Edición 109

Año 3

No. 109

Semana del 06 al 12 de marzo de 2011

Si luchas, puedes perder, pero si no luchas ya estás perdido.

Si luchas por tu vida familiar, no estás perdido

Pág. 15

Justin Bieber:“Aborto es matar a un bebé”

El conocido cantante juvenil canadiense de pop, Justin Bieber, afirma en una entrevista concedida a la revista musical Rolling Stones que el aborto es “matar a un bebé”.

En la nota principal de esta publicación en inglés que salió el viernes 18 de febrero, Bieber da su opinión sobre las relaciones sexuales pre-matrimoniales y el aborto.

Sobre el segundo tema, el cantante que este 1 de marzo cumplió 17 años de edad, señala que “realmente no creo en el aborto” porque eso es “como matar a un bebé”.

Al ser preguntado sobre lo que considera debe hacerse en caso de violación, el cantante indica que “creo que eso es algo realmente triste, pero todo pasa por una razón. No sé cómo eso podría

ser una razón” para abortar.

“Creo que como no he estado en esa posición, no estoy en capacidad de juzgar eso”, añade.

Sobre las relaciones sexuales prematrimoniales, el cantante originario de la localidad de London, estado de Ontario (Canadá), afirma que “no creo que uno deba tener sexo con alguien a menos que se ame a esa persona”.

“Creo que debes esperar por la persona... de la que uno se ha enamorado”, añade.

Justin Bieber inició su carrera artística en 2008 cuando un ejecutivo lo descubrió de manera accidental al ver un video de Youtube donde interpretaba temas de cantantes conocidos como Usher.

Tiempo después se convirtió en su manager.

En 2009 lanzó su primer disco.

Miércóles de Ceniza 9 de marzo de 2011

MARZO 06 DE 2011

¿Dónde estamos parados?

En el FANGO o en la ROCA

E

Editorial

ste siglo XXI, en el que hemos presenciado los enormes avances tecnológicos y científicos, además de las famosas redes sociales y los genios de la comunicación, también hemos presenciado los desastres gigantes como: El espantoso terremoto de Haití, los desplomes de tierra sobre las casas de gente pobre en el sureste de México y en Brasil a causa de los diluvios nunca vistos. Todo porque nunca han tenido la posibilidad de contar con un cimiento firme donde edificar sus casas y ciudades. El mundo del siglo XXI que se colapsa porque las injusticias han llegado a los límites y las consecuencias se han empezado a desbordar.

Por Pacco Magaña

Juliana de Cornillón Queridos hermanos y hermanas:

Quiero presentarles una figura femenina, poco conocida, pero a la cual la Iglesia debe un gran reconocimiento, no sólo por su santidad de vida, sino también porque, con su gran fervor, contribuyó a la institución de una de las solemnidades litúrgicas más importantes del año, la del Corpus Christi. Se trata de santa Juliana de Cornillón, conocida también como santa Juliana de Lieja. Tenemos algunos datos acerca de su vida sobre todo a través de una biografía, escrita probablemente por un eclesiástico contemporáneo suyo, en la que se recogen varios testimonios de personas que conocieron directamente a la santa.

En los días recientes hemos presenciado también el fango de las naciones del norte de África: Libia, Egipto, Túnez, Argelia… Los desbordamientos de sangre y de violencia, son inevitables, cuando los cimientos de una nación pretenden ser las dictaduras y el enriquecimiento desmedido de unos pocos. Quién sabe cuántos países más se irán a sumar a esta rebelión.

Juliana nació entre 1191 y 1192 cerca de Lieja, en Bélgica. Es importante subrayar este lugar, porque en aquel tiempo la diócesis de Lieja era, por decirlo así, un verdadero «cenáculo eucarístico». Allí, antes que Juliana, teólogos insignes habían ilustrado el valor supremo del sacramento de la Eucaristía y, también en Lieja, había grupos femeninos dedicados generosamente al culto eucarístico y a la comunión fervorosa. Estas mujeres, guiadas por sacerdotes ejemplares, vivían juntas, dedicándose a la oración y a las obras de caridad.

¿Y nuestro México?... a poco, hay alguien que se cree que aún es ¡México lindo y querido! y ¡Cómo México no hay dos!... Tristemente eso está pasando a la historia; en la actualidad esas aclamaciones a veces han sido más aires de triunfalismo que otra cosa. Quizás “queremos vivir de nuestras rentas” o pensábamos que el título de “nación pacífica” nos duraría por los siglos de los siglos, Amén.

Pero hoy, es momento de tomar conciencia que mucho de lo que está en nuestros pies es fango y no roca. Es fango la corrupción de los partidos políticos; es fango el compromiso mediocre de tantas instituciones y tantas veces es fango el testimonio tibio de quienes por el bautismo formamos la Iglesia.

Este domingo 6 de marzo, previo al Miércoles de Ceniza (inicio de la Cuaresma) el Santo Evangelio nos está incitando a CONVERTIRNOS, edificando nuestra casa sobre la roca firme. Es momento de convencernos de que el futuro de las personas y de las comunidades radica en la lealtad que tengamos para ofrecernos cimientos sólidos de amor, fraternidad, armonía, y paz. Más aún, para nosotros, los bautizados y miembros de esta familia eclesial, la roca salvadora es Cristo quien da fundamento a todo el edificio.

Vivamos una cuaresma sensibilizados por el deseo de construir un mundo mejor. Entendamos la conversión propia de este tiempo, no como algo que se predica a los demás, sino como la actitud más profunda que llevamos aquellos que queremos un mundo mejor. Vivamos este anhelo y este compromiso en el Encuentro con Cristo, por la oración y por los sacramentos, pues sólo es ahí donde podemos asegurar que sí estamos edificando sobre roca firme. Qué con este espíritu vayamos con ánimo hacia la nueva Primavera Pascual del Señor Resucitado.

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Juliana quedó huérfana a los cinco años y, con su hermana Inés, fue encomendada a los cuidados de las monjas agustinas del convento-leprosario de Monte Cornillón. Fue educada en especial por una monja, que se llamaba Sapiencia, la cual siguió su maduración espiritual, hasta que Juliana recibió el hábito religioso y se convirtió también ella en monja agustina. Adquirió una notable cultura, hasta el punto de que leía las obras de los Padres de la Iglesia en latín, en particular las de san Agustín y san Bernardo. Además de una inteligencia vivaz, Juliana mostraba, desde el inicio, una propensión especial a la contemplación; tenía un sentido profundo de la presencia de Cristo, que experimentaba

Primera parte

viviendo de modo particularmente intenso el sacramento de la Eucaristía y deteniéndose a menudo a meditar sobre las palabras de Jesús: «He aquí que yo estoy con vosotros todos los días hasta el fin del mundo» (Mt 28, 20).

A los 16 años tuvo una primera visión, que después se repitió varias veces en sus adoraciones eucarísticas. La visión presentaba la luna en su pleno esplendor, con una franja oscura que la atravesaba diametralmente.

El Señor le hizo comprender el significado de lo que se le había aparecido. La luna simbolizaba la vida de la Iglesia sobre la tierra; la línea opaca representaba, en cambio, la ausencia de una fiesta litúrgica, para la institución de la cual se pedía a Juliana que se comprometiera de modo eficaz: una fiesta en la que los creyentes pudieran adorar la Eucaristía para aumentar su fe, avanzar en la práctica de las virtudes y reparar las ofensas al Santísimo Sacramento.

Durante cerca de veinte años Juliana, que mientras tanto había llegado a ser la priora del convento, guardó en secreto esta revelación, que había colmado de gozo su corazón.

Después se confió con otras dos fervorosas adoradoras de la Eucaristía, la beata Eva, que llevaba una vida eremítica, e Isabel, que se había unido a ella en el monasterio de Monte Cornillón. Las tres mujeres sellaron una especie de «alianza espiritual» con el propósito de glorificar al Santísimo Sacramento. Quisieron involucrar también a un sacerdote muy estimado, Juan de Lausana, canónigo en la iglesia de San Martín en Lieja, rogándole que interpelara a teólogos y eclesiásticos sobre lo que tanto les interesaba. Las respuestas fueron positivas y alentadoras.

MARZO 06 DE 2011

RESPETAR LA CREACIÓN

E

l Continente americano concentra una de las más grandes biodiversidades del planeta y en especial América Latina tiene una gran sociodiversidad, una gran riqueza de pueblos y culturas.

Los pueblos originarios conservan aún conocimientos muy valiosos acerca del valor medicinal de las plantas y de otros organismos vivos. Esos conocimientos de medicina tradicional son una riqueza que está siendo expropiada ilícitamente por industrias farmacéuticas transnacionales que patentan los productos y los encarecen.

La madre naturaleza ha sido agredida, depredada y violentada. Se contamina, se destruye, se comercia y se devalúa la tierra, el agua, las áreas verdes, el aire que respiramos. No se puede concebir a los recursos naturales no renovables como una mercancía, pues de ellos depende la existencia de toda la humanidad.

Un ejemplo del valioso depósito natural que beneficia a toda la humanidad lo representa la Amazonía, territorio que se extiende por varios países de América del Sur:

“La Amazonía panamericana ocupa un área de 7,01 millones de kilómetros cuadrados y corresponde al 5% de la superficie de la tierra, 40% de América del Sur. Contiene 20% de la disponibilidad mundial de agua dulce no congelada. Abriga el 34% de las reservas mundiales de bosques y una gigantesca reserva de minerales.

Su diversidad biológica de ecosistemas es la más rica del planeta. En esa región se encuentra cerca del 30% de todas las especies de la fauna y flora del mundo”.

(Nota al pie de página del párrafo 84 del Documento de Aparecida) El Papa Benedicto XVI en su visita pastoral al Brasil llamó la atención sobre la “devastación ambiental de la Amazonía y las amenazas a la dignidad humana de sus pueblos” y pidió a los jóvenes “un mayor compromiso en los más diversos espacios de acción”.

En el Amazonas existen muchas etnias, culturas y religiones que reclaman el respeto y el reconocimiento legal de los pueblos latinoamericanos, puesto que continuamente están amenazados y han sido despojados del lugar que han habitado desde siempre.

Un fenómeno muy actual y evidente es el deshielo de las reservas del polo sur y norte, el calentamiento global con todas las manifestaciones de catástrofes naturales. Estos acontecimientos son un reclamo a la conciencia de todos para que crezcamos en la conciencia de respetar y preservar el medio ambiente.

El Papa Juan Pablo II, quien próximamente será beatificado, decía con voz profética, en la homilía que dirigió a los fieles de la zona austral de Chile, en punta Arenas, el 4 de abril de 1987:

“Desde el Cono Sur del Continente Americano y frente a los ilimitados espacios de la Antártida, lanzo un llamado a todos los responsables de nuestro planeta para proteger y conservar la naturaleza creada por Dios: no permitamos que nuestro mundo sea una tierra cada vez más degradada y degradante”.

NOTA: Puedes ampliar esta reflexión leyendo los párrafos 83-87 del Documento de Aparecida.

Apreciados lectores y lectoras: EL PRÓXIMO 8 DE MARZO, se cumplen 35 años de la firma de mi nombramiento como Obispo, en 1976. En nombre del Papa Pablo VI, lo firmó el cardenal Villot, su Secretario de Estado. Fui nombrado Obispo Auxiliar de Tacámbaro, mi diócesis de origen, y me dieron el título de BURCA. Es una tradición en la Iglesia dar a los Obispos Auxiliares el título de una diócesis o arquidiócesis ya desaparecida. Si no me equivoco, Burca era una diócesis del norte de África, sufragánea en la provincia eclesiástica de Numidia. Recibí la ordenación de Obispo, el 4 de mayo de ese año.

Perdonen que les hable de mí. Es vanidad. Quiero, sin embargo, compartirles la alegría de cerrar un nuevo lustro de mi vida de Obispo y dar testimonio de mi gratitud inmensa al Señor Jesucristo, “Pastor y Mayoral de los Pastores”, por esta asombrosa gracia. Quiero también compartirles la experiencia juvenil de mi encuentro con Juan Bautista Montini, Pablo VI, “Profeta de la Evangelización”, que tuvo a bien elegirme y agregarme al número de los sucesores de los Apóstoles y, de esta manera, rendir un sencillo homenaje a este gran Pontífice que guió a la Iglesia, con grande acierto, durante 15 años, de 1963 a 1978.

