30 minute read

Lenguaje y Introducción

Next Article
Glosario

Glosario

Introducción

El desarrollo del lenguaje es uno de los objetivos fundamentales de la educación escolar, ya que es la principal herramienta a través de la cual el ser humano construye y comprende el mundo que lo rodea y entra en diálogo consigo mismo y con otros. El lenguaje es la forma que toma nuestro pensamiento, nos relaciona con los demás y nos hace parte de una comunidad cultural. Un objetivo primordial del proceso educativo es que los alumnos adquieran las habilidades comunicativas que son indispensables para desenvolverse en el mundo y para integrarse en una sociedad democrática de manera activa e informada. Durante la enseñanza básica se busca llevar estas habilidades a un grado de desarrollo que permita al alumno valerse independiente y eficazmente de ellas para resolver los desafíos de la vida cotidiana, adquirir nuevos conocimientos y enfrentar con éxito las exigencias de la vida escolar.

Advertisement

El pensamiento crítico y reflexivo se sustenta sobre un desarrollo sólido del lenguaje. Este es el entramado que permite pensar con claridad, ampliar los conocimientos, expresarlos y relacionarlos entre sí. Las dos dimensiones en que se manifiesta el lenguaje verbal, lo oral y lo escrito, constituyen elementos determinantes del desarrollo cognitivo y son herramientas de aprendizaje para los alumnos en todas las asignaturas. Un buen dominio de la lengua materna es la base de una buena educación y la clave para el éxito en el ámbito escolar.

Al terminar la educación básica se espera que los niños sepan expresar su pensamiento coherentemente para resolver situaciones cotidianas y para llegar a acuerdos con otras personas a través del diálogo; así como también exponer con soltura y claridad su punto de vista o sus conocimientos en la conversación o frente a un público. Además, se busca que sean lectores autónomos, capaces de informarse, aprender y entretenerse a través de la lectura de textos diversos; y que puedan expresarse por escrito, tanto en la comunicación personal como académica, para ordenar, clarificar y trasmitir creativamente sus ideas en diferentes contextos. Estos aprendizajes sientan la base para desarrollar el pensamiento creativo, entendido como la capacidad de imaginar, generar y relacionar ideas y cuestionarse sobre el mundo que los rodea para contribuir a él.

Una dimensión importante que enriquece la visión de la asignatura es que el lenguaje incorpora al estudiante a su comunidad cultural. La enseñanza formal refuerza la apropiación del patrimonio cultural oral y escrito, que forma parte de un bagaje común en que reconocemos nuestra identidad y nos abrimos a la complejidad del mundo. Durante el proceso educativo los estudiantes comprenden que la lengua construye una cultura de la cual forman parte, que está en permanente transformación y que ha creado obras de significado profundo para ellos y para la sociedad. Para que esta apropiación ocurra es necesario que el niño desarrolle, desde los primeros años, la curiosidad y el gusto por la palabra. En esta etapa, esto implica experimentar los diversos usos del lenguaje hablado y escrito, y comenzar a conocer y apreciar tanto el legado de la tradición oral como las obras literarias universales y nacionales. En este sentido, los Objetivos de Aprendizaje buscan familiarizar al estudiante con una variedad de obras de calidad de diversos orígenes y culturas, propiciando el disfrute y presentándolas como un modo de incentivar en los alumnos el interés y el hábito de la lectura

En relación con el enfoque de la asignatura, los Objetivos de Aprendizaje mantienen el enfoque comunicativo del marco curricular anterior, es decir, apuntan al desarro-

llo de las competencias comunicativas, que involucran conocimientos, habilidades y actitudes. Esta aproximación se basa en la experiencia universal de la adquisición y desarrollo de la lengua materna, que resulta de la interacción con otros en una diversidad de situaciones comunicativas durante todo el proceso de crecimiento de la persona. De acuerdo con este enfoque, la asignatura busca desarrollar competencias que se adquieren participando en situaciones reales de lectura, escritura e interacción oral, en las que los individuos tienen necesidad de comprender lo producido por otros o de expresar aquello que consideran importante. En otras palabras, los alumnos deben estar inmersos en un ambiente lingüísticamente estimulante. El enfoque didáctico que deriva de esta visión concibe la interacción oral, la lectura y la escritura como situaciones comunicativas en que el conocimiento de la lengua y la corrección idiomática se ponen al servicio de la comunicación. Además, dado que el alumno está en permanente crecimiento personal y social, necesita desarrollar competencias comunicativas progresivamente más complejas. Es por esto que los Objetivos de Aprendizaje buscan promover amplias oportunidades y situaciones que requieran la comprensión y la producción abundante de textos orales y escritos gradualmente más desafiantes.

