Psique (+) I n t e l i g e n c i a
y
¿Qué hago con mi relación? Factores de Inteligencia emocional en hombres y mujeres.
Por su salud, sea feliz
Tips para manejar las emociones negativas.
Ejecutivos con corazón La importancia del trabajo en equipo, la apertura de vías de comunicación, la colaboración, la escucha y el diálogo interno.
Vida familiar La primera escuela de aprendizaje emocional.
¿Por qué me comporto así ?
Traumas y temperamentos, aprenda a reeducarlos Para Revista de Psicología Positiva Angie Paola Gutierrez Puerta Alejandra Sánchez Oquendo Luisa Morales Mazo Juan Felipe Tobón Arboleda
E m o c i o n e s
Contenido: Enemigos íntimos Páginas 5-6
Ejecutivos con
El crisol familiar Páginas 12 - 13
Pag
corazón 14
Páginas 7-8-9
La mente y la medicina
Páginas 10-11
Pag
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Trauma y
reeducación emocional
El temperamento no es el destino
Columna de opinión Páginas 16 al 19
Conozca cómo entrenar su inteligencia emocional
>> Páginas 20 al 22
TEST
>> Páginas 23 al 24
DE INTELIGENCIA EMOCIONAL
HORÓSCOPO EMOCIONAL
>>Página 25 <<
¿Una generación con
Inteligencia Emocional? El individuo promedio de esta generación se encuentra todos los días abrumado por un sinfín de realidades y contextos en los que se encuentra inmerso, que representan espacios en los que se viven innumerables situaciones, tanto buenas como malas y que, finalmente, se convierten en momentos en los que se ponen a prueba las maneras y las formas en que éstas son afrontadas por cada uno de nosotros. Aquellas maneras y formas se encuentran supeditadas a rasgos propios de cada uno, producto de las experiencias y las vivencias personales, que van a determinar el grado de madurez emocional que tengamos y van a fundamentar las decisiones que tomemos, así como las acciones y reacciones que tengamos. La psicología emocional es una propuesta que resulta interesante frente a tales cuestiones, puesto que se hace cada vez más necesario el ser conscientes de la manera en que tomamos decisiones y damos respuesta a las situaciones que acontecen en nuestra cotidianidad, más aún cuando se trata de este momento histórico, en el que la gran mayoría de personas viven con dudas y preguntas frente a estos temas, independiente de si éstas son con su pareja, en el trabajo o, incluso, consigo mismo. Esta edición de la revista nos trae una serie de temas, entre los que se encuentran las relaciones de pareja y los factores emocionales, tanto de hombres como de mujeres; la manera en que se debe lidiar con las emociones negativas; las cuestiones emocionales asociadas al trabajo en equipo y, finalmente, la reeducación de traumas y temperamentos.
Editorial
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Inteligencia “
Emocional Aplicada
Una puerta abierta
a la oportunidad” Del texto de Daniel Goleman: Inteligencia Emocional Con la intención de conocer la propuesta que el psicólogo estadounidense Daniel Goleman trae en su libro “Emotional Intelligence”, de 1995, reconocido por ser un best seller a nivel mundial, se espera, pues, realizar una aproximación de los diferentes planteamientos, conceptualizaciones, opiniones, recomendaciones y ejercicios prácticos, que el autor trae específicamente en los capítulos tres y cuatro, de éste: “Inteligencia Emocional Aplicada” y “Una puerta abierta a la oportunidad”, respectivamente.
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Artículo central
Enemigos íntimos
Una “Plena madurez” implica tener presente dos indicadores fundamentales en las relaciones: la capacidad de amar y de trabajar. Aquello se complementa con algunos datos estadísticos, como que tres de cada diez personas que se encuentran recién casadas pueden “confiar en seguir unidas”. Esto se encuentra supeditado a temas relacionados con la inteligencia emocional de las personas. “Gran parte del fracaso de las relaciones de pareja se asienta en las diferencias existentes entre los mundos emocionales de los hombres y de las mujeres.”
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Los antecedentes infantiles de dos concepciones diferentes del matrimonio
Los hombres. El sexo vulnerable
Las relaciones emocionales distintas en hombres y mujeres
los hombres tienen una tendencia a la aversión frente a las
son producto de aspectos de la infancia como los tipos de
disputas
juegos, las lecciones recibidas y las habilidades verbales
emocional se presenta con una mayor facilidad. Los hombres
(más emocionales en las mujeres). Desde los trece años, las
encuentran esta condición como una mejor alternativa, lo que
tácticas de las mujeres tienden a ser sutiles y agresivas,
muestra que las tácticas utilizadas se contraponen y
producto de tal desarrollo emocional; de igual forma, la
desencadenen agresividades descontroladas.
pervivencia por el orgullo de ser solitarios e independientes, constituye un rasgo característico de los hombres.
Con respecto al valor asignado a la comunicación emocional, matrimoniales,
aunque
el
desbordamiento
Consejos para el matrimonio Con respecto al valor asignado a la comunicación emocional,
El fracaso matrimonial
los hombres tienen una tendencia a la aversión frente a las
Goleman plantea las críticas destructivas como un aspecto
disputas
fundamental que afecta la manera en que se da una relación;
emocional se presenta con una mayor facilidad. Los hombres
tienen una orientación hacia el individuo y no a los actos.
encuentran esta condición como una mejor alternativa, lo que
Existen, pues, dos polos de respuesta frente a una situación:
muestra que las tácticas utilizadas se contraponen y
lucha o huida. Mientras en el primero lo más común es
desencadenen agresividades descontroladas.
devolver el ataque con una explosión de ira, el segundo se caracteriza por una “retirada a un silencio sepulcral”. Una
matrimoniales,
aunque
el
desbordamiento
Las “Buenas Peleas”
última defensa existente la denomina el autor como “la
Finalmente, Goleman propone una reflexión sobre la
táctica del cerrojo”, caracterizada por un ensimismamiento
importancia de encontrar escapes de tensión a través de las
general y una respuesta lacónica.
muestras de empatía; aquí aparecen las Válvulas de Seguridad, que impiden que una discusión se desemboque en
Pensamientos tóxicos
consecuencias
Goleman habla de unas “conversaciones paralelas”,
importancia de no entrar la conversación en temas álgidos. A
contrastando lo verbal con lo mental. Aaron Beck pone este
continuación, aparecen cuatro aspectos que sirven como
aspecto en términos de unos pensamientos automáticos, que
puntos para tener en cuenta: Tranquilizarse a uno mismo, a
ponen a funcionar el sistema inmunológico. Se habla
través del dominio de impulsos y de la manera en que pueden
también de dos modelos en los que se fundamentan los
llegar a afectar ciertas necesidades personales más
patrones generales de pensamiento: un modelo de optimismo
profundas. Desintoxicarse de la charla interna con uno
(sosiego) y un modelo de pesimismo (desazón)..
mismo, evitando el desbordamiento emocional, producto de
irreversibles.