Tuve la gracia y el gozo de conocer en persona al Papa Pablo VI, pocos días antes de iniciarse el Cónclave, en junio de1963, cuando hizo una visita al Pontificio Colegio Pío Latino Americano. Manifestó una actitud bondadosa con los alumnos que lo saludamos. Flotaba en el ambiente romano la fundada opinión de que el Cardenal Montini, Arzobispo de Milán, sería el sucesor de Juan XXIII. Alguien le hizo una pregunta en ese sentido. Él respondió con un afectuoso silencio y una amable sonrisa. Lo recuerdo perfectamente. Días después, el 21 de junio, la noticia de su elección llegó a todo el mundo. Su persona y su estilo pastoral eran una esperanzadora garantía para que el Concilio Vaticano II continuara. Trece años después de ese encuentro, me eligió Obispo Auxiliar de un santo Obispo, Don José Abraham Martínez Betancourt.

En esos intensos días eclesiales de la celebración de la primera sesión del Vaticano II, yo terminaba mis estudios en Roma. Estaba, pues, como todos los jóvenes estudiantes eclesiásticos de Roma, impulsado por el viento primaveral que Juan XXIII había hecho soplar en la Iglesia. Puedo decir que ese fugaz encuentro con Pablo VI inspiró y alentó mis primeros años de sacerdote. Seguí con entusiasmo las otras tres sesiones del Concilio. Supe de la paciencia y sabiduría del Papa Montini para conciliar posiciones muy encontradas, no causar fracturas y fortalecer la unidad. Con admirable fortaleza, audacia y sufrimiento, llevó a feliz término el Concilio y realizó su aplicación.

Leí con mucha emoción su primera Encíclica “Ecclesiam Suam”, sobre el diálogo al interior de la Iglesia y, sobre todo, con el mundo. Me gusta repetir y meditar este espléndido pensamiento suyo: “La Iglesia se hace palabra. La Iglesia se hace

mensaje. La Iglesia se hace coloquio”. Otro gran documento de Pablo VI que me ha dado mucha luz en mi servicio de Obispo, es su Exhortación Apostólica “Evangelii Nuntiandi”, donde encuentro esta vigorosa afirmación: “Conservemos el fervor espiritual. Conservemos la dulce y confortadora alegría de evangelizar, incluso cuando hay que sembrar entre lágrimas”. Debo decir que siempre me ha cautivado tanto la profundidad y claridad de su pensamiento como la belleza y la fuerza de su lenguaje.

El Pontificado de Pablo VI no fue fácil. Fue llamado a conducir la Barca de Pedro en una de las estaciones más complejas y turbulentas del siglo XX. Será siempre recordado como un hombre que amó a Cristo y desgastó todas sus energías en anunciarlo; decía con vehemencia: “Cristo nuestro principio, Cristo nuestra vida, Cristo nuestro guía, Cristo nuestra esperanza y nuestro fin”. Amó con honda pasión a la Iglesia, amó al mundo moderno y lo miró con simpatía. Un día dijo: “Si el mundo se siente ajeno al cristianismo, el cristianismo no se siente ajeno al mundo”. Amó y estimó su tiempo y procuró acercarse a todos los hombres. Conoció profundamente la grandeza y miseria del hombre, porque lo supo mirar con los ojos de Dios y lo amó con el amor de Dios. Pocos como él han sabido interpretar los anhelos, inquietudes, búsquedas y fatigas del hombre moderno.

Pocos lo saben, pero Pablo VI fue el iniciador de los viajes papales. Un día dijo a un Cardenal: “¡Ya verán cuántos viajes hará mi sucesor!”. En sus viajes a la ONU, a Tierra Santa, a las Islas Filipinas, a la India, a Colombia y en su enseñanza social, se hizo abogado de los pobres. Su más alta inspiración podría resumirse en una sola palabra: AMOR; y su propuesta, al mundo de la guerra fría, fue construir “LA CIVILIZACIÓN DEL AMOR”. Estaba convencido que el amor, sólo el amor, es la fuerza constructiva de todo camino positivo de la humanidad. Por “LA CIVILIZACIÓN DEL AMOR”, Pablo VI se desgastó sin medida, buscando todas las ocasiones para difundir, por todas partes, una palabra de esperanza y de paz, y de invitación a superar los egoísmos y rencores.

Déjenme terminar, agradeciendo a quienes, en diversas ocasiones, me han hecho un comentario alentador sobre esta columna. De verdad me animan. Esta vez quiero agradecer al P. José Santana Rivera Carranza, Párroco en Jesucristo, Sumo y Eterno Sacerdote, quien, directa y personalmente, en nombre de todos sus feligreses, me dio una palabra de aliento. Pero, sobre todo, gracias a todos ustedes, queridísimos lectores y lectoras.

“Y hasta que nos volvamos a encontrar, que el Señor los guarde en la palma de su mano”. +Luis, Arzobispo de S. Luis P.

Nuestra historia

Para que lo puedas ver

T

equixquiapan, voz mexicana significa sobre el agua de tequezquite. Es el barrio más extenso, uno de los más antiguos y el mejor urbanizado; su jardín es el más bello, después del de la Plaza de Armas.

Existía ya una ermita en 1676, acaso la de Santa Ana que se menciona en 1756. Su antiguo templo parroquial fue derribado el 9 de septiembre de 1914 por órdenes del gobierno, con el objeto de prolongar la Avenida del Centenario, antigua Calle Real de Tequixquiapan y ahora Avenida Venustiano Carranza.

Se improvisó una capilla en el costado Norte del jardín. En este barrio tuvo tierras don Juan de Oñate, primer Alcalde Mayor de San Luis Potosí. Por el año de 1751 se organizaban corridas de toros en la plaza vieja del barrio. Era muy lucido el paseo de las “Bateas Floridas” de cera. En épocas pasadas se hacía el “Baile de los Caballitos” durante la procesión.

La antigua Calle Real de Tequixquiapan fue convertida en amplia avenida en 1886 por el entonces gobernador Gral. Don Carlos Díaz Gutiérrez. La prolongación, hasta el actual Parque Amado Nervo se inauguró en 1910 y el monumento a la Bandera en 1943.

La capilla del Perpetuo Socorro, en la calle de Arista se abrió al culto el 27 de febrero de 1944, por los padres Redentoristas, estando presente el señor Obispo Dr. Don Gerardo Anaya y Diez de Bonilla. En 1944 se abrieron las cepas para los cimientos del nuevo Templo de Tequixquiapan. El 8 de septiembre se celebra la fiesta titular en el día del nacimiento de la Santísima Virgen, pero la Patrona es Nuestra Señora de los Remedios.

Por Pbro. Lic. Salvador González Vásquez

E

s difícil aceptar a los demás, tal como son. Pero siempre buscamos, que los demás nos acepten como somos. Es un gran esfuerzo pasar de la antipatía a la simpatía. Muchas veces decimos que hay alguien a quien no podemos ver. Aunque en el fondo, lo que no queremos es verlo.

Es cierto que la verdad duele, y es difícil tener que enfrentarla. Nos es fácil reconocer la verdad; aunque en el fondo, lo que no queremos es aceptarla. Esta realidad tiene mucho que ver, respecto a las personas que rechazamos.

Casi siempre sucede, que a los que no podemos ver, tienen los mismos defectos que nosotros, pero cuesta trabajo reconocerlo. No queremos ver en ellos, nuestras propias limitaciones. No aceptamos nuestra verdad reflejada en la persona del otro, es decir del que me es antipático.

Pasamos la vida mirando sus defectos, y ya no vemos sus efectos. El defecto, es caren-

cia de efecto. Ver el defecto es mirar lo que falta, y fijarse en la nada. Es mejor mirar el efecto, es decir la cualidad.

Al decir que “no lo podemos ver”, estamos afirmando una realidad, porque el odio nos ha cegado, y no nos permite mirar al interior de la persona. Tenemos el corazón lleno de escamas, que nos impiden ver lo bueno que hay en el otro. Ya alguien dijo, que “Sólo se ve bien con el corazón”.

Pero cuando me acerco a Dios, reconozco y acepto mis propias limitaciones, -que son las mismas de mi hermano-. Al darme cuenta que Dios me ama como soy, que mis amigos me aceptan tal cual soy. Debo comenzar a reconocer, que mi enemigo merece que lo acepte como es. Así como soy aceptado, a pesar de mis carencias.

Comienza por aceptar tu propia verdad. Y entonces tendrás limpieza en el corazón, para que puedas ver bien a los demás.

Si das pláticas pre sacramentales, o enseñas doctrina de la Iglesia…

Entonces eres catequista Te invitamos a que asistas el próximo 13 de marzo al Retiro Cuaresmal para catequistas, que se llevará a cabo en la Casa de la Acción Católica, de 9:00 a 14:00 hrs.

No olvides traer tu lunch y otro para compartir.

9:00 Llegada, inscripción 9:30 Hora Santa, (Pbro. Paulín) 10:30 Descanso 11:30 Tema (Pbro. Benjamín Moreno) 12:30 Preparación a la Eucaristía 13:00 Misa presidida por Mons. Szymanski DIMENSION DE PASTORAL CATEQUÉTICA Mayores Informes: 812.21.11

05

La familia que yo quiero Cornelio eres un “pillín”, te hiciste la vasectomía y estoy embarazada Nuevas formas de infidelidad en el matrimonio Por P. Kino

E

n la antigüedad al hablar de la infidelidad matrimonial se reducía al simple adulterio.

Sin embargo creo que hoy podemos hablar de otros tipos de infidelidad.

Uno de estos tipos de infidelidad matrimonial, Jesús nos lo dice en el evangelio: Ustedes han oído que se dijo: «No cometerás adulterio.» Pero yo les digo: Quien mira a una mujer con malos deseos, ya cometió adulterio con ella en su corazón (Mt 5, 27 – 28).

No se trata de no admirar la belleza física en el sexo femenino, o de parte de la mujer, la atracción natural hacia la persona viril. Jesús se refiere a la mirada morbosa, lujuriosa, pecaminosa a la cual nuestra concupiscencia nos puede llevar.

Una segunda manera muy actual de la infidelidad, es la que se comete cuando se realiza la fecundación artificial heteróloga, es decir cuando uno de los gametos proviene de un donante, pues aunque no haya contacto físico con el donante, el bebé no es fruto de una relación de amor entre esposos, sino de un donador externo que se ha inmiscuido “silenciosamente” en la vida de los conyugues.

Un tercer tipo de infidelidad es lo que es conocido como la “infidelidad cibernética”. Los esposos conviven más tiempo con los amigos cibernautas que con su conyugue o con sus hijos. Mandan fotos (Obviamente las de hace algunos ayeres, para apantallar a quienes solicitan sus fotos). La fidelidad de la educación de la prole muchas veces queda lejos de la realidad.

Otra infidelidad puede ser cuando no se viven las promesas que se hicieran en el matrimonio. El hombre no prevé lo necesario, económicamente hablando, para el hogar.

Muchas veces porque los recursos son para cosas superfluas. La familia requiere calzado, pues pisan un chicle y saben que sabor es.

Requieren ir al dentista, requieren ir al médico, o simplemente requieren de una despensa básica de nutrición, pero no hay recursos, tal vez no por la pobreza (pues esa es otra cuestión), sino a veces porque la “hora feliz” de cada semana se lleva una gran inversión, o porque el consumo de cremas adelgazadoras, o quita “patas de gallo” lo único que quita son recursos monetarios para las necesidades básicas de sustento y salud de la familia, sobre todo de los hijos pequeños.

Fidelidad pues, abarca muchos campos. Lamentablemente cuando se vive la infidelidad es porque los esposos tienen una ruptura de sentimientos, de corazón, se pierde el amor, entonces se busca a través de “la hora feliz”, de los “amigos cibernéticos”, del consumismo, etc. llenar una carencia afectiva, donde la-mentablemente las primeras víctimas son los propios hijos.

Nota: Hay situaciones en que puede haber embarazo, aún practicada la vasectomía.

Estimados lectores: Aprovechando la ocasión, quiero hablar de la familia, a sugerencia de una asidua lectora de mis artículos.

Unas cuantas líneas sobre la unidad familiar: La familia unida, está revestida de el amor, que es el “vínculo de la perfección” (Col. 3,15). La familia que yo quiero es la semejante a la familia de Nazareth, donde haya paz, comunicación, alegría, disponibilidad, respeto, ayuda, y mucho cariño.

