REYNALDO

RODRÍGUEZ

Mi pasión por el diseño nació desde niño, cuando empecé a analizar los juguetes. Me fascinaba contarle a mi mamá cómo funcionaban los juguetes para que me los comprara. Pero también es algo que nace y muere todos los días, es cosa de mantenerse y encontrarme trabajando para darme cuenta de qué idea sirve y qué idea no sirve y es una lucha constante contra esa voz interna que muchas veces me motiva y otras veces me desmotiva. Es algo que nace todos los días cuando empiezo a crear cosas en mi cabeza o veo algo que me inspira o escucho algo de música o encontrarme con alguna necesidad de una persona en particular para buscar formar un diseño completo que satisfaga sus necesidades e invitarla a disfrutar el mundo que diseño a mi alrededor.

Í: ¿Qué te impulsó a estudiar diseño industrial?

O: Me impulsó la oportunidad de aplicar mis habilidades creativas para mejorar la vida de la gente. Quería unir mis conocimientos técnicos con mi habilidad para crear soluciones prácticas y artísticas también.

Í: Y ¿cómo ves la práctica del diseño hoy en día, a comparación de cuando eras estudiante?

O: Desde que estudié Diseño Industrial, mi perspectiva sobre el diseño ha cambiado. He aprendido mucho sobre la función y la forma en que los productos y servicios pueden tener un impacto positivo en la vida de la gente. Esto me ha motivado a buscar la mejor solución para mis proyectos y a aplicar mis conocimientos creativos de manera innovadora. Antes pensaba que diseñar algo a la primera iba a ser suficiente, pero me fui dando cuenta que siempre puedes hacer crecer un proyecto en base

Fotografías de proyectos recientes, la imagen del taburete fue diseñado en colaboración con Jorge Urias Studio

Esta colección de aretes “Rotos” se lanza con sus tres primeros diseños

Í: Ahora cuéntanos ¿actualmente a qué te dedicas?

O: Comencé a trabajar con el arquitecto Jorge Urías en el 2021 y hasta la fecha ha sido una segunda escuela para mí. Hace 6 años, en el 2017, a la mitad de la carrera, decidí fundar mi propio estudio de diseño y le puse mi segundo nombre; ahí me divierto mucho haciendo estudios de materiales, formas, funciones, etcétera. Busco innovar en los procesos, los usos y el concepto para lograr transmitir y contar historias a través de los objetos para que estos se relacionen con las personas y su entorno. En pocas palabras me dedico a enfocar mi atención a los pequeños detalles para satisfacer a las personas con un diseño completo.

Í: Y con esto, ¿qué impacto crees lograr al aplicar tus habilidades de diseño en la sociedad?

O: Creo que mi trabajo como diseñador tiene un impacto significativo en la sociedad ya que puedo diseñar productos y servicios que mejoren la calidad de vida de las personas en una ciudad con mucho potencial de crecimiento; oportunidades hay, es cuestión de salir de tu zona de confort y darte a conocer tocando puertas.

Í: Para finalizar ¿de dónde nace tu inspiración o qué tipo de corrientes / exponentes te inspiran a diseñar?

O: Mi inspiración nace de varios lugares. Me inspiro en el trabajo de escultores, diseñadores y arquitectos de todo el mundo, así como en la cultura del diseño mexicano, escandinavo y japonés y la naturaleza que los hace únicos. También me inspiran los exponentes de la innovación: personas que buscan mejorar el mundo a través de sus productos y servicios. Valoro el trabajo de aquellos que se esfuerzan por mejorar la vida de las personas y encontrar soluciones creativas para los desafíos diarios. Hablo de Isamu Noguchi, un escultor y diseñador estadounidense-japonés, Anne Holtrop, un arquitecto holandés y David Pompa, un diseñador de producto australiano-mexicano. Realmente la inspiración surge a partir de la comunicación que encuentro entre un espacio y yo como espectador, o entre dos personas o más que transmiten entre sí un mensaje en colectivo, tomar elementos clave y modificarlos a mi favor para diseñar algo que se sumerja en su energía acumulada que vive palpitante en un espacio y su entorno.