En el marco del enfoque comunicativo, el aprendizaje implica tanto el trabajo individual y reflexivo de cada alumno como la interacción y colaboración entre ellos. Desde esta perspectiva, el estudiante es un actor protagónico del proceso de aprendizaje que se involucra en actividades diversas en las que debe interactuar con sus pares para negociar significados, ensayar soluciones, autoevaluarse y aprender de sus errores. El rol del docente, por su parte, es de facilitador, monitor y modelo: es decir, crea un clima que promueve el aprendizaje, ofrece a los estudiantes múltiples oportunidades de usar el lenguaje y de reflexionar acerca de lo aprendido, y se constituye en un ejemplo, al mostrar usos reales y contextualizados de las competencias que se quieren lograr.

TIC

Las TIC se integran al desarrollo de los Objetivos de Aprendizaje de los tres ejes de la asignatura. Internet provee la posibilidad de acceder a todo tipo de textos y constituye una de las herramientas indispensables para la búsqueda de información y para aprender a investigar. Por otra parte, la redacción de correos electrónicos, la elaboración de blogs y presentaciones digitales, ofrecen oportunidades para ejercitar la escritura en contextos reales de comunicación que son atractivos para los niños y propios del mundo actual. Asimismo, el uso de los procesadores de texto ha demostrado ser de gran utilidad para realizar tareas de escritura, porque facilita el trabajo de corrección y edición, sin requerir de la reescritura total del documento, lo que redunda en que los estudiantes se muestran más motivados frente a la tarea. Finalmente, el uso de programas para realizar presentaciones orales es un aporte para aprender a estructurar la exposición y contar con apoyo visual. Además, el acceso a material audiovisual como películas, videos y archivos de audio proporciona oportunidades para desarrollar la comprensión oral y ampliar el conocimiento del mundo. Dado lo anterior, esta propuesta curricular considera el uso adecuado de tecnologías de la información y comunicación como uno de los aprendizajes que se deben lograr en el área del lenguaje.

Organización curricular Lenguaje y Comunicación

Escuchar y hablar, leer y escribir son las actividades que conforman la competencia comunicativa de una persona y se ponen en práctica permanentemente en la vida cotidiana. En las presentes Bases, estas dimensiones del lenguaje han sido agrupadas en tres ejes –lectura, escritura y comunicación oral– que permiten describir los conocimientos, las habilidades y las actitudes involucradas en el logro de la competencia comunicativa. Esta división es artificial y responde solo a la necesidad de

A / Ejes Lectura

Es prioridad de la escuela formar lectores activos y críticos, que acudan a la lectura como medio de información, aprendizaje y recreación en múltiples ámbitos de la vida, para que al terminar su etapa escolar, sean capaces de disfrutar de esta actividad, informarse y aprender a partir de ella, y formarse sus propias opiniones. Esta experiencia marca la diferencia en su desarrollo integral, ya que los lectores entusiastas se dan a sí mismos oportunidades de aprendizaje que son equivalentes a muchos años de Leer en forma habitual permite ampliar el conocimiento del mundo, reflexionar sobre diferentes temas, formar la sensibilidad estética, alcanzar una mayor comprensión de sí mismo y aprender a ponerse en el lugar de los demás. A través de la lectura los estudiantes participan de una herencia cultural que se conserva y a la vez se transforma, se actualiza y se reinterpreta. Así, adquieren conciencia de ser miembros de una comunidad de lectores con la presentar una realidad compleja de manera organizada, para destacar los aspectos principales que debe desarrollar el alumno en los primeros seis años de la enseñanza básica y abordar los contenidos propios de la asignatura aplicándolos a situaciones reales. No obstante la división en ejes, se espera que los objetivos se aborden de manera integrada para desarrollar efectivamente las compe-

enseñanza1 .

tencias comunicativas. que comparten un bagaje común, conversan acerca de sus descubrimientos y opiniones, y colaboran para crear significados.

Los lectores competentes extraen y construyen el significado de los textos escritos, no solo a nivel literal sino también a nivel interpretativo. Comprender un texto implica extraer información, inferir o interpretar aspectos que no están expresamente dichos, y evaluarlo críticamente. Esto supone que el lector asume un papel activo, relacionando sus conocimientos previos con los mensajes que descubre en la lectura. De acuerdo con esta visión, la enseñanza en la educación básica debe asegurar que el niño está en las mejores condiciones para comprender un texto. Esto implica considerar aquellas dimensiones que la literatura reciente reconoce como las más relevantes en el desarrollo de esta competencia, y que se explican a continuación:

CoNCIENCIA foNoLÓGICA Y DECoDIfICACIÓN

Hoy se sabe que la iniciación a la lectura comienza en el hogar y durante los años de educación preescolar. En esta etapa se produce un crecimiento significativo del vocabulario, se inicia la conciencia fonológica, se adquieren las primeras experiencias con textos impresos, se empieza a comprender el principio alfabético y comienza el interés por aprender a leer. En primero básico los niños adquieren el conocimiento del código escrito y aprenden a leer y a comprender los textos de manera independiente.

