Revista Primero y Diez NFL Super Bowl LII by Jorge Tinajero Esparza

Carta del editor

Semanas 9, 10 y 11

04 06

Un nuevo campeón

Semanas 12 y 13

Lecciones del primer Lombardi de Philadelphia

Semanas 14 y 15

Semanas 16 y 17

30 32

Playoffs

Los récords del Super Bowl LII

Los juicios del Super Bowl LII por Clark Judge

Así festejó la afición de Philadelphia

¿Serán los Eagles bicampeones en 2019?

Historia: el largo vuelo al primer Lombardi

Cuarto por cuarto: análisis del Super Bowl LII

12 14

Los momentos que cambiaron el Super Bowl LII Los jugadores clave del Super Bowl LII

Doug Pederson: el head coach ganador del Super Bowl LII

Los grandes ausentes del Super Bowl LII

Los momentos que sembraron duda en el campeón

¿El fin de una era en New England?

Los números del campeón

Depth Chart: Philadelphia Eagles en el Super Bowl LII

Minnesota: la gélida sede del Super Bowl LII

Historias tras el Super Bowl LII

El camino del campeón: la temporada 2017 de los Philadelphia Eagles

Nick Foles: el improbable MVP del Super Bowl LII

Semanas 1 y 2

Semanas 3 y 4

Semanas 5 y 6

Semanas 7 y 8

Carta del editor Sería mejor admitirlo: salvo para los aficionados de los Patriots, los Eagles y uno que otro escéptico, esta edición del Super Bowl lucía en principio un tanto fría, por decir lo menos, y hasta un mero trámite yéndonos al extremo. Y es que, después de todo, el desenlace del anterior Super Bowl parecía habernos quitado toda posibilidad de sorpresa. Los New England Patriots, la gran dinastía de la NFL en los últimos 16 años, habían demostrado una y otra vez que, sin importar el rival ni el marcador, habrían de encontrar el modo de prevalecer al final y protagonizar otra entrega del trofeo Vince Lombardi. Otra vez la misma historia. De nuevo la narrativa sobre la grandeza de Bill Belichick y los suyos; otra vez el recital interminable de los récords de Tom Brady, del cual lo único sorprendente parecía ser su condición de cuadragenario, y otra vez los Patriots parecían estar a tiempo para su habitual cita con la historia. Sin embargo, contra todo pronóstico y de manera paradójica aparecieron los más grandes lugares comunes en este deporte para recordarnos la lección: que el football se trata de un juego de equipo en el cual el conjunto termina siendo más importante que la mayor de las individualidades, y que, en un domingo cualquiera, todo puede pasar. Y lo que pasó en el Super Bowl LII fue una final inolvidable que perdurará como uno de los juegos más emocionantes y espectaculares de la época moderna de la NFL. Al final, los Philadelphia Eagles batieron sus alas por todo lo alto, trayendo consigo un viento de cambio y nuevas historias que contar. Un grupo peligrosamente fácil de subestimar por la ausencia de una estrella absoluta, cuyo historial de fracasos –algunos lejanos y otros no tanto– ocultaba el hecho de que se trataba de uno de los equipos más constantes, redondos y efectivos de la temporada 2017. Los Eagles no sólo derrotaron a los hasta entonces todopoderosos Patriots aquel 4 de febrero, sino que pasaron por encima de los dramas, del escepticismo, de los antecedentes y hasta de las cábalas. Volaron por encima de los “nunca antes” para escribir su historia con un orgulloso “por primera vez”. Y también por primera vez, Primero y Diez, el medio líder en español sobre NFL, cierra la temporada 2017 con una revista especial dedicada al campeón. Te presentamos a los Philadelphia Eagles que ganaron el Super Bowl LII con toda la cobertura de lo que aconteció en el juego: los momentos y jugadores clave, el MVP y el coach detrás de la hazaña, los récords conseguidos en este partido, las ausencias y jugadas que pudieron cambiar el destino de la historia; la sede del encuentro, los sonados festejos de toda una ciudad y todo lo necesario para enmarcar el momento que sus aguerridos aficionados y la otrora capital de los Estados Unidos no olvidarán jamás: el primero trofeo Vince Lombardi de su historia. Sirva, además, este trabajo especial como una revista de cierre de temporada que recuerda cada paso que los Eagles dieron hacia el campeonato, desde sus inicios en la liga hasta el recuento de sus partidos y sus estadísticas de la temporada 2017, así como el depth chart con los jugadores que se presentaron a la cita con la grandeza. Esta revista no es sólo el homenaje del Staff de Primero y Diez a los Philadelphia Eagles y a su afición, sino la despedida de una temporada más y nuestro agradecimiento a todos los fanáticos de la NFL que, como tú, nos honran con su preferencia, nos siguen en nuestros diversos canales, intercambian opiniones, comentarios y participan en actividades con nosotros a lo largo del año. Esperamos que disfrutes leyendo, compartiendo y coleccionando esta revista tanto como nosotros al hacerla. Atentamente, Carlos Mercado Rivera Editor en jefe Primero y Diez

Por Luis Obregón A todo aficionado de la NFL le encantaría que su equipo tuviera múltiples títulos de la liga, de ser posible Super Bowls, ya que por alguna razón olvidamos que este bello deporte tiene mucha historia, más allá del medio siglo en que las temporadas han culminado con dicho evento. Sin embargo se entrega sólo un trofeo Vince Lombardi al año y hasta el momento únicamente se ha hecho 52 veces, lo cual lo convierte en una presea absoluta, escasa y, por tanto, de un tremendo valor. Desde 1967, año en que se disputó el primer partido entre el campeón de la AFL y la NFL, hasta antes de comenzar la edición LII del ahora llamado Super Bowl, sólo 19 equipos formaban parte del club conformado por los ganadores de esta instancia; los Philadelphia Eagles se han convertido en el vigésimo equipo en lograrlo. Hay quienes pensamos que un campeonato en la NFL no es algo que se deba salir a defender en la temporada siguiente inmediata a la que se consiguió; es decir, a diferencia de deportes como el boxeo, donde el cinturón de campeón es

uno solo y cambia de manos cuando un contendiente vence a quien lo ostenta, en esta liga hay un trofeo por temporada, y aún si el equipo que lo ganó el año anterior no lo consigue nuevamente, nadie le quita realmente el trofeo. Tal vez de ahí viene el dicho de que “ganar un campeonato es algo que nadie te puede quitar”. Bajo esta lógica, el campeonato de la NFL puede ser tan efímero como el tiempo transcurrido entre el silbatazo final del Super Bowl hasta el día del inicio de la Agencia Libre, que es cuando oficialmente comienza el año nuevo de la NFL – es decir, algo así como un mes y medio o dos – ese día en que todo vuelve a ponerse en ceros. Sin embargo, con esa misma facilidad puede convertirse en algo eterno: nadie más será campeón de esa temporada específica, sin importar lo que pase y el tiempo que transcurra. El 4 de febrero de 2018, los Philadelphia Eagles lograron algo que durará por la eternidad; ganar el Super Bowl por primera vez en la historia de la franquicia.

Foto: Patrick Smith - Getty Images

Howie Roseman, vicepresidente ejecutivo de operaciones de football de los Eagles, realizó un trabajo envidiable de reingeniería en tan sólo dos años, siendo su movimiento más importante el de traer a Doug Pederson a dirigir al equipo y rodearlo de un staff muy capaz, con hombres clave como su coordinador ofensivo, Frank Reich y su equivalente defensivo, Jim Schwartz. Roseman le dio también un vuelco al roster utilizando todos los trucos del libro: selecciones del Draft (Derek Barnett) siendo agresivo en intercambios para obtener a Carson Wentz, con contrataciones de agencia libre (Alshon Jeffery) e intercambios (Jay Ajayi). Con esa receta construyó un equipo que dominó la temporada 2017 de principio a fin. A lo largo del año vimos a un equipo que anotaba puntos en cascada con su quarterback sensación Carson Wentz, quien entró con firmeza a las discusiones por el MVP de la temporada, y con una defensiva que presionaba bien al QB rival y que volaba hacia el balón.

Pero quizás lo más importante fue que este equipo de Philadelphia formó un núcleo resistente, construido a prueba de lesiones, ya que el mencionado Wentz vio su temporada interrumpida por una lesión de rodilla; a él se le sumaron jugadores tan importantes como Jason Peters, el tackle izquierdo que por muchos es considerado el mejor de la liga. A pesar de dichas ausencias, Pederson llevó a su equipo a obtener el mejor récord de la NFC gracias a un esquema que permitió que sus jugadores estuvieran cómodos. Con todo y ello, a pesar de lo demostrado en la temporada, los Eagles salieron siempre como “no favoritos” en los encuentros de postemporada. La culminación vino en el Super Bowl LII, cuando consiguieron más de 500 yardas de ofensiva total y 41 puntos en el marcador para superar a los New England Patriots, quienes al igual que en los dos encuentros anteriores relegaron a los Eagles a la posición de underdogs. Ahora, los Philadelphia Eagles tienen su primer trofeo Vince Lombardi que los reconoce como campeones de la NFL en la temporada 2017 y eso es algo que nadie nunca les podrá quitar.

Lecciones del primer Lombardi

de Philadelphia Por Ulises Harada

Una de las frases más populares es que la tercera es la vencida. Para los Philadelphia Eagles, esta se convirtió en una realidad una vez que el último pase de Tom Brady en el Super Bowl LII resultó incompleto, lo cual les dio la victoria 41-33 y una enorme razón para celebrar. Los Eagles por fin pueden presumir que tienen un trofeo Vince Lombardi y que son campeones en la época moderna de la NFL. Una de las frases más famosas de otro ícono de Philadelphia, el boxeador del cine Rocky Balboa, es: “No se trata de qué tan fuerte golpees, se trata de qué tan fuerte te peguen y seguir adelante, cuánto puedes soportar”. Ello aplica perfectamente para lo que vivieron los Eagles en la Temporada NFL 2017. Los golpes que tuvieron que soportar fueron las lesiones. Es cierto que todos los equipos de la NFL tienen que lidiar con este problema, pero el equipo de Doug Pederson tuvo una complicada racha de lesiones en jugadores clave y sin embargo continuaron luchando.

“No se trata de qué tan fuerte golpees, se trata de qué tan fuerte te peguen y seguir adelante, cuánto puedes soportar” El primero fue el pateador Caleb Sturgis, quien sólo participó en un juego. Pero apareció la figura de Jake Elliott, quien le dio la victoria a este equipo en innumerables ocasiones.

Uno de los capitanes, Darren Sproles, fue el siguiente en la lista para abandonar la temporada 2017. La ofensiva perdió a uno de sus elementos más dinámicos, sin embargo poco a poco figuras como Corey Clement y Wendell Smallwood trataron de llenar el vacío. En semanas consecutivas este equipo perdió al líder de su defensiva, el MLB Jordan Hicks, y a uno de los mejores tackles de toda la NFL, Jason Peters. A pesar de ello los Eagles seguían ganando y jugando bien. Este equipo lucía imparable para llegar al Super Bowl, sobre todo porque su QB de segundo año, Carson Wentz, estaba jugando a un nivel espectacular. Mientras él estuviera bien, los Eagles llegarían lejos… Sólo que no ocurrió así. Wentz sufrió una lesión que lo dejaría fuera de los playoffs y los Eagles dependerían de Nick Foles para conseguir su primer anillo de Super Bowl. Pocos creían que el QB suplente lo lograría, pero hablaremos de esa historia más adelante. Philadelphia soportó todos los embates, todas las dudas, el hecho de no ser considerados favoritos a pesar de tener el mejor récord en la NFC y de jugar todos los juegos en casa. Adoptaron esa faceta de underdogs a tal grado de que la vistieron con orgullo… como lo hizo Rocky. Y al igual que el personaje de Sylvester Stallone, los Eagles se fueron ganando poco a poco a todos los escépticos, sobre todo en postemporada. Primero evitaron que los Vikings se convirtieran en el primer equipo en jugar un Super Bowl en casa, lo cual casi todos aseguraban que ocurriría al inicio de los Playoffs. Luego, en el escenario más importante, enfrentaron a la dinastía más dominante de la NFL en los últimos 16 años y a uno de los mejores quarterbacks de la historia en un escenario donde no eran favoritos.

Foto: Elsa - Getty Images

Foto: David E. Klutho - Getty Images

Hay muchas lecciones que nos dejan los Eagles, sin embargo, creo que en el fondo la mayoría quería que Philadelphia ganara (en mayor parte por el “odio” que generan los Patriots). Y eso le hace muy bien a la NFL: un nuevo campeón, un equipo diferente y otras historias que contar. Any Given Sunday sigue vivo, el mantra de la paridad de la liga también lo está. Hace un par de años los Eagles fueron destrozados por su propio coach, Chip Kelly, y ahora son campeones.

A estos underdogs no les importó, no dejaron de golpear y sorprendieron al mundo.

EL LARGO VUELO AL PRIMER LOMBARDI Todo empezó en 1931 con los Frankford Yellow Jackets, un equipo de la NFL originario de un barrio de Philadelphia que fue campeón en 1926, a tan sólo dos años de ingresar a la liga. Cinco años después del título la franquicia quebró y abrió la puerta para que más de un año después, en 1933, la NFL concediera una franquicia de expansión a un consorcio encabezado por Bert Bell y Lud Wray. Se inspiraron en el águila azul de la Administración Nacional de Recuperación, un órgano administrativo del gobierno de Estados Unidos creado por Franklin D. Roosevelt. En su primera década tuvieron que aguantar varias temporadas malas pero a finales de los años cuarenta llegaron a tres finales consecutivas, ganando dos de ellas a los Chicago Cardinals y a los L.A. Rams en 1948 y 1949 respectivamente. Después de ese par de títulos tuvieron varios años de sequía hasta que llegó el año de 1960, en el que ganaron su tercer campeonato de la mano de su QB Norm Van Brocklin, actual miembro del Salón de la Fama. Los Eagles se convirtieron en el único equipo en vencer a Vince Lombardi y sus Green Bay Packers en los playoffs. Pero los malos años volvieron y los Eagles fueron comprados primero por Jerry Wolman en 1963. Después, en 1969, Leonard Tose impuso un récord de compra de una franquicia deportiva, tras pagar 16 155 000 USD por los Eagles. Vino la fusión de la NFL y la AFL en 1970, cuatro años después de que empezara la era del Super Bowl. Philadelphia fue colocado en la NFC East, teniendo como rivales a los New York Giants, los Dallas Cowboys y los Washington Redskins. Sin embargo, los Giants son su rival más antiguo, ya que se enfrentan desde 1933. En 1976 el equipo contrató a Dick Vermeil como head coach, quien venía de entrenar a UCLA. También de la mano de su QB, Ron Jaworski, llegaron dos veces consecutivas a playoffs. Parecía que el equipo estaba para cosas grandes cuando en 1980 por fin ganaron un campeonato de la NFC East, después tuvieron que vencer a uno de sus grandes rivales, los Dallas Cowboys en el partido de campeonato de la NFC y accedieron a su primer Super Bowl de la historia. Pero no les alcanzó, perdieron contra los Oakland Raiders de Jim Plunkett, Dave Casper y Ray Guy, acumulando entonces veinte años de sequía de títulos.

