Edición 155

“El que lee mucho 3 y anda mucho, ve mucho y sabe mucho”

Año 4

No. 155

Semana del 29 de enero al 4 de febrero de 2012

UN SUEÑO SOÑADO por varios años; un sueño hecho realidad hace tres años: eso es “LA RED”, el Semanario de la Arquidiócesis de San Luis Potosí, que hoy celebra su tercer aniversario. Vale la pena alegrarnos y hacer fiesta.

Son más de mil días de servicio a la comunicación de valores humanos y cristianos.

Sacerdote alienta fe de jóvenes soldados

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EL COLISEO ROMANO

El Coliseo Romano es un anfiteatro de la época del Imperio romano, construido en el siglo I en el centro de la ciudad de Roma. Originalmente era denominado Anfiteatro Flavio, en honor a la Dinastía Flavia de emperadores que lo construyó, y pasó a ser llamado Colosseum por una estatua ubicada junto a él...

10 DIPAC PRESENTÓ EL DIRECTORIO PASTORAL DE SACRAMENTOS DE LA ARQUIDIÓCESIS POTOSINA Es evidente que los tiempos actuales exigen mayor preparación integral cada vez más, por lo que las formas de catequizar cambian vertiginosamente...

16 EL PERDÓN QUE CONDUCE A LA ALEGRÍA

Frecuentemente llegan personas a confesarse. En realidad buscan consejo. Quieren sentirse bien. Viven atados por algún resentimiento.

Y preguntan: ¿cómo puedo perdonar las ofensas? Cómo puedo dejar de odiar, de guardar rencor a este, ese o aquel que me lastimó...

El P. David Smith, capellán del ejército británico que está en la zona de guerra en Afganistán, contó que entre los 400 soldados y el personal civil a su cargo hay una buena cantidad de jóvenes que tienen una profunda hambre espiritual y un “gran deseo por conocer más su fe católica”. La organización católica internacional Ayuda a la Iglesia Necesitada (AIN) respondió al pedido que hizo meses atrás el sacerdote y envió un lote de estampas y copias del Youcat.

El Youcat es el catecismo para jóvenes creado en ocasión de la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ) Madrid 2011, con el que ahora da clases de catecismo todos los viernes. En esos días, además de las clases el sacerdote reza el rosario con sus jóvenes alumnos y termina siempre con una bendición.

En un mensaje de agradecimiento enviado a AIN, el P. Smith que se encuentra en el Camp Bastion, provincia de Helmand en Afganistán, afirma que muchos los jóvenes “han salido del colegio católico sin siquiera saber que es el Santísimo Sacramento.

No sorprende por eso por qué tantos dejan de vivir su fe. Así que me decidí a cambiar eso”.

“Se celebra los sacramentos, se da catequesis y ayuda que se ofrece a los jóvenes que realizan una tarea muy exigente”, indica.

El P. Smith celebra Misa diariamente, tres los días domingos. Además de velar por los soldados, asiste al personal civil que trabaja lado a lado con los soldados.

Finalmente agradeció la colaboración de AIN y pidió a los amigos y benefactores de esta institución que “recen por los capellanes militares”.

ENERO 29 DE 2012

Nada pedir, nada rehusar

E

Editorial

n el marco de sus 90 años de vida, el Sr. Obispo emérito Don Arturo A. Szymanski Ramírez, acaba de publicar un libro que ha titulado: Confesiones de un obispo emérito. Es un libro que retrata de manera amena, sencilla y muy divertida, el cómo Dios lo ha marcado a lo largo de su vida. El periodista Jaime Septién le va haciendo preguntas que el Sr. Obispo responde puntualmente. No evade ninguna pregunta. Sus respuestas reflejan la madurez teológica, filosófica, histórica y social, no sólo de nuestra Iglesia Católica, sino de la vida contemporánea de nuestro querido México.

Por Pacco Magaña

Queridos hermanos y hermanas:

La palabra «Confesiones» es la luz para ir escudriñando la fe que se manifiesta en este hombre de Dios de 90 años. Confesiones me recuerda aquella obra clásica de San Agustín o de los cinco lamentos que encontramos en el profeta Jeremías, que en nombre de este santo la tradición teológica las ha llamado Confesiones. Lo común entre estas tres obras, la de San Agustín, la de Jeremías profeta y la de Don Arturo, es la vida que ahí se narra. Una vida que corre al ritmo y a la velocidad que le da el Espíritu Santo. Movimientos que muy bien saben describir los hombres del Espíritu. Esto es importante, porque es el mismo Espíritu Divino el que iluminó a san Agustín para escribir de una manera teológica y filosófica su conversión; es el mismo Espíritu que le hizo decir a Jeremías sus dolores y angustias al Señor; es el mismo Espíritu que animó a Don Arturo a compartir su historia de un hombre consagrado al Señor. Puede ser que Don Arturo al leer estas notas nos diga que su obra no llega a tanto, como la de estos ilustres varones, pero la vida donde camina Dios eso si es importante, no sólo para el Altísimo, sino también para los caminantes de esos senderos de fe.

Las imágenes de este Salmo, con su riqueza y profundidad, acompañaron toda la historia y la experiencia religiosa del pueblo de Israel, y acompañan a los cristianos. La figura del pastor, en especial, evoca el tiempo originario del Éxodo, el largo camino en el desierto, como un rebaño bajo la guía del Pastor divino (cf.

Is 63, 11-14; Sal 77, 20-21; 78, 52-54). Y en la Tierra Prometida era el rey quien tenía la tarea de apacentar el rebaño del Señor, como David, pastor elegido por Dios y figura del Mesías (cf. 2 Sam 5, 1-2; 7, 8; Sal 78, 70-72).

Luego, después del exilio de Babilonia, casi en un nuevo Éxodo (cf. Is 40, 3-5.9-11; 43, 16-21), Israel es conducido a la patria como oveja perdida y reencontrada, reconducida por Dios a verdes praderas y lugares de reposo (cf. Ez 34, 11-16.23-31). Pero es en el Señor Jesús en quien toda la fuerza evocadora de nuestro Salmo alcanza su plenitud, encuentra su significado pleno: Jesús es el «Buen Pastor» que va en busca de la oveja perdida, que conoce a sus ovejas y da la vida por ellas (cf. Mt 18, 12-14; Lc 15, 4-7; Jn 10, 2-4.11-18), él es el camino, el justo camino que nos conduce a la vida (cf. Jn 14, 6), la luz que ilumina el valle oscuro y vence todos nuestros miedos (cf. Jn 1, 9; 8, 12; 9, 5; 12, 46). Él es el huésped generoso que nos acoge y nos pone a salvo de los enemigos preparándonos la mesa de su cuerpo y de su sangre (cf. Mt 26, 26-29; Mc 14, 22-25; Lc 22, 19-20) y la mesa definitiva del banquete mesiánico en el cielo (cf. Lc 14, 15 ss; Ap 3, 20; 19, 9). Él es el Pastor regio, rey en la mansedumbre y en el perdón, entronizado sobre el madero glorioso de la cruz (cf. Jn 3, 13-15; 12, 32; 17, 4-5).

En este tiempo en que estamos insertos escudriñando la fe de la Iglesia, nuestra propia fe, este libro de Don Arturo nos viene “como anillo al dedo” para preguntarnos: ¿cómo está nuestra fe? Una fe que se vive en la obediencia a Dios y a nuestros superiores. Una frase que ha marcado su sacerdocio, nos dice don Arturo en su libro, es la frase que le dijo su director espiritual cuando estaba a punto de regresarse de Montezuma a Tampico. Había hecho una carta a su Señor Obispo para que lo mandara a una parroquia pobre. Cuando la leyó su director espiritual se la “rompió en las narices” y le dijo: No pidas nada a tu Obispo: él sabe mejor que tú donde te necesita. Nada pedir, nada rehusar, esa sea tu actitud en adelante. En estos tiempos de “crisis de fe” el testimonio no sólo edifica sino arrastra. Obedientes hasta la muerte.

La memoria histórica que nos muestra el autor es admirable.

No sólo recoge los hechos históricos sino que los interpreta y los ubica en un contexto actual, esto con el fin de sacar una enseñanza para nuestra vida eclesial, sobre todo en lo que se refiere a la caridad pastoral y eclesial cuando hay pluralidad teológica. Dice citando a san Agustín: En lo esencial unidad, en lo accidental libertad, pero siempre y en todo caridad.

Después de haber leído estas Confesiones que un Obispo de nuestra querida Iglesia potosina nos comparte, solo nos queda darle su “penitencia”: una taza de chocolate bien caliente con dos piezas de pan y que nos escriba un folleto sobre su amor a la Virgen María.

(Cuarta y última parte)

Queridos hermanos y hermanas, el Salmo 23 nos invita a renovar nuestra confianza en Dios, abandonándonos totalmente en sus manos. Por lo tanto, pidamos con fe

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que el Señor nos conceda, incluso en los caminos difíciles de nuestro tiempo, caminar siempre por sus senderos como rebaño dócil y obediente, nos acoja en su casa, a su mesa, y nos conduzca hacia «fuentes tranquilas», para que, en la acogida del don de su Espíritu, podamos beber en sus manantiales, fuentes de aquella agua viva «que salta hasta la vida eterna» (Jn 4, 14; cf. 7, 37-39).

La RED no necesariamente apoya la publicidad de nuestros anunciantes.

ENERO 29 DE 2012

EL CONTINENTE DE LA ESPERANZA “Hay que sumar y no dividir”, quien busca amigos perfectos, se quedará sin amigos.

La Iglesia en América Latina propone a todos los pueblos el ideal de construir de cada nación una casa fraterna donde todos tengan una morada digna para vivir y convivir con dignidad. Esto solo será posible si buscamos la unidad y sabemos aceptar nuestras diferencias motivados por el amor.

Movida por esta consigna la Iglesia latinoamericana educa y favorece gestos, obras y caminos de reconciliación, amistad, cooperación e integración entre los pueblos. La reconciliación humana supone la reconciliación con Dios, fuente de gracia y perdón.

El continente americano ha sido llamado el Continente de la Esperanza. La esperanza nos compromete a construir un futuro de mayor dignidad y justicia.

El ideal de construir una sociedad nueva no se puede llevar a cabo si no partimos de la necesidad de que haya hombres nuevos y mujeres nuevas. Para llegar a crear una cultura solidaria y fraterna, la Iglesia valora y alienta los voluntariados sociales, las organizaciones ciudadanas y populares, las obras caritativas, educativas, hospitalarias, cooperación en el trabajo y otras obras promovidas por la Iglesia para solucionar las necesidades más apremiantes de la humanidad.

Hay que seguir buscando soluciones eficaces, movidos por la imaginación de la caridad.

Para construir una sociedad donde abunde la vida, el amor y la paz, es necesario salir al encuentro de los pobres y de los que sufren. Una evangelización que pone la Redención en el centro de su actuar es capaz de purificar las estructuras de la sociedad violenta y generar nuevas estructuras basadas en el amor, la convivencia fraterna y la solidaridad.

Los discípulos y misioneros tenemos la tarea de promover una cultura del compartir, en un mundo marcado por la cultura de la dominación, de la acumulación egoísta; asumiendo un estilo de vida pobre y sobrio, para ir al encuentro de los hermanos indigentes.

Las condiciones para establecer una paz verdadera son: restaurar la justicia, la reconciliación y el perdón.

La Iglesia no puede quedarse al margen de la lucha por la justicia. Todos tenemos la obligación de generar una cultura de paz que permita enfrentar los ataques del narcotráfico, la drogadicción, el terrorismo y la violencia.

Los seguidores de Cristo debemos colaborar en la construcción del proceso de democratización de América Latina y el Caribe, educando para la paz, defendiendo y promoviendo los derechos humanos.

La evangelización de nuestro continente no se puede separar de la solidaridad con los pobres y su promoción integral.

NOTA: Puedes ampliar esta reflexión leyendo los párrafos 534-546 del Documento de Aparecida.

Apreciados lectores y lectoras:

UN SUEÑO SOÑADO por varios años; un sueño hecho realidad hace tres años: eso es “LA RED”, el Semanario de la Arquidiócesis de San Luis Potosí, que hoy celebra su tercer aniversario. Vale la pena alegrarnos y hacer fiesta. Son más de mil días de servicio a la comunicación de valores humanos y cristianos. Recuerdo que hubo otro intento que no se consolidó. Allá por el año 2003, se fundó un pequeño periódico quincenal que se llamaba “ENCUENTRO”. No prosperó. Se terminó en el año 2005.

Felicito al P. Tomás Cruz Perales, Director de “LA RED”, y a todo su equipo de trabajo. Gracias a ellos llegamos a este tercer aniversario.

Gracias por su tenacidad, persistencia, disciplina, puntualidad y creatividad. Gracias por la calidad periodística que han dado a nuestro Semanario. Con su perseverante trabajo, han logrado consolidarlo y hacerlo ya parte de nuestra vida diocesana. Han sabido penetrar este difícil medio de la comunicación. Han despertado la necesidad y el gusto por la lectura de su contenido, ameno, variado y profundo.

Han llegado a más de 12,000 lectores con los mensajes del Evangelio y las buenas noticias de la vida de la Iglesia universal y de la Iglesia en México y en esta Arquidiócesis potosina. Y, lo mejor de todo, están decididos a crecer y a llegar a más ambientes y lugares.

Al lado de ellos, están los párrocos que apoyan y difunden “LA RED”, con mucho entusiasmo, entre sus feligreses. Están también los apóstoles de la comunicación que distribuyen el Semanario, con gran esfuerzo y a veces sufriendo rechazo, y lo hacen llegar a los hogares,

sintiéndolo suyo y poniéndose “la camiseta” de nuestro periódico.