También
se
resalta
la
los pensamientos negativos de la pareja y hacerle frente a las
El desbordamiento: el naufragio del matrimonio El desbordamiento se define como una sobrecarga de desazón, incontrolable y que puede causar grandes perjuicios, al ser un tipo de secuestro emocional. En el momento en que existe un desbordamiento reiterado, la pareja se encuentra con el problema de que uno de los dos experimenta constantemente dicha sensación e interpreta todo desde una óptica negativa.
sensación de dolor o enfado. Escuchar y hablar de un modo no defensivo, saber escuchar como una tarea, así como ser consciente del momento en que existe una actitud defensiva. Un método útil es el Método “Reflejar”, que consiste en reformular con palabras propias lo que la otra persona está diciendo y contrastarlas. El modelo XYZ también resulta una herramienta importante: “cuando dices X me haces sentir Y, pero me habría gustado sentirme Z”. Finalmente, se trata de comprender el punto de vista del otro y de dar un lugar pertinente a sus sentimientos y percepciones.
Ejecutivos con
corazón
Los ejecutivos deben poseer un alto grado de inteligencia social (la importancia del trabajo en equipo, la apertura de vías de comunicación, la colaboración, la escucha y el diálogo interno con uno mismo). Los ejecutivos de ahora se deben olvidar de los pensamientos de principios de la Revolución Industrial, con una moral mezquina, unos trabajadores atemorizados, un jefe tiránico y, en suma, cualquiera de las muchas posibles combinaciones de deficiencias emocionales en el puesto de trabajo. Aunque en la actualidad aún existen este tipo de personas, no es un misterio que los costes de esta situación se traducen en un descenso de la productividad, un aumento de los accidentes laborales, omisiones y errores que llegan a tener consecuencias mortales y el éxodo de los empleados a otros entornos laborales más agradables. Pagando un precio inevitable por un bajo nivel de inteligencia emocional en el mundo laboral, un precio que se puede traducir a la quiebra de cualquier empresa.
Entre las diferentes habilidades emocionales fundamentales se encuentran: ser capaces de sintonizar con los sentimientos de las personas que nos rodean, poder manejar los desacuerdos antes de que se conviertan en abismos insalvables, tener la capacidad de entrar en el estado de “flujo” mientras trabajamos, etcétera. Las tres facetas diferentes de la inteligencia emocional que podemos aplicar a las personas que se mueven en ambientes organizacionales son: la capacidad de expresar las quejas en forma de críticas positivas, la creación de un clima que valore la diversidad y no la convierta en una fuente de fricción y el hecho de saber establecer redes eficaces.
La crítica es nuestro primer quehacer En una empresa, todo el mundo forma parte del sistema, y el feedback es el alma de la organización; el intercambio de información permite que las personas sepan y se den cuenta si están haciendo bien su trabajo o si, por el contrario, debe mejorarlo, efectuar algunos cambios o reorientarlo por completo. Sin feedback la gente permanece en la oscuridad y no tiene la menor idea de la forma en que debe relacionarse con su jefe o con sus compañeros, qué es lo que se espera de ellos y qué problemas empeorarán a medida que pase el tiempo. La forma en que se expresan y se reciben las críticas constituye un elemento determinante en la satisfacción del trabajador con su trabajo, con sus compañeros y con sus superiores.
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La peor forma de motivar a alguien Las críticas suelen expresarse en forma de quejas personales más que como quejas sobre las que se puede actuar, en forma de acusaciones cargadas de disgusto, sarcasmo y desprecio y, en consecuencia, también dan lugar a reacciones de defensa, de declinación de la responsabilidad y finalmente a la amarga resistencia pasiva que provoca el hecho de sentirse maltratado. Con demasiada frecuencia, la gente solo expresa sus críticas cuando las cosas han llegado ya a un punto extremo; cuando están demasiado enfadados como para poder controlar lo que dicen. Haciendo que las críticas se digan del peor modo posible, con un tono de amargo sarcasmo, sacando a la luz la larga lista de disgustos acumulados, agrediendo con ella a sus empleados.
La estrategia adecuada Limitarse a lo concreto, señalando también lo que la persona hace bien, lo que no hace tan bien y cómo podría cambiarlo. No hay espacio para rodeos, ambigüedades y evasivas ya que eso podría enmascarar el mensaje real. Es importante ofrecer soluciones. La crítica, como todo feedback útil, debería apuntar a una forma de resolver el problema. De otro modo, el receptor puede quedar frustrado, desmoralizado o desmotivado. La crítica puede abrir la puerta a posibilidades y alternativas que la persona ignoraba o simplemente sensibilizaría a ciertas deficiencias que requieren atención.
Aceptar la diversidad
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Cada vez resulta más claro que, aunque la gente tenga prejuicios, debe aprender a actuar como si no los tuviera. La creciente necesidad de las empresas multinacionales pide a los empleados que no solo dejen de lado todo prejuicio y respeten a la gente de diferentes culturas (y mercados) sino que también tengan en cuenta las ventajas competitivas que conlleva esta actitud. Al igual que poder obtener ese fruto potencial de la diversidad, en términos de mayor creatividad colectiva y energía empresarial. Todo esto significa que la cultura de la empresa debe fomentar la tolerancia aun en el caso de que persistan los prejuicios individuales.