Por Andrés de Esesarte Ya son más de 84 años desde la fundación de los Philadelphia Eagles, uno de los equipos con mayor tradición en la historia de este deporte. Un equipo con altas y bajas, títulos y muchos años de espera, pero eso sí, una afición fiel y apasionada que los ha acompañado en este largo vuelo.

Vino la tragedia el año siguiente. El tackle defensivo All-Pro, Jerome Brown, murió en un accidente automovilístico, mismo que motivó al equipo y a los fans a buscar el trofeo Lombardi como ofrenda a Jerome. Rich Kotite, otrora coordinador ofensivo de Buddy Ryan, tomó el puesto de coach y llevó al equipo a una victoria de postemporada en 1982 en contra de los New Orleans Saints a pesar de perder a Reggie White ese offseason en la agencia libre. White no fue tan productivo en Green Bay, pero con Philadelphia se convirtió en el único jugador en conseguir 20 o más sacks en 12 juegos. En Philly consiguió un número más grande de sacks que de partidos jugados. En 1984 Kotite saldría del equipo tras perder sus últimos siete juegos y terminar con un récord de 7-9. Comenzó la era de Jeffrey Lurie, quien compró al equipo en mayo de 1994 por 185 MDD. Tuvieron un buen año en 1995, con 10 victorias y otro lugar en postemporada. 1996 fue un año lleno de cambios, el uniforme se transformó a un verde nocturno, Randall Cunningham dejó el equipo después de 11 temporadas y Brian Dawkins fue seleccionado en la segunda ronda del Draft. Al final de los noventa la era de Andy Reid arrancó en Philly. En 1999 los Eagles lo contrataron y draftearon al quarterback Donovan McNabb y el equipo empezó a levantar, llegando a cuatro juegos de campeonato de la NFC consecutivos entre 2001 y 2004. En 2001 fueron los Rams quienes los eliminaron. En 2002 llegó otro histórico, el corredor Brian Westbrook, ese año los Eagles consiguieron el Bye de primera ronda sin embargo los echaron los Buccaneers. 2003 parecía el año, consiguieron ser el número 1 de la conferencia pero la lesión de Westbrook en la semana 17 pesó mucho y perdieron la final de la NFC contra los Panthers. 2004 lucía perfecto. Iniciaron la temporada 13-1 antes de descansar a sus titulares y perder los siguientes dos juegos. Era su mejor temporada desde 1960 y parte de su éxito se debía a un receptor muy confiable, Terrell Owens, quien consiguió 1 200 yardas y 14 TD en 14 juegos. Después de vencer a los Falcons y a los Vikings llegaron a su segundo Super Bowl.

Vermeil salió del equipo en 1982 mientras que Tose vendió la franquicia a Norman Braman y Ed Leibowitz por 65 MDD de aquel tiempo. Tres años después, el equipo drafteó nada menos que a Reggie White y un año después llegaría Buddy Ryan, justo después de apalear a los New England Patriots en el Super Bowl con los Bears de Mike Ditka, Walter Payton, Jim McMahon, William Perry y Mike Singletary. Era una gran incógnita si Buddy Ryan podría destacar sin Mike Ditka pues no eran grandes amigos pero hicieron una gran mancuerna en los Bears. Philadelphia empezaba tenía grandes aspiraciones, Buddy Ryan era el nuevo head coach, el gran genio defensivo de los Bears del año anterior tuvo a su cargo a grandes jugadores como White, un veterano Ron Jaworski, Randall Cunningham, Andrew Waters, además de draftear jugadores como Seth Joyner y Cris Carter. Llegaron a los playoffs tres años consecutivos de 1988 a 1990, sin embargo, no lograron ganar en esa instancia. Ryan dejó al equipo en 1991.

Foto: Ronald Martinez - Getty Images

Foto: Patrick Smith - Getty Images

No lucía fácil. Eran los New England Patriots, venían de ganar su segundo Super Bowl el año anterior con Tom Brady y 14 juegos ganados esa temporada. Brady venía de lanzar poco más de 3 600 yardas, 28 TD y 14 INT además de su rating de pasador más alto hasta ese momento con 92.6. McNabb por su parte presumía mejores números, tenía 3 875 yardas, 31 TD y sólo 8 INT además de un rating de 104.7, el más alto en su carrera. No había terminado el primer cuarto y los Eagles ya habían entregado dos veces el balón, Rodney Harrison interceptó a McNabb y L.J. Smith soltó un balón. A pesar de las entregas, Donovan McNabb conectó con su TE Smith y abrió el marcador, pero Brady lo empató tras conectar con David Givens al final de la primera mitad y le daría la vuelta con Vrabel ya en el tercer cuarto. McNabb conectó con Westbrook todavía durante el tercer cuarto y se empató a 14. En el último cuarto Corey Dillon puso adelante a New England y consiguieron una ventaja de 10 con 8 minutos restantes. McNabb tiraría su segunda intercepción a Teddy Bruschi y eso prácticamente selló el juego. Con 1:48, Philly acortó la distancia a 3 puntos pero no les alcanzó. Harrison interceptó por segunda vez a McNabb y terminó con el juego. Los Patriots lograron su tercer Lombardi mientras que los Eagles regresaron a casa derrumbados. Siguieron años buenos y malos pero los fans no se resignaron. Los Eagles regresaron al juego de campeonato en la temporada 2008, sin embargo lo perdieron contra los Arizona Cardinals. En 2009 firmaron a Michael Vick, seleccionaron a Jeremy Maclin en el Draft y tenían a DeSean Jackson y a Brent Celek en gran forma y Trent Cole era la estrella de la defensa, pero por causa de los Cowboys regresaron a casa. Siguieron los años de incertidumbre, McNabb fue canjeado a Washington por una segunda ronda, Westbrook fue cortado del equipo y empezó la era del QB Michael Vick y su corredor estrella LeSean McCoy. El equipo nunca logró jugar a un nivel optimo y no llegó lejos en postemporada. Terminó la era Andy Reid y con ello empezó la de Chip Kelly. Proveniente de Oregon, en 2013 Kelly llegó como head coach y en 2014 también fue nombrado General Manager del equipo. El primer año fue bueno, sin embargo el equipo fue de más a menos con el tiempo. Nick Foles fue titular gracias a una lesión de Vick y esa temporada lanzó 19 TD consecutivos sin intercepción para arrancar, además igualó un récord de 7 TD sin intercepciones en un partido. Ese mismo año LeSean McCoy lideró la liga en yardas por tierra con más de 1 600, pero el equipo volvió a caer en postemporada contra Seattle. Una vez nombrado GM, Kelly empezó una serie de cambios de llamar la atención. Canjeó a McCoy por el LB Kiko Alonso, Cambió a Vick por Mark Sanchez, no pudo renovar a Jeremy Maclin, cambió a Nick Foles por el ganador del Heisman y siempre lesionado Sam Bradford, trajo al corner Byron Maxwell en un contrato grande desde la agencia libre; después canjeó a Alonso y Maxwell a Miami, firmó a Murray y a Ryan Mathews… ninguno de los dos tuvo mucho éxito y ambos salieron, Murray vía trade a Tennessee y Mathews fue cortado. Todo lo demás de la era Chip Kelly fue un desastre. Así llegó en 2016 Doug Pederson al equipo y con él Howie Roseman como GM. Sorprendieron a todos al canjear por Chase Daniel y además ir por el segundo pick del draft para seleccionar a Carson Wentz. Bradford salió del equipo a Minnesota tras la lesión de Teddy Bridgewater y

Wentz asumió la titularidad. Su primer año junto a Pederson fue discreto, aunque el talento se veía tras terminar con récord de 7-9, siendo el peor equipo de la NFC East. Pero 2017 sería diferente, el equipo se encargó de reforzarse, sin grandes aspavientos trajeron a veteranos probados como Alshon Jeffery y Torrey Smith a la posición de wide receiver, además de LeGarrette Blount al backfield; elevaron el nivel de su joven receptor Nelson Agholor y cambiaron a Jordan Mathews por Ronald Darby buscando reforzar la zona de defensive backs, donde ya tenían al veterano Malcolm Jenkins y al joven cornerback Jalen Mills. El equipo se veía fuerte con veteranos como el exPatriot y reciente campeón Chris Long, Patrick Robinson, Corey Graham y Timmy Jernigan en la defensa, además de novatos talentosos a la ofensiva como Corey Clement y Derek Barnett. Sin importar las bajas de Darren Sproles, Jordan Hicks, Jason Peters y Lane Johnson, tuvieron un inicio potente en la temporada y eran candidatos a llegar lejos hasta que con récord de 10-2 enfrentaron a los Rams. Lograron vencer al rival, sin embargo, perdieron a su jugador más importante, Carson Wentz, quien venía de lanzar 3 200 yardas, 33 TD y sólo 7 INT. A partir de ahí, todos dejaron de confiar en los Eagles. Llegó el tiempo para Foles, quien después de haber pasado por los Rams y los Chiefs se encontraba al borde del retiro antes de ser contratado por los Eagles de nueva cuenta para ser suplente de Carson Wentz. Cuando fue nombrado titular, pocos confiaron en él. Tuvo un gran partido contra los Giants lanzando 4 TD y poco más de 230 yardas. En postemporada jugó de manera sublime, no cometió errores y tuvo buena protección, pero fue principalmente contra los Vikings en la final de la NFC cuando dejó boquiabiertos a todos los incrédulos. Completó 26 de 33 pases para 352 yardas y 3 TD contra la mejor defensa de la liga. Pero no acabaría ahí. Los Eagles llegarían al Super Bowl LII bautizados como underdogs, el equipo menos favorecido, pero ahora con la meta más fija que nunca de llevar el trofeo Vince Lombardi a Philadelphia. El Super Bowl LII fue un partido emocionante, la determinación de ambos equipos fue clara pero los Eagles no iban a dejar que su revancha del Super Bowl XXXIX fuese arruinada. Estudiados todos los Super Bowls de los Patriots de Tom Brady, Philly salió agresivo, sin dejar dudas de que lo ganarían. Foles lanzó 373 yardas, 3 TD y 1 INT (misma que no fue su culpa) además de que recibió un pase de TD de parte de su tercer TE Trey Burton. Alshon Jeffrey, Torey Smith y Nelson Agholor fueron piezas fundamentales sin dejar de mencionar al novato Corey Clement, quien recibió 100 yardas en cuatro recepciones. Philadelphia lo saboreaba en los últimos minutos y, gracias a que su defensa logró aguantar, llegó tras más de 51 años el primer trofeo Vince Lombardi al nido. El coraje, corazón, buen trabajo y gran planeación dieron frutos a los de Doug Pederson.

Y la ciudad de Philadelphia, siempre leal a su equipo, festejó un título después de 58 años.

Cuarto por cuarto: análisis del Super Bowl LII Desde el U.S. Bank Stadium Por Ulises Harada

EL SUPER BOWL LII DEJÓ TRAS DE SÍ LA VICTORIA 41-33 DE LOS EAGLES CONTRA LOS PATRIOTS. ESTE ES UN RECUENTO DE LO MEJOR DE ESTE PARTIDO EN CADA UNO DE LOS CUATRO EPISODIOS.

Primer cuarto Sin duda vimos un dominio de los Eagles. Philadelphia recibió el balón y avanzó sin problemas en contra de una defensiva de New England que no tuvo respuesta para los pases de Nick Foles. Sin embargo, una vez que llegaron a la línea de goal en la primera serie ofensiva, los Patriots lograron limitar a los Eagles a tan sólo tres puntos. Algo similar sucedió en la primera serie ofensiva de Tom Brady, ya que también pudo avanzar sin problemas pero debió conformarse con tres puntos. En la segunda serie ofensiva a Philadelphia le bastaron tres jugadas para anotar. Un acarreo de LeGarrette Blount de 36 yardas puso la mesa para que Nick Foles encontrara en un pase profundo casi perfecto a Alshon Jeffery para una anotación de 34 yardas. Jake Elliott falló el punto extra. Al final de este cuarto los Patriots avanzaron hasta la yarda 9 de los Eagles con la oportunidad de poder darle la vuelta a este juego.

Segundo cuarto La defensiva de los Eagles hizo una jugada grande al tacklear a Brandin Cooks en tercera y 2 atrás de la línea del primero y diez. Stephen Gostkowski falló el FG después de un mal centro. La defensiva de los Patriots forzó el primer y único despeje del Super Bowl LII. En la siguiente serie ofensiva de New England Brandin Cooks salió lesionado tras un golpe por el lado ciego y no regresaría al partido.

Un par de jugadas después vino un momento clave que cambió el juego. Tom Brady no pudo atrapar un pase estando completamente solo después de una jugada de engaño en tercera y 5. Los Pats se la jugaron en cuarta oportunidad y no convirtieron. Philadelphia, tras recibir el balón, continuó con su gran éxito a la ofensiva. De nuevo una recepción espectacular de Jeffery puso a los Eagles en situación de anotar, ahora con una escapada de 21 yardas de Blount. Los Eagles aumentaron su ventaja 15-3 tras fallar la conversión de dos puntos. New England logró conseguir un gol de campo gracias a un pase pantalla de Rex Burkhead que los puso dentro de la yarda 30 de Philadelphia a la mitad del segundo cuarto. El ataque de los Eagles, sobre todo por tierra, continuó siendo dominante, sin embargo la buena fortuna le sonrió a los Patriots ya que Duron Harmon se encontró una intercepción en un pase que no pudo controlar Jeffery. Eso evitó que los Eagles aumentaran su ventaja. Esa intercepción sería el único error de los Eagles en todo el juego. Con cinco minutos por jugar en el segundo cuarto, Tom Brady logró montar una sorprendente serie ofensiva de 90 yardas, ayudado por un castigo de los Eagles y un gran pase a Chris Hogan. James White anotó en un acarreo de 26 yardas, pero le dejó más de dos minutos en el reloj a los Eagles y New England falló el punto extra. Philadelphia supo explotar a los linebackers de New England en todo el partido y un pase de 55 yardas a Corey Clement los puso en posición de anotar. En cuarta oportunidad y 1 Doug Pederson continuó con su estilo agresivo y gracias a un increíble pase de Trey Burton a Nick Foles los Eagles aumentaron su ventaja 2212, en un cuarto en el que su dominio fue casi absoluto.

