El pajaro de fuego - Igor Stravinsky

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Colección de cuentos musicales

~~~J.epot7b "U11a colección para leer y escuchar co11 la mejor música para 11.iíios,jóvenes y mayores"

Un joven viajero vive inquietantes sucesos en los que aparecen extraordinarios personajes. Música de Igor Stavinsky. Cuento de Carmen Santonja. Nanado por Femando Palacios. Orquesta Filarmó1úca de Gran Canaria, dirigida por Adrian Leaper.

[IJ - [[] Música con narración: 39' 5" []] - [TI] Música sin el texto: 21 ' 10"

~1~ AGRUPARTE producciones


l gor Stra vinsky


Colección "La Mota de Po/Fo" "El Pájaro de Fuego " I" Edición, 1998 2" Edición, 2002 © de la música: lgor Stravi11sky © del texto: Carmen Santonja, 1998 © de la.\· ilust radone.f: JestÍs GablÍ11 , 2002

Igor Stravinsky Cuento de Carmen Santonja Narrado por Fernando Palacios

AgrupArte Producciones Apdo. Correos 585 - 01080 \litoria-Gasteiz 7]:: 945 148 385 •Fax: 945 144 224 E-mail: editorfr1/ @agruparte.com

hllp: llww\\'.ag ruparte.com © AgmpA/'/e, julio de 2002 Director artístico: Fernando Palados Director editorial y producción: Pat.ri del Campo Secretaría: Lourdes J\guirreztíbal Coordinación: lker Glz.. de Garibay ISBN: 84-95423-26-X Depósito Legal: \11-363102 Impreso en Gl'(ifitec, S.L. CD: Sonopress lberme11101y, S.A.

Queda prohibida, salvo excepción pre11ista en la ley, cualquierforma de reproducción, distribución, c01111111icació11públict1y1ra11 .\jOrmaci611 de esta obra sin contar con la m1Jorizació11 de los titulares de propiedad i111elec1Ual. La infracción de lo .~ derechos mencionado.\· puede ser constitutilia de delito comra la pmpiedad intelectual (a rts. 270 )' sgts. Código Penal). El Centro Espwlol de Derechos Reprogrtíficos 11ela por el respeto de los citados derechos.

Orquesta Filarmónica de Gran Canaria dirigida por Adrian Leaper ilustrac iones, Jesús Gabán


Eran las ocho de la tarde de un día de primavera cuando Maurice Latour, joven viajero francés coleccionista de insectos, deambulaba sin rumbo por el Parque Nacional de Garajonay, en la isla de La Gomera. Estaba completamente perdido. Había viajado hasta allí con la perversa intención de cazar a la Cleopatra Canaria, que no es una señora, sino una mariposa endémica de las islas y, por tanto, especie protegida.


A tal efecto, llevaba escondido en la mochila un mariposero plegable, por si se topaba con un guarda, y había rehuido Jos caminos y rutas marcados, contraviniendo los consejos de todas las guías consultadas. Sabía que el centro de acogida a los visitantes caía hacia el norte, pero había despreciado con suficiencia la idea de llevar una brújula, y no había forma de guiarse por las estrellas en aquella Laurisilva permanentemente nublada por la condensación de los vientos alisios y poblada de árboles retorcidos y fantasmagóricos . ...Música: Introducción A pesar del agotamiento, Maurice no daba tregua a sus pies, buscando una salida antes de que la oscuridad fuera completa. Pero la noche, como todos sabemos, es implacable, siempre cae a su hora; y en un bosque de la era terciaria como aquel, la noche no cae, la noche se precipita, y los sonidos que la acompañan son diferentes, ambiguos .. . }


¿Os habéis dado cuenta? No era el crij-craj de ramas secas que se quiebran, ni el uh, uh, uh de las rapaces nocturnas, ni el ris, ris de pequeños reptiles que se arrastran ... era algo más; algo, sin duda extraordinario, iba a ocurrir.

Ji

- "¡ ¡¡ AAAAHHHH !!!.. . ¿Pe-pe-pero que es a-quequello?"- no pudo por menos de exclamar Maurice. Prendida en una rama de un árbol, una esfera luminosa del tamaño de una naranja resplandecía, alumbrando su entorno con una luz misteriosa. Maurice comenzó a dar vueltas alrededor del misterioso objeto, comprobando, asustado, que no sólo brillaba, sino que ardía, y que a intervalos regulares su esfera se dilataba y contraía, engordaba y se encogía, como si palpitase.

