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M A R T Í N
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Safo. Safo. 19081908-1909. Óleo sobre lienzo. 187 x 124 cms. cms.
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O ΣΑΠΦΟ
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Museo de Bellas Artes. Valencia
Φαίνεταί µοι κῆνος ἴσος θέοισιν ἔµµεν’ ὤνηρ, ὄττις ἐνάντιός τοι ἰσδάνει καὶ πλάσιον ἆδυ φωνείσας ὐπακούει καὶ γελαίσας ἰµέροεν, τό µ’ ἦ µὰν καρδίαν ἐν στήθεσιν ἐπτόαισεν· ὠς γὰρ ἔς σ’ ἴδω βρόχε’, ὤς µε φώναισ’ οὐδ’ ἒν ἔτ’ εἴκει, ἀλλ’ ἄκαν µὲν γλῶσσα ἔαγε, λέπτον δ’ αὔτικα χρῶι πῦρ ὐπαδεδρόµηκεν, ὀππάτεσσι δ’ οὐδ’ ἒν ὄρηµµ’, ἐπιρρόµβεισι δ’ ἄκουαι, κὰδ’ δέ µ’ ἴδρως ψῦχρος ἔχει, τρόµος δὲ παῖσαν ἄγρει, χλωροτέρα δὲ ποίας ἔµµι, τεθνάκην δ’ ὀλίγω ‘πιδεύης φαίνοµαι
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Biografía M A R Í A
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Safo (c. 600-? a.C.), poeta lírica griega cuya fama hizo que Platón se refiriera a ella dos siglos después de su muerte como la décima musa. Nació en la isla de Lesbos, probablemente en Mitilene. Aunque no se sabe mucho acerca de su vida, perteneció al parecer a una familia noble y fue contemporánea del poeta lírico Alceo, de quien se supone fue su amante, y de Stesichorus. También se dice que se casó con un hombre rico de la isla de Andros y que tuvo una hija llamada Cleis.
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No se sabe cuando murió, pero en sus poemas de última época se describe a sí misma como una anciana que goza de una vida tranquila, pobre, en armonía con la naturaleza.
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Biografía M A R Í A
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Los fragmentos que hoy conservamos de sus poemas indican que Safo enseñó su arte a un grupo de mujeres jóvenes, con las que mantuvo una estrecha relación y para las que compuso sus odas nupciales cuando la abandonaron para casarse. El poeta Anacreonte (mediados del siglo VI a.C., es decir, una generación posterior a Safo), afirmaba, en referencia a este grupo, que Safo sentía un amor sexual por las mujeres; de ahí proceden los términos lesbianismo y safismo, que aluden a la homosexualidad femenina.
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Biografía M A R Í A
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Safo escribió nueve libros de odas, epitalamios o canciones nupciales, elegías e himnos, pero apenas se conservan algunos fragmentos de todos ellos. Entre estos destaca la Oda a Afrodita, citada por el erudito Dioniso de Halicarnaso en el siglo I a.C. En el siglo XX se descubrió un papiro con nuevos fragmentos de sus poemas. La poesía de Safo se caracteriza por la exquisita belleza de su dicción, su perfección formal, su intensidad y su emoción. Inventó el verso hoy conocido como oda sáfica (tres endecasílabos y un adónico final de cinco sílabas). Muchos poetas griegos posteriores asimilaron la influencia de Safo, en particular Teócrito
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Fragmentos de Poemas M A R Í A
J.
Fragmento 23 P ........................... pues cuando te miro a la cara creo que jamás Hermíona fue tan bella y que no está mal que a la rubia Helena yo te compare....
Fragmento 39 P ... y un hermoso adorno de piel de Lidia sus pies cubría...
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Fragmento 36 P
Fragmento 47 P
...y echo yo de menos y ansiosa busco...
... me ha agitado Amor los sentidos como en el monte se arroja a los pinos el viento...
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Fragmentos de Poemas Fragmento 51 P
Fragmento 121 P
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Qué puedo hacer, no lo sé: mis deseos son dobles.
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Sigue siendo mi amigo, pero busca una esposa más fresca; que vivir no podría contigo siendo yo la más vieja.
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Fragmento 91 P
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Más desdeñosa que tú, Irana, no sé de ninguna.
Fragmento 115 P ¿A quién, novio, podría yo bien compararte? A un sarmiento flexible de vid te comparo.