Las raíces del prejuicio cada vez resulta más claro que, aunque la gente tenga prejuicios, debe aprender a actuar como si no los tuviera. La creciente necesidad de las empresas multinacionales pide a los empleados que no solo dejen de lado todo prejuicio y respeten a la gente de diferentes culturas (y mercados) sino que también tengan en cuenta las ventajas competitivas que conlleva esta
actitud. Al igual que poder obtener ese fruto potencial de la diversidad, en términos de mayor creatividad colectiva y energía empresarial. Todo esto significa que la cultura de la empresa debe fomentar la tolerancia aun en el caso de que persistan los prejuicios individuales.
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Ninguna tolerancia hacia la intolerancia
Aunque los prejuicios largamente sostenidos no pueden ser desarraigados con facilidad, sí que es posible, no obstante, hacer algo distinto con ellos. El simple acto de llamar a los prejuicios por su nombre o de oponerse francamente a ellos establece una atmósfera social que los desalienta mientras que, por el contrario, hacer como si no ocurriera nada equivale a autorizarlos.
La sabiduría de las organizaciones y el ci colectivo La productividad depende de la adecuada coordinación de los esfuerzos individuales en el seno de un equipo. Hasta ahora, la gente siempre ha trabajado en cadena, pero en el caso de los trabajadores del conocimiento “la unidad de trabajo no será el individuo sino el equipo”. Por ese mismo motivo es por lo que la inteligencia emocional, las habilidades que fomentan la armonía entre las personas, será un bien cada vez más preciado en el mundo laboral. Cuando las personas se reúnen para trabajar en equipo, cada una de ellas aporta determinados talentos (como, por ejemplo, la fluidez verbal, la creatividad, la empatía o la experiencia técnica). El factor individual más importante para maximizar la excelencia del funcionamiento de un grupo es su capacidad de crear un estado de armonía que les permitiera sacar el máximo rendimiento del talento de cada uno de sus miembros. Los trabajadores “estrella” de una organización suelen ser aquéllos que han establecido sólidas conexiones en todas las redes, sean de comunicación, de experiencia o de confianza. Se puede esperar un futuro en el que las habilidades básicas de la inteligencia emocional, el trabajo en equipo, la colaboración entre los individuos y el aprendizaje de una mayor eficacia colectiva, serán cada vez más importantes. El crecimiento y hasta la misma supervivencia de la organización depende, en definitiva, del aumento de la inteligencia emocional colectiva.
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La mente y la medicina la mente del cuerpo: relación entre las emociones y la salud Las Emociones Tóxicas Anteriormente se creía que solo el cerebro y el sistema nervioso tenían la capacidad de aprender, sin embargo, en la actualidad varios estudios han demostrado que el sistema inmunológico también tiene la capacidad de adaptarse y aprender frente a ciertas situaciones. Además, ambos sistemas, el inmunológico y el nervioso, están conectados estrechamente. En otras palabras, la mente, el cuerpo y las emociones están también relacionados, de esta relación nace la psiconeuroinmunología que precisamente estudia el efecto que tiene las emociones sobre el estado físico y el modo en que se comunican los sistemas inmunológico y nervioso. Es importante mencionar que este último influye directamente sobre el funcionamiento del otro sistema. Como ya se sabe, incluso por experiencia propia, el ser humano es un ser de emociones, el cual se enfrenta a las situaciones de la vida por medio de emociones y sentimientos. Con las nuevas investigaciones médicas se ha llegado a la conclusión de que ciertas emociones influyen de manera positiva o negativa sobre la salud. Más adelante se expondrá cómo algunas emociones son perjudiciales para la salud y cómo otras son completamente beneficiosas para la recuperación de algunas enfermedades y procesos post-operatorios.
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Las emociones negativas ponen en riesgo la salud física y mental, ya que estas no solo agravan y causan enfermedades crónicas, sino que también impide la recuperación posterior a operaciones o a tratamientos médicos. A continuación, se explicará los efectos perjudiciales de la irritabilidad, la ansiedad y la depresión sobre la salud. En primer lugar, la irritabilidad afecta de manera directa al corazón. Al parecer el enojo es la emoción más dañina para este órgano, esta emoción es asociada a los ataque cardiacos y a las enfermedades coronarias. Si bien el enfado es una reacción natural del cuerpo a situaciones que son desagradables, una exposición continua a la ira puede aumentar la probabilidad de muerte por enfermedades cardiacas. Dado que en la vida cotidiana existen muchas situaciones que pueden causar ira, lo ideal no es reprimir esta emoción ya que también puede ser perjudicial, sino que se debe liberarla de manera que no afecte a los demás.
En segundo lugar, el estrés influye negativamente en el inicio y en la recuperación al inicio de una enfermedad ya que este debilita el sistema inmunológico, por lo tanto es más propenso a contraer infecciones o virus como el del resfriado, además que estar propenso a enfermedades más graves. El yoga es una eficaz terapia para controlar esos ataques de estrés. Finalmente, la depresión influye en el empeoramiento de las enfermedades ya que los pacientes que sufren de depresión generalmente pierden la esperanza y se niegan a seguir su tratamiento y las demás recomendaciones de los especialistas, es decir la emoción afecta al cuerpo de manera actitudinal y no precisamente de manera biológica. Aunque las consecuencias para los pacientes van desde una recuperación más lenta hasta incluso molestas posteriores a ciertos procedimientos quirúrgicos y a ciertas enfermedades, es difícil diagnosticar la depresión bajo esas circunstancias ya que los síntomas médicos de esta pueden confundirse con los síntomas propios de algunas enfermedades. En este sentido, un acompañamiento profesional adecuado a pacientes con depresión reduciría los gastos médicos asociados a periodos de recuperación más largos y a un mayor índice de recaídas.
Los Beneficios Clínicos De Los Sentimientos Positivos Por otro lado, existe emociones positivas que son revitalizadoras para pacientes que padecen alguna enfermedad, y no solo las emociones son importantes, también existen otros factores externos que ayudan a la recuperación y el tratamiento de los pacientes. A continuación, se dará un vistazo a los beneficios clínicos que tiene el optimismo y las redes de apoyo sobre la salud de los pacientes.
padecen alguna enfermedad. Si bien muchas personas disfrutan de la soledad y tienen una vida plena alejados del mundo y con pocos amigos, el aislamiento clínicamente preocupante es el que se refiere a esa sensación de no tener a nadie con quien compartir los sentimientos, emociones, experiencias que ocurren en la vida, en otras palabras, no tener a nadie a quien recurrir.
