Este maravilloso salterio, originado en el suroeste de Alemania después de 1235, se conservó mucho tiempo en el monasterio de Polling (Alta Baviera) antes de entrar en las colecciones de la Biblioteca Estatal de Baviera. Se destaca especialmente por el extenso ciclo de escenas bíblicas que precede al texto del salterio. Hay cuatro representaciones tomadas de la vida de Adán y Eva, seguidas por escenas del Nuevo Testamento, que comienza con la Anunciación y con un Majestas domini (Gloria del Señor), rodeado de símbolos evangelistas en el final. Tanto la vista de Cristo descendiendo al infierno, en la sección pictórica superior, como la del rey del infierno encadenado, en la inferior, son particularmente imponentes. Los párrafos dentro del texto del salterio están marcados con fastuosas iniciales en acuarela de colores brillantes en gouache de gran densidad, sobre fondo dorado, rodeadas por un marco.