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Día de los F undadores

Del Ejército de Salvación 2 de julio

Durante años, el 2 de julio fue conocido como el Día del Fundador, el día en que comenzó el Ejército de Salvación. Fue ese día en 1865 que William Booth, después de haber estado predicando en las calles, fue invitado a ser el orador invitado en La Misión Cristiana en el East End de Londres. Esa noche el grupo le pidió a William que los dirigiera e inspirara, que fuera su líder.

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Pero ahora lo llamamos Día de los Fundadores, reconociendo el hecho de que el éxito de esta organización (que cambió su nombre en 1878) radica en la pasión y la visión tanto de Catherine como de William Booth - los Fundadores del Ejército de Salvación.

William Booth nació el 10 de abril de 1829 en Nottingham, Reino Unido. Debido a las malas circunstancias, Booth fue puesto como aprendiz de un prestamista por su padre cuando tenía 13 años. Dos años más tarde, Booth experimentó una conversión religiosa. Empezó a leer mucho y a entrenarse en la escritura y la oratoria, y se convirtió en predicador metodista local.

Catherine Booth (1829-1890), la Madre del Ejército de Salvación y esposa de William Booth, habló sobre cómo lograr paz verdadera y cómo nuestros corazones pueden perfeccionarse. Desde el punto de vista interno quizá una de las cosas más diferenciales del Ejército de Salvación es haber sido el pionero en proclamar la igualdad de la mujer. La mujer, dentro del Ejército de Salvación, desempeña los mismos cargos que el hombre, las mismas responsabilidades y deberes.

William Booth dijo: "Sacar a un hombre de su barrio, sanar su cuerpo, regalarle ropa decente, proveerle con una casa propia en el campo y dejarle morir e ir al infierno… verdaderamente no vale la pena”. El ministerio que desde un principio ha ofrecido el Ejército de Salvación es un ministerio integral. La preocupación por los aspectos físicos, sociales, emocionales y espirituales de una persona ha sido desde sus inicios la misión principal del movimiento.

El Ejército de Salvación siempre ha luchado por la dignidad de las personas. Cuando un caballo cae en la calle, solía decir Booth, todo el mundo va ayudar a levantarlo sin preguntar quién fue el culpable de la caída. Cuanto más nuestro Ejército ayudará a levantar a la gente sin preguntar cuál es su religión o el color de su piel.

Los Fundadores del Ejército de Salvación inculcaron un apostolado que se dirige a toda persona necesitada física y espiritualmente. Entendemos por personas espiritualmente necesitadas a aquellas que han perdido su fe, que están desengañadas de toda religión y han abandonado toda práctica religiosa. Estas personas necesitan una mano amiga que las comprenda y ayude a encontrar a Cristo.

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