Ji

Ji

Y, de pronto ... .... Música: El Pájaro de Fuego y su danza .. . ¡¡Se echó a volar!!

Ji

[111 Perdone, maestro, si interrumpo en este punto tan ...

peculim; pero enseguida voy a dejarles tocar mucho rato solos, sin que moleste mi voz. Ahora tengo que darle unas ligeras pautas al público para que escuche y se imagine la escena siguiente a su gusto. Metámonos en la acción. La bola de fuego se echa a volar. El resplandor oculta su forma real, pero Maurice cree vislumbrar unas alas de mariposa y, desechando temores, decide dar caza como sea a ese insólito lepidóptero que no mencionan los libros. Y así comienza su accidentada carrera, enarbolando el cazamariposas. Representaos la escena, la música os ayudará. Os sugiero que escuchéis los ascendentes y rápidos arpegios de


-

la orquesta como si .fiteran frustrados pases del mariposero, y la risa de las flautas como la de la mariposa al ver el ridículo que hace el pobre Maurice. ¿Preparados todos? Pues ... ¡a la carrera, maestro!

.... Música: Variación del Pájaro de Fuego

WJ ¡¡Zas!! ¡La atrapó por fin! Maurice se arrodilló junto al cazamariposas para observar a su presa, y si no lanzó un alarido al verla fue porque el propio susto le paralizó la garganta: lo que había cazado era un ser humano alado,


una mujer diminuta y completa con alas de pájaro cubiertas de plumas ardientes como el fuego. Permanecía muy quieta en medio del mariposero, mirándole desafiante con sus ojos que echaban chispas más ardientes que sus plumas. Lo único que hizo , tras aguantar un rato la mirada atónita del muchacho, fue cubrir su desnudez cerrando las alas de fuego sobre su cuerpo, en un gesto que nada tenía de pudoroso y sí mucho de desafío. Pasado el primer susto, Maurice, que no había visto nunca una preciosidad semejante, no pudo por menos de exclamar: - "¡Quién fuera enanito!" -" ¿Para qué?" -dijo el ser prodigioso en un tono desconfiado y arisco. Sin sorprenderse de que hablara, el muchacho contestó: - "Pues para ... para ... estar a tu altura."

- "¿Para qué?" - "Para casarme contigo." - "¿Y qué te hace a ti pensar que yo me casaría con un homúnculo desplumado? ¿Acaso puedes tu volar como yo? ¡Mira! .. " Y, abriendo sus alas, se proyectó hacia arriba como un cohete y escapó por el cono del cazamariposas dejando un agujero de bordes chamuscados. Maurice intentó atraparla con la mano , sin conseguir más que arrancarle una pluma que apretó en su puño sin darse cuenta de que le estaba quemando. ¡Hasta ese extremo se hallaba embrujado nuestro amigo!


También vosotros vais a sentiros embrujados por lo que vais a escuchar: una de las páginas más inspiradas y románticas de toda la música del siglo XX. Maestro, si no le importa vamos a repetir desde un poco antes del. .. llamémosle "golpe definitivo del mariposero ",para que la transición al tema maravilloso se aprecie como es debido y no se pierda su efecto mágico. ...Música: Ronda de las princesas La mujer pájaro había desaparecido. Desolado, Maurice la buscó por todas partes, llamándola con voz lastimera:

ya? No ; era la luz que ella irradiaba, porque ella estaba allí, ante sus ojos, más resplandeciente que nunca. )l Sí; más resplandeciente que nunca y más ... ¡qué raro!: ¿era sólo una ilusión óptica, o había aumentado de tamaño? - "¿Por qué no me devuelves la pluma que me arrancaste?" -le preguntó ella con una voz dulcísima, muy diferente a la que había empleado antes . - "¿La pluma? ¿Qué pluma?" - "La que llevas encerrada en la mano derecha, extiéndela."

