Retroalimentación general elementos a reforzar a la luz de la experiencia

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RETROALIMENTACIÓN GENERAL Curso Pedagógico de Formadores(as) de Escuelas de Verano 2015

A continuación se detallan algunos elementos para retroalimentar al grupo de la 1ª versión de formación pedagógica para Formadores de Escuela de Verano 2015, a la luz de la experiencia formativa con ellos: a) En torno a la caracterización de los participantes de un curso o taller: Uno de los elementos más comentamos y que siguen causando dudas o dificultades dice relación con la caracterización adecuada de los (futuros) participantes de un curso o taller. A continuación, entregamos algunos elementos complementarios a los entregados en las sesiones: Es necesario acotar lo más posible la caracterización de los futuros participantes de los cursos: -­‐ Evitar poner rangos amplios de edad. Si es el caso de que efectivamente habrá mucha variedad, reconocer cuál va a ser el rango predominante, por ejemplo: mayoritariamente adultos jóvenes entre 20 y 35 años. -­‐ Identificar si son personas a quienes se les exige formación anterior o no. -­‐ Explicitar si son personas que vienen a formarse para algún servicio o si la formación será para el desarrollo personal de la fe. Además, es importante tener en consideración que la caracterización de los posibles participantes no es un ejercicio banal para la planificación: esto se hace justamente para que, luego, la redacción de objetivos, selección de contenidos y estructuración metodológica de las sesiones sea coherente con dicha caracterización. No es lo mismo pensar la propuesta metodológica para un grupo de jóvenes que viene a formarse como Animadores de Pastoral Juvenil que a adultos mayores que vienen a profundizar su experiencia de fe. Finalmente, en la línea de las diversas reflexiones planteadas por ustedes en los foros, los invitamos a realizar en las primeras sesiones, algún ejercicio que les ayude a terminar de caracterizar a los participantes del curso: puede ser a través de algún ejercicio de presentación, compartir algunas preguntas u de otra forma que les parezca adecuado y que no les quite tiempo en exceso. Ahora bien, es importante enfatizar que este ejercicio de contextualización de la caracterización a los participantes que efectivamente llegaron al curso o taller, se hace para que el formador(a) pueda revisar y adecuar la planificación a la realidad de las personas que llegaron a su curso o taller. No olvidar, además, que dicha caracterización y adecuación de la planificación no es un ejercicio que se haga sólo al inicio del curso: es una acción permanente, dado que durante el desarrollo del curso el formador(a) va conociendo más profundamente las experiencias previas de los participantes, y de acuerdo a ellas, va adecuando, acotando o complementando, los contenidos o metodologías.


b) Principales logros visualizados a partir de los ejercicios evaluativos de las sesiones 2 y 3: −

Se logró estructurar objetivos considerando contenidos y habilidades, lo que permite focalizar el desarrollo de las sesiones y el curso en general.

Se reconoce también que en la elaboración de los objetivos, si hace un esfuerzo por considerar el protagonismo de los participantes del curso, visualizado principalmente en la redacción de los mismos en clave de logros a concretar por ellos.

Se reconoce bastante bien logrado la definición de un hilo conductor general para el curso, principalmente en el ámbito de los contenidos: ello permitirá que los participantes puedan seguir de mejor manera el curso y ver la interconexión entre una sesión y la siguiente.

Respecto de la secuenciación, se reconoce bastante bien lograda respecto de los contenidos, avanzando desde aquellos más generales a los más específicos.

En cuanto a la estructuración metodológica de las sesiones, se observa que supieron distinguir bastante claramente los 3 momentos de una sesión (inicio, desarrollo y cierre) y aplicarlos a la estructuración de las sesiones en sus planificaciones. Aunque, dentro de los tres, se reconoce una cierta pobreza en el diseño del momento de cierre (se comenta más abajo).

Además, se visualiza el esfuerzo por acotarse al tiempo disponible en cada sesión y en el curso en general, lo que permite, a su vez, seleccionar de mejor manera los contenidos y las metodologías más adecuadas y realmente abordables.

Finalmente, queremos valorar y felicitarlos por el tiempo dedicado a preparar sus cursos, por el trabajo seriamente hecho y la acogida de las retroalimentaciones de sus respectivos tutores.

c) Principales desafíos o elementos por mejorar a partir de los ejercicios evaluativos de las sesiones 2 y 3: -­‐

Se visualiza como necesario poder acotar mejor los contenidos para que sean realmente abordables en el tiempo disponible: es necesario explicitar más concretamente cuál es el contenido específico de la sesión o del curso, evitando definiciones demasiado generales. Entre más preciso, es más posible de abordar. Por ejemplo, para un curso de Ministros Extraordinarios de la Eucaristía, el contenido no es la Liturgia (así dicho en genérico), sino podría ser la comprensión y sentido de la liturgia en el Concilio Vaticano II (Sacrosanctum Concilium).