La conciencia fonológica consiste en comprender que las palabras se componen de sonidos y que se descomponen en unidades más pequeñas, como las sílabas y los fonemas. Los niños no cuentan con esta habilidad en las etapas iniciales de su desarrollo, dado que en el lenguaje oral estas unidades tienden a superponerse, lo que dificulta percibir los límites de cada una dentro de la continuidad del discurso2. La conciencia fonológica es un importante predictor del aprendizaje de la lectura, ya que es necesaria para desarrollar la decodificación.

La decodificación es el proceso a través del cual se descifra el código escrito para acceder al significado de los textos. Para aprender a leer, se necesita conocer la correspondencia entre grafema y fonema, es decir, comprender el principio alfabético. En español la relación entre estos elementos es regular: cada letra, por lo general, representa siempre el mismo sonido, por lo que conviene abordar esta correspondencia de manera explícita3. Estas Bases Curriculares consideran objetivos que apuntan al desarrollo de la conciencia fonológica y definen el logro de la decodificación como objetivo para el primer año de enseñanza básica. Este logro requiere, a la vez, que los alumnos estén insertos en un ambiente letrado, donde los textos tengan un sentido y que la aproximación a la lectura sea hecha de manera estimulante y motivadora.

FLuIdEz

La fluidez lectora consiste en leer de manera precisa, sin conciencia del esfuerzo y con una entonación o prosodia que exprese el sentido del texto4. Un requisito para que los estudiantes se conviertan en buenos lectores es lograr que lean fluidamente, tanto en silencio como en voz alta. El lector que alcanza la fluidez deja de centrar sus esfuerzos en la decodificación y puede enfocar su atención en lo que el texto comunica5. Es importante ayudar a los estudiantes a desarrollar la fluidez durante los primeros años de la enseñanza escolar y existe hoy el consenso de que esto se logra, sobre todo, mediante la lectura abundante de textos reales, actividad que se complementa con la práctica de lectura en voz alta6. En estas Bases se incluye la fluidez como objetivo hasta 6° básico, en aras de reforzar la comprensión lectora.

VOCABuLArIO

El vocabulario juega un papel determinante en la comprensión de lectura, ya que si los estudiantes desconocen las palabras, es difícil que accedan al significado del texto7. Por otra parte, si conocen más palabras, pueden leer textos más largos y de mayor complejidad, lo que a su vez les permite acceder a más palabras y adquirir nuevos conceptos. Así se genera un círculo virtuoso: los estudiantes que dominan mayor cantidad de palabras están capacitados para leer y escuchar materiales más sofisticados, comprenderlos mejor y acceder a más fuentes de información. También en la producción oral y escrita quien tiene un amplio repertorio de palabras puede referirse con mayor precisión a la realidad que lo rodea y expresar con mayor riqueza lo que desea comunicar8 .

La cantidad de palabras que conoce un individuo determina las posibilidades de acceder a nuevas palabras o a nuevos significados para las ya conocidas9. En consecuencia, se ha dado énfasis a este aspecto en estas Bases Curriculares, estableciendo como un objetivo permanente el que los estudiantes aprendan estrategias para enfrentar términos desconocidas, y usen las nuevas palabras en sus producciones orales y escritas.

CONOCIMIENTOS PrEVIOS

El concepto de conocimientos previos, en relación con la lectura, se refiere a la información que tiene el estudiante sobre el mundo y a su dominio del vocabulario específico del tema del texto10. También incluye la familiaridad que tiene el alumno con la estructura de los textos y sus experiencias previas con diferentes géneros discursivos. Los conocimientos previos que tienen los estudiantes influyen directamente en la comprensión de lectura, ya que el lector entiende un texto en la medida en que conecta la información que lee con lo que ya sabe para construir activamente el significado11 . En directa relación con lo anterior, la cantidad de conocimientos previos que los estudiantes tienen sobre un tema es un poderoso indicador de cuánto podrán aprender sobre el mismo. Por esta razón esta propuesta curricular enfatiza la importancia de que los alumnos lean en abundancia y adquieran el hábito de informarse autónomamente, como un modo de incrementar sus conocimientos y su familiaridad con los textos. Esto los llevará a una mejor comprensión de la lectura y a la vez, a incrementar sus conocimientos en todas las áreas.