- "¿Dónde estás? ¡Vuelve, por favor!" Y siguió errando como alma en pena por el bosque en busca de aquel ser prodigioso que le había fascinado. ji Así vagó largo rato hasta que, agotado y hambriento, se sentó en el suelo para descansar. El sueño se apoderaba de él, se dormía ... cuando ... ¿qué era eso?, ¿estaba amaneciendo

Así lo hizo Maurice y, en efecto: en la palma de su mano estaba la pluma que, al verse libre, voló por el aire hasta desaparecer. ji - "¿No tienes un espejo?" - "No, no acostumbro ... "


- "Pues ven, acércate para mirarte en mis ojos." Maurice, tímidamente, acercó su rostro al de la mujerpájaro y se sumergió en unos ojos inmensos, corno dos lagunas de aguas transparentes . Del fondo de aquellas lagunas emergió su imagen duplicada y embellecida, que al fin se deformó,

Ji

Maurice se dio cuenta, de repente , de que aquel ser misterioso era una bruja. Al tiempo que se lo gri taba a la cara, se levantó de un salto y, al hacerlo , el sombrero se le caló has ta la cintura. 11

- "Pero, ¿qué pasa?" Intentó sacárselo de encima y entonces se le cayeron los pantalones. - "¿Por qué se me caen los pantalones?" Bajó los brazos para sujetarse el calzoncillo, pero llegó tarde.

Luego, las lagunas se redujeron para volver a ser los grandes ojos de una mujer pequeña, ojos de mirada turbadora ... ojos de mirada inquietante ... ojos de mirada maligna ... ojos de mirada perversa ... la mirada inequívoca de una ... ¡¡¡BRUJA ! !!

Ji

- " ¡Me estoy achicando!" La cazadora y la camisa se le escurrieron de los hombros hasta el suelo, y el pañuelo tipo "safari" que llevaba al cuello se le deslizó hasta las caderas , lo que Maurice aprovechó para anudárselo como taparrabos. Su reducción iba imparablernente rápida. Cuando consiguió salir de debajo


del sombrero, trepó la muralla que formaban sus ropas alrededor de su cuerpo completamente desnudo (porque el taparrabos no se le sostuvo ni tres segundos) y descalzo, pues sus pies salieron limpiamente de los calcetines y las botas. - "Pero, ¿qué me has hecho, bruja maldita?" - "¿No querías ser enanito para casarte com11igo? Je, je .. ." Maurice empezó a dar vueltas sin saber hacia donde dirigirse ... sólo sabía que tenía que ir hacia el norte. - "¡Si hubiera estrellas! ... Tendré que guiarme por mi intuición".

Y como eso era algo que no tenía , se fue al revés : hacia el sur. Las carcajadas de la pájara-bruja le acompañaron hasta que su eco se disolvió en la noche. Ahora volvamos a la música: maestro, si 110 le importa vamos a repetir desde el acorde "del susto": porque 110 me negaréis que os habéis asustado, he oído más de un grito por ahí. ... Música : Danza infernal del rey Katchei No había corrido ni dos metros, cuando vio venir hacia él una bestia feroz: una es pecie de rinoceronte enano de cuerpo negro y metálico dotado de un temible cuerno. Hizo un giro a la derecha pero } un segundo monstruo le cortaba el camino. Buscó angustiado otra salida y ji apareció un tercero. No tenía escapatoria por ningún lado, porque a los tres se le añadió } un cuarto monstruo, al que siguió ji un quinto y, para rematar, } un sexto. ¡Estaba rodeado! , ¿qué hacer? ... y, entonces, } de un brinco inverosímil traspu so el


cerco infernal y corrió , gritando a voces insultos contra sí mismo y la maldita bruja. - " ¡ ¡¡ Cándido, estúpido, pánfilo ! ! !" , f'i da, paJara, ,. , - " ¡ ¡¡ p er pecara .11. '." ,)~1

Corría Maurice como alma que lleva el diablo, perseguido ahora por una legión de monstruos, que no eran otra cosa que insectos, aunque él no se hubiera dado cuenta, pues aún no era del todo consciente de su pequeñez. ji Al fin , nuestro amigo se vio acorralado por todas partes. Los insectos habían formado un círculo en torno a él que se cerraba, se apretaba y le empujaba hacia un pozo oscuro por donde fue precipitado sin remedio . }i

ITil Se despertó, dolorido y maltrecho, en un lugar frío y negro corno boca de lobo. No veía nada, pero sí oía los pasos acompasados y rítmicos de un número indetenninado de seres que se aproximaban.


