias más usadas en el año que comienza. Y algunas de estas últimas empiezan a tomarse

estar más relacionada con el estilo punk, donde ayudó a transmitir la rebeldía y el desenfado que buscaban los seguidores de esta tendencia nacida hacia finales de los años 70. Este año las medias en red toman

MEDIAS DE RED Un clásico reinventado en el 2017. POR: KATHE CARABALÍ @rockashionblog FOTOS: CORTESÍA DE ALESSANDRA MAZZINI

las calles, nuestro feed de Instagram (al que más atención le prestamos) y las pasarelas. En este contexto, ya es recurrente ver a las chicas más arriesgadas usando medias de red: un clásico de la moda que ha hecho presencia en varias décadas con su toque fuerte y versátil, y con el cual se han arriesgado desde las chicas pin-up hasta Madonna. En efecto, esta prenda suele 16

fuerza y se hacen presentes en dos formas de uso totalmente diferentes: primero, debajo de los pantalones, dejándose asomar sobre la cintura, los tobillos y los rotos de los jeans, perfecto para un look relajado de zapatillas deportivas y camiseta que con este simple complemento llevará a otro nivel tu estilo; el segundo, a manera de tobilleras con tacones, para llevar de una forma más elegante con falda o pantalones un poco cortos que permitan dejar al descubierto este pequeño detalle.

NAF NAF DAY BY DAY Primavera / Verano 2017

MIGUEL

BECERRA

Diseñador, psicólogo, asesor… amigo.

e trata de un creativo que tiene claro lo que para él significa hacer moda colombiana; por ello, en esta edición Miguel Becerra nos permitió conocer una colección que fusiona la técnica artesanal de los bordados de Cartago en el Valle del Cauca, con la fauna y flora del Pacífico colombiano. Una mezcla que –como él mismo reconoce- involucró no solo una compleja investigación, sino además el trabajo, bajo su dirección, de las bordadoras y caladoras de la fundación Ave Fénix, que aplicaron en sus prendas, la técnica de pata de cabra y sesgos. Así nace ‘Pacífico’: una propuesta en donde colores como el amarillo se combinan con el azul marino y el salmón, en prendas que pueden ser intercambiadas entre sí; brindándole la oportunidad a quien las porta, de obtener una gran variedad de combinaciones con unas cuantas piezas. A esta apuesta de crear prendas funcionales para sus clientas, se le suma la de querer mostrar en el exterior la belleza de nuestras técnicas artesanales y el nivel de la moda nacional. Por ello presentó la colección en el marco del Colombia Trade Expo, una feria internacional llevada a cabo en la ciudad de Miami. Ahí extranjeros y nacionales se deleitaron con prendas frescas, ligeras y muy femeninas que proyectan el trabajo manual a una categoría en la que el valor comercial del producto está ligado a la exclusividad del mismo.

Miguel Becerra -considerado por muchos uno de los próximos referentes de la moda nacional- cree que ahí está el aporte de la moda colombiana a esta industria: al rescatar las raíces ancestrales, las técnicas que, como en el caso de los bordados de Cartago, son un oficio que se enseña de generación en generación y del que dependen familias enteras comprometidas en el desarrollo de este trabajo. Una estrategia que diseñadores internacionales aplican en sus colecciones y que compradores especializados alrededor del mundo están comenzando a valorar. Así lo pudo comprobar el diseñador el año pasado, cuando estuvo como espectador invitado en el Fashion Week de la ciudad de Nueva York. Ahí fue testigo de la intervención del trabajo artesanal en las prendas, de cómo los diseñadores trabajan técnicas de bordado sin duda distintas a las utilizadas por las artesanas de Cartago, pero que al igual que estas últimas, poseen una historia y un valor agregado para la pieza. Entre risas nos cuenta cómo fue su experiencia con las bordadoras; tal vez se guardó para sí aquellas historias que reflejan en su rostro una expresión de picardía, más sí nos habla del complicado esfuerzo que se requiere al empezar a abrir la mente de las artesanas. Es como si vivieran encerradas en un pequeño mundo construido por sus padres y abuelos, en donde un pensamiento entre conservador y clásico, les puede dificultar ver la proyección que tiene su técnica. Y es en ese punto en el que trabajar con ellas se convierte en un proyecto recíproco, pues tanto el diseñador como las bordadoras,

