Tu 154 mayo by Hermandad Obrera de Acción Católica (HOAC)

La persona es lo primero Elecciones al Parlamento Europeo Edita HOAC - Nº 154 - MAYO 2014 - III ª Época - 0,60 € - Suscripción anual: 6 € «Hay que abordar esta fase de grave dificultad y de desempleo con las herramientas de la creatividad y la solidaridad» Papa Francisco, en audiencia a los empleados y directivos de la Fábrica de Aceros de Terni, 20 de marzo de 2014

Foto: Tomás Alonso

Día de la HOAC

Un trabajo digno para una sociedad decente así lo vemos

l desempleo y la precariedad en el trabajo son dos caras de la misma moneda. Y es que, en la actualidad, si no trabajas no puedes vivir y si trabajas pierdes la vida silenciosamente. La forma de entender y organizar el trabajo está supeditada a las exigencias de un modelo económico y social que va haciendo más precaria toda nuestra existencia. Pero, no debemos aceptar el relato de lo que está sucediendo. Construyamos «zonas liberadas», espacios donde generemos –frente al desempleo y la precariedad– procesos de personalización tejidos solidariamente de

estructuras de comunión construidas sobre la primacía de la persona, para posibilitar una economía que ponga en el centro al ser humano. Imaginar y construir una nueva cultura del trabajo con nuevas formas de solidaridad, desear, buscar y cuidar el bien común, el bien de los demás, promover una nueva organización del trabajo desde la Doctrina Social de la Iglesia y cambiar modelos de producción son algunos de los retos que los cristianos hemos de afrontar para realizar nuestra tarea evangelizadora en el mundo del trabajo. Para esta tarea es necesaria toda la Iglesia.

con Dios en la vida obrera

la calle

Dios en marcha Los Obispos Europeos ante por la dignidad

oli sabe que la vida cristiana es una marcha permanente por la construcción del Reino de Dios y su Justicia. Por eso, aquella mañana de marzo le dio gracias por la jornada que tenía por delante. El autobús la esperaba como a tantos otros para marchar por las calles de Madrid. Su vida, la de su marido y la de sus hijos…, le hablan de las dificultades y los sinsabores de ser clase obrera. Trabajadores que se empeñan en vivir con dignidad. Cuando arranca el autobús siente que no va sola. Junto a sus compañeros de Stop-desahucios va Cristo. Cuando los últimos van subiendo al autobús,ella,en silencio,va ofreciendo esta jornada al Dios de la Dignidad: «Te ofrecemos todo el día nuestro trabajo, nuestras luchas, nuestras alegrías y nuestras penas…». El autobús comienza a andar. Algunos intentan dormir, pero ella pide fuerzas para seguir anunciando a Cristo con su vida: «…Concédenos, como a nuestros hermanos de trabajo, pensar como Tú, trabajar contigo y vivir en Ti». Es Él quien la llama a defender la dignidad de su pueblo. De nuevo Dios, en la debilidad de una mujer obrera, se hace presente para «desbaratar los planes de los arrogantes, derribar del trono a los poderosos y exaltar a los humildes, a los hambrientos colmarlos de bienes y a los ricos despedirlos de vacío» (Lc 1, 51-53). Teresa Jiménez Zamorano

las elecciones al parlamento comunitario Del 22 al 25 de mayo se celebran las elecciones al Parlamento Europeo. La Comisión de Conferencias Episcopales de la Comunidad Europea (COMECE, por sus siglas en inglés) ha querido ofrecer orientación al votante europeo y evaluar, a través de la Doctrina Social Católica, los temas que juzgan más importantes.

omienzan pidiendo a los candidatos que sean «conscientes de los daños colaterales de la crisis económica y bancaria que comenzó en 2008». En su comunicado apuestan por «una cultura de la moderación» como «fuente de inspiración de la economía social de mercado y de la política medioambiental». «Tenemos, dicen, que aprender a vivir con menos, pero por la misma razón, hemos de hacer lo posible para que los que viven en una pobreza real accedan a un reparto más justo de los bienes». En coherencia con lo que siempre ha defendido la Iglesia hacen notar que la integración europea no debe sacrificar «el principio de subsidiariedad, pilar básico de la familia única de estados-nación que constituye la Unión Europea», y que se ha de preservar otro pilar fundamental como es la solidaridad, «que debe gobernar las políticas en todos los niveles de la UE, entre las naciones, las regiones y grupos que constituyen la población».