Parte muy importante en esta tarea periodística, son los que escriben. Lo hacen, como ya lo he dicho en otra ocasión, con mucha competencia, inteligencia, creatividad y perseverancia. Todos ellos han sabido revalorar el arte de comunicar, considerándolo, sobre todo, como diálogo, intercambio, solidaridad y creación de relaciones nobles y positivas. Lo valioso de su colaboración es que siempre están implicados en aquello que comunican. Ya sabemos que, cuando se intercambian informaciones y puntos de vista, uno se comparte a sí mismo, comparte su visión del mundo, sus esperanzas, sus ideales, su misma vida. Quienes escriben crean confianza y creatividad responsable para construir una red de relaciones sociales y eclesiales tan necesaria en nuestro tiempo de olvidos y exclusiones de muchas personas.

A ustedes, apreciados lectores y lectoras, les debemos la vida de “LA RED”. Semana tras semana, lo reciben con grande aprecio.

Nos han brindado su confianza y su generosa ayuda. Seguimos necesitando de ustedes para difundir, todavía más, nuestro periódico.

Léanlo y compártanlo. Renueven el hábito de la lectura. Hace días me encontré este pensamiento de Miguel de Cervantes Saavedra: “El que lee mucho y anda mucho, ve mucho y sabe mucho”. La práctica de la lectura permite aprender nuevas cosas, conocer otras formas de vida, explorar nuevos mundos, recrear y hacer suya la palabra impresa. La lectura debería ser una actividad diaria en todas las familias. Debemos ser un pueblo lector. Hay que despertar en los niños el gusto por la lectura. Alguien cuenta que un día le preguntó a un niño: “¿Cuáles son tus libros favoritos? Se quedó pensando y me miró de una manera extraña, respondiendo: ¿libros?, pues sólo los de la escuela, pero no me gustan, me aburro”.

“LA RED” quiere despertar, en cada familia, el placer de leer y de aprender.

Desde estas líneas, felicito a todos los que forman esta familia periodística y les agradezco, de corazón, en este feliz tercer aniversario, lo que han hecho, hacen y harán, por nuestro Semanario de la Arquidiócesis de San Luis Potosí.

Y pido al Buen Dios que les bendiga y les recompense, en abundancia.

“Y, hasta que nos volvamos a encontrar, que el Señor los guarde en la palma de su mano”. +Luis, Arzobispo de S. Luis P.

Los Límites de la Vida y de la Muerte

Nuestra historia

Por Dra. María de Jesús Albuerne Fentanes

(480-547) Por Pbro. Rubén Pérez Ortiz

(primera de dos partes)

Abad, Patrón de Europa y Patriarca del monaquismo occidental.

Lema: “Ora y Labora”, representado emblemáticamente por el arado y la cruz.

Semblanza de San Benito

E

ncontramos importantes datos históricos de la vida de San Benito en el Tomo II de la Sapientia Fidei de la BAC compilados por el Dr. Álvarez con los que nos habla cómo entre el arco de 430 y 435 morían San Agustín y Casiano y hacia el año 480 nacía San Benito en Nursia o en sus alrededores, en la Umbría (Italia), de familia noble no acomodada, de la pequeña nobleza rural. Su hermana gemela Escolástica también alcanzó la santidad. Fue enviado a Roma para cursar el estudio de las artes liberales (que podía ser con vistas a una ulterior dedicación pública). Pero dejó los estudios literarios, abandonó la casa y los bienes paternos y se retiró a vivir sólo para Dios.

En un primer momento se estableció con su nodriza en Effide (hoy Afile), pero muy pronto la popularidad conseguida por un primer milagro le hizo salir del lugar. Huyó completamente solo a un lugar desierto cerca de Subiaco a 77 Km. al Sur de Roma. Vivió en una cueva ignorado de todos excepto del monje Román, posiblemente del vecino monasterio de San Blas, quien le llevaba regularmente pan. Permaneció allí tres años hasta que comenzó la afluencia de los discípulos.

Una comunidad de monjes que vivía según su antojo, la de Vicovaro cerca de Tívoli, lo llamó para que fuese su abad. Benito se esforzó en enderezarlos, pero ellos intentaron envenenarlo si éxito. Entonces, el santo volvió a Subiaco, a su soledad. Pero de nuevo fue reclamado por los discípulos y fundó para ellos hasta doce monasterios, cada uno con doce monjes y su abad. En esta época se sitúa la vocación de sus famosos discípulos Mauro y Plácido. Encontramos ya aquí las grandes líneas de lo que será su concepción monástica llena de equilibrada discreción. Por odio y envidia al santo, el presbítero Florencio introdujo en el monasterio a doce muchachas desvergonzadas para que tentaran a los monjes jóvenes y provocaran así la destrucción de la obre de san Benito. Este, lleno de caridad y delicadeza, prefirió abandonar su obra y junto con unos pocos discípulos marchó al sur.

Fundador de Montecasino, su Regla y su austera vida. Éste es el origen de la nueva fundación, Casino (hoy conocido como Montecacino), donde destruyó el ara de piedra que sobre el altozano estaba dedicado a Júpiter, edificando allí su monasterio y consagrando la iglesia a San Martin. Según la tradición, esto ocurrió en el año 529. El santo evangelizaba a la población al mismo tiempo que continuaba el desenvolvimiento de la obra monástica. Es aquí donde conviene situar la redacción de la Regla, aunque no lo hizo en un solo momento. Parece que primero incluyó hasta el capítulo 66 y después añadió hasta el 73, que cierra la segunda y definitiva redacción, presumiblemente posterior a 540 o 546. Su vida estuvo dedicada a la oración, disciplina y trabajo. Se levantaba a las dos de la

madrugada a rezar los salmos. Pasaba horas rezando y meditando. Hacia también horas de trabajo manual, imitando a Jesucristo. Veía el trabajo como algo honroso. Su dieta era vegetariana y ayunaba diariamente, sin comer nada hasta la tarde. Recibía a muchos para dirección espiritual. Algunas veces acudía a los pueblos con sus monjes a predicar. Era famoso por su trato amable con todos.

Su gran amor y su fuerza fueron la Santa Cruz con la que hizo muchos milagros. Fue famoso por los exorcismos que realizó durante su vida: este don para someter a los espíritus malignos lo ejerció utilizando como sacramental la Cruz, que más tarde se le llamará: Cruz de San Benito.

San Benito predijo el día de su propia muerte, que ocurrió el 21 de marzo del 547, pocos días después de la muerte de su hermana, santa Escolástica.

Más adelante accedió Benito a la demanda de un hombre devoto, y envío unos monjes a construir un monasterio en las inmediaciones de Terracina. Después de haber anunciado la que fue primera destrucción de su monasterio, San Benito se hizo llevar a Montecasino, donde murió probablemente el 21 de marzo de 547, siendo sepultado dentro del mismo monasterio en la capilla de San Bautista. La primer biografía de San Benito aparece publicada por el importante papa San Gregorio Magno, la cual escribió muy probablemente durante su pontificado (590-604). San Gregorio cita a sus informadores, que son especialmente cuatro personajes bien conocidos: Valentiniano, monje de Montecasino y después abad de San Pancracio de Letrán; Simplicio, tercer abad de Montecasino; y Honorato, abad de Subiaco, quien aún vivía cuando vive San Gregorio.

L

a vida y la muerte son inseparables, solo pueden ser comprendidas en la complementariedad de la relación. Si solo contemplamos la vida y dejamos fuera la muerte o contrariamente contemplamos la muerte sin la vida, nuestro pensamiento estaría incompleto, o bien resultaría “deforme, pues sería como tener la mano siempre abierta o siempre cerrada”, según Cardinali ( 2007).

Desde que nacemos empezamos a morir. El final está presente desde el principio. Iniciamos nuestro camino buscando respuestas e intentando aprender las lecciones de la vida que nos lleven a aceptarla tal como es y no como quisiéramos que fuera, que nos ayuden a comprender que lo importante no es cuánto tiempo vivimos, sino cómo vivimos el tiempo que tenemos.

Aprender las lecciones de la vida, es luchar contra el miedo a la soledad, el sentimiento de culpa y la angustia; buscar el sentido de la vida, el amor, el poder, intentar comprender las pérdidas; descubrir quienes somos y sobre todo cómo podremos ser felices. Sin embargo con demasiada frecuencia buscamos estas respuestas en el dinero, la posición social, el trabajo “perfecto”, o en cosas parecidas, y al final descubrimos que no solo no encontramos el significado que buscamos, sino que además somos infelices, nos sentimos inevitablemente vacios y creemos y pensamos que la vida tiene poco o nada de sentido y que el amor y la felicidad no son más que ilusiones.

Dice Victor Frankl (1995) que: “en realidad no importa que no esperemos nada de la vida, sino si la vida espera algo de nosotros. Vivir significa asumir la responsabilidad de encontrar la respuesta correcta a los problemas que ello plantea y cumplir las tareas que la vida asigna continuamente a cada individuo.

Ninguna situación se repite y cada una exige una respuesta distinta. Vida no significa algo vago, sino algo muy real y concreto, que configura el destino de cada hombre, distinto y único en su caso”. Representa en un sentido más profundo, probar a decirnos el sentido que tiene para cada uno vivir esta vida no obstante el dolor que en ocasiones nos sumerge en las profundidades más oscuras y continuar en el propio proyecto de vida, no deteniéndonos frente al dolor sino trascendiéndolo.

Cuando nos encontramos que ya no es posible controlar las circunstancias de nuestra vida, siempre podremos elegir que actitud tomar ante los sucesos. Esto mismo podemos aplicarlo a la muerte: “Podemos vivirla como una tragedia, o verla como una maestra que nos enseña lo que es la vida, o sentirla como algo ante lo que no hay más remedio que resignarnos, o experimentarla como un suceso que hay que vivir plenamente, o, sencillamente, la podemos elegir con una real aceptación”.

(Guzman, 2004).

La muerte es un misterio, sin embargo el drama de la muerte, ninguno puede eliminarlo, ningún pensamiento puede hacerlo inexistente o no doloroso. La muerte nos arrebata a las personas que amamos. La intensidad del dolor depende del valor que le atribuimos a la persona que se ha ido, es una consecuencia de nuestros apegos, es el precio que pagamos por el amor y el costo de la implicación. Con la muerte de un ser querido emerge la soledad; en ocasiones somos incapaces de manifestar abiertamente nuestras emociones y evitamos hacer contacto con el propio mundo interior.

Ante el sufrimiento, buscamos ayuda de las ciencias médicas y psicológicas, sin tomar en cuenta la dimensión espiritual que como humanos nos pertenece y nos define. La historia nos da evidencias que el hombre cuida de sus propios muertos. La necesidad de dar una sepultura la encontramos en todas las culturas y la reencontramos en cada época histórica. Los ritos, son diversos cambian con el tiempo, pero todos parecen decir un mismo y doble pensamiento: la persona que muere tiene garantizado un lugar y un tiempo para seguir su camino, porque la vida y la muerte son solamente modos diversos en los cuales el existir se manifiesta.

Los valores humanos y cristianos alimentan nuestra dimensión espiritual. La muerte nos lleva a confrontarnos con la conciencia de la propia limitación y la ilusión de la inmortalidad y en algunas ocasiones puede poner en crisis nuestra fe muy simplista, basada en la certeza de que Dios nos protege y nos permite vivir con una garantía ilimitada frente a las adversidades, si oramos, si asistimos a la iglesia y si llevamos una vida sana y ordenada, por lo cual ante una muerte inesperada y dolorosa, cuestionamos: ¿por qué a nosotros?, ¿Dónde esta Dios que no escucho mis plegarias?. Pero también la muerte, puede profundizar y madurar nuestras convicciones. En el sufrimiento “no estamos solos”. Por amor, Jesús sufrió, lloró, sudó y transformó su dolor y su promesa da fuerza y ánimo a cuantos creen en El: “He aquí que yo estoy con vosotros todos los días hasta el fin del mundo” (Mt. 28, 20).

05

Mujeres Por P. Kino

divinas

Dios y las mujeres

T

al vez muchos de los lectores de esta columna, al leer el título piensen en la canción de Martín Urieta, que es canción casi obligada de una serenata con mariachi en una noche tequilera. Pero de eso no trata el artículo, sino de cómo la mujer ha sido “divina” en su relación con Dios.

Jesús se encontró con un menosprecio a la mujer por parte del hombre. Se le percibe como la causante del pecado en el mundo, ya que al hacerle caso a la serpiente y comer del fruto prohibido, hace que el “pobre hombre”, sencillo, inocente, y sin malicia lo pruebe y sea también castigado por Dios. Según el escritor judío, Filón de Alejandría, contemporáneo de Jesús, el varón se guía por la razón y la mujer por la sensualidad. Flavio Josefo dice que según la Torá, la mujer es inferior al hombre en todo.

Pero Jesús, las mira de manera diferente, incluso son parte de sus seguidores, por mencionar algunas: María Magdalena, Martha y María y obviamente su Santísima Madre.

Ya no tiene la visión machista de que la mujer es importante solo para atender al hombre y tener hijos, sino que hay algo más importante: Escuchar y cumplir la palabra de Dios, Lc 11, 27 – 28. Jesús en su Evangelio, pone de modelo a mujeres: La mujer que encuentra su moneda, Lc 15, 4 – 6; La mujer viuda que echa sus monedas en el cepo del templo Mc 12, 41 – 44; las mujeres curadas.

Mc 5,24 – 34.

Jesús no vino a darle dignidad a la mujer, sino a recordarles que la dignidad siempre la han tenido, por proceder, igual que el varón, de las manos del Padre.

Por eso, cuando escuches alguna expresión discriminatoria hacia la mujer, si eres hombre, no apoyes esa situación, ya que gracias a la obediencia de una gran mujer, Cristo vino al mundo para salvarnos. También gracias a ellas se han hecho grandes obras: poesías, canciones, pinturas, pero también familias cristianas. Jesús las trataba como verdaderas discípulas, porque en realidad lo eran. Y finalmente, recordemos que la mujer no debe ser objeto de publicidad en nuestra cultura moderna.

Alguien tal vez me podrá decir: Y la Iglesia ¿no las discrimina al negarles el sacerdocio? Y yo les respondo “no”, pues si Jesús hubiera querido mujeres sacerdotisas hubiera comenzado con su Santísima Madre y no lo hizo. Existen otros argumentos que fundamentan esta postura de la Iglesia, que en algún periódico pasado de La Red escribí.

