ojo con El uso y compra de audífonos de ayuda auditiva

Si requieres de un dispositivo de ayuda auditiva, recuerda tener en cuenta los siguientes aspectos:

Debes ser diagnosticado con pérdida auditiva (leve, moderada o severa) por un profesional de la salud.

Ser prescrito por un profesional de la audición o audiólogo.

De acuerdo al tipo de pérdida auditiva, se prescribe con un diseño y tamaño de audífono especifico (Retroauricular, Full concha, media concha, mini canal, RITE).

De acuerdo al diseño y tamaño, puede variar de la siguiente manera:

Si tienen este diseño, NO DEBEN contar con registro sanitario (dispositivo médico sobre medida).

Si tienen este diseño, SI DEBEN contar con registro sanitario otorgado por el Invima (Dispositivo medico Estándar).

Cómo cuidar tus audífonos:

Hacer limpieza al audífono diariamente y mantenimiento con regularidad, un cuidado apropiado ayuda a que las condiciones auditivas sean óptimas, extiende la vida del audífono y asegura una correcta higiene.

Manipula los audífonos con cuidado.

Guarda los audífonos en un lugar seguro que este seco y fresco.

Cambia las pilas de los audífonos con frecuencia para que no se queden sin potencia de repente.

Apaga el audífono cuando no se esté utilizando. Si no se va a usar por un largo periodo, retirar la pila.

Remueve el cerumen del audífono para prevenir un funcionamiento defectuoso temporal o daño permanente.

Limpia el audífono utilizando el cepillo pequeño o el pañuelo suave que viene con él.

Si no puedes limpiar el audífono completamente, debes solicitar ayuda al profesional de la audición.

Cambiar los filtros con frecuencia para que no se acumule cerumen o suciedad.

El cerumen acumulado puede impedir que los sonidos vayan del audífono al oído medio.

Contacta a tu doctor regularmente para que limpie tus canales auditivos.

No utilices el audífono:

En la ducha

Al nadar

Cuando uses el secador, spray para el cabello u otro tipo de spray.