Igualmente insisten en que «todos los ámbitos de las políticas socioeconómicas se han de sustentar en una visión del hombre arraigada en un profundo respeto a la dignidad humana» por lo que piden medidas para defender la vida humana en todas las etapas de su desarrollo. Así

mismo, dicen, «es de vital importancia que el tratamiento de los inmigrantes en cada punto de entrada de la UE sea humano, que sus derechos humanos sean respetados escrupulosamente, y que, posteriormente, se haga todo lo posible, también por parte de las Iglesias, para asegurar su integración con éxito en la sociedad de acogida». El episcopado europeo también defiende la lucha contra el cambio climático,

sin olvidarse de la necesidad de «proteger la consideración del domingo como el día común de descanso semanal». Ante el cambio demográfico abogan, «en nombre de nuestros ciudadanos mayores, por conseguir el nivel y la calidad en la atención a la que tienen derecho, pero también pedimos políticas que creen nuevas oportunidades para los jóvenes». Terminan declarando: «nosotros, obispos católicos, pedimos que el proyecto europeo no se ponga en riesgo ni se abandone por las dificultades de la presente situación. Es esencial que todos nosotros –políticos, candidatos y todas las demás partes implicadas– contribuyamos constructivamente a modelar el futuro de Europa. Todos tenemos demasiado que perder si el proyecto europeo descarrila». Roge Torres Más información: www.hoac.es/?p=12769

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política en zapatillas

1º de mayo de 2050 E

ran una muchedumbre, no gritaban nada, avanzaban en silencio, con una solemnidad que sobrecogía y llenaba de un silencio profundo a toda la ciudad. No había pancartas ni siglas, solo una pegatina con la palabra ¡DIGNIDAD! El precariado, el indigno producto que había generado la reorganización de la economía al final de la primera década del año 2000, rememoraba a los mártires de Chicago que dieron su vida por los «tres Ochos»: ocho horas de trabajo, ocho de familia, ocio y cultura, y ocho de descanso. «Dar la vida» se había convertido en la principal forma de lucha de la clase obrera, que ahora aglutinaba a muchos sectores de la vida social y económica. El Pueblo había comprendido, asumido y puesto en práctica el principio de que

al mal se vence con abundancia de bien, y los resultados eran sorprendentes: banqueros, explotadores y corruptos se sentían acorralados por los «espacios liberados», que se regían por la lógica de la donación y el servicio. Al final del recorrido diversos mostradores debidamente rotulados espera-

ban a los manifestantes: caja de solidaridad, viviendas solidarias, empresas de comunión, procesos de formación, donación de activos y conocimientos, empleos de inclusión… Los manifestantes se acercaban a ellos para «dar su vida»: un día de salario para el fondo de solidaridad; una vivienda para los desahuciados, ahorros para las cooperativas de crédito, conocimientos y habilidades para responder a las necesidades de formación, puestos de trabajo para cubrir las demandas de empleo, tiempo para ayudar a cubrir los cuidados familiares… Sindicatos y asociaciones gestionaban los recursos donados. La moral y la ética crearon la confianza. Un gran abrazo culminó el acto. Muchos lo continuamos con el Carpintero de Nazaret en la eucaristía. A.A. Maestre

cultura

Los que no pueden esperar

a Fundación FOESSA de Cáritas ha hecho público un avance del Informe sobre Exclusión y Desarrollo Social en España que se presentará el próximo mes de octubre. A algunos les ha molestado mucho que la Iglesia digamos cosas como las que se dicen en este estudio. Les estropea su discurso, porque su discurso está muy lejos de la realidad. Molesta que se diga que, más allá de discutir si estamos o no saliendo de la crisis, «debemos poner nuestra mirada en los que no pueden esperar». Porque no es verdad ni que estemos en el buen camino ni que vayamos en la buena dirección. Lo que están provocando las políticas que se practican, en particular desde que en 2010 comenzaron a aplicarse recortes drásticos, es una pobreza y exclusión crecientes, un aumento enorme de las desigualdades, derechos menguantes y una fractura social que se amplía. Si no cambiamos existe un riesgo claro de que el aumento de la exclusión y de la desigualdad se convierta en crónico. El profundo deterioro del empleo (por el desempleo pero también por el empleo cada vez más precario, con sa-

