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3- Alexya San Roman A MI PADRE
A MI PADRE Alexya San Roman - México
Decenas de años han transcurrido uno a uno cayó sobre mi memoria, junto a su genoma espirulado, ceños y flexión vocal contando mi historia.
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Mientras llega por mí la barca, con mi padre conduciendo, como lo hacía en su auto de mi infancia, cantando coplas con la lira de Orfeo.
Ningún tiempo fue perdido, la caricia nocturna al terminar su cuento, la última carcajada de su ronco pecho, me conducía a los sueños con Morfeo.
Me legó la memoria de sus ancestros, contó los pasos ampollados de migrantes, para llegar a la tierra prometida, donde surcar nuestra historia.
Reconozco el trayecto de mi padre, cada momento, una experiencia única, que vivió y fue trascendente, informal e impuntual, incluso a la hora de su partida.
Inesperado momento, su eterno canto, enmudeció en un grito silencioso, atorado en mi garganta. donde ya no pude decir más: ¡Padre! Aún no terminaste mi cuento.
Apreté mis manos, encogí mi lágrima, vacié su eterna sonrisa, en el cajón de mi angustia, en mis ojos ciegos, guardé su figura, y en mi corazón, guardé su alma.