Cómo superar una derrota Author: Diego |
El día en que Alemania mató a Brasil Perder en cualquier aspecto de la vida puede doler muchísimo. ¿A quién no le has pasado que ha tenido grandes expectativas en un proyecto y este ha fracasado? Trasladando esto al tema deportivo, la derrota se puede tornar mucho más jodida y dolorosa. Al menos en deportes de equipo como el fútbol o basquet puedes tener el consuelo “mediocre” de que perdiste por la culpa del resto y puedes compartir eso con tu equipo. Pero en un deporte individual cómo el ajedrez o tenis es normal que uno pueda interpretar la derrota como algo personal: “soy una bestia por haber jugado así”, “no tengo talento, no sirvo para esto” son comentarios internos típicos en cualquier jugador. La mayoría de personas se hunden mucho en estos comentarios que al final del día no son capaces de recuperarse, el resultado negativo los termina marcando. En este post quiero explicar herramientas que puedes aplicar luego de ser vencido en cualquier aspecto de tu vida, no solo ajedrez o cualquier otro deporte. Se trata de cómo superar el negativismo y aprovechar la derrota para convertirla
en oro y así poder levantarte del suelo en cualquier momento de tu vida. Este no es un discurso motivacional, no esperes que te diga cosas cómo: mantente positivo, sabes que tu derrota es injusta pero todo saldrá bien. Sino más bien #STOPBEINGABITCH y reconoce que eres un humano y puedes cometer errores, no pasa nada, la vida está hecha para eso :D.
Tips sobre cómo superar una derrota Reconoce los errores como propios- Sé responsable Si eres de los jugadores que luego de perder le echas la culpa a un mal arbitraje, que tu oponente tuvo mucha suerte o que la persona que te entrenó no lo hizo bien entonces tienes mucho por trabajar. Líneas atrás escribí lo fácil que es echarle la culpa a alguien más aún cuando juegas un deporte colectivo y lo califiqué como algo mediocre. El jugador mediocre de cualquier disciplina solo puede ver que el error se encontró en la falta de un compañero o un estímulo externo pero rara vez se cuestiona que hizo él para influir de manera negativa en el juego tanto antes como durante el partido. Lo mismo se aplica en el ajedrez, es una buena práctica atribuir los errores a nuestra falta de comprensión del juego: falta de práctica, errores por omisión de respuesta del rival, falta de entrenamiento, falta de concentración, etc. Pero si nos ponemos en el plan de pensar que la persona con la que jugamos es un maldito suertudo o que el árbitro apoyo con una decisión a nuestro oponente o cualquier otra cosa, entonces difícilmente vamos a darnos cuenta en que fallamos y MÁS IMPORTANTE AÚN: OMITIMOS TODO LO QUE PODEMOS APRENDER EN BASE DE NUESTRO ERROR PARA, ASÍ, MEJORAR. Deja de culpar a cualquier estímulo externo por tu falta de éxito y empieza por ver en que puedes cambiar tú para mejorar tu juego, los resultados con tu equipo, tu relación familiar, tu éxito laboral, etc. Puedes aplicar este principio a cualquier aspecto de tu vida con buenos resultados. Ser consciente de tus errores es ser responsable. No seas un jugador mediocre en la vida.
Aprende de tus errores, ama equivocarte Ok, ahora que ya eres consciente de que las cosas malas te pasan a ti solo y solo por tu culpa, es necesario que veas esto sin ser un fatalista y hater de la vida. Aprende a sentir un gusto a equivocarte.La manera más rápida de aprender es viendo a través de tus errores. Tu trabajo consiste en analizar tu partida de ajedrez o si juegas otro deporte, analizar el partido con tu entrenador y con el resto de jugadores: ¿Que faltó? ¿En qué momento me desconcentré? etc. Si eres ajedrecista y estas apuntando tu partida en una planilla puedes anotar alguna jugada dudosa y analizarla después con un programa. Etc, hay mil formas de hacerlo pero debe ser tu prioridad descubrir cual fue tu carencia y trabajar en ello.