En primer lugar, vale la pena aclarar que la esperanza está relacionada con el optimismo y ambos sentimientos constituyen un factor curativo en la vida de los pacientes, ya que las personas esperanzadas y que tienen una visión positiva de la vida enfrentan de mejor manera los retos y dificultades que se les presenta. Todo lo contrario, ocurre con las personas pesimistas que son más propensas a la depresión, por lo tanto, como se explicó anteriormente, su sistema inmunológico se debilita y esto trae consecuencias negativas. Además una persona pesimista afronta de manera autodestructiva los retos y dificultades que le pone la vida, adoptando hábitos perjudiciales para su salud.
Es sumamente importante tener una persona de confianza con la cual se pueda hablar sobre cualquier tipo de temas, este ejercicio de conversar puede resultar terapéutico ya que se tiene la posibilidad de liberar todas las emociones negativas, preocupaciones y problemas para recibir a cambio un consejo, una voz de aliento, o incluso la mera satisfacción de ser escuchado. Lo anterior, puede ser una terapia muy efectiva para liberar el estrés y sentir un apoyo emocional puede ser muy gratificante e incluso sanador.
En segundo lugar se tienen las redes de apoyo, las cuales son factores externos positivos que protegen al individuo de situaciones adversas. Por lo tanto, tener un grupo de amigos cercanos ofrece protección respecto al aislamiento que muchas veces experimentan las personas que
En conclusión, aprender a manejar las emociones es muy importante desde la perspectiva del paciente pero también se hace un llamado a promover una atención médica emocionalmente inteligente donde se les enseñe a los médicos desde la academia no solo a diagnosticar y tratar una enfermedad sino los conocimientos básicos de inteligencia emocional con el fin de brindarle a los pacientes experiencias agradables. Es decir, es necesario humanizar la medicina y poner como eje central al paciente.
El crisol familiar La vida familiar es la primera escuela de aprendizaje emocional; es el crisol doméstico en el que aprendemos a sentimos a nosotros mismos y en donde aprendemos la forma en que los demás reaccionan ante nuestros sentimientos; ahí es también donde aprendemos a pensar en nuestros sentimientos, en nuestras posibilidades de respuesta y en la forma de interpretar y expresar nuestras esperanzas y nuestros temores. Este aprendizaje emocional no sólo opera a través de lo que los padres dicen y hacen directamente a sus hijos, sino que también se manifiesta en los modelos que les ofrecen para manejar sus propios sentimientos y en todo lo que ocurre entre marido y mujer. En este sentido, hay padres que son auténticos maestros mientras que otros, por el contrario, son verdaderos desastres. Si se tiene en cuenta que una de las lecciones emocionales fundamentales es la de aprender a diferenciar entre los sentimientos, no nos resultará difícil entender que un padre que se halle completamente desconectado de su propia tristeza mal podrá ayudar a su hijo a comprender la diferencia que existe entre el desconsuelo que acompaña a una pérdida, la pena que nos produce una película triste y el sufrimiento que nos embarga cuando algo malo le ocurre a una persona cercana. Como elementos fundamentales de la inteligencia emocional tenemos el aprender a reconocer, canalizar y dominar sus propios sentimientos y empatizar y manejar los sentimientos que aparecen en las relaciones con los demás.
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Una ventaja emocional Los padres “deben comprender que sus acciones generan la confianza, la curiosidad, el placer de aprender y el conocimiento de los límites” que ayudan a los niños a triunfar en la vida, una afirmación avalada por la evidencia creciente de que el éxito escolar depende de multitud de factores emocionales que se configuran antes incluso de que el niño inicie el proceso de escolarización. Durante esos tempranos años es cuando se asientan los rudimentos de la inteligencia emocional, aunque éstos sigan modelándose durante el período escolar.
La asimilación de los fundamentos de la inteligencia emocional Es así como los padres imparten, de manera consciente o inconsciente, unas lecciones emocionales importantísimas que activan su sensación de seguridad, su sensación de eficacia y su grado de dependencia (un punto al que Erik Erikson denomina “confianza básica” o “desconfianza básica”). Todos los intercambios que tienen lugar entre padres e hijos acontecen en un contexto emocional y la reiteración de este tipo de mensajes a lo largo de los años acaba determinando el meollo de la actitud y de las capacidades emocionales del niño.
Cómo criar a un niño agresivo El estudio demostró que cuanto más agresivos son los niños, cuanto más dispuestos a entablar peleas y a recurrir a la fuerza para conseguir lo que desean, más probable es que terminen expulsados de la escuela y que, a los treinta años de edad, tengan un largo historial de delincuencia. Y estos padres también parecen transmitir a sus hijos la misma predisposición a la violencia, ya que éstos se mostraron tan pendencieros en la escuela como lo habían sido aquéllos.
La violencia: la extinción de la empatía Estos niños, obviamente, tratan a los demás tal y como ellos mismos han sido tratados. Y la crueldad de los niños maltratados es simplemente una versión extrema de lo que hemos entrevisto en los hijos de padres críticos, amenazantes y violentos (niños que también suelen permanecer indiferentes cuando un compañero llora o se encuentra herido), de modo que se diría que los niños maltratados representan el punto culminante de un continuo de crueldad. Si nos damos cuenta de la forma en que la crueldad o el amor modelan el funcionamiento mismo del cerebro, comprenderemos que la infancia constituye una ocasión que no debiéramos desaprovechar para impartir las lecciones emocionales fundamentales. Los niños maltratados han tenido que recibir una lección constante y muy temprana de traumas.
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Trauma y
reeducación emocional Los acontecimientos traumáticos que ocurren en el transcurso de la vida de un ser humano se convierten en recuerdos que quedan grabados en el circuito emocional de los mismos, transformándose en un “detonador” que lleva a la víctima a reaccionar con miedo ante cualquier situación que se lo recuerde.