Bueno hay tanto que decir entre la relación del hombre y la mujer pero ya se me acabó el espacio. Espero que quede claro que las mujeres son divinas porque, igual que el hombre, tienen la misma dignidad y un mismo Padre que las ama… que nos ama.

Por Pbro. Lic. Héctor Colunga colunga46561@hotmail.com

Q

ueridos lectores: En las dos ediciones pasadas, he estado hablando del proyecto que tiene “Grupo Fraternidad Héctor Colunga Rodríguez” de construir una casa hogar para adultos mayores.

¿Por qué hacer una casa hogar?

está cargada de años y con un cúmulo de enfermedades.

No hace mucho me encontré con una persona y me cuestionó del por qué hacer un asilo si ya había muchos; le dije que ciertamente había, pero unos no estaban al alcance del presupuesto de los que pueden pagar y otros, aunque sean muy económicos o para menesterosos, tienen una serie de requisitos, que si no los cumples no pueden ingresar a esa institución, por ejemplo, se debe hacer un examen médico y psicológico y que sean favorables. En ningún asilo te reciben personas que estén enfermas. Además, no deben de ser cuarteles con normas rígidas, sino que debe de haber cierta flexibilidad en las reglas y el trato tiene que ser digno, con calor humano y que la estancia sea como su propia casa.

¿Para qué hacer una casa hogar?

Por eso “Grupo Fraternidad”, tiene en mente un espacio que responda a todas las necesidades de las personas de avanzada edad, y para esto, necesitamos por un lado el terreno que está en vías de donación y empezar a construir y por otro, requerimos personas de buena voluntad y gran corazón para que con su servicio voluntario se unan a esta loable acción.

Se pretende formar un grupo de amigos de todos los niveles sociales que se denominará “voluntarios fraternos” para que en los días y horas posibles de la semana, den atención, cuidado y cariño en la casa hogar, también en las casas particulares, donde hay muchas personas solitarias que no tienen con quién platicar, ni quién les haga un favor; nuestro servicio se tiene que extender a muchos cuya vida

Hay un pensamiento que tomé de un libro que con gusto les comparto y da respuesta a la pregunta que se me hace.

Benditos sean aquellos que excusan mi torpeza al caminar y la poca firmeza de mi pulso. Benditos los que comprenden que ahora mis oídos mucho se esfuerzan para escuchar lo que me dicen. Benditos aquellos que se dan cuenta de que mis ojos están empañados y limitado mi sentido del humor. Benditos los que disimulan el que alguna vez derramé el café sobre su mesa. Benditos los que se detienen a charlar conmigo por unos instantes y escuchan con interés lo que les digo. Benditos los que excusan mis olvidos y nunca me dicen: eso ya me lo habías contado.

Benditos los que me permiten evocar recuerdos felices del pasado que me hacen sentir querido y respetado y que no estoy solo en el mundo.

Benditos aquellos capaces de comprender lo difícil que me es hallar fuerzas para sobrellevar mi cruz. Benditos aquellos que de vez en vez se acuerdan de hacerme algún obsequio por sencillo y pequeño que éste sea. Benditos aquellos que con su amor me ayudan a esperar tranquilo y sonriente el día de mi partida.

Esa es la razón por la cual “Grupo Fraternidad” pretende lo que pretende. Para mayores informes de este proyecto y algunas actividades al 8 12 45 55 (Arzobispado), con su servidor.

Hasta la próxima

Una conversión para la Misión L

a expresión “conversión pastoral” indica sugerencias prácticas que pueden servir de impulso a la renovación misionera de la Iglesia particular y la parroquia. Esta propuesta tiene como base y marco de referencia el hecho de que “el reto fundamental de la Iglesia es ser capaz de “promover y formar discípulos misioneros, que respondan a la vocación recibida” (cf. DA, 14), es decir, formar cristianos convertidos, convencidos y comprometidos. Ahora bien, la auténtica conversión sólo podrá darse a través del Encuentro personal con Cristo (Cf. DA 12) y la experiencia comunitaria; en tanto que la convicción vendrá de la experiencia personal del Encuentro con Cristo, fortalecida por la formación.

De la conversión y la convicción surgirá el compromiso, como una consecuencia. Por tanto, un criterio fundamental de discernimiento para descubrir la autenticidad de la praxis pastoral y las estructuras eclesiales es su capacidad para contribuir de manera eficaz a la promoción y formación de discípulos misioneros.

Las siguientes propuestas que aquí se hacen quieren ser un estímulo a la imaginación creativa.

Es necesario redescubrir el sentido y la necesidad de las estructuras. No hay que absolutizarlas ni menospreciarlas, sino precisar qué se entiende por estructuras y cuáles son las estructuras eclesiales que requieren ser transformadas. En el ámbito eclesial, la función primordial de las estructuras es facilitar que fluya la vida del Espíritu e impregne la vida de las personas y las comunidades; pero también garantizar la comunión, la participación y la misión de todos. Las estructuras son medios para la comunicación, el diálogo, el consenso, la corresponsabilidad. Deben caracterizarse por su flexibilidad, funcionalidad y dinamicidad. No cualquier estructura garantiza una renovación espiritual ni la fecundidad misionera.

Esto implica también revisar a fondo el ejercicio de la autoridad, así como repensar la naturaleza jerárquica de la Iglesia en el actual contexto, y su función de ser garante de la unidad y la misión.

Es absolutamente necesaria una inclusión de los laicos, hombres y mujeres, en las estructuras de la Iglesia.

Pues “la renovación de la Iglesia en América no será posible sin la presencia activa de los laicos” (EA 44).

Esto implica que se les dé más espacio de participación a los laicos y a sus peculiares carismas seculares en

todo el proceso de planeación pastoral: análisis, discernimiento, programación, ejecución y evaluación.

Propiciar el encuentro personal con Cristo y la conversión de los cristianos más alejados como una prioridad pastoral absoluta. Esto implicará institucionalizar el kerigma y emplear los métodos y las estructuras que sean más eficaces y flexibles ante las nuevas y diversas circunstancias.

Asegurar la experiencia comunitaria de cada bautizado. Esto implica la exigencia de rescatar e impulsar con gran fuerza y creatividad la creación del verdadero espíritu de comunidad, que sea auténtico espacio de la experiencia de Dios, de discipulado y de misionariedad. Es necesario que los bautizados “se sientan y sean realmente discípulos y misioneros de Jesucristo en comunión” (DA 172).

Diseñar y llevar a cabo itinerarios de formación integral, sistemática, procesual y permanente, en todos los niveles de Iglesia. Ellos deben garantizar la iniciación o reiniciación cristiana a través de la catequesis; la maduración en la fe de cada bautizado; con una adecuada capacitación para vivir su vocación específica y ejercer sus carismas en la Iglesia y/o en el mundo. Puede hacerse a través de Institutos educativos católicos ya presentes o estableciendo nuevos centros de formación básica y diversificada en los diversos niveles de Iglesia, sobre todo en lo parroquial y lo diocesano. Los centros de formación cristiana (formación básica), las escuelas parroquiales de formación para laicos y los institutos diocesanos para la formación bíblica, teológica y pastoral deben ser apoyados con los necesarios recursos, tanto humanos, como pedagógicos, materiales y económicos.

Impulsar el compromiso pastoral y misionero. Esto implica revisar y potenciar los ámbitos de participación y de corresponsabilidad que favorezcan la participación integral y efectiva de todos los bautizados; así como el fomento de una adecuada “espiritualidad de comunión misionera” (cf. DA 203, 284). En este campo es extremadamente urgente que el sacerdote diocesano y los que están su proceso de formación inicial para el presbiterado entiendan y asuman la dimensión misionera como parte constitutiva de su identidad.

Los libros ¿C

uántos libros han pasado por nuestras manos? ¿Y cuántos libros han recorrido nuestros ojos? Hemos volteado una y otra página de muchas pero nos han quedado páginas sin leer.

libro es la naturaleza. Cada creatura es una página, que se lee de día y por las noches, Dios lo escribió con letras de oro, en día y con la luz del sol. Todas las creaturas nos hablan de su autor, nos dicen: “Dios nos escribió”.

Los libros nos enseñan muchas cosas y presentan ante nuestra vista hechos y cosas lejanas que se nos acercan a nuestra vista. Nos ayudan a conocer personajes que nunca nos habíamos imaginado, a través de las letras escritas con tinta.

Este libro nos habla del poder, sabiduría y amor de Dios. Se puede leer de día y de noche; lo que no podemos hacer con los libros escritos por imprentas.

Hay otro libro escrito por la mano de Dios. Tiene páginas innumerables que nunca acabamos de leerlo. Este

Si nos dedicamos a leerlo, todos nos enamoraremos de este libro. Este libro contiene lo que ningún cuento, novela, historia o manual o enciclopedia contienen.

En este salón se escucha más el Eco

Q

uién no se acuerda haber jugado a los ecos, entre los amigos haciendo resonar las voces, ahora sabemos que es la resonancia de las ondas sonoras (aunque también electromagnéticas). ηχω se traduce como resonancia o reflexión, obviamente de ondas sonoras; la palabra eco es utilizada también como un recurso literario, por ejemplo al decir que alguna situación provoca eco en la conciencia. En la mitología griega Eco es el

nombre de una ninfa de los bosques, la cual muere por causa del amor y cuando alguien gritaba ella hacía la repetición de las últimas sílabas que se pronunciaban.

Encontramos diferentes tipos de ecos como: el eco de luz en la astronomía, el eco de espín es la mecánica cuántica. Y por otros lares tenemos el eco mercado, un lugar donde se va de shopping, carnicerías, fruterías, cremerías, etcétera.

Los libros y sus autores

Por Mtro. Luis Marino Moreno F.

Juan José Tamayo Editorial Herder, 2011, 406 págs.

Otra teología es posible

Pluralismo religioso, interculturalidad y feminismo.

R

eligiones, teología, espiritualidad, ética y política: he aquí los temas centrales de este libro que replantea y reformula los núcleos fundamentales de las religiones y, especialmente del cristianismo.

Juan José Tamayo intenta responder algunos de los desafíos de nuestro tiempo: la diversidad cultural, el pluriverso religioso, el feminismo, la nueva conciencia ecológica y la lucha contra la pobreza. Y lo hace en diálogo interdisciplinar desde el lugar hermenéutico de los movimientos sociales que trabajan por “Otro Mundo Posible”.

Las religiones ya no pueden elaborar un discurso universalista que surja de la cosmovisión occidental. Para evitarla, Tamayo incorpora la categoría de interculturalidad que va más allá de la inculturación de la fe y del multiculturalismo, y elabora un nuevo paradigma el de la teología intercultural e interreligiosa de la liberación en perspectiva de género. Ahí radica la originalidad de este libro.

Juan José Tamayo Nacido en 1946 en Amuso (Palencia), es doctor en teología por la Universidad Pontificia de Salamanca y doctor en filosofía por la Universidad Autónoma de Madrid. Es secretario general de la Asociación de Teólogos y Teólogas Juan XXIII, miembro de la Sociedad Española de Ciencias de las religiones y del Comité Internacional del Foro Mundial de Teología y Liberación. Figura clave de la Teología de la Liberación en Europa.

07

Iglesia Universal CIUDAD DEL VATICANO.- El Papa Benedicto XVI exhortó a los católicos a ser humildes y unirse en el compromiso de orar por la unidad de todos los creyentes en Cristo. Con ocasión de la semana de oración por la unidad de los cristianos, que se celebró del 18 al 25 de enero, el Santo Padre explicó que “la unidad visible de todos los cristianos es siempre una obra que viene desde lo alto, de Dios, una obra que pide la humildad de reconocer nuestra debilidad y acoger el don”. Señaló que “la unidad que viene de Dios exige nuestro diario compromiso de abrirnos los unos a los otros en la caridad”.

ROMA.- Al recibir a un grupo de seminaristas de Roma, el Papa Benedicto XVI resaltó que los sacerdotes deben tener un profundo anhelo de santidad y que además de la ascesis, deben vivir la fidelidad de manera heroica. La formación del presbítero debe ser integral, completa; exige ejercicio ascético, constancia y fidelidad heroica, en todos los aspectos que la constituyen. En la base debe haber una sólida vida espiritual, animada por una relación intensa con Dios a nivel personal y comunitario, con especial cuidado en las celebraciones litúrgicas y en la frecuencia de los sacramentos”.

APARECIDA.- Adveniat, organización alemana que brinda ayuda a la Iglesia en América Latina, celebra sus 50 años de existencia con un congreso teológico-pastoral en Aparecida del 24 al 26 de noviembre. Adveniat fue fundada en Alemania el 23 de agosto de 1961, en la fiesta de Santa Rosa de Lima, patrona de América Latina, por iniciativa del obispo de Essen, Franz Hengsbach, que decidió destinar las colectas de las misas de Navidad realizadas en Alemania, ese mismo año, a las necesidades pastorales de la Iglesia en América Latina. La propuesta fue renovada para los años siguientes y la colecta de Adveniat realizada en el tiempo de Adviento a favor de la Iglesia en América Latina, perdura hasta hoy. La sede de Adveniat se ubica en la ciudad de Essen, Alemania.

Iglesia en México MÉXICO.- Como cada año, miles de jóvenes de todas las Diócesis de México peregrinan hacia el Cerro del Cubilete, para reafirmar su fe y compromiso a Dios y a la Iglesia en la Montaña dedicada a Cristo Rey, pero en esta ocasión con un motivo muy especial: darle la bienvenida al Papa Benedicto XVI que visitará el país del 23 al 25 de marzo. La peregrinación que se realizará el sábado 28 de enero tiene un significado muy especial, ya que los jóvenes católicos de México serán los anfitriones del Santo Padre.

La tradicional peregrinación que se realiza desde 1986, lleva por lema “Cristo nuestra paz” y tiene por objetivo fomentar los valores que contrarresten el mundo de la violencia, la corrupción y las agresiones contra la vida, así como pedir por el restablecimiento de la paz en México y en el Mundo.