Tercer cuarto Los Patriots recordaron que tienen al tight end más dominante de la NFL en Rob Gronkowski, y decidieron darle el balón en este cuarto. Cuatro recepciones, 68 yardas y una anotación para reducir la ventaja de los Eagles a tres puntos. Sin embargo Nick Foles seguía en un plan intratable (como MVP del Super Bowl) y la ofensiva de los Eagles seguía arrastrando a los Pats. Nelson Agholor mantuvo viva la serie ofensiva en tercera oportunidad tras romper una tackleada y una vez más Corey Clement se aprovechó de la defensiva rival para anotar en una recepción de 22 yardas. En ese momento Philadelphia tenía una ventaja de 10 puntos. Pero el QB de 40 años tenía mucha batalla por dar. Tom Brady llegaba a mitad de uno de sus mejores partidos como profesional y en tan sólo siete jugadas consiguió el TD con un pase de 26 yardas a Hogan. Este partido ya era un festival ofensivo y parecía que la primera ofensiva en fallar sería la que perdería. Una vez más la presión estaba del lado de Nick Foles y los Eagles, quienes vieron disminuir su ventaja de diez puntos al inicio de este cuarto a tan sólo un FG. La ofensiva de Philadelphia seguía luciendo imparable y, sobre todo, balanceada. Al terminar este cuarto la ofensiva de los Eagles ya estaba una vez más en zona roja.

Último cuarto

Foto: Gregory Shamus- Getty Image

Como en casi todos los Super Bowls de los últimos 18 años, el último cuarto nos regaló momentos increíbles y la edición LII no fue la excepción. El periodo comenzó a favor de los Patriots, ya que lograron frenar al ataque de los Eagles y con un FG de Jake Elliott estaban abajo sólo por seis puntos. Y de nuevo Brady, ayudado por sus corredores, logró avanzar a placer en contra de la defensiva del coordinador Jim Schwartz. Danny Amendola se encargó de poner a los Pats en zona roja y Gronkowski, con su segundo TD de la noche, puso por primera vez en ventaja a New England en el Super Bowl LII. ¿Podrían los Eagles seguir anotando? La respuesta fue sí. Philadelphia decidió no darse por vencido y sacar todas las jugadas especiales de su playbook e incluso jugársela en cuarta oportunidad de forma dramática para mantener con vida sus aspiraciones de conseguir el primer trofeo Vince Lombardi en la historia de la franquicia. De ahí Foles hizo el resto con pases precisos y logró un TD con Zach Ertz en tercera oportunidad. A pesar de que fallaron la conversión de dos puntos, los Eagles estaban arriba por cinco puntos. Sin embargo con 2:21 por jugar y con Tom Brady en posesión del balón nada estaba asegurado para los Eagles. Diez segundos después llegó el único error de los Patriots en este juego. Brandon Graham consiguió el único sack de este partido y forzó un balón suelto de Tom Brady. Derek Barnett recuperó el balón y los Eagles estaban a escasos dos minutos de ganar este juego. Sin embargo, New England limitó a Philadelphia tan sólo tres puntos y aún soñaba con poder empatar.

Foto: Hannah Foslien - Getty Image

58 segundos por jugar y lo único que necesitaba Tom Brady era una oportunidad de conectar un Hail Mary. Sorpresivamente, en la última jugada del partido con nueve segundos por jugar y 49 yardas por recorrer, el pase desesperado de Brady fue incompleto, aunque casi atrapado en un rebote por Danny Amendola. Así fue como los Eagles consiguieron el primer trofeo Vince Lombardi en la historia de la franquicia.

Foto: Patrick Smith - Getty Image

los momentos que cambiaron el super bowl Por Carlos Gorozpe Primer cuarto 2:38 por jugar TD Foles - Jeffery

Segundo cuarto 0:38 por jugar TD “Philly Special”

Los Eagles sabían que tenían que pegar primero y Nick Foles comenzó su magnífica actuación con este pase de 34 yardas a las manos de Alshon Jeffery, quien superó una pegajosa cobertura para anotar de seis puntos.

LA jugada del Super Bowl. Con cuarta y gol en la yarda 1 y 38 segundos por jugar, Nick Foles sacó del sombrero la jugada que podría marcar el resto de su carrera. El QB se atrevió a llamar una jugada de engaño donde él mismo terminó recibiendo el pase de anotación, una réplica de la jugada con la que Tom Brady soltó el balón.

SeguNdo cuarto 14:18 por jugar Falla de Gostkowski Uno de los pateadores más seguros de la NFL falló en un escenario en el que no suele equivocarse. Es cierto que gran parte de la culpa fue del holder, pero aún tuvo tiempo suficiente para hacer la patada. Tal vez tres puntos no parecen algo tan grave, pero la falla mantuvo a los Eagles con el momentum del juego y al final también pudieron servir para que New England mantuviera una distancia más cerrada con Philadelphia y no los ocho puntos finales.

Tercer cuarto 12:15 por jugar TD Brady - Gronkowski Si los Patriots se mantuvieron en el juego fue gracias al aporte de Gronkowski. El tight end de New England se cargó el equipo al principio del tercer cuarto y con una serie comandada por él, los Pats anotaron de seis para seguir en el marcador a una posesión de distancia.

Segundo cuarto 13:10 por jugar Lesión de Cooks

Último cuarto 2:23 por jugar TD Foles - Ertz

Justo cuando Tom Brady comenzaba a tomar ritmo, una jugada dejó fuera a uno de sus objetivos favoritos. Brandin Cooks fue tackleado de manera contundente y ahí se terminó su participación en el Super Bowl. El receptor suele ser de los hombres más buscados por Brady, esto le sumó toda la carga de trabajo a Rob Gronkowski, quien aunque sí pudo con la responsabilidad, no logró ser vital en las últimas dos series ofensivas.

Justo cuando los Pats ya habían volteado el marcador, Nick Foles armó una serie ofensiva de antología, mantuvo la calma en todo momento y bajó tiempo al reloj. La anotación de Ertz no estuvo exenta de polémica y fue uno de los puntos de mayor tensión en el juego, ya que era obvio que Philadelphia estaba muy cerca de conseguir el Super Bowl con esta anotación.

Segundo cuarto 12:00 por jugar La falla de Brady Al partido todavía le quedaba mucha historia pero ese pase pudo ser determinante, sobre todo en la parte anímica. Si Tom Brady hacia la recepción, seguramente habría escapado hasta la zona de anotación, pero en su lugar el QB dejó caer el pase de Danny Amendola y los Pats se fueron con las manos vacías. Por si no fuera suficiente, lo que sucedió a continuación fue otro golpe en contra de New England.

Último cuarto 2:15 por jugar Fumble a Brady Prácticamente aquí se terminó el Super Bowl. Brandon Graham por fin le pudo llegar a Tom Brady y lo hizo para safarle el balón en el momento preciso. Gracias al fumble, los Eagles consiguieron bajarle más tiempo al reloj y hasta sumar otros puntos que les dieron algo de tranquilidad para afrontar la última embestida de los Patriots. Si hubo un momento de gloria para los Eagles, seguro fue este.

LOS JUGADORES CLAVE DEL SUPER BOWL Por Carlos Gorozpe

No todo el protagonismo en el Super Bowl se reduce al MVP. Si bien es cierto que Nick Foles fue reconocido como el más valioso, otros jugadores también tuvieron una destacada actuación. Tanto de Patriots como Eagles, aquí va una recopilación de las mejores actuaciones de la edición 52 del juego por el campeonato.

Foto: Kevin C. Cox - Getty Image

QB Tom Brady 5 05 yds / 3 TD / 0 int Foto: Patrick Smith - Getty Image

QB Nick Foles 373 yds / 3 TD / 1 Int Foto: Mike Ehrmann - Getty Image MVP del Super Bowl y héroe inesperado de este juego por el campeonato. Foles fue todo lo que no esperábamos; mantuvo la calma en los momentos de mayor presión y aguantó estar abajo en el marcador con pocos minutos por jugar. Demostró que tiene cualidades para estar dentro de la élite, sólo le falta consistencia. Más allá del gran juego, el Super Bowl LII será recordado por una jugada, la Philly Special. Nick Foles, en 4ª y 1 se atrevió a mandar una jugada que nadie se esperaba. Foles abandonó el centro para colocarse como corredor, hizo como si no fuera a salir a pase y dejó que se desarrollara el engaño de corrida. El QB salió en el momento preciso para aislarse en las diagonales y atrapar el pase de TD de Trey Burton.

No ganó el sexto anillo de campeón pero Brady fue probablemente el mejor en el campo ese domingo. Como en sus mejores años, Brady se cansó de repartir el balón a sus receptores, comandó su ofensiva a placer en varios momentos y pudo haber ganado el juego de no ser por ese balón suelto que le costó tres puntos más en contra a New England. Tal vez la gente recordará su balón suelto o el pase que no atrapó, pero la serie que coronó en el arranque del último cuarto con un pase de anotación a Rob Gronkowski fue de lo mejor en la noche. Brady lució como ese comandante que no pierde la tranquilidad ni se deja dominar por sus emociones.

TE Rob Gronkowski 116 yds / 2 TD Foto: Kevin C. Cox - Getty Image Si alguien mantuvo vivos a los Pats toda la noche, ese fue Gronkowski. El tight end se echó el equipo al hombro con nueve recepciones, aunque estuvo desaparecido en la primera mitad del encuentro. Gronk simplemente es imposible de cubrir, sin duda el mejor objetivo en toda la NFL. Para prueba queda la primera serie de la segunda mitad. Brady y Gronkowski hicieron una dupla letal ante unos Eagles que sólo pudieron quedarse como espectadores. Gronk, además, anotó dos veces, el segundo pase con una cobertura muy cerrada. Si los Pats ganaban, Gronk hubiera estado en la pelea por el MVP del juego.

WR Danny Amendola 152 yds / 0 TD Foto: Gregory Shamus- Getty Image

WR Alshon Jeffery 73 yds / 1 TD

Esta vez no se hizo presente en el marcador ni tuvo una recepción milagrosa como ante los Falcons en el Super Bowl LI, pero Amendola fue el arma más productiva de Brady en toda la noche. El receptor demostró que, a pesar del bajo perfil, es quien mejor ejecuta el “sistema Belichick”.

No fue el receptor con más yardas del partido pero el Super Bowl no sólo se juega el domingo, sino es un evento de toda la semana. Jeffery lo entendió a la perfección y se “metió en la mente” de la secundaria de los Pats, que en cada jugada trataron de intimidarlo con golpes o coberturas en el límite de lo legal. El WR les cumplió la profecía y además, les anotó.

Para el WR no hubo una jugada en especial que destacar, simplemente alabar su constancia para estar descubierto ante las grandes cualidades de la defensiva de los Eagles. Cada vez que Amendola tomó el balón, consiguió 19 yardas en promedio.

K Jake Elliott 11 pts / 3 FG / 2 XP Foto: Kevin C. Cox - Getty Image

Foto: Gregory Shamus- Getty Image

Justo esa atrapada de touchdown fue su momento cumbre, no sólo del juego, sino tal vez de su carrera. En el primer cuarto, Jeffery le ganó en la carrera y el salto a su defensivo, atrapó el balón y luego soportó el impacto y los jalones para conseguir el primer TD del Super Bowl. Esa y aquella atrapada entre tres jugadores de los Pats y volteando hacia atrás.

DE Brandon Graham 2 tackles / 1 sack /1 fumble Foto: Kevin C. Cox - Getty Image

Sí, el pateador de los Eagles falló un punto extra que en su momento, cuando el partido estaba 33-32 parecía sumamente costoso. Elliott, un novato que al principio de la temporada fue cortado por los Bengals, no dejó que le pesara y cada vez que Philadelphia lo necesitó, ahí estuvo para sumar puntos y lavar su error.

Otro de los héroes del partido, aunque su labor en el Super Bowl no sólo se resume a una jugada. Durante todo el encuentro Graham estuvo presionando a Brady. Justo la kriptonita del QB de los Pats, quien varias veces se vio errático por la presión de Graham. En un partido donde las defensivas no aparecieron mucho, su aporte fue decisivo en el partido.

Su momento más importante llegó en la última serie ofensiva de los Eagles, Elliott tuvo la responsabilidad de conectar un gol de campo de 46 yardas a un minuto del final del juego y ampliar la ventaja a ocho puntos, con lo que prácticamente finiquitó las esperanzas de los Pats.

Y es que Graham quebró el juego con un manotazo, uno que le zafó el balón a Brady, provocando el balón suelto que recuperaría un compañero a casi dos minutos del final del partido. El defensive end prácticamente ganó el Super Bowl para los Eagles en esa jugada.

RB LeGarrette Blount 90 yds / 1 TD Foto: Kevin C. Cox - Getty Image

El Super Bowl LII podría resumir la carrera de Blount, el corredor de Philadelphia prácticamente pasó desapercibido y sin embargo, sumó 90 yardas y una anotación contra su ex equipo. Que nadie dude del aporte de este bulldozer humano quien, en silencio, se coronó bicampeón de un deporte que mejores corredores mejor valorados que él han jugado por décadas y ni un anillo tienen en su colección. Blount sin duda querrá revivir una y otra vez su visita a la zona de anotación en el Super Bowl LII, un acarreo de 21 yardas donde el RB esperó a que los bloqueos fueran ejecutados correctamente, luego pisó el acelerador y fue imposible evitar que él y los Eagles sumaran seis unidades más al marcador.

Los grandes ausentes del Super Bowl LII Por Jorge Tinajero La máxima aspiración de los jugadores de la NFL no es sólo estar presentes en un Super Bowl, sino tener participación y contribuir con su equipo para conseguir la victoria. Sin embargo algunos, a pesar de que sus equipos lleguen al Súper Domingo y en otras circunstancias hubieran sido protagonistas, al momento de la verdad tienen que quedarse como meros espectadores del gran juego que define al campeón.

ESTOS JUGADORES SE CONVIRTIERON EN LOS GRANDES AUSENTES DE ESTA EDICIÓN DEL SUPER BOWL.

CB Malcolm Butler, New England Patriots

Foto: Kevin C. Cox - Getty Images

Gran sorpresa causó ver a Butler en la banca durante el Super Bowl, mirando como la ofensiva de Philadelphia hacía daño a su equipo en situaciones cruciales en las que el cornerback de New England pudo haber contribuido. Bill Belichick tomó la decisión de dejar fuera del encuentro a Butler por causas aún desconocidas. Nadie sabrá si la historia pudo haber sido diferente con Butler en el terreno de juego, aunque estoy seguro de que habrían tenido mejores oportunidades para detener el juego aéreo de los Eagles.

QB Carson Wentz, Philadelphia Eagles

Foto: Icon Sportswire - Getty Images

Si bien Nick Foles terminó siendo un factor importante para la victoria de Philadelphia, Carson Wentz fue un gran ausente en el Super Bowl tras la lesión que lo dejó fuera por el resto de la temporada. El quarterback de segundo año colocó a su equipo en la mejor posición para llegar a playoffs, dándole ventaja suficiente para terminar en primer lugar de la NFC y jugar como local en la post temporada, lo que aprovecharon muy bien ante Falcons y Vikings. Este equipo no fue favorito para ganar en ningún juego de playoffs con la baja de Wentz, aunque al final resultaron campeones pese a su ausencia.

Las defensivas de ambos equipos

Foto: Patrick Smith - Getty Images

Una intercepción fortuita de New England y un sack clave de Philadelphia que terminó en balón suelto y recuperado. Fuera de esas jugadas el juego de ambas unidades quedó a deber en el Super Bowl, siendo más decepcionante la actuación del equipo de la NFC, cuya defensiva había llegado a este juego con gran ritmo y mostrando una gran capacidad para dominar a las ofensivas. 74 puntos se anotaron entre ambos equipos en un encuentro donde hubo sólo una patada de despeje, 538 yardas totales de los Eagles y 613 yardas de los Patriots. Simplemente los defensivos no acudieron a jugar.

WR Brandin Cooks, New England

Foto: Icon Sportswire - Getty Images

Este jugador tuvo muy poca participación en el encuentro antes de salir lesionado a los pocos minutos de haber comenzado el segundo cuarto, al recibir un fuerte golpe de Malcolm Jenkins. Si bien Tom Brady terminó con más de 500 yardas por pase y tres jugadores con más de 100 yardas por recepción, sin Cooks perdieron la oportunidad de la jugada grande y de la amenaza en rutas profundas.

DT Fletcher Cox, Philadelphia Eagles Si hubo un jugador sobre el cual se tenían altas expectativas e incluso se creía que sería la pesadilla del quarterback de los Patriots, era Cox. Se mencionaba que una de las claves del éxito de la defensiva de Eagles era la presión sobre Brady por el centro de la línea, pero nunca vimos que fuera factor. Cox terminó con una sola tackleada en el Super Bowl y pocas veces vimos que ganara el duelo ante la línea ofensiva de New England. Su juego poco relevante lo califica como un ausente.

Foto: Christian Petersen - Getty Images

momentos que sembraron la duda en el campeón Por Jorge Tinajero

El Super Bowl LII fue un duelo muy apretado durante los 60 minutos de juego e incluso nos hizo pensar en la posibilidad de ver los tiempos extra por segundo año consecutivo, cuando el equipo de New England estaba abajo por ocho puntos y en posesión del balón con poco menos de un minuto de juego. Hasta la última jugada tuvo su emoción, al ver un Hail Mary de Tom Brady buscando que alguno de sus compañeros pudiera quedarse con el balón, aunque no fue así. Los Eagles terminaron siendo campeones de esta edición del Super Bowl, aunque no les resultó fácil.

Foto: Christian Petersen Getty Images

1. La intercepción de Duron Harmon

2. Brady y Gronkoswki abriendo la segunda mitad

Los Eagles ganaban 15-6 en el segundo cuarto con 7:24 en el reloj y vino al terreno la ofensiva de Nick Foles. No se veía gran oposición por parte de la defensiva de los Patriots y los Eagles seguían teniendo éxito con su juego terrestre y los envíos precisos de su QB. Ya estaban en el terreno del rival cuando el quarterback de Philadelphia lanzó un pase profundo buscando a Alshon Jeffery ante la marca del CB Stephon Gilmore. El wide receiver de los Eagles no pudo quedarse con el ovoide y, en su desesperación por conseguirlo, lo bateó hacia adentro del terreno de juego para que Duron Harmon llegara a tiempo a quedarse con la intercepción.

Otro momento en el que parecía que los Eagles se vendrían abajo ocurrió en la primera serie ofensiva de los Patriots en la segunda mitad. Fue una serie en la que Tom Brady buscó en todo momento a su tight end Rob Gronkoski, siendo una combinación muy efectiva. La ventaja física de Gronk sobre cualquier defensivo de la secundaria de Philadelphia fue evidente ante la asignación de Malcolm Jenkins con el running back en turno de los Pats. Brady lanzó cinco pases y en cuatro consiguieron avances importantes ante la cobertura de Corey Graham.

Foto: Elsa - Getty Images

Con el balón en su posesión, a New England le bastaron siete jugadas para recorrer 90 yardas y conseguir el touchdown que los ponía a tres puntos de empatar el juego, esto por la falla en el punto extra de Stephen Gostkowski. Parecía que todo estaba listo para el regreso de los Patriots en la segunda mitad.

La serie terminó en touchdown del mismo Gronkowski para ponerse nuevamente a tres puntos de los Eagles y ocupando 2:45 del reloj en el tercer cuarto. Había mucho tiempo por delante.

4. Tom Brady con el balón a casi dos minutos del final 3. La voltereta de los Patriots El tercer aviso vino cuando Philadelphia volvió al ataque al final del tercer cuarto. El Super Bowl se había convertido en un duelo ofensivo y, serie tras serie, los equipos conseguían anotar touchdowns. Los Eagles ganaban 29-26 cuando finalizaba el tercer cuarto. Con el balón en la yarda 16 de New England, enfrentaban una tercera oportunidad y tres yardas por avanzar. Nick Foles buscó a Nelson Agholor con un pase lateral, pero Marquis Flowers leyó bien la jugada y logró detenerlo ocho yardas detrás de la línea de golpeo. Philadelphia alcanzó a conseguir un field goal por parte de Jake Elliott para sacar ventaja de seis puntos. Pero los Patriots llevaban buena racha a la ofensiva y tras diez jugadas y 75 yardas vino el segundo pase de touchdown de Brady para Gronkowski. New England tomó así ventaja de un punto por primera vez en el juego y parecía que el control estaba en sus manos.

Foto: Boston Globe Getty Images

Foto: Andy Lyons Getty Images

ESTOS SON LOS CUATRO MOMENTOS QUE SEMBRARON LA DUDA EN QUE PHILADELPHIA SERÍA CAMPEÓN.

Después de conseguir otra anotación, los Eagles enfrentaban otro momento clave en el juego. Quedaban 2:21 en el partido, el balón estaba en la yarda 25 de los Patriots, con su ofensiva imparable comandada por Tom Brady, además de contar con un tiempo fuera. Un panorama muy favorable para New England, y muchos pensábamos que el escenario estaba puesto para que los Pats ganaran su sexto anillo de Super Bowl. La primera jugada de la serie fue un pase corto a Gronkowski para ocho yardas y tras la cual el TE salió del terreno de juego. Hasta ese momento, la línea ofensiva de New England había tenido una gran desempeño protegiendo a su quarterback, pero vino el desastre. El DE Brandon Graham enfrentaba a Shaquille Mason y tras arrastrarlo, estiró su brazo sobre Brady, alcanzando hacer contacto con el balón para causar el fumble que fue recuperado por Philadelphia. Esa jugada fue clave para que los Eagles consumieran cerca de un minuto y aumentaran su ventaja a ocho puntos. New England, sin tiempos fuera y con un mal regreso de kickoff que los dejó en su propia yarda nueve, debía recorrer 91 yardas en menos de 60 segundos. Su misión se fue complicando hasta que la defensiva secundaria de los Eagles evitó que el pase Hail Mary de Brady fuera completado por Gronkowski y así Philadelphia obtuvo su primer trofeo Vince Lombardi.

Por Carlos Gorozpe

Rankings NFL:

Ofensiva total: 7° Ofensiva por pase: 13° Ofensiva por tierra: 3°

Defensiva Total: 4° Defensiva contra el pase: 17° Defensiva contra la carrera: 1°

Totales de equipo: Total de primeros y dieces: 338 Por tierra: 108 Por pase: 193 Por castigo: 37

Conversiones en tercera oportunidad: 96 de 230 Conversiones en cuarta oportunidad: 17 de 26

Sacks: 38 Goles de campo: 29 de 34

Touchdowns: 53 Por tierra: 9 Por aire: 38 De la defensiva: 6

Por pase: Carson Wentz Intentos: 440 Completos: 256 Yardas: 3 296 Touchdowns: 33 Intercepciones: 7

Líderes:

Total de yardas ofensivas: 5 852 Yardas por tierra: 2 115 Yardas por aire: 3 737

Tiempo de posesión promedio por juego: 32:41 Diferencial de turnovers: +11

Por recepción: Zach Ertz Recepciones: 74 Yardas: 824 Recepción más larga: 53 yardas Touchdowns: 8

Por tierra: LeGarrette Blount Intentos: 173 Yardas: 766 Carrera más larga: 68 yardas Touchdowns: 2

Goles de campo: Jake Elliott De 20-29 yardas: 5 de 5 De 30-39 yardas: 7 de 7 De 40-49 yardas: 12 de 13 De 50+: 5 de 6 Gol de campo más largo: 61 yardas

Sacks: Brandon Graham: 9.5

Intercepciones: Patrick Robinson: 4

Ofensiva

Halapoulivaati Jason Zach Torrey 17 Alshon 61 Stefen 79 Brandon 65 Lane 13 Nelson Jeffery 72 Vaitai Wisniweski 62 Kelce Brooks Johnson 86 Ertz Agholor 82 Smith 14 Marcus 87 Brent 10 Mak Foles Johnson Celek Hollins 9 Nick

QB Sudfel 7 Nate 29 LeGarrette Blount

36 Jay Ajayi Corey 30 Clement Defensiva

DE CB Mills 31 Jalen Robinson 21 Patrick

91 Fletcher Cox Destiny 97 Vaeao

Graham 56 Brandon Long 56 Chris

Jernigan 93 Timmy Beau 94 Allen

Kendricks 95 Mychal

Ellerbe 57 Dannell

PK Elliott 4 Jake

Curry 75 Vonny Dereck 96 Barnett

CB Darby 41 Ronald Rasul 32 Douglas

Bradham 53 Nigel

McLeod 23 Rodney Graham 24 Corey

Equipos Especiales

KR/PR Barner 38 Kenjon

Jenkins 27 Malcolm Watkins 26 Jaylen

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Lovato 41 Rick

Jones 8 Donnie

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Por Luis Obregón 2017 fue una temporada en la que poco se le puede reprochar al equipo de Philadelphia. Ante nuestros ojos, el quarterback novato de 2016 Carson Wentz se fue convirtiendo en una estrella de la liga, liderando a su ofensiva con seguridad y una gran habilidad para hacer jugadas sin importar la circunstancia, tan sólo en su segundo año de carrera. Su ofensiva terminó en el top-10 en yardas totales, encabezó la lista de pases de touchdown con 38 contra sólo 9 intercepciones y terminó en el top-3 en puntos anotados.

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Por su parte, algo igual de interesante sucedió a la defensiva, donde Jim Schwartz, al mando de ese cuadro, conformó un grupo al que difícilmente se le podía correr –promediaron sólo 79.2 yardas por partido, la mejor marca de la liga – haciendo a sus rivales unidimensionales y facilitando el trabajo de la secundaria, por lo que terminaron en el top-5 en intercepciones, con 19. Cuatro jugadores de la defensiva de los Eagles terminaron la temporada con tres o más intercepciones: Jalen Mills, Rodney McLeod, Patrick Robinson y Ronald Darby. Mientras que ejerciendo presión al QB, Brandon Graham se anotó 9.5 sacks, complementados por los 15.5 sumados entre Chris Long, Fletcher Cox y el novato Derek Barnett.

La conexión entre Wentz y su receptor Alshon Jeffery fue fructífera, así como el involucramiento del TE Zach Ertz. Entre estos dos jugadores consiguieron 17 touchdowns, casi la mitad del total del equipo.

Partido a partido, este equipo demostró que era un digno contendiente al campeonato.

El éxito de la ofensiva no sólo vino por el brazo de su quarterback, el ataque terrestre formó parte integral de la ofensiva (top 3 en yardas por tierra por partido), lo cual abría los espacios necesarios para una ofensiva diversa.

A continuación la crónica su recorrido al trofeo Vince Lombardi a través de cada juego.

Semana 1 eagles VS redskins

Philadelphia arrancó el año con una sólida victoria ante uno de los que en ese momento eran favoritos para llegar a playoffs y dominar la NFC East: los Washington Redskins de Kirk Cousins. Carson Wentz dominó a placer a la defensiva de los Redskins, consolidándose como uno de los mejores pasadores de la semana. Wentz acumuló 307 yardas y dos pases de touchdown, actuación que se combinó con una gran demostración defensiva de los Eagles, quienes dominaron la línea con su front-7. Philadelphia se cansó de presionar a Cousins, lo que provocó dos fumbles, una intercepción y cuatro sacks. Fletcher Cox fue el líder de esta unidad. En ofensiva, además de Wentz, los Eagles mostraron músculo con sus receptores. Zach Ertz y Nelson Agholor superaron las 80 yardas por pase cada uno. El RB LeGarrette Blount, además de correr para 46 yardas, atrapó un pase de anotación. Desde el primer día de la temporada, Philadelphia enseñó que la creatividad sería su fuerte. Foto: Mitchell Left - Getty Images Foto: Mitchell Left - Getty Images

Semana 2 eagles VS chiefs Los Chiefs propinaron la primera de las tres derrotas de los Eagles en el año. Un inspirado Alex Smith continuó la campaña en plan aniquilador y Philadelphia no pudo hacer mucho a pesar del gran partido que vivimos ese día. Para el recuerdo quedará la segunda anotación del RB de Kansas City, Kareem Hunt. Esto puso el marcador 14 puntos arriba para los Chiefs, dejando 2:14 minutos de juego para los Eagles. En ese momento sabíamos que el equipo de Kansas City sería el ganador a pesar del buen intento de Philadelphia por tratar de empatar en la última jugada. Los errores fueron lo que más pesó a Philadelphia ese día. Por ejemplo, al final de la primera mitad, Darren Sproles en un regreso de patada hizo fumble con crédito para el long snapper James Winchester, quien lo contactó casi de frente para hacerlo perder el balón. KC recuperó la posesión del balón y obtuvo tres puntos del error de Sproles para ponerse arriba 6-3. Al final del juego vino el error de Wentz, quien ejecutó un pase pantalla buscando a Sproles, pero fue tan bajo que le pegó en el casco a Justin Houston para que Chris Jones lo interceptara. Los Chiefs volvieron a sacar puntos de un error de los visitantes y así sentenciaron el juego.

Semana 3 giants VS eagles Los Giants ya daban muestras de que sufrirían mucho esta temporada, pero el día de campo estuvo a punto de convertirse en una pesadilla para los Eagles, quienes consiguieron ganar el partido en los segundos finales gracias a un gol de campo de 61 yardas.

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Jake Elliott se convirtió en el héroe del juego con ese field goal de 61 yardas cuando quedaba un segundo en el reloj. Esto sin restar mérito a la atrapada del WR Alshon Jeffery, quien se salió del terreno antes de que el reloj expirara; sin embargo, conectar una patada de tan largo yardaje fue única y exclusivamente virtud del novato de Philadelphia.

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Ese día los Eagles tenían ventaja de 14-0 y con un Eli Manning tan errático, todo parecía sencillo para Philadephia. Los Giants estaban muertos mental y físicamente hasta que un pase de 10 yardas al WR Odell Beckham Jr. los revivió. Wentz tuvo uno de sus peores partidos al completar apenas 176 yardas y un touchdown.

Semana 4

eagles VS chargers Los Eagles se metieron a Los Angeles para derrotar a los Chargers gracias a su juego terrestre y las jugadas de engaño que sacó Carson Wentz en momentos del partido. Aquí se pudo notar el equilibrio que existía entre ofensiva y defensiva, ya que ambas unidades consiguieron hacer su aporte para ganar el partido. La figura, sin duda, fue LeGarrette Blount, quien además de sumar 136 yardas se mandó una escapada de más de 50 yardas en la que se dio el lujo de “sentar” con un stiff arm a su perseguidor. Justo después de esa escapada, los Eagles sorprendieron dándole el balón a Wendell Smallwood, quien entró por el centro en un corto acarreo.