Dicho recuerdo obsesivo de este evento, puede generar un Trastorno de Estrés Postraumático (TEPT) que conlleva a responder ante situaciones más cotidianas como si fueran momentos de peligro y esa sensación de impotencia y de falta total de control es lo que realmente determina si ese acontecimiento va a marcar las vidas, de manera negativa de estos individuos. Desde el punto de vista biológico, las víctimas de un este tipo de traumas nunca vuelven a ser las mismas ya que cualquier situación de estrés incontrolable conlleva a reacciones y secuelas biológicas idénticas. Sin embargo, existen tratamientos que ayudan a reeducar y curar el circuito emocional logrando extinguir estos temores, mediante formas espontáneas como juegos, en el caso de un niño, o asociaciones de contenidos simbólicos como metáforas, mitos, arte, entre otras. En cualquier situación, es necesario que el paciente atraviese por un proceso que consta de tres etapas: recuperación de la seguridad, recordar y narrar los detalles del trauma, afrontar un duelo por la pérdida ocasionada; y aunque no es posible eliminar completamente la tendencia de respuesta ante ciertas situaciones emocionales, si se puede lograr que el sujeto logre recordar los sucesos de una manera tranquila y controlada.
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El temperamento no es el destino El temperamento es aquella dotación genética que configura la predisposición básica y el estado de ánimo de los individuos por medio de las emociones. Según Jerome Kagan, psicólogo de la Universidad de Harvard, existen
4 temperamentos básicos:
Tímidos: Ansiosos, autocríticos, aislados, hipersensibles, sus respuestas son lacónicas, tienden a ser sumisos, sienten miedo al exponerse en público; su sistema nerviosos hace que sean más reactivos a las tensiones y afrontan situaciones desconocidas como si fueran una potencial amenaza.
Abiertos: Confiados, cordiales, sociables, populares, extrovertidos, poco nerviosos
Melancólicos: Negativos, los contratiempos los afectan con mayor facilidad, incapaces de desconectarse de sus preocupaciones y depresiones, propensos a enfadarse, suspicaces
Optimistas: Despreocupados, siempre le encuentran el lado positivo a las cosas, alegres, disfrutan las relaciones con los demás, se recuperan rápido de los contratiempos
Sin embargo, aunque parece que el temperamento fuera el causante de cómo respondemos ante situaciones de la vida y que está determinado genéticamente, existen factores como las lecciones emocionales en la infancia que pueden tener un impacto significativo sobre el mismo. Es decir, el temperamento no es el destino; las experiencias de la vida adecuadas son la mejor manera de reeducarlo y el esfuerzo constante puede llegar a modificar, incluso a nivel neuronal, los hábitos emocionales.
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Concienciación Experiencias e Introspección Por: Juan Felipe Tobón
Todas y cada una de las experiencias de nuestra vida generan, de una u otra forma, un impacto y unas consecuencias que determinan nuestra forma de actuar frente a una situación cualquiera. Nuestra infancia y adolescencia está llena de momentos que juegan, inconscientemente, un papel significativo en las maneras en que hoy día actuamos y reaccionamos. Esto es más evidente aún cuando nos damos a la tarea de pensar en cómo llevamos y lidiamos con una determinada situación, ya sea buena o mala, con nuestra pareja, por ejemplo. Es por eso que el texto de Goleman se puede ver como una invitación a cuestionar y a hacer consciente ciertos comportamientos que tenemos frente a dichas situaciones, de forma que nos sea posible alcanzar un grado de madurez tal, que podamos resolver problemas con la mejor de las intenciones y la mayor sensatez posible. Si bien el texto nos propone ideas y soluciones muy pertinentes, que pueden ser llevadas a la práctica con cierto grado de facilidad, hay algo que me queda dando vueltas en la cabeza y es el hecho de que es importante ser conscientes además de que la especificidad inherente a cada individuo, y a cada relación, hace que sea muy complicado poder generalizar abiertamente las soluciones que las personas pueden dar a su situación o condición. Con ello no estoy diciendo que no sea posible encontrar útil el texto, sino más bien que es importante para el lector ser muy crítico a la hora de poner en tela de juicio su forma de ser, de pensar y de actuar, tomando como referente un best seller de esta naturaleza, puesto que podría darse el caso de que las personas que no son cercanas a las conceptualizaciones propias de una ciencia como la Psicología, puedan tergiversar la información y las propuestas que el autor trae. Lo que para algunas personas puede resultar sencillo de asimilar, para otras puede que no; más aún cuando se trata de plantear un ejercicio de concienciación de sí mismo, que generará un impacto, no solo en la persona como tal, sino en su contexto y en las personas a su alrededor. Goleman nos plantea una mirada importante frente a los temas de psicología emocional; una percepción que puede permitir a muchos hacer frente a varias de las cuestiones que día a día los apremian y atosigan, que pueden depender fundamentalmente de cuestiones que involucran la ya mencionada psicología emocional. Pero debe estar la autocrítica presente en cada individuo que desee hacer este examen de sí mismo. Para esto, debemos estar en la capacidad de plantearnos un ejercicio de introspección o, en su defecto, buscar ayuda especializada en este campo.