Sus ojos se fueron haciendo a

pronto se concretaron en formas evidentes: - " ¡Hormi gas ! ¡Hormigas gigantes ... ! Pero, ¡no! , ¡no son hormigas gigantes! , ¡son hormigas corrientes!, lo que pasa es que me he vuelto más que enano: ¡soy diminuto! " Se dio cuenta entonces de que había sido perseguido no por una legión de monstruos de la noche, sino por una multitud de insectos: desde el Esco robajo Rinocero11t/J hasta aquel horrible monstruo que había dado el último empujón y que ahora identificaba como una

Mantis Religiosa .

La interminable procesión de hormigas, cargadas con bultos más grandes que ellas, desfilaba ante sus ojos sin reparar en su presencia. Cuando pasó la última, Maurice, como un autómata, se incorporó a la fila sin poder evitarlo. Era como si obedeciese un a orden superior que no podía oír, pero que le obligaba, a pesar del rechazo de su cerebro, todavía humano. ... Música : Canción de cuna Caminaba Maurice tras el fúnebre cortejo, a través de un laberinto de galerías subterráneas. El camino ascendía hasta un agujero ~,_' \ en lo alto, del que procedía una débil luz, y ~ por el cual iban entrando las hormigas una una. }

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Cuando le tocó el turno, atravesó el misterioso umbral y se encontró en una

.--


gran estancia en cuyo centro , iluminado por un rayo de luna, se alzaba sobre un montículo el trono de la majestuosa y terrible hormiga reina.

Ji

Las hormigas desfilaban ante la mirada atenta de su soberana y luego se abrían en abanico para depositar Ja carga, según su especie, en el lugar adecuado; porque, además de "salón del trono" , aquello era una enorme y ordenada despensa.

Ji

Maurice intentó escabullirse, pero sus miembros ya no obedecían las órdenes de su cerebro, sino el inapelable mandato de un ente desconocido. Lo único que consiguió fue coger una piedrecita del suelo (para él un peñasco enorme) y cargárselo al hombro, en un intento de pasar desapercibido. Pero al llegar a la base del montículo, en vez de seguir la hilera de hormigas y escaparse, comenzó a ascender la cuesta que conducía hasta el trono, obligado por esa desconocida fuerza.

Ji


Maurice se detuvo ante La Gran Hormiga temblando como un flan. No era sólo su pavoroso aspecto lo que le hacía temblar, sino un "no se qué" de humano que se vislLimbraba tras su cara de insecto: algo que le recordaba a la mujerpájaro y a la pájara-bruja. 11

- "¿Qué pretendes que haga yo con esa piedra, majadero?" Maurice soltó el pedrusco balbuciendo excusas .

Pero lo hizo. Se miró en los ojo s de múltiples facetas de La Hormiga Reina que le devolvieron su imagen múltiple, y pudo contemplar a un multiplicado Maurice Latour que tenía ya mucho más de hormjga que de hombre.

- "Es que ... yo soy nuevo aquí y no sé qué debo hacer.. . porque, ¿sabe usted?, en realidad soy un hombre .. ."

. - "¡Otra vez tú! ¡Bruja-mujer-mariposa-pájarahorm1ga!"

- " ¡Un hombre! ¡Qué ridícula pretensión! ¿Te has mirado en un espejo?"

- "Ni bruja, ni mujer, ni mariposa , hormiga."

Maurice retrocedió espantado, presintiendo lo que iba a venir después.

- "Pues ¿quién eres?,¿ vienes de otra dimensión?, ·de otra galaxia?" ¿

- "Anda, acércate y mírate en mis ojos." - " ¡i ¡ NOOOOO !! !"

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pájara, m

. - "No, simplemente, cómo te diría yo ... soy un ser supenor, cosa que tu pobre inteligencia de hombre no podrá entender jamás."


- "¿Y qué va a ser de mi ahora?,¿ voy a vivir aquí el resto de mi vida? , ¿en un hormiguero?" - " ¡Bah! la vida de un insecto es corta. Pero puedes irte, yo sólo quería bajarte los humos." - "¿Irme? Pero ¿cómo? .. . ¿por dónde? ... " - "Puedes salir al exterior por el rayo de luna que realza mi excelsa majestad." - "Pero ¿cómo voy a salir por un rayo de luna?"- dijo, mirando hacia arriba ... Entonces distinguió una cuerda transparente de hilo cristalino. - "Ya has visto cómo. Ahora que eres casi una hormiga no te será muy difícil trepar por ese hilo de telaraña." - "¡¡TELARAÑA!! ¡¡ARÁCNIDOS AHORA!! " - "No ternas , la araña que tejió ese hilo ya está sacrificada y troceada en la despensa. ¡Vamos!, ¡sube!, date prisa, que estás creciendo y no vas a caber por la rendija."