aprenden del trabajo y de la visión de cada parte. La experiencia le ha dejado grandes satisfacciones y planea seguir interviniendo sus prendas con técnicas distintas de bordado. Actualmente Miguel se encuentra desarrollando los vestidos que lucirán las candidatas al Reinado Nacional de la Belleza; una experiencia totalmente distinta a la anterior, pues para él vestir reinas es hacer prendas de competencia y eso le genera un peso extra a una labor ya de por sí extenuante. “Todas quieren brillar y tener el mejor vestido”, afirma. Por ello su estrategia es crear tres diseños diferentes para cada uno de los 25 vestidos que debe realizar, y repartirlos bajo su criterio entre las candidatas. La parte delicada, cuenta el diseñador, es cuando una de las señoritas quiere el vestido de la otra. Es ahí cuando la seguridad y experiencia del creativo debe notarse y darle la confianza a la candidata de que el vestido que él eligió para ella, es la mejor opción. Tal vez por esta razón y muchas más, es que sus clientas ven en Miguel Becerra no solo un excelente creativo. Sino un psicólogo, un amigo y un asesor; uno capaz de escucharlas, aconsejarlas y reafirmarles su seguridad. Para este creador, el vestido no sería nada si no es por la propia belleza de quien lo porta. El 2017 ha iniciado con pie de derecho para este talentoso ser humano, el cual se prepara para participar en ferias de moda internacionales y seguir exponiendo el trabajo de las técnicas colombianas al mundo entero. Sólo nos resta felicitarle por sus logros y desearle grandes éxitos a lo largo de su carrera. 31

FÁTIMA CABEZAS @the_caucana

Su impactante figura y su hermoso tono de piel, han cautivado a grandes exponentes de la moda nacional.

mponente al hablar y —por supuesto— al caminar. Una mujer orgullosa de sus raíces, que está segura de lo que quiere lograr en la industria del modelaje. Fátima Cabezas inicia en el medio a causa de la curiosidad que personas a su alrededor sembraron en ella cuando constantemente la comparaban con modelos del momento, y aseveraban —sin conocerla— que se dedicaba al oficio. Así fueron empujándola a descubrir qué era eso para lo que tantos le decían que era perfecta. Su primera escuela es una recordada academia de la ciudad de Cali, en donde la forman como modelo y de la cual se retira, pues deseaba, ya en cierto punto de su preparación, que sus servicios como modelo fueran ofrecidos a diseñadores y marcas de moda. Es como llega a M&P y posteriormente a Novamodels, donde se encuentra agenciada actualmente. Fátima, oriunda de Guapi (Cauca), fue elegida como modelo revelación del CaliExposhow 2016: un título que le ha traído grandes satisfacciones y el reconocimiento por parte de las marcas que se interesan cada vez más en su trabajo. Pero es tal vez su participación como modelo de Leonisa, en el marco del Colombia Moda, el trabajo que más la ha impactado hasta el momento. No solo por ser parte del desfile de una marca tan importante, sino porque pudo destruir paradigmas estéticos, a la vez que se permitió soñar en grande, al compartir camerino con top moldels que le hicieron ver que la meta no está lejos y que va por el camino correcto. Su impactante figura y su hermoso tono de piel, han cautivado a grandes exponentes de la moda nacional; entre ellos, el diseñador Miguel Becerra, con el que ha trabajado de la mano para esta editorial que les presentamos a continuación.

Fotógrafo: Ferney Jaramillo Modelo: Fátima Cabezas Agencia: Novamodels Diseñador: Miguel Becerra Colección: Pacifico / Fortalecimiento de bordadoras y caladoras del Valle del Cauca. Accesorios: Fabián Felipe Arte & Diseño. Styling: María Alejandra Gómez

DESFILES DE MODA: ¿EXÁCTAMENTE PARA QUÉ? Atelier Versace siembra la duda. La marca decide retraerse al selecto grupo de la alta costura, porque ocho desfiles al año son demasiados. POR: LAURENCIO GRUESO.

telier Versace ha puesto sobre la mesa de nuevo un interrogante esencial: ¿para qué se hace un desfile de modas? «Hacemos seis shows al año y mi planteamiento es el siguiente: esos son un montón de desfiles. Ocho si tienes en cuenta la Alta Costura, lo cual resulta excesivo”, afirma Jonathan Akeroyd, presidente ejecutivo de Atelier Versace. En efecto, la pregunta sobre la verdadera importancia de un desfile de modas debe hacérsela cualquier diseñador que busque la mejor forma de exhibir su producto, comunicar la marca y hacer dinero, todo a la vez. Y si apela al sentido común, ese diseñador responderá que para vender su última inspiración: este construye una colección y precisa mostrarla a su público objetivo. Pero a partir de esta respuesta teórica podemos encontrar retos cada vez más complejos. En principio, y persiguiendo el objetivo que antes hemos señalado, el diseñador contrata a unas mujeres hermosas, con las que busca que las clientas se identifiquen o se proyecten, y exhibe al ritmo de la música toda esa “magia” y “desborde de creatividad”. No obstante, muy rápido aparece una nueva necesidad: hacer que lo que ahí se mostró sea conocido por más personas. Por supuesto: el círculo social de quien compró en el desfile lo conocerá. Pero el mundo es más grande, el talento gigante y la ambición incalculable. Así que se empieza a invitar a personas que posean canales de comunicación distintos a los propios. Por tanto, la lista de invitados pasa de contar solo con los clientes exclusivos, a contar también con los nombres de editores y periodistas de moda. Y aun así, se siente como si faltara algo. Entonces se llama a personajes del espectáculo para que le den un toque sofisticado al evento. Con lo cual, este ya no