larios más bajos y más desiguales), la acusada debilidad del sistema de protección social, y los severos recortes de prestaciones y servicios, han provocado y están provocando más pobreza y mayor desigualdad en España. Empleo, vivienda y salud marcan una profunda fractura social. Los jóvenes están viéndose severamente afectados por esta situación y la exclusión social de millones de niños y niñas se está convirtiendo en un problema extremadamente grave. Esa es la realidad. Esa es la verdad. Y no es ninguna exageración: son millones de personas que no pueden esperar. Nuestra humanidad no puede esperar. Esa realidad es una llamada a cambiar, un desafío personal, social, eclesial y político.Tenemos, según el mismo estudio de FOESSA, una evidencia del camino que necesitamos recorrer para cambiar: las relaciones internas de las familias y las relaciones vecinales han mejorado porque son más solidarias. Ese camino, el de la solidaridad, es el que necesitamos extender al conjunto de la sociedad y a la acción política, porque hace falta una respuesta a la crisis que sea mucho más solidaria. Francisco Porcar

la ventana del mes Andalucía: Concentración, Denuncia y Eucaristía

Nada hay más importante que las personas A pesar del frío y de la lluvia, unas cuatrocientas personas llegadas desde todas las diócesis andaluzas, se dieron cita en Córdoba en la mañana del sábado día 29 de marzo, para reiterar al unísono que «la persona es lo primero».

aliendo de cuatro puntos distintos de la ciudad, los respectivos grupos confluyeron en la Plaza de las Tres Culturas y desde allí, ya en manifestación, hasta la Plaza de la Peineta del Barrio de las Margaritas, donde se celebró un acto público de anuncio y denuncia. La presidenta de la diócesis de Córdoba, Juana Mari, abrió las intervenciones dando la bienvenida a los asistentes y recordando que la jornada era «una fiesta del compromiso, de la esperanza y de la fe en el Dios de los pobres». Después de varios años proclamando que «nada hay más importante que la persona, que todas las personas, y especialmente las más desfavorecidas de nuestro maltratado mundo obrero», había llegado el momento de dar un paso más e iniciar una nueva fase por la «Justicia y por el Bien Común».Y es que la dignidad humana despierta el «hambre y sed de Justicia». A continuación, tomó la palabra el representante de Cádiz y Ceuta, quien recordó que «si las políticas frente a la crisis están teniendo como consecuencia el incremento generalizado de la pobreza y la exclusión, el impacto en Cádiz es demoledor: una tasa de paro insoportable superior al 41%, un porcentaje de

«Hay que seguir luchando, denunciando y acompañando a las personas que sufren el paro, la pobreza y la exclusión social, para que se restablezcan la justicia, el trabajo y la dignidad robada» desempleados sin prestación alguna que supera el 50% y una profunda incidencia entre la juventud, no pueden sino tener como consecuencia que nuestra provincia encabece las cifras de pobreza y exclusión social a nivel nacional». Por eso, la HOAC de Cádiz, apostaba por «seguir luchando, denunciando y acompañando a las personas que sufren el paro, la pobreza y la exclusión social, para que se restablezca la justicia, el trabajo y la dignidad robada al pueblo de Cádiz». Desde Almería, pusieron sobre la mesa la situación de las mujeres emigrantes en el

servicio domestico, donde con frecuencia «el trabajo es considerado solo como una forma de obtener un salario, sin tener en cuenta otras dimensiones de la persona, familiares, sociales…, con graves daños a veces psicológicos, morales y espirituales». La representación granadina insistió en que «nuestra sociedad actual, capitalista y consumista, ha olvidado los grandes valores que son el sustento social de todas las personas, especialmente las más necesitadas», razón última que subyace en el levantamiento de «vallas asesinas» y en «la persecución del inmigrante, como si hubiera come-

tido algún delito». «Lo primero es la persona, venga de donde venga, haya nacido donde haya nacido», recordó. Le tocó a Huelva hablar del «enorme reto para los cristianos y para todos aquellos que estamos preocupados por la defensa de la dignidad y de los derechos sociales y laborales de las familias» y llamar al compromiso para «hacer posible y exigir al conjunto de la sociedad y al Estado que se pongan las condiciones sociales necesarias para que las familias puedan desarrollarse y cumplir sus funciones, tan precisas para la vida de las personas y de la comunidad social».

