Otra compañía aérea en tierra Ultra Air suspendió la venta de tiquetes

La compañía aérea de bajo costo tomó la decisión como medida para su reorganización, ante la crisis financiera que atraviesa

Luego de que la Superintendencia de Transporte anunciara medidas administrativas contra Ultra Air, sobre el mediodía de este jueves 23 de marzo la compañía aérea colombiana de bajo costo anunció que suspendería la venta de tiquetes aéreos a partir de la fecha.

De acuerdo con la información obtenida por diversos medios colombianos, la suspensión de la venta de los tiquetes aéreos se mantendrá hasta el próximo 30 de abril, con el fin de que la compañía aérea pueda reorganizar su operación y así evitar una afectación a sus pasajeros.

Periodistas de la W Radio además aseguraron que la suspensión de la venta de tiquetes habría sido solicitada desde el propio Ministerio de Transporte.

“Fuentes del MinTransporte confirman que a través de la Aeronáutica Civil se solicitará la suspensión de venta de tiquetes por parte de Ultra Air, así mismo, se empezarán a tomar medidas a través de un PMU para ayudar a los usuarios que están viéndose afectados en sus vuelos”, dio a conocer uno de los comunicadores de la cadena radial a través de su cuenta de Twitter.

La medida se da a conocer a tan solo horas de que usuarios de Ultra Air denunciaran a través de redes sociales demoras y cancelaciones en sus itinerarios de vuelo en los aeropuertos de El Dorado, en Bogotá, y José María Córdova, en Medellín.

“Nadie quiere poner la cara. Siguen vendiendo tiquetes. Nos están estafando, han cancelado todos los vuelos”, manifestó un viajero del Aeropuerto Internacional El Dorado de Bogotá, en diálogo con Citytv.

Fuentes de la industria aérea le indicaron al diario El Colombiano que la suspensión de la venta de tiquetes aéreos estaría relacionada con que la compañía de bajo costo estaría cerca de perder al menos tres de sus aviones, por incumplimientos con sus arrendadores.

Es de recordar que ya en la mañana de este jueves 23 de marzo, la superintendente de Transporte, Ayda Lucy Ospina, confirmó que la aerolínea presenta baja liquidez, lo que podría afectar las operaciones de la compañía a corto plazo.

Según lo dicho por la funcionaria, las dificultades financieras efectivamente estarían relacionadas con retrasos en el cumplimiento de obligaciones con contratos de arrendamiento de los aviones de Ultra Air.

Pese a que la low-cost le aseguró a la Superintendencia de Transporte que adelantaba un proceso de renegociación con los arrendatarios de sus aviones, la entidad decidió interponer una serie de medidas administrativas contra Ultra Air, con el fin de prevenir justamente un cese o suspensión de operaciones, tal y como sucedió el pasado 27 de febrero con Viva Air.

“Estas medidas lo que ha- cen es hacer un seguimiento punto a punto a la aerolínea para identificar las condiciones (de la compañía aérea) de forma diaria y semanal. (...) Yo deseo dejar en claro que hasta el día de hoy Ultra Air no ha suspendido servicios, pero si ha reconocido ante la entidad las dificultades (financieras) que tienen”, explicó la superintendente de Transporte.

Aunque Ultra Air no se ha pronunciado oficialmente sobre la suspensión de la venta de sus tiquetes, ni tampoco ha confirmado si reducirá su flota de aviones, es de recordar que, luego de que JetSmart retirara su oferta de compra de la aerolínea, la low-cost apuntó a través de un comunicado que la cancelación del acuerdo los podría obligar a hacer cambios en sus operaciones.

“Seguimos trabajando para obtener nuevos recursos de nuestros inversionistas y banqueros, ya que la salida de JetSmart del acuerdo firmado, puede obligarnos a ajustar la operación, caso en el cual estaremos contactando a nuestros clientes para minimizar los impactos que estos cambios puedan generarles”, indicó la compañía aérea de bajo costo.

Mientras se esclarece la situación financiera de Ultra Air, la aerolínea deberá cumplir con las medidas administrativas que le interpuso la Superintendencia de Transporte y que, entre otras cosas, incluye presentar a la autoridad un plan de sus operaciones aéreas cada ocho días.