Maurice comenzó a trepar con una agilidad pasmosa, pero a medida que subía, la ascensión le resultaba más difícil. El cuerpo le pesaba y las manos se le escunían de la cuerda. Crecía y crecía. El último tramo fue una pesadilla: a veces, por cada centímetro que avanzaba se deslizaba dos, teniendo que recuperar lo perdido afianzándose incluso con los dientes. Cuando al fin logró alcanzar la rendija, comprobó con espanto que no cabía por ella, pero pudo sacar una mano al exterior y agarrarse a unos matojos que crecían en su borde. Confiando en que resistiera, soltó el pegajoso hilo de la telaraña quedando colgado de una mano en el vacío, mientras con la otra intentaba agrandar el agujero, desterronando la tierra con las uñas. Al fin logró abrir un boquete por el que pudo salir todo arañado, magullado y maltrecho, quedando a cuatro patas sobre el suelo, jadeante y sin ánimo para levantarse. Pero, sacando fuerzas de flaqueza, logró erguirse sobre sus dos pies mientras pensaba:


- "Todavía soy un hombre ." ....Música : Canción de cuna (final) Así permaneció un rato contemplando la luna que, abriéndose paso entre las perpetuas brumas de Garajonay, brillaba en toda su plenüud inundándole con su luz . ... Música: Final (comienzo) Y lo mismo que las mareas crecen bajo la influencia de la luna, así nuestro amigo comenzó a crecer... y crecer... y crecer... hasta alcanzar su estatura normal. )l SAL DEL RAYO DE LUNA QUE TE PUEDE TRASTORNAR BUSCA SOMBRA OPORTUNA SIGUE LA ESTRELLA POLAR

lfiJ ¿De dónde venía aquella voz? ¡Era un ángel! ¡Un ángel resplandeciente de alas de fuego , cuya figura ocupaba casi todo el firmamento! Su rostro maravilloso era el mismo


de la mujercita-pájaro que le había enamorado, el mismo de la bruja perversa que le había hechizado, incluso en La Hormiga Reina había podido vislumbrar un eco de aquellas facciones ... - "¡¡¿Quién eres?!! ¡¡¿Un ángel o un demonio?!!" No recibió respuesta. Aquel extraordinario ser señaló el camino a seguir y se fue desvaneciendo poco a poco. - "¡Se ha ido!" Sí, se había ido, pero en su lugar, esplendorosa y magnífica, lucía la Osa Mayor, señalando Ja situación de la modesta pero, tan útil, Estrella Polar, que siempre marca el norte. Maurice encontró sus ropas a pocos pasos de allí y se vistió a toda prisa. El cazamariposas lo arrojó con fuerza lejos de sí. - "¡Se acabaron los lepidópteros!"


Emprendió el camino, rogando a Dios que las brumas no volvieran a cubrir el firmamento ocultándole las estrellas, y pensando en todo lo que le había ocurrido. Pero ... ¿le había ocurrido realmente? ¿No habría sido todo una espantosa pesadilla? Sí, tenía que haber sido una pesadilla. Entonces sintió un agudo dolor en la palma de su mano derecha, como una quemadura. Abrió la mano despacio, con miedo: ¿qué era aquello? Se alumbró con una linterna y... allí estaba, grabado a fuego en su piel, el dibujo perfecto y nítido de una pluma: la pluma que había arrancado a la mujer-pájaro al principio de la aventura. ¡Todo había si do verdad!, pero ¿quién le iba a creer? ... La respuesta le llegó, de no se sabe donde, en la voz del ángel.

.... Música: Final

NUNCA CUENTES TU HISTORIA PORQUE SE REIRÁN DE TI GUÁRDALA EN TU MEMORIA ES MUCHO MEJOR ASÍ.


El Pájaro de Fuego Música: Jgor Stra vinsky Tex ro: Carmen Santonja Intérpretes: Orquesta Filarmónica de Grnn Canari a. Dir. Adrian Leaper.

