Lic. Juliรกn Esteban Forero Sanabria
Con los sumerios, la Mesopotamia estaba dividida en ciudades-estados, (también podríamos llamarlas “cíudadestemplos”); cada ciudad con su territorio circundante era un templo, desde allí quien gobernaba se dirigía a la población
En esta etapa, la política y la religión estaban íntimamente relacionadas.
El gobernante era el príncipe-sacerdote. el “sumo sacerdote” o “patesi", que representaba a la divinidad, aunque no era el dios, como en Egipto.
El sacerdote administraba el gobierno de la ciudad, los ingresos del templo, conducía a los soldados, vigilaba el mantenimiento de los canales y organizaba el culto. El templo desempeñaba entonces un papel fundamental. Era el eje de la vida política, religiosa y también económica
Después, con la expansión de las ciudades sumerias, se produce un cambio en las atribuciones del patesi, quien se dedicará en adelante exclusivamente al culto. Jefes militares convertidos en reyes desempeñarán el resto de las funciones.
Estos reyes mantendrán la división de la Mesopotamia en pequeños Estados, con sus propios instituciones de gobierno. No dependía de un poder mayor regional ni imperial. Su único lazo de unión con el resto de ciudades-estados sumerias era la cultura: la escritura, las creencias y el lenguaje.
La vida cultural giraba en torno al Templo, denominados ziggurat (montañ a sagrada) construidos en forma de pirámide escalonada, lugar donde moraba el dios principal de la ciudad, que era el patró n de una actividad determinada. Por eso todas las tareas se hacían en su nombre. Pero, además en el Templo se realizaban actividades pedagó gicas, como enseñ ar a leer y escribir o sociales, como la ayuda a los necesitados.
Cerca de los ziggurat estaba el Palacio, donde residía el gobernante, al principio, un rey-sacerdote elegido por el pueblo, que luego, al convertirse el cargo en hereditario, recibió el título de Ensi, siendo considerado representante del dios de la ciudad, lo que le confería inmensos poderes.
No circulaba moneda, pero conocían el crédito, es decir, el préstamo con interés. Además constituyeron sociedades comerciales de eficiente funcionamiento. Los mercaderes se enriquecían con riesgo y gozaban de consideración social.
Los sumerios, autóctonos posiblemente, de lengua aglutinante, tenían numerosos dioses a los que invocaban su protección. Existía una trinidad de dioses mayores (Enlil, Enki, Ea ). También existían dioses y diosas patronos o protectores de una determinada ciudad ( el dios Ningirsu en Lagash, Shara en Umma).
COSMOGONIA. Nammu creó el cielo y la tierra (que se la dio a Ki y a An), Su hijo Enlil creó la atmósfera, el viento , la tormenta y separó el día de la noche. Enlil y Ki crearon los animales, y las plantas. Los hombres fueron creados por Enki y Ki para servir los dioses. La mujer (Eva). Ki creó con la costilla de Enki una diosa, Nin-ti, que significa mujer de la costilla. Una mala traducción añadió todo lo demás.
El paraíso. Enki creó un lugar donde el hombre podía vivir sin miedo a los animales (serpientes, hienas, escorpiones o leones) un lugar sin terror, pero Enki descubrió un comportamiento inadecuado en los humanos y los expulsó.
CaĂn y Abel. Dos dioses, Emesh (el verano) y Enten (el invierno), que inicialmente fueron encargados por Enlil , uno de las cosechas y la agricultura y otro de los animales y el ganado, pero que tuvieron una gran disputa. Un problema parecido hubo entre Ashnan (diosa del grano) y Lahar (diosa del ganado). DespuĂŠs de una borrachera se pelearon y Enlili y Enki tuvieron que mediar entre ambos.
El Diluvio Universal. Durante 7 días y 7 noches llovió sin parar pero Ziusudra, avisado por el dios Utu, creó un barco, donde guardó ejemplares de semillas y animales. Cuando dejó de llover, y apareció el sol, Ziusudra hizo el sacrificio de una oveja al dios Utu. Es lógico suponer que la religión de Abraham que huyó de Ur, posiblemente, al final de la III Dinastía (a fines del II milenio a.C.) tal vez por la invasión amorita, tuviese un fondo común con estas tradiciones mesopotámicas.