1 minute read

Darlo todo en favor del cliente

Next Article
HUMAREDA ETERNA

HUMAREDA ETERNA

Osvaldo Morales dice en tono de broma –refiriéndose a sí mismo y a la voz “Om”, símbolo de lo esencial en el hinduismo–, que alguna gente cree que OM Cigar es un Buda que hace yoga, pero en realidad es un cigarro que devino en empresa. Su serie número uno la dedicó a su madre, y “tras probarla ella me dijo que debía venderle a mis amigos... como al hacerlo necesitaba ponerle un nombre utilicé mis iniciales”.

Manufacturados en Tamboril, República Dominicana, los productos de la empresa buscan también “repartir la paz” y que la o el aficionado tengan momentos de tranquilidad y puedan disfrutar de fumadas hechas por un Master Blender con experiencia que sabe lo que es un puro de calidad; de tal suerte que reciban una compensación justa por lo que han invertido.

De acuerdo con Osvaldo, nacido en Miami pero de ascendencia cubana e inmerso por completo en la cultura de la isla, en eventos como éste se reparten cigarros de las grandes ligas. “Humildemente soy un junior series de un barrio de Nueva Jersey que está frente a jugadores de las ligas mayores del tabaco. Mas puedo decir que a nuestros vendedores de tienda les ofrecemos productos para brindar a sus clientes experiencias y devolverles exactamente lo que esperan: un tabaco bien hecho”.

Dice que en los exhibidores de las tiendas hay una lucha permanente por los espacios y al principio le argumentaban que sus puros no cabían. “En realidad el mensaje era ‘no te conozco y no voy a invertir porque no sé si tus cigarros se mueven’.” Entonces resolvió un problema que en realidad no existía:

Osvaldo observó las cajas de diez unidades semivacías, que en un conjunto de siete muestran unos 35 puros y ocupan 72 pulgadas. Así que se le ocurrió colocar un humidor de cedro de 23 pulgadas en el que acomodó 125 cigarros de sus líneas. “Con eso también se ahorra en el flete porque se envían mazos, no cajas, y el cliente sabe dónde llegar cuando ha vivido una buena experiencia y regresa”.

Cuenta que en la factoría donde produce lo tachan de majadero, “porque exijo mucho. Pero uno quiere las cosas exactamente como deben de ser, con consistencia y calidad. Es lo que hago para mis clientes”.

Heredero del nombre de su padre, Osvaldo es creador de seis mezclas que define como únicas; todas numeradas bajo el nombre de Essential Blend, en distintas vitolas y capas Habano Dominicano, Negro San Andrés y Criollo 98. Este 2023 relanzó sus mezclas número 4, con capa Negro San Andrés, capote Piloto Cubano y tripa Nicaragua y Pennsylvania, y la número 6, con capa Negro San Andrés, capote Dominicana y tripa Nicaragua.

This article is from: