Mtro. Juan Martín Guerrero García
ALIANZA PARA LA PRODUCCIÓN
José López Portillo recibe al país con una situación económica muy difícil:
-
Disminución en el PIB
-
Déficit de las finanzas públicas
-
Continuo incremento de la inflación
-
Aumento en la deuda externa mexicana
● Su proyecto de Gobierno consistiría en un programa dividido en tres etapas 1.
Dos años de recuperación
2.
Dos de consolidación
3.
Dos de crecimiento acelerado
Iniciando una política de reconciliación con los sectores empresariales, propuso a los empresarios su programa denominado “Alianza para la Producción” pues serían un factor importante para aliviar la carga pública.
Reforma en materia hacendaria:
-
Énfasis en la participación del sector empresarial
-
Mayor progresividad al impuesto sobre la renta a personas físicas
Se aplicó una política de austeridad absoluta que para el pueblo se tradujo en un tope salarial del 10% y en el crecimiento de los productos de consumo básico.
Esto se firmó con un acuerdo de estabilización con el FONDO MONETARIO INTERNACIONAL (FIM)
“La alianza para la producción” se consolidó como una política propuesta para superar la crisis, apelando a la unidad de la burguesía en torno al régimen.
Con esta propuesta el desarrollo económico descansaría en la actividad empresarial, correspondiendo al Estado respaldar la acumulación privada a través de apoyos financieros, estímulos fiscales, insumos a precios adecuados y mano de obra barata y eficaz.
La acumulación del capital seguiría el rumbo del apoyo estatal y explotación social.
López Portillo inicia un proceso de modernización de las actividades del gobierno federal y de las relaciones con la sociedad.
LA REFORMA ADMINISTRATIVA
Ésta reforma buscaba que los recursos que manejaba el gobierno federal se administraran eficientemente, esto significaba que las prácticas de corrupción debían erradicarse y disminuir la burocracia del estado.
Se construyó con la idea que la clase empresarial se conformara como un grupo eficiente y productivo.
La
política aplicada en el sexenio de Portillo construyó la idea de que todos los grupos políticos debían participar en la superación de la crisis, obreros, gobierno y empresarios, pues tenían cierta responsabilidad en la recuperación del crecimiento económico.
REFORMA
POLÍTICA
Pretendía incorporar a la estructura institucional todas las manifestaciones políticas representadas en los partidos de oposición.
La Ley Federal de Organizaciones Políticas y Procesos Electorales (LFOPPE) impulsó la participación de grupos políticos opositores al régimen en espacios legales de participación.
Junto con la ley de amnistía conformaron medidas para reconstruir el consenso social con el sistema político.
Con ésta ley se permite el registro de nuevos partidos dando la apariencia democrática del sistema.
APROVECHAMIENTO
DE LOS RECURSOS
PETROLEROS
Hacia 1972 en México se descubrió un número importante de yacimientos de petróleo, pero debido a los problemas económicos y financieros no permitieron realizar inversiones en el sector por el alto costo y la inversión no permitida del capital privado en el sector energético.
José López Portillo anunció que el país contaba con reservas de 24 000 millones de barriles, y que la producción petrolera alcanzaba la cifra de un millón de barriles diarios.
El
gobierno federal adoptó una actitud triunfalista que se muestra con la frase ‘‘los países se dividen entre los que tienen petróleo y los que no tienen; ¡nosotros lo tenemos!’’ pronunciada por el mismo presidente en uno de sus informes de gobierno.
La
política planeada por López Portillo se fue alejando de los objetivos originales hacia un proceso de crecimiento acelerado centrado en la industrialización del país aprovechando las riquezas inagotables de lo yacimientos de petróleo.