motIvACIÓN hACIA LA LECtURA

Ser un buen lector es más que tener la habilidad de construir significados de una variedad de textos, también implica mostrar actitudes y comportamientos que son el sustento para continuar una vida de lectura. La actitud de los estudiantes frente a la lectura es un factor que debe tenerse en cuenta cuando se quiere hacer progresar a los alumnos en la comprensión de los textos escritos. La motivación por leer supone la percepción de que es posible tener éxito en las tareas de lectura, lo que permite enfrentar con una actitud positiva textos cada vez más desafiantes12. Como se ha dicho, dedicar mucho tiempo a la lectura aporta más vocabulario y más conocimiento del mundo; esto, a su vez, lleva a una mejor comprensión y, por ende, a mayor motivación por leer13. Por lo tanto, para desarrollar la habilidad de comprensión de lectura, es deseable que los alumnos adquieran desde temprana edad el gusto por leer y que tengan abundantes oportunidades de hacerlo. Desde esta perspectiva, la selección adecuada de las obras, el acceso a numerosos textos y el uso de bibliotecas y recursos propios de las TIC, constituyen elementos que se destacan en esta propuesta curricular.

EstRAtEGIAs DE CompRENsIÓN LECtoRA

El aprendizaje de estrategias de comprensión permite enfrentarse a la lectura de manera metacognitiva y reflexionar sobre las dificultades que surgen al leer. Las estrategias cumplen una doble función: por un lado, permiten subsanar problemas de comprensión y, por otro, contribuyen a construir una interpretación profunda de los textos. Existe consenso de que los lectores que utilizan flexiblemente las estrategias de comprensión son más activos en la elaboración de significados, lo que redunda en que retienen mejor lo que leen y son capaces de aplicar a nuevos contextos lo aprendido14. En consecuencia, esta propuesta curricular incluye Objetivos de Aprendizaje para desarrollar estrategias que contribuyen a la autonomía y el espíritu crítico.

IMPOrTANCIA dE LOS TExTOS

Formar lectores activos y competentes, capaces de recurrir a la lectura para satisfacer múltiples propósitos y para hacer uso de ella en la vida cultural y social, requiere familiarizar a los alumnos con un amplio repertorio de textos literarios y no literarios. El conocimiento y la familiaridad que tenga el estudiante con textos de múltiples ámbitos contribuye decisivamente a su formación integral.

Las obras literarias, además de ser una forma de recreación, constituyen un testimonio de la experiencia humana, que abre un espacio a la reflexión sobre aspectos personales, valóricos y sociales, lo que da lugar a la discusión y análisis de estos temas con los estudiantes. Frente a la experiencia literaria, esta propuesta busca que

el estudiante elabore una respuesta personal, por lo que resulta inconveniente abordar los textos como medios para ejemplificar teorías o clasificaciones. Las tareas de comprensión propuestas avanzan gradualmente desde la relación con las vivencias propias hasta profundizar en el contexto de la obra, para aportar al estudiante una posibilidad de enriquecer su mundo personal.

Por su parte, la lectura de textos no literarios abre la posibilidad de comunicarse y conocer lo que piensan los demás, aprender sobre diversos ámbitos y acceder a informaciones de interés para satisfacer una variedad de propósitos. La lectura informativa, además, es una actividad de fuerte presencia en la vida escolar, ya que constituye el medio por el que se comunica a los estudiantes gran parte de los conocimientos propios de las asignaturas. De acuerdo con lo anterior, los Objetivos de Aprendizaje consideran el análisis de una variedad de textos, que progresa desde la obtención de información hasta la evaluación crítica de la intención y confiabilidad de la información proporcionada.

Escritura

La escritura satisface múltiples necesidades: permite reunir, preservar y transmitir información de todo tipo, es una instancia para expresar la interioridad y desarrollar la creatividad, abre la posibilidad de comunicarse sin importar el tiempo y la distancia, es un instrumento eficaz para convencer a otros, y es un medio a través del cual las sociedades construyen una memoria y una herencia común15. Dado lo anterior, la asignatura de Lenguaje y Comunicación busca que los estudiantes dominen las habilidades necesarias para expresarse eficazmente y usen la escritura como herramienta para aprender. Escribir es una de las mejores maneras de aclarar y ordenar nuestro pensamiento. A diferencia de la comunicación cara a cara, lo que se busca en la escritura es comunicar algo a un interlocutor que no está presente, por lo que se necesita un esfuerzo especial para expresar las Se considera que para trabajar adecuadamente con los objetivos de estas Bases, la selección de los textos es de gran relevancia, debido a que las habilidades de lectura se desarrollan progresivamente cuando los estudiantes se enfrentan a textos de complejidad creciente. La dificultad de estos se establece a partir de criterios que consideran su forma y contenido. Desde el punto de la vista de la forma, la complejidad de los textos aumenta por una mayor extensión de las oraciones, un uso más frecuente de subordinaciones o porque su estructura es menos familiar para los estudiantes. En cuanto al contenido, los textos progresan al abordar temas cada vez más abstractos o que requieren mayor conocimiento del mundo y al incluir un léxico de uso poco habitual. Tomando en cuenta estos aspectos, los textos seleccionados para desarrollar los objetivos de lectura deben presentar un equilibrio entre ser comprensibles –para que los alumnos se consideren competentes frente a la tarea– y, a la vez, lo suficientemente desafiantes como para hacer que los estudiantes