No saben la alegría que me da ver a mis padres felices, que se amen y cuyo amor se trasmite a sus hijos. Si así vivimos, descubrimos que la familia es lo más importante que tenemos en la vida , pues padres y hermanos, son las únicas personas con las que puedes contar. Ellos te escuchan, te dan consejos y si algo te pasa, te apoyan. Son parte de mi vida y yo de la de ellos. Porque de una u otra manera ellos hacen de mi una mejor persona.

Como ejemplo de unidad, les comparto lo que me pasó hace algunos días que celebramos el cumpleaños de la jefa de una familia; no faltó ninguno de sus hijos, ni de sus hijos políticos, ni sus nietos, ni del único bisnieto. Tampoco faltaron los colados, yo no me cuento, porque yo soy parte de esa familia. El ambiente era cálido, se notaba armonía, se respiraba integración y unidad.

Lo que más me llamó la atención, fue que los hermanos de la cumpleañera, ya entrados en años y con achaques, vinieron desde sus lugares de origen, incluso uno desde el extranjero, para estar con su hermana. Y me consta que ellos no solamente se reúnen en los momentos buenos y felices, también lo hacen en las penas y en el llanto.

La clave está en que entre los padres haya mucha comunicación y estén de acuerdo en muchas cosas, y lo principal, que no se pierda el sentido de la autoridad. Nuestros padres tienen la responsabilidad de educarnos y quieren lo mejor para nosotros, aunque algunas veces no los comprendamos. Por nuestra parte, como hijos, tenemos que obedecerlos, y nunca faltarles al respeto. Además, cuando ya estén grandes, hay que apoyarlos y recompensarles todo lo que hicieron por nosotros.

Ahora una reflexión sobre las familias desunidas: No quiero que mi familia sea desintegrada, donde cada quien ande por su lado, donde no nos interesemos el uno por el otro, donde la palabra no, no exista; donde puedas llegar a altas horas de la noche en estado inconveniente y no te digan nada; que no saben quiénes son tus amigos ni con quién te juntas; puedes no ir a la escuela y hasta te solapan, los padres creen que dejar hacer lo que los hijos quieren está bien.

También no quiero que a los niños les griten ni les hablen a maldiciones: se puede pedir cualquier cosa en buen tono de voz y por favor; no se nos olvide que en la familia se forman prototipos y cuando ese niño sea grande, les gritará a sus padres y les hablará a maldiciones porque así fue formado.

No me gusta que entre los padres haya malos tratos psicológicos, como los insultos, cada insulto es una ofensa al amor que se prometieron en el altar; y mucho menos que haya maltratos físicos o golpes.

Mientras viven los padres hay unidad en las familias, pero cuando estos faltan, algunas veces los hermanos jamás se vuelven a ver ni se frecuentan, y si lo hacen es sólo para las fiestas. Hay tanta falta de sentido fraterno, que no nos importa cómo anden o como vivan aquellos con quienes compartimos parte de la vida y que en algún momento el calor de nuestros padres nos arroparon. Tristemente en algunos casos, uno recibe mejor trato y cariño de gente extraña que de sus propios hermanos.

Por eso, en este día reflexionemos qué tipo de familia tienes o queremos ser y ojalá sea como la de Nazareth y si no tienes una familia así, es el momento de trabajar y luchar para lograrlo.

Los que tenemos familias unidas y bien integradas, hay que sentirnos orgullosos y sobre todo agradecerle a Dios, este magnífico regalo que nos ha dado y que es lo máximo que nos pudo haber pasado.

Hasta la próxima.

Mensaje del Papa Benedicto para la Cuaresma

Las partes de la Eucaristía y su fundamento:

SEÑOR TEN PIEDAD

Por Pbro. José Antonio Martínez Ortiz.

Antes del Señor ten piedad, encontramos el “Yo confieso…”

Yo confieso ante Dios todopoderoso Salmo 32, 5 Y ante vosotros, hermanos Sant 5, 16 Que he pecado mucho 1Jn 1, 8-10 De pensamiento, palabra, obra y omisión. Dt 6, 5 Por mi culpa, por mi culpa, por mi gran culpa Salmo 51, 6-7 (golpes en el pecho Lc 18, 13) Por eso ruego a santa María Virgen, a los ángeles, a los santos Ex 3, 6; Mt 22, 30-32; Jn 2, 5; Jn 19, 27 Y a ustedes hermanos que intercedan (Lc 16, 24) por mí ante Dios, nuestro Señor San 5,16 La invocación Señor, ten piedad tiene su base en la Biblia entera, pues la Gracia de Dios es eso, Don, Gracia gratuita.

En el A.T. se utiliza el término hesed, hamal o hus que indica una actitud profunda de bondad, gracia y amor fruto de la fidelidad divina. El decir Señor ten piedad, significa pedir el Don y la Gracia de la Nueva Alianza… es como decir: “Que la gracia sea más fuerte que el pecado”.

Invocamos a Dios para que manifieste su piedad y compasión por nosotros como un padre lo hace por su hijo al pedir el perdón o remisión de sus culpas.

En el A.T. este término rahamim significaba no un “concepto”, sino el gesto que tiene una madre, después que su bebé ha llorado desconsoladamente, para levantar el ánimo.

Por eso piedad significaba amor materno, regazo materno, entrañas maternas. El amor de Dios es totalmente gratuito no fruto del mérito, por eso clamamos al amor materno de Dios: piedad Is 49, 15; Os 14, 5 Fruto del amor de Dios es el perdón, la restauración de la gracia y el restablecimiento de la alianza interior. No es fruto de nuestras obras ni méritos… sino de la fidelidad de Dios a sí mismo y responsabilidad del propio amor de Dios Ez 36, 22.

Lam 4, 3-6; Ex 34, 6; 2Sam 2, 6; 15, 20; Salmo 25, 10; 40, 11; 85, 11;138, 2; Miq 7, 20. Todo el Salmo 103 y 145. Salmo 6, 3; Salmo 51, 3; Mt 9, 27.

“

El hecho de que en la mayoría de los casos el Bautismo se reciba en la infancia pone de relieve que se trata de un don de Dios: nadie merece la vida eterna con sus fuerzas. La misericordia de Dios, que borra el pecado y permite vivir en la propia existencia “los mismos sentimientos que Cristo Jesús” (Flp 2,5) se comunica al hombre gratuitamente”.

“El Bautismo, por tanto, no es un rito del pasado sino el encuentro con Cristo que conforma toda la existencia del bautizado, le da la vida divina y lo llama a una conversión sincera, iniciada y sostenida por la Gracia, que lo lleva a alcanzar la talla adulta de Cristo”.

“Un nexo particular vincula al Bautismo con la Cuaresma como momento favorable para experimentar la Gracia que salva. En efecto, desde siempre, la Iglesia asocia la Vigilia Pascual a la celebración del Bautismo. Este don gratuito debe ser reavivado en cada uno de nosotros y la Cuaresma nos ofrece un recorrido análogo al catecumenado, que para los cristianos de la Iglesia antigua, así como para los catecúmenos de hoy, es una escuela insustituible de fe y de vida cristiana: viven realmente el Bautismo como un acto decisivo para toda su existencia”.

“Para emprender seriamente el camino hacia la Pascua y prepararnos a celebrar la Resurrección del Señor -la fiesta más gozosa y solemne de todo el Año litúrgico-, ¿qué puede haber de más adecuado que dejarnos guiar por la Palabra de Dios? Por esto la Iglesia, en los textos evangélicos de los domingos de Cuaresma, nos guía a un encuentro especialmente intenso con el Señor, ha-ciéndonos recorrer las etapas del camino de la iniciación cristiana: para los catecúmenos, en la perspectiva de recibir el Sacramento del renacimiento, y para quien está bautizado, con vistas a nuevos y decisivos pasos en el seguimiento de Cristo y en la entrega más plena a él”. “El recorrido cuaresmal encuentra su cumplimiento en el Triduo Pascual, en particular en la Gran Vigilia de la Noche Santa: al renovar las promesas bautismales, reafirmamos que Cristo es el Señor de nuestra vida, la vida que Dios nos comunicó cuando renacimos “del agua y del Espíritu Santo”, y confirmamos de nuevo nuestro firme compromiso de corresponder a la acción de la Gracia para ser sus discípulos”. “Nuestro sumergirnos en la muerte y resurrección de Cristo mediante el sacramento del Bautismo, nos impulsa cada día a liberar nuestro corazón del peso de las cosas materiales, de un vínculo egoísta con la “tierra”, que nos empobrece y nos impide estar disponibles y abiertos a Dios y al prójimo. Mediante las prácticas tradicionales del ayuno, la limosna y la oración, expresiones del compromiso de conversión, la Cuaresma educa a vivir de modo cada vez más radical el amor de Cristo”.

“El ayuno, que puede tener distintas motivaciones, adquiere para el cristiano un significado hondamente religioso: haciendo más pobre nuestra mesa aprendemos a superar el egoísmo para vivir en la lógica del don y del amor; soportando la privación de alguna cosa -y no sólo de lo superfluo- aprendemos a apartar la mirada de nuestro “yo”, para descubrir a Alguien a nuestro lado y reconocer a Dios en los rostros de tantos de nuestros hermanos. Para el cristiano el ayuno no tiene nada de intimista, sino que abre mayormente a Dios y a las necesidades de los hombres, y hace que el amor a Dios sea también amor al prójimo”.

“En nuestro camino también nos encontramos ante la tentación del tener, de la avidez de dinero, que insidia el primado de Dios en nuestra vida. El afán de poseer provoca violencia, y muerte; por esto la Iglesia, especialmente en el tiempo cuaresmal, recuerda la práctica de la limosna, es decir, la capacidad de compartir. La idolatría de los bienes, en cambio, no sólo aleja del otro, sino que despoja al hombre, lo hace infeliz, lo engaña, lo defrauda sin realizar lo que promete, porque sitúa las cosas materiales en el lugar de Dios, única fuente de la vida”.”La práctica de la limosna nos recuerda el primado de Dios y la atención hacia los demás, para redescubrir a nuestro Padre bueno y recibir su misericordia”. “En el período cuaresmal la Iglesia nos ofrece con especial abundancia la Palabra de Dios. Meditándola e interiorizándola para vivirla diariamente, aprendemos una forma preciosa e insustituible de oración. La oración nos permite también adquirir una nueva concepción del tiempo: sin la perspectiva de la eternidad y de la trascendencia, simplemente marca nuestros pasos hacia un horizonte que no tiene futuro.

En la oración encontramos, en cambio, tiempo para Dios, para conocer que “sus palabras no pasarán” (cf. Mc 13, 31), para entrar en la íntima comunión con él que “nadie podrá quitarnos” (cf.

Jn 16, 22) y que nos abre a la esperanza que no falla, a la vida eterna”.

“El período cuaresmal es el momento favorable para reconocer nuestra debilidad, acoger, con una sincera revisión de vida, la Gracia renovadora del Sacramento de la Penitencia y caminar con decisión hacia Cristo”.

“Queridos hermanos y hermanas, mediante el encuentro personal con nuestro Redentor y mediante el ayuno, la limosna y la oración, el camino de conversión hacia la Pascua nos lleva a redescubrir nuestro Bautismo. Renovemos en esta Cuaresma la aceptación de la Gracia que Dios nos dio en ese momento, para que ilumine y guíe todas nuestras acciones. Lo que el Sacramento significa y realiza estamos llamados a vivirlo cada día siguiendo a Cristo de modo cada vez más generoso y auténtico”.

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Los libros y sus autores

¿Cómo sobrevivir intelectualmente al siglo XXl? Leonardo Castellani

Libros libres 2009, 334 páginas Por Luis Marino Moreno

C

omo lo vemos en la genial antología del “Chesterton de la lengua española” con se-lección y notas de Juan Manuel de Prada, Castellani creó escuela y más de un cuarto de siglo después de su muerte, mantiene lectores fieles que propagan su obra con pasión.

Descubrir a Castellani, dicen, es una experiencia inolvidable.

Desde la perspectiva del escritor y columnista Juan Manuel de Prada, ahora encontramos en España y otros países, este libro, puesto que laten muchas de las preocupaciones del mundo actual, como el relativismo, la crisis del sistema educativo, no nada más en su tiempo, sino ahora; Castelli nos mostraba ya los males que seguían a la manipulación de la educación; el declive de Occidente o la llamada memoria histórica.