La diócesis de Jaén puso el foco en que «raro es el día que no suceden accidentes de trabajo, tanto leves como graves o con resultado de muerte», para, después, destacar el trabajo de los militantes, «visitando a la familia más cercana de las víctimas» y procurando mantener la amistad con los familiares de las mismas, además de «hacer denuncias públicas, a través de comunicados y concentraciones uniendo así caridad y justicia». La agrupación malagueña subrayó que «la crisis está siendo la excusa perfecta para precarizar las condiciones de trabajo y poner cada

nos vamos a esforzar para que todo el mundo aspire a tener un trabajo digno para una vida digna». La diócesis de Sevilla hizo notar que ya no se habla de «barrios obreros», sino de «barrios marginados o excluidos», que en realidad se han convertido en «barrios ignorados», que presentan tasas de paro del 70%, tasas de precariedad del 80% y tasas de fracaso escolar, en la ESO, del 70%. «Afirmamos que “la persona es lo primero”. Mientras que no se solucionen los problemas de las personas y las familias, nuestros barrios no tendrán solución. La educación y el empleo son

«Para nosotros y nosotras, cristianos que queremos anunciar la buena noticia de Jesús en el mundo del trabajo, la persona es lo primero» vez más fácil las condiciones de despido, bajo el amparo de la reforma laboral», por lo que «debemos denunciar alto y claro que, para nosotros y nosotras cristianos y cristianas que queremos anunciar la buena noticia de Jesús en el mundo del trabajo, la persona es lo primero y

las armas más poderosas para luchar contra la pobreza y la exclusión», apuntaba. El presidente de la Comisión Permanente de la HOAC, José Fernando Almazá, puso fin a las alocuciones públicas, previas a la celebración religiosa, donde, según sus palabras, «llevare-

mos a la mesa compartida nuestra oración y nuestra petición por los rostros sufrientes de Cristo. También nuestro trabajo y nuestra esperanza de que las cosas que están mal y las personas que hacen que estén mal, cambien» y donde «pediremos al Padre que nos siga dando luz y fuerzas para continuar con la tarea junto con tantos otros compañeros de camino, creyentes o no, que están en la misma brecha». La Eucaristía de Acción de Gracias se desarrolló en la parroquia de las Margaritas donde también tuvo lugar el

final de la jornada con una comida compartida y festiva. Con este acto la HOAC de Andalucía quería gritar una vez más que «la persona es lo primero» y celebrar el trabajo de estos dos últimos años. Las inclemencias del tiempo, que de ningún modo impidió que todo avanzara según lo previsto, resultaron ser como una metáfora de las dificultades que es preciso superar para verificar en el día a día y en cualquier circunstancia que la Persona sea verdaderamente el centro. Redacción

Más información: www.lapersonaesloprimero.es 5

¿quién es? Luis Carbonell, presidente de la Confederación Católica de Padres de Alumnos (CONCAPA)

«Un permiso laboral para interesarse por la marcha escolar de los hijos sería un gran avance» Luis Carbonell, siempre ha defendido un permiso laboral para que los progenitores puedan acudir a los colegios de sus hijos a interesarse por su desempeño escolar. Ha lanzado una campaña para que así se recoja en la legislación laboral, a la que se han adherido algunos sindicatos. –¿Cómo surgió la idea de lanzar una campaña a favor de un permiso laboral de dos horas al trimestre para verse con los tutores o el director del colegio de los hijos? –En un estudio sobre Familia y Educación llamado «Concapa Barómetro» descubrimos que la gente respondía muy mayoritariamente a favor. Cuando vimos que no se trata de una idea de la Concapa o de su presidente, sino de una demanda real de las familias, nos lanzamos y llamamos a todos los agentes educativos más importantes para pedirles que se sumen a algo que no tiene color político. –¿Quiénes se han sumado a su iniciativa por ahora? –Las patronales católicas, como CECE y Escuelas Católicas, se adhirieron sin dudarlo. Los sindicatos ANPE, CSIF, FSIE, FETE-UGT y FE-USO y otra coordinadora de padres, COFAPA, también. Son instituciones con diferentes ideologías o convicciones políticas que han dado un sí a nuestro manifiesto. –¿Cómo les convenció? –Les decía que no era una cuestión política y que teníamos que pensar en grande,