progresen y se sientan estimulados. ideas de manera coherente. En el texto escrito es necesario explicar y describir elementos que en la comunicación oral se pueden deducir de claves no verbales –como el tono de voz y el volumen– o del contexto mismo. Esto exige al escritor ponerse en el lugar del destinatario, lo que significa un gran desafío para los alumnos de los primeros años. La idea de que se escribe para algo y para alguien es un principio que orienta al estudiante sobre cómo realizar la tarea.

Por otra parte, el acto de escribir obliga a reflexionar sobre el tema en cuestión y, de esta manera, se modifica, precisa y aclara las ideas y los conocimientos que se tenía previamente. Al redactar, el estudiante resuelve problemas, se pregunta, identifica elementos conflictivos, reconsidera aspectos que creía tener resueltos y reelabora sus conocimientos. Así, al aprender a escribir, también se

aprende a organizar y elaborar el pensamiento, a reflexionar sobre el contenido de lo que se va a comunicar y a estructurar las ideas de manera que otros las puedan comprender. En conclusión, al escribir, el estudiante no solo comunica ideas, sino también aprende durante el proceso16 .

El aprendizaje de la escritura involucra varios procesos, situaciones y conocimientos que se describen a continuación:

EsCRItURA LIbRE Y EsCRItURA GUIADA

Estas Bases incorporan dos aproximaciones para que los alumnos desarrollen las habilidades de escritura. La escritura libre promueve la experimentación con diversos formatos, estructuras, soportes y registros que los alumnos pueden elegir y utilizar de acuerdo con sus propósitos comunicativos. A través de esta práctica se promueve la idea de que la escritura es una herramienta eficaz para reflexionar, comunicarse con los demás y participar de la vida social de la comunidad. Por este motivo, se han incluido Objetivos de Aprendizaje que abordan la escritura libre para que los alumnos adquieran flexibilidad, descubran un estilo personal y desarrollen el gusto y la necesidad de escribir con diversos propósitos.

La escritura guiada, por su parte, contribuye a que los estudiantes aprendan diferentes maneras de ordenar y estructurar sus ideas de acuerdo con sus propósitos y el género discursivo en estudio. Esta aproximación permite que los alumnos se familiaricen con las ventajas y los desafíos que presenta la estructura de cada género. Para lograr lo anterior, se requiere incorporar las etapas del modelado, la práctica guiada y la práctica independiente, de modo que los estudiantes aprendan a usar los recursos para mejorar su escritura.

LA ESCrITurA COMO PrOCESO

Al leer un texto, el lector se enfrenta a un producto terminado. Sin embargo, entender realmente lo que hace un escritor significa mirar más allá del texto final. Un escritor pone en práctica acciones complejas que implican una reflexión constante durante todo el proceso de escritura17. La perspectiva de la escritura como proceso permite al alumno establecer propósitos, profundizar las ideas, trabajar con otros, compartir sus creaciones y centrarse en diferentes tareas necesarias para la producción. De este modo aprende que hay múltiples oportunidades de intervenir y modificar un texto antes de publicarlo y que cuenta con la posibilidad de obtener retroalimentación de los demás antes de lograr una versión final. En consecuencia, los Objetivos de Aprendizaje referidos al proceso de escritura están orientados a que el alumno adquiera las herramientas para convertirse en un escritor cada vez más independiente, capaz de usar la escritura de manera eficaz para lograr diversos propósitos y expresar su creatividad, su mundo interior, sus ideas y conocimientos.

MANEjO dE LA LENGuA

El aprendizaje de las normas y convenciones ortográficas solo adquiere sentido si se aborda como un elemento necesario para transmitir mensajes escritos con eficacia y claridad; es decir, los conocimientos ortográficos facilitan la comunicación por escrito, no son un fin en sí mismo18 . Esta aproximación contribuye a que los alumnos desarrollen, por una parte, la noción de que para comunicar mejor un mensaje la ortografía correcta es indispensable y, por otra, el hábito de prestar atención a este aspecto y revisar los textos con el fin de facilitar su lectura y su comprensión.

Por otro lado, el enfoque comunicativo que sustenta esta propuesta curricular considera que los conocimientos gramaticales son una herramienta para reflexionar sobre el lenguaje y sus posibilidades en contextos concretos de comunicación. Al comprender la función de las unidades de la lengua y cómo se relacionan entre sí para dar significado, los estudiantes son capaces de experimentar con ellas y, de esta manera, ampliar su comprensión y su capacidad expresiva. Por otro lado, el estudio de la gramática permite adquirir un metalenguaje que facilita la conversación sobre los textos y la revisión de los mismos. Los objetivos de la asignatura en relación con la gramática apuntan a poner estos conocimientos al servicio de la comunicación, induciendo a los estudiantes a ampliar los recursos utilizados en sus producciones escritas y orales.