LEÓN GTO. Estamos próximos a recibir la visita de Su Santidad Benedicto XVI a suelo mexicano, por lo que los preparativos siguen su curso a manos de las diversas comisiones que se dispusieron para la planeación, organización, coordinación y comunicación del Viaje Apostólico que el Santo Padre realizará del 23 al 26 de marzo a nuestro país. Pidamos al Señor por esta visita del Papa Benedicto XVI a América Latina y el Caribe, con su presencia en México y Cuba, porque traiga a nuestros países de América la vida, paz y esperanza de nuestro Señor Jesucristo.

MÉXICO.- Benedicto XVI en su viaje en América Latina con su presencia colmará una orfandad que allá se siente. En particular en México que está sufriendo las consecuencias de una lucha frontal contra la criminalidad organizada. Se lo sentirá como un padre que viene a ayudarlos, y aunque no logre solucionar directamente los problema les acompaña en su dolor. Lo dijo el embajador de México ante la Santa Sede Federico Ling Altamirano. Una visita que, según el embajador mexicano hará caer el cliché según el cual el santo padre es eurocéntrico y poco mariano. Porque Benedicto XVI es un papa que no le teme a nada, subrayó el diplomático del país.

El vino mejor hasta ahora

Para ti Señor es mi canto Aldo Blanco Músico Cantautor católico Comentarios: aldo.blanco@ hotmail.com

E

stoy seguro que por lo menos hay una actividad que a todos los que vivimos en este hermoso planeta nos gusta hacer: cantar. Oímos cantar desde que nacemos y…hasta en los velorios.

Es parte de nuestra vida y, actualmente no es raro, aun en las calles, ver a los jóvenes y a los no tan jóvenes con sus audífonos escuchando música.

La música, con el transcurso del tiempo ha tomado un papel sumamente importante en nuestra vida común, de tal manera que se ha convertido en un medio por el cual se transmiten valores, creencias, ideales, etc.

Los jóvenes ven a sus cantantes favoritos como un ideal de vida y tratan de imitarlos en todo lo posible, en su forma de cantar, de vestir e inclusive su forma de vivir la vida, a veces con resultados no muy buenos.

Esto no ha pasado desapercibido para la Iglesia Católica, por lo cual, la música y el canto son importantes para la Iglesia, ya que une la fe de los creyentes, además de animar la celebración Eucarística.

E

l vino podría ser como la vida, pues el vino con el tiempo es mejor. Así, la vida se hace más excelente con el paso del tiempo. Dicha excelencia la da la madurez y la sabiduría que se recoge en la experiencia del camino. ¿Qué sucede en Caná? Jesús realiza un milagro ¿solo para salvar una fiesta? ¿únicamente porque su madre quiere ayudar a quien la invitó a la fiesta? ¿o para mostrar su poder? Todo esto no parece ser el fondo de este milagro. Ante todo, San Juan califica este milagro como algo más, no es un milagro sino una señal. Es la primera de las señales de Jesús. Es decir, es una obra de Dios que significa algo, que va más allá de lo que los sentidos perciben. Lo que se ve, lo que se palpa y se prueba, es sólo señal de algo más profundo que hay que descubrir.

Por un lado tenemos el contexto festivo de la boda. Consideremos que, habiendo Jesús formado su comunidad discipular, la primera escena donde aparecen todos: Jesús, su madre y sus discípulos, es el evento más desbordante. Se trata de una boda en el medio oriente en tiempos de Jesús, la cual no dura un día sino al menos una semana. En ella no importa sólo la música y los rituales, para los invitados importa la comida y el vino.

Este último, el vino, es uno de los símbolos principales de la alegría en el contexto bíblico. En ese sentido, el vino es lo que garantiza la fiesta. La boda, con el banquete correspondiente y la abundancia de vino es un rasgo propio de los tiempos mesiánicos.

La misma boda es señal de los tiempos de la llegada del ungido de Dios; y es El quien garantiza que la fiesta no fracase.

Cuando Jesús dialoga con su madre, se habla de que no ha llegado la hora, pero finalmente se hace ver que al menos ya comenzó el cumplimiento de esa hora, pues Jesús realiza su primer signo convirtiendo el agua en vino. El tiempo ha madurado y el vino está apto para servirse, Jesús es ese vino que ha llegado al final de los tiempos, de ahí que se diga “tú has servido el vino mejor hasta ahora”. El tiempo de que se sirva ese vino ha llegado finalmente, y a nosotros nos ha tocado beberlo. Así, el vino mejor, en las bodas de Caná, no es solo el vino que Jesús ofreció a los invitados a una boda, no solo es el vino que salvó la situación, sino que representa a Jesús, el vino de mejor calidad que el Padre da en la plenitud de los tiempos.

Por otra parte, el motivo de este signo es señalado al final: Así manifestó su gloria, y sus discípulos creyeron en Él. A Natanael Jesús le había prometido “mayores cosas has de ver”, éste es el inicio de esas “cosas” mayores, pues no se trata del poder de Jesús para transformar el agua en vino, sino la parte de Jesús que se manifiesta en esta señal.

Cada señal no hace otra cosa que mostrar al salvador del mundo y de esa manera, como lo proclama el prólogo, queda explicado el rostro del Padre.

Aquí es donde la comunidad comienza a participar, tal como lo señala el prólogo: hemos visto su gloria, gloria que recibe como hijo único, lleno de gracia y de verdad y de su plenitud todos hemos recibido gracia sobre gracia. Las señales de Jesús no nos dejan como espectadores, sino como contempladores y participantes de su gloria. Esto requiere profundizar cada obra, cada señal que Él realiza.

Puede crear ambientes de gran alegría y exaltación, pero también de recogimiento personal. Como quien dice, puede manifestar todos los sentimientos del hombre.

Y por esto, es importante que cuando alguna persona decide servir a Dios y a la Iglesia en el coro, debe meditar acerca de qué es lo que le motiva a hacerlo, ya que este servicio no debe ser un mero pasatiempo o creer que le estamos haciendo un favor al padrecito. Es algo mucho mas importante y trascendente que ayudará a muchos fieles y no fieles a acercarse al Señor Jesús.

Los que nos dedicamos al servicio de la música, ya sea en una Celebración Eucarística, en una Hora Santa o en la evangelización, debemos hacernos esta pregunta constantemente:

¿Para quién es mi canto?

Felicitaciones a nuestro querido Pastor, Mons. Luis Morales Reyes por haber cumplido 13 años de haber sido nombrado 2º. Arzobispo de San Luis Potosí Por LCC Angélica Maldonado Morales

C

on gran cariño, admiración y profundo respeto que nos merece, felicitamos a nuestro Pastor, Mons. Luis Morales Reyes, porque el pasado 20 de enero del 2012, cumplió 13 de haber sido nombrado por S.S. Juan Pablo II, segundo Arzobispo de San Luis Potosí, dado que un 20 de enero de 1999 fue la bendita y jubilosa fecha en que el ahora Beato, inspirado por el Espíritu Santo, quiso entregárnoslo como nuestro Pastor y Padre en la Fe, tomando posesión – para la mayor Gloria de Dios y santificación de nuestra Iglesia Potosina-- un 18 de marzo de 1999, convirtiéndose en Sucesor de los Apóstoles.

Le agradecemos de todo corazón y con toda sinceridad su incansable y entregado trabajo apostólico realizado con gran amor y ahínco en pro de nuestra querida Arquidiócesis, pues sin duda nuestro Pastor ha sido un PILAR DE LA EVANGELIZACIÓN en tierra potosina, quien se ha sabido ganar el gran amor de sus fieles como digno Representante de Cristo en la Tierra.

Por LCC Angélica Maldonado Morales

E

l pasado domingo 22 de enero del 2012 en las instalaciones de la Casa de Acción Católica, se llevó a cabo la final del Concurso del “Himno de la Misión” resultando ganador el coro de la Parroquia de las “Tres Ave Marías”, con el himno titulado: “Iglesia, una Misión Permanente”, del autor, Pbro. Guillermo Gil Torres, Vicario de la Parroquia de las Tres Ave Marías.

Elevamos a Dios omnipotente nuestras fervientes oraciones para que le conceda muchos años más de fructífera vida Episcopal y Sacerdotal, de entrega fiel a Dios y a su Iglesia, pues sin duda ha convertido a incontables almas, que tal vez sin sus sabias homilías, prudentes consejos y elocuentes y atinadas palabras estuvieran hundidas en la perdición del mal, pero que gracias a sus cualidades, dones, virtudes y carismas miles de potosinos ya no pueden apartarse del amor de Jesús, pues les ha trazado el camino para serle fieles al Todopoderoso en lo próspero y en lo adverso, aunque el amar a Jesús muchas veces cueste lágrimas, pues ¿Quién ha dicho que seguir a Jesús es fácil?

El coro ganador de este concurso está conformado por: Rocío Domínguez Martín del Campo; Rocío Martín del Campo Martínez; Arturo Domínguez Tapia y Luis Arturo Domínguez Martín del Campo, quienes conforman una sola familia.

Pedimos a Dios lo premie, lo bendiga abundantemente y lo siga fortaleciendo para que siga dando incontables frutos de Santidad a nuestra Iglesia Potosina, que camina como discípula y misionera a su lado, aprendiendo de su ardiente amor a la Eucaristía y de su gran espíritu Mariano por excelencia.

El segundo lugar lo ocupó el coro “Nuevo Amanecer” de la Parroquia San José Obrero y Santa María de Guadalupe de la colonia “Del Llano”, con el himno: “Por Caminos y Montañas”.

El tercer lugar lo ganó el coro Guadalupano de la Parroquia de San José de Villa de Zaragoza, SLP., con el tema: “Tómame”.

Gran Encuentro Ecuménico Por LCC Angélica Maldonado Morales

Cabe señalar que este evento estuvo apoyado por el grupo: “Kerigma”, Aldo Blanco y su esposa Alicia Villaseñor y Héctor Tenorio y fue organizado por la Dimensión de Pastoral de Catequesis, dirigida por el Pbro. José de Jesús López Castillo (P. Kino) y la Pastoral de Adolescentes y Jóvenes, dirigida por el Pbro. Oswaldo Esquivel Castillo.

Los premios de los ganadores fueron donados por el Pbro. Armando Oliva Varela y el Pbro. José Manuel López Facundo.

E

n el marco del octavario de la Jornada Mundial de Oración por la Unidad de los Cristianos, se llevó a cabo un Encuentro Ecuménico entre nuestra querida Iglesia Católica Apostólica y Romana y la Iglesia Cristiana Central, (Discípulos de Cristo), ésta última, ubicada en la calle de Independencia no. 1136, zona centro, lugar donde se realizó este evento en el que todos se vieron como hermanos y oraron ante el Único Dios Verdadero para pedir por la UNIDAD DE LOS CRISTIANOS. El Pastor Josué Martínez Cisneros, abrió gustoso las puertas del templo Cristiano de marcadas reminiscencias góticas-eclécticas de origen europeo, para recibir a los Sacerdotes Diocesanos Católicos y Sacerdotes Religiosos Franciscanos, quienes compartieron su fe y a la vez éstos supieron escuchar con atención a nuestros hermanos de esta Iglesia Cristiana “Discípulos de Cristo”, quienes por cierto se distinguieron por su gran amabilidad y su evidente espíritu ecuménico, digno de admirarse, pues nos recibieron con profundo respeto y gozo de compartir su fe con nosotros los Católicos.

El Señor Canónigo, Pbro. Roger Méndez Jiménez y el Pastor Josué Martínez Cisneros fueron los organizadores de este Encuentro Ecuménico, con el objetivo de unirnos en oración y pedir por la Unidad de los Cristianos, sobre todo para que nos veamos como HERMANOS EN CRISTO, y unidos en su amor practiquemos las verdades de nuestra fe.

La Semana de Oración por la Unidad de los Cristianos se realiza desde hace 102 años del 18 al 25 de enero de cada año, terminando con la Fiesta de la Conversión de San Pablo. Sigamos pues, pidiendo a Cristo que nos una su amor y que no haya división, odios o barreras entre los que decimos amarlo. Abramos el corazón a nuestros hermanos Cristianos.

Los otros dos grupos participantes en el concurso “Himno a la Misión Permanente” fueron: “Adonai Elohenu” de la Parroquia de Nuestra Señora del Rosario Puerta del Cielo, con el himno: “Misioneros de Esperanza” y el coro “Fuego suave” de la Parroquia de San Jerónimo de Moctezuma, SLP. Los coros participantes pusieron lo mejor de su esfuerzo y entregaron su talento y profesionalismo para invitarnos a que practiquemos la misión permanente conforme lo dicta nuestro IV Plan Diocesano de Pastoral (PDP) y nos encamina y anima a ponernos en camino hacia la MISIÓN PERMANENTE, por lo que grabarán una producción discográfica que posteriormente se nos ofrecerá como medio evangelizador.

“Evangelizar con los Sacramentos: un gran reto, complejo, pero siempre actual” DIPAC presentó el Directorio Pastoral de Sacramentos de la Arquidiócesis Potosina Por LCC Angélica Maldonado Morales

L

a Dimensión de Pastoral y Catequesis de la Arquidiócesis, presentó el pasado sábado 14 de enero del 2012 el Directorio de Pastoral de Sacramentos en las instalaciones de la Casa de Acción Católica, donde hubo excelente respuesta por parte de los Catequistas que llenaron el lugar, reuniéndose aproximadamente 300 laicos comprometidos, entre hombres y mujeres.

Las conferencias fueron impartidas por los Pbros.

Miguel Cardozo García, Juan Carlos Carrera Rodríguez y Dr. Gilberto Amaya Martínez. La introducción a los Sacramentos la dio el Pbro. José Manuel López Facundo, Vicario de Pastoral, y desde luego, ahí estuvo presente el Padre José de Jesús López Castillo, quien es el titular actual de la Dimensión de Pastoral de la Catequesis (DIPAC) y la Escuela de Ministerios Laicales.