en la sociedad y la educación españolas. Es un ejemplo muy importante para los políticos que son incapaces de llegar a acuerdos. La sociedad civil, lo hemos demostrado, sí que es capaz. –Y ahora, ¿qué va a pasar? –Hemos llevado al registro del congreso de los Diputados el manifiesto y hemos pedido una entrevista con todos los grupos políticos para pedirles su apoyo. No descartamos que más adelante hagamos otras actuaciones, quizás una recogida de firmas. Es algo lento y creo que los políticos no tienen en principio una sensibilidad clara en este asunto. Creo que puede haber reticencias en el mundo empresarial, de hecho le hemos escrito a la CEOE y no nos han contestado siquiera. También a la ministra de Trabajo, con el mismo resultado. –Dos horas al trimestre, ¿es mucho o poco? –Cuando un trabajador tiene su vida personal resuelta es más productivo. Las empresas, si no son miopes, se darán cuenta de que también influye en la mejor formación de nuestros hijos, que son los que, por otra parte en el futuro, trabajarán para ellas.

Me parece que hay que ir más de dos horas al trimestre, sobre todo cuando los hijos son pequeños, pero si consiguiéramos eso sería un paso de gigante. Poder decir en el trabajo que uno va a hablar con el tutor de sus hijos es concederle importancia a esta actuación ante los com-

pañeros de la empresa, ante el entorno de uno mismo. Sería un gran avance en lo que es el compromiso, la implicación de la familia con la escuela. José Luis Palacios Más información: www.concapa.org

DESDE EL OTRO LADO

¿Sabías que.. ?

Libertad, miedo y trabajo

ientras el gasto público en servicios sociales y protección a los más debilitados ha disminuido en España, la banca ha recibido desde el inicio de la crisis en 2007 casi 250.000 millones de euros, según cálculos del Fondo Monetario Internacional. nos 63.000 millones son inyecciones de capital; 134.000 millones son avales y 50.000 millones han ido a parar al banco malo. Apenas 60.000 millones parece que se devolverán.

s curioso que una simple entrevista genere tanto pánico. Y solo es relatar las condiciones de trabajo. Pero ella, a sus treinta años, no puede hablar, ni mostrar su rostro, ni decir su nombre…, si quiere seguir trabajando. Este es el dato que no sale en las estadísticas. Es más, este es el empleo que se propone para combatir el paro. Un empleo precario que genera miedo y roba la libertad. ¡Valiente trabajo! Un empleo que te absorbe tu tiempo, que te empobrece, que rompe tu proyecto de vida, que te noquea y aturde porque no sabes cómo salir de él, que te hace sentirte menos importante que las mercancías que produces o vendes… En la sociedad de la libertad de consumo, de mercado, de empresa, de información…, una joven trabajadora no puede ejercerla por miedo. ¡Y son tantos los hombres y las mujeres acallados, asustados, amordazados por la precariedad de sus trabajos y de sus vidas! Y es que no hay libertad sin equidad y sin justicia. Y sin ellas, ¿dónde queda la fraternidad? Cristina López

La mirada justa

Nuestro país, ¿tierra de pobres?

an salido unas noticias en la prensa y radio y han impactado, o por lo menos, han originado muchos comentarios. Estas noticias las ha dado Cáritas Europea, que es un organismo fiable y nada sospechoso. Veamos estas noticias. «España es el segundo país de la Unidad Europea con el mayor índice de pobreza infantil, superado solo por Rumanía». «El riesgo de pobreza entre los niños menores de 18 años se situó en 2012 en 29,9%», es decir, de cada 100 niños 30 viven en la pobreza. ¿Cómo se mide esta pobreza? Los pobres son los que reciben entre el 40% y el 50% del ingreso medio del resto de la población: los que reciben menos del 49% están en extrema pobreza. Y los que disponen del 60% están en riesgo de pobreza o exclusión social. Se nos dice además que España tiene la mayor tasa de abandono escolar prematuro en Europa, un 24,9%. De cada 100 niños, 25 abandonan demasiado pronto los estudios. El informe de Cáritas pone en cifras el número de trabajadores pobres en España, un

12% de personas con empleo y salario pero con ingresos tan escasos que no les permiten llegar a fin de mes y escapar por completo de la pobreza. Y ya sabemos de la enorme cantidad de parados. ¡Ay, esta maldita crisis y las medidas de austeridad! ¿Nos tenemos que acostumbrar a tanta pobreza entre nosotros? Acostumbrarnos y pensar que mientras no me toque a mí..., es caer moralmente muy bajo, caer en la cultura del desinterés que tanto critica el Papa Francisco, no mejoramos como personas en una sociedad desmejorada. Habrá que poner a los pobres en el centro de la vida personal y social para dar una respuesta a su clamor. Es vivir, exigir y poner medios para que avancen la solidaridad,la igualdad y la justicia social. «Cada cristiano y cada comunidad están llamados a ser instrumentos de Dios para la liberación y promoción de los pobres» (E.G. 187). «Lo cual implica tanto la cooperación para resolver las causas estructurales de la pobreza y para promover el desarrollo integral de los pobres, como los gestos más simples y cotidianos de solidaridad…» (E.G., 188). Gregorio Burgos

