PARTE INDIVIDUAL. RESUMEN
JAIONE GONZÁLEZ VITORES
DIDÁCTICA DE LA LENGUA EN LA EDUCACIÓN INFANTIL “Enseñar a leer y escribir” Este capítulo, describe como se trata la enseñanza de la lectura y escritura asumiendo las aportaciones del enfoque constructiva. En una sociedad alfabetizada, los usos de la lengua escrita ( uso práctico, uso científico y uso literario), son los que marcan la pauta para que el maestro/a planifique las actividades de enseñanza-aprendizaje. El principal interés para planificar los contenidos que deben aprenderse, se dirigirá a la organización de situaciones en las que sea posible tener experiencias funcionales de los distintos usos de la lengua escrita. El uso de la lengua de manera real, con finalidades comunicativas no ficticias, aporta cantidad de oportunidades para reflexionar sobre ella y profundizar en su conocimiento. Las actividades para leer y escribir pueden realizarse teniendo en cuenta las diferentes agrupaciones posibles y su repercusión en la organización del espacio. Se contemplan estas formas de trabajar: El gran grupo. El grupo de reducido y las parejas de trabajo. El individuo. Las actividades en gran grupo ( compartir la audición de un texto, dictar un escrito, hallar soluciones y plantear estrategias, organizar tareas y asumir responsabilidades, etc.), exigen una disposición determinada del espacio que invite a la interacción. Se debe prever una disposición en círculo, para facilitar la situación comunicativa que persigue el trabajo en grupo. Las actividades en pequeño grupo o parejas de trabajo, facilitan la interacción cooperativa y permiten una intervención del adulto ajustada. Para que el aprendizaje sea significativo, los grupos deben aportar variedad de niveles y evitar las disparidades, de modo que puedan compartir zonas de desarrollo próximo, y la interacción pueda enriquecerse. Las actividades individuales, pueden plantear también tareas en las que cada uno deba enfrentarse a ellas autónomamente. Los rincones, son una de las estrategias utilizadas para que los niños trabajen individualmente cuando sea conveniente. El maestro es el responsable de la planificación, organización y evaluación de las distintas actividades que se plantean en el aula, y de que crear las condiciones favorables para posibilitar el aprendizaje. Debe diseñar situaciones reales de uso de la lectura y escritura, debe observar e interpretar las posibilidades de cada alumno y debe interactuar para favorecer y mejorar los aprendizajes. Los materiales que se usan en la escuela, reflejan el planteamiento que los maestros hacen de la enseñanza y aprendizaje de la lengua escrita. Al seleccionar los materiales deben de tenerse en consideración dos aspectos fundamentales: Que tengan sentido y que sean lo más reales posibles.
PARTE INDIVIDUAL. RESUMEN
JAIONE GONZÁLEZ VITORES
Leer y escribir con sentido delante de los niños, con sentido para ellos, ejerciendo de lector y escritor experto, es fundamental para introducir, potenciar, desarrollar y mejorar el proceso de aprendizaje de la lectura y escritura. Cuando el maestro ejerce de modelo de escritor, no debe olvidarse nunca de hacer visibles estas tres fases: Planificar, textualizar y revisar. El maestro debe tener en consideración sobre todo la fase de revisión, con fines eminentemente didácticos, a partir de los cuales se producen los aprendizajes significativos en los niños. Por último, tener en cuenta la evaluación, cuyo objetivo básico es recoger información que permita ir regulando la interacción pedagógica, ajustarla y adecuarla para conseguir que los niños avancen en su aprendizaje. La práctica de la evaluación como regulación, supone una actitud permanente de observación participativa.
APORTACIONES DE LA LECTURA.
La importancia de los criterios en las agrupaciones de los alumnos, ya que para conseguir un aprendizaje significativo, debemos tener en cuenta la necesidad de agrupar alumnos de niveles superiores e inferiores, para poder completar las posibilidades de aprendizaje de todos los niños. Evitar así las agrupaciones de alumnos de un mismo nivel, o niveles muy dispares, ya que la información se movería en una sola dirección.
El aprendizaje de la lectura y escritura a través de materiales reales y situaciones significativas y funcionales para los niños. Ofrecer materiales en el aula, que el alumno sea capaz de relacionar con el exterior de modo que sean fuente de interés para ellos fuera del marco escolar. ( Marca de galletas preferidas, carteles de películas, nombres de dibujos,etc.)