El Padre Juan Carlos Carrera explicó de forma amena los tres primeros Sacramentos de la Iniciación Cristiana, es decir, el Bautismo, la Confirmación y la Penitencia o Sacramento de la Reconciliación con Dios; el Padre Miguel Cardozo García explicó con todo detalle y diversos ejemplos prácticos el Sacramento del Orden Sacerdotal y Matrimonio y el Padre, Dr. Gilberto Amaya Martínez explicó claramente el Sacramento de la Unción de los Enfermos y en su caso la Extremaunción.

Desde temprana hora los Catequistas acudieron gustosos a adquirir su Directorio Pastoral de Sacramentos y analizaron los diversos puntos, --de gran interés— que contiene el ejemplar. También se les

entregó material de apoyo como esquemas y otras explicaciones jerarquizadas por importancia para que los Catequistas comprendieran mejor la importancia de evangelizar en los Sacramentos.

Nuestro Semanario “LA RED” les desea, desde este humilde espacio a todos los Catequistas que se sigan preparando y actualizando con gran éxito, entrega y amor a toda prueba a nuestro Padre Dios, ya que sin duda su recompensa será grande en el Reino de los Cielos, eso ni quién lo dude.

Es evidente que los tiempos actuales exigen mayor preparación integral cada vez más, por lo que las formas de catequizar cambian vertiginosamente, pero sin duda los Sacramentos, los Mandamientos, las Virtudes Teologales y Capitales y en sí toda la Palabra de Dios que da vida eterna, siempre serán los mismos, esa nunca pasará, siempre será vigente, siempre será actual. ¡Gracias Catequistas por invertir su tiempo en Dios!

Fiesta en San Antón de los Martínez

N

o cabe duda que la fecha del 17 de enero marca la vida de los habitantes de la sierra en la que colindan los estados de Guanajuanto y San Luis Potosí. Es la parroquia de San Antonio Abad, cuyo nombre de la comunidad es San Antón de los Martínez. La vida de la sierra tiene sus constrastes, sobre todo en los últimos años en los que la sequía y las pocas oportunidades de trabajo han hecho migrar a muchas personas, especialmente a los jóvenes, que por lo general ya se encuentran radicando en los Estados Unidos, en la Zona Media, en Tierranueva y algunos otros en San Luis Potosí; sin embargo, sus raíces les llaman como en estos momentos festivos en los que se da una gran oportunidad de reencontrarse con los suyos, especialmente sus padres, abuelos o amigos que han permanecido en estas tierras.

Los fieles de esta comuidad honran a su Patrono con las peregrinaciones a las que llevan las llamadas “entradas de cera” o como la cabalgata que con

más de cien jinetes, tanto hombres como mujeres inclinan su cabeza al paso por el templo dedicado a San Antonio Abad. Danza, música de viento, la música de vara (vihuela, violín y guitarra), los coros y sobre todo el ambiente que imprime su gente animada por su Párroco el P. Lucio Zarazúa, han hecho de esta fecha, un día muy especial para esta comunidad.

Felidades a toda esta gente bonita de la sierra, felicidades a todos los jóvenes que ha recibido en Sacramento de la Confirmación, felicidades al P. Lucio que le ha puesto ánimo y sobre todo mucha creatividad para organizar esta festividad.

ENERO 29 DE 2012

“Es preciso pasar por muchas tribulaciones por amor a Cristo” Por LCC Angélica Maldonado Morales

16 años de sacerdocio

L

a Comunidad Parroquial de San Sebastián Mártir celebró su fiesta patronal con una solemne Concelebración Eucarística presidida por nuestro Pastor, Mons. Luis Morales Reyes, el pasado 20 de enero del 2012, donde fue recibido con evidente gozo espiritual por parte de los fieles de este tradicional barrio, encabezados por su Párroco, el Pbro. José Cruz Nicasio Torres “P. Cacho”, --como se le dice con gran cariño--, quien se esmeró y cuidó todos los detalles para que esta fiesta patronal en honor a San Sebastián fuera todo un éxito.

Sacerdotes del Decanato de Nuestra Señora de la Expectación se unieron a esta festividad en la que nuestro pastor indicó: “¿De qué le sirven a los Santos nuestros honores terrenos o elogios? Ellos no necesitan de nuestros elogios u honores porque ya tienen todo el honor y la gloria que nuestro Padre Celestial les prometió, más bien habría que hacernos la pregunta ¿Cuál es el provecho que debemos sacar de ellos de acuerdo a la vida de Santidad que llevaron?”.

“Esa pregunta se hacía San Bernardo y es la que nos debemos hacer hoy que celebramos a un gran Santo de Dios: San Sebastián Mártir. El pensar en los Santos me debe hacer crecer en el amor a Cristo, me debe encender el fuerte deseo de ir al Cielo, el deseo doble de gozar de la compañía de Dios y María Santísima y a la vez de los Santos Patriarcas, Apóstoles, Mártires, Confesores, Vírgenes, Docto-

Por Carlos Cuéllar Murillo

“Es preciso pasar muchas tribulaciones para poder ser MÁRTIRES DE CRISTO. Todos los que aspiran a la santidad padecerán persecuciones del demonio, los asecharán los poderes del mal que nos quieren quitar la FIDELIDAD A CRISTO, pero en eso consiste nuestro martirio, en saber superar todo tipo de tentaciones y de pruebas, en saber amar y saber perdonar ante el deseo de la venganza y la maldad”.

“El PERDONAR ES UN DON PERFECTO, es el mejor regalo que puedo dar a una persona. El hombre y la mujer que perdona es como el incienso que perfuma las brazas que lo consumen, me refiero a las brazas del odio y la venganza”, dijo enfático nuestro Pastor.

“Pidamos a San Sebastián que nos alcance la gracia de ser como él, siendo fieles a Cristo, amando y perdonando”.

Fue así como nuestro Pastor, se vio gozoso de celebrar a este gran mártir que es un ejemplo de fe viva para nuestra vida cotidiana que muchas veces se aparta del amor de Cristo y del amor hacia nuestros hermanos, a quienes muchas veces les medimos o limitamos nuestro amor o desgraciadamente lo condicionamos”.

res de la Iglesia, etc., pues a veces somos fríos e indiferentes y no nos interesa su Cielo. Ojalá nos brote ese deseo ardiente de ir al Cielo algún día, de ver a Dios CARA A CARA, como ahora lo contempla San Sebastián”.

“Jesús nos pide que tengamos un alma, un corazón, un espíritu y vida de Mártir. Es necesario que la Iglesia vuelva a ser IGLESIA DE MÁRTIRES. Nosotros podemos ser mártires SIENDO FIELES A CRISTO, AMANDO Y PERDONANDO, pues amar y perdonar cada día es el camino del martirio”.

Felicitamos sinceramente y con gran cariño al “Padre Cacho” así como a toda su Comunidad Parroquial por seguir viviendo intensamente su fe gozosa en Cristo Jesús y en su santo patrono.

C

on profundo agradecimiento y alegría, el padre Gabino Medina Portales, párroco de Nuestra Señora de las Mercedes, José Luis Grimaldo Ramírez, pároroco de San Ciro de Alejandría, Antonio Huerta García, párroco de Nuestra Señora de la Paz, y Francisco Rocha de los Santos, Párroco de Zaragoza, celebraron el pasado 17 de enero su aniversario sacerdotal.

Han pasado 16 años desde que se les fue concedido el regalo del sacerdocio y durante este tiempo han llevado con gran entrega hacia su comunidad esta misión tan importante, y sus obras, han sido parte fundamental en nuestro caminar como Iglesia.

El Arzobispo Luis Morales Reyes el 17 de enero en la parroquia de Nuestra Señora de las Mercedes, ubicada en la Col. Industrial Mexicana se unió a esta celebración de acción de gracias, y en una solemne Eucaristía felicitó el trabajo de estos sacerdotes, recordando el trayecto y duro camino para un sacerdote, pues en el sacerdocio se vive todo tipo de circunstancias.

Por medio de aplausos, clausuró esta hermosa fiesta. Unámonos en oración por las Vocaciones Sacerdotales y religiosas y que Dios les siga concediendo a estos queridos sacerdotes un hermoso camino de plenitud.

E

l Coliseo Romano es un anfiteatro de la época del Imperio romano, construido en el siglo primero en el centro de la ciudad de Roma. Originalmente era denominado Anfiteatro Flavio, en honor a la Dinastía Flavia de emperadores que lo construyó, y pasó a ser llamado Colosseum por una gran estatua ubicada junto a él, el Coloso de Nerón, no conservada actualmente. Por sus características arquitectónicas, estado de conservación e historia, el Coliseo es uno de los monumentos más famosos de la antigüedad clásica. Fue declarado Patrimonio de la Humanidad en 1980 por la Unesco.

El Coliseo es una estructura de piedra y cemento, de 48 metros de alto, y 188 de largo por 156 m. ancho con capacidad para 50.000 espectadores que podían acceder o salir en cuestión de minutos gracias a una compleja red de pasadizos y salidas. Desde el exterior presenta cuatro pisos de arcadas en los que se puede apreciar la superposición de órdenes, en columnas de tres cuartos con función meramente decorativa: abajo el toscano, en el medio el jónico y arriba el corintio.

No queda nada del pavimento del ruedo: el visitante actual puede ver el laberinto de celdillas y pasadizos que había debajo; se contaba con aparatos elevadores ocultos para que las fieras y los hombres aparecieran desde debajo del suelo. En el último piso pueden verse ménsulas de apoyo que servían para sujetar los mástiles a los que se ataba el toldo que se alzaba en verano para proteger a los espectadores del calor.

En cuanto a la decoración, se sabe que era riquísima, con un gran número de estatuas y escudos de bronce.

A lo largo de los siglos XV y XVI, el travertino que lo recubría fue arrancado para reutilizarlo en otras construcciones. Entre

Po

otras, se utilizó para el Palacio Barberini y para el Puerto de Ripetta. Un conocido dicho latino reza Quod non fecerunt Barbari, fecerunt Barberini (lo que no se atrevieron a hacer los bárbaros, lo hicieron los Barberini). También se utilizó para quemarlo y obtener cal.

En el Coliseo tenían lugar luchas de gladiadores y espectáculos públicos. Se construyó junto al Foro Romano, y las obras empezaron entre el 70 d. C. y el 72 d. C., bajo mandato del emperador Vespasiano. El anfiteatro, que era el más grande jamás construido en el Imperio romano, se completó en el 80 d. C. por el emperador Tito, y fue modificado durante el reinado de Domiciano. Su inauguración duró 100 días, participando en ella todo el pueblo romano y muriendo en su celebración decenas de gladiadores y fieras que dieron su vida por el placer y el espectáculo del pueblo. El Coliseo se usó durante casi 500 años, celebrándose los últimos juegos de la historia en el siglo VI. Aunque la estructura está seriamente dañada debido a los terremotos a los picapedreros, el Coliseo siempre ha sido visto como un icono de la Roma Imperial y es uno de los ejemplos mejor conservados de la arquitectura romana. Es una de las atracciones turísticas más populares de la moderna Roma y aún está muy ligado a la Iglesia Católica Romana. Allí, cada Viernes Santo, el Papa encabeza la meditación y rezo del Viacrucis.

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Por Pbro. Efraín Moreno Aguirre

“Alas de Sobrevivencia” ( Winged Migration. 2001) es un precioso documental sobre la vida de las aves migratorias. Un trabajo maravilloso e imponente. Narra la manera en que diferentes especies de ave- cisnes, grullas, águilas de cabeza blanca, cigüeñas, gansos, hasta pingüinos- debe encontrar el punto exacto del planeta para preservar a su especie y el esfuerzo que les significa emprender esta travesía, volándo miles de kilómetros para llegar a su destino y así enfrentar desde contratiempos climatológicos hasta las balas de cazadores humanos, sin contar a los demás depredadores naturales. El único fin de estas aves: la sobrevivencia. Con este filme, uno es capaz de sorprenderse de lo majestuoso y bella que puede ser la naturaleza.

Alas de Sobrevivencia” es dirigida por el reconocido actor, productor y documentalista francés Jacques Perrin, quien tiene en su haber producciones como “Le Peuple Singe”, “Microcosmos” - un admirable trabajo sobre la vida de los insectos - y la cinta “Himalaya”, donde muestra una gran variedad de locaciones exóticas de Nepal.

El rodaje de este fascinante documental, nominado al Oscar del año 2001, requirió cerca de cuatro años de filmación y la colaboración de más de 450 personas, entre las cuales se incluyeron 17 pilotos aviadores y 14 fotógrafos. Además, cabe señalar que los productores y realizadores no hicieron uso de animatronics, de manera que las aves que podemos ver en pantalla son auténticas y filmadas totalmente en su medio natural. Para los escenarios, los cineastas seleccionaron 40 países para mostrar sus parajes, mismos que nos transportan junto a las aves en sus diversas migraciones : desde Canadá, Francia, Estados Unidos, Islandia, Japón, Alemania, España, Argentina, Senegal, Perú, entre muchos otros.

Esta cinta utiliza innovadoras técnicas de filmación para lograr increíbles tomas en las que atestiguamos cómo los pájaros se elevan en el aire y vuelan libremente a su destino.

La música de Bruno Coulais, quien ya había colaborado con el director Perrin en Himalaya, es fantástica. Es música que enriquece aún más la belleza de cada una de las escenas que admiramos en la película. El soundtrack también incluye la participación del cantante Nick Cave y de Robert Wyatt. En conjunto, la música y las imágenes son pieza clave para dar la sensación de que las aves están haciendo verdaderas coreografías y seguir disfrutando de cada jornada que emprenden las aves.

Alas de Sobrevivencia es un excelente y valioso trabajo documental de gran calidad. Déjese llevar por el canto de las aves y disfrute de un filme extraordinario.