Comunicación oral

Un hablante competente es capaz de comunicar un mismo mensaje de diversas maneras: quienes usan exitosamente el lenguaje manejan un repertorio de recursos que les permite elegir la manera óptima para concretar sus propósitos y, a la vez, mantener relaciones sociales positivas con otros19. Esta propuesta curricular considera que el desarrollo de la comunicación oral es un objetivo central en la educación y pone en relieve que en la sala de clases el estudiante es un actor protagónico, que utiliza el lenguaje oral como vehículo para comunicar conocimientos, explorar ideas, analizar el mundo que lo rodea y compartir opiniones.

Durante los primeros años de escolaridad, la interacción con los adultos y entre los estudiantes toma especial relevancia como medio para adquirir vocabulario y conocimientos20. Mediante la exposición oral y la discusión en clases, los alumnos se expresan y toman conciencia de que el conocimiento se construye también en la interacción, cuando responden con coherencia a lo expresado por otro, amplían lo dicho y aceptan argumentos o los contradicen, es decir, aprenden a dialogar abiertos a las ideas de otros.

Si bien los niños aprenden a hablar sin una educación formal, para que sean comunicadores efectivos es necesario estimularlos a través de interacciones enriquecedoras, diversas y significativas. Por este motivo, los presentes Objetivos de Aprendizaje apuntan a que los estudiantes sean capaces de comunicar ideas sin depender exclusivamente de elementos de la situación como gestos, miradas, movimientos o deícticos. Cuando se estimula a las personas a ampliar su discurso, estas deben usar un vocabulario preciso, complejizar las estructuras sintácticas y explicar de mejor manera las ideas, lo que impacta positivamente en su capacidad de expresión oral y escrita.

Los estudiantes necesitan aprender a adecuarse a cualquier situación comunicativa, lo que implica que sean capaces de interactuar competentemente usando tanto la norma informal como la formal. Aunque se espera que el alumno tome conciencia de cómo cada individuo adecua su lenguaje según el contexto y de que no existe solo una forma correcta de comunicarse, debe comprender también que es importante desenvolverse adecuadamente en todas las situaciones que se presentan en la vida. El manejo de la norma culta formal determina el acceso a nuevos conocimientos, promueve la movilidad social y da acceso a mayores oportunidades laborales. Dado que esta norma es la menos familiar para los estudiantes, es tarea de la escuela poner especial énfasis en que los alumnos adquieran la capacidad para emplearla de manera competente21 .

Por otra parte, las Bases Curriculares consideran objetivos que apuntan a enriquecer el vocabulario y la capacidad de comprensión y expresión en una variedad de situaciones, en concordancia con los requisitos que, de acuerdo con las investigaciones, son necesarios para desarrollar la competencia comunicativa22 .

Para desarrollar el lenguaje oral de los alumnos se debe tener en cuenta las siguientes dimensiones de la comunicación oral:

CompRENsIÓN

En la vida cotidiana los estudiantes están expuestos a una variedad de discursos orales provenientes de su vida privada, de los medios de comunicación masiva y del ámbito escolar. Para que puedan integrarse efectivamente en la sociedad es necesario que comprendan y evalúen estos discursos críticamente. Comprender implica ser capaz de asimilar el conocimiento y utilizarlo de una forma innovadora, es decir, quien comprende demuestra que entiende el tópico de un texto y al mismo tiempo puede discutirlo, ampliarlo y utilizar lo aprendido en diversas situaciones23. Comprender, además, es un requisito para evaluar un texto. Así, la comprensión oral efectiva constituye la base para el desarrollo de las competencias comunicativas y para el aprendizaje y generación de nuevos conocimientos. Con esta visión, en la asignatura se han incorporado Objetivos de Aprendizaje que buscan formar estudiantes que sean capaces interpretar y evaluar la

información escuchada, formarse una opinión sobre ella y construir nuevos conocimientos.

INtERACCIÓN

Para dialogar de manera efectiva y propositiva los estudiantes deben aprender una serie de estrategias que les permiten participar adecuadamente en la conversación: quién inicia el diálogo, cómo mantener y cambiar los temas, cuánta información entregar, cómo se intercambian los turnos de habla y cómo se pone en práctica la cortesía. Los objetivos de este eje apuntan a desarrollar una buena interacción, de manera que los alumnos se conviertan en interlocutores capaces de expresar claramente lo que quieren comunicar y lograr distintos propósitos a través de un diálogo constructivo, que permita enfrentar proyectos, crear soluciones a problemas reales y resolver conflictos.

