Como poner una Sastrería
¿Estas interesado en iniciar tu propio negocio? Conoce los beneficios al iniciar este negocio, el mercado potencial y la mejor ubicación ¿POR QUE UNA SASTRERIA? En este mundo globalizado hay un creciente interés por una moda más personalizada. Esto se ha transformado en una tendencia que nace en oposición a la uniformidad en los servicios y productos, que muchas veces molesta a los consumidores. Las grandes tiendas llenan sus estanterías y escaparates con ropa de tallas estándar. Esto se asocia muchas veces a un producto que no siempre corresponde a buena calidad, y por tanto, su duración es cuestionable. Pero lo más importante, muchas veces sus calces son imperfectos. Cada cuerpo es distinto, por lo tanto, siempre las prendas estandarizadas serán imperfectas y habrá problemas con el largo de brazos, o el ancho de hombros, o la distancia de tiros. Ante tal problema, el mercado ha respondido a las exigencias de calidad en el vestir. Primero, con la personalización de prendas y calzado, y ahora con el renacer de un servicio clásico: la sastrería.
Esta idea de negocio tiene por objetivo entregar un servicio de diseño y confección de prendas y trajes a la medida del cliente y de gran calidad. Hay muchos sastres en el mercado, pero pocos cumplen con altos estándares de calidad. La clave para que los clientes sean fieles es hacer un trabajo profesional y entregar las prendas sin retrasos. Para complementar tus ingresos ofrece también venta de disfraces, servicio de planchado y productos complementarios, como etiquetas y bordados. FORMATOS DE NEGOCIO EXISTENTES La única variación que este clásico modelo de negocio a desarrollado es el ofrecer el servicio directamente en el domicilio del cliente y promocionar los servicios a través de internet. Utilizando las herramientas de Internet, tu negocio podrá funcionar totalmente online y entregar un servicio de calidad efectiva. Para ello necesitarás un sitio web donde publiques tu catálogo de diseños, junto con el detalle de las prendas posibles y un muestrario de telas y colores. Por supuesto, además es vital que entregues tus datos de contacto vía e-mail y telefónico. QUIENES SERAN TUS CLIENTES En estas empresas podemos distinguir dos tipos de clientes:
Clientes particulares: señoras, caballeros, niños (no bebés).
Todas aquellas personas, de diferentes edades y sexo, que acudan a nuestro negocio para que se le asesore y ayude en la confección y encargo de una prenda determinada o se le realicen arreglos de prendas ya confeccionadas.
Otros clientes.
El emprendedor/a puede realizar encargos (confección o arreglo) para tiendas de ropa como boutiques o pequeños comercios de la zona donde se ubique. ¿Cómo saber si tus clientes reales son los más adecuados para tu producto o servicio? La pregunta no es tan ingenua como parece. Es posible pasarse años atendiendo a un grupo de consumidores sin cuestionarse si tal vez habrá otro segmento de mercado que nos pueda dejar más ganancias. Vale la pena, entonces, que lo pienses bien: ¿qué tan seguro estás de que los clientes que tienes en mente son, realmente, a quiénes debes atender? Y en caso de
que sospeches que tal vez haya, al final del arco iris, mejores clientes para ti: ¿cómo encontrarlos? ¿Cualquier cliente es bueno? Esto no significa que tengas que "olvidarte" de aquellos que no cum-plan tu perfil. La idea es comprender bien qué segmentos atendemos y qué segmentos no se han trabajado. Los compradores difieren en sus deseos, poder adquisitivo, procesos de decisión de compra, y en su actitud hacia la compra. Esto hace necesaria la labor de segmentarlos y así poder evaluar. Hay que dividir los grandes y heterogéneos mercados en segmentos más pequeños y homogéneos, para hacer coincidir las capacidades de la empresa, de sus productos y servicios con los valores que buscan los clientes. Basta mirar lo que ha hecho la Grupo ADO con la línea de autobuses turísticos Turibús en la Ciudad de México. El proyecto comenzó atendiendo principalmente a turistas nacionales e internacionales (dos grupos ya muy diferentes), pero, al poco tiempo de operar, la empresa se dio cuenta que existían otros segmentos muy interesantes, especialmente el de los capitalinos que nunca habían explorado su ciudad desde el punto de vista turístico. Para atacar este segmento, ADO elaboró una campaña de publicidad especial para los habitantes del DF. Después descubrió otros segmentos, como los grupos escolares y empresariales. Este caso refleja la importancia de preguntarse cuáles son los segmentos que la empresa realmente debe atender. Para hacerlo, lo primero es verificar tu mercado meta actual. De entre todos tus clientes, ¿quiénes son los que te compraran más seguido? ¿Qué características comparten? Tal vez son más mujeres que hombres. Tal vez son más solteras que casadas. ¿Qué edad tienen? Pero ojo: no son sólo los datos demográficos los que importan. Es vital analizar los psicográficos (estilos de vida y conductas de compra), ya que estos datos nos darán información mucho más detallada sobre la relación de los clientes con nuestro negocio. ¿Cuáles son los valores de estas clientas solteras? ¿Qué hábitos culturales tienen? Pregúntales qué libros leen, qué revistas hojean, qué programas de televisión no se pierden. ¿Cuáles son sus patrones de compra? ¿Qué opinan de tu producto y de la competencia? Todas estas preguntas son pautas para que evalúes tu mercado y verifiques que tu producto o servicio se integra armoniosamente a su estilo de vida. No es necesario que inviertas en un estudio de mercado (aunque no estaría de más realizar uno). Lo más importante será que te acerques a platicar con algunos de tus clientes. Así tendrás la mitad del camino recorrido. Debes tomar en cuenta todo lo que te digan, especialmente si son cosas que no quieres escuchar.