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Quien también merece mención aparte es Jake Elliott. El novato pateador anotó 14 de los 26 puntos que puso Philadelphia en el marcador. Aquella tarde Elliott se fue 4 de 4 con un field goal de 53 yardas. A nivel de equipo, fue la primera vez que los Eagles se vieron como una fuerza dominante.

Semana 5 cardinals vs eagles Se pensaba que este partido sería un duelo interesante y cerrado, sin embargo Philadelphia, otra vez de la mano del QB Carson Wentz, superó con facilidad a la talentosa pero decepcionante defensiva de Arizona. Aunque los Eagles dominaron el juego a placer, la victoria se selló durante el tercer cuarto. Carson Wentz lanzó un pase de 72 yardas a su WR Nelson Agholor para poner el marcador 31-7 y liquidar el juego ante los Cardinals. Wentz enseñó los colmillos y el cuerpo de receptores hizo el trabajo restante. Difícilmente podremos encontrar en la campaña a un grupo más talentoso que este: WR Alshon Jeffery, WR Nelson Agholor, WR Torrey Smith y TE Zach Ertz. Ante los Cardinals se combinaron para 255 yardas y 3 TD. Foto: Leka Steleers - Getty Images

Foto: Icon Sportswire - Getty Images

Semana 6

eagles vs PANTHERS Partido de jueves por la noche en el que la defensiva de Philadelphia comenzó a ganarse el respeto del resto de la NFL. Tal vez permitió muchos puntos, pero su aporte para que la ofensiva lograra carburar es algo innegable. Ello, combinado con el genio de Wentz nos dió un equipo dominante en la NFC East. Aquella noche los Panthers tenían una ventaja de 10-3 y parecía que Cam Newton orquestaría una nueva ofensiva de puntos hasta que los frontales de Philadelphia lo golpearon y el balón salió directo a la secundaria. Con ese cambio de posesión, los Eagles sumaron siete puntos más. Dos sacks y tres intercepciones fueron el botín de ese día para la defensiva de los Eagles. Con esta ayuda, Carson Wentz apenas necesitó 222 yardas para conseguir tres pases de anotación. Sus receptores demostraron cada uno su valía. Lo mismo ayudó y anotó Ertz que obtenían éxito con Agholor o Jeffery. Aunque pocos lo presagiaban, los Eagles ya comandaban la NFC East con récord de 5-1.

Semana 7 Foto: Icon Sportswire - Getty Images

redskins VS eagles Phildealphia dio un golpe de autoridad en Monday Night Football y se consolidó como el rival a vencer en la NFC East. No sólo eso, sino que además ese día se convirtieron en el candidato número 1 de la Conferencia Nacional tras vencer a Washington 34-24. Brandon Graham presionó y desequilibró la balanza en favor de los Eagles cuando le pegó en el brazo a Kirk Cousins, quien acto seguido soltó el balón justo a donde estaba Corey Graham, quien interceptó el balón con 8:39 por jugar en el último cuarto y con el marcador 31-17 en favor de los Eagles. Gracias a este cambio de posesión, Philadelphia consiguió un field goal más, que lapidó el encuentro. El nivel mostrado por Carson Wentz hasta este punto era todo lo que los fanáticos en Philadelphia soñaban cuando lo eligieron en el Draft. Wentz encontró su mejor forma esta noche; cuando tenía que huir de la presión escapó, consiguiendo más de 60 yardas por tierra. Pero cuando lanzaba, Wentz lo hacía con una precisión asombrosa. Esos cuatro pases de touchdown lo metieron de lleno a la contienda por el MVP.

Semana 8 49ers vs eagles Aunque el juego comenzó algo cerrado, todo salió como se suponía que tenía que pasar. Los Niners, que estaban 0-7, se medían a los Eagles de 6-1. Dicha diferencia en el récord también se plasmó en el resultado final, con un Carson Wentz afinado y una defensa de los Eagles más agresiva aún. Para el QB de los Eagles la tarde terminó con 211 yardas, dos touchdowns y una intercepción. Pero del otro lado se encontraba C.J. Beathard y sus dos intercepciones fueron más costosas que la de Wentz. El ataque terrestre de Philadelphia también hizo su trabajo para sumar en conjunto más de 100 yardas entre Clement y Blount. Los Niners al final ni siquiera consiguieron ser un rival incómodo para los Eagles. La prueba está en que alguien como Alshon Jeffery sólo tuvo dos recepciones, pero ambas fueron de 31 yardas y una de ellas a la zona de anotación. Así de dominante fue el juego de Philadelphia ese día. Foto: Icon Sportswire - Getty Images

Semana 9 broncos vs eagles Lo que parecía un duelo interesante, sobre todo cuando la defensiva de los Broncos enfrentaba a la buena ofensiva de los Eagles, resultó en una paliza en favor de Philadelphia. Fue un dominio total y una exhibición de poder del mejor equipo de la NFL tras nueve semanas de temporada. Jay Ajayi demostró que llegó para quedarse a Philadelphia y consiguió anotar por tierra por primera vez en el año a la defensiva de Broncos. El acarreo de el recién llegado fue de 46 yardas y al anotar dejó un marcador de 31-9, con lo que ponía la situación muy complicada para los visitantes con una ofensiva sin muchas mejoras con Brock Osweiler en los controles. Alshon Jeffery, consiguió seis pases completos para terminar como líder en yardas por recepción, además de anotar en dos ocasiones. La defensiva consiguió tres sacks y dos intercepciones. Los Eagles jugaron bien, agresivos y causando presión en un quarterback susceptible a cometer errores bajo esa situación. Todo les salió bien esta tarde.

Semana 10 Bye Week

Philadelphia llegó a su semana de descanso de la mejor forma posible, con apenas una derrota y después de la aplastante exhibición ante Denver. Lo mejor fue que lograron recuperar a algunos de sus lesionados y aprovecharon esa semana para que Jay Ajayi se adaptara más al grupo. Como extra, tuvieron dos semanas para llegar a otro duelo divisional con toda la confianza del mundo.

Semana 11 eagles vs cowboys Mientras Philadelphia llegaba descansado al que probablemente es el duelo divisional que más le importa, Dallas simplemente no le encontraba la vuelta a una temporada llena de altibajos. Los Eagles llegaron presumiendo récord 9-1, Dallas tenía a cuestas un 5-5; la diferencia quedó plasmada también en el campo.

Mientras estuvo sano, Carson Wentz peleó palmo a palmo la carrera por el MVP de la temporada a Tom Brady y Todd Gurley. Aquella tarde en Dallas, el QB de los Eagles lanzó para 168 yardas y dos touchdowns. La defensiva de los Cowboys no estuvo ni cerca de acercarse a un Wentz que jugó a placer.

Sin embargo, por increíble que parezca, la defensiva de Philadelphia fue la auténtica figura del partido. Dak Prescott fue exhibido de fea forma al lanzar tres intercepciones. No todas fueron su culpa, pero el daño fue el mismo para el equipo que lideraba el novato sensación de 2016.

Semana 12 Bears vs Eagles

Un duelo cargado hacia los locales, quienes resolvieron el encuentro en los primeros 30 minutos para ganar 31-3. No hubo una oportunidad real de Chicago para ganar este juego y los de Philadelphia continuaron mostrando su gran nivel.

Tal vez el momento cumbre llegó cuando Carson Wentz lanzó hacia el centro de la zona de anotación para que Alshon Jeffery consiguiera el touchdown al final del segundo cuarto y así poner el marcador 24-0. Por como la defensiva estaba limitando el juego terrestre de Chicago, fue imposible que Mitch Trubisky y compañía pudieran regresar. El quarterback de los Eagles mantenía así intacta su gran temporada, de lleno en la pelea por el MVP 2017. Esa tarde mostró gran presencia en la bolsa de protección, leyendo bien a la defensiva y una vez que la jugada iniciaba fue capaz de realizar la progresión de sus opciones para lanzar el pase, incluso con la presión encima.

Foto: Mitchell Leff - Getty Images

Semana 13

Foto: Mitchell Leff - Getty Images

eagles vs seahawks

Llegó la segunda derrota del año para Philadelphia. Esa semana dejaron ir la oportunidad de amarrar su boleto a playoffs, Seattle encontró la fórmula para detener a Carson Wentz y su gran ofensiva fue limitada a tan sólo 10 puntos.

El otro candidato a MVP de esta temporada, Russell Wilson, lanzó un pase de TD a J.D. McKissic de 15 yardas con 7:29 por jugar en el último cuarto para aumentar la ventaja de los Seahawks a 14 puntos. A partir de ahí, Philadelphia no pudo reponerse.

Lo que más afectó a Philadelphia fue la cantidad de jugadas que dejaron escapar y hubieran hecho de este juego algo más cerrado, por ejemplo, un pase volado de Wentz a un solitario Alshon Jeffery, el fumble del QB de los Eagles estando casi a punto de anotar un TD y los castigos de la defensiva que le dieron vida a Seattle en la primera mitad.

Semana 14 eagles vs rams Al momento en que se dio a conocer el calendario de la temporada 2017, uno de los partidos destacados era este, aunque en ese entonces sólo era por ver el enfrentamiento entre la primera y segunda selecciones del Draft 2016, Jared Goff y Carson Wentz respectivamente. Ahora, además, se enfrentaban los mejores equipos de la NFC hasta ese domingo.

Lleno de emociones, el duelo se definió faltando 1:52 y con el marcador 37-35 a favor de los Eagles. Nick Foles conectó un pase para Nelson Agholor para 9 yardas, lo cual se convirtió en un primero y diez que eventualmente hizo que Philadelphia agotara el reloj de juego y los Rams no pudieran remontar el marcador.

Pero la mayor noticia de ese día fue sin duda la lesión que terminó la temporada 2017 de Carson Wentz. El QB de los Eagles y candidato a MVP salió al inicio del último cuarto y dejó al equipo en manos de Nick Foles. Wentz se lesionó la rodilla al intentar un touchdown por tierra, ya que justo cuando ingresaba a la zona de anotación fue tackleado en la rodilla izquierda. El resto es historia.

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Semana 15 eagles vs giants El primer partido sin Carson Wentz y el día en que oficialmente comenzaron las dudas respecto de si los Eagles eran “show de un solo hombre” o un equipo sólido. Los Giants, que llevaban una temporada para el olvido, hicieron un juego apretado que, sin embargo, no restó mérito a Nick Foles, quien salió por primera vez como titular de los Eagles. El juego fue cerrado pero al final lo finiquitó la defensiva de Philadelphia, cuando Eli Manning buscó a Evan Engram en la zona de anotación en cuarta y gol con apenas 43 segundos en el reloj. El pase fue incompleto y eso le quitó a los Giants la oportunidad de ganar un partido que hubiera dado muchos ánimos en una temporada para el olvido. Para Nick Foles no hubo mayor complicación: 24 completos de 38, 237 yardas y 4 TD. Un juego de buena ejecución, protección casi perfecta y pases muy precisos. Es cierto que no fue una prueba mayúscula pero el QB llevaba más de un año sin jugar. Sin duda le vino bien anímicamente la victoria, y fue una advertencia para los que decían que sin Wentz no había oportunidad. Foto: Abbie Parr - Getty Images

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Semana 16 Raiders vs Eagles Aquella noche en Philadelphia los Eagles no jugaron bien, especialmente Nick Foles, pero aún así sacaron la victoria. El QB tendría que mejorar mucho su rendimiento para poder ganar en playoffs, ya que el resto del equipo estaba repleto de talento, pero sin un buen quarterback es muy difícil ganar el máximo premio en la NFL actual. Contra un equipo con tantas falencias como los Raiders, parecía que Philadelphia tendría todo resuelto antes del último cuarto; sin embargo Oakland se les complicó e incluso llegamos 10-10 a dicha instancia. De no haber sido por la inoperancia de los Raiders, se pudieron haber llevado un duro revés. De todos los juegos que tuvo Foles con los Eagles, este fue donde se vio más flojo, incómodo con las coberturas de pase y hasta terminó lanzando una intercepción. Afortunadamente para él, su defensiva salió al quite y le robó el balón un par de veces a Derek Carr para mantener a Philly como el número 1 de la NFC. Foto: Abbie Parr - Getty Images

Semana 17

cowboys vs eagles

Con el puesto número 1 de la NFC amarrado, los Eagles salieron a este partido únicamente por obligación. Si por Philadelphia hubiera sido, el partido se lo hubieran regalado a los Cowboys que tampoco peleaban ya por nada. La tercera y última derrota de los Eagles en la temporada fue meramente anecdótica.

Nick Foles apenas intentó 11 pases y uno de ellos fue interceptado. A partir de ese momento Doug Pedreson no quiso arriesgar más a su QB y metió al campo al desconocido Nate Sudfeld. LeGarrette Blount tampoco se esforzó mucho y no tuvo suficientes acarreos, por lo que el ataque terrestre quedó en manos de Wendell Smallwood.

El cuerpo de receptores tampoco salió fino al campo y si acaso Zach Ertz se mandó un par de recepciones. La defensiva hizo su trabajo a pesar de que Dallas sí jugó con varios titulares y los limitaron apenas a un touchdown, que llegó al final del juego.

Foto: Tom Pennington - Getty Images

Playoffs / Ronda Divisional

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falcons vs eagles

De la mano de una gran actuación de su defensiva y un Nick Foles que no cometió errores, los Eagles avanzaron a la Final de la NFC tras imponerse 15-10 sobre el representante de la NFC la temporada anterior, los Atlanta Falcons. Las máscaras de perro en la tribuna, simbolizando la condición de underdog del equipo aparecieron ese día por primera vez en Philadelphia. El encuentro resultó tan cerrado como se esperaba y se definió cuando el pase de Matt Ryan en cuarta oportunidad por anotar pasó entre las manos de Julio Jones, quien no pudo hacer la recepción. De ahí, los Eagles agotaron los 53 segundos que quedaban en el reloj para conseguir su pase a la Final de Conferencia. Philadelphia fue superior en todos los aspectos de este juego y la única razón por la que el partido estuvo más cerrado de lo esperado fue que los Eagles cometieron cuatro fumbles, incluyendo dos que recuperó la defensiva/equipos especiales de los Falcons. De hecho, los 10 puntos que anotaron los Falcons llegaron a consecuencia de esas dos entregas. En el primer cuarto, el fumble de Jay Ayaji se convirtió en tres puntos. En el segundo cuarto, un fumble durante una patada de despeje le dio el balón a Atlanta en la yarda 18 y anotaron después de un castigo.

Final de Conferencia vikings vs eagles

Parecía ser un duelo parejo, donde las defensivas permitirían pocos puntos, pero la Final de la NFC fue muy cargada hacia los locales. El equipo de Minnesota fue el que cometió los errores y no supo reponerse desde que dejaron ir la ventaja conseguida en su primera serie ofensiva. Los Eagles sellaron de manera perfecta su pase al Super Bowl LII. Finalmente, los Eagles arrasaron a la temible defensiva de los Vikings con una gran actuación de Nick Foles. También su defensiva jugó un partido monstruoso, colaborando con puntos en el marcador. Philadlephia tomó el control del juego después de la intercepción a Case Keenum y rápidamente consiguieron dar vuelta al marcador con TD de LeGarrete Blount, quien pasó por encima de Andrew Sendejo. A partir de ese momento Minnesota no volvió a aparecer en el juego. Nick Foles encontró su mejor forma justo previo al Super Bowl. Esa noche en casa lanzó tres pases de touchdown y 352 yardas. A él se le unieron Jay Ayaji, quien consiguió 73 yardas, y LeGarrette Blount, quien corrió para otras 21. Este tándem de corredores constante para ir mermando al rival y explosivo cuando se requirió. Así pues, los Eagles mantuvieron el nivel en todo momento de la temporada y los playoffs. No merecieron ser campeones sólo por lo hecho en el Super Bowl, sino por la constancia mostrada, pues a pesar de que Nick Foles tuvo que suplir a Carson Wentz, el equipo nunca modificó su personalidad ni se traicionó. Los Eagles se ganaron a pulso su lugar en la edición número 52 del Súper Domingo.

Doug Pederson:

El head coach ganador del Super Bowl LII A sus cincuenta años de edad, Doug Pederson acaba de conquistar su primer Super Bowl como head coach. La tarea no fue nada sencilla, pues para ello tuvo que derrotar a Bill Belichick y a Tom Brady, la pareja mas ganadora de playoffs en la historia de la NFL. Pero eso sólo fue la cereza en el pastel, la historia va mas allá.

Por Oscar Aguileta Foto: Hannah Foslien - Getty Images

Pederson nació en Bellingham, Washington, en 1968. Desde muy joven tuvo una gran afinidad por los deportes que le permitió obtener un lugar en la Universidad de Northeast Louisiana. Ahí se convirtió en el heredero del quarterback Stan Humphries, quien tuvo en los años noventa una buena carrera con los San Diego Chargers. Pederson era bueno en el football colegial, sin embargo, el bajo perfil de su universidad no le dio la mejor oportunidad rumbo al Draft NFL de 1991. Luego de vagar en diversas ligas de football llegó al equipo de prácticas de los Miami Dolphins. Tras varios intentos comenzó su fogueo en la NFL junto a Don Shula y Dan Marino, dos de los mejores cerebros en la historia de la liga. Sin embargo, su verdadera oportunidad y el momento que marcó su carrera llegó en 1995, cuando se unió a los Green Bay Packers, donde se encontraban las mejores mentes de la ofensiva West Coast: Mike Holmgren, Sherman Lewis, Andy Reid y Steve Mariucci. El éxito de los Packers fue un valioso aprendizaje para Pederson, quien fue parte del equipo que ganó el Super Bowl XXXI en 1997 ante los Patriots. Luego de que Andy Reid firmara con los Eagles en 1999 como nuevo head coach, Pederson al fin recibió la oportunidad en Philadelphia para ser QB titular. Sin embargo, su papel consistió más bien en el de mentor para el joven Donovan McNabb, seleccionado con el segundo pick global del Draft de 1999. Lamentablemente para Pederson, su oportunidad duró muy poco y tras un inicio con marca de 2-7 perdió la titularidad ante el novato. Después de un breve paso con los Cleveland Browns en 2000, que incluyó una victoria como titular ante Bill Belichick y Drew Bledsoe, Pederson regresó en 2001 a una segunda etapa con los Packers. Luego de que Matt Hasselbeck fuese cambiado a los Seattle Seahawks, nuevamente fungió como suplente de Favre, con muy poco tiempo de juego. Finalmente en 2004 decidió terminar su carrera como jugador. Su siguiente paso decidió darlo como coach y en 2005 tomó las riendas del equipo de High School de la Calvary Baptist Academy. Pasó cuatro años como head coach en High School hasta que su buen amigo Reid lo contactó para formar parte del staff de los Eagles. De 2009 a 2010 fungió como Offensive Quality Control Coordinator; en 2011 ascendió a coach de quarterbacks, tiempo en el que revivió la carrera de Michael Vick y en 2012 se cruzó el camino de Pederson con Nick Foles. Una lesión de Vick dio luz verde a Foles, vio su debut en la semana 10 de la temporada 2012 ante los Dallas Cowboys. El suplente adquirió el voto de confianza de Reid y fue nombrado el titular por el resto de la temporada. Lamentablemente, los Eagles cerraron la campaña con marca de 4-12 y el ciclo de Reid junto a Pederson había terminado con Philadelphia. Andy Reid emigró así a los Kansas City Chiefs como head coach y Doug Pederson lo acompañó como coordinador ofensivo. Ahí, Pederson hizo un gran trabajo y fue parte fundamental para la consolidación de Alex Smith como quarterback titular, logrando por primera vez en su carrera dos temporadas consecutivas con más de 3 000 yardas por la vía aérea. Finalmente, el puesto de su vida llegó en 2016. Pederson tomó las llaves de la franquicia de los Eagles como head coach y no perdió un solo minuto. Junto con Howie Roseman y el resto de los ejecutivos se rodeó de grandes estrategas como Frank Reich (coordinador ofensivo) y Jim Schwartz (coordinador defensivo).

Una vez abierta la temporada administrativa de 2016, los Eagles pusieron en marcha su agresivo plan para hacerse de los servicios de Carson Wentz. En primer lugar mandaron a Byron Maxwell, Kiko Alonso y su selección 13 global a cambio de la número 8 de los Dolphins; el segundo paso fue enviar a DeMarco Murray y su cuarta ronda (113) a los Titans por su cuarta ronda (100), finalmente arriesgaron el todo por el todo por Carson Wentz cuando cambiaron esa primera selección (8), la tercera (77) , esa cuarta (100) más su primera ronda de 2017 y su segunda ronda de 2018 por la segunda selección global de los Cleveland Browns, con la que tomaron al QB. De inmediato se notó la mancuerna de Doug Pederson y Carson Wentz. El equipo inició la temporada 2016 con marca de 3-0 y, aunque se desplomaron para finalizar 7-9, las expectativas para Pederson y Wentz eran muy altas de cara a 2017. Los Eagles no perdieron el tiempo y fueron muy agresivos en la agencia libre, firmando a jugadores con experiencia y de cartel ganador como Chris Long y LeGarrete Blount de los Patriots. También Torrey Smith, Alshon Jeffery y el regreso de Nick Foles fueron movimientos clave que, junto a novatos como Derek Barnett y Corey Clement catapultaron a los Eagles al máximo logro de la NFL: el Super Bowl LII. Pederson no fue un genio predestinado ni un superdotado deslumbrante. Nunca fue el atleta ni el estratega perfecto. Luchó para hacerse de un lugar en la NFL como suplente, como titular, como mentor y como aprendiz. La vida no le regaló nada, el trabajo constante y los sacrificios le permitieron quedarse en la NFL para aprender de las mejores mentes ofensivas. Su agresividad en la vida se reflejó en el Super Bowl LII y al igual que lo hiciera como quarterback suplente, nuevamente se las arregló para vencer a Bill Belichick. Pederson apenas está escribiendo su propia leyenda, aunque en el Philadelphia Museum of Art ya merece su estatua junto a la de Rocky Balboa. Foto: Kevin C. Cox - Getty Images

Por Jorge Tinajero VAYA CLASE DE SUPER BOWL RESULTÓ ESTA EDICIÓN 52, EN LA QUE TUVIMOS UN JUEGO MUY OFENSIVO POR PARTE DE AMBOS EQUIPOS Y, COMO RESULTADO, MUCHOS RÉCORDS ROTOS. ESTOS FUERON LOS NÚMEROS HISTÓRICOS DEL SUPER DOMINGO.

74 puntos combinados de ambos equipos, la segunda mayor cantidad de puntos anotados en un Super Bowl. de temporada regular han perdido el Super Bowl de forma consecutiva. Ni Tom Brady 9 jugadores MVP pudo con la maldición. 8 participaciones de Tom Brady en el Super Bowl, la mayor cantidad en la historia. 8 juegos como head coach de Bill Belichick en un Super Bowl. 357 pases lanzados por en un Super Bowl, la mayor cantidad en la historia. Tom Brady alcanzó esta marca. un quarterback 235 pases completos de Tom Brady en la historia del Super Bowl. Ya es récord. 2 576 yardas por pase de Brady en el Super Bowl. ¿Por qué no? Otra marca a su cuenta. 18 pases de anotación que ha lanzado Brady con los de este Súper Domingo. Récord también. 10 Super Bowls de Ningún otro equipo lo ha hecho. New England 33 puntos anotados por en el Super Bowl sin ganar el trofeo Vince Lombardi. un equipo 42 primeras oportunidades entre ambos equipos, la mayor cantidad en un Super Bowl. combinadas Super Bowl. La mayor cantidad en la historia y los Patriots lo hicieron en 613 yardas totales enestaunedición. para un equipo 505 yardas por pase de Tom Brady, la mayor cantidad para un Super Bowl. entre Eagles y Patriots, la mayor cantidad en un juego de playoffs o temporada 1 151 yardas combinadas regular en la historia. 874 yardas aéreas combinadas de ambos equipos en el Super Bowl LII. Es un récord. 0 patadas de despeje tuvo New England, la menor cantidad para un equipo en un Super Bowl. 1 patada de despeje en todo el juego, la menor cantidad para un Super Bowl. cantidad en un Super Bowl. Fueron dos puntos extra y dos conversiones 4 puntos extra fallados lademayor dos puntos errados.

LOS JUICIOS DEL SUPER BOWL LII Por Clark Judge, Talk Of Fame Network / Traducción por Andrés de Esesarte

¿QUÉ SIGUE PARA NICK FOLES? El quarterback de los Philadelphia Eagles y MVP del Super Bowl no se va a ir a Disneyland después de conquistar a Tom Brady y los New England Patriots. Irá a la banca, eso sucederá a menos de que algún equipo necesitado de la NFL haga una buena oferta por él. Esto sucede porque los Eagles no son su equipo, sino de Carson Wentz, pero Wentz se lesionó en la semana 14. Foles ingresó a jugar como Jeff Hosteler y lo hizo así tal cual; los Eagles ganaron su primer campeonato desde 1960 y su primer trofeo Vince Lombardi de la historia. Como Foles, Hosteler, el exquarterback de los Giants, estuvo invicto (5-0) en 1990 cuando tomó las riendas del equipo por el lesionado Phil Simms. Y como Foles, guió a su equipo a ganar el Super Bowl, el segundo en cinco años. Pero se convirtió en el titular de los Giants la siguiente temporada porque le ganó el puesto en los entrenamientos a Simms. Eso no sucederá aquí. Wentz era el principal candidato para ganar el MVP antes de lesionarse el ligamento cruzado anterior y que Foles fuera enviado al campo, pero Wentz es el titular automático tan pronto como se recupere de su lesión, nadie sabe cuándo será, pero hay posibilidades de que ocurra ya habiendo arrancado la siguiente temporada. ¿Y Foles? Entra el segundo de sus dos años de contrato la siguiente temporada. “No estoy realmente preocupado al respecto en este momento,” dijo Foles en la conferencia de prensa del lunes posterior al Super Bowl. “Estoy muy agradecido por ser parte de los Philadelphia Eagles. Simplemente estoy viviendo el momento.” Si están en el mercado en busca de un QB, que empiecen las ofertas.

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LA NFL SE COMIÓ EL SILBATO La NFL dijo que la regla de la recepción no iba a decidir este juego y así fue, pero pudo hacerlo. De hecho, si los oficiales, o específicamente Alberto Riveron, vicepresidente de oficialización, fueran consistentes, hubieran regresado la recepción de touchdown del corredor novato Corey Clement. La razón: cuando Clement logró controlar el balón, sólo consiguió arrastrar uno de los dos pies dentro del campo. Sé que el exdirector de oficialización, Mike Pereira, estuvo de acuerdo con la marcación, y yo casi siempre concuerdo con él, pero que me explique: ¿por qué esta se debía mantener y la de Kelvin Benjamin contra New England antes en esta temporada no? No se puede. La liga hizo lo que debería haber hecho antes en la temporada y le pidió a Riveron que no se involucrara a menos de que hubiera un claro error. Pero los detractores de los Patriots lo verán diferente, para ellos es más bien un justo pago por todos los TD contra New England que fueron anulados en la temporada (Austin Seferian-Jenkins, Jesse James y Benjamin).

20 JUICIOS 1. Quiero reconsiderar mi voto de Coach del Año. Si se pudiera, Doug Pederson debería haber sido el MVP del juego por sus agallas, su agresividad para mandar jugadas y especialmente por las dos cuartas oportunidades que se jugó emulando a Bill Belichick. “Confié en mi instinto,” dijo Pederson. “En juegos como este, contra un gran oponente, tienes que tomar decisiones difíciles y de esa manera mantenerte agresivo.” Inteligente. 2. Nick Foles en los playoffs: 77 de 106 para 971 yardas, 6 TD y 1 INT. Mejor aún, completó 26 de 32 en tercer down. 3. ¿Qué quiso decir Rob Gronkowski cuando dijo “Definitivamente pensaré mi futuro en las siguientes dos semanas”? Creí que Brady y Belichick eran quienes estaban considerando el retiro. 4. Lane Johnson abrió la “barra libre” en la ciudad de Philadelphia con la fiesta que duró desde el final del superbowl hasta el siguiente jueves. 5. Una razón por la que fue un placer ver el juego: Pocos silbatazos y pocos despejes, lo que se tradujo en pocas series detenidas. Hubo sólo siete castigos y un despeje. 6. Deberían hablar acerca del último Hail Mary, y no porque haya habido una jugada controvertida, sino por un castigo obvio sobre Chris Hogan que los oficiales ignoraron.

7. Lo siento, pero esto no hace a Alshon Jeffery el segundo Joe Namath. 8. Jeffery dijo lo siguiente sobre su touchdown del primer cuarto: “Foles simplemente la tiró larga y me dio una oportunidad y logré hacer una gran jugada.” Vaya que lo fue.

GANADORES Jerry Kramer (exjugador histórico de Green Bay) Le tomó 45 años pero finalmente se anunció en la semana del Super Bowl que llegó a donde pertenece: al Salón de la Fama en Canton.

9.El coordinador defensivo Matt Patricia debe estar preguntándose por qué no puso a Stephon Gilmore sobre Jeffery desde antes. Una vez hecho el ajuste, Jeffrey desapareció.

El RB de Philadelphia, Corey Clement. Es el primer novato sin draftear que tiene 100 yardas recibidas y un TD en un Super Bowl.

10. Con sus primeros tres picks de draft New England no debe buscar a su siguiente QB sino a su siguiente pass rusher. No tienen uno.

Brian Dawkins. Un día entra al Salón de la Fama y al día siguiente los Eagles ganan su primer Super Bowl.

