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CON SABOR A HISTORIA

William Harvey

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El descubrimiento de la circulación de la sangre

L

a letalidad del Covid-19, ha podido ser disminuida gradualmente, gracias a conocimientos médicos que tuvieron su punto de partida en el lejano siglo XVI, con el descubrimiento de la circulación de la sangre, toda vez que las autopsias practicadas en Pérgamo, Italia, en marzo de 2020, revelaron que la causa de las muertes es la coagulación intravascular diseminada o trombosis múltiple, que obstruye el torrente sanguíneo a los pulmones. Remontémonos pues, a aquellos tiempos.

Cuando en 1578 nació William Harvey en Inglaterra, a pesar de la obra de Paré y de tantos otros, reinaba todavía una ignorancia grande acerca del funcionamiento del cuerpo humano. Este gran médico inglés era hijo de padres acomodados, que pudieron enviarlo a estudiar a Padua, escuela italiana de medicina mucho más adelantada que las inglesas de aquel entonces.

De allí, Harvey fue a Bolonia y a Pisa, y por último volvió a la Universidad de Cambridge, donde ya había estudiado. Obtuvo el título de doctor en las universidades de Padua y

Cambridge. En Italia tomo lecciones de Galileo sobre temas de física y oyó a Fabricio Acquapendente, quien había descubierto que las venas tienen unas válvulas que impulsan la sangre en cierta dirección.

Los más eminentes doctores examinaban el cuerpo humano y permanecían perplejos ante el fluido de la sangre y el calor del cuerpo, sin poder explicarse estos fenómenos.

Sin embargo, ya se había sospechado la verdad. Algunos italianos dicen que un tal Cesalpino fue el que realmente llevó a cabo, antes que Harvey, el importantísimo descubrimiento de la circulación de la sangre.

Pero hay otros autores que se lo atribuyen al español Miguel Servet, que nació en 1511. Harvey demostró que cuando el corazón se contrae envía la sangre por el cuerpo, en un acompasado sístole-diástole. Fue un gran hallazgo, que se completó con el descubrimiento de los capilares por Malphigi, famoso anatomista italiano.

No podemos menospreciar a los médicos de los siglos pasados; muchos de ellos vislumbraron en realidad algunas de las grandes verdades q ue han tenido apl i cación práctica en nuestros días.

La obra de William Harvey hizo dar un gran paso a la cirugía; pero sería la tarea de los cardiólogos que lo han sucedido a través de los siglos, profundizar y perfeccionar aquellos conocimientos rudimentarios, hasta llegar a los trasplantes de la válvula cardíaca por el doctor Claude Bernard.

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