Tal vez compran tu producto por necesidad y no por gusto. O puede ser que te estén comprando por comodidad o cercanía, no porque realmente prefieran tus productos. Como ejemplo, piensa en los lugares donde comes en horas de trabajo. O en tu manera de decidir a qué cine ir. La mayoría de las personas escogen estos servicios debido a la cercanía o la comodidad, aunque les disguste la opción. Nadie te asegura que tus clientes no te estén usando como su "peor es nada". Busca y encontrarás La información sólo sirve si se procesa, analiza y ayuda a tomar mejores decisiones. Una vez realizada la recolección de información y el primer análisis podrás identificar de manera más clara quiénes serán tus clientes ideales, aquéllos que desesperadamente buscan lo que tú vendes. En este punto es posible que necesites un estudio de mercado (cuantitativo y cualitativo) para descubrir en dónde se encuentran, cómo son, cómo compran, cuánto y cuando gastan, cómo pagan, y muchas cosas más. Si no quieres o no puedes invertir en un estudio formal, busca información en el Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática (Inegi) o en la Secretaría de Economía (SE). Si descubriste un nuevo segmento, el objetivo es investigar todo lo posible y crear un perfil de estos prospectos. Cuando sientas que los clientes potenciales cobran vida a través de las estadísticas y puedas visualizarlos en tu mente, es hora de acercarse para conocerlos en persona. Todo esto te permitirá conquistarlos con tus productos y servicios como si fuera "amor a primera vista". Una vez que hayas encontrado a tus clientes ideales, existen infinidad de tácticas para vincularlos con tu empresa. Desde organizar y patrocinar eventos relevantes para ellos hasta participar activamente en la comunidad. En cuanto a mercadotecnia, es conveniente revisar el diseño de tus productos y servicios para ver si se integran a tus nuevos clientes y así mejorar tus empaques y envases, la funcionalidad del producto y los servicios complementarios que ofrezcas. No descuides la experiencia de compra, los accesos y rutas para llegar a tu negocio, los créditos, las facilidades de pago, y el trato personalizado. Algo que está muy de moda es invitar a los consumidores a volverse parte de la labor de promoción. ¿Cómo funciona? Organiza campañas publicitarias colaborativas, en donde los consumidores puedan proponer eslóganes y ejecuciones creativas. Realiza un video promocional que sea muy dinámico y original, y súbelo a Internet para que los usuarios lo compartan y lo reenvíen. La siguiente tarea es construir relaciones a largo plazo con ellos. Obviamente, las primeras compras serán como un ejercicio de prueba para ver qué tan bien satisfaces sus necesidades, pero tu ofrecimiento debe ser más que el de un proveedor. "Para crear
relaciones a largo plazo hay que establecer vínculos emocionales con los clientes, y entender que él debe ser respetado como persona. Esto debe ser un valor dentro de la empresa y con todo el personal". El énfasis está en la satisfacción. Y no se trata sólo de cumplir expectativas, sino de superarlas. "Un cliente satisfecho se logra cuando el desempeño real supera la percepción que el comprador tenía". "Por eso es clave empezar por conocer las percepciones que los clientes tienen respecto de la empresa y sus productos o servicios". Para conocer mas detalles sobre Como Poner una Sastrería haz clic https://www.comoponerunnegocio.org/Como-Poner-una-Sastreria-,135_14