11. Gisele tenía razón, su esposo no puede “lanzar los balones y atraparlos también”, no como Nick Foles. 12. Sin embargo, no sé qué más pudo haber hecho Brady. Es el primer QB en lanzar más de 500 yardas en un Super Bowl y que ha perdido. “No logramos anotar más puntos que ellos,” dijo Brady. Eso pasó, básicamente.

NFC Este. Es la única división donde todos tienen un Super Bowl por lo menos. El coordinador ofensivo de Philadelphia (y nuevo coach de Indianapolis) Frank Reich. Ahora sabe lo que es ganar un Super Bowl. No muchos miembros de los Bills de los noventa lo saben.

13. Creo que es seguro decir que Malcolm Butler estuvo –o no estuvo– en su último juego con New England.

LeGarrette Blount y Chris Long de Philadelphia. Se convierten en el tercer y cuarto jugadores en la historia de la NFL en ganar Super Bowls consecutivos con diferentes equipos. Ken Norton y Deion Sanders fueron los otros dos, ambos con los 49ers y los Cowboys.

14. Nadie sabe qué pasó con Butler, ni el mismo Butler. “Dejaron de creer en mí.” Dijo a Mike Reiss de ESPN.com. “Supongo que no estaba jugando bien o no se sentían cómodos conmigo, no lo sé, pero pude cambiar el juego.”

La “nación de la cerveza” en Philadelphia. Hubo bebida hasta el jueves, cortesía de Lane Johnson. Buena suerte para la policía de Philadelphia.

15. ¿ Tiene el excoach de los Eagles, Andy Reid, algo de mérito por regresarle a Foles el interés en el football?

PERDEDORES

16. La racha sigue en pie. Ningún líder en yardas por pase de la temporada regular ha ganado el Super Bowl. Lo pueden revisar. 17. Sólo pregunto, pero… ¿por qué le tomó la mitad del partido a los Pats descubrir a Gronk? Tuvo una recepción para 9 yardas en la primera mitad y 8 para 105 y 2 TD en la segunda. 18. Zach Ertz de los Eagles dijo que no entendía por qué su TD tardó tanto en confirmarse. Yo le explico, se llama “regla de la recepción”. 19. Tal vez New Englad debió scoutear el equipo de preparatoria de Nick Foles, Westlake High, en el condado de County de Texas. Corrieron la misma jugada que los Eagles, donde Trey Burton conectó con Foles para un TD en cuarto down. Los Eagles la encontraron, la practicaron mucho en la postemporada y Foles anotó en todas las ocasiones. 20. Ya son cinco derrotas para los New England Patriots, empatando a Denver como el más perdedor en los Super Bowls.

CITA DEL DÍA Tom Brady acerca de su futuro:

“Espero estar de vuelta. Me gustaría procesarlo, pero no veo por qué no estaría de regreso.”

Los Detroit Lions. Su nuevo head coach acaba de recibir 538 yardas totales contra un oponente que jugó con el QB suplente que estuvo a punto de retirarse hace dos años. Cuando le preguntaron a Malcolm Brown de los Patriots qué pasó, únicamente movió su cabeza y dijo: “no sé cómo responder esa pregunta en este momento.” Aparentemente nadie supo. El VP de Oficialización, Alberto Riveron. Uno de estos días quiero ver a este hombre. Es como el Mago de Oz. Muy poderoso, pero siempre detrás de la cortina. Nadie lo ve y nadie entiende por qué no puede descifrar la regla de la recepción. Aunque nadie de nosotros puede. El CB de New England, Malcolm Butler. No inició, apenas jugó y nadie sabe por qué. El coordinador defensivo Matt Patricia dijo “ estábamos intentando diferentes formaciones” y “fue por los duelos que teníamos,” ¿pero quién engaña a quién? El tipo es de calibre titular y jugó casi el 98% de los snaps en la temporada. Hay más historia detrás de esto. El pass rush de los Patriots. Todavía no lo están buscando. El football de la vieja escuela. Fue un duro golpe. Tuvimos récord de 962 yardas en ofensiva en los primeros tres cuartos y 1 151 en todo el juego, incluyendo 613 yardas por el equipo perdedor. Los equipos especiales de los Patriots. Un gol de campo fallado, un punto extra fallado y un pésimo regreso en la última patada de salida, atípico de los Pats. La marca de cerveza oficial de la NFL. Tuvo que patrocinar la madre de todas las barras libres en Philadelphia.

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Así festejó

la afición de Philadelphia Por Luis Obregón

La ciudad que en algún momento fue la capital de Estados Unidos es sede de una de una de las aficiones deportivas más férreas. Sus equipos profesionales en las cuatro ligas principales (NFL, NBA, MLB y NHL) son seguidos por hordas de personas que viven su afición hasta los huesos. Los Flyers, equipo de hockey de la NHL de la ciudad, conquistaron la Stanley Cup en temporadas consecutivas en 1973-74 y 1974-75, teniendo una sequía importante en títulos en un poco más de 40 años. Por su parte los 76ers de la NBA ganaron las Finales en tres ocasiones su historia en las temporadas 195455, 1966-67 y 1982-83, con 35 años desde el último título. En el baseball, los Phillies ganaron la Serie Mundial de la MLB en 1980 y luego le dieron el más reciente éxito deportivo a la ciudad –hasta antes de este Super Bowl, volviendo a conquistar el campeonato en 2008. En la NFL, hasta antes del Super Bowl LII, los Eagles habían conseguido tres campeonatos en 1948, 1949 y el más reciente en 1960, el último año de Buck Shaw como head coach y cuando Norm Van Brocklin lideraba al equipo desde la posición de QB. 57 años de espera son prácticamente dos generaciones de seguidores que nunca habían visto a su equipo coronarse como campeón y que año tras año sufrieron al ser eliminados de la contienda. Los fans de los Eagles se han creado una fama de ser agresivos y hostiles. Asistir a un encuentro antes en el Veterans Stadium y ahora en el Lincoln Financial Field, –los últimos dos estadios en los que han jugado como locales– siendo aficionado al equipo visitante, se considera un acto que requiere de valor. Se trata de una afición que “sangra verde” y que ha protagonizado sucesos como el famoso abucheo a Santa Claus, a quien además le aventaron bolas de nieve en diciembre de 1968 en el Franklin Field. Al igual que desprecian las derrotas de su propio equipo y a los rivales que los visitan, con la misma intensidad festejan las victorias, es por ello que desde que el equipo conquistó el campeonato de la NFC y se hizo oficial que serían los representantes de dicha conferencia en el Super Bowl, uno de los ángulos a cubrir era el qué pasaría si se alzaban con la victoria, o sea, hasta dónde llegarían sus aficionados en las calles de Philadelphia. Es fácil decir que no se han quedado cortos contra las expectativas. Los esfuerzos de las autoridades de la ciudad para contrarrestar posibles motines y destrozos se quedaron muy cortos. Hordas de gente tomaron las calles del

centro de Philadelphia en señal de júbilo; los postes de luz, semáforos y otras señales de tránsito fueron las primeras víctimas; los fans no sólo los escalaron venciendo el engrasado que las autoridades colocaron en ellos, sino que los arrancaron del piso. La gente entró a tiendas de conveniencia gritando “¡todo es gratis!”, tomando diferentes artículos de los anaqueles para entablar “guerras de comida”. La marquesina del hotel Ritz Carlton sufrió daños porque la gente se trepó en ella hasta derribarla. Hubo mucha fiesta, fuegos artificiales, corrió mucho alcohol, gente que se desnudó, gente se disfrazó de águila, hombres propusieron matrimonio a sus novias, un grupo de aficionados volcó un automóvil estacionado en la calle y en algún momento hasta los policías, que teóricamente estaban ahí para guardar el orden, se unieron al festejo, todo esto entre constantes entonaciones del himno clásico “Fly eagles fly”. Además, durante todo el partido vimos las reacciones del actor Bradley Cooper por estar sentado junto al propietario del equipo Jeffrey Lurie; Kobe Bryant, estrella retirada de la NBA, mostró su entusiasmo mediante un tweet y fue capturado en video festejando el final del partido desde su casa con su hijo en brazos. El actor Will Smith hizo una pequeña película en Instagram retratando el día de un aficionado de los Eagles que termina con el festejo del campeonato. El director de cine M. Night Shyamalan, originario de Philadelphia, publicó un video desde el estadio en plena celebración. El actor Sylvester Stallone, quien se convirtió en icono de la ciudad desde su interpretación de Rocky Balboa, ha realizado una serie de publicaciones en su cuenta de Instagram que van desde los días previos al partido hasta las celebraciones posteriores. No podemos dejar de mencionar que el 7 de febrero, el offensive tackle Lane Johnson, en conjunto con Bud Light cumplió con una promesa que el jugador realizó previo al inicio de la temporada, cuando aseguró que si el equipo ganaba el Super Bowl, habría cerveza gratis para toda la ciudad.

Una afición hambrienta de triunfo por fin vio cristalizado el sueño de levantar el trofeo Vince Lombardi tras una larga espera.

¿Serán los Eagles

bicampeones en 2019?

LOS PHILADELPHIA EAGLES CONSIGUIERON SU PRIMER SUPER BOWL TRAS 59 AÑOS DE SEQUÍA DE TÍTULOS, ¿PODRÁN REPETIR LA HAZAÑA Y CONSEGUIR EL BICAMPEONATO? ES ALGO QUE SÓLO HAN CONSEGUIDO SEIS EQUIPOS EN LA ERA DEL SUPER BOWL: PACKERS, DOLPHINS, STEELERS (EN DOS OCASIONES), 49ERS, COWBOYS Y PATRIOTS.

Por Andrés de Esesarte Casi todas las franquicias mencionadas presentan algunas tendencias. Todos los equipos que han repetido tenían un buen QB, que en el caso de Steelers, Cowboys y Patriots estaba dentro de los primeros cinco años de su carrera. Philadelphia tiene a Carson Wentz, quien a pesar de haberse lesionado fuertemente, puede tener una carrera brillante si reduce los golpes recibidos. En apenas dos años en la NFL, Wentz ha lanzado más de 3 200 yardas por temporada, promediando 244 yardas por partido, además de lanzar 33 TD y 7 INT en su segundo año en la liga, números muy buenos para un quarterback de segundo año. Otra constante en los bicampeones ha sido tener líderes en el backfield y línea ofensiva. Philly cuenta con dos corredores que pueden tener un futuro brillante en la NFL como Jay Ajayi y Corey Clement. El primero llegó al equipo tras responder positivamente a la carga de trabajo en Miami, donde logró más de 1 200 yardas en 15 juegos, de los cuales inició 12. En 2016 tuvo tres juegos de 200 yardas además 8 TD y aunque no es un jugador que reciba muchos pases saliendo del backfield, está acompañado por Clement, que tuvo una emocionante temporada de novato, impresionante tomando en cuenta que fue un jugador no drafteado. Clement sorprendió con la capacidad y madurez con las que apareció en los momentos clave de su equipo, como si llevara muchos años en la liga. Los Eagles tienen dos jugadores All-Pro en su línea ofensiva. Parte del gran juego de Nick Foles se debió a que su protección fue extraordinaria, además de que el equipo produjo yardas en pases pantalla y acarreos por fuera con excelentes bloqueos de sus linieros. El cuerpo de receptores de Philly podrá parecer el eslabón débil y de pocos nombres de peso. La realidad es que los Eagles atendieron sus necesidades en la posición con veteranos probados. Alshon Jeffery, proveniente de Chicago, ha sufrido muchas lesiones en sus últimos dos años pero de suma importancia en la zona roja. Entra a su séptimo año en 2018 y cuando se ha mantenido sano ha rebasado las 1 000 yardas por temporada. Es una incógnita si Torrey Smith regresará en 2018 con Philadelphia, entrará a su octavo año la próxima campaña y su productividad ha venido a menos desde el 2013. Los Eagles tal vez quieran ir por un novato prominente en el Draft que pueda darles más. En el tema de la agencia libre, los Eagles tendrán tres jugadores importantes como agentes libres en 2018, uno es Sproles que podría regresar con el equipo, los otros son el OLB Nigel Bradham y su TE Trey Burton. Bradham vino de Buffalo vía free agency y en sus dos años con los Eagles jugó a buen nivel por lo que tal vez consideren traerlo de vuelta, el caso de Burton luce posible también ya que tuvo su mejor año como profesional y gran impacto en la zona de anotación alineando desde el slot y mostrando gran velocidad y manos. La defensa se ha mostrado sólida y eso será lo más importante para que el equipo pueda regresar a la instancia más importante de este deporte. Las defensas siempre serán piezas fundamentales, no sólo para repetir, sino para ganar un Super Bowl. Regresará Jordan Hicks acompañado de Mychal Kendricks, jugador que es garantía y si regresa Bradham podrán mantener a su grupo de LB. En la línea no parece que vaya a haber muchos cambios, Tanto Timmy Jernigan como Fletcher Cox seguirán siendo los DT titulares, además de que tendrán a Vinny Curry y Brandon Graham presionando como DE, con una rotación de lujo, ya que cuentan con el bicampeón Chris Long y el novato Derek Barnett.

El grupo de defensive backs sigue siendo muy atractivo y querrán dar más profundidad en ciertas posiciones. Jalen Mills ha sorprendido a propios y extraños y es que en su segundo año tuvo grandes actuaciones contra receptores elite; Ronald Darby es otro corner capaz, tuvo una lesión que lo mantuvo fuera un buen rato pero tendrá que competir por mantener su lugar ya que Sidney Jones, novato de Washington seleccionado en la segunda ronda del draft, querrá llegar como titular a la temporada. Rodney McLeod es tal vez el punto más débil de la defensa y luce difícil que su suplente, Corey Graham, regrese con el equipo el año que viene. Imagino que el equipo atenderá la posición en el Draft para buscar un jugador que rote con McLeod y acompañe a Malcolm Jenkins. El coacheo ha sido bueno. Doug Pederson mostró una notable mejoría de su primer año al segundo y eso tal vez sea lo más prometedor junto con Carson Wentz. Pederson y su staff lograron hacer ajustes puntuales además de que el head coach evolucionó en el llamado de las jugadas, cosa que no es fácil y menos considerando que tuvieron dos QB titulares en el año. El caso de Foles parece bastante claro, saldrá en un jugoso trade que le permitirá a Philly tener un gran Draft de cara a su intento de otro campeonato. Siempre que a Wentz no le de el “síndrome de Matt Ryan”, no veo por que no pueda regresar el siguiente año y poner incluso mejores números que este. Ha mostrado una gran movilidad, tal vez deba trabajar más en su sus habilidades fuera de la bolsa y en cuidar el físico, que de eso vive. Ya lo demostró Robert Griffin III: una mala rodilla puede destruir una prominente carrera. Wentz mostró una gran madurez y mejoría en su segundo año, estamos deseosos de verlo en el tercero. El panorama luce soleado en Philadelphia, recuperarán a casi todo su equipo para el siguiente año, tienen una gran posibilidad en el Draft de reforzar algunas posiciones y todo un offseason para recuperar a su QB titular, que tiene la capacidad de llevarlos a otro Super Bowl y ganarlo de nuevo.