B / Actitudes

Los Objetivos de Aprendizaje de Lenguaje y Comunicación promueven un conjunto de actitudes para todo el ciclo básico, que derivan de los Objetivos de Aprendizaje Transversales (OAT). Dada su relevancia para el aprendizaje en el contexto de cada disciplina, estas se deben desarrollar de manera integrada con los conocimientos y habilidades propios de la asignatura. Las actitudes aquí definidas son Objetivos de Aprendizaje que deben ser promovidos para la formación integral de los estudiantes en la asignatura. Los establecimientos pueden planificar, organizar, desarrollar y complementar las actitudes propuestas según sean las necesidades de su propio proyecto y su realidad educativa. Las actitudes a desarrollar en la asignatura de Lenguaje y Comunicación son las siguientes:

ExpREsIÓN oRAL

En la presente propuesta curricular se han incorporado objetivos orientados a formar alumnos capaces de expresarse en diferentes situaciones. Con este propósito se incorporan Objetivos de Aprendizaje que progresan desde la simple narración de hechos cotidianos en la interacción espontánea con los pares, hasta la presentación de un discurso informativo estructurado frente a un público24. A través de estas instancias se busca entregar herramientas que permitan a los estudiantes ampliar sus intervenciones, precisar términos, reflexionar sobre fenómenos y procesos, y compartir observaciones y experiencias, prácticas que contribuyen, además, a desarrollar su

pensamiento crítico.

DEmostRAR INtERÉs Y UNA ACtItUD ACtIvA fRENtE

A LA LECTurA, OrIENTAdA POr EL dISFruTE dE LA mIsmA Y poR LA vALoRACIÓN DEL CoNoCImIENto

A partir del interés por la lectura, las Bases de esta asignatura buscan que los estudiantes desarrollen gradualmente una actitud proactiva hacia ella, que se manifiesta en la elección de textos según sus preferencias, en la expresión de opiniones personales y en el hábito de recurrir a la biblioteca en forma autónoma, entre otras.

DEmostRAR DIsposICIÓN E INtERÉs poR CompAR-

tIR IDEAs, ExpERIENCIAs Y opINIoNEs CoN otRos.

Las Bases Curriculares buscan que los alumnos logren utilizar las habilidades de comunicación, orales y escritas, como vehículo para intercambiar ideas, experiencias y opiniones con otras personas. Como parte de este propósito, las Bases promueven tanto el interés por conocer lo que otros tienen que comunicar, como por expresar lo que se tenga por compartir.

DEmostRAR DIsposICIÓN E INtERÉs poR

ExPrESArSE dE MANErA CrEATIVA A TrAVéS dE LAs DIvERsAs foRmAs DE ExpREsIÓN oRAL Y

Las Bases Curriculares ofrecen oportunidades para desarrollar la creatividad a través de prácticas como la escritura libre y guiada, la participación en obras de teatro y la producción de dramatizaciones.

REALIzAR tAREAs Y tRAbAjos DE foRmA RIGU-

RosA Y pERsEvERANtE, CoN EL fIN DE DEsARRoLLARLos DE mANERA ADECUADA A Los pRopÓsI-

TOS dE LA ASIGNATurA.

Se requiere promover estas actitudes para que los alumnos alcancen los diversos aprendizajes establecidos para esta asignatura. Se fomentan de manera importante por medio del trabajo asociado al proceso de escritura (planificación de textos, escritura del borrador, revisión y edición) y mediante los objetivos que establecen el dominio progresivo de las convenciones de la lengua para expresar mensajes orales y escritos.

rEFLExIONAr SOBrE SÍ MISMO, SuS IdEAS E IN-

TErESES PArA dESArrOLLAr LA AuTOCONFIAN-

zA Y LA AUtoEstImA.

Los objetivos de la asignatura promueven que los estudiantes sean capaces de comunicar ideas, opiniones y experiencias con grados crecientes de elaboración, fomentando con esto la posibilidad de aclarar y elaborar sus propias ideas, sentimientos, posturas, juicios e intereses, así como de desarrollar la reflexión sobre sí mismos.

dEMOSTrAr EMPATÍA HACIA LOS dEMáS, CON-

sIDERANDo sUs sItUACIoNEs Y REALIDADEs Y

COMPrENdIENdO EL CONTExTO EN EL QuE SE SITúAN.

Los objetivos de la asignatura promueven que el alumno se enfrente a diversas realidades y conozca las acciones y motivaciones de personas y personajes por medio de la lectura, para que así crezca su comprensión del mundo y del ser humano. La escritura, en tanto, le exige ponerse en el lugar del lector, escribir para otro, darse a entender.

dEMOSTrAr rESPETO POr LAS dIVErSAS OPI-

NIoNEs Y pUNtos DE vIstA Y RECoNoCER EL

dIáLOGO COMO uNA HErrAMIENTA dE ENrIQuE-

CImIENto pERsoNAL Y soCIAL.