México
pudo asegurar el gran potencial de recursos petroleros y el aumento de los precios del barril d petróleo por control de producción, manejada por la OPEP (Organización de Países Exportadores de Petróleo)
López Portillo llego a afirmar que ‘‘los mexicanos que han sufrido carencias ancestrales, ahora tendrían que aprender a administrar la abundancia’’ y que ‘‘por primera vez en la historia disfrutaríamos de autodeterminación financiera’’
El crecimiento de las reservas de petróleo trajo un aumento en la producción de 1979 a 1 626,000 barriles diarios, y hasta 1982 ocupamos el cuarto lugar como país petrolero en reservas probadas de 250 000 millones de barriles alcanzando una exportación de 1 500, 000 barriles diarios, lo que representaba un ingreso muy importante.
Esta situación se considero como una carta de presentación ante las situaciones financieras internacionales, el gobierno mexicano inició un proceso de endeudamiento externo muy importante.
La ‘‘deuda externa que en 1997 era de menos de 21, 000 millones de dólares, ya para 1982 alcanzaba los 76, 000 millones, de los cuales el 80% correspondía al gobierno y el 20% restante la deuda privada. Por ello el presidente optó por una expansión económica acelerada, aprovechando la oportunidad que le abría el petróleo, ‘‘único recurso que podía generar excedentes para solucionar nuestros problemas’’
La política aplicada de crecimiento acelerado de la economía se fundó en el incremento del gato público, la inversión pública y el gato corriente, para 1981 los egresos se incrementaron en 55%, inversión pública un 405, el gasto corriente un55%, y el servicio dela deuda un 36%.
El gasto que se aplicó en el sexenio fue expansivo tuvo muchas consecuencias positivas:
Crecimiento del PIB industrial
Aumento en la creación de empleos en el sector industrial
Autosuficiencia en maíz, arroz y frijol, a partir del plan Sistema Alimentario Mexicano (SAM)
Aumento del poder adquisitivo del salario.
Todos los logros en materia económica perdieron su efectividad porque el crecimiento era ficticio pues las industrias paraestatales producían a costos muy altos y por lo tanto operan con números rojos por la falta de competitividad.
El gobierno federal las apoya a través de recursos públicos, financió sus pérdidas por los subsidios.
Un grave error fue el derroche que se realizó con los recursos que salían de la venta del petróleo y de los créditos del exterior en malas inversiones, en otorgamiento de subsidios, crear superávit, o relajar las políticas fiscales; todo esto condujo a un aumento del déficit hacendario y a su vez a una Inflación rampante.
López Portillo no podía ocultar lo que pasaba en la situación económica, donde existía una inflación muy alta, que hizo que los artículos extranjeros se cotizaran en el mercado interno y que los artículos nacionales (menos el petróleo) encarecieran continuamente.
Afecta esta situación directamente en la balanza comercial y la cuenta corriente aunado al creciente servicio de la deuda externa.
La
cotización del precio del petróleo se debe a:
Incremento en la oferta de hidrocarburos.
Introducción en el mercado de nuevos productores marginales.
Reactivación de pozos.
Desarrollo de fuentes alternativas de energía.
Introducción de nuevas tecnologías ambientales.
Menor consumo de hidrocarburos en países muy desarrollados.
Con la baja del petróleo vinieron otras bajas que formaban parte importante de las exportaciones del país como: café, algodón, cobre y plomo. Muchos economistas recomendaban al presidente devaluar la moneda y reducir los gastos públicos a lo que López Portillo respondió: “Presidente que devalúa, presidente que se devalúa”
En 1982 el Banco de México se retiró del mercado de cambios se devalúo el peso fue necesario porque el pago de los intereses de la deuda externa eran de 8,200 millones de dólares anuales. López Portillo disminuyó el gasto público, subió precios y tarifas públicas, elevó tasas de interés, decretó un alza en sueldos y salarios
Se
siguieron comprando dólares y acreedores del gobierno no renovaron sus créditos, el gobierno pagó en pesos los depósitos en dólares hechos por mexicanos en la banca nacional, se cerró la venta de dólares por 4 días, López Portillo decidió la nacionalización de los bancos y el establecimiento del control de cambios.