Un caso personal No se necesita saber de ajedrez para entender esto. Esta partida se jugó hace muchos años así que no recuerdo como fue exactamente pero más o menos fue así. Yo llevaba las piezas blancas: tengo un rey y una torre. Mi oponente, llevaba las negras y también tenía un rey y una torre pero con un peón de ventaja. El contexto es este: es mi primer torneo de ajedrez oficial, estoy jugando la última ronda y si gano clasifico para jugar el torneo nacional en Huaraz, si pierdo o empato quedo afuera. Lo mismo para mi rival. La situación era muy tensa, y la partida también lo fue. Teóricamente ese final de ajedrez debe ser empate pues debido a que el negro, a pesar de tener un peón de ventaja, no puede imponer el marcador, no tiene como progresar en la posición. Yo, en ese entonces, era un chibolo pulpín y no sabía mucha teoría de finales. Así que al ver que tenía un peón de menos actué mecánicamente y decidí rendirme, pensando que todo estaba perdido, porque desconocía la teoría. Sí, me rendí. jajajaja luego de eso, recuerdo que todos los que miraban la partida se quedaron sorprendidos: ellos sabían que eso era una posición teórica de tablas (empate) y se rieron de mí. Cuando llegue a mi casa, me puse a llorar, me sentía muy imbécil por haber sido derrotado así. Me dolió mucho perder, tenía muchas expectativas de jugar ese
torneo nacional. Odié con todo mi ser a mi rival porque él sí iba a clasificar por pura suerte jajaja que tarado fui. (El odio me duró pocas semanas, ese jugador que me ganó se convertiría en un buen amigo años más tarde).
¿A dónde quiero llegar con esta historia? Luego de esa derrota traumática decidí mejorar mi situación: empecé a entrenar teoría de finales con mucha intensidad. A saber en qué me equivoqué y de esta dolorosa experiencia aprendí tres cosas valiosas: 1. A tener un norte a la hora de jugar finales de ajedrez. 2. No ser impulsivo al momento de tomar una decisión: haber elegido rendirme fue una decisión que tomé apresuradamente, si bien es cierto no conocía mucho de los finales, si me detenía a pensar un poquito más quizás me hubiera dado cuenta que sí había salvación. 3. No rendirme ante la dificultad, pelear hasta el último. Si bien estas cosas las aprendí en el ajedrez, es totalmente factible usar estas enseñanzas en otros aspectos de mi vida.
¿Cómo superé esta derrota? Sé que no es para tanto, perder una partida de ajedrez o cualquier otro deporte cuando eres chibolo (14 años) no es un gran dilema pero en ese entonces para mí fue el fin del mundo. Sin embargo, canalicé ese odio interno en algo positivo: aprender de mi error y mantenerme optimista. Lo cual me hace llegar al siguiente punto sobre cómo superar una derrota.
Toma perspectiva: ¡Inspírate! Cuando me recuperaba de esa derrota estaba forjando, sin saberlo, el YO que sería más adelante. Perder así me marcó mucho pero de una manera positiva, apenas tenía dos meses aprendiendo a jugar ajedrez pero en mi afán por superarme y no cometer más errores así fue cuando decidí que quería seguir entrenando y jugando por el resto de mi vida. Sin saberlo, un error influyó de manera positiva en mí. Como los cabrones de mis amigos no dejaron de fastidiarme por haberme rendido en esa partida (estuvieron en ese plan al menos un año jajaja), tuve que ignorarlos, me despegué totalmente de los comentarios negativos y empezó mi búsqueda de modelos a seguir y mi fuente de inspiración.
Si hay algo que me conmovía mucho era ver a mis profesores de ajedrez enseñando o jugando: eran y son muy buenos en lo que hacen, realmente los admiro bastante y cada comentario positivo o de feedback que recibía de ellos me los tomaba muy a pecho y durante mucho tiempo estuve muy enfocado en seguir perfeccionando mi juego. No es que ahora sea el gran experto de ajedrez pero puedo decir que esa época fue un huracán de motivación para hacerme un mejor jugador.