cuesta lo que en su primera versión: ahora debe ser más impactante, pues de lo contrario los comunicadores y líderes de opinión se aburrirán, y en lugar de hablar de los sublimes cortes y bases textiles, lo harán de las estrellas asistentes o de lo fofo de la pasarela. Se hace necesario entonces subsidiar el evento. Y la mejor manera es unirse con otras firmas, crear un cronograma e invitar a empresas privadas para que a cambio de pagar los gastos de producción, sus marcas encabecen las marquesinas. Con el mismo objetivo, algunos abrirán las puertas al público para percibir ingresos de taquilla; otros, más conservadores, se negarán a hacerlo agitando la bandera de la exclusividad. Pero es que actualmente la gente consume información de forma distinta: por tanto, ni siquiera una semana de la moda resulta suficiente. Las celebridades se roban el show, así que se procede a engrosar la lista con la sangre nueva de personas a las que solo les importa la moda y que ahora se comunican a través de blogs, Facebook o Instagram. El paso siguiente: como hace poco hizo Atelier Versace, la marca decide retraerse al selecto grupo de la alta costura, porque ocho desfiles al año son demasiados y ahora la firma se enfocará en sus clientes más preciados. Se implementa una “nueva” estrategia llamada “see now, buy now” (aprecie y compre ahora), que no es más que una presentación privada, para clientes exclusivos, quienes tendrán la oportunidad de comprar la más reciente creación del diseñador. No queda duda: la moda es cíclica, por lo que en definitiva los aplausos y los comentarios de expertos esnobistas resultan mucho menos importantes que el sonido de la caja registradora. 43

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ESA CHICA POR: OSCAR TENGANÁ @oscartengana

FOTOGRAFÍA: Oscar Tenganá MODELO: Sofía Hincapié AGENCIA: Staff Models VESTUARIO: Gabriela Rivera STYLING: Liz Quintero

FOTOGRAFÍA: Oscar Tenganá MODELO: Sofía Hincapié AGENCIA: Staff Models VESTUARIO: Pulse Sport Wear STYLING: Liz Quintero

ALGO CRECE E

l problema empezó afuera, como todos los problemas de mi vida. Gabriela me había pedido que le cuidara su apartamento. Para ella, las vacaciones de invierno siempre fueron la promesa del verano, su viaje anual a un destino azul en compañía de su amante de turno. Para mí, el invierno siempre ha sido el invierno de guantes insuficientes, nariz goteante, el ronroneo de mi gata Frida y la honorable soledad de los libros. Durante la tercera noche el teléfono sonó. Del otro lado hablaba un amigo de Gabriela, no pude decir casi nada porque su voz alicorada y chillona insistía en que mi amiga era la más degenerada y encantadora mujer que se había encamado. Tuve que dejar el auricular descolgado y le serví atún con aceitunas a Frida. Al regresar, la voz seguía viva, pero esta vez lloraba y prometía que le devolvería todo. Gabriela me había pedido que sólo en caso de incendio la llamara, así que cuando abrí la puerta y encontré la caja con su nombre, decidí ponerla sobre la mesa, y esperar a su regreso para hablarle del borracho. Gabriela era una engreída terrible, me hartaban sus

soliloquios y sus preguntas baratas sobre el estado de su cuerpo. En descomposición, me hubiera encantado responderle más de una vez, pero parece que mi humor ácido sólo tiene vigencia cuando estoy sola. De las pocas cosas que disfrutaba con Gabriela era la de venir a su casa de veraneo, curiosamente siempre llegaba en días fríos o pasaba largas temporadas de nevadas. Los días que siguieron no tuvieron mayores novedades, nadie llamó y la puerta sólo sonó por los domicilios de comida. El conflicto real comenzó cuando Frida tumbó la caja de la mesa. Escuché el estruendo de los cristales en el piso. Quizá un costoso perfume destrozado, un portarretrato, o una porcelana sin valor. El exterior de la caja se humedeció, la nariz de Frida curioseó por un segundo, luego su cuerpo se estremeció y se deslizó entre mis piernas para esconderse. Para evitar tentaciones acomodé la caja en una gaveta de la cocina. Deslicé el pasador de la puerta de madera y regresé a mi lectura. Durante la noche comenzó a caer la nieve, es poco probable que exista otro paisaje que me