Espero sus comentarios, aplausos o rechiflas En: ponchoaranda@hotmail.com

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ENERO 29 DE 2012

La cortesía C

uenta una vieja leyenda hindú que un día, cuando era todavía joven, el Buda acudió a una fiesta. En ella se encontró con doscientas muchachas que no tenían con quien bailar y que se hallaban terriblemente desanimadas. Entonces, movido por la compasión y para no alegrar a unas mientras entristecía a las otras, el Buda se multiplicó por doscientos y así cada una de las muchachas, entre suspiros de júbilo, creyó tener entre sus brazos al único danzante.

Es don José Ortega y Gasset (1883-1955), filósofo español, quien refiere la leyenda en su Meditación del pueblo joven al hablar del entusiasmo. Pero no es ésta la única historia referente al Buda que habla de semejantes multiplicaciones. Jorge Luis Borges (1899-1986) refiere otra de ellas en Qué es el budismo; hela aquí: «Al dejar la ciudad de Sravasti, el Buda debía atravesar una vasta llanura. Desde los diversos cielos los dioses le arrojaron sombrillas para que lo protegieran del calor. Para no ofender a ninguno de ellos, el Buda se multiplicó cortésmente y cada uno de los dioses pudo ver a un Buda que caminaba protegiéndose con su parasol».

El mensaje de ambas leyendas es profundamente aleccionador: hay una virtud, hoy por hoy muy poco cultivada, que se llama cortesía.

Su origen es la compasión y su fin el no contristar a los demás. Ser corteses es saber practicar el arte de multiplicarse para estar de lleno con cada persona.

El Buda, ciertamente, pudo haber dicho para sus adentros: «Lo siento, esto es demasiado para mí. No puedo bailar con todas ustedes, señoritas». O bien: «Puesto que tengo a mi disposición una gran cantidad de parasoles, elegiré el de colores más vistosos, o el que parezca de mayor calidad». Pero sabía que cada una de las doscientas jóvenes esperaba algo de él, y que cada divinidad tenía esperanza de que fuera su parasol el que lo cubriera en la larga caminata; así pues, si no quería correr el riesgo de contristar a las jóvenes y a los dioses, no le quedaba otra salida que multiplicarse. Y así lo hizo.

Cortesía, virtud olvidada. Hoy, como suele repetirse hasta el cansancio, «el tiempo es oro»; por lo tanto, los encuentros, las entrevistas y los diálogos no se llevan a cabo si no es con un cronómetro en la mano. Sin embargo, nada hay más triste ni más descorazonador que una conversación en la que uno habla mientras el otro se sube discretamente la manga de la camisa para echar-

le un vistazo a su reloj y como diciendo: «Acuérdate que soy hombre importante y que no debes abusar del tiempo que te he concedido con tanta generosidad (el tiempo, en abstracto, es oro, pero mi tiempo es platino). Si quedó establecido que a las 5 acababa la cita, a las 4,58 te callas y a las 4,59 te desapareces». Lo de hoy no es multiplicarse, sino restarse.

Los manuales posmodernos de autoayuda insisten en que debemos aprender a decir que no, pero ¿cuántos libros se escriben para enseñarnos a decir que sí?

«Venid a un lugar aparte para descansar un poco» –dijo un día Jesús a sus discípulos-. Claro, todo mundo tiene derecho a estirar las piernas. Sin embargo, al final no pudieron hacerlo ni él ni los suyos, pues cuando llegaron en la barca a la otra orilla ya los esperaba allí una muchedumbre insistente y enferma. Ahora bien, ¿se enojó Jesús por eso? ¿Dijo acaso: «¡Qué lío con estos menesterosos que no nos dejan en paz!», o algo por el estilo? No, sino que más bien «sintió compasión de ellos, ya que es-

taban como ovejas que no tienen pastor, y se puso a enseñarles muchas cosas» (Marcos 6,30). Por último, para que no pasaran hambre, multiplicó para ellos el pan. ¡He aquí otra historia de multiplicaciones prodigiosas!

Bien, pero concluyamos. ¿Qué es pues la cortesía? Una compasión que de tan fuerte se vuelve

¿Y la persona cortés? Aquella que dice (aunque no lo formule expresamente, ni lo haga con parrafadas solmenes): «Descuida, mientras estés bajo mi techo, mientras estés conmigo, frente a mí, yo me encargo de que te sientas bien, a gusto, como en tu propia casa. milagrosa.

Durante todo este tiempo, tu felicidad corre por mi cuenta, aunque para eso tenga que multiplicarme».

Y, porque lo quiere, lo consigue.

Contrato para la recolección de basura en la época Virreinal en San Luis Potosí

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omentaremos ahora un contrato que celebró el muy ilustre Ayuntamiento con Juan Gregorio Juárez, vecino de esta ciudad a fin de recolectar la basura y mantener en lo posible limpia la ciudad y sus alrededores; este documento está pasado ante la fe del Escribano Público y de Cabildo Silvestre Suárez el día 10 de mayo de 1806, en las fojas 72-74 (vuelta) del protocolo correspondiente, libro que custodia el Archivo Histórico del Estado en el Fondo Documental del Registro Público de la Propiedad y del Comercio.

El escribano inicia el contrato con una introducción en la que presenta las bases jurídicas, que expresa de la siguiente manera: Don Juan Mariano Vildósola, Regidor Procurador General (a quien doy fe conozco) dijo: que, a su instancia previo acuerdo con el Muy Ilustre Ayuntamiento de esta capital, se formó expediente en el juzgado del Teniente Letrado Encargado de la Intendencia, sobre establecer dos o tres carretones para la limpia y aseo de la ciudad y remoción de los muladares que la circundan. A cuyo fin propuso en escrito de 12 de febrero últimos todas las condiciones y circunstancias conducentes a el efecto, y en tal virtud todas las diligencias necesarias en solicitud de postores. Y no habiendo ocurrido ninguno, se repitieron otras al mismo intento, en cuyo estado comparecieron Don José Francisco Baca y Don Juan Gregorio Juárez, ambos de esta vecindad, quienes hicieron las que a cada uno le pareció conveniente. Y resultando más ventajosa al fondo de cobro de plaza, que es el destinado para este objeto, la que hizo el último bajo las propuestas contenidas en el escrito que se cita y las que el postor agregó en el acto, hubo de rematársele por el dicho señor Juez según consta de las diligencias.

Las diligencias a que se refiere esta introducción, se celebraron el 20 de febrero anterior a este contrato, ante el juzgado de la Intendencia, estando el juez en forma de tribunal y a las puertas de la oficina del escribano. El tribunal estaba formado además del juez, por el regidor síndico procurador de este común, Don Juan Mariano Vildósola y del ministro pregonero José María Zuñiga.

Los pregones, que se hacían a grandes voces, se comenzaron a dar a las 11 de la mañana en los siguientes términos. ¡Quien quisiere hacer postura a dos o tres carretones que se intentan poner en esta capital para el aseo y limpieza de sus calles, comparezca, que se le admitirá la que hiciere con su correspondiente papel de abono, los que se han de rematar en este día dada que sea la plegaria de las doce, con arreglo a las condiciones estipuladas y propuestas por el Síndico Procurador General de este común!

Por algunos documentos nos enteramos que se escogía para ministros pregoneros, preferentemente a esclavos negros que tuvieran una voz potente y clara.

El pregón se estuvo repitiendo varias veces por espacio de una hora y únicamente se presentaron, como lo hemos indicado, dos postores, Francisco Baca y Juan Gregorio Juárez; el primero ofreció dos carretones provistos de sus enseres y cobrar la cantidad de 600 pesos cada año; es decir, 1,200.00 pesos por los dos años que comprendía el contrato. Esta postura se pregonó por tres veces para que el público se percatara de la oferta de Francisco Baca. Al finalizar el tercer pregón se presentó Juan Gregorio Juárez y ofreció dos carretones, también aperados con sus enseres y cobrar 500.00 pesos por cada año. Por varias veces volvió a darse el pregón para enterar al público

de esta última postura y como dieran la plegaria de las doce en la parroquia, sin que se presentara ningún otro postor, quedó este servicio en manos de Juárez. Públicamente el juez solicitó al agraciado que bajara aún más el cobro, tomando en consideración que se trataba de un servicio indispensable al público y de los fondos tan raquíticos de donde se le iba a pagar.

Juárez adujo no poder abaratar el servicio por los crecidos gastos que debía erogar por la prestación del mismo y que, antes bien, solicitaba se le exonerase de la obligación de sacar la basura de las casas, como se estipulaba en la tercera de las condiciones impuestas por el síndico procurador, debido a que ocuparía mucho tiempo en remover los escombros del crecido número de muladares que circundaban la ciudad. Una vez desaparecidos dichos muladares, podría poner en práctica la expresada cláusula.

Juárez solicitó además que se estipulara en el contrato que prestaría el servicio todos los días de la semana, con excepción del domingo y de los días de fiesta de dos cruces (esta expresión con toda seguridad se refiere a lo que llamaríamos actualmente fiestas de guardar).

Se aceptaron las condiciones propuestas por el postor y como en el ínterin de las deliberaciones no se presentó ningún otro postor, se procedió al remate. Se levantó el pregonero de su asiento y a grandes voces dijo: ¡Y pues no hay quien mejore la postura de quinientos pesos que ha hecho Don Juan Juárez, a el establecimiento de dos carretones que se van a poner en esta ciudad, para el aseo y limpieza de sus calles, bajo de las condiciones estipuladas y propuestas por el Síndico Procurador General de este común.

Que buena, que buena, que buena pro le haga!

El escribano hace constar que una vez que se aprobó el remate, se dictó un auto en el que se autoriza a Juan Gregorio Juárez, para que formalizara el contrato en escritura pública.

Como hicimos notar, este procedimiento cumplía dos objetivos; uno ofrecer a los vecinos con posibilidades, la oportunidad de prestar el servicio, y otro, dar a conocer a todos los ciudadanos, quién o quiénes eran los responsables del aseo público.

Las cláusulas que contiene el contrato de referencia son las siguientes: PRIMERA: Que los carretones hayan de ser bien acondicionados, con sufi-

Por Mtro. José Ricardo García López ciente capacidad en sus cajones y éstos en términos que no tengan abertura alguna por donde se salga la basura.

SEGUNDA: La conducción de ellos ha de ser con bestia mular y cada una de ellas dirigida con su respectivo mozo.

La extracción de basura se ha de hacer desde las seis de la mañana hasta las doce de ella, y desde las tres hasta las seis de la tarde en tiempo de verano, y en invierno de siete a doce por la mañana y de tres a cinco por la tarde.

TERCERA: Llevará uno de los mozos la campanilla para con ella hacer señal en cada casa a efecto de que los criados o criadas de ellas recogiendo la basura que tengan, la lleven a los carretones para lo cual harán estos la mansión regular [la parada o detención que hacían los carretones en el lugar acostumbrado], procurando no sea esta excesiva por el perjuicio que resultaría de tales demoras.

CUARTA: Si sobrare algún tiempo después de recorrida la ciudad, se invertirán los carretones en ir descombrando los muladares.

Era propio de la época que al celebrarse un contrato entre un particular y el ayuntamiento, o cualquier otra autoridad, como en el caso que nos ocupa, se exigiera al ciudadano ofrecer una garantía, ya fuera real (prenda o hipoteca), o personal (fianza o aval); en este caso Juárez ofreció garantía personal; es decir, la fianza del regidor contador de menores, José de la Serna. Por el análisis que hemos hecho de otros contratos similares, deducimos que esta exigencia se hacía efectiva, independientemente de la situación económica, política o social del obligado.

Otra circunstancia que se consignó en el clausulado fue que los pagos se harían, como se indicó, con fondos del cobro de plazas y en dos partidas; es decir, cada seis meses.

Este contrato finaliza con las formalidades de rigor y rubricado con las firmas de Juan Mariano Vildósola como representante del Ayuntamiento, Juan Gregorio Juárez como obligado principal y José de la Serna como fiador.

El documento que hemos considerado, nos demuestra que en todas las épocas la limpieza de la ciudad, que es la casa de todos los ciudadanos que en ella radican, ha sido una preocupación de las autoridades. Pero debemos estar conscientes de que si esa preocupación no es secundada por todos los pobladores, serán vanas e infructuosas todas las acciones que la autoridad emprenda, para solucionar éste y todos los demás problemas que se presenten en la entidad a su cargo.

Fe y política

Las encuestas, ¿les creemos?

Por Pbro. Valentín Carbajal Méndez

E

n época de elecciones, las encuestas son cada vez más utilizadas por los partidos políticos y los candidatos para ver las posibilidades de triunfo.

Por Lucetta Scaraffia

A

primera vista el libro de Anna Meldolesi “Mai nate. Perché il mondo ha perso 100 milioni di donne” (Mondadori) [“Jamás nacidas. Por qué el mundo ha perdido a 100 millones de mujeres”] parece sólo de denuncia, aunque de un tipo nuevo e importante. La autora profundiza desde varias perspectivas estadística, biológica y tecno-científico en la alarma que Amartya Sen había lanzado en un célebre ensayo de 1990: en el mundo faltaban cien millones de mujeres que deberían haber estado en él, mas no es así por su muerte temprana a causa de desidia, o incluso jamás nacidas. Un número espeluznante que supera el balance de las víctimas de las dos guerras mundiales y el de las grandes epidemias como la española o el sida.

Sin embargo, ya hay una perversión en ellas: Usando nombres de empresas, aparentemente objetivas y neutrales, los candidatos difunden resultados en los que aparecen muy bien posicionados con respecto a sus adversarios… aunque esto no sea cierto.

Se puede probar la eficacia que tienen estas acciones para influir en la colectividad para que se empiece a correr la voz de que “ya ganamos”. Aun así, cuando se ponen cifras demasiado alejadas de la realidad, la ciudadanía pensante se da cuenta del fraude y profundiza en los resultados. Para que una encuesta sobre los resultados de una elección sea confiable hay consideraciones que no se pueden pasar por alto: Las encuestas marcan tendencias. No son un resultado definitivo. Son una fotografía del momento que puede cambiar radicalmente.

Las cosas que hoy son ciertas mañana puede que no lo sean.

Mientras más información se da, más se distorsiona la encuesta, pues, en el primer caso, la respuesta requiere que el ciudadano ya sepa quiénes son los contendientes y, en el segundo, las opciones son demasiado específicas y el encuestado puede dar una respuesta distinta, que si no supiera quiénes son los candidatos.