Los Objetivos de Aprendizaje de Lenguaje y Comunicación promueven actitudes de respeto y comportamiento cívico, tanto al fomentar la escucha atenta, como al hacer del diálogo una herramienta para conocer otras opiniones y para buscar acuerdos y puntos comunes.

referencias

1 gutHrIe, J. t. y WIgfIelD, a. (2000). Engagement and motivation in reading. En Kamil, M.L.; Mosenthal, P.B.; Pearson, P.D. y Barr, R. (Ed.) Handbook of reading research: Volume III (403-422). New York, Erlbaum.

2 vIllalón, m. (2008). Alfabetización inicial. Claves de acceso a la lectura y escritura desde los primeros meses de vida. Santiago, Ediciones UC.

3 CarreIras, m., álvareZ, C. y De vega, m. (1993). Syllable frequency and visual word recognition in Spanish. En Journal of Memory and Language, 32, 766-780.

CarreIras, m., álvareZ, C. y De vega, m. (2000).

Syllable-frequency effect in visual word recognition: evidence of sequential-type processing.

En Psicológica, 21, 341-374.

4 rasInsKI, t. v. y Hoffmann, J. v. (2003). Oral reading in the school curriculum. En Reading Research Quarterly, 38, 510-522.

5 stanovICH, K. (2000). Concepts in developmental theories of reading skill. En Progress in understanding reading. New York, The Guilford Press.

CasteJón, l., gonZáleZ-PumarIega, s. y Cuetos, f. (2011). Adquisición de la fluidez en la lectura de palabras en una muestra de niños españoles: un estudio longitudinal. En Infancia y Aprendizaje, 34 (1), 19-30. 6 KuHn, m. r. y rasInsKI, t. (2007). Best practices in fluency instruction. En Gambrell, L.B., Morrow L. M. y Pressley, M. (Ed.). Best practices in literacy instruction. New York, Guilford Press.

7 Baumann, J. f. y Kame’enuI, e. J. (2004). Vocabulary instruction: research to practice. New York, The Guilford Press.

8 staHl, s. y nagy, W. (2006). Teaching word meanings. New Jersey, Erlbaum.

9 vIllalón, m. (2008). Alfabetización inicial. Claves de acceso a la lectura y escritura desde los primeros meses de vida. Santiago, Ediciones UC.

10 marZano, r. (2004). Building background knowledge. Research on what works in schools. Alexandria, ASCD.

11 HIrsCH, e. D. (2004). La comprensión lectora requiere conocimiento de vocabulario y del mundo. En Estudios Públicos, 108, 2007. http://www.cepchile.cl/dms/lang_1/ doc_4060.html

12 mullIs, I. v. s., KenneDy, a. m., martIn, m. o. y saInsBury, m. (2006). PIRLS 2006 assessment framework and specifications, (2nd ed.). Chestnut Hill, MA., Boston College.

13 stanovICH, K. (2000). Matthew effects in reading: some consequences of individual differences in the acquisitions of literacy. En Progress in understanding reading. New York, The Guilford Press.

14 Keene, e. o. y ZImmermann, s. (2007). Mosaic of Thought. Portsmouth, Heinemann.

15 PrIor, P. (2006). A sociocultural theory of writing. En MacArthur, C.; Graham, S. y Fitzgerald, J. (Ed.). Handbook of writing research. New York, The Guilford Press.

16 Bromley, K. (2007). Best Practices in teaching writing. En Gambrell, L. y otros (Ed.) Best Practices in Literacy Instruction. New York, The Guilford Press.

17 Hayes, J. (2006). New directions in writing theory. En MacArthur, C.; Graham, S. y Fitzgerald, J. (Ed.) Handbook of writing research. New York, The Guilford Press.

18 CamPs, a. y otros. (1990). La enseñanza de la ortografía. Barcelona, Graó.

19 Byrnes, J. y WasIK, B. (2009). Language and literacy development: what educators need to know. New York, The Guilford Press.

20 staHl, s. y nagy, W. (2006). Teaching word meanings. New Jersey, Erlbaum. 21 CaZDen, C. B. (2001). Classroom discourse. The language of teaching and learning. Portsmouth, Heinemann.

22 staHl, s. y nagy, W. (2006). Teaching word meanings. New Jersey, Erlbaum.

23 BlytHe, t. (1999). La enseñanza para la comprensión. Guía para el docente. Buenos Aires, Paidós.

24 nIPPolD. m. y otros. (2005). Conversational versus expository discourse: a study of syntactic development in children, adolescents, and adults. En Journal of Speech, Language, and Hearing Research. Vol 48, 1048-1064.

This article is from: