La Navidad en el C.E.I.P. JoaquĂn Benjumea BurĂn Sevilla, diciembre de 2014
Un año más se acerca la Navidad, época en la que continuando con la tradición, el C.E.I.P. Joaquín Benjumea Burín adorna sus clases, salones, pasillos...
Y no podĂa faltar... El Portal de BelĂŠn.
El Portal de Belén del C.E.I.P. Joaquín Benjumea Burín
Es una noche muy, muy fría. El cielo está cubierto de estrellas, pero no son unas estrellas cualquiera. Son estrellas que brillan de forma especial, porque su energía viene del Amor, la Amistad, el Compañerismo y la Paz.
Todo ocurre con total normalidad. El vendedor de telas, Mauricio, hace tiempo que se ha levantado y ha colocado en el tenderete sus mejores tejidos: los paĂąos de mayor calidad, unos linos excelentes y unas sedas tan suaves... En el puesto de Mauricio se podĂan encontrar las telas mĂĄs bonitas del lugar, con un colorido y un tacto sin igual.
Muy cerca de Mauricio encontramos a Primitivo, un viejo pastor que está medio adormilado. Su pequeño rebaño de ovejas lleva toda la noche pastando. - ¡Qué hermosos ejemplares! Primitivo aunque muy cansado, se sentía muy orgulloso de su rebaño.
En la lejanía, podemos ver una pequeña aldea de casitas singulares que empiezan a iluminarse. Pronto la noche desaparecerá y los humildes aldeanos se preparan para el ajetreo del nuevo día, que va a comenzar.
El fornido Tomás ha pasado la noche recogiendo leña para calentar su hogar. Había sido una noche muy fría, tan fría que tenía hasta los huesos congelados. - ¡ Menos mal que leña no nos va a faltar ! Pensaba mientras caminaba sin parar.
- ¿Quién tenemos aquí?. Carmela “la castañera”. Carmela es una anciana que lleva toda su vida en Belén, asando las más ricas castañas del lugar. Carmela aprendió el oficio desde pequeñita, por tradición familiar. Carmela, la castañera, como es costumbre no pasa frío por las noches porque se calienta junto a la lumbre.
Junto a Carmela, unos pastores tienen por usanza pasar las noches alrededor del fuego, hablando de cómo han pasado el día. Entre ellos está el joven Nicolás, al que le gusta el pavo a rabiar; por eso despluma uno deprisa para que esté listo a la hora de almorzar.
En la fuente rodeada de profunda vegetaciรณn, encontramos a las lavanderas Elvira y Leonor que lavan y lavan con mucho furor. - ยกPobrecitas, tienen las manos heladas! - ยกPero que limpia van a dejar la colada!
Pilar y Lucía, van camino de la fuente, llevando sus cántaros con mucha gracia y maestría. - ¡Qué arte, madre mía!
La noche estĂĄ llegando a su fin, dejando paso a las primeras luces del alba, no sin antes decir, que el puesto de semillas estĂĄ perfectamente colocado, endulzando y embriagando el amanecer de un sin fin de olores: anĂs, romero, canela... Olores que recuerdan a los dulces de las abuelas.
Pero, ese otro olorcito a pan recién hecho, ¿de dónde viene?. Juan el panadero se ha pasado la noche amasando y horneando el pan. - ¡Qué puesto más bien ordenado! - ¡Cuánto primor! - ¡Qué trabajo más bien terminado!
El gallo muy ufano, con su Kikirikí, despierta a Severiano, que sigue tumbado. Mientras, Pepita grita: - ¡ Dáte prisa, María Luisa !
Los pastores y pastoras van ocupando los caminos. Unos cargados con sus cestos de fruta, otros con la oveja en su regazo. Poco a poco, todos juntos se estรกn acercando al Portal.
Ese portal que todos los años se ocupa de forma tan singular: San José, el carpintero, María, madre entregada, la mula y el buey que dan calor al niño Rey. La noche está a punto de acabar, y aunque el día llegue el portal no parará de brillar. Estará siempre brillando mientras los hombres, la verdadera NAVIDAD sigan celebrando.
Desde el CEIP. Joaquín Benjumea Burín deseamos que celebréis la NAVIDAD desde el corazón, con Esperanza y Amor. ~
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FELIZ NAVIDAD 2014.