1lustraciones : Jestís Gab;ín Fecha de grabación: 20, 2 1 y 22 de agos to de 1997

Lugar de grabación: '' La Na ve'· (El Cebadal ). Las Palmas de Gran Canarin Producción: M ichael Pu n on (Inglaterra ) Ingeni ero ele sonido: rvlartín Atkin son (Inglaterra )

Grabación de la voz, montaje y mezcla: René de Coupaud Fecha de grabac ión de la voz y mezcla: 13. 14, 15 y 20 de marzo de 1998 Voz: Fern ando Palacios

Di stribu ye AgrupArt e Producciones

A GRUPARTE producc iones

Un libro con el cuento completo de El pájaro de ji1ego acompañado de dibujos especiales que ilustran algunas de sus aventuras. En el texto hay unos símbolos que indican dónde hay que dejar espacio para que suene la música sola } . y otros para que le des a la tecla ele pause. Lll Un disco compacto que narra e l cuento a viva voz junto a la mú sica que compuso Stravinsky para el ballet del mismo nombre, interpretada por una orquesta sinfónica. Es una música para escuchar con mucha atención y descubrir con emoción cómo cuenta a su manera (con sonidos, silencios, ritmos , me lodías ... ) la historia que nos describen las palabras. Hay momentos en que suena sólo la voz, otros suenan la voz con la música y otros la música sola.

Productor: Patxi del Campo

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Este cuento musical en forma de libro-di sco tiene varios componentes:

ORQUESTA FILARMON ICA IH t:RAi'/( .'\N"\IU .1

En la segunda parte del di sco hay una versión sin narrador para que tú seas el cuentacuentos, ele esta manera te servirá la música ele "karaoke". Fíjate bien en las indicaciones de los cortes del disco para saber en qué momento ele la mú sica estás y los lugares donde tienes que dete ner y arrancar la mú sica con la tecla ele pause. 11


El ru so Igor S travinsky es uno de los músicos más importa ntes y ori gin a les de todo el sig lo XX. D esde e l comi enzo, su carrera musica l fu e una co nstante so rpresa para todos, como corresponde a su extraordin ario genio para co mponer mú sicas co mpl etamente nu evas. E l públi co y la críti ca se qu edaron admi rados co n el gran co lorid o de El prijaro de .fi1ego. Los mú sic os que interpre tan es te c ue nto mu sica l pertenece n a la Orquesta Filannónica de Gran Canaria. Una de sus acti vidades son los Conciertos Esco lares, donde toca la mejor mú sica para niñ os y jóvenes, mezc lada con c uentos y narraciones .. . igual que en es te libro-di sco. El director, Adrian Leaper, los guía ya q ue es tá mu y interesado en difundir la mú sica sin fó ni ca entre todos los públi cos. Además diri ge y anima muchos de los co nciertos para niños y program a c ic los ele mú sica para todos. E n la actu alidad es Director Titul ar de la Orques ta de Radi o Telev isión Espa ñola. Cannen Santonja fu e un a arti sta polifacéti ca. Estudi ó pintura con su padre, que era nieto del fa moso pintor Edu ardo Rosales. También estudió mú sica en el Conservatorio , de ahí que toca ra e l piano, la guitarra y cantara muy bi en. Le encantaba tocar a Scarlatti , coger seta s, viaj ar a países lejan os y leer cue ntos junto a su mesa camilla con brase ro . Jesús Gabán , el ilustrador, as isti ó durante algun os años a las c lases ele dibujo del C írcul o ele Be ll as Artes de Madrid para luego dedi carse a la ilustrac ión ele libros in fa ntil es. Ha obtenid o muchos premi os, e ntre ellos e l Lazarill o y e l Premio Nacional de Ilustració n Infantil y Juvenil en 1984, 1988 y 2000. El narrador de esta obra, Fernando Palacios, es asesor didáctico ele la Fundac ión Orquesta F il armónica ele Gran Canaria y la Institución Príncipe el ~ Yi ana ele Nava rra , donde ha montado más de sesenta producc iones ele Conciertos Escol ares. Ultimamente ha compuesto la ópera para todos los públi cos El Planeta Ana(f'a bia.

