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Homenaje a Arturo Fernández

ARTURO FERNANDEZ ´

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El eterno caballero

Arturo Fernández nace en Gijón en el seno de una humilde familia. Su madre lo crió sola durante 9 años, que fueron los que su padre estuvo en Francia.Tiene tres hijos, fruto de su matrimonio con Isabel Sensat de la que desde hace unos años está separado. Actualmente comparte su vida con Carmen Quesada. La ilusión de su madre era que llevara corbata para poder trabajar en una oficina. En el año 1950 llega a Madrid sin un proyecto de trabajo establecido. Sus primeros “pinitos” en el cine fueron los de figurante, más tarde llegó a interpretar pequeños papeles en algunas películas y a partir de esa fecha fue trabajando en cine, teatro y televisión

TEXTO: NURIA VENTURA MUR FOTOS : JEAN PIERRE LEDOS

IC Magazine.: D. Arturo, ¿cómo fueron sus comienzos en el mundo de la interpretación? ¿Tuvo que echarle mucho valor? Arturo Fernández: Si, la verdad. Empecé como extra gracias a un asturiano que era técnico de cine para ganar unas pesetas cuando llegué a Madrid sin oficio y sin vocación definida pero con la intuición de que aquí la encontraría. Y así fue…y empecé a aprender viendo a los grandes de la época.

ICM.: Llega el día en que se incorpora a la Compañía Teatral de Conchita Montes pasando mas tarde a la de Rafael Rivelles. Debió ser como si le hubieran entregado un premio. Cuando le llegó el momento de salir al escenario, los focos alumbrándole, y aquella cantidad de gente frente a usted, ¿no le temblaron las piernas? y ¿a quién recordó? ¿Satisfecho con el resultado?

A.F.: Había hecho algo de cine ya y teatro de cámara… lo que más me preocupaba era mi fuerte acento asturiano (risas). ¡Que dos nombres!, Conchita Montes, la reina de la alta comedia y el gigante de la escena que fue Rafael Rivelles. Ya había encontrado mi camino, ahora tocaba aprender cada día a su lado.

ICM.: Cuando comienzan a llegarle papeles de protagonista ¿cómo lo valora?

A.F.: La gran oportunidad me la da el cine. Más concretamente Julio Coll, uno de los mejores directores de cine, muy dado al cine negro, injustamente olvidado. Impuso mi nombre contra otros mucho más conocidos de la época en “Distrito Quinto” primero y un “Un vaso de whisky” después. A partir de ahí más de 80 películas que pronto me procuraron hacerme con un nombre que me permitió hacer lo que me gustaba realmente: teatro y, sobre todo, alta comedia.

ICM.: ¿Leía y lee las críticas?, ¿les hace mucho caso cuando son negativas?

A.F.: Claro que las leo, de todo se aprende. Les hago caso cuando, siendo positivas o negativas, son objetivas. Pero al crítico que siempre hago caso es al público.

ICM.: ¿Comedia o drama?

A.F.: Comedia. Siempre comedia y, especialmente, alta comedia. Le doy toda la razón a Groucho Marx cuando decía que un actor de comedia puede hacer un drama pero hay muy pocos actores dramáticos que tengan flexibilidad para la comedia…es mucho más difícil la naturalidad querequiere. No estamos hablando de la farsa oel esperpento. La comedia es el más difícil delos géneros.

Fotograma de la pelicula Distrito Quinto

ICM.: Y es ahora cuando vuelve a losescenarios con “Alta Seducción”, que seestrena este 19 de septiembre en el TeatroAmaya. ¿No le da cierto respeto que se lacompare con la que estrenó hace más de 20años?

A.F.: Ciertamente fue un éxito sinprecedentes, pero creo que esta versión,naturalmente actualizada, es aún mejor queaquella. Lo que me da respeto es poderfísicamente con un personaje tan trepidantee incansable como es el protagonista.

CARMEN del VALLE una actriz cuya fuerza y calidad interpretativa ha quedado de sobra demostrada da la réplica a Arturo Fernandez

ICM.: ¿Es cierto que “Alta Seducción” fue escrita pensando en usted?

A.F.: Fue escrita por María Manuela Reina para mí. Algo que siempre le agradeceré.

ICM.: ¿Por qué hay que ir a verla?

A.F.: Porque es un ejemplo de lo que es o debe ser “alta comedia” un género que aúna diversión, elegancia e inteligencia en su texto. Y además una puesta en escena espectacular y cuidadísima.

ICM.: ¿Con que actriz se ha sentido más cómodo trabajando?

A.F.: Me he sentido siempre muy a gusto con todas mis compañeras. Concha Velasco, Carmen Sevilla, etcétera. Pero si he destacar a alguien, sin duda Paula Martel, con quien hice muchas comedias y se convirtió además en una “hermana” elegida y así lo sigue siendo a día de hoy, ocupa un lugar especial y por supuesto Carmen del Valle, protagonista de “Alta Seducción” con quien ya trabajé en “La Montaña Rusa” y con la que desde entonces estaba esperando tener la ocasión de volver a hacerlo.

ICM.: ¿Le ha llegado el papel de su vida?

A.F.: El tener compañía propia te permite elegir los papeles que más te gustan pero al tiempo siempre piensas en que has de encontrar para el siguiente proyecto un papel, una comedia aún mejor. No tener esa inquietud te vararía.

ICM.: ¿Le satisfizo el pase por capítulos en TVde la obra Truhanes, previamente estrenadaen el cine?

A.F.: Truhanes fue una experiencia inolvidabletanto en cine como en TVE, desde todos lospuntos de vista, el profesional y el humano.

ICM.: Su estilo de vestir es el de un dandi, ¿va siempre conjuntado? ¿Siempre ha sido igual?

A.F.: Gracias por su apreciación (risas).Siempre he procurado ir bien vestido y acordea la situación, me parece una muestra derespeto a uno mismo y a los demás. Y sí, demuy joven, mientras mis amigos se paraban en los escaparates de las confiterías yopegaba mi nariz al de la mejor sastrería de miGijón natal.

ICM.: ¿Qué opina de esta moda actual de los pantalones vaqueros, salidos de fábrica rotos y desteñidos, pero que cuestan un dineral?

A.F.:Son modas puntuales que tienen su edad y su momento. Evidentemente no es mi “línea” (risas).

ICM.: La palabra “chatina” que utiliza en muchas ocasiones ¿le ha dado problemas con las feministas?

A.F.:Es un apelativo cariñoso y respetuoso, el problema es de quien no lo entienda así.

ICM.: ¿Piensa retirarse? Si es así ¿cuándo?

A.F.: El teatro es mi pasión, así que ¡¡¡cuandoel público o Dios quieran!!!

ICM.: Y hasta aquí nuestra entrevista Don Arturo, ha sido un verdadero placer conversar con usted.

A.F.: Muchísimas gracias y ¡¡¡¡FELIZ CRUCERO!!!!

Descanse en Paz Don Arturo Fernández

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