olo con los 2.400 millones de euros que va a poner el Estado para rescatar a una docena de autopistas de peaje, a punto de entrar en quiebra, se podrían haber «rescatado» cerca de 700.000 familias sin recursos, según Cáritas. s verdad que la pobreza es mucho más que falta de ingresos, pero no es menos cierto que, si hubiera voluntad política, habría dinero para aliviar esta situación y emprender acciones para promover el desarrollo de las familias castigadas por la crisis.

evangelio en la calle

Así va el mundo

La persona es lo primero

órdoba, 29 de marzo. Diez de la mañana. Día muy lluvioso. Cientos de hombres y mujeres de toda Andalucía, bajo un aguacero inmenso, nos dirigimos a la Plaza de la Peineta para allí concentrarnos, denunciar la situación insostenible de los hermanos trabajadores (y nuestra) y congregarnos alrededor de Cristo en la Eucaristía. La lluvia no impedía que en la plaza habláramos de la convivencia entre iguales en la diversidad, de unas relaciones laborales sin discriminación de género, de una sociedad que no puede soportar tantísimo paro y de un trabajo digno que haga posible una convivencia familiar. La Eucaristía posterior en la parroquia de Las Maravillas fue un grito en común, una protesta llena de esperanza poniendo como centro a Jesús Obrero, el Cristo de nuestra fe. Alguno de los presentes me decía después: «Íbamos todos a una». Maravilloso acontecimiento lleno de luz (en medio de tanta nube), canciones, emociones contenidas y expresadas, palabras colmadas de esperanza y, sobre todo, de fe cristiana; mucha fe. El calor fue secando nuestra ropa empapada por la lluvia. Después vino la comida compartida. Desbordante. Los cordobeses habían preparado con esmero el patio de la parroquia, pero la lluvia persistente hizo que los más de seiscientos nos metiéramos en los salones parroquiales. Aquello sí que fue la multiplicación de los panes y del espacio: aperitivos, perol, bebida, postre…, y principalmente bullicio, fiesta, saludos y…, pasillo viene, pasillo va. Yo pensaba en el autobús de vuelta que, desde el amanecer hasta el atardecer, todo aquel día 29 había sido un Evangelio en la calle. Celebramos ampliamente (ahora hago alusión a las tres lecturas de la Eucaristía) que el hombre y la mujer fuimos creados a imagen y semejanza de Dios (Génesis 1, 26), que la creación entera aguarda, con dolores de parto, la manifestación plena de los hijos de Dios (Romanos 8, l8-23) y que la persona está por delante de la ley, sábado e instituciones (Marcos 2, 23-27) y, con más razones todavía, del negocio, capital y finanzas. ¡La persona es lo primero! ¿Así todos los días del año? Antonio Hernández-Carrillo

NOVEDAD

Los trabajadores y trabajadoras del mundo se sienten abandonados por sus gobiernos, a los que juzgan incapaces de reducir el desempleo, mientras ponen los intereses de las empresas por encima del de las familias trabajadoras. No es una opinión individual, sino una de las conclusiones de una encuesta realizada por la Confederación Sindical Internacional a 13.000 personas de más de 18 años en 13 países (incluida España). Uno de cada dos encuestados se había visto afectado directamente por la pérdida de empleo o por la reducción de horas de trabajo. Más de la mitad afirmaba haber perdido poder de compra en los dos últimos años. Los más afectados por la gestión de la crisis son los trabajadores autónomos y las mujeres jóvenes menores de 35 años de edad. El 65% dudan de que las normas laborales de cada país sirvan para garantizar salarios justos y el 63% para ofrecer seguridad en el empleo. Este es el mundo que estamos construyendo, a fuerza de arrinconar a las organizaciones de trabajadores.

Conocer la realidad es el primer paso para disponerse a cambiarla Pedidos: Ediciones HOAC. Calle Alfonso XI, 4, 4º 28014 Madrid 5€ 91 701 40 83 www.hoac.es - www.edicioneshoac.es

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