. E;i 19 19'.años después de escribir la mú sica del ballet El p(tjaro de.fuego , Strav insky se lecc iono lo mej or en un a Suite con s iete partes diferentes, qu e es la que fi gura en este cl1sco. Co mi enza ele un a fo rm a sini estra , sigil osa y osc ura , como a nun cia ndo qu e algo perverso a me naza: es la Introdu cció n f l] . Leves deste ll os luminosos nos so brecooen e hipnoti za n (es fasc in ante lo qu e hace e l " mago" St rav insky con los colores de la orq ~esta , o sea, con la combm ac1ón ele los timbres ele los instrumentos). La llu via ele so nidos ele la brevísim a Danza del Prija ro de Fu ego f2] nos es pabil a del tran ce antenor y nos ll eva a la Va riación del Prij aro de Fuego [3]. Es la ocasión idea l para que se lu zcan bail ando el clarinete, la fla uta y el fl autín .

. La Ronda de las Prince.1·as [4] es e l momento más amoroso y sereno ele la obra : di álogo de me lod ías in olvidables e ntre el oboe, el clarin ete y el fago t. Todo parece rebosa r fe li c idad cuando , el e repe nte, nos cl a n un a auté nti ca bofetada: es la bárbara Danza h!f'enwl del Rey Katschei [5], donde la mú sica se enloquece y grita a .pl e no pulm ó n. Si no to mas precauciones es p os ible que te arrastre tras e ll a. El contraste llega con la Canción de cww [6] cantada por el fagot con contestac iones del oboe. Esta tri ste y lánguid a nana ti ende un pu ente te mbloroso y místi co en las cuerdas qu e enla za co n la melodía del Final [7], un a especie ele ca nto anti guo que se rep ite en forma el e va ri ac ión ha sta a lca nzar un so brecoge dor co lofó n.


Cuando Igor Stravinsky tenía veintisiete años, los famosos Ballets Rusos le encargaron que compusiera la mú sica para un b a ~l.e t. Stravi nsky eli gió como ar? un~ ~:H o u'.~ se nc1llo_Y tradi cional cuento ru so ll amado El pCIJaro de fu ego. Su h1 ston a es es ta. E l p 11nc1pe lva n caza un ex traño páj aro de fu ego con ca ra de muj er. Al dejarlo en libertad e l paJaro le r~ga l a un a de sus plumas para que le sirva de ay ud a en caso de estar en peh gro . Po~o despues, el príncipe se enamora de un a princesa cauti va de un os terribles monstru o.s. !va n, P? r medi o de la pluma mág ica, ll ama al pájaro de fuego que acude en su ayuda. A l fm sa len tnun fa ntes y ce lebran sus bodas" . Sin embargo, el cuento que ha escrito para este di sco- libro Carme 1~ Santonj a muestra muy importantes diferencias con relación al tradi c i.onal : en v~z de un pnnc1pe ru_so hay un cazador de mariposas francés; en vez de transcurri r en un fn o_bosque.' ~e desa11oll a en e l Parque Nac ional de G arajonay, en la isla d ~ la G?mera ; e l pap rno n g 11~ a l pasaª. se~· un ex tra ño personaje, mezc la de mariposa, muj er, pápra, bruj a, hormi ga y angel. Co111c1den ambos cuentos en la aparición de monstruos y en los enamoramientos, pero e l resto es mu y di stinto . El tex to y la mú sica se fund en de tal manera que es difíc il saber qu é fu e antes'. si la mú sica o el cuento. Esta adaptac ión fu e e nca rgo de la Fundac ión Orquesta Fil armóni ca de Gran Canaria para sus ciclos de "Co nci ertos Esco lares''.

La Co lecc ión de libro-c ue ntos La Mo ta de Polvo ha sido creada para ini c iar y acostumbrar a niños, jóvenes y mayores en el "arte de leer, ver y escuchar" : de leer hi stori as y cuentos nuevos y ant ig uos, de ver los dibujos especialmente hechos para dichas narraciones y de escuc har la mejor y más adecuada mús ica de orq uesta sinfónica y de otros estil os. Lo primero que hay que tener en cuenta es que esta combinación de cuentos, música e ilustraciones prete nde produc ir un efec to de e nca nta mi ento y crear un a corri ente de confi anza e ntre el disco-libro y sus lec tores-oyentes, y, sob re todo, crear el hábito de ate nder con los ojos y con los o ídos .