conmueva más. Si Dios existiera tendría que aparecer en forma de nieve. Desde el marco de la ventana vi la tierra blanca, como una alfombra infinita. Y mientras Frida se acomodó en mi regazo imaginé que yo era el agua cristalizada, copos lentos que caen sobre el bosque. Toda la madrugada tuve sueños extraños: me hacia pequeña y trepaba por los asientos, escondía mi cuerpo entre los frascos de la alacena y de pronto aparecía la caja y su atrayente humedad. La tocaba con un dedo, con la punta de mi codo, con la mejilla, con la lengua. El sueño desaparecía y me despertaba excitada, con un temblor recurrente en la entrepierna que me llevaba de regreso a la pesadilla. A Frida le gusta lamerme la nariz para despertarme, su saliva helada me levanta como un rayo. Por la mañana el temblor en mi vientre se había disipado, pero la imagen de la caja me obsesionaba a un punto irreparable. ¿Qué tipo de sustancia cubría su textura? Abrí el gabinete y puse mi mano sobre la oscuridad del papel, la sensación pegajosa y helada me hizo retroceder. Una mancha se había adherido a mi piel y el jabón no lograba disolverla. El

olor poco me decía del líquido, tenía un aroma a musgo o a hierro enmohecido, un aliento viejo, de algo que lleva mucho tiempo dormido. Agité la caja y escuché de nuevo el trinar de los vidrios, no quise romper el sello del empaque, la regresé a su sitio y seguí insistiendo con el agua y la espuma sobre mi mano ennegrecida. Mientras pasaba las páginas del libro, un cosquilleo extraño me retumbó en los dedos y vi cómo de la marca comenzaba a brotar una pequeña raíz, apenas visible en la superficie. Tal vez una fibra se me había enterrado. La halé con cuidado y sentí como mi sangre burbujeaba, como las venas se trenzaban y un dolor incontenible se agolpaba piel adentro. Cubrí mi mano con el guante y la empuñé por un largo tiempo, esperando que la herida se cerrera. Me parece injusta esta soledad de nieve, injusta y bella al mismo tiempo. Podía estar a mis anchas, pero estaba tan sola, y la pobre Frida dormía. A veces le movía las orejas para que se despertara y su ronroneo me hiciera compañía. Maldita Gabriela y sus hombres hermosos, siempre dispuestos a invitarla a comer y a devorársela

como un postre. El frío adormece, así que pensé que mi mano estaba mejor, pero cuando me quité el guante lo que había sido un hilito de corteza se había convertido en un círculo vegetal. Acerqué los ojos, podría jurar que un hongo crecía asomándose entre las líneas de mi palma. Gabriela guardaba el vodka al lado de la cama. Después del tercer trago miré nuevamente la protuberancia, su olor a tierra mojada me recordó la caja. Caminé a la cocina y vi que el gabinete donde la escondía estaba poblado de otros hongos parecidos al mío. Una multitud diminuta y blanca que crecía en cascada por la casa de madera. Mi mano empeoraba, su centro se abría como una llaga rosa y un tallo grueso eclosionaba de a poco. Me estaba enmoheciendo. Seguro que la culpa la tenía Gabriela, porque jamás dejaba la calefacción en buenas condiciones. En un par de horas la cabaña se fue convirtiendo en una gran exhibición de champiñones. A Frida nunca le gustaron los hongos ,y su colita inquieta evitaba tocar las superficies rugosas de las setas. Cuando cerraba los ojos

podía sentir la caja palpitando, su charco de sombras haciendo que la humedad se expandiera. Toda mi mano se convirtió en un bosque plagado de tallos que crecía reventando la piel y sustituyendo mi epidermis por una negra viscosidad. Afuera todo se desintegraba: los vestidos de Gabriela entre la maleza, el techo convertido en cueva de estalactitas vegetales, con cuellos que descendían igual que los gansos cansados en la noche. Por supuesto, el problema crecía. En el lomo de Frida se manifestaron los primeros brotes. Supe que no resistiría una noche más dentro de la cabaña. Los libros, para comenzar, y la casa entera, serían devorados por la humedad. Mi cuerpo se descompondría , como el de Gabriela, en alguna playa tibia. Para arrancarme los hongos necesité de un poco de gasolina y una chispa, convirtiendo el mutismo invernal en una cálida hoguera. Solo entonces pude llamar a Gabriela para contarle que dejaron una caja con su nombre. Autora: Alejandra Lerma alejandralermagarcia@gmail.com