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OPINIÓN
El drama de las listas de espera disparadas es la exculpación de las responsabilidades
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Luis de Haro Director general de iSanidad
No se pueden ganar elecciones con la inflación o los costes de la energía como están ahora. Está claro que en estos temas veremos cambios antes de las elecciones generales. Sin embargo, sí se pueden ganar elecciones con las listas de espera disparadas. No esperemos cambios importantes en este problema.
La sociedad ya ha asumido que las listas de espera están disparadas. Nadie se va a manifestar por ello y, por tanto, no va a afectar a los votos que necesita el partido del próximo gobierno. Las listas de espera ni suman ni restan votos para ganar elecciones, simplemente es un tema que no se tiene en cuenta. Las listas de espera disparadas afectan a los médicos, no a todos, y a los pacientes. Los consejeros también se preocupan, pero poca gente más. Afortunadamente hay más personas que no sufren por las listas de espera que las que sí sufren por ello.
A partir de ahí, ¿qué solución se puede aplicar? La experiencia de los últimos 40 años dice que no se hará nada que tenga un fuerte efecto. Para maquillar el problema los gobiernos se inventarán una nueva forma de contabilizarlas y así no se podrá comparar con épocas anteriores. Parece que se puede empezar de cero continuamente.
Los médicos de atención primaria llevan reclamando una solución muchos años y no se ha hecho nada. Los especialistas se echan las manos a la cabeza, pero nadie les escucha. Es evidente que las listas de espera no abren tantos telediarios como el precio del gas o el de las frutas y verduras.
En el Ministerio aducen que es una cuestión de las comunidades, y en las comunidades aseguran que el Ministerio no hace nada. Nadie termina de asumir que no se puede seguir con las listas de espera disparadas. Y la culpa… la culpa es siempre de otros.
Un paso más hacia el reconocimiento de las especialidades odontológicas
El pasado mes de julio se aprobó, por parte del gobierno, el nuevo Real Decreto de especialidades. Gracias a este nuevo decreto se conseguirá «establecer la formación transversal en todas y cada una de las especialidades de ciencias de la salud».
España era de los pocos países de Europa que no reconocía la ortodoncia como una especialidad sanitaria. Al igual que el resto de la medicina, la especialidad de ortodoncia surge por la necesidad de una formación específica y de una experiencia concreta para lograr resultados excelentes en los tratamientos. Los ortodoncistas de hoy en día nos hemos estado formando en diferentes programas, durante años en universitarios y escuelas en España, pero sin el reconocimiento por parte del Ministerio de educación y sanidad.
Este nuevo avance permite a los jóvenes odontólogos de nuestro país tener una formación posgraduada, adecuada y parecida al resto de los países de la Unión Europea. Esto permite que cualquier profesional de España que quiera irse al extranjero tenga la cualificación y formación homologada para su ejecución fuera de nuestro país. Además, favorece a que nuestros profesionales puedan acceder a las mismas condiciones salariales y laborales que cualquier otro profesional de la odontología de cualquier otro país de la UE.
Este reconocimiento de la ortodoncia como especialidad buscar tener un beneficio común, no solo para los profesionales de la ortodoncia. También es beneficioso para los propios pacientes. Es importante que cuando estos acudan a consulta sepan que están siendo tratados por un especialista. Hoy en día sería inimaginable acudir al médico y que no estuviera especializado en su campo, con la ortodoncia pasa lo mismo.
Por ello, desde la SEDO queremos mostrar nuestro apoyo y continuar defendiendo la creación de especialidades dentro del campo de la odontología, y por supuesto, de la ortodoncia, algo que llevamos haciendo durante estos últimos años y que consideramos fundamental para seguir creciendo y desarrollándonos en el campo de la salud bucodental.
Además, como presidente de la SEDO y de la comisión de Especialidades del Consejo General de Odontólogos, me gustaría resaltar el esfuerzo que se está llevando a cabo por parte de este último organismo, así como de la Conferencia de Decanos y diversas sociedades científicas, trabajando diariamente en la consecución de las especialidades.
Dr. Juan Carlos Pérez Varela
Presidente de la Sociedad Española de Ortodoncia y Ortopedia Dentofacial (SEDO)