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Columna de opinión
La inteligencia emocional quedó por fuera del pensum. Por: Alejandra Sánchez Oquendo
Más allá de un alto rendimiento académico, de cuanto podamos conocer en áreas como matemáticas, estadística y economía, las empresas están buscando personas con inteligencia emocional. Pero, ¿Qué es inteligencia emocional y si es un tema tan fundamental, por qué no está incluida en el pensum? Somos expertos en números, letras, modelos, cálculos, ecuaciones y balances; desde el primer instante en la universidad nos enseñan a repetir teorías y lecturas desarrolladas por otros, evaluándonos en la manera en que nos aprendamos de memoria lo que otros ya han pensado por nosotros. Nos preocupamos por aprendernos las fórmulas, los verbos, las teorías, los modelos, los ejercicios y los libros, pero ¿realmente nos estamos preocupando por lo verdaderamente importante? La sociedad ya no se rige por los viejos estándares de cuál es el mejor promedio o quien sacó mejores notas a lo largo de la carrera, las empresas más qué profesionales, buscan personas con inteligencia emocional. Personas que sean capaces de no solo saber sus emociones sino también de controlarlas y convertirlas en ventajas, de desarrollar habilidades que se traduzcan a tomar las mejores decisiones y a resolver los problemas de la mejor manera. La inteligencia emocional, también es esa capacidad de relacionarnos de la mejor forma con los demás y de saber construir relaciones de manera efectiva. La fluidez verbal, la creatividad, la empatía, la comunicación, el diálogo y la escucha, son solo una pequeña muestra de todas las competencias que se desarrollan en la inteligencia emocional. Según estudios, los trabajadores “estrellas” eran las personas que tenían este tipo de habilidades dentro de una organización, traduciéndose, en otras palabras, en el éxito de la vida laboral. Si estos entonces, son los factores decisivos en el éxito de la vida laboral, ¿Por qué en la universidad este tipo de habilidades simplemente se dejan de lado, y se hacen como si no existieran? Es cierto que debe haber un equilibrio entre la parte técnica y la parte emocional, pero somos nosotros los que debemos hacer este tipo de críticas a las universidades y no solo asistir a ellas a formarnos técnicamente como administradores de empresas, economistas, contadores, médicos, físicos, ingenieros o matemáticos. Debemos tener la capacidad de crear entornos emocionalmente inteligentes, para crear mayores oportunidades de crecimiento y éxito. La inteligencia emocional es el nuevo origen de las ventajas competitivas de cualquier persona, pero no hay que desanimarse si creemos que no contamos con ellas o si solo tenemos unas cuantas, podemos aprenderlas y desarrollarlas con la práctica; la cuestión es que las universidades se den cuenta de esta gran falencia que tenemos los estudiantes en cuestiones tan básicas como la comunicación, el poder de negociación y el desarrollo de ideas, para así poder no solo ser excelentes en temas de números y teorías sino también en habilidades básicas de inteligencia emocional. .
Columna de opinión
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El desafío de hoy iniciar el cambio Por: Angie Paola Gutierrez
En nuestro círculo social es fácil encontrarnos con personas que frecuentemente mencionen frases como, por ejemplo, “Yo no cambio por nadie”, “soy así porque me ha tocado muy duro”, “Quien me quiera, bien y Quien no, también”, “La vida me ha hecho así”, entre otros dichos que evidencian la posición de las personas frente a posibles críticas u opiniones de los demás acerca de su comportamiento. ¿Pero realmente nuestro comportamiento está determinado sólo por dotación genética o por las experiencias o hábitos que están arraigados desde la infancia? Las emociones son aquellas reacciones que representan la forma en cómo respondemos a ciertos estímulos, éstas son las nos brindan ese valor agregado de supervivencia al permitirnos afrontar situaciones difíciles; pero son las mismas que hacen que en muchas ocasiones prime “la pasión sobre la razón.” Pero entonces, ¿cómo lograr que esos impulsos nos conduzcan a actuar de la mejor manera posible? La reeducación y el reaprendizaje emocional son mecanismos que permiten que, incluso, los más arraigados traumas o las respuestas más comunes en nosotros impulsadas por el temperamento se canalicen, logrando transformar a nivel neuronal esos hábitos emocionales. Para ello, es importante que primero analicemos nuestro comportamiento y entendamos que hay cosas por mejorar, traumas por superar y que eso requiere de un esfuerzo constante y una aceptación del problema y, en caso de ser necesario, una ayuda de un tercero que pueda guiar ese camino hacía el cambio. No es un secreto que ese proceso es difícil, pero vale la pena hacerlo con tal de aliviar esos sentimientos de frustración, esos recuerdos traumáticos que aún nos afectan tanto como si ocurrieran de nuevo o esa sensación de no poder controlar la reacción ante ciertos sucesos. Así que ¡Manos a la obra!, todo lo bueno en esta vida requiere de compromiso y esfuerzo; hoy es el día para emprender este desafío.
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Columna de opinión
Medicina sin corazón Por: Luisa Morales Mazo
El sistema de la salud en la actualidad funciona de manera impersonal, teniendo más relevancia los indicadores de eficacia de la atención al usuario en términos de cantidad y no de calidad. Es decir, el sistema se califica de manera positiva si se atiende el mayor número de pacientes en el menor tiempo, inclusive las citas médicas se han estandarizado a un tiempo de 15 minutos aproximadamente por paciente, de esta manera se ha limitado el tiempo del paciente para resolver todas sus inquietudes. A lo anterior se le suma la falta de empatía del personal médico lo cual concluye en una experiencia desagradable e incluso traumática para los pacientes. En este sentido, el sistema de salud se mueve por la reducción de los costos, enfocándose en reducir los tiempos de consulta. Lastimosamente, en este proceso médico estandarizado se olvida por completo la calidad del servicio y la atención al paciente, incluso se ignora el hecho de que una atención más amable y más emocional puede ser un factor diferenciador ante los pacientes, los cuales estando frente a una enfermedad y sumergidos en un estado de sufrimiento valoran de manera positiva el trato más humano ofrecido por el personal médico. Por lo tanto, aunque el sistema de salud tiene múltiples falencias organizacionales es más devastador para un paciente encontrarse frente a frente con un médico o enfermera que se muestre indiferente a su situación. Decir que todo el personal médico carece de empatía sería generalizar, sin embargo, la gran mayoría de médicos caen en el error de subestimar la emocionalidad de los pacientes. Finalmente, el llamado de atención no es solo al campo de la medicina sino a todos los campos que ofrecen servicios y tienen contacto con las personas. No basta solamente con un curso de servicio al cliente, sino que desde las universidades se deben formar profesionales con los conocimientos básicos en inteligencia emocional, capaces de afrontar con empatía y de la mejor manera las situaciones que se les presente, poniendo en primer lugar el bienestar de la persona.