Por otro lado, en la metodología, tenemos varios elementos a considerar:

En este tema, también es muy diferente que se pregunte: ¿Por qué partido votarás? A decir: ¿Por cuál de estas personas votarás?

La gente puede dar respuestas distintas a un partido que a un candidato.

Tamaño de la Muestra. Debemos saber el número de personas que participan en la encuesta para que ésta sea representativa en número. Una encuesta para valorar las tendencias de un candidato a presidente de la mesa directiva de una escuela, no puede ser igual en número a la aplicada para un presidente municipal, gobernador o Presidente de la República.

Influencia de otros eventos. Muy ligado a la oportunidad, se encuentra la influencia de otras actividades o eventos coincidentes. No son lo mismo los resultados de un candidato a Diputado Federal en las elecciones intermedias –es decir, en las que sólo se vota por diputados federales– a los resultados cuando hay elecciones de Presidente de la República, Senadores y Diputados.

Lugar. Exagerando, ¿qué pasaría si realizamos una encuesta sobre las próximas elecciones en Irán… y la hacemos en México?

El partido en el poder. Aunque muchas personas pueden alinear su voto a su simpatía hacia el partido en el poder, muchas otras saben que el candidato tiene su trayectoria personal, buena o mala, y no debe considerar lo que está haciendo el gobernante en turno… a menos de que el candidato haya sido impuesto por él, porque lo bueno o lo malo también influirá en el posible nuevo gobernante.

Las encuestas deben realizarse a personas que representen el sentir de la sociedad y no elegir un lugar repleto de simpatizantes de quien se desea resulte ganador. Si se realiza la encuesta en un salón en donde todos los asistentes son miembros del propio partido político, los resultados de ella no son quién va a ganar, sino qué simpatía tiene el candidato con su propio partido.

Oportunidad. Se requiere que sea realizada en un momento en que exista cierto nivel de objetividad. Sería absurdo sacar conclusiones de una encuesta cuando un candidato acaba de cometer un grave tropiezo o la actividad que acaba de realizar impactó a muchas personas, pero no determinantemente en el largo plazo.

Las Preguntas. Hay preguntas abiertas, cerradas… y tendenciosas. Por supuesto que no es lo mismo preguntar: ¿Por quién votarás para Presidente de la Republica en este año?, que preguntar: ¿A cuál de estos candidatos elijes para gobernar el país? Y dar los nombres de Andrés Manuel López Obrador, Enrique Peña Nieto y el Candidato (a) del PAN?

Finalmente, la metodología debe ser conocida por la ciudadanía, para saber si se hizo de manera impecable en cuanto a su redacción, objetividad, circunstancia, etcétera.

Y, en la medida de lo posible, en el momento crucial y definitivo. La mejor encuesta es la que esté más cerca del evento, pues cuando faltan muchos meses para una elección, por ejemplo, los resultados pueden cambiar de manera permanente.

Por ello, no tomes como definitivo todo lo que ahora escuchas. Pregúntate: ¿de quién viene? ¿Cómo se hizo? ¿En dónde se hizo? ¿Cuándo se hizo?...

Porque, la mejor encuesta ¡es la del día de la elección!

Un drama gigantesco tal vez numéricamente aún mayor que el denunciado por Sen al que le cuesta encontrar voz tanto en los centros de investigación como en los medios de comunicación. Meldolesi ahonda en ello en el plano de la investigación demográfica, intentando definir las verdaderas dimensiones del gender-icidio en curso, considerando que las estimaciones deben tener en cuenta ya sea la tendencia natural al nacimiento de un número ligeramente superior de varones, ya sean los fenómenos históricos como las migraciones, que generalmente involucran más a sujetos de sexo masculino. Las variables que explican cifras de mujeres distintas de las naturales son, por lo tanto, muchas, y hay que tenerlas presentes.

La autora examina después las razones culturales que pueden empujar a la eliminación de las mujeres: la patrilinealidad típica de los sistemas patriarcales que no conceden a la mujer ninguna garantía ni peso social; el papel de las religiones; y, naturalmente, las que llama “las insidias de la modernidad”, o sea, las posibilidades de descubrir a través de análisis el sexo del nastiturus a fin de eliminar al indeseado con el aborto. Meldolesi es consciente de cómo las nuevas técnicas médicas se hallan en el origen de un agravamiento del gender-icidio, especialmente en los casos de las comunidades inmigrantes, que frecuentemente utilizan la asistencia médica de los países a los que han acudido para obrar la antigua selección sexual. Pero piensa que esto es sólo un empeoramiento inicial al que seguirá un nuevo equilibrio debido a la inserción de los inmigrantes en la cultura occidental, y por lo tanto una nueva actitud respecto a las mujeres. Esta esperanza no le exime de subrayar la frecuencia y la gravedad de la selección en marcha, y la necesidad de formas más atentas de vigilancia y de educación en la igualdad de los sexos.

Sin embargo la parte más interesante del libro, la más nueva, es en la que la autora que además se declara favorable al aborto y a la aplicación de las tecno-ciencias reflexiona sobre el hecho de que es muy difícil combatir al mismo tiempo la batalla por el aborto más seguro y aquella contra el gender-icidio, porque precisamente el aborto seguro y legal contribuye a aumentar el número de las mujeres eliminadas antes del nacimiento. Y no sólo: también las campañas de control demográfico, interviniendo con esterilizaciones y abortos en masa, pueden haber contribuido a agravar esta realidad. “El hecho de que tantas mujeres que no son ignorantes ni marginadas decidan abortar a otras ‘mujeres’ escribe Meldolesi obviamente es como un virus inmenso en el sistema de las argumentaciones pro-choice y representa un desafío para el pensamiento feminista, pero también para todos los progresistas”. ¿Entonces el derecho a abortar debe garantizarse independientemente de las intenciones de quien recurre a ello? ¿La supresión de los fetos de sexo femenino no es tal vez sólo una lógica extensión del derecho de los padres a controlar el número, el timing, el distanciamiento y la calidad de los hijos, ya generalmente considerado inapelable? Tales cuestiones se plantea la autora.

Pero se puede añadir una reflexión. De nuevo, tras el caso de la eugenesia de la primera mitad del siglo XX, salen a la luz los peligros inherentes al “derecho” a controlar los nacimientos, a intervenir para decidir a quién conceder la llegada al mundo y cuándo. También la falta de estas niñas marca un peligro en el que no se quiere pensar y que afecta, junto a ellas, a toda la humanidad.

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Más allá de la estrella D Por Pbro. Margarito de la Torre

esde niño he sido aficionado al beisbol; cuando tenía algunos ocho años de edad leí un artículo en la revista hit, de tantas que mi hermano tenía, titulado: “Se apagó la estrella de Belén”, con ocasión de la muerte de Lázaro Salazar, un famoso pelotero cubano que había jugado con los Fantasmas Grises del Monterrey, entre otros equipos de la liga mexicana. Después, cuando comencé a conocer del Niño Jesús, al menos el título de aquel artículo me pareció muy fuera de lugar.

Puede que se llegue a identificar a la estrella de Belén con el Niño Jesús; la estrella brilla en la oscuridad, pero la estrella no es Jesús; lo más que podemos decir es que la estrella nos lleva a Jesús. De este modo yo más bien relacionaría a la estrella con la Virgen María. Tal vez en este sentido alguien escribió: “Mira la estrella e invoca a María”.

Hace muchos años que no disfruto de un cielo estrellado.

El solo recuerdo de aquellas noches me cautiva; cuando en compañía de mis parientes, tumbados boca arriba, después de cenar, disfrutábamos de las estrellas mientras nos llegaba el sueño, que por cierto no tardaba, debido a la fatiga por el trabajo en la milpa; mientras tanto, los mayores contaban historias del pasado.

Al contemplar el cielo estrellado, en algún momento llegué a pensar, ¿qué habrá más allá de las estrellas?

Las estrellas son una ilusión, o por lo menos lo es el creer que podemos verlas; bueno, podrán verlas los astrónomos actuales, con sus potentes telescopios; pero sin esos aparatos no podemos verlas; lo que vemos es luz que emitieron hace miles de años. ¿Y eso qué impide contemplar y gozar de un cielo estrellado? Es hermoso el titilar del cielo, especialmente en invierno. ¿Pero por qué conformarnos con ver las luces fugaces de las estrellas? ¿Por qué no ir más allá de ellas? “Yo te buscaba fuera de mí y tú estabas dentro

de mí”, decía San Agustín. No busques alegría fuera de ti, descúbrela dentro de ti; esto será posible si dejas que Dios te vaya transformando; que Jesús se manifieste en tu vida.

De muchas maneras buscamos alegría; a veces escuchando música, pero no siempre se logra el objetivo; sé tú mismo la alegría; no esperes que te den alegría, llévala tú a los demás.

En el mundo encontramos gente que se queja porque no la entienden, porque le hacen daño; falta felicidad, falta paz, armonía. No podemos negar que existe todo eso en el mundo y que a todos, de un modo o de otro nos alcanza, si bien en distintas dimensiones; pero también es cierto que en gran medida cada uno de nosotros va construyendo su propia vida; metafóricamente podemos decir que cada quien es según aquello de lo que se alimenta.

Todo en sí mismo es bueno, pero dependiendo del uso que le demos podemos desvirtuar su bondad. Hoy algunos medios de comunicación absorben de tal manera el tiempo, que no dejamos tiempo para encontrarnos con Dios. En realidad el tiempo dedicado a Dios resulta en beneficio propio.

No nos cansemos de buscar a Dios. Jesús es la vida, el gozo, la alegría. Tenemos gozo en la medida en que tenemos a Jesús. Que te llenes de él y él te llene de alegría, de gozo, paz y dicha.

El perdón que conduce a la alegría

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recuentemente llegan personas a confesarse. En realidad buscan consejo.

Quieren sentirse bien. Viven atados por algún resentimiento. Y preguntan: ¿cómo puedo perdonar las ofensas? Cómo puedo dejar de odiar, de guardar rencor a este, ese o aquel que me lastimó hace tiempo? ¿Cómo desechar esto que no me deja vivir feliz? Ya perdoné, pero aún no me libero, como que no he perdonado del todo.

Y el problema es que de fondo hay sentimientos de amor frustrado, hay faltas a la lealtad, al amor, a la confianza; hay traiciones, hay pérdidas; es ciertamente difícil perdonar; nadie dijo que era fácil. El mismo Jesús lo sabía perfectamente, y dedicó, en la oración más bella del mundo, unas palabras a este respecto: Padre nuestro… perdona nuestras ofensas, como también nosotros perdonamos a los que nos ofenden.

Si no perdonamos es porque no oramos por los que nos ofenden, porque no ponemos ante Dios a aquellos que nos han dañado; no perdonamos del todo, porque nuestro perdón es imperfecto, nos falta algo, un ingrediente secreto: misericordia.

Misericordia. Esa es la palabra. Ese es el secreto. Cuando perdonamos a alguien que nos ha dañado, en el fondo no hemos vuelto a recibir al ofensor nuevamente en nuestra vida; decimos: te perdono, decimos: no hay problema, decimos: no hay fijón, decimos: vale. Pero solo lo decimos. Por urbanidad, por mantener situaciones y/o relaciones de paz, de no agresión, pero en el fondo realmente no hemos perdonado, solamente hemos respondido a una súplica, y lo hemos hecho de palabra. Es decir, no volvemos a amar a quien nos dañó.

Misericordia significa amor. Es una de las tantas formas que el amor adopta en el caminar humano. Pero es una forma de amor más perfecta. El que ama perdona. Perdonar al que nos ofende, y perdonarlo de verdad, nos pone a nosotros en un nivel, en una estatura gigante, nos hace reproducir en nosotros mismos esa imagen de Dios de que estamos hechos. Nos enaltece; porque la misericordia no es otra cosa que el amor de Dios que se hace presente. Sin embargo, debemos dejar que fluya, que inunde, que abrace. Y, si no incluimos nuestra alma, nuestras intenciones todas, nuestra oración, entonces no habremos perdonado de verdad. Es decir: solo perdonamos a quien amamos.

Seamos realistas. El odio nos tiene atados a esa persona que odiamos, cuando lo que debería atarnos a ella es el amor; pareciera que los lazos del rencor son más fuertes que los del amor, ¿no es cierto? ¿Cuántas veces, algunos que creían haberse amado y ya no están juntos, viven en absoluta paz, a veces ni se acuerdan ya de los tiempos del amor y de los chocolates y paseos, el cine y el helado, las flores y los regalos? Y ¡cómo cargamos sobre nuestros hombros y en nuestros recuerdos a aquellos que nos han lastimado!

Qué barbaridad. No cabe duda que el mundo camina al revés y que no hemos entendido ni la vida, ni el amor, ni el odio, ni ningún sentimiento, ni la fe. Deberíamos recordar los tiempos del amor y olvidar los del dolor.

El odio, el resentimiento no nos dejan ser felices, nos roban la felicidad, nos quitan energías, esas energías que deberíamos estar ocupando en hacer canciones de amor, obras de arte, obras de caridad; energías que nos deberían servir para dar abrazos, consejos, aplausos. ¿Vamos a permitir que los resentimientos nos roben lo más valioso que tenemos y las más hondas aspiraciones?

Porque para esto fuimos creados: para ser felices, para la vida eterna, para la felicidad eterna. Y esta felicidad no es algo que esperamos como un glorioso futuro, como un bálsamo después de tanto sufrimiento aquí en la tierra. No. La felicidad se conquista en esta tierra, con las posibilidades terrenas y cercanas. La felicidad es algo que conocemos de manera imperfecta por aquí y que tendremos en abundancia en el cielo. Ese paraíso adonde iremos los felices: los bienaventurados. El cielo es continuación de la vida que tenemos aquí.

