LA SOMBRA DEL LOBO -PRISIONERO DE LA LUNA“Te ofrezco pertenecer a Llaxta. A la ciudad perdida. Donde los parias se convierten en llaxtamasi, donde aquello que te avergüenza no existe, donde tus enfermedades pueden ser curadas. No todos pueden pertenecer a Llaxta. Buscamos gente como tú: jóvenes que prometen, sin compromisos con el resto del mundo, que necesiten de un lugar como Llaxta. Que lo necesiten tanto que no se les ocurrirá jamás traicionarnos”. Los yanapaqi somos hombres de fe, y es por eso que se nos ha revelado este Paraíso en la Tierra, para que vivamos en él. Nos fue ordenado que lo cuidáramos aun a costa del sacrificio y que lo preserváramos de todo mal”.
Blas de Marco pisa tierra americana con la esperanza de encontrar un nuevo hogar y olvidar su doloroso pasado. Apenas llega a La Cruz, el pequeño asentamiento en medio de la selva, trabaja duro para convertirse en soldado junto a su amigo, Sebastián Aragón. Ambos resultan ser los blancos de las miradas de las jóvenes del lugar, pero eso a Blas lo tiene sin cuidado. Su historia lo persigue y comienza a sentir que hay algo en él que no podrá confesar a nadie, ni siquiera al padre José, cura del lugar. En su interior crece una fuerza extraordinaria y salvaje que lo domina y no lo deja en paz. Su cuerpo y sus sentidos ya no le pertenecen, animados por la luna de la que no puede escapar. Cuando todo parece estar perdido, la aparición de un extraño hombre le devuelve algo de fe. El paraíso en la Tierra, la legendaria ciudad perdida, está más cerca de lo que él cree y tal vez sea este su posible camino de salvación. Será en ese lugar donde Blas encontrará respuestas a sus temores más profundos.