Columna de opinión
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Conozca cómo entrenar su inteligencia emocional “El manejo de las emociones no solo tiene consecuencias en nuestra vida social, sino que puede llegar a tener efectos negativos en la salud”
No siempre las personas más inteligentes son las más exitosas. Es común la imagen del genio incomprendido que tiene un mejor desempeño en soledad, de igual manera nos sorprende a veces que un compañero de trabajo ascienda sobre otro que aparentemente tiene más capacidades intelectuales. Esto se da porque hay un factor que puede hacer la diferencia: la inteligencia emocional. Este concepto fue descrito por primera vez en el libro del psicólogo y periodista Daniel Goleman, Inteligencia Emocional, de 1995. Goleman recogió las teorías e investigaciones que habían surgido hasta el momento sobre la importancia de las emociones en el desarrollo humano y la posibilidad de moldearlas para ser exitosos. Aunque el concepto tiene detractores y ha sido muy discutido desde su surgimiento, se han encontrado amplias aplicaciones en el campo gerencial y académico. Las instituciones académicas que lo implementan tienen mejoras en la convivencia y en los resultados de sus estudiantes, mientras que en el campo administrativo, a su salida, Harvard Business Review lo catalogó como “un concepto revolucionario”. Para entrenar la inteligencia emocional es necesario aprender a gobernar adecuadamente los sentimientos, saberlos interpretar y entender los de los demás. No es una tarea fácil y requiere adquirir conciencia del funcionamiento de nuestra mente.
El cerebro primitivo Una de las películas más exitosas de los últimos años en Colombia fue Intensamente, de Pixar. En ella, la pequeña Riley Anderson se muda de la
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tranquila Minnesota a la movida San Francisco, proceso en el que experimenta una serie de emociones que la llevan a madurar. La historia se desarrolla en la mente de Riley, donde Alegría, Temor, Tristeza, Desagrado y Furia compiten por el control. Mucho se habló de las pocas emociones que estaban retratadas en la película, que el rango es más amplio y se habían quedado cortos, pero en realidad esas son las emociones más primitivas y su control hace la diferencia a la hora de relacionarnos con el mundo. La naturaleza, en su afán por garantizar la supervivencia de la especie, creó las emociones para protegernos de las amenazas exteriores y estimular nuestro desarrollo: el enojo estimula el cuerpo para que produzca la energía que nos permita defendernos, el miedo nos prepara para la huída, la alegría da reposo y fuerza para afrontar cualquier tarea, el desagrado previene los envenenamientos y la tristeza nos da la posibilidad de reflexionar sobre un hecho y planificar un nuevo comienzo. Todas estas emociones son muy útiles y la mayoría de las veces podemos dar respuestas calculadas a sus embates, sin embargo, su raíz primitiva suele
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jugarnos malas pasadas. Cuando enfrentamos situaciones muy fuertes, el cuerpo puede saltarse el filtro de la mente racional y reacciona de la forma más primitiva, esto es llamado en el libro de Goleman “secuestro neuronal”, el sujeto pierde el control de sus acciones por un momento y puede hacer y decir cosas que no quiere en realidad. Aunque esto puede sonar como una reacción más honesta, no va en consonancia con las normas sociales y nos hace más daño que beneficio.
Estrategias exitosas Entrenar la inteligencia emocional no es sencillo, demanda un conocimiento previo que solo podemos obtener gracias a nuestra curiosidad personal. Ni las escuelas ni los padres tienen claro que deben educar teóricamente sobre esto, solo se adquiere conocimiento a través de las experiencias particulares. Cuando aprendemos de qué se trata cada emoción y cuáles son sus efectos en el cuerpo podemos reconocerlas y prevenir cualquier arranque. Además, aprendemos a identificarlas en los demás, lo que nos permite reaccionar de la manera más adecuada y tener el control de la situación. El mal manejo de las emociones no solo tiene consecuencias en nuestra vida social, sino que puede llegar a tener efectos negativos en la salud. El control de ellas no se traduce en represión, sino en vivirlas adecuadamente y en la justa proporción. Informarse sobre el tema es el primer paso para la tranquilidad.
Ejercicios para
manejar las emociones más negativas:
El miedo Meditación. Los ejercicios de meditación pueden ayudarnos a recuperar el control cuando el miedo se apodera de nosotros. Concentrarse en la respiración y sentir cómo el aire entra y sale de los pulmones hace que el ritmo cardiaco desacelere y podamos recuperar la calma.
Piense positivo. Las palabras son muy poderosas, si construimos pensamientos positivos para restarle importancia al miedo y los repetimos conscientemente, podemos lograr que eventualmente la sensación desaparezca. También podemos engañar a la mente con gestos, como una sonrisa.
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Ansiedad. La preocupación suele ser un acompañante del miedo y la ansiedad, trate de restarle importancia a esos pensamientos innecesarios. Concéntrese en el presente y sus afanes para no caer en ese ciclo interminable de estar esperando lo peor, aunque nos lo demande la experiencia.
La tristeza Depresión. La tristeza nos proporciona espacios de reflexión, gracias a ella podemos tomar una pausa antes de seguir con las preocupaciones cotidianas. Sin embargo, es importante conocer los síntomas de la depresión para identificar cuándo la tristeza deja de ser una emoción normal. Sea sociable. Por más difícil que parezca, el contacto con otros es la estrategia más sencilla para salir de la tristeza. Compartir nuestros sentimientos y otorgarles otros significados puede ser de gran utilidad, además de involucrarnos en actividades que nos puedan producir otras emociones. Llore. Según Daniel Goleman, “el llanto es un método natural para reducir los niveles de neurotransmisores cerebrales que alimentan la angustia”. No reprima sus sentimientos y desee ese espacio que el cuerpo le está pidiendo para volver a empezar. Viva el momento y pase a otra cosa.