Castellani, sostuvo una gran disputa con la prensa de su país Argentina, debido a su empeño apologético en los años 40 y 60. Místico algunas veces, sólido siempre en la doctrina. Su obra anticipó medio siglo problemas que acechan hoy a la humanidad.

Acerca del autor Leonardo Luis Castellani Contepomi nace en Reconquista, (Santa Fe, Argentina) el 16 de noviembre de 1899: Pierde a su padre – periodista y maestro librepensador- en la niñez, muerto en una reyerta política; también pierde en su niñez el ojo izquierdo, que será reemplazado por uno de vidrio. Termina el bachillerato en Santa Fe, y en 1918 ingresa al noviciado jesuita de Córdoba.

Estudia letras, filosofía y teología en Santa Fe, luego en Buenos Aires y comienza a escribir (Camperas). Vistas sus grandes dotes intelectuales, es enviado en 1929 a Europa y proseguir sus estudios.

Es ordenado sacerdote (1931), y estudia Filosofía y Teología en la Gregoriana de Roma, después estudia Psicología en la Sorbona de París. Tras unos meses en Alemania, en 1935 vuelve a Argentina.

Desde su regreso y hasta 1946 trabaja en docencia y periodismo; escribe más de 12 libros y traduce la primera parte de la suma Teológica de Santo Tomás. De esta época son los cuentos reunidos en “Historia del Norte Bravo”, “Martita Ofelia y otros cuentos de fantasmas”, “las muertes del Padre Petri”; ensayos y artículos reunidos en “Las canciones de Militis”, “Crítica literaria”, “ El nuevo gobierno de Sancho”.

Participa activamente en revistas y diarios (Criterio, La Nación, Cabildo, Tribunal) e incursiona en política, llegando a ser incluido en la lista de diputados del partido nacionalista. Estas actividades de actitudes críticas hacia la educación y las estructuras sociales, políticas y religiosas comienzan a ocasionarle enemigos y dificultades.

Muere el 15 de marzo en 1981.

Iglesia Universal CIUDAD DEL VATICANO.- Al presidir el rezo del Ángelus, el domingo pasado, el Papa Benedicto XVI señaló que el cristiano debe distinguirse siempre por su total y absoluta confianza en Dios, en su providencia que lo guía a una mayor libertad ante las cosas materiales y lo aleja del “miedo” al futuro. A pesar del frío del invierno romano, los fieles se reunieron en la Plaza de San Pedro para rezar con el Santo Padre, quien explicó que para confiar en Dios el ejemplo a seguir es el mismo Cristo. El Papa resaltó que Dios “nos invita a la confianza en su indefectible amor” y por Cristo nos llama a la “confianza.

CIUDAD DEL VATICANO.- Benedicto XVI considera que la Iglesia católica debe aprender y hablar el “nuevo lenguaje” de los medios de comunicación de las redes digitales. Fue el desafío que dejó a los participantes en la asamblea plenaria del Consejo Pontificio para las Comunicaciones Sociales que reúne en el Vaticano a pastores, comunicadores y expertos de la comunicación de los cinco continentes. “No se trata solamente de expresar el mensaje evangélico en el lenguaje de hoy, sino que hay que tener el valor de replantear de una manera más profunda, como ha sucedido en otras épocas, la relación entre la fe, la vida de la Iglesia y los cambios que el hombre está viviendo”, aclaró el pontífice.

ROMA.- Hacia la beatificación de Juan Pablo II: La Santa Sede comunica que la ceremonia será precedida de una vigilia -el sábado 30 de abril: desde las 20 hasta las 21 horas la preparación; de las 21 a las 22.30 la celebración- en el Circo Máximo. Organizada por la diócesis de Roma. Benedicto XVI se unirá espiritualmente por conexión televisiva. La beatificación, al día siguiente, comenzará a las 10.00 en la plaza de San Pedro. La participación no está regulada por boletos, si bien el acceso a la plaza y a las zonas adyacentes estará bajo la tutela de la seguridad pública. Todos los peregrinos podrán venerar los restos del nuevo beato el mismo domingo 1 de mayo, inmediatamente después de la ceremonia de beatificación, y continuará hasta que finalice la afluencia de peregrinos. Los restos se expondrán a la veneración en la basílica de San Pedro, ante el altar de la Confesión.

Iglesia en México NEZAHUALCÓYOTL.- El día de mañana, 7 de marzo, toma posesión de su nueva Diócesis Mons. Héctor Luis Morales Sánchez. La Diócesis de Nezahualcóyotl ha estado preparando la llegada de su Nuevo Obispo con una catequesis, en la que explica el rol del Pastor en la Comunidad Diocesana. La celebración, de toma de posesión dará inicio a las A las 12:00hrs. con la Eucaristía, la cual se llevará a cabo en los Campos de baseball del Municipio de la Paz. Recordemos que Mons. Morales es oriundo de la Diócesis de Cd. Valles y quien llevó a cabo sus estudios en nuestro Seminario de San Luis Potosí.

SAN LUIS POTOSÍ.- Como cada año, el presbiterio de esta diócesis se concentra en Jesús María para llevar a cabo sus “Ejercicios Espirituales”. Más de ciento cincuenta sacerdotes de la Iglesia Potosina dejan sus funciones parroquiales para meditar y orar guiados por un Sacerdote Jesuita. Sin lugar a dudas son días privilegiados y oportunos para el presbiterio, pues es un espacio para consolidarse como personas, como hijos de Dios y como pastores.

Es un tiempo de gracia en el cual la familia presbiteral también se consolida como tal, pues brinda la oportunidad del encuentro fraterno y amistoso sin prisas.

E

l Evangelio de Mateo insiste de manera singular sobre el “hacer”, sobre el poner en práctica. En gran parte este Evangelio es como una “halaká” cristiana, es decir el camino que debe seguir el discípulo. Parece ser que San Mateo estaba muy interesado en modelar el obrar de la comunidad cristiana, la conducta de sus miembros, presentándoles de modo organizado la enseñanza profética y sapiencial de Jesús.

El Sermón del Monte es la obra maestra de este Evangelio, pero no es el único, pues después de éste hay cuatro discursos más, abarcando así aspectos fundamentales: de la vida cristiana, del apostolado, del misterio del Reino, de la vida en comunidad (iglesia) y de la vida futura.

Según una apreciación del Cardenal Martini, este evangelio se orienta fundamentalmente al “HACER”. Este verbo y otros relacionados con su mismo campo semántico dominarán la enseñanza del Jesús de Mateo, dando como resultado cinco “discursos prácticos.”

Lo práctico de los discursos, sin embargo, conlleva también un aspecto revelatorio en cada uno de ellos. Es decir, el actuar es consecuencia de verdades teológicas, a pesar de que éstas no sean presentadas sistemáticamente.

Dichosos si obran como su Padre que está en los cielos, el cual es perfecto en el amor, porque serán hijos de Dios.

En esta perspectiva se entiende mejor la última pieza de discurso en el Sermón de la Montaña, en la cual Jesús, después de advertir que no basta decirle “Señor, Señor” para entrar al Reino de los Cielos, sino hacer la voluntad del Padre, pasa a concluir su discurso comparando al que escucha sus palabras, y las hace (las cumple), con el hombre sensato que construye su casa sobre cimientos de roca, la cual resiste los vendavales de la vida; y, al estilo sapiencial, propone también la comparación contraria del que escucha sus palabras y no las hace (no las cumple), con el tonto que construye su casa sin cimientos y sobre arena, la cual es incapaz de resistir el mal tiempo.

Con esta comparación, Jesús no sólo está diciendo que el Sermón que acaba de terminar, el de la Montaña, es el fundamento o cimiento de

toda su enseñanza, sino también que todavía vendrá más enseñanza (para terminar la casa).

Pero, sobre todo, queda claro que sin el fundamento, sin el cimiento, el resto no se sostendrá: el apostolado, la comunidad, etc.

El eje doctrinal, y la motivación capital de ese discurso fundamental en la Montaña, es la revelación de Dios como Padre, el cual sintetizaríamos así: Dichosos si obran como su Padre que está en los cielos, el cual es perfecto en el amor, porque serán hijos de Dios. Es decir, el primer discurso, como se ha hecho notar anteriormente, es un llamado esencialmente a ser felices, fundamentado en la revelación de Dios como Padre, al cual se responde ordenando la vida según el mensaje de Jesús, lo cual equivale a imitar al Padre.

Nadie podrá cumplir lo que no recuerda; este discurso, al ser la puerta de todos los demás, mejor dicho, el fundamento o cimiento de toda la enseñanza de Jesús, debió haber sido el discurso más leído, el más conocido, el más meditado, incluso me surge la pregunta si acaso también llegó a ser recitado de memoria.

Mateo, con la conclusión del Sermón de la Montaña, le dice a la comunidad que la Iglesia no sólo ora con insistencia, no sólo contempla a su Señor resucitado, no sólo le dice “Señor Señor” sino que también escucha al Señor que habla, medita su mensaje día y noche y, ante todo, lo lleva a la práctica, pues así se identifican como hijos de Dios, así se hacen realidad las bienaventuranzas.

El Papel de la Mujer en la Iglesia

L

a Iglesia ha estado siempre interesada en todo lo que se refiere a la mujer. En estos últimos tiempos se ha reflexionado mucho acerca de su dignidad, sus derechos y deberes en los diversos sectores de la comunidad civil y eclesial. Habiendo contribuido a la profundización de esta temática fundamental, particularmente con la enseñanza de Juan Pablo II, la Iglesia se siente ahora interpelada por algunas corrientes de pensamiento, cuyas tesis frecuentemente no coinciden con la finalidad genuina de la promoción de la mujer.

Maestro, en tu Palabra echaré las redes… (Lc 5, 5) Por Pbro. Noé Fco. Estrada Hernández

E

ste mensaje evangélico, marcó el II Congreso Latinoamericano de pastoral vocacional, tomando el rumbo del mismo Documento de Aparecida, que ha venido a dar Luz al trabajo pastoral de nuestra Iglesia en América Latina. Y es que hoy es necesario centrar nuestra vista en la Pastoral Vocacional, que debe ser “una de las acciones prioritarias dentro del plan orgánico de pastoral” en la diócesis (Cfr. NBFSM # 43), dada la urgencia de atender a una promoción vocacional eficaz, que parte desde el seno de la comunidad parroquial como lugar privilegiado para dicha promoción.

Hoy nos lamentamos tanto la crisis de vocaciones por la que atraviesa nuestra Iglesia, sin embargo debemos con mucha honestidad descubrir hasta donde hemos dejado de lado, el promover jóvenes, hombres y mujeres que respondan generosamente a la invitación del Señor a seguirlo en una vocación consagrada o comprometida de laico. Pues como ya se ha mencionado reiteradamente el Obispo es el principal encargado de promover las vocaciones (OT 2) y junto con él, los sacerdotes, los religiosos (as), las familias, los educadores y todo bautizado. Es decir que la promoción de todas las vocaciones es responsabilidad de esta gran comunidad que se llama diócesis, donde todos debemos contribuir, para hacer crecer la semilla de la vocación que el Señor ha sembrado a manos llenas en nuestra Iglesia.

El Papa Benedicto XVI, en la 47va Jornada Mundial de Oración por las Vocaciones, nos exhortaba a tomar conciencia de que nuestro testimonio, será lo que suscite abundantes vocaciones para la Iglesia, y desde ese punto consideramos, que los jóvenes se sentirán atraídos cuando vean en nuestra persona (Sacerdote, religiosa, religioso o padre de familia, o soltero) la alegría con que vivimos nuestra vocación, el compromiso que asumimos día a día en ser fieles a ella; no hay nada mejor que el testimonio para anunciar la Buena Nueva del Señor. Para este año, el Papa, da un siguiente paso al llamarnos a: “Proponer las vocaciones en la iglesia local” (Lema de la XLVIII Jornada Mundial de Oración por las Vocaciones).

Es el momento de ponernos en acción desde el papel que nos corresponde desempeñar dentro de esta iglesia local, es el momento de abrir la puerta a UNA CULTURA VOCACIONAL, o mejor dicho vocacionalizar todos nuestros ámbitos donde desarrollamos nuestras actividades pastorales: jóvenes, familia, grupos apostólicos, grupos de oración, etc.

