Conclusión

Conclusión

La situación de la pandemia mostró la falta de preocupación que existe por el espacio público en Quito, es un tema cultural pero también de administración; es cierto que durante una pandemia y crisis mundial existen otras prioridades en la salud y economía, pero al menos la segunda se puede tratar a través de estrategias urbanas que contemplen el espacio público.

En aspectos estadísticos, con o sin pandemia, los recursos que se destinan a el mantenimiento y desarrollo de espacio público son mínimos, llama la atención que para el año 2022 el municipio dispone de 830.9 millones de dólares, de los cuales 516 se destinarán a proyectos para el desarrollo de Quito, uno de ellos el corredor exclusivo EL Labrador – Carapungo, justo tras superar los puntos más críticos de la pandemia.

Elisa Puga (2021) menciona que “La baja presencia de autos durante la cuarentena evidenció cuánto espacio se dedica a este modo de transporte; mientras que el aumento de peatones mostró el poco espacio que existe para ellos, y el incremento en el uso de la bicicleta, la carencia de infraestructura que facilite su circulación.” (p.39) lo cual es un llamado de atención a entender como vivimos la ciudad y la facilidad que se les da a los habitantes, en un contexto de pandemia la movilidad evidencia la falta de el espacio público primordial, las aceras. Si nos faltan aceras no se diga otro tipo de espacios o equipamientos.

Isaac Flores T.