La furia Otra perspectiva. La clave más evidente para controlar el enfado es tratar de ver las cosas desde una perspectiva distinta. No dejarse envolver por los pensamientos negativos que nos desencadena el hecho, sino esforzarse en tener otras ideas que no permitan que sigamos en lo mismo. Nada personal. Uno de los detonantes del enfado es que nos sentimos amenazados, no solo físicamente, sino en nuestro ego o autoestima. Nuestro escudo para estos ataques debe ser no tomarnos nada personal ni asumir las cosas, solo será para nosotros si nos lo hacen saber. Catarsis. Esta solo funciona en casos de furia moderada y consiste en dejar salir como torrente ese sentimiento que nos embarga. Es importante hacerlo lejos del objeto de nuestro enfado, pues la idea es dejar salir la emoción sin provocar unas nuevas. Grite, es el momento. “Giraldo, M A. ( 5 de Abril del 2017). Conozca cómo entrenar su inteligencia emocional. El Colombiano. Recuperado de http://www.elcolombiano.com/colombia/salud/inteligencia-emocional-qu e-es-AI6280938” : http://www.elcolombiano.com/colombia/salud/inteligencia-emocional-qu e-es-AI6280938
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TEST DE INTELIGENCIA EMOCIONAL
1. Si acaba de tener una idea que le parece muy interesante, ¿qué actitud toma? a. Necesita que otras personas la aprueban, para seguir pensando qué va a hacer. b. La revisa por los cuatro costados, con personas idóneas, y luego comienza la acción. c. Se larga de inmediato a su ejecución. d. La deja para otra oportunidad, por miedo a equivocarse, porque la ve muy audaz, por inhibición, etc. 2. Al enfrentar dificultades, ¿cómo reacciona? a. Sale corriendo. b. Se angustia. c. Se ve estimulado, como el toro ante el color rojo. d. Se mantiene sereno, y toma distancia para reflexionar en busca de la solución. 3. A la pregunta clásica: ante una botella de vino que contiene exactamente la mitad de su capacidad, ¿qué dice? a. Está medio llena. b. Está medio vacía. c. Qué lástima, podría estar llena. d. Qué suerte, podría estar vacía. 4. Si usted visualiza con la mente una pared que le cierra el camino, ¿qué piensa a continuación? a. Se siente incapaz de seguir adelante. b. Tiene la sensación de que se le va a caer encima. c. Idea una forma de rodearla y seguir adelante. d. Piensa en cómo tirarla abajo. 5. Acaba de ser rechazada/o para un puesto laboral, y al estar en la calle piensa o siente: a. Quizá no soy lo suficientemente capaz para este tipo de trabajo. b. Debo descubrir algunas fallas en mí, y superarlas. c. Cada persona tiene un trabajo que la está esperando, y llega más tarde o más temprano. d. Yo nunca tengo suerte.
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6. ¿Qué frase aplicaría o aplica más, en general, ante las circunstancias de la vida? a. Siempre que llovió paró. b. Todo lo bueno se termina. c. Los sueños, sueños son. d. Lo último que se pierde es la esperanza. 7. Un familiar o amigo le dijo que volvería a las 10, son las once y media y todavía no ha llegado. ¿Qué actitud toma? a. Piensa inmediatamente que le pasó algo y en cualquier momento llama a la policía. b. Empieza a preocuparse. c. Se pone a enumerar todas las razones comunes por las cuales puede haberse producido la demora. d. Se pone a mirar TV sin pensar en el asunto. 8. Acaba de discutir agriamente con una persona, a la que tendrá que seguir tratando, y luego de la disputa piensa: a. Lo voy a mandar a… b. Bien, ya pasó… c. ¿Cómo no entiende que tengo toda la razón? d. Voy a repasar toda la discusión. Seguramente, debe haber puntos en los que puedo estar equivocado. Si es así, le pediré disculpas y olvidaremos bien todo el asunto.
Solución del
Test
en
www.psique+.com
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HORÓSCOPO EMOCIONAL ARIES (22 MARZO-21 ABRIL)
TAURO(22 ABRIL-21 MAYO)
GÉMINIS (22 MAYO- 21 JUNIO)
Inicia el día con actividades que despierten tu mente y que a la vez la reconforten. Puedes hacer ejercicio, escuchar música o meditar. Habilidad a trabajar esta semana: la comunicación.
Alimenta tu mente. Consume proteínas en alimentos como huevo y pollo, así como las grasas saludables que contienen omega-3, presentes en las nueces y el pescado. Habilidad a trabajar esta semana: la motivación
Nunca dejes de aprender cosas nuevas, aunque no tengan que ver con tu estudio. Aprende un idioma, o empieza a tocar un nuevo instrumento. Habilidad a trabajar esta semana: el liderazgo
CANCER (22 JUNIO- 23 JULIO)
LEO (24 JULIO-23 AGOSTO)
VIRGO (24 DE AGOSTO-23 OCTUBRE)
Evita que emociones como el enojo y la ira se apoderen de ti, en especial al momento de tratar con tus compañeros y familiares. Habilidad a trabajar esta semana: trabajo en equipo
Desarrolla la capacidad de ponerte en los zapatos de los demás, así formaras vínculos más personales y de largo plazo. Habilidad a trabajar esta semana: la colaboración
Aprende a poner pausa antes de crear una dificultad de la nada. Esto significa dejar ir cosas insignificantes que se presentan todos los días. Habilidad a trabajar esta semana: el diálogo
LIBRA (24 SEPT-23 OCT)
ESCORPIO (24 OCT- 22 NOV)
SAGITARIO (23 NOV-22 DIC)
Establece prioridades. Cuando tienes la meta final como prioridad, es más fácil enfocar tu energía en lo que es valioso sin desviarte para resolver tareas más pequeñas. Habilidad a trabajar esta semana: la escucha
Aléjate de gente tóxica. En todos los ámbitos, evita relacionarte con personas mentirosas, manipuladoras o negativas ¡están mejor fuera de tu vida! Habilidad a trabajar esta semana: la empatía
Toma descansos mentales. Por lo menos cada hora, mueve tu cuerpo para refrescar tu cerebro. Pasea por la calle o haz estiramientos en tu lugar de estudio o trabajo. Habilidad a trabajar esta semana: la confianza
CAPRICORNIO (23 DIC-20 ENERO)
ACUARIO (21 ENERO-19 FEB)
PISCIS (20 FEB-21 MAR)
Haz una cosa a la vez. Ser multitareas genera estrés y efectos negativos en tu desempeño. Enfócate en una tarea: cometerás menos errores y serás más creativo. Habilidad a trabajar esta semana: el optimismo
Acepta el cambio, ve en este una cercanía para llegar al éxito y a la felicidad. Habilidad a trabajar esta semana: la creatividad
Aprende de los errores en vez de sentirte una víctima. Pide perdón cuando es necesario si has hecho algo que ha podido afectar a otras personas de manera negativa. Piden perdón de corazón y perdona. Habilidad a trabajar esta semana: disciplina
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Psique (+) I n t e l i g e n c i a
y
E m o c i o n e s
Para Revista de Psicología Positiva Angie Paola Gutierrez Puerta Alejandra Sánchez Oquendo Luisa Morales Mazo Juan Felipe Tobón Arboleda