¿Qué está pasando con la sanidad? Qué está pasando con la sanidad? Quienes estos días han tenido que ir o están yendo al servicio de urgencias del Hospital Punta de Europa han sido y están siendo plenamente conscientes de que hay problemas, de que han tenido la desgracia, unos más otros menos, de tener que acudir a un servicio saturado y con muchas deficiencias. Al incremento en el número de usuarios, muy normal si consideramos que estamos en invierno y los procesos infecciosos de las vías respiratorias, que no la gripe, según dice el SAS, se han multiplicado porque las temperaturas han descendido de forma importante, a esto, se unen los recortes en Sanidad. Algo tan reiteradamente denunciado por los trabajadores de la salud y comprobado por los usuarios. La pasada semana, uno de los temas de debate en los medios de comunicación fue precisamente el de la sanidad. Se habló de “colapso” en la atención a los pacientes, no sólo en la sala de espera de las urgencias, como paso previo a la primera atención médica, sino también en relación a los enfermos que tienen que esperar en las salas de observación a que se quedara libre una cama en planta. Eso provocó, precisamente, el gran tapón. Todo ello por culpa del cierre de la camas desde este verano... los recortes. La saturación de la zona de sillones y de atención intermedia provoca saturación en el servicio de atención a pacientes menos graves. Al final, mal servicio, largas horas de espera...
El Servicio Sanitario Andaluz no tuvo más remedio que reconocer una situación más o menos fuera de la normalidad, no sólo en los hospitales de la comarca sino de todo el territorio andaluz y, de manera coordinada, se vio obligado a activar medidas excepcionales en los centros sanitarios. Podíamos hablar de problemas puntuales en la sanidad española. Sin embargo, vemos, comprobamos, que si se hace uso de este servicio público, y ya no hablo solo de urgencias, las deficiencias son cada vez más generalizadas. A la falta de material, que es palpable, se une el problema laboral. El Campo de Gibraltar es una de las zonas donde existe un mayor índice de contratación a tiempo parcial. Según denuncian los sindicatos, más de 700 personas tienen contratación eventual y en el mejor de los casos, están contratados al 75%. A pesar de que la atención del trabajador hacia el paciente es, por lo general, bueno y hay que agradecer el esfuerzo que realizan estas personas, es fácil comprobar que desempeñan su labor agobiados porque ya no pueden dar más de sí; porque a veces tienen que asumir un trabajo que no les corresponde o porque tienen que doblar esfuerzo y cubrir el espacio que debería ocupar otro trabajador. Nos estamos cargando, de un plumazo, lo que llegó a ser uno de los mejores sistemas sanitarios del mundo, la envidia de muchos países. Una sanidad pública modelo donde, eso sí, ha habido mucho despilfarro, donde el dinero ha corrido a veces sin control excesivo... Por tanto, es un problema de gestión y tan malo es derrochar como ser “tacaños” en materia de salud. Mientras la sanidad pública se deshincha, la privada se frota las manos ya que quien puede contrata un seguro médico para verse cubierto ante cualquier eventualidad. Hemos visto crecer en número las clínicas y la contratación de seguros médicos privados. Pero no nos confundamos, hay que defender una buena sanidad pública, que es un derecho al que tenemos que poder optar todos y donde la atención no debe diferenciar una clase social de otra. Algeciras, 20 de enero de 2015