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Himno en honor a Afrodita
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¡Oh, tú en cien tronos Afrodita reina, Hija de Zeus, inmortal, dolosa: No me acongojes con pesar y tedio Ruégote, Cripria! Antes acude como en otros días, Mi voz oyendo y mi encendido ruego; Por mi dejaste la del padre Jove Alta morada. El áureo carro que veloces llevan Lindos gorriones, sacudiendo el ala, Al negro suelo, desde el éter puro Raudo bajaba. Y tú ¡Oh, dichosa! en tu inmortal semblante Te sonreías: ¿Para qué me llamas? ¿Cuál es tu anhelo? ¿Qué padeces hora? -me preguntabas¿Arde de nuevo el corazón inquieto? ¿A quién pretendes enredar en suave Lazo de amores? ¿Quién tu red evita, Mísera Safo? Que si te huye, tornará a tus brazos, Y más propicio ofreceráte dones, Y cuando esquives el ardiente beso, Querrá besarte. Ven, pues, ¡Oh diosa! y mis anhelos cumple, Liberta el alma de su dura pena; Cual protectora, en la batalla lidia Siempre a mi lado.
Antigo busto grego de Safo, século 5 a.C. A inscrição "ΣΑΠΦΩ ΕΡΕΣΙΑ" diz: "Safo, a eresiana" Museu Capitolino, Roma, Itália.
A UNA AMADA M A R Í A
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Paréceme a mí que es igual a los dioses el mortal que se sienta frente a tí, y desde tan cerca te oye hablar dulcemente y sonreír de esa manera tan encantadora. El espectáculo derrite mi corazón dentro del pecho. Apenas te veo así un instante, me quedo sin voz. Se me traba la lengua. Un fuego penetrante fluye en seguida por debajo de mi piel. No ven nada mis ojos y empiezan a zumbarme los oídos. Me cae a raudales el sudor. Tiembla mi cuerpo entero. Me vuelvo más verde que la hierba. Quedo desfallecida y es todo mi aspecto el de una muerta...
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Safo y Faón (Jacques-Louis David, 1809)
UNA AMADA AUSENTE M A R Í A
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Te igualaba a una diosa insigne, y tú te embelesabas con su canto como con otro ninguno. Pero se fue, y ahora sobresale entre las damas lidias lo mismo que la luna de rosados dedos eclipsa todas las estrellas una vez puesto el sol. Y su brillo baña de plata el mar salobre, e ilumina las campiñas floridas, donde ha caído el rocío y han brotado las rosas, el tierno perifollo, las dulces flores del trébol. Mas en el ajetreo de su nueva vida no deja de añorar el cariño de su amada Atis, y en el pecho le duele de nostalgia el corazón.
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Safo CharlesCharles-August Mengin Óleo 1877
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EN LA DISTANCIA M A R Í A
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De veras, quisiera morirme. Al despedirse de mí llorando, me musitó las siguientes palabras: "Amada Safo, negra suerte la mía. De verdad que me da mucha pena tener que dejarte." Y yo le respondí: "Vete tranquila. Procura no olvidarte de mí, porque bien sabes que yo siempre estaré a tu lado. Y si no, quiero recordarte lo que tu olvidas: cuantas horas felices hemos pasado juntas. Han sido muchas las coronas de violetas, de rosas, de flor de azafrán y de ramos de aneldo, que junto a mí te ceñiste. Han sido muchos los collares que colgaste de tu delicado cuello, tejidos de flores fragantes por nuestras manos. Han sido muchas las veces que derramaste bálsamo de mirra y un ungüento regio sobre mi cabeza."
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Safo y Alcaeus Lawrence Alma-Tadema 1881
SOLEDAD A MEDIA NOCHE M A R
Se han puesto ya la luna y las pléyades.
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Es media noche.
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Pasa el tiempo. M A R
Y yo sigo durmiendo sola.
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Los poetas Safo y Alcaeus con los liras Detalle de florero ateniense de arcilla Cerca de 480 A.C.
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CUASI VENTUS M A
Amor ha agitado mis entrañas como el huracán que sacude monte abajo las encinas.
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Viniste.
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Hiciste bien.
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Yo te estaba aguardando. Has prendido fuego a mi corazón, que se abrasa de deseo.
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Monte Parnasso, Justicia: Poetas en conversación y Safo Rafael Sanzio Italia
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UN EPIGRAMA Estas son las cenizas de Timade. M A R Í A
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Muertas antes de la boda, fue a parar al oscuro tálamo de Perséfone. Y una vez que ella pereció, con un acero recién afilado, todas sus compañeras colocaron aquí como ofrenda la graciosa cabellera de sus cabezas.
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Safo Johann Heinrich Dannecker 1758-1841 Staatsgalerie, Stuttgart, Alemania
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Me parece el igual de un dios, el hombre que frente a tí se sienta, y tan de cerca te escucha absorto hablarte con dulzura y reírte con amor. Eso, no miento, no, me sobresalta dentro del pecho el corazón; pues te miro un solo instante, ya no puedo decir ni una palabra, la lengua se me hiela, y un sutil fuego no tarda en recorrer mi piel, mis ojos no ven nada, y el oído me zumba, y un sudor frío me cubre, y un temblor me agita todo el cuerpo, y estoy, más que la hierba, pálida, y siento que me falta poco para quedarme muerta.
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(Safo)