Jesús nos dio muchas pruebas de amor y de misericordia. Cuando estaba en la cruz, a punto de morir, de entregar la vida, la sangre preciosa por todos los hombres y mujeres del mundo, nos dio la prueba más grande de su amor: la intercesión, el perdón total: “Padre, perdónalos, porque no saben lo que hacen”.

Sí. Porque no saben lo que hacen. Jesús nos enseña a perdonar. El perdón perfecto, liberador, es el perdón sacrificado. Si supiéramos como Jesús que quienes nos ofenden, quienes nos dañan no saben realmente lo que hacen, los perdonaríamos de corazón.

No hemos aprendido a perdonar, porque no hemos aprendido a orar.

Es verdad. Perdonar es altamente difícil. Hay que subir a las alturas para ver el mundo como lo ve Dios. Si podemos verlo así un minuto, habremos aprendido a perdonar de corazón. Hay que ver desde arriba, para tener misericordia, desde arriba: desde la cruz. Desde arriba, para saber que somos grandes. Y sólo los grandes perdonan. Quien no ha aprendido a perdonar tiene estatura de hormiga; quien vive sufriendo por las faltas de los demás en contra suya, no ha crecido, porque solo perdonan los que han escalado hasta el Gólgota, los que han cargado una cruz, los que saben el valor del sufrimiento que redime. ¿Para qué vivir con amargura? ¿Para qué permitir que el resentimiento nos robe esa condición angelical con que fuimos creados y a la que somos llamados? Hay que decir: no, a la tristeza; el no perdonar, siempre traerá a nuestro corazón dolor. El perdón recibido y otorgado, nos conduce al gozo.

Palabra de Dios

Sexo sin Dios Por Benjamín Juárez Guerrero, Teología I Escríbenos: ecos_seminarioslp@hotmail.com Se nuestro amigo en Facebook: Seminario Guadalupano Josefino

¿Q

ué es el sexo? Sin duda causa pudor y morbo cuando escuchamos esta palabra, y es que sólo hemos entendido este término como el acto sexual, sin embargo Salomón Rahaim dice en su libro de moral Sexo uso y abuso, citando la constitución del Concilio Vaticano II Gaudium et Spes, sobre la Iglesia en el Mundo Actual: que el sexo es la constitución interna, la constitución psicosomática que distingue a los animales en macho y hembra, y, a los hombres, con psiquismo superior al de los brutos, en varón y mujer (Cfr. GS 51; Sexo uso y abuso p. 68).

En este sentido hay que distinguir que sexo es diferente a sexualidad, al respecto el catecismo de la Iglesia Católica nos dice que la sexualidad abraza todos los aspectos de la persona humana, en la unidad de su cuerpo y de su alma. Concierne particularmente a la afectividad, a la capacidad de amar y de procrear y, de manera más general, a la aptitud para establecer vínculos de comunión con otro (CEC 2332). En este sentido hablar de “relaciones sexuales” es muy amplio y no se reduce sólo al coito.

Hay que vivir de la manera más natural en cuanto se refiere a nuestra sexualidad. Muchas veces el sexo se vive sin Dios cuando es por puro placer; cuando se busca sólo el interés propio de satisfacerse así mismo.

En cuanto al sexo entendido como coito cabe decir que en la actualidad es común que las personas practiquen el sexo sólo como una diversión, como un placer, como una experiencia nueva e incluso como un hobbie. Es común que en la secundaria y en la preparatoria la mitad o más de la mitad ya hayan tenido relaciones sexuales. Por otra parte, existe una cultura sexual que dice que, si no has tenido relaciones sexuales después de los 18 años estás quedado, eres raro, no sabes divertirte y estás desperdiciando tu vida.

El mundo moderno ofrece un sentido del hombre sin Dios. Por eso, hoy son muchos los hombres que caminan por este mundo sin fe, sin moral y sin Dios. Quizá, en la mentalidad de algunos hombres sigue viva la creencia propagada por Nietzsche de que Dios ha muerto y que el superhombre representa los nuevos valores y la nueva moral. Entonces, ¿qué es lo que vale hoy? Lo

que me agrada: las relaciones sexuales. El único imperativo categórico es: Haz lo que quieras, ten sexo sin compromiso, mastúrbate, mira pornografía, etc. ¡Vive feliz! “Si Dios no existe, todo está permitido”, cualquier cosa es moralmente válida. Recordemos a Pablo VI que decía: “El mayor pecado de nuestro tiempo, es precisamente haber perdido el sentido de pecado”.

Es más frecuente que la gente diga: ¡Comamos, bebamos y disfrutemos toda clase de placeres! ¡Sí a la fornicación, sí a la masturbación! La vida es para vivirla sin atenerse a normas ni principios. Dios ha muerto, no existe el pecado ni el infierno, hay que tener sexo con quien sea y como sea. ¿Sabes cuál es el sentido del sexo en el plan de Dios? El sexo une y es benéfico para el relacionamiento. Aún así, Dios Padre propone que el sexo se viva sólo dentro del matrimonio. El Señor no incluye en sus planes la práctica del sexo o fuera o antes del matrimonio. La vida sexual entre el hombre y la mujer, tiene dos sentidos en el plan divino: unitivo y pro-creativo. El Creador dice a la pareja: “Sean fecundos y multiplíquense.

Llenen la tierra y sométanla” (Gn 1, 28), y la tierra aún no estaba llena, por eso, Dios dio a la pareja una vida sexual. ¿Qué es entonces el sexo con Dios? Es tener a Dios como centro de mi vida, es tener a Dios como norma moral en todos mis actos.

El sexo con Dios es que vea el acto sexual como un regalo que Dios me da para expresar mi amor a otra persona en estado de matrimonio. Es importante decir que el vivir el sexo con Dios no sólo es por voluntad divina, sino que es una realidad y necesidad del hombre actual adherirse a Dios.

El ser humano es engendrado por el acto sexual. Para la pareja el acto sexual es una fuente de vida, por eso es un acto grandioso y digno. Sin embargo, en el mundo, el sexo es maltratado, sucio, profanado, prostituido, comercializado y, de esta forma, es común en la mente de algunas personas la imagen de este acto (sexo) como algo impuro, malo.

Por último recordemos que la inmoralidad sexual, siempre ha existido, desde la antigüedad. Dios creó el matrimonio, para que un solo hombre y una sola mujer tengan una relación permanente y fiel, cualquier otro modelo es rechazar ese plan original, la inmoralidad sexual lo practicaron los hombres que fueron desobedientes en el Antiguo Testamento, hoy en día en la actualidad, se practica la inmoralidad sexual por los hombres desobedientes a Dios, el designo de Dios nunca fue ni tampoco que los cónyuges, tengan relaciones extramatrimoniales, ni mucho menos que tengan relaciones del mismo sexo, para Dios es una aberración. ¡Sexo sin amor es para los animales! ¡Sexo con amor es de cristianos!

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“Este hombre tiene autoridad para mandar hasta a los espíritus inmundos y lo obedecen”

Evangelio según San Marcos 1, 21-28 En aquel tiempo, llegó Jesús a Cafarnaúm y el sábado siguiente fue a la sinagoga y se puso a enseñar. Los oyentes quedaron asombrados de sus palabras, pues enseñaba como quien tiene autoridad y no como los escribas.

Había en la sinagoga un hombre poseído por un espíritu inmundo, que se puso a gritar: “¿Qué quieres tú con nosotros, Jesús de Nazaret? ¿Has venido a acabar con nosotros? Ya sé quién eres: el Santo de Dios”. Jesús le ordenó: “¡Cállate y sal de él!” El espíritu inmundo, sacudiendo al hombre con violencia y dando un alarido, salió de él. Todos quedaron estupefactos y se preguntaban: “¿Qué es esto? ¿Qué nueva doctrina es ésta?

Este hombre tiene autoridad para mandar hasta a los espíritus inmundos y lo obedecen”. Y muy pronto se extendió su fama por toda Galilea.

Palabra del Señor.

Gloria a ti, Señor Jesús.

Con autoridad

La autoridad es la realidad más necesaria en la vida de cualquier persona; en la historia de cualquier pueblo, en la intimidad de una familia; sin autoridad todo se convierte en un caos.

Por eso algunos críticos de la sociedad dicen que cuando alguna institución presenta fracturas, cuando no hay el progreso deseado; cuando el orden supuesto no se ve, hay cristo de autoridad.

El Evangelio de hoy nos presenta al Señor Jesús hablando con autoridad, hecho que llama la atención de sus interlocutores y le escuchan con atención y admiración.

Hablar con autoridad significa: hablar con verdad, actuar con libertad; sin maquillajes y sin poses, con autoridad…

Hoy más que nunca necesitamos hombres y mujeres que hablen con la verdad, que actúen con toda libertad, que no negocian la autoridad, porque la autoridad no se negocia, se ejerce, como lo hizo el Señor Jesús, a tal grado que debemos llamar la atención de los que están con nosotros.

Si el Señor Jesús nos confía autoridad agradezcámosle su confianza y así como Él actuemos con autoridad, entendiéndola como un gran servicio, como una necesidad fundamental, como un compromiso con la verdad y con la libertad.

Por Pbro. José de Jesús Cruz Rodríguez

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ENERO 29 DE 2012

Por Vicente Cruz

Yo encontré a Dios ¿y los demás? ¿Una vez que decimos que somos cristianos, qué clase de actitud tenemos ante quienes no se asumen de manera semejante?

A

lguna vez unos mineros le preguntaron a cierto Obispo que fue a visitarlos a su lugar de trabajo, qué podrían hacer ellos ante los abusos del sindicato corrupto que los mantenía en condiciones laborales injustas. El Obispo les contestó que por lo pronto ellos no se portasen de manera injusta ante sus propios compañeros de trabajo.

El encuentro con los asambleístas, una gran experiencia para nuestros laicos comprometidos Caminando juntos en misión permanente en nuestra Iglesia Potosina

Cuando se es cristiano es entendible que nuestro comportamiento en principio debe manifestarse en acciones favorables hacia nuestra comunidad. Hasta aquí queda perfectamente claro, pero salta frecuentemente otra pregunta a la cual muchas veces pareciera eludirse: ¿Qué hacer frente a aquellos que han decidido no aceptar a Cristo y son responsables de generar injusticias?

Regresando al caso del sindicato corrupto podríamos simplificar así la pregunta ¿Cuál debe ser la actitud –y la acción- ante quienes los oprimen?

Me parece que la pregunta es fundamental porque le corresponde dar respuesta al comportamiento que como hijos de Dios deberíamos tener frente a quien nos hiere.

La respuesta toma importancia debido a que de alguna manera ha quedado la impresión en ciertos sectores que la única respuesta cristiana ante la injusticia es la resignación.

El Pbro. Darío, encargado de dirigir la Lectio Divina en el inicio de la Asamblea Diocesana

El momento de oración, una expresión de nuestros agentes comprometidos con la misión

Sin tener la pretensión de dar una repuesta absoluta, creo que se debe partir de aceptar que no se puede ser cristiano y a la vez apático. Es impensable que alguien se diga cristiano pero se aísle de una realidad que lo cuestiona. Las soluciones a tales problemas comenzarán a darse en la medida que los que se asumen como cristianos comiencen a tenderse la mano, a reconocerse hijos de Dios y por lo tanto hermanos. El pecado de la gente que se asume como buena, generalmente es de omisión, pues permite la injusticia.

La Misión permanente, un espíritu de comunión con toda Latinoamérica

Preparándonos para la Asamblea diocesana de pastoral

Un espíritu de comunión durante la Lectio Divina

Podríamos incluir también las injusticias que se cometen día a día en muchos niveles de nuestra cotidianeidad: en las calles, en la escuela, en el trabajo, etc.

Sacerdotes y seglares participantes en la XXVI asamblea diocesana

Para no pecar de omisión, ojalá que comencemos ya a tender las manos a nuestros vecinos, compañeros de trabajo, de escuela, etc. Muy posiblemente las soluciones estén allí, en la mente de varias personas, pero solo serán efectivas hasta que se compartan en la solidaridad de quienes ya se asumen privilegiados como Hijos de Dios.

ENERO 29 DE 2012

ni単os

TRIBUNAL ECLESIÁSTICO ARQUIDIÓCESIS DE SAN LUIS POTOSÍ MADERO 300. COL. CENTRO TEL. (444) 812-45-55 SAN LUIS POTOSÍ, SLP.

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(29 de enero de 2012) 968l 21, 2011 COMUNICACIÓN El Tribunal Eclesiástico, por este medio se notifica a Oswaldo Jonathan Álvarez Espinal y Erika María Elena Alanís Ramírez que con Decreto del día 11 de octubre de 2011, el suscrito Pbro. Lic. Héctor Colunga Rodríguez, Juez Único, en virtud de las facultades ordinarias de que goza, declaró NULO E INVALIDO su matrimonio religioso efectuado en la parroquia de La Santa Cruz de San Luis Potosí, el 20 de noviembre de 2009, por falsificación de la boleta de bautismo y por presunción de atentado matrimonial por existencia de impedimento dirimente de ligamen por el matrimonio que contrajo Jorge Enrique Álvarez Espinal y/u Oswaldo Jonathan Álvarez Espinal con Ma. Guadalupe Hernández Galindo, el 9 de septiembre de 1995 en la Parroquia Catedral de San Buenaventura en Cuautitlán, Méx.

Asimismo, se les informa que se ha pedido hacer las anotaciones pertinentes en los archivos eclesiásticos de la Arquidiócesis de San Luis Potosí y de la Diócesis de Cuautitlán.

La dirección electrónica de envío es semanariolared@iglesiapotosina.org y semanariolared@hotmail.com

Encuentro de SEM-FAM,

N.B.: Se usa este medio informativo porque se han rehusado a recibir correspondencia los interesados.

solo para quienes estan en secundaria.

Este 4 y 5 de febrero en el Seminario Menor Iniciamos a las 11:00 am Lleva tus cosas personales, ropa de cama, Biblia y libreta, ropa para deporte y $50.00 de cooperación. ¡Te Esperamos!

Más informes: Pbro. Noé Estrada, 811.86.85 Facebook: Pbro Noé Estrada

¿Le duelen mucho las rodillas?

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