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Para ello, es fundamental que los contenidos sean precisados por el contexto en el que se van a trabajar, el que está dado ya sea por las características de los participantes, por el tipo de curso (si es formación para un servicio o es para laicos en general, si es introductorio o de profundización, etc.) y el tiempo disponible. Es decir, tener claro desde dónde se parte (realidad de los participantes) y hacia dónde quiero llegar.

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En la elaboración de objetivos y estructuración metodológica de las sesiones, tener cuidado con integrar también el desarrollo de habilidades, es decir, el saber hacer o


saber aplicar, evitando caer en una exagerada perspectiva cognitiva del desarrollo de los contenidos. -­‐

A pesar de una correcta secuenciación de contenidos, se visualiza el desafío de mejorar la secuenciación de las habilidades, progresando de aquellas iniciales a otras de nivel más avanzado (por ejemplo, conocer, comprender, analizar). Para ello, se puede consultar la taxonomía de Bloom o la presentación de power point compartida en el curso titulada “50 destrezas a enseñar”.

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En el ejercicio de justificación respecto de la definición de los elementos fundamentales del curso y la secuenciación de contenidos, es necesario aclarar que ésta implica dar razón o argumentos de por qué se definieron los objetivos y secuenciación de contenidos de determinada manera y no de otra. Y no sólo describir lo que se hizo.

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Es necesario, además, cuidar la coherencia entre los objetivos propuestos para el curso y la propuesta metodológica por sesiones. En algunos casos no había conexión entre uno y otro elemento. Es importante no caer en la tentación de planificar para tener claro qué voy a hacer actividades, sin tener en consideración si ésta colabora efectivamente el logro del objetivo propuesto.

En relación al momento de desarrollo dentro de una sesión, es importante no identificarlo sin más con la exposición lectiva de contenidos. Aunque se use una presentación de power point para hacerlo más “ameno” o más fácil de seguir, el desarrollo de la sesión no debe reducirse a una relación pasiva con los participantes del curso, como si ellos no tuvieran nada que aportar para el desarrollo de los contenidos que se quieren trabajar. Es necesario buscar otras estrategias que ayuden a desarrollar habilidades, profundizar la experiencia de fe, no solo ni principalmente el desarrollo o adquisición de contenidos conceptuales. Ello nos permitirá dar pasos para concretar aquellos que el Plan de Formación dice respecto del rol formador(a): que éste es un facilitador de los procesos de aprendizajes de los laicos, y no un conductor o protagonista. Ello no logra plasmarse aún suficientemente en las propuestas metodológicas de las sesiones presentadas en la evaluación de la tercera sesión.

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En el diseño del momento de cierre, queremos también invitarlos a ser más creativos metodológicamente hablando, evitando limitar este momento a plenarios o respuesta de dudas finales, con lo cual no se logra el objetivo de este momento. Para ello, es bueno recordar que el sentido del cierre es poder hacer síntesis conjunta de los aprendizajes y tomar conciencia (metacognición) de lo realizado y aprendido.

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Finalmente, dos últimas reflexiones bien sencillas y concretas: es importante que la planificación sea lo suficientemente clara como para que otros la entiendan y la puedan aplicar también. No sólo un punteo de actividades. Ello les ayudará a definir con claridad y a poder reutilizar para actualizar, planificaciones anteriores.

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Sentido de la calificación: por último, comentar la importancia de resignificar el sentido de las calificaciones. Estamos inmersos en un modelo educativo que ha resaltado exageradamente los resultados, como si fuera lo más importante y el objetivo último de la educación o de la formación, en este caso. Es importante que nosotros no repliquemos ello, ni al ser estudiantes ni como formadores. La calificación quiere ser una objetivación de un proceso de aprendizaje y lo importante es esto, no la nota.


Por último, queremos agradecer una vez más su participación, esfuerzo, deseos de aprender y de seguir formándose para dar un mejor servicio a nuestros hermanos en la fe en comunión con la Iglesia. Estas nuevas herramientas que hemos conocido y desarrollado juntos, no son el fin en sí mismo, ni la “panacea”. Son eso, herramientas. que quieren ayudarnos a preparar mejor los espacios formativos que nos han encargado, sabiendo que siempre el objetivo último de ellos, es profundizar nuestro encuentro con el Dios de Jesucristo y mejorar nuestro servicio a los hermanos. Es bueno profesionalizar nuestro servicio como formadores, pero que no pierda el horizonte último, que no es generar aprendizajes cognitivos, sino ampliar las experiencias humanas y religiosas (Cfr. Capítulo 6 de DA sobre la Formación de los Discípulos Misioneros).

Tutores pedagógicos: Patricio Araya Karina Ramos Jeannette Riquelme Jorge Vargas

Coordinación general: Catalina Cerda Asesoría técnica: Mariana Galaz


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