¿El fin de una era en New England? Por Jorge Tinajero

Un mes antes de llevarse a cabo el Super Bowl LII comenzaron los fuertes rumores sobre problemas al interior del equipo de los Patriots. Aparentemente, las fricciones entre el head coach Bill Belichick y el quarterback Tom Brady comenzaron con la prohibición hacia el entrenador personal de Brady, Alex Guerrero, para estar en la banca durante los juegos. Ello, según los reportes, desató la furia de Brady. Otro asunto que pudo ser un problema fue la salida del QB suplente Jimmy Garoppolo. Se dice que Belichick no quería que este saliera del equipo, pero que Brady fue uno de los que más presionaron por su salida y posterior cambio a los San Francisco 49ers. Un par de semanas antes de la fecha límite de cambios de jugadores entre equipos en la NFL, se habló de que hubo una reunión entre el dueño de los Patriots, Robert Kraft, y Bill Belichick, de donde salió la orden para que Garoppolo fuera enviado a otro equipo, situación que no agradó al entrenador de New England. Como resultado de esto, Brady se vio más tranquilo. Esta situación se manejó de manera discreta por parte de Kraft, diciendo que las cosas estaban bien, pero lo que ocurrió en el pasado Super Bowl no fue algo normal en los Patriots.

Fue la peor actuación defensiva de New England en la era Belichick Fue la peor actuación defensiva de New England en la era Belichick, quien tomó la decisión de prescindir el día del juego de Malcolm Butler, uno de sus mejores elementos en la defensiva secundaria. Las razones hasta el momento son confusas y todavía no existe versión oficial de lo sucedido. Aunque no por esta situación los Patriots perdieron el Super Bowl, pudo haber sido una historia distinta con Butler en el terreno de juego. El cornerback de los Patriots se expresó sólidamente al final del encuentro y después publicó en sus redes sociales su sentir, dando a entender que ha terminó su tiempo en New England. Por cierto, Tom Brady mostró su apoyo a Butler. Esto último despierta sospechas. Se habla de que la relación entre head coach y quarterback está rota y que la acción desesperada de Kraft por retener al coordinador ofensivo Josh McDaniels (quien estaba apalabrado

para partir a Indianápolis pero se retractó a unas horas del anuncio en público de los Colts) se hizo buscando mantener la estabilidad en su equipo. Es bien sabido que Brady y McDaniels son grandes amigos y que si este último se hubiese ido a Indianapolis, posiblemente la bomba en New England reventaría en algún momento de 2018. Lo anterior, aunado a otras situaciones, podrían hacernos pensar en el final de una era en New England. Rob Gronkowski, al final del Super Bowl LII declaró que meditaría sobre su futuro como jugador de la NFL. Brandon Browner, exjugador de los Patriots, posteó en instagram la foto de Butler llorando y diciendo que el vestidor estaba dividido antes del juego, responsabilizando a Belichick. Incluso hay quien cree que las decisiones del head coach de New England en el Super Bowl fueron una muestra de poder sobre Brady. Lo seguro es que vienen muchos cambios en 2018 para este equipo. Tendrán nuevo coordinador defensivo con la salida de Matt Patricia hacia Detroit, el posible retiro de Gronk, la salida de Butler y varios nombres importantes serán agentes libres como Nate Solder, Rex Burkhead, Danny Amendola y Dion Lewis. Sobre todo, existe el reto de una defensiva por mejorar. Tom Brady comenzará la siguiente temporada con 41 años cumplidos y, aunque jugó a un gran nivel en 2017, nada es para siempre.

es difícil creer en la continuidad de la dinastía de los Patriots de Kraft, Belichick y Brady. Por todo lo anterior, es difícil creer en la continuidad de la dinastía de los Patriots de Kraft, Belichick y Brady. La derrota del Super Bowl LII fue de esas que duelen y marcan el futuro de una franquicia que, si bien ha sido exitosa, también demanda muchos cambios que podrían marcar el final de una era histórica en la NFL.

Minnesota: la gélida sede del Super Bowl LII Por Ulises Harada

Foto: Gregory Shamus - Getty Image

Uno de los factores que menos se toma en cuenta cuando se piensa en el Super Bowl es qué tanto frío va a hacer en la ciudad sede. Con excepción de el juego por el título que se llevó a cabo en New York hace algunos años, las ciudades que han recibido el juego más importante de la NFL tienen clima cálido o templado, pero durante el Super Bowl LII la ciudad de Minnesota le dio la bienvenida a la NFL con temperaturas de hasta -22 grados centígrados. Afortunadamente eso no afectó el día del juego, ya que la sede del juego por el trofeo Vince Lombardi fue el U.S. Bank Stadium, un inmueble techado y simplemente espectacular. Lo primero que llama la atención del estadio, en el cual caben casi 68 000 espectadores, es que casi la mitad de la construcción es de un polímero transparente, tanto en el techo como en la pared que da hacia el oeste. Desde el estadio se tiene una increíble vista del centro de la ciudad de Minnesota. Pero eso no es todo, el U.S. Bank Stadium es bastante ruidoso y durante el Super Bowl se escuchaba el canto de “Fly Eagles Fly” casi tan fuerte como si se estuviera en el Lincoln Financial Field de Philadelphia. El clima no es ningún problema, ya que al tratarse de un estadio cerrado hay un control de temperatura de entre 18 y 22 grados en todo el inmueble.

Bowl y que las instalaciones paralelas –como el Mall of America– funcionaron a la perfección, los habitantes de las “Ciudades Gemelas” sabían que su equipo (los Vikings) se había quedado a la orilla de ser la primera franquicia en disputar un Super Bowl en casa. Y así los aficionados locales descargaron esa frustración en contra de sus verdugos, los Eagles. Durante los eventos abiertos al público, como el Opening Night o las visitas al Radio Row, los abucheos eran incesantes cada vez que aparecían los Eagles o algún exjugador del equipo. Los fans de Philadelphia aprovecharon la ocasión para burlarse del canto de “Skol”. Sin embargo esas son las historias y momentos que le dan un sabor extra a un Super Bowl. En lo personal disfruté mucho de Minnesota y no sólo por un estadio sorprendente, sino porque la gente es muy amable y el clima, a pesar del frío, le dio un toque extra a esta historia. ¿Volveremos a ver un Super Bowl en Minnesota? Lo más seguro es que sí, ya que tanto la logística como el inmueble hicieron en conjunto una gran experiencia. Personalmente me encanta la idea de llevar el juego por el título de la NFL a tierras gélidas.

Lo único que falló en este Super Bowl, al menos para la afición de Minnesota, fueron los Vikings. Durante toda la semana se vivió un ambiente agridulce, ya que a pesar de que pudieron disfrutar de todas las actividades de una semana de Super

historias

tras el super bowl LII

CUANDO EL CONFETI TERMINÓ DE CAER EN EL U.S. BANK STADIUM Y LOS PHILADELPHIA EAGLES SE CORONARON COMO CAMPEONES DE ESTA TEMPORADA, FUE EL MOMENTO PARA QUE SURGIERAN ALGUNOS TEMAS INCONCLUSOS PARA AMBOS EQUIPOS, LOS CUALES NOS MANTENDRÁN OCUPADOS DURANTE EL OFFSEASON.

Por Luis Obregón

El misterio del cornerback estelar en la banca Tal parece que la permanencia del cornerback Malcolm Butler con los New England Patriots pende de un hilo tras no haber participado en una sola jugada defensiva –y sólo en una de equipos especiales– en el Super Bowl LII por decisión de los coaches. Las razones específicas aun se desconocen, lo que ha dado lugar a rumores y especulaciones. Tras haber retrasado su llegada a Minnesota por enfermedad y luego de una serie de entrenamientos en los que no le fue muy bien, además del rumor de que cometió una leve falta al reglamento del equipo, al presuntamente no cumplir con el toque de queda por asistir a un concierto, se creó la tormenta perfecta. Lo que más llama la atención es la reacción tanto de Butler como de algunos de sus compañeros ante la situación. Días después del partido, publicó un mensaje en su cuenta de Instaram en el que negó los reportes de sus faltas al reglamento y agradeció al equipo, a sus compañeros y a los fans. Lo más notorio fue que el mismo Tom Brady respondió el mensaje en apoyo: “Te quiero Malcolm. Eres un jugador y compañero de equipo increíble y un amigo. Por siempre!!!” Otros jugadores como Phillip Dorsett, Elandon Roberts, Harvey Langi, Cody Holister, Vincent Valentine, Martellus Bennett, Marcus Cannon, Jacoby Brissett, Justin Coleman, LeGarrette Blount, Brandon Browner, Jaime Collins y Rob Ninkovich, también respaldaron su declaración con un “me gusta” en la publicación. Este tipo de actos en los que los jugadores parecen formar un bloque pasivo-agresivo en contra del staff de coacheo no hace más que darle combustible al reporte de ESPN que hablaba de fricciones al interior de la organización.

Foto: Hannah Foslien - Getty Image

Josh McDaniels y sus cambios de opinión

Todo parecía listo desde semanas antes del Super Bowl LII para que Josh McDaniels, quien fungiera hasta esta Todo parecía listo desde semanas antes del Super Bowl LII para que Josh McDaniels, quien fungiera hasta esta temporada como coordinador ofensivo de los Patriots, fuera el nuevo head coach de los Indianapolis Colts a partir del momento en que terminara el juego por el campeonato; sin embargo, sólo un par de días después del partido, el mismo McDaniels confirmó que rechazaba la oferta de los Colts para permanecer en su cargo en New England. Las razones difícilmente serán dadas a conocer de forma oficial, sin embargo existen rumores de que los Patriots pudieron haberle hecho una jugosa propuesta económica e incluso promoverlo como sucesor de Bill Belichick en la posición de head coach. Para muchos este es un movimiento que, sumado a su poco exitosa estancia como head coach en los Denver Broncos, le cierra las puertas con el resto de la liga para aspirar a una posición de dicha jerarquía. Para mayor escándalo, los Colts ya habían convocado a la conferencia de prensa para hacer oficial el anuncio de McDaniels como el nuevo head coach y a escasas horas, de la misma vino la negativa. Será muy interesante ver cómo progresan los cambios al interior de la franquicia de New England a lo largo del offseason.

El futuro de Nick Foles No podemos olvidar que en los Philadelphia Eagles Carson Wentz jugó un papel totalmente determinante para terminar como el mejor equipo de la NFC, sin embargo el trabajo hecho por Nick Foles para manejar el final de la temporada regular y los tres encuentros de Playoffs fue destacable. Tras ser nombrado MVP del Super Bowl, los bonos de cualquier jugador suben de manera drástica y ese será el caso de un Foles que este offseason tendrá frente a sí el potencial problema de decidir si quiere regresar a ser el sustituto de Wentz o toma el reto de ser titular en otro equipo. Por supuesto el equipo de Philadelphia tendrá mucho qué decir al respecto, ya que el QB se encuentra bajo contrato hasta el final de la temporada 2018, por lo que tener la clase de seguridad comprobada que Foles brinda en caso de emergencia debe darles mucha tranquilidad, a la que podrían no querer renunciar.

Nick Foles:

el improbable MVP del Super Bowl LII Por: Luis Obregón

Foto: Hannah Foslien - Getty Image

Cuando el confeti todavía estaba cayendo en el U.S. Bank Stadium para celebrar la victoria de los Philadelphia Eagles en el Super Bowl LII nos enteramos de que Nick Foles, había sido nombrado el Jugador Más Valioso (MVP por sus siglas en inglés) del partido, uniéndose así a una selecta lista de 44 jugadores con dicho logro, entre los cuales figuran leyendas como Jerry Rice, Bart Starr, Roger Staubach, Terry Bradshaw y otros ídolos modernos como Drew Brees, Peyton Manning y el mismo Tom Brady. No era el final que estábamos esperando. Vaya, es muy probable que ni el mismo Foles lo hubiera pensado al inicio de la temporada. Su circunstancia no le favorecía en lo absoluto; después de todo, su éxito parecía haber sido fugaz en aquella temporada 2013 en la que sustituyó a Michael Vick en la semana 5 para quedarse con la titularidad prácticamente el resto del calendario, cristalizando un gran año que todos recordamos por haber lanzado 27 touchdowns y sólo dos intercepciones, lo que resultó en su selección al Pro Bowl.

A partir de entonces todo parecía estar en debacle; al año siguiente no completó la temporada por una lesión en la clavícula y lo que jugó de la temporada no estuvo a la altura del año anterior; para 2015 fue enviado a los St. Louis Rams, donde eventualmente fue a dar a la banca a favor de Kase Keenum y posteriormente vio cómo el equipo tomaba a Jared Goff en la primera ronda del Draft ante lo que solicitó salir de los Rams.

partido de la temporada sólo jugó un cuarto, cuando los Eagles ya eran el mejor sembrado de la NFC.

Tras un paso de una temporada con los Kansas City Chiefs en donde fungió como reemplazo de Alex Smith y fue titular en un partido, comenzó el offseason de la temporada 2017 como agente libre, que claramente estaba instalado en el mercado de los quarterbacks suplentes y fue así como regresó a los Philadelphia Eagles para estar detrás del jugador de segundo año Carson Wentz.

En las tres ocasiones su equipo salió al campo siendo desfavorecido por todo el mundo, señalando precisamente a Foles como la causa principal de las dudas; aun así puso unos números espectaculares, superando el 72% de pases completos, quedándose apenas corto de las 1 000 yardas, con seis touchdowns y sólo una intercepción y con un rating de QB de 115.7 puntos.

La improbabilidad de su brillo en el escenario más grande incrementó cuando Wentz estaba teniendo una temporada tremenda que lo colocó de inmediato en los primeros planos de la NFL y en la contienda por el MVP de la temporada. Su inesperada lesión en la semana 14, cuando los Eagles ya eran un equipo perfilado para llegar lejos en la postemporada, puso a Foles de nuevo en los controles de la ofensiva.

Lo más interesante es que el planteamiento ofensivo inició adaptándose a sus habilidades, imitando algunos conceptos con los que fue exitoso en la temporada 2013, pero poco a poco la ofensiva de Philadelphia regresó por momentos a ser la misma que ejecutaba Carson Wentz y Foles la operó sin mayor problema.

En total, Foles vio acción en siete partidos en la temporada regular, en cuatro de ellos entró al campo en el último cuarto cuando su equipo iba ya muy arriba en el marcador. En las semanas 15 y 16 fue en las que tuvo todo el partido para él y completó 43 de 76 pases para 400 yardas con cinco TD y una intercepción. En el último

Lo verdaderamente interesante vino en playoffs, donde tomando ventaja de un diseño de plan de juego excepcional por parte de su staff de coacheo – específicamente Doug Pederson, Frank Reich y John DeFilippo– dio tres actuaciones realmente destacadas

En un partido en el que involucró a cinco diferentes receptores, lanzó tres pases de anotación, todos a un jugador diferente, acumuló 373 yardas y registró un rating de más de 106 puntos, su reconocimiento fue más que merecido.