BENEMERITA ESCUELA NORMAL “Manuel Ávila Camacho”
Curso: Conocimiento de la Entidad
Tema: Mi Primera Experiencia
Maestro(a): José Antonio Jasso Lugo Alumna: Jazmín Vázquez Miranda
Educación Preescolar
Fecha: Jueves 03 de Septiembre del 2015
MI PRIMERA EXPERIENCIA Cuando egrese de la normal, pase por un gran nerviosismo en cuanto al lugar donde laboraría, sin embargo, me toco en una comunidad muy cerca de Jerez. No era necesario que viviera en la misma comunidad, pues la cercanía con mi hogar me permitía trasladarme a diario hasta allí. Las condiciones del jardín de niños eran muy desfavorables, es un jardín pequeño, sin mucho color, o áreas verdes, ni siquiera contaba con juegos, donde los niños pudieran divertirse, por lo que desde el momento en que lo vi, quede impresionada, más sin embargo no decepcionada, había mucho trabajo por hacer y me encantaba ser yo quien iniciara el cambio y les devolviera la alegría. Sin embargo a pesar de que el jardín de niños y su contexto ya me habían dejado impactada, quede más sorprendida aun con el comportamiento y carácter de los niños. Por lo general, los niños han tenido una característica importante, la amabilidad, la sinceridad y el entusiasmo, pero en este lugar era asombroso el carácter de los niños, siempre había escuchado que las personas de una comunidad son características de la amabilidad, pero nunca imagine que fuera hasta este grado. A la hora del receso, las mamás de los niños asistieron puntualmente al jardín a llevarles su lonche, algunas cuantas incluso llevaron comida extra para darme la bienvenida a mi primer trabajo. Trabaje todo el día de manera muy divertida y constructivista con los niños, son alumnos alegres, participativos, llenos de energía, y también eran los niños con el alma más pura que había visto antes. Una vez concluida la clase, los padres esperaban impacientes a sus hijos fuera del salón, les pedí que pasaran por un momento, y les hable de las condiciones del jardín, y de cómo lo podemos solucionar, hacer de un sitio bello por dentro un sitio bello por fuera. La respuesta inmediata de los padres de familia, fue de apoyo, excepto por la situación económica. Sin embargo actividades para recolectar dinero serian parte de nuestra situación. Así que los padres de familia y yo, iniciamos actividades dentro de la comunidad, desde eventos culturales que contribuyeran a la educación de los niños, donde los espectadores entraban a un costo muy aceptable, además las madres de familia vendían comida o dulces fuera del jardín de niños, entre muchas actividades más, la participación y el entusiasmo de la comunidad eran impresionantes. Poco tiempo después conseguimos la cantidad necesaria para dar inicio a las actividades pensadas, y con la ayuda de los padres de familia, pintamos, equipamos y dimos un sentido a cada una de las pinturas que se establecieron ahí, siempre pensando en la educación de sus hijos, los padres de familia hicieron todo lo que estaba en sus manos y mucho más. Yo en lo personal aprendí mucho de las personas que ahí habitan, de su amabilidad, de su bondad y su nobleza y sobre todo de que nunca se rendían sin
importar lo difícil que fuera la situación, así también los niños aprendieron todo lo que yo sabía. Fue sin duda alguna la mejor experiencia que pude haber pedido, y no solo eso, sino que hoy en día me da gusto saber que ese Jardín de niños, sigue tan alegre que cuando lo deje.