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Los c uentos mu sica les se pu eden escuchar muchas veces; cada vez que lo haces puedes desc ubri r cosas nu evas y aprender de ell os. Ta mbi én te brindamos la pos ibilidad de redac ta r los cuent os a tu ma nera y añadirles 1mís aventuras con los mi smos personajes y otros nuevos qu e se te oc urra n. Vea mos algun as acti vid ades qu e se puede n hacer a partir de la obra El páj aro de f uego, qu e co ntie ne este vo lumen:

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En la pági na anteri or hay un esquema de l cuento orig inal: desarró ll alo entero de ta l manera que se pueda leer con la música. Ten en cuenta que debe haber bue n equil ibri o entre di álogos, descri pc iones y acc ión.

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Como la música y la acció n dramática ti enen una estrec ha relación, seguro que eres capaz de hace r varias cosas co n tus manos: Iº) llevar con un dedo la dirección de las melodías que más te gusten: 2º) dirigir la música de tal forma que se "vean" los sonidos y la acción en tus movimientos: 3º) que tu s manos sean los ac tores del cue nto e n un a representac ión ''111anu al''.

Del mi smo modo que lo haces en e l aire. tambi én podrás dibujar los movimientos en una hoja de papel, te quedará un interesante cuadro abstracto. Quien dice un dibujo dice un "co lla ge", un montaje plástico con obje to s, fotos , periódi cos, desperdicios , e tc. ¿Có mo te im aginas las esce nas de l c ue nto que no es t<Í n ilu stradas e n e l libro ?:

¿Qué momentos de la mú sica te gusta n más?¿ Y del cuento ?

pín talas.

¿Co n qué dibujo te quedarías?

Analiza la música de l cuento. Mientras esc uchas puedes pensar en los instrumemos que va n aparec iendo. en las melodías que toca n, en los efectos que hacen y e n las cosas que se rep ite n. Apréndete la melodía del ángel y C<Í ntala con él.

¿Q ué quieren decir estas palabras : e ndé mica, lauri sil va , alisios. lepidóptero?

Entre varios podéis co mponer otra mú sica para este mi smo c ue nt o y después la podé is tocar con vuestros instrumentos (no importa si a lgunas veces se parece a lo que toca la orquesta) ¿Qué tal quedaría un conci e rto donde la orquesta es tu viera formada po r los in strumentos didácticos y el narrador fuera alguno de vosotros? Esta música es muy buena para danzar, pues fue creada para un ballet. Si os di stribuís bien las escenas y los personajes podéis hacer una representación en toda reg la, con vestuario, decorados , danzas y movimi ento.

¿Por qué Maurice había ido a la Gomera? ¿Dó nde está esa is la? ¿C uántos tamaños y formas difere ntes adopta e l personaje fem e nino del cuento? ¿Q ué fra se dice e lla varias veces para hipn oti zar a Maurice? ¿Q ué otro famoso personaje de cue ntos di sminuye de tamaño? ¿Has visto alguna vez los insectos que sa len en este cuento?: dibújalos. ¿Q ué dirección seña la la Est re lla Polar? ¿Por qué los ojos de la hormi ga devuelven imágenes múltiples? ¿Qué ti ene que ver la luna con las mareas? ¿C uál es so n los mom entos más fu ert es de la mú s ica?¿ Y los más sua ves? ¿Por qué es tán s ituados prec isa mente en esos si tios? ¿Qué instrumentos son los protagonistas de la Ca11ció11 de c1111a? ¿Cómo es posible que la Ca11ció11 de c1111a sirva como mú sica de hormi guero? ¿Cuál es e l in strumento que entona la canc ión del ángel? ¿Có mo se ll ama cuando la mi sma melodía se toca de maneras di fe rentes? ¿Qué otras obras de Stravinsky co noces?


Cuento con narración [ I) [2] [3) [4) [5] [6] [71 [8]

"Eran las ocho de la tarde de un día de primavera ... " " ¡Se ec hó a vo lar! " - Danza de l pájaro de fuego Vari ac ión del pája ro de fuego Rond a de la s princesas Dan za infernal de l rey Katschei Ca nción de cuna " Así permaneció un rato contemplando la luna .. ." Final - " Nunca cuentes tu hi storia ... "

Música sin texto para la narración [9] [ 1O] [ 11] [ 12]

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Introdu cc ión Danza de l pájaro de fu ego Variac ión del páj aro de fuego Ronda de las princesas Danza infernal del rey Katschei Canci ón de Cun a Final

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Cuento de l'JlJsky Nart Carrne¡¡ lldo Por F. San ton . ernand !la oPa/ac·Ios


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