Este documento, después de una breve presentación y valoración crítica de algunas concepciones antropológicas actuales, desea proponer reflexiones inspiradas en los datos doctrinales de la antropología bíblica, que son indispensables para salvaguardar la identidad de la persona humana. Se trata de presupuestos para una recta comprensión de la colaboración activa de la mujer en la Iglesia y el mundo, en el reconocimiento de su propia diferencia.

Con respecto a la Iglesia, el signo de la mujer es más que nunca central y fecundo. Ello depende de la identidad misma de la Iglesia, que ésta recibe de Dios y acoge en la fe. Es esta identidad «mística», profunda, esencial, la que se debe tener presente en la reflexión sobre el respectivo papel de la mujer en la Iglesia.

Prescindiendo de las condiciones, estados de vida, vocaciones diferentes, con o sin responsabilidades públicas, tales actitudes determinan un aspecto esencial de la identidad de la vida cristiana. Aun tratándose de actitudes que tendrían que ser típicas de cada bautizado, de hecho, es característico de la mujer vivirlas con particular intensidad y naturalidad. Así, las mujeres tienen un papel de la mayor importancia en la vida eclesial, interpelando a los bautizados sobre el cultivo de tales disposiciones, y contribuyendo en modo único a manifestar el verdadero rostro de la Iglesia, esposa de Cristo y madre de los creyentes.

Que la próxima Jornada Diocesana que se estará realizando en toda nuestra diócesis en la semana de 12 al 20 de marzo, no ayude a dar este primer paso, para atender con prontitud a esta urgencia en nuestra Iglesia.

Prescindiendo de las condiciones, estados de vida, vocaciones diferentes, con o sin responsabilidades públicas, tales actitudes determinan un aspecto esencial de la identidad de la vida cristiana

50 Aniversario Sacerdotal de Mons. Antonio Martínez Cano “ Por LCC Angélica Maldonado Morales

¿Quién es el Sacerdote?, ¿Cómo es su vida?, ¿Cuál es su relación con Dios, con sus fieles y cuál es su misión y tarea en el mundo de hoy?, son preguntas que nos ofrecen una oportunidad para reflexionar sobre este magnífico DON DEL SACERDOCIO MINISTERIAL, que también es un REGALO DE DIOS A SU IGLESIA Y AL MUNDO”.

homilía: “En sus invitaciones él eligió esta sublime frase: “Aceptar esta invitación de Jesús de Nazareth, ha sido el mejor acierto de toda mi vida”, con estas palabras, se revela cómo un Sacerdote de gran fe, dichoso por su fiel seguimiento de Jesucristo, cautivado por la Persona y la Palabra de Jesús: “Vengan, yo los haré pescadores de hombres”.

Así lo señaló en su homilía nuestro Pastor, Mons. Luis Morales Reyes, el pasado viernes 25 de febrero, día de fiesta para la Iglesia Potosina que se gozó en celebrar los 50 años de Vida Sacerdotal de Mons. Antonio Martínez Cano, en el bellísimo Santuario de San José y del Señor de los Trabajos.

“En esta fiesta de acción de gracias a Dios por sus cincuenta años como sacerdote, adivinamos su gozo interior por esta inmensa y asombrosa gracia del Sacerdocio que él ha vivido con fidelidad y amor, con alegría y entrega generosa, con sacrificio y renuncias dolorosas. le felicitamos y le pedimos al Señor que, este día y siempre, lo colme de gracia, alegría y paz”.

Nuestro Pastor presidió la solemne Concelebración Eucarística acompañado de Mons. Lucas Martínez Lara, Obispo de la Diócesis de Matehuala, y de más de una treintena de Sacerdotes que se dieron cita para elevar su oración de Acción de Gracias al Dios Trino y Uno por el aniversario sacerdotal de Mons. Antonio Martínez Cano, quien en su largo caminar ha sido un ejemplo vivo del Evangelio, un hombre que siempre ha mostrado FIDELIDAD, AMOR Y RESPETO al llamado que el Señor le ha conferido.

En esta Misa Jubilar de Acción de Gracias, Mons. Martínez Cano renovó sus votos sacerdotales que hiciera hace 50 años, en que un 25 de febrero de 1961 se entregó plenamente a Dios y a su Iglesia recibiendo la Ordenación Sacerdotal de manos del Sr. Obispo D. Luis Cabrera Cruz, en la que se comprometió a vivir en plena OBEDIENCIA, HUMILDAD, POBREZA, CASTIDAD Y PUREZA. Mons. Luis Morales afirmó en su

“La vocación del Sacerdote es como la del Profeta Jeremías porque subraya la intervención de Dios en la vida del hombre como algo inesperado y diferente. Dios lo llama de manera personal; su palabra es un imperativo: “Irás a dónde yo te envíe y dirás lo que yo te ordene”; expresa la experiencia del impulso irresistible; la objeción no es un desahogo, sino que recoge las dificultades reales de la llamada y supone su libertad de aceptación. La vida entera del profeta, como la del Sacerdote, está dirigida por Dios, Quien promete estar con Jeremías, guiar sus palabras y obras”.

“La vida del Sacerdote no debe ser una vida confortable, debe ser “plaza fuerte”, “columna de hierro”, “muralla de bronce”, sabrá que como todos los profetas, muchas veces se encontrará solo, incomprendido y rechazado”.

“El Sacerdote no puede sustraerse

Los fieles de nuestra querida arquidiócesis, acompañaron a Mons. Antonio Mtz. Cano, en esta magna Concelebración Eucarística para dar gracias a Dios por su fidelidad al Sacerdocio durante 5 décadas. del camino de Jesucristo. Su vida Sacerdotal está acompañada frecuentemente por lágrimas y gemidos”.

“La frase: “Tu Eres Sacerdote para siempre como Melquisedec”, anuncia también la realidad de una certeza y un gozo, una alegría interior que nada ni nadie puede arrebatarle. El

Sacerdote debe obedecer al Padre y llevar a cumplimiento su designio de salvación para ser testigo de su amor eterno para todos los hermanos, debe compadecerse de las debilidades, porque también él está sometido A LA PRUEBA Y AL SUFRIMIENTO”.

Momentos en que nuestro pastor le entrega la Bendición Papal a Mons. Antonio Mtz. Cano, quien la recibe con un espíritu jubiloso.

MARZO 06 DE 2011

Preparación de L jóvenes misioneros

Por Carlos Cuéllar

a palabra misión significa envío, y en nuestra Arquidiocesis cientos de personas durante la semana santa acuden a diferentes partes de México y de nuestro estado, a llevar el mensaje evangelizador mas importante de nuestra fe: la Resurrección del Señor.

Esta importante tarea está a cargo de la Pastoral de la Misión y el encargado es el padre Edmundo Moreno Gómez, quien con un buen trabajo de equipo preparó a los misioneros con materiales y sobre todo espiritualidad para que acudan en condiciones perfectas y se conviertan en auténticos misioneros.

El pasado sábado 26 de febrero en las instalaciones de pastoral vocacional se prepararon todos los coordinadores de los equipos, decenas de jóvenes de diferentes grupos y movimientos acudieron, el responsable de la Pastoral de la Misión les dió la bienvenida. Esta reunión es de suma importancia pues es la primera de varias reuniones que se harán durante el mes y así posteriormente clausurar esta preparación con la misa de envío en la catedral por el Arzobispo Luis Morales unos días antes de la semana santa.

El padre Edmundo dio énfasis al tema de la espiritualidad y el sacramento de la confesión, con los que se deben de vivir estos días rumbo a la misión, este momento concluyó con la reflexión personal de los asistentes y con una oración.

“Hace falta crear la gran necesidad de Dios en la vida”

El Papa pide que se rece en marzo por un mayor

reconocimiento de la mujer

Entrevista con el Pbro. Carlos Medina López Por LCC Angélica Maldonado Morales

E

n entrevista con su Semanario Católico “LA RED”, el Canónigo Carlos Medina López, Rector de la Basílica-Santuario-Parroquia de Ntra. Sra. de Guadalupe, habló sobre los grandes alcances, logros y retos que tiene la ADORACIÓN NOCTURNA, la cual dio inicio a las actividades que la encaminan a celebrar su gran Jubileo del primer Centenario en enero del 2012”.

Indicó el Sacerdote entrevistado: “En números redondos son 1,400 grupos de Adoración Nocturna en el país, en 84 Obispados. San Luis Potosí fue el quinto grupo en el país de haberse fundado, que fue en enero 6 de 1912”.

“El primer socio y fundador de la Adoración Nocturna fue el Sr. Obispo Ignacio Montes de Oca y Obregón, cuarto Obispo de San Luis Potosí”.

“De 5 millones de socios que tiene la Adoración Nocturna en el país, son 12 mil socios adultos, entre hombres y mujeres. Tarcisios son los jóvenes y adolescentes de 14 a 17 años e Inesitas, son mujeres de 14 a 17 años”.

“Un dato relevante es que el año pasado 2010 es que entraron al grupo de la Adoración Nocturna de la Basílica de Guadalupe, 24 socios nuevos, mitad adultos y mitad jóvenes y tuvimos el sábado pasado un ingreso de 34 socios nuevos, esto en el grupo sede de la ciudad, que es el de la Basílica”.

“El 70 % fueron jóvenes, menores de los 40 años, eso nos da mucho gusto, dado que la mayoría de los grupos apostólicos del país están conformados de puros adultos que pasan los 50 años, por lo que vemos que la promoción que se está haciendo, va respondiendo”.

“En muchas Parroquias en ocasiones, se pierde el amor a la Adoración Nocturna, pero es que no se promueve, un factor es que ahora se vive muy de prisa, con mucho estrés y bajo presiones de trabajo muy fuertes, y otro sería el que en muchas Parroquias falta crear esa necesidad de Dios en la vida, ese espacio dedicado a Él.

“En un momento dado, sea en la alegría, en las penas, en la ancianidad,

P

ara este mes de marzo, el Papa Benedicto XVI pide a los fieles que recen para que se reconozca el papel de la mujer, así como por los cristianos perseguidos en Asia. en la enfermedad, siempre Cristo le da sentido a nuestra vida diaria y a veces incluso le falta al Sacerdote, crear espacios y ambientes, donde la persona sienta que Dios la llama y la ama y pueda responderle a Dios, eso es lo que yo propondría”.

“Todo es parte de la cultura contemporánea, el ritmo de vida que nos trae de cabeza, y que nos dicta que tenemos tiempo para todo menos para Dios. Nos hace falta fomentar más valores humanos y cristianos, ése sería un reto para la Iglesia: EL CREAR UNA NECESIDAD DE UN DIOS EN LA VIDA A TRAVÉS DE LA EUCARISTÍA”.

“Es importante, preciso y urgente crear más espacios para jóvenes en todos los ambientes católicos; en nuestra misma Iglesia tendríamos que abrir nuevos espacios de acuerdo a la condición donde se vive y de acuerdo a los valores que se tienen”.

Esta es, de hecho, la propuesta que hace en las intenciones de oración para el tercer mes del año, contenidas en la carta pontificia que ha confiado al Apostolado de la Oración, iniciativa que siguen casi 50 millones de personas en los cinco continentes.

“Para que en todo el mundo sea reconocida adecuadamente la contribución de la mujer al desarrollo de la sociedad”, dice la intención general.

Cada mes, el Pontífice propone también una intención misionera.

La de marzo dice así: “Para que el Espíritu Santo conceda perseverancia a cuantos son discriminados, perseguidos y asesinados por el nombre de Cristo, particularmente en Asia”.

Templo de

Nuestra Señora del Carmen

E

l recinto cuenta con acervo pictórico y escultórico de gran valor artístico, entre las que se encuentran varias pinturas al óleo con pasajes e imágenes de la Orden Carmelita, así como verdaderas joyas de arte, como el órgano de viento, el púlpito con tornavoz, varias esculturas religiosas estofadas y policromadas de excelente calidad y valor.

En el rubro de pinturas el recinto resguarda de varios temas religiosos, entre los que podemos citar: La Vida de Santa Teresa, Vida de San Elías, Virgen de Guadalupe, el Árbol Genealógico de Jesús o de la Sacratísima Familia de los Cinco Señores atribuida a Tresguerras; encabeza en el tronco del árbol el rey David del cual descienden Santa Ana y San Joaquín, la Santísima Virgen María y San José.