Carlsen Magnus celebrando en la piscina luego haber ganar el campeonato del mundo!!! No solo eso, mi generación fue la que sintió en carne viva la lucha por la supremacía de Carlsen Magnus. A mediados del 2008 veía como un joven, apenas unos años mayor que yo rompía con todos los esquemas y derrotaba a todos los grandes maestros del ajedrez a nivel mundial. Carlsen siempre ha sido una inspiración para mí. Hoy en día es campeón del mundo. Y a pesar de que tiene un juego casi perfecto, también ha sido derrotado en numerosas ocasiones. Y yo presencié todo eso, vi como una persona como yo se caía y se alzaba una y otra vez y eso me marcó. Carlsen representa el ímpetu y rebeldía de la juventud y de él aprendí a romper con lo tradicional y sobre todo a divertirme con lo que hago.
¿A qué quiero llegar con todo esto? 1.
Cuando te sientas como una caca por haber perdido en algo que significaba mucho para tí o por haber fallado en cualquier proyecto, lo que te puede ayudar a superar esta derrota es tomar perspectiva de tu situación: recuerda que perder no es una derrota en sí sino una oportunidad para aprender de tus carencias.
2. Para esto es necesario, MUY NECESARIO, que seas responsable contigo mismo, que te comprometas con una meta y que estés listo para autocriticarte: ser lo suficientemente humilde y sincero contigo para darte cuenta que tú y solamente tú eres responsable del error que has cometido. Solo así podrás tener la capacidad de reconocer en que te equivocaste y arreglarlo. 3. Para mantener el optimismo ignora los comentarios negativos: generalmente la gente esperará que te estrelles de cara contra el piso para poder reírse de ti o recordarte lo estúpido que era tu idea, sueño o meta a cumplir. Shit happens. Lo importante es alejarte de esa gente pesimista y buscar gente que ya ha logrado lo que tú persigues, en mi caso: mis entrenadores de ajedrez. 4. Busca modelos a seguir, en mi caso, yo elegí a Carlsen Magnus: él me inspiró a querer mejorar mi juego y adaptar sus ideas sobre el tablero. Observar el comportamiento y el camino de la gente que admiras te hará comprender que el éxito es mucho más que victorias, ellos también son humanos y han sido derrotados, pero han sabido levantarse y aprender para mejorar.
Conclusiones No hay mucho que decir, es necesario que entiendas que perder es algo difícil de asimilar pero es la mejor manera de aprender algo. El fracaso es la vía del éxito. No te hagas dramas por las cosas negativas que te están pasando, toma acción respecto a tu vida y convierte una mala experiencia en algo positivo. Agradécele al mundo la oportunidad que tienes de redimir tus errores y para la próxima vez estarás mejor preparado, optimista y listo para comerte al mundo. No pensaba en exponer esta última parte pero tengo que admitir que escribir esta entrada me ha ayudado a abrir un poco los ojos. ¿Conoces a Steve Jobs? sí, el fundador de Apple. En su famoso discurso en Standford él habla respecto a la teoría de conectar los puntos. Una serie de eventos y decisiones que tomaste en tu vida: algunas positivos otras negativas. Estos aparentemente son producto del azar y no puedes hallarles explicación a futuro pero, sin embargo, pasado el tiempo te das cuenta que las cosas pasaron por algo y agradeces que así haya sido. Escribiendo este post recién son consciente de algunas cosas importantes: agradezco haber perdido esa partida a mis 14 años, no hizo otra cosa más que motivarme para seguir mejorando y a enamorarme de algo que se convertiría años más tarde, sin saberlo, en mi pasión. Puede que no haya viajado a jugar el torneo nacional producto de mi derrota pero todas las amistades, las experiencias, lo viajes
que he realizado debido a jugar ajedrez me hicieron ganar algo más importante: D. Puede sonar algo irracional, pero unir los puntos es algo que solo se puede hacer en el futuro mirando hacia el pasado. Acepta las cosas malas que te pasan, haste responsable por ellas, trabaja para superarte y cuando llegue el día: varias semanas, varios meses o varios años más tarde podrás ver todo con más claridad. Confía en tu intuición y sigue tu corazón. I’m done.
Y tú ¿Alguna vez has pasado por algo similar en cualquier aspecto de tu vida? ¿Qué hiciste para sobreponerte a esa dificultad? Comparte este post con quienes estén pasando por un momento complicado y puedan encontrar útil esta información: D. Fuente: Aquí