Finalmente en la cúspide el Niño Jesús; así mismo imagen pictórica de Nuestra Señora de la Fe, pinturas al temple del Sueño de San Elías y otra de la Visión del mismo San Elías, El triunfo de la Madre de Dios, Nacimiento del profeta Elías, Huida a Egipto, San Elías y el rey Acaba, Elías y los Sacerdotes del Baal, La Inmaculada Concepción, La Asunción de María, La Santísima Virgen y San José se aparecen a Santa Teresa, vocación de San Eliseo, Muerte de San Elías, Transfiguración, El Patronato del Santísimo Sacramento sobre los Carmelitas De los autores que dejaron plasmado su arte en estos lienzos se encuentran principalmente los siguientes pintores Vallejo, Vela, Tresguerras, Antonio de Torres, José Guerrero, Antonio Sánchez y José Luis Rodríguez.

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MARZO 06 DE 2011

E

l evangelio es palabra de vida eterna. Lo sé y lo confieso en voz alta.

Cuando leo en la asamblea litúrgica una de sus partes, digo siempre al final: Palabra del Señor, y beso el libro en señal de agradecimiento y reverencia. En el evangelio está a veces de manera velada y con frecuencia de manera patente la respuesta a casi todas nuestras preguntas.

Los antiguos, según un método de interpretación bastante escrupuloso, veían en cada monosílabo, en cada letra y hasta en cada signo de puntuación un mensaje oculto que era necesario descifrar. Cada palabra era analizada como con lupa y de ella fluían miles de sentidos, de señalamientos y sugerencias que el lector apresurado ni siquiera hubiera podido imaginar. Por decir así, el texto santo más que leído era desmenuzado, pues –como reconoce Borges al hablar de la Biblia en una de sus conferencias- «en este libro nada puede ser casual, absolutamente nada. Todo tiene que estar justificado».

«Ni una pequeña sílaba ha

de despreciarse en las divinas letras –enseñaba San Juan Crisóstomo, a su vez-.

Pues no son palabras secas, sino Palabras del Espíritu Santo, y, por tanto, se puede encontrar un gran tesoro incluso en una sílaba».

Hoy se procede de manera diversa. Sin dejar de ver en la Biblia la Palabra eterna, tiende a leerse según periodos más largos. No se ve la letra, la frase particular, sino el conjunto y el contexto.

Utilizando una palabra de moda, diría que se trata de una lectura globalizada.

Ambos métodos son válidos: mientras uno mira el árbol, el otro mira el bosque, y los dos tienen razón.

Supongamos, por ejemplo, que tenemos que analizar el milagro de la multiplicación de los panes y los peces según lo cuenta Marcos en su breve evangelio. ¿Qué diría de él el segundo tipo de lector, es decir, el lector al que hemos llamado global? No nos es difícil adivinarlo. Diría, eso es casi seguro, que en este pasaje se encuentra el cumplimiento de una famosa profecía del Antiguo Testamento, o bien

un anticipo claro del sacramento de la Eucaristía, o bien las dos cosas a la vez, pues lo ocurrido frente al lago tiene que ver tanto con el pasado como con el futuro. El primer tipo de lector, en cambio, sin descartar ni lo uno ni lo otro, se detendrá en cada letra o frase del texto buscando algo que le ayude a vivir más plenamente el día de hoy. Una frase como ésta sería para él profundamente significativa: «Entonces les ordenó Jesús que se sentaran sobre la hierba verde» (Marcos 6,39).

Como también éstas son palabras de Jesús, poseen ya en sí mismas un misterioso poder redentor, un poder capaz no sólo de salvar al hombre eternamente, sino de salvarlo también de este apresurado presente que se va muriendo a horas. ¿Qué consecuencias se pueden sacar, en efecto, de este pequeño versículo ante el que los lectores globales ni siquiera se detienen?

El Señor da una orden a la muchedumbre, y una orden muy precisa: «¡Siéntense!».

A mí, hoy, pues, me pide exactamente lo mismo que

pedía hace dos mil años a la muchedumbre que lo seguía por los caminos polvorientos de Judea: «¡Siéntate!». Es decir: «Escucha: no corras ni te apresures.

Descansa un poco. A cada día le basta su propio afán.

Reposa. ¿De qué le sirve al hombre ganar el mundo entero si pierde su alma, si se pierde a sí mismo? Cuando te ordeno que te sientes, te quiero decir que vivas con sosiego. El trabajo fue hecho para el hombre, pero no el hombre para el trabajo. Tú vales más que todo lo que hagas. Cuando veas que ya no puedes más y que la hora es ya muy avanzada, siéntate; es más, cierra los ojos y duerme tranquilo. No eres un esclavo. Acerca una silla y toma aliento: te hará muy bien. Que no te sorprenda el corazón diciéndote que no puede seguirte el ritmo.

Toma la vida con mayor tranquilidad. Mira los lirios del campo: son bellos con una belleza que no tuvo ni siquiera Salomón en la época de su mayor gloria. Yo sigo multiplicando para ti los panes y los peces. ¿Crees que las panaderías están llenas gracias únicamente a tu laboriosa industria? Si así lo crees, piensa: ¿qué harías tú si yo no diera crecimiento a las semillas que depositas en la tierra como un tesoro? ¿Y no es esto el milagro de la multiplicación de los panes cotidianamente repetido?

En el mar, los peces se aparean para ti. Dios ha

puesto en movimiento a todo el universo para responder a esa sencilla petición que haces al rezar el Padre nuestro de que no te falte el pan de cada día. Así pues, mira la vida con menor ansiedad y atrévete a hacer una pausa. Atrévete a sentarte». ¡Existe el mandamiento de sentarnos! Cristo mismo muchas veces se sentó: a orillas del mar (Mateo 13,1), en los montes (Mateo 5,1), en el brocal de los pozos (Juan 4,6). ¿Por qué, pues, no iba a pedir a los suyos que hicieran lo mismo ellos también? «La vida de Jesús –observa el teólogo suizo Hans Urs von Balthasar (1905-1988)- sigue un ritmo natural. Él tiene tiempo para dormir, para comer, para celebrar fiestas, para asistir a banquetes. En su vida hay momentos de alegría, de ira, de llanto, de disgusto, y momentos de retiro y oración, de los cuales saca nuevas fuerzas para realizar el compromiso que ha tomado sobre sí». Sí, Jesús se permitía a sí mismo el derecho de sentarse. ¿Y por qué sus discípulos no buscan imitarlo en esto también?

Dijo también Jacques Leclerq (1891-1971) en uno de sus libros: «De Cristo nunca se dice que hubiera tenido prisa». Lo creo, lo creo. ¿Cómo, si no, nos hubiera dado la orden de sentarnos sobre la hierba

«Ninguno nos ha dicho cómo pasaban el invierno Jesús y sus discípulos. Imagino que se detenían para reposar; después de todo, Palestina no es tan difícil de recorrer. ¿Pero qué patrón, qué profesor e incluso que hombre de fe osará pedirnos imitar a Cristo de esta manera?».

PIERRE SANSOT Du bon usage de la lenteur

Por Lic. Fil. Rafael Gómez

L

a humanidad tiene puesta su mirada de esperanza en los padres dispuestos a planear, “entre sí y bajo el cielo”, el nacimiento del hijo, porque son estos los únicos “que acaban haciéndose cargo de toda la vida y de la vida de todos”. Por eso ahora nos ocuparemos de quienes, sin amor de sus padres, solo son concebidos y no alcanzan a nacer porque les falta tiempo y son incapaces de brincar etapas de su gestación para librarse del exterminio. Ya hay leyes “que niegan consistencia de humana” a la vida humana antes de nueve semanas. Sólo ha sido cuestión de tiempo despenalizar <la eliminación de esa vida> y, cuestión de tiempo, encontrarle una justificación y hasta una bondad: la salud pública; y todo porque, lo que en otro tiempo era rechazado como delictivo, acaba, con un poco de tiempo, en un criterio socialmente respetable: “eliminar a uno que le estorba al otro” y, de paso, hacer de la ciencia y de la medicina, ya no una altísima vocación al cuidado de la vida, sino una profesión al cuidado del dinero.

“lo facilita todo” y propone leyes que dejan en manos de las emociones y de las sensaciones el gobierno de la vida. El gobierno de la vida no puede estar sino a cargo de la luz de la razón que nos lleva a contraer compromisos de amor y, solo así, con el corazón descubrimos el valor de la ternura, con el alma contemplamos el sentido de la vida y con el espíritu participamos del encuentro con todos.

La ley solo mira hacia el exterior del ser humano para obligarlo a su cumplimiento y la norma ética y moral, que se ocupa de valorar los actos buenos y malos, es la que mira hacia su interior. No es por la ley sino por la norma ética y moral que éste busca libremente el bien. Desde su interioridad decide comprometerse con la verdad y con el bien en su genuina orientación a los valores. Los gobernantes solo cuentan con la ley para cumplir sus funciones, por tanto, deben legislar y hacer cumplir las leyes, con la conciencia clara de que cada ser humano está llamado a una plenitud de vida que va más allá de la existencia terrena porque participa de la vida misma de Dios. Una buena ley nunca obscurece la luz de la razón y sí favorece la salud del alma y del corazón. La ley, pues, no puede subordinarse al gusto de muchos hombres y mujeres que no buscan sinceramente ni la verdad, ni el bien, ni la luz, sino la oscuridad de la razón. Esta oscuridad es la pendiente por la que se preci-pita una sociedad que no advierte en qué momento el criterio del estorbo empieza a correr por sus venas. Y todo porque la cultura Light

Dice el Evangelio (Lc 2, 15-35) que cuando nació Jesús y se salvó de la muerte a manos de su gobernante, Herodes, hubo manifestaciones en el cielo y ángeles anunciaron a los pastores a cerca del Niño y estos acabaron dando gloria y alabanza a Dios y, de igual manera, cuando sus padres lo presentaron al templo y le pusieron el nombre de Jesús, según el ángel le había pedido a María antes de estar embarazada, tales manifestaciones continuaron cuando, por Simeón, se manifestó el Espíritu, la Salvación y la Luz de Dios. Los padres de Jesús sabían que era necesario planear entre sí, la vida de aquél en quien los pueblos tendrían vida. Ese Niño que nació con todos los problemas y precariedades humanas, con amenazas de muerte desde su nacimiento, pero, con todo el amor humano y de sus padres, y con todo el amor Divino de su padre, nunca estuvo obligado a brincar etapas en su vida y, cuando llegó su tiempo, cuando llegó su hora, anunció a todos la buena nueva, se vació por ellos de su sangre y por ellos resucitó.

Quien concibe una nueva vida se convierte en padre o madre y, si acaba con ella porque estorba a sus planes, acaba también con el sentido de paternidad y, por consiguiente, con el de fraternidad. No es posible que una sociedad exprese fraternidad (solidaridad) cuando, por el criterio del estorbo, ha perdido el sentido de paternidad y, dentro de ella, el sentido profundamente humano y divino de maternidad, que es la que mejor representa la ternura de Dios para su criatura y, en esa misma acción, se sale del corazón de Dios que, al mismo tiempo que se nos da a todos como Padre, nos convierte a todos en hermanos.

JUAN PABLO II

Incansable luchador de los derechos humanos Por Lic. Alejandro Gerardo Nava García

A

propósito de la beatificación del Papa Juan Pablo II el primero de mayo del presente año, me gustaría resaltar la vida de este hombre que es un gran ejemplo de santidad ya que él vivió primero bajo la dominación nazi y después sobre la opresión soviética, además participó en las sesiones del Concilio Vaticano II, fue un hombre abierto a los grandes problemas de la humanidad.

En Polonia, cuando fue obispo y después como cardenal en Cracovia, demostró una gran habilidad en el manejo de las relaciones Iglesia-Estado comunista, se convirtió en un verdadero activista de los Derechos Humanos. Una de las metas de Karol Wojtyla era hacer una revolución espiritual sin violencia. Sus armas eran solamente aquellos “pensamientos revolucionarios” relativos a los derechos humanos, por ejemplo la dignidad del ser humano y puso aquí los cimientos de unos valores por los que la gente estaba decidida a luchar; como son: la verdad, la libertad y la solidaridad. Juan Pablo II también apoyó el derrumbe del muro de Berlín.

Juan Pablo II también procuró el amor al prójimo y tenía el don de unir la fe y el ecumenismo; la firmeza y el calor humano; diagnosticó que el mundo estaba en estado de decadencia moral y espiritual y sin embargo, nunca temió al mundo, sino que lo amó enormemente y a la gente proponía siempre la verdad con amor.

El gran tema del Pontificado de Juan Pablo II, fueron los derechos humanos hablando con claridad, fuerza y constancia; su primera encíclica REDEMTOR HOMINIS (redentor del hombre, 1979), la dedicó a la causa del hombre, a la dignidad humana, a los derechos inalienables y a los peligros que amenazan al ser humano.

La fe nos enseña que el hombre es imagen y semejanza de Dios (Génesis 1:27), eso significa que está dotado de una inmensa dignidad y que cuando se atropella al hombre, o cuando se violentan sus derechos y se cometan contra él injusticias, o cuando se le someta a las torturas, se le violenta con el secuestro o se viola su derecho a la vida se comete un crimen que es a la vez, una gravísima ofensa a Dios. Es entonces cuando Cristo vuelve a recorrer el camino de la pasión y sufre los horrores de la crucifixión.

Concluyo con lo siguiente: la Iglesia siempre protestará cuando corra peligro la vida humana y defenderá con celo a la persona, digna de amarse, no por su utilidad sino por la grandeza de su dignidad; nada supera la grandeza de la persona humana.

Las democracias que niegan el derecho a la vida desde el momento de la concepción hasta el de la muerte natural, son los calificados como “Estados Tiranos” que envenena la cultura de estos derechos.

FEBRERO 27 DE 2011

A propósito del día de la familia: Memorias Diez ideas para proteger a tu familia de la rutina, el individualismo… de antaño Por Cango. José Ma. Ortega R.

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uando éramos seminaristas, en aquel entonces, cada año nos daban vacaciones de dos meses. Mes y medio íbamos a vacaciones de comunidad y a nuestra casa tan sólo 15 días.

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iez ideas para proteger a tu familia de la rutina, el individualismo…

Aquilino Polaino es conocido por el gran público como divulgador y consejero en temática familiar y de salud emocional. Estuvo presente en el II Congreso Educación y Familia de la Universidad Católica de Murcia y habló de diez principios básicos que contribuyen a mejorar la estima de los miembros de una familia.

1. Disponibilidad: Consiste en dedicar tiempo (¡que es lo que menos tenemos!) a atender a nuestros hijos y esposo/a.

Con los adolescentes, por ejemplo, no vale lo de “este tema ya lo hablaremos el sábado con tranquilidad”. Para el sábado, tu hija de 13 años ya se ha emborrachado con una amiga y van a ha-cer lo que se les ocurra. Hay que estar disponible, porque hay problemas que sólo se arreglan en el momento en que el otro se anima a plantearlo y pide ser escuchado.

2. Comunicación padres-hijos: que los padres hablen menos y escuchen más: En muchas familias, cuando un padre o madre dice “hijo, tenemos que hablar”, el chico piensa “uy, malo, malo”. ¿Por qué? Porque sabe que los padres cuando dicen “tenemos que hablar” quieren decir “te voy a soltar un discurso por algo tuyo que no me ha gustado”.

Escuchar a los hijos (o al cónyuge, a cualquiera) es un esfuerzo activo. Hay que soltar el diario, quitar el volumen de la TV, girar la cabeza hacia quien te habla.

Eso es escucha activa, que es la que sirve para mejorar la autoestima de tu familia.

3. Coherencia en los padres y autoexigencia en los hijos: Uno es coherente cuando lo que piensa, siente, dice y hace es una sola y misma cosa.

No tiene sentido decirle a los niños desde el sofá: “hey, ustedes, ayuden a mamá a quitar la mesa”.

Hay que dar ejemplo primero. Tú, padre, has de quitar la mesa durante 5 días, que te vean. El quinto día dices a tu hijo: “hey, ahora entre los dos”. Y dos días después: “estoy orgulloso de ti, ahora ya has aprendido y ya puedes quitar la mesa tú sólo”. Esto es un progenitor potenciador, motivador, animador y protector al mismo tiempo. También pedimos a los niños que estudien pero ¿nos ven a nosotros estudiar, leer revistas de nuestro oficio, ponernos al día en nuestra especialidad?.

4. Tener iniciativa, inquietudes y buen humor, especialmente con el cónyuge. Estos tres factores son útiles para la autoestima familiar. Pero la rutina es un enemigo en las relaciones

Un año nos tocó ir a San Anton de los Martínez, Gto. Ya para terminar las vacaciones de comunidad, nos llevaron a Jofre, Gto. En el camino pasamos por el rancho, de San Juan. Qué primor, huertas de manzanas chapeteadas, pero más hermosos los corazones de sus habitantes que nos atendieron como si hubiera llegado el presidente de la República.

conyugales y con los hijos. El punto clave es que haya creatividad e iniciativa en la vida de pareja y eso se contagiará a toda la familia. Ser papá o mamá no debe hacernos olvidar que somos “tú y yo, cariño, nosotros”.

Creatividad e iniciativa protegen a la pareja de la rutina. Cuando hay rutina, es fácil que uno de los dos busque la “magia” añorada fuera, en otras relaciones. Por el contrario, si la pareja va bien, los hijos aprenden su “educación sentimental” simplemente viendo cómo se tratan papá y mamá, viendo que se admiran, se halagan, se alaban, son cómplices.

5. Aceptar nuestras limitaciones, y las de los nuestros: Hay que conocer y aceptar tus limitaciones, las de tu cónyuge, las de tus hijos. Pero es importantísimo no criticar al otro ante la familia, no criticar a tu cónyuge ante los niños, o a un niño ante los hermanos, comparando a un hermano “bueno” con uno “malo”. Eso hace sufrir al hijo y le quita autoestima. Es mejor llevarlo aparte y hablar.

6. Reconocer y reafirmar lo que vale la otra persona: Seamos sinceros: no tiene sentido que andemos llamando “campeón” a nuestro niño que nunca ha ganado nada. Si ha perdido un partido de fútbol, no le llames campeón. Ha de aprender a tolerar la frustración, acompañado, eso sí. También hemos de saber (grandes y pequeños) que somos buenos en unas cosas y no en otras.

“Hijo, pareces bueno en A y en B, pero creo que C no es lo tuyo”.

7. Estimular la autonomía personal: Uno se hace bueno a medida que va haciendo cosas buenas. Es importante que lo entiendan los hijos. Lo que se hace es importante: hacer cosas buenas nos hacen buenos a nosotros. Esta idea ayuda a tener autonomía personal, hacer las cosas por nosotros mismos, para mejorar nosotros.

8. Diseñar un proyecto personal: No irás muy lejos si no sabes donde quieres ir. Quedarte quieto no es factible, uno tiende a volver a quedarse atrás. Has de tener un proyecto personal para crecer, y atender y ayudar a discernir y potenciar los proyectos de los tuyos.

9. Tener un nivel de aspiraciones alto, pero realista. Hemos de jugar entre lo posible y lo deseable. Si aspiramos alto, nos valoraremos bien, tendremos autoestima. Pero, ¿es posible? Debemos conjugar un alto nivel de aspiraciones con la realidad de nuestras capacidades y recursos.

10. Elijamos buenos amigos y amigas: El individualismo es el cáncer del s.XXI. Nosotros y nuestros hijos estamos atados a máquinas gratificantes: el DVD, la TV, la videoconsola, Internet... no se diga esos espacios llamados “Redes Socia-les”. El trabajo en solitario va minando la amistad verdadera. ¡Los amigos comprometen mucho y al individualista no le gustan los compromisos!

Hay finalmente tres ideas más a considerar: * Según Chesterton, lo natural tiende a lo sobrenatural mientras que lo que no se sobrenaturaliza se desnaturaliza.

Hemos de entender que la autoestima, el amar y el amarse, es sobrenatural. ¿Has pensado en cómo te ama Dios, en lo grande, lo sobrenatural de Su amor por ti? Eres muy especial para Él. Cuando vivas este amor, comunícalo a tus hijos. * Buena parte del sufrimiento inútil en el mundo se produce porque en algunas ocasiones en las que deberíamos dedicarnos a pensar, nos ponemos a sentir; y en ocasiones que son para sentir, nos ponemos a pensar. Evitemos este sufrimiento inútil: hay momentos para pensar y momentos para sentir. * Si luchas, puedes perder, pero si no

Seguimos adelante, siempre caminando a pie. Llegamos a otro rancho, ya para anochecer, allí pernoctamos. Nos ofrecieron hospedaje. Eran unas trijes de pastura, pocos nos hospedamos ahí porque nos platicaron que había muchos alacranes; otros se acostaron debajo de unos mezquites, por la misma razón.

Al día siguiente partimos para Jofre. A mediodía acampamos en un bonito paisaje para almorzar.

Parecía que todos teníamos sarna de perro, las uñas eran pocas para rascar. El Pbro. D. Jesús Castillo que en paz descanse, prefecto de disciplina, responsable del grupo vocacional, silenciosamente se retiró a un lugar lejano, después de algunos minutos regresó y nos dijo: “Tuve que ir a ponerme en traje de Adán”, ¿por qué? Porque donde había pernoctado me saturé de piojos.

Esta es una de tantas anécdotas que nos toca saborear cuando se está en el seminario.

Lo mismo acontece a tantos pobres que por su necesidad ocupan cuartos de vecindad que son una desgracia y cuyos dueños siempre están con las manos tirantes para acaparar dinero, pero no para arreglar esos locales que para esos dueños son una mina.

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I

luminada del Espíritu Santo, Isabel llenó a María de palabras bellas. Palabras inspiradas por el Espíritu de Dios. Bendiciones son lo que esa ocasión escuchó María. Ella estaba realmente sorprendida. Hacía unos días o semanas ella había escuchado también otras palabras bellas pues se le acercó un ángel con un mensaje divino y con saludos parecidos a las palabras de Isabel, mejor dicho, palabras del Espíritu.

Efectivamente, es el Espíritu el que habló en estas ocasiones, como es el Espíritu el que dice todas las cosas hermosas que leemos en la Biblia. Por eso decimos que la Biblia es palabra de Dios. Llamamos sagradas escrituras a los libros de la Biblia porque tienen al Espíritu Santo por autor. En realidad el autor de las cosas más maravillosas del mundo y el universo es este Espíritu de Dios. Él aleteaba sobre las aguas. Él bajó en forma de paloma cuando Jesús fue bautizado por Juan en el Jordán. Él es quien se posó en forma de lenguas de fuego sobre los apóstoles en pentecostés. Él quien impulsó a los primeros cristianos a anunciar la buena nueva del evangelio, la feliz noticia de Jesús resucitado. Es, entonces, el autor de las palabras más lindas del mundo.

Sí amigos. Y las más excelentes palabras fueron pronunciadas a la Madre de Dios, a María virgen; recordemos al ángel en aquel momento de la anunciación: “alégrate María, llena de gracia, el Señor está contigo”. Fascinante, ¿no es cierto? María inspira las Palabras de amor más sublimes. Ella, en aquel momento, se sorprendió de sobremanera de aquel tan extraño como bello saludo. Pero el ángel la tranquilizó: “No temas, María, porque has hallado gracia ante Dios…”

Recordemos ahora la respuesta de la hermosa María cuando aquel ser celestial le anuncia que será madre del verdadero Dios por quien se vive: “he aquí la esclava del Señor, hágase en mí según tu palabra”. Ella, María se acoge a la voluntad y al amor de Dios con santa obediencia; esta es la belleza de María.

Tenía razón el ángel al saludarla, pues ella está llena de gracia, de tal manera que ni por un segundo duda de las palabras del ángel. Sabe que esas palabras se cumplirán cabalmente y a tiempo.

Imaginemos ahora a María subiendo la cuesta en las montañas de Judea. Ella va a ayudar a Isabel a tareas cotidianas pues su parienta tendrá en breve un hijo. María es solícita y solidaria. María tiene amor, tiene caridad hacia quienes la necesitan. Ella va pensando en las palabras del ángel. Ese saludo tan raro que aun no comprende, pero le gusta recordar. Y mientras piensa en estas cosas, dentro de sí está creciendo, casi imperceptiblemente el Hijo de Dios, Jesús. Ella va pensando en José y también en la nueva misión en su vida: criar al Hijo de Dios, educarlo, amarlo, verlo crecer. Eso será maravilloso…

… Y María pensaba en todo esto, lo que tenía guardado en su corazón, cuando llegaba a casa de Isabel, y escucha nuevamente la voz de Dios en boca de su prima: “Bendita tú entre las mujeres y bendito el fruto de tu vientre. ¿Quién soy yo para que la madre de mi Señor venga a verme? Apenas llegó tu saludo a mis oídos, la criatura dio saltos de gozo en mi vientre. Y bienaventurada tú que creíste, porque se cumplirá lo que te fue dicho de parte del Señor”.

Cómo la buscaba el Espíritu, cómo le hablaba con tanto amor. María, aún no asimilaba las primeras palabras, las del ángel, cuando Isabel vuelve a manifestarle tan grande amor de Dios. Dejemos que el Espíritu nos hable, oremos con frecuencia, leamos la Palabra de Dios, escuchémosla, como María lo hacía.

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Palabra de Dios

Ni el huracán, ni el terremoto, ni el fuego, sino la caricia de la voz de Dios Por Victor Javier Morales Soldevilla 4to. Teología

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escubrir a Dios es paradójicamente sencillo y a la vez difícil. No porque Dios se nos esconda, sino porque nosotros no siempre lo reconocemos. El paso de Dios lo podemos ejemplificar con la misma figura de Elías (1 Re 19, 9-11). Quien estando en una cueva refugiado, sabe que Dios le va a visitar, vive el paso de un huracán, la sacudida de un te-rremoto, la fuerza del fuego, y finalmente una la suavidad de una sencilla brisa.

Podemos impactarnos con las ideologías del mundo como ante un huracán, nos podemos fascinar ante las modas como frente a un terremoto, podemos fascinarnos ante los avances tecnológicos como frente al fuego, y podemos despreciar lo sencillo de la vida. Y resulta que es en lo sencillo donde Dios estuvo presente, en la brisa del viento que es como una caricia.

En muchas ocasiones queremos descubrir a Dios en los actos extraordinarios y atrayentes, en lo que nos hace sentir, en lo que nos emociona y eriza la piel, pero en realidad la presencia de Dios se manifiesta de modo mucho más sencillo. Si vemos a un hombre bien vestido, con toda la apariencia de un modelo o cuando menos la apariencia de alguien importante, nos impacta más y nos causa más respeto, porque nos deslum-

bra lo que lleva, nos impacta los alcances que tiene su poder adquisitivo, más que alguien que viste modestamente, así, de muchas formas buscamos a Dios en tantos lugares que nos olvidamos de buscarlo en los lugares realmente importantes, como en la Eucaristía, los sacramentos y la Escritura. Que siendo misterio deben impactarnos y causarnos admiración, dejarnos perplejos, por ser un misterio que nos sobrepasa. Sin embargo, aprender a ver la Luz que viene de arriba, es difícil cuando nuestros ojos se han acostumbrado a estar iluminados por las luces artificiales.

Necesitamos cerrar los ojos y descubrir el camino interior que Dios ha trazado en nosotros como ruta para alcanzar el encuentro con Él.

En el Evangelio de Marcos, 10, 17- 22, leemos cómo un joven rico se acerca a Jesús y éste mirándolo con amor le llama; sin embargo, el joven no acepta la llamada de Jesús por refugiarse en las falsas seguridades, en las luces artificiales de sus posesiones, dejando lo más por lo menos, es decir, toma la decisión de quedarse con lo poco que tiene y no arriesgarse a ganar más con la suave caricia de la llamada de Dios, refugiándose así en el terremoto, efímero y pasajero de sus bienes, finalmente pasajeros.

La vida está llena de decisiones, algunas simples e intrascendentes, otras realmente importantes y trascendentes que pueden cambiar la vida de manera radical. Decisiones que no se toman a la ligera, decisiones que inician como una curiosidad por conocer lo que vendrá, y después que se vuelven cruciales, como la decisión de Elías de permanecer en la cueva hasta la visita de Dios en la brisa, o como la decisión del joven de dejarse llevar por la fuerza de su riqueza, lo cual, quizá físicamente representaba una mayor seguridad y bienestar que una llamada, que una palabra.

Descubrir el llamado de Dios en lo vertiginosos del mundo que nos impacta con las ideologías, avances tecnológicos y aquello que se vuelve un tumulto de voces y ruidos a nuestro alrededor, nos distraen y en ocasiones, nos hacen olvidarnos de hacer un alto en nuestra vida, para escuchar la voz suave como una caricia de Dios que no deja de estar presente en el mundo y en la vida de cada cristiano y le da la oportunidad de tomar la decisión trascendente de qué hacer con esta vida que Dios nos ha dado. Podemos decidir hacer la voluntad de Dios, llevar a cabo el plan que Dios tiene para cada uno de nosotros, dejarnos seducir por ese sutil viento que la voz de Dios que nos llama a seguirle, o como el joven del Evangelio, irnos abatidos porque nos sentimos más seguros con lo que tenemos y queremos arriesgarlo por lo más que Dios nos ofrece.

El nombre del profeta Elías nos llega de la Escritura porque escuchó la voz de Dios y la vivió, el nombre del joven rico se perdió en la historia, cada uno tomó su decisión ante la invitación de Dios, uno fue capaz de ver a Dios en la sencillez, el otro, deslumbrado por las luces artificiales que provoca el dar la confianza a lo material, no fue capaz de ver más allá de la renuncia que Jesús le pedía, ambos tomaron una decisión que cambió trascendentalmente su vida, ¿qué decidiremos cada uno de no-

No todo el que me diga: ‘¡Señor, Señor!’, entrará en el Reino de los cielos

Evangelio según San Mateo, 7, 21-27 En aquel tiempo, Jesús dijo a sus discípulos: “No todo el que me diga: ‘¡Señor, Señor!’, entrará en el Reino de los cielos, sino el que cumpla la voluntad de mi Padre, que está en los cielos. Aquel día muchos me dirán: ‘¡Señor, Señor!, ¿no hemos hablado y arrojado demonios en tu nombre y no hemos hecho, en tu nombre, muchos milagros?’ Entonces yo les diré en su cara: ‘Nunca los he conocido. Aléjense de mi, ustedes, los que han hecho el mal El que escucha estas palabras mías y las pone en práctica, se parece a un hombre prudente, que edificó su casa sobre roca. Vino la lluvia, bajaron las crecientes, se desatacaron los vientos y dieron contra aquella casa; pero no se cayó, porque estaba construida sobre roca.

El que escucha estas palabras mías y nos las pone en práctica, se parece a un hombre imprudente, que edificó su casa sobre arena. Vino la lluvia, bajaron las crecientes, se desataron los vientos, dieron contra aquella casa y la arrastraron completamente”.

Palabra de Dios

La palabra en acción A lo largo de nuestra vida, sin lugar a duda, hemos escuchado palabras muy hermosas, discursos convincentes, relatos interesantes, hermosos poemas; canciones y alabanzas… y tal vez muchas de estas palabras han movido nuestro corazón, le han dado luz a los momentos oscuros de nuestra vida; otras palabras tal vez como llegaron se fueron, sin provocar absolutamente nada en nuestro corazón y por tanto sin influir en nuestra vida.

La palabra de Dios hoy de los labios del mismo Jesús nos invita: a que pongamos las palabras en acción, no se trata sólo de decir “Señor, Señor”… sino cumplir la voluntad de Dios. Siempre el seguimiento de Jesús pide esfuerzo, los amigos de Dios no podemos quedarnos sólo en la palabra tenemos que dar el brinco a los hechos; tenemos que demostrar nuestra fe con obra, porque como dice Santiago una fe sin obra es una fe muerta.

El ejemplo de las dos casas, es sugerente claro y preciso.

La casa somos cada uno de nosotros, a nosotros nos toca edificar la vida, nos toca edificar nuestra casa y la sugerencia es que edifiquemos sobre roca firme; el buen edificador es el que escucha la palabra y la pone en práctica; porque el que escucha la palabra y no la pone en práctica construye sobre arena, es un hombre necio.

Tenemos que vivir bajo la luz y las exigencias de una fe operante, nuestra fe debe estar firme como la roca para que logre sus frutos, para que cuando vengan las tempestades, los vientos contrarios permanezcamos firmes. Una fe, fuertemente enraizada en Dios no sucumbirá ante la dificultad.

Cuando el Señor Jesús nos invita a edificar nuestra casa sobre roca, nos invita a verlo a Él como nuestra roca firme, nuestra muralla, nuestro refugio. La tarea es pues escuchar la palabra y ponerla en práctica, para que cuando la adversidad llegue, cimentados fuertemente en Jesús enfrentemos las consecuencias de lo que sea.

Por José de Jesús Cruz Rodríguez

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Taller en la parroquia Nuestra Señora del Rosario de Fátima

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astoral Social-Cáritas acompañó a Cáritas Parroquial “San Juan Diego” que celebró 3 años de haber sido fundada, y que recibió el mes de noviembre del año pasado, un segundo envío del Sr. Cura Gladimir Isaac López Flores.

Se presentaron durante cuatro días -a partir del 15 de febrero- algunos de los talleres que promueve la Comisión Episcopal para la Pastoral Social para el estudio de esta Exhortación Pastoral.

Actualmente esta Cáritas Parroquial ayuda y sirve al más necesitado con el apoyo de la comunidad, a través de un pequeño Dispensario en el que se dona medicamento. También llevan a cabo el “Domingo de la Caridad” en la Parroquia, mediante el cual es posible repartir mensualmente despensa a los beneficiarios de la parroquia que se considera que tienen más necesidad.

Su objetivo es que más personas se integren al grupo para fortalecerlo, y poder apoyar de esta manera solidaria, a un mayor número de personas.

Aplicación de Pruebas de Detección del Virus del VIH

en el “Comedor de la Esperanza” de Cáritas Diocesana Por Lic. T.S. Gpe. Díaz Trabajo Social de Cáritas

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áritas Diocesana de San Luis Potosí continúa llevando a cabo diversas actividades en relación al tema del VIH-SIDA, como parte de la Campaña permanente de sensibilización. Juntamente con otras instituciones, invita a la comunidad, la Iglesia Potosina y familias de enfermos portadores del virus, a promover la NO discriminación y exclusión de estas personas, que como todos, tienen derechos y merecen ser respetados.

Es por esto que el equipo capacitado con el que cuenta Cáritas; el día 25 de febrero aplicó dichas pruebas rápidas. Para ello se dio con anterioridad información referente al tema, haciendo la invitación y repartiendo material impreso. Esto se hizo a los beneficiarios del Comedor, de las Oficinas Centrales de Cáritas y a una escuela cercana al lugar donde se llevó a cabo esta actividad.

Se observa cierto temor a realizarse esta prueba, sin embargo se cuenta con personal que disipa dudas previamente, y brinda apoyo inmediatamente a la persona, en caso de resultar positivo el resultado.

Cabe mencionar que mucho sorprende el que la Iglesia Católica participe en esta labor, a lo que se responde que el tema es de interés de todos, por lo que es necesario estar bien informados respecto a la pandemia y las formas de prevenirla, a los derechos de quienes tienen quienes tienen el padecimiento, y al interés de Cáritas por contribuir al bienestar integral de las personas.

Agradecemos a quienes invirtieron 15 minutos de su tiempo en su salud. Asimismo a la Fundación Aids Health Care, que desde la Cd. de Tijuana nos vienen apoyando con lo necesario para la realización de estas actividades, y las que están por venir.

En Cáritas seguiremos trabajando en nuestra campaña permanente de “Sensibilización sobre el VIH-SIDA”, con el fin de crear espacios solidarios de esperanza, atención y prevención. Sabemos no será fácil, pero tenemos claro que tampoco imposible.

Cáritas parroquial en la diócesis invita a formar parte del equipo diocesano de animación, formación y coordinación de las acciones a favor de la caridad Renovar nuestra opción preferencial por los pobres, excluidos y migrantes, construyendo caminos de justicia, paz, reconciliación y solidaridad.

4º PDP Línea de acción # 7

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on objeto de impulsar este Programa que se ofrece desde la Comisión para la Pastoral Social en la Diócesis, se llevó a cabo una reunión, cuyo resultado fue la integración de nuevos agentes que se incorporan a este servicio, de diversas parroquias.

Hacemos una atenta invitación a las parroquias para que se comuniquen con nosotros y poder brindarles acompañamiento en el proceso que lleven en relación a la proyección social de la fe, invitándolas a su vez a formar parte de este nuevo equipo de agentes de la caridad.

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Anawin en lengua aramea significa: “hombre pobre, cuya única riqueza es tener a Dios, que cree radicalmente en Él y teniéndolo en su

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